Ensayo

I.- Datos Informativos:

Nombre: Yadira Vanessa Rivadeneyra Calapucha
Módulo: Habilidades Comunicacionales
Docente:
II.- Tema de ensayo: La escucha empática y activa en el manejo de conflictos.
Introducción:
Los seres humanos somos seres sociales y la comunicación es el medio que nos permite
conectarnos los unos con los otros, adaptarnos y así sobrevivir, una característica en
común que tienen es que las personas no suelen escuchar antes de hablar, una frase
popular dice “rápidos para escuchar y lentos para hablar”. Las personas que están
distraída, indiferentes, apáticas o faltos de inteligencia emocional mantienen conflictos
contantes y una de las herramientas para solventar aquello es el desarrollar la capacidad
de saber escuchar.
Desarrollo:
Escuchar es la capacidad de percibir, comprender, interpretar y atender los mensajes
verbales y no verbales de un receptor, dando un significado y sentido a las palabras. El
desarrollo de la escucha disminuye los conflictos y los malos entendidos durante una
conversación en los diferentes escenarios donde se desenvuelve una persona sea social,
laboral, familiar como psicológico (Calderón y Silva, 2018, p.28).
Al momento de escuchar a una persona su “curva de la atención se inicia en un punto
muy alto, disminuye a medida que el mensaje continúa y vuelve a ascender hacia el
final del mensaje” el arte de escuchar es mantener el foco de atención constante. El
proceso de la escucha activa se ve afectado por las barreras internas y externas, las
primeras: los prejuicios, el aconsejar, lo sabelotodo (síndrome del experto), emociones
negativas, las generalizaciones y la falta de tiempo; y las externas son el ruido, el uso de
tecnología, las diferencias culturas y la falta de expresión no verbal (kinestesia). La
devolución correcta después de haber escuchado es importante durante el diálogo, el
saber responder con preguntas o con lenguaje no verbal del emisor mientras el receptor
intervenga.
La comunicación empática se la conoce como la comunicación compasiva, donde se
trata de comprender la información que transmiten las emociones y las necesidades que
tiene una persona. La empatía no solamente es comprender el mundo de los demás si no
compartir los sentimientos propios. El usar la empatía al momento de escuchar y hablar
disminuye la violencia de nuestro lenguaje y al contrario al usar la comunicación
violenta ofende al otro y al yo propio (Villanueva, 2016, p.2).
Conclusión:
Una escucha activa permite que una persona (receptor) pueda expresar su idea y ser
comprendida, el emisor tiene que utilizar sus recursos físicos y mentales para entender
el mensaje de forma eficaz y eficiente. La escucha empática permite el interpretar las
emociones y los pensamientos correctamente, y la resolución de conflictos.
III.- Bibliografía:
Villanueva, E. (2016). Comunicación No Violenta. Recuperado de:
https://www.cop.es/colegiados/PV00520/pdf/Empat%C3%ADa-autoempat
%C3%ADa.pdf
Calderón, K. A. H., & Silva, A. K. L. (2018). La escucha activa como elemento
necesario para el diálogo. Revista convicciones, 5(9), 83-87.
https://www.fesc.edu.co/Revistas/OJS/index.php/convicciones/article/view/272/311