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El marketing sabe que necesita mantenerse al día con las tendencias en el comportamiento del
consumidor para mantenerse relevante. Si vivimos en la era digital, está claro que la tecnología
debe estar en el centro de las estrategias comerciales.
Mercadotecnia 1.0
Al principio, el marketing se centró en su producción y sus productos. La intención era mostrar que
tenían los mejores procesos y productos de la mejor calidad. Las certificaciones ISO, por ejemplo,
son un símbolo de esta mentalidad de marketing.
En ese contexto, ni siquiera hubo un intento de diferenciación de marca y segmentación de
audiencia. Con pocos competidores en el mercado, bastaba resaltar los atributos funcionales de
sus productos y dirigir la comunicación a la gran masa de consumidores.
También estamos hablando del comienzo de la era publicitaria, que creó campañas y anuncios
para vehículos de comunicación masiva, como la televisión, la radio y las revistas. El mensaje era el
mismo para todos los consumidores, sin importar si diferían entre sí, como es evidente en el
siguiente paso.
Marketing 2.0
En el Marketing 2.0, las empresas se dan cuenta de que los consumidores no son todos iguales.
Tratar al mercado como una gran masa ya no funciona, porque ha crecido el número de
competidores y la gente se ha vuelto más exigente con las marcas.
Por lo tanto, el marketing se vuelve centrado en el consumidor. Es necesario comprender sus
comportamientos e intereses y agruparlos en segmentos con características comunes, lo que
llamamos público objetivo; a partir de ahí, es posible delinear estrategias de branding, publicidad y
comunicación dirigidas a cada público objetivo.
En este contexto, ya han surgido algunos canales de marketing y publicidad con posibilidad de
segmentación de audiencia, como revistas especializadas, canales de televisión por cable y
programas de radio y televisión para determinadas audiencias.
Marketing 3.0
Si el Marketing 1.0 estaba centrado en el producto y el Marketing 2.0 estaba centrado en el
consumidor, el Marketing 3.0 está enfocado en el ser humano.
Si el Marketing 1.0 se comunicaba con la masa y el Marketing 2.0 se dirigía al segmento, el
Marketing 3.0 se centra en el individuo.
Después de todo, los consumidores no son una gran masa homogénea, ni un objetivo a alcanzar.
Son seres humanos, con toda su complejidad y singularidad, con valores detrás de sus acciones y
comportamientos.
En esta etapa, la gente espera que las marcas muestren sus valores y las causas que defienden. Las
personas ya no quieren compañías que solo se preocupen por sus productos, sino que piensen en
su impacto en el planeta. Y, con internet y el Marketing Digital ya en escena, este consumidor gana
voz y protagonismo para influir en las marcas.
El marketing pasa entonces a adoptar estrategias de personalización que van más allá de la
segmentación y se comunican específicamente con cada persona. Además, también es la etapa de
humanización de las marcas, que quieren mostrar su personalidad, su propósito, sus valores y sus
causas, con el fin de despertar la identificación de las personas.
Marketing 4.0
El Marketing 4.0 marca la transición del marketing a la economía digital. Nada de lo que
caracteriza al Marketing 3.0 se pierde, sin embargo, ahora la tecnología está mucho más presente
en la vida de las personas, en todos sus ámbitos, en todas sus relaciones.
En esta misma línea, empiezan a surgir tecnologías de inteligencia artificial, big data, realidad
virtual y otros conceptos que aún se están consolidando en el Marketing 5.0. Pero las empresas ya
están en transformación digital para poner este tipo de tecnología en el centro de sus estrategias
con el fin de generar más valor para los consumidores.
En la migración al Marketing 5.0, lo que sucede es que estas tecnologías ahora deben volcarse al
bien de la humanidad. El Marketing 5.0 aúna la centralidad humana del Marketing 3.0 y el
empoderamiento tecnológico del Marketing 4.0, pero añade la preocupación por crear una
sociedad más inclusiva y sostenible.