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Las emociones cumplen una serie de funciones que nos permiten adaptarnos a un
determinado entorno o situación, entre ellas está por ejemplo la protección, afiliación,
rechazo, exploración, entre otras más.
Función adaptativa: La función adaptativa es de suma importancia, ya que permite
generar una conducta apropiada ante una determinada situación.
Función social: Ésta nos permite introducirnos en las relaciones interpersonales,
generando no solo vínculo entre las personas, sino dinámicas de relaciones.
Función motivacional: La emoción va dirigida hacia una determinada meta, por lo
que moviliza a que se realicé una determinada conducta. Se trata de una experiencia
que posee dos características, dirección e intensidad.
La teoría Plutchik está constituida por ocho emociones básicas las cuáles casi nunca se
presentan solas, sino que se expresan en diferentes grados de intensidad.
La alegría: es una emoción “positiva”, que se expresa como un estado de bienestar y
satisfacción respecto a uno mismo/a y a las condiciones generales de la vida. Su grado
más básico se manifiesta como serenidad, mientras que el más complejo adopta la
forma de éxtasis. La alegría puede combinarse de muy distintas maneras con otras
emociones básicas.
Goleman escribe: “No es que las habilidades intelectuales y técnicas sean irrelevantes. Ellas
son importantes, pero sobre todo como ‘capacidades de umbral’, es decir, que son los
requisitos de nivel de entrada para los cargos ejecutivos. Pero mi investigación, junto con
otros estudios recientes, muestra claramente que la inteligencia emocional es la condición
‘sine qua non’ del liderazgo. Sin ella, una persona puede tener la mejor formación en el
mundo, una mente incisiva y analítica, y una fuente inagotable de ideas inteligentes, pero aún
así no será un gran líder”. Goleman identifica cinco aspectos principales de la inteligencia
emocional: autoconciencia, autorregulación, motivación, empatía y habilidad social.
1) Auto-conciencia: es la capacidad para identificar las propias fortalezas y debilidades,
y de comportarse en el lugar de trabajo de manera de capitalizar las primeras y
minimizar las segundas. Franqueza acerca de las áreas de debilidad, comodidad con
uno mismo y "un sentido fuerte y positivo de autoestima" caracterizan a las personas
que son conscientes de sí mismas. Parte de la autoestima es la voluntad de escucharse
a uno mismo antes que nadie. De acuerdo a las observaciones de Goleman y Malcolm
Gladwell, la conciencia de sí mismo va más allá de la auto-evaluación conciente de
un individuo, y más profundamente involucra la capacidad innata de una persona para
la toma de decisiones, influyendo así en todos los aspectos del desempeño
2) Autorregulación: se relaciona con la conciencia de sí mismo, pero describe más
específicamente la capacidad de controlar las emociones, ya sean negativas o
positivas, con el fin de mantener un comportamiento más adecuado a la práctica
profesional y la actividad. Goleman escribe acerca de la auto-regulación no sólo como
un enfoque reaccionario ante escenarios que pueden empujar, movilizar y distraer,
sino también como el impacto constante y deliberado de un ejecutivo en la cultura
organizacional
3) Motivación: El principio de la motivación representa la voluntad de logro -
entusiasmo, empuje, ambición - independientemente de los obstáculos, y es otro tema
constantemente reforzado por los líderes analizados. Los líderes motivados son
competitivos - con ellos mismos y con sus pares por igual. Se fijan metas y emplean
métodos de medición para cuantificar qué tan bien se han cumplido esos objetivos, si
se ha hecho. No cuesta imaginar lo fácil que este rasgo, si no se controla o no está lo
suficientemente equilibrado con otras características como la auto-conciencia y la
autorregulación, puede socavar un perfil de liderazgo. Sin embargo, Goleman
sostiene que un líder potencial no se materializará en uno real sin una motivación
suficiente: "Si hay un rasgo que casi todos los líderes tienen, es la motivación". El
líder más fuerte ve oportunidades donde otros no pueden y asume que todos los
problemas se pueden resolver, y, más importante, está motivado para aprovechar esas
oportunidades y buscar la resolución.
4) Empatía: es el cuarto pilar de Goleman de la inteligencia emocional y es quizás el
más propenso a la mal interpretación. Pero la empatía tiene un propósito profesional,
claro y concreto, y según Goleman "no significa adoptar las emociones de otras
personas como propias y tratar de complacer a todo el mundo". Describe la
comprensión intuitiva del líder de las necesidades no- técnicas del personal y la
Tomar riesgos inteligentes, buenas decisiones y mostrar iniciativa son las conductas
ejemplificadas por los líderes más exitosos y emprendedores. Los principios de la
autoconciencia, la autorregulación, la motivación, la empatía y habilidades sociales permiten
la claridad y la capacidad para llevar a cabo estos comportamientos, especialmente en las
industrias vulnerables sin fines de lucro, donde son cada vez más críticos para la estrategia
organizacional.
Por instinto de supervivencia, los seres humanos buscamos formas específicas para eliminar
las emociones negativas. Estas soluciones pueden ser correctas, como hacer deporte, meditar
y hacer ejercicios de respiración, o inadecuadas, como fumar, beber alcohol y responder de
manera agresivas. A menudo, las conductas inadecuadas pueden tener consecuencias
negativas.
Ahora que ya conoces cómo las emociones pueden interferir de manera negativa en nuestra
vida si no se gestionan, llega el momento de contarte las 11 técnicas de control emocional
que cambiarán tu manera de dirigir tus sentimientos.
Técnica 7: Distracción
Las técnicas para el manejo de las emociones también incluyen métodos para momentos de
emergencia, es decir, cuando no podemos controlar los sentimientos de otra forma. Cuando
nos sentimos desbordados por nuestras emociones, podemos intentar distraernos con algún
estímulo que nos reconforte como una canción, un libro, una película, etc.
Técnica 8: Autorregulación
La autorregulación emocional es una técnica para controlar las emociones que requiere algo
de práctica, sin embargo es muy eficaz. Para lograr autorregularnos, debemos seguir los
siguientes pasos:
Detectar y apuntar los momentos en los que perdemos el control.
Cuando estemos calmados/as, pensar en los desencadenantes de la situación (qué
estábamos pensando cuando perdimos el control de nuestras emociones).
Identificar los pensamientos desencadenantes antes de que deriven en emociones
incontrolables.
Aprender a regular nuestras emociones durante momentos de crisis ayudándonos de
otras técnicas de relajación.
La naturaleza de la negociación
La gente negocia todo el tiempo, casi todo es susceptible de ser negociado. Donde hay
personas hay conflictos, en el ámbito de las organizaciones, la gestión de conflictos, re-quiere
diversas habilidades por parte de los directivos, la negociación es una de las más importantes.
Definición:
De acuerdo con Fisher y Ury, (1994): “la negociación es la comunicación de ida y vuelta que
aspira a alcanzar un acuerdo cuando diferentes partes tienen intereses contrapuestos y otros
parcialmente compartidos”.
Para Altschul, “la negociación es un proceso en el cual cada una de las partes dan pasos para
alcanzar un mínimo y puede materializarse en un convenio, un contrato, una carta de
intención o un apretón de manos. La naturaleza y pronóstico del proceso dependerá de cómo
se equilibren las obligaciones, necesidades y deseos en un despliegue inteligente de intereses
y riesgos del que surgirán, en principio, aspiraciones y conjeturas, más tarde, compromisos
e implicaciones calculadas”.
Más concretamente se trata de la relación que establecen diferentes personas sobre un tema
determinado con el objetivo de acercar posiciones para tratar de llegar a un acuerdo que sea
beneficio para todos.
Intereses y posiciones. Deben estar claros por ambas partes y las posiciones flexibles
garantizarán el éxito de la negociación.
Opciones. Una vez conocidas posiciones e intereses se trata de valorar qué opciones
reales quedan para satisfacer a las partes llegando a un acuerdo óptimo.
Alternativas. Siempre hay que tenerlas dependiendo de cómo evolucione la
negociación.En caso de no llegar a un acuerdo habrá que compararla con las opciones
de acuerdo.
Criterios. Se realiza una evaluación objetiva de las soluciones intentando dejar a un
lado las subjetividades de las partes.
Relación. Nunca debe afectar a la negociación y tampoco debe ser un problema que
no permita avanzar.
Compromisos. Estos son las promesas verbales que si se cumplen se convierten en
acuerdos duraderos.
Comunicación. La expresión, tanto verbal como no verbal tiene gran influencia y la
recomendación es siempre negociar “en persona” para establecer una relación de
confianza.
Para efectos de simplificación las hemos reducido a tres categorías generales: variables de
tipo personal, la estructura y la comunicación.
Las variables personales, incluyen los valores, creencias, cultura, entre otras. Por ejemplo,
en los equipos de trabajo, si los miembros pertenecen a generaciones diferentes quizá surjan
mayores desacuerdos sobre cómo llevar a cabo una tarea, los miembros estarán en una
situación potencial de conflicto. También, hay que tener en cuenta la jerarquía de valores de
cada parte integrante. Por ejemplo, si un socio prefiere los rendimientos en el corto plazo –
liquidez- y el otro la permanencia en el largo plazo –estabilidad- podrá ser semilla para
múltiples conflictos. Además, se consideran las características de la personalidad como otro
factor detonante, por ejemplo, la convivencia entre dos personas con carácter explosivo, es
caldo de cultivo de conflictos.
La estructura, hace referencia al contexto, el cual incluye variables como: el tamaño de la
organización, su filosofía, la cultura, el grado de monotonía, especialización y
estandarización de las tareas asignadas a los miembros del equipo, heterogeneidad entre ellos,
estilos de liderazgo, sistemas de incentivos y el grado de dependencia entre los miembros
entre grupos.
Finalmente, la comunicación, es fuente de conflicto, los problemas de semántica, de malos
entendidos y de ruido en los canales de comunicación son potenciadores de conflictos cuando
no se gestionan correctamente.
Sin embargo, algunos conflictos provocaran graves daños a los miembros y al propio equipo,
estos son resultados disfuncionales. En análisis de los resultados permite determinar qué tan
funcionales o no han sido las situaciones conflictivas, que aspectos positivos han aportado.
Lo anterior es útil para saber si los métodos empleados para gestionar conflictos han sido
eficientes.
En una especie de espiral, se observan los niveles sobre los que va escalando un conflicto.
En la primera etapa se presenta una situación molesta, mencionamos los factores
desencadenantes como, diferencia en el sistema de valores de las partes en conflicto. Sube a
un segundo nivel donde, se percibe la situación de conflicto por al menos alguno de los
miembros, se pone de manifiesto, y comienza a surgir el comportamiento conflictivo, cuando
algún miembro intenta frustrar el logro de los objetivos del otro. Es importante en este nivel,
poner en práctica estrategias para evitar que el conflicto escale hasta convertirse en un
problema de carácter violento. También es posible llegar al último nivel con resultados
constructivos.
Ante un nivel moderado de conflicto se pueden reconocer las siguientes consecuencias
constructivas:
Aumenta la motivación y la energía para realizar las tareas demandadas por el sistema
social. El autoconocimiento desarrollado en algunas personas, al superar el obstáculo
del conflicto las lleva a estar motivadas por un reforzado afán de logro.
Incrementa la capacidad de innovación en los miembros del grupo, por el
reconocimiento de la diversidad en los puntos de vista.
Las personas adquieren mayor conciencia de su identidad, a través de descubrir sus
limitaciones, defectos, habilidades y virtudes.
Ante un nivel excesivo de conflicto interpersonal las consecuencias negativas son:
Somatización de los problemas en los miembros, los efectos fisiológicos afectan la
estructura corporal y psíquica de los individuos. Se pueden padecer enfermedades
como úlceras, hipertensión, dermatitis o mecanismos de defensa como la evasión,
racionalización, negación de la realidad, fantasías, entre otras.
Disminuye la motivación y eficiencia de las partes involucradas, repercutiendo en su
productividad.
Rigidez en el sistema donde ocurre el conflicto, distanciamiento entre las personas
que se necesitan, no se aprovechan las sinergias y los recursos como tiempo, energía,
talentos, conocimientos, instalaciones, dinero, entre otros.
Sentimientos negativos, odio, envidia, pesimismo entre los miembros, incluso se
puede llegar a la agresión física.
Un conflicto no tiene por que ser algo negativo, todo lo contrario, un conflicto bien
gestionado puede resultar en una mejora de rendimiento. Para que el resultado de la gestión
del conflicto sea positivo, debemos contar con un ambiente de trabajo propicio, no tóxico y
personas preparadas para gestionarlos adecuadamente. De cara a enfocar un conflicto
siempre deberemos intentar buscar una solución win-win, de manera que ambas partes se
sientan escuchadas y tratar la situación con ética, profesionalidad y de manera colaborativa.
1) Identifica tus ladrones de tiempo para poder combatirlos. Es el primer paso que
debes dar antes de comenzar a planificar tu agenda laboral. Saber qué tareas te roban
más tiempo te ayudará a combatirlas. Reserva un espacio concreto para llevar a cabo
estas actividades, de tal forma que no puedan ocupar más de ese tiempo. Por ejemplo,
consulta tu correo entre tres y cuatro veces a lo largo de la jornada. Una al principio,
otra al final y un par de veces entre medias. Identifica los correos más importantes
para leerlos y contestar y deja el resto para el final de la jornada.
2) Planifica tu jornada laboral. Todos los días, dedica tus diez primeros minutos a
planificar las tareas que tienes que realizar. Lo mejor es que lo hagas por escrito, para
que no se te olvide. Puedes realizar un listado con las tareas o un cronograma,
señalando el tiempo que le dedicarás y a qué hora llevarás a cabo cada tarea.
3) Prioriza las tareas. Siempre hay tareas que son más importantes o urgentes que el
resto. Debes aprender a identificar estas actividades para establecer cuáles se deben
realizar en primer lugar.
4) Reserva tiempo para imprevistos. Además de los ladrones de tiempo siempre
pueden surgir otros imprevistos, fuegos que hay que apagar con urgencia. Reservar
media hora de tu tiempo para estas situaciones te ayudará a planificar eficazmente tu
jornada.
5) Planifica tus pausas. Los descansos son importantes para que aumente tu
rendimiento. Descansa cinco minutos cada hora o diez minutos cada dos horas.
Su continua toma de decisiones sobre qué tareas debía hacer cada día para ser más productivo
propició la invención del famoso principio de Eisenhower, donde la gestión del tiempo de las
tareas se evalúan según su grado de urgente / no urgente e importante / no importante.
Este método, conocido también como la caja de Eisenhower o matriz de Eisenhower, es una
herramienta para la administración del tiempo y la organización de las tareas.
Se trata de un cuadrado dividido en cuadros donde se clasifican las tareas según su urgencia
y su importancia, un cuadro que facilita la gestión del tiempo:
En este caso, se trata de una pirámide descendiente en cuyo vértice se coloca lo más
prioritario para después ir bajando hasta lo menos relevante.
El método POSEC no sólo está indicado para la administración del tiempo y la gestión de
prioridades de forma personal, también lo está para lograr una efectiva gestión de equipos de
trabajo.
Se trata de una excelente herramienta de gestión del tiempo para establecer los objetivos y
marcar las tareas al grupo según su orden de importancia. Si se ejecuta correctamente se van
consiguiendo las metas más fácilmente hasta alcanzar el éxito final.
Por último, igual de importante que organizar y priorizar las tareas es analizar si se han
desempeñado correctamente.
De ser así, vale la pena que preste especial atención a las siguientes líneas: si entendemos la
procrastinación como dar prioridad a regular el estado de ánimo del “yo” presente y menos
importancia al del “yo” futuro, no es sorprendente que la procrastinación se haya vinculado
a una variedad de problemas de salud y bienestar.
Priorizar el estado de ánimo del “yo” presente sobre el del “yo” futuro significa que no hay
razón para trabajar por el bienestar del “yo” futuro. En resumen, las tareas que son
fundamentales para la buena salud pueden ser postergadas si se las considera difíciles o
desagradables.
¿Qué es la Innovación?
Con el fin de saber qué significa el término innovación, recurrimos a diversas fuentes.
Para la Real Academia Española, tiene dos acepciones: a) acción y efecto de innovar
(mudar o alterar algo, introduciendo novedades), y b) creación o modificación de un
producto y su introducción en un mercado.
Es el proceso que introduce novedades, además de referirse a la modificación de
elementos ya existentes con el fin de mejorarlos, aunque también es posible en la
implementación de elementos totalmente nuevos.
En tanto, para el Manual de Oslo, que sirve de referencia para la OCDE (Organización
para la Cooperación y el Desarrollo Económicos), se refiere a la implantación de
cambios significativos en el producto, el proceso, el marketing o la organización de
la empresa con el propósito de mejorar los resultados, publicó la Fundación
Bankinter.
De acuerdo con la “Teoría de las innovaciones” de Joseph Schumpeter, define a la
innovación como el establecimiento de una nueva función de producción. Lo que
quiere decir que la economía y la sociedad cambian cuando los factores de producción
se combinan de una manera novedosa.
¿Qué es la proactividad?
La proactividad se puede definir como el comportamiento que desarrollan los individuos ante
determinadas situaciones y que se caracteriza por ser anticipatorio, autoiniciado y orientado
al cambio. Es por tanto una actitud que las personas asumen para tener el control absoluto de
su conducta de forma activa.
Este tipo de personas están capacitadas para tomar la iniciativa, anticiparse a posibles hechos
que puedan ocurrir, ser responsables de aquello que les ocurra y tener la habilidad de tomar
decisiones en cada momento bajo presiones o circunstancias adversas.
Las personas proactivas son capaces de reaccionar ante cualquier circunstancia pero en
ningún caso debe confundirse con la impulsividad, ya que son dos cosas totalmente distintas.
Un individuo proactivo no se queja de la cantidad de trabajo o si las cosas no van como
fueron planteadas sino que se esfuerza por cambiar lo que va mal para que vaya bien y esto
es algo que las empresas valoran de forma muy positiva. Las personas proactivas ayudan a
las organizaciones a lograr cambios constructivos y además fomentan un ambiente de trabajo
en el que la excelencia es la principal protagonista.
Una persona con determinación también puede reconocer y visualizar nuevas oportunidades,
y desde este punto de vista se puede decir que es un Emprendedor, alguien que goza de
independencia para poder ejecutar su idea, realizar su invento o poner en operación su
proyecto, alguien que no sigue las órdenes o reglas de un Jefe, alguien que persigue sus
ideales o sus instintos, no los de alguien más.
También existen los empleados que cuentan con gran determinación de acción, esos que
actúan por cuenta propia para hacer las cosas o ver que los demás las hagan de acuerdo con
los objetivos y la misión de la Empresa. Este tipo de individuos son casi siempre
imprescindibles, cobran mucho ya que saben alcanzar objetivos, y son quienes concretan
metas en tiempo costo y calidad.
A continuación ocho cualidades que distinguen a las personas que cuentan con gran
iniciativa:
1) Son Auto-Suficientes: Las personas que pueden iniciar con dinamismo cuentan con
su propio motor interno, generan su propio impulso, son auto-suficientes, cuentan con
esa fuerza interior que los impulsa a levantarse cada mañana, a empezar a pensar, a
comenzar su trabajo. Una persona con iniciativa es una persona con una energía
inusual que inicia, continua y termina objetivos de manera infatigable.
Una persona auto-suficiente jamás espera a que le digan lo que tiene que hacer,
siempre es capaz de actuar y perseverar hasta llegar a donde ya sabe que tiene hacerlo.
2) Se encuentran activos permanentemente: Uno o una que se proponen iniciar por su
cuenta se encuentra en todo momento tomando acciones y trabajando en la búsqueda
y aprovechamiento de nuevas oportunidades, como arrancar un negocio, inventar un
producto, generar nuevas teorías, desarrollar un proceso o escribir un libro, y trabajar
incansablemente en alguno de estos.
3) Se comprometen con el trabajo: Los que se comprometen con un trabajo no lo hacen
por quedar bien o por sentirse obligados, o por demostrar que son adictos al trabajo,
lo hacen porque están convencidos de que su trabajo les ayudará a alcanzar las metas
que les brindarán unas satisfacciones personales más grandes que solo ganar dinero.
4) Son Resilentes: Una persona con gran iniciativa demuestra resilencia o capacidad de
resistencia ante circunstancias críticas en las que otros se quebrarían, renunciarían o
evitarían enfrentar. Alguien con gran iniciativa cuenta con la esperanza y la confianza
suficiente en sí mismo para poder perseverar ante decepciones, fracasos, y
comentarios negativos.
5) Van por delante de sus fechas límite: Los que tienen iniciativa trabajan eficientemente
procurando acabar antes de las fechas prestablecidas en sus programas. A muchos
nos cuesta ponernos a trabajar en los puntos más difíciles de un trabajo, los que tienen
iniciativa empiezan por lo más difícil cuando pueden, evitan procrastinar, saben evitar
las distracciones y comienzan cuanto antes para acabar antes de la fecha límite.
6) Generan sus propias ideas: Los que tienen iniciativa no se esperan a que alguien les
diga por dónde tienen que ir o empezar. Saben bien cuándo, cómo y dónde iniciar,
tienen capacidad de generar ideas propias para solucionar problemas y proponer
acciones con creatividad y eficiencia.
Definición
La orientación al logro es alinear los objetivos personales con los organizacionales y de esa
manera fijar metas ambiciosas por encima de los estándares y expectativas establecidas. Los
estándares pueden ser de superación personal en relación c on el rendimiento pasado, de
orientación a resultados basado en medida objetiva, de competitividad en correspondencia
con el desempeño y superación de los demás, de mejoramiento continuo en concordancia con
resultados que uno mismo se ha propuesto, de inn ovación esperando realizar algo único y
excepcional. El orientación al logro requiere definir objetivos claros, concisos y precisos que
faciliten el éxito. Algunos de ellos se muestran a continuación.
Elementos
Adaptando lo que indica Robbins (2004) en su libro Comportamiento Organizacional. La
orientación al logro tiene tres elementos necesarios:
Proceso
Esta habilidad consiste en actuar con autenticidad planteando tus objetivos y trabajando
acorde a ello, para ello necesitas generar una gran motivación para cumplir esas metas,
realizarle un seguimiento a su evolución y así mismo tener planes por si las cosas no salen
como lo estabas planeando. Dejar de pensar a través de las limitaciones te ayudará a pensar
en todas las posibilidades que hay.
El llamado “círculo cerebral del placer” está formado por una serie de pequeñas zonas del
cerebro donde se acumula mayor cantidad de dopamina. Esta zona se pone en movimiento
cuando recibimos estímulos que nos producen placer: hacer deporte, comer chocolate, el
sexo, practicar un hobbie, una comida de altas calorías y también ayudar a los demás, todo
esto permite obtener la sensación de logro en la realización de un esfuerzo que apunta a un
final feliz por la consecución del objetivo deseado.
La ciencia reconoce el “sistema cerebral de recompensa”, una actividad que garantiza nuestra
supervivencia. En su parte menos positiva, la búsqueda del placer de manera antinatural
conduce a algunas personas a consumir drogas estimulantes del cerebro que generan sentido
de placer en un corto tiempo, provocando la afectación neuronal subsiguiente.
En el caso del “sentido de logro” el placer que se obtiene es muy alto cuando se recibe la
“recompensa”, es decir, la evidencia del producto final de que el logro se ha consumado.
Ejemplo: es momento de alta satisfacción cuando sacamos el coche nuevo de la agencia,
cuando recibimos el título universitario, cuando concluimos el quinto libro leído en mayo
habiendo cubierto el deseo de la lectura de un libro mensual en enero o la recepción de monto
de la factura por la consumación del negocio que aspirábamos.
En el “proceso hacia el logro”, no todo lo que sucede son momentos satisfactorios, los
obstáculos implícitos para su consumación y para la obtención de la recompensa final,
pueden producir en la persona estados de alta tensión, de grandes esfuerzos, incluso
sacrificios y pérdidas momentáneas, que en sí mismos, a menudo constituyen detonadores
para el posible abandono del objetivo.
En cuanto a los pasatiempos, si eres un ávido lector, esta experiencia puede ser muy valorada
por algunos empleadores si optas por una posición que requiere análisis. Si, por otro lado, tu
pasatiempo es el ajedrez, o resolver sudokus, eso refleja que eres una persona apta para la
resolución de problemas, con capacidad de concentración y análisis. Si pintas o cocinas en
tus tiempos libres y hablas de esas experiencias personales en su entrevista de trabajo, estarás
mostrando ser una persona creativa y dedicada y esas son cualidades que las empresas buscan
en sus posibles empleados.
De acuerdo con Velásquez, el estrés laboral es producto de la presión del entorno y se produce
por la falta de capacidad del trabajador para responder a sus exigencias. Los principales
síntomas que se presentan son: agotamiento físico y mental, irritabilidad, depresión, entre
otros.
El estrés tiene la potencialidad de afectar el desempeño laboral. Este impacta en el
rendimiento y capacidad para el cumplimiento de las tareas y funciones asignadas,
induciendo a errores procedimentales y falta de eficiencia; lo que puede afectar al resto de su
equipo de trabajo.
1) Parar
Técnica que consiste en hacer pausas breves y frecuentes a lo largo del día, en especial en
momentos difíciles, para calmarnos a conciencia a través de seguir los pasos que refiere el
acrónimo:
Para: Haz una pausa en tus actividades.
Atiende: Pon atención a tu estado mental y emocional, determina si te está
controlando alguna emoción.
Recuerda: Haz memoria de tus metas y de lo que valoras y es importante para ti.
Aplica: Respira profundamente y no actúes hasta que estés con más tranquilidad.
Regresa: Vuelve a la actividad que estabas realizando con una mente más tranquila y
clara.
Esta técnica nos puede ayudar a dejar de actuar en “piloto automático”, es decir, a detener la
inercia de la forma en que reaccionamos para hacernos conscientes de cómo tendemos a
reaccionar y desarrollar una nueva manera de relacionarnos con aquello que sentimos,
pensamos para actuar de una manera constructiva.
3) Atender el respirar
Esta técnica nos ayuda a mantenernos enfocados en lo que sucede en el momento y no
perderse tanto en las emociones como en los pensamientos que experimentamos. A su vez,
incrementa la concentración y la capacidad de regular las emociones y reducir el estrés.
Instrucciones:
1. Siéntate cómodamente en la silla: Mantén la espalda derecha y el cuerpo relajado. Si lo
deseas, puedes cerrar suavemente los ojos.
2. Ahora lleva tu atención al respirar: Nota la inhalación y exhalación de tu respirar.
3. Mantén tu atención en el respirar: Si viene a tu mente alguna sensación, emoción o
pensamiento, no trates de bloquearlos, simplemente nótalos y regresa tu atención al proceso
de respirar una y otra vez.
4. Ahora, suelta todo esfuerzo mental: Aligera tu atención de respiración y descansa.
A lo largo del día puedes utilizar esta técnica que te ayudará a relajarte y a estar atento a tu
experiencia en ese momento. Trata de practicarla con regularidad para que notes sus efectos
de manera más evidente. Si al principio te resulta difícil o quieres aplicarla en un momento
de estrés y no te resulta, ten paciencia y continúa familiarizándote con el ejercicio y así, cada
vez que lo practiques te será más fácil y útil aplicarla.
El cambio dentro de las organizaciones es uno de los procesos que se da con más
frecuencia, sin embargo, la manera de proceder determinará en gran medida cómo los
colaboradores asuman estas modificaciones. Las reacciones pueden ser desde generar
resistencia hasta externar un alto deseo por involucrarse y ser parte del cambio.
La ya muy conocida frase “lo único constante es el cambio”, nos recuerda que todo está en
continua transformación. Observemos además que “cambiar” es un verbo, es decir, implica
movimiento, pero también supone un procedimiento porque en lo posible cada cambio debe
planearse, ejecutarse y evaluarse, para extraer la riqueza de la experiencia.
Pensamos en cambiar cuando identificamos una necesidad o una oportunidad de mejora. En
consecuencia miremos ahora si realmente estamos abiertos a recibir todo aquello que la vida
nos ofrece, a pasarlo por nuestro filtro interno, por nuestro corazón, para luego decidir qué
queremos hacer, hacia dónde queremos ir y qué es lo que nos conviene hacer en un momento
dado, como personas y como empresa.
La frase de Albert Einstein: “Si buscas resultados diferentes, no sigas haciendo lo mismo”,
nos pone a pensar hasta qué punto nos cuesta hacer cambios en nuestra vida, en nuestro
trabajo, en nuestro hogar… y cuántas veces en verdad seguimos apegados a un
comportamiento que es claramente inconveniente no sólo para nosotros sino para quienes
nos acompañan de cerca. A veces nos apegamos a lo que ya sabemos o a lo que tenemos y
no nos queremos mover de allí. Aprender a “dejarnos llevar”, a fluir con la vida sin oponer
resistencia, pero reflexionando sobre lo que nos llega o debemos buscar, nos facilita el
cambio pues es imposible negarnos a cambiar por siempre.
Nosotros aprendimos a escribir con un lápiz, luego tuvimos que cambiar a otro porque ese
primer lápiz se acabó o lo perdimos y seguramente luego cambiamos al lapicero, algunos al
estilógrafo, o a los marcadores, o a las máquinas de escribir, y hoy muchos, a los
computadores. ¿Podríamos habernos negado a escribir con otro lápiz o con un bolígrafo?
Seguramente, pero la necesidad de seguir escribiendo en el colegio o en el trabajo, nos llevó
a cambiar y a usar nuevos instrumentos.
Todo cambio bien hecho, trae un nuevo aprendizaje que aporta cualificación y re-
acomodación de lo que ya se tiene, a la vez que enriquece procesos y actividades futuras.
Cuando nosotros cambiamos cambia todo el sistema, no sólo una parte. Todo se afecta porque
como personas o como empresas somos una unidad dinámica, por eso prever cómo se
afectarán otros subsistemas o personas es clave para lograr éxito en el cambio que deseamos
realizar.
Muchas veces nos vemos enfrentados a tener que cambiar lo que ya habíamos cambiado,
pero es una buena medida de cuánto vamos avanzando en esta competencia y así pasaremos
de tener una capacidad, a poseer una habilidad personal y grupal de gran valor en el
cambiante mundo laboral.
5 consejos útiles para abrazar el cambio en general, que ayudarán a tu equipo a aceptar que
vivimos en una situación de incertidumbre, y desechar sentimientos de miedo, ansiedad o
tristeza constante, de forma que podamos mantenernos positivos:
1) Una de las claves vivir en el presente, poniendo mucha atención al momento y trayendo
la mente de vuelta cuando se vaya a otros lugares que nos traen ansiedad, miedo, culpa,
tristeza, etc. En este punto nos puede ayudar a ejercitar esta capacidad el hacer ejercicios
de meditación.
2) Si te asaltan miedos y ansiedades, date un momento para pensar cuáles son esos eventos
tan terribles que estás imaginando, y reflexiona sobre si serían tan horribles realmente o
si por el contrario contarías con herramientas para capear las situaciones. También
reflexiona sobre la probabilidad de que dichos eventos sucedan. Imagina otras
alternativas más realistas sobre el devenir.
3) Los sentimientos no se desechan, sino que se escuchan, se les pone nombre y se les
pregunta qué nos están pidiendo. Evitarlos, no aceptarlos, ir contra ellos y ocultarlos solo
nos daña. No veas a los sentimientos, incluso el miedo, la ansiedad o la tristeza, como
enemigos, ya que están para pedirte algo. Por ejemplo, que te cuides, que bajes el ritmo
y la autoexigencia, que no controles hasta lo incontrolable, o que pidas ayuda a un
profesional.
4) Busca llenar tu vida con alternativas positivas y reconfortantes que llenen los vacíos que
han ido dejando aquellas cosas que ahora no puedes hacer o no tan cómodamente como
antes. Ante la pérdida de reforzadores positivos, notaremos que estamos faltos de
estímulos, así que es hora de movernos y buscarlos.
5) Busca el contacto con los demás del modo que sea. Pídeles ayuda, comunícate,
escúchales… en definitiva, comparte tus miedos e inseguridades y ayuda al resto con las
suyas. Te ayudará a ver tu realidad de otra manera.
Tenemos que tener en cuenta que, existen normas sociales, de cortesía y buena educación.
«La cortesía que debe presidir nuestras actuaciones cotidianas se fundamenta
principalmente en el respeto y la comprensión hacia todos». Confucio:
Saludar y despedirse. Decir buenos días o buenas tardes es nuestra mejor carta de
presentación.
Deja a un lado la rumorología. Es una de las actitudes más negativas en tu entorno
laboral. No transmite nada positivo de tu imagen. Sé discreto no propagues rumores
o chismes. En el caso que, en tu círculo social, alguien esté hablando mal de otra
persona, no sigas esta conducta y abstente de opinar. No te gustaría que alguien
hablará de ti ni tampoco a los demás les gustaría que hablaran de ellos. No hay peor
cosa que los comentarios en los pasillos, no olvides que esto puede difundirse
Los buenos modales, la cordialidad, la sencillez y la discreción son buenos principios para
mantener unas correctas relaciones con los compañeros de trabajo. Un mal ambiente de
trabajo genera tensiones, baja productividad y estrés.
El valor es algo que posee en sí mismo un grado de categoría, que influye en el ser humano
que le da significado y que puede ser empleado para decidir o justificar. El valor está muy
relacionado con los principios y sentimientos actitudes que posee un individuo a la hora de
actuar.
Los valores pueden cambiar, por ejemplo en las primeras etapas de la vida el valor que
pudiera ser más importante en una persona podría cambiar más adelante; también puede
cambiar según el ámbito social, laboral, cultural y religioso.
Los valores tienen un carácter personal, cada quien le otorga el grado de importancia que
desea a tal o cual valor según su punto de vista social en el sistema de valores.
Tipos de valores
Existe una gran variedad de valores, entre ellos 12 principales que se clasifican en:
personales, familiares, universales, materiales, económicos, humanos, éticos, pragmáticos,
estéticos, socioculturales, morales y espirituales. A continuación, se exponen algunos de los
más importantes:
Valores universales: Comprenden las normas de relación y sociedad establecidas e
impuestas por la comunidad en épocas específicas y según necesidades particulares.
Valores religiosos: Son aquellos que son establecidos por cada vertiente, doctrina o
denominación religiosa; pueden ser creencias paganas o integradas y reconocidas
mundialmente.
Valores morales: Son lo que derivan de su relación con la sociedad y son útiles a la
hora de tomar decisiones ya que están sujetos a lo ético.
Paso 1. Establece tus metas y plan de ejecución: Para ser disciplinado, debes saber lo que
quieres lograr, si no sabes hacia dónde te diriges puedes desviarte del camino. Obtener los
resultados que buscas es un elemento muy importante para sentirte bien.
Te recomendamos que escribas tus metas con palabras concisas y desde una perspectiva
positiva, piensa en lo que representan en tu vida y luego establece fechas para alcanzarlas a
ritmo constante. Es importante que si no logras alguna meta, no te juzgues, toma la
experiencia y analiza nuevamente la situación, las recompensas llegarán.
La disciplina te puede permitir moldear tu propio carácter y tener un panorama más amplio
de la realidad, en el que logres tus objetivos gracias a tu esfuerzo. Recuerda que una persona
disciplinada siempre logrará sus metas, pues es perseverante y constante.
La teoría Kantiana indica que “es autónomo el que no se rige por lo que le dicen, pero
tampoco sólo por sus apetencias o por sus instintos sino por un tipo de normas que cree que
debería cumplir cualquier persona, le apetezca a él cumplirlas o no.”, ya que me guío por las
normas establecidas pero razonando y decidiendo con autonomía cuáles cumplir.
Otro de los temas clave de la ética en las profesiones es el análisis de stakeholders, ya que al
estudiar las partes interesadas de una empresa te puedes dar cuenta del alcance que tendrán
las acciones que lleves a cabo y de las implicaciones que tendrán tus decisiones como
Lo realmente importante es siempre actuar de manera coherente con lo que piensas y nunca
realizar alguna acción que haga que tu moral o tu ética se rompa, ya que si se rompe es muy
difícil volverla a reconstruirla.
La mayoría de las empresas suele proteger la información tanto de sus colaboradores como
de sus clientes, pero también reservan información sobre los aspectos internos de la empresa
y que tienen que ver con sus trabajadores. Ejemplo de ello son los salarios, algo que no suele
hacerse público entre los integrantes de los equipos.
Si bien es una práctica muy común, esto no quiere decir que sea la mejor, y mucho menos
que los trabajadores se sientan cómodos con esto. El ocultar información puede atraer malas
prácticas y problemas internos, por eso la transparencia en el ámbito laboral es importante
para evitarlo.
Harvard Business Review encuentra que la transparencia en el lugar de trabajo es mucho mas
compleja que compartir informacion o la capacidad de los empleadores para observar en
tiempo real el compromiso de los empleados en el lugar de trabajo.
Harvard Business Review destaca que el lugar de trabajo mas eficaz es aquel que encuentra
un equilibrio entre el trabajo de transparencia y la privacidad. Los empleadores deben confiar
en los procesos de los empleados, ya que la investigacion de revision empresarial demuestra
la correlacion entre la falta de un lugar de trabajo transparente y la falta de confianza en el
lugar de trabajo.