Está en la página 1de 44

2

Integración de niños con déficit


intelectual en la escuela

Autor: Prof. Luis Cristian Páez

3
4
Índice

Introducción………………………………………….……… 7

Grandes afecciones según el DSM-IV……………………. 8

La autoestima ………………………………………………... 10

El alumno deficiente…….....………….……….…….............. 12

Habilidades adaptativas………………………….…………… 14

Inserción de las personas discapacitadas en la sociedad.......... 19

Teorías……………………...…………………………...….… 21

Deficiencias psicológicas adquiridas……….……………….. 23

Síndrome de discapacidad intelectual……………………...… 25

Características de alumnos con discapacidad intelectual..…… 31

Indicios que ayudan a detectar los niños con disc.intelectual... 32

Bibliografía…………………………………………………... 42

Actividades Evaluativas……………………………………… 44

5
6
Introducción

La educación inclusiva se basa en el derecho de todos


los niños a recibir una educación de calidad que satisfaga sus
necesidades básicas de aprendizaje y enriquezca sus vidas.
Al prestar especial atención a los grupos marginados y
vulnerables, la educación integradora y de calidad procura
desarrollar todo el potencial de cada persona. Su objetivo
final es terminar con todas las modalidades de discriminación
y fomentar la cohesión social. Lo s términos “vulnerable” y
“marginado” son conceptos que abarcan a personas o grupos
muy distintos pero con el común denominador que no
pueden ejercer su derecho a la educación. Uno de esos grupos
son los niños con discapacidad intelectual (Organización de
las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la
Cultura, UNESCO, 2011).
La discapacidad intelectual o discapacidad cognitiva
consiste en una adquisición lenta e incompleta de las
habilidades cognitivas durante el desarrollo humano, que
conduce finalmente a limitaciones sustanciales en el
desarrollo corriente. Se caracteriza por un funcionamiento
intelectual significativamente inferior a la media, que tiene
lugar junto a limitaciones asociadas en dos o más de las
siguientes áreas de habilidades adaptativas: comunicación,
cuidado personal, vida en el hogar, habilidades sociales,
utilización de la comunidad, autogobierno, salud y seguridad,
habilidades académicas funcionales, ocio y trabajo.

7
Grados de afectación según el DSM-IV

Discapacidad cognitiva leve CI 50-55 a 70.


Se los denomina los de la “etapa educable” son
alrededor del 85 % de las personas afectadas por el trastorno.
Suelen desarrollar habilidades sociales y de comunicación
durante los años preescolares (0-5 años de edad), tienen
insuficiencias mínimas en las áreas sensorio motoras y con
frecuencia no son distinguibles de otros niños sin
discapacidad cognitiva hasta edades posteriores.
Acostumbran adquirir habilidades sociales y laborales
adecuadas para una autonomía mínima, pero pueden necesitar
supervisión, orientación y asistencia, especialmente en
situaciones de estrés social o económico desusado. Contando
con apoyos adecuados, los sujetos con discapacidad cognitiva
leve acostumbran a vivir satisfactoriamente en la comunidad,
sea independientemente, sea en establecimientos
supervisados.
Discapacidad cognitiva moderada CI 35-40 a 50-55.
La discapacidad cognitiva moderada equivale
aproximadamente a la categoría pedagógica de «adiestrable».
Este grupo constituye alrededor del 10 % de toda la
población con discapacidad cognitiva. Adquieren habilidades
de comunicación durante los primeros años de la niñez.
Pueden aprovecharse de una formación laboral y, con
supervisión moderada, atender a su propio cuidado personal.
También pueden beneficiarse de adiestramiento en
habilidades sociales y laborales, pero es improbable que
progresen más allá de un segundo nivel en materias escolares.
Pueden aprender a trasladarse independientemente por
lugares que les son familiares. En su mayoría son capaces de
realizar trabajos no cualificados o semicualificados, siempre
con supervisión, en talleres protegidos o en el mercado

8
general del trabajo. Se adaptan bien a la vida en comunidad,
usualmente en instituciones con supervisión.
Discapacidad cognitiva grave CI 20-25 a 35-40.
Incluye el 3-4 % de los individuos con discapacidad
cognitiva. Durante los primeros años de la niñez adquieren un
lenguaje comunicativo escaso o nulo. Durante la edad escolar
pueden aprender a hablar y pueden ser adiestrados en
habilidades elementales de cuidado personal. Se benefician
sólo limitadamente de la enseñanza de materias pre
académicas como la familiaridad con el alfabeto y el cálculo
simple, pero pueden dominar ciertas habilidades como el
aprendizaje de la lectura global de algunas palabras
imprescindibles para la “supervivencia”. Los adultos pueden
ser capaces de realizar tareas simples estrechamente
supervisadas en instituciones. En su mayoría se adaptan bien
a la vida en la comunidad a no ser que sufran alguna
discapacidad asociada que requiera cuidados especializados o
cualquier otro tipo de asistencia.

Discapacidad cognitiva profunda CI 20-25.


Incluye aproximadamente en el 1 % y el 2 % de las
personas con discapacidad cognitiva. La mayoría de los
individuos con este diagnóstico presentan una enfermedad
neurológica identificada que explica su discapacidad
cognitiva. Durante los primeros años desarrollan
considerables alteraciones del funcionamiento sensorio
motor. Puede predecirse un desarrollo óptimo en un ambiente
altamente estructurado con ayudas y supervisión constantes,
así como con una relación individualizada con el educador.
El desarrollo motor y las habilidades para la comunicación y
el cuidado personal pueden mejorar si se les somete a un
adiestramiento adecuado. Algunos de ellos llegan a realizar
tareas simples en instituciones protegidas y estrechamente
supervisados.

9
Discapacidad cognitiva de gravedad no especificada.
Se utiliza cuando existe claridad sobre la discapacidad,
pero no es posible verificar mediante los test.
Dependiendo del nivel de gravedad del discapacidad
cognitiva, el sujeto se puede «educar» y capacitar para que
aprenda a vivir en la sociedad; puede dominar ciertas
habilidades de lectura global (señalización de tránsito, por
ejemplo: "STOP"), puede trasladarse a lugares desconocidos
o familiares, puede aprender un oficio y trabajar en él,
siempre y cuando la sociedad le dé la oportunidad de hacerlo.
La discapacidad cognitiva, en la escala de medición de
la inteligencia está por debajo de 70 de CI (cociente
intelectual) Es la contraparte al otro extremo de la
inteligencia, que es la superdotación, esta se encuentra por
arriba de 130 de CI.

La autoestima

La autoestima es, fundamentalmente, estar a gusto con


uno mismo, saberse importante y sentirse especial, para ti y
para el resto. El alumno con un nivel adecuado de autoestima
se afirma orgulloso de su trabajo, de lo que piensa y siente; y
está contento. Tener autoestima significa, también, ser
responsable y aceptar las dificultades sin enfadarse cuando no
salen las cosas como uno quiere, saber reconocer los límites
propios y no sentirse peor por ellos. La autoestima es, en
general, tener entusiasmo por las cosas, mantener buenas
relaciones con el resto y saber expresar las emociones. Tener
claro que todos te siguen aceptando si algo no te sale bien.
Nos gusta que nos elogien. El profesor, en este aspecto,
debe tener especial cuidado con el alumno con baja
autoestima, animarlo a hacer las tareas, alabándolo cuando
están bien hechas y motivándolo en el caso contrario. La
autoestima del alumno influye notablemente en su conducta;

10
pues si crees que eres un buen chico te portas bien, si estas
convencido de que eres malo, buscas problemas.
Cada persona es especial y distinta. Aunque nos
parezcamos al resto en ciertos aspectos, cada uno destaca por
algo que sabe hacer especialmente bien: practicar algún
deporte, tener una gracia especial para algo, tener aficiones,
saber mucho de alguna materia. Debemos ayudar al alumno
con baja autoestima a encontrar ese algo que lo hace especial,
a potenciarlo.

Programa
Las pautas de interacción para atender a los alumnos de
baja autoestima, en general, van en función de una serie de
características:

Personales: escaso autocontrol de sus


estímulos. Poseer una imagen negativa de sí mismo.
Sentimientos de incapacidad respecto a otras áreas.

Contexto socio-familiar: experiencias de


marginalidad respecto a su entorno. Falta de conexión
entre las exigencias de la familia y la sociedad y las
respuestas del niño. Múltiples variables
distorsionadoras de expectativas.

Contexto escolar: fracaso escolar. Feed-back


educativo de aspecto negativo frecuentemente.
Etiquetaje: la respuesta del niño está en consonancia
con lo que el profesor y el resto de los alumnos esperan,
la profecía se cumple.

Estas pautas implican una serie de necesidades:

11
Personales: desarrollar una serie de
estrategias de autocontrol. Alcanzar metas socio-
personales factibles, obtener ciertos éxitos. Crear una
imagen positiva.

Contexto socio-familiar: llevar a cabo


estrategias y actividades de integración social. Orientar
a las familias para adecuar las metas que deben imponer
a sus hijos con la realidad que estos pueden alcanzar.

Contexto escolar: desarrollar actividades


escolares adecuadas al nivel de competencia y al estilo
de aprendizaje del niño. Variar sus atribuciones:
verbalizar con frases positivas sus conductas adecuadas.
Para finalizar, es importante señalar que estas pautas
determinan:

Una respuesta educativa: en el contorno del


colegio, la familia y la escuela; y en consonancia.

A nivel del centro: medidas de atención a la


diversidad. Plan de acción tutorial adecuado.
Colaboración con las familias.

A nivel de aula/individual: programas de


acción tutorial. Adaptaciones del currículo.
Colaboraciones con las familias.

El alumno deficiente
En cuanto al alumno con niveles mentales deficientes
debemos hacer unas consideraciones especiales. Tarde o
temprano el chico deficiente se da cuenta de que sus límites

12
son diferentes, y las metas que puede alcanzar están por
debajo de las del resto de la gente. Llegados a este momento
la autoestima del alumno puede, y suele, reducirse. El chico
se siente inútil, no podrá desarrollar una serie de funciones o
actividades comunes para el resto de la gente, o le costarán
más; entonces, es consciente de ello y se hunde, piensa que
no sirve para nada. Ante estos casos el entorno de la familia y
la escuela debe actuar con rapidez y profesionalidad. Las
terapias y charlas que informan a los niños acerca de sus
capacidades y el alcance de estas resultan muy interesantes y
pueden ser realmente fructíferas. Debemos hacer saber al
alumno que con tiempo, ayuda y constancia, podrá llegar a
realizar actividades cotidianas sin mayor esfuerzo (resulta
primordial señalar que el grado de deficiencia debe tenerse
muy en cuenta en este aspecto para conocer las posibilidades
y limitaciones). No obstante, la práctica puede resultar mucho
más interesante y beneficiosa. Debemos proponer actividades
que el chico pueda realizar, así como otras que le cuesten más
para ir avanzando y trabajar la superación, teniendo especial
delicadeza con la posible frustración. Mediante trabajos del
día a día el alumno debe ser consciente de que puede realizar
funciones que le permiten llevar una vida más o menos
normal; teniendo siempre presente la cuestión de los distintos
grados de deficiencia. No obstante, indepen-dientemente de
cada caso, se puede llevar a cabo una labor de crecimiento de
la autoestima favorable.
Por otra parte, es significativo que se potencie y anime
al alumno a realizar ciertas actividades en las que podría
destacar; nos gusta que nuestros padres y profesores se
interesen por nuestras aficiones, intereses, proyectos,
ilusiones… Alabando cuando las cosas salen bien, y
empleando adecuada y delicadamente las malas críticas,
siempre de la mano de la motivación y de la vista de una
mejora futura, para no retroceder en esta labor.

13
Todos somos iguales, todos somos distintos. Cada
persona es importante en su esencia, independientemente de
su estado físico o psíquico. Resulta esencial que nos
aceptemos y queramos para poder llevar a cabo una vida
óptima y feliz. En esta labor, muchas veces se necesita ayuda
del exterior, y es ahí donde los padres y profesores entran en
juego para facilitar la llegada a la cumbre de la autoestima:
me siento bien, estoy contento.

Habilidades adaptativas

Área de comunicación
Definimos la comunicación como la capacidad de
expresar y comprender una información a través del lenguaje
verbal oral, escrito, símbolos gráficos, lenguaje de signos,
palabra codificada, expresión facial y corporal, sonidos…,
para establecer relación con uno mismo, con el medio y con
los demás. Es un código más o menos estructurado, supone
además la representación mental de todo lo real y también
una herramienta que permite la regulación del
comportamiento del otro.
Es un área esencial para el ser humano, ya que sirve
para expresarse e interactuar con los demás. En el caso de las
personas con deficiencia mental, puede haber dificultades
para la comunicación ya que además de la deficiencia mental
puede haber un problema físico que impida una
comunicación normal. Estas dificultades dependen del grado
de discapacidad, del tipo de enfermedad y de la autoestima de
la persona.
Su desarrollo comunicativo suele ser más lento, pero si
es posible conseguirlo, es necesaria la ayuda de las personas
que lo rodean y por supuesto es fundamental estimular a la

14
persona desde pequeña para practicar y conseguir los
resultados.

Área de habilidades sociales


Las habilidades sociales están relacionadas con
intercambios sociales con otras personas, incluyendo iniciar,
mantener y finalizar una interacción con otros; comprender y
responder a los indicios situacionales pertinentes; reconocer
sentimientos, proporcionar realimentación positiva y
negativa; regular la propia conducta, ser consciente de los
iguales y de la aceptación de éstos, calibrar la cantidad y el
tipo de interacción a mantener con otros, ayudar a otros,
mantener amistades y amor, responder a las demandas de los
demás, elegir, compartir, entender el significado de la
honestidad y de la imparcialidad, controlar los impulsos… en
resumen mostrar un comportamiento social adecuado.
La persona con deficiencia mental puede tener
problemas para adaptarse socialmente, ya que puede
encontrar diferencias con los demás o en algunos casos puede
verse rechazado. Si la comunicación se ha desarrollado
correctamente será mucho más fácil lograr una buena
adaptación social. Existen diferentes aspectos en las
habilidades sociales:
Interacción social: Como se ha explicado en
el área de comunicación, la interacción es necesaria
para ellos y puede ser totalmente normal. Hay que
desarrollar una relación de respeto hacia los demás. Es
importante que el deficiente mental se desenvuelva en
un medio en el que su minusvalía no sea una causa
aislante sino una diferencia.
Escolarización: Deberá realizarse de
acuerdo a dos premisas fundamentales: por una parte, el
modelo de currículo aplicable a estos sujetos y el tipo
de adaptaciones curriculares que precisan para obtener

15
una respuesta idónea a sus necesidades educativas
concretas: por otra parte, la tendencia a ofrecer una
escolarización lo más integradora posible; se trata de
educar siempre en los ambiente menos restrictivos. Esto
lleva consigo tanto la adaptación física como de
materiales y metodologías.
Pertenencia a un grupo o institución: Para
los deficientes mentales es muy importante este punto,
ya que al pertenecer a un grupo, o realizar algún deporte
o actividades de ocio con más personas tienen la
oportunidad de desarrollar su autoestima y sus
habilidades sociales. Pero estas actividades deben ser
reguladas por ellos mismos para no convertirse en una
obligación y además así aprenderán a organizar su
tiempo. Es una educación social, afectiva e intelectual.
Es fundamental que el deficiente mental se desenvuelva
en un medio socialmente abierto para autorrealizarse
por completo, ya que si sólo se relaciona con la familia
y los educadores se impide dicha realización.
Amistad: A excepción del autismo,
normalmente hacen amigos con facilidad. Lo esencial
es que el resto de personas los acepten y ellos sientan
que están integrados en el grupo como cualquiera.
Amor y sexualidad: Es un tema muy
delicado e importante respecto a los deficientes
mentales, ya que ellos se enamoran y necesitan amar y
ser amados, además también tienen necesidades
sexuales. Es importante que reciban una educación
sexual como cualquier persona ya que no son asexuales.
No hay que tratarlos como si fueran niños ya que
normalmente lo que existe es una discapacidad
cognitiva. Normalmente para ellos es difícil encontrar
una pareja, ya que pocas personas los aceptan sin
prejuicios. En el caso del síndrome de Down se acentúa

16
más el sufrimiento por el amor, ya que su deficiencia no
es tan diferencial como en otras enfermedades y es muy
difícil para ellos aceptar el no ser tratados de igual
modo.
Las personas con discapacidad cognitiva requieren de
nuestro apoyo para la mejora, posible y deseada, de su
funcionamiento en comunidad y para el avance de su calidad
de vida, porque son personas con derechos, y por tanto deben
gozar de ellos. Por eso es importante luchar contra las
barreras sociales con las que se encuentran día a día.
Muchas veces los deficientes mentales se caracterizan
por su ingenuidad, lo cual puede repercutir negativamente en
lo psicosocial, ya que los demás se suelen aprovechar de
ellos. Esto ocurre frecuentemente en casos de síndrome de
Asperger.
Área de actividades domésticas: enseñanza del
hogar
Las personas con deficiencias se encuentran encerradas
en una burbuja de la que mucha gente no quiere que salgan
por miedo a que no se puedan desenvolver de forma
adecuada con el resto de la sociedad. Este miedo lo único que
hace es que cada vez se sientan menos útiles y su autoestima
se encuentre en niveles cada vez más inferiores.
La manera que tienen de sentirse personas realizadas en
la sociedad es la de realizar una vida en sociedad como
cualquier otra persona, cómo realizar las tareas domésticas,
buscar empleo, salir a la calle y desenvolverse
socialmente…son las llamadas habilidades sociales. Estas
habilidades sociales se estudian de forma sistemática a partir
de los años 60, las habilidades sociales son definidas como
conductas que se aprenden, que están orientadas a fines que
pueden ser: materiales, sociales o autorrefuerzos; que deben
respetar las normas sociales en cada situación, con distintos
componentes y con distintos elementos.

17
Las habilidades sociales dependen de las personas
implicadas y de los factores de situación. Las personas con
discapacidad tienen déficit en habilidades sociales que se
pueden referir al retraimiento social o la sumisión, y a la
agresión social.
Los pasos en el entrenamiento en habilidades sociales
son:
Instrucción: dar información y mostrar el
comportamiento adecuado.

Práctica: reproduce la conducta observada


varias veces.

Perfeccionamiento: se modela y perfecciona


la conducta.

Mantenimiento y generalización: conductas


entrenadas se reproducen en otras situaciones.

Para potenciar la adquisición de habilidades sociales


deben de conocer las capacidades biológicas, mentales y
sociales de cada individuo; para ello se requiere una
evaluación inicial, se definen los objetivos a conseguir y se
establecen los pasos que se van a llevar a cabo así como la
retroalimentación, la generalización y el mantenimiento de
los cambios conseguidos. Teniendo en cuenta todas estas
nociones podemos idear un programa de actividades que
pueda adaptarse a cada persona y así ayudar a su desarrollo
intelectual. Actividades tan simples como realizar la comida,
planchar, limpiar la casa, ducharse…son tareas que a priori
son dificultosas para estas personas, pero que tras un buen
sistema de aprendizaje por medio de monitores en escuelas de
educación especial, o con el gran apoyo de las familias y
voluntarios, estas tareas y muchas otras se convierten en un

18
satisfactorio juego que los realiza como personas totalmente
normales dentro de la sociedad.

Inserción de las personas discapacitadas en la


sociedad

Existen una serie de programas para la reinserción de


las personas discapacitadas. Todos tenemos derecho a poder
trabajar en cualquier lugar y a que no suframos ninguna
discriminación por parte de nadie, porque todos somos
iguales. A continuación vamos a explicar cómo se gestiona el
trabajo para estas personas:

Gestión de empleo
Existen varias fundaciones, por ejemplo la ONCE,
CONFE, que fomentan el autoempleo como vía de
reinserción laboral de las personas discapacitadas, cuya
finalidad es: que estas personas se realicen como personas y
que se sepan defender en su propio empleo. Para estas
personas significa la oportunidad de sentirse útiles, crecer así
como ganar algo de dinero para sentirse con independencia
económica y poseer un lugar en la sociedad como todo el
mundo.
Los discapacitados actualmente trabajan en varios
sitios, como por ejemplo en oficinas, de jardineros, haciendo
talleres... etc. Cabe destacar que hay más de 126 personas
discapacitadas trabajando en la empresa llamada McDonald.
En varios lugares lo que se ha hecho es repartir esas 126
personas en varios grupos por ejemplo: un 34% se ha
destinado que lo ocupen personas con la enfermedad de
síndrome de Down, un 58% con enfermedades mentales, 8%
son hipoacústicos…etc. Actualmente existen varios
programas para ayudar a estas personas como son la ONCE,

19
la Obra Social de la Caixa, Caja Madrid…etc. Estos
programas son los que existen en España y son los que
principalmente ayudan a estos jóvenes

Integración de los jóvenes


Para las empresas que acogen estos programas de
reinserción esto es muy importante, ya que ayudan a que
estas personas se desarrollen e incluso se motiven. Con estos
programas por otro lado fomentan que los empleados se
sientan orgullosos Con estos programas lo que se pretende es
que la sociedad no desconozca nada sobre estas
discapacidades, por lo tanto la sociedad dejara de ser
ignorante en este ámbito. Sin embargo las posibilidades de
conseguir un empleo para estas personas son muy reducidas
en todos los países. Para que una persona discapacitada sea
reinsertada de forma laboral deberá sortear una serie de
obstáculos, como por ejemplo si las personas no conocen
nada sobre estas enfermedades eso también hará que sea
también un gran inconveniente. Cada vez que una persona
ingresa en una empresa y demuestra que puede realizar los
trabajos que se le manden, le abrirá camino a otras muchas
personas. También sirve para que las compañías se
conciencien y contraten a estas personas o elaboren
programas para estas personas

Objetivos para llevar a cabo con estas personas


Los objetivos de las empresas que contratan a estas
personas pueden ser:
Favorecer el desarrollo intelectual, físico y
psíquico de estas personas
Ofrecerles una oportunidad para
experimentar el trabajo con otras personas asimismo
integrarse.

20
Crear conciencia de que todas las personas
pueden realizar un trabajo y que puede reinsertarse el
mundo laboral como todas las personas que no tienen
las dificultades que tienen estos.
Otro de los objetivos concienciarse de que
estos programas no solo ayudan a las personas a
conseguir su independencia económica sino que
también ayudan a crecer y a encontrar el apoyo de otros
ámbitos que no sean solo los de la vida familiar
Otro objetivo importantes es que todas las
personas con discapacidad tengan los mismos derechos,
asimismo de iguales beneficios que tienen los demás
empleados
El recurso más importante de estos programas es el ser
humano. Son programas que ayudan al aprendizaje tanto de
la empresa que lleva a cabo estos programas, como también
para sus empleados, instituciones, y los propios jóvenes que
tienen dicha capacidad y lo más importante es que ayudan a
que estas personas se sientan útiles y a que sean felices.

Teorías

Existen teorías y teoremas de tipos psicológicos, como


la que ha creado el psicólogo Carl G. Jung, su teoría se basa
en la relación de los individuos con el mundo externo:
extroversión e introversión.
La extroversión tiene como característica la relación del
individuo con respecto al medio ambiente, gozando así de la
compañía de otras personas. La introversión, en cambio, evita
a las personas y prefiere realizar las actividades en soledad.
Esta teoría ha sido estudiada por otro psicólogo llamado
Eysenck, en su estudio con individuos normales y neuróticos
ha sido verificada la teoría de Jung. Pero otro psicólogo
actual como Guilford, relata que no todas las personas caen

21
en una u otra categoría, puesto que en algunos casos la
conducta de la persona será introvertida y en otros
extrovertida, dependiendo de la situación y las personas que
se encuentren en el.
Hay otros Psicólogos como son Bandura y Walters que
no creen que la conducta quede determinada por conceptos
psicoanalíticos, sino que apoyan la teoría de que una
personalidad se crea dependiendo de los conceptos sociales y
cognitivos. Hay una creencia de que la teoría de la
personalidad sólo es posible verla cuando se ha tratado
enteramente en humanos, en lugar de animales. También
dicen estos dos psicólogos que el esfuerzo no es la
característica básica para el desarrollo de la personalidad.
Hay otros enfoques más recientes basados en el enfoque
hacia el trabajo y han sido creados por otros dos psicólogos,
Dollard y Miller, que son usados para explicar el desarrollo y
funcionamiento de la personalidad. En el enfoque hacia el
trabajo hay cuatro características básicas a analizar: impulso,
respuesta, indicio y esfuerzo, donde el esfuerzo sería la
característica básica. En este estudio se sustenta que no hay
dos personas totalmente iguales, porque cada una tiene
valores distintos y dan una respuesta distinta a sus
condiciones vitales. Esta teoría ha sido ha sido basada
enteramente en animales.
Existen otras teorías de la personalidad que
principalmente destacan el YO como concepto central.
Psicólogos como Hall y Lindzey dicen que el término “yo”
tiene dos significados: en primer lugar se define como un
sistema de actitudes y sentimientos que se tiene sobre sí
mismo y por otro lado, un grupo de procesos psicológicos
que rigen la conducta.
Otros como Rogers y Maslow sostienen teorías
humanísticas sobre la personalidad, es decir, la tendencia a la

22
superación humana desarrollando el potencial máximo de la
personalidad.

Deficiencias psicológicas adquiridas

Hay un número considerable de apariciones de


deficiencias mentales en personas (incluida la infancia
principalmente), que no habían nacido con ellas. Esto en la
actualidad se debe al maltrato sufrido por los padres,
maestros o cuidadores.
Al existir una vulnerabilidad mayor en la infancia, esto
afecta a la mente o a su parte psicológica, abstrayéndose de la
sociedad y encerrándose en sí mismo, cuando se trata solo de
características psicológicas. En cambio hay otros casos en los
que no sólo ataca esto a estas capacidades sino que también
daña sus capacidades físicas dejando al infante para toda su
vida con unas secuelas que lo hacen “deficiente” en el ámbito
completo de la palabra.
También pueden aparecer deficiencias en la persona,
tras sufrir un accidente debido a que la colisión, golpe, etc. le
ha causado daños irreparables, esto sucede en la gran mayoría
de los casos. En algunas ocasiones, hay niños que tienen que
cuidar a otros con deficiencias psicológicas, esto crea una
dependencia del niño-cuidador y una vulnerabilidad mucho
mayor de los demás niños en condiciones normales, no puede
tratarse de “deficiencia” en sí, pero hace una modificación de
la personalidad en función de la persona que está cuidando o
conviviendo con ella.

Causas conocidas
La discapacidad mental puede tener muchas causas, y
esta puede ser desde el nacimiento o posterior, puede haber
causas genéticas, metabólicas, congénita o ambientales

23
(accidente, enfermedad que provoque daño, malnutrición,
efectos de drogas u otros tóxicos, problemas en el desarrollo
o educación.)
Factores ambientales
Infecciones: Hasta la aparición de las vacunas era
frecuente desarrollar encefalitis que podía afectar de forma
severa las capacidades cognitivas (la rubeola, sarampión,
meningitis por meningococo, polio, tosferina... Eran hasta
hace poco enfermedades infecciosas que podían llegar a
alterar las capacidades de un individuo. Aún hoy una de las
principales causas de discapacidad intelectual en el tercer
mundo es la malaria.
Daños cerebrales el cerebro ante impactos: puede verse
dañado y según el lugar del daño puede provocar
discapacidad cognitiva, existen muchos motivos por los que
el cerebro puede tener un daño cerebral, entre otros:
accidentes de tráfico, daños provocados en el parto (falta de
oxigeno, fórceps, etc.). Infartos cerebrales, derrame cerebral,
etc.
Tóxicos: la exposición del feto a drogas aumenta las
posibilidades de problemas posteriores, es conocido el efecto
del alcohol y el efecto que muchas otras drogas pueden tener
en el desarrollo posterior. Igualmente en personas sanas
existen muchas drogas que pueden provocar lesiones
cerebrales y discapacidad cognitiva, el alcoholismo por
ejemplo puede llevar a distintos tipos de síndromes, por
ejemplo el Síndrome de Korsakov).
Genéticos: gracias a la medicina y a las novedosas
pruebas genéticas prácticamente cada día se conocen nuevos
genes implicados en la discapacidad intelectual, estas pruebas
ya en el 2011 están al alcance de todos.

24
Síndromes de discapacidad intelectual

Síndrome de Asperger
Es un trastorno del desarrollo cerebral muy frecuente
(de 3 a 7 por cada 1.000 niños de 7 a 16 años), que afecta más
a los varones que a las niñas; fue reconocido como tal en
1994, por lo que la población general e incluso muchos
profesionales lo desconocen. La persona que lo padece tiene
un aspecto externo normal, suele ser inteligente y no tiene
retraso en la adquisición del habla, pero tiene problemas para
relacionarse con los demás y en ocasiones presenta
comportamientos inadecuados. Los padres suelen percibir
esta diferencia entre los 2 y los 7 años, buscando una ayuda
que en muchas ocasiones no es la apropiada. Como
características (aunque cada individuo presenta distintos
aspectos de la condición) se cuentan: tics nerviosos, babeo,
miedo o angustia ante estimulaciones sensoriales (tacto y
ruido principalmente), pobre coordinación motriz y destreza,
interés compulsivo y constante en un tema particular, rituales
de conducta cotidianos, comprensión literal de las palabras,
ingenuidad (a veces excesiva), etc.

Síndrome Epileptico en niñas con retraso mental


Este síndrome es de reciente descubrimiento (2008), por
ello está infradiagnosticado y no es ampliamente conocido
por la comunidad médica, se trata de un tipo de epilepsia
genética provocado por una mutación en el Gen PCDH19, los
varones pueden ser portadores, pero no sufren la enfermedad,
sin embargo las niñas muestran numerosas crisis epilepticas,
el 70% de las niñas sufre algún tipo de retraso mental y
problemas psicológicos, psiquiatricos o del desarrollo, un
30% son completamente normales. La especial diferenciación
de este tipo de epilepsia con respecto a otras es que
infecciones y fiebre pueden disparar la posibilidad de que

25
ocurran las crisis. Las crisis habitualmente se dan en clusters
(crisis epilepticas consecutivas durante uno o varios días) y
requiere de hospitalización. La confirmación de este tipo de
epilepsia solo se puede dar cuando se realizar un análisis
genético. Este síndrome se le conoce ahora como EFMR
abreviatura del inglés (Epilepsy Female with Mental
Retardation).

Síndrome de Rett
Se trata de un trastorno neurológico, que se describió al
principio sólo en niñas, en el que el desarrollo temprano es
normal, pero entre los 7 meses y los dos años (6 a 18 meses
de vida) hay una pérdida parcial o completa de capacidades
manuales adquiridas y del habla, retraso en el crecimiento de
la cabeza y la consecuencia es una grave invalidez mental. Su
incidencia es de 1 caso por cada 15000 niñas nacidas vivas;
es un trastorno neurológico progresivo severo. Está ligado al
Cromosoma X; los niños concebidos con esta mutación
finalizan en aborto espontáneo, ya que el Síndrome de Rett se
debe a mutaciones espontáneas no hereditarias. Las primeras
manifestaciones aparecen entre los 6 y los 30 meses de edad
en forma de deficiencia mental severa.El desarrollo de la niña
ha sido normal hasta esta edad, algunas incluso pronuncian
palabras o combinaciones de palabras sencillas. Muchas de
estas niñas andan en la edad que les corresponde mientras
que otras presentan incapacidad para andar. Clínicamente se
caracteriza, entre otras, por hipotonia (extremidades
flexibles), regresión en el desarrollo, crecimiento de la cabeza
más pequeña de lo habitual ( microcefalia ), pérdida de uso
de las manos, que realizan movimientos esteriotipados y
repetitivos. También se pierde la capacidad de interacción
social, presentan dificultades para expresar y comprender el
lenguaje y se producen convulsiones en una gran parte de los
pacientes. El tratamiento tienen que ser multidisciplinar; la

26
fisioterapia y la rehabilitación en su conjunto son
fundamentales. A pesar de que no existe un tratamiento
farmacológico específico, los anticonvulsivos pueden
beneficiar a las niñas para tratar los ataques epilépticos y,
también, para mejorar el estado de alerta en algunas
pacientes.

Síndrome de Dravet
Es la epilepsia mioclonica más severa que existe junto
con el Sindrome de West, cursa con epilepsia incontrolable
con retraso mental de algún tipo la mayoría de las veces, los
estatus epilepticos son frecuentes y las crisis ocurren
especialmente con un aumento de temperatura. Los niños
adolescentes terminan habitualmente con un alto grado de
dependencia. Es una enfermedad genética provocada por una
mutación en un gen, en la mayoría de los casos el SCN1A,
aunque recientemente se han descubierto otros genes
implicados.

Síndrome de Prader-Willi
Es un defecto congénito no hereditario que puede
afectar por igual a cualquier bebé, independientemente de su
sexo, raza o condición de vida. Se caracteriza
fundamentalmente por un apetito insaciable y por problemas
de conducta. Otros síntomas son el escaso tono muscular,
deficiencia mental, desarrollo sexual deficiente, corta
estatura, manos y pies pequeños, problemas visuales,
dentales, trastornos respiratorios, escoliosis y diabetes. La
causa es una incógnita y no hay posibilidad de curación. Hay
que tener mucho cuidado para que esta persona no tenga fácil
acceso a la comida pues tienen auténtica obsesión por comer,
lo que provoca frecuentemente problemas de obesidad.

27
Síndrome de Down
Alteración genética del par 21 que presenta tres
cromosomas (trisomía 21); uno de cada 700 niños nace con
este síndrome, en todos los grupos étnicos, con tendencia a
engendrar varones. Si bien cualquier persona está expuesta a
concebir un hijo Down, las madres de edad avanzada tienen
más posibilidades de tener descendencia con este trastorno.
Ocasiona un retraso mental que varía desde leve a grave y se
asocia además con características faciales y físicas propias:
estatura baja y cabeza pequeña, redondeada; frente inclinada;
orejas de implantación baja; ojos sesgados hacia arriba y
afuera; boca abierta; lengua grande y fisurada; dedos
meñiques cortos y curvados hacia adentro; manos anchas con
surco transversal en la palma. A veces se detectan anomalías
congénitas del corazón, en el tabique que separa los lados
izquierdo y derecho. En algunos casos aparece hacia los 40
años demencia prematura tipo Alzheimer. El cociente
intelectual promedia en 50, pero además de esta menor
capacidad cognitiva y de los mencionados rasgos físicos, no
existen grandes diferencias en su desarrollo y adquisición de
hábitos con el resto de los niños.

Autismo
Consiste en un trastorno profundo del desarrollo que
afecta las capacidades de relación, comunicación y
flexibilidad del comportamiento. Las estadísticas mundiales
señalan que cinco de cada 10 mil nacidos tiene autismo, en su
mayoría varones y generalmente está vinculado a algún nivel
de retardo mental; las conductas propias de este síndrome
comienzan a manifestarse antes de los tres años de vida,
desconociéndose hasta ahora sus causas. Las principales
características que presenta la persona autista son: Dificultad
para usar el lenguaje o ausencia de él; indiferencia al medio
que lo rodea; desconocimiento de su propia identidad; falta

28
de comunicación con otras personas; ausencia de contacto
visual; incapacidad para jugar y simbolizar su realidad con el
juego; movimientos repetitivos y estereotipados; falta de
iniciativa propia.

Síndrome X frágil o Síndrome de Martin y Bell


Es la segunda causa de retraso mental, después del
Síndrome de Down, y la primera causa de retraso mental
hereditario. Su diagnóstico suele ser tardío y a veces erróneo,
ya que a menudo se le confunde con autismo. Se presenta
mayormente en varones; fue descubierto en 1943 y, gracias a
los avances médicos, en 1992 se desarrolló un test basado en
el ADN para diagnosticar tanto a portadores como a
afectados por este síndrome. Las características físicas típicas
que presentan las personas con cromosoma X Frágil son:
Cara alargada, orejas grandes y/o separadas y estrabismo,
aunque estos rasgos no están presentes en todos los casos ni
con la misma intensidad. Las características de conducta más
frecuentes en los varones son: hiperactividad, trastornos de
atención, timidez extrema, evitación de la mirada, lenguaje
repetitivo, estereotipias como aleteos o morderse la mano,
angustia, hipersensibilidad a los estímulos, resistencia a los
cambios, etc. En las mujeres se presenta angustia, timidez y
dificultades en áreas como las matemáticas. Hoy por hoy, no
existe un tratamiento médico curativo, pero sí tratamientos
paliativos de alguno de sus síntomas, de cara a mejorar
determinados problemas físicos y, por otra parte, educativo,
adaptado a las necesidades y habilidades de cada individuo.
Ambos han de comenzar lo antes posible. En nuestro país, el
diagnóstico del Síndrome se realiza a través de tres criterios:
El clínico, el citogenético (relacionado a la conformación
celular) y el genealógico (que se refiere a la presencia de la
enfermedad dentro de la familia).

29
Fenilcetonuria
Es una enfermedad hereditaria causada por un defecto
metabólico que afecta el modo en que el cuerpo procesa las
proteínas. Si bien afecta a todos los grupos étnicos, es extraño
en la raza negra y en los judíos askenazi. Los niños con
fenilcetonuria no pueden procesar una parte de la proteína
llamada fenilalanina hidroxilasa; como consecuencia, se
produce una acumulación de fenilalanina en el flujo
sanguíneo del niño que, si no es diagnosticada antes de los
seis meses de vida, provoca daños cerebrales. Mediante el
uso de una prueba desarrollada en los años 60 - consistente en
una pequeña punción en el talón del bebé para extraer y
analizar una muestra de sangre- se puede detectar
precozmente esta enfermedad. Es posible prevenir el retraso
mental completamente, si comienza a tratarse al bebé con una
dieta especial que tenga poca fenilalanina antes de su tercera
semana de vida.

Alzheimer
Esta enfermedad afecta las partes del cerebro que
controlan el pensamiento, la memoria y el lenguaje. La
memoria se debilita, los hechos cotidianos recientes no son
recordados y en la medida que avanza se afecta la memoria
para los eventos vitales más antiguos; los afectos se
empobrecen, con pérdida del interés para mantener relaciones
sociales con la familia y el entorno, mostrando un progresivo
aislamiento social. El proceso de la enfermedad es gradual y
generalmente la persona se deteriora lentamente; hasta ahora
la causa de la enfermedad es desconocida y no tiene cura.
Este padecimiento lleva el nombre del Doctor Alois
Alzheimer quien en 1906 describió cambios en el tejido del
cerebro de una mujer que había muerto de lo que se creía era
una enfermedad mental inusual. Ahora estos cambios

30
característicos y anormales en el cerebro se reconocen como
la Enfermedad de Alzheimer, la que afecta a todos los grupos
de la sociedad; aunque es más común entre las personas
mayores, los jóvenes también pueden presentarla.

Características generales de un alumno con discapacidad


intelectual

De acuerdo con lo mencionado anteriormente, un


alumno con discapacidad intelectual presenta limitaciones
significativas en su funcionamiento intelectual
(razonamiento, planificación, solución de problemas, rapidez
en el aprendizaje) y en las conductas adaptativas.
Así, un estudiante con discapacidad intelectual puede
manifestar dificultades en las habilidades conceptuales,
sociales y prácticas. Por ejemplo, quizá se le complique
entender algunas instrucciones si no se le dan con un lenguaje
sencillo; puede ser que tenga problemas para expresarse
oralmente; tal vez dificultad para comprender conceptos
abstractos. Algunos alumnos con discapacidad intelectual
pueden adquirir la lectura y escritura y algunos otros no lo
logran o la adquieren de forma muy básica.
Asimismo, si los alumnos con discapacidad intelectual
no reciben los apoyos adecuados se les dificultará ser
responsables de sus pertenencias o deberes; seguir reglas o
tener un comportamiento como el resto de sus iguales en
edad y contexto sociocultural.
En cuanto a su vida diaria, sin las ayudas necesarias,
quizá se les complique prepararse algún alimento, llegar a la
escuela solos, usar los servicios de la comunidad, entre otros.
En este sentido, es importante tomar en cuenta las
siguientes premisas:

31
Con los apoyos apropiados por parte de la escuela y la
familia, la conducta adaptativa a menudo mejora.
Las limitaciones coexisten con las capacidades; es
decir, los alumnos con discapacidad intelectual tienen
limitaciones, pero también talentos como todos los seres
humanos; pueden tener capacidades y competencias en
diferentes áreas, independientemente de su discapacidad
intelectual.
Se eliminan las categorías de discapacidad ligera,
moderada, severa y profunda en favor de un nuevo modelo
que categoriza los apoyos requeridos, no al individuo.
Al momento de evaluar se debe considerar la cultura o
etnia del individuo (incluyendo el lenguaje hablado), la
comunicación no verbal y sus costumbres.
Es necesario desarrollar un perfil de apoyos. Analizar
simplemente las limitaciones de un alumno no es suficiente,
se requiere describir los apoyos para mejorar su
funcionamiento y lograr aprendizajes significativos.

Indicios que ayudan a las familias o a los maestros a


detectar a un niño con discapacidad intelectual

Los alumnos que presentan discapacidad intelectual


suelen tener limitaciones en cuanto a la calidad y cantidad de
sus aprendizajes; es decir, presentarán un ritmo más lento
para procesar la información y, por tanto, requerirán de
apoyos específicos para lograrlo.
Es frecuente observar en las aulas que un alumno con
discapacidad intelectual tiene dificultades en las habilidades
del pensamiento como la memoria, la percepción y la
atención. En este sentido podemos detectar algunas pautas
como las siguientes:

32
No capta bien todos los sonidos, procesa mal la
información auditiva y, por tanto, se le dificulta responder a
las órdenes que se le dan.
Tiene dificultades para seguir las instrucciones dadas al
grupo (el alumno hace los movimientos y cambios de
situación que se han ordenado al grupo, pero su conducta es
más el resultado de la observación e imitación, que de una
auténtica comprensión e interiorización de lo propuesto por el
profesor).
Tiene poca memoria auditiva secuencial, lo que le
impide grabar y retener varias órdenes seguidas, es preciso,
por tanto, darlas de una en una y asegurarse de que han sido
captadas.
Tiene dificultades para el lenguaje expresivo y para dar
respuestas verbales; da mejor las respuestas motoras, lo cual
debe ser tomado en cuenta por el maestro para no sentirse
engañado creyendo que el alumno no entiende la orden si lo
que espera es sólo una respuesta verbal.
Presenta ciertos problemas de motricidad gruesa
(equilibrio y tono) y fina (uso del lápiz y las tijeras).
Algunos alumnos, sobre todos aquellos que presentan
Síndrome de Down, no aceptan cambios rápidos o bruscos de
tareas.
La concentración dura poco tiempo; el problema no es
siempre de pérdida de concentración sino de cansancio
(recordemos que para un alumno con discapacidad intelectual
aprender implica más esfuerzo).
En ocasiones juega solo, quizá porque no puede seguir
demasiados estímulos ni con tanta rapidez como los demás
niños o porque los otros se cansan de animarlo a participar y
de seguir su ritmo.
Presenta dificultades en los procesos de activación,
conceptualización y generalización. Lo que aprende en un

33
determinado contexto no se puede dar por supuesto que lo
realizará en otro diferente.
Se le dificulta comprender las instrucciones, planificar
las estrategias, resolver problemas y atender diversas
variables a la vez.
Presenta dificultad para incorporar información nueva
acerca del objeto de conocimiento, sobre todo si es muy
abstracta y carece de sentido para el alumno, de ejemplos o
material concreto para que pueda comprender.
Este listado no supone que un alumno en concreto
presente todo este conjunto de características, mucho menos
que todos los alumnos presenten el mismo grado de
dificultad, pero sirve de punto de partida para que el maestro
pueda detectar posible discapacidad intelectual en el alumno.
Tomando en consideración las limitaciones coexisten
con las capacidades de las personas, es necesario señalar
algunas cualidades que también es posible observar en
algunos alumnos con discapacidad intelectual:
Buena comprensión lingüística, en términos relativos,
siempre que se le hable claro y con frases cortas.
Suelen disponer de suficiente vocabulario, aunque ya se
mencionó que presentan problemas lingüísticos.
Una personalidad de “tener gusto en dar gusto”; no
rechaza, en principio, el trabajo en general (aunque
dependerá mucho de la percepción emocional que el
interesado experimente en relación con su maestro o
maestra).
En general, lo que ha aprendido bien suele retenerlo,
aunque es necesario reforzar y consolidar el aprendizaje.
¿Cómo se realiza el diagnóstico?
El proceso de diagnóstico para determinar si un alumno
presenta discapacidad intelectual o no debe estar a cargo de
un grupo de profesionistas especializados, quienes aplicarán
diferentes instrumentos para conocer tanto el funcionamiento

34
intelectual como la conducta adaptativa de la persona.
Generalmente, este diagnóstico está a cargo de los psicólogos
que son quienes tienen la capacitación y autorización para
aplicar las pruebas estandarizadas que se requieren.
A los maestros y a la comunidad educativa en su
conjunto no les compete hacer un diagnóstico de
discapacidad intelectual, pero sí ofrecer los apoyos
pedagógicos pertinentes para que el alumno aprenda y
participe en todas las actividades escolares, lo que llevará a
mejorar su funcionamiento en los diferentes contextos
comunitarios en donde se desenvuelve.
¿De qué manera puede participar el maestro de grupo
en la Evaluación Psicopedagógica de un alumno con
discapacidad intelectual?
Durante la Evaluación Psicopedagógica el maestro
puede aportar información muy valiosa en relación a tres
aspectos: 1) estilo de aprendizaje, 2) nivel de competencia
curricular y 3) contexto escolar y áulico del alumno. Para ello
es necesario que observe detenidamente a su alumno y
registre puntualmente lo percibido. Igualmente, es
imprescindible que una vez realizado el proceso valorativo
del alumno, el maestro participe en la elaboración del
informe de la Evaluación Psicopedagógica y en la toma de
decisiones.

Algunas ideas
• En relación con el estilo de aprendizaje,
entre otras preguntas, el maestro debe indagar lo
siguiente:
-¿En qué condiciones trabaja mejor: de manera
individual, en pequeños grupos o con todo el grupo?
-¿En qué actividades demuestra mayor interés?
-¿Cuáles asignaturas se le facilitan más y cuáles se le
dificultan?

35
-¿En qué tareas, con qué contenidos y en qué tipo de
actividades se muestra más interesado?
-¿En qué momento del día presenta más atención?
-¿De qué manera se puede captar mejor su atención y
cuánto tiempo puede centrarse en una misma actividad?
-¿Cuál es el canal más receptivo para recibir
información: auditivo, visual, táctil...?
-¿Qué tipo de información recibe más fácilmente?
-¿Cómo progresa en su aprendizaje: secuencial o
global?
-¿Cómo procesa la información: activo o reflexivo?
• El nivel de competencia curricular ha de servir para
conocer lo que el alumno es capaz de hacer en relación con
los contenidos, competencias y propósitos de las distintas
áreas del currículo. Por ello, el maestro informará de manera
puntual, qué sabe hacer el alumno, qué conoce, cómo lo hace,
qué puede hacer con apoyos y qué tipo de apoyos, en función
de cada uno de los contenidos o competencias del grado
escolar que cursa.
• En cuanto a la información del contexto escolar y
áulico será necesario analizar cómo es el estilo de enseñanza
del profesor y en qué medida éste se adecua o no a las
necesidades de los alumnos:
-¿Cuáles son las estrategias metodológicas que utiliza?
-¿Qué material didáctico emplea?
-¿Cómo motiva a sus alumnos?
-¿Qué estrategias de evaluación utiliza?
-¿Cómo distribuye el tiempo de su clase?
-¿Cómo planea sus actividades?
Asimismo, es importante tener claro las relaciones que
establece el alumno con sus compañeros y maestros de la
escuela: ¿con quién se relaciona más al momento de trabajar
y en el juego? ¿Quiénes de sus compañeros lo incluyen y

36
quiénes lo excluyen? ¿Cómo es su relación con su maestro y
con los otros maestros de la escuela?, entre otros aspectos.
Es importante recordar que el principal objetivo de la
Evaluación Psicopedagógica es definir las necesidades del
alumno, con la finalidad de determinar los apoyos que
requiere.
Sin la intención de generalizar, a continuación se
señalan algunas características básicas en el proceso de
aprendizaje de los alumnos con discapacidad intelectual, ya
que son un indicativo de cuáles pueden ser sus necesidades
específicas, mismas que se obtendrán de las observaciones
del maestro o maestra, como se mencionó anteriormente:
Demanda que se pongan en práctica estrategias
didácticas individualizadas.
Requiere que se les enseñen cosas que otros aprenden
espontáneamente.
Necesitan más tiempo debido a que su proceso de
consolidación de lo que acaban de aprender es más lento.
Aprenden más despacio y de modo diferente.
Demandan un mayor número de ejemplos, ejercicios,
actividades más prácticas, más ensayos y repeticiones para
alcanzar los mismos resultados.
Requieren una mayor descomposición en pasos
intermedios, una secuenciación más detallada de objetivos y
contenidos.
Los procesos de atención y los mecanismos de memoria
a corto y largo plazo necesitan ser entrenados de forma
específica.
Necesitan un trabajo sistemático y adaptado y que se les
proporcionen estrategias para adquirir conceptos matemáticos
básicos debido a que el aprendizaje de los cálculos más
elementales es complicado para ellos.
Necesitan que se les introduzca en la lectura lo más
pronto posible, mediante la utilización de programas

37
adaptados a sus peculiaridades (por ejemplo: métodos
visuales y globales).
Necesitan que se les evalúe en función de sus
capacidades reales y de sus niveles de aprendizaje
individuales.
¿Cuáles son los apoyos y recursos específicos que se
requieren en la escuela para la inclusión de los niños con
discapacidad intelectual?
Como se ha mencionado en otros apartados, los apoyos
son recursos y estrategias cuyo propósito es promover el
desarrollo, la educación, los intereses y el bienestar personal;
su finalidad es mejorar el funcionamiento individual.
Todas las personas necesitamos ayuda de otras, de
instrumentos o de la tecnología para realizar actividades, pero
algunas demandamos más apoyos que otras, éste sería el caso
de las personas con discapacidad intelectual.
El tipo y la cantidad de apoyos que requiere una
persona con discapacidad intelectual dependerán de sus
necesidades específicas. Todas las personas con discapacidad
intelectual son diferentes y, por tanto, cada una demandará
apoyos distintos y con una intensidad particular.
Los apoyos irán en función de las condiciones de cada
alumno: a mayores necesidades mayores apoyos, a menores
necesidades menores apoyos, y tenderán a disminuir para que
se promueva el desarrollo, la educación, los intereses y el
bienestar personal de los alumnos con discapacidad
intelectual y así logren un mejor funcionamiento individual, y
de esta manera las necesidades también se minimicen.
Los alumnos con discapacidad intelectual necesitan de
apoyos naturales, como maestros, compañeros, familiares,
vecinos y amigos, además de apoyos basados en los
servicios, ya que en ocasiones requerirán profesionistas
especializados en lenguaje o psicomotricidad o, bien, a la

38
atención de un psicólogo o un médico en caso de presentar
algún problema de salud.
Estos especialistas pueden ser parte del equipo de
educación especial del servicio que apoya a la escuela (si lo
hay) o de alguna otra instancia gubernamental o social. En
cualesquiera de los casos deben trabajar de manera vinculada
con el personal de la escuela desde la detección de
necesidades hasta el planteamiento, seguimiento y evaluación
de los apoyos establecidos en la Propuesta Curricular
Adaptada.
Respecto de los alumnos con discapacidad intelectual,
habitualmente no requieren adecuaciones de acceso; es decir,
modificaciones en las instalaciones de la escuela o del aula ni
de materiales específicos, como quienes presentan
discapacidad visual, motriz o auditiva; sin embargo, necesitan
adecuaciones curriculares, esto es, ajustes en la metodología
y en la evaluación, así como en los contenidos, competencias
o propósitos.
En cuanto a las adecuaciones en la metodología, sin
duda serán las principales ayudas que un maestro o maestra
puede brindar al alumno con discapacidad intelectual
integrado en su grupo.
En la medida en que los maestros apliquen estrategias
de enseñanza flexibles, la necesidad de adecuaciones
específicas para el alumno disminuirá; es decir, los maestros
que frecuentemente emplean material didáctico variado:
Organizan actividades utilizando diversas agrupaciones,
tanto fuera como dentro del salón de clases.
Implementan estrategias didácticas lúdicas que motivan
y desarrollan aprendizajes significativos en sus alumnos,
entre otras.
Con base en lo anterior, tendrán menos dificultades en
ofrecer una respuesta educativa pertinente al alumno con

39
discapacidad intelectual pues lo que éstos alumnos necesitan
es justamente eso: actividades de enseñanza diversificadas.
Algunas ideas
Algunos de los apoyos o modificaciones en la
metodología que se pueden ofrecer a los alumnos con
discapacidad intelectual de manera más específica son los
que aquí se enlistan:
•Brindar experiencias variadas utilizando material
didáctico concreto, llamativo y acorde a los intereses del
alumno que le permita experimentar con éxito las actividades
realizadas. Por ejemplo, si el resto de sus compañeros realiza
cálculo mental, el alumno con discapacidad intelectual es
probable que necesite fichas para resolver lasoperaciones.
• Ayudarlo y guiarlo al realizar la actividad, hasta que la
pueda hacer por sí solo.
• Repetir la tarea las veces que sean necesarias, hasta
asegurarse que la ha comprendido; si además de la
instrucción se le ofrece un ejemplo, ayudará para su
comprensión.
• Otorgar más de tiempo para realizar una tarea y, en
caso de ser necesario, disminuir el número de tareas o
actividades (si los demás resuelven tres problemas, que él
resuelva dos o uno).
• Aprovechar los acontecimientos o hechos que ocurren
a su alrededor y su utilidad, relacionando los conceptos con
lo aprendido en clase.
• Conducirlo a explorar situaciones nuevas, a tener
iniciativa. Dejar que el alumno experimente por sí mismo,
ayudarle sólo cuando sea necesario.
• Ofrecerle muchas posibilidades de resolver
situaciones de la vida diaria, no anticipar ni responder en su
lugar.

40
• Ubicarlo cerca de compañeros que pueden ofrecerle
un ejemplo positivo a seguir, que lo estimulen y lo incluyan
en sus actividades y juegos.
• Iniciar y propiciar los diálogos con contextos
conocidos, apoyándose en objetos, materiales o situaciones
recientemente vividas.
• Propiciar su expresión a través de interrogatorios, por
ejemplo “¿qué vas a hacer?, ¿cómo...?, ¿cuándo...?, ¿en
dónde...?, ¿para qué...?” Si es necesario, se le puede ofrecer
algunas opciones para que elija entre dos o tres respuestas:
¿quién viene por ti: papá, mamá o abuelo?
• Enfatizar la funcionalidad del lenguaje escrito de
acuerdo con las necesidades del alumno.
• Interpretar o rescatar el contenido de textos leídos por
otros alumnos o por él mismo por medio de escenificaciones,
mímica, dibujos u otros.
• Organizar en binas o equipos pequeños las actividades
de descripción y redacción.
• Propiciar la autocorrección, mediante otros modelos,
dándole la oportunidad de leer lo que escribió y de corregirse
a sí mismo, con la ayuda de otro compañero o del maestro.
• Priorizar la función comunicativa a través de juegos y
aplicaciones prácticas, reflexionando acerca de la relación
que guarda la parte sintáctica con el significado (género,
número, tiempo, verbo, entre otros).
• Hacer resúmenes de textos largos o complejos.
• Solicitar el apoyo de la familia para revisar un tema
anticipadamente, así el alumno se presenta en clase con
información previa.
Respecto a la evaluación de los aprendizajes de los
alumnos con discapacidad intelectual, es importante
considerar que ésta debe efectuarse tomando como referencia
los objetivos y criterios de evaluación fijados para ellos y
establecidos también en su Propuesta Curricular Adaptada.

41
Igualmente, es importante tomar en cuenta las adecuaciones
en la evaluación para tener información precisa del
aprendizaje real del alumno.
Las calificaciones obtenidas por los alumnos en las
asignaturas o materias objeto de adaptación se deberán
expresar en los mismos términos y escalas previstos en las
Normas de Control Escolar para el resto de los alumnos.
En este sentido, la promoción del alumno con
discapacidad intelectual se fundamenta en lo establecido en
su Propuesta Curricular Adaptada, no queda a la buena o
mala voluntad del maestro o director de la escuela, ahí la
importancia de la misma.

Bibliografía

Aguerrondo, I. (2007). Inclusión – Exclusión: Taller


internacional sobre la educación inclusiva (América
Latina, del Sur y Andes). Buenos Aires, 12-14 de
setiembre de 2007.
Barton, L. (2009). Estudios sobre discapacidad y
labúsqueda de la inclusividad. Observaciones. Revista
de Educación, 349, 137-152.
Gómez, R. (2011). Creating Inclusive Communities:
Pathways to the Vision. Intelectual and developmental
disabilities. 49, 5, 360-364.
Berman Bieler, R. (2008). Equipo de Discapacidad y
Desarrollo Inclusivo. Región de Latinoamérica y El
Caribe, Banco Mundial. 1-9. Echeita Sarronandia y Duk
Homad. (2008). Inclusión educativa. REICE. Revista
Electrónica Iberoamericana sobre Calidad, Eficacia y
Cambio en Educación. 6, 2, 1-8.

42
Organización de las Naciones Unidas para la educación,
la ciencia y la cultura (UNESCO) (2011). Objetivos de
Desarrollo del Milenio. Informe de 2011. Disponible en
http://www.un.org/spanish
millenniumgoals/pdf/MDG_Report_2011_SP
CORKILLE, D. (1993) El niño feliz. Su clave
psicológica. Barcelona: Gedisa.
PIAGET, J. y INHELDER, B. (1920) Psicología del
niño. Madrid: Ediciones Morata.
OSTERRIETH, P. (1920) Psicología infantil. Madrid:
Ediciones Morata.
VALLÉS ARÁNDIGA, A. (1998) Autocontrol:
Enfrentamiento en actitudes, valores y normas. Alcoy:
Marfil
FEAPS. (2001) Las personas con retraso mental y
necesidades de apoyo generalizado. Madrid
CHRISTINE MILES. Educación especial para alumnos
con deficiencia mental.
JOAN J.MUNTANER. La sociedad ante el deficiente
mental.
JAMES O,WHITTAKER. Psicología. Tercera edición

43
Actividades Evaluativas

1. Definir habilidades para la creación de


autoestima favorable
2. Analizar la inserción de las personas de
discapacidad en la sociedad
3. Describir las habilidades y factores que influyes
para poder relacionarse sin limitaciones
4. ¿Cuáles son las habilidades que se ven
afectadas con estas discapacidades?
5. ¿Cuáles cree que son las pautas básicas para
ayudar a un alumno con baja autoestima?
6. ¿Podría describir algunos de los problemas para
adaptarse socialmente?
7. ¿Cómo cree que debería ser el sistema para
emplear a personas con esta dificultad?
8. ¿Qué papel cumple la familia en este contexto?

44

También podría gustarte