Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
128
Otras enfermedades del colon
y del recto
ARNOLD WALD
Descargado para Anonymous User (n/a) en National Autonomous University of Mexico de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 18, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
Capítulo 128 Otras enfermedades del colon y del recto 2299
se sustenta en la desaparición de la inflamación tras derivar el de ácidos biliares puede contribuir a la diarrea en pacientes con
tránsito fecal, y su recidiva tras restablecer la solución de conti- CC y que el tratamiento con una resina quelante de ácidos biliares
nuidad intestinal en tres pacientes.9 Se desconoce la identidad de como la colestiramina puede mejorar la diarrea. No es probable
los factores antigénicos precipitantes, aunque se han propuesto que los ácidos biliares provoquen los cambios histológicos obser-
medicamentos, sales biliares, toxinas y agentes infecciosos.10 vados en la CC, y la reducción de la diarrea no se asoció con una
La fuerte asociación de enfermedades reumatológicas con disminución de la colitis. Los estudios hormonales, incluidos
la colitis microscópica ha planteado la posibilidad de que los la determinación de la gastrina sérica, el polipéptido intestinal
AINE puedan desempeñar un papel etiológico. Un mecanismo vasoactivo y las concentraciones de ácido 5-hidroxiindolacético
propuesto por el cual los AINE pueden lesionar el colon sería el en la orina, han sido normales en la colitis microscópica.
aumento de la permeabilidad colónica, permitiendo de ese modo
que los antígenos luminales penetren en la lámina propia y favo- Características clínicas y analíticas
rezcan la inflamación. Debido a que muchos pacientes con CL o Los pacientes con CL y CC generalmente presentan una diarrea
CC no han tomado AINE, y que el uso de AINE es frecuente en acuosa crónica, con un promedio de ocho deposiciones al día
adultos de edad avanzada, pero estos trastornos son infrecuentes, que varían en volumen de 300 a 1.700 g/24 h, y se asocian de for-
se han aducido otras causas, incluida la predisposición genética ma ocasional con incontinencia fecal y dolor cólico abdominal.
basada en el hallazgo de que un 12% de los pacientes con colitis Los síntomas disminuyen con el ayuno.5 Las náuseas, la pérdida
microscópica tenían antecedentes familiares de EII. Actualmente, de peso y la urgencia fecal están presentes de manera variable.
los estudios han observado asociaciones independientes con el La diarrea suele ser de larga evolución, con una duración de
tabaquismo activo, el lansoprazol, el omeprazol, los antagonistas meses a años, con un curso fluctuante de remisiones y exacer-
de los receptores de la angiotensina 2, los β-bloqueantes y la ser- baciones. En una serie de 172 pacientes, la mediana del tiempo
tralina.11 Se ha notificado que aproximadamente del 20 al 30% de transcurrido desde el inicio de los síntomas hasta el diagnóstico
los pacientes con enfermedad celíaca tienen CL, lo que aumenta fue de 11 meses, mientras que, en otra serie más pequeña, dicha
la posibilidad de unos eventuales mecanismos patógenos simila- mediana hasta el diagnóstico fue de 5,4 años. La exploración
res para estos trastornos.12 Un estudio demostró que en un 40% física generalmente no es relevante y no se detecta sangre en las
de los pacientes con CC, las biopsias de intestino delgado eran heces. Los estudios analíticos de rutina también son normales.
compatibles con enfermedad celíaca,13 aunque en otro estudio El análisis de heces frescas mostró leucocitos fecales en un
la frecuencia de enfermedad celíaca solo se observó en el 2% de 55% de 116 pacientes con CC. En dos estudios más pequeños
45 pacientes con CC y en el 9% de 199 pacientes con CL.10 Por otra se detectó calprotectina fecal del 62 al 75% de los pacientes
parte, los pacientes con colitis microscópica no responden a una con colitis microscópica activa y, en este último estudio, desde
dieta sin gluten, y ni la CL ni la CC se asocian con el HLA B8 o un punto de vista diagnóstico este marcador fue superior a la
DR3, como lo hace la enfermedad celíaca. Finalmente, en la colitis lactoferrina fecal.21,22 En un número variable de pacientes se
microscópica predominan las células T CD8+ intraepiteliales, en ha descrito esteatorrea moderada, anemia leve, bajas concen-
comparación con la enfermedad celíaca, en la que predominan traciones séricas de vitamina B12 e hipoalbuminemia, pero no
las CD3 y CD8. son característicos. Entre los marcadores autoinmunitarios que
Debido a que, en pacientes con CL y CC, se han descri- se han identificado en pacientes con CC se encuentran anticuer-
to trastornos autoinmunitarios como artritis y alteraciones pos antinucleares (hasta en un 50%), anticuerpos ancitoplas-
tiroideas,10 se han realizado continuos esfuerzos por asociar ma de neutrófilos perinucleares (pANCA) (en un 14%), factor
la colitis microscópica con varios haplotipos autoinmunitarios reumatoide y valores elevados de C3 y C4 del complemento,18
del HLA y marcadores séricos. Un pequeño estudio demostró pero ninguno de estos marcadores tiene un valor diagnóstico.
que se expresaban antígenos HLA-A1 con mayor frecuencia La exploración colonoscópica suele ser normal. En un
en la CL, pero no en la CC,14 mientras otro estudio demostró estudio se demostraron alteraciones inespecíficas, incluyendo
una expresión anómala similar de antígenos HLA-DR por las edema parcheado, eritema, friabilidad y un patrón vascular
células epiteliales de la mucosa en ambos procesos. Se des- anómalo,23 pero se desconoce la especificidad y la reproducibi-
conoce si estas alteraciones son la causa o el resultado de estas lidad de estos hallazgos.
enfermedades. Otro estudio encontró similitudes en los locus
del HLA-DQ entre pacientes con enfermedad celíaca y los que Diagnóstico diferencial
tenían CL o CC.15 Aunque el gluten no es un factor precipitante Deben excluirse causas infecciosas mediante el análisis de las
de la colitis microscópica, pueden encontrarse implicados meca- heces en busca de patógenos intestinales, huevos y parásitos,
nismos inmunitarios similares, aunque aún no identificados, en y de la toxina de Clostridium difficile. Muchos pacientes son
la enfermedad celíaca y la colitis microscópica. diagnosticados erróneamente como un SII, un trastorno que
También se desconoce la patogenia del engrosamiento de puede ser descartado mediante una cuidadosa anamnesis, el
la banda de colágeno en la CC. Inicialmente se consideró que hallazgo de un volumen fecal aumentado (que es atípico en el
la síntesis de colágeno estaba aumentada, 1 pero las biopsias SII) y biopsias del colon anómalas.
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.
del colon de pacientes con la enfermedad mostraron concen- Otras enfermedades pueden producir colitis, pero deberían
traciones reducidas de la colagenasa intersticial, lo que indica distinguirse de la colitis microscópica por los hallazgos his-
que una reducción en la degradación de la matriz puede con- tológicos. La colitis infecciosa aguda se caracteriza por una
tribuir a la acumulación proteínica.16 inflamación neutrófila y una disminución de los linfocitos
La mecánica de la diarrea en la colitis microscópica se rela- intraepiteliales. La enterocolitis eosinófila que afecta a la mucosa
ciona con la gravedad de la inflamación y no con la extensión se caracteriza por una infiltración de eosinófilos, acortamiento
o engrosamiento de la banda de colágeno. Los estudios de per- de las criptas, inflamación de las zonas más profundas de la
fusión han demostrado una alteración en la absorción activa y lámina propia y ausencia de un aumento de linfocitos intra
pasiva de sodio y cloro, y una reducción del intercambio cloro- epiteliales. Se ha confundido la amiloidosis con la CC, pero su
bicarbonato en el colon;17 dos de seis sujetos presentaron anoma- distribución abarca las membranas basales de las criptas y los
lías asociadas a la absorción de líquido y electrólitos en el intes- vasos sanguíneos, así como el epitelio, y puede obtenerse la
tino delgado. Otros investigadores han relacionado la absorción confirmación mediante tinción histoquímica (v. capítulo 36). Los
del líquido colónico con la gravedad de la inflamación.18,19 Un casos leves de CU y de enfermedad de Crohn no deben llevar a
informe señala el posible papel de los mediadores solubles, ya confusión diagnóstica a la vista de los hallazgos endoscópicos
que, en un paciente con colitis microscópica, caracterizada por un e histológicos característicos. Los tumores productores de hor-
mayor número de mastocitos, la diarrea se resolvió con un anta- monas, el abuso subrepticio de laxantes y el hipertiroidismo
gonista de la histamina H1.20 Se ha señalado que la malabsorción pueden ser excluidos por los hallazgos clínicos y bioquímicos.
Descargado para Anonymous User (n/a) en National Autonomous University of Mexico de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 18, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
2300 Sección X Intestino delgado y grueso
Descargado para Anonymous User (n/a) en National Autonomous University of Mexico de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 18, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
Capítulo 128 Otras enfermedades del colon y del recto 2301
fármacos parecen mejorar la diarrea y la inflamación en algunos apreciable.37 El número de anaerobios estrictos se reduce en el
pacientes, pero no en todos.25 Aunque los glucocorticoides colon excluido, lo que concuerda con la producción reducida
administrados por vía oral o rectal proporcionan una mejoría de AGCC.38 La instilación de enemas que contenían AGCC dio
sintomática y disminuyen la inflamación en más del 80% de lugar a la desaparición de cambios endoscópicos 4-6 semanas
los casos, rápidamente se produce la recaída tras suspender el después en cuatro pacientes, aunque la resolución de las ano-
fármaco.5,24 Además, la toma de glucocorticoides a largo plazo malías histológicas fue más lenta e incompleta.37
tiene efectos indeseables, especialmente en pacientes de edad Aunque el déficit de AGCC ha sido muy aceptado como
avanzada. Se ha informado de la eficacia de otros inmunode- causa de la colitis por derivación, otras observaciones indican
presores, como la azatioprina y la 6-mercaptopurina, pero no que el déficit de AGCC puede no explicar del todo su etiología.
existen grandes estudios que utilicen estos fármacos.25 En primer lugar, los estudios en niños indican que los enemas
La única publicación que evaluó la cirugía en la CC incluyó de AGCC no tienen un éxito general en el tratamiento de la
a nueve pacientes que se sometieron a una ileostomía debido a colitis por derivación. En segundo lugar, en roedores libres de
una enfermedad refractaria incapacitante, después de lo cual gérmenes con una derivación quirúrgica y en pacientes que reci-
todos presentaron una remisión sintomática e histológica.29 En ben dietas de nutrición parenteral o dietas de exclusión a largo
los pacientes en quienes se restableció la solución de continuidad plazo (circunstancias en las que las concentraciones luminales de
intestinal, la enfermedad reapareció, y en tres pacientes someti- AGCC son bajas) se produce una atrofia de la mucosa en lugar
dos a proctocolectomía con anastomosis del íleon al reservorio de su inflamación.39 En tercer lugar, la inflamación no se produce
anal, dio lugar a una diarrea complicada. La ileostomía debe en las derivaciones urinarias al colon, del cual se ha derivado el
considerarse solo como último recurso, pero parece ser eficaz en tránsito fecal, y la orina no contiene AGCC cuantificables.40 Por
pacientes con síntomas incapacitantes y refractarios. último, en un estudio prospectivo aleatorio doble ciego de 13
pacientes con una colitis por derivación, la administración de
enemas de butirato durante 14 días no proporcionó una mejoría
COLITIS POR DERIVACIÓN ni en los parámetros endoscópicos ni los histológicos.41 En un
Epidemiología estudio posterior del mismo grupo, la administración de AGCC
no afectó a la población bacteriana del colon excluido.42 Otros
La colitis por derivación es un proceso inflamatorio que se produ- elementos luminales, además del déficit de AGCC, deben desem-
ce en los segmentos excluidos del colon y del recto después de una peñar un papel, pero se desconoce la naturaleza de estos factores.
derivación quirúrgica del tránsito fecal. La entidad fue descrita
por primera vez en 1981 por Glotzer et al. en 10 pacientes que Diagnóstico
habían sido sometidos a una ileostomía o colostomía por diversas El diagnóstico de colitis por derivación se basa en el cuadro
indicaciones distintas de una EII.30 Desde entonces, se ha encon- clínico y los hallazgos endoscópicos e histológicos. El diagnós-
trado colitis por derivación en pacientes que han sido sometidos tico es relativamente sencillo en un paciente sin EII preexis-
a una derivación quirúrgica por diferentes indicaciones, aunque tente, pero la colitis por radiación e isquémica debe tenerse en
se ha descrito que la colitis por derivación se produce más fre- cuenta en su correcto contexto clínico. Suelen ser necesarias la
cuentemente en pacientes con EII (87%) que en quienes presentan determinación en muestras fecales de la toxina de C. difficile,
enfermedades no inflamatorias (28%).31 La prevalencia de la coli- huevos y parásitos, y la realización de cultivos para excluir las
tis por derivación ha sido subestimada, porque muchos pacientes etiologías infecciosas más frecuentes.
se encuentran asintomáticos; sin embargo, es probable que los En pacientes con un diagnóstico prequirúrgico de enferme-
cambios histológicos se produzcan en los segmentos excluidos dad de Crohn debe distinguirse la colitis por derivación de una
del colon pocos meses después de la derivación quirúrgica. recidiva de la EII. Se afirma que los hallazgos en la colonoscopia
de úlceras lineales y posiblemente de estenosis están a favor de la
Anatomía patológica enfermedad de Crohn, así como la inflamación transmural, ano-
Se han descrito numerosos cambios histológicos en la colitis malías importantes de la arquitectura de las criptas y granulomas
por derivación, que van desde la hiperplasia linfática folicu- epitelioides. La hiperplasia linfática se produce en ambos trastor-
lar y la infiltración mononuclear y neutrófila mixta hasta una nos, pero tiende a ser más importante en la colitis por derivación.43
intensa inflamación con abscesos en las criptas, granulomas de Si la afectación rectal con la enfermedad de Crohn está ausente
mucina y metaplasia de las células de Paneth;32,33 generalmente antes de la derivación, la inflamación del recto es más probable que
en ausencia de grandes úlceras y cambios transmurales, y con esté causada por la derivación que por la enfermedad de Crohn.
la arquitectura de las criptas preservada. Entre los hallazgos
endoscópicos se encuentran eritema, friabilidad, nodularidad, Tratamiento
edema, ulceraciones aftosas, exudados y sangrado franco, como El mejor tratamiento de la colitis por derivación es la restau-
en la EII idiopática. Mucho tiempo después de la derivación ración quirúrgica de la solución de continuidad del colon, que
pueden desarrollarse seudopólipos inflamatorios y estenosis. revierte rápidamente los síntomas y los cambios histológicos. Si
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.
Descargado para Anonymous User (n/a) en National Autonomous University of Mexico de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 18, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
2302 Sección X Intestino delgado y grueso
Descargado para Anonymous User (n/a) en National Autonomous University of Mexico de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 18, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
Capítulo 128 Otras enfermedades del colon y del recto 2303
Las técnicas quirúrgicas más frecuentes son la extirpación local cambios característicos no siempre se encuentran en todo el
de la úlcera, la sutura de la úlcera si presenta un sangrado colon, y existe una predilección por la afectación del colon
importante y, ocasionalmente, resecciones más amplias del colon ascendente. Entre los cambios anatomopatológicos en las
afectado. muestras de colon catártico resecadas se encuentra atrofia
mucosa, inflamación crónica con engrosamiento de la mus-
cularis mucosae, infiltración grasa de la submucosa y fibrosis
ÚLCERA DE COLON DE TIPO leve. No hay estenosis irreversibles ni cambios degenerati-
DIEULAFOY vos en las neuronas intestinales. Se han encontrado cambios
neuronales en pacientes con abuso crónico de laxantes, pero
En 1897, Georges Dieulafoy describió por primera vez una estos pacientes no presentaban un colon catártico tal como se
hemorragia digestiva masiva procedente de una arteria submu- define en este apartado.
cosa relativamente dilatada («calibre persistente») a través de
una minúscula úlcera mucosa en el punto más superficial del Efectos de los laxantes en el colon
vaso, que denominó exulceratio simplex.51 Aunque originalmente La propuesta inicial de que los laxantes irritantes, fundamen-
fue descrita en el estómago y más frecuentemente en el fondo talmente las antraquinonas, dañaban el colon se basó en estu-
gástrico, se han descrito lesiones idénticas en otros órganos dios en animales de experimentación y en el colon resecado
digestivos, incluidos el colon y el recto. En el colon, las lesiones de pacientes con abuso de laxantes.56 Aunque se describieron
de tipo Dieulafoy parecen tener un mayor predominio en hom- atrofias de la mucosa y alteraciones del sistema nervioso enté-
bres y se han descrito a todas las edades.52 rico, no se demostraron entidades concretas relacionadas con
Histológicamente, las lesiones de colon de tipo Dieula- los laxantes, ni tampoco información relativa a enfermedades
foy son idénticas a las encontradas en otras partes del tubo previas que pudieran haber provocado el consumo crónico de
digestivo. La arteria submucosa es tortuosa e hipertrófica, laxantes.
y se curva hacia la mucosa con persistencia de su calibre. Estudios posteriores han demostrado cambios en las células
No hay inflamación, y la ulceración solitaria de la mucosa epiteliales del colon y en la submucosa de pacientes con abuso
no se extiende a mayor profundidad que la capa superior de laxantes a largo plazo, y se han involucrado tanto las antra-
submucosa del colon. quinonas como el bisacodilo; sin embargo, la naturaleza confusa
El cuadro clínico es el de una hemorragia aguda y masiva. y la duración del uso de laxantes, así como la imposibilidad de
La colonoscopia permite identificar la lesión en algunos casos,52 excluir enfermedades previas, hacen que la importancia de estas
aunque con frecuencia es difícil o imposible, especialmente observaciones sea incierta. Los estudios realizados en roedores
cuando el sangrado persiste o no puede lograrse una completa y en mujeres con estreñimiento crónico no apoyan un efecto
limpieza del colon. La angiografía mesentérica selectiva es la deletéreo de las antraquinonas en la estructura de los nervios
prueba diagnóstica de elección, y la resección quirúrgica ha sido colónicos,57 ni hay evidencia científica que indique que los senó-
la principal opción terapéutica. Incluso después de la detección sidos, el bisacodilo u otras sustancias relacionadas causen un
angiográfica del lugar de sangrado, la localización precisa de daño morfológico significativo en el sistema nervioso entérico
la lesión es con frecuencia difícil, y es necesaria a menudo en animales de experimentación o en seres humanos. Tal vez
una resección más amplia. En algunos casos, las lesiones del uno o más laxantes que ya no están en uso (p. ej., podofilina)
colon aparecen como seudopólipos, y el éxito terapéutico con pueden explicar algunos casos de colon catártico, porque no
escleroterapia, electrocauterización o ligaduras hemostáticas se ha comunicado ningún caso de colon catártico en personas
puede evitar la necesidad de cirugía.53 También se ha descrito que comenzaron a usar o abusar de laxantes irritantes después
la ablación endovascular de las lesiones del colon de Dieulafoy de 1960.55
con éxito.53a
Características clínicas
COLON CATÁRTICO Los pacientes que consumen o abusan de laxantes habitual-
mente refieren a menudo molestias abdominales, meteorismo,
El colon catártico es una manifestación infrecuente y grave del plenitud o incapacidad para completar la deposición sin usar
abuso crónico de laxantes irritantes. En 1943, Heilbrun des- laxantes. En los casos más graves, las alteraciones hidroelec-
cribió por primera vez las anomalías radiológicas del colon y el trolíticas, como la hipopotasemia y la hipovolemia, se asocian
íleon terminal asociadas con el abuso prolongado de catárticos con sed excesiva y debilidad. Raramente se ha descrito una
irritantes.54 Se han notificado menos de 50 casos en la literatura enteropatía con pérdida de proteínas. Todos los síntomas son
científica, todos en mujeres con una duración de abuso de reversibles al suspender los laxantes o al cambiar a un trata-
laxantes de 10 a 70 años. Es importante destacar que el término miento con laxantes más adecuados si no hay ningún diagnós-
de colon catártico se basa en características observadas con el tico subyacente, como un SII.
enema opaco y no es sinónimo de un uso prolongado o de un
abuso de laxantes. De hecho, la aplicación errónea del término Tratamiento
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.
de colon catártico ha llevado a preocupaciones innecesarias El tratamiento del colon catártico y los síntomas del consu-
sobre el uso crónico de laxantes, que, cuando se utilizan ade- mo crónico de laxantes se centra en reducir o eliminar los
cuadamente, no se asocian a un daño estructural o funcional laxantes irritantes, en cambiar a fármacos incrementadores
del colon. El colon catártico no es la consecuencia inevitable del del volumen fecal u osmóticos y en reeducar el intestino.
abuso crónico de laxantes, el cual puede asociarse a diversos Aunque a menudo se cree que es irreversible, hay evidencias
síntomas reversibles, así como a alteraciones hidroelectrolíticas. científicas de que el colon catártico puede revertir parcial o
En una revisión de 240 casos de abuso crónico de laxantes completamente tras suspender los laxantes. En casos graves
publicados en más de 70 informes, no se demostró ningún caso o refractarios, la colectomía subtotal o la proctocolectomía
de colon catártico.55 han sido eficaces.
El colon catártico tiene un interés histórico y es improbable
Características radiológicas y anatomopatológicas que se identifique en la práctica clínica actual. No hay eviden-
Heilbrun describió las siguientes características en su informe cias de que los laxantes utilizados actualmente puedan producir
de un caso original: pérdida de las haustras, seudoesteno- esta entidad. El término colon catártico no debe confundirse con
sis, colon e íleon terminal dilatados y apertura de la válvu- «síndrome de abuso crónico de laxantes», ni tampoco debería
la ileocecal; 54 en este y posteriores estudios se observaron implicar que los laxantes actuales sean peligrosos si se usan de
similitudes con el aspecto radiológico de la CU crónica. Los forma crónica, pero adecuadamente.
Descargado para Anonymous User (n/a) en National Autonomous University of Mexico de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 18, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
2304 Sección X Intestino delgado y grueso
FIGURA 128-6. Imagen colonoscópica de seudomelanosis del colon asociada a la toma crónica de laxantes con sena en un paciente con
proctitis ulcerada. Hay poco o ningún pigmento de seudomelanina (lipofuscina) en los 30 cm distales de colon donde hay colitis activa
leve (A), en comparación con la pigmentación más intensa del resto del colon (B). (Por cortesía de Miguel Regueiro, MD, Pittsburgh, Pa.)
Descargado para Anonymous User (n/a) en National Autonomous University of Mexico de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 18, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
Capítulo 128 Otras enfermedades del colon y del recto 2305
Ácido acético
Ácido fluorhídrico
Ácido sulfúrico
Alcohol
Amoníaco
Cloro-m-xilenol
Ergotamina
Formalina
Glutaraldehído
Hierbas medicinales
Jabón
Lejía
Permanganato potásico
Peróxido de hidrógeno
Soda cáustica (hidróxido de sodio)
Sustancias empleadas en radiocontraste (Hypaque, Renografin-76)
Vinagre
Descargado para Anonymous User (n/a) en National Autonomous University of Mexico de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 18, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
2306 Sección X Intestino delgado y grueso
adecuados en el ciclo de aclarado de los instrumentos que se de hidratos de carbono. Levitt y Olsson teorizaron que la alta
desinfectan. El secado y el aclarado de los canales del endos- presión de hidrógeno en la luz del colon conduce a su rápida
copio y del exterior del instrumento con aire a presión deben difusión al interior de una burbuja de gas intramural, y puede
garantizar una técnica libre de productos químicos. dar lugar a que el N2, O2 y CO2 difundan de la circulación al
Debe advertirse a los pacientes y profesionales sanitarios interior de la burbuja gaseosa.83 Según su teoría, la burbuja de
que no utilicen enemas jabonosos. Debe desalentarse la ins- gas crecería si continúa la difusión de hidrógeno a su interior.
tilación rectal de sustancias con fines medicinales o rituales que De hecho, se ha observado un alto contenido de hidrógeno en
no sean enemas comercialmente disponibles. los quistes,84 y los quistes desaparecen en pacientes alimentados
El tratamiento de la colitis química es en gran medida de con una dieta básica que disminuye el aporte de hidratos de car-
soporte, con la administración de líquidos intravenosos y anti- bono a las bacterias del colon. Se argumentan dos importantes
bióticos de amplio espectro. La cirugía puede estar indicada en observaciones en contra de la teoría bacteriana de la NQI: 1) no
casos graves de necrosis intestinal que conducen a la gangrena se cultivan bacterias de los quistes, y 2) la ruptura del quiste y
o la perforación. La mayoría de los pacientes se recuperarán el neumoperitoneo no produce una peritonitis.
completamente 4-6 semanas después de la lesión. Se ha planteado la hipótesis de que los quistes de gas se
forman debido a la sobresaturación por contraperfusión de gas
de H2, mediante la cual la sobreproducción de H2 por las bacte-
NEUMATOSIS COLÓNICA (NEUMATOSIS rias del colon proporciona las condiciones para que la presión
de H2 en la luz colónica se iguale al nivel de presión de N2 en
QUÍSTICA INTESTINAL) sangre.85 Uno de estos mecanismos es la exposición a fármacos,
El término de neumatosis colónica es sinónimo de neumatosis quís- como el hidrato de cloral, que inhiben el crecimiento de bacterias
tica intestinal (NQI) cuando el trastorno se limita al colon. Este metanógenas que consumen H2 en el colon, aumentando así
raro trastorno se caracteriza por múltiples quistes llenos de gas la producción neta de H2.85 Otro posible marco etiológico es la
que se encuentran en la submucosa y la subserosa intestinales. administración de hidratos de carbono no absorbibles como la
La NQI debe distinguirse de la neumatosis lineal, o presencia de lactulosa, la cual incrementa la producción de hidrógeno en el
gas dentro de la pared del intestino, que por lo general se asocia colon en un contexto en el cual existe un déficit de bacterias que
con necrosis intestinal, e implica una pérdida de la viabilidad metabolicen el H2.86 La eficacia del tratamiento antibiótico84,86
intestinal y precisa cirugía. En el sida, la neumatosis lineal pue- y del lavado de colon también apoyan la etiología bacteriana
de estar asociada con infecciones oportunistas del colon y puede de la NQI. En un estudio se demostró que las deposiciones de
resolverse sin cirugía si la infección se trata de forma eficaz.77 los pacientes con neumatosis colónica carecían de dos especies
La mayoría de los casos de NQI se producen en el yeyuno principales de bacterias consumidoras de hidrógeno.82 Dado que
y el íleon, y solo el 6% de los casos afectan al colon, con una el hidrógeno normalmente solo se produce en el colon y no en
tendencia a afectar al lado izquierdo. Se han asociado numero- el intestino delgado, la neumatosis colónica puede diferir de la
sas enfermedades con la neumatosis colónica, entre las que se neumatosis intestinal en relación con sus mecanismos patógenos.
encuentran apendicitis, enfermedad de Crohn, CU, enfermedad
diverticular, enterocolitis necrotizante, colitis seudomembrano- Características clínicas y diagnóstico
sa,78 íleo79 y vólvulo sigmoideo. La NQI también se ha asociado La neumatosis colónica es más frecuente en la sexta década
con enfermedades no digestivas, entre las que se encuentran de la vida, con igual frecuencia en hombres y mujeres.81 En la
enfisema, enfermedades vasculares del colágeno,79 trasplan- mayoría de los casos, la neumatosis es un hallazgo inesperado
tes, sida,77 uso de glucocorticoides, quimioterapia79 y algunos en las radiografías simples de abdomen. Los síntomas más fre-
medicamentos, como inhibidores de la α-glucosidasa intestinal cuentes son diarrea (68%), secreción mucosa (68%), rectorragia
utilizados como fármacos hipoglucemiantes; se resolvieron (60%) y estreñimiento (48%).81 Aproximadamente el 3% de los
completamente una vez que se suspendió el tratamiento.80 pacientes presentan complicaciones debidas a la neumatosis
Aproximadamente en el 20% de los casos no existían enfer- colónica, entre las que se encuentran el neumoperitoneo en
medades médicas asociadas y la NQI se consideró primaria.81 tensión, el vólvulo, la obstrucción intestinal, la intususcepción
y la perforación intestinal. La exploración física puede revelar
Etiología una masa abdominal, y una exploración rectal cuidadosa puede
Se han señalado varias teorías para explicar las numerosas y permitir la palpación de las lesiones quísticas. Una radiogra-
diversas enfermedades asociadas con la NQI, de las cuales las fía simple de abdomen permite identificar conglomerados o
más plausibles son la teoría mecánica y la bacteriana. estrías radiotransparentes a lo largo de la pared intestinal con
Según la teoría mecánica, el gas intraluminal entra en la la presencia de neumoperitoneo si se ha roto un quiste. Con
pared intestinal bajo presión a través de un defecto o posible el enema opaco se observa un colon sigmoide marcadamente
defecto de la mucosa intestinal. Dicho defecto puede ser el redundante, así como el contorno de los quistes o las estrías
resultado de un traumatismo directo o de un aumento de la lineales (fig. 128-10).81 Es necesaria una exploración endoscópica
presión intraluminal. Esta hipótesis podría explicar los casos de con toma de biopsias para realizar el diagnóstico definitivo,
NQI comunicados después de colonoscopias y sigmoidoscopias excluir un carcinoma y diferenciar la neumatosis de la poliposis
sin biopsia, los casos de colitis, úlceras duodenales perfora- adenomatosa familiar y de la impronta dactilar de la colitis
das y divertículos yeyunales, y tras anastomosis intestinales. isquémica. La imagen endoscópica es la de múltiples quistes,
Sin embargo, la plausibilidad de esta teoría se reduce ante la que varían en su tamaño desde unos pocos milímetros hasta
ausencia de una comunicación entre la mucosa y los quistes, y varios centímetros (fig. 128-11) y se deshinchan rápidamente al
la presencia de concentraciones elevadas de gas de hidrógeno pincharlos con una aguja o una pinza de biopsia. También se ha
en los quistes.82 utilizado la EE para establecer el diagnóstico.87
La teoría bacteriana señala que las colecciones de gas quís-
tico son subproductos de las bacterias, concretamente las Anatomía patológica
productoras de hidrógeno. Esta teoría ha sido apoyada por Los quistes de la NQI se asemejan a burbujas de jabón. Por
observaciones clínicas y experimentos analíticos. En animales lo general son de paredes delgadas, uniloculados, y pueden
de experimentación puede inducirse una NQI mediante la ino- presentarse por separado o en racimos. No se comunican
culación de bacterias productoras de gas en la pared intestinal. con la luz intestinal o unos con otros, tienen una consistencia
Además de la invasión local de la pared intestinal, las bacterias esponjosa y explotan como un globo cuando se comprimen.
pueden originar quistes gaseosos al producir grandes cantida- En una sección transversal aparecen brillantes y alveolados,
des de gas de hidrógeno como resultado de la fermentación y varían en tamaño desde unos milímetros a varios centímetros.
Descargado para Anonymous User (n/a) en National Autonomous University of Mexico de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 18, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
Capítulo 128 Otras enfermedades del colon y del recto 2307
Tratamiento
Debido a que la evolución natural de la NQI es su regresión
espontánea hasta en el 50% de los casos, y debido a que los quis-
tes pueden reaparecer después de la cirugía, no se recomienda un
FIGURA 128-11. Muestra de una resección colónica con neumatosis tratamiento concreto en individuos asintomáticos. Los pacientes
colónica. En esta imagen de la superficie de la mucosa se observan
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.
Descargado para Anonymous User (n/a) en National Autonomous University of Mexico de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 18, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
2308 Sección X Intestino delgado y grueso
Descargado para Anonymous User (n/a) en National Autonomous University of Mexico de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 18, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
Capítulo 128 Otras enfermedades del colon y del recto 2309
fue descrita por primera vez en 1766 por Stark, quien informó Características clínicas y diagnóstico
de dos casos asociados con disentería.99 La CQP se manifies-
La CQP afecta a hombres y mujeres por igual. Los síntomas más
ta en tres patrones: 1) localizada, con una lesión polipoidea;
frecuentes son la rectorragia, la secreción mucosa y la diarrea;99
2) difusa, con múltiples lesiones polipoideas, y 3) difusa, con
y menos frecuentes son el tenesmo, y el dolor abdominal y rectal.
una lámina confluente de quistes.
Rara vez, el paciente puede presentar una obstrucción intestinal
Etiología provocada por los quistes. En la endoscopia, la mayoría de las
lesiones se localizan en la pared anterior del recto, de 6 a 7 cm
Se desconoce la etiología de la CQP, pero se han propuesto
del borde anal. Las lesiones aparecen como pólipos revestidos
varias teorías. Una posible etiología congénita está sustentada
de mucosa, que puede ser normal, estar inflamada o ulcerada.
en varios hallazgos. En estudios embriológicos se han encon-
En algunos casos, la endoscopia puede mostrar un prolapso
trado quistes submucosos en múltiples localizaciones diges-
rectal asociado. El aspecto endoscópico de las lesiones puede
tivas. La aparición de CQP en niños y su asociación con otras
ser indistinguible de diversas lesiones, como adenocarcino-
enfermedades congénitas, como el síndrome de Peutz-Jeghers,
mas, pólipos adenomatosos, lipomas submucosos, neurofi-
también apoyan el origen congénito para esta enfermedad. Sin
bromas, seudopólipos inflamatorios, neumatosis colónica y
embargo, la ausencia de quistes submucosos en grandes series
endometriosis.99 El enema opaco puede mostrar defectos de
de autopsias de lactantes y niños reduce la plausibilidad de
relleno radiotransparentes. La ecografía transrectal puede ser
esta etiología.
útil para diferenciar esta enfermedad del cáncer y mostrar la
La CQP se ha asociado a varias enfermedades adquiridas
presencia de quistes hipoecoicos rodeados de una submucosa
que predisponen a la ulceración e inflamación de la mucosa,
intacta, a diferencia del cáncer invasivo.103 Será necesaria una
incluidas la CU, la enfermedad de Crohn100 y la colitis infec-
biopsia para diferenciar esta lesión de una serie de enferme-
ciosa.101 También se han comunicado quistes submucosos en
dades inflamatorias, neoplásicas e infecciosas. En la biopsia,
áreas expuestas a un traumatismo local, como anastomosis
la submucosa se observa engrosada por la presencia de los
intestinales o colostomías. La proctitis quística profunda se
quistes llenos de moco (fig. 128-15). Los quistes normalmente
desarrolló en ratas sometidas a irradiación102 y también aparece
se comunican con la luz a través de pequeñas aperturas en la
en la zona de los estomas de intestino delgado en ratas.137
mucosa. Aunque generalmente están confinados a la submu-
La CQP se ha encontrado asociada al adenocarcinoma de
cosa, se han descrito quistes que afectan a la muscular propia y
colon, y se han descrito varios casos de adenocarcinoma
la serosa. El epitelio glandular puede introducirse en el interior
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.
Descargado para Anonymous User (n/a) en National Autonomous University of Mexico de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 18, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
2310 Sección X Intestino delgado y grueso
escisión local por medio de un abordaje transanal.104 Cuando determinar la gravedad de la enfermedad. Las radiografías
la enfermedad se localiza en el recto, pero es circunferencial, abdominales pueden mostrar asas dilatadas de intestino del-
puede lograrse su extirpación completa mediante la resección gado con poco aire en el cuadrante inferior derecho, y aire libre
del asa mucosa y su extracción coloanal.104 Se han extirpado intraperitoneal si se ha producido una perforación intestinal.
lesiones más difusas mediante resecciones segmentarias. La La TC es más sensible para establecer el diagnóstico y ayudar
resección segmentaria también puede ser necesaria en el caso a excluir otras enfermedades, como apendicitis y diverticulitis.
de grandes lesiones obstructivas y en lesiones que producen La TC puede mostrar una pared intestinal engrosada, neumato-
hipopotasemia, hipoalbuminemia y anemia grave por pérdi- sis intestinal, ascitis y aire libre. Debe evitarse la realización de
da crónica de sangre. Una colostomía de derivación puede enemas opacos debido al posible riesgo de perforación. Debe
dar lugar a la regresión de esta enfermedad y puede ser la realizarse rutinariamente un análisis de heces para la detección
mejor opción en un paciente con importantes enfermedades de la toxina de C. difficile.
asociadas.
Tratamiento
El tratamiento de la enterocolitis neutropénica ha variado. Los
ENTEROCOLITIS NEUTROPÉNICA (TIFLITIS) enfoques han incluido únicamente medidas de apoyo, resec-
La enterocolitis neutropénica (tiflitis) es una enfermedad ciones quirúrgicas amplias de inicio, y tratamiento médico y
potencialmente mortal, generalmente asociada a neutropenia quirúrgico combinado; han sido documentados éxitos y fracasos
relacionada con la quimioterapia, aunque también se ha des- con todos estos enfoques. En dos estudios, todos los pacientes
crito tras el trasplante de órganos, con el sida y en pacientes tratados médicamente se recuperaron, mientras que, en otra
con leucemia tratada con arabinósido de citosina y con tumores serie similar, todos los pacientes tratados médicamente murie-
sólidos tratados con una quimioterapia combinada. 105,106 Esta ron. Sin duda, el manejo eficaz de pacientes con enterocolitis
entidad fue descrita inicialmente en 1970 por Wagner en niños neutropénica debe individualizarse para optimizar el resultado.
que estaban recibiendo quimioterapia por una leucemia.107 La En general, el tratamiento médico abarca los antibióticos
enfermedad afecta habitualmente al íleon y al ciego, y puede de amplio espectro, la aspiración NG y el reposo intestinal. La
producir una perforación intestinal. La frecuencia de la ente- reposición líquida con soluciones isotónicas es fundamental
rocolitis neutropénica en personas en riesgo varía entre el 1 y para mantener la perfusión renal frente a la reducción de la resis-
el 46%.108 tencia vascular sistémica por sepsis y secuestro intraabdominal
de líquido. Se necesita una vigilancia estrecha y exploraciones
Etiología abdominales y radiológicas seriadas para controlar la respuesta
La causa de la enterocolitis neutropénica puede ser multifac- al tratamiento médico. Los antibióticos deben ser activos frente
torial. La lesión inicial es una úlcera de la mucosa intestinal, a microorganismos intestinales gramnegativos, grampositivos
sin una respuesta inflamatoria asociada. La lesión mucosa y anaerobios. Entre los microorganismos causantes se encuen-
puede producirse por infiltración leucémica, acumulación del tran Pseudomonas, S. aureus, E. coli y Streptococcus del grupo A.109
contenido intestinal o isquemia mucosa por vasoconstricción En los pacientes que no responden a fármacos antibacterianos
esplácnica debido a una sepsis.108 Algunos fármacos también debe considerarse la anfotericina, porque es frecuente la coexis-
pueden contribuir al daño de la mucosa. El arabinósido de tencia de una fungemia.109 Pueden ser necesarias transfusiones
citosina puede desencadenar necrosis y retrasar la regenera- sanguíneas, porque la diarrea suele ser sanguinolenta. El fac-
ción del epitelio glandular intestinal. Los alcaloides de la vinca tor estimulante de colonias de granulocitos y macrófagos es
utilizados para tratar la leucemia también pueden contribuir a un complemento útil del tratamiento médico para corregir la
la distensión del ciego dañando el plexo mientérico intestinal. neutropenia.110 Se ha recomendado la cirugía precozmente en
La lesión mucosa en el seno de unas defensas del huésped personas con una evolución rápidamente negativa a pesar del
alteradas dará lugar posteriormente a una colitis infecciosa. tratamiento médico completo. Dos series han demostrado una
La infección será con frecuencia polimicrobiana; y entre las disminución de la tasa de mortalidad en pacientes con enferme-
bacterias causantes se encuentran especies de E. coli, Staphy- dad grave que son tratados quirúrgicamente en comparación
lococcus aureus, Clostridium septicum y Klebsiella; 109 también con los tratados médicamente.111 En los pacientes con com-
se han aislado microorganismos fúngicos como Aspergillus plicaciones como gangrena, perforación intestinal y shock a
y Candida. 109 Además de la infección transmural intestinal, pesar del soporte vasopresor, es imperativa la cirugía.
el ciego puede gangrenarse y perforarse como resultado de La controversia se centra en la elección de la intervención
una mayor distensión e isquemia. El proceso puede afectar quirúrgica. Debe resecarse el intestino gangrenado o perforado.
únicamente al íleon, o al íleon y al ciego.109 Cuando el intestino está edematoso sin afectación vascular y
sin signos de perforación, el tratamiento eficaz ha incluido no
Características clínicas y diagnóstico resecarlo, la derivación intestinal sin resección y la resección
La presentación más frecuente de la enterocolitis neutropénica del intestino afectado.112 Si se realiza una resección, la recons-
es la aparición de fiebre, diarrea, náuseas, vómitos y dolor trucción de una ileostomía y de una fístula mucosa puede ser
abdominal en un paciente que está recibiendo fármacos anti- la opción más segura debido a que suelen producirse dehis-
neoplásicos. El dolor abdominal normalmente se localiza en el cencias de las anastomosis intestinales en presencia de neu-
cuadrante abdominal inferior derecho, pero puede estar ausen- tropenia. Debido a que las recidivas de las enterocolitis neutro-
te o estar enmascarado por fármacos como la prednisona; el pénicas son frecuentes cuando se reinicia la quimioterapia, se
dolor localizado puede progresar rápidamente hasta desenca- recomienda la hemicolectomía derecha antes de reanudar el
denar signos de peritonitis como resultado de una perforación tratamiento.112
intestinal. El shock puede producirse como consecuencia de
la bacteriemia o la perforación intestinal. En ocasiones puede
verse afectado el colon sigmoide, lo que complica aún más el ENDOMETRIOSIS
diagnóstico. La neutropenia es generalizada, y los hemocultivos La endometriosis, definida como la presencia de tejido endome-
son positivos hasta en el 50% de los casos.109 El diagnóstico trial fuera de la cavidad y músculos uterinos, fue descrita por
diferencial incluye apendicitis, colitis seudomembranosa, colitis primera vez por von Rokitansky en 1860. Estos tejidos ectópicos
isquémica, vólvulo, diverticulitis y la diarrea inducida por fárma- se encuentran frecuentemente próximos al útero. La endome-
cos. triosis se produce hasta en el 15% de las mujeres que menstrúan
El diagnóstico debe incluir una evaluación radiológica y hasta en el 30% de las mujeres infértiles. La descripción inicial
para excluir otras enfermedades, confirmar el diagnóstico y de la endometriosis no pigmentada en 1986 dio lugar a un
Descargado para Anonymous User (n/a) en National Autonomous University of Mexico de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 18, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
Capítulo 128 Otras enfermedades del colon y del recto 2311
aumento en su detección y una prevalencia mucho mayor de intestinales, especialmente si están en edad fértil y tienen pro-
este trastorno que la apreciada previamente.113 En comparación blemas ginecológicos. El diagnóstico es especialmente difícil,
con la afectación endometrial de los órganos reproductores porque el SII es muy frecuente en las mujeres.
femeninos, la afectación digestiva es menos frecuente, nor- Un componente importante de la evaluación es una explo-
malmente asintomática y clínicamente menos importante. Los ración pélvica cuidadosa que incluya la palpación combinada
órganos digestivos más frecuentemente afectados son el colon rectovaginal. El hallazgo de nódulos dolorosos o irregularida-
rectosigmoide (96%), el apéndice (10%) y el íleon (5%), con des en el fondo de saco es muy indicativo de endometriosis.
otros órganos afectados con menor frecuencia. La endome- Debido a que los hallazgos pueden variar considerablemente
triosis intestinal puede simular diversos trastornos digestivos durante el ciclo menstrual, la exploración pélvica debe realizar-
inflamatorios, infecciosos y neoplásicos.114 se inmediatamente antes y después de la menstruación si no se
encontraron anomalías en un inicio.
Etiología y patogenia Es raro ver implantes endometriales en la mucosa colónica
Se han propuesto varias hipótesis para explicar la localización excepto cuando hay hematoquecia. Por lo tanto, la colonoscopia
ectópica del tejido endometrial. La explicación más habitual- suele ser normal, exceptuando áreas de compresión extrín-
mente aceptada es la de la migración retrógrada de tejido seca o estenosis con mucosa intacta.116 Es más útil el enema
endometrial, que luego se implanta y crece sobre los órga- opaco con contraste de aire que muestra masas polipoideas
nos pélvicos y el peritoneo. Desde estas ubicaciones surgen submucosas o áreas de estrechamiento no circunferencial de
implantes más distantes a través de la diseminación hemató- la luz (fig. 128-16). El rendimiento y la exactitud diagnósticos
gena o linfática; puede producirse una mayor diseminación pueden mejorarse al realizar estas pruebas justo antes del inicio
durante las intervenciones quirúrgicas. Una hipótesis menos de la menstruación. Se ha descrito que la TC (fig. 128-17), la
aceptada, con menos datos científicos que la apoyen, es la ecografía y la RM ayudan al diagnóstico o evaluar la extensión
de la metaplasia endometrial, en la que células mesoteliales de la afectación endometrial. La ecografía de alta resolución
peritoneales multipotenciales son activadas por factores des- transvaginal y transrectal también son útiles para detectar
conocidos para sufrir su transformación metaplásica a tejido pequeños implantes endometriales, especialmente en la pelvis
endometrial. retroperitoneal.117
Una vez implantado, el tejido endometrial parece aún El diagnóstico definitivo de la endometriosis se realiza a
estar regulado por influencias hormonales, de forma que los menudo mediante laparoscopia o laparotomía con biopsia, y es
estrógenos favorecen y la progesterona inhibe su crecimiento. especialmente útil en pacientes con implantes intestinales sin
Estos ciclos repetidos de crecimiento y desprendimiento tisular afectación pélvica. La observación de que el tejido endometrial
pueden producir la irritación serosa y la invasión progresiva del puede no estar pigmentado ha aumentado considerablemente
músculo intestinal, generando fibrosis e hipertrofia muscular. el rendimiento de estas intervenciones.113
Por lo tanto, el dolor puede surgir por compresión nerviosa o El diagnóstico diferencial de la endometriosis intestinal
inflamación serosa, mientras que la obstrucción puede ser el engloba trastornos inflamatorios como la enfermedad de Crohn
resultado de una estenosis de la luz o una torsión intestinal. y la CU con estenosis, la diverticulitis, enfermedades infecciosas
como la tuberculosis ileocólica y la esquistosomiasis, trastornos
Características clínicas neoplásicos benignos y malignos, y la colitis isquémica.114 Es
La endometriosis se encuentra casi exclusivamente, pero no importante destacar que no existen hallazgos radiológicos o de
siempre, en mujeres en edad fértil, con un inicio clínico habi- imagen patognomónicos de endometriosis, que las anomalías
tualmente entre los 20 y los 45 años de edad. Las mujeres que,
ya en la menopausia, presentan síntomas o que se someten a
cirugía por una endometriosis presumiblemente tienen una
fibrosis crónica o exacerbaciones inducidas por estrógenos
exógenos.
Aunque la mayoría de las mujeres con implantes endome-
triales en estructuras intestinales no tienen síntomas, las mujeres
con implantes serosos pueden manifestar dolor localizado,
lumbalgia o dolor abdominal. La penetración del tejido endo-
metrial en la pared intestinal puede producir estreñimiento,
diarrea y obstrucción parcial, que dará lugar a un dolor abdo-
minal intermitente. Contrariamente a la opinión general, los
síntomas no siempre son cíclicos y pueden no fluctuar con las
concentraciones hormonales; y los síntomas gastrointestinales
no están necesariamente asociados con los síntomas ginecoló-
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.
Descargado para Anonymous User (n/a) en National Autonomous University of Mexico de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 18, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
2312 Sección X Intestino delgado y grueso
Descargado para Anonymous User (n/a) en National Autonomous University of Mexico de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 18, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
Capítulo 128 Otras enfermedades del colon y del recto 2313
la muscularis mucosae. La muscularis mucosae se encuentra con logía del SURS, especialmente si se está considerando la cirugía.
frecuencia hipertrofiada, y sus fibras se sitúan en continuidad La defecografía se utiliza para demostrar el prolapso mucoso,
con las de la lámina propia. No hay un aumento significativo la intususcepción, el prolapso rectal, la falta de relajación del
del número de células inflamatorias. La variante polipoidea es músculo puborrectal y la evacuación incompleta o retardada.128
similar a la variante ulcerosa excepto por los cambios hiperplá- La ecografía endorrectal puede demostrar la presencia de la
sicos regenerativos, como la dilatación quística y la producción pared rectal engrosada y sus componentes, especialmente
de moco. Los elementos epiteliales y la lámina propia pueden de la muscular propia, y puede ser útil para distinguir el SURS de
encontrarse introducidos en la submucosa (fig. 128-20). Este otras enfermedades, como un cáncer invasivo.137
tejido desplazado puede entonces verse sometido a una dilata-
ción quística debido a la retención de moco. Las glándulas que Tratamiento
se encuentran en un lugar erróneo y son displásicas pueden ser Los pacientes asintomáticos pueden no necesitar ningún trata-
diagnosticadas erróneamente como un adenocarcinoma, espe- miento y, en algunos pacientes, el SURS se resuelve espontánea-
cialmente cuando no se conocen las características histológicas mente. El tratamiento incluye mejorar los hábitos intestinales;
y macroscópicas del SURS; a veces, el SURS está asociado con consumir una dieta rica en fibra; utilizar laxantes incrementa-
un carcinoma, lo que complica aún más el diagnóstico.136 dores de la masa fecal, el empleo de fármacos tópicos y la bio-
Aunque en la mayoría de los pacientes no es necesaria rretroalimentación, y la intervención quirúrgica. El uso de fibra
la defecografía, esta puede ser útil para esclarecer la fisiopato- como un producto incrementador del volumen fecal, junto con
Descargado para Anonymous User (n/a) en National Autonomous University of Mexico de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 18, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
2314 Sección X Intestino delgado y grueso
Descargado para Anonymous User (n/a) en National Autonomous University of Mexico de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 18, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
Capítulo 128 Otras enfermedades del colon y del recto 2315
BIBLIOGRAFÍA ESENCIAL 57. Wald A. Is chronic use of stimulant laxatives harmful to the
colon? J Clin Gastroenterol 2003;36:386-9.
La bibliografía completa de este capítulo puede consultarse en 76. Cappell MS. Colonic toxicity of administered drugs and
www.expertconsult.com. chemicals. Am J Gastroenterol 2004;99:1175-90.
79. Knetchle S, Davidoff A, Rice R. Pneumatosis intestinalis:
6. Corti-Hoekstra LR, van den Brande JMH, Peppelenbosch Clinical management and surgical outcome. Ann Surg
MP. Report from the Falk workshop on microscopic colitis: 1990;212:160-5.
Creating awareness for an underappreciated disease. 87. Shimada M, Ina K, Takahashi H, et al. Pneumatosis
Gastroenterology 2012;143:e1-3. cystoides intestinalis treated with hyperbaric oxygen
22. Wildt S, Nordgaard-Lassen I, Bendtsen F, Rumessen JJ. therapy: Usefulness of an endoscopic ultrasonic catheter
Metabolic and inflammatory fecal markers in collagenous probe for diagnosis. Intern Med 2001;40:896-900.
colitis. Eur J Gastroenterol Hepatol 2007;19:567-74. 104. Beck DE. Surgical treatment for colitis cystica profunda and
25. Chande N, MacDonald JK, McDonald JW. Interventions solitary rectal syndrome. Curr Treat Options Gastroenterol
for treating microscopic colitis: A Cochrane Inflammatory 2002;5:231-7.
Bowel Disease and Functional Bowel Disorders Review 112. Davila ML. Neutropenic enterocolitis. Curr Opin
Group systematic review of randomized trials. Am J Gastroenterol 2006;22:44-7.
Gastroenterol 2009;104:235-41. 118. Olive DL, Pritts EA. Treatment of endometriosis. N Engl J
26. Stewart MJ, Seow CH, Storr MA. Prednisolone and Med 2001;345:266-75.
budesonide for short- and long-term treatment of 119. Streuli I, de Zeigler D, Santulli P, et al. An update on the
microscopic colitis: Systematic review and meta-analysis. pharmacological management of endometriosis. Expert
Clin Gastroenterol Hepatol 2011;9:881-90. Opin Pharmacother 2013;14:291-305.
35. Mortensen PB, Clausen MR. Short-chain fatty acids in the 125. Madigan MR, Morson BC. Solitary ulcer of the rectum. Gut
human colon: Relation to gastrointestinal health and disease. 1969;10:871-81.
Scand J Gastroenterol 1996;216:132-48. 144. Maurer CA, Renzulli P, Mazzucchelli L, et al. Use of accurate
44. Eggenberger JC, Farid A. Diversion colitis. Curr Treat diagnostic criteria may increase incidence of stercoral
Options Gastroenterol 2001;4:255-9. perforation of the colon. Dis Colon Rectum 2000;43:991-8.
48. Masannat YA, Harron M, Harinath G. Nonsteroidal
anti-inflammatory drugs-associated colopathy. ANZ J Surg
2010;80:96-9.
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.
Descargado para Anonymous User (n/a) en National Autonomous University of Mexico de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 18, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
Capítulo 128 Otras enfermedades del colon y del recto 2315.e1
BIBLIOGRAFÍA 23. Richieri JP, Bonneau HP, Cano N, et al. Collagenous colitis:
An unusual endoscopic appearance. Gastrointest Endosc
1. Lindstrom CG. Collagenous colitis” with watery diarrhea: 1993;39:192-4.
A new entity. Pathol Eur 1976;11:87-9. 24. Schiller LR. Diagnosis and management of microscopic
2. Read NW, Krejs GJ, Read MG, et al. Chronic diarrhea of colitis syndrome. J Clin Gastroenterol 2004;38(Suppl 1):
unknown origin. Gastroenterology 1980;68:264-71. S27-30.
3. Lazenby AJ, Yardley JH, Giardiello FM, et al. Lymphocytic 25. Chande N, MacDonald JK, McDonald JW. Interventions
(“microscopic”) colitis: A comparative histopathologic study for treating microscopic colitis: A Cochrane Inflammatory
with particular reference to collagenous colitis. Hum Pathol Bowel Disease and Functional Bowel Disorders Review
1989;20:18-28. Group systematic review of randomized trials. Am J
4. Fernandez-Banares F, Salas A, Forne M, et al. Incidence Gastroenterol 2009;104:235-41.
of collagenous and lymphocytic colitis: A 5-year 26. Stewart MJ, Seow CH, Storr MA. Prednisolone and
population-based study. Am J Gastroenterol 1999;94:418-23. budesonide for short- and long-term treatment of
5. Olesen M, Eriksson S, Bohr J, et al. Microscopic colitis: microscopic colitis: Systematic review and meta-analysis.
A common diarrheal disease: An epidemiologic study in Clin Gastroenterol Hepatol 2011;9:881-90.
Orebro, Sweden, 1993-1998. Gut 2004;53:346-50. 27. Gentile NM, Abdalla AA, Khanna S, et al. Outcomes of
6. Corti-Hoekstra LR, van den Brande JMH, Peppelenbosch patients with microscopic colitis treated with corticosteroids:
MP. Report from the Falk workshop on microscopic colitis: A population based study. Am J Gastroenterol 2013;108:256-9.
Creating awareness for an underappreciated disease. 28. Fine KD, Lee EL. Efficacy of open-label bismuth
Gastroenterology 2012;143:e1-3. subsalicylate for the treatment of microscopic colitis.
7. Tanaka M, Mazzoleni G, Riddell RH. Distribution of Gastroenterology 1998;114:29-36.
collagenous colitis: Utility of flexible sigmoidoscopy. Gut 29. Schiller LR. Diagnosis and management of microscopic colitis
1992;33:65-70. syndrome. J Clin Gastroenterol 2004;38(Suppl 1):527-30.
8. Salas A, Fernandez-Banares F, Casalots J, et al. Subepithelial 30. Glotzer DJ, Glick ME, Goldman H. Proctitis and colitis
myofibroblasts and tenascin expression in microscopic following diversion of the fecal stream. Gastroenterology
colitis. Histopathology 2003;43:48-54. 1981;80:438-41.
9. Jarnerot G, Tysk C, Bohr J, Ericksson S. Collagenous colitis 31. Edwards CM, George B, Warren B. Diversion colitis: New
and fecal stream diversion. Gastroenterology 1995;109: light through old windows. Histopathology 1999;34:1-5.
449-55. 32. Yeong ML, Bethwaite PB, Prasad J, Isbister WH. Lymphoid
10. Anderson T, Anderson JR, Tvede M, Franzmann MB. follicular hyperplasia: A distinctive feature of diversion
Collagenous colitis: Are bacterial cytotoxins responsible? colitis. Histopathology 1991;19:55-61.
Am J Gastroenterol 1993;88:375-7. 33. Haque S, Eisen RN, West AB. The morphologic features
11. Fernandez-Banares F, deSousa MR, Salas A, et al. of diversion colitis: Studies of a pediatric population with
Epidemiological risk factors in microscopic colitis: no other disease of the intestinal mucosa. Hum Pathol
A prospective case-control study. Inflamm Bowel Dis 1993;24:211-9.
2013;19:411-7. 34. Cook SI, Sellin JH. Review article: Short-chain fatty acids in
12. Wolber R, Owen D, Freeman H. Colonic lymphocytosis in health and disease. Aliment Pharmacol Ther 1998;12:
patients with celiac sprue. Hum Pathol 1990;21:1092-6. 499-507.
13. Armes J, Gee DC, MaCrae FA, et al. Collagenous colitis: 35. Mortensen PB, Clausen MR. Short-chain fatty acids in the
Jejunal and colorectal pathology. J Clin Pathol 1992;45:784-7. human colon: Relation to gastrointestinal health and disease.
14. Giardiello FM, Lazenby AJ, Yardley JH, et al. Increased Scand J Gastroenterol 1996;216:132-48.
HLA A1 and diminished HLA A3 in lymphocytic colitis 36. Roediger WE. Utilization of nutrients by isolated epithelial
compared to controls and patients with collagenous colitis. cells of the rat colon. Gastroenterology 1982;83:424-9.
Dig Dis Sci 1992;37:496-9. 37. Harig JM, Soergel KH, Komorowski RA, Wood CM.
15. Fine KD, Do K, Schulte K, et al. High prevalence of celiac Treatment of diversion colitis with short-chain fatty acid
sprue-like HLA-DQ genes and enteropathy in patients irrigation. N Engl J Med 1989;320:23-8.
with the microscopic colitis syndrome. Am J Gastroenterol 38. Neut C, Colombel JF, Guillemot F, et al. Impaired bacterial
2000;95:1974-82. flora in human excluded colon. Gut 1989;30:1094-8.
16. Aigner T, Neureiter D, Muller S, et al. Extracellular matrix 39. Morin CL, Ling V, Bourassa D. Small intestinal and colonic
composition and gene expression in collagenous colitis. changes induced by a chemically defined diet. Dig Dis Sci
Gastroenterology 1997;113:136-43. 1980;25:123-8.
17. Bo-Linn GW, Vendrell DD, Lee E, Fordtran JS. An evaluation 40. Tomasino RM, Morello V, Latteri MA, et al. Histological
of the significance of microscopic colitis in patients with and histochemical changes in the colon mucosa after
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.
chronic diarrhea. J Clin Invest 1985;75:1559-69. ureterosigmoidostomy or colon conduit. Eur Urol
18. Burgel N, Bojarski C, Mankertz J, et al. Mechanisms 1988;15:248-51.
of diarrhea in collagenous colitis. Gastroenterology 41. Guillemot F, Colombel JF, Neut C, et al. Treatment of
2002;123:433-43. diversion colitis by short-chain fatty acids: Prospective and
19. Basmeyer C, Erko I, Fromm A, et al. Ion transport and double-blind study. Dis Colon Rectum 1991;34:861-4.
barrier function are disturbed in microscopic colitis. Ann N 42. Neut C, Guillemot F, Gowerrousseau C, et al. Treatment of
Y Acad Sci 2012;1258:143-8. diversion colitis by short-chain fatty acids: Prospective and
20. Baum CA, Bhatia P, Miner PB. Increased colonic mucosal double blind study. Gastroenterol Clin Biol 1995;19:871.
mast cells associated with severe watery diarrhea and 43. Geraghty JM, Talbot IC. Diversion colitis. Histological
microscopic colitis. Dig Dis Sci 1998;34:1462-5. features in the colon and rectum after defunctioning
21. Wagner M, Peterson CG, Stolt I, et al. Fecal eosinophil colostomy. Gut 1991;32:1020-3.
cationic protein as a marker of active disease and treatment 44. Eggenberger JC, Farid A. Diversion colitis. Curr Treat
outcome in collagenous colitis: A pilot study. Scand J Options Gastroenterol 2001;4:255-9.
Gastroenterol 2011;46:849-54. 45. Sartor RB, Murphy ME, Rydzak E. Miscellaneous
22. Wildt S, Nordgaard-Lassen I, Bendtsen F, Rumessen JJ. inflammatory and structural disorders of the colon. In:
Metabolic and inflammatory fecal markers in collagenous Yamada T, editor. Textbook of gastroenterology. 3rd ed
colitis. Eur J Gastroenterol Hepatol 2007;19:567-74. Philadelphia: Lippincott Williams & Wilkins; 1999. p. 1857.
Descargado para Anonymous User (n/a) en National Autonomous University of Mexico de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 18, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
2315.e2 Sección X Intestino delgado y grueso
46. deOliviera-Neto JP, de Aguilar-Nascomento JE. Intraluminal 70. Pike BF, Phillippi PJ, Lawson EH Jr. Soap colitis. N Engl J
irrigation with fibers improves mucosal inflammation and Med 1971;285:217-8.
atrophy in diversion colitis. Nutrition 2004;20:197-9. 71. Bollen P, Goossens A, Hauser B, Vandenplas Y. Colonic
47. Khawaja FI, Vakil N. Colonoscopy as an aid in the diagnosis ulcerations caused by an enema containing hydrogen
of nonspecific ulcers of the colon. Gastrointest Endosc peroxide. J Pediatr Gastroenterol Nutr 1998;26:232-3.
1987;33:43-5. 72. Stein BL, Lamoreux E, Miller M, et al.
48. Masannat YA, Harron M, Harinath G. Nonsteroidal Glutaraldehyde-induced colitis. Can J Surg 2001;44:113-6.
anti-inflammatory drugs-associated colopathy. ANZ J Surg 73. Munoz-Navas M, Garcia-Villareal L. Caustic colitis due to
2010;80:96-9. formalin enema. Gastrointest Endosc 1992;38:521-2.
49. Aftab AR, Donnellan F, Zeb F, et al. NSAID-colopathy: 74. Michopoulos S, Bouzakis H, Sotiropoulou M, et al. Colitis
A case series. J Gastrointest Liver Dis 2010;19:89-91. due to accidental alcohol enema: Clinicopathological
50. Lee BC, Allen PB, Caddy GR, Mainie I. Nicorandil presentation and outcome. Dig Dis Sci 2000;45:1188-91.
associated colonic ulceration: Case series of an increasingly 75. Chan A, Depew W, Vanner S. Use of oral sodium phosphate
recognized complication. Dig Dis Sci 2011;56:2404-8. colonic lavage solution by Canadian colonoscopists: Pitfalls
51. Dieulafoy G. Leçons clinique de l’Hotel-Dieu de Paris. Paris: and complications. Can J Gastroenterol 1997;11:334-8.
Masson; 1897. 2. P. 1-3. 76. Cappell MS. Colonic toxicity of administered drugs and
52. Jain R, Chetty R. Dieulafoy disease in the colon. Arch Pathol chemicals. Am J Gastroenterol 2004;99:1175-90.
Lab Med 2009;133:1865-7. 77. Gelman SF, Brandt LJ. Pneumatosis intestinalis and AIDS:
53. Testerman GM, Osborne JB, Easparam SA. Endoscopic A case report and review of the literature. Am J Gastroenterol
clipping of bleeding ascending colon Dieulafoy lesion. Am 1998;93:646-50.
Surg 2012;78:68-9. 78. Tak P, Van Duinen C, Bun P, et al. Pneumatosis cystoides
53a. Ashour MA, Millward SF, Hadziomerovic A. intestinalis with intestinal pseudo-obstruction: Resolution
Embolotherapy of a Dieulafoy lesion in the cecum: case after metronidazole. Dig Dis Sci 1992;37:949-54.
report and review of the literature. J Vasc Interv Radiol 79. Knetchle S, Davidoff A, Rice R. Pneumatosis intestinalis:
2000;11:1059-62. Clinical management and surgical outcome. Ann Surg
54. Heilbrun N. Roentgen evidence suggesting enterocolitis 1990;212:160-5.
associated with prolonged cathartic abuse. Radiology 80. [No authors listed]. Intestinal alpha glucosidase inhibitors:
1943;41:486-91. Abdominal gas cysts. Prescrire Int 2012; 21:212-3.
55. Muller-Lissner S. What has happened to the cathartic colon? 81. Gagliardi G, Thompson I, Hershman M, et al. Pneumatosis
Gut 1968;9:139-43. coli: A proposed pathogenesis based on study of 25 cases and
56. Smith B. Effect of irritant purgatives on the myenteric plexus review of the literature. Int J Colorectal Dis 1996;11:111-8.
in man and the mouse. Gut 1969;139:43. 82. Christl S, Gibson G, Murgatroyd P, et al. Impaired
57. Wald A. Is chronic use of stimulant laxatives harmful to the hydrogen metabolism in pneumatosis cystoides intestinalis.
colon? J Clin Gastroenterol 2003;36:386-9. Gastroenterology 1993;104:392-7.
58. Ghadially FN, Walley VM. Pigments of the gastrointestinal 83. Levitt M, Olsson S. Pneumatosis cystoides intestinalis and
tract: A comparison of light microscopic and electron high breath H2 excretion: Insights into the role of H2 in this
microscopic findings. Ultrastruct Pathol 1995;19:213-9. condition. Gastroenterology 1995;108:1560-5.
59. Benavides SR, Morgante PE, Monserrat AJ, et al. The 84. Read N, Al-Janabi N, Cann P. Is raised breath hydrogen
pigment of melanosis coli: A lectin histochemical study. related to the pathogenesis of pneumatosis coli? Gut
Gastrointest Endosc 1997;46:131-8. 1984;25:839-45.
60. Walker NI, Bennett RE, Axelson RA. Melanosis coli: 85. Florin THJ. Alkyl halides, super hydrogen production,
A consequence of anthraquinone-induced apoptosis of and the pathogenesis of pneumatosis cystoides coli. Gut
colonic epithelial cells. Am J Pathol 1988;131:465-76. 1997;41:778-84.
61. Speare GS. Melanosis coli: Experimental observations of its 86. Goodman RA, Riley TR. Lactulose-induced pneumatosis
production and elimination in twenty-three cases. Am J Surg intestinalis and pneumoperitoneum. Dig Dis Sci
1951;82:631-7. 2001;46:2549-53.
62. Mengs U, Rudolph RL. Light and electron-microscopic 87. Shimada M, Ina K, Takahashi H, et al. Pneumatosis
changes in the colon of the guinea pig after treatment with cystoides intestinalis treated with hyperbaric oxygen
anthranoid and non-anthranoid laxatives. Pharmacology therapy: Usefulness of an endoscopic ultrasonic catheter
1993;47(Suppl 1):172-7. probe for diagnosis. Intern Med 2001;40:896-900.
63. Balazs M. Melanosis coli: Ultrastructural study in 45 88. von Hansemann D. Ulser Malakoplakia der Harnblase.
patients. Dis Colon Rectum 1986;29:839-44. Virch Arch Pathol Anat 1903;173:302-8.
64. Van Gorkom BAP, DeVries EGE, Karrenbeld A, Kleibeulier 89. Michaelis L, Gutmann C. Ueber Einschlusse in
JH. Review article: Anthranoid laxatives and their potential Blasentumoren. Z Clin Med 1902;47:208-15.
carcinogenic effects. Aliment Pharmacol Ther 1999;13: 90. Cipolletta L, Bianco M, Fumo F, et al. Malacoplakia of the
443-52. colon. Gastrointest Endosc 1995;41:255-8.
65. Nusko G, Schneider B, Wittekind C, Hahn EG. Anthranoid 91. Lewin K, Harell G, Lee A, Crowley L. Malacoplakia—An
laxative use is not a risk factor for colorectal neoplasia: electron-microscopic study: Demonstration of bacilliform
Results of a prospective case control study. Gut 2000;46: organisms in malacoplakic macrophages. Gastroenterology
651-5. 1974;66:28-45.
66. Jacobs EJ, White E. Constipation, laxative use, and 92. Stevens S, McClure J. The histochemical features of the Michaelis-
colon cancer among middle-aged adults. Epidemiology Gutmann body and a consideration of the pathophysiological
1998;9:385-91. mechanisms of its formation. J Pathol 1982;137:119-27.
67. Roberts MC, Millikan RC, Galanko JA, et al. Constipation, 93. Thorning D, Vaco R. Malacoplakia: Defect in digestion
laxative use, and colon cancer in a North Carolina of phagocytosed material due to impaired vacuolar
population. Am J Gastroenterol 2003;98:857-64. acidification? Arch Pathol 1975;99:456-60.
68. Hung C-Y, Shyung L-R, Chen M-J. Pigmentation sparing in 94. Abdou N, NaPombejara C, Sagawa A, et al. Malacoplakia:
melanosis coli. Gastroenterology 2012;142:e10-1. Evidence for monocyte lysosomal abnormality correctable
69. Hardin RD, Tedesco FJ. Colitis after Hibiclens enema. J Clin by cholinergic agonist in vitro and in vivo. N Engl J Med
Gastroenterol 1986;8:572-5. 1977;297:1413-9.
Descargado para Anonymous User (n/a) en National Autonomous University of Mexico de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 18, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
Capítulo 128 Otras enfermedades del colon y del recto 2315.e3
95. Biggar W, Crawford L, Cardella C, et al. Malacoplakia 119. Streuli I, de Zeigler D, Santulli P, et al. An update on the
and immunosuppressive therapy: Reversal of clinical and pharmacological management of endometriosis. Expert
leukocyte abnormalities after withdrawal of prednisone Opin Pharmacother 2013;14:291-305.
and azathioprine. Am J Pathol 1985;119:5-11. 120. Berquist IA. Hormonal regulation of endometriosis and
96. Pillay K, Chetty R. Malakoplakia in association with the rationales and effects of gonadotropin-releasing
colorectal carcinoma: A series of four cases. Pathology hormone agonist treatment: A review. Hum Reprod
2002;34:332-5. 1995;10:446-52.
97. Bates A, Dev S, Baithun S. Malakoplakia and colorectal 121. Hall LLH, Malone JM, Ginsburg KA. Flare-up of
adenocarcinoma. Postgrad Med J 1997;73:171-3. endometriosis induced by gonadotropin-releasing
98. Van Furth R, Van’t Wout J, Wertheimer P, Zwartendijk hormone agonist leading to bowel obstruction. Fertil Steril
J. Ciprofloxacin for treatment of malacoplakia. Lancet 1995;64:1204-6.
1992;339:148-9. 122. Tran KT, Kuijpers HC, Willemsen WN, Bulten H. Surgical
99. Guest CB, Reznick RK. Colitis cystica profunda: Review of treatment of symptomatic rectosigmoid endometriosis. Eur J
the literature. Dis Colon Rectum 1989;32:983-8. Surg 1996;162:139-41.
100. Aftalion B, Lipper S. Enteritis cystica profunda associated 123. Darai E, Bazot M, Rouzier R, et al. Outcome of laparoscopic
with Crohn’s disease. Arch Pathol Lab Med 1984;108:532-3. colorectal resection for endometriosis. Curr Opin Obstet
101. Wayte D, Helwig E. Colitis cystica profunda. Am J Clin Gynecol 2007;19:308-13.
Pathol 1967;48:159-69. 124. Cruveilhier J. Ulcere chronique du rectum. In: Anatomie
102. Hubmann F. Proctitis cystica profunda and radiation fibrosis pathologique du corps humain. Paris: JB Bailliere; 1829.
in the rectum of the female Wistar rat after x-irradiation: 125. Madigan MR, Morson BC. Solitary ulcer of the rectum. Gut
A histopathological study. J Pathol 1982;138:193-204. 1969;10:871-81.
102a. Franzin G, Novelli P. Gastritis cystic profunda. 126. Tjandra JJ, Fazio VW, Church JM, et al. Clinical conundrum
Histopathology 1981;5:535-7. of solitary rectal ulcer. Dis Colon Rectum 1992;35:227-34.
103. Petritsch W, Hinterleitner T, Aichbichler B, et al. 127. Morio O, Meurette G, Desfourneaux V, et al. Anorectal
Endosonography in colitis cystica profunda and physiology in solitary ulcer syndrome: A case-matched
solitary rectal ulcer syndrome. Gastrointest Endosc series. Dis Colon Rectum 2005;48:1917-22.
1996;44:746-51. 128. Halligan S, Nicholls RJ, Bartram CI. Proctographic changes
104. Beck DE. Surgical treatment for colitis cystica profunda and after rectopexy for solitary rectal ulcer syndrome and
solitary rectal syndrome. Curr Treat Options Gastroenterol preoperative predictive factors for a successful outcome. Br J
2002;5:231-7. Surg 1995;82:314-7.
105. Moran H, Yaniv I, Ashkenazi S, et al. Risk factors for 129. Womack NR, Williams NS, Holmfield JH, Morrison
typhlitis in pediatric patients with cancer. J Pediatr Hematol JF. Pressure and prolapse—The cause of solitary rectal
Oncol 2009;31:630-4. ulceration. Gut 1987;28:1228-33.
106. Bremer TC, Monohan PB. Necrotizing enterocolitis in 130. Eckardt VF, Kanzler G, Remmele W. Anorectal ergotism:
neutropenia and chemotherapy: A clinical update and old Another cause of solitary rectal ulcers. Gastroenterology
lessons relearned. Curr Gastroenterol Rep 2006;8:333-41. 1986;91:1123-7.
107. Wagner M, Rosenberg H, Ferbach D, Singleton E. Typhlitis: 131. Crowe J, Stellato TA. Radiation-induced solitary rectal ulcer.
A complication of leukemia in childhood. AJR Am J Dis Colon Rectum 1985;28:610-2.
Roentgenol 1970;109:341-50. 132. Jarrett ME, Emmanuel AV, Vaizey CJ, Kamm MA.
108. Moir D, Bale P. Necropsy findings on childhood leukemia Behavioural therapy (biofeedback) for solitary rectal ulcer
emphasizing neutropenic enterocolitis and cerebral syndrome improves symptoms and mucosal blood flow. Gut
calcification. Pathology 1976;8:247-58. 2004;53:368-70.
109. Katz J, Wagner M, Gresik M, et al. Typhlitis: An 18-year 133. du Boulay CE, Fairbrother J, Isaacson PG. Mucosal prolapse
experience and postmortem review. Cancer 1990;65:1041-7. syndrome—A unifying concept for solitary ulcer syndrome
110. Kouroussis C, Samonis G, Androulakis N, et al. Successful and related disorders. J Clin Pathol 1983;36:1264-8.
conservative treatment of neutropenic enterocolitis 134. Vaizey CJ, van den Bogaerde JB, Emmanuel AV, et al.
complicating taxane-based chemotherapy. Am J Clin Oncol Solitary rectal ulcer syndrome. Br J Surg 1998;85:1617-23.
2000;23:309-13. 135. Kuijpers HC, Schreve RH, ten Cate Hoedemakers H.
111. Moir C, Scudamore C, Benny W. Typhlitis: Selective surgical Diagnosis of functional disorders of defecation causing
management. Am J Surg 1986;151:563. the solitary rectal ulcer syndrome. Dis Colon Rectum
112. Davila ML. Neutropenic enterocolitis. Curr Opin 1986;29:126-9.
Gastroenterol 2006;22:44-7. 136. Tsuchida K, Okayama N, Miyata M, et al. Solitary rectal
113. Jansen RP, Russel P. Nonpigmented endometriosis: Clinical, ulcer syndrome accompanied by submucosal invasive
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.
Descargado para Anonymous User (n/a) en National Autonomous University of Mexico de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 18, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
2315.e4 Sección X Intestino delgado y grueso
142. Badrek-Amoudi AH, Roe T, Mabey K, et al. Laparoscopic 144. Maurer CA, Renzulli P, Mazzucchelli L, et al. Use of accurate
ventral mesh rectopexy in the management of solitary diagnostic criteria may increase incidence of stercoral
rectal ulcer syndrome: A cause for optimism? Colorectal Dis perforation of the colon. Dis Colon Rectum 2000;43:991-8.
2013;15:575-81. 145. Serpell JW, Nicholls RJ. Stercoral perforation of the colon.
143. Schey R, Cromwell J, Rao SS. Medical and surgical Br J Surg 1990;77:1325-9.
management of pelvic floor disorders affecting defecation. 146. Falidas E, Mathioulakis S, Vlachos K, et al. Stercoral
Am J Gastroenterol 2012;107:1624-33. perforation of the sigmoid colon. A case report and brief
review of the literature. G Chir 2011;32:368-71.
Descargado para Anonymous User (n/a) en National Autonomous University of Mexico de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 18, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.