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CÓMO MEJORAR UN PLAN DE PRODUCCIÓN DE TU EMPRESA

El objetivo de toda empresa es conseguir una mejora constante de su productividad, entendida como el
cociente entre los resultados y los recursos que ha utilizado para conseguirlos. Para lograrlo, se necesita un
intenso trabajo previo que se plasma en el Plan de Producción de la Empresa.

“Los sistemas básicos para planificar y controlar los procesos de producción, abordan el problema de la
ordenación del flujo de materiales en la empresa para alcanzar eficientemente los objetivos marcados.”

Gracias a las herramientas que ofrece el Lean Manufacturing y la Industria 4.0, es mucho más fácil tener los
datos fundamentales para controlar la producción, a través, por ejemplo, de un Software MES (Manufacturing
Execution System). Algunas de las variables susceptibles de desarrollar en este Plan son las siguientes:

 Calcular el rendimiento de las líneas y de los tiempos improductivos. Esto permite conocer los errores
para poder corregirlos.
 Identificar los retrasos en las líneas para equilibrar las operaciones.
 Detectar y eliminar aquellas operaciones sin valor añadido.
 Desarrollar técnicas para involucrar al personal y crear equipos de liderazgo
 Conocer cuánto material es necesario para una producción dada
 Revisar la maquinaria, saber si es necesario modernizarla o reparar algún mal funcionamiento.

CICLO DE PRODUCCIÓN DE UNA EMPRESA

El Ciclo de Producción comienza en el mismo momento en el que se inicia el proceso productivo y finaliza
cuando el producto (o servicio, dependiendo de la empresa) se pone en el mercado. La definición más clásica
es que se trata del tiempo durante el que una empresa, vista como unidad de producción, mide los costes y los
ingresos.

Dada la gran variedad existente en la industria, los ciclos no son homogéneos. Algunos pueden ser anuales,
pero lo más común son periodos más cortos, semanales o mensuales. Luego, basta con multiplicar para
obtener el balance cada año.

Uno de los desafíos a los que se enfrenta un Plan de Producción es intentar reducir la duración de estos
procesos. Al hacerlos más cortos, la empresa gana en productividad y necesita consumir menos recursos.

PLAN DE VIABILIDAD DE UNA EMPRESA

El Ciclo de Producción comienza en el mismo momento en el que se inicia el proceso productivo y finaliza
cuando el producto (o servicio, dependiendo de la empresa) se pone en el mercado. La definición más clásica
es que se trata del tiempo durante el que una empresa, vista como unidad de producción, mide los costes y los
ingresos.

Dada la gran variedad existente en la industria, los ciclos no son homogéneos. Algunos pueden ser anuales,
pero lo más común son periodos más cortos, semanales o mensuales. Luego, basta con multiplicar para
obtener el balance cada año.

Uno de los desafíos a los que se enfrenta un Plan de Producción es intentar reducir la duración de estos
procesos. Al hacerlos más cortos, la empresa gana en productividad y necesita consumir menos recursos.

Plan de viabilidad de una empresa

Un Plan de Viabilidad mal proyectado (o peor, la falta de uno), puede llevar a una empresa a no ser viable en
poco tiempo. Es necesario por lo tanto evaluar de manera realista todos los aspectos que afectan al negocio.
Así, hay que tener en cuenta la demanda estimada de lo que se desea producir, el coste previsto de todo lo
relativo al proceso productivo (materiales, maquinaria, recursos humanos, logística…) y calcular los aspectos
económicos del proyecto.
Dada la gran variedad de industrias, no existe un único modelo de Plan de Viabilidad de empresa. Sin
embargo, hay unas líneas generales que casi todas comparten:

Presentación del Proyecto: ¿Qué producto o servicio queremos introducir en el mercado?

Análisis del Mercado: ¿A quién va dirigido? ¿Qué producir?, ¿qué producto o servicio queremos introducir en
el mercado? ¿Hay demanda suficiente? ¿A qué competencia se enfrenta?

Plan maestro de Producción: ¿Cómo se fabrica el producto? Inversión necesaria y análisis de las diferentes
vías para obtenerla: ¿Qué inversión hace falta? ¿Créditos, subvenciones, capital societario?

Recursos Humanos: ¿Qué equipo humano se necesita?

Plan de Operaciones: ¿Qué operaciones son necesarias para el proceso productivo?

Plan económico de costes-beneficios a corto, medio y largo plazo: ¿Plazo para obtener ganancias?

Puesta en Marcha.

“Un Plan de Viabilidad funciona también como una simulación con datos reales de los distintos escenarios
con los que pueda enfrentarse la empresa”

Además, el Plan de Empresa es una herramienta de comunicación y marketing del proyecto empresarial,
especialmente útil en la búsqueda de socios, colaboradores, inversores o para solicitar ayudas públicas o
privadas. Para la puesta en marcha de la iniciativa empresarial, es preciso analizar determinados elementos
que responden tradicionalmente a una serie de preguntas, básicamente las siguientes:

Optimizar eficiencia

El principal objetivo de los planes de producción es maximizar su eficiencia. La competitividad existente hoy
en día hace necesario que las estructuras internas vayan mejorando continuamente para no perder posiciones
en el mercado global.

Dos potentes herramientas para conseguir esta optimización son el Lean Manufacturing y la metodología Six
Sigma. Gracias a esta última, se pueden recolectar todos los datos que facilitan la obtención de mejores
resultados y la reducción de riesgos.

El Lean, por su parte, con su software de gestión que conduce a la la industria inteligente del futuro, es
perfecto para minimizar los desperdicios y reducir los costes y los tiempos.

Automatización de las tareas

Desde la Revolución Industrial la automatización de las tareas productivas ha sido uno de las formas más
utilizadas para mejorar la productividad. Ahora, con las Nuevas Tecnologías de la Información y el Internet
de las Cosas, este proceso va un paso más allá.

La nueva Industria 4.0 no solo trata la automatización en el antiguo sentido de maquinaria productiva, sino
que engloba todos los campos empresariales.

“La industria 4.0 está ya suponiendo una nueva revolución al aprovechar la computación en la nube, la
integración de los datos y todos los avances tecnológicos aplicables a los sistemas de producción y
fabricación”

Asimismo, el desarrollo futuro de campos como la robótica, la realidad aumentada, el Big Data o la sensórica,
hará que la optimización de la producción ligada a la automatización alcance niveles no conocidos hasta hoy.

Por todas estas razones, la automatización es un punto fundamental a la hora de presentar el Plan de
Producción de una empresa.
Formación de empleados

A pesar de la importancia de la automatización, los empleados siguen siendo la base principal del proceso
productivo. Por tal motivo, es necesario tener previsto un plan de formación, que, de manera continua,
consiga que la plantilla esté al día tecnológica y metodológicamente.

Algunos de los puntos que suelen aparecer en estos planes de formación son:

Entrenamientos formales (individuales o corporativos)

Coaching y mentores de empleados

Participación en conferencias

Entrenamiento en el trabajo

Rotación de trabajo

Motivación y reconocimiento

PRODUCTIVIDAD <=> TRABAJADORES MOTIVADOS Y SATISFECHOS

Muchas veces se olvida la importancia del elemento humano al elaborar los planes de producción de las
empresas. Sin embargo, está sobradamente demostrado que la satisfacción y la motivación de los trabajadores
repercuten de manera directa en la productividad.

Frente al reduccionismo en el que, a veces, se cae, esta motivación no tiene solo que estar basada en lo
económico. Cierto es que una correcta retribución contribuye a que la implicación con la empresa sea mayor,
pero también hay que tener en cuenta otro tipo de fortalecer los vínculos entre trabajadores y la compañía.

Se pueden señalar unos pilares fundamentales en los que se basa esta sinergia:

Bienestar laboral: Aparte del salario, en esto influyen factores como el ambiente de trabajo, la flexibilidad de
las condiciones laborales o una política de formación que contribuya a posibles ascensos.

Engagement: Es el compromiso existente entre el trabajador y la empresa.

Autorealización: Un reconocimiento de que el trabajo está bien hecho crea satisfacción en el trabajador, lo
que ayuda a que se sienta importante como parte de la empresa.

Delegar tareas

Delegar algunas tareas es fundamental en cualquier estructura empresarial. Es algo que cuesta trabajo a
muchos de los que ocupan posiciones de liderazgo, que intentan tener bajo control cada paso dado en la
compañía. De acuerdo con la revista Forbes, los principales problemas a la hora de delegar son cuatro:

1. Objetivos claros

En ocasiones, la falta de información sobre las tareas que se delegan provoca dudas entre los que han sido
elegidos para realizarlas. Por esto, cuanto más concreto sea el encargo, habrá mayores posibilidades de que
todo vaya bien.

2. Responsabilidad delimitada

La responsabilidad no de delega. De esta forma, tiene que haber un jefe de cada proyecto que la asuma y
reparta las funciones para que el trabajo sea lo más efectivo posible.

3. Tiempo
Poner un límite de tiempo claro ayuda para que los empleados se organicen mejor. Decir “urgente” o “rápido”
no es de gran ayuda, siendo mejor señalar una fecha límite exacta.

4. Comunicación

La comunicación es, quizás, el aspecto más importante a la hora de delegar. Todos los demás puntos se
relacionan con ella. No debe haber ambigüedades, ni asuntos que no queden claros. Es importante aclarar
todas las dudas que surjan, generando confianza para que los trabajadores las presentes. Es mejor una
pregunta de más, que un trabajo mal hecho que tenga que ser repetido.

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