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República Bolivariana de Venezuela

Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria


Universidad Nacional Experimental de los Llanos Occidentales Ezequiel
Zamora/UNELLEZ
VPA Núcleo Acarigua.
2do. Año Derecho, Sección “A”

DERECHO PROCESAL CIVIL

INFORME UNIDAD I
VISION GENERAL DEL PROCESO

Prof.: Abogado Edgar Rodriguez


Integrante: José R. Dorfler B.
C.I. 11084500

La Ley Procesal.
El artículo 257 Constitucional establece:
‘El proceso constituye un instrumento fundamental para la realización
de la justicia. Las leyes procesales establecerán la simplificación,
uniformidad y eficacia de los trámites y adoptarán un procedimiento breve,
oral y público. No se sacrificará la justicia por la omisión de formalidades
no esenciales’
Las normas en general, contienen un poder obligante en beneficio de
la colectividad. En toda norma existen dos elementos: un supuesto de
hecho y una sanción para el caso de que ese supuesto de hecho sea violado;
o sea, una previsión y una sanción. Las normas procesales se caracterizan
porque regulan la actividad jurisdiccional y el funcionamiento del proceso.
Según CHIOVENDA (1922): La Ley Procesal regula los modos y
condiciones de la actuación de la Ley en el proceso.
Según HUMBERTO CUENCA (1974): La Ley Procesal es el
instrumento que tiene a su disposición el Derecho Procesal para la
realización del Derecho.
La Ley Procesal, a pesar de estar en el campo del Derecho Público,
algunas normas son de orden público y otras de interés particular.
A las de orden público se les llama absolutas, inderogables y de
obligatorio cumplimiento, tanto por las partes, como por el Juez.

Naturaleza procesal de la ley.


La naturaleza de la Ley Procesal es de Derecho Público, porque regula
la función jurisdiccional asumida por el Estado. Ej: cuando presentamos
una demanda, ya estamos en el campo del Derecho Público, porque las
partes se subordinan al Estado y éste es el que va a decidir a través de la
decisión judicial.
La norma procesal se distingue de la norma material, porque esta
última regula mandatos abstractos generales: Ej: el derecho de propiedad.
La norma procesal en cambio, compone conflictos de intereses particulares,
en cada situación hay que llevar el caso concreto al Tribunal.
Hay normas procesales relativas, derogables o dispositivas, que se dan
en interés de los particulares; Ej: las partes pueden en un juicio de
particulares, de mutuo acuerdo, pudiendo reducir algún lapso estipulado.
Las leyes materiales se diferencian de las normas procesales: porque
estas últimas regulan la conducta del Juez y de las partes en el proceso; las
materiales se refieren al fondo del proceso, la sentencia; La procesal es
vinculante: vinculan a las partes con el Estado a través del proceso; y las
materiales se aplican solamente a la sentencia definitiva.

Naturaleza de la ley procesal.


Al estudiar su naturaleza jurídica se trata de saber qué es el proceso.
Por su naturaleza jurídica, todas las leyes procesales son de Derecho
Público, pero no todas son de orden público. No hay normas procesales de
derecho privado, y por ello es necesario diferenciar normas de interés
público y normas de interés privado. Todas las normas procesales
pertenecen al Derecho Público porque son aplicadas por un órgano del
Estado, que es el poder jurisdiccional, disciplinan funciones del Estado y
sólo el Estado puede aplicarlas.

Eficacia de la ley procesal en el tiempo.


Los procesos se saben cuándo comienzan, pero no cuándo terminan;
porque intentado un juicio, regularmente tiene una larga duración y durante
el transcurso del mismo pueden tener vigencia diversas leyes procesales; tal
ocurrió con los procesos que comenzaron con el Código de Procedimiento
Civil anterior y que al entrar en vigencia el nuevo Código de Procedimiento
Civil, se plantea cuál de los dos aplicar.
Las leyes de procedimiento se aplicarán desde el momento mismo de
entrar en vigencia, aún en los procesos que se hallaran en curso (Art. 9
C.P.C.). Se refiere a la determinación de cual ley procesal se aplica a una
relación procesal actual, cuando durante la misma han regido
sucesivamente dos normas procesales una anterior (derogada) y otra nueva
(vigente).
La norma rectora al asunto es el Art. 24 de la C.R.B.V., que establece
que ninguna disposición legislativa tendrá efecto retroactivo. Hay una
excepción en materia penal, la ley es retroactiva cuando impone menor
pena.
Los procesos terminados.
"El momento culminante o decisivo de la actividad probatoria, esto es,
si las posiciones cumplen o no, el fin a que se destinaron por parte del
promoventesiendo pertinentes, es decir, "concernientes a los hechos
controvertidos". (Guerrero.1991).
Al iniciar el juicio culmina la revisión de los medios probatorios
presentados ante el tribunal, de ahí vienen los alegatos de los abogados
quienes pueden presentar testigos y otros documentos mientras se dirime la
controversia ante el juez.

En relación a los procesos que se hayan iniciado bajo la vigencia de la ley


derogada.
En este supuesto los actos ejecutados bajo la vigencia de la ley
anterior debían aplicarse la ley del momento en que se realizaron, porque
las partes no habrían llegado a acuerdos de haber sabido que iba a ver un
cambio de ley que los pudiera perjudicar.

Y se encuentren en curso, cuando entra a regirla nueva ley.


A este respecto los (Artículos 24 de la Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela; artículos 9 y 941 del Código de Procedimiento
Civil; y artículo 3 del Código Civil), refieren muy bien los pasos a seguir
para tales supuestos. Es de particular interés la interpretación del artículo
24 de la Constitución Nacional, donde refiere; la Ley procesal se aplica
inmediatamente aún en los procesos en curso, salvo cuando la vieja ley
tenga sanciones o penas menores, en cuyo caso se aplica a favor del reo la
ley anterior.
Cuando la nueva Ley Procesal exige un nuevo requisito, éste debe
cumplirse, porque la nueva Ley entra en vigencia inmediatamente; y
cuando el Código de Procedimiento Civil vigente en sus artículos 9 y 941
dan efectos procesales a los actos ejecutados bajo el imperio de la anterior
Ley Procesal, debe entenderse para los juicios en curso.
En lo referente al artículo 3 del Código Civil: La Ley no tiene efecto
retroactivo.

Los procesos no iniciados.


Quedan regidos por la Nueva Ley Procesal, la actuación solo podrá
efectuarse en la medida en que la nueva ley lo permita.
Eficacia de la ley procesal en el espacio.
El punto se refiere a cual de dos leyes procesales coexistentes es la
aplicable en un juicio pendiente en un país, cuando estas leyes son vigentes
simultáneamente en dos países.
Estos problemas se resuelven de acuerdo a las normas de Derecho
Internacional Privado, aplicando el criterio de territorialidad y por ello se
aplica el derecho del lugar donde se tramita el proceso.
Se trata de determinar cuál ley, entre dos o más coexistentes en
diversos territorios, es aplicable al proceso pendiente en uno de ellos.
A este respecto queda entendido en los artículos del Código de
Procedimiento Civil: 1, 137, 857, 858 y 850 del Código de Procedimiento
Civil; artículos del Código Civil: 8, 9, 11 y 26; artículos de la Ley de
Derecho Internacional Privado: 1 y 3.

En relación a la capacidad procesal.


Conforme al artículo 137 del Código de Procedimiento Civil, las
personas, que no tengan el libre ejercicio de sus derechos deberán ser
asistidas o representadas en juicio según las leyes que regulan su estado o
capacidad. Así por ejemplo, un extranjero de 20 años de edad, que según la
ley de su país adquiere la mayoría de edad a los 21 años, si no ha cumplido
esa edad no puede ser parte en juicio, en Venezuela los venezolanos con 18
años de edad cumplidos adquieren la mayoría de edad (artículo 18 del
Código Civil).

En relación a las pruebas.


En cuanto a las pruebas, el principio admitido en el Derecho
Internacional Privado es el de que la admisibilidad de los medios de prueba
se rige por la ley del lugar en que se ha realizado el acto, y la forma de
practicarse la prueba se rige por la ley del lugar en que se lleva a cabo. Art.
399 y 400 del Código Bustamante. El 399 exceptúa los medios de prueba
no autorizados por la ley del lugar en que se sigue el juicio, los cuales, por
tanto, quedan regulados en su admisibilidad por la lex fori. Además, si la
ley venezolana exige documento público o privado para la existencia o
prueba de un determinado acto, un medio diferente será inadmisible (art. 11
del Código Civil).

Ejecución en el extranjero de actos relativos al proceso en Venezuela.


El artículo 11 del Código Civil consagra la regla tradicional (locus
regit actum) según la cual la forma y solemnidades de los actos jurídicos
que se realicen en el extranjero, se rigen por las leyes del lugar donde se
hacen, con la única salvedad de que si la ley venezolana exige instrumento
público o privado para su prueba, tal requisito deberá cumplirse para que el
acto tenga efectos en Venezuela.

Ejecución en Venezuela de actos relativos al proceso extranjero.


El Código de Procedimiento Civil contiene una disposición que
permite la ejecución en Venezuela de actos relativos a un proceso
extranjero, tales como citaciones, notificaciones, examen de testigos,
experticias, etc. La ejecución de estos actos en la República se lleva a
efecto por las autoridades judiciales competentes del lugar donde haya de
realizarse el acto mediante decreto del Juez de Primera Instancia del lugar y
siempre que las providencias del juez extranjero que las acuerda, vengan
con rogatoria y legalizadas por un funcionario diplomático, consular o por
la vía diplomática.
Estos casos de ejecución en Venezuela de actos de instrucciones
relativos a un proceso pendiente en el extranjero, se diferencian de la
"ejecutoria" de sentencias de autoridades extranjeras que puede acordar en
Venezuela el Tribunal Supremo de Justicia cuando se trata de jurisdicción
contenciosa; o el Tribunal o Corte Superior en los casos de jurisdicción
voluntaria.
En Venezuela se ha escogido el sistema que confía a los funcionarios
judiciales del Estado extranjero la realización de los actos en su territorio y
la cooperación se actúa mediante cartas rogatorias dirigidas por la vía
diplomática o consular. El art. 388 del Código Bastamente, dice: "Toda
diligencia judicial que un Estado contratante necesite practicar en otro, se
efectuará mediante exhorto o comisión rogatoria cursados por la vía
diplomática. Sin embargo, los Estados contratantes podrán pactar o aceptar
entre sí, en materia civil o criminal, cualquier otra forma de trasmisión".
Un principio de Derecho Internacional Privado es el que distingue
entre el objeto de la rogatoria recibida y la forma de cumplirlo y establece
que se regule por la ley del Comitente aquél objeto, y por la ley del
Comisionado la forma de realizarlo.

El Exequátur La interpretación de la ley procesal.


Señala Chiovenda, que mediante este procedimiento la sentencia
extranjera se nacionaliza. No podrán ser objeto de exequátur las decisiones
dictadas por organismos que no son órganos jurisdiccionales de alguna
soberanía.
Requisitos para que a la sentencia extranjera pueda dársele fuerza
ejecutoria en Venezuela:
Al respecto, el Tribunal Supremo de Justicia en sentencia N° 01561
del 4 de julio del 2000, estableció que debe aplicarse lo establecido en el
artículo 53 de la Ley de Derecho Internacional Privado, quedando
derogados los artículos 850 y 851 del Código de Procedimiento Civil,
donde recepta los requisitos que deben concurrir para que las sentencias
extranjeras tengan efecto en Venezuela.
El artículo de la Ley de Derecho Internacional Privado en mención,
establece lo siguiente:
“Artículo 53. Las sentencias extranjeras tendrán efecto en Venezuela
siempre que reúnan los siguientes requisitos: 1. Que hayan sido dictadas en
materia civil o mercantil o, en general, en materia de relaciones jurídicas
privadas; 2. Que tengan fuerza de cosa juzgada de acuerdo con la ley del
Estado en el cual han sido pronunciadas; 3. Que no versen sobre derechos
reales respecto a bienes inmuebles situados en la República o que no se
haya arrebatado a Venezuela la jurisdicción exclusiva que le correspondiere
para conocer del negocio; 4. Que los tribunales del Estado sentenciador
tengan jurisdicción para conocer de la causa de acuerdo con los principios
generales de jurisdicción consagrados en el Capítulo IX de esta Ley; 5. Que
el demandado haya sido debidamente citado, con tiempo suficiente para
comparecer, y que le hayan otorgado en general, las garantías procesales
que aseguren una razonable posibilidad de defensa; 6. Que no sean
incompatibles con sentencia anterior que tenga autoridad de cosa juzgada;
y que no se encuentre pendiente, ante los tribunales venezolanos, un juicio
sobre el mismo objeto y entre las mismas partes, iniciado antes que se
hubiere dictado la sentencia extranjera.”
Elementos del proceso interpretativo.
El Código Civil Venezolano de 1.942 establece en su Artículo 4, lo
siguiente:
"A la ley debe atribuírsele el sentido que aparece evidente del
significado propio de las palabras, según la conexión de ellas entre sí y la
intención del legislador. Cuando no hubiere disposición precisa de la ley, se
tendrá en consideración las disposiciones que regulan casos semejantes o
materias analógicas y, si hubiese todavía dudas, se aplicarán los principios
generales del Derecho".
Savigny distingue cuatro elementos de la interpretación: gramatical,
lógico, histórico y sistemático. No se trata de cuatro clases de
interpretación, sino de cuatro operaciones diversas, pero que actúan
conjuntamente.
 Elemento gramatical, tiene por objeto la palabra. La interpretación de
las palabras de la ley, debe tener lugar según las reglas del lenguaje.
 Elemento lógico, tiene una doble finalidad: Por una parte busca
desentrañar la intención o espíritu de las leyes para lo cual investiga la
“RATIO LEGIS”, es decir el propósito perseguido por la ley, la razón
que la justifica y también la “OCASSIO LEGIS”, es decir las
circunstancias particulares del momento histórico que determinaron su
dictación.
Por otra parte el elemento lógico busca determinar la armonía y
cohesión interior de una ley, las relaciones lógicas que unen las
diversas partes de una ley.
 Elemento histórico: su objeto es indagar el estado del derecho existente
sobre la materia al elaborarse o promulgarse la ley y el estudio de los
antecedentes que tomó en cuenta el legislador antes de dictar la ley que
se trata de interpretar.
 Elemento sistemático: se basa en la conexión que enlaza a todas las
instituciones jurídicas y normas en una gran entidad. Se trata de ver la
relación que hay entre la ley interpretada y el conjunto del
ordenamiento jurídico.
La Jurisdicción.
Etimológicamente, el término jurisdicción deriva de iurisdictio que
significa (decir o Mostar el derecho). La jurisdicción es una función del
Estado (el Estado es quien administra justicia) de administrar; cabe
destacar que no debe usarse el termino Jurisdicción como sinónimo de
determinación geográfica, ni como sinónimo de competencia, ni para
referirse a la materia.
La jurisdicción es aquella potestad que tiene el estado para dirimir
conflictos de tipo legal, para esto, el estado ejerce presión a través de la ley
aplicable (que pueden ser diferentes de acuerdo al caso, bien sea penal,
civil, etc.) De esta manera, el juez puede ejecutar la medida que él mismo
ha decidido a través de una sentencia.
Bajo la Jurisdicción esta todo el orden jurídico, ella lo envuelve, y es
de carácter general.

Nociones sistemáticas fundamentales.


Tal como lo han afirmado diversos expositores de la ciencia del
derecho procesal, la jurisdicción hoy día representa una noción
fundamental. Y, además, se ha venido asociando a las nociones de acción y
de proceso. Calamandrei, citado por Rengel Romberg, afirma que la
jurisdicción, asociada con la noción de acción y de proceso, forman lo que
él llama “el trinomio sistemático fundamental” del derecho procesal. De
similar forma lo expresa Podetti al hablar de “la trilogía estructural del
proceso civil”

Diversas acepciones.
En relación a las distintas acepciones que se le asignan a la
jurisdicción como por ejemplo utilizar como sinónimo de competencia, o
sinónimo de procedimiento, o para expresar poder o cuando se habla de
jurisdicción civil, mercantil, laboral etc.; debe aclarase que la jurisdicción
parte del principio de unidad de la jurisdicción y con ello, el ejercicio de la
acción toma como actividad cooperadora de la jurisdicción en la
preservación del conjunto normativo que regula la vida en sociedad.

Origen de la jurisdicción.
La jurisdicción nace propiamente en el momento en que el Estado deja
de recurrir a árbitros privados y asume él, mediante jueces y tribunales
públicos la función de administrar justicia.
La doctrina está acorde en que la jurisdicción tiene sus orígenes con el
nacimiento del Estado y de la civilización. En épocas anteriores las
controversias surgidas entre personas particulares eran dirimidas a través
del uso de la fuerza bruta, es decir, mediante el ejercicio de la autodefensa,
en cuyo caso, la razón la va a tener quien posea la fuerza y la utilice contra
su adversario y cada cual perseguía su derecho haciendo uso de sus propios
medios e incluso con la ayuda de amigos o parientes.

Posición de la jurisdicción dentro del orden jurídico.


La jurisdicción descansa sobre el derecho subjetivo de los particulares
y órganos públicos, de reclamar su presencia para resolver las situaciones
jurídicas que pudiera confrontar, llegando inclusive a reconocer como
delito, la conducta de los encargados de administrarla, tipificada como
denegación de justicia (art 19 del C.P.C.), pero a su vez se considera delito
hacer justicia con su propia mano.

Concepto del acto jurisdiccional.


Podemos definir la jurisdicción como la potestad de juzgar y ejecutar
lo juzgado en todo tipo de procesos, que corresponde exclusivamente a los
jueces y tribunales determinados por las leyes, según las normas de
competencia y procedimientos que las mismas establezcan.

Elementos del acto jurisdiccional.


Dentro de los elementos del acto jurisdiccional tenemos:
 La forma: no es más que las partes que conforman al proceso jurídico,
se denomina también como una parte externa de este procedimiento y
se conforma por el juez y la parte activa y pasiva.
 El contenido: el cual se basa al conflicto propiamente dicho que
genera la necesidad de establecer un tribunal y proceder a un juicio.
 La función: cuyo principal objetivo es plasmar una garantía
constitucional de que el derecho lesionado va a repararse, siempre y
cuando este mismo este sancionado por la constitución del territorio o
por cualquier ley ordinaria vigente durante el proceso.

Forma de la jurisdicción.
Se refiere a los elementos externos del acto jurisdiccional, los cuales
se encuentran constituidos por la presencia de las partes, los jueces y los
procedimientos establecidos por la ley.

Contenido de la jurisdicción.
Se refiere a la existencia de un conflicto con relevancia jurídica que
debe decidirse mediante resolución susceptibles de adquirir autoridad de
cosa juzgada.
La jurisdicción es tal por su contenido y por su función, no por la
forma, el contenido caracteriza a la función.
El contenido ha sido delimitado frecuentemente como la reparación
del derecho lesionado, la tutela del derecho subjetivo, la restitución de los
bienes despojados.
Además como contenido de la jurisdicción se ha señalado su carácter
sustantivo que se produce de dos maneras;
 En la fase de conocimiento, el juez sustituye con su voluntad, la
voluntad de las partes y los terceros.
 En la fase de ejecución el funcionamiento del Estado; coactivamente,
realiza los actos que debió realizar el obligado, ejemplo, la subasta de
los bienes embargados para pagar con el precio del remate.

Función de la jurisdicción.
Atribución poder estatal para resolver valida y definitoriamente
conflictos sociales.
Este elemento está formado principalmente por el cometido del
tribunal, que es asegurar la paz social, la justicia y los demás valores
jurídicos, mediante la aplicación eventual coercible del derecho.
Definición de la jurisdicción.
Si entendemos por jurisdicción, el poder-deber, o el derecho subjetivo
público, está claro, que ese derecho subjetivo público es único e indivisible,
es decir, que desde el punto de vista conceptual la jurisdicción es una sola.
La manifestación de poder público es igual frente a cualquiera que sea
el tipo de asunto que se trate de resolver, bien sea condenando,
absolviendo, o simplemente reconociendo o negando derechos. En
consecuencia también es una e indivisible, la función que se ejercita a
través de ese Poder.

Alcance de la definición.
En cuanto al alcance que define a la jurisdicción, es el interés
postulado por los ciudadanos ante los órganos del Estado destinado para
ello:
 La jurisdicción es una potestad reservada por el Estado: esto implica
que se trata de un poder-deber, es decir, al lado de la facultad de
juzgar y ejecutar lo juzgado, también se encuentra una obligación que
concreta en el deber de los jueces de no absolver la causa, so pena de
delito de denegación de justicia, y la obligación, en general, del
Estado, de establecer la estructura funcional de la prestación de
servicio (creación de tribunales, nombramientos de jueces, proveer
materiales y equipos). Esta potestad es una reserva que ha hecho el
Estado de solucionar conflictos y tutelar derechos e intereses tal como
lo estipula el artículo 26 CRBV.
 La jurisdicción es un atributo de la soberanía: si convenimos que la
misión del Estado es garantizar la paz social, mediante la consecución
del bien común y la justicia (fines esenciales), entonces tal finalidad se
logra con las funciones básicas de legislación, administración y
jurisdicción. Siendo la soberanía la capacidad de autonormarse y
decidir, sin injerencia externa, la forma y manera de convivencia
social, entonces se entiende que el ejercicio de la función
jurisdiccional logra la consecución de los Fines señalados y bajo la
exclusiva consideración del mandato otorgado por los ciudadanos.
 La jurisdicción se ejerce en la forma de un servicio público: En
efecto, la jurisdicción es una función pública por excelencia, mediante
ella el Estado dispone de un conjunto de elementos materiales,
humanos y organizativos para que todos los ciudadanos puedan
ejercer el derecho de acceso a los órganos jurisdiccionales.
 La jurisdicción está formada por órganos predeterminados,
independientes para la realización concreta de las peticiones de los
ciudadanos: este aspecto configura la dimensión procesal de la
jurisdicción, Hablamos de órganos que se pronunciarán sobre una
petición o pretensión jurídica la cual, a manera de ver, se trata de un
interés sustancial sometido a su conocimiento. Esta decisión tendrá
carácter definitivo y sólo podrá dictarse en el marco de un proceso
judicial.

Tipos de garantías jurisdiccionales.


La jurisdicción proporciona ciertos tipos de garantías, con el fin de
mantener el respeto a la ley, y en caso de violación de la misma, reparar el
gravamen inferido.
Los tipos de garantías jurisdiccionales según la doctrina, han sido
elaboradas en base a la clásica división de las sentencias, en fallos
declarativos, de condena, constitutivos y cautelares:
 En las sentencias declarativas: la jurisdicción proporciona una
declaración de certeza del derecho, frente a la incertidumbre de una
situación jurídica existente, sobre el contenido de la norma y su
aplicación a los hechos.
 Sentencias constitutivas: la jurisdicción tiene una finalidad
constitutiva frente a cambios jurídicos que originan la creación o
modificación de situaciones anteriores.
 Sentencias de condena: la jurisdicción ante la obligación de reparar el
derecho, ordena la restitución, que puede ser directa, caso en el cual
estamos frente a la restitución del propio derecho violado, o mediante
un equivalente, que es la indemnización del daño.
 En las sentencias cautelares: la jurisdicción proporciona las medidas
preventivas o cautelares, cuya finalidad es asegurar el cumplimiento
del fallo, frente al riesgo de que la condena se haga ilusoria por
imposibilidad para ejecutarla, y contra la eventual insolvencia del
obligado o la posibilidad de la reparación de un daño.

Extensiones del concepto de jurisdicción.


 En el lenguaje forense, aun en ciertas leyes se hace una aplicación
extensiva del concepto de jurisdicción.
 Se habla, entonces de jurisdicción contenciosa, voluntaria y
disciplinaria, tal como si fueran tres formas o manifestaciones de una
misma función.
 Corresponde fijar el alcance de cada uno de estos conceptos.

La jurisdicción contenciosa.
Esta es la verdadera jurisdicción, su nombre deriva de la contienda,
disputa o pleito. La controversia es una de las características de la
jurisdicción, pero no es indispensable porque hay juicios sin contienda. Sin
embargo, hay que distinguir que estos actos producen cosa juzgada formal
y material.
Cuando no se llama al magistrado a suplir una capacidad defectuosa,
ni a cooperar en la formación de estados jurídicos nuevos, o al
desenvolvimiento del comercio jurídico, sino a actuar derechos o reconocer
y reparar las infracciones de deberes jurídicos de particulares, los actos que
el magistrado cumple son de jurisdicción contenciosa, es decir, la
jurisdicción contenciosa tiende a actuar relaciones ya existentes, este
proceso sirve para la composición de la Litis, es decir, los particulares
recurren a este proceso en búsqueda de la solución de un litigio que por sus
propios medios no han podido solucionar.

La jurisdicción voluntaria.
El vocablo “Jurisdicción Voluntaria”, es referido a aquellas
situaciones que han de dirimirse ante el órgano jurisdiccional sin que haya
de plantearse el contradictorio, es decir, sometidas a la actividad
jurisdiccional por la parte interesada, prescindiendo de un contendor o de
cualquier otra persona que tenga un interés actual en el asunto. La
jurisdicción voluntaria representa un concepto opuesto a la jurisdicción
contenciosa, en ésta se aprecia un conflicto suscitado entre dos o más
partes. En la jurisdicción voluntaria el asunto conflictivo es, en principio,
pertinente a una sola parte interesada, valga decir, no se plantea
controversia alguna.
La jurisdicción disciplinaria.
Se refiere a las normas procesales y de organización judicial,
contenidas en el Código de Procedimiento Civil, en la Ley Orgánica del
Poder Judicial, la de Carrera Judicial, la Ley de Consejo de la Judicatura,
que establecen sanciones disciplinarias, en virtud de la potestad jerárquica
de imponer modos de comportamiento tanto a los jueces, a los empleados
del tribunal y a las partes.

La jurisdicción de derecho y la jurisdicción de equidad.


El ejercicio de la jurisdicción, centra su desarrollo en la función de
resolver una controversia, la cual puede ser de Derecho o de Equidad.
Jurisdicción de Derecho es aquella en que la norma conforme a la cual
debe resolverse un conflicto está establecida con anterioridad por la ley y el
juez debe ajustarse a lo que ella señala. De esto se desprende que la labor
del juez consiste en interpretar la ley en forma tal de aplicar la norma al
caso particular y por ello en su sentencia el juez debe indicar los
fundamentos de hecho y de derecho.
Jurisdicción de Equidad es aquella en que el juez va creando el
Derecho al resolver cada controversia. En estos casos el juez busca,
primeramente, la existencia de algún precedente en este caso
(jurisprudencia) es decir, algún fallo recaído en un asunto anterior en el que
se haya resuelto el mismo problema, materia del proceso que debe fallar. Si
existe algún precedente, el juez debe resolver conforme a él; y, si no existe,
debe crear la norma jurídica de acuerdo con los principios generales del
Derecho y su prudencia que le permitan resolver el conflicto sometido a su
decisión.

Los dos momentos de la jurisdicción.


En la doctrina extranjera se expone que los momentos culminantes de
la jurisdicción son la Cognición y la Ejecución forzosa, o sea, el proceso de
conocimiento, que se extiende de la demanda hasta la declaración de
derecho contenida en la sentencia y el proceso de ejecución que hace
efectiva, material y económicamente, aquella declaración.
En tal sentido, el proceso venezolano no existe esta delimitación entre
proceso de conocimiento y proceso de ejecución, en que tanto insiste la
doctrina extranjera, especialmente la italiana. Entre nosotros, la ejecución
no es sino la fase final del proceso, de manera que no constituye un
procedimiento aparte, autónomo e independiente.
La teoría que puede extraerse de nuestro ordenamiento jurídico es la
de la integralidad procesal en el sentido de que el juicio se desenvuelva a
través de las fases y de las etapas, pero con una continuidad jurídica, desde
la demanda hasta la ejecución, sin fragmentación ni desmenuzamientos.
El proceso culmina con la declaración de certeza y el proceso de
ejecución con la expropiación forzosa. Desde este punto de vista, el
proceso ordinario tiene tres etapas: Sustanciación, decisión y ejecución,
como un todo indivisible y tiene tres fases: Primera instancia, apelación y
casación.

La cognición.
Normalmente los particulares adaptan su conducta a las previsiones de
la ley, a los condicionamientos contenidos en las normas generales y
abstractas. Cuando la conducta no corresponde a esos presupuestos, no se
cumple con el fin del legislador previsto en la norma, al afectarse un
interés, es necesaria la tutela del juez quien tiene la función de juzgar. El
juez no es libre de hacer discrecionalmente las valoraciones de la conducta
de las partes en conflicto, sino que debe basarse en los condicionamientos
generales y abstractos establecidos en las leyes. Esta la fase de
conocimiento de la jurisdicción que culmina con la sentencia.

La ejecución forzada.
De nada serviría todo el conocimiento que el juez adquiere de los
hechos para encuadrarlos en la norma y sentenciar, si la decisión no se
cumple por el obligado. De manera que la jurisdicción asegura mediante la
fuerza, si la parte no cumple, la ejecución de la norma concreta creada con
la sentencia. Esta es la etapa de ejecución forzada, y esta etapa forma parte
integrante de la jurisdicción.

La jurisdicción y otras funciones del Estado.


En la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela,
(CRBV) en su capítulo III, Del Poder Judicial y el Sistema de Justicia,
sección Primera, de sus disposiciones generales, establece en el artículo
253 que:
“El Estado ejerce la función jurisdiccional a través de nuestros
tribunales y para cumplir con la garantía constitucional de la justicia. El
Estado debe asumir directamente la función de resolver los conflictos
mediante órganos investidos de autoridad, donde debe imponer a los
contrincantes árbitros privados. Esta razón de árbitros privados es por la
sencilla finalidad de lograr solución pacífica a los conflictos”
Tomando como referencia lo antes expuesto de puede decir que la
función jurisdiccional es una atribución que se le confiere al Estado como
exclusivo y que este ejecuta a través de la persona de jueces, quienes son
los que tienen el poder de ejecución de hacer cumplir una decisión judicial,
para dirimir conflictos e intereses que alteren el orden social, es por ello,
que la función jurisdiccional comprende la decisión con fuerza de verdad
legal de una controversia entre partes.

La Acción Procesal.
La acción procesal o procedimiento ordinario otorga a los habitantes
de Venezuela una posibilidad de velar por sus derechos, que puedan acudir
ante un tribunal de Primera Instancia en lo Civil, Mercantil o del Trabajo
para que les restituyan sus derechos, impulsando un cobro en bolívares
(ahora también en divisas) por un perjuicio que hubieran sufrido por otra
persona o empresa. Esta acción se realiza mediante un proceso que aunque
tiene unos lapsos establecidos por la ley, a veces se pueden dilatar a
solicitud de los propios abogados, bien sea la parte actora o demandada.

Concepto.
"Entendemos por acción procesal posibilidad jurídico-constitucional
que tiene toda persona, natural o jurídica, pública o privada, de acudir ante
los órganos jurisdiccionales para que mediante los procedimientos
establecidos en la ley, pueda obtener la tutela de un determinado interés
jurídico individual, colectivo, difuso o para lograr los efectos que la ley
deduce de ciertas situaciones jurídicas". (Ortiz, R. 2004).
La relatividad del concepto de acción.
El Jurista Piero Calamandrei: sostiene que el concepto de acción no
puede plantearse en términos absolutos, y observa preguntándose ¿Cuál de
las diversas  teorías expuestas es la verdadera? como si no hubiera más que
una que pudiera considerarse absolutamente exacta frente a todas las otras
que habrían de considerarse equivocadas.
La polémica en torno a la acción observa Calamandrei tiene un fondo
esencialmente político y no constituye más que un aspecto, históricamente
paralelo, de la polémica más vasta sobre el problema del Estado.
No cabe duda de que la formulación del concepto de acción depende
estrechamente del momento histórico, político y jurídico existente al
tiempo y en el espacio en que esa formulación se hace.

Autonomía de la acción.
La acción se materializa con la presentación de una demanda o de una
denuncia, que viene a ser el primer acto procesal del proceso postulado por
el titular de la acción.

Acción y Justicia.
Contempla la vía establecida por la ley para que las personas reclamen
sus derechos.

Acción y derecho subjetivo.


La acción en sentido abstracto se define como el derecho subjetivo
público a desencadenar la actividad jurisdiccional. El derecho de acción se
ejercita frente al Estado y hace surgir en él, a través de sus órganos
jurisdiccionales, la obligación de pronunciarse sobre la tutela pretendida
actuando el Derecho. Surge aquí el concepto de pretensión: un acto
procesal que, deducido ante el juez, se dirige contra el adversario, y del que
el derecho de acción es presupuesto. Pero el derecho de acción es
"abstracto": se agota en excitar la actividad jurisdiccional, y triunfa cuando
se dicta sentencia, aun desestimatoria. No existe un derecho a obtener una
sentencia con un contenido determinado.
La acción en sentido concreto se conceptúa, por el contrario, como un
derecho subjetivo público a una tutela jurisdiccional concreta, a una
sentencia de contenido determinado, y depende de la concurrencia de los
correspondientes presupuestos jurídico-materiales.
Se distingue así del derecho al proceso, que es otro derecho subjetivo
público (previo a la acción) a obtener una sentencia sobre el fondo, y que
depende de la concurrencia de presupuestos jurídico-procesales. El
concepto de pretensión opera aquí como una manifestación de otro
derecho: el derecho fundamental, (abstracto), a acceder a los tribunales,
mediante la afirmación de la acción e implícitamente del derecho al
proceso.

Acción y pretensión.
El derecho de acción abstracto constituye la parte para que se realice
el proceso y se dicte una sentencia debe distinguirse de la pretensión, ya
que ésta no es un derecho sino una declaración de voluntad en que se le
exige una subordinación de un interés de otro a un interés propio.

Acción y demanda.
La “Demanda se conoce como el escrito que inicia el litigio y tiene
por objeto determinar las pretensiones del actor, mediante relato de los
hechos que dan lugar a la acción, invocando el derecho que le fundamenta
y petición clara de lo que se reclama". (Lino, P. 2009).
La presentación de la demanda debe hacerse en forma escrita y
conforme a las reglas del procedimiento ordinario, con algunas excepciones
relativas a la promoción de la prueba instrumental y excepciones relativas a
la promoción de la prueba instrumental y la de testigos (Artículo 864 CPC).
El juez que recibe el libelo de demanda tiene la potestad jurídica de decidir
si esta debe ser admitida o no y para esto tiene que revisar el expediente.
El artículo 339 del CPC contempla la exigencia de que la demanda sea
presentada por escrito, en cualquier día y hora ante el secretario o el juez,
esto descarta la posibilidad de formalizar demandas mediante diligencia o
de forma oral, tomando en cuenta que una excepción contenida en el CPC,
a esta regla, está prevista en el artículo 882 del CPC el cual prevé la
demanda verbal en juicios breves con una cuantía menor a cuatro mil
bolívares.
El proceso y sus Principios Fundamentales.
 Principio de Oralidad y Escritura: nuestro proceso civil, al igual que el
penal, el laboral y contencioso administrativo, ha sido tradicionalmente
escrito, porque la escritura domina prácticamente la totalidad de los
actos, tanto de las partes como del tribunal; y es así como la ley dispone
que las partes harán sus solicitudes mediante:
 Diligencias escritas.
 Escritos.
 Protocolización.
 Principio de Concentración y Fraccionamiento:
 Concentración se realizan los actos procesales en una audiencia única,
o en unas pocas audiencias próximas entre sí.
 Fraccionamiento: los distintos actos procesales se realizan en intervalos
más o menos prolongados de manera que el proceso parece como en
distintos compartimientos estancos.
 Principio de Mediación e Inmediación:
 Mediación: se caracteriza por el hecho de que el procedimiento se lleva
a cabo formando la opinión o criterio del juez bajo la influencia de
actuaciones realizado por otro juez comisionado.
 Inmediación: el principio de inmediación rige cuando todos los alegatos
y pruebas se realizan con la intervención directa del mismo juez que
debe sentencias: no se permite al juez comisionar. Este principio no es
exclusivo del procedimiento oral también puede cumplirse en el juicio
escrito.
 Principio Dispositivo e Inquisitorio (nemo iure sine actore):
 Principio Dispositivo: sus Efectos;
 Nadie está obligado a intentar una acción en contra de su voluntad.
 Los jueces deben sentenciar conforme a lo alegado y probado.
 Las partes tienen la facultad de intentar sus recursos en contra de las
decisiones que los perjudiquen.
 Excepciones:
 Los jueces pueden suplir el derecho no invocado.
 Los jueces tienen facultades inquisitivas en materia de pruebas. Se
pueden declarar incompetentes de oficio.
 Tienen iniciativa probatoria.
 Los jueces pueden proceder de oficio cuando la ley los autorice o
cuando se trate de resguardar el orden público o las buenas costumbres.
 Dirección Formal y Material del Proceso: el principio dispositivo sufre
una excepción al establecer el Art. 14 del C.P.C. que el juez es el
director del proceso, pudiéndolo impulsar de oficio hasta su conclusión
y si la causa está paralizada deberá fijar un lapso para su reanudación.
El juez deja de ser un mero espectador formal, pudiendo dirigir el
proceso, impulsándolo de oficio. El juez queda facultado para buscar la
verdad y lograr economía procesal.
 Principio Inquisitorio: rige en los casos en que las partes no tienen la
libre disponibilidad de la relación jurídica, el juez está desvinculado de
la iniciativa de las partes para investigar la verdad.
 Principio de Contradicción: cónsono con la garantía del derecho a la
defensa, este principio pretende que los actos del procedimiento deban
realizarse con la intención de la contraparte, o con la posibilidad de que
ésta se entere de la realización del acto para poder oponerse antes de la
realización, o después, o dentro del lapso que fije la ley. Este principio
aspira que las partes tengan oportunidad no sólo de atacar, sino también
de defenderse.
 Principio de que las Partes están a Derecho: se plasma este principio en
que una vez practicada la citación para la contestación de la demanda,
ya no habrá necesidad de una nueva citación para ningún otro acto del
juicio, salvo que lo establezca alguna norma especial.
 Principio de Igualdad: Se trata de la igualdad jurídica de las partes.
Supone que los derechos de las partes sean idénticos y en consecuencia,
que se les dé el mismo tratamiento frente al ejercicio de derechos
similares.
 Principio de Economía Procesal: se pretende que exista una proporción
entre el fin que se persigue en el proceso y los medios. De allí que los
procesos de módica cuantía sean objeto de trámites más simples.
 Principio de Celeridad Procesal: se aspira que la secuencia de actos
procesales se desarrolle fluidamente; es un reflejo de la colaboración
que deben prestarse las partes en el impulso del litigio. Este principio
está relacionado con la tutela judicial efectiva en el sentido de que la
controversia se decida en un tiempo razonable.
 Principio de Preclusión: según el cual se pasa de un estadio al siguiente
acto del proceso, de tal manera que el acto procesal que no haya sido
realizado en la oportunidad prevista ya no podrá realizarse, porque cada
etapa del proceso se desarrolla en forma sucesiva y preclusiva, sin que
se pueda regresar a ella una vez cumplido el lapso.
 Principio de la Verdad: está vinculado con el principio de la mayor
aproximación a la verdad material de los hechos. No se trata de llegar a
una verdad formal, sino a la verdadera.
 Principio de Publicidad: el principio se cumple con la posibilidad que
se le da a cualquiera de tener acceso al expediente y sacar copias
simples de los documentos contentivos de los actos procesales. Los
actos del proceso son públicos, salvo por razones de decencia pública.
 Principio de Responsabilidad: las normas procesales también recogen la
disposición constitucional que establece la responsabilidad del
funcionario en ejercicio del Poder Público, cuando infrinja la ley o por
abuso de autoridad (Arts. 18 C.P.C., 287 C.O.P.P. ord. 8, 49 Y 255
C.R.B.V.)
 Principio De Probidad: a través de este principio se pretende que tanto
las partes como sus abogados actúen con lealtad y honorabilidad en los
distintos actos procesales.

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