Los sistemas de trabajo de alto desempeño (STAD) combinan prácticas de recursos humanos para mejorar el compromiso y desempeño de los empleados. Los STAD fomentan la información compartida, el desarrollo de conocimientos, la vinculación entre desempeño y recompensa, y la igualdad. Estos sistemas consideran a las organizaciones como sistemas compuestos por piezas que se vinculan con las metas globales y se enfocan en procesos que agregan valor al cliente.
Los sistemas de trabajo de alto desempeño (STAD) combinan prácticas de recursos humanos para mejorar el compromiso y desempeño de los empleados. Los STAD fomentan la información compartida, el desarrollo de conocimientos, la vinculación entre desempeño y recompensa, y la igualdad. Estos sistemas consideran a las organizaciones como sistemas compuestos por piezas que se vinculan con las metas globales y se enfocan en procesos que agregan valor al cliente.
Los sistemas de trabajo de alto desempeño (STAD) combinan prácticas de recursos humanos para mejorar el compromiso y desempeño de los empleados. Los STAD fomentan la información compartida, el desarrollo de conocimientos, la vinculación entre desempeño y recompensa, y la igualdad. Estos sistemas consideran a las organizaciones como sistemas compuestos por piezas que se vinculan con las metas globales y se enfocan en procesos que agregan valor al cliente.
En un mercado altamente competitivo, las empresas más exitosas
descubrieron que un sistema de trabajo basado en la comunicación y la cooperación es la ventaja competitiva. Estos también se aplican a las PYMES. En el pasado, “los libros de texto de recursos humanos terminaban después de presentar y explicar cada uno de los aspectos de la administración de recursos humanos”. Sin embargo, en la actualidad se están desarrollando nuevas teorías en torno a estrategias de malajemente que, para aumentar la productividad, apuntan a producir transformaciones profundas en la cultura de la empresa, haciendo desaparecer las jerarquías para dar lugar a relaciones de trabajo horizontales, cooperativas, basadas en una comunicación fluida. En este contexto, surgen los sistemas de trabajo de alto desempeño (S.T.A.D.) para dar respuesta a las necesidades de empresas insertas en una economía altamente competitiva.
Los S.T.A.D. se constituyen a partir de la combinación entre prácticas
habituales de recursos humanos –que antes se trataban de forma aislada, como el reclutamiento, capacitación y compensación de los empleados -, con un sistema global para mejorar su compromiso y desempeño con la empresa. Con ese fin, fomentan el desarrollo de sistemas de trabajo sobre la base de cuatro principios: la información compartida, el desarrollo del conocimiento, los enlaces entre desempeño y recompensa, y el igualitarismo. No obstante, al referirnos a sistemas de trabajo de alto desempeño no hay que olvidar el concepto fundamental de los mismos, es decir, el de sistema. De este modo, se considera que las organizaciones están compuestas por piezas que se enlazan con las metas estratégicas globales, y que poseen un valor específico en términos de cómo ayudan a que el sistema funcione como un todo. En este sentido, las tecnologías de la comunicación y la información desempeñan un rol fundamental, en especial al crear la infraestructura para comunicar y difundir la información vital para el desempeño de la empresa. Por su parte, el trabajo cotidiano se configura de forma diferente. Así, en lugar de separar los puestos en unidades discretas, los gerentes se concentran primero en los procesos fundamentales de negocios que agregan valor para el cliente y después crean los equipos de trabajo que se encarguen de tales procesos. Las prácticas de reclutamiento de personal, así como la capacitación y la compensación, se complementan a los nuevos diseños de flujo de trabajo, como prácticas que fomentan una alta participación de los empleados. El reclutamiento se identifica por ser amplio e intenso, a fin de elegir a personas calificadas con capacidad de aprender continuamente y de trabajar en cooperación. El beneficio de esta selección minuciosa es que, con trabajadores eficientes, es probable que las organizaciones recuperen el tiempo y gasto que invirtieron en el proceso. Por otro lado, surge una nueva modalidad de capacitación “cruzada”, es decir, la capacitación de empleados en puestos que tiene poca relación con el suyo. Esto favorece el trabajo en equipo, porque de esta manera los empleados cuentan con las herramientas para solucionar problemas o colaborar con compañeros de otras áreas. Asimismo, en los S.T.A.D. las cuestiones de liderazgo surgen en varios niveles. Esto apunta a que en lugar de gerentes se hable de líderes de equipo, que no imponen sus órdenes de forma acrítica, sino que comparten la toma de decisiones con los demás empleados. Ésta es una característica clave de los STAD porque cuando los empleados acompañan al nivel ejecutivo, es más probable que se logre cambiar, en mayor profundidad, la cultura de la empresa. Cuando se utiliza el término Recurso Humano se está catalogando al individuo como un instrumento, sin tomar en consideración que es el capital principal, poseedor de habilidades y características que le dan vida, movimiento y acción a toda organización, es por ello que prefiero usar el término “Talento Humano”. Cada factor productivo debe trabajar de manera eficaz en el logro de los objetivos organizacionales y es aquí, donde se llega a realizar el tratamiento del recurso humano como “talento humano”, es a este factor a quien debe considerarse de real importancia para aumentar sus capacidades y elevar sus aptitudes al punto tal, que sea capaz de valerse por sí mismo y entregar lo mejor de sí a su trabajo, sintiéndose conforme con lo que realiza. Investigaciones realizadas demuestran que la productividad de las personas es mejor cuando se han implementado mecanismos para fomentar el trabajo en equipo”. El reto principal en la construcción de equipos de alto desempeño es encontrar la forma de lograr interdependencia, eficiencia, responsabilidad compartida, apoyo mutuo y confianza entre las tareas y los miembros del equipo. Los llamados sistemas de Trabajo de Alto Desempeño no son más que una combinación de prácticas de recursos humanos, estructuras de trabajo y procesos que maximizan el conocimiento, las habilidades, el compromiso y la flexibilidad del trabajador. En un equipo de Trabajo de Alto Desempeño , se requiere gente segura de sí misma, dispuesta a aceptar la responsabilidad por las tareas que realiza y por los resultados que produce, que sabe pedir ayuda sin complejos cuando la necesita y que, además, se involucra en tareas para fortalecer el equipo, aunque no sean de su responsabilidad. Los beneficios del trabajo en equipo se consiguen, cuando los grupos logran dotarse de las habilidades para operar cooperativamente y dominar procesos internos de trabajo para canalizar productivamente el esfuerzo colectivo. Por lo tanto, un “Equipo de Alto Desempeño”, es aquel que ha alcanzado los objetivos propuestos de una manera excelente en términos de eficacia y de eficiencia. Algunas consideraciones a tomar en cuenta para lograr Equipos de Alto Desempeño son: –Diseñar un programa de mejora continua que incluya desarrollo y evaluación de desempeño. –Programar y planificar las actividades que se van a abordar. –Tener claridad de tareas, proyectos y responsabilidades. –Hacer seguimiento a los objetivos alcanzados por el equipo. –Analizar las variables y criterios utilizados para recompensar la eficacia de los resultados de un equipo. –Lograr que un equipo sea capaz de autodirigirse. –Dotar al equipo de la flexibilidad necesaria ante cambios y conflictos.