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Botella, M., Hernández, O., López, M.L. y Rodríguez, A.

Con esta unidad de ...Pero antes de empezar veamos algunas cuestiones previas

trabajo podremos... - Es posible enfermar dentro del hospital?.

Conocer las características - ¿Por qué al entrar como visita en determinados servi-
principales de la infeccio- cios tenemos que ponernos la bata?.
nes hospitalarias y cuáles
- ¿Con qué tipo de pacientes es necesario extremar las
son las más fecuentes.
precauciones para evitar el desarrollo de enfermedades
infecciosas?.
Analizar las medidas de
prevención y control de las
mismas. Es sabido por todos nosotros que a lo largo de la historia
de la humanidad ha habido una serie de epidemias que ocasio-
Como trabajadores de un naron una gran mortalidad. Por ejemplo, en 1.918 una epidemia
centro hospitalario reco- de gripe asoló prácticamente a toda Europa con un número de
fallecimientos mayor al de la Segunda Guerra Mundial.
nocer nuestra implicación
en el desarrollo de las in- Durante la primera mitad del siglo XIV
fecciones nosocomiales. la mortalidad a causa de la peste era tan alta que
el Papa consagró el río Ródano para que se
considerase que los cadáveres arrojados al río
habían recibido cristiana sepultura.
Comprender la importan- Río Ródano
cia de la toma de precau-
ciones para disminuir el Hoy asumimos sin ningún problema que existe una serie
número de dichas infeccio- de microorganismos que son capaces de originar enfermedades.
También aceptamos que cuando una persona padece una enfer-
nes.
medad de este tipo “puede pasarla” a otra. Esto, que tan evidente
nos parece ahora, costó mucho tiempo demostrarlo.

ÍNDICE
I. Características comunes a toda enferme- 6 III. Medidas de prevención y control de las 23
dad infecciosa infecciones hospitalarias
1. Mecanismos de defensa del huésped 10 1. ¿Cuáles son las medidas que disminuyen la contami- 25
nación de persona a persona?
2. Principales factores que pueden afectar 13 1.1. Precauciones básicas: lavado de manos, uso de 26
a los mecanismos de defensa guantes, mascarilla, gafas, bata,etc...
1.2. Precauciones según transmisión 37
II. Las infecciones hospitalarias 14 2. Las barreras protectoras físicas 38
1. Pasado y presente de las infecc. nosocomiales 15 2.1. Orden de colocación de las barreras 38
2. ¿Cuáles son las inf. hospitalarias más frecuentes? 18 Autoevaluación 40
3. ¿Cómo se producen las infecc. hospitalarias? 19 Recuerda que... 42
Actividades propuestas 42

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

Si bien desde el sigo XVI se intuía que había “algo que pasaba
de un enfermo a un sano”, originando en este último la misma
enfermedad, no se pudo demostrar que era causada por los microor-
ganismos hasta el siglo XIX. Tengamos en cuenta que es precisa-
mente en este siglo cuando se perfeccionan los microscopios que
permitieron ver un mundo hasta ese momento invisible.

Los microorganismos fueron descu-


biertos en 1.863 por un químico francés, Louis
Pasterur. Fue el alemán Robert Koch, un mé-
dico rural desconocido, quien profundizó en el
descubrimiento de microorganismos producto-
Louis Pasteur res de enfermedades en el ser humano. En
(1822-1895) 1.882 descubrirá el bacilo de la tuberculosis y Robert Koch
(1843-1910)
en 1.883 el del cólera.

Ya adelantamos que el medio hospitalario, aunque no lo


parezca, es un lugar enormemente propicio para que se produzcan
enfermedades infecciosas, tanto en los pacientes como en el perso-
nal. ¿Cómo puede ser esto?. ¿Por qué ocurre así?. ¿Cómo evitar o
minimizar esta posibilidad?. Más adelante iremos despejando todas
estas dudas. De momento, hemos de profundizar un poco en los
factores que intervienen en la producción de una enfermedad infec-
ciosa. Luego nos centraremos en el caso particular de los hospitales
y, una vez visto lo que ocurre en el medio hospitalario, podremos
adoptar medidas para intentar evitarlas y/o controlarlas. Por eso esta
unidad de trabajo está estructurada en 3 grandes apartados:

1. Características comunes a toda enfermedad infecciosa.


2. Las infecciones hospitalarias.
3. Medidas de prevención y control de las infecciones hospi-
talarias.
¿Conoces alguna enfermedad infecciosa en la que no exista
I.- CARACTERÍSTICAS COMUNES A TODA ENFERMEDAD INFECCIOSA.

un microorganismo que la origine?. Si es así, llama al tutor inmediata-


mente y comunícaselo, que estamos a punto de ganarnos un Premio
Nobel. Por tanto, podemos afirmar que en toda enfermedad infecciosa
existen uno o varios microorganismos que la originan. No debemos
perder de vista que los microorganismos pueden ser bacterias, hon-
gos o virus y que para poder observarlos tenemos que utilizar un
microscopio. El microorganismo que origina una enfermedad infec-
ciosa recibe el nombre de agente causal. Por ejemplo, el agente
causal de la tuberculosis es el Mycobacterium tuberculosis.

El lugar desde el que pasa el agente causal (microorganismo)


para infectar al ser humano se denomina fuente de infección. ¿Qué
“lugar” puede ser ese?. Pues prácticamente cualquier sitio con vida:
personas, animales, suelo ... etc. Observa que el propio ser humano
puede actuar como fuente de infección. Pero ¡ojo!, aquí existen dos
posibilidades:

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

a) Un sujeto que padece en ese momento una enfermedad infec-


ciosa. Es decir, que en él “se ha puesto a vivir el agente causal”
y además le está ocasionando síntomas y signos propios de la
enfermedad. En este caso se dice que la fuente de infección es
el enfermo. Por ejemplo, cuando estamos padeciendo una gripe.

b) Un sujeto en el que “el agente causal se ha puesto a vivir en él”


pero no produce síntomas ni signos. Vamos, que está sano, no
padece la enfermedad. En estos casos se dice que la fuente de
infección es un portador. Te plantearás que esto es bastante
raro. ¿Cómo es posible tener el agente causal y no tener la
enfermedad?. Pues porque, como en todo, las cosas no ocurren
de repente. Por ejemplo, cuando empezamos a padecer los
síntomas de la gripe ya el virus (agente causal) lleva algún
tiempo (días) viviendo en nosotros. Cuando por fin logramos
recuperarnos de la gripe y nos incorporamos a nuestras tareas
habituales, todavía existen algunos “virus con nosotros”.

Veamos un ejemplo muy teórico y casi imposible de demos-


trar, pero que servirá para recordar bien estas ideas. Supongamos
que el día 2 de Febrero entraron una serie de virus de la gripe en tu
cuerpo. Comenzaste a tener síntomas y signos el 7 de febrero, con
lo que no te quedó más remedio que “coger la baja”. Por fin, el día 14
de febrero te encontraste bien (¡ufff, y menos mal! porque este día
tan señalado seguro que habías quedado para cenar...) reincorpo-
rándote a tu trabajo. Pero sabemos que algunos virus se quedaron
contigo y acabaste de eliminarlos el día 16 de febrero. Bueno pues
en todo este tiempo “has sido distintas cosas”:

2 Feb. 7 Feb. 14 Feb. 16 Feb.

No Fuente Fuente Fuente Fuente No Fuente


de infección: de infección: de infección: de infección: de infección:

Sano Portador Enfermo Portador Sano

Detengámonos un momento y recapitulemos. Hasta ahora


tenemos un microorganismo (agente causal),que se encuentra en un
lugar (fuente de infección) desde el que va a pasar a una persona
con la perversa intención de provocarle una enfermedad. La persona
a la que infecta el microorganismo se llama huésped. En lenguaje
coloquial consideramos un huésped a alguien que acogemos en
nuestra casa y, probablemente, ésta es la razón por la que muchos
alumnos piensan que el huésped va a ser el microorganismo, que es
al que acogeremos nosotros en nuestro cuerpo. Pues es todo lo
contrario. ¡Ojo!, no confundirse. El huésped en este caso es el sujeto
que se infecta.

Pero, ¿cómo pasa desde la fuente de infección al individuo?.


El modo, sistema o método por el que el agente causal logra llegar al
huésped se denomina mecanismo de transmisión.

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

Fuente de infección Fuente de infección

}
M sm i
Tr

e c si
an

. d ón
. de Microorganismos

e
Mec isión
sm
Tran

Mec. de
Transmisión
Mec. de
Transmisión

Fuente de infección
Fuente de infección
Huésped

Los mecanismos de transmisión son prácticamente infinitos,


así que vamos a poner varios ejemplos para que podamos hacernos
una idea de la forma en la que se transmiten las enfermedades.
− Ejemplo A: Imagina un niño con varicela. Está claro que él es la
fuente de infección pero ¿cómo pasa el virus de la varicela a otra
persona?. En las vías respiratorias del niño se encuentra el virus.
Cuando él habla “escupe” unas gotitas, llamadas gotitas de
Flügge, que no se ven a simple vista pero que sin darnos cuenta,
pueden penetrar en nuestras vías respiratorias. Hemos de advertir
que las gotitas de Flügge las emitimos todos al hablar o estornu-
dar, pero en este caso van cargadas con el virus de la varicela y,
por eso, se convierten en mecanismo de transmisión de esta
enfermedad. El mecanismo de transmisión ha sido el aire.
− Ejemplo B: Seguro que en alguna ocasión habrás oído decir que al
día siguiente de un banquete de bodas todos los invitados se
pusieron muy malos con vómitos y diarreas. ¡Pobres novios!.
¿Qué ha pasado aquí?. Lo más habitual es que el agente causal
sea una bacteria llamada salmonella. (Esta historia va a dar un
poquito de “asco”). Uno de los cocineros es portador de la salmo-
nella, que se encuentra en su intestino. Al cocinero, mientras
preparaba algo del banquete le dieron ganas de ir al retrete y al
defecar eliminó salmonellas por las heces. Tras utilizar el papel
higiénico cometió el imperdonable error de no lavarse las manos.
Volvió a la cocina y al manipular los alimentos los contaminó con
salmonellas que fueron a parar a los intestinos de los invitados.
¡Casi nada!. El mecanismo de transmisión han sido los alimentos.
− Ejemplo C: Una persona adicta a drogas por vía parenteral y que
es portadora del virus de la hepatitis C, se inyecta heroína en una
reunión de amigos y, como sólo hay una jeringuilla se la pasa a
otra persona. En esa aguja y jeringuilla hay restos de sangre y
cuando el amigo la reutiliza se está inyectando heroína, pero
también la sangre y los virus de la hepatitis del otro. El mecanismo
de transmisión ha sido la sangre.
− Ejemplo D: Una mujer en una noche de “marcha” conoce a un
hombre del que se queda prendada. Tanto es así, que esa misma
noche mantiene una relación sexual coital sin preservativo. Desco-
noce que el individuo es portador del virus del SIDA. Semanas
más tarde ella realiza una donación altruista de sangre y desde el
banco de sangre la llaman para comunicarle que es VIH positiva.
El mecanismo de transmisión ha sido el semen.

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

− Ejemplo E: Un enfermo ha ingresado con una infección purulenta


en la extremidad inferior derecha. El TAE cambia la ropa de
cama sin guantes mientras el paciente se asea en el baño. Días
más tardes el TAE observa que en el dedo anular de la mano
derecha, donde tenía una pequeña cortadita, la herida se ha
infectado y está adquiriendo un aspecto sospechoso. El meca-
nismo de transmisión es un objeto inanimado (ropa de cama)
sobre el que estaba depositado el agente causal.

Rellenando el siguiente cuadro podrás reforzar la idea de que


en toda enfermedad infecciosa se da la siguiente secuencia o
cadena:

Fuente de infección Mecanismo de


Huésped
con agente causal transmisión

AGENTE FUENTE DE MECANISMO DE


EJEMPLO HUÉSPED
CAUSAL INFECCIÓN TRANSMISIÓN
A
B
C
D
E

Muchas veces me has oído decir (..)¡ésto no es para


que te lo memorices!, sin embargo ahora te recomiendo que
no pierdas de vista la siguiente nota, ¡es para recordar!

∗ Toda enfermedad infecciosa tiene un agente causal (microorganismo)


∗ El lugar desde el que sale o pasa el agente causal para infectar a un ser
humano se denomina fuente de infección.
∗ La fuente de infección puede ser cualquiera: objetos, animales y ser hu-
mano (enfermo y portador).
∗ La persona infectada se denomina huésped.
∗ El modo por el cual el agente causal alcanza al huésped es el mecanismo
de transmisión.

Podríamos plantearnos que esta cadena de acontecimientos se


parece mucho a la labor de siembra. En ella tenemos una semilla (fuente
de infección) que el sembrador (mecanismo de transmisión) deposita en
el suelo (huésped) para que germine. Es la cadena de las 3S: Semilla,
sembrador y suelo.

S Semilla: Agente causal


Sembrador: Mecanismo de transmisión
S
Suelo: Huésped
S

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

¿Toda semilla sembrada germina?. No, ya le gustaría a los


agricultores. Pues lo mismo sucede con las enfermedades infeccio-
sas. Afortunadamente, el hecho de que un agente causal sea capaz
de llegar al huésped no asegura que vaya a padecer la enfermedad.
¿Por qué?. Porque el ser humano tiene una serie de mecanismos de
defensa que impiden que los microorganismos provoquen enfermedad
una vez que han llegado a él (huésped).

El día 16 de octubre de 1.846, en la sala de operacio-


nes del Massachusetts General Hospital de Boston, nació la
anestesia. La cirugía ganaba así la batalla a uno de sus
mayores enemigos: el dolor. Pero le quedaba aún una dura 1.846
lucha contra otro enemigo cruel, antiquísimo, muy temido,
que mataba a la gran mayoría de los pacientes y que,
irremediablemente, atacaba tras las operaciones. Hoy sa-
bemos que se trataba de infecciones, pero en aquella
época se consideraba un mal enigmático y fatal, recibía
multitud de nombres distintos, comenzaba con la supura-
ción de las heridas, continuaba con una generalización del
mal y terminaba con la muerte del paciente. Nacimiento de la ANESTESIA en el
Massachusetts General Hospital

1. Mecanismos de defensa del huésped.

Para poder comprender cómo se defiende nuestro


cuerpo de los microorganismos vamos a plantear una obra
de teatro con 3 actores: 2 microorganismos distintos (MA y
MB) capaces de provocar diferentes enfermedades (EA y
EB), y un tercer actor/actriz que eres tú.

En la primera escena el MA
entró en contacto contigo con la inten-
ción de provocarte la EA, pero...
¡ganaste la batalla y permaneciste
sano!. ¿Cuál fue tu actuación?. En
realidad existen varios guiones para
esta escena, veamos algunos:

− El MA entra en contacto con tu piel.- En este caso las característi-


cas propias de la piel impiden que el MA pueda atravesar la
epidermis y llegar a tejidos más profundos. Así que de entrada, el
MA se encuentra una barrera natural que es la piel que le impide
el paso pero, además, en ella se forma un manto ácido que crea
un medio ambiente muy hostil para el MA.

− El MA entra en contacto con tus vías respiratorias al inspirar.- Es


posible que el MA quede atrapado en el laberinto de las fosas
nasales o que acabe llegando a la tráquea o a los bronquios.
Como recordaremos, toda la vía aérea está cubierta por una
mucosa (epitelio) “barnizada” con moco. El MA quedará atrapado
en el moco y además tendrá dificultades para atravesar la mucosa
que, al igual que la piel, supone una barrera continua.

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

− El MA es ingerido.- Aquí la mucosa de toda la vía digestiva y el


moco que la recubre harán el mismo papel que en el caso
anterior. Pero disponemos de algunas “armas más”:

− Saliva: ¿recuerdas la lisozima?. Es un componente de la


saliva con acción antibacteriana.

− Jugo gástrico: cuando el MA llegue al estómago “lo va a


tener muy difícil”. Recordemos que el pH gástrico es
enormemente ácido y es muy poco probable que el MA
sobreviva a ese ambiente.

− Flora intestinal: son bacterias que viven sobre la mucosa


de nuestro intestino y su presencia impide el desarrollo
de otros microorganismos que puedan provocarnos en-
fermedad.

− Movimientos peristálticos: se producen en todo el tubo


digestivo y, además de hacer avanzar el contenido del
tubo, sirven para impedir que los microorganismos capa-
ces de producir enfermedad aniden en la mucosa.

− El MA entra en contacto con la uretra.- Otra vez disponemos de


una mucosa que actúa de barrera y, por otro lado, el propio
chorro de la orina limpiará la vía urinaria.

“Todos los orificios naturales de nuestro organismo (vagina, boca, oídos,


ano…) pueden ser puertas de entrada para los microorganismos pero
en todos ellos existen mucosas que actúan como barreras.”

¿Qué hubiese pasado si en otra escena


ingieres el MB?. Pues el guión sería exactamente
idéntico. El MB sería incapaz de atravesar las
barreras y sobre él actuarían la lisozima, el pH, el
moco, la flora y los movimientos peristálticos.

Como llevamos un buen rato actuando en esta


extraña e increíble obra y no vemos un duro (0.03 Euros),
vamos a hacer un pequeño descanso para reflexionar. Los
actores han ido cambiando, pero tu actuación frente a cada uno
de ellos ha sido idéntica. Es decir, existen unos mecanismos de
defensa (piel, mucosas, pH, lisozima … ) que siempre
“funcionan” de la misma manera independientemente del mi-
croorganismo que entre en contacto con el huésped. Precisa-
mente porque “funcionan” del mismo modo para cualquier
agente causal, se les denomina mecanismos de defensa ines-
pecíficos.

Vamos a cambiar algunas partes del guión. Supongamos que


cuando el MA entró en contacto con tu piel tenías una pequeña
herida. ¡Mala suerte!. Con la barrera rota el MA es capaz de

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

atravesar tu epidermis. Lo mismo habría ocurrido si tienes lesionada


la mucosa respiratoria, digestiva o urinaria. Y ahora ... ¿qué?.
¡Tenemos al enemigo en casa!. Pues no debe cundir el pánico porque
afortunadamente disponemos de un ejercito de glóbulos blancos que
acuden a la zona donde se encuentra el MA y le plantan batalla.
¿Cómo luchan los glóbulos blancos?. De dos maneras muy distintas
porque no todos los glóbulos son iguales:

a) Glóbulos blancos que actúan siempre de la misma ma-


nera.- Los glóbulos blancos están en la sangre, así que
debido a su localización están continuamente “dando Glóbulo blanco fagocitando
vueltas” por todos los tejidos. a un microorganismo

Si pasan por zonas en las que se encuentra el MA


o el MB, atraviesan la pared del vaso sanguíneo y se
aproximan al microorganismo. A continuación lo fagoci-
tan (el glóbulo ingiere al microorganismo), o bien liberan
una serie de moléculas que lo aniquilan.

En estas situaciones los glóbulos actuarán de la


misma manera independientemente del tipo de microor- Glóbulo blanco liberando
ganismo. En los dos casos los fagocitarán o liberarán moléculas que aniquilan a
moléculas que sirven para aniquilar a cualquiera de ellos. los microorganismos
Por tanto, seguimos estando ante un mecanismo de
defensa inespecífico.

b) Glóbulos blancos que actúan de diferente manera según el mi-


croorganismo contra el que van a luchar.- Se trata de un tipo
especial de glóbulos blancos llamados linfocitos y que también
circulan por la sangre. Los linfocitos también van a producir
moléculas con el fin de destruir a los microorganismos. Entonces,
¿qué diferencia a los linfocitos del resto de glóbulos blancos?. La
diferencia está en la calidad y el tipo de molécula. Para erradicar
al microorganismo invasor se producirá una molécula especial-
mente diseñada para luchar contra cada tipo de “invasor”. En
nuestro ejemplo:

− Ante el MA se pro-
duce una molécula
que es capaz de ani- A
quilar al MA, pero no La molécula naranja Linfocito que forma
al MB. Es decir, sólo sólo encaja con el mi- moléculas capaces de
sirve contra el MA. crooganismo A, no aniquilar al microor-
con el B ganismo A

B
− Ante el MB se pro-
duce una molécula
que es capaz de ani-
quilar al MB, pero no A
al MA. Es decir, sólo La molécula azul Linfocito que forma
sirve contra el MB. sólo encaja con el mi- moléculas capaces de
croorganismo B, no aniquilar al microor-
con el A. ganismo B.

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

Como dependiendo del tipo de microorganismo invasor


los linfocitos producen moléculas distintas y propias para cada
caso, decimos que el mecanismo de defensa es específico.

Después de esta larga historia deberíamos llegar a una serie


de conclusiones:

• Ante el contacto con un determinado agente causal el huésped


no se queda pasivo sino que intenta defenderse del mismo.

• Los mecanismos de defensa que utiliza son de dos tipos:

− Inespecíficos: Funcionan siempre del mismo modo inde-


pendientemente del tipo de agente causal. Son la piel, las
mucosas, el pH, la lisozima … y los glóbulos blancos que no
sean linfocitos.

− Específicos: Funcionan de distinta manera dependiendo del


tipo de agente causal. Para cada tipo de agente los linfocitos
producen unas moléculas que sólo sirven para actuar contra
ese agente y no contra otro.

Si tanta “batería defensiva” tenemos, ¿cómo es posible que


padezcamos enfermedades infecciosas?. La razón es bien sencilla:
los microorganismos serán infinitamente pequeños, pero “no son
tontos”. Suelen crear estrategias adecuadas para intentar saltarse
todas las barreras y así poder multiplicarse en el huésped provocán-
dole la enfermedad.

Por otro lado, hay ocasiones en las que “se lo ponemos fácil”
a los microorganismos. Es decir, hay circunstancias en las que esos
mecanismos de defensa no están funcionando como debieran.
¿Cuáles son esas circunstancias?. Ya hemos tratado alguna de ellas
en el Módulo de Técnicas Básicas de Enfermería, ¿las recuerdas?.

2. Principales factores que pueden afectar a los mecanismos de


defensa.
• Edad.- En los ancianos y niños pequeños es más fácil que se
desarrolle una enfermedad infecciosa que en los jóvenes y
adultos. Las causas son varias.
− En los niños los mecanismos de defensa tanto específicos
como inespecíficos son inmaduros, y aún necesitan cierto
tiempo para poder llegar a funcionar al 100% de sus
posibilidades.
− En los ancianos se facilita la infección por: piel seca y
quebradiza, acúmulo de secreciones en las vías respirato-
rias, menor eficacia en la actuación de todos los glóbulos
blancos (incluidos los linfocitos), ... etc. Todas estas carac-
terísticas no son más que el producto de las modificaciones
que sufre nuestro cuerpo cuando envejecemos.

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

• Estado nutricional.- Seguro que hemos oído la frase: ¡come que


si no te vas a enfermar!. Pues aunque se trate de una afirmación
popular no le falta razón. Un estado nutricional deficiente favorece
las infecciones. No debemos imaginar que un estado nutricional
deficiente acontece sólo cuando se pasa hambre, sino que tam-
bién ocurre cuando las dietas no son equilibradas. Esta última
situación es muy frecuente en los ancianos que en nuestra socie-
dad es el grupo que peor come.
• Alteración de las barreras naturales.- Por
ejemplo heridas, úlceras, quemaduras ... etc.
Todas estas posibilidades no sólo pueden ocu-
rrir en la piel, sino que también hemos de “La edad, malnutrición, alteración de
imaginarlas en las mucosas (digestiva, respira-
toria, urinaria,... ). barreras naturales, enfermedades cróni-
cas …, alteran los mecanismos de de-
• Padecimiento de enfermedades crónicas.-
fensa y favorecen las infecciones.”
Cualquier enfermedad que se prolonga en el
tiempo durante años (diabetes, bronquitis cró-
nica, tumores malignos, ... etc) puede alterar
los mecanismos de defensa del paciente.

• Situaciones especiales: Algunos ejemplos son:


− Los tratamientos médicos agresivos (radioterapia y quimiote-
rapia) pueden alterar considerablemente la integridad de las
mucosas y la cantidad de glóbulos blancos.
− Encamamiento prolongado.- Cualquier persona encamada lo
estará por alguna enfermedad y a la propia enfermedad
hemos de sumar que la inmovilización favorece la retención
de secreciones. Esta retención facilitará el asentamiento de
gérmenes. Por esto es muy frecuente observar que pacientes
con largas estancias hospitalarias desarrollan episodios infec-
ciosos como neumonías.
− Coma.- En estos casos “los boletos” para padecer una infec-
ción son diversos. Por un lado muchos mecanismos de de-
fensa están alterados y por otro los pacientes están conecta-
dos a aparatos que rompen las barreras naturales (intubación,
cateterización venosa, sondaje vesical ... etc.)

II.- LAS INFECCIONES HOSPITALARIAS.

Imaginemos un paciente que ingresa porque tiene una neumo-


nía bacteriana. ¿Es ésto una infección hospitalaria?. Podríamos pen-
sar que sí, porque como el paciente padece una enfermedad infec-
ciosa y ahora está en el hospital .... No nos engañemos, esto no es
una infección hospitalaria.

Para empezar, hemos de saber que infección hospitalaria es


sinónimo de infección nosocomial. De acuerdo con las recomendacio-
nes sobre higiene hospitalaria del Consejo de Europa (1.984) se
entiende por infección nosocomial a:

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

al
comi
oso “Toda enfermedad contraída en el hospital causada por
cc.n
fe un microorganismo [...] que afecta al paciente con motivo de su
In
estancia en el hospital o de los cuidados recibidos mientras está
hospitalizado pudiendo aparecer sus síntomas durante su estancia o
después del alta.”

Para que las cosas nos queden bien claras vamos a analizar
esta definición:

− “enfermedad contraída en el hospital”.- Esto quiere decir que el


agente causal se pondrá en contacto con el huésped dentro del
hospital. Por eso, en el ejemplo que pusimos de la neumonía no
podemos hablar de infección nosocomial porque ya, antes de su
ingreso, el paciente la padecía.

− “causada por un microorganismo”.- Ni que decir tiene que debe


existir un agente causal (bacteria, virus u hongo).

− “que afecta al paciente con motivo de su estancia en el hospital


o de los cuidados recibidos mientras está hospitalizado”.- La
infección nosocomial sólo se define para un paciente que está en
el hospital porque está ingresado por otro motivo. Tengamos en
cuenta que un visitante o un trabajador que contraiga una
infección en el hospital no constituye una infección nosocomial
porque o está de visita, o está trabajando, pero no cumple el
requisito de estar ingresado por otra enfermedad.

− “pudiendo aparecer sus síntomas durante su estancia o después


del alta”.- Esta última condición únicamente quiere contemplar
que si bien para adquirir la infección hospitalaria hay que estar
ingresado, los síntomas de la misma pueden surgir mientras está
ingresado o posteriormente, cuando ya ha sido dado de alta.

Puede que te preguntes por qué esta- Pretendemos que


mos desmenuzando tanto la definición este concepto quede bien
de infección hospitalaria o nosocomial. delimitado porque consti-
tuye un serio problema de
salud pública. Para poder
comprender la dimensión de este problema vamos a realizar un
breve recuerdo histórico para luego analizar la situación actual
de las infecciones nosocomiales.

1) Pasado y presente de las infecciones nosocomiales.

La historia de la infección nosocomial es paralela a la de los


hospitales. Existen infecciones hospitalarias desde el momento en el
que los enfermos se agrupan y permanecen en una institución para
ser cuidados.

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

Razis, un famoso médico que vivió en el siglo IX, fue requerido


para que se hiciera cargo de un hospital que se iba a fundar en la
ciudad de Bagdag. Para decidir en qué lugar debía construirse, Razis
se fue por diferentes lugares de la ciudad en los que colgó pedazos de
carne. Observó en cuál de ellos la carne tardaba más en pudrirse y ése
fue el que escogió. Razis debía haberse dado cuenta de que la
putrefacción y la enfermedad tenían algo en común. El descubrimiento
de ése elemento común, los microorganismos, se hizo 1.000 años más
tarde y entonces nació la Higiene moderna.

Durante siglos los hospitales prestaron atención a miles de


pacientes sin que nadie conociera la existencia de microorganismos ni
el papel que juegan en las enfermedades infecciosas. No obstante,
durante el siglo XVII los médicos sí que tenían la impresión de que
cuando alguien “cogía” este tipo de enfermedad la podía pasar a
otros, pero siempre pensaron que ocurría “de enfermo a enfermo”. No
estaban del todo equivocados, pero se olvidaron de otra posibilidad
muy importante: el personal sanitario nunca imaginó su papel como
posible transmisor de las enfermedades infecciosas.

Con todo lo descrito en el párrafo anterior es fácil imaginar


que, por poner un ejemplo, la cantidad de heridas que se infectaban
en el hospital fuera superior al 50%. Así que llegó un punto en el que
“ir al hospital” se asociaba irremediablemente a “no salir de él”. Bueno,
sí se salía, pero “con los pies por delante”.

Situémonos en el tiempo. ¿Hasta cuándo duró todo esto?.


Pues no pienses que estamos hablando de la Edad Media o del
Renacimiento. En realidad duró “hasta el otro día”. Tengamos en
cuenta que los microorganismos se relacionan con la enfermedad
infecciosa a mediados del siglo XIX, y que la “Santa” que ayudó a
tratar muchas infecciones “Santa Penicilina”, se comercializó en 1.941
en plena II Guerra Mundial.

El hombre que sospechó las causas de la muerte por supura-


ción y que, además de verlo lo proclamó “a los cuatro vientos” fue el
germano-húngaro Ignaz Philipp Semmelweis. Comenzó su labor mé-
dica a los 22 años de edad ocupando el cargo de ayudante de la
primera clínica de obstetricia de Viena. No obstante, la gran mayoría de
sus colegas contemporáneos no sólo no le creyeron sino que incluso se
rieron y burlaron de sus descubrimientos. P. Semmelweis
En 1.847 Semmelweis se da cuenta de que en las dos salas donde se encuentran
las parturientas las cifras de mortalidad por infecciones son mucho más bajas en la
segunda sala. Analizando la situación sólo encuentra una diferencia:

− En la primera sala trabajan médicos (él entre ellos) y sus estudiantes. Cada día tienen
la rutina de, primero investigar sobre cadáveres en las salas de autopsias y, luego,
dirigirse a la sala primera a reconocer a las parturientas.

− En la sala segunda no trabajan médicos ni estudiantes, sólo comadronas y éstas no


practican nunca autopsias antes de reconocer a las pacientes.

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

La conmoción de Semmelweis es terrible, se cree en los límites de la locura e incluso


se le pasa por la cabeza suicidarse. Dispone palanganas de agua clorada, cepillos de uñas y
jabón a la entrada de la sala para que todo el que entre se lave antes las manos. Más
adelante se dará cuenta que no sólo se transmite el problema de muertos a vivos, sino que
también ocurre de vivos a vivos. No cesa de difundir su descubrimiento y los buenos
resultados del lavado de las manos. Sus ideas resultan tan nuevas para los médicos de la
época que no le creen y reaccionan con el desdén o con el silencio.

Muchos años después de su descubrimiento escribe: “… sólo Dios sabe el número de


mujeres que por mi causa han bajado a la tumba prematuramente”. El destino será cruel. El
primer hombre que penetró en el misterio de la sepsis y de la asepsia morirá en 1.865 de
este mal. A Semmelweis se le infectará una herida que se hizo durante una autopsia.
Todavía, mucho tiempo después de su fallecimiento, seguirán pereciendo innumerables
parturientas y multitud de víctimas de operaciones quirúrgicas porque su colegas no
quisieron seguir su método.

Hoy en día (comienzos del siglo XXI) tenemos muchas


ventajas: conocemos los agentes causales, el modo en que pueden
transmitirse, el tipo de enfermedad que producen y además, dispo-
nemos de una gran cantidad de medicamentos para combatir las
infecciones. ¡Pero no echemos las campanas al vuelo!. El problema
de las infecciones nosocomiales no está ni mucho menos resuelto
porque:

− Afecta al 5-10% de los enfermos ingresados en países desarro-


llados.- Ni que decir tiene que en los países en vías de desarrollo
o subdesarrollados el porcentaje se eleva considerablemente.
Pongamos los datos más claros: en un hospital de Estados
Unidos, Canadá o Alemania, de cada 100 pacientes que ingre-
san cinco “se infectarán en el hospital”.

− La infección nosocomial prolonga la estancia hospitalaria.- Esta


estancia suele prolongarse una media de 5-7 días con el consi-
guiente perjuicio para el paciente (más medicación, pruebas
diagnósticas adicionales ... etc.) Si por una sola vez nos olvida-
mos de la salud del paciente y hablamos de dinero, las cifras son
para temblar. Esta prolongación de la estancia cuesta a un país
desarrollado miles de millones de pesetas.

Para ilustrar mucho mejor el estado actual de las cosas,


veamos como nos va “por casa”. De acuerdo con una serie de
estudios iniciados en 1.990 sobre las infecciones nosocomiales en
España se constata que:
− Afecta a un 9% de los pacientes.- Es decir que de cada 100
ingresos 9 desarrollan una infección hospitalaria.
− El 1% de las infecciones son causa directa de muerte.- De 100
pacientes que padezcan infección nosocomial, uno morirá debido
a ella. Si lo relacionamos con el dato anterior podemos decir que
de 1.100 pacientes que ingresan, aproximadamente 100 desarro-
llarán una infección nosocomial y de esos 100, uno morirá.

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

Las cifras a veces son frías y engañosas. Podemos pen-


sar: “bueno, que de cada 1.100 ingresos muera uno ... pues no
está tan mal”. Sí que esta mal porque va a morir por una enferme-
dad que no tenía y distinta a aquella por la que ingresó, así que …
¡tremenda gracia!.
− La prolongación de la estancia hospitala- ¡No memorices es-
ria es de 11.6 días y supone un gasto de tos datos!, solo se trata de
100.000 millones de pesetas al año. Si no hacernos una idea sobre
existieran las infecciones nosocomiales la magnitud del problema
nos sobrarían 100.000 millones cada año. de las infecciones nosoco-
¿Te imaginas todo lo que se podría hacer miales en nuestro país.
con ese dinero?.

2) ¿Cuáles con las infecciones hospitalarias más frecuentes?.

A continuación reproducimos en una representación gráfica los


datos obtenidos en 1.992 por el EPINE (Estudio de prevalencia de
infecciones nosocomiales en España).

OTRAS INFECCIONES
INFECCIONES URINARIAS
26% 28%

9%
BACTERIEMIAS
19%
18%
INFECCIONES INFECCIONES
RESPIRATORIAS QUIRÚRGICAS

De la representación podemos deducir que el orden de fre-


cuencia de mayor a menor es:

a) Urinarias.- Ya sabíamos (Módulo Técnicas Básicas de Enfer-


mería) que la infección urinaria es la enfermedad más fre-
cuente del aparato urinario. Ahora podemos también afirmar
que la infección nosocomial más frecuente es ésta.
b) Quirúrgicas.- Se refiere a la infección de la herida quirúrgica.
c) Respiratorias.- Son las famosas neumonías hospitalarias.
d) Bacteriemias.- El sufijo “emia” se refiere a sangre, así que se
entiende por bacteriemia la presencia de bacterias en la
sangre.
e) Otros.- Corresponde a la suma de las infecciones hospitala-
rias digestivas, cutáneas, oculares, óticas, óseas, del sistema
nervioso central ... etc.

Además de todos estos datos, no podemos perder de vista que


los factores generales que afectan a los mecanismos de defensa para
cualquier tipo de infección siguen siendo iguales para las infecciones
nosocomiales. Por tanto:

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

− Un paciente anciano hospitalizado tiene mayor probabilidad de


adquirir una infección nosocomial que otro joven igualmente
hospitalizado.

− Un paciente malnutrido que ingresa tiene mayor probabilidad de


adquirir una infección nosocomial que otro que esté correcta-
mente nutrido y sea hospitalizado.

− Igualmente ocurrirá con la alteración de las barreras naturales, la


existencia de enfermedades crónicas o de situaciones especia-
les (encamamiento prolongado, coma, tratamientos médicos
agresivos ... )

Para terminar, señalaremos que la


cantidad de infecciones nosocomiales que
“Las infecciones nosocomiales ocurren en una institución sanitaria son un
son aquellas que adquieren los buen indicador de la calidad de los cuidados
enfermos ingresados durante su que se prestan al paciente. Recordaremos
que lo mismo sucede con las úlceras por
estancia hospitalaria.” presión.

Arthur Conan Doyle (1.859-1.930) estudió medicina, pero se


hizo famoso como escritor por haber creado al detective Sherlock
Holmes. En uno de sus relatos describe al doctor James Winter y
dice de él: “la teoría de los gérmenes como causantes de enfer-
medad le arrancó durante mucho tiempo glogloteos de risa, y su
chiste preferido en los cuartos de los enfermos solía ser el de:
cierren la puerta, porque si no, se colarán los gérmenes”.

3) ¿Cómo se producen la infecciones hospitalarías?.

Las infecciones nosocomiales son enfermedades infecciosas


adquiridas en el hospital. Así que, como toda enfermedad infecciosa,
se producirá porque se “monta” la siguiente cadena:

Fuente de infección Mecanismo de Huésped


con agente causal Transmisión

La gran particularidad de las infecciones nosocomiales es


que la fuente de infección con el agente causal “está de forma
permanente o temporal en el hospital”, el mecanismo de transmisión
ocurre “en el hospital” y el huésped está ingresado en la institución
sanitaria.

Analicemos cada uno de los eslabones de la cadena en el


caso de las infecciones nosocomiales:

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

• Agente causal.- Evidentemente serán los microorganismos: bac-


terias, virus u hongos. La infección nosocomial más frecuente es
bacteriana.
Con respecto a las bacterias es necesario saber que
cuando las condiciones ambientales son poco favorables (bajas
temperaturas, sequedad del aire, acción de jabones y desinfectan-
tes ... etc) pueden morir, pero en muchos casos las bacterias son
capaces de resistir las condiciones adversas porque se transfor-
man en unas estructuras llamadas esporas. Cuando las condicio-
nes vuelven a ser favorables las esporas se convierten nueva-
mente en bacterias.
La formación de esporas es algo parecido a lo que ocurre
con los animales que hibernan. Los osos, al llegar el crudo
invierno con bajísimas temperaturas (condiciones desfavorables),
entran en un estado de somnolencia durante meses. Cuando
vuelven a subir las temperaturas (condiciones favorables) “salen
de esa especie de coma” y desarrollan una vida normal hasta el
siguiente invierno.
La hibernación en este sentido hace el mismo papel que la
formación de esporas, es decir, una forma de resistir las condicio-
nes adversas.

• Fuente de infección.- Es enormemente variable. Puede ser cual-


quiera que esté en el hospital: enfermos, trabajadores y visitas.
Está claro entonces que un paciente puede infectarse a partir de
otro paciente, del médico, del DUE, del TAE, del personal de
limpieza, del de mantenimiento, de las visitas .... etc.

• Mecanismo de transmisión.- ¡Prepárate para lo que vamos a


decir!. Todos los estudios sobre infecciones nosocomiales llegan a
la siguiente conclusión:
“La transmisión de microorganismos se
produce generalmente a través de las manos
sucias del personal sanitario” .
Cuando se habla de manos sucias no estamos
refiriéndonos a que estén impregnadas de residuos
visibles debajo de las uñas, en los pliegues ... etc. Si
fuera así, ¡ya sería el colmo!. Hablamos de manos
aparentemente limpias pero que tras alguna maniobra
no han sido correctamente lavadas. Un sanitario des-
pués de sonarse con un pañuelo debe lavarse las manos y, por
supuesto, después de ir al baño. Evidentemente, después de
cualquier procedimiento con un paciente también hay que lavárse-
las
No todo se transmite por las manos, existen otras formas.
La segunda más frecuente en el caso de las infecciones nosoco-
miales es la vía aérea: por las gotitas de Flügge procedentes del
aparato respiratorio del personal, enfermos o visitas; por los
aerosoles originados como consecuencia del funcionamiento de

20
Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

los sistemas de aire acondicionado; por partículas de polvo que


son arrastradas por corrientes de aire ... etc.

Los utensilios de uso habitual (guantes, mascarilla,


“Extremar las precauciones aparatos de exploración, instrumental ... ) pueden actuar
significa reducir riesgos y como mecanismo de transmisión si están contaminados. Por
evitar complicaciones poste- eso, el material que se utilice y, dependiendo de cada caso,
estará limpio, desinfectado o esterilizado. Por ejemplo, en un
riores.” sondaje urinario la sonda deberá estar estéril, pero en la
determinación de la temperatura el termómetro estará desin-
fectado.

En las siguientes unidades de trabajo profundizaremos


sobre estos 3 conceptos: limpieza, desinfección y esterilización.
De momento hemos de quedarnos con la idea de que la máxima
limpieza (ausencia de gérmenes) es la esterilización.

Para terminar, diremos que la transmisión de microorga-


nismos por la ropa o el uniforme de trabajo durante un determi-
nado procedimiento o actuación (cambio de lencería, servir la
comida ...) es posible, pero la probabilidad es mínima.

• Huésped.- Tiene que ser un paciente que durante su ingreso se


infectó. Si no fuera así, no sería una infección nosocomial.
Hemos de recordar una vez más que en la mayoría de los casos
las barreras defensivas pueden estar alteradas (por la propia
enfermedad o por los tratamientos que recibe).

Está claro que el causante directo de la infección nosocomial


es el microorganismo, pero no podemos olvidar toda una serie de
factores que favorecen su aparición:

a) Ausencia de medidas adecuadas de higiene hospitalaria y/o


insuficiente formación en higiene del personal sanitario.-
Una higiene hospitalaria racional y exigente es fundamental a la
hora de combatir las infecciones nosocomiales. Las medidas de
limpieza, desinfección y esterilización constituyen la base de la
higiene hospitalaria. Así que todo el personal debe conocer,
aplicar y controlar de forma estricta este tipo de medidas. En este
sentido podemos sacar dos conclusiones:

− Este módulo es absolutamente necesario en la forma-


ción del TAE porque aquí aprenderemos a aplicar y
controlar las medidas de higiene.

− Las medidas a aplicar para cada caso vienen especifica-


das en una lista de pasos a seguir, como si fuera una
ficha de procedimientos. Cada ficha recibe el nombre de
protocolo. La única manera de ser estrictos es no sal-
tarse pasos y ejecutar cada uno de ellos tal como se
indica en el protocolo. Cada institución elabora sus
propios protocolos en función de sus necesidades y
circunstancias particulares.

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

b) Maniobras agresivas que sufren los pacientes.- No nos esta-


mos refiriendo a maltrato sino a agresiones que rompen barreras
defensivas y que son propias del medio
hospitalario como sondaje vesical, cate-
terización intravenosa, aspiración de se- “Todas las maniobras de actuación de
creciones, transfusiones, punciones, in- estas características hay que realizarlas
tubación endotraqueal ... etc. De todas con absoluta asepsia.”
ellas, el sondaje vesical es con mucho el
origen más frecuente de la infección no-
socomial.

c) Presencia de pacientes que fueron ingresados padeciendo ya


una enfermedad infecciosa.- Esto implica que estos pacientes
hospitalizados constituyen una destacable fuente de infección.
Está claro que no los podemos “poner en la calle” para evitar que
infecten a otros. Entonces, ¿qué hacer?. Pues seguir una serie de
protocolos que indican, para cada tipo de enfermedad infecciosa,
las medidas a aplicar en el paciente infectado y en el personal
para evitar la transmisión a otros pacientes. Volvemos a insistir en
la importancia de la ejecución correcta de los protocolos.

d) Características propias de los pacientes hospitalizados.- Mu-


chos tendrán alteradas sus barreras defensivas naturales por la
enfermedad que padecen, otros por el encamamiento prolongado,
inmovilidad ... etc. Así que, para todos estos casos habrá que
tomar medidas de protección y prevención. Es decir, seguir los
protocolos de higiene y asepsia de cada actuación asistencial.

Una vez que hemos visto cómo se producen las infecciones


hospitalarias y los factores generales que favorecen su aparición,
surge una gran pregunta que casi podríamos llamar “la pregunta del
millón”: Si todas las medidas de higiene hospitalaria están detalladas
por pasos para cada situación (protocolos), ¿cómo es posible que la
transmisión de microorganismos se produzca generalmente a través
de las manos sucias del personal sanitario?.

Pues la pregunta del


millón tiene una respuesta que
debería resultarnos vergon-
zosa, pero que está compro-
bado que es cierta: ¡La maldita
¿¿¿ RESPONSABILIDAD ???
rutina!. Efectivamente todo
está escrito y especificado y no
es difícil seguir los pasos que
indican los protocolos. Desgra-
ciadamente lo que ocurre es
que en el día a día el personal
(médicos, DUEs y TAEs) se
relaja en el seguimiento de los
mismos.

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

Vamos, que a lo mejor nos saltamos un paso, no nos


lavamos bien las manos, usamos un producto que no es el ade-
cuado, nos distraemos y sin querer tocamos un instrumental o
material estéril sin guantes, no revisamos la fecha de caducidad del
material esterilizado, etcéeeeeeeeeeeetera. Y ¿qué es lo peor?.
Pues que como trabajamos muchos sobre el mismo paciente “nadie
tiene la culpa”. La responsabilidad se diluye, nosotros mismos “nos
dejamos ir”, no somos conscientes del problema que creamos y
mientras tanto .... ¡los pacientes padeciendo nuestra falta de profe-
sionalidad!.

FUERTE ESTE PÁ-


RRAFO, ¿NO?. PERO
REAL COMO LA VIDA “Siguiendo los protocolos
MISMA correctamente podremos
contribuir a que disminuyan
las infecciones nosocomiales
de forma directa y eficaz”
¡NO PERMITAS QUE LA RUTINA
SE APODERE DE TI Y SIGUE LOS
PROTOCOLOS DE HIGIENE ME-
TICULOSAMENTE!

III.- MEDIDAS DE PREVENCIÓN Y CONTROL DE LAS INFECCIONES


HOSPITALARIAS.

Aunque la experiencia y los estudios realizados demuestran


que para cualquier hospital de cualquier país es muy difícil conse-
guir un porcentaje de infecciones nosocomiales inferior al 5%,
sabemos que un gran número de ellas son evitables aplicando
medidas de bajo coste.

Considerando que en España tenemos un 9% de infecciones


nosocomiales, podemos deducir que aplicando adecuadamente me-
didas que cuestan poco dinero lograríamos evitar casi la mitad de las
infecciones nosocomiales que se producen en la actualidad.

La prevención y control de las infecciones nosocomiales es


un programa global en el que se requiere la implicación y participa-
ción de todo el personal. En primer lugar cada hospital tendrá que
conocer cuántas y que tipo de infecciones nosocomiales se produ-
cen en él. Para eso existe el equipo de vigilancia epidemiológica
que se encarga de:

− Comprobar diariamente los nuevos casos de infección nosoco-


mial.
− Registrarlos.
− Comunicarlos al Comité de Higiene del hospital.
− Elaborar periódicamente un informe (suele ser mensual).

23
Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

¿Qué es y qué hace el Comité de Higiene Hospitalaria?. El


Comité es otro equipo de profesionales que se encarga de establecer
medidas que eviten situaciones nocivas para la salud dentro del
hospital. Entre este conjunto de medidas se encontrarán las encami-
nadas a disminuir las infecciones nosocomiales

HOSPITAL – INFECCIONES NOSOCOMIALES

COMITÉ DE HIGIENE EQUIPO DE VIGILANCIA


HOSPITALARIA Comunica EPIDEMIOLÓGICA
Establece medidas para Detecta y registra las
su control y prevención infecciones nosoco-

Todos los protocolos de higiene y normas de actuación ven-


drán determinadas por el Comité de Higiene Hospitalaria. Es relativa-
mente frecuente observar cómo el personal se habitúa a llevar a cabo
los protocolos de una determinada manera y cuando algún paso,
producto o técnica se modifica es reacio a aceptar el cambio. Hemos
de colaborar y adoptar las nuevas medidas. Tengamos en cuenta que
se trata de una decisión tomada por un Comité que, una vez infor-
mado por el Equipo de Vigilancia Epidemiológica, ha llegado a la
conclusión de que ese cambio es probadamente eficaz para disminuir
la cantidad de infecciones nosocomiales. Así que no vale eso de:
“pues yo siempre los he hecho así”, “pues yo siempre he utilizado este
producto”..... Es nuestra obligación seguir las indicaciones y adaptar-
nos a los cambios que se propongan para controlar y combatir las
infecciones.

Las medidas de prevención y control de las infecciones noso-


comiales son muchas y muy variadas pero podemos agruparlas de la
siguiente manera:

• Saneamiento del medio ambiente hospitalario.- Incluye los


procedimientos de limpieza, desinfección, esterilización, desinsec-
tación y desratización. Las dos últimas suelen ser llevadas a cabo
por empresas que se contratan. La limpieza, desinfección y esteri-
lización es diaria y la realiza personal del hospital. Las trataremos
en las siguientes unidades de trabajo.

• Obtención, manipulación y eliminación de material biológico.-


Nos estamos refiriendo a qué hacer con las muestras de sangre,
esputo, tejidos ... etc. una vez que han sido analizadas y con el
material desechable que se utilizó para su obtención (la jeringa
con restos de sangre, gasas, agujas ...). Evidentemente no se tira
a una basura normal y corriente. Desprenderse adecuadamente
del material biológico no es tan sencillo y también hay que seguir
una serie de normas. Las veremos en la Unidad de Trabajo 6.

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

• Medidas encaminadas a reducir la contaminación de per-


sona a persona.- Nos referimos a las medidas destinadas a
evitar la transmisión de microorganismos de una persona a otra
(enfermo, profesional, visita). De este punto nos ocupamos en la
presente Unidad de Trabajo, pero antes hagamos una pequeña
reflexión:

Puede parecernos absurdo que para evitar las infeccio-


nes nosocomiales nos estemos ocupando de que los microorga-
nismos no pasen de los enfermos a los profesionales o a las
visitas, éstos si enfermaran no constituirían una infección noso-
comial pues no están ingresados. Entonces, ¿por qué nos ocu-
pamos?. Existen infinidad de caminos por los que un microorga-
nismo puede infectar a un paciente ingresado

Enfermo ingresado Profesional Otro enfermo ingresado

Profesional Enfermo ingresado

Visitas Profesional Enfermo ingresado

Si en estos ejemplos empleamos medidas de prevención


y control sobre los profesionales y visitas, romperemos la cadena
de transmisión y evitaremos que el enfermo hospitalizado ad-
quiera una infección nosocomial.

1) ¿Cuáles son las medidas que disminuyen la contaminación


de persona a persona?.

Desde muy antiguo existía la costumbre de separar (aislar) a


las personas enfermas de aquellas que se encontraban en perfecto
estado de salud. Al conjunto de medidas que se aplicaba a los
enfermos se las conocía como medidas de aislamiento.

¿Sabes cuál fue la primera


medida de aislamiento de la En el año 1.374 en Venecia
que tenemos constancia?. se aplicaron medidas de aislamiento
a los barcos que arribaban para pro-
teger a los venecianos de la epidemia
de peste.

Seguramente habrás oído hablar de los aislamientos en el


hospital y habrás comprobado que se trata de un conjunto de
medidas estrictas, recomendaciones y pautas de actuación que
persiguen evitar la transmisión persona → persona. Este conjunto de
medidas fueron publicadas en 1.970 y, teniendo en cuenta la vía de
transmisión de la enfermedad, se proponían 5 tipos de aislamiento:
1) Aislamiento estricto. 2) Aislamiento respiratorio.
3) Aislamiento cutáneo. 4) Aislamiento entérico.
5) Aislamiento protector o inverso.

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

No vamos a profundizar sobre ellos porque a partir del inicio de


la epidemia del SIDA (1.985) se hizo una revisión profunda de todos
los sistemas de aislamiento y finalmente, en 1.996 los CDC de Atlanta
(Centros para el control y prevención de enfermedades) propusieron
un nuevo sistema de aislamiento. En él se consideran dos líneas
principales de actuación:

1.1.- Precauciones básicas.- Su propio nombre lo dice, son básicas


= importantes. Se aplican a todos los pacientes ingresados
independientemente del motivo de ingreso.

1.2.- Precauciones según transmisión.- Se aplican a pacientes


específicos con sospecha o confirmación de un infección que se
puede transmitir por el aire o por contacto con la piel u otras
superficies. Siempre se acompañan de las precauciones bási-
cas.

Analiza el siguiente cuadro en el que se detallan las precau-


ciones básicas y los tipos de precaución según transmisión.

Lavado de manos
Uso de guantes
Uso de mascarilla
Precauciones básicas Uso de pantalla o gafa
Uso de bata
(Para todos los pacientes)
Manejo de equipos de cuidados (material, instrumental)
Control ambiental
Manipulación de lencería
Manipulación de objetos cortantes y punzantes
Ubicación del paciente
Precauciones de contacto
Precauciones según transmisión Precauciones por tuberculosis, sarampión y varicela
(Las básicas más otras) Precauciones para otras enfermedades de transmisión
respiratoria

1.1.- Precauciones básicas.

A continuación vamos a analizar las características principales


de cada una de las 10 precauciones básicas.

1.1.1.- Lavado de manos.

Ya sabemos que gran parte de las infecciones nosocomiales


se producen principalmente a través del contacto con las manos
sucias del personal. El lavado de manos es una técnica sencilla,
económica y se considera que tiene una gran eficacia en la preven-
ción de las infecciones nosocomiales. Entonces, ¿dónde está el
problema?. El de siempre, ¡la maldita rutina!. Lavarse las manos es un
acto habitual así que pocas veces se le reconoce su importancia y, o
no se realiza o se hace incorrectamente.

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

Para poder aprender a lavarnos las manos es necesario


saber contestar a las siguientes preguntas:
a) ¿Qué tenemos en nuestras manos?
b) ¿Qué conseguimos con el lavado de manos?
c) ¿Cuándo hay que lavarse las manos?
d) ¿Con qué nos lavamos las manos?
e) ¿Cómo hemos de lavarnos las manos?

a) ¿Qué tenemos en nuestras manos?. En condiciones nor-


males sobre la piel de nuestras manos viven una serie de microorga-
nismos que nos acompañan siempre y que mientras no atraviesen la
piel, no nos provocan enfermedad. Este conjunto de microorganis-
mos recibe el nombre de flora residente. Además, pueden existir
temporalmente otros microorganismos que no son los habituales, es
la flora transitoria. Por supuesto, sobre la piel también existen
restos líquidos y sólidos: la suciedad evidente (que se lo pregunten
a un mecánico o a un obrero).

b) ¿Qué conseguimos con el lavado de manos?. Si lo hace-


mos correctamente:

− Eliminaremos la suciedad evidente y la flora


Lávate bien las transitoria
manos porque es el único
− Disminuiremos la flora residente
modo de conseguir todas
estas cosas. − Dejaremos sobre nuestra piel un medio ambiente
que retrasará el crecimiento de la flora transitoria
y residente.

c) ¿Cuándo hay que lavarse las manos?

ANTES Y DESPUÉS DE...


- Cada jornada laboral
- Ir a la cafetería o al comedor
- Realizar cualquier procedimiento sobre un paciente. ¡Entre pa-
ciente y paciente hay que lavarse las manos! y entre varios
procedimientos sobre un mismo paciente también puede ser
necesario (por ejemplo: baño completo y luego comida)
- Manipular sistemas de drenaje o sistemas que sea conveniente
mantener estériles
ANTES DE... DESPUÉS DE...
- Preparar medicación y/ - “Ir al baño”(orinary/o defecar), sonarse,
o alimentación peinarse...
- Haber tocado material contaminado con
secreciones o fluidos biológicos (sangre,
heces, orina, esputos...)

d) ¿Con qué nos lavamos las manos?. Necesitamos un lavabo


con su grifería, cepillos, dispositivos de secado, dispensador y
detergente. Analicemos cada cosa:

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

− Lavabo y grifería.- Lavabos los hay de muchos tipos, modelos y


materiales, y no vamos a profundizar en ellos. Sí que es impor-
tante considerar que la grifería debe poder accionarse sin usar las
manos, son los llamados “grifos de codo” (se abren accionando
una palanca con nuestro codo) y “grifos de pedal” (se abren
presionando un botón o
pedal con el pie). Los la-
vabos y la grifería tienen También existe el “grifo mágico”
microorganismos en su de algunas discotecas. Aquí no hay
superficie, así que cual- que presionar nada, sólo con poner
quier objeto que entra en las manos bajo el grifo sale el agua
contacto con ellos se eso sí, a ritmo de salsa.
contamina. ¡Hay que la-
varse las manos sin to-
carlos!

− Cepillos.- El cepillo debe estar estéril cuando lo usemos. Por eso


es preferible que sean desechables o fácilmente esterilizables. En
el área quirúrgica es muy habitual utilizar cepillos desechables que
ya vienen impregnados de jabón desinfectante.

− Dispositivos de secado.- Estamos acostumbrados a verlos y


usarlos en las discotecas, aeropuertos, aviones, baños públicos...
Seguro que has visto dos tipos: unos que emiten aire caliente y
otros con papel (en rollo o en toallitas individua-
les). Los de aire caliente no son recomendables
en las instituciones sanitarias pues las turbulen-
cias que provoca el aire favorecen la disemina-
ción de los microoganismos. Al secarnos las
manos con papel hemos de desecharlo en un
contenedor que, si tiene tapa, pueda abrirse
con pedal.

− Dispensador.- El dispensador es un dispositivo cerrado que


contiene el detergente y tiene la peculiaridad de poder accionarse
sin emplear las manos directamente. Podemos distinguir dos
tipos:
− Dispensador de superficie: Son muy parecidos a los que
compramos para los baños de nuestras casas. Es decir,
recipientes que se colocan sobre una superficie y que al
apretar la parte superior sale el detergente. Una vez que se
agota el detergente , se desecha el dispensador y se pone
otro nuevo. Es habitual encontrarlos en las plantas de hospita-
lización.
− Dispensador de pared: El dispensador está adosado a la
pared y dispone de una palanca que al accionarla hace salir el
detergente. El depósito que contiene el detergente puede ser
desechable, si no es así será fácilmente desmontable y
rellenable. Cuando el depósito se vacía, si es desechable se
quita y se pone uno nuevo. Si no es desechable se retira, se
lava y se rellena con detergente. Los dispensadores de pared
son los más adecuados, pero también son más caros.

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

Los encontraremos siempre en la zona de lavado de los


quirófanos y lo ideal sería tenerlos también en las plantas de
hospitalización.

Para cualquier tipo de dispensador hemos de tener en


cuenta que hay que mantenerlos en adecuadas condiciones de
limpieza y de conservación. No es buena práctica dejar que
restos de jabón se acumulen en el orificio de salida, si hay partes
metálicas hay que cuidar que no se oxiden ... etc.

− Detergente.- Los detergentes son productos que en contacto


con el agua favorecen la eliminación de la suciedad. Este con-
cepto “está tirado”, ¿no?.

El uso de pastillas de jabón en las instituciones sanitarias


está prohibido porque la humedad que queda en ellas favorece la
proliferación de microorganismos. Tampoco suele usarse el de-
tergente en polvo porque deja en las manos residuos muy
difíciles de eliminar, es decir, son muy irritantes. Por lo tanto, lo
recomendado es utilizar productos líquidos colocados en reci-
pientes cerrados (dispensadores).

En el mercado existe gran variedad de detergentes.


No somos los TAEs los encargados de decidir cuáles son
mejores. Cada hospital adquiere los que estima oportunos.
¡Es un disparate lavarse las Nuestro cometido es familiarizarnos con los de nuestra
manos con el detergente institución y utilizarlos de acuerdo con los protocolos. Habrá
para material o superficies! detergentes para lavado de manos, para limpieza de mate-
rial, para limpieza de superficies (suelos)... Mientras no lo
indique el fabricante, los detergentes no pueden mezclarse
y, obviamente, cada uno se utilizará para lo que esté
destinado.

e) ¿Cómo lavarnos las manos?. En cualquier procedimiento


existen una serie de normas generales que son muy fáciles pero que
si no se llevan a cabo pueden hacer fracasar el procedimiento. Lo
mismo sucede en este caso. Son normas generales las siguientes:

• Debemos lavarnos las manos lo más cerca posible del lugar


donde vamos a ejercer nuestra tarea. De este modo se evitará la
contaminación posterior al proceso. Vamos, que no vale lavarse
las manos en la planta 3ª para luego atender a un paciente de la
5ª par!.

• Antes del lavado nos quitaremos los relojes, pulseras, anillos y


demás abalorios. Dada la cantidad de veces que hemos de
lavarnos las manos en una jornada laboral, lo mejor es quitarse
los abalorios antes de iniciarla.

• Hemos de cuidar nuestras uñas manteniéndolas cortas, bien


limadas y sin esmalte. Hay que destacar que en las uñas se
acumula una gran cantidad de gérmenes y suciedad y, además,
es difícil eliminarlos. Conociendo esto, ¿cómo te sentaría que te

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

diera de comer un TAE con las uñas largas y pintadas de rojo


bermellón?. Si no nos ocupamos de nuestras uñas, por muy bien
que nos lavemos las manos podemos estar transmitiendo microor-
ganismos a los pacientes. En este sentido, para ser buenos
profesionales hemos de olvidarnos de la estética y la moda.

• El lavado de manos debe estar protocolizado en cuanto a la


duración, tipo de sustancia química utilizada (detergente, desin-
fectante, antiséptico), momento y lugar de su ejecución y técnica
de realización. Esto quiere decir que existe un protocolo en el que
están escritas y especificadas todas estas circunstancias.

• Cuando utilicemos cepillo lo haremos sólo si es estéril. Si no lo


está es preferible no utilizarlo.
El procedimiento
El tipo de lavado de manos varía en función de los para cada una de
cuidados que se vayan a realizar. Se pueden distinguir 3 ellas se describe en
la correspondiente
técnicas para lavarse las manos: ficha.

1) Lavado de manos higiénico (básico, rutinario u


ordinario).- Es el que se hace al comienzo de la
jornada, cuando se realiza cualquier tipo de técnica
asistencial con los pacientes ...., es decir, en todos los
casos que citamos en el cuadro titulado “¿Cuándo nos
lavamos las manos?”. Se trata de un lavado de manos
sencillo pero minucioso.

2) Lavado de manos especial.- Se realiza antes de


cualquier maniobra que requiera un alto grado de
asepsia (sondaje urinario, cateterismo intravenoso, in-
tubación endotraqueal, curas ...) y al comienzo de la
jornada laboral cuando trabajamos en servicios espe-
ciales (prematuros, UCI, trasplantes ....).

3) Lavado de manos quirúrgico.- Se realiza antes de


cualquier intervención quirúrgica y se lleva a cabo en
instalaciones especiales y cercanas a los quirófanos.

1.1.2.- Uso de guantes.

No vamos a definir lo que es un guante, únicamente vamos a


profundizar sobre los tipos y características de cada uno. Todos son
desechables y existen dos tipos: de plástico y de látex.

− Guantes de plástico.- No son estériles,


su talla es única y su uso es rutinario en
casi todas las técnicas que no necesitan
condiciones de asepsia. Su objetivo prin-
cipal es la protección del personal sanita-
rio.

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

− Guantes de látex.- Los hay estériles y no estériles.

No estériles.- También son de uso rutinario y se utilizan en


técnicas que no requieran asepsia. Vienen en cajas (suelen
ser de 100 unidades) y por fuera de la caja se indica la talla.
Son más caros que los de plástico pero como se adaptan
mejor a las manos son más cómodos.

Estériles.- Se utilizan para todas aquellas técnicas que


requieran condiciones de asepsia. El objetivo principal de los
guantes estériles es la protección del pacientes y del perso-
nal.

Cada par de guantes estériles viene envuelto en un


paquete con doble envoltura. En la externa se indica la talla.
La envoltura interna se abre a modo de libro. Al hacerlo
veremos también señalada la talla y algunos signos que nos
indican cuál es el guante derecho y cuál el izquierdo. Los
signos más habituales son:

Derecho: “D” o “R” (derecho o right) o dibujo de silueta


El procedimiento de mano con la palma hacia arriba.
para colocar y retirar
los guantes se des-
cribe en la corres- Izquierdo: “I” o “L” (izquierdo o left) o dibujo de silueta
pondiente ficha. de mano con la palma hacia arriba.

Sobre el uso, colocación y retirada de los guantes es muy


importante señalar que:

− Cuando se vaya a tocar sangre, fluidos corporales, secreciones,


excreciones u objetos contaminados hay que llevar siempre
guantes. En este caso no es necesario que sean estériles porque
se trata sólo de proteger al personal.

− Antes de tocar mucosas o piel no intacta hay que ponerse


siempre guantes estériles. En este caso también hay que prote-
ger al paciente.

− Si los guantes se manchan con material altamente contaminado


(esputo de un paciente con tuberculosis, sangre de un paciente
con hepatitis, drenajes de heridas ... etc.) hay que cambiarlos
entre tareas que se realizan en el mismo paciente.

− Cualquiera que sea el tipo de guantes que utilicemos siempre


tenemos que lavarnos las manos antes de colocárnoslos. Proba-
blemente estemos cansados de leerlo porque en todas las fichas
de procedimientos se dice: “lávate las manos y ponte los guan-
tes”.

− Cuando los guantes no son estériles la colocación de los mismos


es la habitual, la misma que para guantes de lana contra el frío.

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

− Cuando los guantes son estériles no podemos ponérnoslos de


cualquier manera porque si tocamos su superficie externa se
contaminan y dejan de ser estériles. Se describe el procedimiento
de colocación de los guantes estériles en la correspondiente ficha.

− Los guantes hay que quitárselos rápidamente tras


su empleo y, por supuesto, antes de dirigirse a “Ponerse los guantes implica
otro paciente. Con estas medidas evitamos con- lavarse las manos previamente
taminar objetos o superficies que están limpias y
la transmisión de microorganismos a otros pa- y quitárselos implica lavarse
cientes. las manos posteriormente.”
− Para retirar cualquier tipo de guante (plástico,
látex no estéril y látex estéril) no podemos tocar
su parte externa con la piel de nuestros dedos, ...y ¡ojo! que lo
deben quedar “del revés” y uno dentro del otro. obvio es lo que ge-
neralmente se deja
− Después de quitarse los guantes hay que lavarse de hacer...
las manos inmediatamente. También lo hemos
visto en todas las fichas de procedimientos:
“quítate los guantes y lávate las manos”.

1.1.3.- Uso de mascarilla.

La mascarilla es un dispositivo que cubre parte del rostro. Si se


usan correctamente proporcionan una eficaz barrera contra los mi-
croorganismos presentes en el ambiente y contra aquellos que se
encuentran en las gotitas de Flügge, es decir, contra microorganismos
procedentes del aparato respiratorio.

¿Cuándo hemos de utilizar la mascarilla?. Siempre que se


realicen procedimientos que puedan ocasionar salpicaduras de san-
gre, fluidos, secreciones y excreciones. Esto quiere decir que ante
cualquier paciente (con enfermedad infecciosa o no) en el que el
procedimiento a realizar pueda “salpicar” fluidos a nuestro rostro es
necesario ser precavidos y protegernos con la mascarilla.

Las mascarillas las hemos visto todos pero quizá no hemos


reparado en los distintos tipos. Las hay de tela, de papel y sintéticas.

− Las mascarillas de tela son estériles y se utilizan en el área


quirúrgica.

− Las de papel son las más baratas pero tienen dos inconve-
nientes: por un lado, no se adaptan bien a la cara y por el
otro, se humedecen fácilmente. El papel humedecido no es
tan buena barrera como el seco y por eso se estima que
una mascarilla de papel es eficaz sólo durante 30 minutos.
Por tanto, hay que cambiarla cada vez que se humedezca.

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− Las sintéticas se acoplan perfectamente a la cara porque en la


parte superior poseen una tira de material flexible que permite
adaptarlas a la forma de la nariz. La tira metálica es muy
parecida a la de las mascarillas faciales de oxígenoterapia.
Aunque se humedezca con la respiración su eficacia como
barrera es de varias horas.

Es fundamental saber que cualquiera que sea el tipo de


mascarilla debe cubrir boca, nariz y mentón. Esto, que resulta tan
evidente para todo el personal, en ocasiones no parece tenerse en
cuenta en la práctica real. ¿Cuántas veces hemos visto en la
realidad y en la ficción (películas) personal con la mascarilla por
debajo de la nariz?. Muchas. Una mascarilla mal colocada da una
falsa impresión de seguridad y, lo que es pero, no ofrece protección
alguna a quien la lleva.

La mascarilla cubre El procedimiento de colocación y retirada de la mascarilla se


nariz, boca y mentón detalla en la correspondiente ficha. No obstante, para hacer un uso
correcto de las mascarillas siempre es necesario tener en cuenta
que:
− Las emplearemos una sola vez, es decir, son de uso
único para cada paciente. ¡Ojo!, es muy frecuente ver
como se pasa de la unidad de un paciente a otra con la
misma mascarilla. Ni que decir tiene que esto no está
bien. Tampoco se deben guardar en el bolsillo para luego
reutilizarlas con el mismo paciente o con otro. ¡Hay que
desecharlas inmediatamente después de usarlas!.
− No la llevaremos colgada alrededor del cuello ni sujeta
“Las mascarillas deben por debajo de la barbilla. Si la mascarilla es necesaria
cubrir nariz, boca y hay que llevarla bien colocada y si no lo es, no hay que
llevarla. Lo que no se puede hacer es “llevarla a medias”.
mentón, y han de ser
de uso único para cada − Una vez que la tengamos puesta hemos de evitar hablar
actuación o paciente.” mucho, toser o estornudar. Tampoco debemos tocarla
con las manos aunque será necesario hacerlo para
adaptar la tira metálica a la nariz..

1.1.4.- Uso de gafas o pantallas protectoras.

Son de material plástico transparente, suelen ser de talla


única y desechables. Las gafas son similares a las de buceo y las
pantallas son completamente transparentes y de forma parecida a
las que utilizan los soldadores.

Nos protegen contra salpicaduras de sangre u otros fluidos.


Con las gafas protegemos nuestros ojos y con la pantalla toda la
cara. Se utilizan en procedimientos que pueden hacer saltar fluidos
o partículas hacia la cara, procedimientos en los que se manejan
aerosoles o instrumentos de pulido y/o corte mecánico. Ejemplos:
aspiraciones de secreciones respiratorias, consultas dentales al pulir
las piezas, cirugía ósea ... etc.

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

1.1.5.- Uso de bata.


¿...Así que de estos
La bata es una prenda que se modelitos de pasa-
utiliza para proteger la piel y el uniforme rela nada de nada?
Con lo que
del personal durante procedimientos que me iba a mí...
puedan producir salpicaduras de sangre
y fluidos. Hay batas de papel
(desechables) y de tela (reutilizables).
Deben cumplir las siguientes característi-
cas: manga larga, con o sin puños elásti-
cos, amplias, llegar por debajo de las
rodillas, lisas por la parte delantera para
no engancharse con nada y abertura en
la parte posterior que se ata con cintas.

Son normas generales de utilización de las batas las siguientes:

− Conviene utilizarla una sola vez y una para cada paciente.


− No debemos salir con la bata fuera del lugar concreto en el
que haya sido utilizada.
− Al quitarnos la bata la depositaremos en un contenedor
dispuesto para tal fin.
− Cuando se va a atender a personas con mecanismos de
defensa muy disminuidos, grandes quemados y en quiró-
fano las batas serán estériles.

1.1.6.- Manejo de equipos de cuidados (material, instrumental).


Únicamente hay que destacar tres aspectos fundamentales:

− El material desechable nunca debe ser reutilizado.


− Cuando el material se desecha hemos de asegurarnos de
que se hace correctamente (en los contenedores o reci-
pientes destinados a ellos)
− Hemos de manipular con cuidado el material e instrumen-
tal que tiene sangre o fluidos. Por ejemplo, al retirar una
bolsa de diuresis hemos de evitar que rebose poniéndole
el capuchón y anudando el tubo de drenaje, y además
evitaremos que entre en contacto con otro paciente, con
objetos o superficies de esa unidad ... En definitiva, ser
meticulosos y realizar los procedimientos de modo que se
evite la posible diseminación de microorganismos al am-
biente y a las personas.

1.1.7.- Control ambiental.


En realidad se trata de una medida de carácter general que se
refiere a los procedimientos adecuados para la limpieza y desinfec-
ción de superficies (suelo, paredes …), mobiliario (camas, mesillas
…), material, aparatos e instrumental.

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

En un hospital se tiene que garantizar que todos estos


procedimientos se llevan a cabo. La limpieza y desinfección de
superficies y mobiliario corre a cargo del personal de limpieza. La
limpieza, desinfección y esterilización del material, aparatos e instru-
mental se tratará con profundidad en las siguientes unidades de
trabajo.

1.1.8.- Manipulación de lencería.


Al manipular, transportar y depositar la lencería manchada
con sangre y fluidos corporales hemos de ser muy cuidadosos. Esta
lencería no debe contactar con la piel o mucosas de los pacientes ni
del personal. Tampoco puede contactar con nuestro uniforme. Por
supuesto, nunca pondremos la lencería sucia en contacto con la
limpia ni con la que está utilizando otro paciente.
Profundizaremos sobre la manipulación y transporte de la
lencería en la Unidad de Trabajo 4.

1.1.9.- Manipulación de objetos cortantes y punzantes.


Esta precaución básica está íntimamente relacionada con el
riesgo ocupacional. Es relativamente frecuente pincharnos o cortar-
nos fortuitamente con instrumental utilizado en un paciente. ¡Ojo al
siguiente dato!: está comprobado que en la gran mayoría de los
casos “nos pinchamos o cortamos” porque no estamos prestando
suficiente atención a lo que realizamos y así, no tenemos en cuenta
alguna de las siguientes precauciones:
• Hay que ser muy cuidados en 4 momentos: cuando se prepara el
material, cuando se está utilizando, cuando se limpia y cuando
se desecha. Es decir, siempre que lo manipulemos sea cual
fuere la intención.
• Para quitarle el capuchón a la aguja hemos de hacerlo en dos
fases: desenganchar el capuchón del cono y luego retirarlo.

- El capuchón se desengancha del cono con una sola


mano, ¡nunca con las dos!. Tomaremos la jeringa tal
como se muestra en el dibujo y desengancharemos
el capuchón cogiéndolo entre nuestros dedos pulgar
e índice. Si lo hacemos así es imposible que por la
fuerza o velocidad del movimiento el capuchón salga
completamente dejando la aguja al descubierto.

- Para retirar el capuchón utilizaremos la mano libre.

Es importante insistir en que si con una mano cogemos la


aguja montada en la jeringa y con la otra de un solo movimiento
hacemos los dos pasos anteriores, es probable que nos pinche-
mos. ¿Qué puede pasar?. En principio nada grave porque la
aguja está estéril. Eso sí, habrá que cambiarse los guantes y
tener en cuenta que hemos roto una barrera defensiva (piel) y se
favorecerá que los microorganismos puedan traspasarla.

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

• Cuando la aguja está sin capuchón hay que ser muy cautos y no
dirigirla a nuestro cuerpo, no gesticular con ella en las manos …
etc.

• Para recapuchar una aguja sólo se usa una


mano. ¡Nunca sostener la aguja con una mano
y recapuchar con la otra!. Recapucharemos
con la técnica de pala, que no es más que
dejar el capuchón sobre una superficie y dirigir
la aguja hacia él. Una vez que la aguja esté
cubierta por el capuchón, podemos usar la otra
mano para ajustarlo al cono.

• Cuando una aguja está sin encapuchar, ¡nunca separarla de la


jeringa, doblarla, romperla o manipularla!.

• Las agujas y el material punzante desechable Al tirar de la jeringa


se introducen en contenedores rígidos. En estos la aguja cae dentro
casos no es necesario recapuchar la aguja. Por del contendor
una ranura introducimos la aguja montada en la
jeringa, se engancha la aguja en un dispositivo
que tiene el contenedor y al tirar de la jeringa
hacia fuera caerá la aguja en el interior del
mismo.

• Todo el material punzante que se vaya a reutili-


zar hay que transportarlo en contenedores rígi-
dos.

“Al manipular objetos punzantes o cortantes hay que prestar


máxima atención durante todo el procedimiento.”

1.1.10.- Ubicación del paciente.

Cuando por las circunstancias que sea exista un paciente en el


que sea difícil mantener una higiene y control ambiental adecuados,
será necesario colocarlo en habitaciones individuales. Pacientes poco
cuidadosos, con pocos hábitos de higiene en el baño de la unidad,
que cuando tosen o expectoran no tiene en cuenta la proximidad del
compañero de habitación … Vamos, ¡el compañero
“ideal”!. En estos casos es mejor ubicarlo en una
habitación individual como precaución hacia el compa-
ñero de habitación.

Debemos plantearnos estas 10 precau-


ciones básicas cuando vayamos a atender a
cualquier tipo de paciente independiente-
mente de cuál sea su enfermedad.

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

1.2.- Precauciones según transmisión.


No se aplican a cualquier paciente, sino a aquellos en los que
existe la sospecha o confirmación de una infección que puede
transmitirse por el aire o por contacto con la piel u otras superficies.
Con un paciente en estas condiciones habrá que tener en cuenta las
precauciones básicas más las precauciones según transmisión.
¿Quiénes son estos pacientes “especiales”?. Aquellos que
presenten enfermedades infecciosas que se transmitan por con-
tacto (úlceras por presión infectadas, abscesos, heridas y quemadu-
ras infectadas, pediculosis = piojos, hepatitis A en incontinentes
fecales, … etc.) o por vía aérea (tuberculosis, sarampión, varicela,
determinadas neumonías y meningitis, tosferina … etc.).
Si tantos y tan variados son los ca-
“Cuando tomamos precauciones según sos, ¿cómo sabemos nosotros cuándo tene-
mos que tomar estas precauciones?. Nos lo
transmisión, seguimos manteniendo las debe advertir el personal de enfermería.
precauciones básicas”

PRECAUCIONES DE CONTACTO
UBICACIÓN DEL
- Colocar al paciente en habitación individual.
PACIENTE
- Emplear guantes (no es necesario que sean estériles) para entrar en la
GUANTES Y LA- habitación.
VADO DE MANOS - Quitarse los guantes antes de abandonar la habitación y lavarse las
manos inmediatamente con jabón antiséptico
- Ponerse una limpia al entrar a la habitación. En estos casos suele estar en
BATAS un pequeño habitáculo por fuera de la misma.
- Quitársela antes de salir del habitáculo.

TRANSPORTE - Limitar los movimientos y transporte de pacientes fuera de la habitación a


DEL PACIENTE los estrictamente necesarios.

- Siempre que sea posible, el material que entre en contacto con la piel
EQUIPOS DE intacta (fonendoscopio, tensiómetro...) debe ser usado en un único pa-
CUIDADOS ciente. En caso de no poder ser, habrá que desinfectarlos entre pacientes.

PRECAUCIONES PARA TUBERCULOSIS, SARAMPIÓN Y VARICELA


UBICACIÓN - Colocar al paciente en habitación individual
DEL PACIENTE - Mantener la habitación cerrada y al paciente en su interior
- Ante sospecha o confirmación de tuberculosis pulmonar usar mascarilla al
entrar en la habitación
MASCARILLA - Las personas inmunizadas contra sarampión o varicela (por haberlas padecido
o vacunas) no precisan mascarillas para entrar en la habitación del paciente.
- Las personas no inmunizadas no deben entrar en la habitación. Si no quedara
más remedio lo haría con mascarilla.
TRANSPORTE - Limitar los movimientos y transporte del paciente fuera de la habitación a los
DEL PACIENTE estrictamente necesarios. Cuando el paciente tenga que salir de la habitación
debe llevar mascarilla quirúrgica (tela).

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

PRECAUCIONES PARA OTRAS ENFERMEDADES DE TRANSMISIÓN


RESPIRATORIA
UBICACIÓN
- Colocar al paciente en habitación individual
DEL PACIENTE
- Llevar mascarilla para entrar en la habitación si se va a trabajar en un radio de
MASCARILLA 1 metro alrededor del paciente.
TRANSPORTE - Limitar los movimientos y transporte del paciente fuera de la habitación a los
DEL PACIENTE estrictamente necesarios. Cuando el paciente tenga que salir de la habitación
debe llevar mascarilla quirúrgica (tela).

2) Las barreras protectoras físicas.

Aunque hasta este momento no lo hemos especificado, en


realidad ya nos hemos referido a ellas. Entendemos por barreras
físicas protectoras el conjunto de prendas que utiliza el personal
sanitario, pacientes y visitas con el fin de evitar o minimizar la
transmisión de microorganismos. Estas prendas son: guantes, bata,
mascarilla, gafas o pantalla ocular, gorro y calzas.

Ya las hemos descrito todas a excepción del gorro y las calzas


porque éstas se utilizan en zonas de acceso restringido (unidades de
prematuros, quirófanos, unidades de trasplantes, URPA … etc.)

− El gorro.

Puede ser de tela o de papel (desechable). Los de tela se atan


a la parte posterior de la cabeza mediante unas cintas. Los de papel
pueden tener el mismo sistema de sujeción que los de tela, o bien ser
muy parecidos a los gorros para la ducha, con goma elástica.

El gorro debe cubrir todo el pelo. Si el personal lleva el pelo


largo, deberá recogérselo antes de colocarse el gorro.

− Las calzas.

También se denominan cubrecalzado o “patucos”. Pueden ser


de tela o de material sintético (desechables). Los de tela están
prácticamente en desuso. Se utilizan para cubrir el calzado de las
visitas o de los pacientes en determinadas áreas. También los utiliza
el personal de quirófano.

2.1.- ¿En qué orden se colocan y retiran las barreras protecto-


ras?

Cuando tenemos que ponernos sólo una de las barreras


protectoras esta pregunta carece de sentido, pero si son varias, ¿da lo
mismo el orden?. No. La secuencia recomendada como precaución
frente a la transmisión de infecciones nosocomiales es la siguiente:

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

1. Calzas.
2. Gorro.
3. Mascarilla.
4. Gafas o pantalla ocular.
5. Bata.
6. Guantes.

Es necesario tener en cuenta que:

• Este orden es válido incluso cuando sólo se usen algunas de las


barreras.

• Las barreras pueden ser estériles o no, dependerá de cada caso.

• Como todo procedimiento, va precedido de un lavado de manos


e incluso puede ser necesario intercalar varios lavados, según
sea el caso y las circunstancias de trabajo.

• Cuando las barreras se utilizan en quirófano siempre son estéri-


les.

El orden en el que se retiran las barreras no es exactamente


el contrario. Es el siguiente:

1. Guantes.
2. Gafas o pantalla ocular.
3. Mascarilla.
4. Bata.
5. Gorro.
6. Calza.

Siempre hemos de lavarnos las manos después de quitarnos


los guantes y al final, cuando nos quitemos las calzas.

“Las barreras físicas protectoras


se colocan y retiran siguiendo un
orden establecido.” ...y ahora a ver de
qué nos acordamos...

¿Qué? ¿Cómo ha ido este primer tema?


Espero que no te haya “afectado” nin-
guna “infección”( ¡a mí sí, maldita
gripe...!); de cualquier forma esta uni-
dad está tratada con un potente antivi-
rus: el buen humor. entonces yo mejor me voy...

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

AUTOEVALUACIÓN
1. Relaciona mediante flechas:
Bacteria
Aire
Fuente de infección Enfermo de tosferina
Agente causal Alimentos
Huésped Virus VIH.
Mecanismo de transmisión Enfermo de hepatitis
Jeringa con restos de sangre

2. Nombra al menos 4 mecanismos de defensa inespecíficos.

3. Señala verdadero o falso:


a) Los tratamientos médicos agresivos pueden alterar nuestro mecanis-
mos de defensa.
b) Una persona portadora de un virus puede actuar como fuente de
infección y como mecanismo de transmisión.
c) Las infecciones nosocomiales se manifiestan siempre cuando el
enfermo está hopitalizado.
d) Un número elevado de infecciones nosocomiales demuestran la alta
calidad asistencial.
e) El equipo encargado de registrar la infecciones hospitalarias es el
comité de higiene.
f) Las pastillas de jabón no son adecuadas para las instituciones
sanitarias.
g) Si aseando a un paciente los guantes se manchan con secreciones de
una de sus heridas, seguiremos con esos guantes y sólo los cambia-
remos al pasar a otro paciente.
h) Si nos colocamos las barreras físicas protectoras no será necesario
realizar un lavado de manos previo.

4. Con respecto al lavado de manos completa las siguientes frases:


a) Se realiza en un lugar ……………….
b) Se utiliza un cepilllo …………..
c) Debemos quitarnos …………….
d) Siempre lo realizaremos después de haber tocado ……………... ...

5. De las siguientes infecciones nosocomiales señala la más frecuente:


a) Pulmonar.
b) Vaginal.
c) Urinaria.
d) Gástrica.
e) Piel.

6. Para conseguir que disminuyan las infecciones nosocomiales será im-


prescindible actuar sobre:
a) Huésped y portador.
b) Portadores sanos y enfermos.
c) Huésped, fuente de infección y mecanismo de transmisión.
d) Mecanismo de transmisión.
e) Ninguna es cierta.

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

AUTOEVALUACIÓN
7. Si te has puesto las siguientes barreras protectoras,
¿en qué orden te las quitarías?.
Mascarilla Guantes Calzas Gorro
8. Con respecto al momento en que debe realizarse el lavado de manos,
relaciona mediante flechas:
Ir al baño
ANTES DE Ir a la cafetería
Tocar secreciones de un enfermo
DESPUÉS DE Preparar la medicación.
Peinarnos
ANTES Y DESPUÉS DE Preparar alimentación
Manipular una sonda vesical
9. Completa el siguiente cuadro. Las casillas que tiene una X quedarán
vacías.

PRECAUCIONES SEGÚN TRANSMISIÓN


CONTACTO TUBERCULOSIS, OTRAS ENF. DE
SARAMPIÓN Y TRANS. RESPI-
VARICELA RATORIA
UBICACIÓN DEL Colocar al paciente en habitación individual

PACIENTE X X

TRANSPORTE Limitar mov./transp. del paciente a los estrictamente necesarios


DEL PACIENTE X
Llevar una masca-
rilla al entrar en la
habitación si se va
X a trabajar a menos
MASCARILLA
de 1m del paciente

GUANTES Y LA-
VADO DE MA-
NOS

BATAS

EQUIPOS DE
CUIDADOS

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Educación a Distancia U.T.1. Infecciones hospitalarias: Prevención y control

RECUERDA QUE ...


• En toda enfermedad infecciosa tenemos: 1) Agente causal o microorga-
nismo productor de la infección, 2) Fuente de infección o lugar donde
asientan los microorganismos antes de infectar, 3) Huésped o individuo
que se infecta y 4) Mecanismo de transmisión o sistema por medio del cual
el agente causal llega al huésped.

• Nuestro organismo se defiende de la infección por medio de mecanismos


de defensa. Los hay inespecíficos (mucosas, piel, moco, pH ácido del
estómago, flora intestinal, lisozima, movimientos peristálticos … ) y especí-
ficos (linfocitos).

• Las infecciones nosocomiales u hospitalarias son aquellas que se contraen


en el hospital mientras la persona está ingresada, y su causa más
frecuente es el no cumplimiento de las normas de higiene por parte del
personal sanitario.

• Las medidas de prevención y control de las infecciones nosocomiales las


establecen los comités de higiene hospitalaria de cada institución y las
podemos agrupar en:

1. Saneamiento del medio hospitalario: limpieza, desinfección, esteriliza-


ción, desinsectación y desratización.
2. Obtención, manipulación y eliminación de material biológico.
3. Reducción de la contaminación persona – persona.
- Precauciones Básicas: lavado de manos, uso de guantes, uso de
mascarilla o pantalla ocular, uso de la bata, manejos de equipos
de cuidados, control ambiental, manipulación de lencería, manipu-
lación de objetos cortantes y punzantes y ubicación del paciente.
- Precauciones según transmisión: de contacto; para tuberculosis,
sarampión y varicela, y para otras enfermedades de transmisión
respiratoria.

• Las barreras físicas protectoras se colocan en el siguiente orden: calzas,


gorro, mascarilla, gafas, bata y guantes; y se retiran en el siguiente:
guantes, gafas, mascarilla, bata, gorro y calza.

ACTIVIDADES PROPUESTAS
1) Aunque las bacterias, virus y hongos son microrganismos, ¿qué
diferencia a unos de otros?. ¿Cuáles son las características básicas
de cada uno de ellos?.

2) Investiga cuáles son las infecciones nosocomiales más frecuentes


en el hospital que te corresponde en tu área de salud o en el que
trabajas. ¿Qué tipo de microorganismos las producen?.

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