SEMINARIO POST-COSECHA

1. Introducción:

El tomate es un cultivo de gran importancia económica y social en Venezuela, ya

que genera empleo, ingresos y alimentación para la población. Sin embargo, el
cultivo de tomate enfrenta diversos desafíos, como la competencia de las
importaciones, las plagas y enfermedades, el cambio climático y la falta de
tecnificación.

El objetivo de este informe es analizar la situación actual del cultivo de tomate en

Venezuela, considerando los aspectos de producción, consumo, exportación,
importación y almacenamiento, así como los avances tecnológicos y las buenas
prácticas agrícolas que pueden mejorar su competitividad y sostenibilidad.

2. Situación comercial del cultivo de tomate en Europa:

 El mercado del tomate en Europa tiene un tamaño de USD 197.76 mil

millones en 2023 y se espera que crezca a una tasa compuesta anual
del 4.76% hasta 2028.

 El principal productor de tomate en Europa es España, que produce

alrededor de 4.5 millones de toneladas al año, seguido de Italia, con 4.2
millones de toneladas.
  El principal destino de las exportaciones de tomate europeo es Reino
Unido, que importa más de 500,000 toneladas al año, pero su salida de la
UE ha afectado negativamente al comercio.

 El principal proveedor de las importaciones de tomate europeo

es Marruecos, que exporta más de 500,000 toneladas al año, con un
crecimiento del 7% en 2021.

 El tomate europeo se enfrenta a diversos desafíos, como el alto coste de la

energía, los virus, la competencia internacional y las preferencias de los
consumidores.

3. Exportación e Importación en Venezuela:

 Producción: Venezuela produce alrededor de 400,000 toneladas de tomate

al año, principalmente en los estados de Aragua, Carabobo, Guárico,
Lara, Monagas, Portuguesa y Zulia. El tomate es un cultivo de clima
cálido que requiere riego durante los períodos secos y fertilización con
fosfatos.

 Consumo: El tomate es un alimento con bajo contenido calórico y rico en

vitaminas C y licopeno, que son antioxidantes beneficiosos para la
salud. El consumo per cápita de tomate en Venezuela es de 14 gramos al
 día2. El tomate se consume tanto fresco como procesado en forma de
salsa, puré, jugo, deshidratado o enlatado.

 Exportación: Venezuela exporta una pequeña parte de su producción de

tomate, principalmente a Colombia y Trinidad y Tobago. El valor de las
exportaciones de tomate en 2020 fue de USD 4.0 millones. Los
principales productos exportados son el tomate fresco y el concentrado
de tomate.

 Importación: Venezuela importa una cantidad significativa de tomate,

sobre todo desde México y Chile. El valor de las importaciones de tomate
en 2020 fue de USD 23.6 millones. Los principales productos importados
son el tomate fresco y el puré de tomate.

Requisitos para la importación y exportación en

Venezuela

La importación y exportación de mercancías son actividades esenciales para

cualquier país que busque un crecimiento económico sostenible. Venezuela no es
la excepción y, para llevar a cabo estas actividades, es necesario cumplir con
ciertos requisitos documentales. A continuación, te explicamos todo lo que debes
saber sobre estos requisitos para importar y exportar en Venezuela.

Para importar:

1. Registro de Usuario Aduanero (RUA): Es un registro obligatorio para todas

las empresas que deseen importar mercancías en Venezuela. El RUA se
 tramita en el Servicio Nacional Integrado de Administración Aduanera y
Tributaria (SENIAT).

2. Registro de Información Fiscal (RIF): Este registro es obligatorio para todas

las empresas que operen en Venezuela, incluyendo aquellas que deseen
importar mercancías. Se tramita en el SENIAT.

3. Licencia de Importación: En Venezuela existen ciertas mercancías que

requieren de una licencia de importación para poder ser importadas. Esta
licencia se obtiene a través del Ministerio del Poder Popular para el
Comercio.

4. Documentos de transporte: Es obligatorio contar con los documentos de

transporte que acrediten la importación de las mercancías. Entre ellos se
encuentran el Conocimiento de Embarque (Bill of Lading), la Guía Aérea
(Air Waybill) y la Carta de Porte.

Para exportar:

1. Registro de Exportador: Es un registro obligatorio para todas las empresas

que deseen exportar mercancías en Venezuela. Se tramita en el SENIAT.

2. Licencia de Exportación: En Venezuela existen ciertas mercancías que

requieren de una licencia de exportación para poder ser exportadas. Esta
licencia se obtiene a través del Ministerio del Poder Popular para el
Comercio.

3. Documentos de transporte: Es obligatorio contar con los documentos de

transporte que acrediten la exportación de las mercancías. Entre ellos se
encuentran el Conocimiento de Embarque (Bill of Lading), la Guía Aérea
(Air Waybill) y la Carta de Porte.
 4. Certificado de Origen: Este documento acredita el origen de las mercancías
a exportar y es requerido en algunos países para el ingreso de las mismas.
Se obtiene en la Cámara de Comercio.

Es importante que, al momento de importar o exportar, se cumplan con todos los

requisitos documentales para evitar retrasos y multas. (INSEROCA Internacional
et al., 2023).

https://inseroca.com/guia-completa-requisitos-documentales-para-importar-y-
exportar-en-venezuela/#:~:text=Se%20tramita%20en%20el%20SENIAT,Poder
%20Popular%20para%20el%20Comercio.

4. Almacenamiento de tomate para su distribución

El tomate es un alimento perecedero, requiere una temperatura de conservación

entre 10-15°C, dependiendo del requerimiento del cliente, esto puede variar. Un
elemento clave en la buena conservación de tomate es; la recolección con la
madurez adecuada. Las bajas temperaturas y la humedad relativa alta en torno al
90-95% reducen la transpiración, retardan la pérdida de agua, y a su vez reducen
el desarrollo de patógenos, ayudando a alargar la vida del tomate.

5. Cadenas logísticas del tomate

Las cadenas logísticas del cultivo de tomate para su exportación e importación son
el conjunto de actividades y procesos que permiten llevar el producto desde el
campo hasta el mercado internacional, garantizando su calidad, inocuidad y
rentabilidad.

Algunos de los aspectos que se deben considerar en las cadenas logísticas del
tomate son los siguientes:

 Producción: Se debe elegir la variedad de tomate adecuada al clima, al

suelo y al mercado objetivo, así como aplicar las buenas prácticas
agrícolas para obtener un producto sano y de calidad. Se debe contar con
un sistema de riego eficiente, una fertilización balanceada, un control
integrado de plagas y enfermedades, y una cosecha oportuna y
cuidadosa.

 Empaque: Se debe seleccionar, clasificar, lavar, desinfectar y empacar el

tomate según los estándares de calidad y las normas sanitarias del país
de destino. Se debe utilizar un empaque adecuado que proteja el
producto y facilite su manejo y transporte.

 Transporte: Se debe transportar el tomate en vehículos refrigerados que

mantengan la temperatura y la humedad óptimas para conservar el
producto. Se debe evitar el apilamiento excesivo, los golpes y las
vibraciones que puedan dañar el tomate. Se debe cumplir con los
requisitos fitosanitarios y aduaneros del país de destino.

 Distribución: Se debe distribuir el tomate a través de canales eficientes

que permitan llegar al consumidor final en el menor tiempo posible y con
 el menor costo posible. Se debe mantener la cadena de frío y la
trazabilidad del producto. Se debe establecer una relación comercial
sólida y transparente con los clientes.

6. Avances para el acondicionamiento:

El uso de almácigos o bandejas para la producción de plántulas de tomate, que

permiten obtener plantas sanas, vigorosas y uniformes, con un menor consumo de
agua, fertilizantes y agroquímicos.

El empleo de ambientes protegidos como mallas sombra o invernaderos, que

ofrecen ventajas como el control del clima, la protección contra plagas y
enfermedades, el aumento del rendimiento y la calidad de los frutos, y la
posibilidad de cultivar durante todo el año.

La aplicación de tecnologías de información y comunicación (TIC) para el

monitoreo y la gestión del cultivo de tomate, como sensores, cámaras, drones,
sistemas de riego automatizado, software de análisis de datos, etc., que facilitan la
toma de decisiones y la optimización de los recursos.

La implementación de buenas prácticas agrícolas (BPA) para el manejo integrado

del cultivo de tomate, que incluyen la selección de variedades resistentes o
tolerantes a plagas y enfermedades, la rotación de cultivos, el uso racional de
fertilizantes y plaguicidas, la eliminación de residuos vegetales, la capacitación del
personal, etc., que contribuyen a mejorar la productividad, la rentabilidad y la
sostenibilidad del cultivo.

La adopción de métodos de cosecha y post-cosecha adecuados para el cultivo de

tomate, que implican determinar el momento óptimo para cosechar según el grado
de madurez y el destino del producto, utilizar herramientas e indumentaria
apropiadas para evitar daños en los frutos, clasificar y empacar los frutos según su
calidad y tamaño, reducir la temperatura y la humedad relativa para prolongar la
vida útil, aplicar etileno para uniformizar la maduración, etc., que permiten
conservar las características organolépticas y nutricionales del tomate y evitar
pérdidas.

EMPACADOS

Se puede empacar en diversas presentaciones: granel (suelto en cajas plásticas o

de madera), bolsas o bandejas al consumidor (0,5; 1; 2 kg) o una mezcla de
ambos. En cada caso se debe vigilar que la cantidad de producto (peso)
corresponda a la unidad de comercialización acordada, por ejemplo cajas de 18 kg
o bandejas de 10 kg de tomates.

Las características del empaque a utilizar dependen del destino final del producto
(ferias de productores, mercados mayoristas, supermercados, mercados
minoristas o mercados de exportación).

Cuando el producto se comercializa en mercados locales se deben garantizar los

siguientes aspectos a la hora de seleccionar un empaque:

- Cantidad de tomates a colocar.

-Forma, tamaño y grado de madurez del tomate a empacar.

-Diseño y materiales del empaque (resistencia, rugosidad o suavidad de

superficies, tamaño y ventilaciones);

-Exigencias del consumidor en cuanto al empaque (cajas, bolsas, bandejas).

-Recuperación del empaque (tiempo que se deja al comprador, prontitud y

seguridad de la devolución).
-Compatibilidad con el manejo (tolerancia al contacto con agua, dimensiones,
espacio para el almacenamiento del empaque, tiempo y espacio requerido para
armarlo).

-Disponibilidad en el mercado local o facilidad para importarlo.

-Costo (inversión, armado, lavado).

Ceras

Las frutas y hortalizas frescas poseen entre el 75% y 90% de agua, además de
estar cubiertas por una capa de cera natural que actúa como barrera para reducir
la pérdida de humedad, evitando que se afecten o dañen durante su maduración.

Sin embargo, una vez que se colectan y lavan, además de eliminar la suciedad o
posibles residuos químicos, también se elimina su cera natural, lo que provoca
que se acorte su tiempo de conservación y almacenamiento.

Existen en la actualidad diferentes alternativas para la conservación de frutas y

vegetales después de colectarse; una de ellas es la aplicación de recubrimientos
de ceras que pueden jugar el mismo papel que la cera natural como barreras
semipermeables a gases y vapor de agua.

Es importante subrayar que no todos los vegetales en el mercado están cubiertos

con estas ceras. Las más comunes son la cera de abeja, candelilla y carnauba,
que representan opciones para mantener la calidad de frutas y vegetales de una
forma natural e inocua.

Estas ceras, como otro tipo de aditivos alimentarios, han sido evaluadas por el
Comité Mixto FAO-OMS de Expertos sobre Aditivos Alimentarios (Jecfa, por sus
siglas en inglés) y se ha considerado que su uso en alimentos “no es motivo de
preocupación para la salud”.

Para los tomates, han sido cubiertos con estas ceras que tienen como objetivo
incrementar su vida de anaquel mediante la disminución de la pérdida de agua,
reducción de la pérdida de firmeza, inhibición de oscurecimiento, control de
deterioro ocasionado por microorganismos y el mantenimiento de una “respiración”
normal de la fruta u hortaliza para evitar los cambios de sabor por fermentación.

La protección que brindan las ceras también coadyuva a conservar las

características sensoriales del alimento, sin alterar su calidad nutricional, a la vez
que mejora su apariencia con un brillo muy particular, lo cual incrementa su
atractivo al consumidor. ( Centro de Investigación en Alimentación y desarrollo,
A.C et al., 2023).

https://www.ciad.mx/que-es-esa-cera-que-tiene-mi-fruta/#:~:text=Las%20frutas
%20y%20hortalizas%20frescas,o%20da%C3%B1en%20durante%20su
%20maduraci%C3%B3n.

7. Código arancelario

El código arancelario del cultivo de tomate en Venezuela es el 0712.90.30.00, que

corresponde a los tomates secos, incluidos los cortados en trozos o en rodajas o
las trituradas o pulverizadas.

Este código pertenece a la sección 07 de plantas, hortalizas, frutas, café y demás

productos de origen vegetal, al capítulo 12 de hortalizas secas, y al subcapítulo
12.90 de las demás hortalizas y mezclas de hortalizas.

El código arancelario sirve para identificar y clasificar las mercancías que se

importan o exportan, y para determinar los aranceles y derechos que se aplican a
cada producto.

8. Normalización Nacional e Internacional

Existen diferentes normas y guías que regulan las BPA y BPM para el cultivo de
tomate en distintos países y regiones. Algunas de estas normas son de carácter
obligatorio y otras son de carácter voluntario. Se presentan algunos ejemplos:

 En Costa Rica, el Instituto Nacional de Innovación y Transferencia en

Tecnología Agropecuaria (INTA) ha elaborado un manual técnico del
cultivo de tomate1, que contiene información sobre las características
botánicas, los requerimientos climáticos, las variedades, el manejo del
suelo, la fertilización, el riego, el control de plagas y enfermedades, la
cosecha, la post-cosecha y los costos de producción del tomate.

 En Ecuador, el Instituto Nacional Autónomo de Investigaciones

Agropecuarias (INIAP) ha publicado un manual del cultivo de tomate de
árbol2, que incluye aspectos como la descripción botánica, la
propagación, el establecimiento, la poda, la fertilización, el riego, el
control fitosanitario, la cosecha y la post-cosecha del tomate de
árbol. Además, la Agencia Ecuatoriana de Aseguramiento de la Calidad
del Agro (AGROCALIDAD) ha elaborado una guía de BPA para el cultivo
de tomate de árbol3 y otra para el cultivo de tomate riñón4, que establecen
los requisitos que deben cumplir las unidades de producción
agropecuarias para obtener el certificado de cumplimiento de BPA.

 En México, la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural,

Pesca y Alimentación (SAGARPA) ha emitido una norma oficial
mexicana5 que establece las especificaciones y criterios para la
aplicación y certificación de BPA y BPM en los procesos de producción
de frutas y hortalizas para consumo humano en fresco. Esta norma aplica
para todos los productores primarios y empacadores que deseen obtener
el certificado correspondiente.
Estos son solo algunos ejemplos de las normas existentes para el cultivo de
tomate en diferentes países. Es importante que los productores conozcan y
apliquen las normas vigentes en sus respectivos países o regiones, así como las
exigencias de los mercados a los que desean acceder. De esta manera, podrán
mejorar la calidad y la rentabilidad de su producción, al tiempo que contribuyen al
desarrollo sostenible del sector agrícola.

9. Conclusión:

El cultivo de tomate en Venezuela tiene un gran potencial para aumentar su

producción y calidad, así como para reducir su dependencia de las importaciones
y acceder a nuevos mercados. Para ello, se requiere una mayor inversión en
infraestructura, capacitación, investigación e innovación, que permitan incorporar
tecnologías y prácticas adecuadas para el manejo del cultivo. Asimismo, se
necesita una mayor articulación entre los actores de la cadena productiva, así
como una mayor coordinación entre el sector público y privado, para diseñar e
implementar políticas y estrategias que favorezcan el desarrollo del cultivo de
tomate en Venezuela.