REINADO DE ISABEL II ⠀

1. Introducción
A mediados del siglo XIX, tuvo lugar un periodo caracterizado por cambios que afectaron a
todos los aspectos de la vida en España. Podemos destacar la sustitución del viejo sistema
absolutista por otro de tipo liberal, con constituciones, limitación del poder regio, partidos
políticos, elecciones, etc. No obstante, la inestabilidad, las guerras civiles y el protagonismo
político de los militares (pronunciamientos) son caracteres que demuestran la debilidad del
nuevo régimen, también se aprecia en las dificultades que tiene este para imponerse sobre
los partidarios del absolutismo (los carlistas).
Este periodo histórico fue presidido sobretodo por el reinado de Isabel II, el cual lo podemos
dividir en las siguientes fases:
1º- El periodo de las regencias 1833-1843, ambas coinciden con la minoría de edad de Isabel II:
+ la de María Cristina de Borbón
+ la de Espartero
2º- La Década Moderada (1844 - 1854)
3º- El Bienio Progresista (1854 - 1856)
4º- Epílogo Isabelino (1856 - 1868):
+ Concluyó en la revolución llamada “La Gloriosa” que provocó el destronamiento de Isabel II.
5º- El Sexenio revolucionario o Democrático (1868 - 1874):
+ Tras la caída de Isabel II se llevaron a cabo en España los primeros intentos democratizadores de
nuestra historia.

2. Desarrollo
2.1 Periodo de las regencias (1833 - 1843)
Regencia de María Cristina (1833 - 1840)
Fernando VII murió en 1833 y quedó como sucesora del trono una niña de 3 años, la futura
Isabel II. Se iniciaba así un periodo de regencia de su madre, María Cristina. Durante los 7
años que duró esta, los aspectos más destacados fueron los siguientes:

- Guerra Civil. 1ª guerra carlista

Fernando VII había contraído matrimonio con Mª Cristina en 1828, con quien tuvo 2 hijas.
Este hecho planteó un problema sucesorio, debido a la ley sálica (introducida en España por
Felipe V, esta ley excluía de la sucesión al trono a las mujeres) el infante don Carlos María
Isidro, hermano del Rey, se convertía en heredero. Para evitar esto, el mismo día que nació
Isabel, Fernando VII promulgó la pragmática de 1830 aboliendo dicha ley.
Los carlistas, partidarios de don Carlos María Isidro, vieron en esta decisión el resultado de
una conspiración de los liberales contra su pretendiente. Se inició así la 1ª Guerra Carlista,
que finalizó en 1839 con el llamado “Abrazo de Vergara” entre los generales Espartero
(isabelino) y Rafael Maroto (carlista).

- Las reformas administrativas

Durante el primer gobierno de la regencia, el de Cea Bermúdez (1832 - 1834),
el ministro de fomento Javier de Burgos llevó a cabo la división provincial de España, con la
intención de acabar con todo fuero o privilegio que atentase contra el principio de igualdad
de los ciudadanos ante las leyes.
- Las reformas políticas
En 1834, subió al gobierno Martínez de la Rosa (liberal moderado).
En ese año, promulgó el Estatuto Real que supuso la transición al liberalismo. En realidad,
este Estatuto era una ley concedida por un monarca que renuncia a algunas de sus
competencias. Y fue rechazado por los liberales progresistas.

- El Gobierno de Mendizábal
En 1835, subió al poder Mendizábal e instaló el liberalismo radical. En su gobierno, destacó la
desamortización de 1836 de los bienes eclesiásticos y se organizaron los partidos progresista
y moderado. Finalmente, uno de los líderes, Istúriz, sustituyó a Mendizábal por petición de la
reina.

- La revolución de los sargentos de la Granja de 1836

Poco después del gobierno moderado (Istúriz), el pronunciamiento de los sargentos en la
Granja (1836) inclinó el poder del lado progresista. El nuevo gobierno estaba presidido por
José Mª Calatrava, cuya labor principal fue el nuevo texto constitucional de 1837, de
inspiración progresista. Algunas de sus características son:
- Soberanía nacional
- División de poderes
- No prohibición de otras religiones

Regencia de Espartero (1841 - 1843)

Por diferentes motivos políticos, Maria Cristina renunció a la Regencia en 1841.
Por ello, el General Espartero se quedará al cargo de esta. Gobernó durante 2 años y su
fuerte personalidad llegó a rozar la Dictadura militar. De hecho, algunas de sus actuaciones
militares como en zonas del País Vasco, Madrid o Cataluña, le causaron graves problemas.
Debido a su dura política, Espartero provocó que en 1843 se produjera una coalición entre
progresistas y moderados la cual acabó con la Regencia del General, el cual se exilió a
Londres.
A corto plazo los moderados se harían dueños de la situación y se iniciaría así la Década
Moderada. Además, finaliza el periodo de las regencias con la llegada de Isabel II al trono, la
cual había sido nombrada mayor de edad a los 13 años.

2.2 La década moderada (1844 - 1854)

Tras la derrota de Espartero en 1843, la reina nombró jefe de Gobierno a Narváez (moderado).
Se elaboró la Constitución de 1845, una de las más largas de la historia española y de
carácter moderado. Se diferencia de la de 1837 por:
- Sustituye el principio de Soberanía Nacional por el de Soberanía compartida con las Cortes.
- Se afirma la confesionalidad católica del Estado español.
- Se recortan los derechos individuales.
- Supresión de la Milicia Nacional
Durante esta década se estableció el modelo de Estado Liberal, con las siguientes medidas:
- Se llevó a cabo una amplia organización administrativa, educativa y fiscal, esta última de
manos de Alejandro Mon.
- Se aprobó el Código Penal de 1851.
- Se creó la Guardia Civil, de manos del duque de Ahumada (1844).
- Volvieron las relaciones Iglesia/Estado con la firma del Concordato de 1851
- Se llevaron a cabo obras públicas para dar al país una infraestructura que hiciera posible el
progreso industrial.

2.3 El bienio progresista (1854 - 1856)

En los últimos años de la década moderada, con el gobierno de Bravo Murillo se estableció
un régimen ultraconservador que provocó el rechazo general, incluso entre moderados.
En 1854, el general O’Donnell (moderado) dirigió un pronunciamiento en Vicálvaro, tras el
cual se redactó el Manifiesto de Manzanares para reformar la ley electoral o reimplantar la
Milicia Nacional.
Debido a la radicalización revolucionaria, la reina recurrió a Espartero para que formase un
nuevo gobierno con O’Donell.
En este periodo hubo una gran labor legislativa que no llegó a culminar:
-Ley de desamortización de Pascual Madoz (1855)
-Constitución non nata de 1855
-Ley de sociedades bancarias y créditos
-Ley de Ferrocarriles (1855)
A finales de 1855 hubo una crisis económica que provocó una huelga general en Barcelona.
Esto hizo que la reina destituyera a Espartero y nombró a O’Donnell jefe de Gobierno.

3. Conclusión
A modo de conclusión decir que en los últimos años de este periodo, tuvo lugar una sucesión
de gobiernos de distinto carácter político, denominada el Epílogo Isabelino.
De 1856 a 1858 se dio el Bienio Moderado dirigido primero por O’Donnell y después por
Narváez, cuyo objetivo fue la pacificación del país.
En 1856 O’Donnell regresó al poder con la Unión Liberal (partido posicionado entre
moderados y progresistas) y fue caracterizado por una política exterior de prestigio (hubo
intervenciones en México, Indochina y África). Permaneció hasta 1863.
De 1863 a 1868 hubo una sucesión de gobiernos poco duraderos de progresistas y
moderados. Ante esta situación, en 1866 una serie de progresistas firmaron el Pacto de
Ostende para destronar a Isabel II.