Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
5 IDP2 - Interpretación Del Negocio Jurídico
5 IDP2 - Interpretación Del Negocio Jurídico
I N S T I T U C I O N E S D E D E R E C H O P R I VA D O I I
Reglas de interpretación
INTERPRETACIÓN DEL NEGOCIO JURÍDICO
Interpretación de la voluntad
La interpretación constituye una revisión ex post de la manifestación de la voluntad, a fin de comprender sus
alcances, solucionar una diferencia de opinión o para integrar una situación no prevista.
La interpretación del acto jurídico es realizada, en principio, por las partes en dicho negocio, pero en caso ello
sea imposible o existan diferencias, deberá ser delegada a un tercero.
1. Textualismo: Interpretación basada en la manifestación del negocio. Se asume que las circunstancias
ajenas al acto son irrelevantes o están subordinadas a lo pactado.
2. Contextualismo: Interpretación basada en elementos ajenos al negocio, que permiten dar sentido a sus
disposiciones. Se busca integrar el acto con información no contenida en este.
Métodos de interpretación
El Código Civil plantea tres métodos de interpretación de los negocios jurídicos, que van desde el recurso directo
la voluntad manifestada, hasta los fines que persigue el acto.
Estos métodos no son excluyentes entre sí; se utilizan de manera complementaria para alcanzar la comprensión de
los alcances del negocio jurídico y de sus consecuencias.
Adicionalmente, existen reglas específicas para la interpretación de determinados actos jurídicos, como los
contratos, que deben ser leídas junto con las reglas generales. Estas son:
1. Interpretación literal.
2. Interpretación sistemática.
La interpretación del contrato se sustenta en la lectura del texto, el cual recoge la voluntad exteriorizada de
las partes.
La interpretación de las condiciones negocio se basa en el significado ordinario de las palabras. Sin
embargo, las partes pueden pactar libremente un significado técnico o específico.
El costo de interpretación del negocio es menor pues el universo interpretativo está limitado por la voluntad
expresa de las partes.
Interpretación literal
Artículo 168º.- Interpretación objetiva Artículo 1361º.- Obligatoriedad de los contratos
El acto jurídico debe ser interpretado de acuerdo Los contratos son obligatorios en cuanto se haya
con lo que se haya expresado en él y según el expresado en ellos.
principio de la buena fe.
Se presume que la declaración expresada en el
contrato responde a la voluntad común de las
partes y quien niegue esa coincidencia debe
probarla.
Buena fe
Artículo 1362º.- Buena Fe Tanto la voluntad expresa de las partes, como
aquella que subyace al negocio, se encuentran
Los contratos deben negociarse, celebrarse y
limitadas por el principio de buena fe.
ejecutarse según las reglas de la buena fe y
común intención de las partes. El principio de buena fe constituye fuente del
contextualismo: la manifestación e intención
detrás del acto deben estar alineadas a conductas
prosociales.
Adicionalmente, la interpretación literal está condicionada por el principio de buena fe. Seguir el contenido
expreso del negocio no puede llevar a resultados contradictorios.
En tanto los negocios jurídicos pueden celebrarse bajo el principio de libertad de forma (salvo excepciones),
la interpretación literal quedará condicionada a aquellas estipulaciones que las partes puedan objetivamente
demostrar.
Interpretación sistemática
Artículo 169º.- Interpretación sistemática El negocio jurídico se asume como una unidad
orgánica, en que todas sus estipulaciones guardan
Las cláusulas de los actos jurídicos se
congruencia entre sí.
interpretan las unas por medio de las otras,
atribuyéndose a las dudosas el sentido que En caso de duda o imprecisión de una cláusula,
resulte del conjunto de todas. debe ser interpretada en función de las demás, a
fin de mantener la unidad del acuerdo.
El recurso a una o más de estas fuentes dependerá de las circunstancias del caso, del contenido del negocio
y la complejidad de la manifestación de voluntad.
El fin objetivo del negocio determinado por el ordenamiento, constituye un punto de partida para interpretar
la voluntad expresada por las partes.
Función económica del negocio
Todo negocio cumple una función económica determinada previamente por la ley, la cual se asume que las
partes buscan en el marco de la buena fe.
La causa objetiva del negocio es su función económica: aquella que surge de la ejecución del acuerdo y
permite la mutua transferencia de utilidad entre las partes.
Ante la imprecisión o falta de negociación de las partes, se atiende a los fundamentos de la institución
negocial: usos y costumbres, prácticas y principios.
La referencia a principios de interacción social permite reducir los costos de transacción, al otorgar un marco
de referencia estándar (y que se asume aceptado socialmente).
Además de la voluntad expresamente declarada en el negocio, se busca contrastar los incentivos detrás del
acuerdo, a fin de determinar qué buscaban las partes con dicho acto.
La identificación de la voluntad real de las partes permite alinear los incentivos que las llevaron a pactar, y así
alcanzar la solución más eficiente en términos sociales.
Identificar la verdadera voluntad de las partes requiere revisar los antecedentes del acuerdo, la negociación y
la actuación de las partes en el desenvolvimiento del mismo.
Permite identificar un patrón de conducta previo que revele las intenciones detrás del acto.
¿Cómo interpretar un negocio jurídico?
Interpretación
literal
Función Interpretación
económica sistemática
Voluntad de las
partes
¿Cómo interpretar un contrato? (Posner)
La interpretación de los contratos se vuelven necesarios en caso exista discrepancia entre las partes. La
solución a la controversia deberá ser planteada por un tercero (juez o árbitro), el cual deberá elegir un
método para integrar el contrato.
Richard Posner propone 4 métodos para interpretar los contratos y solucionar una disputa entre las partes:
Es una fórmula contextualista, pues busca la respuesta a la imprecisión contractual en elementos ajenos o
previos al acuerdo.
Esta interpretación permite llegar a la verdadera intención de las partes en el acuerdo, alineando sus
incentivos al contrato.
Sin embargo, es costoso arribar a dicha conclusión, y podría no solucionar el inconveniente (si es un
imprevisto).
2. La opción más eficiente
Ante la diferencia de opinión entre las partes, se busca la solución más acorde a los términos económicos
del contrato.
Se asume que las partes buscan un interés común y utilidad a través del contrato, el cual se obtiene a través
de la función económica del contrato.
Las partes quienes se encuentran en la mejor posición para definir sus propios intereses.
En caso de ausencia, el intérprete debería proponer la solución que las partes habrían podido alcanzar en
caso de existir condiciones contractuales eficientes (Coase).
3. Una regla para alinear incentivos
Al no existir claridad sobre el interés que las partes buscaban en el contrato, se busca una solución que
permita alinear los intereses de las partes para alentar la negociación.
La parte que redacta el contrato se enfrenta a la posibilidad de una interpretación contraria a sus intereses, lo
que impulsaría a negociar mejores cláusulas para evitar la sanción.
La voluntad de las partes se circunscribirá a la eficiencia económica del contrato, sin perjuicio de la cual los
detalles de la relación tendrán prioridad sobre los intereses estandarizados.
Sin perjuicio de ello, en caso de oscuridad de las cláusulas y ante la imposibilidad (o costo) de asignar una
solución eficiente, se promoverán interpretaciones que permitan alinear incentivos de las partes.
Instituciones de Derecho Privado II