PSICOLOGÍA

ENSEÑANZA SOCIAL DE LA IGLESIA

RESUMEN GRUPAL DE LOS VIDEOS
ALUMNAS:

- Ccasa Cabrera, Edith

- Herencia Ramos, Yohana
- Lipa Ayamamani, Janeth
- Luna Tejeda, Ana Lucia
- Pacheco Tapia, Paula
- Vera Cari, Aracely Mayori

GRUPO: PSI 9-1

“Los alumnos declaran haber realizado el presente trabajo de

acuerdo a las normas de la Universidad Católica San Pablo”

2022
 VIDEO 1: PODERES PÚBLICOS
El origen de la autoridad a la que están sometidos los hombres, nace en la ley divina. Antes
de Cristo, predominaron los sistemas despóticos y arbitrarios.
El cristianismo introdujo los conceptos de dignidad, igualdad, libertad para el hombre y sobre
esta base se puede edificar una sociedad más justa. Por otro lado, en el mundo antiguo, la
religión formaba parte de la comunidad política donde el cristianismo inauguró la distinción
entre poder público y sociedad religiosa.
El estado laico nace a partir de dicha distinción entre la política y la religión, que surgió en
los siglos XVIII y XIX. quienes pensaban que separar el estado de la religión era el mejor
medio para practicar libremente sus respectivas creencias. Por otro lado, los principios que
inspiraron la revolución americana fueron genuinamente religiosos.
La sociedad actual es tributaria debido a la evolución de las revoluciones liberales donde la
mayor parte de la humanidad vive bajo regímenes pseudo “democráticos” ya que la
democracia auténtica se fundamenta en una determinada concepción del hombre y su
dignidad, sin embargo se ve vulnerada hoy en dia por el relativismo. Hoy se tiende a afirmar
que el agnosticismo y el relativismo escéptico son la filosofía y actitud fundamental
correspondiente a las formas políticas democráticas. El sistema de educación ha sido objeto
de control por las ideologías de algunos estados que buscan adoctrinar a los jóvenes en base a
una determinada formación, con el objetivo de anular el aspecto espiritual, por lo tanto, es
importante que los ciudadanos contribuyan en la vida política, social, cultural y económica,
donde la participación es un deber de la humanidad para integrar los valores y la ética en la
política, asimismo, el deber del individuo es revertir el prejuicio que se tiene sobre la política
participando de manera activa, mediante la crítica, legítima y veraz de la gestión pública;
donde los medios de comunicación tiene un papel fundamental ya que la política muchas
veces depende de la información que nos brindan estos medios, por lo tanto, la participación
de la ciudadanía y de la política se debe realizar en función de la ayuda social y caritativa
siendo objetivo de humanización y no con fines personales.
El voto es un derecho y un deber, donde el ciudadano es responsable de valorar las ofertas de
cada partido según su dimensión moral, y en el caso de los políticos deben de manifestarse en
base a la verdad y a la libertad sin invertir el principio que lleva a concluir que cualquier
acción realizada en base a la libertad santifica la conducta, lo cual es erróneo.
Buscar la verdad es una obligación y un derecho, el poder político debe fomentar el libre
desenvolvimiento de las personas, para llegar a la verdad. El estado democratico debe valorar
la libertad religiosa como elemento fundamental del bien común. El estado laicista es el
estado que no permite nombrar a Dios en público, porque entiende que la vida pública y
político le corresponde al estado. La cooperación entre la iglesia y el estado cubren varios
ámbitos. La religión no es menos importante que la música o el deporte, ni los templos menos
importantes para el bien integral de los ciudadanos que los museos o los estadios. Es
conveniente que la iglesia y el estado se pongan de acuerdo en la necesidad de intensificar la
educación moral, especialmente de los jóvenes; elevar el nivel moral de un país es un bien
social, ya que disminuye el gasto público en los sectores de salud y la lucha contra la
delincuencia.
El estado laicista beligerante de signo antirreligioso, no garantiza la cooperación ni la libertad
religiosa, ya que mutila los derechos de las personas y comunidades de las personas. El
laicismo hoy reverdecido ofrece a la opinión pública una visión oscura y negativa de la
religión. Muchas decisiones políticas comportan una concepción determinada de la persona,
de la sociedad y de lo justo, tienen una nueva dimensión ética basada en los conceptos y
pactos, que conforma un orden anticristiano. La respuesta del laicismo militante puede venir
de los excesos opuestos como la teocracia, el fundamentalismo, el integrismo o el
clericalismo, la respuesta correcta a todo es la actuación cívica, responsable y libre de los
creyentes. Los cristianos deben defender las verdades naturales, donde lo verdadero es porque
Dios lo revela por ser verdadero, es mejor buscar el acuerdo en torno a la verdad y la ley
natural común a todos. El catolico no impone sus criterios con violencia, sino siembra paz y
alegría, la religión de cristo es amor, misericordia y perdón. La concordia, se logra si los que
rigen las naciones buscan honradamente el bien efectivo de todos los miembros de la
comunidad civil incluida las minorías. Por otro lado, no ha existido nunca un régimen político
que encarna plenamente el ideal cristiano, asimismo, la herida del pecado original incita al
abuso de la libertad, pero no cabe la desesperanza, la salvación del mundo es voluntad de
Dios.
Benedicto XVI “En este tiempo en que algunos intentan excluir a Dios, los cristianos hemos
de mostrar en cambio que Dios es amor y quiere la felicidad de todos los hombres.”
 VIDEO 2: EL ORDEN INTERNACIONAL
Vivimos en una sociedad, donde prevalece diferencias étnicas, culturales, raciales, etc; sin
embargo, esas diferencias son superficiales, ya que todos los individuos, al margen de su
color, raza u otra característica, pertenecen a la misma especie, a la misma naturaleza humana
y eso nos convierte en una fraternidad universal, cuya padre en común es Dios, que creó al
hombre a su imagen y semejanza, concediéndole el don de la libertad y de la sociabilidad. El
génesis nos relata, que cuando Dios creó al hombre y a su compañera, les concedió todo los
recursos naturales de la tierra, así también, sustancias naturales (minerales) para que el
hombre lo transformará con su trabajo. Dios, como padre, desea que todos los hombres sean
solidarios entre ellos, que prime la fraternidad y el apoyo mutuo. Sin embargo, el hombre,
con esa misma libertad, quiso imponer la unidad entre los hombres, pero de una manera
diferente, usando las armas. Juan XXIII en su encíclica Pacem in Terris, menciona que el
orden internacional sólo se puede estar guiado por Dios, el creador, y se manifiesta cuando
cada hombre guarda en su interior el orden establecido por su creador, y ese orden se va
desarrollando, cuando se respeta los derecho a la vida y dignidad alejándose de aquellas
pasiones (soberbia, odio, envidia, venganza, codicia) que destruyen la humanidad originando
guerras, conflictos. Ahora bien, la iglesia habla de la paz, como un restablecimiento de
relaciones entre los individuos bajo un enfoque moral.
En cuanto a la distribución de la riqueza, esta debe estar basada en la igualdad y no creando
más pobreza. A pesar de que muchos países del tercer mundo recibieron ayuda de gobiernos
y organizaciones internacionales, la mayoría aún tiene problemas económicos; esto se debe
políticamente a que los países donde han logrado establecer un estado de derecho priorizando
la educación ha funcionado aunque no en todos los países, debido a la corrupción de los
líderes, a pesar de la ayuda que recibieron, lo cual no llegó a todos a los ciudadanos.
La corrupción afecta la rentabilidad y la distribución de riqueza, lo cual no permite invertir
como gobierno. Por tanto, Juan Pablo II, hace mención al pecado, responsabilizando a las
personas que lo usan, no a las estructuras, ya que el pecado solo puede ser singular a la
persona. ¿Podemos afrontarla ? Si, ya que el desarrollo es un derecho y esto se funda en la
solidaridad como fin de la humanidad, la educación es la salvación para afrontar la pobreza .
Otra causa frecuente de retraso, es la ausencia de un marco legal de instituciones fiables .El
comercio internacional bien orientado promueve, crea trabajo y suministra recursos pero el
continuo deterioro de las materias primas y la agudización de las diferencias reclaman
criterios éticos eficaces .
Cuando las desigualdades superan ciertos límites, hay menos paz y menos democracia .
El proteccionismo que suele dañar a países tercermundistas es el agrícola, por las fuentes de
exportaciones, estos sistemas afectan a los agricultores no ricos, ya que estas barreras han
hecho fracasar diversas negociaciones comerciales. Por tanto, debe existir una equidad en las
relaciones comerciales, incluyendo el justo precio de las materias primas y el pago de las
remuneraciones, condenando la explotación de la mano de obra barata, los niños y mujeres.
Hoy se abre camino a la idea que las empresas de los países ricos pueden ayudar al tercer
mundo con mayor eficacia que los gobiernos y las ONGs; debido a que estos países tienen el
deber moral de emplear sus recursos y competencias para solucionar problemas mundiales.
La iglesia católica es optimista, confía en que el hombre es capaz de hacer el bien; asimismo,
hace un llamado para que no se arrepienta de seguir el camino del bien, la moral y la justicia,
ya que, el hombre ha sido redimido para aspirar al bien, teniendo como propuesta, sustituir el
relativismo por ideales cristianos, por el bien común y el desarrollo solidario de la familia.

VIDEO 3: LOS IMPUESTOS

De acuerdo a la Biblia, tenemos tres pasajes en específico que nos hablan sobre lo lícito que
es pagar impuestos. El primero es el de Jesús mencionando “Al César lo que es del César”; el
segundo es relativo al impuesto al templo, pagar el tributo para que no haya escándalo; y el
tercero de San Pablo hacia los romanos alegando a la obligación de pagar impuestos por
respeto a las autoridades establecidas por Dios para recolectarlos. Posteriormente, Santo
Tomás de Aquino, menciona que sólo los impuestos justos tienen la obligación moral de ser
pagados. Premisas bajo las cuales, los cristianos católicos sabemos que para exigir nuestros
derechos hay que cumplir con nuestros deberes y que el Concilio Vaticano II condena todo
tipo de fraude al respecto.
La ESI basa las recaudaciones en los principios de solidaridad y subsidiaridad para contribuir
al bien común. Con respecto al primero, los impuestos no son la única forma de solidaridad,
pues la responsabilidad del deber del ciudadano va más allá de votar y pagar impuestos.
Implica ser activo en la comunidad y afrontar las necesidades de la misma con los recursos
con los que se cuente, ya sean financieros, intelectuales o simplemente, tiempo y esfuerzo.
Con respecto al principio de subsidiariedad, limita el derecho fiscal de detraer del trabajo de
los ciudadanos, exigiendo que no se asuman más poderes públicos de los necesarios, de los
que no pueden ser atendidos por iniciativa social. El impuesto justo no es fácil determinar y
no es rol de la Iglesia hacerlo, sino recordar al ciudadano de pagar los impuestos justos; y al
Estado, que el fin de los impuestos es el bien común.
Dios nos dió este mundo para hacer realidad el destino universal de los bienes, una buena
política social financiada por los impuestos puede ser de gran ayuda, pues las medidas
sociales aceptadas son un arma contra la indigencia. Sin embargo, esto no suprime la
responsabilidad personal de ayudar a los necesitados, ya que se debe tener cuidado como lo
que dice León XIII, “la distribución de la riqueza y el aumento de la productividad sólo se
conseguirán si la propiedad privada no se ve absorbida por la dureza de los tributos”. La
carga tributaria debe respetar la justicia legal y distributiva, siendo proporcional a la
capacidad contributiva de cada uno.
Juan XXIII: “Es justificable una cierta progresividad”.”La única razón es que una persona
debe pagar lo que le toque, que pague al que le sobre mas, no al que no tenga menos y pague
más y se quede sin nada”. Los Gobernantes deben hacer un bien común, de todos y para
todos, donde todos tengan un derecho tributario y el impuesto vaya al bien de la comunidad,
ya que, existe malversación de fondos, cuando nos salimos del bien común, ocasionando
problemas al límite por los gobernantes de estado. ¿Porque financiar partidos, sindicatos etc;
sino financian asociaciones de familia, juveniles?. La totalidad de financiación, sobre la renta
y los fines que llevan a cabo la labor social, es grande porque la iglesia católica apoya.
Si el sistema fiscal está mal utilizado, pues ya hace un fraude fiscal de la planificación fiscal,
un engaño a la hacienda pública, evadiendo pagos y la planificación fiscal, presupone invertir
en planes de inversión para en un futuro, sea menor la explotación de impuestos.

La iglesia juzga de ilícito el fraude fiscal, al no declarar ingresos o fraude de ley, cuando la
finalidad no es la correcta. El fraude fiscal engaña a los ciudadanos, el defraudador es un
ladrón que roba a los demás y recibe sus gustos y lujos a costa de los demás. Cuando una
empresa deja de pagar genera déficit fiscal para el gobierno, empieza a no tener recursos para
atender colectivos, la empresa quiere hacer uso de agua, luz, carreteras y no paga impuestos.
Entonces si él puede hacer uso de todos lo que el gobierno brinda y no paga sus impuestos es
un acto Ilícito defraudar, las empresas que defraudan al fisco, una empresa que deja de pagar
hay una competencia desleal donde vende más barato sus productos ya que evade impuestos.
La evasión del impuesto, perjudica al estado donde hay pruebas falsas y falsificación y
engaño y lo es frente a la hacienda. La prueba fiscal no debe ser un fraude. No hay ley moral
de autoinculpación