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DERECHO CIVIL 2: ACTO JURÍDICO

EL ACTO JURÍDICO
SIMULADO Y EL ACTO
JURÍDICO EN FRAUDE
A LOS ACREEDORES
MÓDULO

10
Curso: Derecho Civil 2: Acto Jurídico
Módulo: El acto jurídico simulado y el acto jurídico en fraude a los acreedores

© Universidad Privada del Norte, 2021


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Contenido

1. El acto jurídico simulado en la doctrina y en el Código Civil 3

2. El acto jurídico en fraude a los acreedores en la doctrina 4


y en el Código Civil

3. Conclusiones 5

4. Bibliografía 6
DERECHO CIVIL 2: ACTO JURÍDICO

EL ACTO JURÍDICO SIMULADO EN LA


1
DOCTRINA Y EN EL CÓDIGO CIVIL

En el acto jurídico simulado, pues, hay un concierto de voluntades para presentar


un acto jurídico que no responde a la voluntad interna de las partes y que solo
sirve de medio para producir engaño a terceros (Vidal Ramírez, 2005, p. 422).

De esta definición se desprende que con el acto jurídico simulado se busca engañar a un tercero.
Para ello, se utiliza una falsa declaración de voluntad que disimula una auténtica divergencia que
es pactada a través de un acuerdo simulatorio.

A partir de estas definiciones, la doctrina ha esbozado los siguientes rasgos característicos del
acto jurídico simulado. En primer lugar, la falta de conformidad entre la voluntad interna y la
voluntad declarada; cabe decir, que esta divergencia entre lo interno y lo externo debe ser
consciente y no mera suposición. En segundo lugar, debe verificarse la existencia de un acuerdo
de simulación; es decir, debe haberse realizado un concierto entre los sujetos para llevar a cabo
el acto simulado. Finalmente, el elemento subjetivo de querer causar un engaño y perjuicio a un
tercero.

Concluimos, desde una óptica doctrinaria, que el acto jurídico simulado es aquel pactado entre
dos sujetos cuyas voluntades internas divergen, a propósito, de sus respectivas declaraciones
con la sola finalidad de engañar a otros buscando sembrar en estos la idea que las voluntades
manifestadas por ellos responden verdaderamente a sus reales intenciones.

Ahora bien, el acto jurídico simulado puede ser utilizado para diferentes objetivos: bien para
convencer a otros sobre la existencia de un negocio imaginario; bien para disfrazar la naturaleza
o el contenido real de la operación, o bien para ocultar la identidad de una o más partes del
negocio.

Respecto a la regulación que el Código Civil realiza sobre el acto jurídico simulado, debemos
subrayar lo siguiente: la clasificación que se ensaya en simulación absoluta, simulación relativa y
simulación parcial.

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DERECHO CIVIL 2: ACTO JURÍDICO

La doctrina describe la simulación absoluta como aquella en la que existe apariencia absoluta
porque nada se esconde o disimula; es decir, se hace creer a los demás que ha tenido el interés de
realizar un acto jurídico cuando en realidad no se ha querido llevar a cabo ningún negocio. En el
caso de la simulación relativa, se pueden identificar dos actos: el primero que los contratantes en
puridad no desean celebrar, denominado acto simulado; en segundo lugar, un acto que realmente
desean celebrar, denominado acto disimulado, y que mantienen oculto a terceros.

Nuestro Código es compatible con lo propuesto por la doctrina. En el artículo 190, se señala que
por la simulación absoluta se aparenta celebrar un acto jurídico cuando no existe realmente
voluntad para celebrarlo. Asimismo, el artículo 191 indica que cuando las partes han querido
concluir un acto distinto del aparente, tiene efecto entre ellas el acto ocultado, siempre que
concurran los requisitos de sustancia y forma y no perjudique el derecho de tercero. Además,
también regula la simulación parcial en el artículo 192 cuando declara que la norma del artículo
191 es de aplicación cuando en el acto se hace referencia a datos inexactos o interviene interpósi-
ta persona.

En todos los supuestos de simulación, el acto jurídico simulado es siempre nulo por cuanto no
contiene la verdadera voluntad de las partes contratantes. Sin embargo, en el caso de la simula-
ción relativa, el acto disimulado puede producir efectos en la medida en que contenga todos sus
requisitos de sustancia y forma tal como lo señala el artículo 192 del Código Civil.

En ese sentido, podrá solicitar la nulidad del acto simulado, tanto para casos de simulación abso-
luta como para casos de simulación relativa. El artículo 193 establece que la acción para solicitar
la nulidad del acto simulado puede ser ejercitada por cualquiera de las partes o por el tercero
perjudicado, según el caso. Asimismo, debemos tener presente lo estipulado en el artículo 194
respecto que la simulación no puede ser opuesta por las partes ni por los terceros perjudicados a
quien de buena fe y a título oneroso haya adquirido derechos del titular aparente.

EL ACTO JURÍDICO EN FRAUDE A LOS ACREEDORES


2
EN LA DOCTRINA Y EN EL CÓDIGO CIVIL

La acción pauliana es la respuesta del ordenamiento


jurídico frente a los efectos nocivos del acto jurídico
celebrado en fraude a los acreedores. En ese sentido, la
acción pauliana o acción revocatoria por fraude a los
acreedores tiene como finalidad asegurar la garantía
patrimonial del deudor frente a actos de disposición
que puedan menguar la totalidad de su patrimonio y
por ello impedir o dificultar el cobro del crédito.

Por ello, compartimos la opinión de la doctrina que


define la acción pauliana como aquella en la cual el
acreedor persigue que se declare respecto de él la
ineficacia de los actos realizados por su deudor con los
cuales renuncia a derechos, o desaparezca o disminu-
ya su patrimonio conocido, perjudicando el cobro del
crédito actual o futuro (Torres Vásquez, 2007, p. 657).

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DERECHO CIVIL 2: ACTO JURÍDICO

El Código Civil también constituye su principal fuente de regulación. Así, en el artículo 195 se
describe con detalle todo lo referente a la acción pauliana. La citada disposición normativa señala
que el acreedor, aunque el crédito esté sujeto a condición o a plazo, puede pedir que se declaren
ineficaces respecto de él los actos gratuitos del deudor por los que renuncie a derechos o con los
que disminuya su patrimonio conocido y perjudiquen el cobro del crédito. Se presume la existen-
cia de perjuicio cuando del acto del deudor resulta la imposibilidad de pagar íntegramente la pres-
tación debida o se dificulta la posibilidad de cobro.

Además, subraya que tratándose de acto a título oneroso, deben concurrir, adicionalmente, los
siguientes requisitos:

a) Si el crédito es anterior al acto de disminución patrimonial, que el tercero haya tenido conoci-
miento del perjuicio a los derechos del acreedor o que, según las circunstancias, haya estado
en razonable situación de conocer o de no ignorarlos y el perjuicio eventual de los mismos.

b) Si el acto cuya ineficacia se solicita fuera anterior al surgimiento del crédito, que el deudor y el
tercero lo hubiesen celebrado con el propósito de perjudicar la satisfacción del crédito del
futuro acreedor. Se presume dicha intención en el deudor cuando ha dispuesto de bienes de
cuya existencia había informado por escrito al futuro acreedor. Se presume la intención del
tercero cuando conocía o estaba en aptitud de conocer el futuro crédito y que el deudor
carece de otros bienes registrados.

Con relación a los temas procesales, este mismo artículo establece que incumbe al acreedor la
prueba sobre la existencia del crédito y, en su caso, la concurrencia de los requisitos indicados en
los incisos 1 y 2 de este artículo. Corresponde al deudor y al tercero la carga de la prueba sobre la
inexistencia del perjuicio o sobre la existencia de bienes libres suficientes para garantizar la satis-
facción del crédito. Además, esta regulación debe complementarse con el artículo 200 que indica
que la ineficacia de los actos gratuitos se tramita como proceso sumarísimo y la de los actos
onerosos como proceso de conocimiento. Son especialmente procedentes las medidas cautela-
res destinadas a evitar que el perjuicio resulte irreparable.

3 CONCLUSIONES

El acto jurídico simulado es aquel pactado entre dos sujetos cuyas voluntades internas
divergen, a propósito, de sus respectivas declaraciones con la sola finalidad de engañar a
otros, buscando sembrar en estos la idea que las voluntades manifestadas por ellos responden
verdaderamente a sus reales intenciones.

La acción pauliana o revocatoria consiste en el derecho de acción atribuido al acreedor de


exigir judicialmente la declaración de ineficacia (inoponibles), en relación a él, ciertos actos de
disposición a título gratuito u oneroso sobre el patrimonio del deudor que le provoquen
perjuicio a su derecho de crédito.

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4 BIBLIOGRAFÍA

Espinoza, J. (2012). Acto jurídico negocial. Análisis doctrinario, legislativo y jurisprudencial.


Editorial Rodhas.

Lohmann, J. (1994). El negocio jurídico. Grijley.

Torres, A. (2007). Acto Jurídico. Idemsa.

Vidal, F. (2005). El acto jurídico. Gaceta Jurídica.

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