Gestión de procesos de negocio

Un proceso es una secuencia de pasos que se llevan a cabo para obtener algo de valor en
la empresa.

Ejemplos de procesos pueden ser un proceso de compras, un proceso de ventas, un

proceso de liquidación de sueldos, el proceso contable, un proceso de manufactura de
un determinado producto.

Todas las tareas que se realizan en una empresa son parte de algún proceso.
Podemos decir que una empresa es un conjunto de procesos y que una empresa es tan
eficiente como lo sean sus procesos.

Para mejorar y hacer más eficientes los procesos, podemos encarar distintos tipos de
proyectos de mejora de procesos.

Existen cuatro niveles de cambio en los procesos, clasificados desde el menor nivel de
cambio hasta el mayor de ellos.

El primero es la automatización de procesos. Definimos la automatización de procesos

como un proyecto que logra reemplazar ciertos pasos manuales por automáticos en un
proceso utilizando tecnología. Pero no cambia el diseño del proceso.
La secuencia de pasos que se dan sigue siendo la misma.

El segundo es la racionalización de procesos.

En este tipo de iniciativa you existe cierto nivel de cambio en el diseño del proceso.

Se puede eliminar o modificar algún paso en particular, por ejemplo, algún control o
aprobación que no agrega valor. Pero el cambio en el diseño del proceso es pequeño.

El tercer nivel es la reingeniería de procesos. Es un rediseño radical del proceso.

Si no es radical, no es reingeniería.

Y el cuarto nivel es un cambio en el paradigma. Implica repensar la naturaleza del negocio

completo, no you del proceso. Definir un nuevo modelo de negocio. Por ejemplo, cuando
Amazon cambió el paradigma del proceso de venta de libros.

Respecto de los niveles de retorno esperado y riesgo, a medida que aumentamos el nivel
de cambio organizacional, va aumentando el nivel de retorno esperado por ese proyecto,
pero también va aumentando el nivel de riesgo.
Entendemos el riesgo de un proyecto como el nivel de incertidumbre existente sobre la
captura de los beneficios esperados de ese proyecto.

Las organizaciones que comprenden el valor que tienen los procesos y sus
resultados pueden llegar a plantearse cambiar su esquema organizacional, pasando de
una organización funcional con organigrama típico y departamentos específicos para
cada función a la gestión por procesos.

La gestión por procesos pretende optimizar todos los procesos de la compañía con el
objetivo de aumentar los resultados de la organización a través de la obtención de niveles
superiores de satisfacción de los clientes.

Para lograrlo, la empresa transita un largo camino de madurez, partiendo de un nivel

inicial hasta un nivel de optimización de su gestión.

A lo largo de este camino, la compañía que lo atraviesa provoca cambios, no solo en la

documentación y formalización de los procesos, sino también en su estructura para que
no haya vacíos funcionales entre los distintos departamentos y la información fluya de
manera adecuada sin barreras.