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Seminario Mayor Nuestra Señora De Suyapa

Asignatura: Doctrina Social de la Iglesia


Catedrático: S.E. Óscar Andrés Cardenal Rodríguez Maradiaga
Alumno: Noé Gerardo Hernández Hernández
IV de Teología
Lunes 27 de marzo de 2023
Inicio del II Parcial. Continuidad del Documentos: Doctrina Social de la Iglesia, pág. 6:

La participación de los trabajadores: el Papa Juan XXIII llamó


la atención a la necesidad de emplear medios eficaces para
que las desigualdades económico-sociales no aumenten,
sino que se atenúen. Así, en la lucha contra las
desigualdades, surge el concepto de democracia económica
y empresarial que procura dar al trabajador una participación
en las utilidades, decisiones y propiedad o capital de la
empresa en que trabaja.

La política: sociedad, estado y autoridad: las sociedades humanas pueden tener diversas
finalidades: familiares, culturales, económicas, religiosas, políticas, locales, internacionales, pero
todas deben poner a la persona humana como principio y fin.

Democracia Integral: la participación, como principio esencial


de la doctrina social de la Iglesia, tiene una aplicación muy
específica en el orden político. El objetivo del "bien común" de
la autoridad pública se concreta en las condiciones sociales
que favorecen el desarrollo integral de la persona humana en
lo económico, cultural, social y político.

El individuo participa en las organizaciones intermedias, desde


la familia hasta las asociaciones religiosas, profesionales,
sindicatos, partidos políticos y otras instituciones que exceden a las capacidades individuales.

Una teoría de cómo se puede lograr esto es que el ciudadano tenga dos votos, uno por el lugar
donde reside y el otro por la organización a la que pertenece. Sea esta cultural, profesional,
religiosa, sindical etc.

La creación, el medio ambiente y el desarrollo: producir más y


mejor responde a una exigencia de la razón y es también una
necesidad imprescindible, pero no es menos necesaria y
conforme a la justicia que la riqueza producida se reparta
equitativamente, y que el reparto de los bienes de la creación comprenda también a las
generaciones futuras.

Liberación humana integral: a pesar de los avances alcanzados en la mayoría de los países, las
diferencias entre ricos y pobres no se han reducido; al contrario, las desigualdades han aumentado.
El marxismo, que prometía una sociedad ideal, no liberó a los oprimidos, sino que los hizo esclavos
de un sistema totalitario, injusto y opresor. No se trata solo de elevar el nivel de vida de todos los
pueblos, sino de hacer crecer la dignidad y creatividad de todos. El desarrollo no es solo económico,
sino que tiene una dimensión humana integral.

Liberación de la opresión y del pecado: la opresión es


la falta de humanidad que tolera la miseria y el hambre
en los sistemas políticos que mantienen a millones de
seres humanos en la indigencia.

La dimensión universal de la solidaridad: la ayuda


monetaria solamente no resuelve los problemas existentes, la verdadera solución se halla solamente
en el desarrollo económico, en el progreso social, y en la eliminación de la corrupción.

Hacia un mundo mejor: los seres humanos aspiran a vivir felices. En la búsqueda de felicidad,
muchas personas escogen un camino equivocado, que lejos de llevarlos a acercarse a Dios y
hacerlos felices, los llevan al pecado. Buscando dinero, poder, fama, sexo y otros placeres para
saciar sus deseos, olvidan el verdadero y único camino para
la felicidad.

Estructuras de justicia y paz: el actual mundo intercomunicado


y la economía planetaria exigen estructuras que hagan
posible la convivencia en paz y con justicia. Así como fue
necesario establecer leyes, tribunales y demás órganos para
la sociedad en escala nacional, ahora la humanidad reclama esas estructuras a escala mundial.

Sin estructuras globales no es posible lograr la justicia y la paz, evitar la guerra y otros excesos que
todavía hay que lamentar.

Desarrollo y aplicación de las estructuras mundiales: la Declaración de los Derechos Humanos


parece inspirada en la Doctrina Social de la Iglesia, incorporando muchos de sus principios.
Sin embargo, mucho queda por hacer, y corresponde a los ciudadanos del mundo, y muy
especialmente a los fieles laicos, la aplicación práctica de muchos de estos derechos y principios.

Medidas propuestas por la Iglesia:


 Un análisis crítico del orden económico mundial para corregirlo y proponer un sistema y
mecanismos capaces de promover el desarrollo integral y solidario de las personas y de los
pueblos, basado en el bien común, y no exclusivamente en el lucro.
 Mayor presencia de cristianos en la vida social y pública para promover la verdad, la
honradez, la laboriosidad y el servicio del bien común.
 Proyectos internacionales para eliminar el comercio de drogas.
 Apoyo a la creciente democratización del mundo como forma de reducir los regímenes
dictatoriales, respetar los derechos de cada persona y evitar los abusos.
 Adecuados organismos de control y transparencia con apertura al público de las
transacciones económicas para prevenir la corrupción.
 Protección eficaz del medio ambiente, controlando gases nocivos, incendios forestales y
protegiendo las reservas naturales como la selva amazónica.
 Promover la dimensión social de la conciencia.
 Que esa participación se haga con un estilo de vida vestido con los principios del Evangelio
de modo que el testimonio de los laicos comprometidos inspire a la solidaridad.
 Promover una cultura de solidaridad ayudando e incentivando a los pobres y marginados.
 Promover la educación cívica, moral, social y ética como base para el orden social, la paz y
la justicia social; y apoyar la nueva evangelización para difundir el mensaje social del
evangelio.
 Defender la cultura de la vida en contra de la eutanasia, el aborto y demás amenazas a la
vida de víctimas indefensas.
 Fortalecer la familia con leyes adecuadas e instituciones que promuevan adopciones y
ayuden a las mujeres con problemas por su embarazo.

Transparencia. La transparencia procura reducir las oportunidades de cometer fraudes, abriendo las
contrataciones oficiales y otras operaciones al conocimiento público.

Una llave para un mundo más feliz: no se puede ser feliz en con una sociedad donde haya opresión
y miseria, cuando reinan la violencia, el hambre y la injusticia. Para lograr la felicidad se necesita que
el prójimo también lo sea. Procurar el bien común, paz y la fraternidad en justicia, es el único método
para alcanzar un mundo feliz.

Lunes 17 de abril de 2023

Teología de la liberación
En el marco de una sociedad oprimida, la Iglesia busca dar respuesta sobre el papel del cristiano y
la propuesta de una fe liberadora. Es así como nace la Teología de la liberación, una corriente
teológica nacida en el seno de la Iglesia Católica y la Conferencia de Medellín con representantes
como Leonardo Boff, Gustavo Gutiérrez, Jon Sobrino, etc.
Los primeros registros de esta corriente teológica los encontramos en Brasil, en donde mediante un
proceso de concientización se desarrolló un método de alfabetización, en el que además se
empezaron a utilizar conceptos marxistas para analizar la sociedad. El trabajo de algunos
sacerdotes en el mundo obrero impulsó este movimiento en Latinoamérica, esto provocó ser
acusados de comunistas.
Las ideas de esta corriente son:
1. Opción preferencial por los pobres.
2. La salvación cristiana no puede darse sin la liberación económica, política, social e
ideológica, como signos visibles de la dignidad del hombre.
3. Eliminar la explotación, la falta de oportunidades e injusticias de este mundo.
4. La liberación como toma de conciencia ante la realidad socioeconómica latinoamericana.
5. La situación actual de la mayoría de los latinoamericanos contradice el designio histórico de
Dios de que la pobreza es un pecado social.
6. No solamente hay pecadores, sino que hay víctimas del pecado que necesitan justicia y
restauración.
La injusticia e inhumanidad crece en los países industrializados, la globalización de la economía
lleva claramente a la falta de solidaridad de nuestras sociedades. La teología de la liberación en
Latinoamérica es la primera alternativa contra el capitalismo. La mercantilización global de todas las
cosas. Ya no solo es una teología contextual latinoamericana, sino que, con el desarrollo
mencionado, se convierte en teología contextual universal.
La teología de la liberación se ha dedicado a difundir el evangelio cristiano con un peculiar estilo al
igual en países en desarrollo que en aquellos menos favorecidos en lo económico, afirmando la
necesidad de conversión de toda la Iglesia para una opción preferencial por los pobres, con miras a
su liberación integral.
El Cardenal Ratzinger señaló los errores de algunas formas de la teología de la liberación:
1. Desde un punto de vista teológico, el análisis marxista no es una herramienta científica para
el teólogo que debe llevar a cabo un examen crítico de naturaleza epistemológica más que
social o económico.
2. El marxismo es, además, una concepción totalitaria del mundo, irreconciliable con la
revelación cristiana, en el todo como en sus partes.
3. Impone su lógica y arrastra las "teologías de la liberación" a un concepto de la praxis que
hace de toda verdad una verdad partidaria
4. La violencia de la lucha de clases es una concepción puramente estructuralista, para
legitimar esa violencia.
5. Decir que Dios se hace historia, e historia profana, es caer en un inmanentismo historicista,
que tiende injustificadamente a identificar el Reino de Dios y su devenir con el movimiento
de la liberación meramente humana, lo que está en oposición con la fe de la Iglesia.
6. Las virtudes teologales de la fe, la esperanza y la caridad reciben un nuevo contenido como
"fidelidad a la historia", "confianza en el futuro", y "opción por los pobres" que en realidad les
niega su sustancia teológica.
7. La politización de las afirmaciones de la fe y de los juicios teológicos lleva a la aceptación de
que un hombre, en virtud de su pertenencia objetiva al mundo de los ricos, es, ante todo un
enemigo de clase que hay que combatir.
8. Todo eso lleva a un clasismo intolerable dentro de la Iglesia y a una negación de su
estructura sacramental y jerárquica, hendiendo al cuerpo místico de Cristo en una vertiente
"oficial" y otra "popular", ambas contrapuestas.
9. La nueva hermenéutica de los teólogos de la liberación conduce a una relectura
esencialmente política de las Escrituras y a una selectividad parcial y mentirosa en la
selección de los textos sacros, desconociendo la radical novedad del Nuevo Testamento,
que es liberación del pecado, la fuente de todos los males.
10. También entraña el rechazo de la tradición como fuente de la fe y una distinción inadmisible
entre el "Jesús de la Historia" y el "Jesús de la fe", a espaldas del magisterio eclesiástico.
A pesar de todas sus objeciones el mismo Ratzinger reconoce que tratando de hacer un juicio global,
no puede dejar de reconocer que, cuando busca uno comprender las opciones fundamentales de la
teología de la liberación, el conjunto tiene una lógica casi irrebatible.

Lunes 24 de abril de 2023

Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe


Instrucción sobre algunos aspectos de la «Teología de la Liberación».
Joseph Card. Ratzinger, Prefecto

Introducción
El Evangelio de Jesucristo es un mensaje de libertad y una fuerza de
liberación. La liberación es ante todo y principalmente liberación de la
esclavitud radical del pecado. Su fin y su término es la libertad de los hijos
de Dios, don de la gracia. Lógicamente reclama la liberación de múltiples
esclavitudes de orden cultural, económico, social y político, que, en
definitiva, derivan del pecado, y constituyen tantos obstáculos que impiden
a los hombres vivir según su dignidad. 

Una aspiración
La aspiración de los pueblos a una liberación constituye uno de los
principales signos de los tiempos que la Iglesia debe discernir e interpretar
a la luz del Evangelio. Esta aspiración traduce la percepción auténtica de la dignidad del hombre,
ultrajada y despreciada por las múltiples opresiones... Recordemos que el Evangelio ha suscitado en
el corazón de los hombres la exigencia y la voluntad positiva de una vida fraterna, justa y pacífica.

Por otro lado, el hombre no quiere sufrir ya pasivamente el aplastamiento de la miseria. Tampoco se
ignora, que la humanidad, sería capaz de asegurar a cada ser humano el mínimo de los bienes
requeridos por su dignidad de persona humana. Entonces cómo responder al escándalo de irritantes
desigualdades entre ricos y pobres; a la ausencia de equidad y de sentido de la solidaridad en los
intercambios internacionales y que se vuelve ventajosa para los países industrializados.

La Sede Apostólica, en la línea del Concilio Vaticano II, así como las Conferencias Episcopales, no
han dejado de denunciar el escándalo que constituye la gigantesca carrera de armamentos.

Expresiones de esta aspiración


La aspiración a la justicia y al reconocimiento efectivo de la dignidad de cada ser humano requiere
ser iluminada y guiada. Se debe ejercer el discernimiento de las expresiones, teóricas y prácticas, de
esta aspiración. Aunque, con frecuencia la aspiración a la justicia se encuentra acaparada por
ideologías que ocultan o pervierten el sentido de la misma.

La liberación, tema cristiano


Tomada en sí misma, la aspiración a la liberación no puede dejar de encontrar un eco amplio y
fraternal en el corazón y en el espíritu de los cristianos. Por eso, ha nacido el movimiento teológico y
pastoral conocido con el nombre de «teología de la liberación». La expresión «teología de la
liberación» designa en primer lugar una preocupación privilegiada, generadora del compromiso por
la justicia, proyectada sobre los pobres y las víctimas de la opresión.

La aspiración a la liberación, como el mismo término sugiere, toca un tema fundamental del A.T. y
del N.T. Por tanto, la expresión «teología de la liberación» es plenamente válida: designa entonces
una reflexión teológica centrada sobre el tema bíblico de la liberación y de la libertad, y sobre la
urgencia de sus incidencias prácticas.

Fundamentos bíblicos
La experiencia radical de la libertad cristiana constituye aquí el primer punto de referencia. Cristo,
nuestro Liberador, nos ha librado del pecado, y de la esclavitud de la ley y de la carne, que es la
señal de la condición del hombre pecador.

Enumeramos aquí, nueve ideas tomadas de la Sagrada Escritura:


1. Las «teologías de la liberación» tienen en cuenta ampliamente la narración del  Éxodo. El
episodio que originó el Éxodo jamás se borrará de la memoria de Israel.

2. Las múltiples angustias y miserias experimentadas por el hombre fiel al Dios de la Alianza
proporcionan el tema a varios salmos: lamentos, llamadas de socorro, acciones de gracias
hacen mención de la salvación religiosa y de la liberación.
3. En el Antiguo Testamento los Profetas, después de Amós, no dejan de recordar, con
particular vigor, las exigencias de la justicia y de la solidaridad, y de hacer un juicio
extremamente severo sobre los ricos que oprimen al pobre.
4. Tales exigencias se encuentran en el Nuevo Testamento. Aún más, están radicalizadas,
como lo muestra el discurso sobre las Bienaventuranzas. La conversión y la renovación se
deben realizar en lo más hondo del corazón.
5. Ya anunciado en el Antiguo Testamento, el mandamiento del amor fraterno extendido a
todos los hombres constituye la regla suprema de la vida social.
6. Las exigencias de la justicia y de la misericordia, ya anunciadas en el Antiguo Testamento,
se profundizan hasta el punto de revestir en el Nuevo Testamento una significación nueva.
Los que sufren o están perseguidos son identificados con Cristo. La perfección que Jesús
pide a sus discípulos (Mt 5, 18) consiste en el deber de ser misericordioso «como vuestro
Padre es misericordioso» (Lc 6, 36).
7. A la luz de la vocación cristiana al amor fraterno y a la misericordia, los ricos son
severamente llamados a su deber.
8. La Revelación del Nuevo Testamento nos enseña que el pecado es el mal más profundo,
que alcanza al hombre en lo más íntimo de su personalidad.
9. La Carta a Filemón muestra que la nueva libertad, traída por la gracia de Cristo, debe tener
necesariamente repercusiones en el plano social.

La voz del Magisterio

Para responder al desafío lanzado a nuestra época por la opresión y el hambre, el Magisterio de la
Iglesia, ha recordado repetidas veces la actualidad y la urgencia de la doctrina y de los imperativos
contenidos en la Revelación.

Algunas de estas intervenciones: Mater et Magistra y Pacem in terris, Populorum progressio,


Evangelii nuntiandi. Mencionemos igualmente la Carta al Cardenal Roy, Octogesima Adveniens. Por
su parte el Concilio Vaticano II, ha abordado las cuestiones de la justicia y de la libertad en la
Constitución pastoral Gaudium et Spes.

En 1971 y 1974, el Sínodo de los Obispos ha abordado temas que se refieren directamente a una
concepción cristiana de la liberación. También, los documentos de las Conferencias Generales del
Episcopado latinoamericano, abordaron el tema de la conversión y de la liberación.

Subversión del sentido de la verdad y violencia


Esta concepción totalizante impone su lógica y arrastra las «teologías de la liberación» a aceptar un
conjunto de posiciones incompatibles con la visión cristiana del hombre. En efecto, el núcleo
ideológico, tomado del marxismo, al cual hace referencia, ejerce la función de un principio
determinante.

En la lógica del pensamiento marxista, «el análisis» no es separable de la praxis y de la concepción


de la historia a la cual está unida esta praxis. En consecuencia, sólo quien participa en este combate
puede hacer un análisis correcto. La conciencia verdadera es así una conciencia partidaria.

La ley fundamental de la historia que es la ley de la lucha de clases implica que la sociedad está
fundada sobre la violencia. La lucha de clases es pues presentada como una ley objetiva, necesaria.
Por concesión hecha a las tesis de origen marxista, se pone radicalmente en duda la naturaleza
misma de la ética. De hecho, el carácter trascendente de la distinción entre el bien y el mal, principio
de la moralidad, se encuentra implícitamente negado en la óptica de la lucha de clases.

Orientaciones

1. La Iglesia, guiada por el Evangelio de la Misericordia y por el amor al hombre, escucha el


clamor por la justicia y quiere responder a él con todas sus fuerzas.
2. Por tanto, se hace a la Iglesia un profundo llamamiento. Con audacia y valentía, con
clarividencia y prudencia, con celo y fuerza de ánimo, con amor a los pobres hasta el
sacrificio, los pastores, considerarán tarea prioritaria el responder a esta llamada.
3. Esta liberación tiene como pilares indispensables la verdad sobre Jesucristo el Salvador, la
verdad sobre la Iglesia, la verdad sobre el hombre y sobre su dignidad.
4. El recurso sistemático y deliberado a la violencia ciega, venga de donde venga, debe ser
condenado. El tener confianza en los medios violentos con la esperanza de instaurar más
justicia es ser víctima de una ilusión mortal. La violencia engendra violencia y degrada al
hombre. Ultraja la dignidad del hombre en la persona de las víctimas y envilece esta misma
dignidad en quienes la practican.
5. La lucha de clases como camino hacia la sociedad sin clases es un mito que impide las
reformas y agrava la miseria y las injusticias.
6. La enseñanza de la Iglesia en materia social aporta las grandes orientaciones éticas.

Conclusión

Las palabras de Pablo VI, en el Credo del pueblo de Dios, expresan con plena claridad la fe de la
Iglesia, de la cual no se puede apartar sin provocar, con la ruina espiritual, nuevas miserias y nuevas
esclavitudes. Nunca podrá comportar que la Iglesia se conforme con las cosas de este mundo ni que
disminuya el ardor de la espera de su Señor y del Reino eterno.

Documental:
Capitalismo: Una Hostoria de Amor. Falso.
El filme dirigido por el cineasta Michael Moore empieza con una
versión de cómo el Imperio Romano se hundió cuando le faltaron los
esclavos. Y precisamente eso es lo que el capitalismo hace por
medio mundo: buscar esclavos que permitan a los ricos ser más
ricos. Aunque sea a costa de empobrecer la clase media. Queda
impuesto el consumismo como una moda.
El capitalismo basa su estrategia en provocar el consumo al coste
que sea, o en ejecutar un servicio al precio que sea. En el fondo,
Capitalismo, una historia de amor es un análisis de cómo la política
no es más que un refugio de los poderosos para seguir dominando el
mundo. Expone los excesos, las mentiras, las contradicciones y las hipocresías del gobierno y de las
grandes corporaciones norteamericanas, arrancando con escenas de asaltos a bancos.
Lo central del relato será los cuestionamientos a los créditos hipotecarios dados sin muchos requisitos a
los usuarios de los sectores medios y bajos, lo que devino en la actual crisis por las especulaciones de
Wall Street con respecto a eso, desembocando en el rescate financiero de $700,000 millones en pos de
evitar la quiebra de muchas entidades del sector.
En el camino, el polémico documentalista recoge testimonios de ciudadanos víctimas de estas
circunstancias. Desalojados y desempleados, dejan constancia de sus penosas realidades. Infaltables
son las críticas contra los deslices de Wall Street y a los gobiernos republicanos pasados, desde el de
Reagan hasta el de W. Bush.
Película:
El Joven Marx

El Joven Karl Marx, es una película biográfica, acerca de la vida de Karl Marx y
Friedrich Engels, pero sobre todo del surgimiento del comunismo como
movimiento político. La película se centra en unos años de la vida de Karl Marx,
de 1843 a 1848, breves pero claves para el desarrollo del marxismo, la
fundación de la Liga de los Comunistas y la publicación del Manifiesto
comunista.
Es una dura crítica al capitalismo institucionalizado a causa de la primera
revolución industrial. Esto ha traído consecuencias: la esclavitud moderna, la
apropiación de los bienes públicos y el empobrecimiento de la clase obrera.
La película presenta al joven Karl Marx como un idealista, pero también como
una persona sin escrúpulos que toma el poder expulsando del movimiento a los
que tienen objetivos diferentes a él.
Engels y Marx congenian, marchan a Manchester y juntos van pergeñando el entramado filosófico de la
lucha de clases, los conceptos de plusvalía o propiedad privada y otros.
Marx es representado como un miembro relevante dentro de la intelectualidad, cuyas ideas, más que
sus acciones, van en aras a corregir la explotación de la clase obrera por parte de un capitalismo feroz,
coincidiendo con la revolución industrial en Europa occidental y Reino Unido. Pero siempre, esta
pretensión suya es mostrada más desde una posición de estudioso, que como hombre de acción.

Jeffrey Sachs sobre el "histórico" impulso de China a un mundo multipolar para acabar
con la dominación estadounidense.
Lo que China persigue, si lo vemos desde la perspectiva de China, es lo que también se dijo: el
verdadero multilateralismo. Y lo que eso significa es que no quieren un mundo liderado por Estados
Unidos, sino un mundo multipolar. La base de eso es que Estados Unidos es el 4,1% de la
población mundial, mientras que China es el 17,5% de la población mundial. La economía china es
comparable a la estadounidense y, de hecho, China es el principal socio comercial de gran parte del
mundo. Así pues, China está diciendo: "Nosotros también estamos ahí, junto a ustedes. Queremos
un mundo multipolar. No queremos un mundo liderado por Estados Unidos".
Pues bien, China no quiere que Estados Unidos sea la potencia preeminente. Quiere convivir con
Estados Unidos. Blackwill, escribiendo en 2015, dijo que el ascenso de China es una amenaza para
la preeminencia de Estados Unidos. Y expuso una serie de pasos que la administración Biden está
siguiendo en realidad casi paso a paso.
La mayor parte del mundo quiere un mundo verdaderamente multipolar y, por lo tanto, no se alinea
detrás de las sanciones de Estados Unidos a Rusia y demás.
Estados Unidos fue el creador del Banco Mundial. Pero ahora el Congreso estadounidense no quiere
poner dinero nuevo en el Banco Mundial. Y debido a eso, el Banco Mundial es en realidad una
institución bastante pequeña. Tiene un gran nombre, pero es una institución bastante pequeña en el
esquema financiero de las cosas. Estados Unidos no quiere poner más dinero. El Congreso dice:
"No. ¿Por qué deberíamos malgastar nuestro dinero internacionalmente?" Y así sucesivamente, y en
el Congreso hay mucho barullo al respecto.
¿La cuestión de cuánto tiempo más los miembros permanentes del Consejo de Seguridad pueden
mantener el número a cinco? Porque, claramente, Brasil y otros países del Sur Global han estado
diciendo que la ONU necesita ser reformada, y que los países de América Latina, específicamente
Brasil, y África deberían tener representación en el Consejo de Seguridad de la ONU, miembros
permanentes.
Ahora, ¿qué quiere Putin? Putin no puede quedarse con el territorio de Ucrania. Tal vez ni siquiera
hablemos de Crimea, pero tendrá que replantearse lo que ha invadido. Además, Zelensky no puede
tener todo lo que quiere exigir. La OTAN no podrá instalarse en la frontera. Por lo tanto, esto es algo
que tenemos que poner sobre la mesa. ... Creo que esta guerra se ha prolongado demasiado. Brasil
ya ha criticado lo que tenía que criticar. Brasil defiende la integridad territorial de cada nación, así
que no estamos de acuerdo con la invasión rusa de Ucrania.

La estrategia de Estados Unidos, desde hace décadas, ha sido rodear a Rusia en el Mar Negro, con
Ucrania, Rumanía, Bulgaria, Turquía y Georgia, todos miembros de la OTAN, rodeando a Rusia y a
su flota naval en el Mar Negro, una flota naval que ha sido la flota naval rusa del Mar Negro desde
1783. Rusia ha dicho sobre la ampliación de la OTAN a Ucrania y Georgia: "No lo hagan; ésta es
nuestra línea roja". Y lo ha dicho durante décadas. El presidente Putin lo dijo claramente en 2007,
antes de que George W. Bush Jr. tuviera -lo llamaré la descabellada idea de anunciar en 2008, y
también obligar a la OTAN a anunciar, que Ucrania se convertiría en miembro de la OTAN.
Eso es lo que quiere decir China cuando afirma en su plan de paz: "queremos un plan de paz que
respete los intereses de seguridad de todas las partes". Eso es un código para decir: "Hagan la paz.
Pongan fin a la guerra. Pero no amplíen la OTAN hasta la frontera".
Pero la administración Biden, ni siquiera discutirá esta cuestión de la ampliación de la OTAN. Ese ha
sido el mayor fallo y la razón por la que no hemos podido llegar a la mesa de negociaciones, en mi
opinión. Incluso cuando Zelensky dijo en marzo de 2022: "Quizá Ucrania no entre en la OTAN, quizá
encontremos garantías de seguridad de otra manera". Rusia y Ucrania estaban de hecho cerca de
un acuerdo, y Estados Unidos intervino ante Ucrania y dijo: "No creemos que sea un buen acuerdo",
porque los neoconservadores estadounidenses, así llamados, han estado presionando para que la
ampliación de la OTAN sea un objetivo central de Estados Unidos.
Pero esto vuelve al punto más general para nosotros, que es que lo que está en juego en Ucrania y
Taiwán y en muchas otras cuestiones, desde el punto de vista de China o Rusia u otros países,
incluidos Brasil, ahora Arabia Saudí, Irán y otros, es si Estados Unidos hace lo que quiere hacer o si
respeta algunos límites basados en lo que también dicen otros países. Quieren una verdadera
multipolaridad, no sólo el dominio de Estados Unidos, reglas escritas por todos los países, no reglas
escritas sólo por Estados Unidos".

ENCUENTRO CON EL MUNDO UNIVERSITARIO Y DE LA CULTURA


Discurso del Santo Padre Francisco
Facultad de Informática y Ciencias Biónicas de la Universidad Católica "Péter Pázmány" (Budapest)
Domingo, 30 de abril de 2023
La cultura, es como un gran río: conecta y recorre
varias regiones de la vida y la historia relacionándolas,
permite navegar por el mundo y abrazar países y tierras
lejanas, sacia la mente, riega el alma, hace crecer la
sociedad.
La universidad es, de hecho, el lugar donde el
pensamiento nace, crece y madura, abierto y sinfónico;
no monocorde, no cerrado: abierto y sinfónico. Es el
"templo" donde el conocimiento está llamado a liberarse de los estrechos límites del tener y del
poseer para convertirse en cultura, es decir, en "cultivación" del hombre y de sus relaciones
fundadoras: con lo trascendente, con la sociedad, con la historia, con la creación.

El Concilio Vaticano II afirma al respecto: "La cultura debe aspirar a la perfección integral de la
persona humana, al bien de la comunidad y de toda la sociedad humana…" (Const. Gaudium et
Spes, 59).

En este discurso Su Santidad el Papa Francisco ha compartido dos pensamientos, partiendo de dos
frases: “Conócete a ti mismo” y, “La verdad os hará libres”.

1. La cultura nos acompaña a conocernos a nosotros mismos. Esto lo recuerda el pensamiento


clásico, que nunca debe ser olvidado. Viene a la mente la famosa frase del oráculo de
Delfos: "Conócete a ti mismo". Pero, ¿qué significa "conócete a ti mismo"?
- Significa saber reconocer nuestros propios límites y, por lo tanto, contener nuestra
presunción de autosuficiencia.
- Es reconociéndonos como criaturas que nos volvemos creativos, sumergiéndonos en el
mundo en lugar de dominarlo.
- Conocerse a uno mismo, en otras palabras, implica mantener juntos, en una dialéctica
virtuosa, la fragilidad y la grandeza del ser humano.
- De la maravilla de este contraste surge la cultura: nunca satisfecha y siempre en busca,
inquieta y comunitaria, disciplinada en su finitud y abierta a lo absoluto.

2. La segunda frase guía se refiere directamente a la verdad. Es una frase de Jesucristo: "La
verdad os hará libres" (Jn 8,32).
- Pienso en la transición del comunismo al consumismo.
- Ambos "ismos" comparten una falsa idea de libertad;
- la del comunismo era una "libertad" forzada, limitada desde fuera, decidida por alguien más;
- la del consumismo es una "libertad" libertina, hedonista, que se aplana sobre sí misma, que
hace a los consumidores y a las cosas sus esclavos.
- De una libertad frenada a una libertad sin frenos.
La clave para acceder a esta verdad es un conocimiento nunca desligado del amor, relacional,
humilde y abierto, concreto y comunitario, valiente y constructivo. Esto es lo que las universidades
están llamadas a cultivar y la fe a alimentar. Por lo tanto, deseo que esta y cada universidad sean un
centro de universalidad y libertad, un taller fecundo de humanismo, un laboratorio de esperanza.

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