Está en la página 1de 82

Director y editor

A N A M N E S I S
Eduardo Díaz Amado
Revista de bioética
Grupo de investigación en Bioética
Eduardo A. Rueda Barrera
Número 12, julio - diciembre 2017
Jairo Clavijo Poveda ISSN 2011-1258
José E. Cuéllar Saavedra
Eduardo Díaz Amado
Contenido
Hugo Escobar Melo
Javier A. González Cortés
Editorial
Edgar A. López López Eduardo Díaz Amado ................................. 3
Edilma M. Suárez Castro El maltrato animal a la luz de la
Esteban Rossi ética de Kant
Sandra Daniela Rojas Castillo ..................... 7
Fernándo Suárez Obando
Algunos aspectos psicológicos
Efraín Méndez Castillo
para explicar el desarrollo de la
Lilian Torregrosa afición taurina
Nelson Castañeda Alarcón Carlos Alberto Crespo Carrillo .................... 19
¿Pueden las guías de práctica clínica
apoyar el ejercicio de la bioética?
Con el apoyo de: Oscar Mauricio Muñoz Velandia ................. 29
Instituto de Bioética, Investigación clínica en la práctica
Facultad de Medicina, de la reumatología en Colombia.
Pontificia Universidad Javeriana. Visión de un reumatólogo desde
la óptica ética
Daniel G. Fernández-Ávila .......................... 39
Diagramación, Semiótica, Semiología, Genética
CTP e Impresión y Dismorfología
Fundación Cultural Javeriana Fernando Suárez-Obando .......................... 49
de Artes Gráficas –JaVEGraF– Neuroética de los potenciadores
Bogotá, DC., Colombia. cognitivos
Ricardo de la Espriella Guerrero ................. 61
La Compañía de Jesús y la renovación
de la ciencia española entre los
siglos XVI y XVIII
Jairo Solano Alonso ................................... 71
editorial
Eduardo Díaz Amado1

Para la bioética 2017 es un año carga- médicos, un abogado, un teólogo y un


do de significados, conmemoraciones y historiador, en el que se formulaban los
aniversarios. Para empezar, se celebran criterios para el diagnóstico de muerte ce-
50 años del primer trasplante de corazón rebral y que llegaron a conocerse como
humano, realizado por el cirujano sudafri- los Criterios de Harvard. El título del ar-
cano Christian Barnard a Louis Washkans- tículo es Una definición de coma irrever-
ky, en un hospital de Ciudad del Cabo, sible, lo que en otras palabras significó
Sudáfrica, y quien padecía de una enfer- que la perdida permanente de la función
medad cardiaca terminal. La donante del cerebral era sinónimo de que este órgano
órgano trasplantado era Denise Darvall, había muerto. Ahora bien, explicar cómo
una joven de 24 años que resultó con se extrapoló el concepto de muerte cere-
muerte encefálica luego de un accidente bral al de muerte de la persona es una
de tránsito en el que también su madre cuestión más compleja que escapa a los
falleció. El trasplante fue un éxito si con- objetivos de estas líneas.
sideramos que Washkansky sobrevivió a
la operación, aunque lastimosamente por No se trató solamente de “adelantos téc-
poco tiempo, pues murió 18 días más tar- nicos” o de “avances de la medicina”.
de producto de una infección pulmonar. En primera instancia implicó la transfor-
mación del concepto de morir, que pa-
Un año después, en 1968, se publicaba recía tan obvio e inmutable, superando
en la revista JAMA2 el Reporte del Co- el tradicional criterio de muerte basado
mité Ad Hoc de la Escuela de Medicina exclusivamente en el funcionamiento car-
de Harvard para examinar la Definición dio-pulmonar. Segundo, al habernos atre-
de Muerte Cerebral, constituido por diez vido a manipular un órgano tan lleno de

1. Profesor Asociado, Instituto de Bioética, Pontificia Universidad Javeriana. Correo electrónico: eduardo.
diaz@javeriana.edu.co
2. Journal of the American Medical Association, agosto 5 de 1968, Vol. 205, No. 6.
Eduardo Díaz Amado

significados y metáforas (el corazón es el derechos en tales circunstancias, tanto


depositario del amor, lo que se entrega de médicos como de pacientes, así como
cuando se ama; es el centro de la vida y nuevas incertidumbres y debates en el
el lugar en donde para muchos vive Dios) seno de la sociedad. Y aunque en dife-
se rasgó el velo de lo que hasta entonces rentes hospitales del país actualmente se
habíamos considerado sacro e intocable, hacen diagnósticos de muerte cerebral y
reforzando la esperanza que el mundo se realizan trasplantes cotidianamente,
moderno ha depositado en la medicina. sin que ello genere mayores cuestiona-
Y, tercero, planteó la necesidad de acom- mientos, el tema de la eutanasia en cam-
pañar el progreso y la investigación cien- bio no ha dejado de generar polémica y
tíficos con reflexiones de distinto orden, es difícil pensar que un día se llegue a un
especialmente ético, bajo la idea de que consenso sobre la materia.
tenemos que ser responsables frente a la
vida, así como evitar abusos y despropósi- Temas como estos, y otros tantos relacio-
tos en la investigación científica y el ejerci- nados con el progreso biomédico y con
cio de la medicina. Tales preocupaciones las tensiones entre ciencia, sociedad y
y objetivos están, entre otros, relaciona- cultura, que generan incertidumbre, cues-
dos con el origen de la bioética que esta- tionamientos y dudas de orden filosófico,
ba por surgir justo en esta época, finales ético, religioso, jurídico y económico, entre
de los 1960s y principios de los 1970s. otros, requieren sin duda de una aproxi-
mación cuidadosa y de juicioso examen
Treinta años después, en 1997, y cuando desde diferentes ángulos, que sea a la vez
ya la bioética había arribado a Colombia crítico y abierto. Se necesitan luces desde
trayendo consigo denuncias por la deshu- diversos sectores, pero en especial desde
manización del morir (dada la colectiviza- la academia, que ayuden a comprender el
ción de la medicina y la preeminencia de mundo en el que nos tocó vivir y a orientar
la tecnología en la atención en salud), así éticamente las acciones tanto de quienes
como diversas reflexiones sobre el dere- tienen en sus manos diseñar políticas pú-
cho a morir dignamente, la Corte Cons- blicas en el ámbito biomédico y científico,
titucional despenalizó el homicidio por como en la toma de decisiones a nivel in-
piedad mediante la sentencia C-239 de dividual. La sociedad en general y los ciu-
ese año. Por tanto, también celebramos dadanos necesitan información adecuada
en 2017 veinte años de una sentencia y buenos criterios en estas temáticas, en
que dejó claro el talante liberal y garan- especial a la hora de buscar integrar lo
tista de la nueva Constitución Política de que el progreso científico y el mundo bio-
4 1991, y que las ideas sobre el morir y la médico tienen para ofrecer.
muerte estaban cambiando drásticamen-
te en nuestra sociedad. Esto trajo consi- Por las anteriores razones también en
go un replanteamiento de los deberes y 2017 celebramos el que hace 20 años se

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Editorial

haya fundado el Instituto de Bioética de la letín de Bioética Clínica y Filosofía de la


Pontificia Universidad Javeriana, que jus- Medicina, publicación del grupo de estu-
tamente ha tenido como misión examinar dio en bioética clínica, historia y filosofía
los “numerosos problemas éticos y políti- de la medicina, fundado en 2005. Este
cos que surgen en el ámbito clínico, la sa- Boletín se convertiría en Anamnesis. Re-
lud pública y el medio ambiente.”3 Durante vista de Bioética, gracias al gran apoyo
estos 20 años el Instituto de Bioética se ha y visión del profesor Guillermo Hoyos,
consolidado en cuatro frentes. Primero, quien fuera director de nuestro Instituto.
ha logrado constituir un grupo multidis- Nuestra revista, como es hoy conside-
ciplinario, abierto, crítico e incluyente de rada en el Instituto de Bioética, ha sido
profesores, estudiantes, exalumnos, per- una plataforma abierta para todos aque-
sonal administrativo, amigos y seguidores llos que desean hacer aportes al debate
que trabajan de manera comprometida y análisis, en bioética y áreas afines. Su
en bioética y áreas afines. Segundo, se ha formato sencillo y flexible le ha permitido,
fortalecido como grupo de investigación4, tanto a consagrados académicos y profe-
con programas de posgrado de alta ca- sionales, como a estudiantes y neófitos en
lidad (primero con la Especialización y estas áreas, exponer sus ideas y compartir
actualmente con la Maestría en Bioética), sus trabajos. Esperamos seguir adelante,
investigaciones y publicaciones que hacen en especial porque sabemos que se trata
un gran aporte al debate y propuestas de de una alternativa importante y necesaria
la bioética y áreas afines. Tercero, se ha en nuestro medio.
convertido en punto de encuentro amiga-
ble y promotor de importantes discusiones En este número tenemos siete artículos. El
al interior de la comunidad universitaria. primer artículo, escrito por S. Rojas Casti-
Y, cuarto, ha enarbolado los ideales y pro- llo, se ocupa de examinar los argumentos
puestas de la Universidad Javeriana para que desde una perspectiva kantiana po-
construir una mejor sociedad. drían esgrimirse para exigir el buen trato
a los animales, buscando ir más allá de
Y para aumentar las celebraciones, en posiciones emotivistas y reconociendo al-
2017 también nos alegramos por el dé- gunas limitaciones de dicha perspectiva.
cimo aniversario de la fundación de esta Luego, en el segundo artículo, C. Crespo
revista, Anamnesis5, que surgió como Bo- Carrillo señala que la afición por la tau-
romaquia se relaciona con las maneras
3. Ver página de internet del Instituto de Bioética: como las personas son educadas, por lo
http://www.javeriana.edu.co/ins-bioetica/nosotros que si queremos que algún día se reco-
4. Nuevamente reconocido como Grupo A de
Colciencias en 2017.
nozca y se evite el sufrimiento de los to- 5
5. Nombre que fue sugerido en alguna conversación ros, así como su derecho a vivir y a no
por la profesora Olga Maldonado, y que fue rá-
ser torturados, será necesario cambiar los
pidamente acogido por su profundo significado
tanto para la Filosofía como para la Medicina. patrones de educación que están, en pri-

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Eduardo Díaz Amado

mera instancia, en manos de las familias, tista clínico, nos presenta una interesante
y en segunda instancia en la escuela. perspectiva que busca ligar la semiología
médica, la semiótica y su propio campo,
Los siguientes cuatro artículos surgen de la genética, del cual hacen parte dismor-
las reflexiones llevadas a cabo por los es- fologías, y problemas de comunicación y
tudiantes de la primera cohorte del pro- traducción, como ocurre cuando estudia-
grama de doctorado en Epidemiología mos el funcionamiento de la molécula de
Clínica, de la Facultad de Medicina de la la vida, el ADN. El cuarto artículo, escrito
Universidad Javeriana, y que arrancó con por R. de la Espriella Guerrero, nos lleva
gran entusiasmo en 2016. En dicho doc- a considerar a la neuroética como cam-
torado quedaron incluidos un módulo de po relacionado con la bioética, aunque
Bioética, y otro de Epistemología y Filoso- distinto, y en el que podemos ubicar las
fía de la Medicina, a cargo del Instituto de preguntas que hoy genera el uso de los
Bioética. Un aspecto que hace particular- potenciadores cognitivos (que buscan au-
mente valiosos estos artículos es que pre- mentar la inteligencia); un elemento más
sentan las reflexiones que consagrados del gran debate sobre el mejoramiento
clínicos y profesores de medicina hacen humano (human enhancement).
sobre diversos aspectos que surgen en la
relación de sus propios campos discipli- Cerrando este número de Anamnesis está
nares y lo visto en estos módulos. En el el artículo de J. Solano Alonso, historia-
primero de ellos, O. Muñoz Velandia, in- dor que trabaja en nuestra costa caribe,
ternista, analiza cómo las guías de prácti- en el que nos presenta una bella perspec-
ca clínica, un instrumento de la medicina tiva de cómo la Compañía de Jesús jugó
de nuestro tiempo, pueden ser un camino un papel fundamental en el desarrollo de
para realizar propuestas de la bioética. En la ciencia española entre los siglos XVI y
el segundo, D. Fernández Ávila piensa su XVIII. Recordándonos, además, que los
propio quehacer como reumatólogo, se- debates en bioética, en lo que tiene que
ñalando los retos y problemas que se pre- ver, por ejemplo, con las relaciones entre
sentan cuando se es clínico e investigador ciencia y sociedad, no son nuevos, sino
a la vez. Luego, F. Suárez Obando, gene- que tienen una historia.

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


El maltrato animal a la luz de la ética de Kant

El maltrato animal a la luz


de la ética de Kant

Sandra Daniela Rojas Castillo1

Resumen
En el presente escrito expongo, a la luz de la teoría moral kantiana, la importancia del
buen trato animal en el camino de la vida virtuosa. He escogido tratar el tema desde
la perspectiva de Kant, cuya principal preocupación no es cómo debemos tratar a los
animales, sino que su propuesta respecto al trato moral animal se encuentra basada
en un ámbito racional, más no emocional; siendo este último, un contexto que ha te-
nido como consecuencia la pérdida de la credibilidad cuando se habla de protección
animal. El discurso animalista se fundamenta en la relación emocional que llegamos
a compartir con los animales, la cual nos aleja de argumentos objetivos y sólidos que
fomenten la consideración moral de los animales como seres a los que es necesario
prestarles atención.

Palabras clave: Buen trato animal, perspectiva kantiana, ámbito racional.

7
1 Filósofa, Pontificia Universidad Javeriana. Bogotá, Colombia. Monitora, grupo de estudio Animales y So-
ciedad, Instituto de Bioética, Pontificia Universidad Javeriana, Bogotá. Correo electrónico: rojas-sandra@
javeriana.edu.co

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Sandra Daniela Rojas Castillo

Abstract
In the present text I expose the importance of good animal treatment to get a virtuous life in
the light of Kantian ethics. I have chosen to treat this topic from Kant’s view, a writer whose
principal concerns is not how we have to treat animals, as his approach about moral animal
treatment is based on a more rational reasoning than an emotional one, this have had as a
consequence the loss of credibility when it talks about animal protection. The animal speech
has been based in the emotional relation that we get to share with animals, which move us
away from impartial and strong arguments that encourage moral consideration of animals
as something that is necessary.

Key words: Good animal treatment, Kant’s view, rational scope.

Introducción En medio de esta preocupación por el


maltrato animal, considero que la ética
Los animales en general han sido parte kantiana da una solución a la pregunta
fundamental del progreso de nuestra so- por cómo debemos tratar a los animales
ciedad, sin embargo, durante siglos se sin caer en sentimentalismo o utilitarismo,
han visto sometidos a diferentes formas ya que estos son un problema al momen-
de maltrato por parte del ser humano, Por to de establecer cuál es la forma correc-
ejemplo, el abuso físico que han padeci- ta de relacionarnos con ellos, los cuales
do muchas de las mascotas en Bogotá, nos ayudan en nuestras labores diarias y
el exceso en las labores impuestas a los nos brindan compañía, permitiendo así la
caballos cocheros en nuestro país, entre consideración de los animales en su tota-
otros.2 Preocupada por la forma incorrec- lidad y aunque no lo hace de una forma
ta en la que hemos actuado con los ani- directa como se desea hoy en día, si lo
males, decidí buscar argumentos que le hace para todos los animales no huma-
permitieran a la humanidad reconsiderar- nos por los que pedimos un trato adecua-
los y tratarlos sin causarles padecimientos do y sin sufrimiento.
que bien pueden ser omitidos.
Sin embargo, esta visión de Kant a favor
2 “La situación de los animales este año en Colom-
bia ha causado revuelo por los constantes casos de los animales no se ha considerado en
de maltrato que se han evidenciado en videos gran medida, pues como dice Singer,
publicados en redes sociales, razón por la que
no solo los animalistas, sino la comunidad en
general, se volcaron en rechazo a estos actos.(…) [e]n general, he evitado el punto de vis-
Recientemente, a través de las redes sociales, han ta de que debemos ser compasivos con
8 aparecido circunstancias violentas que preocupan
a las autoridades ambientales, como los felinos
los animales porque la crueldad con
cazados en Chocó y en el Llano, el gato quemado
ellos acaba generando crueldad con
vivo en Cartagena, el tiburón cazado y atacado los humanos. Quizá sea cierto que la
con machete en San Andrés, y los perros ultrajados compasión por los humanos y por otros
por paseadores en Bogotá.” (El tiempo, 2015) animales vayan unidas frecuentemente;

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


El maltrato animal a la luz de la ética de Kant

pero, en cualquier caso, decir que ésta del deber del hombre consigo mismo, la
es la verdadera razón por la que debe- propia perfección. Deber que hace parte
mos ser compasivos con los animales,
como dijeron santo Tomás y Kant, es
de la doctrina de la virtud, a saber, la fe-
una postura profundamente especista. licidad ajena. Que revela el significado
(Singer, 1999, p.294) de la humanidad en la propia persona, y
por tanto también en la persona de otros.
Considerar la visión antropocéntrica de
Kant como especismo es algo en lo que Además, propongo que la teoría kantia-
se puede caer fácilmente, pues a prime- na, respecto de las acciones que debe-
ra vista en su trabajo parecería que los mos tener en relación con los animales,
animales carecen de importancia. No podría ser tenida en cuenta en nuestra
obstante, al adentrarse en su obra ética sociedad actual, en las normas que re-
y cuestionarse la importancia de la inclu- gulan nuestra interacción con estos seres,
sión de los animales en la misma, permi- para que los derechos de los animales
te ver que la consideración hacia estos por los que se aboga hoy en día tuvieran
seres, si bien no es directa y se basa en un mejor fundamento moral, que permi-
un ámbito racional desde el ser humano, tiera a todo ser racional cumplir las nor-
es apropiada para lograr un objetivo de mas legales que los cobijan. No solo por
consideración universal. coacción externa, sino teniendo como
base una legislación interna, tal y como
En la obra kantiana, el autor ha dispuesto sucede en los derechos humanos, los
un apartado sobre deberes respecto con cuales pueden ser objeto de legislación
los animales, que a pesar de su breve- externa pero se encuentran bajo el im-
dad, contiene los suficientes elementos perativo de la humanidad como fin en sí
para suponer que Kant consideró a los mismo, permitiendo que no se trasgreda
animales como seres capaces de experi- la dignidad del otro en el cumplimiento
mentar sufrimiento, un padecimiento que de la normatividad.
afecta al hombre en el cultivo de su cons-
ciencia moral.
Kant, un autor humanista que pensó
En el presente escrito expongo a partir de en los animales
la visión de Kant, cómo debemos com- A lo largo de las obras de Kant, la expo-
portarnos con los animales en los diferen- sición de las relaciones del hombre con
tes ámbitos en que nos relacionamos con los animales se ve reflejada en un pará-
ellos, con el fin de establecer las acciones grafo de la Metafísica de las Costumbres
moralmente correctas y moralmente in- y en las Lecciones de ética. En cambio, 9
adecuadas. La tesis que defiendo es que la relación con el hombre ha ocupado la
el buen trato animal hace parte funda- mayoría del desarrollo de su trabajo crí-
mental de la búsqueda del cumplimiento tico, y como Adela Cortina enuncia en el

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Sandra Daniela Rojas Castillo

estudio preliminar de la MC3, indudable- tía y miedo/repugnancia, la segunda tiene


mente el kantismo es humanismo, pues relación con perjudicar o beneficiar nues-
el autor propone al hombre como tarea tros intereses. Teniendo en cuenta lo ante-
y no sólo como límite (Cortina, 2008). rior, muchas de las acciones en relación
Sin embargo, este humanismo no hace a con los animales según la ética de Kant
un lado a los animales, pues en su ética, son realizadas por el motivo incorrecto,
muestra la importancia moral del cuida- ya que su principio no es motivado por el
do animal para el hombre, con el propó- bienestar animal, menos por la ley moral,
sito de alcanzar una perfección moral. sino por los afectos que produce el animal
o su beneficio para la raza humana.
La propuesta moral kantiana se encuen-
tra fundamentada en las directrices de Un ejemplo de lo que sucede al actuar
la razón; los sentimientos, inclinaciones motivado por afecciones o el sentido de
y deseos, se encuentran subordinados utilidad, puede verse reflejado en las re-
al análisis de la razón. Cualquier acción laciones que tenemos con las diferentes
pensada como ética o virtuosa posee clases de perros. En donde se es digno
como máxima un principio acorde al im- de privilegios como nombre, techo, co-
perativo moral, a saber, “obra según una mida, cuidados veterinarios, entre otros,
máxima de fines tales que proponérselos si se es un perro útil para el hombre, a
pueda ser para cada uno ley universal” saber, perro policía, antidrogas, lazarillo,
(MC, 2008, p.249). Ninguna acción ética etc., y si por su apariencia genera afec-
o virtuosa tiene como móvil inclinaciones ciones positivas como es el caso de los
o deseos egoístas, pues las inclinaciones lobos siberianos. En cambio, si es un pe-
pasan por el examen de la razón y han rro que habita en la calle, las considera-
concordado con una legislación univer- ciones propias de sus congéneres no son
sal, así cumplen con lo exigido por la ra- aplicadas a él. Primero, porque no es útil
zón y fundamentan la acción. al ser humano, sino todo lo contrario, es
considerado como indeseable; segundo,
Cuando hablamos acerca de cómo debe- no cumple con los requerimientos estéti-
mos actuar con los animales, tenemos el cos para generar en el ser humano afec-
problema de que la acción se encuentra ciones positivas y ser amado en un hogar.
en gran parte motivada por fines egoís-
tas o inclinaciones sentimentales. Según Aunque no todos los casos pueden ser
Serpell, nuestro modo de pensar sobre las comprendidos dentro del esquema afec-
especies se encuentra fundamentado por to/uso, la gran mayoría de las acciones
10 dos dimensiones, las emociones y la utili- con respecto a los animales se encuentran
dad, la primera se divide en amor/simpa- dentro de rasgos afectivos o de utilidad,
en donde el fundamento de la acción no
3 MC es la abreviatura para Metafísica de las
Costumbres. es algo que pueda hacer justicia al trato

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


El maltrato animal a la luz de la ética de Kant

animal o cumplir con el deseo de buen El buen trato animal como parte
trato para todos los animales. vital de una vida virtuosa
A pesar de no ser una ética pensada para La base de la ética de Kant es la ley mo-
los animales, el hecho de ser una ética hu- ral que se fundamenta en la razón del ser
manista permite un acercamiento al hom- humano, un atributo inherente a su na-
bre como sujeto racional en la búsqueda turaleza, la cual le dictamina el deber de
de un buen trato animal, sin exclusión por propender el bien supremo, constituido
afectos o utilidad. La ética de Kant propo- por virtud y felicidad. Alcanzar este bien
ne a los animales como seres capaces de conlleva en el hombre el sentimiento de
experimentar sufrimiento, aunque el hom- felicidad al ser consciente de que su actuar
bre tiene derecho a alimentarse de ellos, es virtuoso, denominado contentamiento
debe matarlos con rapidez, sin sufrimiento de sí mismo. Un sentimiento similar a la
(MC, 2008). Pues su sufrimiento es un fac- felicidad pero que no cae en la denomi-
tor que puede destruir moralmente al hom- nación de natural5 en el ser humano, sino
bre. “Cuando un amo arroja de su lado a que es el resultado de un proceso racional
su burro o a su perro porque ya no pueden en relación con las acciones.
ganarse el pan, demuestra la mezquindad
de su espíritu.” (LE, 1988, p.289)4 Entre los deberes que Kant menciona para
el cumplimiento de una vida virtuosa, el de-
El espacio de los animales en la vida mo- ber del hombre consigo mismo cumple un
ral del ser humano se enfoca en la conse- rol fundamental. Es el deber que le permite
cuencia que tiene en el hombre maltratar al hombre considerar a la humanidad como
al animal, más no en el animal per sé, lo fin en sí mismo, primero a él y después a
que permite que una persona que no sea sus semejantes. Es necesario que la huma-
amante de los animales, deba llegar a nidad desee primero alcanzar la perfección
comprender que lo mejor para sí mismo es propia en el cumplimiento de los deberes fí-
no maltratar a estos seres que nos rodean sicos y morales, para así poder contribuir a
en nuestro diario vivir. Logrando que la la felicidad de los otros en el cumplimiento
preocupación por el bienestar animal se de sus fines moralmente aceptables.
construya desde fundamentos racionales
e indirectos, teniendo como consecuen- 5 La felicidad entra en el marco de los impulsos
cia que todo ser animal no humano se naturales, “la felicidad no es un ideal de la razón,
sino de la imaginación, que descansa en meros
considere de igual forma sin importar su fundamentos empíricos” (FMC, 2009, p.103). La
uso o especie. Actitud que permite cuidar felicidad de cada uno es algo que el ser humano
de la integridad del ser humano como in-
propende por naturaleza, tal como lo hace con
el alimento, por lo que una obligación hacia un
11
dividuo y a su vez de la humanidad. impulso natural no podría ser, pues “tener un
fin para las propias acciones es un acto de la
libertad del sujeto agente y no un efecto de su
4 LE, es la abreviatura de Lecciones de Ética. naturaleza” (MC, 2008, p.385)

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Sandra Daniela Rojas Castillo

Para llevar a cabo este deseo racio- puede producir actitudes adversas hacia
nal, el buen trato animal entra a jugar quien causó daño al animal, en este caso
un rol indirecto dentro de la búsqueda hacia la naturaleza humana. Hay gente
del perfeccionamiento moral, pues hace que odia a la humanidad por el sufri-
parte de los deberes consigo mismo del miento que algunos seres humanos cau-
hombre en el ámbito moral. “[O]bserva- san a los animales.
mos deberes hacia la humanidad, cuan-
do por analogía los observamos hacia Toda acción del hombre que se proponga
los animales y promovemos con ello de una vida virtuosa, debe generar un senti-
modo indirecto nuestros deberes hacia miento de agrado, pues de lo contrario
la humanidad.” (LE, 1988, p.287) Den- la concepción del hombre como fin en sí
tro del ámbito moral, las acciones que mismo desde el sujeto en sí se va des-
realizamos con los animales nos afectan arraigando, llevándolo a considerarse a
moralmente, teniendo como resultado sí mismo y a sus semejantes como me-
sentimientos de agrado o desagrado con ros medios, olvidando el deber que tiene
respecto a nuestras acciones hacia ellos, como ser racional con la humanidad y
y en el peor de los casos la pérdida de con respeto a los demás seres sintientes
disposiciones morales naturales hacia diferentes a él. “Para no desarraigar es-
nuestros semejantes. tos deberes humanos, el hombre ha de
ejercitar su compasión con los animales,
Por ejemplo, una de las consecuencias pues aquel que se comporta cruelmente
morales del maltrato animal es la destruc- con ellos posee así mismo un corazón en-
ción de la predisposición natural de com- durecido para con sus congéneres.” (LE,
pasión ante los males de la humanidad. 1988, p.288)

Con respecto a la parte viviente, aun- Para Kant la relación que tenemos con los
que no racional, de la creación, del animales, no se limita a un uso descon-
trato violento y cruel a los animales se
opone mucho más íntimamente al deber siderado, sino que ellos son medios para
del hombre hacia sí mismo, porque con nuestros fines que debemos cuidar y tra-
ello se embota en el hombre la com- tar de tal forma que no les ocasionemos
pasión por su sufrimiento, debilitándo- alguna clase de sufrimiento innecesario.
se así y destruyéndose paulatinamente
una predisposición natural muy útil a la Esta consideración tiene como base la
moralidad en la relación con los demás conciencia de la analogía de nuestras
hombres (MC, 2008, p.309-310). naturalezas sensibles, por lo que hacer
trabajar a un animal más allá de sus fuer-
12 El maltrato provocado por un hombre a zas, puede equivaler a realizar la misma
un animal, despierta en el ser humano el acción con un hombre. De esta forma
sentimiento de compasión hacia el ani- se comienza a perder el sentimiento de
mal que está sufriendo, sentimiento que compasión por nuestros semejantes, y a

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


El maltrato animal a la luz de la ética de Kant

su vez el sentido de fin en sí mismo que A pesar de que la ética de Kant permite
posee el hombre. un acercamiento a las bases de una ética
preocupada por el bienestar animal, en-
La gratitud por los servicios prestados tendiendo bienestar como las condiciones
hace parte de las predisposiciones mo- en las que el sujeto encuentra satisfacción
rales que el hombre debe tener, no solo en el estado del animal, su teoría no res-
con sus semejantes, sino con aquellos ponde ante la construcción de un derecho
que le sirven como medios para sus fines, para los animales, que implique deberes
en este caso los animales. Cultivar estas directos hacia estos seres. Una búsqueda
predisposiciones es un deber moral que que nos ocupa en los debates actuales
el ser humano tiene y aplica para la na- sobre protección animal, en donde se
turaleza sensible, pues de lo contrario su espera que sean considerados sujetos de
relación con los seres humanos se vería derecho, para así poder proteger a todos
determinada por la consideración de la los animales sin distinción alguna de los
naturaleza racional como meros medios. diferentes tipos de maltratos.

La segunda limitante es la consideración


Límites de la ética kantiana en la
de los animales como seres inteligentes
protección animal con cierto grado de racionalidad. En la
Si bien la ética kantiana permite criticar ca- teoría kantiana, sólo el hombre posee la
sos concretos de abuso de animales ocurri- característica de ser sujeto racional, por
dos alrededor del mundo, como el abuso de lo que es el único ser capaz de proponer-
los caballos o “zorras” como comúnmente se fines, una característica que define el
se conocían6, es necesario mencionar los concepto de personalidad y a su vez de
límites de su ética para una comprensión humanidad, lo cual le da un estatus mo-
completa de la relación que debemos tener ral diferente a los animales, es decir, en
con los animales desde la moral kantiana. donde los derechos y deberes son direc-
tos sólo en relación con el ser humano.
6 En el caso de los caballos, aunque eran el único
medio de subsistencia de muchas familias de
escasos recursos en nuestro país, fueron llevados Finalmente, en la búsqueda actual del
a límites a los cuales los hombres no pueden
reconocimiento de los animales como
ser llevados por su calidad de seres humanos,
naturaleza que los cobija contra abusos físicos seres sintientes sujetos de derechos, en
y emocionales. Sin embargo, cuando llevamos donde no sean vistos como meros me-
a los animales a un exceso de esfuerzo, como
el que vivieron estos caballos en Cartagena, el dios para nuestros fines, sino que, en tér-
hombre no reconoce la dignidad de su huma- minos kantianos sean reconocidos como
nidad, pues se está fallando a sí mismo, ha ol-
vidado que los animales poseen una naturaleza fines en sí mismos, a partir de la ética de 13
análoga a la suya, y que por ser seres con los Kant no sería posible. Sólo los seres ra-
cuales se relaciona, es decir, que hacen parte de
su diario vivir, tiene un deber que cumplir para
cionales pueden ser considerados como
consigo mismo respecto de ellos. fines en sí mismos, pues son los únicos

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Sandra Daniela Rojas Castillo

capaces de proponerse fines con valor o humanos8, sin embargo, Kant nos mues-
significado moral. tra un camino indirecto en el que nuestro
círculo moral incluye a seres diferentes
Sin embargo sí hay un reconocimiento de al ser humano, es decir, animales, natu-
los animales, en cuanto organismos vivos raleza y Dios. Aunque sea indirecta esta
como fines de la naturaleza, en donde consideración, para el hombre pensar
se realiza la distinción entre un animal y en su estado moral implica pensar a los
una máquina y se deduce la importancia animales, la naturaleza y Dios en relación
de cada individuo como miembro de un consigo mismo.
gran organismo, aunque no es una con-
sideración que permita tomar a los ani- El hombre no puede pensarse como suje-
males como algo más que medios para to moral sin reflexionar las acciones que
nuestros fines, pues continúan sin poseer comete en el entorno que lo rodea. Pen-
la capacidad de proponerse fines acor- sar a los animales y la naturaleza es una
des a la legislación universal. obligación para aquel hombre que desee
progresar moralmente, pues la tarea del
La ética kantiana tiene límites al pensar ser humano no podrá ser llevada a cabo
en deberes directos para los animales, si se limita a pensarse a sí mismo y a sus
pero posee elementos que valen la pena semejantes dentro de su círculo de consi-
ser considerados y puestos en práctica en deración moral, dejando de lado los se-
la construcción de una consciencia pro- res con los que convive y que son ajenos
teccionista de los animales, y en el desa- a su naturaleza.
rrollo de normas éticas relacionadas con
estos seres. Determinar quienes se encuentran dentro
de los límites de la consideración moral es
una tarea algo difícil de realizar, aunque
Considerar a los animales desde la disposición de experimentar empatía
Kant amplía nuestro círculo de es un factor que permite la resolución so-
consideración moral7 bre quienes hacen parte de este círculo.
Cuando hablamos de consideración mo- Teniendo en cuenta esto, según Kant, ha-
ral, los seres sujetos a esta son los seres cia los animales experimentamos el senti-

7 “nadie se siente culpable por darle una patada 8 “nuestra preocupación moral fundamental tie-
a una piedra, pero sí nos parece terrible darle ne que ver con todos los seres humanos” (Gil,
una patada a un niño. En algún punto, los 2014, p.301). Los hombres al pertenecer a la
14 seres humanos trazamos unos límites mediante
nuestros códigos morales, de tal modo que
misma naturaleza tanto sensible como racional,
nos permite observar un tipo de semejanza entre
aquello que cae dentro de esos límites es digno uno mismo y el otro, llegando a ponernos en el
de consideración moral, mientras que lo que lugar del otro. Lo que permite que consideremos
cae fuera de esos límites no lo es.” (Gil, 2014, a los humanos como los principales participes
p.245) de nuestra consideración moral.

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


El maltrato animal a la luz de la ética de Kant

miento de simpatía9 dada la analogía de males morales, como la destrucción de la


nuestras naturalezas. Por lo que, es posible integridad moral del individuo, y a su vez
incluir a los animales en una forma similar la privación de la consciencia de la dig-
a como lo hacemos con los humanos. nidad propia de la naturaleza racional.
Tales males no dañan al hombre a simple
La inclusión de los animales desde la éti- vista, sino que van destruyendo su pre-
ca de Kant, se encuentra sujeta a com- disposición moral a la simpatía y agrade-
prender la capacidad de los animales de cimiento hacia otros animales y a su vez
experimentar sufrimiento dada la similitud hacia sus congéneres, actitud que tendría
de su naturaleza sensible con la nuestra. como resultado la pérdida del valor de la
A su vez que el buen estado de un animal humanidad como fin en sí mismo, y un
entra a ser tenido en cuenta por las po- aumento en el desinterés por el bienestar
sibles consecuencias morales que podría animal en comparación con el que vivi-
ocasionar en mí que un animal sufra de mos hoy en día.
cualquier modo.
Kant niega la posibilidad de derechos
animales, pero la búsqueda por derechos
Conclusiones directos hacia los estos no debe ser de-
A pesar de que Kant no ha sido un autor jada de lado, sin embargo, es necesario
relevante cuando se habla del trato ha- que se tenga en cuenta los límites del
cia los animales, la perspectiva kantiana concepto derecho aplicado a la humani-
destaca si se quiere dar una respuesta dad en relación con los animales. Pues
objetiva a nuestra relación moral con los las características que permiten ser cobi-
animales. Cómo debemos tratarlos es jados por el derecho no son aplicadas a
una preocupación que debe comenzar a los animales, ya que son seres diferentes
ser discutida desde un ámbito imparcial, a nosotros. Pero a la vez que son dife-
teniendo cuidado de caer en sentimenta- rentes a nosotros poseen una naturaleza
lismos subjetivos o enfoques meramente análoga a la nuestra, a partir de la cual
racionales que dejan de lado sentimien- se podría retomar el concepto de dere-
tos como la simpatía. cho humano y reformularse para poder
ser aplicado a los animales.
El sufrimiento innecesario de los anima-
les acarrea como consecuencia posibles Pensar el derecho no puede ser algo que
se realice sin tener en consideración la
9 Kant define la simpatía como la predisposición ética, pues cualquier norma o ley debe
de “[a]legrarse con otros y sufrir con ellos”
(MC, p.327). Es un deber que el hombre tiene contar con un fundamento moral sólido 15
con otros, pues a diferencia del sentimiento o que permita la coacción interna para así
conciencia moral, “es un deber indirecto (…)
fortalecer la coacción externa que el de-
cultivar en nosotros los sentimientos compasivos
naturales” (MC, p.329) recho exige. Para dicho objetivo, Kant es

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Sandra Daniela Rojas Castillo

un autor que permite la fundamentación dad no es independiente de los animales


moral de las leyes en pro de la protección y la naturaleza. Pues los animales hacen
animal, pues considera al animal des- parte importante de nuestra subsistencia,
de un ámbito racional, dejando de lado y su uso debe estar ligado con la pregun-
sentimentalismos que han sido la voz de ta por el cómo debo tratarlos, teniendo
la lucha por el reconocimiento del sufri- en cuenta que su sufrimiento destruye mi
miento animal, y a su vez aparta al utilita- integridad moral como ser humano y a
rismo, el cual ha determinado la relación su vez mi valor como individuo y el de la
con los animales en nuestra sociedad. humanidad.

La pregunta por cómo debemos tratar Ignorar el sufrimiento animal daña moral-
a los animales no puede ser pensada mente al hombre, es su deber propender
sin tener en cuenta la relación y conse- el bienestar animal y su bienestar moral
cuencias en el hombre. Aunque la visión como individuo. La dignidad humana, es
moral de Kant en relación con los ani- una tarea por realizar, y sólo podrá ser lle-
males puede ser vista como antropocen- vada a cabo por un hombre virtuoso que
trista10, bajo esta concepción el término en su relación con los animales descubre
no debe ser considerado como negativo y asume una relación de tipo moral, más
o limitante, sino como necesario, pues allá de sus afectos y de la utilidad que
una ética para los animales sólo puede de ella pueda obtener. Hacerse digno de
ser pensada por el hombre y es desde la humanidad que nos habita pasa ne-
éste que los conceptos y determinaciones cesariamente por el trato que damos a
se originan. Es el ser humano el que se los animales, y más en concreto, por los
coacciona moral o legalmente en rela- sufrimientos que podamos evitarles.
ción con lo mejor para la humanidad y
lo que la rodea. Referencias
Ávila, C. (2016, 5 de Noviembre) El país
Considerar a la humanidad implica tener
reacciona contra casos de maltrato ani-
en cuenta a la naturaleza y fauna que mal. El Tiempo. Recuperado de http://
hace parte de su ambiente, el hombre no www.eltiempo.com/politica/congreso/
el único ser en el mundo y nuestra socie- maltrato-animal-el-pais-reacciona-con-
tra-casos-de-maltrato-animal-49261
10 Antropocentrista, pues los animales no son el eje DeMello, M. (2012). Animals and Society:
principal si se quiere responder a cómo Kant los an Introduction to Human-Animal Stu-
considera. Ya que comprender a los animales
dies. United States of America: Colum-
desde una perspectiva moral, está establecido a
bia University Press.
16 partir de la relación que tiene con el hombre y de
cómo lo afecta a él moralmente las acciones que Gil, M. (2014). La teoría de las emociones
comete hacia estos seres. Los animales no juegan
un rol principal en la teoría kantiana, a pesar de
en Martha Nussbaum: el papel de las
que son parte fundamental para culminar con el emociones en la vida pública (tesis doc-
deber del hombre de perfeccionarse a sí mismo. toral). Universidad de Valencia, España.

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


El maltrato animal a la luz de la ética de Kant

Kant, I. (1988). Lecciones de Ética. R. Ara- Serpell, J.A. (2004). Factors influencing hu-
mayo (trad). Barcelona: Crítica. man attitudes to animals and their wel-
Kant, I. (2008). Metafísica de las Costum- fare. Animal Welfare, 13, pp.145-151.
bres. A, Cortina (trad). Madrid: Tecnos. Singer, P. (1999). Liberación Animal. P, Ca-
Kant, I. (2009). Fundamentación Metafísi- sal (trad). Madrid: Trotta.
ca de las Costumbres. M. G, Morente
(trad). Madrid: Tecnos.

17

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Algunos aspectos psicológicos para explicar el desarrollo de la afición taurina

Algunos aspectos psicológicos


para explicar el desarrollo
de la afición taurina1

Carlos Alberto Crespo Carrillo2

Resumen
El desarrollo de la afición hacia la tauromaquia no se fundamenta en conductas asocia-
das a la sociopatía o algún otro tipo de trastorno mental, sino a procesos de aprendizaje
cuyo reforzamiento continuo permiten caer en la desensibilización ante el sufrimiento
ajeno ya sea animal o humano. Poder abolir la tauromaquia en un futuro, depende de
detener la influencia que habitúa a nuevos escenarios de violencia.

Palabras clave: Tauromaquia, desensibilización, procesos de aprendizaje.

Abstract
The development and maintenance of most of the people who have a fondness for bull-
fighting are not based on behaviors associated with sociopathy or any associated mental
disorder, but rather on a learning processes whose continuous reinforcement makes us
to lose the ability to take into account the interests of the bull. If we want to abolish bull-
fighting in the context of a growing trend of respect for all life, it will be necessary to stop
any influence that makes us insensitive to new violent scenarios.

Palabras clave: bullfighting, desensitization, learning process.


19
1 Ponencia presentada en la 9ª Cumbre de la Red Mundial por la Abolición de la Tauromaquia (2016).
Ecuador. Versión actualizada a 2017.
2 Psicólogo, Magíster en Bioética. Fundación Resistencia Natural (REN) – Por una cultura de liberación animal.
Correo electrónico: caalsoya@gmail.com

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Carlos Alberto Crespo Carrillo

Influencias psicológicas y sociales negativas para sí mismos y para la socie-


que afectan el desarrollo de la dad. Por ejemplo, los comportamientos de
agresión o violencia, que son modelados
afición taurina
y que los infantes e inclusive los adultos4
Nuestras emociones, pensamientos y aprenden como formas de comunicación
comportamientos se ven moldeados por y comportamientos no asertivos, (agre-
nuestras vivencias en los diferentes tipos sión verbal y física) y que a su vez se ven
de escenarios o esferas de funcionamien- reforzados por la aceptación de grupos
to vital, dentro de los cuales la figura de con la misma línea de pensamiento.
autoridad tiene un papel protagonista
en nuestro proceso de aprendizaje. En Somos lo que somos en mayor medida
la infancia, nuestros padres, o herma- debido a nuestras experiencias de apren-
nos mayores representan esta figura en dizaje. La figura de la familia, la escuela
el hogar, a la vez que los maestros en la y la sociedad introducen a los infantes a
escuela, quienes se convierten en los mo- las normas y formas de convivencia. La
delos a imitar. Posteriormente, las figuras misión de estas figuras de autoridad es
públicas serán modelos a seguir. Es con enseñarles a los nuevos ciudadanos la
el modelado o aprendizaje vicario3, con manera adecuada de comportarse den-
los que vamos adquiriendo las destrezas tro de una sociedad con sus semejantes y
y habilidades que nos permitirán enfren- los animales no humanos que interactúan
tar la vida. Lo anterior es un hecho de en ella.
gran importancia, desarrollado desde la
Psicología del aprendizaje por Bandura
(1974), quien considera que la mayor La triada cognitiva
parte de la conducta humana se adquiere Una sociedad que discrimina a los anima-
por aprendizaje observacional. les5, considerándolos cosas, propiedades,
u objetos al servicio de los humanos, debe
Sin embargo, no solamente aprendemos
los repertorios comportamentales y cog-
4 El proceso de aprendizaje es algo que no se
nitivos considerados necesarios y funcio- acaba en la infancia, sino que, es algo continuo
nales para una adecuada forma de vida, que sigue hasta la adultez.
5 De acuerdo con Leyton (2007) el especismo es
sino que también aprendemos pautas de un término acuñado por el psicólogo Richard D.
conducta que producen consecuencias Ryder en 1970, quien denominó como especis-
mo a toda discriminación basada en la diferencia
de especies. En su clásico libro Liberación Animal
3 De acuerdo a Perry y Furukawa “el modelado Singer (1999, p.42) define el especismo como un
20 es un proceso de aprendizaje observacional en
el que la conducta de un individuo o grupo (el
“prejuicio o actitud parcial favorable a los intere-
ses de los miembros de nuestra propia especie y
modelo) actúa como un estímulo para generar en contra de los de otras.”. Sin embargo, Crespo
conductas, pensamientos o actitudes semejantes (2013) explica que el especismo también implica
en otras personas que observan la actuación del una actitud parcial favorable a los intereses de
modelo” (1986, p.594). algunas especies y en contra de los de otras.

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Algunos aspectos psicológicos para explicar el desarrollo de la afición taurina

enfocar sus esfuerzos en dar las pautas de ser del animal, por ejemplo, la carne
aprendizaje para que sus miembros ana- de vaca se designa como carne de
licen el rol que les hemos impuesto a es- res7. “Res” es el denominador para
tos seres. Joy (2013), ha resumido en su identificar a las vacas y toros, pudien-
triada cognitiva la forma de distorsionar do plantearse que la expresión carne
la percepción de los humanos hacia otros de res implica carne de cosa. Siendo
animales, reconociéndolos desde su indi- la muerte de esta clase de animales
vidualidad. La triada impide que los hu- calificada como sacrificio. Además,
manos nos identifiquemos con los otros en el idioma inglés, el pronombre “it”
animales, privándolos de ubicarlos en el que se usa para denominar cosas,
mismo círculo de consideración moral también se aplica a animales, siendo
que el nuestro6. identificados como una algo en vez de
un quien.
• La cosificación: es el proceso por el
cual se pasa a percibir a un animal • La desindividualización: es el proceso
como una cosa (objeto inanimado). por el cual se percibe a los animales
La cosificación de los animales es rea- como abstracciones, viendo a seres
lizada de varias maneras a partir del individuales solo en términos de su
lenguaje, comenzando con la forma identidad grupal, solo como miembros
como se entienden los animales en de un todo, de modo que todos sus
cuanto al uso o beneficio que prestan miembros tengan las mismas carac-
a los humanos (animales de consumo, terísticas. La abstracción del concepto
de compañía, de trabajo, de gran- animal da cuenta de ello: se agrupa
ja, de diversión, de experimentación, con el término animal a una serie de
etc.). Por medio del lenguaje también individuos y grupos con características
se apela a denominaciones distracto- muy distintas entre sí, y normalmente
ras en las que se pierde el sentido del separadas del animal humano.

6 Para Mosterin (1998), “algo es (para nosotros)


• La dicotomización: es el proceso mental
digno de consideración moral, si en nuestras por el que se separa lo externo a noso-
deliberaciones tenemos en cuenta como le tros en categorías distintas y frecuente-
afectan nuestras acciones, si lo contamos entre
los seres a los que tratamos de no dañar, si su mente opuestas con base en nuestras
respeto es una restricción al tipo de conducta creencias. Estas categorías se cargan
que aprobamos”. También afirma que si “algo
es (para nosotros) digno de consideración moral de valores, pues se experimentan sen-
si entra también por sí mismo como factor de saciones completamente diferentes por
la evaluación moral, independientemente de su
utilidad como medio para otro fin nuestro”. De
los seres que cada individuo establece 21
acuerdo a Mosterin, “una moral consecuente en determinada categoría. Determina-
considera a todos los seres portadores de inte-
reses y capaces de sufrimiento como dignos de
consideración moral”. 7 El término latino res significa cosa.

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Carlos Alberto Crespo Carrillo

dos animales pueden estar incluidos 2004, que describe todos los procedimien-
en varias de ellas, no siempre en la ca- tos seguidos en una corrida de toros.
tegoría de uso más común en cuanto
a su utilidad percibida. Por ejemplo, Por otra parte, la categoría animal, ya es
los conejos pueden encontrarse en ca- una desindividualización en tanto abs-
tegorías como animal de compañía, tracción y en esta abstracción, los toros
de experimentación, o de consumo. El hacen parte de una subcategoría de abs-
objetivo de la dicotomización es que se tracción, en cuanto a sus características
crea sin mayor información, dando lu- atribuidas por los criadores y fanáticos de
gar a decisiones basadas en premisas este “deporte” en donde el individuo se
falsas y arbitrarias sobre los animales. pierde y el grupo denominado toros de li-
Para los animales, implica que estas dia tiene un fin específico atribuido por el
premisas de destinación asignadas por hombre: morir en el ruedo. En el mundo
el humano sean consideras inherentes de la tauromaquia se habla del número
a los animales. de festejos y del número de toros lidiados,
reconociendo a algunos individuos del
grupo toros de lidia por haber asesinado
La afición taurina a partir de la
a un torero en el rodeo.
triada cognitiva
Teniendo en cuenta lo anteriormente di- Finalmente, el proceso de dicotomización
cho, cuando se habla de tauromaquia, se asemeja al de desindividualizión, pues
esta no escapa a la triada cognitiva. Bajo se crea la categoría o grupo designado
la denominación de tauromaquia se en- toro de lidia, un animal destinado a ser
tienden todas las prácticas que se mate- espectáculo público, estableciéndose toda
rializan en la realización de corridas de una serie de valores y sentimientos aso-
toros, novilladas, becerradas, tientas, re- ciados a al desarrollo de este acto (tau-
joneo y corralejas, hablando de las que romaquia), que hacen que las personas
tienen lugar en Colombia. aprendan a dar relevancia a estos valores
y no al ser del toro como animal sintiente.
Los toros son cosificados en cuanto a la
percepción del beneficio que prestan a los Ahora bien, la triada no es algo ajeno al
humanos, en este caso, estos animales son aprendizaje por observación, pues estas
destinados para el esparcimiento humano categorizaciones y cosificaciones del len-
o para ser parte de sus ritos y/o tradicio- guaje son algo relacionado al proceso de
nes, siendo en este último contexto deno- aprendizaje que cada individuo desarrolla.
22 minado dentro de un lenguaje cosificador Las figuras de autoridad que lo orientan en
como toro de lidia. Cosificación, que ha la sociedad son quienes le muestran qué
sido avalada legalmente por el Congre- lugar tienen ciertos animales en nuestras
so de Colombia, existiendo la ley 916 de vidas y cómo referirse a ellos.

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Algunos aspectos psicológicos para explicar el desarrollo de la afición taurina

Aprendizaje social tas etapas del ciclo vital aún no se ha logra-


do discriminar las conductas que pueden
Durante años, se han mostrado a las co- traer consecuencias negativas a sí mismos,
rridas de toros como un elemento de es- a otros, a la sociedad o a la naturaleza, y
tatus social y prestigio. Políticos, artistas a que el razonamiento moral9 se encuentra
y demás íconos reconocidos han asistido en etapas iniciales donde no es posible del
masivamente a este tipo de eventos, mos- todo aplicar el pensamiento crítico.
trando aceptación ante esta actividad;
aceptación en la que otros han deseado
participar para alcanzar el mismo lugar so- El aprendizaje por observación
cial en el que estas figuras se encuentran. Las familias que hacen parte de la po-
blación que disfruta las corridas de toros,
Dado este escenario, las personas que mos- cuando llega el momento harán partíci-
traban abiertamente un rechazo a las co- pes de estas a sus hijos. Siendo los padres
rridas de toros parecían no representar un y/o hermanos mayores y otros miembros
gran porcentaje de la población, sino una familiares las figuras de autoridad, respe-
minoría en desacuerdo con esta actividad8. to y admiración, el niño imitará sus acti-
Sin embargo, en Colombia es necesario re- tudes ante este tipo de espectáculos y las
cordar a Rodolfo Kohn Olaya, quien publi- aceptará como positivas.
có en 1952 “De la Impía tauromaquia y su
corruptor influjo - significativos datos para La reacción natural de un ser humano es
un balance de la cultura en Colombia”. Per- la empatía. Joy (2013, pp. 144), refiere
sonajes de antaño como este autor y poste- una investigación reciente que sugiere
riormente el trabajo continuo de activistas bases biológicas para la empatía. Inclu-
individuales y ONGs animalistas mostraron sive, Beckoff (2010) ha demostrado que
al mundo que la afición por las corridas de el humano no es el único capaz de sentir
toros es realmente un asunto de minorías. empatía hacia otros y manifestar compor-
tamientos de solidaridad, pesar o ayuda,
Por otro lado, el aprendizaje vicario de la sino que otros animales también lo ha-
tauromaquia en la infancia y aún en la ado- cen. Se esperaría que un infante mostrara
lescencia cimenta conductas y cogniciones signos de aflicción por presenciar una co-
que se encaminan a habituar la violencia rrida de toros. De esta manera, luego de
hacia los animales y a privilegiar por me- la asistencia a un evento traumático como
dio de la atención selectiva toda una serie una corrida de toros, una persona pue-
de elementos externos al padecimiento del de manifestar diversos comportamientos
toro, potenciado por el hecho de que en es- como irritabilidad, ausencia de reactivi- 23
dad emocional o pensamientos recurren-
8 Testimonios obtenidos de miembros del movi-
miento animalista y otros ciudadanos que no 9 Referido a la Teoría del desarrollo moral de
están a favor. Lawrence Kohlberg.

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Carlos Alberto Crespo Carrillo

tes sobre el hecho. Estas manifestaciones, mas”, o denominar como “maestro” al


dependiendo de las condiciones psicoso- torero matador. Los mensajes de artistas
ciales multivariables a las que se enfrenta y eruditos famosos que hacen apología
la persona, podrían derivar en trastorno a la tauromaquia: Shakira, Madonna,
de estrés agudo e incluso orientar al de- Fernando Botero, Andrés Calamaro, Joa-
sarrollo de criterios relacionados con el quín Sabina, Antonio Caballero, Mario
Trastorno por Estrés Postraumático (TEPT). Vargas Llosa, entre otros. Y por supuesto,
los clásicos argumentos taurinos como
que la tauromaquia es cultura, tradición,
Los condicionamientos sociales deporte o arte, conceptos positivos que
La industria de la tauromaquia, mueve la sociedad ha categorizado de forma
miles de millones en ganancias, las cua- errónea como invariables y estáticos han
les se destinan al mantenimiento de los tenido su contribución a la normalización
ganaderos, empresarios y toreros, es de- de la tauromaquia en la sociedad.
cir, al refuerzo de esta actividad.
De esta manera, estímulos neutros como
Retomando nuevamente el ciclo vital de una pintura o una escultura, una melodía,
la infancia y su aprendizaje por observa- o un libro, que no tienen como consecuen-
ción, un padre y/o una madre que gustan cia ninguna forma de maltrato o explota-
de la tauromaquia, rodean su vida con ción a ningún ser más allá de su alegoría
una cantidad de referencias a su afición: cuando son referidos a la tauromaquia,
afiches, pinturas, esculturas, música, poe- irán siendo asociados a la normalización
sía, libros, etc. El niño vive en medio de o asistencia a las corridas de toros.
toda esta serie de referentes que habitúan
y normalizan la actividad taurina a través
Consecuencias del
de su crecimiento, forjando fuertes aso-
ciaciones entre estos estímulos, neutros
condicionamiento social
en sí mismos, y el mundo taurino. El actual código de policía de Bogotá
(Colombia) afirma que los menores pue-
Aquello que habitúa a la infancia tam- den asistir a una corrida de toros solo en
bién sirve para el resto de la población: compañía de un adulto responsable. Ese
Las sociedades que cuentan con corri- adulto responsable se encargará de ense-
das de toros ofrecen también estímulos ñar al infante a hacer uso de la atención
de presentación repetitiva que inundan a selectiva10, apoyado por todos aquellos
la población y que normalizan a la tau-
24 romaquia. Lenguaje con jerga taurina
10 El concepto de “atención selectiva” hace referen-
cia a que nuestra capacidad de procesamiento
como “tomar al toro por los cachos”, “sa- es limitada y no podemos atender a todo a la
vez. La atención selectiva tiene una función
lir por la puerta grande”, “mirar al toro
adaptativa clara. Nuestro sistema cognitivo tiene
desde la barrera”, “capotear los proble- una capacidad limitada, y si tuviéramos que dar

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Algunos aspectos psicológicos para explicar el desarrollo de la afición taurina

estímulos con los que se inundó previa- na el rechazo espontaneo a la violencia


mente y los cuales asoció con conductas y agresión contra un animal por medio
reforzantes y positivas, y ya in situ, en la de aproximaciones sucesivas a diferentes
plaza de toros, aprenderá a valorar todo estímulos neutros y positivos presentados
aquello que ocurre alrededor de la li- de manera continua e ininterrumpida.
dia del toro: La música de la banda, la
arquitectura de la plaza, el traje de los La desensibilización a la violencia contra
toreros, los pases con el capote, y el am- el toro (y los caballos que también son
biente festivo. Con cada asistencia a una víctimas), se une a la desensibilización
nueva corrida, aprenderá a valorar abso- frente a otros tipos de violencia (huma-
lutamente todo alrededor de la lidia, ele- no–humano), donde la frase del perio-
mentos que actuarán como refuerzos a su dista Ricardo Silva Romero se torna en
comportamiento a través de un condicio- angustiante realidad: “Quien duerme en
namiento operante y que lo impulsarán Colombia, que es un agotador compen-
eliminar sistemáticamente cualquier tipo dio de lo que está pasando en el mundo,
de sentimiento hacia el toro. a repetirlo. sabe de memoria que aquel que vive de-
masiado tiempo entre la guerra un buen
De acuerdo a Cruzado (1998), “La des- día deja de verla, e incluso el horror pue-
ensibilización sistemática es una técnica de volverse paisaje” (Silva, 2015). Los
dirigida fundamentalmente a reducir las aficionados taurinos, que viven su afición
respuestas de ansiedad y a la vez a elimi- desde pequeños, dejan de ver la agresión
nar las conductas motoras de evitación”, hacia un ser vivo sintiente. Esta agresión
muy común para tratar las fobias, por se vuelve paisaje. Su mirada está en el
medio de un proceso de aproximaciones toro, pero lejos de su tormento. De esta
sucesivas a los estímulos aversivos. Lo manera, los niños de estas familias tau-
que le ocurre al toro en una plaza es un rinas al ser llevados continuamente a las
estímulo aversivo a la vista de un huma- corridas de toros habitúan la violencia
no que no ha sido condicionado por el contra los animales, normalizándola, in-
mundo taurino. La facilidad con la que sensibilizándose frente a la misma.
los aficionados a las corridas aceptan y
celebran la muerte del toro, no es más
Consecuencias de la
que el resultado de un proceso de des-
ensibilización sistemática, donde se elimi-
desensibilización
El rasgo de pérdida de empatía hacia el
respuesta a todos los estímulos que nos envuel- otro es una característica de las personas
ven, éste se vería amenazado y sobresaturado
de información. Por otra parte, si no seleccio- que padecen el trastorno antisocial/psi- 25
náramos que actividades son más relevantes y copático. Según el manual diagnóstico
debemos hacer en un momento determinado,
éstas estarían continuamente entorpecidas por
de trastornos mentales (DSM V), las per-
el inicio de nuevas acciones. (Migallon, s.f) sonas que coinciden con el tipo psicopáti-

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Carlos Alberto Crespo Carrillo

co son arrogantes y egocéntricas, buscan manos y Animales (GEVHA) de España,


el poder sobre los demás y los manipulan que mantienen similares perspectivas
o se aprovechan de ellos con el fin de conceptuales11, han recopilado nume-
infligir daño o para lograr sus objetivos. rosos estudios que muestran las corre-
Son insensibles y muestran poca empatía laciones existentes entre la violencia
con los demás, a menos que éstos sean hacia los animales y la violencia hacia
coincidentes con sus intereses. Muestran los humanos. Existe una tendencia entre
desprecio por los derechos, propiedades la violencia ejercida contra los animales
o seguridad de los demás, y no sienten y paralelos o futuros casos de violencia
culpa o remordimientos por el daño que contra los humanos (como indicador de
causan. Pueden actuar de manera agre- etapas tempranas de diversos trastornos
siva o sádica hacia los demás en pos de de conducta). Estos estudios muestran
sus intereses personales y parecen obte- también cómo la exposición de la infan-
ner placer o satisfacción al dominar, hu- cia a la crueldad con los animales puede
millar o degradar a los demás. También desensibilizar contra todas las formas de
tienen encanto superficial y capacidad de violencia. Las correlaciones entre las vio-
agradar cuando conviene a sus propósi- lencias ejercidas a humanos y animales
tos. Demuestran pocos principios mora- no humanos han dado lugar a que legis-
les convencionales y tienden a negar la laciones como la colombiana y la espa-
responsabilidad de sus actos y a culpar a ñola consideren el maltrato animal como
otros de sus propios fracasos y defectos delito, y como agravante del mismo reali-
(A.P.A., 2014). zarlo en presencia de menores.

Teniendo en cuenta que la mayoría de


Conclusiones
espectadores taurinos no son realmente
aficionados, o son aficionados de oca- Las corridas de toros y en general la tau-
sión y dada la distorsión cognitiva con la romaquia se compone de esquemas de
que cuentan, producto de la desensibili- comportamientos y cogniciones que más
zación a la que han sido sometidos, es allá de sus justificaciones vulneran la
poco probable que lograran cumplir con vida e integridad de un ser vivo sintien-
los criterios para el trastorno antisocial/ te. Los niños y niñas que han vivido este
psicopático. Un porcentaje de ellos, dis- proceso de desensibilización sistemática
frutará de hacer daño a otro ser vivo y se- y selectiva, sufren de una distorsión cog-
rán personas con problemas que pueden nitiva que refuerza la pérdida de empatía
poner en peligro a otros humanos.
26 11 También apoyan lo dicho otros importantes
Diferentes grupos como la National Link estudios como los de Baldry (2003), Gullone y
Robertson (2008), Peckins, Dockray, Eckenrode,
Coalition en Estados Unidos o el Grupo
Heaton y Susman (2011) y Thompson y Gullone
para el Estudio de la Violencia hacia Hu- (2006), entre otros.

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Algunos aspectos psicológicos para explicar el desarrollo de la afición taurina

frente al padecimiento del otro. Siendo Referencias


más propenso a cometer agresiones ha-
Anónimo (2012). Apuntes de Psicología. In-
cia otros seres vivos o hacia los de su troducción al Narcicismo; Freud (Men-
misma especie. saje en un blog). Recuperado de: http://
apuntes-psico.blogspot.com/2012/02/
No en vano la ONU, por medio de la introduccion-al-narcicismo-freud.html
Convención de los derechos de los niños American PsychiatricAssociation (2014).
ha realizado recientemente una solicitud DSM-5. Manual Diagnóstico y Estadísti-
a Colombia de apartar a los niños de las co de los Trastornos Mentales. %a. Edi-
ción. Editorial médica panamericana.
corridas de toros y corralejas (Naciones
Unidas, 2015). Teniendo en cuenta que Baldry, A. (2003). Animal abuse and expo-
sure to interparental violence in italian
todo comportamiento es susceptible de
youth. Journal of interpersonal violence,
ser modificado, las conductas y esquemas 18 (3), pp.258–281.
cognitivos que mantienen la tauromaquia
Bandura, A. Walters, R. (1974). Apredizaje
deben ser abordados por el conjunto de social y desarrollo de la personalidad.
la sociedad, liderada por políticas de es- Madrid, España: Alianza Editorial.
tado que impidan que nuevos aficiona-
Bekoff, M. Pierce, J. (2010). Justicia salvaje:
dos taurinos se formen, paralelamente a la vida moral de los animales. Madrid,
la atención y solución al déficit de protec- España: Turner publicaciones.
ción animal del que habla la Sentencia Crespo, C. (2013). Trasfondo psicológico
666 de 2010 de la Corte Constitucional de los espectáculos con animales en los
de Colombia. circos. Voces Animales Por los derechos
de los que no tienen voz. Periódico bi-
mestral No. 6. Mayo 2013.
La visión que se tiene de los animales
como cosas que encajan en ciertas cate- Gullone, E. y Robertson, N. (2008). The re-
gorías según su uso, son resultado de los lationship between bullying and animal
abuse behaviors in adolescents: The
procesos de aprendizaje que a lo largo importance of witnessing animal abuse.
de su vida el niño desarrollado. La imita- Journal of Applied Developmental Psy-
ción ha jugado un rol principal, las figu- chology, 29 (5), pp.371–379.
ras de autoridad y respeto que estos niños Jarero, I. (2013). Comentarios sobre el
seguirán, deben educarlos en una nueva Trastorno por Estrés Agudo. DSM-5.
forma de comprender el mundo que los Revista Iberoamericana de Psicotrau-
rodea, en donde la cosificación catego- matología y Disociación. Vol. 5. Num.
1. Recuperado de http://revibapst.com/
rización y la desindividualización sean
data/documents/TEADSM5.pdf
algo del pasado. Una nueva generación
Joy, M. (2013). Por qué amamos a los pe- 27
de seres humanos respetuoso por la vida
rros, nos comemos a los cerdos y nos
está en las manos de padres, maestros e vestimos con las vacas: Una introduc-
individuos cuyas imágenes son ejemplos ción al carnismo. México: Plaza y Valdés
de vida. editores.

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Carlos Alberto Crespo Carrillo

Labrador, Cruzado, Muñoz. (1986). Ma- Perry, M. G., Furukawa, M. J. (1986). Mo-
nual de técnicas de modificación y te- deling methods. En Labrador, Cruzado
rapia de conducta. MAdrdi, España: y Muñoz (Eds.). Manual de técnicas de
Ediciones Pirámide. modificación y terapia de conducta (pp.
Leyton, F. (2007, 24 de enero). ¿Qué 595). Ediciones Pirámide. Madrid.
es el especismo? (Mensaje en un Psicología on line (1997 – 2014). Teoría de
blog). Recuperado de http://ecosofia. la disonancia cognitiva. Recuperado de
org/2007/01/que_es_especismo.html http://www.psicologia-online.com/pir/
Migallon, I. (Sin fecha). Psicología de la teoria-de-la-disonancia-cognitiva.html
atención. Tema 4. Atención Selectiva. Silva, R. (8 de enero de 2015). Alá. El
Recuperado de http://www.psicocode. Tiempo. Recuperado de http://www.
com/resumenes/4ATENCION.pdf eltiempo.com/opinion/columnistas/
Mosterín, J. (1998). Que vivan los anima- ala/15072502
les. Madrid, España: Editorial Debate. Singer, P (1999). Liberación animal. Edito-
Naciones Unidas (2015). Observaciones rial Trota, Valladolid
finales sobre los informes periódicos Thompson, K, Gullone, E. (2006). An Inves-
cuarto y quinto combinados de Co- tigation into the Association between the
lombia. Convención sobre los Dere- Witnessing of Animal Abuse and Adoles-
chos del Niño. Recuperado de http:// cents´ behavior toward Animals. Society
ow.ly/4n7Prj and Animals, 14 (3), pp.221 – 244.
Peckins, M., Dockray, S., Eckenrode, J., Zaldivar, J. (2007). Veterinary technical
Heaton, J y Susman, E. (2011). The lon- report on bullfighting: why bulls really
gitudinal impact of Exposure to violen- do suffer. Recuperado de https://sites.
ce on cortisol reactivity in adolescents. google.com/site/veterinariosavatma/
Journal of Adolescents Health, 51 (4), estudios-cientificos/revisiones-cientifi-
pp.366–372. cas-sobre-el-sufrimiento-de-los-toros

28

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


¿Pueden las guías de práctica clínica apoyar el ejercicio de la bioética?

¿Pueden las guías de práctica


clínica apoyar el ejercicio de la
bioética?

Oscar Mauricio Muñoz Velandia1

Resumen
Las guías de práctica clínica (GPC) son publicaciones de formato corto que permiten ac-
tualizar a los profesionales de la salud en problemas clínicos específicos, así como orientar
la toma de decisiones en los pacientes. En este artículo, su autor, Oscar Mauricio Muñoz,
explora las GPC como vehículo práctico de los principios de la bioética. Propone las GPC
como un medio efectivo para la deliberación médico-paciente en temas que implican una
reflexión sobre el cómo vivir del paciente; lo cual es un hecho propio del quehacer diario
en la clínica. En este sentido, las GPC darían al paciente los suficientes elementos de juicio
para un pleno consentimiento informado (CI), para tomar la decisión más apropiada a su
situación particular.

Palabras clave: Toma de decisiones, consentimiento informado (CI), Guías de práctica


clínica (GPC), aplicación de principios bioéticos, autonomía del paciente.

29
1 Médico Internista, Magíster y candidato a PhD en Epidemiología Clínica, Pontificia Universidad Javeriana,
Bogotá. Profesor Asistente, Departamento de Medicina Interna, Pontificia Universidad Javeriana. Hospital
Universitario san Ignacio, Bogotá. Correo electrónico: o.munoz@javeriana.edu.co.

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Oscar Mauricio Muñoz Velandia

Abstract
The practical clinical guides are short format publishings that allow healthcare professionals
to update themselves in specific clinical problems, as well as guide patients in decision ma-
king. In this article, I explore the GPC2 as practical vehicle of bioethics principles. I propose
the GPC as an effective way to medical-patient deliberation in subjects that involve conside-
ration about the living of the patient, which is a fact in the daily tasks of clinics. In this sense,
the GPS will give to patients enough elements of judgment to a fully inform consent, to make
the best decision for each situation.

Key words: Making decisions, Informed Consent, practical clinical guide, application of
bioethical principles, patient autonomy.

Introducción problema clínico en circunstancias sani-


tarias específicas” (Field, 1990). Dentro
En las últimas décadas la investigación del desarrollo de las GPC se adelantan
médica y la disponibilidad de los resul- procesos de búsqueda sistemática de la
tados de la misma han aumentado de información, síntesis estructurada de la
manera exponencial, llevando a que misma y generación de recomendacio-
los médicos modernos cuenten con una nes que incorporan puntos clave como la
gran cantidad de información. Como determinación de riesgos y beneficios de
consecuencia resulta muy difícil para cada intervención, y la evaluación de va-
los profesionales de la salud mantener- lores y preferencias de los pacientes (Mu-
se actualizados, conocer la calidad de ñoz, 2015).
la evidencia disponible e incorporarla en
la práctica médica diaria. Buscando dar El resultado de este proceso y los docu-
respuesta a esta dificultad, se crearon las mentos derivados del mismo, tienen un
metodologías para el desarrollo de guías potencial adicional que ha sido poco
de práctica clínica (GPC), documentos reconocido: pueden ayudar a aterrizar
que han logrado gran aceptación en la y a hacer operativa la aplicación de los
comunidad médica. principios bioéticos dentro de la práctica
diaria de la clínica.
Las GPC son definidas por el Instituto de
Medicina de los Estados Unidos como “el El presente documento busca evaluar, por
conjunto de recomendaciones desarrolla- una parte, cómo las GPC pueden apoyar
das de manera sistemática, para ayudar a el proceso de consentimiento informa-
clínicos y pacientes en el proceso de toma do, el cual es un elemento fundamental
30 de decisiones, sobre cuáles intervencio- a la hora de garantizar la autonomía de
nes son más adecuadas para resolver un los pacientes; por otra parte, se muestra

2 Siglas en español de: Guías de práctica clínica.

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


¿Pueden las guías de práctica clínica apoyar el ejercicio de la bioética?

cómo las GPC facilitan el reconocimiento verdadera autonomía de los pacientes a


de conductas que atentan contra la segu- la hora de tomar decisiones sobre las in-
ridad del paciente; también muestra cómo tervenciones de salud que van a recibir.
estas son herramientas que permiten una Entendemos por supuesto que el brindar
evaluación estructurada del balance en- información es un acto necesario, pero
tre riesgos y beneficios de una determina- no suficiente para hablar de un CI pleno
da intervención. Las GPC pueden incluso o completo; ello sin desconocer el hecho
impactar de un modo socio-económico que el proceso de brindar información
al contribuir a una distribución más ade- tiene complejidades y dificultades que
cuada de los beneficios en salud, tenien- deben ser resueltas.
do en cuenta los principios de equidad,
esto si consideramos que pueden facilitar En efecto, en primera instancia resulta
el acceso de las personas con menores necesario definir la cantidad de infor-
recursos socioeconómicos a intervencio- mación que se le debe proporcionar a
nes diagnósticas o terapéuticas que pro- un paciente para que pueda tomar una
bablemente no estarán disponibles si no decisión informada, voluntaria y verda-
fueran incluidas en las GPC. Por último, deramente autónoma. Para ello se han
se evaluará cómo las metodologías utili- propuesto varios estándares posibles, de
zadas para el desarrollo de las guías de los cuales los más aceptados son: (I) el
práctica clínica podrían ser aplicadas en estándar profesional y (II) el estándar de
la toma de decisiones bioéticas. la “persona razonable”. De acuerdo con
el primero de ellos, el personal de salud
debería brindar solo la información que
Guías de práctica clínica (GPC):
un miembro de la especialidad a la que
elementos para operar los corresponde el caso brindaría a sus pa-
principios bioéticos cientes, de acuerdo con lo aceptado por
Teniendo como punto de partida la bioé- un consenso de pares. Dentro de este es-
tica, definida por Beauchamps y Chil- tándar, las GPC pueden ofrecer un punto
dress (2013), evaluaré a continuación de partida sobre cuál sería la opinión de
el impacto potencial de las GPC en la los pares en cuanto a la información ne-
operatividad de cuatro principios funda- cesaria para orientar al personal de salud
mentales de la bioética: autonomía, no sobre cómo interactuar con los pacientes.
maleficencia, beneficencia y justicia. Las GPC presentan además de las reco-
mendaciones, presentan una explicación
Partamos por reconocer que la informa- resumida de las consideraciones que se
ción contenida en las GPC y la forma tuvieron en cuenta a la hora de generar 31
en que está presentada pueden facilitar la recomendación, en un formato corto,
las prácticas de consentimiento informa- generalmente a modo de resumen eje-
do (CI) y, en últimas, propender por una cutivo. Esta explicación tiene en cuenta

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Oscar Mauricio Muñoz Velandia

los conceptos de los expertos en deter- una decisión y, adicionalmente, esta in-
minado tema, pero está obligada a ser formación es presentada en términos que
concreta. Lo cual nos ofrece una aproxi- son fácilmente comprensibles para la po-
mación a la información que los pares de blación general o para un “paciente ra-
un determinado profesional de la salud zonable”. Este último no es un beneficio
podrían proporcionar a sus pacientes. menor, ya que habitualmente se asume
No obstante, se podría argumentar que que el profesional de la salud brinda la
la información contenida en el resumen información de una manera sencilla y en-
ejecutivo de una GPC es todavía muy tendible, pero en la realidad, muchas ve-
extensa para que pueda ser brindada a ces éste decide utilizar términos técnicos
cada paciente particular, pero también que dificultan enormemente la trasmisión
es cierto que la información que se debe de la información o, simplemente, el pro-
brindar en cada acto médico no es toda fesional de la salud puede carecer de ha-
la referida a una determinada condición bilidades comunicativas adecuadas.
de salud o enfermedad, sino aquella que
tiene que ver específicamente con la deci- Presentar las recomendaciones de las
sión que se está tomando en el momento GPC en versiones para pacientes ayuda a
específico, por ejemplo, la decisión entre superar estas dificultades, especialmente
uno u otro medicamento. cuando se presenta la información com-
plementada con tablas o gráficos que
El segundo estándar, y probablemente el ayudan a su comprensión. Finalmente,
más aceptado, es el de “la persona razo- las GPC permiten conciliar las brechas
nable”. En este caso el profesional debe- entre el estándar profesional y el estándar
ría brindar la información suficiente para de la persona razonable, ya que la opi-
que una persona promedio y en pleno uso nión de ambos debe ser tenida en cuenta,
de sus facultades mentales pueda tomar de manera sistemática a la hora de gene-
una decisión informada. Es aquí donde rar los documentos finales, tanto para las
puede estar el mayor aporte de las GPC, versiones de los profesionales como para
en el proceso de entregar la información. las versiones de los pacientes.
La razón es que las GPC desarrolladas
en la actualidad incorporan representan- La participación de los representantes de
tes de los pacientes dentro de los grupos pacientes en el desarrollo de las GPC
de desarrolladores. Uno de los mayores también tiene otra ventaja, como es la
beneficios de esa participación es que incorporación de la evaluación de sus
las GPC tienen versiones para pacientes valores y preferencias en la elaboración
32 que tienen dos características muy útiles: de las recomendaciones. La metodología
la primera es que son construidas tenien- más aceptada actualmente es la propues-
do en cuenta su opinión en cuanto a la ta por el grupo GRADE, que incorpora la
información necesaria para poder tomar variabilidad en los valores y preferencias

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


¿Pueden las guías de práctica clínica apoyar el ejercicio de la bioética?

de los pacientes como un factor determi- de manejo alternativos en pacientes que


nante en la persuasión y escogencia de manifiestan preferencias diferentes a las
una recomendación (Muñoz, 2015). Por recomendaciones dadas por los médicos.
ejemplo, dentro del desarrollo de una
GPC sobre fibrilación auricular se pre- Hemos de anotar que la información pro-
guntó a los pacientes cuántos episodios porcionada en las GPC no resuelve todas
de sangrado gastrointestinal estarían dis- las dificultades en el proceso de entrega
puestos a tolerar, como riesgo inherente de la información. Muchos pacientes tie-
al manejo con anticoagulantes, con mi- nen múltiples comorbilidades y condicio-
ras a prevenir el desarrollo de un ataque nes particulares, así como preferencias
cerebrovascular isquémico (ACV). Aun- distintas en la forma en que quieren ser
que la mayoría de los pacientes dieron tratados, por lo que la recomendación
gran valor a reducir el riesgo de ACV y dada por una GPC para una paciente “tí-
estuvieron dispuestos a aceptar un riesgo pico”, puede no aplicarse a otro paciente
de sangrado, se encontró una gran dife- particular. Algunos contradictores de las
rencia en el nivel de riesgo de sangrado GPC podrían afirmar que éstas atentan
que cada paciente estaría dispuesto a to- contra la autonomía del profesional de
lerar. Este enfoque propuesto en las GPC la salud, al ponerles “camisas de fuerza”
reconoce claramente la autonomía que que impiden la individualización de sus
tiene el paciente a la hora de tomar deci- pacientes. Sin embargo, como es claro
siones sobre su propia salud, aceptando en los párrafos anteriores, las guías son
que puede haber posturas diferentes y no desarrolladas con plena conciencia de
por ello menos válidas. El enfoque que que no todas las recomendaciones apli-
propuso esta guía fue disminuir la fuerza can a todos los pacientes y que es de-
de la recomendación en favor de usar an- ber del médico adaptarlas a cada caso
ticoagulantes y, adicionalmente, permitió particular, por lo que se consideran como
proponer una recomendación diferencial sugerencias más que normas.
para aquellos que tolerarían un menor
riesgo de sangrado, como fue recomen- El impacto de las GPC en lograr la ope-
dar el uso de antiagregantes plaqueta- ratividad de los principios éticos de be-
rios en vez de la anticoagulación plena. neficencia y no maleficencia dentro de la
Ejemplos como éste permiten demostrar práctica clínica diaria es aún más eviden-
que el proceso de deliberación, presen- te. La metodología de GRADE, incorpora
tado de forma sistemática, puede facilitar dentro de sus determinantes la fuerza de
a los profesionales de la salud promover la recomendación, la evaluación de los
la autonomía de los pacientes dentro de riesgos y los beneficios de cada interven- 33
la toma de decisiones en lo referente a ción (Beauchamp, 1999; Andrews, 2013;
su salud y también les puede facilitar el GRADE, 2014). Como primera medida,
reconocimiento de planes terapéuticos esta metodología, propone definir de for-

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Oscar Mauricio Muñoz Velandia

ma sistemática todos los posibles desen- ción presente en la GPC. En este sentido,
laces de una intervención, tanto positivos el aporte de las GPC está dado por su
como negativos, bien sea ésta diagnósti- habilidad de mostrar de forma concre-
ca o terapéutica. Adicionalmente, pide a ta y explícita los riesgos y beneficios de
los diferentes miembros del grupo desa- cada intervención en salud, junto con una
rrollador definir la importancia relativa de aproximación a su importancia y frecuen-
cada uno de estos posibles desenlaces, cia, que sirvan como punto de partida
teniendo en cuenta la opinión tanto de para la evaluación del balance riesgo-
los pacientes como de los profesionales beneficio de un paciente particular.
de la salud. Posteriormente, se procede a
determinar qué tan frecuente se presenta A la hora de evaluar el impacto de las
cada uno de esos desenlaces. Toda esta GPC con relación al principio de justicia,
información se tiene en consideración a debemos abordar la bioética desde su
la hora de generar una recomendación. sentido más amplio, entendiendo poten-
La metodología permite, por tanto, eva- ciales beneficios no solo para un indivi-
luar de forma juiciosa y estructurada los duo particular, sino para la sociedad en
riesgos y beneficios de una determinada general, al brindarnos herramientas para
intervención, presentado este análisis de exigir una distribución de los recursos de
forma explícita, lo que permite al profe- la salud con mayor equidad.
sional de la salud una comprensión más
clara de los mismos, ofreciéndole herra- Ahora bien, consideremos que un alto
mientas para brindar esta información a porcentaje de las GPC son iniciativas
los pacientes en una forma sencilla. En gubernamentales (tal como sucede en
muchas ocasiones estos ejercicios permi- Colombia), comisionadas a grupos de
ten definir cuáles intervenciones resultan desarrolladores académicos con alta cre-
inseguras para los pacientes y cuáles me- dibilidad, generalmente dependientes de
didas de prevención resultan importantes universidades o sociedades científicas.
para implementar. Bajo estas condiciones los resultados de
las GPC tienen un poder implícito, que
Naturalmente, el balance de riesgos y vincula y compromete al gobierno en la
beneficios puede ser diferente en un pa- implementación de las recomendaciones,
ciente típico presentado en una GPC, imponiéndole la obligación de romper
al balance determinado por el paciente las barreras para su implementación. Las
particular que está tomando una decisión GPC traen adicionalmente algunos indi-
en conjunto con su médico, puesto que, cadores sugeridos, dentro de los que se
34 pueden entrar en consideración los fac- destaca la medición de la adherencia a
tores sociales y económicos, que pueden las recomendaciones dentro de un sistema
influir de manera determinante en la de- de salud. La evolución de esta adherencia
cisión final y discrepar dela recomenda- a través del tiempo brinda información

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


¿Pueden las guías de práctica clínica apoyar el ejercicio de la bioética?

del compromiso del gobierno con deter- dependiente de la diversidad geográfica,


minadas políticas de salud y define metas étnica, socioeconómica y cultural. Tener
a cumplir. Para lograr la mejoría de estos en mente todas estas consideraciones
indicadores habrá entonces que trabajar dentro del desarrollo de las GPC y la co-
en aquellas poblaciones donde existan rrecta implementación de sus recomen-
mayores dificultades para acceder a las daciones debería, por tanto, favorecer la
tecnologías y a tratamientos propuestos equidad en la atención en salud.
en las guías.

Metodología de las GPC aplicada a


Algunos autores ya han resaltado la im-
portancia de las GPC con miras a fa-
la toma de decisiones éticas
vorecer la equidad en la atención en La metodología propuesta para el desa-
salud (Acosta, 2011; Eslava-Schmalbach, rrollo de las GPC puede tener aplicación
2011). De acuerdo con Acosta y Eslava dentro del proceso de toma de decisio-
se deben garantizar que algunas condi- nes consideradas, fundamentalmente,
ciones metodológicas se cumplan dentro como decisiones éticas. Ejemplos de este
del desarrollo de las GPC para que este abordaje son las GPC desarrolladas para
beneficio se maximice, estas condiciones toma de decisiones de fin de vida (Bone,
son : primero, vincular la población ob- 1990) o de retiro de la diálisis (Moss,
jetivo durante todas las fases desarrollo 2011).
de la GPC; segundo, realizar un análi-
sis y adaptación al contexto cultural, que Respecto a si se deben o no desarrollar
propenda por la aplicación de inter- guías éticas se encuentran posiciones
venciones sin disparidades por barreras divergentes entre los diferentes autores.
culturales y con resultados clínicos más Para algunos resulta totalmente inade-
equitativos; tercero, considerar los facto- cuado considerar el abordaje de las GPC
res psicosociales que podrían afectar la en la toma de decisiones éticas (Eriksson,
implementación y los resultados de las 2008), considerando que el contenido
GPC; y cuarto, considerar las inequida- de dichas guías resulta demasiado esca-
des del sistema de salud en su conjunto, so y en todo caso insuficiente como para
de modo que se promueva intervenciones guiar una acción, estos autores también
dirigidas a conductas de riesgo y barreras sugieren que múltiples guías y regula-
para la salud generadas por los factores ciones sobre un mismo tema añaden di-
socioeconómicos. Es decir, se deberá te- ficultades innecesarias para interpretar
ner en cuenta algunas situaciones como problemas particulares. De acuerdo con
la existencia efectiva de una diferencia en esta interpretación, utilizar las GPC en 35
los grupos sociales de las intervenciones la toma de decisiones éticas podría pro-
y, que por lo tanto, la implementación de ducir un cambio negativo en la forma en
las propuestas presentadas en las GPC es que se percibe la ética, al ser entendidas

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Oscar Mauricio Muñoz Velandia

como mecanismos regulatorios, más que rísticas deseables a la hora de desarrollar


herramientas que ayuden en la toma de una guía ética. De acuerdo con el estu-
decisiones. dio mencionado (Strech, 2011), la mayo-
ría de las guías éticas analizadas fueron
Para otros autores el desarrollo de las insuficientes en cinco de los seis dominios
GPC que nos ayuden a orientar el pro- previamente mencionados. Dicho estu-
ceso de toma de decisiones éticas resulta dio también demostró que es posible de-
deseable con miras a garantizar que este sarrollar guías éticas de alta calidad de
proceso sea transparente, informado y lo acuerdo con estos criterios. La conclusión
suficientemente justificado y deliberado. del autor fue que la calidad de las guías
Situación que permite estandarizar las éticas debería y puede ser mejorada.
conductas y promover el cuidado centra-
do en el paciente. Si se quiere utilizar esta Buscando aproximarse a dicho objetivo,
metodología debemos primero entender se han desarrollado iniciativas que po-
que el enfoque de las guías clínicas debe drían brindarnos las bases para el de-
ser diferente al de las guías éticas. Para sarrollo de guías éticas de alta calidad
las primeras, el objetivo será generar re- (Mertz, 2014). Teniendo en cuenta algu-
comendaciones basadas en la evidencia, nos pasos como: la determinación siste-
mientras las segundas, deberían estar mática del espectro de la enfermedad;
más dirigidas a proporcionar un enfo- aquellos puntos donde resultan necesa-
que informado y estructurado que facili- rias recomendaciones éticas; la búsqueda
te aproximarse a preguntas moralmente sistemática de la información relacionada
controversiales (Sofaer, 2012). a estas decisiones; la escritura de las re-
comendaciones teniendo en cuenta que
El desarrollo de estas guías éticas reque- sean pragmáticas, estandarizadas y lo
rirá de metodologías que garanticen su suficientemente simples como para ser
calidad. Un estudio reciente utilizó la he- utilizadas, pero sin hacerlas inútiles o in-
rramienta AGREE II para evaluar la cali- suficientemente justificadas; revisando la
dad de las guías éticas desarrolladas en validación de las mismas y el desarrollo
la toma de decisiones sobre el fin de vida de sus modificaciones de acuerdo con
(Strech, 2011). La herramienta AGREE II esa validación. Otros autores han pro-
fue diseñada para evaluar la calidad de puesto que estas recomendaciones han
las GPC teniendo en cuenta 6 dominios: de ser contrastadas con sus implicaciones
la claridad en los alcances y objetivos de legales, teniendo en cuenta la sociedad
la guía, la participación de los implica- donde van a ser utilizadas.
36 dos, el rigor en la elaboración, la clari-
dad de la presentación, la aplicabilidad Ahora bien, todos estos procesos resultan
de la misma y su independencia editorial. deseables, pero el desarrollo de metodo-
Todos estos criterios son también caracte- logías complementarias a las que usamos

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


¿Pueden las guías de práctica clínica apoyar el ejercicio de la bioética?

en el desarrollo de guías clínicas para Bone R, Rackow E, JG W. (1990). Ethical


lograr estos objetivos está pendiente, and moral guidelines for the initiation,
continuation, and withdrawal of intensi-
requiere estudios por desarrollar, serios,
ve care. Chest, (97), p.949–58.
académicos y bien intencionados para
que puedan brindarnos luces en el futuro. Consorcio AGREE . Instrumento AGREE II:
instrumento para la evaluación de guías
de práctica clíníca. Recuperado de
Conclusiones http://www.guiasalud.es/contenidos/
documentos/Guias_Practica_Clinica/
El presente escrito se centró en proponer Spanish-AGREE-II.pdf
caminos interdisciplinarios entre la bioé- Eriksson S, Höglund AT, Helgesson G.
tica y la epidemiología clínica, con miras (2008). Do Ethical Guidelines Give
a facilitar la operatividad de los princi- Guidance? A Critical Examiniation fo
pios bioéticos en la práctica clínica. Se Eight Ethics Regultions. Cambridge Q
Healthc ethics, 17(1), p.15–29. Recue-
han presentado algunas ideas de como prado de http://www.ncbi.nlm.nih.gov/
las GPC podrían ser especialmente útiles pubmed/18462542
en este objetivo, y de cómo la metodo-
Eslava-Schmalbach J, Sandoval-Vargas G,
logía desarrollada para la elaboración Mosquera P. (2011). Incorporating equi-
de estas guías de práctica clínica podría ty into developing and implementing for
enriquecer la toma de decisiones éticas evidence-based clinical practice guideli-
e incrementar su calidad. La construcción nes. Rev Salud Pública, 13(2), p.339–51.
Recuperado de http://www.scielosp.org/
de metodologías complementarias para
scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0124-
lograrlo resulta un tema interesantísimo y 00642011000200015&lng=en&nrm
necesario. =iso&tlng=en\nhttp://www.ncbi.nlm.
nih.gov/pubmed/23751574
GRADE. DECIDE final report. (2014). pp.
Referencias 1–33.
Acosta N, Pollard J, Mosquera P, Reveiz Guyatt GH, Oxman AD, Kunz R, Falck-Ytter
L. (2011). Equidad en el desarro- Y, Vist GE, Liberati A, et al. (2008). GRA-
llo de guías de práctica clínica1. Rev DE: Going from Evidence to Recommen-
Salud Pública, 13(2), pp.327–38. dations. BMJ, 336, pp.1049–51.
Recuperado de http://www.scie-
lo.org.co/scielo.php?pid=S0124- Mertz M, Strech D. (2014). Systematic and
00642011000200014&script=sci_ transparent inclusion of ethical issues
abstract and recommendations in clinical prac-
tice guidelines: a six-step approach. Im-
Andrews JC, Schunemann HJ, Oxman AD,
plement Sci, 9(1), p.184. Recueprado
Pottie K, Meerpohl JJ, Coello PA, et al.
de http://www.implementationscience.
GRADE guidelines: 15. Going from evi- 37
com/content/9/1/184
dence to recommendation - Determi-
nants of a recommendation’s direction Moss AH. (2011). Ethical principles and pro-
and strength. J Clin Epidemiol, 66(7), cesses guiding dialysis decision-making.
pp.726–35. Clin J Am Soc Nephrol, 6(9), pp.2313–7.

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Oscar Mauricio Muñoz Velandia

Muñoz O, De la Hozz AM. (2015). Desa- Sofaer N, Strech D. (2012). The need for
rrollo de guías de práctica clínica. In: systematic reviews of reasons. Bioethics,
Ruiz A, editor. Epidemiología clínica 26(6), pp.315–28.
Investigación clínica aplicada. 2nd ed. Strech D, Schildmann J. (2011). Quality
pp. 331–45. of ethical guidelines and ethical con-
Schunemann HJ, Oxman AD, Brozek J, tent in clinical guidelines: the example
Glasziou P, Jaeschke R, Vist GE, et al. of end-of-life decision-making. J Med
(2008). Grading quality of evidence Ethics, 37(7), pp.390–6. Recuperado
and strength of recommendations for de http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pub-
diagnostic tests and strategies. BMJ, med/21343629\nhttp://jme.bmj.com/
336, pp.1106–10. content/37/7/390.full.pdf

38

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Investigación clínica en la práctica de la reumatología en Colombia. Visión de un reumatólogo desde la óptica ética

Investigación clínica
en la práctica de la
reumatología en Colombia.
Visión de un reumatólogo
desde la óptica ética
Daniel G. Fernández-Ávila1

Resumen
En Colombia, la artritis reumatoide es considerada como una enfermedad de alto costo.
Sin embargo, el sistema de salud colombiano indica que los pacientes con esta enfermedad
pueden acceder a tratamientos costosos como las terapias biológicas, incluidas o de obli-
gatoria cobertura en el Plan Obligatorio de Salud (POS).

La industria farmacéutica, con el concurso de médicos e institutos de reumatología en varios


países del mundo, incluyendo a Colombia, ha iniciado investigaciones mediante experimentos
clínicos que buscan encontrar nuevas opciones terapéuticas para mejorar el control de la artritis
reumatoide. El paciente con este tipo de enfermedad tendría que poder decidir si quiere ser par-
te de estos experimentos o ser tratado con los medicamentos y terapias cubiertas en el POS. El
autor, en este artículo, expone y cuestiona el proceder del reumatólogo y de las instituciones de
atención a la reumatología en Colombia ante la explicación objetiva al paciente y apoyo en la
decisión de ser tratado con la terapia convencional o experimental. Un dilema ético que afronta
día a día el médico reumatólogo que trabaja en atención de pacientes y en investigación.

Palabras clave: Tratamiento artritis reumatoide, Industria Farmacéutica e investigación


médica, derechos de los pacientes, actualidad de la reumatología en Colombia, tratamien- 39
tos convencionales o experimentales, desarrollo científico y ética.

1 Médico Internista - Reumatólogo. Candidato a PhD en Epidemiología Clínica, Pontificia Universidad Jave-
riana. Correo electrónico: daniel.fernandez@javeriana.edu.co

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Daniel G. Fernández-Ávila

Abstract
The rheumatoid arthritis in Colombia is considered as a high cost disease. However, the
Colombian healthcare system shows that the patients with this disease can access to high
cost treatments as biological therapy is incorporated or mandatory whitin the coverage in the
Mandatory Healthcare Plan (POS2).

Nowadays, the pharmaceutic industry in collaboration with doctors and rheumatology ins-
titutes in Colombia, have begun researches that contribute to a future cure of this disease,
through clinical experiments. The patient with this kind of disease would have to decide if
they want to be part of this experiments or be treated by POS’s medicines and therapies.
The author in this article exposes and disputes rheumatologists and institutions proceeding
in face of support patient’s decision to be treated by experimental or conventional treatment.
An ethical dilemma that rheumatologists have to face.

Key words: Rheumatoid arthritis treatment, pharmaceutic industry and medical research,
ethic and scientific development.

Introducción Iniciando la última década del siglo XX,


entran las terapias biológicas a hacer
La medicina avanza rápidamente gracias parte de la terapéutica de las enferme-
a la investigación que se genera día tras dades reumáticas, inicialmente aplicadas
día en diferentes áreas. La reumatología, en artritis reumatoide. Hoy en día conta-
junto con la oncología y la genética son, mos con ocho terapias biológicas para el
tal vez, las tres áreas de la medicina en tratamiento de artritis reumatoide; siete
las que más rápido ha crecido el cono- terapias biológicas aprobadas contra la
cimiento fisiopatológico y el arsenal te- espondiloartritis; y, finalmente, con una
rapéutico. Desde mediados de los años para el lupus eritematoso sistémico. En el
cincuenta del siglo pasado, los anti in- contexto colombiano, la artritis reumatoi-
flamatorios no esteroideos (AINES) y los de es considerada como una enfermedad
glucocorticoides han sido piezas funda- de alto costo, al punto de que el Minis-
mentales en la terapéutica reumatológica terio de Salud de nuestro país ha creado
(Finckh, Gabay, 2008). Hacia el inicio de una dependencia para analizar el costo
los años noventa, el tratamiento de las y la evolución de todos los pacientes con
enfermedades reumáticas se basaba en artritis en Colombia, denominada cuenta
medicamentos antirreumáticos químicos de alto costo para artritis reumatoide. Se
como, por ejemplo, metotrexate, sulfasa- ha de anotar que la artritis reumatoide es
lazina, lazatioprina y antimaláricos). una enfermedad tan costosa y vigilada
40

2 POS son las siglas en español del Plan Obligatorio de Salud en Colombia.

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Investigación clínica en la práctica de la reumatología en Colombia. Visión de un reumatólogo desde la óptica ética

por el sistema de salud tal como lo son del mes de junio de 2016. No obstan-
la enfermedad renal crónica terminal en te, el médico debe continuar haciendo la
terapia de reemplazo renal, el cáncer y la solicitud especial para la aprobación de
infección por VIH – SIDA. estos medicamentos para las indicacio-
nes previamente mencionadas. En este
En el sistema de salud colombiano, las te- orden de ideas, es claro que un paciente
rapias biológicas para artritis reumatoide en Colombia con artritis reumatoide mo-
están incluidas en el Plan Obligatorio de derada a severa, refractaria al tratamien-
Salud (POS) y son de obligatoria cober- to convencional, tiene derecho a todos
tura, con cargo a la unidad de pago por los tratamientos biológicos disponibles y
capitación (UPC) de todas las Empresas aprobados. Es necesario anotar que ocho
Promotoras de Salud (EPS). En el acuerdo de los medicamentos obtenidos por bio-
028 de 2011 y en su actualización en la tecnología disponibles en Colombia son
Resolución 5521 de 2013 (Diario oficial, los mismos ocho medicamentos disponi-
s.f), se reglamentan los medicamentos bles y aprobados por la FDA en Estados
autorizados para la artritis reumatoide Unidos y la EMA en Europa. Lo mismo
en el POS y se anota que la indicación sucede para el caso de la espondiloar-
para las terapias biológicas es para ca- tritis y el lupus eritematoso sistémico. Los
sos de pacientes con artritis reumatoide medicamentos disponibles en Colombia
moderada a severa, que sean refractarios son los mismos disponibles y aprobados
al tratamiento inicial con antirreumáticos en Estados Unidos y Europa, la diferencia
modificadores de la enfermedad, es decir, está en el trámite, pues no es necesario el
que no responden a medicamentos tales diligenciamiento de formato no pos, así
como metotrexate, leflunomida o sulfaza- como el trámite extra de examen de posi-
lasina. Así pues, cualquier paciente con bilidad de aprobación y posterior entrega
artritis que tenga estas características, por parte de la EPS.
tendrá derecho a la prescripción de un
medicamento biológico si su reumatólo-
Estudios clínicos: un reto ético para
go tratante así lo considera.
el reumatólogo
Anteriormente, en el sistema de salud co- La inquietud académica de los investiga-
lombiano se podía acceder a este tipo dores genera a diario miles de preguntas
de terapias de alto costo a través del a lo largo y ancho del mundo, éstas se
diligenciamiento de un formato de uso traducen en procesos investigativos de
de medicamento no incluido en el POS toda índole: descriptivo, analítico o de in-
y bajo el análisis y aprobación del caso tervención, siendo los experimentos clíni- 41
por parte de un Comité Técnico Cientí- cos en todas sus fases la principal fuente
fico (CTC), esta figura ha desaparecido de conocimiento para la ciencia médica
luego de la reforma de la salud a partir (Miser, 2006). Estos experimentos clínicos

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Daniel G. Fernández-Ávila

y la investigación en general, se gestan fase III. Los estudios clínicos fase IV, son
en la mayoría de los casos, en el contexto estudios en los cuales se hace seguimien-
de la práctica clínica asistencial, y para el to abierto, es decir, no tienen cegamiento,
caso de reumatología en la atención de ni grupo control, como sí tienen los ante-
consulta externa. Así es que varias insti- riores estudios. Estos últimos se realizan
tuciones de atención en reumatología en en pacientes a quienes se les prescribe la
Colombia centran sus mayores esfuerzos molécula biológica mediante el uso de
en el tema de investigación, incluso cer- medicamentos ya aprobados en el país;
tificándose ante entes regulatorios loca- sin embargo, aunque tienen un patrocinio
les como el ICONTEC y el INVIMA. De del laboratorio productor del biológico,
esta forma, los pacientes que acuden los honorarios para los médicos y los cen-
a consulta en estas instituciones son la tros de investigación, así como la entrega
principal fuente de participantes para las del medicamento prescrito por el reuma-
investigaciones, las cuales se originan y tólogo está a cargo de la EPS con cargo
diseñan, en su gran mayoría, por par- directo a la UPC. Ahora bien, habiendo
te de la industria farmacéutica. Estas se considerado el funcionamiento de estos
realizan en forma multicéntrica, siendo estudios, se entiende por qué los estudios
Colombia uno de los países con mayor fase IV son tan criticados, calificándolos
participación alrededor del mundo. como “estudios de siembra”, es decir, in-
vestigaciones diseñadas para incluir pa-
En el mundo existen cuatro tipos de es- cientes en la terapia biológica que se está
tudios clínicos diferentes, clasificados de estudiando, pero con el fin de aumentar
acuerdo con la naturaleza y objetivos las ventas del laboratorio productor de la
del tratamiento en experimentación y en molécula que financia la investigación. Es
los cuales participan una gran cantidad acá donde surge una primera preocupa-
de colegas en nuestro país. En los estu- ción ética, es la que tiene que ver con
dios clínicos fase III, se está probando la el doble papel que desempeña un mis-
efectividad de un fármaco biológico y se mo médico reumatólogo, a saber, por un
analizan otros desenlaces como el cam- lado, siendo el galeno tratante de la en-
bio en la progresión radiológica de la en- fermedad para el paciente y para la EPS
fermedad, mejoría en índices de calidad que lo ha contratado para tal fin y, por
de vida y aspectos en la seguridad de la otra parte, convirtiéndose en el investiga-
terapia (Clancy, 2002). En este tipo de es- dor que está reclutando los participantes
tudios, en general, el pago de honorarios para un estudio clínico determinado.
por concepto del diligenciamiento de los
42 formatos establecidos para la investiga- En este punto surgen preocupaciones éti-
ción va por cuenta de los médicos reuma- cas, pues, primero, algunas instituciones
tólogos participantes y de las respectivas prestadoras de servicios de salud (IPS)
IPS que acogen los experimentos clínicos de reumatología adelantan, en forma si-

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Investigación clínica en la práctica de la reumatología en Colombia. Visión de un reumatólogo desde la óptica ética

multánea, una gran cantidad de estudios en la introducción del presente documen-


clínicos para las diferentes enfermedades to, es claro que el médico reumatólogo
ya mencionadas (artritis reumatoide, es- que participa en investigaciones en la IPS,
pondiloartritis y lupus eritematoso sisté- que atiende pacientes de la especialidad,
mico). Segundo, en algunos casos puede entra en un claro conflicto ético al jugar
suceder que el paciente deje de ser vis- un doble papel en la atención del pacien-
to por su médico reumatólogo como un te, con dos intereses encontrados: (I) la
paciente a ser atendido, brindándole la búsqueda de la mejor opción terapéutica
mejor opción terapéutica de acuerdo a su para el paciente con enfermedad reumá-
situación clínica y a las condiciones a las tica refractaria al tratamiento inicial y, (II)
que tiene derecho legalmente en nuestro la posibilidad de ingresar el paciente en
país, (incluyendo las terapias biológicas), un estudio clínico (que no garantiza bene-
y pase a ser visto, en cambio, solamente ficios para el paciente, pero sí representa,
como un individuo más para incluir en un casi siempre, réditos económicos para el
estudio. Para el caso de un experimento investigador y la institución donde traba-
clínico fase III, el paciente podría ser asig- ja, además del posible progreso en el co-
nado al grupo del medicamento activo en nocimiento que tal vez beneficie a otros,
estudio o, por lo contrario, ser asignado pero casi nunca a los participantes). Es
al grupo control, donde se usa placebo, preocupante que en algunos casos no se
y un medicamento antirreumático modi- le explique al paciente claramente la po-
ficador de la enfermedad, como el me- sibilidad o derecho que tiene de recibir
totrexate, por ejemplo. Esta asignación un tratamiento efectivo con cobertura de
se lleva a cabo sin que el reumatólogo su EPS por el POS.
investigador pueda saber en qué grupo
del estudio estará el paciente, debido al
Hacia una ética del reumatólogo
cegamiento que exige la metodología de
la mayoría de este tipo de estudios.
investigador
Después de analizar el panorama de los
Ante esto es necesario preguntarse, ¿por experimentos clínicos en la práctica clíni-
qué el médico no ofrece a su paciente la ca del reumatólogo, es necesario resaltar
mejor opción a la que tiene derecho en el los aspectos que surgen como dilemas
sistema de salud colombiano, en vez de éticos, pero también plantear posibles so-
ofrecer la incertidumbre de un medica- luciones, pues el objetivo de este escrito
mento en experimentación o, incluso, de no es satanizar la participación de mis
dictaminar la opción de estar en el grupo colegas reumatólogos en la investigación,
placebo, recibiendo, para el caso de artri- por el contrario, es clarificar los aspectos 43
tis reumatoide, el mismo metotrexate que bioéticos que se deben tener en cuenta
seguramente ya venía recibiendo previa- en el ejercicio de la reumatología, para
mente? Teniendo en cuenta lo expuesto evitar malas prácticas clínicas que puedan

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Daniel G. Fernández-Ávila

generar no solamente un problema ético del ministerio de salud denominado MI-


en la atención del paciente, sino también, PRES. Una vez el paciente ha recibido esta
sesgos que afecten finalmente los resulta- información y es claramente consciente
dos de la investigación en curso. de la posibilidad de recibir estas terapias
con cobertura de su aseguradora, debe
El primer punto es resaltar el papel de quedar claro que el paciente escoge li-
los comités de ética en investigación, los bremente y sin presiones participar o no
cuales surgen como garantes de la se- en el experimento clínico que se le está
guridad de los pacientes, pues evalúan ofreciendo. Además, en esta decisión el
detenidamente los riesgos a los que se paciente ha de conocer la metodología
exponen los participantes, buscando que del mismo y, si se trata de un experimento
estos riesgos sean necesarios, justificados clínico fase III, el paciente ha de ser cons-
y minimizados. Así mismo, deben evaluar ciente de que puede quedar en el grupo
concienzudamente los beneficios que po- control, recibiendo el tratamiento anti-
dría traer la investigación, pues ésta debe rreumático convencional más un placebo
tener validez científica y relevancia social del medicamento biológico.
que repercuta positivamente en la pobla-
ción. Una vez la investigación ha pasado Propiamente, este es el momento de de-
por este primer filtro y tiene el visto bue- cisión del paciente frente a su médico, un
no del comité de investigación, viene la momento cardinal y central, pues en este
aplicación de este proceso investigativo punto emerge la importancia de un sóli-
a la práctica clínica del reumatólogo. En do fundamento ético por parte del reuma-
este punto vale la pena recalcar la ob- tólogo, quien, sin olvidar su papel como
tención de un adecuado consentimiento médico tratante, debe jugar el rol de inves-
informado, resaltando de modo especial tigador, pero debe hacerlo de una forma
el tema de la información al paciente, el equilibrada, honesta y sincera; recordan-
cual debe estar enterado que, para casos do a sus ancestros hipocráticos, quienes se
de artritis reumatoide moderada a seve- referían a la ética no solo como un código
ra, refractaria al tratamiento antirreumá- de normas, sino el modo cómo se debe
tico convencional tiene derecho a recibir ejercer de una manera justa la medicina,
directamente de la EPS cualquier medica- teniendo en cuenta su fin último: la salud
mento biológico, pues se encuentran en del paciente. Así como hay una forma
su totalidad incluidos en el POS. correcta de tocar piano o hacer un buen
vino, la ética es la forma correcta de vivir
Ahora bien, si se trata de casos de espon- y ejercer la medicina, es un criterio para
44 diloartritis o lupus eritematoso sistémico, la acción a tener en cuenta en el día a día
también el paciente puede acceder a este del ejercicio médico, un criterio para la ac-
tipo de terapias de alto costo mediante el ción que se debe tener muy en cuenta a la
diligenciamiento de un aplicativo en línea hora de ofrecer a un paciente la opción de

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Investigación clínica en la práctica de la reumatología en Colombia. Visión de un reumatólogo desde la óptica ética

prestar su cuerpo, su anatomía, fisiología pacientes, y también en el marco de los


y la fisiopatología de su enfermedad au- procesos de investigación en el área bá-
toinmune, para fines investigativos que, en sica y el área clínica de la reumatología
últimas, buscan aumentar el conocimiento (MacKenzie, Meltzer, Kitsis, 2015).
científico, lo cual repercutirá en un benefi-
cio para toda la humanidad.
Conclusión
Otro aspecto a resaltar a la hora de par- Teniendo en cuenta las anteriores críticas,
ticipar en la investigación clínica es que y ante el problema ético que genera en el
una vez el paciente ha tomado la deci- médico reumatólogo el hecho de recibir
sión de participar en el estudio de forma honorarios por su rol de investigador, y
libre, autónoma y suficientemente infor- más más aún, el que estos pagos se con-
mada, el reumatólogo pasa a jugar el rol viertan en su mayor fuente de ingresos,
de investigador y debe llevar de manera por encima de lo que recibe por su tra-
responsable, el proceso de recolección bajo en la misma práctica asistencial, es
de datos para el estudio en curso y esto necesario subrayar que el reumatólogo
debe ser vigilado, a lo largo de la dura- debe reflexionar sobre este doble papel
ción de todo el protocolo, por parte del que pone a prueba sus principios éticos
comité de ética en investigación, el cual y la forma como establece y maneja esta
debe tener un papel que no se debe limi- compleja interacción entre su práctica
tar solamente a la aprobación del inicio clínica y su ejercicio como investigador
del estudio en su centro de atención en en estudios clínicos financiados por la in-
reumatología, sino que debe ir más allá, dustria farmacéutica. En este punto surge
haciendo un seguimiento activo al proce- la pregunta: y, entonces, ¿cómo se pue-
so de investigación, incluyendo las nove- de hacer investigación clínica en nuestro
dades que se puedan presentar durante país? Es necesario anotar que el proceso
las diferentes fases del estudio clínico. de investigación es muy importante, no
solamente para mejorar la atención de los
La reumatología está inmersa en un com- pacientes localmente, sino para beneficio
plejo entramado de dilemas de la prác- de toda la humanidad, pues permite la
tica asistencial e investigativa, como lo posibilidad de encontrar mejores opcio-
demostraron Mackenzie y colaboradores, nes terapéuticas que permitan un mejor
quienes realizaron una encuesta entre control de las enfermedades reumáticas,
reumatólogos adscritos al Colegio Ame- lo cual se traduce en una mejor funcio-
ricano de Reumatología, encontrando nalidad y calidad de vida de las personas
que los dilemas éticos están a la orden afectadas por este tipo de enfermedades. 45
del día en la práctica diaria del reumató-
logo, que en efecto, se encuentran des- Como en muchos aspectos de la vida,
de el proceso asistencial de atención a la respuesta a esta disyuntiva entre in-

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Daniel G. Fernández-Ávila

vestigación y práctica asistencial está en originadas en la industria farmacéutica.


el equilibrio. Lastimosamente, algunas Sin duda, esta debería ser una iniciativa
instituciones se han dedicado en forma soportada desde el INVIMA, que deberá
desproporcionada a participar en cuan- establecer normas claras para la partici-
to trabajo de investigación les es posible; pación de reumatólogos e instituciones de
incluso, basan su equilibrio financiero en salud en la investigación en reumatología.
este tipo de actividad y no en la presta-
ción de servicios de salud (consulta de Para finalizar, cabe resaltar que la bioé-
reumatología), que es la misión para lo tica es un reflejo de nuestra época; es la
cual fueron creadas y para lo cual tiene respuesta a lo que sucede en una socie-
una autorización de funcionamiento, ha- dad dinámica, en movimiento, y que en
bilidad otorgada por el ente regulador lo- el campo de la reumatología se expresa
cal: la secretaría de salud, y para lo cual en el enorme cambio que ha habido en
tiene una inscripción ante la Cámara de el ejercicio médico en reumatología en
Comercio local. los últimos 25 años. Antes de la década
de 1990 no se disponía aún de terapias
La propuesta va a que exista un equili- biológicas y el ejercicio de investigación
brio entre el número de pacientes aten- en reumatología se limitaba a unos po-
didos por una enfermedad y el número cos estudios sobre anti-inflamatorios no
de pacientes que eventualmente podría esteroideos, mientras que hoy en día los
ingresar a determinada institución a los experimentos clínicos fase III y fase IV
diferentes estudios. Lo anterior permitiría abundan por doquier y lastimosamente
manejar un rango máximo de pacientes se mezclan y confunden con la práctica
incluidos en los estudios, con ello se evi- clínica, sin límites claros y la adherencia
taría la inscripción exagerada de partici- a estándares éticos para garantizar tanto
pantes en los estudios. el respeto a los derechos de los sujetos de
investigación, como a los derechos de los
¿Cuál sería el número máximo a incluir?, pacientes en su atención.
¿qué criterios servirían para determinar
cuáles pacientes serían parte de estos es- El llamado es, entonces, a realizar un
tudios y cuáles no? Las respuestas a estas ejercicio responsable, fundamentado en
preguntas y otras relacionadas escapan principios éticos, por encima de intereses
al alcance de este documento; no obs- financieros, empoderando a los comités
tante, sería un ejercicio interesante que de ética en investigación como garantes
debe partir de un estudio juicioso sobre del principio rector de beneficencia y al
46 la oferta de consulta de reumatología, la reumatólogo como actor principal de
demanda de la misma en el sistema de este proceso. Ello para garantizar que
salud colombiano, y la cantidad y natu- en forma conjunta adelanten procesos
raleza de las propuestas de investigación de investigación que, basados en sólidos

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Investigación clínica en la práctica de la reumatología en Colombia. Visión de un reumatólogo desde la óptica ética

principios éticos, puedan construir nuevo logy: new biologic agents. Curr Opin in
conocimiento para beneficio de todos, Rheumatol, (20), pp.269-75
pero respetando siempre la autonomía Fries, JF y Krishan, E. (2004) Equipoise,
y derechos del paciente con enfermedad design bias, and randomized contro-
reumática. lled trials: the elusive ethics of new drug
development. Arthritis Res Ther, (6),
pp.250-55

Referencias MacKenzie, CR, Meltzer, M. y Kitsis, EA.


(2013). Etical challenges in rheumatolo-
Clancy, MJ. (2002) Overview of research
gy. Arthritis Rheum, (65), pp. 2524 - 32
designs. Emerg Med J, (19), pp.546-49
Miser, WF. (2006) An introduction to evi-
Diario Oficial Número 40019. Diciembre
dence-based medicine. Prim Care Clin
30 de 2013.
Office Pract, (33), pp.811-29
Finckh, A. y Gabay, C. (2008). At the hori-
zon of innovative therapy in rheumato-

47

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Semiótica, Semiología, Genética y Dismorfología

Semiótica, Semiología,
Genética y Dismorfología

Fernando Suárez-Obando1

Las formas de la racionalidad médica se hunden en el espesor maravilloso de la


percepción, ofreciendo como primera cara de la verdad el grano de las cosas, su color,
sus manchas, su dureza, su adherencia. El espacio de la experiencia parece
identificarse con el dominio de la mirada atenta, de esa vigilancia empírica abierta a la
evidencia de los únicos contenidos visibles.

Michel Foucault
El nacimiento de la clínica

Resumen
El autor en este artículo analiza la construcción del criterio para determinar el diagnóstico
de una enfermedad atípica, para el caso específico de la dismorfología clínica, rama de
la genética. Hay tres componentes básicos para el diagnóstico de una enfermedad preva-
lente: la valoración subjetiva del médico, la evidencia científica que soporta las opiniones
médicas y un lenguaje técnico que articula los dos anteriores. Sin embargo, el autor señala
que, en medicina y en la vida en general, el lenguaje va más allá de la mera descripción.
La semiología médica soporta las decisiones del médico frente a un diagnóstico y trata-
miento, a partir de su cuerpo teórico o sistema de causas y efectos o signos y síntomas.

49
1 Médico Especialista en Genética y en Bioética, y candidato a PhD en Epidemiología Clínica, Pontificia
Universidad Javeriana, Bogotá. Magíster en Informática Biomédica, Universidad de Pittsburgh. Profesor
Asistente, Instituto de Genética Humana, Facultad de Medicina, Pontificia Universidad Javeriana. Correo
electrónico: fernando.suarezobando@gmail.com

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Fernando Suárez-Obando

En el caso de las enfermedades de baja prevalencia (Enfermedades raras y huérfanas), la


forma de acción diagnostica se basa principalmente en la riqueza semiótica de lo particu-
lar. En el diagnóstico aplicado en la dismorfología clínica, la particularidad de un fenotipo
dismórfico evidencia o comunica, la determinación de su genotipo y la constitución de
síndromes, asociaciones y secuencias determinadas por la interacción del medio ambiente
con en el código genético y su capacidad de expresión variable. El autor muestra cómo la
semiótica, sistema de comunicación de signos no sólo funciona en la cotidianidad, sino
está implícita en la naturaleza del cuerpo humano y en la de cualquier ser vivo; el DNA
es una muestra de ello. Se expone así, cómo el médico aplica la llamada teoría del signo
y del significado, explicada por el lingüista Ferdinand de Saussure, para diagnosticar una
enfermedad y para comunicar “…lo que parece ser incomunicable: los efectos en el cuer-
po de un proceso innombrado”.

Palabras clave: diagnóstico médico, diagnóstico en la dismorfología clínica, semiología


médica, biosemiótica o sistemas de comunicación biológicos, ley del efecto y principio
semiótico.

Abstract
The author in this article analyzes the construction of the criterion to determine the diagnosis
of an atypical disease, for the specific case of clinical dysmorphology, branch of genetics.
There are three basic components for the diagnosis of a prevalent disease: the physician’s
subjective assessment, the scientific evidence supporting the medical opinions, and a te-
chnical language that articulates the previous two. However, the author points out that
in medicine and in life in general, language goes beyond mere description. The medical
semiology supports the doctor’s decisions against a diagnosis and treatment, from its theo-
retical body or system of causes and effects or signs and symptoms. In the case of diseases
of low prevalence (rare and orphan diseases), the form of diagnostic action is based mainly
on the semiotic richness of the unique. In the diagnosis applied in clinical dysmorphology,
the particularity of a dysmorphic phenotype evidences or communicates, the determination
of its genotype and the constitution of syndromes, associations, and sequences, determined
by the interaction of the environment with the genetic code and its capacity for variable
expression. The author shows how semiotics, a system of sign communication not only
works in everyday life but is implicit in the nature of the human body and that of any living
being; DNA is a sign of it. This is how the doctor applies the so-called theory of sign and
meaning, explained by the linguist Ferdinand de Saussure, to diagnose a disease and to
communicate: “... what appears to be incommunicable: the effects on the body of an un-
named process”.

Key words: medical diagnosis, diagnosis in clinical dysmorphology, medical semiology,


biosemiotic or biological communication systems, law of effect and semiotic principle.
50

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Semiótica, Semiología, Genética y Dismorfología

Semiología de lo particular los fenómenos clínicos comprende, ade-


más de la conjugación de ciencia y arte,
El criterio, entendido como un patrón o un medio a través del cual el lenguaje
pauta que el médico adopta, para reco-
médico es capaz de definir umbrales fisio-
nocer la verdad o falsedad del diagnósti-
lógicos que, una vez se superan, definen
co, está contextualizado por la dicotomía
el estado mórbido. La semiología médica
diagnóstica, la cual supone la identifi-
es el cuerpo de conocimientos que esta-
cación de un sujeto (en este caso el pa-
blece el señalado umbral fisiológico, es
ciente) en cualquiera de los estados del
decir, conceptúa y atribuye el parámetro
ciclo salud-enfermedad. Este ciclo, hace
clínico que, de acuerdo a la descripción
referencia a un patrón reconocible de
del signo clínico, sustenta la decisión del
normalidad sobre el cual se construyen
galeno, siempre y cuando se base en la
mecanismos que articulan la capacidad
rutina prestablecida del interrogatorio y
de tomar decisiones y permite la com-
el subsecuente examen físico (Malterud,
prensión del fenómeno fisiopatológico.
2015). De esta forma, la noción diagnós-
Así mismo, es un proceso que consiente
tica que sucede luego de la valoración
la apreciación de los posibles desenlaces
del criterio clínico, se construye sobre una
clínicos y que se armoniza con cada deci-
forma especial de causa y efecto: signos y
sión particular, si se guarda la coherencia
del trabajo clínico. Estas acciones susten- síntomas equivalen a una enfermedad es-
tan un juicio de valor sobre las decisiones pecifica que se codifica bajo la denomi-
tomadas y sus consecuencias. Procesos nación de la categoría diagnóstica (Melo,
que, a su vez, se ajustan de acuerdo a 2011; Pelaccia, 2015).
la selección y evaluación de la mejor
evidencia disponible, para cada área en La construcción del criterio y de la evi-
particular de la medicina y para una gran dencia, se fortalecen con la práctica de
proporción de diagnósticos y tipos de pa- la generación de hipótesis y con la ruti-
cientes (Burns, 2008). na de repetir la evaluación y la evolución
de cada paciente. En consecuencia, la
El criterio clínico sobre el cual se funda- evaluación de enfermedades prevalen-
menta la toma de decisiones en Medici- tes y el conocimiento sobre ellas, tiene
na, comprende una serie de elementos una ventaja obvia sobre la enfermedad
expresivos que se caracterizan por mani- de baja prevalencia, que es, la usanza o
festarse a través del lenguaje técnico de práctica de los eventos, enmarcados en
la medicina, articulándose con la valora- la variabilidad intrínseca de cada caso,
ción subjetiva que el médico hace de su sin sobrepasar los límites de un diagnós-
paciente y de la propia evidencia que res- tico repetitivo (Ej.: neumonía). Mientras 51
palda la construcción de su criterio (Her- que la enfermedad prevalente no pierde
mann, 2016). Sin embargo, el aspecto las características de individualidad que
semántico de la descripción corporal de le otorga cada paciente, sigue siendo el

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Fernando Suárez-Obando

mismo diagnóstico con particularidades causa efecto, tanto de la normalidad fi-


del sujeto, más no una nosología dife- siológica como de la anormalidad estruc-
rente. En el caso de la enfermedad de tural (Dismorfología).
baja prevalencia, la rareza del diagnós-
tico exige del facultativo una forma de
Semiótica
acción diagnóstica que no depende en
gran proporción de la experiencia (expre- La semiótica se experimenta tanto en
sada en términos de frecuencia de rutinas la cotidianidad, como en la interpreta-
diagnósticas) sino de una valoración que ción que la ciencia les da a sus objetos
se apoya, principalmente, en la riqueza de estudio, de tal modo que, desde las
semiológica de lo particular e infrecuen- conversaciones cotidianas, las señales de
te (Allanson, 2009; Coles, 2016; Dixit, tránsito, los íconos religiosos, los mensajes
2016, Meaney, 1986). cifrados, las macromoléculas, el examen
físico del paciente y hasta los sistemas bio-
En el campo de la dismorfología, rama lógicos como el genoma, comparten en
de la genética clínica, lo particular, infre- su ordenación básica la organización de
cuente y de baja prevalencia adquiere el un cuerpo de instrucciones que sustenta el
protagonismo a través del lenguaje se- desempeño de los sistemas comunicativos.
miológico, anudado a la particularidad
de la etiología genética de la enferme- La semiótica, entendida como un sistema
dad, lo que constituye una correlación de comunicación de los signos, se desarro-
entre lo manifiesto (fenotipo) y lo etioló- lla en razón a los métodos expresivos exis-
gico (genotipo - ambiente). Correlación tentes, si su estructura permite la presencia
que, sin pretender ser directa, proporcio- y permanencia de lo que en su propia esen-
nal o necesariamente absoluta para to- cia es el propósito de su actuar, es decir,
dos los casos de la enfermedad genética, comunicar. La teoría del signo y el significa-
resalta dentro de la semiología médica do, ayuda al médico a alcanzar diagnósti-
por su quehacer detectivesco en el cual cos, siendo los signos de la enfermedad,
cada pequeña clave, oculta en la rareza y los que se identifican por la expresión sin-
particularidad de un fenotipo dismórfico, tomática del paciente, se transforman a su
aporta en la constitución de síndromes, vez en signos objetivos bajo la mirada clíni-
asociaciones y secuencias. En el núcleo ca (Burnum, 1993; Nessa, 1996).
de la correlación fenotipo-genotipo, se
encuentra la noción del código genéti- La estructuración del sistema comunica-
co, la cual se describe en términos que, tivo depende de reglas que son comu-
52 casi siempre señalan a los genes, como nes a todos y cada uno de los ejemplos
el plano a partir del cual se construye la mencionados (señales de tránsito, ADN2,
estructura fisiológica de los cuerpos, un
rasgo especial y relevante en la relación 2 ADN: ácido desoxirribonucleico.

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Semiótica, Semiología, Genética y Dismorfología

presentación clínica de la enfermedad). mensajes que el cuerpo mórbido trasmite


La comunicación implica, transmisión de durante el ejercicio de la rutina clínica.
información y será la estructura del sis-
tema comunicativo la que establecerá
Semiología médica y Semiótica
en su momento, el sentido (significado y
dirección) en que se interpreten los da- En su estructuración semiológica y lingüís-
tos comunicados. A pesar del uso diario, tica, la lengua es un hecho y acuerdo so-
consciente o inconsciente de la semiótica, cial, una serie de reglas que, enmarcadas
usualmente no se reconoce la importan- en pautas de fácil manejo, permite casi
cia de su presencia en las ciencias bá- siempre, la fluidez de mensajes sin mayo-
sicas médicas. Además, sus atribuciones res dificultades. Sin embargo, más allá de
en el desarrollo de la práctica médica no sus modos básicos de desarrollo, la len-
van más allá de las clases de semiología gua es arbitraria, se debe principalmente
médica en los años de entrenamiento clí- a la sucesión de eventos y circunstancias
nico (Nessa, 1996). que en el contexto de su existencia gene-
ra un significado. El habla es un aconte-
Aunque la semiótica en el ámbito médi- cimiento individual que se enmarca en el
co cuenta un venerable cuerpo teórico acuerdo social de la lengua. El sistema es
(Brands, 2000), aparentemente, tiene una estructura en la cual, las partes fun-
poco impacto fuera de sus confines casi cionan como un todo, pautas, arbitrarie-
insulares y aunque su acepción más sim- dades, circunstancias e individualidades
ple es el estudio de los signos, su impor- que, en el contexto del lenguaje técnico
tancia se hace fundamental y distinguida, de la Medicina, se convierten en un cuer-
cuando se tiene en cuenta su rol como po especializado en identificar y describir.
parte de la vida social, rol al cual se le
denomina semiología. Ferdinand de El funcionamiento del sistema lingüís-
Saussure (Ginebra, Suiza, 1857 – 1913), tico, como en el caso de un organismo
reconocido como uno de los fundadores biológico, depende de cada uno de sus
de la lingüística moderna, consideraba componentes. El signo es todo lo que
que la lengua era un sistema de signos; se puede interpretar, sea cosa, hecho o
de allí que, la lingüística es sólo una par- persona. Los signos son creados y usa-
te de una ciencia más general llamada dos para cumplir con determinados fines,
semiología (Mick, 1995). Ciencia que, para aportar determinados rendimientos:
contextualizada en el campo de la Me- se quiere expresar algo a través de ellos,
dicina, engloba aspectos fundamentales representar y comunicarlo a alguien (re-
de la comunicación y comprensión de la ceptor). De tal modo que un objeto ani- 53
enfermedad, los cuales, para el trabajo mado o inanimado cualquiera que este
diagnóstico del médico, se hacen más no- sea, puede designar como signo a otro y
tables en cuanto a la interpretación de los no depende solo de convenciones acep-

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Fernando Suárez-Obando

tadas, sino también de que ese signo fun- objeto al cual el signo se refiere y, 3- el
cione en una determinada situación. Para interpretante, la instancia o la persona
de Saussure el signo es la unión de sig- que interpreta el signo referido al objeto.
nificado3 y significante4, la unión de dos Signo es la objetivación de los síntomas,
componentes: el concepto y la imagen. como objeto es al órgano o sistema que
Es así como los signos son una presencia padece un proceso mórbido. Signo es, a
constante e indispensable en el acuerdo la denominación formal de los hallazgos
social de la lengua. al examen físico, como interprete es, al
médico que dilucida el signo referido al
Estas observaciones no se apartan de lo paciente. Es así como el uso del pensa-
que los médicos definen, en su ejercicio, miento conjetural y el manejo de signos
como signos clínicos: revelaciones objeti- y síntomas en búsqueda del diagnósti-
vas, físicas o químicas que se reconocen co, junto al seguimiento del curso de la
al examinar al enfermo. Se trata de la reu- enfermedad conforman el aspecto más
nión de la imagen y su concepto, eviden- familiar de la práctica médica. Las mani-
ciados por el examen físico. El médico y el festaciones de la enfermedad no se pre-
paciente usan un lenguaje para comunicar sentan como meras contingencias, sino
lo que parece ser incomunicable: los efec- que constituyen una evidencia sensible a
tos en el cuerpo de un proceso innombra- la observación clínica y éste se entiende
do, que luego de la implementación del en el contexto de signos, síntomas y sín-
criterio, la evaluación de la evidencia y el dromes. De tal modo que, sí el proceso
proceso de toma de decisiones, se llega a fisiopatológico subyacente a la manifes-
reconocer como el proceso patológico y tación clínica tiene una base molecular,
se le bautiza con el nombre de una enfer- fisiológica y anatómica, la causa que
medad (Olds, 1995). conlleva a la pérdida del equilibrio, no
excede los parámetros biológicos. No
El fundamento semiótico de este proceso está por encima de ellos y responde de
se precisa como el triángulo semiótico, el igual forma que, el proceso mórbido, al
cual se compone de: 1- el signo o todo marco axiomático de la aproximación
aquello que se pueda interpretar; 2- el científica5, es decir aquella en que los di-
versos procesos normales o patológicos,
3 Significado: es una parte de la estructura del explican la fisiología de los seres vivos, en
signo que consiste en la imagen mental o el términos físicos, químicos, contextos celu-
concepto que el signo desea representar.
4 Significante: es una parte de la estructura de sig- lares y en las manifestaciones clínicas de
no que consiste en la forma material que toma el la enfermedad (Barbieri, 2008).
54 signo. Ejemplo, la cianosis peri oral, es un signo
clínico relevante, su significado es: hipoxia (falta
de oxígeno), su significante es la coloración pur- 5 Se entiende aquí como aproximación científica
purea alrededor de los labios 8Forma física que a la fundamentación de la Medicina a través de
adopta el signo y que se identifica por ejemplo la evidencia respaldada por el método científico,
en examen físico del paciente). sea esta ciencias básicas o clínicas.

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Semiótica, Semiología, Genética y Dismorfología

En el marco de referencia del fundamento ordenación. Ambos, signo y significante,


semiótico, contextualizado al quehacer y coexisten como objetos, el uno para el
comprensión del fenómeno mórbido, se otro. En el caso de la aproximación mé-
puede afirmar que los seres vivos respon- dica a la interpretación de los signos de
den a dos grandes principios: la ley del la enfermedad, el signo clínico no puede
efecto y el principio semiótico. El primer existir sin una carga útil de significado,
principio es la regla básica y fundamen- de tal modo que se manifiestan como un
tal de la permanencia, puesto que lo que principio semiótico, en el que la evalua-
actúa y funciona sobrevive; mientras que ción objetiva hecha por el galeno tiene
aquello que se pliega a la inacción o la una carga de significado que se rotula
acción fútil, desaparece. Ello indica que, como enfermedad. El sistema incluye por
la adaptación y la supervivencia de los tanto un trasmisor, un receptor, las reglas
organismos, y también de las ideas (no- del código, el signo y el significado. En-
ciones, conceptos), no son simplemente tonces podría simplificarse este ordena-
sinónimos, dado que una gran propor- miento en un paciente que trasmite un
ción de sistemas biológicos adaptados y mensaje, objetivado por el médico, es
existentes, se vuelven comparativamente decir: el receptor, las reglas de interpre-
menos adaptados que otros y, posterior- tación del mensaje y un mensaje que se
mente, cesan de sobrevivir. Es un principio rotula como diagnóstico, sobre el cual se
según el cual la repetición y permanencia actúa y se evalúa la enfermedad. Ningu-
de un suceso depende de los efectos que no de estos principios puede existir sin el
la acción genera y que repercuten en la otro, coexisten para algún otro objeto di-
supervivencia de quien ejerce la acción. ferente de él mismo en el mismo sistema,
Una ley de efectos a la que no escapan los cada uno de los componentes le da signi-
seres vivos, ni tampoco los argumentos o ficado al otro. La ley del efecto describe,
las ideas (Blackmore, 2016; Croft, 2007). uno de los pilares de la supervivencia, el
principio semiótico representa el quiebre
El segundo, el principio semiótico, es tan biológico de la evolución; la enfermedad
básico, genérico y abstracto como el pri- como manifestación de la disputa de los
mero. Declara que un objeto puede exis- sistemas biológicos por subsistir.
tir para algún otro objeto diferente de él
mismo en el mismo sistema. Cercano a
Biosemiótica y dismorfología
la tautología como la ley del efecto, pero
que, al analizar el signo y el significante, El principio semiótico, también explica
es decir, las relaciones entre aquel que los mecanismos de comunicación de los
objetiva y aquel que está cargado de sen- organismos, incluyendo la transmisión de 55
tido, generan una lógica de presencia, mensajes de identidades y sistemas pro-
en razón a la correspondencia y mani- pios (EJ.; sistema nervioso, sistema endo-
festación de los dos entes en una misma crinológico), así como la comunicación

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Fernando Suárez-Obando

de las propiedades biológicas de especie, y significantes, pero su acción recorre un


a través de las generaciones vía el ADN camino más largo que otras semiotecnias
(herencia y evolución). De tal modo que aplicadas por facultativos a las demás
la noción de comunicación no está limita- especialidades clínicas y quirúrgicas: se
da al mundo perceptible por los sentidos. extiende desde la endosemiótica hasta
Los estudios fisiológicos y bioquímicos la propedéutica. Puesto que, al describir
de los sistemas vivientes revelan diversas el proceso mórbido como un signo que
formas de procesos comunicativos a nivel encierra en su contexto la etiología de la
microscópico y molecular, tales como la manifestación clínica, describe la altera-
transmisión de señales intercelulares y la ción de la información genética, es decir,
regulación epigenética (Barbieri, 2008). la secuencia de nucleótidos que, una vez
alterada (mutación) o desregulada (epi-
La biosemiótica, tiene como fundamen- genética) desarrolla en el paciente un dis-
to teórico, estudiar la comunicación y morfismo y al integrar su descripción, al
su sentido en los seres vivos. Estudia el contexto de la anamnesis diagnóstica o
proceso y el procesamiento de los signos terapéutica, comunica y define la interac-
en los colectivos biológicos. De tal modo ción entre el genotipo y el ambiente. Esta
que empodera a la comunicación, como estructura de aproximación y desarrollo
la característica esencial de la vida, de- del criterio diagnóstico a partir de una
terminando además que, un organismo base genética, concatenada con la mani-
es un mensaje en sí mismo. Un mensaje festación clínica de la malformación, sólo
que cobra sentido cuando su constitución es posible si se especifica que existe una
biológica más íntima (genoma) expli- semiosis de las moléculas en los sistemas
ca y detalla, a las futuras generaciones, vivos. La molécula de ADN como signo.
cómo sobrevivir y reproducirse (Kawade,
1996). Uno de los objetos de estudio de La biología ha demostrado que el ADN
estudio de la biosemiótica es el conjun- puede ser reducido a una serie de reac-
to de comunicaciones entre las células y ciones bioquímicas, que pueden, en prin-
moléculas, enfrentando el fenómeno de- cipio, ser reproducidas en un tubo de
mostrativo dentro de un solo organismo ensayo. De esta forma, las moléculas de
multicelular y dentro de cada una de las ADN parecen simplemente obedecer a
células que lo constituyen. Aspecto bio- principios físicos, a la fuerza bruta de la
semiótico conocido como endosemiótica naturaleza, sin una implicación semiótica.
(Ji, 1999). Incluso, la molécula de ADN aislada no
es información genética, ni siquiera un
56 La semiología médica encuentra en la ge- transportador de información. Aunque si
nética clínica y, especialmente, en la dis- se añade a la interpretación, del sistema
morfología, un exponente notable de la bioquímico, el contexto, el marco de refe-
descripción de pacientes mediante signos rencia que confiere significancia biológica

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Semiótica, Semiología, Genética y Dismorfología

a la molécula, convierte al ADN en infor- caso la enfermedad infrecuente repre-


mación. La transición conceptual se logra sentada por la dismorfología. La genéti-
si la molécula se encuentra en un sistema ca clínica es un puente entre los mundos
viviente, una célula o una organización ocultos de la célula y los signos mani-
relevante que la contenga, incluso una fiestos en el paciente, la interpretación
reacción de amplificación in vitro, con un semiológica del aspecto clínico revela
propósito investigativo o diagnóstico. la molécula que edifica el signo bajo el
cual se desarrolla el fenotipo, descubre el
La interpretación de la molécula deja de ADN, lo intuye, lo describe, lo predice y lo
ser solo la descripción dura del compues- enfrenta en revelaciones objetivas, físicas
to y la información que encierra para o químicas que se reconocen al examinar
convertirse en una relación de caracterís- al enfermo, al resultado visible a los senti-
ticas, físicas y químicas, de información dos por un aparente cambio de deletéreo
contenida junto a un intérprete. El gen en su constitución: el dismorfismo.
tiene la estructura química, la secuencia
del ADN es el signo primario, la proteí- El criterio clínico sobre el cual se funda-
na específica el objeto y la red celular y menta la toma de decisiones en Medici-
bioquímica actúan como sus intérpretes, na, para el caso especial de la Genética
los cuales se ven influenciados por el am- clínica y un área particular de su saber, la
biente. El estudio de estos fenómenos y dismorfología, requiere de conjuntos de
el procesamiento de los signos a nivel signos patognomónicos que desglosen
molecular se definen en el campo de la la ontología del síndrome y mereológi-
microsemiótica (Barbieri, 2008). La pre- camente reconstruyan cada uno de sus
sentación del signo a escala humana, en componentes, así como sus relaciones
el examen físico del paciente dismórfico y causales, bajo las definiciones apropia-
enmarcada en la semiotecnia tradicional, das del lenguaje técnico de la genética
define el procesamiento de los concep- (Allanson, Biesecker, Carey, Hennekam,
tos. Este procesamiento encierra el signo 2009). Proponiendo así, la base para
en la macrosemiótica, estudio que reúne construir el criterio diagnóstico de lo in-
el significado y el significante de lo mani- frecuente y fundamentando la acción de
fiesto y de lo oculto en el mundo endo- reconocer, lo que se define en la asisten-
semiótico de los tejidos y células, y que cia clínica, como un modelo de definición
también interpreta la microsemiótica de nosológica codificada como enfermedad.
la molécula del ADN como signo en su
contexto celular. La construcción de estos modelos desta-
ca su definición o propuesta de acerca- 57
Es así como se encuentra sentido en el in- miento al fenómeno, porque el punto de
térprete, representado por el contexto de partida es la diferenciación entre causa
la valoración de la enfermedad, en este y asociación, origen y consecuencia, gen

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Fernando Suárez-Obando

y fenotipo, soportado en los aspectos la constitución genética, la que a su vez


de consolidación causal, como son la abarca, desde el signo y significado de
relación temporal y la plausibilidad bio- la microsemiótica molecular, hasta la ma-
lógica. La cimentación del criterio y la crosemiótica del fenotipo, encontrando
formulación de una nueva evidencia, se en la evaluación médica un significado
fortalecen con la práctica de la genera- de riqueza semiológica de lo particular e
ción de hipótesis: práctica que estable- infrecuente. El mensaje entonces puede
ce la relación entre la microsemiótica y ser leído en el lenguaje de los nucleótidos
la macrosemiótica, así como también, la o en el lenguaje de los diagnósticos.
rutina de repetir la evaluación y la evo-
lución de cada paciente que, manifieste
Referencias
una alteración en el desarrollo de la for-
ma y la comunicación del mensaje. Una Allanson JE, Biesecker LG, Carey JC, Hen-
variación del ADN estructural o funcio- nekam RC. (2009). Elements of mor-
phology: introduction. Am J Med Genet
nal que se revela en el dismórfico. Ahora A, 149A (1), pp.2-5.
bien, se entiende que la valoración de la
Barbieri M. (2008). Biosemiotics: a new un-
superficie corporal del paciente afectado derstanding of life. Naturwissenschaf-
y su microsemiótica corresponde al ge- ten, 95(7), pp.577-99.
notipo; por su parte, la macrosemiótica Blackmore S. (2016). Memes and the evo-
corresponde al fenotipo elaborado por la lution of religion: We need memetics,
valoración clínica, es decir, la semiología too. Behav Brain Sci, 39, pp.e5.
descriptiva del síndrome. Brands M, Franck D, van Leeuwen E.
(2000). Epistemology and semiotics of
Es así como el núcleo de la correlación medical systems: A comparative analy-
sis. Semiotica, 132(1-2), pp.1-24.
fenotipo-genotipo se descubre en el men-
Burnum JF. (1993). Medical diagnosis
saje que había planteado la noción del
through semiotics. Giving meaning to the
código genético. El ADN como el plano sign. Ann Intern Med, 119(9), pp.939-43.
primordial a partir del cual se construye
Burns PB, Rohrich RJ, Chung KC. (2008).
la estructura fisiológica de los cuerpos, The levels of evidence and their role in
un rasgo especial y relevante en la rela- evidence-based medicine. Plast Recons-
ción causa efecto, tanto de la normali- tr Surg, 128(1), pp.305-10.
dad fisiológica, como de la anormalidad Coles CD, Gailey AR, Mulle JG, Kable JA,
estructural, las cuales no hacen parte de Lynch ME, Jones KL. (2016). A Compa-
la manifestación semiótica en la que se rison Among 5 Methods for the Clini-
cal Diagnosis of Fetal Alcohol Spectrum
interpreta a la molécula de ADN como
Disorders. Alcohol Clin Exp Res, 40(5),
58 signo primordial. En conclusión, la semio- pp.1000-9.
logía de lo particular, de lo infrecuente,
Crofts AR. (2007). Life, Information, Entro-
de la enfermedad rara y del dismorfismo, py, and Time: Vehicles for Semantic In-
reflejan la particularidad más extrema de heritance. Complexity, 13(1), pp.14-50.

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Semiótica, Semiología, Genética y Dismorfología

Dixit A, Suri M. (2016). When the face says Melo M, Scarpin DJ, Amaro E, Jr., Passos RB,
it all: dysmorphology in identifying syn- Sato JR, Friston KJ, et al. (2011). How
dromic causes of epilepsy. Pract Neurol, doctors generate diagnostic hypotheses:
16(2), pp.111-21. a study of radiological diagnosis with
Hermann H, Trachsel M, Elger BS, Biller- functional magnetic resonance ima-
Andorno N. (2016). Emotion and Value ging. PLoS One, 6(12), e28752.
in the Evaluation of Medical Decision- Mick DG. (1986). Consumer Research and
Making Capacity: A Narrative Review of Semiotics: Exploring the Morphology
Arguments. Front Psychol, 7, pp.765. of Signs, Symbols, and Significance.
Ji S. (1999). The cell as the smallest ADN- Journal of Consumer Research, 13(2),
based molecular computer. Biosystems, pp.196-213.
52(1-3), pp. 123-33. Nessa J. (1996). About signs and symp-
Kawade Y. (1996). Molecular biosemiotics: toms: can semiotics expand the view of
Molecules carry out semiosis in living sys- clinical medicine? Theor Med, 17(4),
tems. Semiotica, 111(3-4), pp.195-216. pp.363-77.
Malterud K, Guassora AD, Graungaard Olds D. (1995). Semiotics for Clinicians.
AH, Reventlow S. (2015). Understan- Semiotica, 107(1/2), pp.89-103.
ding medical symptoms: a conceptual Pelaccia T, Tardif J, Triby E, Ammirati C,
review and analysis. Theor Med Bioeth, Bertrand C, Charlin B, et al. (2015). In-
36(6), pp.411-24. sights into emergency physicians’ minds
Meaney FJ, Farrer LA. (1986). Clinical in the seconds before and into a patient
anthropometry and medical genetics: a encounter. Intern Emerg Med, 10(7),
compilation of body measurements in pp.865-73.
genetic and congenital disorders. Am J
Med Genet, 25(2), pp.343-59.

59

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Neuroética de los potenciadores cognitivos

Neuroética de los
potenciadores cognitivos

Ricardo de la Espriella Guerrero1

Resumen
Este artículo presenta una reflexión sobre qué es la neuroética, cómo ésta se distingue de
la bioética, especifica la validez, su campo de acción, métodos y posibilidades mediante la
reflexión de un tema de gran difusión actual: el uso de los potenciadores cognitivos, conoci-
dos como ‘la droga de la inteligencia’ o ‘la pastilla para pensar’. El autor llama la atención
sobre el escaso debate sobre el uso comercial o cosmético del mismo, pone de manifiesto
los peligros de su uso y cuestiona las consecuencias sociales, legales y éticas de uso, me-
diante el examen de los cuatro principios propios de la bioética: justicia, beneficencia, no
maleficencia y equidad.

Palabras clave: Potenciadores cognitivos, neuroética, control farmacológico, deterioro


cognitivo.

Abstract
This article introduces a deliberation about what neuroethics is, how it is different from
bioethics, specifies validity, its sphere of influence, methods and possibilities through the de-
liberation of an important and actual broadcasting: the use of cognitive enhancers, known

61

1 Médico psiquiatra, Epidemiólogo Clínico, Docente Departamento de Psiquiatría, candidato a PhD en Epi-
demiología Clínica, Pontificia Universidad Javeriana, Bogotá. Correo electrónico: rde@javeriana.edu.co

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Ricardo de la Espriella Guerrero

as “the intelligence drug” or “the pill of thinking”. The author calls the attention about low
debate of commercial or cosmetic use of this, show dangers of its use and disputes social,
lawful and ethic consequences, throughout inquiring the four principles of bioethics: justice,
charity, no maleficence and equity.

Key words: Cognitive enhancers, neuroethics, pharmaceutical control, cognitive im-


pairment.

¿Qué es la neuroética? qué una persona actúa en determinada


forma, sino que también se ocupa de es-
La neuroética puede definirse como el es- tudiar asuntos como las actuaciones mo-
tudio de las implicaciones éticas, legales rales, lo cual plantea un campo de acción
y sociales que surgen cuando los desa- especial y particular (Buller, 2006).
rrollos científicos acerca del cerebro y del
comportamiento se traducen en la prác-
tica clínica, llevando a interpretaciones Campo de acción
legales, que afectan la política social y de Hasta hace poco, la neurociencia no
salud (Morein- Zamir & Sahakian, 2009). generaba mucho debate o discusión
pública; en la comunidad científica ésta
La neuroética es un término emergente ha sido afín a la filosofía de la men-
en el siglo XXI con antecedentes de larga te, aunque ignorada por la ética. Hay
tradición en la filosofía, psiquiatría y en dos puntos importantes: (I) la discusión
la literatura. Este término se dice que fue acerca del correlato neurológico de la
acuñado por la neuropsiquiatra de origen creencia, emoción, conciencia, toma de
alemán trabajando en Harvard Anneliese decisiones, etc., no siempre basadas en
A. Pontius, en 1973, se aplica al campo evidencia y, (II) la filosofía doctrinal que
actual desde 2002 por William Safire, y mantiene que la neurociencia descriptiva,
se define como “el examen de lo que es tiene poco que ver con la ética normativa
correcto e incorrecto, lo que está bien y (Buller, 2012).
mal, con respecto al tratamiento del cere-
bro, su perfeccionamiento, la invasión no Si bien la neuroética ha tenido un amplio
bienvenida o la alarma de la manipula- desarrollo durante la llamada ´década
ción del cerebro humano”2 (Smith, 2012). del cerebro’, llevando al desarrollo de
la fundación de la Neuroethics Society,
La neurociencia contribuye a la ética no desde la que se ha promovido la realiza-
sólo por las explicaciones acerca del por ción de congresos, publicación de libros,
62 artículos y otros desarrollos significativos
2 Traducción propia: “The examination of what is que, sin embargo, no han permeado la
right and wrong and bad about the treatment of,
perfection of or unwelcome of and worrisome
docencia en pregrado y postgrado (Mo-
manipulation pf the human brain.” rein-Zamir & Sahakian, 2009).

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Neuroética de los potenciadores cognitivos

Los desarrollos en investigación, terapéu- ética de la neurociencia y la neurociencia


tica y diagnóstico de condiciones men- de la ética. La primera comprende el cuer-
tales llevan a considerar que existe un po de conocimiento mayor, relacionado
campo lo suficientemente desarrollado con el impacto de las neurociencias, los
y válido, con especificidad de conoci- desarrollos tecnológicos y su aplicación,
miento y problemas, argumentos y aná- donde se establecería la ética de poten-
lisis que difieren de aquellos problemas ciación (Farah, 2002).
propios de la ética de la vida en sentido
general, sobre los cuales se ha centrado En cuanto a la neurociencia de la ética,
la bioética. Tal es el caso de las decisio- se ubican las discusiones de, primero,
nes hacia el final de la vida, el aborto, los cómo los avances en la ciencia nos pro-
trasplantes y la experimentación clínica. veen un marco de realización de juicios
La IBRO (International Brain Research Or- morales, y, segundo, cómo la evidencia
ganization), organismo de la UNESCO, sugiere una revisión de la creencia de
establece como prioridades para la neu- que somos agentes racionales e inten-
roética los temas de potenciadores cog- cionales, capaces de acción voluntaria
nitivos, el inicio de la ‘vida cerebral’, la (Buller, 2012).
muerte cerebral, la neurotoxicidad de los
aditivos presentes en los alimentos, el uso La neuroética estaría entre esas dos ca-
de tejidos fetales para tratar enfermeda- tegorías, considerando como tema el
des neurológicas, el abuso de drogas, los del uso de los llamados potenciadores
problemas de aprendizaje, las diferencias mentales o cognitivos, pues intuimos que
sexuales y el estrés (Illes & Bird, 2006). puede acarrear aspectos problemáticos
tales como la disminución del respeto a
Los temas y procedimientos de la neuroé- las personas (Kass, 2003). Si bien que-
tica no difieren de modo sustancial de los remos alternativas, farmacológicas o no,
tratados por la bioética general, sin em- que mejoren la memoria, el deseo y las
bargo, dado su campo de estudio: el ce- acciones (Buller, 2012), conseguirlo a
rebro y el comportamiento, estamos frente través de un estilo saludable y de esfuerzo
a problemas especiales y consideraciones personal, difiere de hacerlo por medio de
filosóficas únicas. Entre los ejemplos de su medicamentos.
campo de reflexión y estudio se encuentra
temas como la personalidad, la identidad, La neurociencia es una disciplina nor-
las relaciones humanas y la consciencia. mativa, la cual promete lograr una
explicación simple de fenómenos neurop-
sicocomportamentales, en términos de 63
Particularidades de la neuroética neurobiología, es decir, biológica mas no
La neuroética tiene dos campos de estu- de tipo relacional sistémico, de explica-
dio relacionados, lo que se ha llamado ción más de las relaciones entre indivi-

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Ricardo de la Espriella Guerrero

duos (Buller, 2012), esta limitación debe la guerra de Corea por los norteameri-
ser considerada cuando se realiza análisis canos, actualmente son usadas por estu-
de dilemas éticos; por ejemplo, podemos diantes; el metilfenidato es el potenciador
encontrar dilemas al uso de medicación cognitivo de elección en los estableci-
en unos contextos y no en otros. mientos educativos (Mehlman, 2004).

Tomemos el ejemplo de los llamados po- Los potenciadores cognitivos mejoran


tenciadores cognitivos, como una forma el desempeño en sujetos sanos, no so-
de analizar las tensiones, incertidumbres lamente en aquellos con demencia, por
y posibilidades que desde la neuroética ejemplo, el modafinilo, ampliamente
pueden surgir. usado sin indicación terapéutica en mé-
dicos y personas que realizan turnos, es
indicado para la hipersomnia diurna liga-
Potenciadores cognitivos da a narcolepsia, éste ha sido usado por
Los potenciadores cognitivos, llamados militares para mejorar el desempeño en
también nootrópicos (Chinthapalli, K, pruebas de simulación de vuelo para he-
2015) son un grupo de medicamentos licópteros. Los potenciadores cognitivos
surgidos del estudio del Alzheimer para mejoran no solamente el estado de aler-
prevenir el deterioro, mejorar el desempe- ta, mantienen despierto al sujeto y mejo-
ño y la función cognitiva. Inicialmente se ran el recuerdo; también éstos mejoran el
usaron medicamentos como Donepezil, desempeño ejecutivo y la resolución de
Rivastigmina, Galantamina y Memantina, problemas (Mehlman, 2004).
luego se han sumado otras medicacio-
nes como el Modafinilo para aumentar Si bien el modafinilo no parece tener un
el estado de alerta, elemento clave en el efecto inmediato y manifiesto en el desem-
desempeño cognitivo, (Mehlman, 2004), peño cognitivo, ha tenido una explosión
aunque en sentido amplio también pu- mediática sobre su uso como ‘droga de
diéramos considerar para este efecto a la inteligencia’, en parte por las limitantes
la cafeína, el guaraná y otras sustancias de uso de la medicación corriente para
químicas de origen natural. Alzheimer (Mehlman, 2004). El uso permi-
tido que podemos rastrear de las prescrip-
El uso de este tipo de sustancias no es ciones en el 2003 son: la narcolepsia para
nuevo, la cafeína ha sido ampliamente 135.000 personas en USA, y 350.000
usada por siglos, lo mismo que la yerba prescripciones (Mehlman, 2004).
mate, el chocolate, guaraná, gingko bilo-
64 ba, nicotina que usada en parches mejo- Otros usos de los potenciadores cogni-
ra el desempeño cognitivo asociado a la tivos se han establecido en la práctica
edad. Las anfetaminas fueron usadas en por fuera del uso regulado por agencias
la segunda guerra mundial, Afganistán y (FDA, INVIMA), como es el caso de de-

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Neuroética de los potenciadores cognitivos

portistas con alto desempeño, jugadores Inteligencia como bien de consumo


de ajedrez, artistas y creativos. De modo
que, los potenciadores cognitivos han La posibilidad de mejorar la inteligencia,
abandonado el campo restringido y te- atributo central en la definición del self, de
rapéutico de la demencia, para enfren- la identidad e imagen personal, luce como
tar nuevos análisis y discusiones sobre la atractiva, deseable y, actualmente, está al
pertinencia, racionalidad y justificación alcance como un bien de consumo. En
de su uso. efecto, se piensa que «si puedo mejorar mi
inteligencia o desempeño cognitivo, mis
Los datos de admisión a universidades notas en los exámenes, etc…, tendré una
nos muestran un rápido incremento en mejor expectativa para lograr mi proyecto
los puntajes con una brecha entre grupos personal de vida como: mejorar el em-
socioeconómicos altos y bajos; ligado pleo, graduarme con buenas notas, des-
al uso de potenciadores neurocogniti- tacarme social y académicamente…». De
vos que mejoran la memoria y la velo- esta forma, la inteligencia se puede perci-
cidad de procesamiento de información; bir como si ésta fuera un bien de consumo
aunque su uso es prohibido, esta práctica que se puede lograr de modo inmediato y
cada vez es más generalizada (Sheridan, efectivo, pues es inherente la promesa de
Zinchenko, & Gardner, 2016). una mayor capacidad productiva3.

Actualmente, existe expectativa y promesa Punto de vista desde la neuroética


de otras formas de potenciación cognitiva
a desarrollar en el futuro, tal es el caso de Comencemos con el ‘Mantra de Geor-
la manipulación genética, los dispositivos getown’ o principios fundamentales de
y nuevos fármacos. la bioética, basados en los principios de
respeto por la autonomía, beneficencia,
no maleficencia y justicia.
Inteligencia como un constructo
Inteligencia es lo que mide mi test, Principios Fundamentales de la
Binet.
Bioética
La inteligencia como constructo es am-
plio, polisémico, manipulable. Llamamos Justicia
inteligencia al resultado de pruebas que
pretenden medirla, a la capacidad de to- Los potenciadores cognitivos plantean
mar decisiones o de adaptarse a situa- retos en cuanto a su campo de acción,
ciones retadoras, entre otras. Lo que los 65
medios han llamado inteligencia puede 3 Se calcula que la industria de los nootrópicos
superó en 2015 el billón de dólares anuales y
ser el desempeño incrementado, no siem-
en este año se aprecia un rápido crecimiento de
pre probado en pruebas y tests. su demanda. (Chinthapalli, 2015).

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Ricardo de la Espriella Guerrero

no obstante, podría decirse que su uso también es adecuado realizar un balance


justo implica su utilización en aquellos de riesgos y beneficios ligados a la ex-
individuos que tienen alguna deficiencia, posición no investigativa ante una inter-
como podría ser en las personas con pro- vención, en este caso, modafinilo. Hemos
blemas cognitivos de demencia y retardo de partir que los estudios muestran que
mental. El modafinilo, específicamente, no hay una adecuada evidencia a favor
no ha sido aprobado para el tratamiento de la utilización de los mismos; en efec-
de estas condiciones patológicas, por lo to, a la fecha los potenciadores mentales
cual su uso no está dentro de los planes no tienen un buen nivel de evidencia que
de beneficios posible. Por otra parte, las pruebe su efectividad, eficacia y seguri-
personas con daño cognitivo y que no dad (no existe a la fecha meta-análisis en
pueden desarrollar actividad laboral pro- la Cochrane Collaboration), por lo cual
ductiva tienen limitación para acceder a no pueden ser usados con criterio ético
esta tecnología; aunque sí pueden hacer- de beneficencia.
lo aquellos que tienen su función cogniti-
va intacta, es decir, se benefician aquellos Esta reflexión, lleva a plantearse si, ¿es-
que ya están bien, aumentando la brecha tamos ante el avance de una neuropsi-
entre los que están sanos y los enfermos. cofarmacología cosmética? El uso de
medicación que mejore las funciones
También podemos considerar el uso de cognitivas en sujetos sanos es controver-
potenciadores cognitivos en condiciones sial, igual el uso de antidepresivos en pa-
donde el resultado de ciertas pruebas no cientes sanos para estar ‘mejor que bien’.
ha sido satisfactorio, y no necesariamente Estamos aquí en presencia de un uso no
en presencia de una patología, como es claramente sostenible desde el punto de
el caso de la inteligencia límite, en la cual vista ético. Podría tratarse de la mani-
hay un desempeño más bajo en las prue- festación de una sociedad de consumo;
bas, pero no es necesariamente conside- aunque filósofos como Arthur Caplan
rado un estado de ‘enfermedad’. Habrá manifiestan que el sujeto tiene el derecho
que preguntarse si daremos potenciadores a determinar si usa o no una droga con
para que una persona con estas caracte- propósitos cosméticos, es decir, prima el
rísticas tenga mejor desempeño, hacién- principio del respeto por la autonomía
dola dependiente toda su vida de tales (Hyman, 2011).
sustancias, frente a un desenlace incierto.

No maleficencia
66 Beneficencia
Desconocemos los efectos a largo plazo
Si consideramos la necesidad de brindar de los potenciadores cognitivos, el moda-
protección de los sujetos, no solamente finilo, como cualquier medicación, puede
aquellos en investigación (DuVal, 2004), tener efectos adversos serios, dentro de

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Neuroética de los potenciadores cognitivos

los que llaman la atención la posibilidad ha sido escasa su investigación, así como
de producir alucinaciones, ansiedad, de- sus efectos a largo plazo (Sheridan, Zin-
presión, y pensamientos suicidas (NIH, chenko, & Gardner, 2016).
2016), sería paradójico que, buscando el
bienestar se produzca daño e infelicidad. Por otra parte, el uso de potenciadores
mentales está más presente en la pobla-
El uso de control social de personas para ción con inteligencia normal que busca
volverlas ‘mejores trabajadoras’, ‘mejo- los beneficios de un mejor desempeño
res estudiantes’, no necesariamente más cognitivo, explicado y motivado por los
creativos o reflexivos, puede socavar las procesos de selección, los ascensos la-
libertades individuales, lo cual es un peli- borales o, simplemente, motivados por
gro propio de los regímenes totalitarios y sentirse más listos. Esto hará que se be-
de las sociedades consumistas. neficien aquellos quienes no están indi-
cados estos medicamentos como terapia.
En cambio, los verdaderos usuarios y be-
Equidad
neficiarios de estos medicamentos serían
El uso de potenciadores cognitivos al las personas con retardo mental, con pro-
parecer es mayor para aquellos diag- cesos donde es visible el deterioro men-
nosticados con ansiedad o trastorno por tal, como es el caso de la demencia o el
déficit de atención con hiperactividad deterioro por esquizofrenia, en quienes su
(TDAH). En nuestro medio, el modafinilo uso es off-label, es decir, por fuera de las
es usado por aquellos profesionales de la indicaciones aprobadas por las entidades
salud que hacen turnos para mantenerse regulatorias, como el INVIMA en Colom-
alertas, con un uso más proclive por parte bia. El uso de potenciadores mentales en
de médicos y estudiantes de medicina. situaciones ajenas a una necesidad de tipo
médica, sería, entonces, un uso cosmético,
Tomar estos medicamentos implica un similar al de las vitaminas en los deportis-
dilema sobre su uso legal, es decir, to- tas, pues no hay un trastorno de base.
mar un test con una desventaja o con
una ayuda extra que permita un mejor En la clínica esto se ligaría al uso en in-
desempeño o resultado para lograr los teligencia límite, categoría diagnóstica
objetivos buscados, se puede comparar cuestionable cuyo criterio diagnóstico es
perfectamente con el caso de los depor- un bajo desempeño en las pruebas de
tistas profesionales, cuyas ayudas extras inteligencia, pero que no configura un
son sancionadas y cuestionadas social- retardo mental, es decir, se ofrece trata-
mente (doping). No obstante, quienes miento para un hallazgo paraclínico. Es 67
toman las decisiones o apoyan el con- importante cuestionarse si el uso de estos
sumo de este tipo de medicamentos no medicamentos en estos casos efectiva-
han considerado sus efectos potenciales, mente representa una mejoría: ¿cuánto

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Ricardo de la Espriella Guerrero

mejora un paciente con inteligencia límite como realizar ejercicio, resolver cruci-
sometido a este tipo de tratamiento? gramas, sudoku, rompecabezas, etc.
plantean la posibilidad de mejorar ha-
bilidades y lograr resultados. En el caso
Algunas alarmas
de los potenciadores cognitivos surgen
Ante la aprobación de uso de potencia- interrogantes con potenciales dilemas so-
dores cognitivos, surgen dilemas sobre bre su uso; por ejemplo, ¿cuál debe ser
la justicia distributiva y la bioética de el papel de los entes regulatorios?, ¿por
intervención (Garrafa, 2016); algunas qué es fácil encontrar estas medicaciones
consideraciones son: (I) Puede sobrecar- en los estantes de tiendas de medicina
garse al sistema por uso de medicación naturista?, ¿por qué estos potenciadores
no prioritaria para los planes de salud, pasan como suplementos vitamínicos,
quitando la posibilidad de realizar in- promocionados por televentas y simila-
versión en otros proyectos como sanea- res?, ¿se promocionan como lo hacen
miento ambiental, vacunación, etc. (II) La con los geles reductores de abdomen o
inversión en el mercadeo y la comercia- los cursos de inglés on-line?, ¿entrará en
lización de medicación para el bienestar el campo laboral como un plus para em-
deja de lado prioridades de salud pública pleadores?, ¿se distribuirán en el futuro
y enfermedades huérfanas. medicaciones para mejorar la productivi-
dad, disminuir la accidentalidad y lograr
(III) Sobre el uso off label: vale pregun- las metas que fijan las administraciones?;
tarse si puede determinarse que el uso de dado que su uso actual está creciendo,
medicación que está fuera del uso per- es necesario realizar controles similares a
mitido por las agencias regulatorias hace otras medicaciones.
parte de la autonomía profesional. Aun-
que, es evidente el interés de farmacéu- En el caso de los Militares y fuerzas de
ticas, la presión de medios, el público, y seguridad ¿se utilizarán para combatir
las fallas regulatorias, etc. Causales que mejor, lograr más resultados? O incluso,
llevan a un uso no contemplado o plena- si pensamos en nuestro país, ¿lo usarán
mente consciente, en últimas, a una me- las fuerzas irregulares para ataques más
dicación sin control. Ante ello, surge una exitosos a la población civil?, ¿mejora el
pregunta: ¿Qué estamos tratando? desempeño en actividades ilegales? En el
ámbito de la educación, es necesario que
nos preguntemos por ¿cómo se modifica
¿Es éticamente aceptable la
la relación entre profesores y alumnos?,
68 potenciación cognitiva? ¿buscarán las instituciones posicionarse
No hay nada de abusivo en querer me- en los rankings de buen desempeño en
jorar el desempeño cognitivo, de hecho, las pruebas nacionales e internacionales
actividades que se proponen para ello promocionando o permitiendo su uso?

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Neuroética de los potenciadores cognitivos

Ahora bien, más allá de los usos específi- asuntos de salud y enfermedad mental,
cos y sus posibles consecuencias, si pen- ampliando el campo de acción de las neu-
samos en la población como totalidad, rociencias hacia aspectos de bienestar y
debemos considerar las edades a las que desarrollo no contemplados previamente.
se suministrarán estos potenciadores, el Además, podría conllevar a una banaliza-
rol de los padres y los beneficios para ción de la patología y de la salud, así como
aquellos que han sido diagnosticados la posibilidad de patologizar la vida cotidia-
con algún tipo de deterioro cognitivo. na; si una persona normal puede ser más
inteligente, entonces, la inteligencia normal
Además, entre los campos a considerar, actual sería baja con parámetros de poten-
podemos realizar una similitud del uso de ciación cognitiva; si los compañeros de es-
potenciadores cognitivos y el uso de dro- tudio tienen mejor desempeño académico
gas o sustancias para mejor rendimiento usando potenciadores cognitivos, el des-
en los deportes, con el objetivo de aproxi- empeño promedio se verá como inferior.
marnos a la comprensión del papel ético
de los potenciadores. Hemos de partir que
en los deportes se pretende valorar las Conclusión
capacidades innatas, el entrenamiento,
El uso de potenciadores cognitivos plan-
la estrategia, etc., sin mediar sustancias o
tea para la neuroética aspectos ya evi-
ayudas especiales para el desempeño. Por
denciados en el mito de Prometeo, de la
ejemplo, la federación española de aje-
búsqueda de la razón y del conocimiento,
drez prohíbe dosis altas de cafeína y limita
no libre de contradicciones y peligros, los
la nicotina. Esto nos lleva a preguntarnos
cuales ya se pueden vislumbrar. Los poten-
si el uso de potenciadores cognitivos es
ciadores cognitivos prometen desenlaces
justo, si, no es ello una forma de doping.
deseables, de bienestar y felicidad, pero
Algunos ven en el uso de potenciadores nos alejan de que éstas se basen en un
cognitivos una actividad similar a robar, desarrollo humano a través de la intros-
a obtener fraudulentamente ventaja y pección, el logro personal y la coherencia
lucrarse de ella. Por otra parte, valores de los actos (Hare & Vincent, 2016).
sociales tales como la recompensa al es-
fuerzo personal se minan. ¿Cuál debe ser Quienes se oponen a los potenciadores
la actitud de la sociedad frente a su uso?, cognitivos aducen que hay una diferencia
¿Deben prohibirse, regularse o difundir- moral significativa entre tomar una ayuda
se?, ¿Deben ser considerados compues- psicofarmacológica para conseguir un fin
tos similares a la cafeína, a suplementos diferente al de la potenciación cogniti-
dietarios, o a medicamentos de control? va o, intencionalmente, potenciarse a sí 69
mismo, siendo la primera permisible y la
El uso de potenciadores cognitivos pue- segunda no (Levy, 2011). Dado su campo
de redundar en una mayor inversión en de acción, problemas y forma de análi-

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Ricardo de la Espriella Guerrero

sis, la neuroética por sí misma ofrece la Hare, S. M., & Vincent, N. A. (2016, April).
oportunidad de refinar, e incluso alterar Happiness, Cerebroscopes and Incorri-
gibility: Prospects for Neuroeudaimonia.
dramáticamente las herramientas utiliza-
Bioethics.
das por los bioeticistas (Levy, 2011).
Huber, C. G., & Huber, J. (2009). Epistemo-
logical considerations in neuroimaging
La potenciación cognitiva, y otros asuntos - a crucial prerequisite for neuroethics.
en el campo de la neurotética, tales como Bioethics, 23(6).
medicamentos e intervenciones que alte- Hyman SE. (2011). Cognitive Enhance-
ren la personalidad, comportamiento, y ment: Promises and Perils. Neuron, 69,
moralidad, son áreas de desarrollo sin pp. 595-598
duda interesantes y retadoras, así como Illes, J., & Bird, S. J. (2006). Neuroethics:
la neurobiología de la toma de decisio- a modern concept for ethics in neu-
nes, que pueden aplicarse a campos ta- rosciences. Trends Neurosci. 29 (9),
les como el mercadeo, tiene que ver con pp.511–517.
consideraciones éticas. (Miller, 2008) Levy, N. (2011, March 31). Neuroethics: A
New Way of Doing Ethics. AJOB Neuro-
science, 2(2), pp.3-9.
El público debe involucrarse no solo en
la difusión de la información, el interés y Mehlman, M. J. (2004). Cognition-enhanc-
ing drugs. The Milbank Quarterly, 82(3),
la educación acerca de la neurociencia,
pp.483-506.
también de informar a los científicos de la
Miller, G. (2008, October 10). Bioethic:
traducción de los datos y experimentos de
Students learn, not what, to think about
la investigación en los usos, terapias y po- difficult issues.
líticas (Morein-Zamir & Sahakian, 2009).
Morein-Zamir, S., & Sahakian, B. J. (2009).
Neuroethics and public engagement
training needed for neuroscientists. Trends
Referencias in Cognitive Sciences, 14(2), pp.49-51.
Buller, T. (2006). What can neuroscience Science, 322(5899), pp.186-187.
contribute to ethics? journal of medical
ethics, 32, pp.63–64. Sheridan, K., Zinchenko, E., & Gardner, H.
(2016). Neuroethics in education. In J.
Retrieved 04 12, 2016, from www.jme- Illes, Neuroethics in the 21st Century:
dethics.com. Defining the Issues in Theory, Practice
Buller, T. (2012). Brain, lies, and psychologi- and Policy. Oxford University Press.
cal explanations. In J. Illes, Neuroethics. William S, (2012). Recuperado de
Defonng the issues in theory, practice and https://braintalks.files.wordpress.
policy. Stanford: Oxford University Press. com/2012/04/2012-may-10-cogni-
Chinthapalli, K. (2015). The billion dollar tive-enhancement-by-dr-derryk-smith.
70 business of being smart. BMJ, 351. pdfCognitive
DuVal, G. (2004). Ethics in Psychiatric Re-
search: Study Design Issues. Canadian
Journal of Psychiatry, pp.55-59.

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


La Compañía de Jesús y la renovación de la ciencia española entre los siglos XVI y XVIII

La Compañía de Jesús
y la renovación
de la ciencia española entre
los siglos XVI y XVIII
Jairo Solano Alonso1

Resumen
La Compañía de Jesús desde su origen ha desempeñado un papel de avanzada y progre-
so en el cultivo de la ciencia y en la formación cristiana del hombre. Además del carácter
pionero que condujo a esta comunidad a todos los confines del orbe con su visión de un
cristianismo asociado al mejoramiento de la calidad de vida de los nuevos creyentes, sus
planteles promovieron una coexistencia fructífera de tradición y renovación2 en áreas como
la Medicina, la astronomía, la filosofía natural y el “arte de navegar”, sin cuyo dispositivo
técnico no hubiese sido posible la incorporación de los vastos territorios del Nuevo Mundo
a la cultura universal.

Palabras clave: Compañía de Jesús, cristianismo, tradición y renovación.

Abstract
The Jesus Company since its origins has performed a role of advancement and progress,
in the cultivation of science and Christian education of man. Also, the pioneering cha-

1 Doctor en Historia de América, Universidad Pablo de Olavide, Sevilla, España. Doctor en Ciencias de la
Educación Universidad de Cartagena, Magister en Dirección Universitaria Universidad de los Andes, Magister
en Sociología de la educación, Universidad de Antioquia. Profesor Investigador Invitado CSIC-Universidad
71
de Valencia España. Investigador Emérito de Colciencias, Director Grupo de Estudios Interdisciplinarios
sobre el Caribe, Universidad Simón Bolívar, Barranquilla.
2 Sigo el clásico libro del profesor José María López Piñero “Ciencia y Técnica en la Sociedad española de
los siglos XVI y XVII”.

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Jairo Solano Alonso

racter that led the community to all the ends of the world with its vision associated to a
Christianism, improvement of new believer’s life quality, their campuses promoted a fruitful
coexistence between tradition and renovation in areas as medicine, astronomy, natural
philosophy and “sailing art”, without whose technic device, it wouldn’t be possible the in-
corporation of large territories of the New World to the universal culture.

Key words: Society of Jesus, Christianism, tradition and renewal.

Aún en el epílogo sombrío del siglo XVI como la Compañía de Jesús contribuye-
cuando la península se ve sumida en el ron a la penetración de conocimientos
vórtice de la decadencia científica, fenó- nuevos, particularmente en las disciplinas
meno que se extiende hasta bien avanzado fisicomatemáticas y sus aplicaciones.
el siglo XVII, la comunidad combatió las
tradiciones regresivas y se mantuvo atenta El investigador valenciano Víctor Navarro
a las novedades de pensamiento, espe- Brotóns demuestra que las únicas institu-
cialmente en el campo astronómico - ma- ciones españolas que durante la mayor
temático y náutico El presente trabajo se parte de la centuria mostraron cierta vitali-
orienta a presentar el marco intelectual y dad en los estudios científicos, sobre todo
científico que preside la vinculación de la a través de las cátedras de matemáticas y
Compañía de Jesús a Colombia en 1604 en el marco de la ideología jesuítica, fue-
inscrito en el post renacentismo humanista. ron algunos colegios de la Compañía es-
tablecidos en España, muy especialmente
Serios estudiosos del discurrir de la ciencia “Los Reales Estudios del Colegio Imperial
y la técnica (Navarro, 1996), han puesto de Madrid” y a finales de siglo el Colegio
de manifiesto, el descollante papel de la Jesuíta de Cádiz, el Real Colegio de San-
Compañía, no sólo en la espiritualidad de ta María i San Jaume, el de Nobles de
la península, en el impulso de la exigen- Calatayud y en el de Bilbao, todos ellos
cia académica y el trabajo para la incor- regentados por jesuitas.
poración de las colonias a un horizonte
de pensamiento asociado al cristianismo El carácter internacional que había ad-
incorporando elementos prácticos de ilus- quirido la Compañía permitió el contacto
tración orientados a la conquista de la dig- de sus miembros con sus hermanos de
nidad humana. Se ha solido sostener que otros países de Europa y afincó en Es-
España llegó tarde al punto de partida de paña a profesores extranjeros, por esas
la revolución científica del siglo XVII, por razones los jesuitas fueron el “principal
72 las circunstancias derivadas del forzado modelo para los propósitos de introducir
aislamiento de la Contra -Reforma, la In- en España la nueva ciencia. El Colegio
quisición y la cultura barroca, no obstan- de la Compañía de Jesús en Madrid se
te, esta exclusión coyuntural, instituciones creó hacia 1560, y contó entre sus alum-

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


La Compañía de Jesús y la renovación de la ciencia española entre los siglos XVI y XVIII

nos a Lope de Vega y Quevedo (Navarro, plazar a la Academia de Matemáticas de


1996), después en 1623, Felipe IV, enco- Madrid, que fundara Felipe II en 1582,
mienda a la Compañía el establecimiento desde entonces el cargo de catedrático
de un nivel superior de Studium Generalii y cosmógrafo mayor del reino fue des-
a lo que accedió Viteleschi, el general de empeñado por un jesuita ininterrumpida-
la Comunidad. mente hasta 17673.

En ese propósito renovador se estableció Se ha tratado de explicar la actitud ética


en 1625 un Plan de diecisiete cátedras de la Compañía de Jesús hacia la cien-
que era apoyado y promovido por el in- cia con el concepto de ideología jesuítica,
fluyente ministro Conde Duque de Oliva- así lo expresan J. Harris (1983) y Rivka
res y contaba con estudios de gramática Feldhay4. Esta imagen del conocimiento
latina, pero también incursionaba en la se percibe en las obras impresas y ma-
erudición griega, el hebreo, el caldeo y el nuscritas redactadas por los miembros de
siríaco, así como cronología (Historia cro- la comunidad como las de Juan Eusebio
nológica), súmulas y lógica, filosofía natu- Nieremberg en 1630, naturalista que
ral y metafísica. Se impartían dos cátedras centra su atención en el mundo mineral,
de matemáticas, (Teórica y aplicada), éti- vegetal animal y humano, ademásllegó a
ca, política, económicas, re-militarii e his- manejar información sobre las ideas del
toria natural. Este pensum abierto que era magnetismo de Gilbert, el heliocentrismo
una superación del tradicional Trivium y de Copérnico y las ideas del flujo y el re-
Quadrivium, condujo en ocasiones a la flujo del mar de Galileo. En su Historia
oposición de las otras órdenes religiosas y Naturae maxiemae peregrini introdujo el
de las otras universidades tradicionalistas, jesuita Nieremberg en el ambiente cientí-
especialmente las castellanas. fico europeo el trabajo de Francisco Her-
nández Historia de las plantas de Nueva
A pesar de las controversias planteadas, España que conservan las ilustraciones
el avance y la voluntad de saber irrever- amerindias de las que carece la versión
sible de la Compañía permitió no solo la del italiano de la Academia Lincei, Nardo
reflexión temprana sobre la propuesta de Antonio Recchi.
Copérnico en España que como es sabi-
do violentaba todo el orden aristotélico, Es de destacar que los jesuitas implemen-
sino también contenidos un manejo útil taron para la época la enseñanza de las
de las matemáticas a través del estudio
de “la esfera, astrología, astronomía, as- 3 Cuando sobreviene la injusta expulsión de
trolabio, perspectiva y pronósticos, geo- 4
Carlos III.
Navarro acoge esta tesis de Feldhay “To cover
73
metría, geografía, hidrografía y relojes” more than just the jesuitic educational program,
developing the value structure of the Society, and
(Navarro, 1996, p.17). Los Reales estu-
exploring further the institutional ramifications of
dios de la Compañía llegaron a reem- the Jesuit, image of knowledge”.

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Jairo Solano Alonso

matemáticas “puras” y “mixtas”, en los mentos, además de investigaciones en


distintos colegios de la Compañía dise- óptica y magnetismo dejó manuscritos so-
minados por Europa y América. Uno de bre astronomía y arte militar especialmen-
los profesores de Colegio Imperial, Hugo te preparados para sus clases, además de
Sempilius en su obra De mathematicis una edición de las Cónicas de Apolonio.
disciplinis (1635), sustenta la “dignidad
y utilidad de estas materias e incluye la Entre los profesores de Colegio Imperial
geometría, la óptica, la estática, la mú- se destaca también el jesuita belga Jean
sica, la cosmografía, la geografía, la Charles della Faille, quien además de
hidrografía y los meteoros, así como la las lecciones de matemáticas fue nom-
astrología y los calendarios. brado cosmógrafo mayor por Felipe IV y
se ocupó de avanzar en el estudio de las
Sempilius, es un continuador de otro fases de la luna, la cartografía física, la
miembro de la comunidad el italiano astronomía y la geografía. Su única obra
Giuseppe Biancani, quien reivindicaba Theoremata de centro gravitatis partium
en su De matematicarum natura disertatio circulis et ellipsis (Amberes 1632), es ri-
publicada en Bolonia, el carácter aristo- gurosamente matemática arquimediana y
télico de las matemáticas y la utilidad de mereció el reconocimiento del joven Hu-
estas para el físico. Volviendo a Sempilius ygens (Navarro, 1996). Della Faille dejó
hay que señalar que discutía cuestiones tratados sobre arquitectura, náutica, có-
de la vanguardia de la historia natural: nicas y relojes.
“la solidez de los orbes, el relieve lunar,
las manchas solares, el fuego sublunar, el Si bien hay que reconocer que el exa-
verdadero sistema del mundo y el movi- men que realizaban los jesuitas sobre las
miento planetario aportando los nuevos nuevas ideas y conocimientos estaba per-
descubrimientos y observaciones astronó- meado por los planteamientos de Suárez,
micas de Tycho Brahe, Muñoz, Galileo, Toledo y otros celosos guardianes del or-
Kepler, Scheiner. También menciona los den tradicional, uno de los más impor-
satélites de Júpiter y Saturno y las fases tantes pensadores de la comunidad en el
de Venus”. (Navarro, 1979, p.25) XVII, Sebastián Izquierdo5, emerge como
portavoz del cambio conceptual dentro de
Otro docente de relieve en el Colegio la fe. Izquierdo, además de enseñar en el
imperial fue Claude Richard matemáti- Colegio Imperial, impartió clases de Filo-
co, procedente de los Colegios jesuitas sofía y teología en los colegios jesuíticos
de Toulon y Lyon quien publicó Euclides de Alcalá de Henares y Murcia, en 1659,
74 Elementorum en 1645, una referencia a
Isidoro de Mileto sobre los cinco sólidos 5 Según López Piñero, (1979) y Víctor Navarro
Sebastián Izquierdo era autor del Pharum Scien-
regulares y su inscripción en una esfera
tiarum 1664) que ejerció influencia en Leibniz a
y cuestiones de proporcionalidad de seg- través de Kircher .

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


La Compañía de Jesús y la renovación de la ciencia española entre los siglos XVI y XVIII

publica en Lyon, Pharus scientiarum que donde fue además de profesor, cosmó-
busca con carácter pionero ofrecer una grafo mayor y consejero técnico.
teoría general de la ciencia ó método del
saber científico basado en presupuestos El jesuita Zaragoza, publicó obras di-
epistemológicos cercanos a los plantea- dácticas como Arithmetica Universal (Va-
mientos de Raimundo Lullio. lencia, 1669), Geometría especulativa y
Práctica (Valencia, 1671) y Trigonometría
Según el historiador de la física Víctor (Mallorca, 1672). No obstante sus máxi-
Navarro “Izquierdo ofrece en el Pharus mos aportes están representados por
un tratado de combinatoria con algunas observaciones astronómicas y por su tra-
aportaciones originales que puede consi- bajo Geometria magna in minimis (Toledo
derarse un inmediato antecedente del clá- 1674), donde realiza aportes destacables
sico De arte combinatoria de Leibniz. Otro como el concepto de centro mínimo de
científico que pasó por los claustros jesui- un sistema de puntos similar al centro de
tas y vistió transitoriamente la sotana fue masas en la física, dice Víctor Navarro,
el astrónomo mallorquín José Mut, hom- que este concepto le sirvió de base para
bre universal, historiador, hagiógrafo, ar- construir una teoría geométrica “isomorfa
quitecto militar y matemático, influido por a la de la estática de un sistema de cuer-
la dinámica galileana para el manejo de pos aislados y otras teorías geométricas,
los proyectiles. Corresponsal de los jesui- además de observaciones de cometas,
tas Athanasius Kircher y Giovanni Bautista como la de 1677, considerada pionera
Riccioli, científicos de primera línea, pu- por Cassini y mencionada en el Journal
blicó de Sole alphonsino restituto, (1649) de la Academia de Ciencias de París.
Cometarum Anni MDCLXV (1666) y Ob-
servationes motuum caelestium (1666), Zaragoza, escribe asimismo en el recinto
inscritas en las controversias de vanguar- del Colegio Imperial, su trabajo de ma-
dia astronómica de entonces. yor fondo Esphera en común celeste y
terráquea (Madrid, 1675). Acoge como
Entre los prominentes investigadores je- una hipótesis útil para el cálculo, la teo-
suitas de entonces figuraba José de Zara- ría heliocéntrica condenada entonces por
goza quien después de adquirir el grado la Inquisición, la primera ley de Kepler y
de doctor en teología ingresó en 1651, a la hipótesis elíptica simple de Boulliau-
la Compañía de Jesús en cuyos planteles Ward, al tiempo, sostiene que los movi-
enseñó teología e investigó en matemá- mientos planetarios describen una espiral
ticas y astronomía conjuntamente con el y diserta sobre el magnetismo del sol, el
matemático y músico Felix Falcó, maestro fuego subterráneo. 75
de los científicos renovadores valencia-
nos de finales de siglo XVII. En 1670 en- Otros jesuitas importantes en el siglo XVII,
señaba en el Colegio Imperial de Madrid, vinculados a los Reales Estudios, fueron el

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Jairo Solano Alonso

austríaco Jacobo Kresa, que a la muerte El naturalista y filósofo José de


de Zaragoza ocupa la cátedra de mate- Acosta
máticas en el Colegio Imperial, Hugo de
Omerique autor del Analisys geometri- Aunque vivió y escribió en la última fase
ca (Cádiz 1698) que recibió elogios de del siglo XVI, es preciso destacar la obra
Newton, Jean Francoiss Petrei, el egresa- de un jesuita de la talla del naturalista
do Pedro Hurtado de Mendoza autor del José Acosta, cuya obra Historia natural y
Espejo geográfico (Madrid, 1690). Moral de las Indias (1590) es quizás la
aproximación de mayor altura y coheren-
Se puede concluir con López Piñero que cia conceptual que intenta la interpreta-
“la única institución docente de relieve ción racional y científica de las realidades
fundada en España del siglo XVII. Fueron de Indias aportando conjeturas é hipóte-
los Reales estudios del Colegio Imperial sis con sentido, acerca de sus habitantes
de Madrid”, cuya creación en 1625, se- aborígenes y explicaciones físicas cuestio-
gún el maestro murciano, es una impor- nadoras del aristotelismo escolástico.
tante victoria para la Compañía de Jesús.
La misma organización religiosa, antes de El científico jesuita José Acosta, naturalis-
su expulsión de la hispanidad, desempe- ta y cosmógrafo, egresado de la Univer-
ñó un papel importante en la difusión de sidad de Alcalá, escribe quizás la obra de
técnicas de trabajo en diversas misiones y mayor calado entre los cronistas de Amé-
es notorio su papel en la introducción de rica puesto que a juicio de López Piñero,
la imprenta en América. supera “el nivel meramente descriptivo e
intenta una explicación”,7 el propio Acos-
Hay que resaltar entonces que la Com- ta expresa así su propósito:
pañía de Jesús, se caracterizaba por su
Del Nuevo Mundo e Indias Occidenta-
talante progresista en medio del torbe- les han escrito muchos autores diversos
llino retardatario del siglo XVII6, su ethos libros y relaciones en que dan noticia
era la conjugación de una religiosidad de de las cosas nuevas y extrañas que en
acciones útiles, aún en el marco de un aquellas partes se han descubierto [...]
más hasta ahora no he visto autor que
cristianismo cimentado en la idea de la trate de declarar las causas y razón de
culpa original sustentadora de un anhelo tales novedades y extrañezas de la na-
de redención. turaleza ni que haga discurso o inquisi-
ción en esta parte. (Acosta, 1590)

6 La España del XVII, como bien lo ha demostrado Lo verdaderamente notable en el jesui-


76 López Piñero y lo dice Maravall presentaba un
“espectacular y problemático desajuste de una
ta Acosta consiste en “que realizó dicha
sociedad en cuyo interior se han desarrollado tarea apoyándose en los supuestos de la
fuerzas que la impulsan a cambiar y pugnan
con otras más poderosas cuyo objetivo es la 7 López Piñero, José María Ciencia y Técnica en
conservación“ Citado por Granjel (1978) p. 13. la Sociedad Española de los siglos XVI y XVII.

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


La Compañía de Jesús y la renovación de la ciencia española entre los siglos XVI y XVIII

filosofía natural aristotélica, pero sin so- rencia de Jerarquía eclesiástica aplazó
meterse a la autoridad de Aristóteles ni la institucionalización en el Nuevo Reino
ningún otro clásico”. Sugiere que en los hasta 1602 cuando el rey a instancias
principios de los antiguos podía haber del Arzobispo de Santafé Bartolomé Lobo
“yerro y engaño” y se atiene a la expe- Guerrero, concede la licencia para la ins-
riencia. Esboza originales teorías sobre el tauración del Colegio de la capital virrei-
origen de los indios americanos y sobre la nal, empeño que no se logra hasta 1604
unidad y eventual redondez de la tierra, al mismo tiempo que la comunidad em-
la distribución geográfica de animales y prende la fundación del Colegio de Car-
plantas, la gran diversidad de la flora y tagena de Indias.” (Ybot, 1963, p. 889)
la fauna.

Los jesuitas en el caribe colombiano


La obra de Acosta fue apreciada por
Alexander Von Humboldt y de ella dijo La obra que nos ha servido de fuente do-
el historiador J.H. Elliot: “Hasta que no cumental directa en este trabajo es la del
se publicó en español, en 1590, la gran historiador de la Compañía, el P. Joseph
Historia natural y moral de las Indias de Cassani, escribe en 1741, el texto titula-
José Acosta, no culminó triunfalmente el do: Historia de la Provincia de la Compa-
proceso de integrar al mundo americano ñía de Jesús del Nuevo Reyno de Granada
en el contexto general del pensamiento en la América, Descripción Exacta de sus
europeo, […] la obra de Acosta es la cul- Gloriosas misiones en el Reyno, Llanos,
minación de un siglo de esfuerzo” J.H. Meta y Orinoco, almas y terreno que han
Elliot (citado en López, p.295) conquistado sus misioneros para Dios
(1741), que si bien se desenvuelve en los
linderos de la historia institucional de la
La Compañía de Jesús en América comunidad, aporta elementos relativos a
Los seguidores de Ignacio de Loyola ha- Cartagena de Indias en el siglo XVII y en
bían llegado a América Meridional en el particular a las acciones que allí adelan-
siglo XVI, emprendiendo trabajos en Lima taron los PP. Alonso Sandoval y el catalán
que era su centro provincial. Su vincula- Pedro Claver.
ción al Nuevo Reino de Granada data de
1589, a través de los PP. Francisco de Vic- Joseph Cassani, era “un insigne jesui-
toria y Antonio Linero y un hermano coad- ta de múltiples talentos, varia y extensa
jutor, Juan Martínez, gran arquitecto, que cultura y espíritu abierto a las corrientes
le habían acompañado llegan a Cartagena científicas del siglo XVIII en que vivió.
como escala para trasladarse a Bogotá. Astrónomo, Físico, ingeniero militar, lin- 77
güista, hagiógrafo e historiador, acudió
Después de muchas vicisitudes y a pesar a los más diversos y dispares campos de
de los empeños de la Compañía, la ca- la Ciencia y en todos ellos obtuvo frutos

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Jairo Solano Alonso

de notorio relieve, fue uno de los ocho guna ostentación, pero de bastante
primeros miembros con que Felipe V, fun- capacidad, bendíjola el señor obispo
y al punto se empezó a dar a conocer
dó en 1731, la Real Academia Española” la Compañía por sus ministerios. Púso-
(Ybot, 1963, p.852). Trabajó Cassani en se cátedra pública de Gramática para
la confección del Diccionario de esa Real criar la juventud y enseñar a los niños
institución, y particularmente en la deter- de los indios, la doctrina cristiana. Sa-
lían a buscarlos por las calles y en las
minación del sentido de las matemáticas plazas los días de fiesta. También eran
y la heráldica. Fue Provincial de la Com- objeto de atención los Esclavos negros:
pañía en el Nuevo Reino de Granada. “Y era delicia ver aquellos bozales, tan
bien instruidos y que en una plaza pú-
blica decían la doctrina, como pudiera
La historia de los Jesuitas en Cartagena un español criado en la culta policía de
que va a formar parte de la provincia nuestra Europa.
neogranadina segregada de Lima, se ini-
cia así según Cassani: Además del exalumno portugués, el
Obispo Fray Juan de Ladrada, fue fun-
Al mismo tiempo que en Santa Fé, pues
damental para la instauración del cole-
era el año de 1604, aportó por casua-
lidad desde Europa y desembarcó en gio jesuita de Cartagena que se fundó
Cartagena una misión de la compañía paralelamente al Colegio de San Barto-
que iba de recluta a toda América. Juz- lomé de Bogotá. Esta obra de la compa-
gó el Superior que sería conveniente
ñía desempeñó la función de formación
dejar en aquel puerto algunos jesui-
tas, pues siendo la puerta principal ó de las juventudes de Cartagena, Santa
la escala para entrar y penetrar a todo Marta y Panamá, hasta 1767 cuando se
el Reyno será ventaja tenerla siempre produjo la absurda expulsión de esta pro-
abierta. Con éste ánimo se dejó en
gresista comunidad. Hay que acotar que
Cartagena a los PP. Francisco Perlín,
que luego tomó el oficio de Superior y los Jesuitas también fundan un colegio en
el padre Hernando Núñez que sucedió Mompox en 1643, que será el embrión
al P. Perlín. (1741, p.330) de la efímera Universidad Pontifi­cia San
Pedro Apóstol de esa Villa y del legenda-
Cassani en su importante trabajo brinda rio Colegio Pinillos (Cassani, 1741).
los pormenores de la adquisición del Co-
legio de Cartagena: Además del tema educativo el P. Joseph
Cassani ensalza la labor del P. Alonso
Estaba en venta una casa de un merca-
Sandoval que se desarrolla esencialmen-
der lusitano, exalumno de la Compañía
en Evora, como faltaban $2000, para te con los esclavos africanos que llega-
la negociación se le solicita un pres- ban en las Flotas de los mercaderes de
78 tamo y este responde: “Si para pagar la ignominia racial y aborda, aparte de
han de pedir ya me la han pedido a
la actitud de compromiso de piedad y del
mi”...”Con ésta limosna se formó de
unas salas bajas de la casa, unidas y frenesí bautismal, la primera semblanza
desembarazadas, una iglesia de nin- antropológica de los negros de “nación.”

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


La Compañía de Jesús y la renovación de la ciencia española entre los siglos XVI y XVIII

El trabajo de Alonso de Sandoval se pue- cribe con minuciosa prolijidad la actua-


de considerar fundacional en una de las ción de los dos clérigos y a partir de su
disciplinas que más se desarrolló en el narración podemos extraer referencias a
Caribe colombiano que fueron las Cien- la salud de los esclavos, las endemias y
cias Sociales. Podría decirse que el primer epidemias de la urbe fortificada, no sin
estudio etnográfico del país se escribió trasladar a su versión, su interpretación
en Cartagena, por parte del sacerdote axiológica.
Sandoval quien lo tituló: De Instauranda
æthiopum Salute, que constituye según el Otra de las figuras cimeras que de la
antropólogo Eduardo Restrepo una de las Compañía que en el siglo XVIII, se des-
fuentes más tempranas y sistemáticas en plazó al Nuevo Reino de Granada, es el
los estudios de los afrodescendientes en Padre valenciano José Gumilla cuya obra
las Américas. El Orinoco Ilustrado y Defendido, Historia
Natural civil y geographica de este gran
Alonso de Sandoval quien publica su Río y de sus caudalosas vertientes, govier-
obra en 1627, es realmente el ideólogo no usos y costumbres de los Indios (1745)
que moviliza la acción bautismal empren- es una de las monografías mejor logradas
dida por Pedro Claver, conocido como el sobre una región geográfica que aporta
Apóstol de los negros, con un criterio de importante información y ensaya hipóte-
restauración y reparación religiosa de los sis sobre diversidad de temas reiterativos
infieles africanos conocidos como bo- de la época, el relativo al origen de las
zales, a quienes habría de conducirlos, tres razas comprometidas en la coloniza-
según su criterio a la salvación mediante ción de América.
el bautismo católico, lo que equivalía a
reconocer su condición humana desco- Gumilla escribió muy seguramente su fa-
nocida hasta entonces. Pedro Claver, por moso libro que sirviera de obra de ca-
su parte, manteniendo idénticos móviles becera al economista inglés Adam Smith,
caritativos lleva hasta el extremo su minis- en Cartagena pues en el marco de una
terio al punto de ser llamado “El esclavo observación científica, señala que
de los esclavos”.
En el Año de 1738, estando a mi cargo
Al tema del P. Pedro Claver dedicamos un el Colegio de la Compañía de Jesús,
que la Provincia del Nuevo Reyno de
capítulo en nuestro libro Salud, Cultura y
Granada tiene en Cartagena de Indias,
Sociedad en Cartagena de Indias donde salí a una Enfermería, sólo pared de
destacamos la labor de este sacrificado por medio separada de dicho Colegio,
taumaturgo, también hemos dedicado a visitar a los sirvientes enfermos, que 79
se traen de la hacienda para recobrar
atención a Alonso de Sandoval en el tra-
la salud, hallé entre otros a una negra
bajo Ciencia y saberes en Cartagena de casada que en el contesto de su en-
Indias y el Gran Caribe. El P. Cassani des- fermedad, añadió que no consiguió la

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


Jairo Solano Alonso

mejoría que le había pronosticado el muy adelantado y hasta incomprendido


Médico, en la resulta de su parto, había en la época.
tenido una niña albina.

La obra de Gumilla expresamente es tanto Referencias


una observación minuciosa premonitoria
Acosta, Josef de, S. J. (1590) Historia Na-
de la antropología descriptiva una impor- tural y Moral de las Indias, Sevilla: Im-
tante pieza de historia natural antecedente prenta de Juan León.
de la biología y la materia médica porque Acosta, José de (1604) The natural and
además de los habitadores de la cuenca moral historie of the East and West In-
del Orinoco centra su atención en “nue- dies, traducción de Edward Grimstone,
vas y útiles noticias de animales arboles Londres.
frutos, aceytes, resinas, yervas y raices Cassani, Joseph (1741). Historia de la
medicinales”. No descuida, por supuesto Provincia de la Compañía de Jesús del
su misión pastoral “ad maiorem dei glo- Nuevo Reino de Granada en la Amé-
rica, y relación exacta de sus gloriosas
riam”, premisa axiológica de los jesuitas, y
misiones en el Reino, Llanos, Meta, y rio
anuncia que en su libro se “hallaran con- Orinoco. Madrid: Manuel Fernández.
versiones muy singulares a Nuestra santa
Ceñal, R. (1942) El P. Sebastián Izquierdo S.
fe y casos de mucha edificación”. J. (1601-81) y su “Pharus Scientiarum”,
Rey, de Filosofía, (1), pp.127-154.
Hay que señalar que las comunidades re- Granjel, L. (1978). La Medicina Española
ligiosas en la conquista y la colonización del siglo XVII. Salamanca: Universidad
de América tuvieron también una división de Salamanca.
del trabajo, de una parte estaba, el per- Gumilla, J. (1745). El Orinoco Ilustrado y
sonal misionero ó de “Doctrina” dedica- defendido Historia Natural, Civil y geo-
do al trabajo de comunidad, es el caso graphica deste gran Río y de sus cau-
dalosas vertientes,Govierno y usos y
de Claver y su apostolado con los negros,
costumbres de los indios sus habitado-
y de otro lado los ilustrados ó intelectua- res, con nuevas y utiles noticias de ani-
les que en el caso de los jesuitas se orien- males, arboles, frutos aceytes, resinas,
taron a la Gramática, la Historia Natural, yervas y raices medicinales; y sobre todo
las matemáticas, los estudios astronómi- se hallarán conversiones muy singulares
a nuestra santa fé y casos de mucha edi-
cos, y la medicina. En esa lógica también
ficación, por el P...de la Compañía de
se fundaron los Colegios de la Compañía Jesús Misionero y Superior de las misio-
cuyo propósito era la formación de éli- nes del Orinoco, Meta y Casanare, cali-
tes. Otro era el sentido de las misiones ficador y consultor del Santo Tribunal de
indígenas del Orinoco, Meta y Casanare la Inquisición de Cartagena de Indias y
80 examinador synodal del mismo Obispa-
orientadas a la producción y formación
do, Madrid:r Manuel Fernández.
integral de los indígenas con un revolu-
cionario sistema de trabajo comunitario, Harris, Seven J. (1983). Transposing the
Merton thesis: Apostolic Spiritually and

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017


La Compañía de Jesús y la renovación de la ciencia española entre los siglos XVI y XVIII

the establishment of the jesuitical scien- ca. Bogotá, Biblioteca de la Presidencia


tific tradition, Science in context, (3). de Colombia. Sandoval Alonso de, S. J.
Izquierdo, S. (1659). Pharus Scientiarum 1647. De Instauranda Æthiopum Salute.
ubi quidquid ad cognitionem humanam Historia de Ætiopia, naturaleza, Policía
acquisibilem perlinet... verae Encyclo- sagrada y profana, constumbres, ritos
paediae Orbis facile a cunctis circun- y catechismo evangélico, de todos los
volvendus, eximio scientiarum omnium ætíopes con que se restaura la salud de
emolumento, manet expositus (Lugduni). sus almas, Madrid.

López Piñero, J.M. (1979) Ciencia y técnica Splendiani, Anna María. (2000). Un jesuita
en la sociedad española de los siglos y una ciudad: Pedro Claver y Cartagena
XVI y XVII, Barcelona: Labor. de Indias» 2 Tomos. Informe a la Funda-
ción para la Promoción de la Investiga-
López Piñero, J. M. (1969). Introducción de ción y la Tecnología. Bogotá.
la ciencia moderna en España, Barcelo-
na, España. Solano Alonso, Jairo (1998). Salud, Cultu-
ra y Sociedad en Cartagena de Indias,
López Piñero, J. M. y otros. (1976). Mate- Siglos XVI y XVII, Barranquilla: Universi-
riales para la Historia de las Ciencias en dad del Atlántico.
España: siglos XVI-XVII, Valencia.
Solano Alonso, J. (2005). El Arte de Curar
Navarro Brotóns, V. (1996). Los jesuítas y la en el Caribe Colombiano, Ediciones
Renovación Científica en la España del Universidad Simón Bolívar.
siglo XVII. Studia Historica, Universidad
de Salamanca: Separata. Valtierra, Angel. (1956). «El padre Alonso
de Sandoval, S.J.» Prefacio a P Alonso
Nieremberg, Eusebio, J., S.J. (1644). Curio- de Sandoval, S. J. 1956 1627 De Instau-
sa filosofía y Tesoro de las maravillas de randa aethiopum salute. El mundo de la
la naturaleza”, Por el Padre Juan Anto- esclavitud negra en América. Bogotá: Bi-
nio Nieremberg de la Compañía de Je- blioteca de la Presidencia de Colombia.
sús, Barcelona, Por Pedro Lacavallería.
Vila Vilar, E. (1987). «Introducción» En:
Restrepo E. (2005). De instauranda æthio- Alonso de Sandoval, Un tratado sobre
pum salute, Sobre las ediciones y ca- la esclavitud.
racterísticas de la obra de Alonso de
Sandoval, Tabula Rasa, (3), pp.13-26. Ybot, León, Antonio. (1963). La Iglesia y los
eclesiásticos Españoles en la Empresa
Sandoval, Alonso de S. J. (1956). [1627] de Indias.
De Instauranda aethiopum salute. El
mundo de la esclavitud negra en Améri-

81

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 12, julio - diciembre 2017

También podría gustarte