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“Año de la unidad, la paz y el desarrollo”

UNIVERSIDAD DE SAN MARTÍN DE PORRES

Facultad de Derecho

TEORIA DEL DERECHO II


“Trabajo final”

Estudiantes: Cancho Díaz Nicole


Chacca Chávez Raquel
Rentería Gutarra Maccie

Docente: Dr. Jorge Beltrán

Ciclo: III

Secc: N01

Turno: Noche

LIMA - PERÚ

2023
¿Las intervenciones policiales vulneran el debido proceso?

I.Introducción
En nuestro país se reporta un número significativo de detenciones policiales cada año.
Estas detenciones pueden ser por diversas razones, como sospecha de comisión de un
delito, orden judicial, flagrancia, entre otros. En este contexto es importante garantizar
algunos de los más importantes derechos fundamentales como lo son: La libertad
individual, seguridad personal y debido proceso.

El debido proceso en las detenciones policiales es un principio fundamental que


garantiza los derechos de las personas involucradas en un proceso penal desde el
momento de su detención hasta la conclusión del juicio. Este principio está consagrado
tanto en la Constitución Política del Perú (Derecho fundamental al debido proceso y a la
tutela jurisdiccional) como en tratados internacionales de derechos humanos ratificados
por el país. En el contexto de las detenciones policiales, el debido proceso se refiere a
los derechos y garantías que deben ser respetados desde el momento de la detención
hasta que la persona sea puesta a disposición de un juez.

En primer lugar, se establece que toda persona tiene derecho a ser informada de los
motivos de su detención y de los cargos que se le imputan. Esta información debe ser
comunicada de manera clara y comprensible. Además, se garantiza el derecho a la
asistencia legal desde el momento de la detención, para que la persona pueda contar con
la representación de un abogado que la asesore y defienda sus intereses.

Asimismo, se establece que las detenciones deben ser llevadas a cabo por autoridades
competentes y en estricto apego a la ley. No se permite la detención arbitraria o ilegal, y
toda persona tiene derecho a impugnar la legalidad de su detención ante un juez.
Además, se garantiza el respeto a la integridad física y psicológica de la persona
detenida, prohibiendo cualquier forma de tortura, trato cruel o inhumano.

El debido proceso también implica el derecho a un juicio justo y en un plazo razonable.


Esto implica que la persona detenida tiene derecho a ser juzgada por un tribunal
imparcial, a presentar pruebas y a ejercer su defensa de manera adecuada. Además, se
garantiza la presunción de inocencia, lo que significa que la persona es considerada
inocente hasta que se demuestre su culpabilidad más allá de toda duda razonable.
En Perú, se han implementado esfuerzos para fortalecer y mejorar el sistema de justicia,
incluyendo el debido proceso en las detenciones policiales. Estas mejoras buscan
garantizar un sistema más transparente, eficiente y respetuoso de los derechos humanos
de las personas involucradas en procesos penales.

En resumen, el debido proceso en las detenciones policiales en Perú es un conjunto de


normas y garantías que busca proteger los derechos fundamentales de las personas
involucradas en un proceso penal. Estas garantías incluyen el derecho a ser informado
de los motivos de la detención, a la asistencia legal, a impugnar la legalidad de la
detención, a un juicio justo y a la presunción de inocencia. El respeto a estos principios
es esencial para asegurar un sistema de justicia equitativo y proteger los derechos
humanos de todas las personas.
II.Marco teórico

Antecedentes:

Un primer trabajo corresponde a Terrazos (2004): En este trabajo denominado “El


debido proceso y sus alcances en el Perú” se manejan los aspectos generales del debido
proceso y los alcances de este en un país como el nuestro. Si bien nos habla del alcance
doctrinal de la figura jurídica del proceso también tiene un enfoque práctico el cual
reúne la narrativa de nuestra experiencia jurídica: su tratamiento en nuestra constitución
actual y la jurisprudencia que ha derivado de ella. Finalmente se exponen las
importantes y nocivas consecuencias de la vulneración del debido proceso como
derecho fundamental.

Un segundo trabajo de Ramos (2021), quien realizó su tesis “Análisis del régimen
disciplinario de la Policía nacional del Perú desde la perspectiva del debido
procedimiento”, nos menciona la forma en la que se debe aplicar el principio del debido
procedimiento acorde los estatutos del régimen disciplinario de la Policía Nacional
peruana según el principio de legalidad y razonabilidad.

Un tercer trabajo de Bartra (2003), en el capítulo IV de su tesis “El habeas corpus y


las resoluciones del tribunal constitucional” nos habla de la esencia del proceso
constitucional de habeas corpus como una institución jurídica de vital importancia para
el desarrollo de una sociedad bajo del régimen de estado de derecho. Tomaremos la idea
de que el bien jurídico de la libertad no puede ser desplazado con una justificación
arbitraria o ambigua. La razón de la existencia de este mecanismo de defensa tiene
motivación, proyecciones y raíces en la más profunda problemática social, económica y
política.

Bases teóricas:

Debido proceso
Para Castillo (2013), en su estudio sobre el debido proceso y la tutela jurisdiccional
pretende averiguar sobre las interpretaciones que se ha venido haciendo sobre este
derecho fundamental y sobre su contenido. En primer lugar, hace hincapié en la persona
como fin, en calidad de ello, se deben resolver los conflictos no por la fuerza, sino a
través del Derecho, puesto este establece mecanismos para una realización justa, la cual
se busca para respetar la dignidad de cada ser humano.

Terrazos (2004) “Entendiéndose a la dignidad como el conjunto conformado por


aquellas condiciones mínimas que le permiten al ser humano tener y llevar a cabo su
proyecto de vida y le permiten realizarse como persona, nace la necesidad de buscar
mecanismos o instrumentos adecuados para el respeto y protección efectiva de dicho
valor supremo: la dignidad...”
Es así, que el derecho al debido proceso está referido a situaciones relaciones con
resolución de conflictos, la cual a su vez está vinculada a que “el procedimiento o
proceso en el cual se encuentre comprendida una persona, deba considerarse como
justo” ( EXPs. N.º 06149–2006–PA/TC y 6662–2006–PA/TC, Fundamento 37) (no se si
ponerlo)
Asimismo, el Tribunal Constitucional se ha pronunciado distintas veces sobre el
derecho al debido proceso, que “su contenido constitucionalmente protegido comprende
una serie de garantías, formales y materiales, de muy distinta naturaleza”. Y es que este
derecho fundamental requiere “al proceso no sólo como instrumento de solución de
conflictos, sino como un mecanismo rodeado de garantías compatibles con el valor
justicia”.
(EXP. N.º 02386-2008-PA/TC - EXP. N.º 00917-2007-PA/TC)

Por otro lado, si bien las leyes persiguen un procedimiento o fin justo, esta no está
asegurada en su totalidad.

“(…) Para solventar esta posible deficiencia se ha reconocido que el derecho


fundamental al debido proceso exige tomar en consideración una serie de parámetros
materiales íntimamente vinculados al valor justicia. Tales parámetros tienen que ver con
la razonabilidad de las decisiones, de modo que puedan ser rechazadas por vulneradoras
del derecho fundamental al debido proceso aquellas decisiones que, siendo
procedimentalmente impecables, adolecen de estas elementales exigencias de
razonabilidad.” (Castillo, 2016, p. 8.)

En palabras del Tribunal Constitucional, el debido proceso “en su faz sustantiva, se


relaciona con los estándares de justicia como la razonabilidad y la proporcionalidad que
toda decisión con la que se pone término a una controversia debe suponer”. Esto supone
que “el juez constitucional se encuentra legitimado para evaluar la razonabilidad y
proporcionalidad de las decisiones judiciales”. (EXP. N.º 00917-2007-PA/TC)

El derecho al debido proceso en la jurisprudencia nacional e internacional:

En el artículo 8.1 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos


establece que “(…) Toda persona tiene derecho a ser oída, con las
debidas garantías y dentro de un plazo razonable, por un juez o tribunal
competente, independiente o imparcial.
Esto quiere decir que no se le puede imputar un delito salvo que se haya
demostrado su culpabilidad, materializando la presunción de inocencia.
Por otro lado, la Convención también se ha expresado acerca del plazo
razonable como parte del derecho al debido proceso, en el que “es
necesario examinar las circunstancias particulares de cada caso”
Es, en ese sentido, que para que se pueda determinar el plazo razonable,
se debe tomar en cuenta: a) la complejidad del asunto, b) la actividad
procesal del interesado y c) la conducta de las autoridades judiciales.

El Hábeas Corpus
El Habeas Corpus es una figura fundamental en el ámbito jurídico, que se remonta a la
Edad Media en Inglaterra, y que hoy en día se encuentra vigente en muchos países
alrededor del mundo. Esta institución ha sido esencial en la defensa de derechos
humanos y la protección de las libertades civiles en todo el mundo, y su importancia
radica en su capacidad para salvaguardar uno de los valores fundamentales del Estado
de derecho, a saber, la libertad.

Esta figura se utiliza para garantizar la libertad personal de un individuo y para


protegerlo contra detenciones arbitrarias por parte de las autoridades. El habeas corpus
es un mecanismo idóneo para proteger derechos como el de la vida, la integridad física
y la libertad personal. Además, es un medio eficaz para evitar que las autoridades
estatales abusen de su poder al llevar a cabo detenciones arbitrarias o ilegales. La
importancia del habeas corpus no puede ser subestimada, en cuanto a su relevancia, el
habeas corpus ha permitido en numerosas ocasiones la liberación de personas que
habían sido detenidas ilegalmente o sin una justificación adecuada. De esta forma, ha
servido como herramienta para prevenir y combatir el abuso de poder por parte de las
autoridades y garantizar el respeto a los derechos humanos de los ciudadanos.

En términos generales, el Habeas Corpus es un recurso legal que permite que cualquier
persona que haya sido detenida de forma ilegal o arbitraria, o que esté siendo retenida
en contra de su voluntad, pueda impugnar su detención ante un juez. El juez debe
entonces evaluar la legalidad de la detención y, en caso de que determine que la
detención es ilegal, ordenar la puesta en libertad inmediata del detenido. El Habeas
Corpus es un instrumento fundamental para proteger los derechos fundamentales de las
personas y evitar abusos por parte de las autoridades. En muchos países, esta figura se
encuentra garantizada en la Constitución y goza de un alto nivel de protección legal.

En conclusión, el habeas corpus es una garantía vital para la protección de los derechos
humanos y las libertades civiles. Su importancia radica en su capacidad para proteger a
los ciudadanos de detenciones ilegales o arbitrarias, y en su papel fundamental en el
mantenimiento del Estado de derecho y la defensa de las libertades civiles. Es esencial
garantizar que el habeas corpus siga siendo una herramienta.

Principio de legalidad
Nadie será procesado ni condenado por acto u omisión que al tiempo de cometerse no
esté previamente calificado en la ley, de manera expresa e inequívoca, como infracción
punible, ni sancionado con pena no prevista en la ley. (Artículo II, Título Preliminar del
Código Penal)
oda persona está obligada a hacer lo que la ley dice y puede hacer todo lo que la ley no
le prohíbe.
Gracias al cumplimiento correspondiente a realizarse, respetando la Carta Magna en su
esencia, el maestro Morón Urbina nos mencionó tres partes clave de esta: la legalidad
formal, que pide el cumplimiento de la ley tal cual está establecida; la legalidad
sustantiva, la cual no permite ejercer atribuciones penales o de seguridad sin previa
disposición de la ley; la legalidad teleológica, que obliga a cumplir lo que el espíritu del
legislador pensaba sobre la norma y estableció previamente.
Esta doctrina incluye dos opciones, mantenerse conforme sobre el sometimiento o
mantener una ausencia de contrariedad a este.
La primera tesis para llevarse a cabo correctamente menciona que los 14 actos
administrativos podrían presentar cualquier contenido a excepción de los que generan
incompatibilidad con las normas jurídicas expresas (este es el alcance mínimo de
legalidad). La segunda tesis implica que con la conformidad de dichos aspectos basta
dicho acto de presencia de manera que se aplique y se autorice por la legislación (este es
el alcance máximo de legalidad). En otras palabras, para la noción mínima las
decisiones administrativas necesitan tener compatibilidad con el sentido de las reglas,
no solo estar en contrariedad sesgadamente a estas. Al tiempo que, para la noción
máxima todo esto debe mantener un riguroso procedimiento influenciado directamente
por las normas previas.
El enfoque de todo esto es instar que la administración se ejerza al margen de la ley o en
esta (MORÓN. 2018. Pág. 63,64,65).
Por otro lado, para el maestro FRAGA este principio se adhiere a favor de los
administrados, ya que menciona que estos poseen la capacidad de instar a la
administración una acción de cumplimiento y funcionamiento según las normas
jurídicas, y que en consecuencia estos se verifiquen con los organismos competentes,
aplicando una rigurosa especialización para su correcto fin. Es otras palabras, el derecho
a la legalidad se fragmenta en una sucesión de derechos respectivos como, el derecho a
la competencia, a la forma, al motivo, al objeto y al fin prescrito por la ley (FRAGA.
1992. Pág. 451,452).

Intervención policial:
En el decreto legislativo N° 1267, sobre la Ley de la Policía Nacional del Perú
Se encuentra en el artículo III de su Título Preliminar, en cuanto a Función Policial, en
sus incisos 1, y 3, que es la Policía Nacional la que garantiza y mantiene el orden
interno y el orden público. Este último entendido como el conglomerado de normas que
respetan principios constitucionales y derechos fundamentales, que aseguran la
convivencia social pacífica. Asimismo, que es el que brinda protección a los ciudadanos
y que garantiza el cumplimiento de las leyes.

En el Artículo V de este, establece que el Estado le ha dado atribuciones la Policía


Nacional del Perú para ejercerlas respetando los derechos fundamentales.
En el mismo orden de ideas, en el artículo VII, figuran sus principios institucionales, en
los que resaltamos para este estudio el inciso 1, referido a la primacía de la persona
humana y sus derechos fundamentales, en los que establece que la defensa y protección
humana. Asimismo, en el inciso 7 se refiere a la legalidad, en cuanto que su función
policial debe ser dentro del marco de la Constitución Política del Perú.

En el inciso 5 del artículo 2, en torno a sus funciones, es la Policía Nacional del Perú la
que debe garantizar los derechos de las personas (…)”
Pero este a su vez, en el inciso 6, menciona que la Policía debe “prevenir, combatir,
investigar y denunciar la comisión de los delitos y faltas previstos en el Código Penal y
leyes especiales.
En el inciso 10, referido a que deben realizar sus pertinentes investigaciones por
iniciativa propia o bajo la orden jurídica del Fiscal.

Por otro lado, la Ley N° 30714, titulada Ley que regula el régimen disciplinario de la
Policía Nacional del Perú, en el artículo 1 sobre las Garantías y Principios Rectores,
principio de legalidad: los órganos disciplinarios deben actuar con respeto a
Constitución Política del Perú, dentro del límite de sus facultades establecidas.

En torno, a sus sanciones disciplinarias, las clases de sanciones que existen son: la
amonestación, sanción simple, sanción de rigor, pase a la situación de disponibilidad
por medida disciplinaria y el pase a la situación de retiro por medida disciplinaria.

En el artículo 32, los efectos de la sanción pueden darse por infracción leve, la cual se
remite a la Dirección Ejecutiva de Personal dentro del plazo de 3 días hábiles. Por otro
lado, la infracción grave y muy grave una vez notificada, surte inmediato efecto. Esta
también será remitida dentro del plazo de 3 días hábiles.
SUPREMACÍA CONSTITUCIONAL

En el artículo 51 de la Constitución Política del Perú, figura que “La Constitución


prevalece sobre toda norma legal; la ley, sobre las normas de inferior jerarquía, y así
sucesivamente”. A su vez, el artículo 138 alude: “En todo proceso, de existir
incompatibilidad entre una norma constitucional y una norma legal, los jueces prefieren
la primera...”.

En este rango de ideas, “La Constitución es, norma jurídica y tiene fuerza vinculante.
Es por ello por lo que, puede hacerse referencia a ella aludiendo al ‘Derecho de la
Constitución’, esto es, al conjunto de valores, derechos y principios que, por pertenecer
a ella, limitan y delimitan jurídicamente los actos de los poderes públicos.” Palomino
(2004)

A modo de conclusión, en cuanto a la supremacía constitucional, puede referirse que la


Constitución es fuente de derecho nacional, fuente normativa y fundamento de todo el
orden jurídico; en otras palabras, prevalece sobre todas las normas y a su vez, las
condiciona, puesto que puede determinar la invalidez de aquellas que objeten los
principios constitucionales.

En concordancia, el principio de jerarquía, ubicado en el art. 51 de la Constitución,


advierte que son los poderes públicos los que están supeditados a la Constitución. Por
consiguiente, el principio de jerarquía es el instrumento que detecta la validez o
invalidez de las normas jurídicas de rango inferior. De modo que, la consecuencia de la
infracción a este principio es la invalidez de la norma.

Artículos:

Art 139, Constitución Política del Perú


Inciso 3: La observancia del debido proceso y la tutela jurisdiccional
Ninguna persona puede ser desviada de la jurisdicción predeterminada por la ley, ni
sometida a procedimiento distinto de los previamente establecidos
En el artículo 200, nos hablan de acciones de garantía constitucional, en los cuales
tenemos y que servirán para esta investigación:
El inciso 1, referido a la acción de Hábeas Corpus, que procede ante el hecho u omisión,
por parte de cualquier autoridad, funcionario o persona, que vulnera o amenaza la
libertad individual o los derechos constitucionales conexos.
En relación con los principios de Administración de Justicia, establece que son
principios de derechos de la función jurisdiccional:
En el inciso 2, que es pertinente: la independencia en el ejercicio de la función
jurisdiccional
Ninguna autoridad puede avocarse a causas pendientes ante el órgano jurisdiccional ni
interferir en el ejercicio de sus funciones. Tampoco puede dejar sin efecto resoluciones
que han pasado en autoridad de cosa juzgada, ni cortar procedimiento en trámite, ni
modificar sentencias.
En el artículo 166 de la Constitución menciona sobre la finalidad de la Policía Nacional
En el artículo 169 menciona que las fuerzas armadas y la policía nacional no son
deliberantes, sino que están subordinadas al poder constitucional.

Sin embargo, en el artículo 205 del Código Procesal Penal, señala que la Policía
Nacional, tiene bajo sus facultades requerir la identificación de cualquier transeúnte y
realizar comprobaciones pertinentes, sin necesidad de alguna orden Fiscal o del Juez.
Esto hace referencia a cada vez que resulte necesario para poder prevenir un delito u
obtener información para la indagación de un hecho punible.

Y el artículo 2.3 del Decreto Supremo Nro. 028-2009-MTC tenemos que las acciones de
fiscalización “(…) Comprende al personal policial de Comisarías y del Escuadrón de
Emergencias de la Policía Nacional del Perú.”

III.Discusión
En el presente trabajo se encuentra en contraposición las facultades conferidas a la
Policía Nacional para que ejerza su función en la búsqueda de la paz social, sin
embargo, esta puede verse impedida si la ejecutan arbitrariamente, pues dentro de la ley
orgánica establece que están supeditadas al respeto de la Constitución y por ende, a los
derechos fundamentales contenidos en esta.
El Perú es un país que cuenta con un Sistema de Protección de los Derechos Humanos,
como el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, en los que se encuentran
recogidos el respeto de los derechos fundamentales, teniendo como los principales: el
derecho a la vida, a la dignidad, a la integridad y al debido proceso, por mencionar unos
cuantos.
En el presente trabajo, se busca explicar que a pesar de la competencia que pueda tener
la Policía Nacional operando como agente estatal, es decir en representación del Estado,
no puede ser mayor buscar el fin de éste, si en alguna intervención policial usan la
fuerza o armas de fuego en busca de “justicia” cuando claramente vulneran derechos
fundamentales, y el más importante de todos, es decir, el derecho a la vida. A su vez,
existe la presencia de que una ley, en este caso orgánica o de materia penal, no puede
ser mayor que una norma constitucional, por el llamado principio de supremacía
constitucional.
En el mismo orden de ideas, en el entendido que los derechos fundamentales son
elementos de todo ordenamiento jurídico y siendo uno de ellos el debido proceso, su
existencia no debería de depender de un reconocimiento expreso en la Constitución
Política, puesto que, la base de ella encuentra sustento en la dignidad humana.
En efecto, los derechos fundamentales no tienen un carácter taxativo en nuestra
constitución política. Sin embargo, encuentra un reconocimiento implícito en el Artículo
3° del marco constitucional, que reconoce aquellos que buscan como fin la protección
de la persona humana y su dignidad.
Finalmente, en este extremo, el reconocimiento de la importancia de los alcances del
derecho del debido proceso se viene dando de manera progresiva, de manera tal, la
manifestación del debido proceso sustantivo debe ser taxativa, no con la finalidad de
reconocer la existencia del derecho ya que todo derecho fundamental es anterior al
ordenamiento jurídico, sino más bien con la finalidad de hacer más efectiva su
protección. Entendido el debido proceso sustantivo como aquel que sirve de protección
para los derechos fundamentales de los ciudadanos ante las leyes que contradigan a
esta.
IV.Conclusiones

El debido proceso es un derecho fundamental que garantiza a las personas el acceso a


un proceso justo y equitativo en cualquier situación relacionada con la resolución de
conflictos. Se basa en el respeto a la dignidad humana y comprende una serie de
garantías formales y materiales.
El habeas corpus es una figura fundamental en el ámbito jurídico que tiene como
objetivo proteger la libertad personal de las personas y prevenir detenciones arbitrarias o
ilegales. Es una herramienta esencial para proteger los derechos humanos y las
libertades civiles.
El principio de legalidad establece que nadie puede ser procesado o condenado por un
acto que no esté previamente calificado como infracción punible en la ley. Es un
principio fundamental en el sistema jurídico y garantiza que las autoridades actúen
dentro de los límites establecidos por la ley.
La intervención policial, especialmente en el contexto de la Policía Nacional del Perú,
está sujeta a principios institucionales que incluyen la protección de los derechos
fundamentales de las personas, la prevención y combate de delitos y la realización de
investigaciones bajo la orden jurídica del fiscal.
La supremacía constitucional establece que la Constitución prevalece sobre cualquier
norma legal y tiene fuerza vinculante. Es la fuente de derecho fundamental y condiciona
y limita los actos de los poderes públicos.

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