Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
metodología de
la investigación
en kinesiología
Hablar en público
Epistemología y metodología de la investigación en kinesiología
Hablar en público
Índice
Presentación ............................................................................................................... 3
Objetivos .................................................................................................................... 3
1. ¿Qué es hablar en público? ............................................................................... 4
2. ¿Cómo preparar una intervención en público? .............................................. 4
2.1. Apuesta por la simplicidad ....................................................................................... 6
3. El objetivo de la presentación............................................................................ 8
4. La estructura de la presentación ....................................................................... 8
5. Conecta con el público ................................................................................... 10
5.1. Comunica con tu voz .............................................................................................. 12
Presentación
Es la hora de la verdad. Estás frente al tribunal y la audiencia, ¿estás preparado?
Es evidente que hablar en público no resulta tarea fácil y aquel que opine lo contrario
no tiene más que hablar con algunas de las innumerables personas a las que el simple
hecho de pensar en hablar en público les genera nerviosismo, taquicardias, ansiedad,
etc. Pero también resulta cierto que cualquier persona que se esfuerce puede llegar a
desarrollar de manera aceptable esta habilidad, un desarrollo que pasa por mecanizar
algunas acciones presentes en la comunicación oral.
▪ Memorizar algunas partes del discurso para evitar mirar demasiado tiempo el
papel
Es normal que estés cohibido cuando vayas a exponer. Estarás nervioso, lógico y normal.
Piensa que esta presentación es una toma de contacto para cuando tengas que hablar
con tus pacientes, con sus familias, con el staff médico o técnico, etc.
No hables demasiado rápido y haz pausas entre frases para que el tribunal y la
audiencia puedan digerir la información. Piensa durante la preparación en qué
momentos podrás hacer esas pausas.
Y finalmente, tras meses de trabajo, mira a la gente a los ojos, habla alto y claro y, sobre
todo, sonríe.
Objetivos
Los objetivos que se pretenden alcanzar en este recurso son los siguientes:
Al esbozar la estructura debes tener en cuenta dos cosas: no tienes tiempo para exponer
todo el contenido del trabajo, ni mucho menos para explayarte a tu gusto sobre el tema.
Así que no te queda otra que seleccionar las ideas más potentes y renunciar a las más
superfluas.
Los Trabajos de Fin de Licenciatura (TFL) tienen su propia estructura, una estructura difícil
de trasladar a la pantalla. Define el tema del que vas a hablar. Recuerda que tienes
que ser claro y coherente para que los oyentes sigan tu discurso.
▪ Saber con qué tipo de público contamos para captar su atención e interés.
▪ Número de personas.
▪ Tener presente la forma en la que se lleva a cabo esa comunicación, dado que,
por ejemplo, si fuese telefónica, deberíamos centrar la mayor parte de la
atención en la voz. Por ejemplo, si queremos que en una conversación telefónica
Epistemología y metodología de la investigación en kinesiología
Hablar en público
Para destacar los puntos clave, evita a toda costa extenderte demasiado tiempo en
hablar de bibliografía o teoría; por norma general, el tribunal ya sabrá de lo que estás
hablando, puesto que han leído tu trabajo.
Por ello, al elaborar el guion debes plantearte las dos siguientes cuestiones:
Las presentaciones pueden servir para muchos fines, como persuadir, inspirar, explicar o
informar, por lo que el objetivo de la presentación determina el contenido.
Hazlo todo tan sencillo como sea posible, pero no más sencillo. Lo justo. Naturalidad.
Maximiza la relación señal-ruido en cada una de tus diapositivas. Máximo impacto con
los mínimos medios. Se suele decir que una imagen vale más que mil palabras, puesto
que las imágenes se recuerdan mejor que las palabras. Las imágenes poseen la virtud
de cautivar a la audiencia, no abuses de las imágenes predefinidas y utiliza fotos de
calidad, así que cuando vayas a usar una foto, pregúntate: ¿esa foto comunica o
degrada el mensaje?
▪ Definir el contexto
▪ Presentar evidencias
Las malas animaciones se encuentran entre las características más irritantes de una
presentación. Ten en cuenta que, cuando algo se mueve por la pantalla, es imposible
no seguirlo. Cuidado con los mensaje difusos o contradictorios, ya que a veces el texto
Epistemología y metodología de la investigación en kinesiología
Hablar en público
contradice la imagen que has usado o viceversa. El público dividirá su atención entre
los dos mensajes y la información se perderá por el camino. Haz un uso eficaz de las
animaciones:
▪ Nunca subrayes.
▪ Utiliza diferentes colores solamente para enfatizar o para indicar diferentes clases
de información.
▪ Utiliza diferentes fuentes solamente para enfatizar o para indicar diferentes clases
de información.
▪ La mejor receta para el fracaso es asegurarte de que nadie puede leer el texto
de tus diapositivas.
▪ Habla en positivo, pues una persona tarda un 48% más de tiempo en comprender
una frase negativa que una positiva
3. El objetivo de la presentación
La prioridad debe ser transmitir la esencia del estudio, pues los miembros del tribunal han
de comprender no lo que hace, sino por qué lo hace.
Si necesitas más de dos minutos para explicar en qué consiste tu mensaje y que lo
entiendan, es que tú mismo no lo tienes suficientemente claro. A la hora de definir el
mensaje fundamental de tu charla, esfuérzate para que sea claro y breve; que afirme
un beneficio evidente para tu audiencia y no solo para ti; que haga referencia directa
a los asistentes mediante la palabra “tú” o “vosotros”; que evoque emociones para
conectar no solo de cabeza a cabeza sino de corazón a corazón; y que incite a los
presentes a la acción. Ejemplo: el discurso del ascensor o elevator pitch.
4. La estructura de la presentación
Para que una presentación tenga éxito, su contenido debe haber sido seleccionado y
sintetizado con esmero y posteriormente estructurado de forma correcta. Aunque hayas
tamizado el material más relevante, el impacto de tus ideas dependerá en buena
medida del orden en que las presentes. Una buena presentación tiene una estructura
clara, que consta de introducción, un cuerpo o desarrollo y una conclusión.
Esta le permitirá al tribunal seguir el hilo de tu presentación. Una estructura clara permite
seguir el avance de la exposición. Haz alusión al índice de la charla para saber, y hacer
saber, por dónde vas. Asegúrate de tener una introducción, un desarrollo y una
conclusión transparentes.
La gente recuerda mejor los primeros y últimos puntos de la charla, así que asegúrate
de que tu conclusión e introducción son infalibles. Incluye aquí lo más importante.
Una forma sencilla y eficaz de organizar la información que no falla es (figura 4):
▪ Introducción
▪ Objetivos
▪ Hipótesis
▪ Metodología
▪ Resultados
▪ Discusión
▪ Conclusiones
Epistemología y metodología de la investigación en kinesiología
Hablar en público
17% 17%
25%
41%
La introducción debe servir de presentación y suscitar el interés del tribunal. No debe ser
más larga de dos minutos y debe servir para presentar siempre el mensaje clave en la
introducción. Resume la información a los aspectos clave, nada de cantar de memoria
definiciones o párrafos. Explícate con tus propias palabras, con lenguaje científico, sobre
el desarrollo de tu trabajo.
Cada idea, cada transparencia, cada palabra, deben estar presentes con la única
intención de ayudar a los oyentes a recorrer el camino. Lo que no contribuya a inspirar
el cambio que buscas en ellos, debe eliminarse. Durante tu intervención, no muestres
todas tus ideas, sino solo las más potentes. Presentar es seleccionar y ordenar ideas. Y
seleccionar significa elegir. Y elegir significa renunciar. Selecciona de entre todo tu
material lo más relevante y lo que mejor contribuye a comunicar tu mensaje para esa
audiencia en particular, bajo esas circunstancias, en ese espacio de tiempo. Debe ser
lo más corto posible en torno al mensaje principal. Sé claro y conciso. Sintetiza. La Figura
4 representa cómo deben repartirse los tiempos en una exposición.
Redacta una introducción cautivadora. Será lo último que debes escribir de tu TFL.
que ha ocurrido, puedes elegir disponer los sucesos siguiendo la lógica del tiempo; es
decir, en el mismo orden en que se produjeron. Por este motivo también se conoce a
este patrón como línea o flecha de tiempo. Su estructura permite describir una serie de
pasos o acontecimientos conectados cronológicamente en el orden en el que han
ocurrido o en el que podrían suceder, de tal forma que si suprimes uno de ellos el
proceso perdería el sentido. Muchas personas hacen su lista de la compra ante de ir al
supermercado. Hacen bien, no podemos recordar más de siete cosas a la vez.
La gente tiene una capacidad limitada para recordar y retener la información. Esto
también le ocurrirá al tribunal de tu TFL. Cíñete a la esencia de tu estudio y a la estructura
de la redacción. No pierdas el hilo, no te vayas por las ramas o confundirás al oyente.
La introducción prepara el camino y las conclusiones dejan las cosas bien atadas. Pero
la esencia está en la metodología, resultados y discusión. Ahí está el mensaje principal,
donde tu TFL se vuelve interesante. Los agradecimientos no son necesarios en la
exposición (en el texto deben ser breves y sentidos). Por último, piensa que la gente se
queda con lo último que oye, así que asegúrate de repetir el mensaje clave en tu
conclusión, ya que tanto el tribunal como la audiencia recordarán la charla en función
de la conclusión.
Por eso nos refugiamos detrás de diapositivas antes que salir a hablar a pecho
descubierto. Anteponemos un documento muerto al acto vivo de comunicar.
Volcamos datos desde la cabeza en vez de contar historias desde el corazón. Con esta
actitud, nuestras presentaciones no descuellan ni para bien ni para mal. No serán
excelentes, pero tampoco horribles. No llamarán la atención ni en una dirección ni en
otra. Serán, en definitiva, invisibles.
Las diapositivas no están para servirte a ti sino para servir a tu audiencia. Abandona el
uso de PowerPoint como una muleta en la que apoyarte y transfórmalo en una
Epistemología y metodología de la investigación en kinesiología
Hablar en público
Busca la simplicidad en el diseño de tus diapositivas. Asegúrate de que todo texto que
aparezca en tus diapositivas puede leerse desde la última fila. No insertes, sin más,
complejas tablas de Excel. Deja los detalles minuciosos para el documento impreso que
repartas y concéntrate en la gran foto, en la vista de pájaro.
▪ Resuena con sus propios intereses y objetivos (¿te has detenido antes a
escucharlos?)
▪ Les ayuda a alcanzar sus metas o sus sueños (¿sabes qué es lo que anhelan?)
▪ Datos: son la base de toda evidencia, pero deben suministrarse con mesura.
▪ La conclusión debe ser firme y decisiva, reducida a una única frase concisa.
▪ Di “gracias” y cállate.
Habla alto, con claridad y lentamente. Emplea frases cortas y lenguaje directo. Da
variedad melódica a tu discurso, utilizando todo el rango de tu paleta paraverbal:
▪ Cambia la entonación
No te parapetes tras atriles o mesas. Sal delante, ofrécete al público en persona entera.
Tú eres el visual más importante de la presentación. No debes parecer ni una estatua ni
un león enjaulado. Muévete con decisión y con un propósito firme. Aprende a controlar
el movimiento. No dejes que él te controle a ti.
Muestra entusiasmo genuino. Esfuérzate por proyectar en todo momento una imagen
positiva. Y viste apropiadamente para la ocasión: la forma de vestir conlleva dos
importantes mensajes no verbales: respeto por la audiencia y deseo de conformidad.
Una buena imagen siempre predispone favorablemente a los oyentes.
6. Miedos e imprevistos
Hablar en público ocupa el primer puesto en la lista de las diez cosas que más temor
producen. Le siguen: las alturas, los insectos, problemas económicos, aguas profundas,
enfermedad, muerte, avión, soledad, los perros, etc.
Has de saber que es posible que al comienzo de tu charla te tiemble la voz y/o las
piernas, no saber qué hacer con las manos, pensar que aburres a la audiencia y quieras
esconderte en los papeles o salir huyendo. Para evitar esto, has de haber ensayado
antes, como hemos dicho. No hay más secretos que practicar. Además, ten en cuenta
que estos nervios previos son normales y ni al tribunal ni a la audiencia le suponen mayor
problema, por lo que suelen pasar desapercibidos para ellos.
Al empezar, debes estar tranquilo (todo lo que se pueda claro está) y subir al estrado
mostrando seguridad y firmeza. Debes usar un tono de voz adecuado al tema que
Epistemología y metodología de la investigación en kinesiología
Hablar en público
estamos tratando, con una velocidad que permita la comprensión del mensaje. Sé
respetuoso y mira a los ojos (técnica del faro) y, en algún, momento, esboza una sonrisa.
Pide perdón si toses, te equivocas, te trabas o ante cualquier situación inesperada. No
hay mayor problema. Se debe ser natural por encima de todo. No te quedes parado,
debes moverte por el estrado (cruzar el río).
▪ Gestos exagerados
Conclusiones
Puntos más importantes para tener en cuenta (¡no dejes nada al azar!):
▪ Tiempo del que se dispone para exponer el TFL o póster (unos 10 minutos).
▪ Seleccionar los puntos fuertes del trabajo: ideas relevantes, aportaciones propias,
etc. Dejar de lado cuestiones de conocimiento general.
▪ Prepara la presentación con tiempo para ver cuánto tardas en exponer. Que
otros te escuchen.
▪ Repetir, repetir, repetir... Si te ciñes a una estructura clara, estarás mucho más
relajado durante la charla.
▪ Piensa en las necesidades de tus oyentes. Ponte en su piel para ver qué puede
interesarles y estructura el mensaje en consecuencia.
Epistemología y metodología de la investigación en kinesiología
Hablar en público
▪ Muestra simpatía. Procura sonreír y establecer contacto visual con los miembros
del público.
▪ Aplica la regla de 10 diapositivas máximo con seis reglones con seis palabras.
Tamaño: 30 o más.
▪ Usa el lenguaje corporal. Adopta una postura que muestre seguridad y muévete
por el escenario o por la sala durante la presentación.
▪ No valen los ensayos mentales: ponte de pie y repite en voz alta palabra por
palabra la idea o ideas asociadas a cada transparencia como si estuvieras en el
día de la presentación delante de la audiencia.
▪ Repasa las diapositivas hasta memorizar los puntos importantes, ten claro qué
decir en cada una. Practícalo todo: la voz, los gestos, la mirada, el movimiento,
las demos, etc. Ensaya con compañeros: debe primar la sinceridad y honestidad.
Referencias bibliográficas
Carnegie, D. (2013). Cómo hablar bien en público. Overstock Bargains.