Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
1. Identifica qué tipo de respuesta está teniendo el paciente según la descripción del caso;
imagina también qué manifestaciones se podrían dar en una situación como esta en los
ámbitos fisiológico, conductual, cognitivo (pensamiento) y emocional. LILIANA
2. ¿Qué principios de PAP intentarías aplicar al paciente con el propósito de disminuir el
nivel de activación (agitación)? Describe cómo lo realizarías teniendo en cuenta la
comunicación verbal y no verbal (aproximación, tono de voz, información que se
pregunta/ofrece, etc.). URI
3. En el caso de que la mujer estuviese muy desbordada emocionalmente (conducta de
llanto, hiperventilación, sentimiento de desesperanza, incredulidad, confusión, etc.), ¿qué
principios de PAP aplicarías? Describe cómo lo llevarías a cabo. CAROL
4. ¿Qué habilidades y técnicas de gestión de conflictos consideras que se deberían tener en
cuenta para gestionar este tipo de situación? MARC - ELI
La respuesta de nuestro organismo ante una situación de estrés es, se activa nuestro
sistema simpático, siendo su objetivo preparar al cuerpo en todas aquellas funciones
garantizando nuestra supervivencia. Cuando nuestro sistema parasimpático se mantiene
activado, es decir, la experiencia se interpreta como más estresante, la amígdala, está
hiperactiva y en consecuencia, la parte del córtex prefrontal disminuye su funcionamiento,
ya que es nuestra parte más lógica y funcional, es el centro neurálgico de nuestras
emociones, por lo que provocaría mayor dificultad para tomar decisiones o resolver un
problema.
c) Fase de agotamiento: En esta fase el organismo se colapsa por la intensidad del estrés
y pueden aparecer alteraciones psicosomáticas.
Respuesta psicológica que puede aparecer en respuesta a una amenaza, se clasifican en:
REA (Reacción de Estrés Agudo), respuestas emocionales intensas, como la ira, la
tristeza, el miedo, la impotencia, la culpa y el estado de alerta. Estos síntomas duran
aproximadamente entre 24 o 48 horas. TPEA (Trastorno Por Estrés Agudo), siguen
teniendo el mismo nivel de intensidad, puede tener una duración de entre un mes o 30 días.
Pasado este tiempo y continuando la intensidad de los síntomas se puede hablar de TEPT
(Trastorno por Estrés Post Traumático). El grupo de síntomas son los mismos, lo que
varía es la temporalidad (duración).
Dado los síntomas del paciente que presenta sensación de palpitaciones, temblores y
nerviosismo de 12 horas de evolución, está agresivo, comportamiento amenazante,
presenta verborrea, irritable y no ha podido dormir desde hace dos días, se encuentra en
REA en fase de alarma.
Por eso, una de las primeras acciones que proponemos realizar es mostrar compromiso de
ayuda, explicando al paciente que estamos aquí para ayudarle. Dirigiéndonos por su
nombre, le explicaremos que no lo vamos a dejar solo hasta que llegue el Psiquiatra de
guardia. Como este manifiesta que nadie le hace caso, al realizar las acciones anteriores,
hará que sienta que lo acompañamos en el proceso y que le estamos brindando la ayuda
que necesita.
Mientras llega el profesional, le explicaremos que aquí está a salvo, que el peligro ya ha
pasado, nos intentaremos acercar a él con una aproximación tranquila y mostrando empatía
para poder conectar con lo que siente y en consecuencia con el paciente. Esto hará que su
sentimiento de impotencia disminuya. Para todas las acciones que realizamos, le pediremos
permiso al paciente para que no se sienta amenazado.
Es importante fomentar el papel que juega el paciente en todo esto. Intentaremos realizar
una activación eficiente y participativa, pidiendo que realiza acciones y facilitar la toma de
decisiones. Una de las preguntas que se le podrían plantear es cómo cree el que lo
podemos ayudar, o si necesita alguna cosa de nosotros. Fomentaremos la sensación de
control de la situación y respetar los tiempos que él marque.
Por lo que se comenta en el caso, el paciente parece estar orientado en tiempo y espacio.
Esto nos facilitará el poder explicarle lo que le vamos a hacer y fomentar su colaboración.
Durante nuestra conversación con el paciente utilizaremos frases cortas utilizando un tono
de voz tranquilo y neutro e intentaremos evitar discursos extensos. Es de vital importancia
realizar una escucha activa en todo la información que nos brinde la persona e intentaremos
activar la parte más cognitiva y menos emocional.
Finalmente, una vez hayamos conectado con el paciente y esté menos desbordado, le
pediremos que nos explique que ha sucedido durante el día ayudando a centrarse en lo que
está sucediendo. Al estar acompañado con la familia tenemos la posibilidad de apoyarnos
en la red de soporte familiar e intentar que esta partícipe en los momentos que precisen del
proceso.
Ante una situación de agresividad de un familiar es difícil gestionar las propias emociones.
Muchas veces se siente pena, culpa o responsabilidad por la situación en la que se
encuentra nuestro allegado, a pesar de quizás no estar recibiendo un buen trato por su
parte. En casos de brotes de agresividad y donde el paciente requiere de asistencia
inmediata de seguridad y profesional sanitario, dado que claramente no controla ni su
cuerpo ni mente sea por el motivo que sea, es conveniente sacar a la familia fuera de la
habitación/box y hacerla partícipe en todo momento de las técnicas y procedimientos
llevados a cabo, pero sin la visualización de ellos, dado que depende de qué situación
puede alterarlos más.
Es importante tener en cuenta también que aunque nuestro paciente sea el hombre, su
familia también requiere atención. Es por eso que hemos de empatizar con ellos y
anticiparnos a sus necesidades.
Primero de todo nos acercaremos con tranquilidad y firmeza, mostrando seguridad y
determinación en los pasos a seguir pero estableciendo un vínculo de confianza y
sinceridad. Que la familia perciba que su familiar está bajo buenas manos es importante
para que se tranquilicen y confíen en las intervenciones que realizaremos. Hemos de
entender que bajo estas situaciones, los familiares no se encuentran en sus máximas
capacidades para entender todo lo que les comentamos, dado que se ven desbordados. Es
por eso que utilizaremos frases cortas, sencillas y concretas para facilitar su
entendimiento. Un mecanismo efectivo es hacerles sentir eficientes en la actuación, es
por ello que podemos preguntarles qué técnicas consideran que pueden ser efectivas con el
familiar. Por ejemplo, preguntarles; “¿De qué manera crees que podemos ayudar a tu
marido/padre?“. En este caso, dado que es la madre quien está mostrando signos de
ansiedad y nerviosismo, podemos darle un papel más activo a la hija respecto con su
madre, que se la lleve a la cafetería a por una infusión y la tranquilice por ejemplo.
Siempre que sea posible pediremos el consentimiento de los representantes del paciente
si este no está capacitado en el momento para tomar decisiones. En el caso de agitaciones
por ejemplo, es muy probable que el personal sanitario haga uso de la contención tanto
mecánica como farmacológica. En el caso sobre todo de la contención mecánica es
requerible del consentimiento familiar, teniendo especial cuidado con una explicación
tranquila y profesional sobre los motivos de su uso y los beneficios para el paciente. Muchas
veces se tiene el estigma de que las contenciones mecánicas son herramientas de “abuso”
ante el paciente, sin entender los criterios de su uso mismo.
Comunicación no verbal:
Ofrecer opciones:
Involucramiento de la familia: