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Plan ■ Complicaciones 8
Morbilidad y mortalidad 8
■ Introducción 2 Complicaciones peroperatorias 8
Complicaciones postoperatorias 9
■ Reseña anatómica y fisiopatológica 2
■ Resultados 9
■ Indicaciones quirúrgicas 2 Resultados clínicos 9
■ Estudio preoperatorio 2 Efectos secundarios 9
Anamnesis 2 Comparación entre las diferentes técnicas 9
Endoscopia 2 ■ Situaciones particulares 10
Tránsito baritado esofagogastroduodenal (TEGD) 2 Esófago de Barrett 10
pH-metría y pH-impedanciometría 3 Obesidad mórbida 10
Manometría 3 Hernia hiatal paraesofágica 10
Gammagrafía de vaciamiento gástrico 3 Braquiesófago, técnica de CollisNissen 12
■ Técnica quirúrgica 3 Reintervenciones 14
Historia 3 ■ Innovaciones tecnológicas 14
Colocación del paciente y posición de los trocares 3 Cirugía robótica 14
Exposición del hiato esofágico 4 Cirugía a través de una incisión umbilical única 14
Disección del esófago 4 Sistema LINX 15
Cierre de los pilares del diafragma 5
Métodos valvulares 6
pH-metría y pH-impedanciometría
La pH-metría de 24 horas y la pH-impedanciometría son
los exámenes de referencia para confirmar el diagnóstico
de RGE. Su uso se limita a las dudas diagnósticas: sínto-
mas típicos de RGE pero sin lesión endoscópica, síntomas
atípicos o pacientes refractarios a los IBB [16] . Estos exáme-
nes también permiten confirmar la correlación entre los
síntomas que se experimentan y el reflujo.
Manometría
La manometría esofágica explora el tono del EEI y la
motilidad esofágica. El dogma defendido durante mucho 2 1
4 3 5
tiempo según el cual la técnica quirúrgica debería adap-
tarse al resultado de la manometría no tiene ninguna
base científica basada en hechos. La ausencia de hipoto-
nía del EEI no es una contraindicación para la cirugía,
ya que el RGE puede estar ligado a relajaciones inapro-
piadas [17] . Se puede realizar una fundoplicatura, incluso
de 360◦ , en caso de esclerodermia o de acinesia eso-
fágica idiopática [18] . Los trastornos motores secundarios
al RGE, relacionados con la gravedad de la esofagi-
tis [15] , son parcialmente reversibles tras el tratamiento
quirúrgico [19] . No presentan ninguna correlación con
la disfagia postoperatoria, tanto si la fundoplicatura es Figura 1. Posición de los trocares (1 a 5).
parcial como total [20] . Por lo tanto, la manometría preo-
peratoria sólo estará verdaderamente indicada en los
pacientes que refieran disfagia, para poder excluir una de hospitalización y una vuelta más rápida a las activida-
acalasia. des habituales en el grupo de laparoscopia. Por último,
la incidencia de eventraciones es superior en el grupo
laparotomía [29] . Los principios de la cirugía siguen siendo
Gammagrafía de vaciamiento gástrico idénticos:
El vaciamiento gástrico suele estar alterado en los • disección y movilización del esófago para conseguir un
pacientes con un RGE complicado con una esofagitis [21] , segmento intraabdominal de 2-3 cm;
aunque estos trastornos de la evacuación gástrica no • aproximación entre sí de los pilares del diafragma;
correlacionan con malos resultados postoperatorios [22] . • creación de una válvula antirreflujo sin tensión.
Además, la fundoplicatura de Nissen acelera el vacia- Para conocer más sobre las indicaciones y técnicas qui-
miento gástrico, independientemente de si era normal rúrgicas mediante laparotomía, consulte el artículo de la
o no en el preoperatorio [23] . No obstante, algunos equi- EMC sobre este tema [30] .
pos [24, 25] aconsejan asociar una piloroplastia a la cirugía
antirreflujo en caso de paresia gástrica muy grave, que se
caracteriza por una prueba de vaciamiento con un T½ Colocación del paciente y posición
superior a 120 minutos. El interés de la piloroplastia no de los trocares
está en mejorar el control de los síntomas del RGE, sino en
disminuir el riesgo de distensión abdominal posprandial La intervención quirúrgica se realiza bajo anestesia
(bloating). La prueba de vaciamiento gástrico en el preo- general. Se coloca al paciente en posición semisentada y
peratorio no está indicada de rutina. Sólo es interesante con las piernas separadas. El cirujano se coloca entre las
en los pacientes con una semiología franca de paresia gás- piernas, y los ayudantes, a ambos lados. El monitor se
trica o en caso de reintervención para asegurarse de que no coloca en el eje de visión del cirujano. Para crear el neu-
existe una lesión iatrogénica de los nervios vagos durante moperitoneo, habitualmente se utiliza la aguja de Veress,
la intervención quirúrgica previa. y se introduce un primer trocar (T1) de 10 mm a 2 cm por
debajo del reborde costal izquierdo, en el borde externo
del músculo recto abdominal. A continuación, y bajo con-
Técnica quirúrgica trol visual, se colocan los trocares complementarios. En
total, para realizar la intervención quirúrgica, serán nece-
Historia sarios cinco trocares colocados sobre una misma línea
horizontal (Fig. 1). La óptica se coloca sobre la línea
Para tratar el RGE se han propuesto numerosas y dife- media (T2); se puede utilizar una óptica a 0◦ , aunque la
rentes técnicas y vías de acceso [26] . Hoy en día, los óptica a 30◦ permite una mejor visión quirúrgica, especial-
métodos de reposición anatómica (Lortat-Jacob, Hill) o mente en los pacientes obesos. Los trocares paramediales
la prótesis de Angelchick han sido sustituidos por la fun- (T1, T3) son los trocares de trabajo. Los trocares latera-
doplicatura posterior de tipo Nissen o Toupet. La válvula les se destinan a los ayudantes. El trocar izquierdo (T5)
anterior de Dor se utiliza principalmente en la preven- permite exponer el campo quirúrgico. En caso de HH
ción del RGE tras miotomía de Heller, pero sigue siendo importante, es preferible utilizar una pinza de Johan de
la técnica de elección de tratamiento del RGE para algu- 10 mm (Fig. 2) que una pinza equivalente de 5 mm para
nos equipos. Las indicaciones de toracotomía izquierda minimizar el riesgo de lesiones gástricas. El trocar dere-
son excepcionales, y la laparoscopia ha sustituido a la cho (T4) proporciona un acceso para el instrumento que
laparotomía en caso de cirugía de entrada. Diversos estu- permite separar el lóbulo izquierdo hepático. La sonda
dios aleatorizados [27, 28] han comparado estas dos vías de gástrica, colocada en ocasiones al inicio de la intervención
acceso. Los resultados funcionales (disfagia, control del quirúrgica por el anestesiólogo para descomprimir el estó-
RGE, puntuaciones de CdV) son similares, aunque se mago, se retira para no hacer rígido el esófago durante su
observa una disminución de la morbilidad, menor tiempo disección.
Figura 8. Paso del lazo por detrás del esófago y el nervio vago
posterior (flechas).
Figura 11. Primer punto en la base de los pilares. 1. Vena cava
inferior; 2. aorta.
Figura 12. Cierre posterior de los pilares diafragmáticos de Figura 14. Plastia transversal del pilar izquierdo según Bau-
abajo arriba. lieux.
Figura 13. Vista final del cierre de los pilares. Figura 15. Sección de los últimos vasos cortos gastroespléni-
cos.
de los pilares no es estenosante (Fig. 13). De hecho, la
disfagia postoperatoria importante y persistente se atri-
buye con más frecuencia a un cierre demasiado ajustado
de los pilares que a un problema de válvula [34] . En ocasio-
nes es imposible realizar un cierre satisfactorio los pilares
sin tensión, origen de recidivas. En estas condiciones, una
alternativa consistiría en completar la aproximación pos-
terior de la base de los pilares con una plastia transversal
del pilar izquierdo según Baulieux (Fig. 14). El interés del
refuerzo del cierre de los pilares con una prótesis se aborda
en el epígrafe «Hernia hiatal paraesofágica».
Métodos valvulares
Técnica de Nissen
La fundoplicatura completa fue descrita por Nissen en
1956 [35] . Tras la abertura del ligamento frenoesofágico y
la movilización del esófago sin sección de los vasos cortos
(VC) gastroesplénicos, se crea una válvula de 360◦ y de
6 cm de largo utilizando las caras posterior y anterior del
fundus, que se suturan juntas sobre el borde derecho del Figura 16. Liberación completa de la cara posterior del fun-
esófago. dus.
A raíz de los trabajos de Donahue [36] y de Demees-
ter [37] , se han aportado múltiples modificaciones técnicas hasta alcanzar el espacio retroesofágico a nivel del pilar
a la técnica inicial. Los VC se seccionan sistemáticamente izquierdo, de forma que se libera completamente la cara
para permitir la realización de una válvula sin tensión posterior del fundus (Fig. 16). La hemostasia de estos VC se
(floppy Nissen). No es deseable una liberación extensa de facilita con el uso de los modernos instrumentos hemos-
la curvatura mayor del estómago comenzando en el polo táticos. Se levanta el esófago ayudándose del lazo, y la
inferior del bazo. Sólo se seccionan los tres o cuatro últi- parte superior de la tuberosidad mayor se toma con una
mos VC, de abajo arriba (Fig. 15). La disección continúa pinza fenestrada (Fig. 17) para a continuación pasarla de
Figura 17. La válvula se confecciona con la parte superior del Figura 19. Prueba de la «toalla».
fundus.
Figura 22. Fijación de la parte posterior de la válvula al pilar Figura 23. Fundoplicatura posterior de 270◦ según Toupet.
derecho.
derecha de la válvula, en particular cuando no se seccio-
despreciable [39] y su interés clínico en términos de dis- nan los VC. Al contrario que en la técnica de Nissen, para
fagia o de CdV postoperatoria no se ha confirmado en permitir un control eficaz del RGE, la válvula debe medir
otros estudios [10, 40] . No es necesario colocar un drenaje al menos 3 cm de altura [46] . Se debe fijar la válvula a cada
quirúrgico. Se recomienda un tratamiento antiemético lado del esófago con al menos tres o cuatro puntos de
profiláctico, ya que es preciso evitar las náuseas y vómi- sutura no reabsorbible (Fig. 23).
tos en la sala de recuperación, origen de una ascensión
torácica precoz del montaje.
Técnica de Dor
Técnica de Nissen-Rossetti Para prevenir la aparición de un RGE tras una miotomía
de Heller, Dor comunicó en 1962 la realización de una
Rossetti describió en 1977 una modificación de la téc- válvula anterior parcial [47] . Este tipo de válvula también
nica original de Nissen, del que era uno de sus alumnos. se puede utilizar en el tratamiento del RGE.
Los VC no se seccionan, y se crea una válvula corta La liberación de los VC no es necesaria. La válvula ante-
(2-3 cm) utilizando únicamente la cara anterior del fundus rior se crea utilizando la tuberosidad mayor, que se fija
gástrico [41] . sobre los bordes derecho e izquierdo del esófago utili-
Se pasa una pinza atraumática por detrás del esófago, zando tres puntos separados de sutura no reabsorbible. La
con la que se toma la parte anterior del fundus por debajo parte derecha de la válvula se fija también sobre el pilar
del nivel del cardias y a mitad de la distancia entre la derecho del diafragma.
curvatura menor y mayor del estómago. Se tracciona del
fundus para llevarlo a la derecha del esófago. La válvula,
cuya altura no debe superar los 2 cm, se confecciona en la
cara anterior del esófago, utilizando dos o tres puntos gas-
Complicaciones
troesofágicos con sutura no reabsorbible. Es aconsejable
utilizar sistemáticamente una sonda tutora intraesofágica
Morbilidad y mortalidad
para evitar realizar la válvula bajo tensión [42] . Para algunos En una serie multicéntrica que incluyó 7.531 pacientes,
autores, esta intervención sólo debe realizarse si las condi- operados entre 2005 y 2009, la mortalidad fue del 0,19%,
ciones anatómicas son favorables. Sobre todo, es necesario y la morbilidad, del 3,8% [48] . No se observó ninguna
suficiente «material» gástrico para confeccionar una vál- influencia de la obesidad sobre estos dos parámetros. En
vula flexible [43] . El principal riesgo con esta intervención cambio, la mortalidad y la morbilidad aumentaban signi-
quirúrgica es una torsión antihoraria de la parte baja del ficativamente con una edad superior a los 70 años, para
esófago responsable de una disfagia que no responderá alcanzar el 0,79% y el 7,3%, respectivamente. Esto se
al tratamiento mediante dilataciones [43] . En caso necesa- explica por el aumento de los factores de comorbilidad y
rio, no se debe dudar a la hora de modificar la estrategia por el hecho de que en esta población la indicación quirúr-
quirúrgica y realizar una sección de los VC o una fundo- gica suele establecerse con más frecuencia por una hernia
plicatura parcial [42] . paraesofágica que por un RGE simple.
Técnica de Toupet
Complicaciones peroperatorias
Con la finalidad de reducir los problemas de disfagia
postoperatoria, en 1963 Toupet propuso la realización de Los incidentes peroperatorios más frecuentes son las
una fundoplicatura posterior parcial de 180◦ [44] . perforaciones de vísceras, hemorragias, neumotórax y
Actualmente, los cirujanos adeptos a esta técnica tie- enfisema [49] . La perforación esofágica o gástrica se comu-
nen más bien tendencia a crear una válvula de 270◦ . En nica en el 0-4% de los casos [50] . Estas perforaciones son
esta intervención, no suele ser necesario seccionar los VC temibles cuando no se diagnostican, ya que exponen a
gastroesplénicos y, al igual que para la técnica de Nissen- una mortalidad importante. El tratamiento ideal consiste
Rossetti, la válvula se confecciona con la cara anterior del en suturar la perforación y recubrirla con la fundo-
fundus. No obstante, muchos equipos realizan de rutina plicatura [51] . Las hemorragias son raras y generalmente
una sección de los VC [21, 45] . Clásicamente, la parte poste- no precisan transfusión. Los accidentes hemorrágicos
rior de la válvula se fija al pilar derecho del diafragma corrientes aparecen durante la disección de los VC o
mediante uno o dos puntos de sutura no reabsorbible son secundarios a una lesión involuntaria del hígado
(Fig. 22). El objetivo principal de estos puntos es impedir producida por el separador. Las lesiones esplénicas eran
la migración intratorácica de la válvula. También dismi- frecuentes con la laparotomía, con una tasa de esplenecto-
nuyen la tensión de tracción que se ejerce sobre la parte mía de hemostasia del 5-11%; este tipo de complicación es
excepcional (< 1%) con la laparoscopia [52] . Se han comu- Algunos estudios encuentran también un impacto clara-
nicado heridas de la aorta durante la disección del esófago mente positivo sobre la CdV [45, 60] . No obstante, el 3-6%
mediastínico con un bisturí ultrasónico, durante la sutura de los pacientes necesitará una reintervención quirúr-
de los pilares diafragmáticos o durante la fijación de una gica [45, 59, 62] .
prótesis sobre el pilar izquierdo del diafragma. El neumo-
tórax por el dióxido de carbono (CO2 ) producido por la
abertura de la pleura durante la disección intramediastí- Efectos secundarios
nica del esófago es una complicación benigna de la vía
En el postoperatorio es habitual un grado variable de
de acceso laparoscópica. Su incidencia varía del 0 al 1,5%
disfagia para los alimentos sólidos. Esta disfagia probable-
según las series, pero puede llegar al 10% en caso de her-
mente sea consecuencia del edema causado por la cirugía.
nia paraesofágica [53] . Las lesiones pulmonares asociadas
Desaparece espontáneamente en 2-3 meses [53] y no tiene
son excepcionales, y el drenaje torácico no es necesario,
influencia sobre la corrección del RGE a largo plazo [63] .
ya que el CO2 se reabsorbe rápidamente al detener la insu-
Se trata de una disfagia funcional y no mecánica, ya que
flación. El enfisema subcutáneo no necesita tratamiento
está influida por la capacidad del paciente para controlar
específico. En muy raras ocasiones se comunica el trau-
sus emociones y por sus hábitos alimentarios [64] . Se debe
matismo de los nervios vagos, ya que a menudo pasa
informar a los pacientes en el preoperatorio de la posi-
inadvertido [53] . En los equipos entrenados en laparosco-
bilidad de desarrollar dicha disfagia, a la vez que se les
pia, la tasa de conversión a laparotomía es baja (< 2,4%).
tranquiliza con el hecho de que se trata de un efecto secun-
Las causas de conversión son las complicaciones perope-
dario transitorio cuyo tratamiento es puramente dietético.
ratorias (34%), la falta de comodidad del cirujano (59%)
En un 3-24% de los casos, la disfagia persiste más allá
o problemas de equipamiento (7%) [53] .
del tercer mes postoperatorio [65] . En este caso, es pre-
ciso considerar una causa mecánica y realizar un estudio
complementario que conste de un TEGD, endoscopia y
Complicaciones postoperatorias manometría. En caso de que se trate de una válvula con
Los problemas postoperatorios más frecuentes son res- demasiada tensión, el tratamiento consistirá en la dilación
piratorios: atelectasias, infección o derrame pleural [54] . Las endoscópica, que ofrece buenos resultados en el 50% de
trombosis venosas profundas y la embolia pulmonar son los casos [66] . En caso de anomalía del montaje antirreflujo
excepcionales gracias a que los pacientes se levantan de o de un cierre demasiado tenso de los pilares, el trata-
forma precoz y al uso de las heparinas de bajo peso mole- miento es quirúrgico [67] . La tasa de disfagia persistente a
cular [51] . Están descritas las hemorragias postoperatorias, largo plazo es del orden del 5% [59] .
que muy a menudo provienen de los VC gastroesplénicos El síndrome de distensión abdominal por gas (gas bloat
o de las zonas de inserción de los trocares, aunque rara- syndrome) corresponde a una serie de síntomas atribuidos
mente precisan una reintervención quirúrgica [55] . Una a la incapacidad de eructar, cuya incidencia varía del 1
complicación específica de la vía de acceso laparoscópica al 85% [53] . La queja principal es la distensión abdominal
es la herniación intratorácica precoz de la fundoplicatura posprandial (bloating). Otros síntomas son dolor abdo-
o del estómago, comunicada en el 0-2,4% de los casos [56] . minal, dispepsia, saciedad precoz, náuseas y flatulencias.
Los factores que favorecen su aparición son los esfuer- Para explicar esta sintomatología se han evocado muchos
zos de vómito postoperatorios y el cierre inadecuado de factores, como la incapacidad de la unión esofagogástrica
los pilares diafragmáticos. Para evitar este riesgo, algu- de abrirse en respuesta a la distensión gástrica, la aero-
nos autores proponen realizar una disección esofágica fagia (frecuente en los pacientes que sufren RGE y que
mínima [57] , aunque esta técnica no es aplicable en caso continúan deglutiendo aire en el período postoperatorio)
de HH o de braquiesófago [50] . Otros autores recomien- o las lesiones iatrogénicas quirúrgicas de los nervios vagos,
dan realizar rápidamente un TEGD en todos los pacientes que producen una gastroparesia [53] . Al contrario, muchas
que presenten vómitos postoperatorios para comprobar la de estas quejas estaban ya presentes antes de la cirugía y
integridad del montaje quirúrgico. Si se evidencia una her- no se ven agravadas en el postoperatorio [10] . Por último,
nia, estará indicada una reintervención inmediata, que es un estudio específico sobre el problema del bloating ha
técnicamente sencilla cuando se realiza precozmente [53] . mostrado que la fundoplicatura de Nissen atenuó la gra-
Las complicaciones parietales, como los abscesos de pared vedad de estos síntomas en el 49% de los pacientes y la
(0,6-1,4%) o las eventraciones (0,6-2%), son poco frecuen- agravó en el 21% de los casos [68] . En este último subgrupo,
tes tras laparoscopia [49] . Las complicaciones más graves la sintomatología se atenuó con el paso del tiempo.
se relacionan con el diagnóstico tardío de una perfora- Tras una fundoplicatura, clásicamente se comunica un
ción esofágica o gástrica, lo que expone a una elevada aumento de las flatulencias, lo que parece ser una compli-
mortalidad. cación específica de la cirugía antirreflujo [10] . La etiología
de presunción es una asociación de aerofagia y la impo-
sibilidad de eructar. En el postoperatorio precoz tras una
Resultados
fundoplicatura se deben desaconsejar las bebidas gaseo-
sas. En algunas ocasiones se comunican diarreas, cuyo
origen no está claro, aparte del traumatismo de los nervios
Resultados clínicos vagos [53] .
La eficacia de la cirugía antirreflujo en el tratamiento de
los síntomas típicos del RGE está bien documentada [50] .
En cambio, sólo un 67-92% de los pacientes señala una
Comparación entre las diferentes
mejora de los síntomas atípicos tras la cirugía [50, 58] . La técnicas
tos crónica suele mejorar con más frecuencia que los pro-
blemas de asma o de laringitis [50] . Con un seguimiento
Nissen frente a Nissen-Rossetti
de 5-10 años, los buenos resultados de la cirugía se man- Existen cinco estudios aleatorizados y dos metaanáli-
tienen con una tasa de satisfacción del 90% [59, 60] y una sis [69, 70] que comparan la fundoplicatura de 360◦ con o
tasa de recidiva de los síntomas de tipo pirosis o regurgi- sin sección de los VC gastroesplénicos. Los resultados a
tación inferior al 12% [45, 59] . La vuelta al tratamiento con corto plazo (1 año) y a largo plazo (10 años) no mues-
IBP es más frecuente, del orden del 25-50%, aunque está tran ninguna diferencia significativa entre ambas técnicas
bien documentado que estos IBP se prescriben a menudo en términos de control del RGE, disfagia, síndrome de
para síntomas dispépticos atípicos y que muchos de estos distensión abdominal (gas bloat syndrome), duración de
pacientes no presentan una recidiva objetiva del RGE [61] . la hospitalización o complicaciones postoperatorias. La
ventaja innegable de la técnica de tipo Nissen-Rossetti ácido o biliar, con un riesgo de transformación en adeno-
es una disminución de la duración quirúrgica, con una carcinoma (ADC) 30-120 veces superior al de la población
ganancia media de 28 minutos (82 frente a 110 minutos) normal [80] . Clásicamente, se distingue el esófago de Barret
en relación con la técnica de Nissen. En cuatro de los corto (< 3 cm) del esófago de Barret largo (> 3 cm), que
cinco estudios aleatorizados, los cirujanos realizaron en se considera como un estadio muy agresivo e irreversi-
los pacientes del grupo Nissen una sección de los VC a ble de la enfermedad. El esófago de Barret se suele asociar
partir del polo inferior del bazo. Esta movilización extensa a defectos anatómicos y fisiológicos graves de la unión
de la curvatura mayor, de hecho inútil, explica por qué esofagogástrica, como una amplia HH, un braquiesófago,
se observa una diferencia tan grande en términos de una hipotonía del EEI o una alteración del vaciamiento
duración quirúrgica. Además, todos estos estudios con- esofágico. Por lo tanto, no es sorprendente que la ciru-
cluyen en la inutilidad de realizar la sección de los VC gía antirreflujo se caracterice por una elevada tasa de
gastroesplénicos de rutina. No obstante, hay que señalar fracasos, más alta en caso de esófago de Barret, especial-
que la mayoría de los expertos de la Society of American mente en caso de esófago de Barret largo [81] . Numerosos
Gastrointestinal and Endoscopic Surgeons (SAGES) [50] estudios han demostrado que una fundoplicatura eficaz,
o de la European Association for Endoscopic Surgery al contrario que el tratamiento médico, puede inducir
(EAES) [12] recomiendan seccionar los VC de forma siste- una regresión o incluso una desaparición de la metapla-
mática cuando se realiza una fundoplicatura completa. sia intestinal en los pacientes con un esófago de Barret
corto [82] . Lamentablemente, la cirugía no ha demostrado
Nissen frente a Toupet su superioridad en relación al tratamiento médico en la
prevención del ADC [83] . Las indicaciones de cirugía en
Existen dos metaanálisis que comparan la fundoplica-
los pacientes portadores de un esófago de Barret son las
tura completa o incompleta y que se suelen citar como
mismas que las de los pacientes sin esófago de Barret,
referencias [27, 71] . Los resultados de estos dos estudios son
teniendo en cuenta que después de la cirugía antirreflujo
equívocos, ya que en el grupo fundoplicatura parcial se
se deberá continuar con la vigilancia endoscópica debido
incluyen pacientes operados según la técnica de Tou-
al riesgo persistente de desarrollar un ADC.
pet, pero también según las técnicas de Dor o de Hill.
Existen más específicamente 10 estudios aleatorizados que
comparan la técnica de Nissen y de Toupet (tres por lapa- Obesidad mórbida
rotomía y siete por laparoscopia), cuyos resultados son en
algunas ocasiones contradictorios. Existe un metaanálisis Existe una asociación demostrada entre RGE y obesi-
sólo sobre los siete estudios realizados por laparosco- dad; la prevalencia del reflujo aumenta con el índice de
pia [72] . En estos siete estudios, a excepción de uno o dos, masa corporal (IMC) [84] . En relación con la eficacia de la
la técnica quirúrgica se caracterizaba por la sección siste- fundoplicatura en los pacientes obesos, los resultados son
mática de los VC, la confección de una válvula de 270◦ contradictorios. Algunos estudios concluyen que los resul-
o de 360◦ y el uso sistemático de una sonda de calibra- tados se ven influidos negativamente por un IMC superior
ción. La desaparición de los síntomas subjetivos del RGE, a 30 [85] , y otros, lo contrario [86] . Aunque los pacientes
la satisfacción global de los pacientes y las complicacio- con un IMC entre 30 y 35 se pueden beneficiar de una
nes postoperatorias son similares entre ambos grupos. La cirugía antirreflujo por fundoplicatura y esperar un buen
técnica de Nissen se caracteriza por una duración de la resultado, se les debe informar de que una posible cirugía
cirugía más corta (91 frente a 98 minutos) y por una mejor bariátrica ulterior será no sólo más difícil técnicamente,
restauración de la presión del EEI (15 frente a 13 mmHg). sino que se asociaría a una tasa más alta de complicaciones
En cambio, las tasas de disfagia (9% frente al 13%), de gas postoperatorias [87] . En los pacientes con un IMC superior
bloat syndrome (23% frente al 36%), de dilatación endoscó- a 35, los autores de este artículo no aconsejan una cirugía
pica postoperatoria (3% frente al 7%) y de reintervención antirreflujo. Si se establece la indicación de cirugía bariá-
quirúrgica (3% frente al 7%) son menores en el grupo trica, la técnica de elección sería el bypass gástrico, ya que
Toupet. El autor concluye que la fundoplicatura de tipo esta intervención quirúrgica induce una pérdida de peso
Toupet debería ser la técnica quirúrgica de elección en el significativa y trata eficazmente el RGE [88] .
tratamiento del RGE [72] . No obstante, hay que recordar
que varios estudios no aleatorizados comunican de forma
significativa un peor control del RGE en caso de técnica Hernia hiatal paraesofágica
de Toupet [45, 73, 74] .
Clásicamente, se distinguen cuatro tipos de HH [89] . El
tipo I corresponde a la migración de la unión esofago-
Válvula anterior frente a válvula posterior gástrica a través del hiato; el tipo II, a la ascensión del
Existen siete estudios aleatorizados y dos metaaná- fundus hacia el tórax con una unión esofagogástrica en
lisis [75, 76] que comparan la fundoplicatura posterior y posición normal; el tipo III, a una hernia mixta (I + II), y
anterior, cuyos resultados son a menudo contradictorios. el tipo IV, a la herniación combinada del estómago y de
La CdV postoperatoria y la satisfacción de los pacientes otro órgano abdominal. Las hernias paraesofágicas (HPE)
a largo plazo son similares en ambos grupos. En cambio, corresponden a los tipos II a IV. En caso de HPE, la indi-
la fundoplicatura de tipo Nissen permite un mejor con- cación quirúrgica suele estar basada más en síntomas de
trol de los síntomas de RGE, y la válvula anterior de Dor origen mecánico (dolor, disfagia, vómitos) que en sínto-
induce menos efectos secundarios, en particular menos mas específicos de RGE.
disfagia [77, 78] . En caso de HPE, el cierre de los pilares mediante suturas
simples se asocia a una tasa elevada de recidivas radiológi-
cas, del orden del 25% (extremos: 7-66%) [90] . El riesgo de
Situaciones particulares recidiva aumenta cuando el tamaño del hiato es superior a
5 cm [91] . En la mayoría de los casos, estas recidivas corres-
Esófago de Barrett ponden únicamente a una ascensión de la válvula hacia el
tórax, y sólo se observa una recidiva con herniación aso-
El esófago de Barrett es un proceso de metaplasia carac- ciada del cuerpo gástrico en el 30% de los pacientes [89] .
terizada por la sustitución del epitelio epidermoide de la La mayoría de los pacientes que presentan una reci-
parte baja del esófago por una mucosa glandular de tipo diva radiológica son paucisintomáticos [89, 90, 92] , aunque
gástrico o intestinal. Su incidencia es del 10-15% en los el 2-7% deberá ser reoperados [89] . Se cita la presencia de
pacientes con RGE [79] . Se trata de una anomalía adquirida un braquiesófago no diagnosticado como posible meca-
que es la consecuencia de un RGE crónico de componente nismo de recidiva [90] , aunque las causas evocadas con más
Anchura = 4 cm
Altura = 7 cm
6 cm
ilar =
del p itud
Long
Ángulo α = 38°
Figura 24. Determinación de la superficie del hiato. Figura 25. Reducción completa del saco herniario.
Figura 27. Refuerzo protésico posterior. Figura 29. La parte horizontal de la prótesis se coloca entre la
válvula y el esófago.
Figura 28. Fijación de la prótesis con hilos de sutura no reab- Figura 30. Vista final de la prótesis posterior y de la válvula de
sorbibles. 360◦ .
el riesgo de erosión con este tipo de material parece casi braquiesófago se suele asociar a otras entidades patoló-
inexistente. Se utiliza una placa de prótesis de 10 × 10 cm gicas como el esófago de Barret, una HH de gran tamaño
para confeccionar un refuerzo en tres dimensiones (3D). (HH de tipo I > 5 cm, HH de tipo III), una estenosis pép-
La parte vertical es de forma trapezoidal y mide 10 cm tica, sarcoidosis o esclerodermia [97] . La incidencia de
de ancho en su parte superior, 6 cm en su parte inferior y braquiesófago es del 3-8% [97, 98] , aunque algunos autores
7 cm de alto; el borde superior de la prótesis se recorta de niegan su existencia [99] . Se puede sospechar la presen-
forma elíptica en una anchura de 3 cm para dejar un paso cia de un esófago corto en el preoperatorio con base en
para el esófago. La parte horizontal es de forma rectan- los resultados de la manometría, de la endoscopia o del
gular y mide 4 cm de ancho y 3 cm de longitud. Las dos TEGD, aunque el valor predictivo de estos exámenes es
partes se solidarizan entre sí en ángulo recto a nivel de inferior al 50% [97] . El diagnóstico de braquiesófago es
la escotadura del borde superior mediante dos puntos de peroperatorio y se define por la imposibilidad, a pesar
sutura no reabsorbibles (Fig. 27). El refuerzo 3D se coloca de una disección extensa de la parte mediastínica del
en posición posterior y a continuación se fija a los pilares esófago, de descender la unión esofagogástrica 2 cm por
y al diafragma mediante cinco a siete puntos de sutura debajo del hiato sin tensión. El desconocimiento de la
no reabsorbible. Así, el esófago reposa sobre la parte hori- existencia de un braquiesófago expone a fracasos por des-
zontal de la prótesis (Fig. 28). La fijación de la prótesis al lizamiento de la válvula hacia abajo a lo largo del eje
diafragma utilizando grapas es peligrosa, ya que se han del esófago, también denominado como Nissen deslizado
descrito casos de taponamiento cardíaco [93] . Al final del (slipped Nissen) o por ascenso de la válvula hacia dentro
procedimiento se crea siempre una válvula antirreflujo, del tórax [97] . En caso de esófago corto, las alternativas
para tratar un RGE preexistente o prevenir la aparición de son una esofagectomía distal con interposición de un seg-
un RGE inducido por la disección excesiva del hiato. La mento corto de colon (intervención quirúrgica reservada
válvula se posiciona sobre la parte horizontal de la pró- únicamente para las lesiones con estenosis refractaria),
tesis para minimizar el riesgo de migración intratorácica una fundoplicatura intratorácica (recomendada con muy
postoperatoria (Fig. 29) y se realiza una fundoplicatura poca frecuencia debido a las múltiples complicaciones
completa mediante tres puntos gastroesofágicos (Fig. 30). específicas) y, sobre todo, una plastia de alargamiento del
esófago con fundoplicatura. En 1957, Collis presentó la
Braquiesófago, técnica de Collis-Nissen primera gastroplastia de alargamiento por vía toracoab-
dominal [26] , y, a partir de 1982, Orringer popularizó la
El RGE crónico produce lesiones inflamatorias que técnica de Collis-Nissen [26, 97] . Esta técnica, que combina
pueden extenderse a todas las capas del esófago y gene- una gastroplastia de alargamiento según Collis y una
rar una fibrosis cicatricial longitudinal responsable de fundoplicatura según Nissen, se puede realizar por lapa-
la formación de un esófago corto o braquiesófago. El roscopia con excelentes resultados funcionales [97, 98, 100] .
3 cm
Innovaciones tecnológicas
Cirugía robótica
Figura 37. Paso anterior de la válvula con colocación en posi- El uso de un robot quirúrgico del tipo Da Vinci no
ción inferior de la hilera de grapas. aporta ninguna ventaja en comparación con la laparosco-
pia clásica. Los resultados clínicos son similares, pero con
unión esofagogástrica para dejar un mínimo de mucosa un aumento del tiempo quirúrgico y un impacto finan-
gástrica por encima de la válvula [98] . ciero desfavorable [103] .
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Clinique Saint-Jean, 32, boulevard du Jardin Botanique, 1000 Bruxelles, Belgique.
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ULB, Hôpital Érasme, 808, route de Lennik, 1070 Bruxelles, Belgique.
Cualquier referencia a este artículo debe incluir la mención del artículo: Hauters P, Bertrand C, Legrand M, van Vyve E, Closset J. Tratamiento
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Disponibles en www.em-consulte.com/es
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complementarias Animaciones legales al paciente complementarias evaluación clinico