Está en la página 1de 1

isquémico.

2. Es una práctica milenaria ligada a la religión. Los musulmanes hoy en día


hacen ayuno obligatorio en el mes 9 del calendario islámico, cuando se reveló
el profeta Mahoma. En 30 días no se come nada mientras haya sol. A los que
hagan ayunos desordenados y por fuera del contexto de una dieta KETO,
comiendo lo que les da la gana en la ventana de comida, no les va a pasar nada.
No tienen beneficios. Está comprobado que, en este mes, los islámicos no
bajan de peso ni mejoran su conocimiento; mejoran algo su salud, pero tienen
mayor tasa de accidentes y menor rendimiento en el trabajo, debido a que se
acuestan a dormir más tarde.
3. Tiene múltiples beneficios cuando se hace bien y de forma intermitente.
Además de los beneficios de KETO, está ligado a una mejoría en el rendimiento
cognitivo y la longevidad. En la ventana del ayuno se utilizan grasas como
energía y se forman cuerpos cetónicos. Esto solo se cumple: si lo haces bien, si
no comes nada, si no activas la insulina y si no te da hambre.
4. Los estudios muestran que la reducción de peso con ayunos de 8 semanas solo
llega al 4 %-6 %, o sea, 2,8 kg a 4 kg, en una persona de 70 kg.
5. El ayuno de más de 24 horas es un trastorno alimenticio, hasta que no se
demuestre lo contrario, o si llevas más de 1 año haciéndolos.
6. ¿Cuándo un ayuno es en realidad beneficioso? Está demostrado que los ayunos
que se hacen durante 18 horas, 3 veces a la semana, son igual de beneficiosos
para la salud que los que se hacen todos los días. La verdad, faltan estudios
médicos que evalúen ese umbral que diga cuánto tiempo es seguro. Por lo
pronto, nos vamos por lo que ya está comprobado científicamente. La esencia
del ayuno es que sea intermitente, por eso se llama fasting, o sea que en el día
existan ventanas de ayuno y de comida.
7. Para que el ayuno sea beneficioso, se debe romper sin activar la insulina, entre
las 14:00 a 16:00 horas, con grasas y sin hambre.
8. El hambre es una necesidad fisiológica cerebral del hipotálamo medial, que no
podemos eludir. Es diferente el hambre al apetito. El hambre es la necesidad de
energía. El hambre aparece por la activación de la grelina, que es un péptido
del estómago que lo prepara para recibir comida. El hambre prepara a tu
estómago produciendo ácidos y enzimas, esperando comida. El hambre activa
el estrés que activa la insulina y produce más hambre. El hambre activa la NPY
que aumenta la síntesis de grasa y te hace aumentar de peso en el ayuno. Por

152

También podría gustarte