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Clase Psicopatología Infantil

Clase teórica: Trastornos del neurodesarrollo II

I. Planificación de la clase

I. TEA
● Definición TEA
● Evolución histórica
● Etiología
● Presentación clínica
● Manifestaciones clínicas
● Espectro (gravedad)
● Primeras señales en el desarrollo: “banderas rojas”
● TEA femenino
● Prevalencia
● Comorbilidades
● Evaluación
Trastorno del Espectro Autista
Definición TEA
El Trastorno del Espectro Autista, es una condición del neurodesarrollo caracterizada por una
deficiencia persistente en la comunicación e interacción social, así como por patrones restrictivos y
repetitivos de comportamientos, intereses o actividades, lo cual se da en un mayor o menor grado a
lo largo de toda la vida. Lo anterior, implica que ciertas personas pueden presentar un compromiso
más severo que otras, por lo que, la manifestación de conductas va a variar según cada individuo,
dependiendo de su compromiso cualitativo y cuantitativo (American Psychology Association [APA],
2013).

Evolución histórica
La manifestación clínica de lo que hoy se conoce como autismo o TEA, probablemente ha existido a
lo largo de toda la historia, pero es la terminología exacta y la utilización de determinados criterios,
los que han hecho que históricamente se haya ido diferenciando y separando de otros diagnósticos.
En este intento de caracterizar el autismo, diversos médicos, especialmente psiquiatras, han
aportado a la concepción que hoy en día se tiene del TEA. Para poder realizar este breve recorrido
histórico, se destacan algunos de los aportes considerados más significativos para su comprensión.
● Eugen Bleuler: en 1911 describió síntomas fundamentales para la psicosis esquizofrénica,
creando el término “autismo”, el cual alude a la retirada activa que realizan los pacientes
con esquizofrenia hacia sí mismos o su vida de fantasía, para poder hacer frente a las
experiencias externas intolerables en ese momento (Garrabé, 2012). Lo anterior para el
psiquiatra era el síntoma central de la esquizofrenia (EQZ).
● Leo Kanner: basándose en la terminología “autismo” de Bleuler, en 1943 publicó uno de los
artículos fundamentales de la historia del autismo “Autistic disturbances of affective contat”,
en donde destacó algunos signos en niños/as con características particulares, caracterizando
su diagnóstico como “autismo infantil precoz”. Dentro de las características destacó:
aislamiento autístico (vuelta hacia sí mismos como rasgo central); incapacidad para poder
establecer relaciones; actividades repetitivas y relaciones particulares con determinados
objetos; deseos de mantener la rutina y orden en los objetos; dificultad en el lenguaje y
comunicación efectiva; buen potencial cognitivo, limitado a temáticas de su interés (Artigas-
Pallares, 2012).
● Hans Asperger: en 1944 tras la observación de un determinado grupo de niños/as, describió
ciertas características comunes: dificultad en la habilidad para hacer amigos; falta de
empatía; falta de reciprocidad en las conversaciones; intereses particulares; movimientos
“torpes”; comportamiento como “pequeños profesores” (gran capacidad de hablar sobre
sus propios intereses), siendo esta última característica la que más se resalta en sus
hallazgos. De aquí surge el Trastorno de Asperger (Baron-Cohen, 2015).
● Lorna Wing: promueve los postulados de Asperger al traducirlos del alemán al habla inglesa.
En 1981, realiza distintas propuestas en torno al autismo, el cual lo conceptualiza como un
síndrome, que presenta tres dimensiones sintomáticas básicas o nucleares (triada autista):
dificultades en la comunicación social, particularmente en la reciprocidad; alteración en la
comunicación y el lenguaje verbal y no verbal; alteración en la conducta y en el
pensamiento. Posteriormente añadió los patrones repetitivos de actividad e intereses.
Además introdujo el concepto de “espectro”, al darse cuenta de la diferencias existentes
entre las distintas personas con el mismo diagnóstico (concepto acuñado en el DSM-5)
(Morales, 2010; Wing, 1993), dando cuenta de que el TEA es un continuo (mirada
dimensional y no categorial).

Etiología (Abufhele, 2019; Le Couteur & Szatmari, 2015))


No hay una etiología única bien definida, existen múltiples hipótesis. Sin embargo, se ha llegado a la
conclusión de que el TEA es el resultado de alteraciones complejas del neurodesarrollo que pueden
ocurrir tanto pre como post natal.
Genética
Se ha observado que la genética influye en esta condición:
● Aumento de prevalencia en hermanos y parientes de pacientes con TEA.
● Padres e hijos usualmente presentan manifestaciones leves sub sindrómicas de TEA, tales
como retraso del lenguaje, dificultades en la pragmática del lenguaje, retraso en el
desarrollo social, ausencia de amigos íntimos y rasgos de personalidad rígidos y
perfeccionistas.
● En relación a los genes particulares, si bien se han estudiado algunas anormalidades (por
ejemplo: se han visto anormalidades en el cromosoma 7q y 15q pero que no son
concluyentes), no hay resultados concluyentes en línea con esto.
Hay una multiplicidad de genes y cada uno es responsable solo de una pequeña a moderada parte
del efecto en el fenotipo final.

Neurobiológico
En cuanto a cambios a nivel cerebral se ha observado:
● Cambios en el tamaño cerebral, en específico, macrocefalia.
● Aumento total de la sustancia blanca cortical y patrones anormales de crecimiento en
lóbulos frontal, temporal y estructuras límbicas (amígdala). Lo anterior, pareciera explicar
los déficits que se encuentran en la función ejecutiva (frontal), emocional (área temporal-
medial) y del lenguaje (córtex prefrontal dorsolateral-lóbulos temporales).
● Diferencias en patrones de activación y sincronización en la circuitería cortical, con
disminución de la conectividad funcional relacional con el lenguaje, memoria de trabajo,
cognición o percepción social y resolución de problemas.

Ambientales y perinatales
Los factores ambientales pueden constituir un factor de activación de ciertos factores genéticos
predisponentes a TEA:
● La exposición a tóxicos, teratógenos, infecciones prenatales y noxas perinatales dan cuenta
de una minoría de casos de TEA.
● Sin embargo, el compromiso global de la salud perinatal (condiciones metabólicas maternas,
bajo peso al nacer y menor edad gestacional) podrían aumentar el riesgo.
● Se ha observado que los niños con TEA es más probable que hayan tenido complicaciones
obstétricas como: nacer extremadamente prematuro, hipoxia, sangramiento en el
embarazo, diabetes gestacional materna, entre otros. Sin embargo, sigue siendo un aspecto
a evaluar.
● Edad parental avanzada ha sido asociada con un aumento de riesgo
Presentación clínica: DSM 5

A. Deficiencias persistentes en 1. Deficiencia en la reciprocidad emocional: desde un


la comunicación y la acercamiento social anormal, hasta el fracaso en iniciar o
interacción social en diversos responder a interacciones sociales.
contextos, manifestados en la 2. Deficiencias en las conductas comunicativas no verbales
actualidad o por los utilizadas en la interacción social: desde una comunicación
antecedentes: verbal y no verbal poco integrada, hasta una falta total de
expresión facial y de comunicación no verbal.
3. Deficiencias en el desarrollo, mantenimiento y comprensión
de las relaciones: desde dificultades para ajustar el
comportamiento en diversos contextos, hasta la ausencia de
interés por otras personas.
B. Patrones restrictivos y 1. Movimientos, utilización de objetos o habla estereotipados
repetitivos de o repetitivos.
comportamiento, intereses o 2. Insistencia en la monotonía, excesiva inflexibilidad de
actividades, en la actualidad o rutinas o patrones ritualizados de comportamiento verbal o no
por los antecedentes verbal.
3. Intereses muy restringidos y fijos que son anormales en
cuanto a su intensidad o foco de interés.
4. Hiper o hiporeactividad a los estímulos sensoriales o interés
inhabitual por aspectos sensoriales del entorno.
C. Estos síntomas deben estar presentes en el desarrollo temprano. Sin embargo, debido a que
los síntomas pueden no ser aparentes hasta que las demandas sociales superen capacidades
limitadas, no se especifica un umbral de edad para el "desarrollo temprano".
D. Los síntomas pueden provocar un deterioro clínicamente significativo en el funcionamiento
habitual.
E. Estas alteraciones, no se explican mejor por la discapacidad intelectual o por el retraso global
en el desarrollo.

Manifestaciones clínicas (según área)


(Antes de partir mostrar video Academia de especialistas para dar cuenta del abanico de distintas
características: https://www.youtube.com/watch?v=fCoBk1tWYEg)

Interacción social
Las alteraciones de la sociabilidad pueden variar desde un completo desinterés por otras personas,
tratarlas como objetos o ignorarlas, relacionarse de un modo intrusivo hasta un modo unidireccional
de relación.
Los niños pueden ser distantes, evadir las miradas y el contacto físico. También pueden
entrometerse en el espacio del otro, acercándose demasiado, tocándolos, besándolos u oliéndolos.
Hay niños con funcionamiento más alto que si tienen intención de interaccionar, pero son
desagradables e intrusivos en el trato. Les cuesta el entendimiento intuitivo de las reglas del
comportamiento social y por lo tanto, les cuesta entender los pensamientos y sentimientos de otros.
Por otro lado, a menor severidad del TEA tienen un mayor interés en la interacción, pero
presentan una cualidad poco común de comportamiento social y destrezas de conversación. La
interacción social puede ser inapropiada y unidireccional. Pueden no mostrar interés en otros niños
y tender a aislarse. Suele ser un participante pasivo en el juego, interactuando con otros solo con
respecto a sus propios intereses. Puede haber dificultades en desarrollar y mantener relaciones con
pares apropiados al nivel de desarrollo. A veces su dificultad es que son intrusivos, desagradables,
torpes socialmente, no reconocen el espacio personal de otros. Parecen carecer de la habilidad para
modificar su comportamiento, de acuerdo a las demandas, del contexto social o del ambiente. Hay
una falta de entendimiento intuitivo de las reglas del comportamiento social y consecuentemente,
una dificultad para comprender los pensamientos y sentimientos de otros y para expresar sus
propios sentimientos y emociones, siendo inexpresivos o reaccionando desproporcionadamente.

Juego
Las características conductuales de un niño con TEA se puede ver reflejada en la pobreza de su
juego. Lo más habitual es que manipulen los juguetes (o los alinean) en vez de jugar con ellos.
Algunos pueden llegar a ser capaces de realizar algún juego imaginativo, pero este suele ser la
repetición de un “ escenario aprendido” .
Ahora bien, también nos podemos encontrar con niños con TEA que tienden a contar con
una gran imaginación; crean historias, mundos y amigos imaginarios. Tienen menor habilidad para
los juegos de roles, reglas y de competencia. Sin embargo el juego simbólico es estereotipado,
repetitivo y solitario. Algunos niños en este grupo presentan fascinación por un interés específico,
suelen acumular gran cantidad de objetos o información sobre dicho interés.

Lenguaje
En niños con TEA severo, el lenguaje casi siempre está afectado. Los que aprenden a hablar
no adquieren fluidez y es muy distorsionada, frecuente con ecolalia y repetición constante. No
suelen necesitar un compañero para conversar. La comprensión y la pragmática se encuentran
comprometidas. La comprensión se puede encontrar comprometida a pesar de poseer un
vocabulario extenso, existiendo un defecto en el procesamiento del lenguaje. El lenguaje no verbal
también se ve afectado, tanto en el uso como en la interpretación. Sus hijos evitan el contacto
ocular, no levantan los brazos para ser cargados o tienen dificultades para interpretar gestos,
expresiones faciales y corporales.
Por otro lado, niños con TEA más leve suelen adquirir bien el lenguaje. Dificultades en la
pragmática (uso del lenguaje), semántica (no reconocen que pueden haber varios significados),
prosodia (habla tiene una falta de variación del tono, énfasis, ritmo o melodía poco común), voz
(carece de inflexión adecuada y las convesaciones son unilaterales). Suelen interpretar literalmente,
por lo que las metáforas, ironías, bromas, son difíciles de comprender. Cuando van creciendo suelen
tener una forma de hablar excesivamente formal.

Comportamiento estereotipados e intereses restringidos

El sello característico del TEA, sobre todo los de funcionamiento más alto, es la fascinación
por un interés específico. Quienes padecen de esta condición suelen acumular gran cantidad de
objetos o información sobre dicho interés que va más allá de lo habitual para los niños de su misma
edad y nivel de desarrollo. Esta actividad implica imaginación y creatividad. Existe un porcentaje de
estos niños que tiende a establecer rutinas para hacer previsible la vida y para imponer orden, ya
que para ellos la novedad y la incertidumbre son intolerables.
La inflexibilidad al cambio en su rutina o entorno y la ruptura de sus rituales puede
acompañarse de problemas conductuales. Las personas del entorno pueden tener dificultades en
identificar los rituales autistas, interpretando que su conducta es un sinsentido cuando en realidad
obedece a un comportamiento compulsivo en el que involucran a los adultos.

Alteración sensorial
Algunos niños con TEA perciben las sensaciones auditivas, visuales o táctiles de un modo
extremadamente débil o fuerte.
La hipersensibilidad a estímulos sensoriales diversos puede provocar reacciones
conductuales extremas en diferentes lugares y circunstancias, que a veces la familia puede que no
las identifique.
La hiposensibilidad es un factor de riesgo para las autolesiones, que pueden llegar a lesiones
físicas importantes sin reacción aparente al dolor. La hiposensibilidad puede producir una
disminución de la identificación de percepciones físicas como son las sensaciones de hambre,
cansancio, plenitud de vejiga o intestino o plenitud gástrica, relacionándose con inanición, insomnio,
alteración del control de esfínteres u obesidad.

Alteración en la Teoría de la Mente (ToM)


Se presentan dificultades para entender o interpretar intenciones y pensamientos de otras
personas, de comprender y adaptarse a las necesidades del entorno, está en la raíz de muchos
comportamientos inadecuados de las personas con TEA. La falta de empatía y de comprensión de las
repercusiones emocionales que su conducta puede causar en otras personas puede originar que los
niños con TEA presenten conductas inadecuadas, incluso agresivas, pensando que es una
experiencia agradable para el otro niño.
Cuando son mayores, estas cogniciones incorrectas pueden conducir a conductas
desinhibidas. En personas con TEA está alterada generalmente la empatía cognitiva, entendida como
la capacidad de comprender los pensamientos que lleva a otras personas a determinadas
emociones, y está más preservada la empatía emocional, entendida como la capacidad de sintonizar
emocionalmente con las emociones de otras personas. En personas con rasgos psicopáticos ocurre
lo contrario: tienen preservada la empatía cognitiva, pero alterada la empatía emocional.

Niveles de gravedad: Espectro


Grado 3 “Necesita ayuda muy notable”: aquellas personas de bajo funcionamiento, que
requieren mayor compromiso de ayuda, ya que presentan una mínima
comunicación social y gran interferencia en los distintos ámbitos de su vida debido a
los comportamientos restringidos. Se presenta inflexibilidad y dificultades de
cambio y foco en atención.

Grado 2 “Necesita ayuda notable”: aquellas personas de mediano funcionamiento, donde la


ayuda está fuertemente centrada en la inflexibilidad cognitiva (cambio de foco) y en
la limitación de las respuestas sociales (dificultad en la iniciación o respuestas
reducidas o atípicas).

Grado 1 “Necesita ayuda”: aquellas personas que poseen un alto funcionamiento en su


diario vivir, que en general tienen un buen desempeño, especialmente en el ámbito
cognitivo, pero requieren de ayuda en las habilidades sociales y comunicacionales.
En relación a los comportamientos restringidos hay una interferencia significativa en
al menos un contexto.

Síntomas Algunos síntomas en una o ambas dimensiones, pero sin alteraciones significativas
subclínicos en la comunicación social. En relación a los comportamientos restringidos, presenta
un inusual o excesivo interés pero no interfiere.

Primeras señales en el desarrollo: “banderas rojas”


Signos de alarma de trastornos del espectro autista a nivel global (Levy et. al., 2009, Abufhele citado
en Almonte, 2019):
● Bebés muy tranquilos y pasivos, que no requieren atención.
● Aislamiento y concentración en sí mismos con autoestimulaciones, fijación o atracción
anormal por sus propias manos
● Escasa reacción a estímulos externos (no toma objetos, no responde a la llamada, ni
estímulos sonoros, rechazo al contacto físico, balanceo)
● Atracción o fijación por objetos muy determinados
● Estereotipias y tendencia a la repetición, con resistencia a los cambios ambientales o hábitos
del niño
● Hipotonía y problemas instrumentales
● Pataletas inconsolables, disforia, pánicos inexplicables
● Tristeza, ausencia o escasez de sonrisa, mirada perdida, ausencia de fijación de la mirada
● Falta de conductas anticipatorias
● Autoagresiones
● Insensibilidad al dolor y a los momentos angustiosas o respuesta paradójica a los mismos
● Dificultades alimentarias
● Ausencia o desaparición del poco lenguaje adquirido o desarrollo atípico del mismo.

Según edad:

0-6 meses 6-12 meses Edad pre-escolar

• Disminución del contacto • Mayor evidencia de los • Comienzo de conductas repetitivas y


ocular. problemas de interacción rigidez conductual (2 años).
• Fija la mirada en social. • Problemas más claros de la comunicación
estímulos luminosos. • Disminución de la sonrisa social, el juego, lenguaje y congición.
• No muestra postura social (6 meses). • Diagnóstico inicial de T. de la
anticipatoria al levantarlo • Disminución de la comunicación.
en brazos. vocalización hacia las • No responden al llamarlos por el nombre.
• Ausencia de balbuceo. personas, incremento hacia • Fallan en participación de juegos de
• Tiene presión palmar los objetos. imitación y vocalización recíproca.
pero sin mirar el objeto. • Indiferencia por los padres. • Mirada más fija en boca que ojos.
• Se irrita con frecuencia • No hay intervención en • Uso atípico de objetos (repetitivo, sin
juegos de interacción social. juego simbólico).
• No logra imitar sonidos, • Disminución de gestos comunicativos.
gestos ni expresiones. • Irritabilidad.
• Sueño fragmentado. • Dificultades sensoriales.
Observación de video: Primeros signos (15 minutos máximo)
Tutorial de los Primeros Signos de los Trastornos del Espectro Autista I Kennedy Krieger
Institute

Se observa el video de dos niños de 14 meses.


Ambos se encuentran en una situación de interacción y juego con un adulto. Se ve primero uno de
los videos y luego, antes de discutir, se ve el segundo video.
Los alumnos deben identificar cuáles serían los signos o señales correspondientes al TEA.

Análisis:
En el caso del primer niño se observa que:
● responde con la mirada al intentar compartir la atención (atención conjunta): cuando la
adulta apunta y él sigue la mirada a los distintos puntos
● es socialmente activo: juega con las personas presentes, no está solo concentrado en el
juguete
● coordina con la mirada, vocalización y gestos para comunicarse.
● Estas conductas darían cuenta que el niño tiene un desarrollo social esperado y no indicarían
conductas correspondientes al TEA.

En el caso del segundo niño se observa que:


● Aleteo o movimiento estereotipado cuando está viendo las burbujas
● No hay respuesta al nombre: cuando le hablan, no responde, incluso cuando el adulto está
frente a él hablando.
● No hay respuesta a los requerimientos para compartir la atención: no sigue la mirada
cuando apuntan (no hay atención conjunta), aunque sí se puede observar que el niño mira la
mano del adulto.
● No se observa interés social: no juega con el adulto.
● Estas conductas sí indicarían conductas correspondientes al TEA.

Continuación con señales de alarma en niños más grandes:


Edad escolar Adolescencia Adultez
• Dificultad para incorporarse en el • Generalmente • Dificultad en la flexibilidad
juego de grupos. sintomatología mejora con cognitiva y conductual.
• Problemas de coordinación y la edad (alto • Alteraciones sensoriales.
psicomotricidad, que interfiere funcionamiento), pero las • Dificultades en la obtención y
en el juego físico y en el deporte. necesidades sociales mantención de empleos.
• Dificultad en la comprensión de aumentan drásticamente. • Historia de atención a salud
los idiomas. • Dificultad en la autonomía, mental; dificultades en el proceso
• 40% tiene hiperactividad, higiene, autocuidado y de aprendizaje.
impulsividad y/o dificultades desarrollo psicoafectivo, • Redes de apoyo (sociales)
atencionales. pueden proporcionarle limitadas, dificultades en las
• Problemas de psicomotricidad dificultades en la relación parejas.
fina, dificultad en actividad con otros. • Problemas en la comunicación.
gráfica y en el lenguaje escrito: • Aumentan las demandan • Aprendizaje de normas sociales
dislexia, dificultades en en el aprendizaje, por lo más que entendimiento.
matemáticas (discalculia). que necesitan adaptaciones
• Dificultades en la integración curriculares individuales.
sensorial. • Aparece mayor número de
comorbilidades
emocionales, adicciones a
videojuegos y actividades
en el ordenador.

TEA femenino
Las mujeres presentan más dificultades que los hombres para recibir el diagnóstico de autismo,
debido a diferencias en la manifestación de las características. Ahora bien, las mujeres con un CI más
bajo tienen mayor probabilidad de recibir el diagnóstico que las mujeres TEA con un CI alto (Hull et.
al., 2020).
Algunas de las diferencias en las características son:
● Algunas investigaciones han sugerido que las mujeres con autismo pueden tener menos
impedimentos sociales que los hombres; las mujeres autistas tienden a tener niveles más
altos de motivación social (el deseo y la intención de formar amistades con otros) que los
hombres en promedio. Sin embargo, a las mujeres autistas les puede resultar más difícil
mantener amistades o relaciones a largo plazo que a los hombres autistas. (Hull et. al.,
2020).
● Las mujeres con autismo tienen niveles más bajos de intereses restringidos y/o repetitivos,
comparado con los hombres. Incluso se ha observado que los intereses especiales de las
mujeres autistas pueden estar en áreas diferentes a las de los hombres y, por lo tanto,
pueden subestimarse si estas áreas no se investigan durante las evaluaciones o no se
consideran "atípicas" (Hull et. al., 2020).
● Las mujeres con TEA son significativamente más propensas a tener trastornos de
internalización. Una expresión más severa de esta comorbilidad puede servir para
enmascarar las características autistas subyacentes, de modo que las mujeres reciben un
diagnóstico de la condición concurrente únicamente y su autismo no se reconoce (Hull et.
al., 2020). Además, en comparación con los hombres, las mujeres con TEA tienen menos
probabilidades de tener conductas de externalización, como hiperactividad/impulsividad y
problemas de conducta, y son más vulnerables a problemas de internalización, como
ansiedad, depresión y trastornos alimentarios (Bargiela et. al., 2016).
● Una característica clave del fenotipo del autismo femenino es la capacidad de “camuflar” las
dificultades sociales en situaciones sociales (Bargiela et. al., 2016). El camuflaje se refiere al
uso de estrategias conscientes o inconscientes, que pueden aprenderse explícitamente o
desarrollarse implícitamente, para minimizar la aparición de características autistas durante
un entorno social. Por ejemplo: imitar las expresiones faciales de la persona con la que está
hablando (ya sea conscientemente o no), o forzarse a sí mismo a hacer contacto visual y
dejar de hablar sobre un interés (Hull et. al., 2020). Al evitar estos comportamientos que
perciben como raros en sí mismas, provocan baja autoaceptación, frustración y bajo nivel de
bienestar subjetivo.

Prevalencia
En Chile, en un estudio publicado el 2021, con una muestra de 272 niños de Santiago, la prevalencia
de TEA obtenida en la muestra fue de 1,96% (IC95% 0,81–4,63), es decir, 1 en 51 niños, con una
distribución por sexo de 4 niños por 1 niña. Esta prevalencia se asemeja a las más altas reportadas a
nivel mundial, con predominio en el sexo masculino, lo que se alinea con lo reportado en la
literatura (Yáñez et. al., 2021).

Comorbilidades
La complejidad de la manifestación del TEA se nota en la asociación con otras alteraciones del
neurodesarrollo, problemas psiquiátricos o médicos. Según las edades, un 50-70% de las personas
con TEA presentan asociados otros retrasos en el desarrollo, comorbilidades con problemas de salud
mental o problemas de conducta.
● Otras alteraciones del neurodesarrollo frecuentes asociadas:
o Discapacidad intelectual: 30% aumenta algunos síntomas de TEA.
o Trastorno del lenguaje: retrasos en el lenguaje, incluso algunas no logran desarrollar
lenguaje verbal.
o TDAH: 30% síntomas de hiperactividad, impulsividad o inatención. La asociación de
ambos, potencia la gravedad de los síntomas, especialmente las funciones
ejecutivas.
o Trastornos motores: Tics y Tourette: 15-20% tics motores, fónicos, conductas
repetitivas, ecolalias o ecopraxias propios de los trastornos motores, se asocian a las
conductas repetitivas o rituales propias del TEA, incrementando las conductas
estereotipadas.
o Problemas de integración sensorial (60-90%).
● Comorbilidades con problemas de salud mental:
o Ansiedad: frecuentemente ansiedad social, por temor a una evaluación social
negativa, ansiedad fóbica ante estímulos a los que previamente se han sensibilizado,
o ansiedad generalizada ante situaciones nuevas que no sepan afrontar.
o Episodios depresivos: con incremento en la adolescencia. Comienzo brusco de
irritabilidad y alteración conductual.
o Episodios psicóticos: más frecuente es la aparición de ideas sobrevaloradas
autorreferentes o malinterpretación de las intenciones de otras personas, contextos
o experiencias sociales, con base en la dificultad de la comprensión social, aunque
pueden producirse episodios transitorios psicóticos en ocasiones relacionados con el
estrés.
● Comorbilidades médicas:
o Epilepsia: 20-35% a veces se asocia a cuadros bruscos de empeoramiento
conductual antes de poder reconocerse los signos visibles de las convulsiones.
o Dificultades para dormir: 40-80% Las alteraciones del sueño y del apetito, cansancio
y malestar también se asocian a empeoramiento conductual.
o Problemas gastrointestinales 9-70%
Evaluación
Habitualmente la familia plantea la “sospecha” por alteración en la comunicación y en la interacción
social (TEA a los 2 años, Asperger en edades posteriores). El diagnóstico de un TEA es un proceso
complejo y eminentemente clínico. Requiere de una cuidadosa historia clínica y familiar, una
exhaustiva evaluación de desarrollo, examen mental, neurológico y estudios complementarios, todo
lo cual - en lo posible- debiera ser realizado por un equipo de profesionales con experiencia en
trastornos del desarrollo.
Para poder hacer la evaluación se deben considerar diferentes niveles:
● Observación del desarrollo: observación del cumplimiento de los hitos del desarrollo en los
primeros años de vida.
● Detección específica: Se basa en la utilización de cuestionarios para familiares y educadores
(CHAT 18 m y el M-CHAT 24 m) y “banderas rojas” (no mirar de manera directa a los demás a
la cara, no compartir intereses o placer con los demás, no mostrar respuesta cuando se le
llama por su nombre, no señalar con el dedo índice para pedir y/o compartir focos de
atención, no traer cosas para compartir con los demás).
○ M-Chat: Lista de verificación modificada para autismo en niños pequeños, revisada
(M-CHAT-R) es una evaluación que hace una serie de 20 preguntas sobre el
comportamiento de niños o niñas. Tiende a generar doble de falsos negativos en
población femenina.
● Diagnóstico y evaluación: Evaluación por equipo especializado, psiquiatra, TO,
fonoaudiólogo, psicólogo.

Pruebas diagnósticas específicas para autismo


● ADI-R (autism diagnostic interview-revised): entrevista con los padres o cuidadores de niños,
adolescentes y adultos con TEA, incluye un algoritmo diagnóstico con referencia
principalmente a los 4-5 años y otro algoritmo de la edad actual. Es válido para niños
mayores de 2 años.
● ADOS2 (autism diagnostic observational schedule): Entrevista semiestructurada para NNA y
adultos con TEA. Mediante el juego, conversación, imágenes y libros, el entrevistador va
provocando “conductas autistas” que va puntuando con el fin de obtener algoritmos
diagnósticos que indican: normalidad o trastorno del espectro autista. Tiene 5 módulos de
aplicación y algoritmos diagnósticos clasificados según edad y nivel de lenguaje. Incluye la
incorporación de un módulo T para niños pequeños con edad cronológica o no-verbal mayor
de 12 meses.

Aplicación: análisis de video

Vídeo 2: Escena The Good Doctor (15 minutos máximo)


"Olían a comida quemada" | The Good Doctor en Español
Contexto: El hermano menor se cae jugando y se golpea la cabeza, finalmente fallece. Ambos se
encontraban viviendo en la calle tras escaparse por la violencia ejercida por el padre a Shaun.

Preguntas:
● Respuesta del adolescente frente a la angustia:
Cuando está en el auto de policía se desregula y comienza a golpearse, hay una
subregulación de sus emociones ante el temor de volver con sus padres.
Observamos también que tiene movimientos autorregulatorios.

Si bien se ve tranquilo al final del video, es importante mostrarle a los alumnos y


preguntarles si ellos creen que está o no angustiado. Esta escena permite vislumbrar que la
tramitación de la angustia es sobre regulada, pero nadie pensaría que no es un adolescente que está
sufriendo. En muchas ocasiones uno escucha padres que comentan que sus hijos con TEA no tienen
emociones o da igual lo que se hable frente a ellos porque no lo entienden; sin embargo, aquello no
es así, sino que lo expresan de forma diferente.

● Respuesta de los padres:


Discutir respecto al rechazo de los padres ante su hijo y las dificultades que ello puede conllevar, por
ejemplo: escaparse de la casa (en este caso) y agravamiento de síntomas. Se ha observado que
frente a un diagnóstico e intervención temprana, junto con el apoyo de redes, los niños con TEA
pueden desarrollarse de mejor manera. No implica que vaya a remitir dado que es una condición,
pero sí se pueden trabajar distintas dificultades que presentan y estrategias de afrontamiento.

● Respuesta del doctor Glassman (médico):


Se adapta a las necesidades de Shaun, entiende que en momentos de angustia no puede responder
de la forma que espera, por lo que busca distintas estrategias para que le comunique lo que
necesita.
En la última escena, se observa que logra leer las señales de Shaun ante la necesidad de estar
leyendo un libro de medicina, y desde ahí le da el espacio de seguir en su actividad, sin criticarlo.

● Respuesta de los profesionales que lo atienden (policías, hospital):


Discutir principalmente el desconocimiento de los policías y doctores del hospital, eso afecta en
cuanto a cómo pueden llegar a manejarlo frente a ciertas conductas que podría presentar. Por
ejemplo: la escena del auto de policía podríamos pensar que en caso de mayor desconocimiento se
pudiese interpretar como conducta violenta y tener que “reducirlo”. Importancia de la
concientización respecto a las diferentes condiciones que existen entre las personas y
particularidades para el trato.

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