Está en la página 1de 3

COUNTRY MEAT

El “COUNTRY MEAT LOAF”, un plato típico de USA. Su nombre resulta de la unión de tres palabras:
country (país) meat (carne) y loaf (pan de molde), que traducido significa “pastel de carne del país”
pues originariamente se hacía en un molde para pan. De la “Meat Loaf” se puede encontrar una gran
variedad de recetas diferentes, con más o menos ingredientes.
El pastel de carne americano, “Country Meat Loaf”, es un plato cuya base es la carne picada,
mezclada con otros ingredientes, a la que se la da una forma como de barra de pan y luego se
hornea. La forma se le puede dar bien porque se cocina en un molde en forma de barra de pan o
bien dándole la forma a mano sobre una bandeja. Normalmente se utiliza carne de ternera o vaca,
pero también puede hacerse de cordero, cerdo o cualquier otra.
“Carrot Cake” y “Country Meat Loaf “
La comida americana es esencialmente casera. América es una nación fundada por inmigrantes que
añoran la comida con la que se criaron y en las grandes ciudades, sobre todo en la costa, es fácil
encontrar cualquier comida étnica, desde la polaca a la peruana.
Este país es un cajón de sastre de culturas y las cocinas se aferran de forma inflexible a sus
orígenes. En fácil encontrar a un italiano plantando hinojo y tomates en su jardín o a un vietnamita
cultivando coriandro o menta.
Todos estos platos “inmigrantes” han echado raíces en América. Muchos platos italianos, por
ejemplo, son ahora mismo clásicos americanos.
SALSA BARBACOA
Barbecue, Barbeque, BBQ o barbacoa. El origen de esta palabra es español y muchas veces se
utiliza como sinónimo de asado (grilling). Su definición hace referencia a la parrilla que se utiliza para
asar al carbón y a los alimentos que se cocinan en ella de manera lenta y a fuego bajo, además,
denomina a los eventos sociales en los que las personas se reúnen a degustar platillos preparados
de esta forma. Por lo regular la carne o verdura que se preparará a la barbacoa, se marina con una
salsa homónima de sabor agridulce, y al momento de llevar los platillos a la mesa, se acostumbra
agregar una porción extra para remojar e impregnar bien la comida.
La tradición de la cocina BBQ o low and slow (porque se cocinaba en asador a fuego bajo, por
periodos largos de tiempo) aparece durante el siglo XVIII en Virginia, Estados Unidos, y era utilizado
con fines sociales para reunirse entre familias y amigos. Poco a poco la popularidad fue en aumento,
ya que hacer una parrillada otorgaba un estatus más alto a las personas.
Fue hasta el siglo XIX cuando aparecen los primeros restaurantes de este giro. Estos
establecimientos eran muy sencillos -no tenían nada que ver con el concepto actual de restaurante-,
se encontraban a lo largo de las avenidas o en terrenos baldíos y se dedicaban vender carne como
costillas, brisket, cordero y pollo cocinada estilo bbq en parrillas improvisadas. Las guarniciones eran
rústicas, ensalada de papa y los famosos mac 'n' cheesse.
Para brindarle a la carne un sabor especial se comenzó a experimentar con distintos sabores en
salsas. Cada familia y restaurante probaba con algo distinto que sirviera para maridar la carne o para
bañarla una vez servida en el plato. Fue así como en 1909 aparece la primera salsa barbecue de la
que se tienen registros: Georgia Barbecue Sauce Company en Atlanta. Se preparaba con una base
de jitomate, vinagre, mostaza y salsa picante o chiles. En 1948 la compañía Heinz introduce al
mercado la primera salsa de distribución nacional.
Con el auge del bbq comenzaron a aparecer restaurantes bien establecidos que ofrecían este tipo
de comida e incluso algunas cadenas como Burguer King incorporaron exitosamente en su menú
hamburguesas con esta preparación, como la Texas BBQ Whopper. De costa a costa abrieron
nuevos negocios especializados, se elegía el tipo de carne que se creía era el mejor para cocinar
low and slow y aparecieron diferentes salsas BBQ según la región o el restaurante.
Este movimiento cobró gran importancia en el oeste de Estados Unidos donde era casi obligatorio
reunirse con familia y amigos alrededor de un asador para preparar este delicioso manjar. Tal fue el
gusto que en 1970 se llevaron a cabo las primeras competencias que consistían en comer la mayor
cantidad de costillitas y salchichas barbecue sin morir en el intento. Estos concursos, vigentes hoy
en día, son un espectáculo que se realiza en las ferias de cada estado, ya que funcionan como una
muestra del estilo culinario de los participantes.
Hoy en día se reconocen dos tipos de barbecue;
 El primero es la forma tradicional, que consiste en un asador cerrado donde se cocina la
carne a fuego bajo durante al menos 6 horas; la llama no está directamente en contacto con
la carne, además se le añade carbón o trozos de madera de manzano, mezquite o roble
para dar un sabor ahumado. El resultado es una carne ahumada, dorada por fuera y
extremadamente tierna por dentro.
 La segunda forma consiste en colocar la carne directa en las brasas de un asador. Aunque
la cocción es mucho más rápida y se obtiene un sabor ahumado, la textura de que se logra
no es la misma a la del método tradicional, ya que queda un poco más dura.
Además, debido a la globalización y a la popularidad mundial de este producto, existen más de cien
variedades de salsa barbecue para acompañar, cada una elaborada con una receta diferente según
la región e incluso la familia que la prepara.

Las salsas barbacoa se pueden combinar entre ácidas y dulces, generalmente llevan condimentos
especiados o se hacen eco de un solo sabor. En la mayoría de los casos hacen realce de los
sabores ahumados de la barbacoa. Los ingredientes pueden variar desde la salsa de tomate,
especias, edulcorantes, miel y también puede contener vinagre. Estas variaciones obedecen a
recetas lugareñas y a especialidades locales.
A nivel comercial, básicamente vendría a ser un kétchup ahumado (adicionado de humo líquido que
le da el sabor y color característicos).

(salsa barbacoa comercializada)

También podría gustarte