Está en la página 1de 9

Se entiende por deuda la obligación que alguien tiene de pagar o

reintegrar algo a otra persona.


También se entiende por deuda a cualquier cuenta por pagar como
resultado de una compra de bienes o servicios en términos de crédito.

El principal y más grande error que nos conduce a la creación de deudas


es el gastar más de lo que ganamos. En cuanto a la deuda esa es la raíz de
todos los males.

En esta sociedad tan consumista en la que vivimos en estos tiempos es muy fácil
caer en las deudas.

El consumismo, las ofertas y las posibilidades de crédito


están a la orden del día.
En cualquier lugar que uno va aparecen los letreros y las
posibilidades de “Ofertas” diciendo que se puede obtener
“Crédito Fácil”,” Crédito Inmediato”, “Pague en muchos
meses”, en donde nos venden la idea para endeudarnos
fácilmente haciéndonos consumir, comprar y adquirir
insumos que están fuera de nuestro alcance, fuera de
nuestro presupuesto y va más allá de lo que ganamos.

Y en esta sociedad de ahora en la que al individuo o a la familia promedio le


gusta competir entre sí, ¿Quién tiene la casa más grande y bonita?, los mejores
utensilios, los mejores adornos, el mejor carro, los hijos en la mejor escuela, la
ropa más cara y fina, etc.
Nos esforzamos por apantallar a nuestro alrededor sin darnos cuenta de que nos
estamos haciendo daño a nosotros mismos y más lamentable aun a nuestras
propias familias con esa conducta autodestructiva.

Si realmente el mundo exterior pudiera ver nuestras finanzas (las cuales


nosotros si podemos ver y conocer) se darían cuenta de cuan falso es
nuestro exterior de lujos, viajes y placeres y se darían cuanta de la horrible
verdad (la cual nosotros si conocemos terriblemente), lo deprimente de
nuestras finanzas, y podemos mantener el teatro por algún tiempo, años si
es posible pero nosotros en nuestro interior siempre sentiremos ese vacío y
esa horrorosa preocupación que no nos dejará estar en calma, porque
recuerde nosotros sí sabemos lo precaria de nuestra situación real.
Un sabio economista una vez dijo que existen deudas buenas y deudas
malas, y la deuda mala es la que se basa en GASTAR más de lo que
ganamos y que este gasto no nos produzca ninguna rentabilidad y
lógicamente esté fuera de nuestra realidad inmediata.

Video: 7 consejos para salir de Deudas

Una deuda buena es una deuda que en vez de sacar dinero de nuestros
bolsillos, poner dinero en ellos.
Por ejemplo. Comprar un Carro deportivo del año con un préstamo o tarjeta de
crédito (si nuestro salario y nuestras posibilidades no pueden costearlo) sería una
deuda mala. Pero conseguir un préstamo con un interés razonable e invertirlo en
un negocio o algo que va a poner dinero en tu bolsillo sería una deuda buena. Y
que dicha inversión pague la deuda.

Como se mencionaba anteriormente la deuda es como un arma cargada. En las


manos correctas puede ser una gran ayuda, pero en las manos incorrectas puede
ser un arma mortal, capaz de dañar a la persona que la posea y a todos los que
están alrededor de ella.
Es necesario eliminar de nuestras vidas, mentes, de la de nuestra familia y de la
sociedad esa cultura competitiva y de consumismo ilógico que nos lleva a
contraer deudas sin razón justificada, para evitar caer en la trampa en la que la
mayoría de la sociedad cae y ser arrastrados por esa arena movediza en la que
nos hundimos desde muy jóvenes y de la nunca podemos salir. Creándose así un
círculo vicioso, una bola de nieve que se va haciendo más y más grande cada vez

El préstamo
Se entiende como préstamo a la entrega de un bien bajo condición de ser
devuelto o al dinero que se toma con la condición de devolverlo con intereses.

Un préstamo es un instrumento de financiación que permite al


prestatario (persona que recibe el préstamo) disponer de una
cantidad de dinero en efectivo a cambio del abono de unos
determinados intereses.
Es importante mencionar que los intereses cobrados por un préstamo
convencional son un porcentaje de la deuda total, y son normalmente
mucho más bajos que los intereses adquiridos al utilizar una tarjeta de
crédito. (Tomando en cuenta que las tarjetas de crédito también funcionan
mediante un tipo de préstamo pero no convencional).

Algunos de los parámetros más importantes a considerar en un préstamo son


la duración del mismo, el capital solicitado, y los intereses que se aplicarán
sobre el mismo. En base a estos parámetros se determinan las cuotas que
periódicamente deberá satisfacer el cliente a la entidad financiera a fin de
satisfacer el préstamo.
La cantidad que tendremos que abonar en concepto de intereses se dividirá en
las correspondientes cuotas del préstamo. Debemos tener en cuenta que
cuanto mayor sea el plazo para pagar la deuda, mayores serán los intereses
globales, al igual que sucede con el capital solicitado (Guzmán. 2006).
Para los préstamos hipotecarios se suele emplear el sistema de amortización
francés, de forma que en nuestras primeras cuotas estaremos abonando
básicamente intereses, y poco a poco estos irán disminuyendo (Guzmán. 2006).

Existen diferentes tipo de prestamistas pero los más aconsejables son


los bancos o las entidades reconocidas de crédito, ya que existen
personas naturales o pequeñas empresas que se dedican a ser
prestamistas pero estas fuentes son mucho más peligrosas porque no
tienen el mismo respaldo y seguridad y además sus intereses son
mayores en gran manera (Guzmán. 2006).
En muchas oportunidades las empresas prestamistas requieren que el
prestatario cuente con un aval para poder aprobar el préstamo. Un
aval es una persona que se haría responsable de pagar el préstamo en
caso de que el prestatario directo no pueda o no sea capaz de redimir
(pagar) su deuda.

Garantiza el pago de la deuda. También hay otras empresas que para


dar el “OK” para un préstamo, requieren algo más como garantía del
cumplimiento de las obligaciones. A esto se le llama una hipoteca y
consiste en dejar algo de considerable valor como garantía de que la
deuda será cancelada, de lo contrario el prestamista puede quedarse
con ese algo de valor como pago de dicha deuda.

Elementos que conforman un préstamo


Los principales elementos de un préstamo son los siguientes:

• Partes contratantes: todo contrato de préstamo tiene dos partes; un


prestamista, aquella entidad financiera que otorga una suma de dinero
determinada, y un prestatario, la persona física o jurídica que la recibe.
• Capital o principal: es el monto neto de intereses que el acreedor
recibe por el préstamo.
• Interés: es la ganancia que recibe el prestamista a partir del capital
aportado al prestatario. Se calcula como un porcentaje del principal.
• Plazo: representa la duración del préstamo desde que se otorga hasta
que es reintegrado en su totalidad. Durante su vigencia, el prestatario
recibirá periódicamente el pago correspondiente a los intereses
generados, más una cuota parte del principal.
Tipos de préstamos
Los tipos de préstamo más frecuentes son los siguientes:

• Préstamos al consumo: aquellos donde la entidad financiera pone a disposición del


cliente una cantidad de dinero para la adquisición de diferentes bienes o servicios,
tales como un auto o un refrigerador. Por lo general, no se exige la necesidad de
justificar el destino del préstamo.
• Préstamos personales: aquellos utilizados para financiar necesidades concretas
generadas por determinados eventos como bodas, viajes, remodelación del hogar,
etc.
• Préstamos al estudio: préstamos dirigidos a estudiantes para financiar el pago de su
matrícula o estudios de posgrado (maestrías, doctorados) en su país de residencia o
en el extranjero.
• Préstamos hipotecarios: aquellos utilizados para la compra de un inmueble, tal como
una vivienda, un terreno, etc. Además de la garantía personal que debe avalar el
préstamo, el bien adquirido constituye una segunda garantía; si no se devuelve el
préstamo, la entidad financiera será su nueva propietaria.

Diferencia entre préstamo y crédito


A pesar de que los conceptos de préstamo y crédito suelen tratarse
indistintamente, tienen entre sí sus diferencias. En un préstamo, la entidad
financiera pone a disposición del cliente una suma fija que deberá devolver
cumplido un plazo determinado y habiendo pagado los intereses financieros
durante dicho período de tiempo.

En un crédito, la institución financiera abre una cuenta de crédito y otorga


un monto de dinero al cliente. Dentro de ese límite, el cliente puede ir
retirando dinero y devolviéndolo periódicamente. El banco le cobrará
intereses sobre el crédito parcial utilizado.

Asimismo, el préstamo suele constituir una operación a mediano o largo


plazo e involucrar una importante cantidad de dinero, mientras que en el
crédito, el plazo y la suma solicitada suelen ser menores.

Es de suma importancia en la vida tener un plan financiero y para tener


un plan financiero exitoso es necesario trazarse metas claras en la vida en
el ámbito financiero.
Metas a corto, mediano y largo plazo. Sin embargo también es necesario
trazarse metas ambiciosas pero realistas, que sean alcanzables a corto y
mediano plazo, sino deja de ser un incentivo y se convierten en algo
decepcionante en lugar de emocionante.

Un buen plan financiero nos permite trazar nuestras metas en materia


financiera para así saber cuál es el objetivo que perseguimos. En pocas
palabras es el mapa que contiene la dirección a seguir para alcanzar
las metas en el plano económico.

Una vez se elabore el presupuesto, se establezcan las metas financieras y


se defina una estrategia, es importante mantener la ruta, revisar
periódicamente el plan y realizar las correcciones necesarias en las metas o la
situación financiera para el mejoramiento continuo de los procesos.
Las metas a corto, mediano y largo plazo (6 meses, 2 años y 10 años
respectivamente) son solamente alcanzadas si se es ordenado en las finanzas
mediante un presupuesto bien definido.
A continuación se presenta un ejemplo sencillo de un presupuesto:
Como se observa arriba se respeta la cantidad sugerida de ahorro del 10%
de las entradas. Y un buen presupuesto, como se observa arriba, siempre la
resta de las entradas totales menos las salidas totales, SIEMPRE tiene que
dar 0 (cero al final).
*Nota: cantidades son solo aproximaciones para efectos didácticos y de
aprendizaje.

También podría gustarte