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son tributarios de cirugía prostática sigue cons- sobre los síntomas similar a la finasterida19, a la
tituyendo un reto diario todavía no resuelto en tamsulosina20 y a placebo21. El tratamiento hor-
la comunidad urológica17. El tratamiento farma- monal de la HBP abarca los progestágenos, los
cológico se circunscribe a tres categorías: fár- antiandrógenos esteroideos, los antiandrógenos
macos alfabloqueantes, derivados hormonales puros, los análogos de la LH-RH y los inhibido-
y fitoterapia (tabla 3). En la actualidad está au- res de la 5 α-reductasa. Estos últimos, represen-
mentado el tratamiento médico de estos pa- tados por el fármaco finasterida, se han im-
cientes, reduciéndose el número de pacientes puesto sobre los otros tratamientos hormonales
sintomáticos que están en una actitud de “ espe- por los efectos secundarios que presentaban
ra vigilada” , que se situará en un 33 %18. La fi- aquéllos. El fundamento de los inhibidores de
toterapia o tratamiento con plantas medicinales la enzima 5 α-reductasa está basado en obser-
es tan antiguo como la historia misma de la vaci ones cl íni cas de una curi osa forma de
Medicina. La fitoterapia basa su éxito en la pseudohermafroditismo masculino en el que el
gran variabilidad sintomática de la HBP, que desarrollo viril se hace de forma tardía y con
hace difícil distinguir lo que es un efecto positi- muy escaso desarrollo de la glándula prostática
vo de un curso propio de los síntomas, de la debido a la ausencia de la enzima 5 α-reducta-
excelente tolerancia del tratamiento y de cierta sa. De esta enzima existen dos isoenzimas, las
eficacia sintomática. tipo 1 y 2. La enzima 5 α-reductasa tipo 1 está
No obstante, la variabilidad de los productos localizada en el cromosoma 5 y no se encuen-
que los integran, dado que se obtiene de frutos, tra en la próstata, la tipo 2 se encuentra en la
raíces, semillas, cortezas, etc., dificulta enor- próstata y está alterada en el síndrome comen-
memente que se puedan comparar y que se tado; es la isoforma que es inhibida por la fi-
puedan realizar estudios serios. Dentro de los nasterida18. Los fármacos de este grupo (inhibi-
productos fitoterapéuticos el más popular es la dores de la 5 α-reductasa) no sólo mejoran los
Serenoa repens, cuyo principio activo son los síntomas e incrementan el flujo miccional, sino
β-sitosteroles. En estudios controlados doble que también reducen el volumen prostático22.
ciego comparativos ha mostrado una eficacia No obstante, en la actualidad el tratamiento
farmacológico está representado en un 50 %
TABLA 3 por los alfabloqueantes, en un 30 % por los
Tratamiento farmacológico de la hiperplasia preparados fitoterapéuticos y en un 20 % por
benigna de próstata los inhibidores de la 5 α-reductasa18, con con-
sidera-bles variaciones en lo que hace referen-
Fitoterapia cia al uso de fitoterapia. Así, cerca de un 40 %
Serenoa repens la utiliza en Alemania y apenas el 0 % en el
Sabal serrulatum Reino Unido (fig. 1). Los alfabloqueantes, trata-
Pygeum africanum miento puramente sintomático, constituyen el
Hipooxis rooperi grupo farmacológico más utilizado y el que tie-
Urtica dioica ne una acción antihipertensiva que facilita el
Secale cereale tratamiento en los varones prostáticos con HTA
Curcubita pepo asociada.
Hormonoterapia (I)
Agonistas LH-RH
Antagonistas LH-RH
Progestágenos
Antiandrógenos esteroideos 70
Antiandrógenos puros
60
Hormonoterapia (II)
50
Inhibidores de la 5 α-reductasa
Finesterida 40
Dutasteride 30
Episteride
20
Alfabloqueantes
Fenoxibenzamina 10
Prazosina 0
Doxazosina Alemania Francia Italia R. Unido
Alfuzosina
Fitoterapia Finasterida Alfabloqueantes
Terazosina
Tamsulosina
Indoramina Fig. 1. Uso de fármacos para el tratamiento de la HBP en
Europa.
50 % de la respuesta máxima es de 3,0 mg para sujetos con valores bajos de colesterol LDL y
la PA sistólica y de 1,5 mg para la PA diastólica. elevados de insulina. El volumen prostático se
Es deci r, con dosi s superi ores a 10 mg no correlacionó positivamente con la PA sistólica,
se obtienen beneficios sustanciales, con lo que la obesidad y la insulina en ayunas y negativa-
se puede minimizar la aparición de efectos ad- mente con los niveles de colesterol HDL55. Una
versos si no se sobrepasa esta dosis de 10 mg45. hipótesis derivada de estas observaciones pudie-
La eficacia del terazosina para tratar los STUI ra ser que la HBP forma parte del síndrome me-
asociados a HBP ha sido evaluada recientemen- tabólico, en el que un defecto en la recaptación
te en una revisión de 17 estudios que incluyeron de la glucosa dependiente de la insulina y un hi-
a 5.151 pacientes. En general, terazosina produ- perinsulinismo secundario constituirían los posi-
jo una mejoría de los síntomas superior a place- bles factores etiológicos. Una corroboración in-
bo y a finasteride, y similar a otros alfabloquean- directa de esta hipótesis es la eficacia de los
tes46. La comparación de la eficacia a largo receptores α1-adrenérgicos para aliviar los STUI
plazo entre terazosina y finasteride o la combi- en los sujetos con HBP. Se ha demostrado que la
nación de ambos, se obtendrá en el estudio insulina tiene un efecto estimulador sobre los
M TO PS (M edi cal Therapy of Prostati c núcleos ventromediales hipotalámicos, regulan-
Symptoms) que está en curso. do de esta forma el si stema nervi oso y
simpático56. La hiper-insulinemia inducida au-
menta los niveles plasmáticos y tisulares de cate-
Hipertensión arterial e hiperplasia colaminas57. También la hiperinsulinemia au-
benigna de próstata menta el fl uj o de l os nervi os si mpáti cos
periféricos28. Parece, pues, razonable pensar que
Como se ha comentado anteriormente, la HBP los pacientes con HBP y niveles elevados de in-
se correlaciona positivamente con la edad, de sulina puedan tener una hiperactividad simpáti-
forma que en varones entre los 61 y los 70 años ca y ser especialmente candidatos al tratamiento
la prevalencia es superior al 70 %47. Al menos con bloqueadores de los receptores α1-adrenér-
un 50 % de los varones mayores de 50 años pa- gicos.
decen de HBP48. Así pues, tanto la HBP como la
HTA aumentan en frecuencia con la edad y se
puede considerar que en un 25 % de los varones Tratamiento farmacológico del paciente
mayores de 60 años coexisten ambas entida- hipertenso con hiperplasia
des48,49. Aunque las mismas constituyen patolo- benigna de próstata
gías diferentes, podría establecerse un nexo en
común entre ambos procesos a través del siste- El enfoque del tratamiento farmacológico y no
ma nervioso simpático. Hemos comentado ante- farmacológico del paciente hipertenso con sín-
riormente que el tejido prostático responde al es- tomas asociados a la HBP no difiere en general
tímulo de los receptores α1-adrenérgicos, y éstos de cualquier otro hipertenso, y para ello dispo-
son fundamentales en el control de la PA50. Ade- nemos de las recientes actualizaciones de las re-
más se ha encontrado cierta asociación entre la comendaciones americanas (JNC-7) y europeas
HBP y el síndrome metabólico. Así se ha obser- (ESH-ESC-2003) para el manejo y tratamiento de
vado una mayor prevalencia de diabetes melli- la HTA58, 59. Como en cualquier hipertenso, los
tus en varones prostatectomizados con respecto valores de PA y la asociación de otros factores
de varones de la misma edad sin afectación de riesgo o enfermedades vasculares (estratifica-
prostática51, sugiriendo a aquélla como un factor ción del riesgo) van a condicionar el inicio del
de riesgo para HBP. Con respecto a la obesidad, tratamiento farmacológico del hipertenso59. En el
los resultados han sido más contradictorios; así, varón hipertenso con STUI por HBP los fárma-
algún autor52 ha encontrado después de realizar cos alfabloqueantes constituyen una clase tera-
una resección tras-uretral unas próstatas mayores péutica que permite un abordaje integral con
en varones obesos con respecto de los que no una eficacia para ambas condiciones clínicas. La
los son, mientras que otros autores no han en- mayoría de los sujetos hipertensos, por sus valo-
contrado diferencias en la incidencia de HBP res de PA y su patología o factores de riesgo aso-
entre obesos y no obesos, o incluso una inciden- ciados, van a precisar más de un solo fármaco
cia menor en los obesos53, 54. Más recientemente para conseguir un adecuado control de la PA.
se ha estudiado la asociación entre la HBP, mi- Así, en hipertensos estadios 2 y 3, o en estadio
diendo el volumen prostático mediante ultraso- 2, según la reciente clasificación del JNC-758, la
nografía, con los diferentes componentes del sín- monoterapia controla sólo entre el 25 %-40 % de
drome metabólico55. Se analizaron 158 sujetos los pacientes60, mientras que en el estadio 1 se
con STUI, con o sin síndrome metabólico, ob- consigue controlar con un solo fármaco al 60 %
servándose unas próstatas mayores en diabéticos de los hipertensos61. Ante la necesidad de un tra-
tipo 2, en hipertensos tratados, en obesos y en tamiento combinado la adición de un alfablo-
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Antihypertensive and lipid lowering treatment to prevent