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INTERÉS ACADÉMICO Y PERSONAL- BUENOS PROFESORES

Introducción

La educación es un acto emprendido con real compromiso por pocos hombres y


mujeres. Si bien muchos practican la docencia, no son tantos los que realmente se
involucran en el proceso educativo y formativo de un sujeto, al grado de llegar en
muchos casos al sacrificio personal extremo en favor del desarrollo de sus
alumnos.

Normalmente, cuando tomamos una decisión tan importante como es la de elegir


una trayectoria académica o profesional determinada, ponemos en marcha
numerosos mecanismos cognitivos y emocionales, a través de los cuales cotejar
diversos aspectos relacionados con la elección final que terminaremos realizando.
Necesitamos verificar si realmente seremos capaces de desarrollar las habilidades
propias de la trayectoria elegida; si dicha decisión encaja con nuestros intereses;
si ello nos va a proporcionar buenas oportunidades profesionales, a través de
procesos de comparación de la futura situación con la actual; cuan accesibles son
esas carreras para nosotros; así como si la identidad profesional que queremos
construir es la adecuada para poder identificarnos con la trayectoria académica o
profesional finalmente elegida (Bandura, 1997, 1999)
Aspectos esenciales del maestro
Una condición fundamental del buen maestro es su compromiso con la formación
humana. Formar es influir en la manera de ser y actuar de los alumnos, y es un
proceso que involucra tanto la razón como la sensibilidad. La posibilidad de formar
exige al maestro un proyecto de vida consecuente con los principios que orientan
su labor educativa.

Interés académico

El rol de los profesores en la sociedad actual es indiscutible. Tienen la misión de


formar a los niños, niñas y jóvenes que conformarán la sociedad del futuro,
favoreciendo la adquisición de competencias de toda índole que les permitirán
desenvolverse de la mejor manera posible en su vida adulta, partícipes de una
sociedad inclusiva y democrática.

Para esta misión, los profesores se preparan inicialmente estudiando la carrera


universitaria de pedagogía que su vocación les dicta, para luego, con las
herramientas iniciales salir a enfrentarse al mundo de la docencia con más
vocación que experiencia y con más ímpetu que competencias. Evidentemente
estas herramientas no son suficientes para ejercer la profesión durante toda la
vida.

La carrera docente requiere de parte de los profesores y profesoras que se


mantengan a la vanguardia en temas propios de la pedagogía, como los cambios
de paradigmas o las nuevas tendencias. Del mismo modo, necesitan estar
actualizados respecto de los avances disciplinares en los diferentes campos del
conocimiento, especialmente en los que forman parte de su especialidad.

 Te presentamos 3 motivos por los cuales los docentes deberían estudiar y
actualizarse de forma continua.

En la actualidad, las instituciones educativas no solo deben ocuparse de promover


la formación y mejorar el desempeño de sus alumnos, sino también de su equipo
docente. Considerando la complejidad de la tarea que deben afrontar, resulta
indispensable que los maestros posean los conocimientos y dispongan de las
herramientas necesarias para lograr tal propósito de forma satisfactoria. En esta
oportunidad, enumeraremos tres motivos que explican por qué los docentes
deberían formarse y actualizarse constantemente.

· Los cambios en la tecnología


Implementar la tecnología en el aula es un requisito casi obligatorio. Sin embargo,
para lograrlo es necesario investigar, estudiar y estar al tanto de todas las
actualizaciones que surgen en esta materia, por ejemplo, el lanzamiento de
nuevas aplicaciones y otras herramientas digitales.

· La evolución de los métodos educativos


Cuando los educadores utilizan los mismos programas y técnicas a lo largo de su
carrera, es probable que el crecimiento de sus alumnos, e incluso el propio, se vea
perjudicado. Es por este motivo que los docentes deben indagar acerca de nuevos
métodos de aprendizaje e investigaciones científicas en el área de la educación y
la pedagogía.

· La disminución del índice de rotación de personal


Según publicó el portal Inc, un reciente reporte demostró que las compañías que
invierten en sus empleados a través de un programa de educación continua no
solo mejoran su desempeño sino que también favorecen su retención. ¿El motivo?
El hecho de recibir este tipo de oportunidades demuestra a los empleados que son
valorados y reconocidos, se sienten más satisfechos, y por tanto, son menos
propensos a abandonar su puesto o cambiar de empleo.

https://noticias.utpl.edu.ec/5-razones-por-las-que-un-docente-debe-estar-
actualizado

Interés personal
Muchas veces las personas se relacionan con otras por medio de cierto interés,
cuando se busca algún beneficio personal, el interés puede nacer en las personas
cuando algo le puede causar un beneficio, una curiosidad, un aprendizaje, cuando
una persona ve una película o lee un libro es porque le causa interés, porque el
tema abordado en ellos, son temas actuales o que de alguna manera genera
influencia en su vida personal y social.
Absolutamente todo lo que hacemos y decimos es debido a nuestro interés
personal. Si no tuviéramos interés no lo haríamos ni diríamos lo que decimos. La
diferencia entre una buena y una mala persona reside en el objeto de su interés.
El objeto podrá ser sublime o ruin pero el interés personal siempre está presente.

El maestro tiene que mirarse a sí mismo, descubrir que reflejan sus expresiones
corporales, percatarse de la fuerza comunicativa que tiene y proyecta su cuerpo.
El rasgo más hermoso que puede acompañar la presentación del maestro es una
actitud que revele nítidamente alegría, sensibilidad, compromiso, esfuerzo, deseo
de superación, convicción moral, y honradez intelectual.

El docente consciente de la influencia de su personalidad en el proceso educativo


debe:
Analizar de manera constante sus acciones educativas desde la perspectiva de
sus rasgos de personalidad. (Si toma cierta actitud negativa hacia un alumno,
dicha actitud tiene un sentido fundamentado en la personalidad del docente y no
necesariamente en las características del alumno.) d) Tener espacios para discutir
y analizar casos y situaciones en que se haya expuesto una situación de carácter
personal. Dichos espacios de preferencia compartidos con otros profesores donde
se puedan presente

Ejemplos de Intereses Personales en un CV
 Lectura: ficción, noticias, aprendizaje...
 Música: instrumentos, géneros, artistas...
 Cocina: tradicional, exótica...
 Fotografía: paisajes, modelos...
 Deportes: de equipo, de resistencia...
 Baile: en pareja, solo, géneros...
 Escritura: blogging, RRSS

Relacionar las dos cosas


Ejemplo
Mis intereses
 En lo personal me encanta el tiempo bien aprovechado con mi familia y
amigos.

En lo profesional me interesa una nueva educación basada:


 En el alumno como centro y protagonista del aprendizaje.
 Que esté basada en el Aprender a aprender.
 En la que mis alumnos disfruten, aprendan y crezcan como estudiantes y
personas.
 En la creación de redes de aprendizaje tanto entre los alumnos como entre
los profesionales de la educación.
El maestro debe ser capaz de expresar y sentir ternura, estar siempre abierto y
sensible a las vivencias afectivas de los alumnos; transmitir en la experiencia de
enseñar el goce del conocimiento; revelar a sus discípulos la manera cómo el
conocimiento embellece la vida; contagiarles de actitudes de respeto hacia sí
mismos, de entusiasmo y calidez en su relación con los otros, de autoconfianza y
valoración de sus posibilidades.

Debe ser una persona organizada en sus ideas, segura, y bien documentada para
que su palabra comunique con claridad, convenza, tenga impacto, y movilice los
alumnos hacia cambios significativos. Que maneje apropiadamente las diversas
técnicas, recursos, y métodos de comunicación necesarios para hacer más
atractiva y eficiente la transmisión de sus mensajes.

Un buen profesor es la base de una educación exitosa y para que esto sea así
precisa tener una serie de habilidades personales y profesionales. Porque enseñar
no es solo transferir conocimientos, es mucho más, se trata de saber crear las
condiciones necesarias para que los alumnos aprendan a pensar y a construir su
propio conocimiento sobre el mundo que les rodea.
Un buen profesor necesita no solo un amplio conocimiento de la materia que
imparte y un plan de estudio; necesita ser entusiasta, cariñoso y empático pero
también firme y respetuoso, responsable, flexible y comunicativo. Estas entre otras
características conforman las claves para ser un buen profesor.
Hoy resaltamos 10 de ellas que nos parecen imprescindibles.
 
Las claves para ser un buen profesor
Un buen docente entre las muchas habilidades que debe desarrollar ha de mostrar
ante todo:
1. Empatía, para ponerse en el lugar del alumno y entender sus dificultades o
inquietudes; entenderle y ayudarle a superar los obstáculos que le frenan o para
ponerle los retos necesarios que le permitan ir más lejos.
2. Paciencia, para tratar tanto con aquellos alumnos que les cuesta mucho como
para los que siempre quieren más, para saber esperar a los más lentos pero
también para adaptarse a los que acaban demasiado rápido.
3. Entrega por su profesión y por el trabajo que ejerce. El buen profesor se
preocupa por transmitir y contagiar el afán de superación que supone aprender sin
importarle el número de alumnos por clase ni las diferencias cognitivas, culturales,
sociales o económicas que existan entre ellos.
4. Entusiasmo por lo que hace, capaz de motivar a sus alumnos y contagiarles
las ganas de aprender y saber. Un entusiasmo capaz de llegar al alumno y hacerle
despertar la curiosidad ante lo que le rodea.
5. Creatividad. Un buen profesor ha de ser capaz de ser creativo tanto en el modo
de atraer la atención de los alumnos como en la forma de exponer sus
conocimientos creando lecciones únicas, cautivantes y dinámicas.
6. Flexibilidad. Ante una situación especial o problema debe ser capaz de
cambiar y encontrar el camino para que todos los alumnos comprendan el
concepto que está explicando. Cambiar el rumbo y adaptarse a las necesidades
del grupo clase.
7. Coherencia en sus decisiones. Un buen maestro debe saber poner normas y
reglas en su aula coherentes y consistentes, debe ejercer la autoridad que su
posición le otorga sin caer en el autoritarismo, lo que le restaría credibilidad y
alejaría de sus alumnos. Por ejemplo, si no permite a sus alumnos comer chicle, él
tampoco debe hacerlo.
8. Humildad. Un buen maestro por más que se esfuerce puede no ser infalible,
como cualquier persona puede cometer errores. Ser capaz de reconocerlos,
admitirlos y pedir disculpas es una cualidad que siempre jugará a favor del
profesor, aumentando la confianza de los niños en él, ya que le verán como lo que
es, un ser humano.
9. Respeto hacia sí mismo,  hacia sus compañeros y obviamente hacia sus
alumnos y respectivos padres. Si hay algo que deben tener en cuenta los
profesores es que son un modelo a seguir para cada uno de los alumnos, que les
observan constantemente como actúan, cómo hablan, cómo se mueven,
responden o visten.
10. Responsabilidad ya que trabaja con un material muy sensible: los niños y
precisamente la formación de sus alumnos es el trabajo más importante que tiene
que ejercer. Por eso un profesor responsable llega puntual, prepara bien las
clases, motiva a sus alumnos, es creativo y comunicativo, atento y paciente
buscando siempre lo mejor para todos ellos.
 
Un buen profesor será aquel que nuestros hijos recordarán con afecto y
agradecimiento años después de dejar las aulas donde creció y aprendió con él.
CONCLUSIÓN

Los docentes siempre serán el pilar fundamental en la educación de los niños. Los
docentes por vocación ven su tiempo y dedicación recompensados cuando sus
alumnos aprenden y se superan, sus alumnos siempre serán sus mejores
maestros, pues de ellos aprenden sus principales enseñanzas de vida. El interés
académico y personal de los buenos profesores será siempre el reflejo del proceso
formativo de sus alumnos a través de su formación profesional inicial y continua y
su formación humana.
 
La enseñanza que deja huella no es la que se hace de cabeza a cabeza, sino de
corazón a corazón, el docente que ama su profesión lo entrega todo, porque su
principal recompensa no es monetaria, sino la satisfacción que le produce el
hecho de contribuir a la formación de la sociedad que le rodea y que tendrá la
llave de un futuro, ojalá que muy esperanzador, los mejores maestros enseñan
desde el corazón.
GLOSARIO
1. Entrega por su profesión:
El buen profesor se preocupa por
transmitir y contagiar el afán de
superación que supone aprender sin
importarle el número de alumnos por
clase ni las diferencias cognitivas,
culturales, sociales o económicas que
existan entre ellos.

2. Empatía:
La empática se caracteriza por tener
afinidades e identificarse con otra
persona. Es saber escuchar a los demás,
entender sus problemas y emociones.

3. Creatividad:
Un buen profesor ha de ser capaz de
ser creativo tanto en el modo de atraer
la atención de los alumnos como en la
forma de exponer sus conocimientos
creando lecciones únicas, cautivantes y
dinámicas.
1. Entrega por su profesión: El buen profesor se preocupa por transmitir y
contagiar el afán de superación que supone aprender sin importarle el
número de alumnos por clase ni las diferencias cognitivas, culturales,
sociales o económicas que existan entre ellos.
2. Entusiasmo por lo que hace: capaz de motivar a sus alumnos y
contagiarles las ganas de aprender y saber. Un entusiasmo capaz de llegar
al alumno y hacerle despertar la curiosidad ante lo que le rodea.
3.

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