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ANAMNESIS Revista de Bioética Número 11, Enero-junio 201

ANAMNESIS
Revista de Bioética
ISSN 2011-1258
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A N A M N E S I S
Revista de bioética
Número 11, Enero - Junio 2016
Director y editor
ISSN 2011-1258
Eduardo Díaz Amado

Grupo de investigación en
Bioética
Eduardo A. Rueda Barrera Contenido
Jairo Clavijo Poveda
Editorial
José E. Cuéllar Saavedra
Latinoamérica y la agenda de la bioética
Eduardo Díaz Amado global
Hugo Escobar Melo Eduardo Díaz Amado ....................................... 3

Javier A. González Cortés Humanización en cuidado paliativo: una


Edgar A. López López solución a la futilidad terapéutica
Virginia Cuevas Rivero ..................................... 5
Edilma M. Suárez Castro
Esteban Rossi Abordaje bioético del tratamiento de
Fernándo Suárez Obando toxicomanías: Un análisis de la singularidad
en situación a partir de la narrativa
Efraín Méndez Castillo
cinematográfica
Liliam Torregrosa Paula Paragis
Nelsón Castañeda Alarcón Irene Cambra Badii ........................................ 15

Opciones dignas esperanzadoras frente al


dolor, el sufrimiento
Con el apoyo de: y el final de vida
Nora H. Riani-Llano ......................................... 33
Instituto de Bioética,
Facultad de Medicina,
Ambientalismo moderno o Ecomodernismo:
Pontificia Universidad Javeriana.
Una visión pragmática de los problemas
ambientales
Esteban Rossi................................................. 41

Diagramación, El uso de animales y la simulación clínica:


CTP e Impresión un modelo diferente de educación en
Fundación Cultural Javeriana medicina
de Artes Gráficas –JAVEGRAF– Diana Carolina Estrada Cano ......................... 53
Bogotá, DC., Colombia.
EDITORIAL

EDITORIAL
LATINOAMÉRICA Y LA AGENDA DE LA
BIOÉTICA GLOBAL
Eduardo Díaz Amado

El tema del congreso mundial de la Aso- sos lugares del planeta, y que se dedican
ciación Internacional de Bioética este a la investigación, docencia y debate en
año, hacia mediados de junio, y que se bioética, compartieron sus trabajos. Fue
llevó a cabo en Edimburgo (Escocia), fue también la oportunidad para que aca-
“Individuos, intereses públicos y bienes démicos jóvenes o recién graduados,
públicos, ¿cuál es la contribución de la escucharan y compartieran con conno-
bióetica?”. La apuesta fue intercambiar tados intelectuales y pensadores que han
perspectivas, análisis y opiniones, dentro hecho contribuciones importantes en el
de la amplia gama de temas y problemas campo, como Alastair Campbell, la Ba-
que aborda la bioética, sobre la manera ronesa Onora O’Neill, Roger Baker o Eric
como las relaciones individuos/sociedad Juengst, por citar solo algunos.
se construyen y se pueden mejorar, en
particular en un contexto de grandes re- Vale la pena recalcar que esta vez la Red
tos socio-políticos y culturales, así como Iberoamericana de Bioética contó con
de permanente avance tecno-científico su propio espacio, para que quienes tra-
que conlleva la transformación de todos bajan en esta parte del mundo pudieran
los ámbitos de la experiencia humana. presentar sus trabajos en su idioma nati-
vo, español o portugués, constituyéndose
En un ambiente pluralista y multicultural, en un escenario de camaradería y “toque
personas provenientes de los más diver- latino” en medio de la sobriedad escoce- 3

1 Profesor Asociado. Instituto de Bioética, Pontificia Universidad Javeriana. Correo electrónico: eduardo.
diaz@javeriana.edu.co

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EDITORIAL

sa. Fue interesante ver que en Iberoamé- blico/privado, ¿un reto para la bioética”.
rica quienes trabajan en bioética están El ambiente de intercambio académico
abordando temas variados, complejos y que propiciaba este congreso fue impor-
de impacto en la región. Como suele su- tante para comprender algunos de los te-
ceder con propuestas que provienen más mas en los que la bioética en Colombia
de los márgenes y escenarios no anglo- debe seguir trabajando: salud pública y
parlantes, la perspectiva iberoamericana equidad en salud, aspectos normativos
hizo énfasis en los problemas del desarro- relacionados con la ética de la investi-
llo, de justicia, los derechos y la salud pú- gación en seres humanos, mejoramiento
blica. De hecho, siguiendo esta línea, el humano, nuevas tecnologías biomédicas
siguiente congreso en Nueva Delhi, India, y su impacto, entre otros. Pero sobre todo,
en 2018, tiene como tema central “Salud la necesidad de repensar el rol, los alcan-
para todos en un mundo desigual: Obli- ces y los límites de la bioética en nuestro
gaciones de la bioética global”, lo que presente. Es claro que a casi 50 años de
plantea el gran reto de lograr la realiza- su surgimiento, cuando ya la bioética se
ción de la justicia en uno de los campos ha institucionalizado y ha dejado de ser
donde más sufren las personas hoy por un campo exótico o desconocido, se re-
hoy en gran parte del planeta, en particu- quiere reflexionar sobre sus fundamentos
lar en los países de más bajos ingresos: la y retos. En particular en nuestro país don-
atención en salud. de ya existen muchos programas y cursos
a diferentes niveles, publicaciones y es-
La participación del Instituto de Bioética cenarios para el debate y el intercambio
en el congreso de este año fue satisfac- académico. Mención especial merece la
toria; dos de sus profesores tuvieron a su pregunta por el rol de la bioética en los
cargo sendas presentaciones orales: Este- tiempos de pos-acuerdo que se aveci-
ban Rossi con “The proactionary principle nan… Una tarea inescapable para quie-
in environmental ethics” y Eduardo Díaz nes creemos en la vocación incluyente,
Amado con “Historia de la eutanasia en crítica, emancipadora y democrática de
Colombia y la reconfiguración de lo pú- la bioética.

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HUMANIZACIÓN EN CUIDADO PALIATIVO: UNA SOLUCIÓN A LA FUTILIDAD TERAPÉUTICA

HUMANIZACIÓN EN CUIDADO
PALIATIVO: UNA SOLUCIÓN A LA
FUTILIDAD TERAPÉUTICA
Virginia Cuevas Rivero1

Resumen
El Cuidado Paliativo (CP) es un escenario reconocido en el mundo actual, es una necesidad
que se fundamenta en el aumento de la esperanza de vida, con el consecuente incremen-
to del envejecimiento poblacional, y mayor prevalencia de las enfermedades crónicas y
terminales. Este CP, está dirigido hacia una población que presenta enfermedades de tipo
terminal, entidades que promueven un estado de vulnerabilidad en términos físicos, sociales
y psicológicos a quienes las padecen. Pese a la importancia de este tipo de cuidado, la evi-
dencia señala que la asistencia de personas con enfermedades terminales es inadecuada,
y que hay factores causantes determinantes para que esto se haya producido. Uno de estos
elementos es la futilidad terapéutica, la cual se presenta cuando el médico no reconoce que
la vida tiene límites, y que ciertos manejos terapéuticos atentan contra la autonomía y la
dignidad de los seres humanos. Realmente, más allá de evitar la muerte, las medidas útiles
se encaminan a proveer calidad de vida a los que sobreviven, y calidad de muerte a los que
mueren. Por lo anterior, la asistencia paliativa debe optimizarse, promover el bienestar al
final de la vida y evitar medidas fútiles.

Palabras clave: Cuidado Paliativo, enfermedades terminales, futilidad terapéutica, final


de la vida.

1 Médica, Universidad de los Andes. Máster en Bioética, Instituto de Bioética, Pontificia Universidad Javeriana.
Bogotá, Colombia. Correo electrónico: vicurivero@hotmail.com

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VIRGINIA CUEVAS RIVERO

Abstract
At present, Palliative Care (PC) is a worldwide recognized stage, it is a necessity that is based
on the increase in life expectancy, with the consequent rise in the population aging, and a
higher prevalence of chronic and terminal illnesses. This CP, is directed toward a population
with terminal diseases, entities that promote a vulnerability state in physical, social and psy-
chological terms. Despite the importance of this type of care, the evidence shows that the
assistance of people with terminal illnesses is unsuitable, and that exist determining factors
causing this. One of these elements is the therapeutic futility, which occurs when the medical
doctor does not recognize that life has limits, and that certain therapeutic approaches put in
risk the autonomy and dignity of human beings. Actually, beyond avoiding death, the useful
measures must aim to provide quality of life to those who survive, and quality of death to
those who die. Therefore, the palliative assistance should be optimized, promote wellness at
the end of life and avoid futile measures.

Key words: Palliative Care, terminal illnesses, therapeutic futility, end of life.

Introducción que exista un enfoque de tratamiento de


acuerdo a sus propias necesidades y po-
Los reportes mundiales señalan que el sibles complicaciones. La investigación
perfil epidemiológico en salud se encuen- de Fitzsimons et al. (2007) apoyada en
tra en proceso de transición. La incorpo- testimonios de pacientes, fundamenta
ración de estilos de vida saludables, el insuficiencias e inquietudes físicas, emo-
aumento en la expectativa de vida, los cionales y sociales dentro del tratamien-
avances en el diagnóstico y tratamien- to médico que reciben las personas que
to de enfermedades infecciosas, entre padecen una enfermedad terminal. Otros
otros, han hecho que las enfermedades estudios citados muestran que la atención
crónicas y degenerativas como el cáncer, en salud al final de la vida de aquellos
ocupen en el mundo los primeros luga- con este tipo de entidades es subóptima,
res de morbilidad y mortalidad (Restrepo, y que la investigación en necesidades es-
2005). Para el año 2004 se afirmaba pecíficas para este tipo de población es
que, de los 58 millones de personas que limitada (Fitzsimons et al., 2007).
morían anualmente, al menos un 60% lo
hacían en la fase avanzada de una enfer- Al tratarse del final de la vida, cuando las
medad prolongada y, lamentablemente, enfermedades progresan, las intenciones
sin una atención adecuada a su condi- de los médicos se apoyan en la super-
ción (Sarmiento-Medina, 2011). posición de nuevos experimentos o trata-
6 mientos tecnificados que puedan precisar
Mundialmente los pacientes con enfer- diagnósticos o complicaciones de la en-
medades terminales son cada vez más fermedad, y a su vez, se instauran pro-
en términos numéricos, y es necesario cedimientos terapéuticos más agresivos,
HUMANIZACIÓN EN CUIDADO PALIATIVO: UNA SOLUCIÓN A LA FUTILIDAD TERAPÉUTICA

con el fin de evitar la muerte. Cuando ma calidad de vida posible para el paciente y
esto sucede, se presenta un momento en su familia (p.1).
el que “tanto el paciente como el médico
Esta declaración, comprende términos rele-
se preguntan hasta qué punto es conve-
vantes como el de atención activa y completa,
niente seguir adelante” (Mendoza, 2008,
pues no se trata de asistir a una enfermedad,
p.27). Es en estos instantes cuando vale
sino a un ser humano que presenta una en-
la pena aclarar si existe futilidad dentro
fermedad. En este sentido, la asistencia pa-
de esas intervenciones.
liativa es la atención integral y activa de las
personas con afecciones terminales y de sus
La futilidad en medicina implica una esti-
familiares, por parte de un equipo multidis-
mación completa de un escenario, en el
ciplinario, cuando ya se sabe que el enfer-
que existe alguien en una condición de-
mo no va a responder a tratamiento curativo
terminada, y las decisiones que se tomen
(Keeley y Noble, 2011).
con respecto a él o ella deben mejorar
su calidad de vida, ofrecerle bienestar y Desde el punto de vista médico y ético, la
deben ser útiles para cumplir con estos meta de la atención de aquel con una en-
propósitos. El objetivo de este trabajo es fermedad terminal consiste en conseguir el
demostrar que las personas bajo un CP, mayor bienestar físico y mental posible, aso-
ameritan una atención multidisciplinaria y ciado al deber de respetar su dignidad y au-
humanizada que evite la futilidad. tonomía. Por ello, el médico se ve expuesto a
una serie de decisiones que reclaman una re-
A continuación, se hablará sobre el cui- flexión en cuanto a los medios utilizados, las
dado paliativo, se abordarán ideas clave consecuencias y los fines (Sarmiento-Medina,
de la legislación colombiana, y finalmen- 2011). Esto indica que no solo se trata de
te se abordará el tema de la futilidad te- protocolos y generalizaciones, sino de seguir
rapéutica y cómo puede solucionarse a unas pautas establecidas que se apliquen a
través de la humanización de los actos cada paciente de acuerdo a su situación en
médicos. particular. “El cuidado paliativo destaca la
dignidad del ser humano que sufre, y atiende
Generalidades del Cuidado Paliativo
sus diferentes dimensiones a través de equi-
La OMS (2016) define el cuidado palia- pos terapéuticos interdisciplinarios y especia-
tivo así: lizados” (Restrepo, 2005, p.6).

Cuidado activo e integral de pacientes cuya La experiencia permite decir que el aprendi-
enfermedad no responde a terapéuticas cu- zaje sobre la muerte y sobre los momentos
rativas. Su fundamento es el alivio del dolor y previos a que esta ocurra es algo que se da a 7
otros síntomas acompañantes y la considera- lo largo de la vida. Es difícil “estar preparado
ción de los problemas psicológicos, sociales 100%” para la muerte, tanto para la propia
y espirituales. El objetivo es alcanzar la máxi- como para la de los seres queridos, o en el

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VIRGINIA CUEVAS RIVERO

caso médico, para la muerte de los enfermos. Por su parte, el médico no deberá ha-
A pesar de ello, se sabe claramente que la cer todo solo. Para proveer una atención
muerte es algo que puede suceder en cual- completa y efectiva, el apoyo psicosocial
quier momento y puede acontecerle a cual- y el trabajo en equipo son funciones com-
quier ser humano. plementarias al tratamiento terapéutico.

Por esto, sobresaliente es en este sentido, El cuidado paliativo en Colombia


la existencia de una atención en salud El origen de esta rama de la medicina
de tipo paliativo que evita el sufrimien- en Colombia se remonta a la década de
to, malestar y dolor de quienes padecen 1980, siendo fundada en Medellín la pri-
una enfermedad terminal, brindándoles mera clínica de alivio del dolor y cuida-
apoyo integral y acompañamiento hasta dos paliativos (Pastrana, De Lima, Pons, y
el final de sus vidas. Teniendo en cuenta Centeno, 2013). Desde el punto de vis-
lo comentado, se trataría de “preparar” ta educativo, se instituyó la especialidad
al paciente, a su familia y al equipo como médica en Cuidados Paliativos en 1995
tal, para afrontar y esperar la muerte de en el Instituto Nacional de Cancerología.
la manera más cálida y digna posible.
Para el 2010, los estudios señalaban que
De este modo, el médico frente a alguien varios de los que presentaban una en-
con una enfermedad terminal tiene varias fermedad en fase terminal en Colombia
funciones (Tealdi, 2008). En primer lugar, eran atendidos de manera inadecuada
se deben controlar el dolor y otros sín- (Moyano, Zambrano, Mayungo, 2010).
tomas que afecten el bienestar, la meta Esto se explicó al observar una respuesta
es el confort de la persona atendida y ineficiente a las necesidades de los indi-
una vigilancia y suplencia estricta indivi- viduos, como el alivio de sus síntomas,
dualizada de sus necesidades. Segundo, el bajo o incorrecto uso de los medica-
debe existir una comunicación adecuada, mentos básicos de la medicina paliativa,
ya que no corresponde a un diagnósti- la realización de tratamientos fútiles y la
co común de decisiones únicas, rápidas falta de asistencia de los aspectos biop-
o cómodas, sino que tiene implicacio- sicosociales de cada persona de modo
nes vitales. Una enfermedad terminal es multidisciplinario.
un dictamen que tiene un determinado
pronóstico, que tiene un tratamiento no En el 2014, se decretó la ley 1733 lla-
curativo pero si paliativo, y que debe ser mada Ley Consuelo Devis Saavedra “me-
conocido y entendido por el enfermo y su diante la cual se regulan los servicios
8 familia, permitiendo una aceptación de de cuidados paliativos para el manejo
ello y una entera confianza en términos integral de pacientes con enfermedades
de apoyo y solución de dudas. terminales, crónicas, degenerativas e irre-
HUMANIZACIÓN EN CUIDADO PALIATIVO: UNA SOLUCIÓN A LA FUTILIDAD TERAPÉUTICA

versibles en cualquier fase de la enfer- estipula la distribución las 24 horas del


medad de alto impacto en la calidad de día, los siete días de la semana, la acce-
vida” (Gaviria, 2014, p.1). En esta ley se sibilidad y disponibilidad de los medica-
reglamenta el derecho que tienen los in- mentos opioides.
dividuos a la atención en medicina palia-
tiva, lo cual pretende mejorar su calidad Es muy pronto para establecer estadísti-
de vida y la de sus familias. camente la adecuada implementación y
cumplimiento de la ley de 2014. Hasta
Para su fundamento, la ley define los tér- el momento no hay estudios que den res-
minos de: “enfermo en fase terminal”, puesta a esta inquietud. Lo importante es
“enfermedad crónica, degenerativa e irre- que ya se priorizó este tipo de asistencia
versible de alto impacto en la calidad de dentro del Plan Obligatorio de Salud de
vida”, y “cuidados paliativos”. También, Colombia, y debe ejercerse de acuerdo a
describe los derechos de los individuos los estándares implantados.
con este tipo de enfermedades: Derecho
al cuidado paliativo, a la información, a
Futilidad en Medicina
una segunda opinión, a suscribir el do-
cumento de voluntad anticipada2, a par- Durante la práctica médica, en escena-
ticipar de forma activa en el proceso de rios de unidades de cuidado intensivo, ur-
atención y la toma de decisiones sobre gencias y hospitalización, “las decisiones
los planes terapéuticos de la asistencia acerca de iniciación, continuación, ex-
paliativa, entre otros. tensión, y terminación de medidas diag-
nósticas y terapéuticas son necesarias
Adicionalmente, la ley vigente en Colom- diariamente” (Frick, Uehlinger, Zuercher,
bia, obliga a las Entidades Promotoras 2003, p.456). Lo imprescindible es des-
de Salud EPS y a las Instituciones Pres- tacar y diferenciar entre medidas útiles, y
tadoras de Salud IPS públicas y privadas medidas no útiles.
a garantizar a sus afiliados la prestación
del servicio de cuidado paliativo, refor- Desde Paracelso se propusieron principios
zando cobertura, equidad, accesibilidad para cumplir debidamente con la labor
y calidad dentro de su red de servicios en médica: Relatividad, equivalencia, pro-
todos los niveles de atención. Además, se porcionalidad y equidad (Maglio, 2010).
Al mencionar la característica de propor-
2 Voluntad Anticipada. Documento por medio del cionalidad, se equipara actualmente a
cual se indican decisiones en el caso de estar decir que “un medio es proporcionado si
atravesando una enfermedad terminal, crónica,
degenerativa e irreversible de alto impacto en la
ofrece una esperanza de vida razonable 9
calidad de vida, de no someterse a tratamientos al paciente” (Cataldi, 2003, p.1). A partir
médicos innecesarios que eviten prolongar una
de ese entonces, se reconocía la impor-
vida digna en el paciente y en el caso de muerte
su disposición o no de donar órganos. tancia de delimitar la actividad médica,

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VIRGINIA CUEVAS RIVERO

manteniendo una simetría entre lo que se En consecuencia, existen casos de personas


hace y el resultado, con imparcialidad y cuyo estado se ha determinado como “en
justicia en el trato hacia los individuos. situación clínica límite”, contexto en el cual
la técnica de las medidas tomadas ha im-
Al abordar contextos como los cuida- pedido su muerte, pero no han curado y no
dos intensivos o la medicina paliativa, el han restablecido el estado de salud previo.
éxito en el tratamiento no debe ser me- En ocasiones estas intervenciones generan
dido en estadísticas de sobrevida, pues incapacidad física o psicológica, pues hay
la muerte no indica fracaso terapéutico. situaciones límite susceptibles de curación,
Más allá de evitar la muerte, las medidas pero otras son incurables (Mendoza, 2008).
útiles se encaminan a proveer calidad de
vida a los que sobreviven, y calidad de El análisis de estos escenarios dentro de la
muerte a los que mueren (Maglio, 2010, práctica médica ha promovido el debate y
p.37). Esa es la forma de medir el éxito la conceptualización de la futilidad médica.
en esos contextos, y es un punto clave
que permite direccionar y proporcionar La palabra fútil proviene del latín futilis que
las acciones terapéuticas aplicadas para significa “de escasa importancia”, “sinóni-
cada persona. mo de trivial o insustancial” (Cataldi, 2003,
p.1). También, fútil se define como “algo
Hasta la década de 1960, el cese defi- que no sirve, que no tiene propósito útil,
nitivo de la actividad del corazón y respi- completamente inefectivo” (Kasman, 2004,
ratoria era la clave del diagnóstico de la p.1053). Para el caso de la medicina, la
muerte, indicando que la intervención mé- futilidad está explícita como una acción que
dica ya debía terminar (Mendoza, 2008). no es útil para alcanzar la meta específica
Sin embargo, con el avance de la cien- establecida para un determinado individuo
cia, comenzó el auge de la utilización de (Kasman, 2004).
técnicas que mantienen artificialmente la
función cardiopulmonar en aquellos que De acuerdo a la Declaración de Consen-
espontáneamente no podían cumplir con so de la Sociedad Americana de Medici-
estas funciones. Así, apareció un estado na de Cuidado Crítico, un tratamiento es
clínico conocido como “estado vegeta- fútil cuando no logra su objetivo previsto,
tivo persistente”, condición en la cual el el cual consiste en un efecto fisiológico be-
individuo mantiene homeostasis metabó- néfico para el paciente (Frick et al., 2003,
lica, puede respirar artificialmente, pero p.459). Se puede decir entonces, que la fu-
sus funciones cerebrales superiores como tilidad es el resultado obtenido después del
10 la conciencia están abolidas (Mendoza, seguimiento de unos pasos: Primero, exis-
2008). Casos como este han suscitado te una meta, luego coexiste una acción y
cuestionamientos acerca de la utilidad de una actividad encaminada a conseguir esa
determinadas prácticas médicas. meta, por último hay certeza implícita que
HUMANIZACIÓN EN CUIDADO PALIATIVO: UNA SOLUCIÓN A LA FUTILIDAD TERAPÉUTICA

esa acción fallará al tratar de cumplir con el escuchen la una a la otra, y se respeten
propósito trazado (Kassman, 2004). mutuamente. Esto significa hacer medici-
na como “una forma de vida en la que
La futilidad de los actos médicos se da se aprecia y se hace énfasis en el bien-
cuando el médico no reconoce que la vida estar del ser humano” (Oseguera, 2006,
tiene límites, y que ciertos manejos terapéu- p.61). Por ello, debe reconocerse a cada
ticos atentan contra la autonomía y la digni- persona como única e individual. Cada
dad de los seres humanos (Cataldi, 2003). ser humano con determinada afección
Esa futilidad se entiende a través de varios debe dimensionarse y considerarse de
ejemplos: fracaso para prolongar una vida acuerdo a su estado físico y mental, a su
en condiciones dignas, fracaso para satis- entorno social y familiar, y comprender
facer los deseos o los pedidos del atendido, sus peticiones.
fracaso para lograr que los medicamentos
tengan los efectos fisiológicos esperables, Con relación a la futilidad terapéutica y
y/o fracaso para obtener los resultados te- la consolidación de actos profundamen-
rapéuticos que sean realmente aceptables te humanos (humanización) existen varias
(Cataldi, 2003) realidades. En primer lugar, los médicos
no están obligados a proveer tratamien-
Los actos médicos fútiles son acciones que tos que ellos consideran inefectivos o
no se aconsejan porque no son clínicamen- perjudiciales para las personas. Los pro-
te eficaces, porque no van a mejorar el pro- fesionales tienen la obligación moral de
nóstico ni los síntomas, y a veces producen “no hacer mal”, y respetar así el principio
efectos perjudiciales desproporcionados al de la no maleficencia. Los médicos tam-
beneficio esperado para el individuo asisti- bién son autónomos, y deben expresar de
do (Mendoza, 2008). Por otra parte, se ha forma clara en la historia clínica y frente
reconocido que además de no cumplir con a los implicados que por motivos de in-
las metas señaladas en términos médicos, utilidad o ineficacia no se aplicarán los
la futilidad tampoco alcanza o permite con- tratamientos fútiles (Kasman, 2004).
seguir la calidad de vida de las personas,
definida como la presunta satisfacción indi- En segundo lugar, humanizar implica dar-
vidual de cada quien a nivel físico, psicoló- le importancia a la interacción entre los
gico y social (Frick et al, 2003). seres humanos, pues el médico no sólo
debe negarse a la realización de los tra-
tamientos que considera fútiles, sino que
Humanización como solución a la
debe constituir un diálogo con aquel que
futilidad terapéutica
sobrelleva una enfermedad (y con su fa- 11
El ejercicio de la medicina debe consoli- milia), y discutir las alternativas existentes.
darse en un acto profundamente huma- Así el tratamiento sea fútil, es una opción
no, donde las personas interactúen, se y debe ser conocida por el que presen-

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VIRGINIA CUEVAS RIVERO

ta la enfermedad y por su familia si es el a prácticas invasivas y tratamientos inúti-


caso (Kasman, 2004). les, hace que su agonía se prolongue y
se constituye lo que se conoce como una
Por otra parte, los médicos deben reco- obstinación o ensañamiento terapéutico
nocer y transmitir siempre que la asisten- (Cataldi, 2003). Fundamento de estas ac-
cia médica nunca es fútil. No es lo mismo titudes lo establecen pensamientos como:
un tratamiento agresivo que un tratamien- “más tecnología, mejor medicina”, “lo
to que provee confort. Humanización se que se pueda hacer se debe hacer”, o, “si
relaciona con el hecho de garantizar el hay herramientas tecnológicas al alcan-
cuidado y acompañamiento constantes, ce del médico deben ser usadas”. Todas
sobre todo si es una condición al final de estas acciones lo único que producen es
la vida, que amerita paliación, control del una omnipotencia médica, una sacraliza-
dolor, y respeto de su dignidad y auto- ción de la vida y una negación (maníaca)
nomía, medidas que le darán beneficio de la muerte (Maglio, 2010).
a su salud y no son consideradas fútiles
(Kasman, 2004). Para contrarrestar esta situación, se ha
considerado la aplicación de un término
La autonomía del paciente también cum- conocido como “limitación del esfuerzo
ple un papel fundamental en las disposi- terapéutico (LET)”. Esto consiste en tener
ciones médicas. El paciente por sí mismo siempre presentes y definidos los objetivos
tiene el derecho moral y legal de tomar y fines de las acciones terapéuticas, para
decisiones, puesto que es él quien reco- poder “iniciar” o “retirar” un tratamiento
noce sus necesidades siempre que esté específico (Hernando, Diestre, Baigorri,
mentalmente competente. En términos de 2007). “La cuestión esencial de la LET
bioética, el respeto a la autonomía de los es la proporcionalidad del tratamiento en
pacientes dentro del ámbito de las deci- relación a la futilidad” (Hernando et al,
siones clínicas es parte fundamental. La 2007, p.131). La idea es que los resul-
futilidad, para algunos, es una “carta de tados obtenidos de un tratamiento o pro-
triunfo” para el medico que suele “anu- cedimiento son fútiles en comparación
lar” las necesidades u opiniones de los con los medios dispuestos. Todo consiste
que padecen alguna enfermedad, violan- en adecuar proporcionalmente un trata-
do su autonomía (Baily, 2011). miento.
Es en estos contextos donde falta huma-
Conclusiones
nización, donde sobresale la imagen y el
pensamiento del médico por encima de Durante el ejercicio de la medicina, pero
12 los atendidos y sus familias, lo cual da con mayor razón en el campo del CP, “el
lugar a la obstinación terapéutica: Cuan- respeto de los puntos de vista del pa-
do alguien está sin posibilidad alguna ciente y la consideración de cada una de
de recuperación, el hecho de someterlo sus opiniones en la toma de decisiones
HUMANIZACIÓN EN CUIDADO PALIATIVO: UNA SOLUCIÓN A LA FUTILIDAD TERAPÉUTICA

respecto a su salud” (Oseguera, 2006, vidual del entorno físico, mental, familiar
p.57). La interacción entre el médico y y social; aplicación de medidas útiles,
su paciente no consiste en una relación proporcionadas y efectivas; adecuado
autoritaria entre alguien con poder y un uso del conocimiento; y acompañamien-
sometido, por el contrario, es una inte- to humanizado.
racción entre iguales, donde los implica-
dos son autónomos y tienen capacidad Para evitar la futilidad, hay que ponerse
decisoria. en el lugar de los demás, escuchar, iden-
tificar sus necesidades, y aplicar eficien-
El soporte principal de la interacción en- te y proporcionalmente el conocimiento
tre los seres humanos es el hecho de es- que se tenga para permitirles estar bien.
cucharse unos a otros. En el caso de la La medicina paliativa no consiste en uti-
medicina, Hipócrates ya mencionaba que lizar todos los medios posibles para pro-
“muchos enfermos se curan solamente con longar una vida, o evitar una muerte. Al
la satisfacción de un médico que los escu- contrario, se trata de brindar un acom-
cha” (Maglio, 2010, p.5). En esto consiste pañamiento humanizado a quienes lo
gran parte de la medicina, en un ejercicio necesitan (y a sus familias), con medidas
de atención y escucha: “Practicar la medi- que permitan bienestar físico y emocio-
cina sin los libros, es navegar sin brújula, nal, que eviten sufrimiento y dolor hasta
pero practicarla sin escuchar a los enfer- el momento en que la muerte llegue.
mos, ni siquiera es embarcarse” (William Realmente, la prevención de los trata-
Osler, tomado de Maglio, 2010, p.6). mientos fútiles podría constituirse a partir
de la abstención de realizar algún pro-
En el caso de aquellos con entidades termi- cedimiento o provocar alguna conducta
nales, está claro que, si los seres humanos cuando ese acto médico no aporta nin-
mueren sufriendo de modo intolerable, a gún beneficio a la persona con la afec-
causa de dolor u otros síntomas de difícil ción (Mendoza, 2008).
control, es signo de una muerte no digna.
Por ello, las medidas que se tomen con Finalmente, con una interacción entre
respecto a la salud de las personas deben iguales, con comunicación y escucha
ser efectivas, proporcionadas y útiles. Es efectivas, donde se identifiquen las nece-
un imperativo moral que el médico evite sidades a nivel individual y se respete la
la futilidad terapéutica y privilegie la digni- autonomía y dignidad humanas, se con-
dad humana (Cataldi, 2003). solidarán actos médicos humanizados;
acciones fundamentadas en una admi-
En este sentido, existen actitudes que son nistración adecuada del conocimiento, 13
ineludibles al tratar individuos con enfer- las cuales evitarán los tratamientos fútiles
medades terminales: consideración indi- dentro del cuidado paliativo.

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 11, Enero - Junio 2016


VIRGINIA CUEVAS RIVERO

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ABORDAJE BIOÉTICO DEL TRATAMIENTO DE TOXICOMANÍAS: UN ANÁLISIS DE LA SINGULARIDAD EN SITUACIÓN A PARTIR DE LA NARRATIVA...

Abordaje bioético del tratamiento


de toxicomanías: Un análisis de la
singularidad en situación a partir
de la narrativa cinematográfica
Paula Paragis1
Irene Cambra Badii2

Resumen
La Bioética, el Cine y el Psicoanálisis se han entrecruzado en distintos estudios en las últi-
mas cuatro décadas, con aproximaciones exclusivamente teóricas o mediante aplicaciones
conceptuales de una disciplina sobre otra, estableciendo una finalidad pedagógica de los
contenidos a ser transmitidos mediante una película o una serie televisiva. En este artículo,
nos interesamos por la narrativa cinematográfica considerándola en su potencia de pen-
samiento, es decir, para repensar las categorías con las cuales trabajamos desde el campo
de la Bioética, haciendo foco en una lectura de las toxicomanías a través del film Trainspot-
ting. Desplegamos tres ejes de análisis, en relación con los Beneficios y efectos nocivos, la
Autonomía y la No estigmatización. A través de situaciones singulares relatadas en el film,
problematizamos la cuestión de las decisiones del médico respecto de los beneficios de los
pacientes en los tratamientos por toxicomanías, por ejemplo el paradigma abstencionista,
que pone el foco de la intervención en el no-uso de la droga en lugar de la función que la
droga cumple en la vida del sujeto; la autonomía de quienes, inmersos en una situación
de toxicomanía, pueden dar su consentimiento informado para comenzar un tratamiento; y
la utilización de la categoría social de “adictos” para pensar en forma estigmatizada a un
grupo de personas que requiere un abordaje más singular, en el caso por caso. Este film nos
15
1 Becaria Estímulo a la Vocación Científica - Consejo Interuniversitario Nacional. Ayudante Facultad de
Psicología, Universidad de Buenos Aires. Correo electrónico: paula.paragis@gmail.com
2 Doctora en Psicología. Docente e investigadora Facultad de Psicología, Universidad de Buenos Aires. Correo
electrónico: irenecambrabadii@gmail.com

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 11, Enero - Junio 2016


PAULA PARAGIS, IRENE CAMBRA BADII

permite entonces nueva posibilidad de interrogar la complejidad en Bioética a través de la


narrativa cinematográfica, incluyendo tanto el análisis de la normativa vigente como el de
la acción singular y la lectura de la subjetividad.

Palabras clave: Bioética - Cine - Psicoanálisis - Drogas - Adicciones

Bioethical approach to drug treatment: an analysis of the


singularity of the situation from the cinematic narrative
Abstract
Bioethics, Cinematic narrative and Psychoanalysis have intersected in different studies in the
past four decades, with exclusively theoretical approaches or by conceptual applications
from one discipline to the other, establishing a pedagogical purpose of the contents to be
transmitted by the means of a film or a TV series. In this article, we are interested in the film
narrative because of its power of thought, that is, to think over the categories which we work
with in the Bioethics field, focusing on a new look on the drug addictions issue through
the film Trainspotting. We display three core ideas of analysis, regarding the Benefit and
harm, Autonomy and Non-Stigmatization principles. By the means of some singular situa-
tions shown in the film, we interrogate the issue regarding medical decisions about patients’
benefit in drug addiction treatments, such as the abstentionist paradigm, that focuses on
interventions based on the withdrawal of drug consumption instead of raising a question of
the function that the drug fulfills in that person’s life; the autonomy of the ones who, immerse
in a drug-addictive situation, may give their informed consent to begin a treatment; and the
use of the social category of “addicts” to refer in a stigmatized way to a group of people that
require a more singular approach, that will depend on the case. This film gives us a new pos-
sibility to interrogate the complexity in Bioethics by using cinematic narrative, including not
only the analysis of the law in force but also one of the singular action and the subjectivity.

Key words: Bioethics - Cinema - Psychoanalysis - Drugs - Addiction

Introducción El cine ha desplegado desde siempre dis-


tintas problemáticas éticas y bioéticas. En
Tomaremos como punto de partida la las últimas cuatro décadas, este estilo ha
consideración compleja del entrecruza- fundado toda una corriente de pensa-
miento transdisciplinario entre Bioética, miento que piensa la dilemática de una
Psicología y narrativa cinematográfica, lo situación a partir de la potencia narrativa
cual nos permitirá interrogar a la Decla- de escenarios literarios, cinematográficos,
ración Universal de Bioética y Derechos
Humanos (UNESCO, 2005) desde una lectura de la subjetividad y de las motivaciones
16 perspectiva psi3. inconscientes de las acciones más allá de las
enunciaciones conscientes. Dejamos de lado
las extensas diferencias entre ambas disciplinas
3 Bajo el nombre de perspectiva psi nos referimos ya que exceden al presente artículo y el enfoque
a una matriz conceptual que conjuga elementos que buscamos en articulación con el Cine y la
de la Psicología y el Psicoanálisis, es decir, una Bioética.
ABORDAJE BIOÉTICO DEL TRATAMIENTO DE TOXICOMANÍAS: UN ANÁLISIS DE LA SINGULARIDAD EN SITUACIÓN A PARTIR DE LA NARRATIVA...

teatrales, plásticos y musicales, incluyen- de la subjetividad implicada en el uso de


do en algunas ocasiones la articulación sustancias psicoactivas). Veremos a con-
desde la psicología y el psicoanálisis (Cfr. tinuación una introducción teórica para
Michel Fariña y Gutiérrez, 1999; Cattori- poder situar el recorte de la presente pro-
ni, 2006; Muñoz y Gracia, 2006; Cavell, puesta.
2008; Moratalla, 2011; Michel Fariña y
Solbakk, 2012).
El campo de la Bioética y su
Declaración Universal
Partimos de la premisa de que la trans-
misión y el análisis de la complejidad Entendemos a la Bioética como un cam-
bioética a través de la narrativa cinema- po que no atañe a una disciplina en par-
tográfica supone la articulación de un ticular, sino que recibe aportes teóricos
doble movimiento, que incluye por un desde distintas áreas (Medicina, Derecho,
lado las normativas y códigos deontoló- Filosofía, Psicología, Ciencias Sociales,
gicos, y por otro, a la singularidad en si- etc.) y a su vez requiere un abordaje inter-
tuación, es decir, los elementos singulares disciplinario para la resolución de distin-
del caso (Michel Fariña, 2001, 2012). En tas situaciones dilemáticas. Utilizaremos
este sentido, nos hemos preguntado si di- entonces el término Bioética en su acep-
cho doble movimiento en el cine permite, ción amplia, al considerarla una rama de
asimismo, generar en el espectador un la Ética como disciplina, dedicada a los
plus, un efecto no calculado, que está en principios para la conducta humana res-
sincronía con la dimensión vivencial que pecto de la vida y de la muerte, sin limi-
posibilita al espectador apropiarse subje- tarla al ámbito de competencia (médico,
tivamente de la narrativa cinematográfica psicológico, etc.), sino incluyendo todos
(Cambra Badii, 2014), convirtiéndose en los problemas éticos que guardan rela-
parte activa y creativa de la problemática ción con la vida en general, tanto de los
bioética que puede desarrollarse a partir seres humanos, como los animales y las
de la operación de lectura del film. plantas, y el medio ambiente en general
(UNESCO, 2005; Michel Fariña & Lima,
La propuesta de este artículo está centra- 2009).
da en el abordaje del entrecruzamiento y
la tensión entre los campos de la narrativa Si bien la Bioética hunde sus raíces en la
cinematográfica (a partir del análisis del filosofía (Sass, 2008; Lolas Stepke, 2008),
film Trainspotting), la Bioética (fundamen- es cierto que luego de los aportes de Potter
talmente a través de sus principios fun- (1971), en 1979 Beauchamp y Childress
damentales y la Declaración Universal de introducen cuatro principios fundamenta- 17
Bioética y Derechos Humanos, UNESCO les para su propuesta principalista ligada a
2005) y la Psicología y el Psicoanálisis la medicina: autonomía, no maleficencia,
(como nuevas formas de comprensión beneficencia y justicia. La Bioética queda

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PAULA PARAGIS, IRENE CAMBRA BADII

ligada y enfocada en la relación médico- a su vez en la imposibilidad de separar la


paciente, intentando que este último pueda Bioética de los Derechos Humanos.
ejercer sus derechos y elegir más allá del
paternalismo médico.
El cine como parte de la bioética
Actualmente, la Declaración Universal de
narrativa
Bioética y Derechos Humanos, promul- Según Muñoz y Gracia (2004, 2006), el
gada en la Conferencia General de la momento de irrupción de la cuestión na-
UNESCO en 2005, es la legislación in- rrativa en Bioética fue el año 1977 con
ternacional de mayor alcance y difusión, un trabajo de dos teólogos protestantes,
y contiene los 28 principios generales Burrell y Hauerwas: From system to story:
(Autonomía y responsabilidad individual, an alternative pattern for rationality in
Consentimiento, Privacidad y confiden- Ethics.
cialidad, etc.), aunque no se restringe
al ámbito biomédico sino que incorpora La corriente narrativa de la bioética su-
cuestiones ligadas al medio ambiente, a plementa a un enfoque más racional, tal
la cooperación internacional, etc. como ha sido pensado por la Moderni-
dad, que excluye el mundo de los afectos
La Declaración se basa en Documentos y de los sentimientos: “La fecundidad de
anteriores: Declaración Universal de De- la bioética narrativa está en revalorizar
rechos Humanos (1948), Declaración el papel de la imaginación en la ética,
Universal sobre el Genoma Humano y los su rol fundamental en el razonamiento
Derechos Humanos (1997), Declaración moral como exploración narrativa, con-
Internacional sobre los Datos Genéticos trariamente a la tradición racionalista
Humanos (2003); y puede ser leída como del absolutismo moral, excluyente de
una confirmación más del “proceso cons- la insobornable subjetividad de la com-
tante hacia una juridización de la Bioéti- prensión humana” (Mainetti, en Tealdi,
ca” (Gross Espiell, 2014). 2008, p. 167). La bioética narrativa in-
cluye entonces no sólo a las normas y
El recuerdo indeleble de las atrocidades principios, sino también a las circunstan-
cometidas en Auschwitz y en otros cam- cias, emociones y sentimientos, equili-
pos de concentración en donde se reali- brando ambos modelos.
zaron macabros experimentos con seres
humanos, actúa como reaseguro de estas Gracia y Muñoz (2006) coinciden en se-
condiciones de bioética que toman como ñalar que la fuente más importante del
18 base a la dignidad humana (Andruet, conocimiento de la vida, de la cultura y
2007). La primacía de la dignidad hu- de la moral son las tradiciones narrativas.
mana sobre cualquier otra consideración Las narraciones nos dan una visión del
(médica, científica, política, etc.) se basa mundo. Luego, van un paso más allá al
ABORDAJE BIOÉTICO DEL TRATAMIENTO DE TOXICOMANÍAS: UN ANÁLISIS DE LA SINGULARIDAD EN SITUACIÓN A PARTIR DE LA NARRATIVA...

afirmar, desde la filosofía hermenéutica, cursos, provenientes de la medicina, del


que “la vida tiene estructura narrativa” ámbito jurídico-legal, de la religión, y
(Gracia y Muñoz, 2006, p. 17). Los cuen- aún la publicidad misma que el mercado
tos, las novelas, las canciones, el folklo- produce para publicitar sus varios obje-
re, las películas, los relatos de viajes o de tos de consumo. El resultado es que nos
casuística, son narrativas que configuran encontramos ante un conjunto heteróclito
nuestro accionar. de discursos sobre drogas, consumidores
y adicciones.
Partiendo entonces de la narrativa bioé-
tica, podemos considerar distintos me- Resulta de suma importancia considerar
dios, cada uno con distintos alcances y que la historia de las drogas es mucho
limitaciones: la narración escrita, oral, el más amplia que la historia de las toxi-
cine, etc. Consideramos que la narrativa comanías, puesto que la relación de los
cinematográfica es un elemento audio- sujetos con la droga es milenaria. Es po-
visual de enorme relevancia, capaz de sible ubicar que la toxicomanía como tal
desplegar distintas expresiones e identi- (junto con el alcoholismo) no tienen más
ficaciones. La importante capacidad del de ciento cincuenta años de antigüedad.
cine de desplegar escenarios y conflictos Siguiendo los desarrollos de Escohotado
éticos ficcionales que convocan al espec- (1998), encontramos distintos usos que
tador en relación a la mirada, al pensa- ha tenido la droga en diversos momentos
miento, a la implicación en la batalla –así históricos. Por ejemplo, en la Antigüedad,
considera el filósofo francés Alain Badiou diversas religiones -como el budismo- uti-
(2004) que es nuestra participación en el lizaban el cáñamo (hoy conocido como
cine: en el cuerpo a cuerpo– , tiene rela- marihuana) fundamentalmente para
ción con el método ético con el cual se acompañar la meditación. Por otro lado,
analizan las situaciones controvertidas, es en la cultura grecorromana, se utilizaba
decir, mediante nuestra implicación en la el término Pharmakon para referirse a la
situación y el significado de esas acciones droga, con una doble acepción: remedio
singulares, entrecruzadas con las teorías y veneno. Comienza allí una discusión
y el campo normativo en un doble movi- que se continúa hasta el día de hoy en
miento. cuanto al modo de utilizar el Pharmakon
–que es lo que hoy llamamos uso indebi-
do/uso aceptado de drogas-. Se plantea
Drogas y toxicomanías: una
si el problema del abuso de la sustancia
deconstrucción posible
se encuentra del lado del sujeto o del
La problemática del consumo de sustan- lado de la sustancia en sí misma. Pos- 19
cias tóxicas puede ser abordada desde teriormente, en la época del liberalismo,
distintos puntos de vista, puesto que se las drogas comienzan a tener un lugar
encuentra atravesada por diferentes dis- fundamental en ciertas ideologías como

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 11, Enero - Junio 2016


PAULA PARAGIS, IRENE CAMBRA BADII

el movimiento hippie. En ese entonces, ha- des que implicarían un consumo de tipo
bía una creencia muy fuerte que sostenía adictivo, etc.
que consumiendo ciertas drogas se podía
acceder más fácilmente al inconsciente. Si bien resulta fundamental conocer di-
cha definición, en el presente trabajo no
La aparición de la toxicomanía o adic- nos guiaremos con estos parámetros,
ción propiamente dicha se instala en el puesto que partimos de una concepción
contexto de la guerra civil de Estados psicoanalítica de la toxicomanía, la cual
Unidos, de 1860-1865, que es cuando no ubica el foco primario de atención en
se comienza a utilizar de manera siste- la cuestión en la sustancia ni en las can-
mática la morfina (derivado del opio) tidades de su consumo. Desde el Psicoa-
para calmar los dolores de los heridos. nálisis, entendemos que el consumo de
Al terminar la guerra se evidencia la tóxicos constituye un síntoma que atañe a
adicción a la morfina, lo cual se deno- cada sujeto en su posición. Este síntoma
minó “el mal militar”. Se descubre en- tiene particular importancia en la época
tonces el fenómeno de abstinencia, lo actual y se encuentra íntimamente ligado
cual sanciona la entrada de la cuestión a las coordenadas de la posmodernidad:
del consumo de drogas al campo médi- nos encontramos en un momento históri-
co –ya que hasta entonces se considera- co en el cual el mercado ha impuesto su
ba la “buena o mala fe” de la persona ley, viéndose acompañado por un hiper-
que consumía, dependiendo de ella si individualismo, siendo un tiempo que ca-
eso traía problemas colaterales o no–. rece de normativa o regulación y que se
da a nivel global. Se trata de un mundo
La definición que introduce la Organiza- invadido por las nuevas tecnologías y la
ción Mundial de la Salud de lo que se modificación de la cultura. Entendemos
considera adicción es la siguiente: “Es- de este modo que la toxicomanía se ha
tado de intoxicación crónica y periódica convertido en una forma universal pato-
originada por el consumo excesivo de lógica, tratándose de una forma subjetiva
una droga, natural o sintética, caracteri- generalizada en la actualidad, por lo cual
zado por: 1) Una compulsión a continuar se intentarán plantear ciertos puntos de
consumiendo por cualquier medio. 2) tensión entre la Declaración de Bioética
Una tendencia al aumento de las dosis. y una clínica de la singularidad. Conside-
3) Una dependencia psíquica y general- ramos que las problemáticas contempo-
mente física de los efectos. 4) Conse- ráneas nos interpelan como profesionales
cuencias perjudiciales para el individuo y de la salud y, por ello, la utilización de
20 la sociedad” (Escohotado, 1998, p. 111). la narrativa cinematográfica posibilita la
Es decir que se delimita qué drogas son reflexión, el análisis y la problematización
adictivas y cuáles no, las drogas llama- de su complejidad a través de las ficcio-
das “duras” y las “blandas”, las cantida- nes en la pantalla (Solbakk, 2006).
ABORDAJE BIOÉTICO DEL TRATAMIENTO DE TOXICOMANÍAS: UN ANÁLISIS DE LA SINGULARIDAD EN SITUACIÓN A PARTIR DE LA NARRATIVA...

La propuesta de este artículo: ‡ Artículo 4 – Beneficios y efectos noci-


Trainspotting vos: “Al aplicar y fomentar el conoci-
miento científico, la práctica médica y
Para este artículo, nos propondremos las tecnologías conexas, se deberían
puntualmente interrogar lo establecido potenciar al máximo los beneficios di-
en la Declaración en relación al consumo rectos e indirectos para los pacientes,
de tóxicos, tomando el caso del film Tra- los participantes en las actividades de
inspotting, de Danny Boyle (1996), cuya investigación y otras personas concer-
trama gira en torno a la adicción a la he- nidas, y se deberían reducir al máxi-
roína de un pequeño grupo de amigos. mo los posibles efectos nocivos para
dichas personas”
Será interesante adentrarnos en este film
ya que, en la articulación entre Psicolo-
‡ Artículo 6 – Consentimiento: “Toda
gía, Bioética y Cine, o al menos en dos
intervención médica preventiva, diag-
de estas disciplinas, los aportes hasta el
nóstica y terapéutica sólo habrá de
momento (por ejemplo Muñoz y Gracia,
llevarse a cabo previo consentimien-
2006; García Manrique, 2008; Mora-
to libre e informado de la persona
talla, 2011; Colt, Friedman, & Quadre-
interesada, basado en la informa-
lli, S., 2011; Michel Fariña & Solbakk,
ción adecuada. Cuando proceda, el
2012; Icart Isern & Donaghy, 2013) giran
consentimiento debería ser expreso y
en torno a las problemáticas bioéticas
la persona interesada podrá revocar-
más difundidas o reconocidas por el gran
lo en todo momento y por cualquier
público, acerca del principio y final de la
motivo, sin que esto entrañe para ella
vida (aborto, tecnologías de reproduc-
desventaja o perjuicio alguno”
ción asistida, genética, clonación, apro-
piación y restitución de niños, cuidados
‡ Artículo 11 – No discriminación y no
paliativos, eutanasia, suicidio asistido),
estigmatización: “Ningún individuo o
del tratamiento del dolor, clonación, do-
grupo debería ser sometido por nin-
nación y trasplante de órganos, investi-
gún motivo, en violación de la digni-
gación, genética, etc. No hay, en estos
dad humana, los derechos humanos y
importantes antecedentes, lecturas sobre
las libertades fundamentales, a discri-
la articulación de la Declaración Univer-
minación o estigmatización alguna”
sal de Bioética y Derechos Humanos y el
(UNESCO, 2005).
escenario del consumo de tóxicos desde
una perspectiva psi. ¿Cuáles pueden ser El film Trainspotting está basado en la no-
esas articulaciones? ¿Cómo puede apor- vela homónima de Irvine Welsh. El título
tar una mirada psi en este ámbito?
21
hace referencia a un término escocés que
significa “buscar una vena para inyectar-
Nos enfocaremos en tres artículos de la
se droga”.
Declaración UNESCO:

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 11, Enero - Junio 2016


PAULA PARAGIS, IRENE CAMBRA BADII

Recapitulemos brevemente lo que sucede embargo, Renton se siente aburrido y


en la historia, que narra la vida de cinco angustiado, ya que no encuentra un pro-
jóvenes amigos de Edinburgo, adictos a pósito en su vida. Posteriormente, gracias
la heroína. Comienza con la narración a la intervención de una amiga, decide
en off de Mark Renton, cuando él y su mudarse a Londres y comenzar a trabajar
amigo Spud corren por la calle, siendo como agente de alquiler de propiedades.
perseguidos por unos guardias de segu- El personaje aparenta disfrutar la vida de
ridad luego de un robo. Renton declara sobriedad y comienza a ahorrar dinero.
que, a diferencia de la gente que “es- Sin embargo, poco tiempo después sus
cogió una vida” (con hijos, estabilidad amigos lo buscan y deciden instalarse
financiera y posesiones materiales), él en su hogar, arruinando su nueva vida,
eligió la heroína. robándole y destrozando su habitación.
Debido a ciertas complicaciones gene-
La historia incluye el devenir de Renton, radas por los muchachos, Renton pierde
cuando intenta dejar la droga y cuando su trabajo. Spud, quien había salido de
vuelve a consumir. Recurre a suposito- la cárcel, les propone realizar una tran-
rios de opio para aplacar el malestar de sacción de heroína en Londres que les
la abstinencia y se encierra en un hotel resultaría sumamente provechosa, si bien
para resistir esos síntomas, para volver a implicaba grandes riesgos. Para realizar-
consumir casi inmediatamente. Es cap- la, necesitaban la ayuda de Renton quien
turado por robar una librería junto con aportaría la mitad de la suma necesaria
su amigo Spud y debe realizar un trata- para llevar a cabo el negocio. Después
miento de rehabilitación con metadona, de la adquisición, Renton se inyecta una
del Programa estatal de Intervención de dosis de heroína para verificar su pure-
Drogas, para no ir a la cárcel. A pesar za. Una vez realizada la misión con éxito,
de contar con el apoyo de familia y ami- celebran en un bar y discuten sus diver-
gos, el joven se siente constantemente sos planes con el dinero. A la mañana
deprimido y apático. Más tarde, en una siguiente, mientras todos dormían, Ren-
visita a su dealer, vuelve a inyectarse he- ton decide tomar sigilosamente el dinero
roína y casi muere por sobredosis, sien- y huir. La película finaliza con el prota-
do salvado justo a tiempo. A partir de lo gonista caminando por las calles de Lon-
ocurrido, sus padres lo llevan a su casa y dres, tratando de convencerse de llevar
lo encierran en su habitación sometién- una nueva vida alejada de las drogas.
dolo a “una rehabilitación súbita”. Es allí
donde comienzan los síntomas severos
Los beneficios y efectos nocivos
22 de la abstinencia, presentando intensos
interrogados en la clínica
delirios. Su reclusión finaliza cuando sus
padres lo instan a realizarse un examen Uno de los puntos principales a ser inda-
de VIH, que da resultado negativo. Sin gados en este puente articulador entre
ABORDAJE BIOÉTICO DEL TRATAMIENTO DE TOXICOMANÍAS: UN ANÁLISIS DE LA SINGULARIDAD EN SITUACIÓN A PARTIR DE LA NARRATIVA...

Bioética, Cine y Psicoanálisis es, sin lugar de estas situaciones en su singularidad.


a dudas, la relación entre los Beneficios y Al promediar el film, cuando parece no
efectos nocivos de los tratamientos propues- haber solución para su adicción a la he-
tos para el abordaje de las toxicomanías. roína, el protagonista es sometido a un
tratamiento de sustitución con metadona,
Si bien el principio de primum non nocere con lo cual se intenta cambiar la sustan-
es intrínseco a todas las intervenciones, cia que él consumía por una sustancia
ya sean médicas o psicológicas, de inves- supuestamente menos dañina para su
tigación o tratamiento, es necesario tener organismo. La abstinencia aquí está re-
en cuenta que este “primero no dañar” ferida a la sustancia en sí misma y no a
o “potenciar los beneficios y reducir los la función que el tóxico tenía para este
efectos nocivos”, esconde tras de sí un sujeto, ya que el movimiento permanece:
sinfín de matices y situaciones. Renton se vuelve adicto a la metadona en
lugar de la heroína.
Es bien conocida la opinión moral de
bioeticistas, psicólogos y educadores
Desde una mirada psicoanalítica, enten-
respecto de la utilización de medidas
demos que existen diversos modos de vin-
coercitivas a fines de lograr el inicio o
culación de los individuos con las múltiples
continuación de tratamientos para el
sustancias psicoactivas, siendo distinta la
abordaje de las toxicomanías, tales son
función que ocupa el tóxico en la subje-
los casos de: “la decisión de generar in-
tividad de cada quien. En este sentido, la
capacidades cuando la conducta adictiva
apuesta terapéutica consistiría en propiciar
produce riesgo propio, riesgo de terceros
una pregunta en el sujeto, entendiendo
o quebranto económico familiar (...) [y es
que “la causa del consumo problemático
sabido que] en el caso de los drogode-
no es la sustancia sino que hay que loca-
pendientes la necesidad de “obtener la
lizarla en la singularidad subjetiva” (Duek
droga a cualquier precio” y los efectos
y Quevedo, 2010, p.3). Resulta interesan-
psicopatológicos justifican la restricción
te tener en cuenta que la abstinencia de
de la autonomía” (Lazzari, 2007). Esta
la heroína cobra aquí un valor de ideal
opinión moral sustentada con argumen-
terapéutico que se impone a todos por
tos de la disciplina científica vuelve sobre
igual en el programa estatal, sin conside-
los pasos de la autonomía en el nombre
rar las coordenadas subjetivas de Renton
del paternalismo médico: creyendo saber
en cuanto a la singularidad que el consu-
lo mejor para el paciente, toman las deci-
mo tiene para él. En efecto, la abstinen-
siones por él y callan sus contradicciones
cia puede ser leída en términos morales,
bajo la categorización de una psicopato-
como “lo indicado”, “lo beneficioso” o “lo 23
logía de base.
esperable” que se quita o se reemplaza
Veamos a través del recorte de la na- -por metadona, en este caso-; pero que
rrativa cinematográfica elegida algunas en los casos en que no contemple al sujeto

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en la situación, hará estallar todo por los guen las coordenadas significantes que
aires ante la mínima ocasión de tambaleo, marcan la vida del sujeto, permitiendo ir
generando un regreso al consumo. situando la función que cumple el tóxico
en su subjetividad.
Este tipo de tratamientos, que imponen
estrictamente el abandono del consumo Es importante mencionar que en el film
para poder ingresar al programa, se en- no aparecen los profesionales a cargo
marcan en un paradigma abstencionista del tratamiento, como si éste fuera acé-
que centra la causa de la adicción en la falo o como si no hubiera un vínculo te-
droga, es decir, la sustancia en sí misma, rapéutico con Renton: todo lo que a éste
siendo el fin último el cese del consumo. le importa queda en él, sus tóxicos y los
Este tipo de instituciones pretenden desin- amigos que están vinculados a éstos. Este
toxicar al sujeto, sacarle el objeto de la hecho no hace más que reforzar el inten-
adicción en tanto causa. Desde una pers- to del sujeto de resolver su malestar por
pectiva que aloje la singularidad, podría- fuera del campo de la palabra, recurrien-
mos pensar que las curas de abstinencia do al tóxico como un modo de obtener
sólo tendrán éxito aparente si se sustrae un placer inmediato que le proporciona
la sustancia narcótica sin cuidar el motivo independencia del mundo exterior.
de la imperiosa necesidad de aquella.
Por otra parte, es posible ver allí cómo la
De lo que se trata a fin de cuentas es de figura del “adicto” en la sociedad actual
cómo operar allí donde se presenta la es ubicada en un lugar marginal, puesto
posibilidad de que la ética del psicoanáli- que es vista como “flagelo social”, lindan-
sis pueda confundirse con la moral social te a lo delictivo o bien a una enfermedad.
que impone el ideal de salud (Piotte, Sru- De este modo, no sólo se produciría una
ber y Torregiani, 2005). La apuesta que retroalimentación entre el aislamiento
se realiza desde el psicoanálisis es que la propio del toxicómano y la marginación
dirección del tratamiento no se sostenga por parte de la sociedad, sino que todo
en la abstinencia del paciente, sino que esto acarrea la demonización de la sus-
implique escuchar al paciente, sin tener tancias, con la consecuente desresponsa-
un “ideal” en el horizonte, permitiendo al bilización de los sujetos implicados en los
paciente interrogarse acerca de su con- actos de consumo.
sumo, posibilitando que aparezca allí
algo en relación con la singularidad de Si volvemos al film, los dichos del pro-
su deseo. De ningún modo se trata de tagonista respecto del tratamiento de
24 una pretensión de regular la relación del mantenimiento con metadona resultan
paciente con el tóxico, como sucede con un tanto chocantes: “Ya que estaba en re-
otras terapéuticas. Así, vía la intervención habilitación, el Estado costeaba mi adic-
del analista se intentará que se desplie- ción”. Antes que nada, debe tenerse en
ABORDAJE BIOÉTICO DEL TRATAMIENTO DE TOXICOMANÍAS: UN ANÁLISIS DE LA SINGULARIDAD EN SITUACIÓN A PARTIR DE LA NARRATIVA...

cuenta que este tratamiento es la opción que resulta riesgoso? ¿Cómo debemos
farmacológica más utilizada para la adic- operar como profesionales de la salud
ción a opiáceos en todo el mundo. Se es- en situaciones en las cuales aquello que
tima que al menos un millón de personas resulta beneficioso para los intereses del
reciben dicho tratamiento actualmente, Estado –en nombre del interés de pacien-
dado que su eficacia y efectividad son te– va en detrimento del bienestar de este
bien conocidas (Bobes García y Bobes último?
Bascarán, 2012). Este tipo de tratamien-
to es tan frecuente ya que conlleva dos El Consentimiento Informado y los
ventajas para el Estado y los sistemas de carriles de la responsabilidad
salud: resulta económico y es más fácil su El Consentimiento se basa en el principio
seguimiento y control. Ahora bien, en se- de la Dignidad humana y en los derechos
mejante panorama, ¿dónde queda el su- humanos (Andruet, 2007), ya que resulta
jeto? El hecho de que Renton señale que una especificación práctica del principio
el Estado es ahora el que costea su adic- de autonomía y responsabilidad indivi-
ción nos pone en la pista de que hay algo dual, lo cual equivale a pensarlo como
allí que no se ha conmovido. El supuesto un acto de voluntad. Sin embargo, des-
tratamiento que se propone que el indivi- de el psicoanálisis sabemos que la toma
duo abandone su consumo problemático de decisiones es compleja y no incluye
de sustancias ha pasado a ser una nueva únicamente a la voluntad del sujeto au-
variante de dicha adicción. Si bien este tónomo, capaz de tomar decisiones y de
tratamiento es eficaz y validado empírica- manifestarlas, sino también al sujeto del
mente, podemos ubicar que es imposible inconsciente (Freud, 1900; Salomone,
soslayar el caso por caso, la singularidad 2006), y más allá de esta consideración,
de cada quien, en tanto no se trata de la incluye también al médico tratante y a la
droga que Renton consumía anteriormen- relación con el paciente.
te sino de la función que aquel consumo
cumplía, el cual simplemente ha mudado Volviendo a la especificidad del escenario
de sustancia (de heroína a metadona). del consumo de tóxicos, se trata de un
tipo de pacientes suele llegar a consulta
A través de lo manifestado por el protago- sin un síntoma –en el sentido analítico-
nista del film, es posible abrir ciertos inte- que los aqueje, no presentan interrogan-
rrogantes respecto de la tensión existente tes sino que arriban con la respuesta que
entre lo establecido en la Declaración de han conseguido. Allí la causa parecería
bioética y la práctica clínica: ¿Hasta qué ser “atribuida a algún otro o a la sustan-
punto se está efectivamente potenciando cia otorgándoles poderes omnímodos y 25
los beneficios que el tratamiento com- demonizantes, y, a la vez, requiriendo la
porta para este paciente? ¿Acaso no se gestión de una solución o respuesta que
está perpetuando un circuito compulsivo suprima el malestar que portan, a la ma-

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nera de una extracción quirúrgica del tóxi- Según Le Poulichet, es notable que cier-
co” (Kamaniecki y Quevedo, 2008, p.2). tos toxicómanos se aferren ellos mismos a
Dicha solución probablemente recubra esta creencia en un flagelo del que serían
cierta angustia, permitiéndole al sujeto las víctimas, y de ese modo alimenten su
la desresponsabilización, en tanto es la propio estereotipo, su propia figura nor-
sustancia la “responsable”, de lo cual se mativa: “algunos se presentan entonces
desprendería un “no querer saber” acer- como ya desposeídos de sus actos, op-
ca de las determinaciones desconocidas ciones o síntomas, a partir del momento
de sus actos. Este aspecto puede verse en que existen clichés y leyes para asig-
claramente en el film, cuando Renton es nar una racionalidad a esta anomalía”
apresado y enviado a juicio por los ac- (1990, p.46), lo cual resulta un espejo de
tos delictivos que venía cometiendo. Para su propia dificultad para elaborar algo
lograr la absolución, atribuye los actos de la relación que sostienen con la toxi-
delictivos al consumo de drogas y brinda comanía, como acto singular, como algo
su consentimiento para iniciar un trata- que les pertenece.
miento.
Así pues, podríamos preguntarnos por
En este sentido, se evidencia la tensión la verdadera naturaleza de este consen-
existente entre la responsabilidad enten- timiento. ¿Hay allí un acto de voluntad
dida en términos jurídicos y aquella que de iniciar un tratamiento? En términos
compromete al sujeto del inconsciente. psicoanalíticos, ¿puede ubicarse allí una
Si consideramos que Renton ha brinda- verdadera demanda de tratamiento?
do su consentimiento como “un acto de ¿Existe en Renton algún atisbo de interro-
voluntad”, nos situamos en el terreno de gación respecto de su consumo? En ese
un sujeto autónomo, lo cual restringe la momento, el consentimiento para iniciar
responsabilidad al terreno de la concien- un tratamiento parece “el mal menor”
cia. El hecho de que para este persona- frente a la posibilidad de ir a prisión -opi-
je su tratamiento se inicie como requisito nión compartida por sus padres, quienes
judicial deja por fuera el campo de la lo acompañan al juicio-, pero no hay una
responsabilidad subjetiva, no lo interpe- interrogación acerca de su responsabi-
la más allá de las fronteras conscientes. lidad en los actos cometidos –ni en los
De este modo, Renton sería responsable robos, ni en el consumo–. Esto lo hará
de los actos cometidos bajo el efecto de volver a consumir casi inmediatamente.
tóxicos, en cuanto a las normas se refiere.
Es responsable por el no cumplimiento de
No discriminación y no
26 sus obligaciones o el mal ejercicio de sus
estigmatización
derechos. Desde una reflexión ética, no
se puede obviar el análisis de las conse- Teniendo en cuenta el Artículo 11 de la De-
cuencias que esto tendrá para el sujeto. claración de Bioética y Derechos Huma-
ABORDAJE BIOÉTICO DEL TRATAMIENTO DE TOXICOMANÍAS: UN ANÁLISIS DE LA SINGULARIDAD EN SITUACIÓN A PARTIR DE LA NARRATIVA...

nos, es posible interrogar hasta qué punto lado, sitúa a su compañero Begbie como
éste es respetado en escenarios tales como víctima de “otro tipo de adicción”: aun-
el de consumo de tóxicos, especialmente que este personaje no consume ninguna
cuando se trata de casos “judicializados”, droga -si bien podría pensarse que tal vez
como el de Renton -una vez que ingresa tenga alguna cuestión sintomática en re-
al aparato judicial por las denuncias de lación al alcohol, ya que en varias esce-
robos y es enviado al tratamiento por sus nas se encuentra bebiendo en exceso-, a
adicciones para evitar la prisión. lo que Renton se refiere como “adicción”
en este caso es a los ataques de ira de
Si bien se establece que ningún individuo este sujeto, los cuales no logra manejar,
o grupo debería ser sometido a discrimi- necesitando imperiosamente una descar-
nación o estigmatización alguna, pare- ga motriz que lo lleva a los más cruentos
ciera ser que en el imaginario social y en ataques por motivos nimios.
el modo de abordar este tipo de consu-
mos problemáticos la mirada que prima Cuando Renton inicia el tratamiento esta-
dista mucho de aquella premisa. De he- tal para dejar las drogas y evitar la prisión,
cho, la figura del “adicto” en la sociedad vemos su desprecio frente a las entrevistas
actual es ubicada en un lugar marginal, y las propuestas que le hacen: parecen ser
puesto que es vista como “flagelo social”, similares para todos, a todos les dan los
lindante a lo delictivo o bien a una enfer- mismos remedios, él no hace vínculo con
medad, por lo cual suelen proliferar las ningún profesional. No hay escenas filma-
llamadas “comunidades terapéuticas”, das de los tratamientos, no ocupan lugar
que mantienen aquella fuente de pertur- en la vida de Renton y tampoco en el film.
bación en un espacio delimitado y por Ahora bien, en relación con la Bioética,
fuera de los márgenes de la sociedad. nos interesa destacar aquí la pregunta que
De este modo, no sólo se produciría una nos surge desde el campo profesional,
retroalimentación entre el aislamiento ¿por qué abordar la toxicomanía como un
propio del toxicómano y la marginación grupo homogéneo?
por parte de la sociedad, sino que todo
esto acarrea la demonización de la sus- Si consideramos al grupo “adictos” o
tancias, con la consecuente desrrespon- buscamos según categorías del tipo de
sabilización de los sujetos implicados en los manuales diagnósticos de la psiquia-
los actos de consumo. En el film, Renton tría, veremos que las personas que están
conmueve con todo lo que va diciendo, agrupadas en una misma categoría son
aquello que entendemos vulgarmente vistas como “relativamente similares” en
por “adicción”. Señala que su madre es cuanto a la manifestación de determina- 27
una “social y domésticamente aceptable da patología. La concepción de lo normal
drogadicta”, ya que consume Valium (en y lo patológico que guía esas concep-
grandes dosis y con frecuencia); y por otro tualizaciones conforma un instrumento

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de dominio social que, en términos fou- cen más que llevar al protagonista de
caultianos, podemos entender como una regreso a su antiguo modo de respuesta,
normalización ¨biopolítica¨: un control consumiendo heroína una vez más.
que se ejerce sobre toda la población
con el objetivo de gobernar su vida, nor- Desde el Psicoanálisis, entendemos que
malizarla, etc (Canguilhem, [1966]2005; existen diversos modos de vinculación de
Foucault, 2000). La Psicología puede los individuos con las múltiples sustancias
aparecer estableciendo parámetros de psicoactivas, siendo distinta la función
la salud y la enfermedad, fomentando que ocupa el tóxico en la subjetividad de
que la población interiorice esas normas, cada quien. En este sentido, la apuesta
y ahorrando la necesidad de recurrir a terapéutica consistiría en propiciar una
mecanismos disciplinarios para ser más pregunta en el sujeto, entendiendo que
eficaces (Muhle, 2009), por ejemplo me- “la causa del consumo problemático no
diante la medicalización y la psicoterapia es la sustancia sino que hay que locali-
cognitivo-conductual, en busca de rápi- zarla en la singularidad subjetiva” (Duek
dos resultados. y Quevedo, 2010, p.3). De hecho, vemos
en este pequeño grupo de amigos que el
En cuanto a la psicoterapia, es llamativo film muestra cómo cada uno en su sin-
que no haya ningún tipo de intervención gularidad se va ligando al tóxico de una
presente en el film. Sin embargo, todas las manera especial, y cómo el tóxico cumple
intervenciones estatales giran en torno a una función diferente para cada uno de
la modificación conductual mediante el ellos: por ejemplo, al promediar el film
reemplazo de la sustancia, por lo cual el vemos cómo Tommy, el único de los ami-
paciente –Renton, en este caso– pareciera gos del grupo que mantenía un trabajo
no tener autoridad alguna sobre su propio y tenía un noviazgo estable, se deja caer
tratamiento (¿quiere dejar las drogas? por una situación en su relación amoro-
¿Cómo?), aunque él se las ingenia para sa e, incapaz de volver a encontrarle un
recuperar algo de ese margen de decisión sentido a su vida por fuera de esa no-
en el tratamiento con metadona. En di- via, comienza a consumir heroína en un
chas maniobras que Renton realiza pode- abandono de todo lo que había construi-
mos ver que se lo que se trata es de hacer do hasta el momento. Cuando Renton
del tratamiento algo propio, de singulari- va a visitarlo meses después, y lo encon-
zar aquello que por definición se propone tramos en pésimas condiciones, viviendo
borrar las diferencias individuales e inter- con VIH, sin muebles ni objetos, en un
personales, puesto que opera bajo pa- colchón raído, desesperado por el próxi-
28 rámetros estandarizados e inamovibles. mo consumo, vemos que no ha podido
Finalmente, estas estrategias –que se le superar ese proyecto fallido de futuro con
presentan como ineficaces para paliar esa novia y que la droga ha intentado lle-
los síntomas de la abstinencia– no ha- nar un vacío imposible.
ABORDAJE BIOÉTICO DEL TRATAMIENTO DE TOXICOMANÍAS: UN ANÁLISIS DE LA SINGULARIDAD EN SITUACIÓN A PARTIR DE LA NARRATIVA...

Por último, una reflexión respecto del presión, no sólo marcada por la falta de
consumo: si bien Renton, hacia el final deseo sino que fenomenológicamente se
del film, parece encontrar una salida me- presenta como aburrimiento o insatisfac-
nos mortificante (propone salir de las dro- ción permanente. Entonces, la sustancia
gas, encontrar un trabajo, comprarse una en sí misma no es lo central en la clínica
casa y un auto), toda la película constitu- con toxicomanías, sino la relación de cada
ye un circuito que se cierra en sí mismo y sujeto con dicha sustancia, el efecto subje-
vuelve a comenzar, nunca por fuera del tivo que conlleva la práctica de consumo
consumo: aún en esta posible salida ale- para cada quien. Por lo tanto, pretende-
jada de tóxicos, no deja de resultar evi- mos romper con la idea que se presenta
dente continúa tratándose del consumo y en el discurso social con respecto al adicto
la saturación de objetos, ahora con otros en tanto “conjunto”, ya que desde una mi-
alcances. rada psicoanalítica es posible evidenciar
que dicho conjunto incluye una serie de
Conclusiones cuestiones sumamente diversas en lo que
respecta a la subjetividad.
A partir de lo desarrollado, es posible
ubicar cierta paradoja en un escenario Tomando el concepto de pharmakon (re-
tan complejo como el de consumo pro- medio/veneno), su operatoria configura
blemático de sustancias: no se puede un modo de autoconservación paradóji-
pensar en la toxicomanía como entidad co que se distingue de un consumo sim-
clínica pero a su vez es necesario resca- ple de sustancias, ya que “el consumo
tar su especificidad en articulación con la problemático de una sustancia puede
bioética, problematizando la cuestión de ser un intento de autocuración, de auto-
qué le produce el tóxico a un sujeto y qué medicación […] un intento para aliviarse
es lo que hace cada sujeto con el mismo. […] paradójico porque alguien se conser-
va de un daño psíquico mayor, aunque
Por otro lado, consideramos que la ca- aplastándose subjetivamente, perdiéndo-
tegoría del “adicto” existe porque hay un se como sujeto” (Duek y Quevedo, 2010,
discurso social que lo nombra, concep- p. 5). El protagonista de Trainspotting
tualización que repite algo de lo que estos ubica esto claramente al decir respecto
sujetos padecen: la aniquilación subjetiva. de inyectarse heroína: “piensa en tu me-
Desde la orientación psicoanalítica, no jor orgasmo, multiplícalo por mil y aún así
podemos decir que este nombre sea váli- no estarás cerca” pero al mismo tiempo
do para todos los que consumen drogas, evidencia sufrimiento en la dependencia
sino que se trata de circunscribir cuál es el constante del tóxico.
lugar o la función del objeto droga para 29
cada quien. La droga es la respuesta que Ahora bien, ¿cuál es el desafío para los
encuentra un sujeto particular para des- psicólogos, para los médicos, para los
embarazarse de la angustia o de la de- bioeticistas? ¿Cuáles son las reflexiones

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finales que podemos proponer a partir de galcohol (Sociedad Científica Espa-


la lectura del film? En principio, haremos ñola de Estudios sobre el Alcohol, el
Alcoholismo y las otras Toxicomanías).
énfasis una vez más en la importancia de
Palma de Mallorca.
la narrativa cinematográfica en tanto po-
tencial de reflexión y de deliberación: a Cambra Badii, I. (2014) “La narrativa ci-
nematográfica como Vía de Acceso a
partir del desarrollo de un largometraje la Complejidad en Bioética”. Tesis de
de 1 hora y 30 minutos pudimos inter- Doctorado en Psicología, Universidad
pelar distintas nociones (tales como be- del Salvador, Buenos Aires, Argentina,
neficios y efectos nocivos, autonomía, la Inédita.
cuestión de la homogeneización y estig- Canguilhem, G. ([1966]2005). Lo normal
matización de los grupos de adictos), es y lo patológico. Buenos Aires: Siglo XXI.
decir, que el recurso cinematográfico no Escohotado, Antonio (1998) Historia de las
sólo es válido si quisiéramos hacer un drogas. Madrid: Alianza Editorial S.A.
uso pedagógico y de difusión, sino más Foucault, M. (2000). Los anormales. Curso
bien, y fundamentalmente, en su poten- en el Collège de France (1974-1975).
cia de pensamiento respecto de las cate- Buenos Aires: FCE.
gorías teóricas y conceptuales del campo Freud, S. (1930) El malestar en la cultura.
de la bioética (Cambra Badii, 2014). Por Capítulo II. Obras Completas, Tomo
XII. Amorrortu Editores: Buenos Aires.
último, volvemos sobre la necesidad de
1976.
distinguir el caso por caso, a la manera
Kamaniecki M., Quevedo S. (2008) Dispo-
de la lectura de un film, que nos lleva a
sitivos clínicos en un Centro de Día en
profundizar en cada situación en lugar de Clínica institucional en toxicomanías.
hacer un análisis del “grupo de adictos” Una cita en el Carlos Gardel. Editorial
en general: el psicoanálisis nos da las Letra Viva: Buenos Aires.
herramientas para interrogar la singula- Le Poulichet, S. (1990) Toxicomanías y Psi-
ridad, y puede utilizarse articuladamente coanálisis. Las narcosis del deseo. Capí-
con los aspectos bioéticos de la situación tulo I. Amorrortu Editores: Buenos Aires.
en un interjuego que no sólo evidencie Michel Fariña, J.J. (2001). “La ética en mo-
tensiones sino que pueda permitir una su- vimiento”. Fundamentos en Humanida-
plementación disciplinar y conceptual. des. Facultad de Ciencias Humanas de
San Luis, 1(2), 13-20.

Referencias Michel Fariña, J.J. y Solbakk, J.H. (2012a).


(Bio)ética y cine. Tragedia griega y
Bobes García, J. y Bobes Bascarán, M. acontecimiento del cuerpo. Buenos Ai-
(2012) “Efectividad a largo plazo de res: Letra Viva Editorial.
los tratamientos de mantenimiento Muhle, M. (2009). Sobre la vitalidad del po-
30 con metadona en personas con adic- der. Una genealogía de la biopolítica a
ción a derivados de opiáceos” en partir de Foucault y Canguilhem. Revista
Adicciones 24(3). Editorial: Socidro- de Ciencia Política, 29(1), 143-163.
ABORDAJE BIOÉTICO DEL TRATAMIENTO DE TOXICOMANÍAS: UN ANÁLISIS DE LA SINGULARIDAD EN SITUACIÓN A PARTIR DE LA NARRATIVA...

Salomone, G. (2011) “El sujeto autónomo UNESCO (2005), Declaración Universal


y la responsabilidad”. La transmisión de sobre Bioética y Derechos Humanos.
la ética. Clínica y deontología. Buenos http://unesdoc.unesco.org/images/
Aires: Letra Viva Editorial. 0014/001461/146180s.pdf
Solbakk, J.H. (2006) “Catarsis y terapia
moral II: Un relato Aristotélico” en Me-
dicine, Health Care and Philosophy.

31

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OPCIONES DIGNAS ESPERANZADORAS FRENTE AL DOLOR, EL SUFRIMIENTO Y EL FINAL DE VIDA

Opciones dignas esperanzadoras


frente al dolor, el sufrimiento
y el final de vida
Nora H. Riani-Llano1

Resumen
Son actos médicos, esencialmente humanas, acompañar y atender cuando una persona
tiene dolor, está sufriendo y entra en un proceso final de vida hasta morir. Propongo, bajo un
enfoque ético biomédico personalista, retomar la dignidad y asegurar la esperanza en cada
individuo que los experimenta. La eutanasia moderna no es un acto médico. A pesar de su
reciente legislación en Colombia, el debate sobre ésta controvertida medida sigue. Aquí, la
racionalidad y elementos que se exponen, demuestran por qué no constituye una actividad
profesional ni un servicio de salud.

Palabras claves: Dolor, sufrimiento, muerte, dignidad, bioética, compasión, cuidados pa-
liativos, atención sanitaria, eutanasia

Humane hopeful options to confront pain, suffering and the end of life
Abstract
Medical activities, essentially humane, include accompanying and caring when a person is in
pain, is suffering and enters the end stage of life until dying. With a humanitarian biomedical
ethic’s focus I propose regaining dignity and ensuring hope in each individual experiencing
them. Modern euthanasia is not a medical act. Despite legislation recently favoring it in
33

1 Pediatra, Bioeticista Clínica. Directora Científica, Coordinadora Curso Bioética para Medicina Pontificia
Universidad Javeriana, Sede Cali. Correo electrónico: nhriani@javerianacali.edu.co

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NORA H. RIANI-LLANO

Colombia, the debate over this controversial topic continues. Here, the rationale presented
and elements exposed show why it is neither a professional activity nor a healthcare service.

Key words: pain, suffering, dying, dignity, bioethics, compassion, palliative care, healthca-
re, euthanasia.

Introducción Discusión
Desde una perspectiva de ética biomédi- Eliminar al paciente – con el fin de eli-
ca personalista, propongo la compasión minar su sufrimiento – no corresponde a
genuina y la compenetración con el su- un verdadero acto de compasión. Lo dice
frimiento del paciente (manejo médico) o la médica bioeticista Paulina Taboada:
con la persona (actitud comunitaria), más este acto lo que elimina es precisamen-
el reconocimiento de la dignidad esencial te la vida, el verdadero bien, el fin en sí
de toda persona, como los elementos fun- mismo de UNA VIDA HUMANA, objeto
damentales que argumentan en contra de real precisamente del elemento afectivo
“la necesidad” de aplicar la eutanasia. y terapéutico llamado “compasión”. Lue-
go, eliminar a la persona que sufre hace
La medicina paliativa, la asistencia sani- innecesaria la compasión, en otras pala-
taria adecuada y las mejores opciones de bras, un acto auténticamente compasivo
cuidados, apoyos y redes familiares y co- tiene la intención de eliminar – o al menos
munitarias son dignas y esperanzadoras aliviar - el sufrimiento y / o sus fuentes, al
opciones compartidas por expertos, en su tiempo que afirma el valor de la persona
mayoría médicos, como Paulina Tabao- que está sufriendo (Taboada, 2011).
da, Cecile Saunders, Gonzalo Herranz,
Felipe Vizcarrondo, Gian Domenico Bo- Minimizar “costos” físicos, emocionales,
rasio y Jesús Colomo. espirituales y sociales PARA la persona
con enfermedad crónica, terminal y/o ca-
En Colombia, debemos analizar éste tastrófica, permitiendo el curso natural de
tema y participar en la debates sobre el la muerte (SIN postergarla pero también
dilema ético que suscita, A PESAR de la SIN PRECIPITARLA) es conocer y ejercer
reciente legislación promovedor de la eu- adecuadamente el principio de propor-
tanasia. cionalidad terapéutica. Es mostrar ver-
dadero respeto y consideración por ésa
persona. Es acertar en el debido recono-
34 Metodología
cimiento del valor de cada vida, buscan-
Ensayo: punto de vista reflexivo, de tema do proveerlo de la mejor calidad posible,
controvertido, con extensas citas literarias. aún en su fase final. Y esto se hace, de
OPCIONES DIGNAS ESPERANZADORAS FRENTE AL DOLOR, EL SUFRIMIENTO Y EL FINAL DE VIDA

verdad se logra, curando, cuidando, ali- del médico y por encima del principio
viando y acompañando; elementos y ac- bioético de no-maleficencia. Pero, a favor
tividades contempladas en el quehacer de los pacientes que exigen sus derechos
diario médico y social. de “morir dignamente” a mano de mé-
Me encanta la citación hecha por Paulina dicos, hay que reconocer que ellos son
Taboada (2011), atribuido a la fundado- precisamente productos tanto de socie-
ra del movimiento hospicio, la inglesa Ci- dades utilitaristas, hedonistas, y pragmá-
cely M.S. Saunders: ticas, como de médicos tecnificados que
los han hecho pensar y aún creer que la
Tú me importas por ser tú, importas has- eutanasia es la mejor salida. Ya sea que
ta el último momento de tu vida y hare-
piensan que son inútiles estorbos, que se-
mos todo lo que esté a nuestro alcance,
no sólo para ayudarte a morir en paz, rán abandonados en su sufrir o contrario,
sino también a vivir hasta el día en que tienen miedo al encarnizamiento terapéu-
mueras. (p. 51) tico, ésta desvirtuada postura es producto
del mundo posmoderno, es resultado de
Como yo lo veo, sólo hay fríos argumen- fallas sociales y tecno-científicas de hoy.
tos a favor de la eutanasia basados en
enfoques utilitaristas, hedonistas, prag- Bajo una equivocada perspectiva se seña-
máticos. Para aplicar dichos enfoques se la el encarnizamiento (error médico que
tiene que contar con una mirada materia- debemos evitar) para justificar otro acto
lista de la persona (y su cuerpo humano), realmente contradictorio al quehacer mé-
hay que verla como OBJETO. Bajo ésta dico. Dicho acto, la eutanasia, tampoco
óptica comúnmente, pero desacertada- tiene similitud alguna con el origen eti-
mente, se aplica de manera extrínseca el mológico de la palabra y su considera-
calificativo “FALTA DE calidad de vida” ción antigua. “Eutanasia” en origen se
con la intención de ponerle fin a una refiere a la BUENA MUERTE, concebido
vida, equivocadamente pensando que se como una buena atención mediante un
justifica. Tanto ver la vida en términos de buen acto médico (valga la redundancia).
“commodity” al que se da o se resta va- Pero, ése buen actuar médico también se
lor, como disponer de ella, es ajeno a la refería y aún incluye hoy primun non noc-
realidad respetable y digna de cada uno cere, también incluye evitar activamente
en, tal vez, el momento más crucial de la distanasia (mala muerte a manos mé-
nuestras vidas. dicos por encarnizamiento). Una cosa es
una cosa y la otra es otra: aplicar un in-
En la actualidad, a favor de la decisión yección letal (eutanasia moderna activa)
eutanásica existe la importancia predo- o desconectar el soporte técnico-terapéu- 35
minante y desequilibrada de la autono- tico (eutanasia moderna pasiva) son ac-
mía de los pacientes por encima de la tuares conscientes de provocar la muerte,
consciencia y compromiso hipocrático que en nada difieren de asesinar.

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NORA H. RIANI-LLANO

Ahora, la ortotanasia2 etimológicamente final de la vida digno, bajo los cuidados


se refiere a asegurar el proceso de morir adecuados”. (Sierra, 2014)
con dignidad, precisamente como pro-
pongo al inicio de ésta reflexión. Sí se Es entonces la ortotanasia la que debe-
reconoce y se respeta la vida de cada mos proporcionar, por ser derecho de
persona individual (intrínsecamente ella todos morir con dignidad, sin el empleo
misma y extrínsecamente por parte de los de medios farmacológicos y técnicos des-
demás) y se busca cumplir con la actua- proporcionados para el sostenimiento de
ción correcta ante la inevitable muerte vida cuando en verdad se está postergan-
por parte de los mismos pacientes y por do una muerte segura. Dice Wikipedia:
parte de los tratantes (todos: médicos, “en este sentido se deberá procurar que
enfermeras, cuidadores, terapeutas, fa- ante enfermedades incurables y termina-
miliares) que atienden al paciente o a la les se actúe con tratamientos paliativos
persona que sufre una enfermedad incu- para evitar sufrimientos, recurriendo a
rable, severa, catastrófica, crónica, grave medidas razonables hasta que la muer-
o terminal, se estará garantizando la or- te llegue. Según Wikipedia (2014): “La
totanasia. Se estará tratando con razón, ortotanasia se distingue de la eutanasia
compasión, proporción al que sufre, ga- en que la primera nunca pretende delibe-
rantizando alivio y dignidad en la etapa radamente el adelanto de la muerte del
final de su vida, sin quitarla ésa vida, has- paciente.”
ta que cesa naturalmente y muere. Qué
mejor que morir aliviado y acompañado, Cada vez más, la ciencia médica y los
sin agresiones ni provocaciones. sistemas de salud han sabido garantizar
ésta, una digna muerte, con minimización
Siendo tan individual, personal y variado del dolor y del sufrimiento mediante ver-
como hay personas, el profesor doctor daderas opciones terapéuticas: el saber
Gian Domenico Borasio (experto actual limitar ése esfuerzo terapéutico, ofrecer
en Medicina Paliativa, que logró la inclu- opciones paliativas, implementar clínicas
sión de las materias cuidados, paliación, de dolor, introducir hospicios y coordinar
espiritualidad y atención del moribundo cuidados en casa, por dar unos ejemplos.
en las facultades de Medicina de Suiza Contrario a esto, el muy reconocido maes-
y Alemania), escribe y publica extensa- tro bioético Gonzalo Herranz (s.f.) resalta
mente sobre la medicina y el acompaña- que la aplicación actual equivocada del
miento para asegurar el bien morir. Dice acto eutanásico contemporáneo se refie-
que consiste en “la esperanza de tener un re a matar sin dolor y deliberadamente,
36 2 Diccionario virtual Real Academia Española:
de ordinario mediante procedimientos
‘muerte dulce’, muerte natural de un enfermo de apariencia médica, a personas que se
desahuciado sin someterlo a una prolonga- tienen como destinadas a una vida ator-
ción médicamente inútil de su agonía http://
dle.rae.es/?id=RGNutzv
mentada por el dolor o limitada por la in-
OPCIONES DIGNAS ESPERANZADORAS FRENTE AL DOLOR, EL SUFRIMIENTO Y EL FINAL DE VIDA

capacidad, con el propósito de ahorrarles Ya revisé porque va en contra de la lex


sufrimientos o de librar a la sociedad de artis, el deber-ser y el acto médico; ahora
una carga inútil. avanzo éstas reflexiones sobre la eutana-
sia rechazando en definitiva el concepto
El 20 de abril 2015 Alejandro Gaviria, y su aplicación actual: PROVOCAR LA
economista a cargo del Ministerio de Sa- MUERTE, peor a manos del médico.
lud y Protección Social colombiano, firmó
la Resolución 1216 que impone la res- No hay forma de negar, ante la realidad
ponsabilidad de hacer eutanasia moder- de los protocolos eutanásicos – que inclu-
na activa a los hospitales y a los médicos, yen instrucciones para preparar cocteles
bajo el eufemismo de Derecho a Morir farmacológicos letales - que estos corres-
con Dignidad. ponden a la eliminación de personas con
enfermedades crónicas o severas, con
Por esto es más importante aún ejercer discapacidades y con malformaciones.
el derecho constitucional de objeción de Se aplican sin alusión alguna a las raíces
conciencia sin alterar el compromiso vo- etimológicas de “eutanasia”, sino bajo
cacional y servicial del acto médico. Al óptica utilitarista y manera peyorativa,
respecto dice el Manual de Ética Médica considerando que estas personas son es-
de la Asociación Médica Mundial en el torbos o sobrecargas emocionales y eco-
Capítulo II sobre El Médico y El Pacien- nómicas (Vizcarrondo, 2014). Peor aún:
te (2009) que “la conciencia del médico, que las personas que padecen desventa-
antes que la legislación o las autoridades jas de salud acepten o prefieran desechar
disciplinarias, puede ser el único medio sus vidas disminuidas, o quieren eliminar
de evitar los abusos de derechos huma- las vidas de sus dependientes, por verlos
nos” cuando se trata de tener que decidir como menos válidas, obedece a un gran
por rechazar atender un paciente en par- fracaso humanitario.
ticular (salvo en caso de emergencia).
¿De cuándo acá las sociedades mo-
Pero más aún no debemos prestarnos dernas aplican valorativos despectivos
para una nueva legislación cuyos matices y objetivizantes a las personas débiles
parecen ser fríamente económicos, pre- desaventajados y dependientes hasta el
texto de racionalizar recursos, mediante punto de justificar eliminarlos? Peor aún
la eliminación de personas enfermas gra- ¿de cuándo acá lo hacen en nombre de
ves o crónicas. nuestra profesión médica? Como no ma-
nifestar nuestro absoluto rechazo.
Si no reflexionamos, si no objetamos, si 37
no ofrecemos otras opciones éticamente No entiendo cómo pueden colegas nues-
válidas, seremos cómplices de una clási- tros practicar la eutanasia; precisamente
ca pendiente resbaladiza. lo que pretendo con ésta propuesta es

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 11, Enero - Junio 2016


NORA H. RIANI-LLANO

contrarrestar la pérdida de criterio pro- de muerte: 1. El estado real biológico de


fundo, la desensibilización y la ausencia muerte y 2. La Muerte Cerebral, diagnos-
de análisis de conciencia de los médicos ticado clínicamente por dos especialistas
en Oregón (EEUU), en Holanda y aho- independientes con al menos veinte-cua-
ra en Bélgica que han ayudado a caer tro horas de diferencia. Otras definicio-
en semejante error (Vizcarrondo, 2014). nes como la de Corazón Parado o Muerte
Peor aún, que sean ellos los que ayudan Circulatoria que trató de implementar una
a legislar semejante práctica, bajo el su- organización estadounidense de Medici-
puesto de acto médico, me entristece. na Interna, es ambigua, peligrosa y falsa
en muchas circunstancias clínicas que ser
Independiente de las pendientes resba- presentan hoy día. Si bien una nueva de-
ladizas que han logrado que los médi- finición aumentaría la disponibilidad de
cos y las sociedades que los presionan órganos donados (tan necesitados en las
se equivoquen, hay que insistir: hacer el listas y programas de trasplantes), estaría
mal está mal hecho a pesar que “todo el fundamentado en un concepto de muerte
mundo” lo está haciendo. Hay que evitar errado haciendo dicha consecución mo-
el fenómeno en que la rutina conlleva a ralmente errada (mala) de raíz (Rady, Ver-
pensar: cómo se puede se hace y después heijde y McGregor, 2007).
de tantas veces ya se asume que está bien
y se normaliza. Por el contrario, hay que La única nueva definición aceptable, di-
reflexionar y deliberar detalladamente; en ferente a la natural biológica, es la de
Colombia estamos a tiempo ya que aún muerte clínica CEREBRAL. Se entiende así
no se ha legislado. el que fue necesario definir ante las mara-
villas del avance técnico-científico médico;
Dada la situación clínica o de cuidado que
al vernos afrontados al hecho de poder
sea, propongo a todos: médicos, civiles,
postergar la muerte biológica segura. Para
comunidades, sociedades y legisladores,
corregir, y efectivamente evitar esto, se
apoyar ahincadamente y siempre hacer el
definió cuando las personas conectadas
bien con respecto a la atención en salud
a máquinas tenían claramente y artificial-
que se brinda. Hacerlo de manera pro-
mente (técnico-científicamente) posterga-
porcionada, recurriendo a las medidas
dos sus muertes. Éste concepto, de origen
necesarias (ordinarias y / o extraordina-
científico, ha sido mayoritariamente acep-
rias), procurando recurrir a la alea tera-
tado culturalmente, éticamente y también
péutica y a los cuidados pertinentes para
ha sido entendido espiritualmente (Johan-
que toda persona sea respetada y bien
nesburg, 2003). Ir más allá, con agalla de
manejada en todo momento de su ciclo
38 vital material (concepción-vida-muerte).
tener nuevas definiciones (justificaciones)
para otras necesidades sin las correctas
Y, para terminar, propongo para éste fin bases éticas, sería otro error adicional (Jo-
que sólo se reconozcan dos definiciones tkowitz, 2008).
OPCIONES DIGNAS ESPERANZADORAS FRENTE AL DOLOR, EL SUFRIMIENTO Y EL FINAL DE VIDA

Para cumplir con la exclusiva alternativa Referencias


de definición de muerte cerebral es im-
Taboada, P. (2010). Principios éticos relevan-
portante acogerse a - aceptando la pro- tes en medicina paliativa. En A. Palma,
puesta bien analizada y estudiada - Jesús P. Taboada y F. Nervi (Eds.) Medicina
Colomo Gómez, quien explica que la Paliativa y Cuidados Continuos (pp. 41-
muerte cerebral TOTAL es la destrucción 52) Recuperado de http://cuidadospalia-
tivos.org/uploads/2011/11/MEDICINA%20
de toda la masa encefálica, en cuyo caso
PALIATIVA%20baja.pdf
se cumple la triada de a) pérdida de fun-
ciones cognoscitivas, b) pérdida de la Sierra, Z. (25 agosto de 2014). Entre-
vista a Gian Domenico Borasio “La
coordinación de los sistemas vitales y c)
buena muerte no existe”. EL TIEMPO.
garantía de la irreversibilidad del proceso Recuperado de http://www.eltiempo.com/
(Colomo, 1994). estilo-de-vida/salud/entrevista-de-el-tiempo-
a-domenico-borasio-experto-en-medicina-
paliativa-y-eutanasia/14431660
Conclusión
Herranz, G. (s.f.) Los médicos y la Eutana-
Mientras no suceda la muerte biológica sia. Recuperado de http://www.muerte-
natural o la muerte cerebral total, pro- digna.org/textos/euta29.html

pongo que se respete la vida de cada Ministerio de Salud y Protección Social.


persona, que se salvaguarde su dignidad, (2015). Resolución 1216 de 2015: Cum-
plimiento de la Sentencia T-970 del 2014.
que se tenga máxima compasión e inten-
Recuperado de https://www.minsalud.gov.co/
ción de aliviar ante cualquier muestra de Normatividad_Nuevo/Resoluci%C3%B3n%20
sufrimiento y dolor. Propongo que primen 1216%20de%202015.pdf
los imperativos terapéutico y de buen Williams, J. Asociación Médica Mundial.
cuidado, evitando el daño y procurando Manual de Ética Médica (2009). [Des-
hacer el bien hasta que de verdad haya cargado en archivo PDF] 2ª Ed. Francia:
llegado la muerte. Así podremos ejercer AMM; Recuperado de http://www.
wma.net/es/30publications/30ethicsman
a conciencia la bondad de nuestra pro-
ual/pdf/ethics_manual_es.pdf
fesión; y la comunidad en que vivimos
Vizcarrondo, F. (2014). Neonatal Eutha-
entenderá, aceptará y colaborará. Entre
nasia: The Groningen Protocol. Ame-
todos tejaremos la red social más huma- rican College of Pediatricians: Position
nista y apropiada posible para el ocaso Statements of the College: Life Issues.
de cada vida. Recuperado de http://acpeds.org/the-co-
llege-speaks/position-statements/life-issues/
Termino con una nota personal: ante la neonatal-euthanasia-2

muerte, al finalizar ésta vida terrenal, Rady, M., Verheijde, J. y McGregor, J.


(2007) “Non-Heart-Beating,” or “Car-
además aspiro que den Santa Sepultura
diac Death,” Organ Donation: Why We
39
al ser material (cuerpo, cenizas) que dejo
Should Care. Journal of Hospital Medi-
atrás. cine; 2(5):324-334.

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 11, Enero - Junio 2016


NORA H. RIANI-LLANO

Johannesburg, C. (2003). Organ Donation and Moshe Feinstein. Journal Medical


and Determination of Death. ZENIT. Ethics; 34: 706-709. doi: 10.1136/
Disponible en: http://www.zenit.org/en/ jme.2007.023267
articles/organ-donation-and-the-deter- Colomo, J. (1994) Muerte cerebral: Algu-
mination-of-death nas precisiones en torno a un concepto
Jotkowitz, A. (2008). Theological reflec- ambiguo. Cuadernos de Bioética, pp.
tions on donation after circulatory 165-170. Recuperado de http://aebioe-
death: the wisdom of Paul Ramsey tica.org/revistas/1994/3/19/165.pdf

40
AMBIENTALISMO MODERNO O ECOMODERNISMO: UNA VISIÓN PRAGMÁTICA DE LOS PROBLEMAS AMBIENTALES

Ambientalismo moderno
o Ecomodernismo:
Una visión pragmática de los
problemas ambientales1
Esteban Rossi2

Resumen
Si le preocupa la biodiversidad, le disgusta la pobreza y está dispuesto a probar nuevas
tecnologías con una dosis moderada de optimismo, probablemente estará de acuerdo con
la propuesta del movimiento ecomodernista. En abril 2015, los líderes de este movimiento
publicaron su Manifesto provocando un debate entre los ambientalistas. Recientemente la
propuesta del Ecomodernismo ha inspirado a investigadores, empresarios, filántropos y
funcionarios gubernamentales a revisar sus estrategias para enfrentar los problemas am-
bientales. En este ensayo describo como el Ecomodernismo nos invita a repensar algunos
de nuestros supuestos acerca de la naturaleza, la política y la tecnología para renovar el
movimiento ambientalista. El Ecomodernismo ha hecho contribuciones importantes sobre la
conservación de la biodiversidad y la necesidad de aumentar la disponibilidad de energía.
Es muy posible que estas contribuciones enriquezcan el trabajo de la de ecología política y
la ética ambiental y permitan abrir nuevos espacios políticos.

Palabras clave: conservación, desarrollo, energía, medio ambiente.

1 La versión electrónica de este artículo, disponible en la página web del Instituto de Bioética (http://www.
javeriana.edu.co/ins-bioetica/publicaciones), incluye enlaces que pueden ser consultados por quienes estén
interesados en las temáticas que aquí se plantean. Una primera versión de este texto, en inglés, se encuentra
disponible en: http://www.ecomodernism.org/responses/2015/8/26/ecomodernism-environmentalism-for- 41
everyone-1
2 Profesor Asistente, Instituto de Bioética, Pontificia Universidad Javeriana. Doctor en Geografía, Universidad
de Clark; Maestría en Ciencias Ambientales, Universidad de Yale; Biólogo, Pontificia Universidad Javeriana.
Áreas de interés: gestión ambiental, ecología política, teoría crítica. Correo: esteban.rossi@javeriana.edu.co

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ESTEBAN ROSSI

Abstract
If you worry about biodiversity, dislike poverty, and are willing to try new technologies with
a fair share of optimism, you are likely to agree with the ecomodernist proposal. Last year,
the leaders of the ecomodernist movement published their Manifesto provoking a vigorous
debate among environmentalists. Yet, the manifesto, and Ecomodernism more broadly, has
inspired a number of academics, business leaders, philanthropists and government officials
to revise their strategies to address environmental problems. In this essay I argue that eco-
modernism invites us to rethink some of our deeply held assumptions about nature, politics,
and technology in order to renew environmentalism across the world. Engaging with eco-
modernism can also enrich debates in political ecology on issues ranging from biodiversity
conservation to energy and open new spaces for political debate.

Key words: conservation, development, energy, environment.

Ecología sin Naturaleza pacios representan la forma sublime de


la Naturaleza, ampliamente descrita por
Desde hace décadas, científicos, huma- los escritores románticos del siglo XVIII, y
nistas y filósofos se han preguntado que es despiertan profundos sentimientos entre
la Naturaleza y como la podemos cono- las personas. Sin embargo, la belleza de
cer. La conceptualización de la naturaleza estos lugares no los hace más o menos
ha sido una preocupación fundamental naturales que un cultivo de café o una
de la modernidad. Sin embargo, la res- plantación forestal.
puesta todavía es incierta. Para algunos,
la naturaleza es una totalidad que inclu- De forma similar, investigadores de di-
ye a todos los seres vivos: los jaguares versas orientaciones teóricas, entre los
en la selva tanto como los mosquitos en que se destacan William Cronon, Neil
el jardín. La naturaleza es una categoría Smith, Alston Chase y Arturo Escobar,
donde caben los organismos biológicos, han señalado que la naturaleza es una
los fenómenos climatológicos y las fuer- construcción social, una metáfora cuyo
zas geológicas, es decir casi todo. Para significado es culturalmente especifico.
los científicos, la naturaleza es una abs- William Cronon, en un ensayo clásico
tracción que describe todo aquello que titulado “The trouble with wilderness”,
no es humano, es decir el mundo biofí- muestra como proyectamos nuestros an-
sico y que incluye aquellos lugares y pai- helos y carencias en una idea de la natu-
sajes hermosos que cautivan la mente raleza que a veces no se ajusta a nuestras
humana. Entre estos lugares cautivadores preferencias. Para Cronon, la naturaleza
42 se destacan: Caño Cristales, en el Meta, salvaje que hay que proteger no es más
las cataratas del Niagara en la frontera que una fantasía humana. Neil Smith, por
entre Canadá y Estados Unidos, y las sa- su parte, nos recuerda que la naturaleza
banas del Serengueti en Kenia. Estos es- es un producto social, creada y recreada
AMBIENTALISMO MODERNO O ECOMODERNISMO: UNA VISIÓN PRAGMÁTICA DE LOS PROBLEMAS AMBIENTALES

para satisfacer nuestras necesidades. La naturaleza como una totalidad probable-


naturaleza no solo tiene una historia, sino mente nunca existió (Cronon, 1995).
que refleja las relaciones sociales que la
producen. Por tanto, debemos recordar Por otra parte, desde un punto de vista
que los paisajes agrícolas, sistemas agro- puramente teórico, es posible concebir la
forestales, plantaciones, parques y saba- naturaleza como un significante, es decir
nas ganaderas son producto del trabajo una categoría vacía a la cual le asigna-
humano. De forma similar, el filósofo y mos significado de acuerdo con nuestros
escritor Alston Chase describe uno de los intereses y valores. Así los significantes
conflictos ambientales más importantes adquieren contenido de acuerdo a la for-
de la historia de Estados Unidos: la lucha ma en que se articulan en un discurso;
entre los conservacionistas interesados en por ejemplo, categorías como la libertad,
proteger las especies en peligro y las co- o la democracia, pueden adquirir distin-
munidades locales dedicadas a la explo- tos significados de acuerdo a la forma en
tación maderera en la región del Pacifico que se definan en un discurso político.
Norte de Estados Unidos. Chase muestra Por tanto, dado que la libertad puede ad-
que la aplicación de ideas científicas en quirir múltiples significados, se considera
políticas públicas está plagada de proble- un significante y no un concepto que se
mas y nos recuerda que las políticas para pueda definir de forma precisa.
proteger los recursos naturales y las espe-
cies en peligro con frecuencia perjudican Si consideramos la naturaleza como un
a las comunidades rurales. Chase insiste significante es posible considerar que se
en la importancia política de balancear trata de una construcción social que se
las necesidades de las poblaciones rura- puede redefinir según se requiera. Luego
les con los objetivos de conservación. Por la naturaleza no es un marco de referencia
último, en su libro Territorios de Diferen- para permita interpretar los cambios am-
cia, Arturo Escobar describe detallada- bientales. Por tanto, no podemos regresar
mente el proceso de construcción cultural a un pasado donde vivamos en equilibrio
de la naturaleza, iluminando las conexio- con la naturaleza simplemente porque
nes entre los niveles biofísico, humano nuestra idea de la naturaleza cambia en
y sobrenatural, que son vitales para las el tiempo. A esto se refiere el filósofo Tim
comunidades del pacífico colombiano. Morton cuando propone construir una
Con base en estas ideas, Escobar propo- Ecología sin Naturaleza, una ecología
ne abordar la pregunta sobre la naturale- desconectada completamente de la na-
za desde otras posturas epistemológicas turaleza (Zizek, 2007). Norton propone
y repensar la categoría de Naturaleza. abandonar la idea de la naturaleza como 43
En conclusión, diversas escuelas de pen- una totalidad armónica para reorientar
samiento nos invitan a repensar la idea nuestros esfuerzos y enfocarnos en el ma-
de la naturaleza y nos recuerdan que la nejo de cuencas, bosques y biodiversidad.

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 11, Enero - Junio 2016


ESTEBAN ROSSI

Para Norton la ecología requiere gestión las posturas clásicas de alguna discipli-
y manejo activo para proveer valores de na. Por esta razón el ejercicio de la in-
interés junto con servicios ambientales. terdisciplinariedad implica abandonar
algunos supuestos para considerar con
El primer paso hacia una ecología sin
cuidado nuevas propuestas. Con sus es-
naturaleza consiste en identificar nuestros
tudios sobre los beneficios ambientales
valores de interés, es decir las cosas que
y económicos de la revolución del gas
nos importan o nos preocupan. Identifi-
natural en los Estados Unidos, los eco-
car y comunicar adecuadamente los va-
modernistas ilustraron la importancia de
lores de interés es necesario para que los
la interdisciplinariedad para el ambien-
actores puedan administrar los recursos
talismo Breakthrough Institute (2012). El
para beneficio mutuo. Si los actores ne-
gas natural es abundante, tiene un bajo
gocian adecuadamente sus valores es
costo y es menos contaminante que otros
posible combinar actividades tan distin-
combustibles fósiles como el petróleo o
tas como el aprovechamiento forestal, la
el carbón. Curiosamente, estos beneficios
conservación, la ganadería y los estilos
pasaron desapercibidos para numerosos
de vida rurales. Las herramientas actuales
ambientalistas quienes se enfocaron en
de la ciencia y las tecnologías de la in-
las consecuencias negativas del gas natu-
formación permiten manejar los recursos
ral, específicamente en la contaminación
naturales de forma eficiente, equitativa y
de las fuentes de agua subterráneas. En
sostenible, pero primero debemos iden-
el futuro, probablemente podemos mejo-
tificar nuestros valores de interés para
rar la calidad del debate y analizar tanto
luego precisar objetivos de manejo. Por
los beneficios como impactos ambienta-
el contrario, cuando nos apoyamos en la
autoridad de la “Ciencia” o la noción de les de las nuevas tecnologías a diferentes
“Naturaleza” con frecuencia terminamos escalas. El gas natural es el más limpio de
imponiendo nuestros valores en otras los combustibles fósiles y ha traído bene-
personas, particularmente en poblacio- ficios económicos para toda la sociedad,
nes vulnerables o comunidades rurales. al mismo tiempo, algunos métodos de
Esto no solo es políticamente injusto, sino extracción como la fracturación hidráu-
que contribuye a polarizar las discusiones lica, pueden contaminar las fuentes de
ambientales (Chase, 1996). agua. Por tanto debemos evaluar cuida-
dosamente estos impactos para regular
En segundo paso hacia una ecología sin adecuadamente esta tecnología. En esto
naturaleza consiste en combinar diferen- consiste el abordaje interdisciplinario que
tes disciplinas del conocimiento. Aunque se recomienda para enfrentar los proble-
44 la importancia de la interdisciplinariedad mas ambientales.
ha sido reconocida en la academia, en
la práctica es difícil combinar diferentes En tercer lugar, es necesario analizar
perspectivas sin entrar en conflicto con con cuidado el contexto de los proble-
AMBIENTALISMO MODERNO O ECOMODERNISMO: UNA VISIÓN PRAGMÁTICA DE LOS PROBLEMAS AMBIENTALES

mas ambientales. Dado que este tipo de para reducir la transmisión de la malaria,
problemas combina factores sociales y filtros para el agua para prevenir la dia-
ecológicos que se encuentran ligados al rrea y estufas mejoradas para reducir la
contexto, debemos evitar tanto las gene- incidencia de enfermedades pulmonares.
ralizaciones simples como las soluciones Este tipo de estrategias, aunque muy valio-
excesivamente complejas. Por ejemplo, sas, son insuficientes para las necesidades
en vez de promover el establecimiento de de los más pobres y no reflejan los recur-
áreas protegidas más grandes y numero- sos y la tecnología disponibles actualmen-
sas como principal estrategia de conser- te. Ahora que la posibilidad de erradicar
vación, la invitación del Ecomodernismo la pobreza está a nuestro alcance, las ac-
consiste en colaborar con las comunida- tividades de mitigación son probablemen-
des locales para construir una agenda te inadecuadas. Debemos ser mucho más
común que permita el manejo integra- ambiciosos. Aunque como ambientalistas,
do de los recursos, como han hecho los reconocemos que erradicar la pobreza es
profesionales del desarrollo desde hace una tarea que excede nuestras competen-
décadas (Garrity, 2006). La evidencia in- cias y que los profesionales del desarrollo,
dica que en el largo plazo las estrategias las agencias especializadas y las organiza-
colaborativas que permiten reconciliar las ciones comunitarias están mejor prepara-
necesidades locales con los objetivos de dos para enfrentar este reto. Sin embargo,
conservación tienen mejores probabilida- sabemos bien que el ambiente y el desarro-
des de éxito que las estrategias tradicio- llo se encuentran estrechamente ligados y
nales de conservación (Escobar, 2008). que la política influencia el manejo de los
El manejo de paisajes agrícolas, los sis- recursos naturales y las agendas de conser-
temas silvopastoriles y zonas de uso mixto vación. Entonces debemos preguntarnos:
puede ser tan importante para la conser- ¿qué le ofrece el ambientalismo tradicional
vación como las estrategias tradicionales. (occidental) a los pobres, los grupos vulne-
Así, al identificar nuestros valores de in- rables y los menos favorecidos?
terés, combinar perspectivas y reconocer
la importancia del contexto, podremos Al parecer no mucho. El ambientalismo
enfrentar las debilidades políticas del am- tradicional no cuenta con una propuesta
bientalismo tradicional. clara y atractiva para las personas menos
favorecidas. En general, el establecimien-
to de áreas protegidas y la conservación
Política
de la biodiversidad no han traído bene-
Una de las preguntas políticas más im- ficios importantes a las comunidades lo-
portantes de nuestros tiempos es que tan cales. Es por esto que en el pasado, el 45
rápido podemos erradicar la pobreza ambientalismo tradicional (occidental) ha
material. Ya no se trata simplemente de sido percibido como un movimiento re-
mitigar la pobreza utilizando mosquiteros gresivo, de origen colonial, algunas veces

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 11, Enero - Junio 2016


ESTEBAN ROSSI

elitista y con frecuencia desconectado de los pobres necesitan grandes cantidades


las necesidades y valores de las comuni- de energía para salir de la pobreza.
dades locales. La escritora Emma Marris
describe el problema de la siguiente ma- La posibilidad de obtener energía barata
nera: mientras que las personas afluentes y abundante es atractiva para líderes a la
se preocupan por las especies en peligro, izquierda y derecha del espectro político
las personas pobres se preocupan por por varias razones. Principalmente por-
la próxima comida. Aunque numerosos que los mecanismos tradicionales para
investigadores desde la ecología polí- reducir la pobreza, es decir el crecimien-
tica hasta la antropología, han descrito to económico y la redistribución de la ri-
las limitaciones del ambientalismo tradi- queza, han sido insuficientes y difíciles de
cional, alinear las agendas ambientales implementar. Asimismo, la necesidad de
con los objetivos del desarrollo es todavía ampliar el acceso a la energía es funda-
un desafío (Li, 2007). Por consiguiente, mental porque que sabemos que mien-
si queremos reconciliar el ambiente y el tras las agendas ambientales interfieran
desarrollo debemos hacernos la misma con los objetivos del desarrollo, estos últi-
pregunta ¿que ofrece el Ecomodernismo mos prevalecerán. Esta lección la apren-
para los más pobres? dimos gracias a los repetidos fracasos de
las negociaciones internacionales sobre
La respuesta es energía. El Ecomodernis- cambio climático, desde el protocolo de
mo ofrece ampliar radicalmente el acce- Kyoto (1991) hasta la cumbre de Copen-
so a la energía. Debido a que la energía hague (2009) (da Silva, 2009). Por estas
juega un papel crucial en el desarrollo, razones, desde el punto de vista de los
esta debe ser barata, abundante y cada pobres y los menos favorecidos, la pro-
vez más limpia. El acceso a fuentes de puesta del Ecomodernismo supera am-
energía mejorará la calidad de vida de pliamente al ambientalismo tradicional.
millones de personas mientras que se re-
duce gradualmente el uso de combusti- En el plano personal, el Ecomodernismo
bles ineficientes y contaminantes como la nos invita a reconocer como nuestro es-
leña y el carbón de palo. Los servicios de tilo de vida depende de la disponibilidad
salud, educación y las comunicaciones de energía y de la tecnología moderna
dependen estrechamente de la disponibi- y nos invita a hacer que estos beneficios
lidad de energía. Los procesos industriales sean accesibles para todos. Servicios o
también dependen de la disponibilidad herramientas como el aire acondiciona-
de energía de bajo costo y son funda- do, los sistemas de refrigeración, las es-
46 mentales para el crecimiento económico tufas de gas y los computadores deberían
(Breakthrough Institute, 2014). Por tanto, estar al alcance de todas las personas sin
debemos insistir en lo obvio, el acceso a importar sus ingresos (Moss & Gleave,
la energía es esencial para el desarrollo, 2014). Como ambientalistas y ciudada-
AMBIENTALISMO MODERNO O ECOMODERNISMO: UNA VISIÓN PRAGMÁTICA DE LOS PROBLEMAS AMBIENTALES

nos debemos promover la difusión y el mas políticos como tecnológicos lo que


mejoramiento de estas tecnologías. le ha permitido contribuir a debates so-
bre temas difíciles como la fracturación
Sin embargo, si no logramos un amplio hidráulica (fracking) y la percepción pú-
compromiso político, la energía y la tec- blica del cambio climático (Shellenberger
nología moderna no serán suficientes & Nordhaus, 2009) Lo que es más im-
para producir el cambio social que qui- portante, especialmente para la izquierda
siéramos ver. Erradicar la pobreza y re- académica que desconfía del optimismo
ducir la desigualdad requiere mucho más tecnológico y tiene identificados a sus
que aumentar la disponibilidad de ener- enemigos políticos, Nordhaus y Shellen-
gía. En este sentido, algunos investiga- berger nos invitan a examinar aquellos
dores han manifestado su preocupación supuestos ideológicos a los que nos afe-
por la ausencia de un mensaje político rramos fuertemente.
en el manifestó ecomodernista (Latour,
2015). Tienen razón, el Ecomodernismo Los supuestos ideológicos se refieren al
carece todavía de una bandera política. marco de referencia, o a los referentes
He observado esta esta crítica desde la implícitos que nos permiten abordar pro-
ecología política en varios espacios inter- blemas, interpretar diferentes fenómenos
nacionales. La ausencia de un mensaje y apropiar la realidad. En sus ensayos
político llama la atención porque en la sobre la modernización del liberalismo,
última década dos de los líderes del Eco- Nordhaus y Shellenberger describen
modernismo Ted Nordhaus and Michael como estos supuestos estructuran nuestra
Shellenberger, escribieron artículos im- comprensión de problemas complejos.
portantes sobre temas profundamente Por ejemplo, a propósito de la percepción
políticos como los mercados de carbono del riesgo señalan que aunque en Esta-
y el futuro del liberalismo norteamerica- dos Unidos los accidentes de tránsito son
no. (Shellenberger & Nordhaus, 2011; la principal causa de muerte, los liberales
2008). se preocupan por el cambio climático y
los conservadores por el terrorismo. Los
Con base en estos artículos podemos datos indican que en Norteamérica el
especular sobre la apuesta política del riesgo de muerte asociado al terrorismo o
Ecomodernismo. A primera vista, la po- el cambio climático es bajísimo, sin em-
lítica ecomodernista se puede describir bargo ningún partido le dedica especial
como un liberalismo ecléctico dispuesto atención a la seguridad vial. Esta com-
a cuestionar y quizás reemplazar sus su- paración muestra como nuestra com-
puestos teóricos. Esta flexibilidad intelec- prensión de problemas como el cambio 47
tual es valiosa y merece reconocimiento. climático, la energía nuclear o el desarro-
Una mirada más detallada muestra que llo económico se encuentra fuertemente
el Ecomodernismo aborda tanto proble- influenciada por supuestos ideológicos.

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 11, Enero - Junio 2016


ESTEBAN ROSSI

Una elaboración de este argumento se las que los estados, las organizaciones y
puede encontrar en sus artículos sobre la los mercados puedan interactuar activa-
modernización del liberalismo. mente (Bakker, 2010). Buscando impul-
sar este tipo de estrategias y promover
Para todos aquellos que formamos parte formas más equitativas de distribuir los
de la tradición del ambientalismo libe- recursos, la ecología política en particu-
ral cuyos inicios se asocian al protoco- lar ha combinado la crítica con el acti-
lo de Kyoto (1997), el Ecomodernismo vismo. Estos esfuerzos políticos han sido
nos invita a reducir nuestra confianza inspiradores y en muchos casos exitosos,
en las fuerzas del mercado para distri- pero han causado que factores como la
buir servicios ambientales y a repensar tecnología reciban poca atención.
los factores que impulsan el cambio so-
cial (Shellenberger & Nordhaus, 2011). El cambio tecnológico combinado con
Desde 1997, la comunidad ambienta- transiciones demográficas también pue-
lista, particularmente en el mundo an- de impulsar profundos cambios sociales.
glosajón, ha buscado aprovechar los Las tecnologías de la información (TIC) y
mecanismos de mercado para distribuir la energía están transformando la forma
bienes y servicios ambientales (Berns- en que las personas aprenden, trabajan y
tein, 2001). Hasta el momento y a pe- participan en la vida pública. Cientos de
sar de inversiones considerables, estos millones de personas se comunican regu-
esfuerzos no han arrojado los resultados larmente utilizando el correo electrónico y
esperados. Desde el protocolo de Kyo- las redes sociales, hacen transacciones en
to hasta hoy, los intentos de crear un mercados cada vez más grandes y tienen
mercado global de carbono (CO2) han acceso a mejores herramientas. Además,
sido ineficaces y profundamente con- una gran parte de la información que uti-
troversiales. Las razones para esto han lizamos regularmente está disponible en
sido descritas detalladamente desde la internet de forma casi gratuita. No cabe
ecología política y la economía. Aunque duda que estos avances tecnológicos son
numerosos mercados privados y volun- positivos. Aunque desconocemos cual
tarios continúan operando en varios lu- será el papel de las TIC en la organiza-
gares, su tamaño está muy por debajo ción social y política, las oportunidades
de las metas establecidas por el panel son numerosas. Para aquellos investiga-
internacional del cambio climático para dores que describen y facilitan procesos
estabilizar las emisiones (Forsyth, 2002). sociales desde la ecología política, las
Está claro que el mercado no es sufi- humanidades o las ciencias sociales, el
48 cientemente eficaz para distribuir bienes Ecomodernismo nos invita a considerar
y servicios ambientales. Luego necesi- las oportunidades que ofrecen las nuevas
tamos desarrollar estrategias mixtas en tecnologías.
AMBIENTALISMO MODERNO O ECOMODERNISMO: UNA VISIÓN PRAGMÁTICA DE LOS PROBLEMAS AMBIENTALES

Tecnología vidad y reducir las emisiones de carbono


en varios, aunque no todos, los proce-
Hace tres décadas, el venerado escritor sos industriales. Este proceso se conoce
de ciencia ficción, William Gibson seña- como la decarbonización de la economía
lo: “el futuro ya está aquí, pero no está (Ausubel, 1996). En conjunto, estos pro-
bien repartido” (Gibson, 1984). Des- cesos descritos por ingenieros y ecólo-
afortunadamente, el mensaje de Gib- gos desde hace varias décadas, sugieren
son parece seguir siendo cierto. En la que no hay escases absoluta de recursos,
actualidad, una tercera parte de la po- que la tecnología podría separar el creci-
blación mundial tiene acceso limitado a miento económico de la polución y que el
las tecnologías que hacen posible la vida futuro del medio ambiente podría ser mu-
moderna. Los elevados costos y los con- cho mejor de lo que creíamos en los años
flictos políticos todavía dificultan la difu- noventa. Aunque debemos continuar in-
sión de nuevas tecnologías; sin embargo, vestigando estos procesos con atención,
el avance tecnológico sigue impulsando no cabe duda de que estas son buenas
el cambio social, entre estos avances se noticias. Los ecomodernistas merecen re-
destacan: la telefonía móvil, el internet y conocimiento por señalar la importancia
el gas natural. de la tecnología y la energía para el mo-
vimiento ambientalista.
Desde la primera revolución industrial, el
progreso tecnológico ha incrementado
Criticas al Ecomodernismo
gradualmente la eficiencia y la produc-
tividad en la manufactura. Por esta ra- A pesar de sus aciertos, la izquierda aca-
zón los automóviles, los bombillos y los démica y la ecología política han critica-
computadores son mejores cada año. De do fuertemente el optimismo tecnológico
forma paralela, la productividad agríco- y la falta de contenido político que ca-
la ha aumentado continuamente demos- racteriza al ambientalismo moderno. La
trando que la escasez local o regional principal preocupación radica en que el
de alimentos no se debe a problemas de énfasis en el progreso tecnológico so-
producción sino que obedece a factores cava la lucha política por una sociedad
comerciales, políticos o logísticos. En al- más justa y equitativa. Como esta crítica
gunos países desarrollados, la mecani- se puede abordar de varias maneras, me
zación e intensificación de la agricultura voy a referir solamente a dos preguntas
ha permitido que las áreas marginales se que son especialmente interesantes: pri-
abandonen favoreciendo el crecimiento mero, cual es la relación entre la moder-
de los bosques y la recolonización de la nidad y el capitalismo –mencionada en 49
fauna. Aún más, el progreso tecnológico el manifesto- y segundo, cual puede ser
sumado al uso de combustibles más lim- el efecto del avance tecnológico sobre el
pios ha permitido aumentar la producti- empleo en las próximas décadas.

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 11, Enero - Junio 2016


ESTEBAN ROSSI

Sobre la primera pregunta, la ecología más primitivas de vivir. Afortunadamente,


política señala que el progreso tecno- como señala el manifestó ecomodernista,
lógico forma parte de la narrativa de la las tendencias sociales y económicas su-
modernidad que no se cumplió (Latour, gieren que podemos planear el futuro y
2015). En esta perspectiva teórica, la facilitar la transición hacia una sociedad
modernidad no se puede pensar por fue- más equitativa y disfrutar de un medio
ra del capitalismo y por tanto sus prome- ambiente sano.
sas nunca tendrán lugar en un sistema
económico capitalista. Por consiguiente, La segunda pregunta hace referencia a
aunque la tecnología ha mejorado la ca- un complejo desafió social. A medida que
lidad de vida de millones de personas, sin la tecnología se distribuye y se hace más
un cambio político radical será imposible barata es más probable que numerosos
reducir la desigualdad. Abordar esta pre- empleos rutinarios o manuales sean sus-
gunta requiere redefinir la relación entre tituidos por maquinas, robots o progra-
la modernidad y el capitalismo y anticipar mas. Para tareas repetitivas las maquinas
como se desenvolverá el capitalismo tar- son cada vez mejores que las personas.
dío (Echeverria, 2011). Este es un pro- Algunos estudios sugieren que hasta el
yecto interesante que apenas comienza. 40% de los empleos en Estados Unidos se
Sin duda requerirá considerable trabajo podrían automatizar en las próximas dos
teórico y empírico y en el que se requiere o tres décadas (Ford, 2015). Aunque este
combinar diferentes perspectivas, tanto tipo de predicciones no son muy precisas,
desde el Ecomodernismo como desde la si las tendencias en la producción manu-
ecología política. facturera continúan es posible que muchos
empleos desaparezcan definitivamente. Si
Aunque no sabemos si las nuevas tecno- esto ocurre ¿Cómo podríamos manejar
logías abrirán nuevos espacios políticos, una transición a una sociedad con cada
para estar en posición de aprovecharlos vez menos empleos? ¿Qué tipo de opor-
necesitamos hacer el mejor uso de las tunidades podríamos crear para personas
tecnologías disponibles. Por tanto la pre- con destrezas manuales en un mercado
gunta práctica no es si debemos acoger en el que se requieren habilidades com-
las nuevas tecnologías sino por el contra- plejas y conocimientos adquiridos durante
rio, como construir una sociedad donde varios años? El problema del desempleo
las tecnologías sean accesibles, fáciles de tecnológico tiene profundas implicacio-
usar, baratas y limpias. Algunas comuni- nes, la experiencia de las ciudades post-
dades virtuales como el movimiento del industriales como Detroit (Estados Unidos)
50 software de libre acceso sugieren que esto indica que cuando el empleo desaparece
es posible. Sabemos bien que nuestros los impactos sobre las comunidades son
estilos de vida dependen de la tecnolo- devastadores: drogadicción, crimen, vio-
gía y que no podemos regresar a formas lencia y deserción escolar.
AMBIENTALISMO MODERNO O ECOMODERNISMO: UNA VISIÓN PRAGMÁTICA DE LOS PROBLEMAS AMBIENTALES

Por otra parte, en una sociedad afluente Bakker, K. 2010. Debating green neoliberalism:
y equitativa no es difícil imaginar cómo “The limits of neoliberal natures”. Prog Hum
Geogr, December, 34(6): 715-735.
se podrían crear numerosos empleos de
calidad en educación, salud y servicios Bernstein, S. 2001. The compromise of
sociales. Aunque la transición actual ha- liberal environmentalism. New York:
Columbia University Press. 314 p. ISBN-
cia una sociedad con menos empleos de- 10: 0231120370.
mandara esfuerzos de diversos actores.
Chase, A. 1996. In a dark wood: The fight
En este caso, al igual que en el anterior, over forests and the myths of nature.
el Ecomodernismo y la ecología política USA Transaction Publishers. 535 p.
deben aunar esfuerzos para enfrentar ISBN: 0765807521.
este desafío. Cronon, W. 1996. Uncommon Ground:
Rethinking the Human Place in Nature.
En conclusión, a pesar de las críticas, la Norton Press. New York. 560 p. ISBN:
invitación del manifestó ecomodernista a 978-0-393-31511-0. http://www.william
cronon.net/writing/Trouble_with_Wilderness_
reconsiderar el papel de la tecnología y
Main.html
reconstruir la modernidad merece aten-
da Silva, L. 2009. Speech of the Brazilian
ción. De forma similar, las tendencias en
President at COP15 in Copenhagen.
el desarrollo industrial, la agricultura y la https://www.youtube.com/watch?v=LQz
energía son imposibles de ignorar. No VjDp5WA8 (Consultado 20 Agosto 2016)
cabe duda que examinar estas tendencias Echeverria, B. 2005. Modernity and Capitalism,
de forma interdisciplinaria creara nuevos 15 theses. Theomai (5):11. http://www.re-
espacios de participación política. Aun- dalyc.org/articulo.oa?id=12420823007
que el papel de la tecnología como motor Escobar, A. 1995. Encountering Develop-
del cambio social probablemente seguirá ment: the making and unmaking of the
siendo un tema controversial, espero que third world. Princeton University Press.
346 p. ISBN: 9780691150451.
en el futuro el Ecomodernismo aborde
esta pregunta en dialogo con la ecología Escobar, A. 2008. Territories of Differen-
ce: Place, Movements, Life, Redes.
política. Por último, el Ecomodernismo
Duke University Press. 435 p. ISBN-10:
nos invita a revisar nuestros supuestos y 0822343274
a ser ligeramente optimistas sobre el futu-
Ford, M. 2015. Rise of the Robots: Techno-
ro. Esta invitación es bienvenida no solo logy and the Threat of a Jobless Future.
porque enfrentamos serios problemas Basic books. New York. 334 p. ISBN:
ambientales, sino porque como señaló 17807484859781780748481.
William Gibson, el futuro ya está aquí. Forsyth, T. 2002. Critical Political Eco-
logy: The Politics of Environmental
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ESTEBAN ROSSI

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52
EL USO DE ANIMALES Y LA SIMULACIÓN CLÍNICA: UN MODELO DIFERENTE DE EDUCACIÓN EN MEDICINA

EL USO DE ANIMALES Y LA
SIMULACIÓN CLÍNICA: UN MODELO
DIFERENTE DE EDUCACIÓN EN
MEDICINA
Diana Carolina Estrada Cano1

Resumen
El uso de animales en la investigación y la educación biomédica genera interés dentro del
estudio de la bioética. Se describe la experiencia de algunos médicos con el uso de anima-
les (perros) durante el curso de su carrera, sus vivencias y las distintas reacciones relaciona-
das con esta práctica. Se menciona un recuento histórico sobre el papel de los animales
a través del tiempo, y la influencia que tuvo este proceso en el modelo de educación en
medicina. El legado histórico influyó enormemente en el ámbito científico y biomédico en
el cual, durante muchos años, se han utilizado animales en múltiples áreas así como en
los modelos de educación en las facultades de medicina. Surgieron entonces muchas
inquietudes alrededor del entrenamiento de los estudiantes de medicina con animales y
en las diferentes facultades de medicina alrededor del mundo se empezaron a interrogar
acerca de la necesidad de este tipo de prácticas. Se han desarrollado métodos que no re-
quieren el uso de animales como es la simulación clínica que recrea un ambiente ideal en
el contexto educativo en el cual se presentan situaciones predecibles, consistentes, estanda-
rizadas, seguras y reproducibles. Después de una larga historia de eventos, experiencias y
sufrimientos, existe hoy una sociedad más consciente del valor moral de estos animales y
las generaciones más recientes de médicos tienen un desempeño similar al de aquellos que
recibieron entrenamiento con animales.

Palabras clave: Uso de animales, educación médica.


53
1 Médica pediatra. Profesora Departamento de Pediatría, Facultad de Medicina. Estudiante Maestría en
Bioética, Instituto de Bioética, Pontificia Universidad Javeriana. Correo electrónico: diana.estrada@jave-
riana.edu.co

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 11, Enero - Junio 2016


DIANA CAROLINA ESTRADA CANO

Abstract
The use of animals in biomedical research and education generates interest in the study of
bioethics. It is described the experience of some physicians using animals (dogs) during the
course of their careers, their experiences and the different reactions related to this practice. A
historical account of the role of animals through time, and the influence they had in the men-
tioned medical education model. The historical legacy greatly has influenced the scientific
and biomedical field, in which animals have been used for many areas, as well as the models
of education in medical schools. Many concerns emerged about training medical students
with animals and different medical schools around the world began to question about the
need for such practices. Methods that do not require use of animals have been developed,
such as clinical simulation that recreates an ideal environment in the educational context in
which predictable, consistent, standardized, safe and reproducible situations arise. After a
long history of events, experiences and sufferings, there is now a more conscious society in
terms of moral value of these animals and the most recent generations of doctors have a
similar performance to those who were trained with animals.

Key words: Use of animals, medical education.

Introducción y la influencia que tuvo este proceso en


el modelo de educación en medicina.
La discusión acerca del uso de animales Se mencionarán los cambios que dieron
en la investigación y la educación bio- inicio a un modelo de educación dife-
médica es un tema que me ha generado rente, sin animales y los beneficios de
preocupación, curiosidad e interés dentro los métodos actuales para la enseñanza
del estudio de la bioética. Como docente de ciertas competencias.
de una facultad de medicina, me he inte-
resado por conocer las implicaciones del Hace un poco más de 10 años, el currí-
uso de animales no humanos en el proce- culo universitario de la Facultad de me-
so educativo del médico, sus limitaciones, dicina incluía dentro de las actividades
sus prácticas y las críticas en su contra en académicas de la asignatura de Cirugía,
el actual modelo de educación, así como un taller práctico en el cual algunos pe-
los fundamentos de su uso en el antiguo rros vivos eran los protagonistas, o más
modelo de las facultades de medicina. bien, las víctimas. Se trataba de un la-
boratorio con perros. Estos animales se
En el texto se describirá la experiencia
encontraban en el salón del laboratorio
de algunos médicos con el uso de ani-
bajo efectos de anestesia ya ubicados en
males durante el curso de su carrera,
54 sus vivencias y las distintas reacciones
las mesas de trabajo y allí se iniciaba el
taller con el objetivo de lograr entrena-
que la práctica generaba. Se hará una
miento en ciertos procedimientos como
pequeña reseña histórica acerca del pa-
realización de traqueostomías (paso de
pel de los animales a través del tiempo,
EL USO DE ANIMALES Y LA SIMULACIÓN CLÍNICA: UN MODELO DIFERENTE DE EDUCACIÓN EN MEDICINA

un tubo a través del cuello para garan- rida de muerte pero lo salvé”, (estudiante
tizar la permeabilidad de la vía aérea) de medicina en el año 2001).
ó paso de tubos de tórax (tubo a través
del tórax entre las costillas para drenar La conciencia que tenían los estudiantes
un sangrado). Los perros se quejaban en de medicina con respecto a los aspectos
ocasiones y por tanto existía la duda entre éticos y morales de la práctica con ani-
los estudiantes con respecto a si sentían males era limitada o nula. Era usual par-
dolor durante sus intervenciones. ticipar en este tipo de talleres con perros
en las diferentes facultades de medicina,
Para los estudiantes de medicina era bien y se consideraban necesarios dentro del
conocido que una vez cursaran octavo entrenamiento para adquirir habilidades
semestre tendrían esta experiencia. No quirúrgicas. No existían espacios para
solo generaba angustia el hecho de no discutir acerca de sus implicaciones mo-
saber si aquellos animales sentían algún rales o quizás simplemente se ignoraban
tipo de dolor, también existía una fuerte los aspectos éticos frente al gran peso
sensación de curiosidad y poder, pues fi- que se le adjudicaba a lograr ser bue-
nalmente intervendrían en un cuerpo de nos cirujanos. Hoy en día, los estudiantes
forma “similar” a lo que sería su posterior de la facultad de medicina manifiestan
práctica de vida. asombro y gran sorpresa cuando cono-
cen información acerca de estos talleres
Se generaban múltiples interrogantes: con animales y expresan dudas como las
¿De dónde provienen los perros? ¿Son siguientes: “¿cómo podían cometer se-
perros sanos? ¿Enfermos? ¿Están bien mejante crueldad?” (estudiante de octavo
anestesiados? Al mismo tiempo que se semestre de medicina, 2016), “¿Es ética-
planteaban estos interrogantes se perci- mente correcto?” (estudiante de octavo
bían diferentes reacciones y sentimientos: semestre de medicina, 2015).
algunos expresaban emoción; otros, tris-
teza o enfado. Al entrevistar a algunos Es importante conocer el proceso históri-
médícos que vivieron esta experiencia co a través del cual se ha discutido sobre
durante su carrera, se registraron diferen- el papel de los animales en la sociedad,
tes percepciones: “Inicialmente no quería su rol entre nosotros, su valor moral y su
entrar al laboratorio, luego sentí ganas presencia en actividades con fines edu-
de llorar, y finalmente me daba mal genio cativos. La preocupación por los anima-
con los que lo disfrutaban”, (estudiante de les parece ser algo relativamente reciente
medicina en el año 2001). “Me pareció con la aparición de la legislación, nor-
muy provechoso, aunque sí sentía triste- matividad y penalización correspondiente 55
za por el perro”, (estudiante de medicina (Ley 83, 1989), pero la discusión filo-
en el año 1995). “Yo aprendí a pasar un sófica y teológica se remota a muchos
tubo de tórax en un perro, le hice una he- años atrás. En la Grecia antigua existían

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 11, Enero - Junio 2016


DIANA CAROLINA ESTRADA CANO

diferentes escuelas de pensamiento que refiere a esto de la siguiente manera: “la


estudiaban el valor moral y social de los pregunta no es si pueden razonar, ni si
animales. Los animistas como Pitágoras pueden hablar; la pregunta es si sufren”,
predicaban la compasión hacia los seres (traducción propia), (Bentham, 1823).
vivos, dándoles valor moral y consideran-
do que los animales y los humanos com- Este legado histórico influyó enorme-
partían e intercambiaban “almas”. Por mente en el ámbito científico y biomédi-
otro lado, los mecanicistas se oponían a co en el cual, durante muchos años, se
esta concepción manifestando que ni los han utilizado animales en múltiples áreas
humanos ni los animales tenían alma y, así como en los modelos de educación
por lo tanto, funcionaban como simples en las facultades de medicina. Surgieron
máquinas. De forma común, estas dos entonces muchas inquietudes alrededor
escuelas clasificaban en el mismo nivel a del entrenamiento de los estudiantes de
los humanos y los animales (Self, 1989). medicina con animales. En las diferen-
Existían también otras escuelas, como la tes facultades de medicina alrededor del
vitalista de Aristóteles, quien sostenía que mundo se empezaron a interrogar acerca
los animales si tenían alma pero que ésta de la necesidad de este tipo de prácticas.
nunca sería tan avanzada como la de los Dentro de los currículos de medicina
humanos y que, por lo tanto, nunca se- los animales han sido utilizados primor-
rían considerados pares. Afirmaban que dialmente en áreas como farmacología,
los animales habían sido creados en la fisiología y cirugía y, desde hace aproxi-
tierra para el beneficio de los seres huma- madamente cuatro décadas, se han reali-
nos, concepto que aún es aceptado hoy zado estudios con respecto a la utilidad de
en día con frecuencia (Self, 1989). estas actividades en la formación médica,
especialmente en Norteamérica. En 1994
Más tarde, San Agustín niega que los ani- se realizó un estudio en las 126 facultades
males sean equiparables a los hombres en de medicina de Estados Unidos en el cual
su actividad vital. Santo Tomás de Aquino se evaluaba el uso de animales en estas
se refiere a los animales como criaturas áreas y su obligatoriedad para los estu-
no racionales dispuestas en la tierra por diantes (Ammons, 1995). Se reportó que
Dios para el beneficio de la humanidad. 77 de 125 facultades afirmaban utilizar
Esta tradición continuó con Descartes, animales vivos dentro de sus cursos, más
quien sostenía que los animales no te- específicamente en fisiología (49 faculta-
nían alma y, en consecuencia, no tenían des), laboratorios de cirugía (21 faculta-
ningún status moral. Una vez llegado el des) y farmacología (13 facultades). Los
56 siglo XVIII es notoria la preocupación por animales utilizados más frecuentemente
los animales. Empieza, entonces, la ne- eran perros, seguidos de cerdos, ratones,
cesidad de darles un valor moral por el conejos y gatos. El estudio reveló además
hecho de sentir dolor. Jeremy Bentham se que era evidente la disminución en el uso
EL USO DE ANIMALES Y LA SIMULACIÓN CLÍNICA: UN MODELO DIFERENTE DE EDUCACIÓN EN MEDICINA

de estos animales con respecto a estu- animales como “prácticas innecesarias,


dios de años previos (1985), y muchas de inhumanas y regresivas” (Traducción
las facultades ya habían suspendido este mía) (Hansen, 2014, p.454). Al respecto,
tipo de actividades. Los motivos por los Hansen (2014) afirma: “No hay eviden-
cuales se suspendían estos talleres con cia que sugiera que los estudiantes estén
animales fueron, en orden de frecuencia: recibiendo una educación subóptima por
costos en el mantenimiento de los anima- el hecho de no estar “cortando” animales
les y laboratorios, cambios curriculares, como parte de su entrenamiento ó que el
preocupación por parte de los estudian- hecho de hacerle daño a los animales los
tes, ausencia de profesores entrenados, vaya a hacer mejores médicos” (Traduc-
disponibilidad de videos y otro tipo de ción mía) (p.454).
programas educativos. Reportan la pre-
sencia de protestas por parte de algunos En la educación y entrenamiento médico
estudiantes a partir de las cuales se ge- se han desarrollado métodos que no re-
neraron debates durante las actividades, quieren el uso animal. Uno de ellos es la
creación y distribución de panfletos y pe- simulación clínica. Hace aproximadamen-
ticiones para no participar en las clases e te 50 años se inició su desarrollo como
incluso peticiones para suspender dichos una técnica para reproducir experiencias
laboratorios. reales de pacientes a través de escenarios
adecuadamente guiados y controlados
El estudio publicado por Hansen y Bossen (Corvetto et al., 2013). Se instauró como
el 2002 reportó la disminución en el uso un método para realizar algunas prácti-
de animales en las facultades de medi- cas de forma segura y eficaz. A través de
cina, con un 68% de programas que ya dicha técnica el estudiante interactúa en
no los utilizaban en ninguna de las asig- un entorno que simula la realidad, con
naturas. Adicionalmente, aquellas que sí una serie de elementos, a través de los
los utilizaban, ofrecían a los estudiantes cuales será capaz de resolver situaciones
la opción de asistir o no a los talleres. clínicas de baja o de alta complejidad.
Sin embargo, el estudio menciona tam- Recrea un ambiente ideal en un contexto
bién que el 91.9% de los estudiantes de educativo en el cual se presentan situa-
medicina que tuvieron la experiencia en ciones predecibles, consistentes, estanda-
un laboratorio de animales, la conside- rizadas, seguras y reproducibles (Corvetto
ran una parte importante de su proceso et al., 2013).
educativo y el 90.5% de ellos consideran
que debe continuarse su práctica para el La simulación clínica hace parte funda-
entrenamiento en cirugía. mental en la actualidad del currículo de 57
educación en medicina en varios países,
Muchos miembros de la comunidad mé- y la tendencia es incluirla en un mayor
dica han catalogado las actividades con número de asignaturas médicas y, en

Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 11, Enero - Junio 2016


DIANA CAROLINA ESTRADA CANO

general, en las diferentes profesiones re- ciencias de la salud. Aunque la expe-


lacionadas con la salud como enferme- riencia no es comparable con la inter-
ría y odontología. En varios estudios se ha vención sobre animales vivos respecto
comprobado su validez y su utilidad como a la realidad del procedimiento, permi-
estrategia didáctica para la formación de te el desarrollo de destrezas en ciertos
diversas competencias en estudiantes de procedimientos médicos y habilidades
pregrado y de posgrado (Corvetto et al., quirúrgicas útiles para los futuros mé-
2013). Sirve para el desarrollo de com- dicos y especialistas.
petencias técnicas, habilidades y destrezas
tales como entrenamiento en procedimien- No genera ningún tipo de sufrimiento o
tos médicos cotidianos: intubación orotra- dolor a los animales pues no implica nin-
queal, obtención de accesos venosos, paso gún tipo de contacto con ellos.
de catéteres intraóseos y realización de ci-
rugías endoscópicas. Tales procedimientos Los médicos de las generaciones más
se llevaban a cabo en años anteriores en recientes que no han recibido aquel
los talleres con animales. “entrenamiento” con perros tienen un
desempeño similar al de aquellos que sí
Tiene también implicación en la forma- lo recibieron. Cumplen su labor diaria
ción de competencias relacionadas con sin haber causado dolor ni sufrimiento a
la actitud, la toma de decisiones y la co- algún tipo de animal y cuentan con las
municación, antes de enfrentarse con el aptitudes quirúrgicas necesarias para el
paciente real, aspecto que le suma valor adecuado desarrollo de su profesión. La
a éste método. (Amaya, 2012). Es utiliza- simulación clínica ofrece ventajas desde
da actualmente en Colombia en varios el punto de vista metodológico frente a
programas de educación médica y ha la pedagogía de años anteriores, aunque
tomado mucha fuerza en la facultad de no es del todo comparable con las prác-
medicina de la Universidad Javeriana, en ticas en animales vivos. Después de una
donde se cuenta con un Centro de Simu- larga historia de eventos, experiencias
lación que brinda oportunidad de entre- y sufrimientos, existe hoy una sociedad
namiento en diferentes áreas (Centro de más consciente del valor moral de estos
Simulación Clínica, Pontificia Universidad animales y de nuestro papel como prota-
Javeriana). gonistas desde el estudio de la bioética y
desde la medicina. Reducir la necesidad
La aparición de de técnicas educativas de experimentación con animales se con-
como la simulación clínica abrió un vierte en una prioridad del siglo XXI, al
58 amplio espectro de posibilidades para igual que incrementar métodos alternati-
la formación de los estudiantes de me- vos encaminados al mejoramiento de la
dicina y, en general, para los de las calidad de vida humana.
EL USO DE ANIMALES Y LA SIMULACIÓN CLÍNICA: UN MODELO DIFERENTE DE EDUCACIÓN EN MEDICINA

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Anamnesis Revista de Bioética, Bogotá (Colombia), Nº 11, Enero - Junio 2016

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