Matrícula: 23-EPSS-2-189 Nombre: Brenda pache Qué es la memoria sensorial
La memoria sensorial es aquella que posibilita que seamos
capaces de percibir y almacenar la información de nuestro entorno físico. Parte de ella la convertimos en recuerdos y la que nuestro cerebro considera que carece de importancia, la elimina. Funciona así gracias a los sentidos, responsables de captar toda esa información visual, gustativa, táctil, auditiva y olfativa y retenerla en nuestra
Esta forma de funcionar de nuestra memoria nos posibilita
relacionarnos con nuestro entorno de manera más placentera, cuando estamos o vemos a los que queremos y percibimos aquello que activa recuerdos bonitos y agradables: el olor de las pinturas del colegio si hemos sido felices en él, el sabor de una comida de un viaje al extranjero en que disfrutamos cada segundo, etc. Pero también posibilita que seamos precavidos y actuemos con mayor cautela cuando recordamos algo que nos alerta de un peligro: el olor a gas, el rostro de una persona violenta, el sabor de un alimento en mal estado, etc. La experiencia almacenada a través de nuestra memoria sensorial es muy valiosa. Cómo funciona la memoria sensorial???
El funcionamiento de la memoria sensorial resulta, en cierta
medida, curioso. Nuestra memoria trabaja como si realizara una fotografía instantánea de determinado momento en milésimas de segundo. Esta instantánea le sirve para captar información a través de los sentidos. Pero la mayoría de esa información la destruye y, acto seguido, la sustituye por otra.
De hecho, la memoria sensorial solo es capaz de retener esa
información precisa un par de segundos. Solo cuando esos datos almacenados pasan a la memoria a corto o a largo plazo, porque nuestro cerebro los considera relevantes, se convierten en recuerdos y se almacenan; en caso contrario, se pierden. Tipos de memoria sensorial
La memoria icónica o visual es la que almacena la
información por medio de la vista, como la imagen de un anuncio, una foto, un color o una puesta de sol. La memoria ecoica o auditiva se sirve de los oídos, así que en esta categoría entra la música, el sonido de un timbre, un teléfono o una voz. La memoria háptica se base en la información que se recibe por medio del tacto, como la suavidad de un tejido, la arena cuando quema, etc.
La memoria olfativa capta la información de los olores y los
relaciona con otras situaciones o personas, como nos sucede con el perfume de alguien. Y la memoria gustativa se pone en funcionamiento por medio de la captación de sabores, aunque cuando hablamos de comida, el olfato y la vista interrelacionan entre sí en muchas ocasiones. ¡Mantén en forma tu mente y tu memoria! Con el tiempo, tu salud lo agradecerá.
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