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Procesal Civil IMPEDIMENTO, RECUSACIÓN, EXCUSACIÓN Y ABSTENCIÓN
Procesal Civil IMPEDIMENTO, RECUSACIÓN, EXCUSACIÓN Y ABSTENCIÓN
TEMA:
CICLO: VI
MOQUEGUA -2019
DEDICATORIA
Cuan verdadero será lograr tener una justicia equitativa para que se cumplan con los
principios para una adecuada administración de justicia, de alguna manera como afecta
que el a quo, entendido como aquel en que las partes se comprometen para que por vía
de equidad ajuste y transija sus diferencias, cuando de alguna manera tiene él, algún
germen que al momento de administrar justicia perturbe su raciocinio, y pierda a
consecuencia de ello la equidad.
1. CONCEPTO.
En sentido general quiere decir obstáculo, estorbo para alguna cosa. En general se
refiere a la institución en la cual prescribe bajo que supuestos él a quo está
impedido de ser parte del proceso, estos supuestos lo encontramos en el Art. 305
del Código Procesal Civil. En esta situación el juez el que dilucida el impedimento
que la ley le prescribe para no estar dentro del proceso.
En esta situación el juez quien debe ser el que declare impedido de conocer tal
proceso, en concordancia del Art. 311 del Código Procesal Civil; se supone que el
juez debe ser el mismo que declare su impedimento, sea quien dilucide si es que
cayese en alguna causal prescrita en el Art. 305 del Código Procesal Civil.
2. CAUSALES DE IMPEDIMENTO.
Si un juez está sometido bajo cualquier causal descrita en el artículo 305 del CPC
está obligado a declararse impedido tan pronto advierta la existencia de ella. Tales
casuales son taxativas y deben, por lo tanto, interpretarse restrictivamente. Si no lo
hace, cualquier parte podrá formular contra él una recusación, para que no conozca
de la actuación o del proceso. En ese sentido léase el artículo 312 del CPC.
En los que refieren a la actividad procesal, ubicamos a los incisos 1 y 5; esto implica
que está impedido de intervenir si ha sido parte en el proceso o haber intervenido
como juez en otra instancia. Aquí opera el prejuzgamiento, en cuya virtud es
admisible apartar del conocimiento del proceso al juez que ya ha exteriorizado su
opinión acerca de la forma de resolver las cuestiones debatidas en aquel. Tampoco
Situación especial merece el caso del juez que asume el proceso en el que su
antecesor había designado curadora procesal a una abogada, íntima amiga del
nuevo juez, por lo tanto, si bien ello no constituye causal de impedimento porque
no está en las causales del artículo 305, debemos ubicarla como una causal de
recusación según el inciso 1 del artículo 307, de ahí que para evitar la recusación de
parte, la abogada podría renunciar al cargo de curadora o el juez abstenerse de
Artículo 306: “El juez que se considere impedido remitirá el expediente a quien
deba reemplazarlo. Si éste estima que los hechos expuestos por
aquél no constituyen causal de impedimento, remitirá el expediente
al superior en consulta para que en el término de tres días y bajo
responsabilidad, resuelva sin más trámite sobre su legalidad.
Aceptado el impedimento se enviará el expediente al juez que deba
reemplazar al impedido; en caso contrario, se devolverá al Juez que
venía conociendo. En las Cortes, el juez que se considera impedido
informará a la respectiva Sala expresando la causal invocada. La Sala
resolverá, sin trámite, integrándose con el llamado por ley. Aceptada
la abstención, pasa el conocimiento del proceso al que corresponda.
La resolución que resuelve la abstención es inimpugnable”.
La norma señala que el superior resolverá sin mayor trámite sobre su legalidad del
impedimento. Aceptado el impedimento se enviará el expediente al juez que deba
reemplazar al impedido; en caso contrario, se devolverá al juez que venía
La norma también regula el supuesto de que en las salas de las cortes uno de los
vocales estuviere impedido de conformar colegiado, pero no regula la posibilidad
de que todos los integrantes de una sala estuvieren impedidos. En este supuesto,
opinamos que debe conocer de esos impedimentos la sala que sigue en el orden de
tumo o la asignada de manera aleatoria.
II. RECUSACIÓN.
1. CONCEPTO.
La ley concede a las partes en un juicio civil, penal o laboral, reclamar que un juez,
uno o varios miembros de un tribunal colegiado, se aparten del conocimiento de un
determinado asunto, por considerar que tienen que ver sus propios intereses
dentro del proceso, o que lo han prejuzgado.
Se puede dar de dos clases: sin expresión de causa o con expresión de causa, en la
primera, el justiciable se reserva el motivo específico para pedir la separación del
juez, en la segunda se ampara en algunas de las causales establecidas en la ley, pero
la corriente doctrinaria prefiere que se haga alegando que el recusado se encuentra
comprendido en alguna de las causas que concretamente enumeran los códigos
procesales.
La recusación sin causa ha sido objetada por muchos tratadistas, basándose en que
esta expresión importa una injuria para los magistrados, de tal motivo ha sido
suprimida de la mayoría de las legislaciones. En contrario sensu de lo enunciado,
Hugo Alsina la considera uno de los medios más eficaces que pueda ponerse en
mano de los litigantes para poder sustraer a la potestad de los malos jueces.
2. CAUSALES DE RECUSACIÓN.
Las partes pueden solicitar que el Juez se aparte del proceso cuando:
Palacio define a la recusación como "el medio acordado por la ley para apartar del
conocimiento de un determinado proceso al juez cuyas relaciones o situación con
alguna de las partes, o con la materia contravenida en aquel, sean susceptibles de
afectar la garantía de imparcialidad que es inherente al ejercicio de la función
judicial".
La recusación tiene que fundarse en algún motivo, esto es, debe ser causada.
promueve un incidente contra el juez, invocando hechos y situaciones jurídicas
3. OPORTUNIDAD DE RECUSACIÓN.
4. IMPROCEDENCIA DE LA RECUSACIÓN.
Artículo 309: No son recusables:
1. Los Jueces que conocen del trámite de la recusación.
2. Los Jueces comisionados y quienes deben dirimir conflictos de
competencia.
3. Los Jueces que conocen de los procesos no contenciosos.
La norma enumera los casos en que no procede la recusación del juez, por citar, en
los casos de declaración voluntaria, en los de comisión, en los que conocen del
trámite de la recusación y en los que tienen que dirimir conflictos de competencia.
Debemos agregar que tampoco procede la recusación contra el juez por las
manifestaciones formuladas en la audiencia de conciliación (ver el artículo 324 del
CPC).
La regla general que se aprecia es: "Solo puede formularse recusación hasta antes
del saneamiento procesal; ello resulta coherente con lo dispuesto en el artículo 308
"la recusación se puede formular hasta cinco días antes de la audiencia, donde se
promueva la conciliación".
Frente a la regla general citada, aparece una excepción, los procesos ejecutivos.
Procede la recusación en ellos siempre que la causal se sustente en documento
fehaciente y sea propuesta dentro del plazo para la contradicción; luego de ello, la
parte pierde el derecho de deducir esta clase de recusación en el supuesto de no
haberlo ejercido; sin embargo, podríamos aplicar por extensión lo regulado en el
artículo 308 del CPC cuando se refiera a una causal sobreviviente.
En igual sentido, los comisionados para la actuación de algún acto procesal fuera de
la competencia del juez del proceso tampoco son recusables, porque no definen la
litis, todo lo contrario, su intervención está focalizada a una actividad de asistencia
o de colaboración, en particular, ante la incompetencia territorial del juez
comisionante, pero no se debe olvidar las atribuciones del juez exhortado para
aplicar, de oficio, los apremios que permite el Código. En igual forma, en los casos
de contienda de competencia, el juez que le corresponde dirimir este conflicto,
tampoco puede ser apartado del proceso, balo el argumento de la recusación, pues
no se justifica la provocación de un doble cuestionamiento a las incidencias del
proceso, como sería la incidencia a la competencia y a la recusación.
Artículo 310:La recusación se formulará ante el Juez o la Sala que conoce el proceso,
fundamentando la causal alegada. En el mismo escrito se ofrecerán los
medios probatorios, excepto la declaración del recusado, que es
improcedente.
Ello resulta coherente con lo que regula la norma en comentario: no será necesario
integrar el Colegiado, salvo en caso de discordia que justifica llamar a otro juez. El
artículo 145 de la LOPJ hace referencia al mecanismo de conformación de una sala,
en caso de discordia de uno o más vocales.
La norma prevé que, si el juez se resiste a retirarse del proceso, la parte podrá
formular contra él una recusación, para que no conozca de la actuación o del
proceso. Para que proceda la recusación se requiere que se expongan por escrito
ante el juez del proceso los motivos alegados para recusar que señala el artículo 307
del CPC y se adjunten las pruebas de los hechos en los cuales se funda. Sobre el
particular léase el artículo 310 del CPC que describe el procedimiento para la
recusación.
III. ABSTENCIÓN.
Artículo 313: Cuando se presentan motivos que perturban la función del juez, este,
por decoro o delicadeza, puede abstenerse mediante resolución
debidamente fundamentada, remitiendo el expediente al juez que
debe conocer de su trámite.
La abstención es el deber te cada juez de apartarse del conocimiento del proceso por
considerarse parcializado. La norma en comentario permite al juez abstenerse, no por
En lo que atañe al derecho de abstención, la ley adopta una fórmula flexible, porque
remitiendo fundamentalmente a las motivaciones subjetivas del juez, tiende a respetar
todo escrúpulo serio que este manifieste en orden a una posible sospecha sobre la
objetividad de su actuación. En ese sentido, la redacción de la norma señala: "Cuando
se presenta motivos que perturban la función del juez, este, por decoro o delicadeza,
puede abstenerse mediante resolución debidamente fundamenta
Puede darse el caso de que, una vez ejercido por cualquiera de las partes el derecho
de recusar con expresión de causa, el procedimiento aplicable a la recusación no puede
ser obviado por la abstención del juez.
ARTICULO 314: EI pedido de recusación deberá rechazarse sin darle trámite en los
siguientes casos:
Nótese que el inciso 3 de la norma señala que, si no se ofrecen los medios probatorios
necesarios para acreditar la causa de recusación, esta se rechaza; sin embargo, es
precisamente este uno de los argumentos que se utilizan para justificar la recusación
sin causa, pues, se permitiría la posibilidad de apartar del conocimiento del proceso a
un juez que pese a hallarse incurso en alguna causal de recusación, la prueba de los
hechos que la configuran resulta imposible o de dificultosa producción. Otra razón
recae en la conveniencia de brindar a las partes una mínima garantía de selección,
merced a la cual pueden evitarse los inconvenientes derivados de la actuación de un
magistrado negligente.
V. ÓRGANOS AUXILIARES.
Artículo 315: Los auxiliares jurisdiccionales y los órganos de auxilio judicial pueden ser
recusados por las causales contenidas en los artículos 305 y 307 que les
sean aplicables. Asimismo, tienen el deber de abstenerse si se
encuentran afectados por alguna de las causales de impedimento.
Al proceso también concurren los órganos de auxilio judicial. Ellos son mecanismos de
apoyo para hacer realidad los fines del proceso. El artículo 55 del CPC refiere que son
órganos de auxilio judicial el perito, depositario, interventor, martillero público,
curador procesal, policía y otros órganos que determine la ley entre los que podemos
citar, al cuerpo médico forense, a los traductores e intérpretes, entre otros.
Como señala la norma, tanto los auxiliares jurisdiccionales como los órganos de auxilio
judicial pueden ser recusados por las causales contenidas en el artículo 307 del CPC en
lo que sean aplicables.
La recusación es el medio por el cual las partes exteriorizan su voluntad para que otros
sujetos procesales ajenos al juez, no intervengan en el proceso por sospechar de su
imparcialidad. El sujeto activo siempre es la parte y el pasivo los auxiliares
jurisdiccionales y los órganos de auxilio judicial de todas las instancias. Decimos ello
porque, como señala la norma, la recusación se formula ante el juez o la sala
respectiva.
La recusación tiene que ser causada en alguno de los supuestos que refiere el artículo
307 del CPC; en caso contrario se rechazará liminarmente tal como hace referencia el
Por otro lado, tanto los auxiliares jurisdiccionales como los órganos de auxilio judicial
están sujetos a las causales de impedimento reguladas en el artículo 305 del CPC. En
tales circunstancias, tienen el deber de abstenerse si se encuentran afectados por
dichas causales.
Cuando concurre cualquiera de las causales del citado artículo 305 del CPC, dichos
sujetos están obligados a declararse impedidos tan pronto se advierta la existencia de
ella. Tales causales son taxativas y deben, por lo tanto, interpretarse restrictivamente.
Vemos que la intervención del curador procesal permite que una de las partes del
proceso pueda actuar en él a través de otra persona debidamente autorizada para ello.
Su rol es importante frente a la naturaleza de confrontación del proceso. La dualidad
de las partes es un elemento imprescindible para equilibrar la tutela judicial y la
aplicación de las leyes; esa dualidad se va a establecer a partir del emplazamiento. El
curador procesal tiene el deber de intervenir en todos los actos que ocurran durante
el desarrollo del proceso cesando su representación solo frente a la comparecencia del
demandado, por tanto, en atención a la actividad que desarrolla en el proceso, al
curador procesal no podemos atribuirle la imparcialidad que se exige a los demás
órganos de auxilio judicial, llámese perito, traductor, testigos, secretarios, etc.; todo lo
contrario, su intervención en el proceso es parcial porque va a estar orientada a la
defensa de los intereses de la parte a quien representa, esa es su misión, por tanto, el
atributo de la imparcialidad que se exigiría a todo colaborador de la justicia no podría
darse en este supuesto, menos ser pasible de recusación o de abstención bajo las
causales de los artículos 305 y 307 del CPC, pero sí aplicables las reglas del artículo 286
de la LOPJ y los deberes que recogen los artículos 288 de la LOPJ y 109 del CPC.
Desestimada una recusación se aplican los gastos procesales y la multa. Los gastos
procesales comprenden las costas y costos materializados directamente en el
procedimiento de recusación, como son el honorario del abogado, las tasas judiciales,
las cédulas de notificación, los honorarios de los órganos de auxilio judicial, entre otros
conceptos que describen los artículos 410 y 411 del CPC. La regla general que rige para
los gastos procesales señala que estos son reembolsados por la parte vencida. Véase
en ese sentido lo regulado en el artículo 412 del CPC, por tanto, la parte vencida en
esta articulación tendrá que asumir la devolución de dicho3 gastos. A pesar de que la
En relación a la multa se aprecia que esta se impone por no haber sido amparada la
recusación. Para esta sanción no se califica si el pedido fue malicioso o no, tampoco si
se utilizó la recusación sin fundamento alguno o para lograr un objetivo incompatible
con la finalidad de la institución. A tener de lo que señala la norma, el referente
objetivo para su aplicación es la mera derrota. La norma propone que se fije como
sanción pecuniaria el importe no menor de tres ni mayor de diez URP.
Estas son sanciones pecuniarias que se imponen a los sujetos procesales en atención a
su conducta asumida en el proceso. Es una manifestación de la autoridad del
magistrado, indispensable para asegurar la ejecución de las resoluciones judiciales. La
actividad que se exige realizar debe depender de la voluntad del resistente y además
debe ser posible su cumplimiento. No sería razonable exigir a una persona de quien no
depende el cumplimiento o que el hecho se ha tomado en imposible.
No solo los jueces la imponen para asegurar el orden y buen trámite de los procesos,
bajo un rol conminatorio, como se aprecia del inciso 1 del artículo 53 del CPC, sino que
asumen un rol represivo, que mira al pasado y es pronunciada por el juez, de oficio. No
repara el perjuicio que el incumplimiento o cumplimento tardío causa en el proceso.
Responde a un procedimiento coactivo que se ejerce sobre los bienes del resistente
(véase sobre el particular lo normado en la Resolución Administrativa Ne 361-SE-TP-
CME-PJ del 07/08/99).