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ALUMNA:

GRADO Y GRUPO:

TEMA DE INVESTIGACIÓN:
SALUD MENTAL

MAESTRO:

POZA RICA, VER. A 3 DE MAYO DE 2024

 ÍNDICE

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA……………….…………….…....... 1

OBJETIVO……………………………………………….…………….……… 2
JUSTIFICACIÓN…………….……………………………….……….……… 3
INTRODUCCIÓN…………………………………………………….………. 4
ANTECEDENTES DE LA SALUD MENTAL……………………………... 2
¿QUÉ ES LA SALUD MENTAL?........................................................... 8
COMPONENTES DE LA SALUD MENTAL………………………………. 9
IMPORTANCIA DE LA SALUD MENTAL………………………………… 10
SEÑALES DE TENER UN PROBLEMA DE SALUD MENTAL………... 12
¿QUÉ HACER PARA CUIDAR LA SALUD MENTAL?......................... 13
¿CUÁNDO BUSCAR AYUDA PROFESIONAL?................................... 14
CONCLUSIÓN………………………………………………………………... 17
BIBLIOGRAFÍA………………………………………………………………. 18
 PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

La importancia de la salud mental en las personas radica en que se

vuelve altamente necesaria para el bienestar en general, en la que se es capaz de
hacer frente a las demandas psicosociales del día a día. Sin embargo, los índices
mundiales estiman muy altos porcentajes sobre la depresión, la ansiedad, el
estrés post traumático, el trastorno bipolar y la esquizofrenia, que son
enfermedades mentales que afectan a más de una de cada cinco personas en el
mundo.

Actualmente se sabe que la salud mental ha sido definida de múltiples

maneras, por diversos estudiosos desde diferentes culturas, lo cierto es que esas
definiciones tienen como punto de encuentro, el incluir el bienestar subjetivo, la
autonomía y el potencial emocional del individuo en cuestión, es decir, van más
allá del funcionamiento biológico de la persona.

La Organización Mundial de la Salud (OMS), frente a esto, da a conocer

que no existe un enunciado único para definir la “salud mental” como tal, y los
conceptos existentes tienen la influencia propia de cada cultura, la influencia
subjetiva de quién o quiénes lo plantean, la influencia de las teorías ya existentes;
sin embargo, salud mental tiene que ver en cómo las personas relacionan su
entorno con la realidad.

Para conocer el estado de la salud mental de una persona es fundamental

tener en cuenta su comportamiento, en cuanto a sus capacidades,
responsabilidades, competencias, su forma de afrontamiento, el manejo de
situaciones estresantes y dificultades vitales, autonomía e independencia,
relaciones interpersonales, entre otras; y de qué manera conduce su vida. Cabe
mencionar que existe un trastorno el cual hace referencia a la significación clínica
de un patrón de comportamiento, psicológico, biológico y disfuncional, ligado con
la salud mental, pero en una etapa que necesita ayuda psicológica y psiquiátrica
para conocer más a fondo el problema que lo causa.

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 OBJETIVO

Ahondar en la investigación del porqué evaluar la salud mental es

importante, así como la necesidad de ayuda psicológica, para disminuir los
factores estresantes y hábitos nocivos de la sociedad, mediante el análisis de
hábitos personales y generales bajo diversos factores que desencadenan
situaciones de riesgo mental.

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 JUSTIFICACIÓN

En la historia de la evolución de la sociedad la salud mental y su estudio

ha sido un desafío para el hombre, en el mundo, cada vez, un mayor número de
personas están interesadas en llevar a cabo estudios sobre ella. La sociedad, la
familia, la persona equilibrada integralmente es prioridad y ha de ser una constate
de alcanzar.

En este sentido se hace necesario realizar estudios, y generar

conocimientos en esta área, proponer estrategias para optimizar la salud mental.
En una sociedad que evoluciona dinámicamente con elementos que
frecuentemente se presentan tales como el estrés, las presiones laborales, el
desempleo, la violencia, entre otros, factores adversos, en la cotidianidad, se
observa a través de los principales sondeos mundiales realizados en materia de
salud mental, que los trastornos mentales tienen una alta prevalencia en muchos
países de bajos y medianos ingresos.

Es así como al realizar la presente investigación se pretende contribuir con

el desarrollo personal y social, de la sociedad en general, luego de conocer el
estado de salud mental en diferentes sondeos en un mismo momento de su
permanencia en ciertos lugares al realizar sus descansos laborales o de algún tipo
de trabajo,( al inicio, en la mitad y al estar finalizando los mismos), con la finalidad
de saber acerca de sus estilos de vida, saludables o no, y brindándoles una
pequeña capacitación de índole informativa para resistir las presiones sociales,
entre otras que en ocasiones le invitan a practicar estilos de vida poco saludables.

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 INTRODUCCIÓN

La salud mental es considerada como el estado de equilibrio entre una

persona y su entorno socio-cultural, de esta manera con ese equilibrio, la persona
puede tener una participación exitosa en lo laboral, lo intelectual y de relaciones
con su entorno, que le permite vivenciar un bienestar y una calidad de vida.

Actualmente se sabe que la salud mental ha sido definida de múltiples

maneras, por diversos estudios desde diferentes culturas, lo cierto es que esas
definiciones tienen como puntos de encuentros, el incluir el bienestar subjetivo, la
autonomía y potencial emocional, del individuo, es decir van más allá del
funcionamiento biológico de la persona.

La Organización Mundial de la Salud (OMS), ha dado a conocer que no

existe un enunciado único para definir “salud mental”, y los conceptos existentes
tienen la influencia propia de cada cultura, la influencia subjetiva de quien o
quienes lo plantean, la influencia de las teorías existentes, sin embargo salud
mental, tiene que ver como las personas relacionan su entorno con la realidad.

Para conocer el estado de su salud mental de una persona es

fundamental su comportamiento, en cuanto a sus capacidades, competencias,
responsabilidades, su forma de afrontamiento, el manejo de situaciones
estresantes y dificultades vitales, autonomía e independencia, relaciones
interpersonales, entre otras y de qué manera conduce su vida.

Al mencionar que existe un trastorno se hace referencia a la significación

clínica de un patrón de comportamiento, psicológico, o biológico, disfuncional.
Para conocer en torno a los trastornos existen variedades de pruebas
estandarizadas, que miden en relación a síntomas somáticos, ansiedad e
insomnio, disfunción social, depresión grave. Principalmente se utiliza para
detectar casos de patología psiquiátrica en las consultas no especializadas.

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 ANTECEDENTES DE LA SALUD MENTAL

Para entender la salud mental es importante echar la vista atrás y revisar

la historia. Los conceptos siempre van de la mano con la sociedad del momento,
la religión y la cultura. Desde tiempos ancestros, las civilizaciones han hablado y
escrito sobre la salud y la medicina, el cuerpo y su relación con el “alma”, con la
mente. ¿Qué recorrido se ha producido para que lo que antes se percibían como
locos o poseídos ahora se reconozcan como personas con una enfermedad como
cualquier otra?

El concepto de salud mental tal y como lo define hoy en día la

Organización Mundial de la Salud (OMS), como un bienestar y no solo la ausencia
de trastornos, no llega hasta finales de 1940. Tras la Segunda Guerra Mundial, se
inician nuevas políticas que contemplan la importancia de cuidar tanto la mente
como el cuerpo, así como empezar a integrar una persona con una enfermedad o
trastorno mental en el sistema de salud general.

Desde una perspectiva histórica, las enfermedades mentales siempre se

han encontrado entre los límites de lo sobrenatural y lo científico. Por ejemplo, ya
en las culturas precolombinas, trepaban el cráneo para que los espíritus malignos
que invadían al enfermo pudieran escapar.

¿Y en la cultura clásica, como se explicaban las enfermedades mentales?

El médico griego Hipócrates de Cos (460 - 377 a.C.) fue el primero en entenderlas
de manera natural. Según él, el desequilibrio de alguno de los cuatro fluidos del
cuerpo (la sangre, la bilis negra, la bilis amarilla y la flema), enfermaba a la
persona. En este sentido, su teoría ya apunta a que existe una relación entre el
comportamiento del paciente y su situación orgánica.

La difusión del cristianismo condujo durante años a conflictos entre el

carácter científico y medicinal y la visión sobrenatural de las enfermedades

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mentales. Se creía que la locura era la posesión del demonio por hacerse con el
alma humana.

Durante la Edad Media, la tradición popular asociaba la locura a una

piedra alojada en el cerebro. Los más ingenuos trataban de librarse de ella
haciendo que se la extirparan. El pintor holandés, El Bosco, en 1501 pintó la
escena.

Más tarde, durante la Edad Moderna, destacan dos personajes en el

recorrido de la salud mental. Uno fue el médico Thomas Willis, considerado padre
de la neurología, porque reconoció la relación entre los nervios cerebrales y las
patologías mentales. El otro fue el filósofo John Locke quien expresó la influencia
en el cerebro de los sentidos y la experiencia. Tal y como se conoce hoy en día, la
salud mental de un individuo tiene mucho que ver con su contexto vital.

Dentro de este marco histórico, nace la psiquiatría y es aceptada como

especialidad médica por la comunidad científica. La psiquiatría entiende que el
origen de los trastornos mentales es genético o neurológico. Una teoría que se
consolida durante el siglo XIX y XX, con las teorías de Sigmund Freud.

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 ¿Quién fue Freud para la historia de la salud mental? Él es considerado el
padre del psicoanálisis porque lo defendía como método terapéutico para las
personas con un trastorno o enfermedad mental.

Se introduce el concepto de inconsciente, el cual esconde las experiencias

dolorosas de la infancia que podrían ser las causantes de dicho trastorno. Según
Freud, el psicoanálisis procura llevar estos recuerdos a la conciencia para así
liberar al paciente.

A mediados del siglo XX comienzan a desarrollarse las clasificaciones

trastornos mentales y manuales de diagnóstico. La sociedad empieza a rechazar
los manicomios y los métodos agresivos como la lobotomía (cirugía en los lóbulos
frontales del cerebro).

En la actualidad, la sociedad y la comunidad científica entienden que los

trastornos o enfermedades mentales deben tratarse con medicación, aunque
también con terapia. Así pues, uno de los objetivos del presente es acabar con la
estigmatización que la historia ha ido acumulando al concepto de salud mental.

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 ¿QUÉ ES LA SALUD MENTAL?

La Organización Mundial de la Salud define la salud mental como “un

estado de bienestar en el cual el individuo es consciente de sus propias
capacidades, puede afrontar las tensiones normales de la vida, puede trabajar de
forma productiva y fructífera y es capaz de hacer una contribución a su
comunidad.”

En base a esta definición, entendemos por salud mental un estado de

bienestar emocional, psicológico y social, en todas las etapas de la vida (desde la
niñez hasta la vejez). La salud mental es importante porque influye sobre nuestros
pensamientos, conductas, emociones y relaciones, así como también sobre
nuestra capacidad de hacer frente a situaciones de estrés, y nuestra capacidad
para tomar decisiones.

Es también relevante entender que la salud mental no es una ausencia de

enfermedad o malestar, sino más bien, un estado general de bienestar que
permite llevar una vida satisfactoria y hacer frente a las dificultades.

La salud mental es un componente fundamental de nuestro bienestar

general que abarca nuestro estado emocional, psicológico y social. Se refiere a la
manera en que pensamos, sentimos y nos comportamos en respuesta a las
diferentes situaciones de la vida. En otras palabras, la salud mental afecta la forma
en que manejamos el estrés, nos relacionamos con los demás, tomamos
decisiones y enfrentamos los desafíos cotidianos.

Contrariamente a lo que algunas personas podrían creer, la salud mental

no se limita a la ausencia de trastornos mentales. Si bien la ausencia de
condiciones como la depresión, la ansiedad o la esquizofrenia es importante, la
salud mental también implica tener habilidades de afrontamiento efectivas,
relaciones interpersonales saludables y un sentido de bienestar emocional y
psicológico.

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 COMPONENTES DE LA SALUD MENTAL

La salud mental incluye nuestro bienestar emocional, psicológico y social.

Afecta la forma en que pensamos, sentimos y actuamos cuando enfrentamos la
vida. También ayuda a determinar cómo manejamos el estrés, nos relacionamos
con los demás y tomamos decisiones. La salud mental es importante en todas las
etapas de la vida, desde la niñez y la adolescencia hasta la adultez y la vejez. La
salud mental se compone de varios aspectos interrelacionados:

 Bienestar emocional: Esto se refiere a la capacidad de reconocer y

manejar nuestras emociones de manera saludable. Incluye ser
consciente de nuestros sentimientos, expresarlos de manera apropiada y
gestionar el estrés de manera efectiva.
 Bienestar psicológico: Este aspecto implica tener una percepción positiva
de uno mismo y de la vida en general. Incluye tener una autoestima
saludable, sentirse satisfecho con la vida y tener una sensación de
propósito y significado.
 Relaciones interpersonales saludables: Las relaciones con los demás
desempeñan un papel crucial en nuestra salud mental. Mantener
conexiones sociales positivas y tener relaciones de apoyo puede mejorar
nuestra salud mental y ayudarnos a superar los momentos difíciles.
 Resiliencia y capacidad de afrontamiento: La capacidad de adaptarse y
recuperarse de las adversidades es un aspecto clave de la salud mental.
Desarrollar habilidades de afrontamiento efectivas nos permite enfrentar
los desafíos de la vida de manera constructiva y mantenernos fuertes
ante la adversidad.
 Equilibrio entre trabajo y vida personal: El equilibrio entre el trabajo, la
familia y el tiempo personal es esencial para una buena salud mental.

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 Mantener límites saludables y tomarse tiempo para el autocuidado es
crucial para prevenir el agotamiento y el estrés crónico.

IMPORTANCIA DE LA SALUD MENTAL

La salud mental es un componente del bienestar general de las personas

que contribuye a una vida plena y satisfactoria. Se cree en la importancia de
cuidar la salud mental por una serie de razones:

 Funcionamiento diario: La salud mental influye en nuestra capacidad para

funcionar en la vida cotidiana. Una buena salud mental nos permite tomar
decisiones adecuadas, manejar el estrés, mantener relaciones
interpersonales saludables y desempeñarnos de manera eficaz en el
colegio, estudios, o trabajo, y en otros aspectos de la vida.

 Relaciones interpersonales: La salud mental afecta nuestras relaciones

con los demás. Cuando cuidamos nuestra salud mental, somos más

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 capaces de establecer y mantener conexiones positivas y significativas con
amigos, familiares, compañeros y colegas.

 Enfrentar el estrés y los desafíos: Nuestra salud mental se puede ver

afectada por diversos factores, como el estrés, las experiencias traumáticas
y las dificultades de la vida. Las personas con buena salud mental no son
inmunes a las dificultades, pero tienen la capacidad de afrontarlas de
manera eficaz, manejar mejor el estrés y buscar ayuda cuando es
necesario.

 Prevención de trastornos mentales: Cuidar la salud mental es

fundamental para prevenir la aparición de trastornos mentales graves, como
la depresión y la ansiedad.

 Impacto en la salud física: La salud mental y la salud física están

interconectadas. El estrés crónico y otros problemas de salud mental
pueden aumentar el riesgo de problemas de salud física, como
enfermedades cardíacas, diabetes, y trastornos auto inmunitarios.

La salud mental es demasiado importante porque puede ayudarle a:

 Enfrentar el estrés de la vida

 Estar físicamente saludable

 Tener relaciones sanas

 Contribuir en forma significativa a su comunidad

 Trabajar productivamente

 Alcanzar su completo potencial

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 Su salud mental también es importante porque puede afectar su salud
física. Por ejemplo, los trastornos mentales pueden aumentar su riesgo de
problemas de salud física, como accidente cerebrovascular, diabetes tipo 2 y
enfermedades cardíacas.

SEÑALES DE TENER UN PROBLEMA DE SALUD MENTAL

Cuando se trata de sus emociones, puede ser difícil saber qué es normal y
qué no. Pero los problemas de salud mental tienen signos de advertencia, como:

 Cambios en sus hábitos alimenticios o de sueño

 Aislarse de las personas y actividades que disfruta

 Tener nada o poca energía

 Sentirse vacío o como si nada importara

 Tener dolores y molestias inexplicables

 Sentirse impotente o sin esperanza

 Fumar, beber o usar drogas más de lo habitual

 Sentirse confundido, olvidadizo, enojado, molesto, preocupado o asustado

 Tener cambios de humor severos que causen problemas en sus

relaciones

 Tener pensamientos y recuerdos que no puede sacar de su cabeza

 Escuchar voces o creer cosas que no son ciertas

 Pensar en lastimarse a sí mismo o a otros

 No poder realizar tareas diarias como cuidar a sus hijos o ir al trabajo o la

escuela

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 ¿QUÉ HACER PARA CUIDAR LA SALUD MENTAL?

El autocuidado es fundamental para cuidar tu salud mental. Algunas

actividades de autocuidado que puedes realizar para cuidar tu salud mental
incluyen:

 Hacer ejercicio: Todas las personas, incluyendo niños, adultos y personas

mayores, deben realizar ejercicio de manera regular. El ejercicio físico es
esencial para cuidar nuestra salud tanto física como mental.
 Socializar con otros: El contacto social incide en la salud mental porque nos
enseña que no estamos solos. Juntarte con un familiar o amigo, o
simplemente rodearte de personas, es una manera de cuidar tu salud
mental.
 Mantener una rutina de sueño que te permita un buen dormir: El sueño es
crucial para el bienestar mental.
 Comer una dieta nutritiva: Una dieta equilibrada con alimentos ricos en
nutrientes es esencial para la salud mental. Evita el exceso de azúcar,
cafeína y alimentos procesados, y busca una alimentación que incluya
frutas y verduras.
 Pedir ayuda. Cuando vivimos situaciones estresantes o difíciles, cuando
tenemos un mal día, o cuando nos sentimos bajonados, podemos pedir
ayuda a familiares, amigos, o seres queridos. Pedir ayuda es una forma de
recibir apoyo social y contribuye a una buena salud mental.

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 ¿CUÁNDO BUSCAR AYUDA PROFESIONAL?

Se debe saber que pedir ayuda también es una manera de cuidar la salud
mental. Acudir a un profesional de la salud para que nos ayude a resolver las
preguntas o inquietudes sobre la salud mental (o la salud mental de un ser
querido) puede ser un primer paso para recibir ayuda y orientación.

Ahora bien, puede ser difícil saber cuándo es el momento de pedir ayuda.
Se recomienda buscar ayuda profesional cuando hay:

 Presencia de síntomas graves: Si estás experimentando síntomas como

pensamientos suicidas, alucinaciones, delirios, ataques de pánico intensos
o episodios graves de depresión o ansiedad, es recomendable buscar
ayuda lo antes posible. De modo similar, si observas cambios en tu peso o
apetito, en tu sueño, o en tu concentración, un profesional de la salud te
puede ayudar.
 Dificultades en la vida diaria: Si notas dificultades o cambios en tu
capacidad para llevar a cabo tus actividades diarias, como concentrarte,
trabajar, estudiar, relacionarte con otros, o cuidar de ti mismo o tu familia,
es importante buscar ayuda. Si notas cambios en tu memoria (por ejemplo,
dificultad para recordar detalles, tareas o responsabilidades) también
sugerimos acudir a un profesional.

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 Duración prolongada de síntomas o dificultades: Si experimentas
síntomas o dificultades que afectan tu salud mental, y estos síntomas
persisten durante un período prolongado sin mejorar por sí solos, es
aconsejable buscar apoyo profesional.
 Cambios en el comportamiento o la personalidad: Si amigos, familiares
o personas cercanas a ti notan cambios importantes en tu comportamiento,
personalidad o estado de ánimo, es una señal para buscar ayuda
profesional.
 Deterioro en las relaciones interpersonales: Si tus problemas o
dificultades personales están afectando negativamente tus relaciones con
amigos, familiares o seres queridos, considera buscar ayuda para abordar
estos problemas y mejorar tus relaciones.
 Abuso de sustancias: Si estás recurriendo a sustancias (alcohol, drogas,
medicamentos no recetados, u otras) como una forma de lidiar con tus
problemas, es importante buscar ayuda.
 Sentimientos abrumadores: Si te sientes frecuentemente abrumado por
emociones intensas y sientes que no puedes manejarlas por ti mismo, un
profesional de salud mental puede proporcionarte herramientas y
estrategias para ayudarte.
 Problemas en el trabajo o el rendimiento académico: Si notas un
deterioro o cambio en tu desempeño en el trabajo o en los estudios, puedes
buscar apoyo.
 Sentimientos persistentes de tristeza o desesperación: Si te sientes
triste, desesperado o sin esperanza durante un período prolongado y estos
sentimientos no desaparecen, es importante hablar con un profesional de
salud mental.
 Conflictos interpersonales importantes: Si tienes problemas de pareja o
familiares, que no logras resolver y te producen un malestar importante, un
profesional te podría ayudar.
 Patrones negativos que se repiten en tu vida: Si una y otra vez te echan
del trabajo, fracasas en los estudios, tus relaciones de pareja terminan mal,

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 o no logras tener relaciones satisfactorias con tus pares, un profesional de
la salud mental te podría ayudar a entender por qué te está ocurriendo esto
y a cambiarlo.
 Preocupación por tu propia salud mental: Si sientes que algo no está
bien con tu salud mental, o tienes preocupaciones sobre tu bienestar
emocional, buscar ayuda profesional es una decisión valiente y sabia.

Hay que recordar, sin embargo, que no es necesario estar en un estado

de crisis o sentirte muy mal para buscar ayuda para tu salud mental. Es más,
abordar los problemas tempranamente es fundamental para prevenir la aparición
de otras complicaciones. La atención de salud mental no se limita a abordar
problemas graves; también puede ser beneficiosa para el crecimiento personal, el
autoconocimiento y el desarrollo de habilidades para afrontar mejor la vida.
Puedes buscar ayuda profesional para lidiar con el estrés, mejorar tus relaciones,
recibir apoyo durante transiciones importantes (como una mudanza o ruptura
amorosa), y otros desafíos de la vida.

También, recuerda que si estás preocupado por la salud mental de un

conocido o ser querido, y no sabes cómo ayudar o qué hacer al respecto, puedes
acudir a un profesional de la salud para recibir orientación y apoyo.

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 CONCLUSIÓN

La presente investigación tuvo como objetivo el ahondar en el tema de la

salud mental, la necesidad de ayuda psicológica, factores estresantes y hábitos
nocivos que presenta la sociedad debido al ritmo de vida que cada uno lleva y que
suele desencadenar en problemas de leves a graves en cuanto a salud mental se
refiere.

La salud mental debe ser motivo de nuestra atención y por una buena
razón, ya que un cuerpo saludable puede prevenir ciertas enfermedades, como
afecciones cardíacas y diabetes, y ayudar a mantener independencia a medida
que envejecemos

No es ninguna sorpresa que cuanto uno mejor trata al cuerpo, mejor trata
a la mente. A lo mejor, pensar que las multitareas nos permiten hacer más cosas
al mismo tiempo, pero en realidad generan más problemas de los que resuelven.

Recordemos que una buena salud mental conduce a una imagen positiva
de uno mismo y, a su vez, a relaciones satisfactorias con amigos y otras personas.
Por ello, tener una buena salud mental ayuda a tomar buenas decisiones y
afrontar los desafíos de la vida en el hogar, el trabajo o la escuela.

¡Cuidémosla!

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 BIBLIOGRAFÍA

ITA Salud Mental, Biografiasyvidas.com, Scielo.org (Revista Española de Salud

Pública ), DraHumbert-psiquiatria.es, CSIC, Redalyc.org , ActivaMent Catalunya
Associación

https://repositorio.uam.es/bitstream/mental-health

https://www.lavanguardia.com/vida/salud-mental.html

https://www.maniapurefoundation.org/post/salud-mental

https://medlineplus.gov/spanish/mentalhealth.html

https://psiconecta.org/blog/la-salud-mental-es-importante

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