0 calificaciones0% encontró este documento útil (0 votos)
5 vistas2 páginas
Este documento analiza el caso Marbury vs Madison de 1803 en la Corte Suprema de los Estados Unidos. William Marbury demandó a James Madison por no haber recibido su nombramiento como juez de paz a pesar de haber sido designado por el presidente. El juez Marshall determinó que Marbury tenía derecho al nombramiento pero que la Corte no podía obligar a Madison a entregarlo porque la ley que le daba esa autoridad era inconstitucional. Este caso estableció el principio de que la Corte Suprema puede declarar leyes inconstitucionales
Descripción original:
Título original
7. ANALISIS CASO MARBURY VS. MADISON WILSON GEOVANY DIAZ PEREZ
Este documento analiza el caso Marbury vs Madison de 1803 en la Corte Suprema de los Estados Unidos. William Marbury demandó a James Madison por no haber recibido su nombramiento como juez de paz a pesar de haber sido designado por el presidente. El juez Marshall determinó que Marbury tenía derecho al nombramiento pero que la Corte no podía obligar a Madison a entregarlo porque la ley que le daba esa autoridad era inconstitucional. Este caso estableció el principio de que la Corte Suprema puede declarar leyes inconstitucionales
Este documento analiza el caso Marbury vs Madison de 1803 en la Corte Suprema de los Estados Unidos. William Marbury demandó a James Madison por no haber recibido su nombramiento como juez de paz a pesar de haber sido designado por el presidente. El juez Marshall determinó que Marbury tenía derecho al nombramiento pero que la Corte no podía obligar a Madison a entregarlo porque la ley que le daba esa autoridad era inconstitucional. Este caso estableció el principio de que la Corte Suprema puede declarar leyes inconstitucionales
CARNET: 201142843 ANÁLISIS: MARBURY v. MADISON. En el presente documento analizaremos la resolución que resuelve el caso Marbury contra Madison, que tiene su precedente en los Estados Unidos de América, en la cual el demandante era el señor William Marbury y como demandado el secretario de Estado Madison; el caso fue resuelto por el presidente de la Corte Suprema de Justicia Marshall. Teniendo conocimiento la Corte se le solicita el entonces Secretario de Estado un informe para que indique los motivos por el cual no ha podido entregar el nombramiento al señor Marbury, quien había sido designado como Juez de Paz de un condado, por el presidente de los Estados Unidos de América, tal como lo establece la ley y ratificado por el Senado, había sido firmado y enviado al secretario de Estado para que le colocara el sello de dicho país; circunstancia que no fue explicada ya que en ese entonces el sistema de justicia no era respetado. Por su parte el Juez Marshall para resolver las peticiones del demandante parte de preguntas importantes: ¿Tiene el recurrente un derecho al nombramiento que demanda? A lo que el Juez considera que tal derecho se ha originado de una ley del congreso del año 1801, acto seguido el presidente emite y firma el nombramiento, posteriormente se le coloca el sello de los Estados Unidos, pero jamás fue entregado a su titular. El presidente firmo y como consecuencia era obligación del secretario colocarle el sello por mandato de ley y no del presidente quien no está facultado para variar el procedimiento establecido por la legislación, por lo que al momento de colocársele el sello la designación es hecha y por ende el nombramiento válido, sin embargo considera que la transmisión del documento y su aceptación pudieran ser necesarias para completar el derecho del demandante, práctica que ordena la conveniencia pero no está establecida en la ley, pero un nombramiento es transmitido a una persona ya designada no a una persona que va ser designada, en otras palabras, la designación ha cumplido con todos los pasos establecidos en la ley y reviste de validez, aun cuando el mismo no ha sido notificado a su titular, en consecuencia tratar de retenerlo o extraviarlo no es suficiente para que pierda su valor, además es obligación del secretario de Estado conservar copia de dicho nombramiento en el archivo con el objeto de evidenciar la validez de los actos y una copia de dicho archivo es igual de certera que su original. CURSO: TEORIA GENERAL DEL DERECHO. WILSON GEOVANY DÍAZ PÉREZ. CARNET: 201142843 La designación que ha realizado el presidente constituye un acto en el legítimo ejercicio de sus funciones, la aceptación es el acto que le compete al funcionario y es posterior al nombramiento. Continua razonando la Corte que le corresponde al designado el poder de tomar una decisión frente al nombramiento tomando una actitud en dos sentidos, aceptándolo o rechazándolo, el señor Marbury estaba designado desde que su nombramiento fue firmado y sellado y tratar de detener dicho nombramiento no está dentro de las facultades que la ley le confiere al presidente u otro funcionario ya que sería violatorio de un derecho legal absoluto, quedando establecido que el demandante tiene derecho sobre aquel nombramiento. La segunda pregunta va enfocada a explicar si las leyes del país traen un remedio para restaurar el derecho que ha sido violado, a lo que la Corte manifiesta que todo derecho que ha sido negado debe tener un remedio y todo daño su reparación. El presidente como jefe del ejecutivo asigna tareas a sus funcionarios los cuales están obligados a cumplirlas, pero si tales obligaciones son emanadas por la ley el afectado tiene el derecho de acudir a las leyes para obtener su remedio, por ello un hecho que ha existido no puede ser aniquilado ya que tal derecho está protegido por la ley y no por los deseos del presidente. Este caso constituye un precedente histórico sobre la supremacía constitucional, resolviéndose que ninguna ley puede contradecir a lo que establece la Constitución que es la ley fundamental de un Estado y las demás deben enmarcarse a ella y cuando se hallen ante esta situación es deber del poder Judicial decidir sobre tal controversia, haciendo prevalecer la constitución ya que cualquier legislación que entre en conflicto con la misma es nula.
La Supremacía Constitucional Significa Que en Un Sistema Jurídico Determinado La Constitución Rige A Todo El Ordenamiento Legal de Un Estado Por Lo Que Si Una Ley