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Geotecnia

Tema 9: Obras viales. Investigaciones geológicas y geomorfológicas necesarias para el


trazado de caminos, puentes y ferrocarriles. Influencia de los deslizamientos, torrentes de
montaña, encauses, erosión. Terraplenes. Ensayos geotécnicos necesarios. Estabilización
de suelos, métodos.

 Obras Viales. Conceptos generales:


Este título hace referencia a las vías de comunicación terrestre tales como caminos
(pavimentos), puentes y ferrocarriles. En el trazado o diseño, la geología y la geotecnia
constituyen uno de los condicionantes más importantes. Estos aspectos deben tenerse en
cuenta desde el Estudio Informativo y resultaran relevantes cuando se deban escoger las
posibles soluciones a los problemas concretos que se puedan plantear.
Las investigaciones necesarias para el trazado de cualquier obra vial deben reunir los
siguientes estudios previos:
a) Estudios geologicos y estructurales generales :
1- Estudios geológicos y Topográficos (se efectúan después de determinar la factibilidad
del Proyecto) incluye relevamientos topográficos: medidas lineares y angulares, esto
permite definir la forma (si se debe hacer un terraplén o un desmonte) y las dimensiones
de la obra.
Geología y procedencia de materiales: se recoge y analiza la información Bibliográfica, los
mapas geológicos del área y la fotogeología de la zona, la que, conjuntamente con los
trabajos de campo, permitirán hacer una diferenciación de las distintas unidades
litoestratigráficas o formaciones geológicas y, con todo ello, confeccionar la cartografía
geológica de detalle del Proyecto. Incluye la determinación del rumbo y buzamiento de los
estratos que conforman el relieve, lo que sirve de base para la caracterización de las
distintas unidades geológico-geotécnicas.

2- Información hidrológica, hidrogeologica (nivel freático).


La caracterización hidrogeológica se realizará, habitualmente, a partir de la información
disponible sobre los puntos de agua inventariados en la zona durante las campañas de
prospecciones. A partir de los datos hidrogeológicos obtenidos y en el caso de que la
subrasante se encuentre debajo del nivel freático o se afecten niveles acuíferos. Se
efectuará un estudio hidrogeológico a fin de determinar la situación de la superficie
freática, dirección del flujo subterráneo y caudal de flujo para poder diseñar el sistema de
drenaje.

3- En los casos en que existieran extracciones o aprovechamientos de agua subterránea


en las inmediaciones del desmonte, se añadirá a la campaña un Estudio Geotécnico del
sector (con la información sobre los trabajos de campo y laboratorio realizados (STP-
resistencia al corte; saturación del suelo), así como su interpretación. Contiene una
descripción geotécnica del trazado, los planos de planta y perfiles geotécnicos, el estudio
de los materiales de los desmontes, rellenos, yacimientos, canteras y préstamos, la
caracterización de las explanadas e incluye en los apéndices necesarios, toda la
documentación que haya permitido desarrollar el estudio geotécnico.

4- Determinación del lugar de material de prestamo.


 Para los materiales de préstamo se realizan investigaciones geológicas en profundidad
ayudadas por sondeos geofísicos. Hay dos clases de obtención de estos materiales:
Por préstamo lateral, consisten en excavaciones laterales a lo largo del camino. Ej. Ruta
68.
Por préstamo de banco: el material proviene de un lugar donde existe la calidad y
cantidad requerida.
5- Informacion sísmica.

b) Estudios de detalle de la Obra:


1- Geomorfología detallada.
2- Cartografía: fotografías aereas, imágenes satelitales, mapas base (1:50.000-1:20.000).
3- Estudio de economia regional.

c) Relevamientos de superficie:
1- Determinación de volúmenes de suelo o roca en deslizamientos.
2- Pruebas in situ (STP-resistencia al corte; saturación del suelo, ensayos de densidad).
Caminos: Pavimentos
Un camino es toda ruta o sendero que conduce de un lugar a otro. En general consta de
un pavimento, el que pude definirse como la capa o conjunto de capas de materiales,
comprendida (s) entre la superficie de rodamiento y el nivel superior de la terracería
(subrasante). Sus principales funciones son las de proporcionar una adecuada distribución
de las cargas de manera que el suelo subyacente pueda soportarlas sin fallas o
deformación excesiva. Ofrecer una superficie lisa o uniforme, no resbaladiza, resistente a
la acción del tránsito y otros agentes perjudiciales como la intemperie (los elementos del
clima), el escurrimiento procedente de los arroyos o cauces esporádicos (ej. N. º 68, ruta
51), y la altura (N. º 52, Paso de Jama). Fig. 1.

Figura 1: Capas que constituyen el pavimento y la terracería.

Los caminos pueden ser diseñados en una amplia variedad de relieves. La Fig. 2, muestra
un camino sobre un terreno llano en el que se pueden diseñar terraplenes o desmontes.

Figura 2: camino sobre terreno llano

La Fig. 3, un camino de montaña que discurre sobre un terreno cuyos cambios


longitudinales y transversales son abruptos, requiriendo el mismo de terraplenes (T:
rellenos) y/o desmontes (D: excavaciones) para mantener un alineamiento horizontal y
vertical aceptable.
Figura 3: camino sobre terreno de montaña.

Toda obra requiere del análisis de los siguientes antecedentes:


 Geología y Topografía (se analiza el área del proyecto para determinar zonas de
desmontes y terraplenes –con estos datos se realiza el cálculo de volumen de suelo) y se
establecen los Parámetros Básicos de Diseño, las Alternativas de Trazado, Nivel de Servicio
del camino y Tránsito.
 Parámetros Definitivos y Sección Transversal del Camino.
 Estudio del Drenaje. Obras Hidráulicas.
 Estabilidad de Taludes.
 Movimiento de Suelos.
 Pliego y Documentación Complementaria.
 Impacto Ambiental.
 Diseño de Pavimentos.

Históricamente, los pavimentos han sido divididos en dos categorías: Flexibles y Rígidos.
Pavimentos Flexibles: Fig. 4.

Constan de tres capas de materiales representadas por una superficie de desgaste o


Carpeta asfáltica relativamente delgada construida sobre una capa base y sub-base,
apoyándose este conjunto sobre la terracerías constituida por la subrasante compactada y
el cuerpo del terraplén.
1) Carpeta asfáltica: constituida por material pétreo (Se usa el árido Binder, 3 a 8 mm de
diámetro) y un aglutinante asfaltico. Constituye la superficie de rodamiento propiamente
dicha. Debe proporcionar una superficie de rodamiento adecuada con textura y color
convenientes y resistir los efectos abrasivos del tráfico, además debe impedir el paso del
agua a las capas inferiores.
2) La base hidráulica se construye con material granular más o menos grueso,
directamente sobre la sub-base hidráulica. Pero la función principal es proporcionar un
elemento resistente que trasmita a la sub-base y a la subrasante los esfuerzos producidos
por el transito con la intensidad apropiada. La base debe también drenar el agua que
atraviesa la carpeta y evitar el ascenso capilar. Otra función es de carácter económico
porque permite reducir el espesor requerido por el pavimento.
3) La sub-base una de las principales funciones de esta capa es de carácter económico. Se
construye sobre la subrasante con materiales de menor calidad, con mayor contenido de
finos y menor exigencia en lo que se refiere a la granulometría, esto es debido al mayor
alejamiento de la sub-base de la superficie de rodamiento por lo que llegan esfuerzos de
menor intensidad.
Sus funciones son:
 Resistir las cargas de tránsito y transmitirlas adecuadamente a las terracerías.
 Servir de transición entre el material de base, generalmente granular más o menos
grueso y la subrasante.
 Absorber las deformaciones perjudiciales en la subrasante, por ejemplo cambios de
volúmenes asociados a cambios de humedad impidiendo que se reflejen en las superficies
del pavimento.
 Actuar como dren para desalojar el agua que se infiltre a través de las capas superiores
y para impedir la ascensión capilar de agua procedente de la terracería hacia la base.

Debajo de la sub-base hidráulica se presenta casi por lo general otra capa denominada
subrasante, todavía con menos requisitos de calidad que la sub-base, por la misma razón.
Finalmente, bajo la subrasante aparece el material convencional de la terracería o
terraplén o terreno natural sirve de relleno de zonas o superficies bajas o para logar
pendientes adecuadas a las obras. Se construyen con material de préstamo mediante
procesos de compactación. Cuando el material es de buena calidad, la capa subrasante (o
mejoramiento de terracería) será del mismo material, solo que tendrá un mejor
tratamiento constructivo en cuanto a la compactación.

Pavimentos Rígidos: consiste en una losa de concreto hidráulico y pueden o no tener una
capa sub-base entre la losa y la subrasante. Fig. 5.

 La losa o pavimento de concreto se usa con las mismas funciones que la carpeta
asfáltica en los pavimentos flexibles más la función de soportar y transmitir el nivel
adecuado de cargas que se le apliquen. Es una viga que distribuye las cargas por flexión. El
hormigón armado es una mezcla de cantos rodados (árido lavado-sin finos-de 1” =2,54cm)
con argamasa de yeso, arena y agua que se coloca sobre una armadura metálica.
Sub-base: Sus funciones son análogas a la de un Pavimentos Flexible y sirve también para
proporcionar una superficie uniforme que sirva de apoyo a la losa y facilite su colado,
protege también a la losa de cambios volumétricos en la subrasante que de otra manera
inducirían esfuerzos adicionales a aquella.

Funciones de las distintas capas de la terracerías:


 Terreno Natural o de Cimentación o Cuerpo del Terraplén : se define como la franja
de terreno que es afectada por la construcción del camino y su función es la de
soportar la cargas de la estructura del pavimento y de las terracerías sin olvidar las
cargas del tránsito. Será utilizada únicamente en porciones de caminos con
terraplén, su función principal es la de dar la altura necesaria para alojar las obras
de drenaje.
 Capa subrasante: La sub-rasante es la capa superficial del terreno natural
(plataforma).Tiene múltiples funciones como la de recibir y resistir las cargas de
transito desde la capa de pavimento y transmitirlas en forma adecuada a las capas
inferiores además, evitar que se contaminen las capas de pavimento cuando el
cuerpo del terraplén o el terreno sea material fino o arcilloso.

El estudio debe considerar los siguientes aspectos:


1) Granulometría: Clasificación: tipo de material.Clasificación SUCS (Sistema Unificado de
Clasificación de Suelos).
2) Humedad natural: con respecto a la humedad óptima para la compactación.Límites
Atterberg (Los ensayos se realizan en el laboratorio y miden la cohesión del terreno y su
contenido de humedad).
3) Ensayos CBR (capacidad de soporte de suelos y agregados compactados en laboratorio,
con una humedad óptima y niveles de compactación variables). Define el espesor de la
sub-base, base y carpeta (CBR) es un ensayo de rotura para obtener el valor de la
profundidad donde se produce la falla. La expresión que define al CBR, es la siguiente:
CBR= Q (carga unitaria del ensayo / carga unitaria patrón) * 100 (%)

CBR= (Q (Kg)/ 1360 Kg) x100


De la ecuación se puede ver que el número CBR, es un porcentaje de la carga unitaria
patrón. En la práctica el símbolo de (%) se quita y la relación se presenta simplemente por
el número entero. El CBR es el valor de resistencia del suelo al 95% de la máxima densidad
seca, a una penetración de carga de 0.1” (2.54 mm.).
4) Densidad (densidad natural del suelo).
Se define como densidad de un suelo (γ) a la relación entre su masa (tanto de la fracción
sólida como del agua que contiene (Ws+w) y su volumen (V):
γ =  Ws+w / V
En ocasiones puede resultar útil referirse a la densidad seca del material, considerada
como la relación entre la masa de las partículas sólidas y el volumen total del suelo. Dado
que la humedad del terreno puede ser variable, considerar la densidad seca permite
establecer un criterio comparativo entre suelos más o menos compactos con referencia a
un valor determinado de densidad como máxima. Un ejemplo habitual es la valoración del
grado de compactación de un terreno colocado en un relleno controlado, para la cual se
compara la densidad seca “in situ” con la densidad seca máxima obtenida mediante un
ensayo de referencia (habitualmente el denominado Proctor)
5) Proctor, para la compactación (tipo de equipo y número de pasadas).
6) Prueba de la Placa---se coloca en el suelo inalterado una placa de 30 cm de lado y se
agregan cargas para incrementar hasta multiplicar por 2 la carga admisible. Se efectúan
para medir la deformabilidad.
7) Triaxial.

Factores que influyen en el diseño de los Pavimentos Flexibles:


1) Resistencia Estructural.
2) La deformabilidad.
3) La Durabilidad.
4) El costo.
5) Los Requerimientos de conservación.
6) La comodidad.

1) Características de los materiales o Resistencia Estructural : La metodología para el


análisis de la resistencia de un pavimento es proporcionada por la Mecánica de Suelos,
mediante la teoría del Esfuerzo Cortante. En los pavimentos flexibles se considera que los
esfuerzos son la principal causa de fallas desde el punto de vista estructural. Actúan
además los esfuerzos adicionales producidos por la aceleración y frenaje de los vehículos
y los esfuerzos de tensión que se desarrollan en los niveles superiores de las estructuras.
Otro factor que influye es la resistencia de los materiales que constituyen el pavimento
debido a la capacidad de carga que pueden desarrollar las capas constituyentes para
soportar adecuadamente las cargas del tránsito. Los materiales que constituyen la
terracería y la subrasante influyen en el espesor y en la compactación requerida para un
pavimento flexible. En cambio para un pavimento rígido influye poco en espesor pero
bastante en el compactamiento.

2) La deformabilidad: Las cargas de el transito producen en el pavimento deformaciones


elásticas que son de recuperación instantánea y plásticas que son aquellas que
permanecen en el pavimento después de cesar la causa deformadora. Ambas se miden
mediante pruebas efectuadas en los materiales utilizados (pruebas de placa). Existen dos
criterios para fijar la deformación máxima permisible: I) Deformación producida por la
falla del camino es decir la condición en la que el pavimento llega a perder las
características de servicio para las que fue diseñado (criterio AASHO o de Índice de
Servicio) o II) se toma en cuenta la deformación que obligue a una nueva reconstrucción
de determinada importancia económica (Criterio británico).

3) La Durabilidad: La durabilidad está ligada a factores sociales, económicos y climáticos.


En un camino de muy alto tránsito y gran importancia económica se requerirán
pavimentos muy duraderos a fin de no tener que recurrir a interrupciones. El tránsito
produce las cargas que va a soportar el pavimento por ello es importante saber la
magnitud de las cargas, la frecuencia y las velocidades de aplicación (los pavimentos
generalmente están más destruidos en subidas que en bajadas). El factor climático influye
en la durabilidad del pavimento, hay acción directa de las precipitaciones. En regiones
donde estas producen el ascenso del nivel freático se deben construir estructuras de
drenaje. Ej. Ruta 68 (camino a Cafayate, cerca del cauce del Río Las Conchas). Las heladas
y los cambios bruscos de temperatura también afectan el pavimento.

4) El costo: como toda obra vial un pavimento representa un balance entre los requisitos
de resistencia y estabilidad y el costo. Un diseño correcto será el que llegue a satisfacer
requerimientos del servicio a costo mínimo. En la evaluación del costo se debe tener en
cuenta:
 El tipo de pavimento a emplear. Los pavimentos rígidos demandan poco gasto de
conservación y se deterioran poco, pero el costo de construcción es alto y están
condicionados a la disponibilidad de los materiales necesarios y a un equipo de
construcción especializado. Los pavimentos flexibles requieren menor inversión
inicial, pero una conservación más costosa. Los semirígidos pueden constituir
soluciones económicas cuando los materiales de que dispone para la construcción
los hacen convenientes, pues permiten apreciables reducciones en los espesores.
 La compactación del terreno.
 Materiales de préstamo
Los factores básicos que regulan la prospección de una roca son:
1) Calidad: se realizan análisis de muestras representativas de toda la cantera: análisis
químicos (muestras de sondeos de percusión), propiedades físicas (Testigos corona).
Rumbo y buzamiento de estratos.
2) Cubicación en afloramientos: se puede estimar el volumen a extraer a simple vista. Si
no hay afloramientos, la cubicación se realiza por sondeos y estudios geofísicos.
3) Factores económicos: transporte del material, condiciones de desagüe de la cantera,
desmonte.
4) Los Requerimientos de conservación: Los factores que influyen son: climáticos, la
intensidad del tránsito, se trata de prever el crecimiento futuro tanto del número como
del tipo de vehículos circulantes. Las condiciones de drenaje, el comportamiento futuro
de las terracerías, sus deformaciones, derrumbes, saturaciones locales, etc. La
degradación estructural de los materiales por carga repetida.
5) La comodidad: Hace referencia a la comodidad que el usuario requiere para transitar a
la velocidad del proyecto, especialmente en autopistas y caminos de primer orden. Dentro
de este requisito la seguridad es el más importante. La estética y su efecto en las
reacciones psicológicas del conductor merecen también consideración. Las deformaciones
longitudinales de un pavimento por ejemplo, pueden constituir un atentado contra la
comodidad.
Puentes
Los puentes tienen como finalidad el salvar un obstáculo, como un valle, río o carretera,
con el fin de comunicar dos puntos con un margen adecuado de seguridad, permitiendo el
paso de personas, vehículos o trenes. En la antigüedad, se utilizaba principalmente
madera y posteriormente roca. Actualmente los principales materiales que se emplean
para la edificación de los puentes son: Piedra, Madera, Acero, Hormigón armado
(concreto), Hormigón pretensado, Hormigón postensado, Mixtos.
El diseño de cada puente varía dependiendo de su función y de la naturaleza del terreno o
calidad del suelo o roca donde habrá de apoyarse. Al momento de analizar el diseño de un
puente es de suma importancia el régimen del río por encima del que cruza. En su aspecto
técnico, la ingeniería de un puente tradicional diferencia, además de los cimientos, dos
partes esenciales: la superestructura y la infraestructura. Fig. 6.
Figura 6: Diseño de un puente.

La superestructura, Fig. 6, constituye el puente propiamente dicho. Descansa sobre los


estribos o está fijada a ellos. Los estribos son los soportes terminales del puente. Puede
tener postes, pasamanos, tableros, durmientes o rieles. La superestructura puede constar
de una viga o de muchas luces (secciones) y consistir en un número de vigas mutuamente
independientes sostenidas sobre los pilares y estribos.
 Tablero: Base superior de rodaje que sirve además para repartir la carga a las vigas. En
casos especiales el tablero puede estar estructurado para sostener una vía férrea, un canal
de navegación, un canal de riego.

La infraestructura, soporta la superestructura y consta de:


A) Pilas: Son los soportes intermedios entre los estribos. Constan de tres partes:
1) Coronamiento: es la parte superior donde se alojan los aparatos de apoyo. Está
sometida a cargas concentradas.
2) Elevación: es el cuerpo de la pila. Resiste el empuje de las aguas.
3) Fundación: es la parte de la estructura que queda enterrada y transmite cargas al
terreno.
4) Luz: Distancia media entre las paredes internas de pilas o bastiones consecutivos.

B) Estribos: Los estribos son los soportes terminales del puente. Evidentemente un
puente tiene dos estribos y el tráfico tiene que pasar sobre ellos para entrar o salir.
Reciben el empuje de la superestructura y de la tierra del terraplén de acceso. También
actúan como muros de contención. Están constituidos por tres partes: el Coronamiento,
Elevación y Fundación y llevan aleros aguas arriba y aguas abajo.
C) Tramo: Parte del puente que sostienen bastiones o pilastras.

Tipos de puentes
Existen cinco tipos principales de puentes: I) puentes viga o puente simple, II) en ménsula
(= cantiléver o voladizo), III) en arco, IV) colgantes, V) construcción rígida o atirantados. El
resto son derivados de estos. Fig. 7.

Figura 7: Modelos básicos de los cincos tipos principales de puentes.

I) Puente viga o puente simple: Están formados fundamentalmente por elementos


horizontales que se apoyan en sus extremos sobre soportes o estribos. Son los puentes
más comunes para carreteras. Mientras que la fuerza, que se transmite a través de los
pilares es vertical y hacia abajo y, por lo tanto, éstos se ven sometidos a esfuerzos de
compresión, las vigas o elementos horizontales tienden a flexionarse como consecuencia
de las cargas que soportan. El esfuerzo de flexión supone una compresión en la zona
superior de las vigas y una tracción en la inferior. Fotos 1 y 2.
Fotos 1y 2: Puentes en viga.
II) En ménsula (= cantiléver o voladizo) : Un puente en ménsula es un puente en el cual
una o más vigas principales trabajan como ménsula o voladizo. Normalmente se
construyen por la técnica de volados sucesivos, mediante ménsulas consecutivas que se
proyectan en el espacio a partir de la ménsula previa. Los pequeños puentes peatonales
pueden construirse con vigas simples, pero los puentes de mayor importancia se
construyen con grandes estructuras reticuladas de acero. Foto 3.

Foto 3: El Puente de Quebec (Canadá) tiene una viga suspendida de dos ménsulas por encima y por debajo
de la carretera.

III)En arco: Están constituidos básicamente por una sección curvada hacia arriba que se
apoya en unos soportes o estribos y que abarca una luz o espacio vacío. La sección
curvada del puente está siempre sometida a esfuerzos de compresión, igual que los
soportes, tanto del arco como los auxiliares que sustentan el tablero. La fundación se
realiza sobre roca firme. Los esfuerzos se descomponen hacia los estribos sin necesidad de
pilas verticales. Foto 4 y 5.

Foto 4:Puente de Alcántara: trabaja a compresión en Foto 5: El tablero está encima del arco
la mayor parte de la estructura. que es quien soporta el peso del puente.
III) Colgantes: Un puente colgante es un puente cuyo tablero (por el que se circula), en vez
de estar apoyado sobre pilas o arcos se sujeta mediante cables o piezas atirantadas desde
una estructura a la que van sujetas. Una de sus variantes más conocidas es el que tiene
una catenaria formada por numerosos cables de acero, de la que se suspende el tablero
del puente mediante tirantes verticales. La catenaria cuelga de dos torres de suficiente
altura, encargadas de llevar las cargas al suelo.
Catenaria es la curva que describe una cadena suspendida por sus extremos, sometida a un campo
gravitatorio uniforme.

Con excepción de las torres o pilares que soportan los cables portantes y que están
sometidos a esfuerzos de compresión, los demás elementos del puente, es decir, cables y
tirantes, están sometidos a esfuerzos de tracción. Fotos 6 y 7.

Foto 6: Puente "Octavio Frías de Oliveira" en São Paulo, Brasil. Es el único puente atirantado en el mundo
con dos pistas curvas sostenidas por una única estructura

Foto 7: Puente Rosario-Victoria (Santa Fe- Entre Ríos), trabaja a tracción en la zona superior de la estructura
y compresión en la inferior. Los puentes atirantados son una derivación de este estilo.
V) construcción rígida: es aquella estructura en la que la superestructura trabaja en forma
integral con la subestructura, y la estructura de soporte es lo suficientemente rígida para
disminuir apreciablemente los momentos reflectores en el centro de la luz. Combinan las
planchas y estribos de los puentes con las vigas y estribos de las de viga; esta combinación
forma unidades sencillas sin articulaciones de unión entre las piezas. Se construyen de
hormigón armado o pretensado o de armaduras de acero rodeadas de hormigón.
Comúnmente se usan para separar en niveles los cruces de carreteras y ferrocarriles. En
estos cruces suele ser conveniente que la diferencia de niveles sea mínima. Fig. 8.

Figura 8: Partes de un puente rígido.

El resto de los puentes son derivados de estos.


Un puente es diseñado para ferrocarriles, tráfico automovilístico o peatonal, tuberías de
gas o agua para su transporte o tráfico marítimo. En algunos casos puede haber
restricciones en su uso. Por ejemplo, puede ser un puente en una autopista y estar
prohibido para peatones y bicicletas, o un puente peatonal, posiblemente también para
bicicletas.
Un acueducto es un puente que transporta agua, asemejando a un viaducto, que es un
puente que conecta puntos de altura semejante.

Estudios necesarios para el proyecto de un Puente:


Los estudios para el proyecto de un Puente son todos aquellos que proporcionan los datos
necesarios para la elaboración de los anteproyectos y proyecto de un puente:
1) Estudios topográficos.
2) Estudios Hidrológicos e Hidráulicos.
3) Estudios geológicos y geotécnicos.
4) Estudio de Riesgo sísmico.
5) Estudio de Impacto ambiental.
6) Estudio de Tráfico.
7) Estudios complementarios.
8) Estudios de trazo de vía.

1) Estudios topográficos.
Los estudios topográficos además de dar el nombre del río o barranca, o camino
correspondiente, tramos del camino en el cual se encuentra, etc. tienen como objetivos:
a) Realizar los trabajos de campo que permitan elaborar los planos topográficos
correspondientes. Los estudios topográficos deberán comprender:
Levantamiento topográfico general de la zona del proyecto, documentado en planos a
escala entre 1:500 y 1:2.000 con curvas de nivel a intervalos de 1m y comprendiendo por
lo menos 100 m a cada lado del puente en dirección longitudinal (correspondiente al eje
de la carretera) y en dirección transversal (la del río u otro obstáculo a ser transpuesto).

b) Proporcionar la información precisa de la ubicación y las dimensiones de los elementos


estructurales.

c) Proporcionar información de base para los estudios de hidrología e hidráulica, geología,


geotecnia, así como la ecología y sus efectos en el medio ambiente.
2) Estudios Hidrológicos e Hidráulicos.
Los objetivos de estos estudios son establecer las características hidrológicas de los
regímenes de avenidas máximas y extraordinarias y los factores hidráulicos que llevan a
una real apreciación del comportamiento hidráulico del río y que permiten definir los
requisitos mínimos del puente y su ubicación optima en función de los niveles de
seguridad o riesgos permitidos o aceptables para las características particulares de la
estructura.
En el caso de puentes sobre cursos de agua deberá hacerse un levantamiento detallado
del fondo. Será necesario indicar en planos la dirección del curso del agua y los límites
aproximados de la zona inundable en las condiciones de aguas máximas y mínimas, así
como los observados en eventos de carácter excepcional. Cuando las circunstancias lo
ameriten, deberán indicarse los meandros del río. Fig. 9.

Figura 9: Fórmula para el cálculo de la profundidad de socavación de una corriente.

h=K x H x V
Dónde:
h= Profundidades de socavación general (m) (me da la pendiente: Imp.)
K= constante del terreno (s/m)
V= velocidad del flujo
H= profundidad de la corriente (m)
Imp.= Pendiente aguas arriba y abajo.

Los estudios de hidrología e hidráulica para el diseño de puentes deben permitir


establecer lo siguiente:
 Ubicación optima del cruce.
 Caudal máximo de diseño hasta la ubicación del cruce.
 Comportamiento hidráulico del rio en el tramo que comprende el cruce.
 Área de flujo a ser confinada por el puente.
 Nivel máximo de aguas (NMA) en la ubicación del puente.
 Nivel mínimo recomendable para el tablero del puente.
 Profundidades de socavación general, por contracción y local =h.
 Profundidad mínima recomendable para la ubicación de la cimentación según su tipo.
 Datos sobre ríos de caudal constante: la información es de índole hidráulica.
 Datos sobre ríos de caudal variable, presentan los siguientes inconvenientes:
Inundaciones, por lo que debe proveerse un buen drenaje.
 Variabilidad del lecho.
 Los efectos de la socavación son acumulativos, si la sección no es rellenada la
socavación aumentará su profundidad. Los socavones llegan a provocar el colapso del
puente: ej. Puente sobre la Ruta 68. La cota de fundación debe ser fijada por debajo del
nivel calculado para los socavones más profundos.

3) Estudios geológicos y geotécnicos.


Los objetivos de los estudios geológicos son establecer las características geológicas, tanto
locales como generales de las diferentes formaciones geológicas que se encuentran
identificando tanto su distribución como sus características geotécnicas.
El programa de estudios deberá considerar exploraciones de campo, cuya cantidad será
determinada con base a la envergadura del proyecto.
Los estudios geológicos comprenderán:
Descripción geomorfológica.
Zonificación geológica de la zona.
Identificación y características de fallas geológicas.
Definición de zonas de deslizamientos y aluviones sucedidos en el pasado y de potencial
ocurrencia en el futuro.

Los objetivos de los estudios geotécnicos son establecer las características geotécnicas, es
decir, las propiedades físicas y mecánicas de los suelos para el diseño de cimentaciones
estables. Los estudios deberán comprender la zona de ubicación del puente, estribos,
pilares y accesos.
Se deberán realizar:
 Ensayos de campo en suelos y/o rocas
 Ensayos de laboratorio en muestras de suelo y/o roca extraídas en la zona, cuya
cantidad será determinada con base a la envergadura del proyecto en términos de
su longitud y las condiciones del suelo.
 Descripción de las condiciones del suelo, estratigrafía e identificación de los
estratos o base rocosa.
 Definición de tipos y profundidades de cimentación adecuada, así como
parámetros geotécnicos preliminares para el diseño del puente al nivel de
anteproyecto.
 Presentación de los resultados y recomendaciones sobre especificaciones
constructivas y obras de protección.

Limitaciones geotécnicas
Las amenazas que afectan toda obra vial se denominan limitaciones geotécnicas las que,
si se identifican adecuadamente pueden manejarse para producir un impacto mínimo. La
mayoría de las limitaciones geotécnicas pueden manejarse realizando diseños viales
teniendo en cuenta la geotecnia. La identificación de las limitaciones geológicas debe
efectuarse:
 En la oficina (utilizando planos geológicos, fotografías etc.)
 En el campo (realizando exploración geológica y geotécnica)
 En la obra (inspectores de geología y geotecnia).

Antes de realizar el diseño, deben investigarse cuales son las limitaciones geológicas del
Trazado propuesto, por ejemplo: en un camino de montaña, se identifican la/o las zonas
afectadas por deslizamientos, la probabilidad de ocurrencia del fenómeno y se determina
la magnitud de su impacto, se deben analizar además las alternativas de manejo y diseñar
las obras requeridas para atenuar el impacto u ocurrencia del fenómeno.
Las limitaciones se pueden caracterizar mediante un estudio geológico/geomorfológico y
geotécnico detallado, entre ellas se encuentran:

Subsidencia (hundimiento generalizado del terreno) causas de la subsidencia:


 Extracción de agua subterránea
 Minería subterránea
 Explotación de petróleo o gas
 Presencia de cavernas
 Sismicidad
 Fallas geológicas
 asentamientos por consolidación de los terraplenes y puentes por la baja capacidad de
soporte de los materiales (por ejemplo construcciones viales en terrenos arcillosos) para:
pavimentos, terraplenes, puentes y muros. Foto 8.

Foto 8: Subsidencia por construcción en terrenos mal estabilizados.

La subsidencia, al igual que los procesos relacionados con los movimientos de ladera o
procesos de remoción en masa están directamente relacionados con la estabilidad de
taludes. Los movimientos de ladera, por su gran extensión y frecuencia constituyen un
riesgo geológico muy importante, que afecta a edificios, vías de comunicación, cauces y
embalses, etc.
Los movimientos de ladera engloban diferentes tipos de procesos, como los
deslizamientos, desprendimientos, flujos y coladas de barro o derrubios, reptaciones,
avalanchas rocosas etc.

Torrentes de montaña= Flujo (Flow): Es un tipo de movimiento en masa que durante su


desplazamiento exhibe un comportamiento semejante al de un fluido).
Hungr et al. (2001), clasifican los flujos de acuerdo con el tipo y propiedades del material
involucrado, la humedad, la velocidad, el confinamiento lateral y otras características que
los hacen distinguibles; así mismo, aportan definiciones que enfatizan aspectos de uso
práctico útiles para el estudio de amenazas.
Es importante hacer la distinción entre los diferentes tipos de flujos cuando se analiza la
amenaza a que está sometida un área ya que, el potencial destructivo es característico de
cada tipo. Por ejemplo, es importante establecer la diferencia entre flujo de detritos y
avalancha de detritos. En el caso del flujo de detritos (movimiento en masa canalizado) el
estudio de amenaza se deberá concentrar en una trayectoria pre-establecida o canal y en
el área de depositación o abanico, áreas potencialmente afectadas. En cambio, una
avalancha de detritos puede desplazarse sobre áreas abiertas en laderas de alta
pendiente.
Otra distinción importante de uso práctico para el estudio de amenazas es aquella entre
flujos de detritos y crecidas de detritos (inundaciones o avenidas de detritos). Las crecidas
(debris Flood) presentan un potencial destructivo relativamente bajo con respecto a los
flujos de detritos (debris Flow) (Hungr, 2005). Foto 9.

Foto 9: Extremo distal de un flujo con caídas de bloques de la Fm. Puncoviscana. Aº Las Chuñas, RNº 33.

Flujo de detritos (Debris flows)


Es un flujo muy rápido a extremadamente rápido de detritos saturados, no plásticos
(Índice de plasticidad menor al 5%), que transcurre principalmente confinado a lo largo de
un canal o cauce con pendiente pronunciada. Se inician como uno o varios deslizamientos
superficiales de detritos en las cabeceras o por inestabilidad de segmentos del cauce en
canales de pendientes fuertes. Los flujos de detritos incorporan gran cantidad de material
saturado en su trayectoria al descender en el canal y finalmente los depositan en abanicos
de detritos (Fig. 10). Sus depósitos tienen rasgos característicos como albardones o diques
longitudinales, canales en forma de u, trenes de bloques rocosos y grandes bloques
individuales. Los flujos de detritos desarrollan pulsos usualmente con acumulación de
bloques en el frente de onda (Figura 11). Como resultado del desarrollo de pulsos, los
caudales pico de los flujos de detritos pueden exceder en varios niveles de magnitud a los
caudales pico de inundaciones grandes. Esta característica hace que los flujos de detritos
tengan un alto potencial destructivo.

Figura 10: Flujos de detritos

Figura 11: Corte esquemático típico de un flujo de detritos. Frente con bloques de un pulso del flujo de
detritos

Terraplenes.
El moderno desarrollo de las actuales vías de comunicación, tales como canales, caminos,
ferrocarriles, presas de tierra y la realización de obras de protección contra la acción
erosiva de ríos han puesto al diseño y construcción de taludes en un plano de importancia
de primer orden. Desde el advenimiento de la Mecánica de Suelos y la Mecánica de Rocas
y la Geología Aplicada, fue posible aplicar normas y criterios al estudio racional de los
taludes, estas normas apuntan a la durabilidad del talud a lo largo del tiempo. Foto 10.
Foto 10: Deslizamiento superficial del terraplén de un camino vial. Se puede observar la superficie de falla y
el depósito del material al pie del talud.

Definición de Talud:
Se conoce con el nombre genérico de talud cualquier superficie inclinada respecto a la
horizontal que hayan de adoptar permanentemente las estructuras de tierra.
Cuando el talud se produce en forma natural, sin intervención humana, se denomina
ladera natural o simplemente ladera. Cuando los taludes son hechos por el hombre se
denominan cortes o taludes artificiales, según sea la génesis de su formación, cuando se
realiza una excavación se denomina desmonte, en tantoque cuando se realiza una
elevación se denomina terraplen. Foto 11.

Foto 11: Vista del talud que forma parte del terraplén.

El resultado del deslizamiento de un talud puede ser a menudo catastrófico, con la


perdida de considerables bienes y muchas vidas. Por otro lado el costo de rebajar un talud
para lacanzar mayor estabildad suel ser muy grande. Es por esto que la estabilidad se debe
asegurar.
Si a lo largo de una superficie potencial de deslizamiento, las tensiones tangenciales
debido al peso propio o a cualquier otra causa (como agua de infiltración, peso de una
estructura o de un terremoto) superan la resistencia al corte del suelo, se produce un
deslizamiento de una superficie del terreno. Fig. 12.

Figura 12: ladra en la que se muestra una potencial superficie de deslizamiento.

La Fig. 12 muestra una ladera natural sobre la cual se ha construido un edificio. El


incremento de tensiones tangenciales provocado por el edificio y la posible disminución
de resistencia al corte del terreno por el agua infiltrada desde aquel pueden provocar una
falla del talud.
La presa de tierra que aparece en la Fig. 13 a- tiene un núcleo de tierra compactado cuya
estabilidad es necesario estudiar. Durante el proyecto de la presa se deben comparar las
tensiones tangenciales con la resistencia al corte para diversas superficies potenciales de
deslizamiento que pasan por el núcleo arcilloso.

Fig. 13 a-

Las Fig. 13 b- y 13 c- muestran excavaciones para un edificio y una conducción. La


excavación para el edificio es una excavación entibada y la de la conducción sin apuntalar,
en zanja. Al proyectarse debe comprobarse que no se supere la resistencia al corte del
talud ya que esto daría lugar a un derrumbe hacia el interior.

Fig. 13 b- y 13 c-
La Fig. 13 d- muestra el esquema de un canal. Generalmente se construyen excavando el
terreno natural, aunque a veces se construyen con bordes compactados. Los taludes
laterales del canal deben tener suficiente seguridad contra un deslizamiento del tipo ya
descripto y contra los efectos del agua que circula por el interior.
Fig. 13 d-

En la Fig. 13 e- se observa el corte de una vía terrestre (carretera, ferrocarril) en zona


montañosa.
Será necesario analizar la estabilidad de taludes, entendiéndose como tal la inclinación
apropiada en un corte o en un terraplén, casi siempre la más escarpada que se sostenga
el tiempo necesario sin caerse.
Fig. 13 e-

Tipos y causas de fallas más comunes:


Los tipos de fallas más comunes en los taludes son las que se mencionan a continuación:
1.- Falla por deslizamiento superficial (creeping o reptación).
2.- Falla por movimiento del cuerpo del talud.
3.- Fallas por erosión.
4.- Fallas por licuación.
5.- Fallas por falta de capacidad de carga del terreno de cimentación.
6.- Flujos.

1.- Falla por deslizamiento superficial (creeping o reptación).


Cualquier talud está sujeto a fuerzas naturales, que tienden a hacer que las partículas del
suelo próximas a la superficie se deslicen hacia abajo. Esta falla se refiere a un proceso
más o menos continuo y por lo general lento que se presenta en la zona superficial de
algunas laderas naturales.
El creep suele involucrar grandes áreas y el movimiento superficial se produce sin una
transición brusca entre la parte superficial móvil y las masas inmóviles más profundas, No
se puede hablar de una superficie de deslizamiento. Foto 12.
Existen dos clases de deslizamientos: el estacional, que afecta solo a la corteza superficial
de la ladera y que sufre la influencia de los cambios climáticos en forma de expansiones y
contracciones térmicas o por humedecimiento y sacado y existe en mayor o menor grado
variando su intensidad según la época del año, y el masivo, que afecta a las capas más
profundas y es debido al efecto gravitacional que es prácticamente constante.

Foto 12: Deslizamiento producido por la saturación del suelo. Además puede observarse la inclinación de los
arboles respecto de la vertical.

El fenómeno es más intenso cerca de la superficie, y la velocidad de movimiento ladera


debajo de un creep típico puede ser muy baja y rara vez excede la de algunos centímetros
al año.
El fenómeno se pone de manifiesto cuando se nota que los árboles y postes están
inclinados, respecto de la vertical, cuando se evidencian agrietamientos o
escalonamientos en el talud. Fig. 14.
Figura 14: Indicadores que indican la presencia de creeping.

2.- Falla por


movimiento del cuerpo
del talud.
Pueden ocurrir en
los taludes
movimientos bruscos
que afecten a masas considerables de suelo, con superficies de falla que penetran
profundamente en su cuerpo, afectando o no al terreno de fundación. Se considera que la
superficie de falla se forma cuando los esfuerzos cortantes sobrepasan la resistencia al
corte del material, a consecuencia de lo cual sobreviene la ruptura con la formación de
una superficie de deslizamiento a lo largo de la cual se produce la falla.
Estos fenómenos se denominan deslizamientos de tierra y pueden estudiarse dos tipos
bien diferenciados:
2. 1. Falla o Deslizamiento rotacional
En primer lugar se define una superficie curva a lo largo de la cual ocurre el movimiento
del talud. Esta superficie forma una traza con el plano del papel que puede asimilarse a
una circunferencia (pueden existir formas alfo diferentes según la secuencia geológica
local, el perfil estratigráfico y la naturaleza de los materiales). Estas fallas son llamadas de
rotación. Fig. 15.
Este tipo de fallas ocurren por lo general en materiales arcillosos homogéneos o en suelos
cuyo comportamiento mecánico está regido por la fracción arcillosa.

Figura 15: Falla por rotación.


Las fallas por rotación pueden presentarse pasando la superficie de falla por el pie del
talud, sin afectar el terreno de cimentación, Fig. 16 a.- o pasando adelante del pie,
afectando el terreno en el que el talud se apoya, Fig. 16 b.- se llama falla por la base.
Además pueden presentarse Fallas locales que ocuren en el cuerpo del talud, Fig. 16 c.-,
pero afectando zonas relativamente superficiales.

Figura 16 a.-: Falla por el pie del talud Figura 16 b.-: Falla por la base del talud

Figura 16 c.-: Fallas locales

2. 1. Falla o Deslizamiento traslacional


Son fallas que ocurren a lo largo de superficies débiles, asimilables a un plano en el cuerpo
del talud o en su terreno de cimentación. Estos planos débiles suelen ser horizontales o
muy poco inclinados respecto a la horizontal, Estas son fallas por traslación. Fig. 17 y 18.

Figura 17: Falla en bloque propiciada por la estratificación del terreno natural.

Figura 18: Falla por desprendimiento superficial.

3.- Fallas por erosión.


Resultan de los efectos de la acción de agentes erosivos sobre los materiales que
componen el talud. El viento y el agua (lluvia o escurrimiento superficial) son los agentes
cuyos efectos se manifiestan en irregularidades, socavamientos y canalizaciones en el
plano del talud.
Son importantes las fallas por tubificación. Fenómeno frecuente en terraplenes de
caminos o presas de tierra que han embalsado agua y se ha generado un escurrimiento a
través del cuerpo del terraplén. Estos fenómenos se manifiestan en terraplenes
construidos por suelos dispersivos. La tubificación comienza cuando hay arrastre de
partículas de suelo en la masa de suelo por efecto de las fuerzas erosivas. Una vez que las
partículas comienzan a ser removidas van quedando en el suelo pequeños canales, por los
que el agua circula a mayor velocidad, con mayor poder de arrastre, de manera que la
tubificación tiende a crecer continuamente. Foto 13.
Foto 13. Tubo de sufusión ubicado en la margen de la ruta en donde se puede observar la luz al final
perteneciente al nivel de la cárcava. RNº 68.

4.- Fallas por licuación.


Si una masa de suelo perdiera repentinamente su resistencia se comportaría como un
líquido, fluiría cuesta abajo para extenderse sobre los terrenos llanos situados más abajo.
La causa básica de estas fallas es el aumento de las presiones de poros en la masa de suelo
y que va creciendo hasta que la resistencia del suelo es insuficiente para soportar la carga.
Si el material es arena suelta, el comportamiento contractivo contribuye al aumento de la
presión de agua y la perdida de resistencia. Foto 14.

Foto 14: ruta con problemas de licuación

5.- Fallas por falta de capacidad de carga del terreno de cimentación.


Este tipo de fallas se producen cuando se construyen terraplenes de obras viales sobre
terrenos pantanosos o en valles rellenados con arcilla o limo blando. Las roturas por la
base pueden producirse de diferentes maneras:
 El terraplén puede hundirse en masa dentro del suelo que lo sostiene, accidente
que se llama falla por hundimiento. Fig. 19 a y b.
 Colapso: Asentamiento rápido al saturase el suelo, ocurre por ejemplo cuando se
produce la saturación de suelos limosos. Fotos 15 y 16.
 El terraplén junto con la capa de suelo que lo sostiene, puede extenderse
deslizándose sobre un estrato inferior de arcilla excepcionalmente blanda o sobre
estratos de arena o limo que contiene agua a presión y se denomina falla por
extensión. Fig. 20.

Figura 19: ondulaciones de fango y subsidencia del Figura 19: asentamiento del terraplén
Terraplén debido a cortante en la capa de arcilla debido a consolidación de suelos compresibles

Figura 20: deslizamiento alargado por cortante en un estrato de arcilla blanda.

Fotos 15 y 16: Colapso

6.- Flujos.
Se refiere este tipo de falla a movimientos más o menos rápidos de una parte de la ladera
natural, de tal manera que el movimiento en si y la distribución aparente de velocidades y
desplazamientos se asemeja al comportamiento de un líquido viscoso. Foto 17.

Foto 17: Flujo afectando un talud atravesado por una ruta.


Definición de estabilidad.
Se entiende por estabilidad a la seguridad de una masa de tierra contra la falla o
movimiento. La primera medida es determinar cuál será la inclinación apropiada en un
corte o terraplén, casi siempre la más apropiada será la más escarpada que se sostenga el
tiempo necesario sin caerse. Este es el centro del problema y la razón de estudio.
Los problemas relacionados con la estabilidad de las laderas naturales difieren de los que
se presentan en taludes construidos por el ingeniero, es decir que son distintos los
problemas de los cortes de laderas y los d los terraplenes. Las diferencias radican, en
primer lugar en la naturaleza de los materiales involucrados y, en segundo en las
circunstancias en las que se formó el talud y su historia geológica, de las condiciones
climáticas y de la influencia que el hombre ejerce o haya ejercido en el pasado. Esta
historia y génesis de formación de laderas y taludes definen aspectos tan importantes
como la configuración de los suelos y las rocas, o el flujo de las aguas subterráneas a
través de los suelos que forman la ladera o el talud, el cual influye decisivamente en las
condiciones de estabilidad.

F Función lineal y=c+x


X= 0, y=c
X= a, y= c+a
Calculo de estabilidad
La naturaleza y homogeneidad de los materiales constitutivos son básicas para plantear y
definir el problema de estabilidad de un talud.
Los métodos de cálculo, para definir la estabilidad, establecen un mecanismo cinemático
de falla, en el cual se analizan las fuerzas tendientes a producir el movimiento como
fuerzas de gravedad, filtración, presión de agua, etc. (fuerzas motoras), las cuales se han
de comparar con las fuerzas que tienden a que el mecanismo de falla no se produzca
como la resistencia del terreno, raíces y otras fuerzas resistentes.
Los métodos de cálculo que se proponen presuponen una homogeneidad de los
materiales, estratificación, disposición, que muy pocas veces coincidirá con obras reales.
Otras formas de falla como los flujos, erosión, etc. no se pueden analizar
matemáticamente porque presentan una gran variedad y complejidad.
El propósito del cálculo de estabilidad se centra en dos temas principales. El primero es
determinar la resistencia al corte “s” de los suelos a partir de deslizamientos ya
producidos. El segundo es la determinación del coeficiente de seguridad “F” que define la
estabilidad del talud.

A continuación se mencionan los métodos de cálculos más empleados indicando a qué


tipos de fallas se pueden aplicar:

1.- Cálculo de “s” a partir de deslizamientos ocurridos


Durante la construcción, suelen producirse roturas locales en los desmontes o terraplenes.
Estos deslizamientos permiten valorar la resistencia mínima real, y evitar nuevos
accidentes cambiando el proyecto en función de los nuevos datos.
Dichas rotura indican que el valor medio de la resistencia mínima al corte ha sido
sobrestimado. El procedimiento a seguir consiste en determinar por medio de
perforaciones o excavaciones realizas en el terreno la profundidad zc de las fisuras de
tracción y la forma y posición de la superficie de deslizamiento. La línea de deslizamiento
se sustituye luego por un arco de circulo de radio r y de centro en O. Se computan los
pesos de las distintas partes de masa que tendió a producir o a oponerse al deslizamiento,
y se calcula la resistencia media al corte “s” necesaria para satisfacer las condiciones de
equilibrio.
El método que se utiliza para determinar “s”, en función de los datos que se pueden
obtener de los deslizamientos está ilustrado en la figura 21:

Planteando sumatoria de momentos alrededor del punto O se obtiene:


W1 l1= W2 l2 +sr d1 e1
Despejando s:
s = (W1 l1 - W2 l2)/ r d1 e1
W1: peso de la masa de suelo situado a la derecha de la línea punteada.
W2: peso de la masa de suelo situado a la izquierda de la línea punteada.

2.- Taludes en arenas secas sin cohesión


Un talud formado por arena seca y limpia es estable, independientemente de su altura,
siempre que el ángulo ϐ entre el talud y la horizontal sea menor que el ángulo de fricción
interna φ de la arena. El coeficiente de seguridad del talud “F” respecto a su deslizamiento
puede expresarse por la relación de la fig. 22.

Figura 22: Talud y fórmula para el cálculo del factor de seguridad “F”.

No puede existir un talud de arena seca y limpia con un ángulo de inclinación superior a φ
independientemente de su altura. Si F es igual a -1, tal como se define en la ecuación el
diseño del talud no sería conveniente porque la arena próxima al borde del talud estaría
en condiciones precarias, de manera que el viento, la lluvia o cualquier otra causa las
harían caer fácilmente, produciendo pequeños derrames sobre las cunetas de un corte o
erosionando un terraplén. Es por esto que se recomienda que la inclinación del talud sea
un poco menor que el ángulo φ uno o dos grados.

3.- Cálculo de resistencia al corte s= Cu. Falla rotacional. Método Sueco.


Se trata de analizar los casos en que la resistencia al corte de los suelos se expresa con
base en los resultados de una prueba sin consolidación y sin drenaje, usando tensiones
totales.
Se estudiará, en primer lugar, el caso de un talud de altura H, excavado en arcilla, en el
que existe homogeneidad de material en el talud y en el terreno de cimentación, hasta
una profundidad ilimitada.
El procedimiento de cálculo fue establecido primeramente por A. Casagrande y en
principio se puede utilizar para estudiar tanto fallas por el pie del talud como fallas de
base. El procedimiento se describe en la Fig. 23.

Figura 23: Método de las fajas o dovelas

Considérese el arco de circunferencia de radio r y de centro en O como la traza de una


hipotética superficie de falla, en la que se movilizaría la zona rayada de la Fig. 23. Las
fuerzas actuantes, es decir las que tienden a producir el deslizamiento, serían el peso W
del área ABCDA, más cualquier sobrecarga que pudiera actuar en la corona del talud.
El momento de las fuerzas motoras podrá expresarse como:
Mm= W x d
Que incluye el peso de tierra más las sobrecargas que pudieran existir.
Las fuerzas resistentes las generara la resistencia al esfuerzo cortante a lo largo de toda la
superficie de falla supuesta y su momento en relación a O será:
Mr= Cu x L x R
En el momento de la falla incipiente: Mm= Mr y por lo tanto, se podrá escribir:
W x d= Cu x L x R
Si se define el factor de seguridad Fs como:
Fs = Mr / Mm= Cu x L x R/ W x d (1)

4.- Cálculo de resistencia al corte s= Cu. Método de las Fallas o Dovelas.


Este Método se aplica a:
 Cualquier topografía de la superficie.
 Cualquier tipo de suelo c=0, Ø=0.
 Perfil estratificado constituido por distintos materiales o distintos estratos.
 Con o sin presencia de napa freática.
En estos casos se dispone de los parámetros de resistencia que se obtengan en una
prueba sin consolidación y sin drenaje (Triaxial).
El Método que se describirá es el Método de las Dovelas, sugerido por Fellenius. Fig. 24.
1.- En primer lugar se propone un círculo de deslizamiento y la masa deslizante se divide
en dovelas como las de la Fig. 24. Al costado de Fig. 24, aparece el conjunto de fuerzas
que actúan en una dovela, cuando la masa deslizante está situada sobre el nivel freático.
Las fuerzas en cada dovela, al igual que las fuerzas actuantes en todo el conjunto de la
masa deslizada deben estar en equilibrio. Sin embargo las fuerzas E y T actuantes en los
lados de las dovelas, dependen de las características del material y no se pueden evaluar
rigurosamente, por lo que la hipótesis más simple es que el efecto conjunto de las cuatro
fuerzas laterales es nulo.

2.- Cada dovela actúa independiente de las demás. Para cada dovela se considera, Fig. 25:

W= Peso propio= Volumen x peso específico ϒ.


T, E o N= fuerzas tangenciales y normales entre
dovelas.
 W= Peso propio= Volumen x peso específico .
S= fuerza de corte en la superficie de falla.
P= fuerza norma a la superficie de falla.

3.- En cada dovela se puede calcular el cociente N i = Ti, el cual se considera una buena
aproximación al valor τi tensión normal total actuante en la base de la dovela. Con este
valor puede entrarse a la Ley de Resistencia y determinar el valor S i resistencia al corte.
El momento resistente depende de la resistencia al corte S i que se desarrolla en la base de
las dovelas. Es una suma aritmética porque la resistencia siempre actúa en el mismo
sentido. Es decir:
Mr= r Σ Si Li
r: radio del círculo.

Para calcular un momento motor en torno al centro del círculo O, correspondiente al peso
de las dovelas este momento será:
Mm= r Σ Ti

Aplicando (1)
Fs = Mr / Mm= r Σ Si Li / r Σ Ti = Σ Si Li / Σ Ti

Ensayos geotécnicos necesarios.


La estabilidad de un talud está determinada por:
 Factores geométricos (altura e inclinación).
 Factores geológicos (que condicionan la presencia de planos y zonas de debilidad y
anisotropía del talud).
 Factores hidrogeológicos (presencia de agua).
 Factores geotécnicos o relacionados con el comportamiento mecánico del terreno
(resistencia y deformabilidad).
La combinación de los factores citados puede determinar la condición de rotura a lo largo
de una o varias superficies, y que sea cinematicamente posible el movimiento de un cierto
volumen de masa de suelo o roca. La posibilidad de rotura y los modelos de inestabilidad
de los taludes están controlados principalmente por factores geológicos y geométricos. En
la Tabla de la Fig. 26 se detallan los factores influyentes en la inestabilidad de los taludes.
(1)Las tensiones naturales juegan un papel importante ya que la liberación de tensiones
que puede suponer la excavación de un talud puede originar tal descompresión que el
material se transforma y fragmenta por las zonas más débiles y pasa a comportarse
como un suelo y produciéndose el desmoronamiento del talud.

Figura 26: Factores influyentes en la inestabilidad de los taludes.


Factores Condicionantes Factores Desencadenantes
Estratigrafía y litología. Sobrecargas estáticas.
Estructura geológica. Cargas dinámicas.
Condiciones hidrogeológicas y comportamiento Cambios en las Condiciones
hidrogeológico de los materiales. hidrogeológicas.
Propiedades físicas, resistentes y deformacionales. Factores climáticos.
Tensiones naturales y estado tenso-deformacional (1) Variaciones en la geometría.
Reducción de parámetros resistentes.

Estabilización de suelos métodos.


Los análisis de estabilidad se aplican al diseño de taludes o cuando presentan problemas
de inestabilidad. Se debe elegir un coeficiente de seguridad adecuado, dependiendo de la
finalidad de la excavación y de carácter temporal o definitivo del talud, combinando los
aspectos de seguridad, costes de ejecución, consecuencias o riesgos que podría causar su
rotura, etc.
Para taludes permanentes, el Coeficiente de Seguridad a adoptar debe ser igual o superior
a 1.5 e incluso 2.0 dependiendo de la seguridad exigida y de la confianza que se tenga en
los datos geotécnicos que intervienen en los cálculos. Los análisis permiten definir la
geometría de la excavación o las fuerzas externas que deben ser aplicadas para lograr el
factor de seguridad requerido. En caso de taludes inestables, los análisis permiten diseñar
las medidas de corrección o estabilización adecuadas para evitar nuevos deslizamientos.
Las medidas estabilizadoras pueden consistir en:
 1.- Modificación de la geometría del talud.
 2.- Drenajes.
 3.- Aumento de la resistencia del terreno mediante la introducción en el talud de
elementos estructurales resistentes.
 4.- Construcción de muros u otros elementos de contención.

1.- Modificación de la geometría.


Mediante la modificación de la geometría de los taludes se redistribuyen las fuerzas
debidas al peso de los materiales, obteniéndose una nueva configuración más estable. Las
actuaciones más frecuentes se representan en la Fig. 27 y consisten en:
 Disminuir la inclinación del talud.
 Eliminar el peso de la cabecera del talud (descabezamiento).
 Incrementar el peso en el pie del talud (tacones o escolleras).
 Construir bancos y bermas (escalonar el talud).

La excavación de la cabecera del talud elimina peso de esta zona, reduciendo las fuerzas
desestabilizadoras. La disminución del ángulo general del talud y la retirada de peso en su
cabecera no siempre pueden llevarse a cabo por eso los cambios de geometría consisten
principalmente en aumentar el peso en el pie del talud. La construcción de tacones
aumenta las tensiones normales sobre la superficie de rotura, mejorando la estabilidad.
Esta medida es aplicable a taludes en suelos y puede combinarse en combinación con
excavaciones en cabecera.
Si el terreno en el pie del talud es resistente y la inestabilidad no es profunda puede
recurrirse a la construcción de un muro, bien cimentado, al pie del talud.

Figura 27: Métodos para aumentar el coeficiente de seguridad de taludes en suelos


La Fig. 28 muestra un ejemplo de aumento de peso en el pie de un talud de arcillas y
arenas mediante la construcción de un muro de gaviones apoyado sobre un terreno
resistente, que permitió colocar un relleno impermeable sobre gran parte de la superficie
del talud. Con ello se consiguió evitar la desecación de las arcillas expansivas que
aparecían en la mitad inferior del talud (con problemas de inestabilidad por la fisuración
que sufrían al perder humedad).

Figura 28: Ejemplo de estabilización de un talud mediante muro de pie, relleno y gaviones.
El empleo de escolleras al pie de taludes deslizados para aportar peso, permitir el drenaje
y reforzar el conjunto es una solución frecuente y rápida, muy utilizada para
inestabilidades superficiales en materiales arcillosos. Fig. 29.

Figura 29: Estabilización de un talud mediante escolleras.

El escalonamiento del talud, con la construcción de bancos y bermas contribuye a evitar


que se produzcan roturas superficiales que afecten al frente del talud.

2.- Medidas de drenaje:


Las medidas de drenaje tienen por finalidad eliminar o disminuir el agua presente en el
talud y, por tanto, las presiones intersticiales que actúan como factor desestabilizador en
las superficies de rotura y grietas de tracción. Estas medidas son más efectivas ya que el
agua es el principal agente que desencadena los problemas de inestabilidad de taludes
elevando el nivel freático y las presiones intersticiales, creando empujes hidrostáticos,
reblandeciendo el terreno, erosionando al pie del talud, etc.
El drenaje puede ser superficial, mediante zanjas y canalizaciones o profundo pozos o
drenes verticales, galerías de drenaje y pantallas drenantes. En la fig. 30 se muestran
algunas medidas típicas de drenaje y de protección habituales.

Figura 30: medidas de drenaje y protección de taludes.


3.- Aumento de la resistencia del terreno mediante la introducción en el talud de
elementos estructurales resistentes.
La introducción de elementos estructurales resistentes en el terreno tiene como finalidad
aumentar la resistencia al corte mediante alguno de los siguientes sistemas:
 Introduciendo elementos que mejoran la resistencia del terreno en la superficie de
rotura (por ejemplo pilotes o micro pilotes).
 Introduciendo elementos que aumentan las fuerzas tangenciales de rozamiento en la
superficie de rotura por ejemplo anclajes y bulones, Fig. 31.

Figura 31: Disposición y eficacia de los sistemas de drenaje en un talud (modificado de CANMET, 1977).

4.- Construcción de muros u otros elementos de contención.


La construcción de muros se emplea para reforzar la zona de pie de los taludes, evitando
de esta manera la degradación de esta zona frente a la estabilidad. Los muros se
construyen al pie del talud como elementos resistentes, de contención o sostenimiento.
Los muros presentan el inconveniente de que hay que excavar el pie del talud para su
construcción, lo que favorece la inestabilidad y no evitan posibles deslizamientos a favor
de superficies de rotura por encima o por debajo del muro. Estos muros se construyen
separados del pie del talud, rellenando posteriormente el trasdós (espacio entre el muro y
el talud), los de revestimiento tienen como misión proteger el terreno de la erosión y
proporcionar un peso estabilizador a pie de talud.
Existen diferentes tipos de muros que los hacen adecuados para diferentes casos de
estabilización, según se requieran muros rígidos o flexibles, se requiera detener un
movimiento o aportar resistencia adicional. Los muros de gaviones son muros flexibles
que consisten en rellenos de fragmentos rocosos contenidos en una malla de acero,
trabajan por gravedad y pueden ser construidos con escalonamiento hacia el interior o
exterior de un talud. Fig. 32.

Figura 32: Muro de gaviones con el intradós escalonado a), con relleno entre el muro y el talud b), c) Muro a
pie de talud y cuneta de drenaje.

Tienen la ventaja de permitir la circulación del agua procedente del talud.


Los muros pantalla son elementos de hormigón armado construidos in situ, en zanjas
excavadas por debajo de la superficie del terreno cuya acción estabilizadora es similar a la
de las pantallas de pilotes, con la diferencia de que constituyen elementos continuos.
Otro tipo de muros son los de tierra armada, formados por un paramento exterior
prefabricado de hormigón o chapas metálicas y un relleno de suelo, reforzado mediante
bandas o tirantes de metal o de material sintético, que se anclan al paramento y al talud.
Fig. 33. Los muros anclados son muros reforzados con anclajes para mejorar la resistencia
al vuelco y al deslizamiento de la estructura. Fig. 34.
Figura 33: Muro de tierra armada. Figura 34: muro anclado. En la parte inferior gunita y
Bulones en .a parte superior.

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Medidas de protección superficial.


Estas medidas están encaminadas a:
 Eliminar los problemas de caídas de rocas.
 Evitar o reducir la erosión y la meteorización en el frente del talud.
 Evitar la entrada de agua de escorrentía.
Las actuaciones más frecuentes consisten en:
 en suelos.
 Instalación de mallas metálicas.
 Gunitado de taludes. Gunitado: mortero de cemento, agua y árido de hasta 8 mm.
Fig. 35.
 Construcción de muros de revestimiento a pie de talud.
 Instalación de materiales geotextiles.
 Impermeabilización.
Siembra de especies que contribuyen a reforzar el terreno superficial en taludes
excavados.
Figura 35: talud de carretera cubierto de gunita.
Bibliografía
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Páginas web visitadas:
htto://geo.verruijt.net/software/STB.ZIP (Universidad de Delft- Holanda).
htto://www.geo-slope.com

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