Constituyen un elemento accidental del contrato de compraventa y consisten en
una cantidad de dinero u otra cosa fungible que una de las partes entrega a la otra al celebrar el contrato. http://www.enciclopedia-juridica.com/d/arras/arras.htm#:~:text=%5BDCiv%5D %20Constituyen%20 Las regula el artículo 1442 del Código Civil diciendo que “Las arras dadas en garantía del cumplimiento de una obligación, constituyen el equivalente de los daños y perjuicios provenientes de la inejecución, siempre que mediare culpa; y si el incumplimiento procediere de quien las recibió, éste deberá restituir el doble de lo que hubiere recibido”. Historia. Desde el Derecho Romano se legisló permitiendo que uno de los contratantes entregara al otro determinados objetos (anillos o monedas, frecuentemente), en señal de la celebración de un contrato. Si éste era cumplido se devolvían las arras (arras confirmatorias), pero si no lo era, las perdía la parte que las había entregado (arras penitenciales). La primera de dichas modalidades se conserva actualmente bajo la modalidad de las denominadas “fianzas de cumplimiento”; y las segundas, se utilizan como garantía en los contratos de promesa. Contratos de promesa. Las arras son idóneas en los contratos de promesa . En éstos la parte que está interesada en la celebración de un determinado contrato, que en el momento presente no puede o no quiere realizar, entrega a la otra parte una determinada cantidad de dinero en calidad de arras, es decir, como garantía de que el contrato que desea se celebrará dentro del plazo que para el efecto establecen. Si quien entregó las arras no celebra el contrato en el plazo fijado, las pierde; y si, por el contrario, quien no otorga el contrato prometido es quien las recibió, tendrá que devolverlas duplicadas. Necesidad de puntualizar qué clase de incumplimiento cubren las arras. El articulo 1685 del Código Civil establece al respecto que: Cuando en la promesa se conviene en el pago de una multa, sin expresar que este pago es sin perjuicio del cumplimiento del contrato, pagada la multa cesa la obligación de celebrar el contrato prometido. Es erróneo que le denomine “multa”, pero con todo y eso es indudable que la norma se está refiriendo a las arras como garantía del otorgamiento del contrato prometido; y, como se deduce de su expresión, pueden pactarse en sustitución de la celebración del contrato prometido, o como adición a dicha celebración pero hay que especificarlo claramente en el contrato.