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La evangelización de Apolo y los Adversarios de Pablo en Corinto

Introducción del trabajo

A Objetivo
La primera noticia sobre Corinto era las divisiones en la comunidad: "Me refiero a que
cada uno de vosotros va diciendo: «Yo soy de Pablo», «Yo, de Apolo», «Yo, de Cefas»,
«Yo, de Cristo»." (1 Cor 1,12). Estos grupos indicaron que habían otras misiones fuera
de Pablo y su grupo en Corinto. Las cartas de Pablo a los Corintos son las fuentes
primarias: 1 Cor menciona Apolo 7 veces y Cefas 4 veces (Cristo parece que está
referido sólo retóricamente); 2 Cor no menciona nombres sino hablaba de los
yeudapo/stoloß (2 Cor 11,13) y yeuda¿delfoß (2 Cor 11,26). Nos concentramos sólo
en Apolo y los adversarios de Pablo en 2 Cor. Tenemos como objetivo el averiguar
cómo ellos llevaron acabo la evangelización en Corinto y cómo hubo varios estilos de
evangelización, aunque el más conocido es el de Pablo.
B Metodología
En cuanto a la metodología nos hemos encontrado con algunas dificultades, ya que la
fuente principal son las cartas paulinas y San Pablo no siempre es objetivo y
“equilibrado”, especialmente a la hora de tratar con sus adversarios. Por eso la pregunta
¿es fiable Pablo y la información que nos da a la hora de hablar de Apolo y sobre todo
de los adversarios? Esto es la limitación de nuestro trabajo. Tenemos sólo los
testimonios de Pablo en sus cartas a los Corintios para hablar de sus adversarios. De
Apolo tenemos también el libro de los Hechos. Pero intentaremos reconstruir la historia
de la evangelización de Apolo y los adversarios de Pablo en 2 Cor según la hipotesis de
S. Vidal sobre la cronología de la misión en Corinto y la compilación de las diferentes
cartas a los Corintios.1 También podemos construir un retrato robot de Apolo y los
adversarios de Pablo según una analisis sincrónico de los textos sobre estos personajes
en las cartas a los Corintios y los Hechos de los Apostoles con la clave de la estrategía
retórica de Pablo y una análisis contextual de la diferencia de las misiónes a los gentiles
y a los judíos.2
C Plan del Trabajo
Este trabajo esta dividido en tres partes: 1) Contexto: explicaremos brevemente la
cronología de la evangelización en Corinto y la compilación de las cartas de Pablo a los
Corintios, analizaremos las fuentes para Apolo y los adversarios de Pablo en 2 Cor, y
unas pinceladas sobre la ciudad de Corinto; 2) Apolo: examinaremos su relación con
Pablo en 1 Cor, reconstruiremos un retrato robot en Hechos y identificaremos las
características de su estilo de misión en contraste a Pablo; 3) Adversarios de Pablo en 2
Cor: presentaremos un retrato robot de ellos; averiguaremos sus relaciones con la
misión a los judíos y analizaremos las diferencias de la concepción del ministerio con
Pablo. Terminaremos con unas breves conclusiones, más bien, nuestros reflexiones
personales sobre la primera Evangelización en Corinto.
                                                                                                                         
1
S. VIDAL, Pablo: De Tarso a Roma, Santander, 216-220.
2
La clave para entender el contexto es el horizonte escatológico de la misión a las naciones y la colecta
del Templo para los circuncisos,, cf. S. GUIJARRO, La Primera Evangelización, Salamanca 2013, 122-
123; P. FREDRIKSEN, "Judaism, the Circumcision of Gentiles, and Apocalyptic Hope: Another Look at
Galatians 1 and 2", Journal of Theological Studies 42 (1991) 548-558.
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II Contexto
A Cronología (50-53 d.C.)3
50 d.C. Antes de llegar Pablo a Corinto en la primavera del año 50 ya había llegado
Prisca y Aquila procedentes de Roma y habían iniciado una comunidad cristiana (cf.
Hch 18, 1-3). Es la que podemos llamar la comunidad pre-paulina. La misión de Pablo
en Corinto se extiende desde la primavera del año 50 al otoño del año 51 (Hch 18,11)
donde después del incidente ante el tribunal de Galión (Hch 18,12-18) parte para Éfeso
con Prisca y Aquila (Hch 18,18b-19) en su camino hacia Jerusalén.
51 d.C. Estancia de Apolo del 51 al 53 en Corinto (cf. 1 Cor 3,5-10; Hch 18,27-19,1)
hasta que regresa a Éfeso en la primavera del 53 (cf. 1 Cor 16,12).
52 d.C. Pablo escrita Cor A: 6,1-11; 10,1-22; 11,2-34; 15,1-58; 16,13-18 en el otoño
del año 52 en Éfeso (1 Cor 15,32; 16,15-18). Es una carta de advertencia sobre algunos
problemas de la comunidad, a la que refiere 5,9-11 (en Cor B). Lo que tenemos es el
producto de un recopilador que unió en algunos casos varias cartas de Pablo,
originariamente independientes, en una única carta.4
53 d.C. En el 53, Pablo recibe una noticia de Corintios (1 Cor 7,1) traída por los de
Cloe donde le hablan de las divisiones en la comunidad de Corinto (1 Cor 1,11). Pablo
responde con Cor B 1 Cor 1,1-5,13; 6,12-9,27; 10,23-11,1; 12,1-14,40; 16,1-12.19-24
que contiene las referencias a Apolo en el comienzo (caps. 1-4) y al final (16,12).
En el 53 Timoteo regresa a Éfeso después de visitar las comunidades de Macedonia y
Acaya e informa a Pablo de la llegada de los misioneros que están convulsionando la
comunidad. Pablo escribe Cor C (2 Cor 2,14 - 7,4) para responder a esta situación. El
portador de esta carta pudo ser Timoteo. Pablo, con Tito, hace una visita a Corinto (2
Cor 12,14; 13,1-2); encontró a la comunidad en rebeldía contra él y se le acuso de
fraude en la colecta (2 Cor 12,16-18). Pablo interrumpe el viaje y regresa a Éfeso (2 Cor
1,15-16,23), donde escribe Cor D (2 Cor 10,1 - 13,13) que envía por Tito (cf. 2 Cor
12,17-18).
B Fuentes
Apolo aparece en 7 veces Cor B (1 Cor 1,12; 3,4-6, 22; 4,6; 16,12) y en Hch 18,24; 19,1
y Tit. 3,13. El contexto de 1 Cor 1-4 es la división de la comunidad de Corinto en
partidos (1 Cor 1,12) y la discusión sobre la sabiduría: σοφίᾳ λόγου, "sabiduría de
palabras" (1,17); σοφίᾳ τοῦ θεοῦ, "la sabiduría de Dios" (1,21). 1 Cor 16,12 es clave:
Περὶ δὲ Ἀπολλῶ τοῦ ἀδελφοῦ, "acerca nuestro hermano Apolo" para determinar la
relación entre Pablo y Apolo. La cita de Lucas en Hch 18,24; 19,1 como hemos visto
en nuestro estudio de Aquila y Prisca, sitúa Apolo en la misión en Corinto y se presenta
Apolo como un judío de Alejandría, un "hombre elocuente" (άνήρ λογιός, κατήντησεν)
y "muy versado en las Escrituras" (δυνατός ών έν ταΐς γραφείς).
Los adversarios están referidos en Cor C (2 Cor 2,1 -7,4) y Cor D (2 Cor 10,1-13,13).
El ultimo esta conocido como "la carta de lágrimas" (2 Cor 2,3-4; 7,8.12) escrita por
Pablo en Éfeso después de su visita fracasado a Corinto donde le acusó de fraude en la
colecta, y uno de cuyos miembros llegó incluso a infligirle una afrenta en público.

                                                                                                                         
3
Esta cronología de la evangelización en Corinto está basada en la reconstrucción de la vida de Pablo por
S. VIDAL. Cf. "Croquis de la vida de Pablo", Pablo: De Tarso a Roma, 213-225.
4
Ibid, 139-149; 228-232. Para la reconstrucción y al analisis de los textos paulinos vease S. VIDAL, Las
cartas originales de Pablo, Madrid 1996.
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La correspondencia corintia testificaría una evolución en el enfrentramiento entre la

misión paulina y los misioneros opositores. El enfrentamiento: a) es más comedido en
Cor B, donde no se ataca directamente a la figura de Apolo; b) se hace más agudo, en
cambio en Cor C, aunque todavía se emplea un lenguaje sobrio; c) y alcanza por fin, un
tono de gran dureza y de descalificación global en Cor D.5
C Unas pinceladas sobre la ciudad de Corinto
Era la capital de la provincia romana de Acaya desde el año 29 antes de Cristo. Esta
provincia tenía rango senatorial. Se había refundado en el año 44 por Julio César
juntamente con Cartago. Previamente había sido destruida por los romanos en el 146
AC. Era la única ciudad del imperio que tenía 2 puertos de mar en dos mares diferentes,
lo que la convertía en un lugar estratégico para el comercio con Asía y el occidente.
Esto hacía que fuera una ciudad muy cosmopolita donde convivían romanos, griegos y
gentes venidas de las provincias de Oriente. Los juegos ísmicos atraían a muchos
visitantes a la ciudad. Estos juegos eran panhelénicos y se celebraban cada dos años en
primavera, marzo, y duraban varios días y se hacían en honor a Poseidón, dios de los
mares. También la prostitución sagrada del templo de Venus en el acrocorinto atraían a
muchos turistas y visitantes. Todo esto unido al comercio hizo de Corinto una ciudad
próspera, con muchos ricos. Esta ciudad es cosmopolita y ofrece grandes posibilidades
de adquirir importante estatus social y económico con más celeridad que en el resto del
imperio. Corinto era una ciudad de placer y de tributo al esplendor humano. Esto hizo
que los corintios a la hora de valorar las personas dieran mucho valor a los logros
personales. Para conseguir esto el honor, la riqueza y la elocuencia eran de gran ayuda.
De hecho los corintios buscaban en los distintos cultos, de los que había muchos en la
ciudad, prestigio, poder, influencia y remedio para las necesidades materiales.
Con esta situación descrita en la ciudad de Corinto podemos entender mejor las
objeciones de los miembros de la comunidad cristiana de Corinto al ministerio de Pablo
y también el éxito alcanzado por Apolo y los adversarios de Pablo. La comunidad
cristiana de Corinto es muy incipiente y no está hecha del todo, de ahí que Pablo tenga
que continuar su misión a través de las cartas y de las visitas de él y de su equipo de
misioneros. Al ser una comunidad incipiente su marco principal de referencia sigue
siendo la ciudad de Corinto donde viven. Aquí se valora mucho el estatus social y para
ello el honor y la elocuencia serán de gran ayuda.

III Apolo
A Contexto del Cor 1-4
En estos capitulos, el problema tratado es el de la división en grupos que se estaba
dando en el seno de la comunidad (1 Cor 1,10-17). En el v. 17, que cierra la perícopa de
las divisiones, el apóstol critica la sofi÷aˆ lo/gou («sabiduría de palabra») como
contraria a la {palabra de la}cruz de Cristo. Cabe decir, pues, que la división entre
grupos o, al menos, una de sus manifestaciones tiene que ver con esa criticada
«sabiduría de palabra », que algunos utilizan con relación a la cruz de Cristo. Conviene
advertir la fuerza de la negación: «no con sabiduría de palabra». Desde el punto de vista
de la rétorica tiene tanta más fuerza lo que se niega que lo que se afirma.6

                                                                                                                         
5
S. VIDAL, Pablo: De Tarso a Roma, 142-143.
6
J. NÚÑEZ REGODÓN, "El evangelio paulino de la cruz", en ID., La cruz camino de luz, Biblotheca
Salmanticensis Estudios 319, Salamanca 2009, 89.
   4  

D. Litfin ha hecho un estudio de algunas expresiones que encuentran en la

correspondencia corintia, en las cuales Pablo explica y justifica sus maneras or formas
(«modus operandi») de predicador. Del conjunto de expresiones se deduce claramente
que se trataba de un uso de la retórica que terminaba por anular la cruz.7
J. Núñez ha notado que es probable que este grupo que tanto valoraba la elocuencia de
la predicación y de la catequesis contrapusiera a Pablo la figura de Apolo, un
alejandrino de cuya proverbial elocuencia ya deja constancia el libro de los Hechos
(23,24). Queda expresamente excluído que fuera Apolo el instigador o jefe de aquel
grupo que hacía gala de retórica.8
R. Trevijano en una nota de pie en su trabajo hace un resumen de las preguntas de C. K.
Barrett quien aquel grupo: «si fue "grupo de Cristo" (1,12) el que desaralló, a partir de
la técnica de predicar un evangelio cambiado, adecuado al gusto griego, una sabiduría
de este mundo; y ello en reacción al "grupo de Pedro": en la medida en que éste
representaba una perversión legalista del evangelio. Más normal es atribuir al "grupo de
Apolo", un discurso sabio (1,17), acorde con la retórica y filosofía griega.»9
B Relación entre Pablo y Apolo
Rival de Pablo (1 Cor 1,12; 3,4-6, 22; 4,6; 16,12) Pablo cuidadosamente ha tratado de
convencer los corintios que habían estimado Apolo como más importante a él para
cambiar esta estimación. Pablo invita a los corintios a dar a él y a Apolo el mismo trato.
Dentro de esa comparación, se usa el lenguaje y las imágenes diseñadas para mejorar a
sí mismo en su estimación mientras dice poco acerca de Apolo. El resultado final es que
Apolo es socavada.10
Colaborador en la misma misión (1 Cor 16,12) [2 Cor 8,18-24] Pablo escogió a Apolo,
porque es independiente de su equipo misional, y después de haber estado con él en
Éfeso y de haber sido mencionado en la carta que los corintios le enviaron, él es el
ejemplo que puede utilizar con mayor efectividad para contrastar los diferentes estilos
de la misma misión. Por otra parte, la información de 1 Cor 16,12 demuestra la buena
relación de Pablo y Apolo, por el trato afectuoso con el que el apóstol se refiere al
alejandrino al llamarlo "el hermano Apolo. En efecto, Pablo llama con frecuencia a sus
colaboradores "hermanos" (cf. 1 tes 3,2; Flp 2,25, Rom 16,1); esto no quiere decir que
Apolo formara parte del círculo íntimo de Pablo, pero tampoco que era su adversario,
pues la designación "hermano" apunta al hecho de que no había entre ellos ninguna
adversión.11
Según 1 Cor 3,5 Pablo y Apolo no son rivales, pero tampoco del círculo íntimo de Pablo
o de sus colaboradores. Pablo marca distancias entre él, el fundador y padre de la
comunidad, el que ha puesto los cimientos, el que plantó, y Apolo el que regó lo
plantado. Aunque Apolo sea más elocuente y hable muy bien Pablo es la cabeza de la

                                                                                                                         
7
Cf. D. LITFIN, St. Paul's Theology of Proclamation: 1 Corinthians 1-4 and Greco-Roman Rhetoric,
Cambridge 1994, 156-157.
8
J. NÚÑEZ REGODÓN, "El evangelio paulino de la cruz"…, 89.
9
Cf. C. K. BARRETT, "Christianity at Corinth," en ID, Essays on Paul, London 1982, 1-27, y R.
TREVIJANO ETCHEVERRÍA, "El contraste de sabidurías (1Cor 1,17-4,20)," en ID, Estudios Paulinos,
Salamanca 2002, 150.
10
Cf. D. KER, "Paul and Apollos-Colleagues or Rivals," Journal For The Study of The New Testament 77
(March 1, 2000) 75-97.
11
Cf. B. A. ARISTIZÁBAL GONZALEZ, “Pablo y Apolo en Corinto, un ejemplo de colaboración
apostólica”, Medellín 143 (2010) 327-358.
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comunidad de Corinto. La 1 Cor es una carta muy retórica donde Pablo utiliza a Apolo
para invitar a los Corintios a la unidad, verdadera obsesión de Pablo. Pablo dedica a
Apolo 4 capítulos de su carta lo cual indica la importancia de Pablo en su relación con
Apolo. ¿Predicaban una sabiduría distinta? El núcleo de la predicación fue el mismo,
por eso son misiones convergentes, aunque la forma de hacerlo fue diferente. Parece
que había un grupo de la comunidad que se sentían más identificados con Apolo que
con Pablo, ya que ellos, como muchos en el mundo antiguo identificaban o asociaban
elocuencia con sabiduría o conocimiento. Al estar tan versado Apolo en las Escrituras,
como señala el libro de los Hechos, ¿se dirigió Apolo a los judíos de la circuncisión,
cuyo terreno no pertenecía a Pablo, según lo acordado en el concilio de Jerusalén (Gal
2, 9, Hechos 15)? Una pregunta que nos podemos hacer es ¿estaba Apolo solo o estaba
acompañado, era parte de un grupo? Lo que sí que parece claro es que no es una
evangelización paralela a la de Pablo, aunque sí que se hizo con un estilo diferente.
C Retrato robot de Apolo en Hechos
La descripción de Apolo en Hechos como λογιός άνήρ es diversamente traducido como
"hombre elocuente" y "hombre culto". De hecho, como D. Litfin ha ilustrado, en la
mente del oyente greco-romano del primer siglo la educación y la elocuencia estaban
unidas. Litfin nos ayuda a apreciar las actitudes de las audiencias del primer siglo de la
retórica. A la luz de esta esperanza, Apolo, según Hechos, parece haber tenido mucho
éxito. Alguien con su buena disposición y capacidad de "poderosamente refutar los
Judios en público rápidamente" podría ser elevado a la condición de héroe.12
Hch 18,24-26 nos dice que mientras Apolo estaba “enseñando con claridad acerca de
Jesús” Priscila y Aquila “se lo llevaron aparte y le enseñaron con más exactitud el
camino de Dios”. Desconocemos las áreas de esta instrucción. Puede ser que debamos
utilizar Hch 19,2-7 para ampliar nuestra comprensión cómo Apolo posiblemente sólo
había conocido el bautismo de Juan. Si este es el caso, podríamos esperar un enfoque
particular en el Espíritu Santo.
D La verdadera actividad misional del apóstol
La sabiduría en 1Cor 1,18-2,15 se contempla, en primer lugar, en relación con la cruz de
Cristo, en la que se ha mostrado que la sabiduría de Dios no corresponde a la sabiduría
de este mundo ni la fuerza de Dios a lo que el mundo considera fuerte. A este
paradigma de la sabiduría divina responden tanto la llamada de los cristianos de
Corinto, que no pertenecen precisamente a las capas más altas de aquella ciudad, como
la predicación de Pablo entre ellos, cuya fuerza devenía de su mismo contenido: Cristo
crucificado.
Para Pablo la sabiduría de los hombres es de hecho necedad y por ello se muestra
ineficaz en orden a la salvación. Con el mensaje de la cruz ocurre exactamente lo
contrario: los humanos lo consideran necedad y sin embargo es el lugar donde se
manifiesta la fuerza de Dios (1,18-25). La conversión de los corintios (1,26-31) y la
predicación de Pablo (2,1-5) dan prueba de que ello es así, ya que en ambos hechos
quedó claro que el fundamento último de la fe no es lo que los hombres tienen por
válido, sino la fuerza de Dios hecha debilidad en la cruz de Cristo.

                                                                                                                         
12
D. LITFIN, St. Paul's Theology of Proclamation: 1 Corinthians 1-4 and Greco-Roman Rhetoric, 158.
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IV Los adversarios de Pablo en 2 Cor

Una de las preguntas que nos podemos hacer es si este grupo tuvo alguna relación con
el grupo de la circuncisión de I Cor 9,5. ¿De dónde traían las cartas de recomendación y
quién se las había dado? Los responsables del templo solían mandar a delegados con
cartas de recomendación para ver la ortodoxia de los grupos judíos de la diáspora y para
recoger los impuestos del templo. Es posible que el grupo de Santiago de la comunidad
madre de Jerusalén hiciera lo mismo para garantizar la ortodoxia y mandara a este grupo
a Corinto con cartas de recomendación. Es una tesis bastante verosímil.
A Retrato robot de estos adversarios de Pablo
Estos se oponían al liderazgo de Pablo y ponen en duda que fuera un apóstol y serian los
causantes del distanciamiento de los corintios con Pablo, el fundador de su comunidad.
Pablo se defiende con vehemencia. ¿Quiénes eran estos adversarios? Vamos a esbozar
una especie de retrato robot de ellos.
Eran cristianos judíos (este es su origen étnico) que se habían infiltrado en una
comunidad que ellos no habían fundado y de la que ellos aceptan ayudas económicas (2
Cor 11,7-12.20; 12,13-18)13.
Según algunos estudiosos éstos eran judaizantes14. Estos ponían más énfasis en el
cumplimiento de la Ley que en el seguimiento a Cristo para obtener la salvación.
Algunos identifican a estos adversarios con los de la comunidad de Galacia. Se apoyan
en el pasaje 2 Cor 11, 22-25. Pero esto plante muchos problemas en cuanto al mensaje
de unos y de otros. Los de Galacia insistían mucho en el tema de la circuncisión, el
Sabat y leyes alimenticias. Todo eso aquí no aparece.
Esos misioneros se habían presentado con cartas de recomendación (2 Cor 3,1) lo cual
daba a entender que formaban parte de una misión organizada. Pablo les acusa de
comerciar con la palabra de Dios (2 Cor 2, 17) aludiendo con ello a su práctica de
recibir pago o salario a cambio de su actividad apostólica. Les recrimina también que
pongan su confianza más en las apariencias (exterior, elocuencia) que en lo interior
(vivencia interior) (2 Cor 5,17).
Estos habían venido de fuera (2 Cor 11,4) y se habían introducido en el campo de
misión de Pablo y su equipo (2 Cor 10, 13-16). Eran de origen hebreo y se gloriaban de
ser israelitas y descendientes de Abrahán (2 Cor 11,12), pero predicaban un evangelio
distinto del de Pablo (2 Cor 11, 4). Su comportamiento era de vanagloria y muy
presuntuoso, recomendándose a sí mismos (2 Cor 10, 12-18). Llegaron incluso a
denigrar a Pablo presumiendo de condición de apóstoles (2 Cor 12,11).
Las informaciones que tenemos de Pablo en 2 Cor 10-13 están en un tono muy
polémico al sentir el apóstol su autoridad cuestionada. La defensa de Pablo se convierte
a veces en acusación: ellos dicen ser ministros de Dios pero son falsos profetas y
embaucadores ( 2 Cor 11, 13), son unos intrusos. En cambio Pablo nunca se ha
aprovechado del trabajo de otros (2 Cor 10, 13, 16). Ellos se consideran verdaderos
apóstoles, “supereapóstoles” los llama Pablo con ironía, pero es Pablo el único que
puede aducir ser apóstol. Para ello presenta sus credenciales en 2 Cor 12, 11-12.
Los adversarios de Pablo, como él mismo, eran judíos de la diáspora que se habían
hecho cristianos. Pertenecían a una misión organizada y traían cartas de presentación.

                                                                                                                         
13
D. ÁLVAREZ CINIERA, “Los adversarios paulinos en 2 Corintios”, Estudio Agustiniano 37 (2002) 252.
14
J.L. SUMNEY, Identifying Paul´s Opponents, Sheffield 1990, 15.
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Pablo reacciona ante la forma que tienen estos adversarios de entender el ministerio y su
reflexión constituye la más antigua que tenemos sobre el tema.
¿Qué pintaban aquí esos judíos de origen palestinense que incluso tenían cartas de
recomendación? Pudieran ser enviados de la primitiva comunidad de Jerusalén con el
objetivo de extender su influencia judaizante en la comunidad de origen
En el cap. 10 atacan a Pablo por su apariencia de débil y tímido (2 Cor 10, 1). Tampoco
Pablo era un buen orador (1 Cor 10, 10).
Gracias a estos adversarios tenemos la primera reflexión del NT sobre el ministerio y la
misión.
B Distintas formas de entender el ministerio: Pablo y adversarios
1.-Pablo al hablar del ministerio no se llama apóstol sino servidor y su tarea la define
como servicio. Solo al final de su apología en el debate con sus adversarios sí que
reivindica su papel de apóstol. Pablo está como el que sirve. Esto es lo que hizo también
el Señor (2 Cor 10-13(el que quiera ser el primero que sea el servidor: Lc 23, 27; Mc 9,
35. El lavatorio de pies se sitúa en el mismo contexto: Jn 13,4-5).
2.- Pablo entiende su ministerio como la respuesta a la llamada de Dios. Estaría en línea
con lo que ocurrió a los profetas Is 49, 1.5 y Jr 1,5. En Israel la llamada profética tenía
como fin la encomienda de una misión. En Pablo esta misión es anunciar a Jesús, el
Hijo de Dios.
3.- Los adversarios de Pablo se predicaban a sí mismos (2 Cor 3,5) y se jactaban de su
condición de apóstoles (2Cor 11,5; 12,11), reivindicando de este modo una autoridad
fundada en su oficio de mediadores religiosos autorizados. Esto para Pablo era una
traición a la verdad del evangelio cuyo centro debe ser la entrega a Jesús y no la
búsqueda de uno mismo.
3.- La unión con Jesús (sólo unidos a mí podéis dar fruto Jn 15, 4-5) también será
fundamental para el ministerio. Pablo se ve capacitado para continuar la obra de Jesús.
Pero ¿quién está capacitado para ello? (2 Cor 2,17).
4.- La legitimidad no viene de uno mismo, sino de Dios que es el que nos capacita para
ser ministros de la nueva alianza (2 Cor 3, 5b-6a). Este ministerio es un don de Dios, no
una conquista nuestra o de nuestros méritos o capacidades. El P. Raniero Cantalamessa
lo expresa muy bien: “Dios no llama a los capacitados sino que capacita a los
llamados”. Para ello en palabras de Pablo se necesita “vivir en Cristo” o “estar en
Cristo” (2 Cor 5, 19; 2, 17). No hay que vivir para nosotros mismos sino para él que por
nosotros murió y resucitó (2 Cor 5, 14b-15).
5.- Los ministros o servidores de Dios llevan el tesoro en vasijas de barro (2 Cor 4,7)
por eso hacen de la debilidad la fuerza de su testimonio. Los ministros son instrumentos
de Dios. La cualidad moral de los ministros no es la clave, pues la misión encomendada
por Dios supera las fuerzas humanas15.

                                                                                                                         
15
Cf. S. GUIJARRO, Servidores de Dios y esclavos vuestros. La primera reflexión cristiana sobre el
ministerio, Salamanca 2011, 59-129.
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Conclusión: Reflexiones sobre la primera Evangelización en Corinto

En la primera evangelización de Corinto coinciden varias misiones: la de Pablo y Apolo
se consideran integradas (no coinciden en el tiempo, 49-51 Pablo, 51-53 Apolo). La de
Pablo y Apolo: uno plantó, otro regó y Dios lo hizo crecer (1 Cor 3,6) aludiendo a dos
momentos diferentes, pero de la misma misión, incluso rogó a Apolo que los visitara
con los hermanos, aunque no fue por “razones pastorales” (I Cor 16, 12). La de los
adversarios es una misión totalmente diferente a la de Pablo. Aunque se trata de la
misión a una ciudad concreta, Corinto, los distintos misioneros nos siempre utilizaban
los mismos medios. Lo cual enriquece la misión, ya que la uniformidad es siempre
empobrecedora. Pablo y Apolo tienen el mismo objetivo: predicar y testimoniar a
Cristo. Pablo lo hace de una manera sobria y Apolo lo hace con gran elocuencia. Como
sobre gustos “no hay nada escrito” parece ser que la mayoría de los corintios preferían
el estilo “florido” de Apolo, ya que los habitantes de Corinto eran muy amantes de la
elocuencia y del “buen decir”. Los adversarios de Pablo, por el contrario, iban
sembrando confusión y tensiones dentro de la comunidad. Por lo que nos cuenta San
Pablo en su segunda carta parece que más que predicar a Jesucristo se predicaban a ellos
mismos.
Para estas misiones se utilizaban los talleres y las casas16. Pablo cree que los ministros
deben trabajar para no resultar gravosos a nadie. Los corintios, algunos ven esto como
una ofensa y no entienden cómo Pablo se dejó ayudar por los filipenses y no por ellos.
Algunos de estos, según P. Marshal17, podrían haberse pasado a los adversarios de
Pablo.
En Corinto, al contrario de lo que ocurrió en Filipos o Tesalónica las dificultades no
vienen de afuera, acoso de los judíos, falsas acusaciones, juicios y cárcel, sino de dentro
de la comunidad por las divisiones y la presencia de los intrusos, adversarios de Pablo.
Gracias al enfrentamiento de Pablo con los adversarios tenemos la primera reflexión
sería en el NT sobre el ministerio y la misión.

Por Benedict Dilag Sunio y Jesús Garcia Hernando

Mayo 2013

                                                                                                                         
16
S. GUIJARRO La Primera Evangelización, 189.
17
Cf. P. MARSHALL, Enmity in Corinth: Social Conventions in Paul´s Relations with the Corinthians,
Tübingen 1987, 259-265.
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