Rol de docente en la educación universitaria

Hoy en día ser un profesor universitario exitoso requiere tener liderazgo, ser creativo,

didáctico, amigable y con mucha humildad y empatía ante sus alumnos. Este catedrático que

pone empeño por impartir sus conocimientos a los universitarios; es aquél que educa sin algún

egoísmo, demostrando con las buenas acciones desde su convivencia universitaria al lado de

sus alumnos.

Este profesor universitario no solo debe ser de nombre con estas cualidades, sino que lo debe

transmitir con la práctica cotidiana hacia sus alumnos; siempre y cuando demuestre respeto por

los que le rodean al igual que sus alumnos deben saber hasta dónde es la confianza de esta

manera el docente estará capacitado no solo en discernir los conocimientos sino de manera

actitudinal será un ejemplo para ellos.

Este docente debe estar en la capacidad de ser organizado, competente en su área o

especialidad tanto en el aula o campo de estudio; mucho mejor si es apasionado por su

vocación de manera pragmática.

eso hará que sus alumnos se entusiasmen por lo que verdaderamente desea ser como

profesionales para bien de la sociedad donde radican.

Este catedrático para entender que sus estudiantes aprenden de diversas formas debe requerir

de mucha creatividad en la comunicación asertiva de lo enseñado – aprendido. De esa manera

le va ser útil trabajar con algunos maestros que le van a servir de referentes como también con

el personal administrativo. Tal es el caso que se preocupar por el estado emocional de sus

alumnos, viendo los diversos aspectos que le involucran al estudiante universitario de esa

manera sabrá llegar a fondo de la situación educacional de su aprendiz.

Hoy en día estamos para enseñar a los alumnos a estudiar para la vida mas no para el

momento, qué pasaría que de acá más adelante se le presenta al alumno un caso con relación

a su profesión y responde con un ”no recuerdo”, he ahí el problema; ya que tal vez al
estudiante universitario solo se le impartió la parte teórica de su profesión más no fue de la

mano la práctica de dicha carrera profesional. Es el caso de la UNU, en la facultad de

Educación, hasta los 3 años es pura teoría, impartidas en el aula, más no en campo y a partir

de séptimo ciclo recién realizan prácticas de docencia administrativa como pedagógica y una

vez que termine el estudiante al postular a una plaza docencia para trabajar se ve con otra

realidad; y más si a este le ha tocado laborar en una zona rural, si que se topa con la otra cara

de la moneda de la docencia. Mientras que los estudiantes del pedagógico desde que ingresan

van de la mano con las clases teóricas y a la vez salen al campo para realizar las prácticas de

la docencia, en su mayoría los estudiantes muy ventajosos con los conocimientos prácticos y

teóricos. Son más fáciles de relacionarse con el entorno que les rodea, capacitar y poco a poco

entablar más que conocimientos en sus alumnos.

Viendo esta debilidad con esta comparación de estudio entre la universidad y el pedagógico;

qué debemos sugerir en esta casa de estudios para llevar de la mano tanto la práctica y la

teoría, quiénes son los responsables de ello, se deberá tomar algún referente en el currículo

universitario de las universidades; para ver los egresados más acordes con lo práctico y teórica

en cuanto a la docencia.

Haciendo una crítica, a lo que yo pude observar, los docentes de las universidades piensan que

impartir conocimientos es solo estar en el aula frente a los alumnos, dejar libros, copias para

que los alumnos presentes resúmenes, ensayos; incluso no hay revisión minuciosa ya basta

con que el alumno haya presentado, está ok; por qué esos libros que dejan para leer, los

docentes mismos deben explicarlo mediante organizadores visuales, detallando con la crítica

positiva y negativa; y el por qué debemos leerlo, en qué nos servirá en nuestra carrera

profesional. Es uno de las desventajas de los decentes universitarios cuando dejan libros para

leer porque no hacen un análisis profundo de ese libro, del autor, tema, etc. Pero si son buenos

para desaprobar a los estudiantes, porque jalan a la mayoría de estudiantes, son buenos; creo

que el superior de este docente debe hacer un monitoreo tanto en el aula como en la
documentación. Así como el Minedu, la Ugel, lo hace ante los jardines, escuelas, colegios; nos

revisan hasta un mínimo detalle de las enseñanzas a nuestros alumnos.

Con ello, no globalizo a la docencia universitaria, sino que también hay buenos docentes

universitarios que te guían con todo y no son egoístas al impartir más de lo que ellos mismos

son, porque desean que sus alumnos sean muy buenos en esa rama, con vocación; incluso

hay docentes que hacen de tutores del aula universitario, cosa que, ante cualquier

inconveniente, el alumno o todo el salón recurre ante él para dar solución a dicho problema. Se

ven casos muy buenos cuando los alumnos terminar la carrera profesional, al realizar una

bonita fiesta de promoción y por qué no un viaje de promoción, juntamente con ellos, su

docente. El que les orientó, ayudó, enseñó, se solidarizó con sus alumnos ante algún problema

familiar; no solo ello, sino que tal vez intercedió por el en algún documento administrativo para

facilitar el avance las cosas.

Dirán, no tiene nada que ver con los estudios ya que el docente solo imparte conocimientos en

el aula, de ahí no hay más de su parte. Justamente aquí vemos que el verdadero rol del

docente universitario es dar más de sus conocimientos, sin egoísmo, enseñar con su actitud a

sus estudiantes a ser solidarios, empático, cooperativo, carismático, amigable, entusiasta y

demostrar ante todo la perseverancia, no hay por qué decir NO PUEDO, los obstáculos solo

son piedras del camino y es pasajero, sino la vida fuera de color rosa, siendo así todo fácil, al

alcance de la mano, pero si te esmeras con mucha conciencia y honestidad; el camino se le

abrirá solo al estudiante universidad, viendo en su totalidad que todo acto tiene una base,

empezando de abajo y surcando poco a poco después con el pasar del tiempo nos daremos

cuenta lo mucho que avanzamos, para ello hay que ser humildes; dicha actitud nos llevará a

más.

Bonito fuera que todos los docentes universitarios fueran así, uyyy qué sería de nuestros

egresados y de nuestra sociedad; que a causa de esta pandemia con 2 años de encierro

dejaron de socializar; las promociones en plena pandemia, qué de práctica habrán aprendido.
Ante esta situación el docente universitario debió diseñar sus actividades encaminadas a

incentivar la participación de los estudiantes; organizar en su plan de trabajo la distribución de

los contenidos que utilizará para motivar a los estudiantes de manera emocional y despertar las

ganas de seguir con todo a pesar de pasar por pérdidas humanas en su entorno familiar.

Alonso Tapia, 2005; afirma que pensamos que una persona está motivada cuando presenta

indicadores de interés, esfuerzo, concentración y satisfacción, y si estos indicadores están

presentes de modo más o menos regular a lo largo de los cursos.

Gracias a todas estas actitudes del docente universitario, es que el estudiante va tener a quién

y por qué elegir como asesor de tu trabajo de investigación; ya que depositará su confianza de

su docente preferido para seguir paso a paso con el avance de su tesis estudiantil. Es ahí que

compenetraran científicamente tanto docente y estudiante para lograr el objetivo profesional.

El docente universitario al recibir esta solicitud o propuesta de su alumno se sentirá muy

emocionado y feliz en lo profesional porque en ello verá los resultados de su enseñanza, la

confianza que él depositó hacia sus alumnos, porque personalmente digo, que uno elige a su

asesor de tesis por afinidad o porque vio el lado positivo de este catedrático.

Así como hay buenos docentes universitarios, también hay de muy mala conducta, autoritario,

que aprovechan de tal cargo hasta para pedir dinero con la excusa que va hacer algún proyecto

en beneficio de la sociedad o alguna excusa que no viene al caso, creen que porque la mayoría

de sus alumnos desaprueban el curso que él dicta, son los mejores, no demuestran humildad,

siempre suelen ser superiores. Pero pasa el caso que ahora los alumnos tenemos todo el

derecho de solicitar el cambio de ese tipo de docentes, claro con argumentos que sustenten tal

comportamiento, ahora digo, serán escuchados estos alumnos. He ahí otra incógnita; ya que

estos docentes de muy mala actitud, tienen personas que apoyan esa actitud como también

hay universidades que no toleran ninguna falta ya que van a querer el bienestar de su

alumnado.
Es un caso de un colega del doctorado que actualmente enseña comunicación en la UNU,

tanto así que ese alumno lo difamó en las páginas del Facebook, expresándose

despectivamente de dicho colega, fundamentando el mal trato de dicho docente.

Casos como este, es que la sociedad universitaria está funcionando mal en lo que respecta la

enseñanza universitaria, porque a la hora de contratar a un docente no evalúan su perfil

profesional, antecedentes laborales, etc. Entran a laborar por jale de algún conocido.

Concluyendo con lo concernido, el docente universitario debe confrontar diversas expectativas

tanto en lo aptitudinal y actitudinal para saber llegar a sus alumnos diagnosticando las

características de estos.

No hay una formula de cómo ser el mejor docente universitario, sino va depender de la gran

vocación y conocimiento de su especialidad del catedrático para hacer más dinámica su clase y

saber sobrellevar cualquier dificultad de sus estudiantes.