Está en la página 1de 4

res de servicios y no solo como centros de

culto. Como bien señala en la introducción,


el templo en la antigua Mesopotamia era
considerado la casa de la divinidad. Aun-
que había más de un templo en cada ciu-
dad, siempre había uno en particular que
correspondía a la divinidad patronal. Estos
santuarios eran la característica definitoria
del paisaje urbano, destacándose la gran-
diosidad de sus construcciones en el paisa-
je llano del sur iraquí.
Si cada ciudad contaba con un dios
patronal, el panteón mesopotámico en ge-
neral era concebido como una gran familia
en la que cada divinidad contaba con un
dominio o actividad particular, las cuales
no eran exclusivas, sino que podían ser
desempeñadas por varios dioses. Desde
un punto de vista más terrenal, la gestión
de los templos corría a cargo de oficiales
y sacerdotes. No obstante, hablar de “cle-
ro” sería un anacronismo, pues no todo el
personal dependiente de la administración
del templo era personal religioso. Estos
templos han sido considerados por la his-
Dominique Charpin, La Vie Méconnue
toriografía como instituciones encerradas
des Temples Mesopotamiens, Collège de
en ellas mismas y celosas de la salvaguar-
France: Les Belles Letres, Paris, 2017,
da de sus secretos; una idea que el propio
pp. 254, con ilustraciones y figuras,
autor se propone a desmentir en esta obra.
[ISBN: 978-2-251-44671-4].
Así pues, organiza el libro dedicando cada
capítulo a la descripción de un tipo de tem-
Con una dilatada carrera, Domini-
plos dedicados a una divinidad y su rela-
que Charpin es un especialista en el mundo
ción con la función social o servicio que
amorreo de la primera mitad del segundo
podían prestar.
milenio a.C. y particularmente en época
El primer capítulo lo dedica al estu-
Paleobabilónica. De entre sus publica-
dio de los santuarios consagrados a la dio-
ciones se pueden señalar Lire et écrire à
sa Gula, considerada como la diosa de la
Babylone (Paris, 2008), Hammu-rabi de
medicina. Las referencias a la diosa Gula
Babylone (Paris, 2003) y Le clergé d’Ur au
en textos rituales de curación hacen pensar
siècle d’Hammurabi (Paris, 1986) junto a
que posiblemente sus templos fueran cen-
una gran cantidad de artículos científicos.
tros de sanación. Para confirmar su hipóte-
Actualmente es profesor en el Collège de
sis, el autor acude a la información que nos
France dirigiendo la Chaire de la Civilisa-
aporta la arqueología, principalmente en el
tion Mésopotamienne desde donde realiza
principal santuario dedicado a Gula, el de
una gran tarea de divulgación científica;
la ciudad de Isin, entre otros. En este com-
así como dirigiendo la prestigiosa Revue
plejo religioso aparecieron exvotos que re-
d’Assyriologie.
presentan la parte del cuerpo que el oferen-
En esta obra, el profesor Charpin
te deseaba sanar, junto a figuritas de perros
se propone mostrar el papel central de los
que hacen referencia al animal consagrado
templos mesopotámicos como distribuido-
a la diosa. Por su parte, se ha documentado

301
Reseñas - Bookreviews

también la existencia de una perrera cuyos dentro del mismo capítulo trata también
animales eran utilizados en los rituales de los templos de una divinidad muy discreta,
curación (no hay que olvidar que la saliva Mišarum, la cual junto a Kittum simboli-
de los canidos tiene propiedades cicatrizan- zan las dos caras de la justicia, la más téc-
tes). Por otra parte, los templos de la diosa nica en tanto que aplicación del derecho y
Gula y la propia diosa están relacionados la que hace referencia a la justicia social.
con herbolarios. En el capítulo cuarto, el autor anali-
El protagonismo del capítulo dos se za los templos como centros de aprendiza-
lo lleva el dios Šamaš, dios del sol y de je y almacenamiento del conocimiento. Si
la justicia. Así pues, considera que posi- en un principio, la escritura se puso bajo
blemente los templos dedicados a Šamaš, el amparo de la diosa Nisaba y su consor-
como los de Sippar-Amnanum o el de la te Haya, fue a partir del segundo milenio
propia Babilonia, ejercieran un papel fun- a.C. cuando el dios Nabu los reemplaza al
damental en los procesos judiciales, como frente de este ámbito. Fueron los templos
el juramento por la vida del dios, fórmula dedicados a estas divinidades los que ejer-
jurídica por la que se considera que es im- cieron un papel fundamental, no exclusivo,
posible determinar la culpabilidad del juz- en la formación de especialistas de la es-
gado, ante lo cual éste debe jurar que no ha critura. No obstante, como bien sabemos,
cometido el delito. Este papel de Shamash a partir del segundo milenio a.C. este pa-
en el ejercicio de la actividad judicial no pel lo recoge el ámbito privado, dejando de
era exclusivo, pues en Ur se ha documenta- ser la educación una prerrogativa exclusiva
do arqueológicamente el edificio dedicado de los templos. Seguramente la época más
a la administración de justicia, el Dubla- brillante de las escuelas de escribas fue a
mah, dentro del santuario del dios Sin, el finales del tercer milenio a.C. durante el
dios Lunar. En relación con la actividad ju- reinado de Shulgi de Ur, el gran creador de
dicial, Dominique Charpin analiza el papel las E.DUB.BA, las escuelas de escribas. En
de la diosa Ningal como guardiana de las varios textos los templos de Nisaba, como
prisiones, por lo que los templos dedicados el de Eridu, Ur y Uruk, son denominados
a esta diosa funcionarían como presidios, “Templos/casas de la sabiduría”, y en Tell
o bien que estos estuvieran dedicados a la Harmal se encontraron textos escolares
diosa Ningal. asociados a dos templos de Nisaba y Haya.
El capítulo tres se relaciona con el Junto a esta función en el terreno educati-
anterior al tratar los templos de la divini- vo, Dominique Charpin también relaciona
dad Kittum, literalmente “justicia”, una di- los templos dedicados a Nabu con centros
vinidad menor, probablemente adorada en de almacenamiento del conocimiento, es
los complejos religiosos de Sippar y Lar- decir, bibliotecas. Destaca así las famosas
sa, dedicados a Šamaš. Su ámbito de ac- bibliotecas del primer milenio a.C., como
tuación se ha relacionado con la gestión de Nínive. Al igual que en los demás capí-
los pesos y medidas. Esto se desprende del tulos, esta función no es exclusiva de los
descubrimiento arqueológico que se dio en templos a Nabu, sino que también vemos
el templo de Larsa en la que aparecieron bibliotecas en otros templos como el de
pesas junto a piezas de metal precioso y pe- Šamaš en Sippar o la de Ishtar en Uruk.
queños artefactos de arcilla que hacían re- Finalmente, los templos a Nisaba y Nabu
ferencia a las cantidades de metal precioso también tienen una función como archivos
pesado. Junto a este hallazgo, una serie de asociados al poder real como se advierte
textos relacionan esta actividad de pesado en documentos que los denomina Enika,
con templos dedicados a Kittum denomi- “templo/casa de cuentas”
nados Egina. Igualmente se ha determina- Por su parte, el capítulo cinco está
do que los Egina serían también centros dedicado a los templos de Ishtar, conoci-
de medición de capacidades. Finalmente, dos en muchos textos como “casas/templos

302
Isimu 22

del placer”. Desde el principio del capítulo, centros artesanales de alta calidad. Muchos
el autor nos introduce al debate científico de estos templos son de hecho denomina-
sobre la existencia o no de una prostitución dos “templos-taller”. Por su parte, textos
sagrada. Para ello, lo primero que hace es de la época de la III dinastía de Ur reco-
identificar y definir la prostitución en ge- gen la existencia de los “grandes talleres
neral en Mesopotamia, la cual está perfec- del dios Enki”. Sin lugar a dudas, muchos
tamente documentada tanto en los textos templos de diferentes divinidades contaban
como en la arqueología. Existía por tanto con un equipo nutrido de artesanos cualifi-
un estatus jurídico de prostituta. Las pros- cados, principalmente por la necesidad de
titutas en Mesopotamia ejercían su activi- fabricación de numerosos objetos de culto.
dad fundamentalmente en las tabernas; de El autor finaliza destacando la especial re-
hecho, muchas tabernas identificadas como lación entre los centros de culto a Enki y
tales cuentan con representaciones sexua- la disciplina musical, donde se fabrican y
les en tierra cocida. Analizado este aspec- se aprendía a tocar los instrumentos musi-
to, Dominique Charpin pasa a estudiar las cales.
posibles relaciones entre la diosa Ishtar y Por último, el autor pasa a relacionar
la prostitución. En muchos textos literarios otras actividades productivas menos espe-
se la relaciona con el sexo, como por ejem- cializadas con otros templos y divinidades
plo en el propio Poema de Gilgamesh. En específicas. Como es el caso de la relación
cuanto a la relación entre los templos de de los templos dedicados a Nanna/Sin, el
Ishtar y la prostitución, el autor menciona dios lunar con la fabricación de productos
la denominación de muchos de ellos como lácteos, como revela la gran cantidad de
“tabernas de pureza”. Por otra parte, con- documentación al respecto encontrada en
tamos con una serie de rituales de índole el templo de Sin en Ur. Otro sería la divi-
sexual llevados a cabo en los templos a nidad Ninkasi/ Shirashu, asociada a la pro-
Ishtar y a oficiales propios de un santua- ducción de cerveza y cuyos templos serán
rio, supervisando estos rituales. Es eviden- denominados templo/casa de la cerveza.
te, por tanto, que la sexualidad tiene una Uno más serían templos con competencias
dimensión religiosa fuertemente ligada al específicas en la producción de perfumes y
culto a Ishtar. aceites aromáticos.
Finalmente el capítulo seis consiste El autor añade en la conclusión unas
en una descripción de diferentes divinida- líneas sobre las grandes divinidades en la
des cuyos templos podrían contar con unas cima del panteón Mesopotámico. De ellas
funciones específicas. En primer lugar, re- que se desprende que, a diferencia de las
laciona los templos de culto a Nergal, dios estudiadas en el libro, dioses como En-
de los infiernos, como lugares en los que lil, Marduk o Assur tenían una dimensión
se podían preparar las pompas fúnebres. Si más política. Dominique Charpin establece
bien el sepelio está documentado en ám- que, ante la abundancia de la documenta-
bito privado, vemos como algunos de los ción presentada, las funciones desempe-
oficiales de los templos a Nergal son de- ñadas en los templos no eran actividades
nominados enterradores y lamentadores. anexas a la función religiosa, sino que eran
Todo esto, lleva al autor a pensar que, en consustanciales a su propia existencia, en
el momento del funeral, una familia podía otras palabras, los servicios que distribuían
acudir al templo para la organización de la eran parte de su razón de ser. Dichas fun-
ceremonia con personal cualificado; o bien ciones no eran exclusivas de las diferentes
podían organizarlo ellos mismos de mane- divinidades, ni siquiera del propio ámbito
ra autónoma. religioso. En torno a estas ideas, el autor fi-
Seguidamente, pasa a analizar los naliza con una serie de reflexiones en torno
templos del dios Enki, dios del conoci- a la relación entre lo religioso y lo profano
miento de las artes prácticas, asociados a en la sociedad mesopotámica, establecien-

303
Reseñas - Bookreviews

do que no existía tal diferencia. Así pues,


debemos observar en estas funciones des-
empeñadas por los templos la dimensión
sagrada de toda actividad humana.
En esta obra, el profesor Dominique
Charpin nos presenta ese aspecto desco-
nocido de los templos mesopotámicos, es
decir, como instituciones distribuidoras de
servicios. Es de destacar la gran variedad
de fuentes utilizadas, valiéndose de textos
literarios y administrativos, por un lado,
y restos arqueológicos y representacio-
nes iconográficas por otro. Además de las
metodologías que se aprecian en la obra,
desde el análisis filológico para la identifi-
cación de su función de templos y divini-
dades, al estudio del contexto arqueológico
en donde sitúa restos y textos; pasando por
la crítica literaria, el análisis iconográfico
e incluso codeándose con las ciencias na-
turales de cara a ofrecer una visión lo más Trevor Bryce, Jessie Birkett-Rees,
completa posible de la dimensión social de Atlas of the Ancient Near East: From
los templos mesopotámicos. De este análi- Prehistoric Times to the Roman Imperial
sis, podemos ver que los templos no eran Period.
exclusivamente centros desde donde se New York; London: Routledge,
ejercía el control ideológico de la sociedad 2016. Pp. xvii, 318. ISBN 9780415508018
además de células básicas de la producción (impreso). ISBN 9781315734811
económica. Sino que a estas dos facetas, (electrónico)
Dominique Charpin añade una igual de
importante, aquella destinada a distribuir Un atlas actualizado es algo que ne-
servicios dentro del proceso redistributivo cesita el orientalismo antiguo para poder
y que posiblemente sea la clave para enten- tener constancia de los nuevos hallazgos y
der el mantenimiento de estas instituciones sitios que han sido estudiados. La obra re-
a lo largo de toda la Historia de Mesopo- currente entre los estudiantes para la loca-
tamia. lización y uso de cartografía histórica es el
atlas histórico de Michael Roaf “Cultural
Juan Álvarez García Atlas of Mesopotamia (1990)” y los mapas
Contratado FPI-UAM que sirven de apoyo didáctico en los ma-
Departamento de Historia Antigua, Historia nuales de Arqueología e Historia del Próxi-
Medieval, Paleografía y Diplomática mo Oriente, siendo por lo tanto urgente una
Facultad de Filosofía y Letras obra que se ponga al día con los avances e
Universidad Autónoma de Madrid investigaciones que han tenido lugar desde
entonces. La obra de Trevor Bryce y Jes-
sie Birkett-Rees “Atlas of the Ancient Near
East: From Prehistoric Times to the Roman
Imperial Period” pretende ofrecer un ma-
terial completo, revisado y actualizado de
las áreas que conforman al Oriente Antiguo
para los afines el Oriente Antiguo.

304

También podría gustarte