Modos de reificación de universales según Quine

Dentro de la matemática podemos aceptar entidades universales, tales como clases, de alguna
forma, adoptando una de tres posiciones ontológicas:

Realista o logicista: tenencia a aceptar entidades que existen independientemente de la

mente humana, ella puede descubrirlos pero no crearlos, permitiendo usar variables
ligadas para referirse indiscriminadamente a entidades especificadas e inespecificadas.
Aceptando ordenes de infinitud ascendentes de Cantor.

Conceptualismo o intuicionismo: aceptar la existencia de universales que son creados

por la mente humana, siempre y cuando tales entidades puedan ser elaboradas a partir
de ingredientes específicos. Limitándose al orden inferior de infinitud, abandonando
una parte de la matemática clásica.

Formalismo: se rehúsa a aceptar universales de forma realista a la vez que admite que el
conceptualismo desecha gran parte de la matemática clásica. Por su parte, el formalista
concibe la matemática como un juego de notaciones no significantes.

De la forma realista o platónica

Teniendo en cuenta que la lógica puede dividirse en tres grandes grupos: lógica de funciones
veritativas, lógica cuantificacional y lógica de clases (Quine, 1937). Construimos la lógica
cuantificacional haciendo uso del sistema creado1 por nuestro autor en Nueva fundamentación de
la lógica matemática (1937), compuesto por las reglas R1, R2, R4 y R5, las definiciones D1 – 6, el
principio de que todas las ocurrencias de una letra predicativa seguida de variables pueden
sustituirse por cualquier otra condición puesta a esas variables, y el principio de generalización
existencial (no hay necesidad de incluirlos, dado que pueden ser reemplazados por aplicaciones
de los axiomas)2. Luego derivamos de ella la teoría de clases otorgando a las letras predicativas
tales como ‘F’, ‘G’, etcétera, los privilegios dados a variables tales como ‘x’, ‘y’, etcétera. El
proceso es el siguiente:

1
1 En el mismo ensayo de Quine (1937), se ofrece una justificación detallada de por qué preferir este
sistema en comparación con otros, como el de Zermelo o el de von Newmann.
2
La consistencia de este sistema fue demostrada por Hao Wang.
1. De los axiomas obtenemos válidamente el esquema ‘(y) (Gy ≡ Gy)’, como un teorema.

2. Como decidimos conceder a ‘F’ y ‘G’ los privilegios de las variables comunes, aplicamos
generalización existencial al esquema anterior, obteniendo: ‘(∃ F ¿( y )( Fy ≡Gy)' .

3. Por sustitución obtenemos ‘(∃ F ¿( y )(Fy ≡φ)’, siendo φ cualquier condición que queramos
imponer a y.

Se puede observar que ‘F’ cobra el estatus de una variable que toma clases como valores, y la
expresión ‘Fy’ quiere decir que y es miembro de la clase F, que es identificable con R3:

( ∃ x ) ( y ) ( ( y ∈ x ) ≡φ ).3 Ahora, como resultado de esto y del teorema de Cantor, que puede
formularse dentro de la teoría de cuantificación propuesta, se deduce como corolario 4 que
deben haber clases. No obstante, concebir las clases de esta forma puede conducir a la paradoja
de Russell, pero no la rechazamos del todo acepando la teoría con la restricción que Quine
impone a R3, transformado en R3’ (Quine, 1937). Pese a establecer dentro del formalismo clases
representadas por variables predicativas, existen universales presupuestos mediante la ligadura
de variables predicativas, presupuestos ante los que no se puede objetar que correspondan a
abreviación notacional: Frege mostró que los números son definibles como clases de clases, las
relaciones también lo son; y Peano mostró que las funciones son relaciones. En Principia
mathematica, Russell pretende eliminar la apelación a tales entidades mediante el uso ‘funciones
proposicionales’, pero lo que se logra con esto no es más que usar unas entidades universales en
lugar de otras.

En esta concepción platonista se engendra una cantidad inconmensurable de entidades, y con

ello surge la necesidad de introducir restricciones ad hoc que nos salven de paradojas.

3
Se puede ver que reemplazamos x por F, por el permiso de otorgar privilegios de variables comunes a
variables predicativas.
4
Entiéndase corolario como consecuencia evidente de uno o más teorema.
De la forma conceptualista