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1) Benzodiazepinas: (diazepam, lorazepam, lormotezepam, bentazepam,

flurazepam, flunitrazepam, clonazepam) Son medicamentos psicotrópicos que


actúan sobre el SNC, con efectos sedantes, hipnóticos, ansiolíticos,
anticonvulsivos, amnésicos y miorrelajante (relajantes musculares). Se usan las
benzodiacepinas para la ansiedad, insomnio y otros estados afectivos, así como
las epilepsias, abstinencias alcohólicas y espasmos musculares.

Farmacología: Las Benzodiazepinas se pueden administrar por vía oral y algunas


de ellas por vía intramuscular e intravenosa.

Usos terapéuticos:
❖ Anticonvulsivos

❖ Ansiolíticos (clonazepan)

❖ Insomnio

❖ Uso previo a la cirugía (sedante)

❖ Trastornos musculares

❖ Manía aguda

❖ Clasificación de las Benzodiazepinas según su vida media.

Efectos adversos:
❖ Somnolencia

❖ Vértigo

❖ Malestar estomacal

❖ Visión borrosa y otros cambios en la visión

❖ Dolor de cabeza

❖ Confusión

❖ Depresión
❖ Trastornos de la coordinación

❖ Trastornos del ritmo cardiaco

❖ Temblor

❖ Debilidad

❖ Amnesia anterógrada

❖ Efecto resaca (tambaleos)

❖ Sueños inusuales o pesadillas

❖ Dolor de pecho

❖ Ictericia

❖ Reacciones paradójicas

❖ Tolerancia cruzada (alcohol)

Contraindicaciones de la Benzodiazepinas:

❖ Glaucoma de ángulo estrecho

❖ Insuficiencia respiratoria severa

❖ Apnea de sueño

❖ Alcoholismo o toxicomanía

❖ Gestación (especialmente en el primer trimestre)

❖ Lactancia

❖ Insuficiencia renal grave

❖ Insuficiencia hepática
A continuación desarrollaremos el fármaco más utilizado de las Benzodiazepinas,
el diazepam:

✔ DIAZEPAM

Acción Terapéutica: Ansiolítico

Indicaciones:

❖ Sedación consciente: Intervenciones diagnósticas y terapéuticas.

❖ Premedicación e inducción de la anestesia: para aliviar la tensión y la


ansiedad antes de la cirugía.
❖ Excitación: tratamiento de los estados de excitación asociados con trastornos
psiquiátricos.
❖ Efecto anticonvulsivante: tratamiento del estado epiléptico y del tétanos

❖ Ginecología y obstetricia: tratamiento de la eclampsia y para facilitar el trabajo


de parto.
❖ Miorrelajante: como complemento para aliviar el espasmo muscula reflejo
debido a trauma local y para combatir las espasticidad que proviene del
deterioro de las interneuronas espinales y supraespinales.

Contraindicaciones:

- Antecedentes de hipersensibilidad a las Benzodiazepinas, al diazepam y a


cualquiera de sus excipientes.
- Insuficiencia respiratoria severa
- Insuficiencia hepática grave
- Miastenia grave

Precauciones y Advertencias:

Tolerancia: Después de la administración reiterada de diazepam ampollas durante


un periodo prolongado, puede manifestarse una disminución de la respuesta a la
acción de las Benzodiazepinas.
Dependencia: El consumo de benzodiazepinas o sustancia de este tipo puede
originar dependencia física y psíquica. Este riesgo aumenta en relación directa con
la dosis y la duración del tratamiento. En pacientes con antecedentes de
alcoholismo o drogadicción el riesgo es mayor.

Suspensión del tratamiento: Si se desarrolla dependencia. Diazepam debe ser


evitado durante el embarazo.

Reacciones Adversas:

❖ Somnolencia

❖ Bloqueo de las emociones

❖ Reducciones de la agudez mental

❖ Confusión

❖ Fatiga

❖ Cefalea

❖ Vértigo

❖ Debilidad muscular

❖ Ataxia

❖ Diplopía.

✔ Fenobarbital: Antiepiléptico, hipnótico y sedante. Barbitúrico de acción


prolongada y lento comienzo de acción.

Indicaciones: El fenobarbital se usa en el tratamiento de todo tipo de


convulsiones, excepto las de ausencia.
En el tratamiento del status epiléptico se usa, como primera opción,
benzodiacepinas de acción rápida como el diazepam o el lorazepam. Si estos
fallan, se recurre a la fenitoína, con el fenobarbital como alternativa. Si todos los
medicamentos anteriores fallan, se recurre a la anestesia y a cuidados intensivos.
Si se usa, como primera opción, en los casos de convulsiones neonatales.
Efectos secundarios: Los principales efectos secundarios son la sedación y la
hipnosis. También son comunes el nistagmo, la ataxia y el mareo. El paciente de
edad avanzada, también se ha observado excitación y confusión, mientras que los
niños pueden sufrir hiperactividad paradójica.

Contraindicaciones: El fenobarbital está contraindicado en la porfiria aguda


intermitente, hipersensibilidad a los barbitúricos, insuficiencia respiratoria grave,
dependencia a los barbitúricos en etapas anteriores e hiperquinesia infantil.

✔ Hidantoinas: Las hidantoínas se utilizan como antiepilépticos y también


como antiarrítmicos. El fármaco más utilizado de este grupo de la Fenitoína:

Indicaciones:
- Anticonvulsivante
- Epilepsia tónico-clónica. Epilepsia psicomotora. Epilepsia focal.
Alteraciones psiquiátricas con trazo EEG sugestivo de epilepsia.

Efectos secundarios: Los efectos colaterales mas evidentes, que no obstante no


requieren la interrupción del tratamiento, se manifiestan a cargo del sistema
nervioso (excitación, temblores, ataxia o alteraciones de la deambulación,
vértigos).
Además puede aparecer hipertrofia de las encías e hipertricosis (aumento
de vello), que a veces suponen un problema estético muy serio para las mujeres.
Como medida preventiva se aconseja una buena higiene dental (cuidado con la
aplicación, sobre todo en los niños, de aparatos ortodonticos, que actual como
cuerpos irritantes locales adicionales.

Contraindicaciones: Insuficiencia hepática, anemia aplásica, lupus eritomatoso,


linfomas, pacientes hipersensibles a la fenitoína, paciente hipersensibles a los
compuestos de acción efedrínica, pacientes con padecimientos coronarios
severos, embarazo y lactancia.

Atención de enfermería en los diferentes niveles de prevención

Primer nivel:
En el primer nivel de atención debe haber una acción conjunta de testigos,
familiares, amigos, compañeros de escuela o de trabajo, maestro y en lo posible la
comunidad, que debe propender al cuidado del paciente bajo la orientación del
médico y del equipo de salud. Este compromiso debe ser consecuencia de la
educación que el médico imparta en su comunidad.
Los miembros de una comunidad, por ejemplo, deben saber reconocer el
carácter epiléptico o posiblemente epiléptico de los síntomas de un niño o adulto,
deben saber que se trata de manifestaciones externas, es decir, de síntomas de
un trastorno cerebral cuya naturaleza el médico debe investigar.
Que en estas crisis, así como la enfermedad que las produce, deben
percibir tratamiento, y que si éste tiene éxito, la persona que la sufre debe llevar
una vida normal o casi normal: que, por lo tanto, la sociedad debe
responsabilizarse del desarrollo integral del paciente como personalidad.
De este modo, la educación que el médico imparta propenderá a que se
modifiquen favorablemente las actitudes de los demás frente al enfermo y sus
crisis, se racionalicen los cuidados que se deben prestar, se sepa informar acerca
de sus crisis y demás dificultades personales, se reconozca la importancia de la
terapia farmacológica y de la orientación médica para el trabajo del paciente.
El médico general, el pediatra, el obstetra, el cirujano general, el
traumatólogo, el psiquiatra y el administrador de los servicios de salud,
principalmente, y todo médico, en general, conscientes del problema social que
significa la epilepsia, deben orientar sus acciones asistenciales, educativas y
administrativas, teniendo en cuenta los principios y los objetivos del plan de
trabajo clínico arriba delineado.
En cada paso del proceso de atención del paciente con crisis, siempre
habrá algo que hacer de incumbencia del primer médico que atienda al paciente.
La referencia al segundo o tercer nivel de atención, se hará en función de las
exigencias del problema clínico planteado a este nivel.

Prevención de la epilepsia en el Primer Nivel:

A este nivel de atención corresponde la contribución del médico a la


prevención de las enfermedades que causan epilepsia. Aunque sabemos que la
prevención de muchas enfermedades depende de las condiciones económicas de
una sociedad, es posible la implementación de algunas acciones individuales o
institucionales, sobre todo a través de la educación y la intervención del
profesional de la salud en la comunidad, como las siguientes:
1. Evitar las lesiones cerebrales que sufren los niños en el periodo fetal, o al
momento o poco después de su nacimiento.
2. Evitar las infecciones –sobre todo cisticercosis y otras parasitosis- que
dependen de las condiciones de vida de una comunidad, con medidas de higiene
ambiental y corporal.
3. Evitar accidentes, sobre todo de tránsito y del trabajo.
4. Insistir en el diagnóstico temprano de aquellas enfermedades intracraneales
que tienen tratamiento, a fin de que con una intervención oportuna se reduzcan las
secuelas al mínimo.
5. Modificar las actitudes negativas de la sociedad ante el paciente epiléptico
a fin de mejorar las condiciones de su empleo y su calidad de vida.
6. Insistir en el mejoramiento de los servicios médicos de salud, a fin de
dotarlos de los recursos indispensables de diagnóstico a brindar un tratamiento
más oportuno, apropiado y racional.

Segundo nivel:
En el segundo nivel de atención, las acciones sobre el paciente están
destinadas a un tratamiento eficaz y a la disminución de secuelas causadas por la
epilepsia.

Estas acciones comprenden:


a. Exámenes clínicos selectivos como electroencefalograma para
determinar la posible causa de epilepsia.
b. Consulta con especialistas: el paciente epiléptico debe ser referido a un
servicio de segundo o tercer nivel para su atención integral y/o especializada. El
paciente podría ser referido entonces a un hospital general o a un servicio de
neurología para su atención de emergencia o para una consulta ambulatoria,
según convenga.
c. Tratamientos específicos: como el tratamiento del paciente debe durar
varios años, es imprescindible una óptima coordinación entre los tres niveles de
atención médica. Para ello se debe recomendar al paciente que evite ir de
médico en médico, se hospital en hospital; buscando la clase de atención
sistemática como la mencionada se puede garantizar un trabajo medico eficaz y
menos oneroso para el paciente y su familia.
d. Seguimiento del paciente: para observar su evolución, de la enfermedad
y del tratamiento, de las apariciones de crisis, etc. Es de esperar que el médico
en el primer nivel de atención ya haya precisado y definido adecuadamente los
puntos de estrategia aconsejada para la atención esencial del paciente con
crisis, y será el médico que realiza un servicio de segundo nivel el que tenga
que hacer el estudio integral del paciente. En tal caso, los datos que obtenga
servirá para ampliar o precisar aún más el conocimiento y seguimiento del
enfermo y orientar mejor su intervención terapéutica.
e. Limitación del daño: otras de las actuaciones importantes de la
prevención secundaria es la prevención de crisis epilépticas, lo que contribuye a
disminuir las secuelas producidas por la enfermedad. Esto se lograra a través
de:
- Tratamiento clínico con medicación específica para prevenir las
convulsiones
- Psicoterapia de apoyo
- Facilidades socioeconómicas
- Hospitalización
- Cirugía (en el caso de que las convulsiones sean causadas por un
tumor cerebral=
- Educaciones: brindar información acerca de la enfermedad y cómo
actuar ante una crisis convulsiva.
Tercer nivel:
En este nivel las acciones están destinadas a la rehabilitación del paciente
epiléptico y su integración al medio habitual, teniendo al autocuidado, su
independencia y dignidad.

Entre las acciones están:


a. Psicoterapia de apoyo: debemos aclarar al paciente que la epilepsia se
trata de una enfermedad crónica. El primer ataque epiléptico suele ser un duro
golpe para la persona y para sus familiares desde el punto de vista psicológico.
Sin embargo este primer efecto puede reducirse si el enfermo cuenta con el
apoyo necesario. La intervención de enfermería y del especialista en
neurología, con una atención personalizada y diagnóstico adecuado que tengan
como finalidad educar sanitariamente al enfermo sobre su trastorno son de vital
importancia.
b. Cambios en los hábitos de trabajo: recomendar al paciente trabajar en
lugares seguros, lejos de factores potencialmente peligrosos para él en el caso
de darse una crisis convulsiva (por ejemplo una obra en construcción en donde
puede golpear su cabeza), lo ideal sería un trabajo de oficina, en donde esté
siempre acompañado, además el personal de la empresa o lugar de trabajo
debe estar informado sobre la enfermedad del paciente. Tener presente que
para pacientes jóvenes conviene evitar algunas ocupaciones como: chofer,
policía, vigilante, bombero, albañil, cirujano, enfermera.
c. Recomendar ejercicios moderados al aire libre (evitando hacerlas en los
momentos más calurosos y protegiéndose siempre la cabeza) y duchas de
agua tibia como sedantes, dormir siestas.
d. Recomendar al paciente que conviva en ambientes tranquilos y que evite
situaciones de estrés. Siendo esto difícil o imposible, el paciente debe recibir
ayuda médica extra o en caso necesario, sin que ello signifique el uso
obligatorio de tranquilizantes.
e. Readaptación de su vivienda: evitar las alfombras pequeñas y los objetos
tirados en el sueño ya que pueden provocar la caída durante un ataque. Evitar
que el sueño este mojado, sobre todo en la cocina y baño que son lugares
peligrosos.
f. Dormir el tiempo más adecuado a su ritmo personal.
g. Evitar las bebidas alcohólicas, y si es preciso los cigarros.
h. No excederse en la ingestión de líquidos.
i. Aunque no hay regulaciones legales sobre el manejo de vehículos en
algunos países, el paciente debe ser muy consciente de los riesgos de manejar
automóvil, motocicleta, bicicleta, evitándolos por lo menos hasta que las crisis
hayan dejado de presentarse por uno o dos años.
j. Debe llevar una actividad sexual y marital normal, salvo la necesidad de
seguir consejo genético cuando está indicado. El embarazo no necesariamente
complica el problema de las crisis, pero la gestante debe tener una vigilancia
más estricta.
k. El niño epiléptico no debe ser sobre protegido ni ignorado: debe recibir
un trato similar a sus hermanos. Hay que asegurarse que asuma la
responsabilidad de tomar la medicación prescrita y de guardar las precauciones
ya señaladas.
l. En el colegio, tanto los profesores como los instructores, y los mismos
compañeros de clase, deben saber que el paciente tiene crisis, las que deben
ser atendida sin dramatismo.
m. El paciente debe tratarse adecuadamente cuando tiene alguna
enfermedad inclusive banal, como infección respiratoria alta o diarrea aguda,
pues pueden incrementar el número de crisis.
n. El paciente debe estar convencido de la necesidad de tomar sus
medicamentos, pues de ello depende su seguridad el desarrollo de sus
capacidades personales.

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