Está en la página 1de 3

Aprendizaje por Competencias en las Ciencias

Sociales Ciudadanía y Desarrollo Personal

cesarcastillo19@hotmail.com Ciclo - III


Lic. César Castillo Reyes
Tema Nº 02
Desarrollo del pensamiento Científico en el Pre-escolar
1. Pensamiento Científico en el pre-escolar
El pensamiento científico infantil es una manera de dar explicaciones de acontecimientos surgidos en la
cotidianidad, las cuales deben superar la intuición y el sentido común.

El pensamiento científico infantil es adquirido fundamentalmente a partir de experiencia reales, es decir,


cuando tienen una interacción directa con el objeto que desean describir o conocer, además, puede estar
limitado por obstáculos animista, por experiencias básicas los cuales se evidenciaron a lo largo de la aplicación
de una unidad didáctica.

El pensamiento científico facilita una adecuada interpretación y comprensión de los acontecimientos que
surgen en la cotidianidad, favoreciendo el desarrollo de argumentos claros y sólidos que ayudan en la
adopción de actitudes razonadas y críticas ante la toma de decisiones, lo cual repercute positivamente en
primera instancia a nivel individual y posteriormente en el entorno social del cual se hace parte.

Generalmente el pensamiento científico se asocia directamente con el método científico, sin embargo desde el
ámbito infantil, se asume como una manera de explicar acontecimientos surgidos en la cotidianidad, la cual
debe superar la intuición y el sentido común; el desarrollo de esta forma de pensar ocurre en la medida que
niñas y niños hagan “una adecuada adaptación de las ideas a los hechos – objetividad-, lo cual implica una
organización coherente de las mismas –sistematicidad”- Bunge (1958); además, manifestando aspectos como:
curiosidad, asombro, capacidad para hacer preguntas y sorprenderse y plantear hipótesis.

2. Porqué incentivar el pensamiento científico en pre-escolar


El niño y la niña se caracterizan por ser curiosos y tener capacidad de asombro, estas dos condiciones los
impulsan a explorar su entorno, durante esta actividad: observan, razonan, cuestionan, realizan descripciones,
elaboran explicaciones, es decir, llevan a cabo procesos de orden epistémico; de esta manera van
desarrollando un pensamiento de tipo científico, el cual se asocia con la manera de proceder frente a una
situación problemática, toma de decisiones y explicación de acontecimientos surgidos en la cotidianidad, lo
cual debe superar la intuición y el sentido común.
Es importante tener en cuenta que el pensamiento científico es un proceso mental que va más allá de elaborar
ideas, pensar científicamente implica buscar explicaciones a interrogantes, es decir “desarrollar actividades y
actitudes de manera coordinada y organizada para dar respuestas que satisfagan las expectativas de quien
inicialmente se las plantea” Rojas (2009).
Fomentar el desarrollo del pensamiento científico en niños y niñas desde el nivel preescolar no tiene como
finalidad la formación de pequeños científicos, sino estimular sus capacidades, habilidades, aptitudes y
actitudes frente a situaciones en las que están inmersos, de tal manera que avancen positivamente en la
comprensión de su entorno, ayudarlos a que expresen con claridad y coherencia sus ideas, mejorar sus niveles
de razonamiento, así como la percepción de lo que ocurre a su alrededor y la búsqueda de solución a
situaciones problemáticas.

La responsabilidad de desarrollar pensamiento científico recae fundamentalmente en la escuela, donde se


deben brindar espacios formativos donde se propicien hábitos de pensamiento que permitan aprovechar las
características naturales de niñas y niños, para encauzarlos hacia hábitos de pensamientos que superen la
intuición, el sentido común y la naturaleza animada con la que tienden a observar y explicar cómo funciona el
mundo.
Las ideas con las que los estudiantes llegan a la escuela no deben ser consideradas como negativas o positivas,
pues es su manera de comprender cómo funcionan las cosas, sin embargo, es pertinente prestar especial
atención a su naturaleza, pues en ocasiones no están bien fundamentadas, convirtiéndose en obstáculos para
la adquisición de pensamiento científico y su adecuada transferencia hacia otros contextos.
El maestro debe tener en cuenta el saber previo con que el estudiante llega a la escuela y potencializarlo, de
tal manera que desde las primeras etapas se vayan consolidando procesos que les permitan desarrollar
mejores formas de razonamiento.

No hay por qué postergar la formación científica de niñas y niños en el preescolar, relegando esto a grados de
escolaridad más avanzado, tal vez por considerar que no poseen las capacidades para lograrlo, desperdiciando
su potencial cognitivo y la oportunidad de aprovechar esta etapa de formación para ayudarlos a educar su
curiosidad natural hacia hábitos de pensamiento más eficientes, de tal manera que se les facilite la
comprensión del entorno.

3. Características del pensamiento infantil.


a) Pensamiento dirigido por la percepción.
Es la tendencia de los alumnos a basar inicialmente su razonamiento en las características observables de una
situación problemática es decir, niñas y niños elaboran ideas de cómo funciona la realidad a partir de aquellos
aspectos que les son relevantes y los que captan a través de sus sentidos, información que usan para
fundamentar sus ideas y posteriormente emitir opiniones con base en ellas.
En este orden de ideas, la escuela debe tener en cuenta esta forma de pensar de los niños y niñas para
direccionar estrategias didácticas que les permitan profundizar en lo percibido, para evitar la fundamentación
de ideas de manera superficial.

b) Enfoque limitado.
Es una característica estrechamente relacionada con la anterior, niñas y niños centran su atención en la parte
más sobresaliente de los eventos que perciben, lo cual les impide ver la realidad como un todo, situación que
los lleva a una comprensión parcial de los hechos o fenómenos.

c) Enfoque centrado en el cambio.


Tendencia que tienen niñas y niños a centrar su atención en los cambios evidentes de las situaciones que
observan más que en los estados de equilibrio o estáticos, por lo cual, al momento de dar cuenta de una
experiencia, se limitan a describir solamente aquellos eventos de los cuales pudieron percatarse y que les
resultaron significativos durante el proceso.

d) Razonamiento Causal Lineal


Las explicaciones que niñas y niños brindan de situaciones en las que se encuentran inmersos, son de manera
lineal, es decir, en una sola dirección, por ejemplo cuando un balón es chocado contra una pared, tienden a
pensar que es éste quien ejerce la fuerza, les es difícil entender que entre los dos hay una interacción que no
depende sólo del objeto que se mueve, por lo cual la comprensión que hacen del fenómeno es parcial
reduciéndolo solo a las características observables que les llama la atención.

El pensamiento científico fomenta la autonomía y la capacidad de razonamiento de los niños


Aumentar la capacidad de razonamiento mediante el pensamiento científico aporta múltiples ventajas tanto
en el día a día como en la formación de los niños como personas.
Las matemáticas y la ciencia abastecen temas relacionados con la naturaleza, además del estudio de números.
No obstante, el pensamiento científico va más allá y se relaciona también con la capacidad para ser autónomo
o la resolución de problemas de la vida cotidiana. Una visión lógica desarrollada ayuda a los niños a encontrar
relaciones entre los hechos, las ideas o las causas y los efectos.

Aporta el pensamiento científico


El pensamiento científico no sólo es positivo en el ámbito académico, sino que también ofrece múltiples
ventajas en la vida diaria y en la formación del niño como persona.
A los niños les puede esperar un futuro en el mundo de la biología, la ingeniería o la medicina, o tal vez
optarán por estudios relacionados con las letras.
Sea cual sea su elección de aquí a unos años, el razonamiento y la lógica le ayudarán a reaccionar delante de
los problemas, adaptarse a nuevas situaciones, solucionar retos…
Entre muchas cosas, con el desarrollo del pensamiento científico, el niño:
 Mejora la capacidad de razonamiento y la habilidad para pasar de nociones básicas a complejas.
 Aprende a resolver problemas en situaciones reales.
 Practica la construcción del propio aprendizaje.
 Ejercita la capacidad deductiva y aprende a crear estrategias y soluciones propias.
 Mejora la relación con el entorno físico y la percepción de los espacios, las formas, las partes y el todo.
Cinco consejos para fomentar el pensamiento científico
1. Promover la curiosidad. Es aconsejable invitarlos a investigar, a intentar comprender cómo funcionan los
objetos que utilizan cada día y a realizar pequeñas pruebas de acierto-error. Es importante, sobre todo cuando
los niños son pequeños, permitirles manipular los materiales, los juguetes, la ropa… A través del tacto y la vista
los compararán, establecerán relaciones geométricas entre forma y medida y asimilarán sus características y
funciones.
2. Si no surge naturalmente, hagámosles preguntas. Si estamos delante de niños poco curiosos, podemos
despertar su interés planteando cuestiones sobre el mundo que les rodea y animándoles a encontrar una
explicación de aquello que no entienden.
3. Dejar que lo intenten. Siempre que sea seguro y bajo la supervisión de un adulto, se debe dar espacio a los
niños para que intenten buscar soluciones de manera autónoma, según su propio criterio, los problemas que
les surgen respecto cómo manejar un objeto o situación. Ya habrá tiempo para aconsejarles, pero se debe
tener paciencia y permitir que lo prueben solitos.
4. Dirigir sutilmente su aprendizaje. Si les cuesta resolver un problema o afrontar una situación, no se les tiene
que dar la respuesta. Debemos intentar que la deduzcan suministrando algunas pistas o haciéndoles las
preguntas correctas para que ellos mismos encuentren la solución.
5. Utilizar el juego y la imaginación. Es bueno proponer retos o problemas cotidianos para que intenten
resolverlos, ir un poco más allá y pedirles que inventen objetos de futuro o iniciar un relato y animarles a que
lo acaben pensando qué podría sucederle a los protagonistas y cómo reaccionarían.

Actividad

Elabore un cuadro sinóptico en base a sus apreciaciones.

También podría gustarte