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RECOMENDACIONES DIETETICAS EN CASO DE HIGADO GRASO

El hígado graso es una condición sumamente común y uno de los aspectos más
relevantes en su manejo, es la alimentación. La dieta de una persona que tiene “Esteatosis
hepática no alcohólica (EHNA)” es fundamental para evitar el progreso de la enfermedad
con el consecuente deterioro de su hígado. 

Se recomienda limitar el consumo de grasas para ayudar a prevenir dicha afección. Las
grasas son altas en calorías y aumentan su probabilidad de volverse obeso. Es oportuno
reconocer los tipos de grasas:

 GRASAS SATURADAS: Se encuentran en la carne, la piel o pellejo del pollo y demás


aves, la mantequilla, la manteca de cerdo, las grasas vegetales y la leche y sus
derivados (excepto las versiones descremadas o sin grasa).
 GRASAS TRANS: Se encuentran en los alimentos cuya etiqueta menciona que tiene
aceite hidrogenado o parcialmente hidrogenado, como las galletas y refrigerios en
paquetes, las galletas y pasteles horneadas comercialmente, y los alimentos fritos
como donuts y papas a la francesa.
 GRASAS MONOINSATURADAS: Se encuentran en los aceites de oliva, de maní y de
canola.
 GRASAS POLIINSATURADAS: Se encuentran en mayor cantidad en los aceites de
maíz, de soya y de cártamo, y en muchos tipos de nueces. Los ácidos grasos
omega-3 son un tipo de grasa poliinsaturada y se encuentran en los pescados
grasos como el salmón, además de las nueces y el aceite de linaza.

Lo ideal es sustituir las GRASAS SATURADAS y las TRANS en la dieta por


MONOINSATURADAS y POLIINSATURADAS, especialmente los ácidos grasos omega-3, que
puede reducir su probabilidad de desarrollar enfermedades del corazón, si usted tiene
Hígado Graso.

Otros cambios sugeridos en la dieta con Hígado graso:

 Consuma alimentos con un índice glucémico (o glicémico) bajo, como la mayoría


de las frutas, verduras y granos enteros. Estos alimentos afectan menos la glucosa
en la sangre que los alimentos de alto índice glucémico, como el pan blanco, el
arroz blanco y las papas.
 Evite los alimentos y bebidas con grandes cantidades de azúcares simples o de
endulzar, especialmente la fructosa. Este azúcar se encuentra en las bebidas
deportivas, los refrescos, jugos de frutas y té azucarados.
 Evite en lo posible, el consumo de alcohol, que puede aumentar el riesgo de dañar
el hígado.
La FRUCTOSA es el tipo de azúcar presente en la fruta, la miel y algunos vegetales,
así como la GLUCOSA, el azúcar de la sangre, estimulan los genes productores de grasa en
el hígado.

Entonces, por lo explicado se debe poner especial atención en la cantidad y el tipo


de grasa que ingieres. La dieta con abundante GRASA SATURTADA (carnes rojas y
alimentos fritos), favorece el desarrollo de hígado graso.

Está demostrado que el consumo de GRASA MONOINSATURADA y


POLIINSATURADA (aceite de olivo, el aguacate y el salmón) favorece la disolución de la
grasa en el órgano, alargando su vida útil.

Es imperativo que bajar de peso resulta de gran beneficio. Está demostrado que
una disminución del 10% de tu peso corporal puede reducir hasta en un grado tu
esteatosis hepática. 

Otros elementos que debes tener en cuenta si te diagnosticaron hígado graso:

1-     Evita ingerir alimento entre comidas

Contrario a las recomendaciones para bajar de peso NORMALMENTE, es acelerar el


metabolismo consumiendo meriendas saludables entre las comidas principales, hacerlo
cuando tienes hígado graso contribuye al problema. Procura comer tres veces al día. Si te
da mucha hambre entre comidas bebe un vaso de agua o té de manzanilla.

2-     La dieta ideal es la mediterránea

La mayoría de los estudios científicos revela que si tienes hígado graso, la dieta
ideal para ti es la mediterránea, que es rica en grasas monoinsaturadas (ácidos grasos
omega-3 y baja en carbohidratos). Incluye en tus comidas aceite de oliva, nueces, frutas,
verduras, legumbres y pescado. Evita la carne roja y los panes, pastas, pasteles, dulces,
tortas y chocolates. Si consumes vino, hazlo con gran moderación. Evita otro tipo de
bebidas alcohólicas.

3-     Deja a un lado las bebidas azucaradas

Los refrescos, jugos procesados y cocteles deben estar fuera de tu menú. Recuerda
que los alimentos y bebidas ricos en fructosa y sacarosa favorecen la síntesis de
triglicéridos en tu hígado.
4-     Disfruta del café

Según estudios, el consumo de café reduce la acumulación de grasa en el hígado y ejerce


un efecto protector contra el cáncer de hígado al disminuir la inflamación y el estrés
oxidativo de las células.

5-     Incluye alimentos ricos en vitamina C

Varias investigaciones revelan que el consumo de vitamina C en frutas, vegetales y


legumbres se asocia con una menor incidencia de hígado graso. Consume Lechosa, kiwi,
frutas rojas y piña, además de pimentón, brócoli, col rizada y coliflor.

6-     Mantén niveles adecuados de vitamina D

Cada vez surge mayor evidencia de que la deficiencia de este micronutriente se


asocia con el desarrollo de hígado graso. La vitamina D se encuentra en pescados como
salmón y atún, queso y yema de huevo, principalmente. 

7.- Régimen de ejercicios físicos

Es importante que además de diversificar tus alimentos, hagas ejercicios por lo


menos cuatro veces por semana por un mínimo de 30 minutos por sesión.

Ideas para un menú si tienes hígado graso:


Desayuno:

 Plato de frutas con yogur natural o leche baja en grasa y nueces mixtas
 Tortilla de dos claras y una yema con espinacas
 Dos rebanadas de pan integral
 Una taza de café con leche descremada adicionada con vitamina D

Almuerzo:

 Taza de algún tipo de grano.


 Salmón o atún a las brasas con guarnición de brócoli y otros vegetales.
 Ensalada verde con vinagreta a base de aceite de oliva, maíz o canola
 Una taza de piña natural picada

Cena:

 Tostadas horneadas con queso paisa bajo en grasa y aguacate.


Lcda. Celeste González –
Nutricionista

ALIMENTOS PARA COMPLEMENTAR CUIDADOS DEL HIGADO:

Según la medicina china el hígado es uno de los órganos que más atención
necesita. Cuidarlo te ayuda a depurar y a sentirte con más energía.

1. Las Alcachofas: De sabor amargo, contribuyen a la limpieza y desintoxicación del


hígado. Son ricas en antioxidante.

Tómalas 2 ó 3 veces por semana aliñadas con zumo de limón y crudas o cocidas al vapor.

2. Rábanos encurtidos: La fermentación aporta a los encurtidos un sabor ácido y bacterias


buenas para la flora intestinal. El sabor ácido, según la medicina tradicional china, se
asocia también al cuidado del hígado.

3. El brócoli: Esta crucífera es una de las verduras más recomendadas para la salud
hepática porque es rica en azufre, imprescindible en la desintoxicación del hígado.

Consume brócoli 3 ó 4 veces por semana.

4. Ajoporro: Junto con los ajos y las cebollas, el Ajoporro es también rico en compuestos
azufrados que ayudan a que el hígado funcione a la perfección.

Puedes comerlo a diario, en caldos, cremas o al vapor.

5. Los garbanzos:

Necesitamos aminoácidos para formar enzimas que intervienen en el metabolismo de


limpieza hepática. Los garbanzos, como otras legumbres, son una gran fuente de
aminoácidos.

Come garbanzos 4 veces a la semana junto a otras legumbres, como guisantes.

6. Germinados de frijol: Los germinados están repletos de vitaminas y minerales


biodisponibles, además de sumar enzimas a la dieta. Tanto unos como otros
aportan sustancias necesarias para el hígado.

Cada día añade un buen puñado a tus ensaladas.

7. Espárragos:
Ricos en agua y azufre, favorecen la eliminación de tóxicos por la orina y la formación de
aminoácidos azufrados necesarios en el proceso de limpieza.

Consume espárragos verdes 3 ó 4 veces por semana al vapor, al horno o salteados.

8. El nabo daikon:

Según la medicina tradicional china es una de las hortalizas indispensables para la correcta


eliminación a través de la orina de toxinas producidas en el hígado, ya que es una raíz con
mucha agua y favorece la función renal.

Añádelo a tu caldo vegetal o crema de verduras día sí día no.

9. Manzana:

No solo es rica en antioxidantes, necesarios para neutralizar los radicales libres que se
forman en la desintoxicación. También lo es en pectina, una fibra soluble que favorece
el tránsito intestinal y la eliminación de sustancias a través de las heces.

Toma 1 al día cruda.

10. Pepino:

Es otro alimento rico en agua y minerales que favorecen la excreción de tóxicos a través
de la orina. Resulta diurético y laxante. Además, es muy hidratante y bajo en calorías.

Añádelo a diario, semipelado, a tus zumos o batidos y a las ensaladas.


Prevención de la formación de cálculos renales
A continuación se presentan algunas recomendaciones en la dieta:
1. Ingiera abundante líquido. Se recomienda consumir de 2,5 - 3 litros
de líquido al día. Este líquido incluye preferiblemente agua, pero también
incluye caldos, té y refrescos.
2. Alcance un peso adecuado (índice de masa corporal entre 18,5 y
24,9). Varios estudios han señalado que el sobrepeso y la
obesidad aumentan el riesgo de desarrollar cálculos renales. Además la
obesidad puede provocar complicaciones tales
como hipertensión, diabetes, cáncer, entre otros.
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3. Controle la ingesta de sal; se recomienda menos de 2400 mg sodio


(6 g sal) al día. Algunos alimentos altos en sodio son: productos
enlatados y empacados, salsas preparadas, sal de mesa, carnes
adobadas y ahumadas, gaseosas, entre otros.
4. Limite el consumo de proteínas (huevo, carnes, pescado quesos,
mariscos) a 4-5 onzas (120-150 gramos) por día. Las proteínas
incrementan el riesgo de nefrolitiasis (condición en la cual las piedras
están presentes en la pelvis, los cálices del riñón o los uréteres) y la
pérdida de calcio por la orina.
5. Evitar el consumo de alcohol, ya que este incrementa el ácido úrico,
el calcio, fosfato y magnesio en la orina.
6. Dependiendo del tipo de cálculo se debe ELIMINAR  de la dieta.
Por ejemplo: Si tienen cálculos de calcio elimine el CALCIO de la dieta.

 De calcio: Ingerir menos de 400mg de calcio al día y menos de


1000 mg fosfato.
 De oxalato: Disminuir alimentos con ácido oxálico.
 De ácido úrico: Evitar alimentos con alto contenido de purinas:
semillas de soya, carnes (cerdo, res), embutidos y vísceras (riñón,
hígado), pescados (trucha, atún, sardinas, anchoas, patés, bebidas
alcohólicas, cereales integrales.
 De cistina: Evitar alimentos fuente de metionina.
 Alimentos con contenido ABUNDANTE de:
Calcio: Leche/yogur, quesos, espinacas, brócoli, frijoles blancos, soya,
almendras, higos secos
Fósforo: leche,  quesos, carnes, pescado, huevo, legumbres, nueces,
cereales integrales
Acido oxálico: Espinaca, berenjena, maní, chile dulce, pepino, nueces,
uvas, moras, tomate, papas, col, apio, te, puerros, chocolate, "cola"
Meteonina: Leche/yogur, queso, huevo, carnes, pescados. 
Si usted sufre de cáculos de fosfato/calcio, entonces puede comer:
carnes, pescados, cereal (trigo, arroz), frutas secas, huevos
arándanos, ciruelas. Restrinja frutas y verduras. 
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Si usted sufre de cálculos de oxalato/urato, entonces puede


comer: Leche/yogur, hortalizas, frutas (excepto arándanos, ciruelas).
Debe restringir el consumo de: carnes, pescados, huevos y cereales.
Son alimentos neutros los siguientes: azúcar, dulces, te o café, manteca,
margarina, aceites, maíz, tapioca
Las personas con ácido úrico elevado deben eliminarlos de la dieta los
alimentos neutros  ya que influyen en la formación y eliminación urinaria
del ácido úrico.
De lo contrario puede consumirlos con moderación (maximo 2 tazas de
café o té al dia, 4 cdtas azucar, 4 cdtas de aceite o margarina).

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