Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Contexto
Cazadores y cosechadores
Se dice que en los equipos de venta existen diferentes perfiles de vendedores, algunos con
habilidades específicas para la negociación, otros con gran tino para detectar los detalles en el
proceso de venta, o incluso algunos cuya especialidad es tratar con clientes difíciles. No
obstante, la mayoría de estos perfiles pueden agruparse en dos grandes categorías:
los cazadores y los cosechadores.
Los vendedores que integran el primer grupo, el de los cazadores, poseen habilidades de
persuasión muy desarrolladas, un gran portafolio de clientes y referenciados, capacidad para
causar una excelente primera impresión y usualmente quieren cerrar la venta a como dé lugar.
Este tipo de vendedores siempre está buscando nuevos clientes sin importar cómo sean
estos, tratan de cerrar la venta a pesar de que sepan de antemano que la relación con los
clientes podría ser difícil.
Estos son los vendedores que muchas veces necesitan los negocios que van iniciando o que
tienen un problema con los egresos económicos. No obstante, la naturaleza de su perfil no
busca crear relaciones a largo plazo, por lo que les cuesta trabajo manejar y mantener las
cuentas de sus clientes.
Por otro lado, se encuentran los vendedores cosechadores, quienes tienen una gran
capacidad de negociación enfocada en que ambas partes ganen, poseen vocación de servicio
al cliente y tratan de construir relaciones benéficas y a largo plazo. Este tipo de vendedores
conoce las necesidades del cliente y busca convertirse más que un proveedor, en un consultor
dentro de los procesos de las empresas de sus compradores.
Precisamente este tipo de vendedores son los que necesita la empresa que quiere mantener
la relación con clientes a largo plazo.
Preguntas detonadoras o de reflexión:
¿Crees que importa más cerrar la venta o mantener relaciones duraderas con los
clientes?
De los dos tipos de clientes, ¿cuál consideras que es más importante para una
empresa?
Explicación
Introducción
¡Bienvenido al curso!
Lo primero que llevarás a cabo será la revisión de un caso real de administración de
cuentas clave (Key Account Management o KAM). Los nombres de las empresas e
involucrados han sido modificados por cuestiones de privacidad, pero la situación realmente
sucedió.
El propósito del curso es que conozcas las técnicas y sistemas de administración de cuentas
clave dentro de las empresas, pues éstas constituyen en muchas ocasiones el mayor volumen
de ingreso para una empresa y perderlas puede llevar al debacle a la compañía.
En el caso que acabas de leer, la agencia se quedó solamente con una fracción de la cuenta
de la cervecera, perdió la cuenta de lámina, desapareció la cuenta de la aerolínea, perdió la
cuenta de la cementera y no ganó las tres cuentas que estaban en concurso anual (camisas,
acumuladores y sorteo). Casi la mitad de las cuentas se fueron en un solo año. La
ejecutiva de cuentas renunció para dedicarse al cine y el dueño tuvo que despedir al director
general por carecer de recursos para pagarle su sueldo.
Aunque en el siguiente año se ganaron cuentas importantes y se recuperó la agencia, ésa fue
una crisis de manejo de cuentas causadas por conflictos internos y mala gestión. Un programa
de administración de cuentas clave probablemente hubiera salvado a esta agencia de su
crisis.
Práctica
Cierre
Contexto
Enseguida se presenta una definición de cada una de las clasificaciones, sus objetivos,
cualidades y los productos que Siemens compra en cada una de ellas:
Clasificación Objetivos de la clasificación Características de la clasificación
Aprovisionamiento global.
Productos estándar de alto Búsqueda de ahorros Desarrollo de un sistema de informació
volumen. potenciales. internacional para compras.
Política del segundo proveedor.
Explicación
2.1 Las cuentas del vendedor
Es muy probable que si le preguntas a un vendedor cuál es su cliente más importante, te
responda sin dudar que el que más le compre. Esta respuesta no es del todo descabellada,
incluso suena lógica: mi mejor cliente es quien más órdenes me genera y, por ende, el que más
dinero me proporciona. Pero, aunque este criterio es sumamente importante, no es el que
necesariamente determina si una cuenta es considerada como clave.
Una cuenta puede ser clave por múltiples razones, la más obvia es su volumen de venta, pero
no es la única, puede haber clientes que no compran tanto y sin embargo son más rentables.
Quizá no sean rentables en cuestión económica, pero pueden estar alineadas a los objetivos
estratégicos y a largo plazo de la empresa.
Si el factor económico no es el único criterio para determinar que una cuenta es clave,
entonces ¿cuáles podrían ser los otros?
Existen otro tipo de cuentas que pueden ser consideradas como clave, a pesar de que en el
portafolio del vendedor no sean las que dejen mayores ganancias.
Haz clic en cada imagen para conocer más información sobre los tipos de cuentas.
Estas son sólo algunas de las razones por las que la cantidad de beneficios económicos no es
el único criterio para determinar si una cuenta puede considerarse como clave. Cabe señalar la
importancia de contar con objetivos y estrategias claros sobre lo que la empresa desea lograr,
así como el plazo para ello, pues sirven para establecer las prioridades.
Por ejemplo, en 1950 el proveedor Procter & Gamble era una empresa mucho mayor que su
cliente Wal-Mart. Hoy en día la relación es inversa.
El poder del mercado (market power), índice que muestra quién concentra el mayor control de
una industria, ha ido pasando gradualmente de los manufactureros a los comerciantes. Piensa
tan sólo en una de las empresas de mayor reconocimiento actual, Apple, la cual impone
condiciones a sus proveedores de componentes. Es así que cada vez es más importante
entender a los clientes que integran toda una cadena de cuentas clave para poder hacer
sustentable un negocio.
La cadena de cuentas clave puede empezar con una materia prima, por ejemplo: minerales
raros para fabricar componentes electrónicos que se venden a un fabricante de chips, como
Intel, que vende su producto a los ensambladores de computadoras, quienes posteriormente
venden sus equipos a los comerciantes para que finalmente el producto llegue al consumidor.
En esta cadena de cuentas clave hay múltiples clientes y múltiples proveedores, una empresa
puede ser a la vez cliente y proveedora. A la hora de tratar a los clientes es importante que
identifiquen cuáles son las cuentas clave.
La globalización ha llevado a estos procesos a nivel mundial, si se analiza las partes que
integran un automóvil probablemente se encuentre que algunas están hechas en Brasil, otras
en Singapur, unas más en Alemania y el auto es ensamblado en México. Este manejo de
proveedores y clientes a nivel mundial es un reto que necesita un enfoque sistemático como el
que propone el KAM.
A la hora de detectar necesidades del cliente, el ejecutivo de cuentas clave tiene que trabajar
hacia adentro de la empresa para asegurarse de que las partes que se estén fabricando
cumplan con las especificaciones de las ensambladoras.
Esto deja en claro que el KAM no es sólo un plan o un documento, sino que es una filosofía
que va más allá del proceso de ventas.
Práctica
No obstante, para intentar empezar a definir cuáles son las cuentas clave de tu negocio, es
necesario que se establezcan claramente los objetivos de la empresa y lo que se espera
obtener con cada uno de sus clientes.
Responde la siguiente autoevaluación, propuesta por Burnett, para darte cuenta de qué es lo
que consideras más importante en la interacción con los clientes.
Cierre
Retomando el contexto del tema, cualquier proveedor que desee vender a Siemens debe
considerar muy seriamente cómo su posible cliente clasifica los productos comprados y en
cuál categoría estaría. Con base en esto podría establecer estrategias para hacer crecer sus
relaciones comerciales, mejorar los beneficios, mejorar los procesos de compra, entre otros
tantos.
Hoy en día el KAM asume la perspectiva de que un cliente es un socio en el desarrollo del
negocio, de ahí que se haya pasado de un marketing enfocado a desarrollar transacciones, a
un marketing orientado a desarrollar relaciones (McDonald y Woodburn, 2013). El KAM se trata
precisamente de eso, el desarrollo de relaciones sustentables y duraderas con los clientes
más importantes que una empresa pueda tener.
Para conocer el caso de otra empresa con una estrategia similar a la de Siemens, haz clic aquí.
Contexto
La selección y categorización de las cuentas clave de un portafolio de clientes es uno de los
pasos más difíciles en la planeación del KAM, pues implica una labor de análisis interno y
reflexión, que en ocasiones llega a consumir mucho tiempo e involucra un esfuerzo transversal
en la organización. No sólo el departamento de ventas o mercadotecnia debe ser el
responsable de establecer cuáles son las cuentas clave de la empresa, ya que se requiere la
participación de otros tomadores de decisiones para tener una perspectiva amplia de los
objetivos estratégicos que busca lograr la compañía.
A lo largo del tema se presentan los pasos sugeridos para elegir y categorizar las cuentas
clave de una empresa.
Explicación
3.1 Generar criterios de selección
El primer paso a realizar en la selección y categorización de cuentas clave es identificar el
portafolio completo de los clientes de la compañía, cuáles son los clientes que tiene
actualmente, su volumen de compra, el estatus en que se encuentra la relación y, si existen,
incluir también los antecedentes de las interacciones previas.
Una vez que la empresa ha podido identificar todas sus cuentas debe elegir cuáles son
realmente clave para la supervivencia del negocio, ésta es una tarea que va más allá de
simplemente listar a los clientes de mayor a menor volumen de ventas, porque en
realidad deben generarse y aplicarse una serie de criterios para sustentar la visión del
negocio.
Como ya se mencionó, uno de los criterios podría ser la cantidad de productos que te
compran, o también si se trata de un cliente de muchos años, si la relación que llevas con ellos
es buena, si tiene proyección de crecimiento, si hay posibilidad de aumentar las compras, entre
muchos otros.
Como puedes ver hay criterios duros que se refieren a los datos financieros, de venta, de
operación, de costeo; y blandos que van más relacionados con el factor humano en la relación
entre clientes y ejecutivos de cuentas. Woodburn y McDonald (2007), luego de una serie de
investigaciones y análisis, se percataron que todos los criterios que pudieran enlistarse para
identificar cuáles son las cuentas más importantes en una empresa, caen en tres grupos
principales:
Resultados de los clientes
Aquí se agrupan los criterios cuantitativos que pueden ser definidos y medidos claramente,
tales como el volumen de compras, el margen de ganancias que éstas dejan a la compañía,
así como su contribución. También se consideran factores propios de tu cliente,
el crecimiento en el mercado y la cantidad de clientes que él a su vez maneja.
Necesidades de los clientes
Los criterios de este grupo se centran en cómo las necesidades del cliente impactan en la
empresa. Por ejemplo, una compañía puede considerar una cuenta clave a aquellos clientes
que tengan objetivos alineados a los suyos. Este grupo de criterios son cualitativos, sin
embargo pueden medirse.
También incluye factores que reflejan la estrategia de la empresa y la diferencian de otros
proveedores, tales como la presencia global, la compatibilidad de plataformas, metodologías
o tecnologías y la importancia de una tasa baja de pérdida de clientes.
Atributos de los clientes
Este tipo de atributos representan cómo pudiera ser la relación con el cliente, incluye
indicadores cuantitativos que reflejan si la relación será exitosa y rentable; además de factores
que muestren cómo los clientes pueden comportarse en diferentes relaciones, por ejemplo
si existe una estructura central para la toma de decisiones, si existe actitud positiva para la
relación, si están preparados para pagar y si están preparados para invertir recursos en
mejorar las relaciones.
3.2 Aplicación de los criterios de selección
Luego de que se han discutido los criterios más importantes para medir, tanto el atractivo de
los clientes como la relación que existe con ellos, será necesario aplicarlos. Para ello debes
seguir los siguientes pasos:
Paso 1. Generar listas para la medición de atractivo de clientes y de relación con ellos
El primer paso a seguir es generar dos listas, una de ellas con los criterios que tratan de medir
el atractivo de los clientes, la otra con los criterios que determinan el estado de la relación con
ellos. Tal y como se mencionó previamente lo ideal es manejar siete criterios por cada lista, ya
que esta cantidad te facilitará los cálculos posteriores. No obstante si la complejidad de la
empresa lo amerita, pueden usarse un número mayor de criterios (Burnett, 2001).
El segundo paso es asignar una ponderación a cada uno de los criterios de las listas de
acuerdo a una escala, la cual tomará en cuenta el grado de importancia de los criterios y será
acordada por quienes estén realizando este proceso. Lo más recomendable es contar con
especialistas de diferentes departamentos para tener una perspectiva más completa.
Atractivo de la cuenta
Ponderación
Criterio
(1 - 5)
Potencial de compra 5
Crecimiento en la demanda 3
Orientación tecnológica 4
Logística 4
Total 25
Ponderació
Criterio
(1 - 5)
Amplitud de contactos 3
Antigüedad de la relación 2
Total 25
Ponderació
Criterio
(1 - 5)
En este caso la compañía prefirió utilizar el método de distribuir la ponderación hasta una
cantidad fija, 25 puntos. Si observas con atención las ponderaciones, te podrás dar cuenta que
para MTÑ es más importante el potencial de compra del cliente que la posibilidad de que
existan compras a largo plazo en esa cuenta. De igual forma, considera más relevante la
percepción que el cliente tiene de la calidad de los productos que la antigüedad de la relación.
Paso 3. Crear escala de calificación
Después de generar la ponderación, se debe crear una escala de calificación, por ejemplo: ésta
puede ir del 0 al 10, del 0 al 4, del 0 al 3, etcétera. Por tanto, si se eligiera el primer rango, 0-10,
y se obtiene una calificación de 10, significa que dicho factor se cumple por completo.
Para obtener los mejores resultados se debe establecer una descripción clara sobre lo que
significa cada puntaje en la escala de clasificación. Por ejemplo, si el criterio fuera cantidad de
piezas compradas por el cliente, y se estableció que la escala será del 0 al 5, la definición
podría quedar así:
Esto debe hacerse para cada uno de los criterios, pues facilitará la distinción de cuáles son
clientes verdaderamente más relevantes para tu negocio. Posteriormente, y con base en la
escala creada, deberás calificar a cada uno de los clientes en función de los criterios.
En el caso de MTÑ la calificación se hizo en una escala del 0 al 4, pues si se multiplica por la
ponderación, que es de 5, se obtiene un total de 100 puntos. A continuación se muestra la
calificación hecha a tan solo los primeros dos clientes de su lista general:
Atractivo de la cuenta
Cliente A Cliente B
Criterio Calificación Calificación
(0 - 4) (0 - 4)
Potencial de compra 1 2
Crecimiento en la demanda 2 1
Orientación tecnológica 4 1
Logística 3 1
Cliente A Cliente
Criterio Calificación Calificac
(0 - 4) (0 - 4)
Amplitud de contactos 3 2
Antigüedad de la relación 2 1
Atractivo de la cuenta
Cliente A Cliente B
Ponderación
Criterio
(1-5) Calificación Resultado Calificación Resultado
(0-4) ponderado (0-4) ponderado
Potencial de compra 5 1 5 2 10
Crecimiento en la demanda 3 2 6 1 3
Orientación tecnológica 4 4 16 1 4
Logística 4 3 12 1 4
Total 25 60 48
Cliente A Cliente B
Ponderación
Criterio
(1-5) Calificación Resultado Calificación Resultad
(0-4) ponderado (0-4) pondera
innovadoras
Amplitud de contactos 3 3 9 2 6
Antigüedad de la relación 2 2 4 1 2
Total 25 78 44
Para saber cuáles son las cuentas clave, habrá que hacer este análisis para todos los clientes
de la empresa.
La aplicación de los criterios es vital para encontrar cuáles son las cuentas claves de una
empresa. Recuerda llevar a cabo los cuatro pasos para ello.
Aplicar los criterios te permite evaluar, tanto el atractivo del cliente como el estado de su
relación, el análisis de estos resultados permite comparar a las cuentas para saber cuál de
ellas es más importante para tu negocio.
Ahora bien, una gran pregunta que puede surgir es, ¿cuántas cuentas clave se deben manejar?
Una respuesta obvia sería que las más posibles, sin embargo, ésta es una visión equivocada.
Como se mencionó anteriormente, aún las grandes empresas deben reducir esta lista a un
número entre 15 y 35, esto implica dejar a muchos clientes fuera de la gerencia de cuentas
clave; mientras que en las cuentas clave se busca desarrollar relaciones estables, las demás
cuentas estarán orientadas mayormente a la transacción.
Es importante entender que no por dejar de ser cuenta clave, debemos desechar las demás
cuentas, incluso hay que considerar que las cuentas que en este momento no son clave,
pueden llegar a serlo más adelante.
McDonald y Woodburn (2013) sugieren que luego de calificar y elegir entre 15 y 35 cuentas
clave, se categoricen en uno de los cuadrantes de la Matriz de selección de cuentas clave.
Obsérvala a continuación:
Clientes estratégicos
Clientes estrella
Clientes de estatus
Clientes estables
Por un lado, el índice obtenido al aplicar los criterios a cada cuenta es suficiente para darte
una idea de cuáles de ellas son las más importantes y, por otro, la categorización en la matriz
te permitirá tener una referencia visual clara sobre cómo es cada cliente considerado como
clave. Una vez que se categoricen, podrán planear una estrategia para desarrollar a cada
cuenta.
Cada empresa determina sus propias valorizaciones y maneras de categorizar a sus clientes,
por ejemplo algunos clasifican las cuentas de acuerdo a un sistema de letras, donde las AAA
son las más importantes, las AA tienen menor preponderancia en la empresa, las A son
relevantes por ciertos criterios, las B no están dentro del top, y así sucesivamente.
Sin importar cuál sea la que elijas debes tener presente que lo importante no es sólo tener una
lista con los nombres de los clientes ordenados del “mejor” al “peor”, sino percibirlos como un
portafolio cambiante. Esta perspectiva hace que la empresa comprenda que la relación con
sus cuentas no será siempre estable y habrá altos y bajos, pero que siempre se puede mejorar
en algún aspecto.
Cierre
Por ello resulta fundamental clasificar y categorizar la cuenta a través de criterios que
permitan evaluar lo más objetivamente posible, tanto al atractivo de los clientes como el
estado de la relación con la empresa.
A la hora de escoger las cuentas clave se debe tomar en cuenta que este ejercicio también
implica la asignación de recursos especiales para atender estos clientes. Por tanto, a la hora
de la selección hay que considerar la rentabilidad de la aplicación de dichos recursos a cada
cliente en específico.
Recuerda:
Consultar la agenda del curso para saber cuál lectura debes hacer antes del
siguiente tema.
Contexto
Cuando se habla de la relación del cliente con el proveedor usualmente se piensa en las típicas
llamadas de seguimiento, las órdenes de compra, las visitas para solucionar malentendidos o
cerrar nuevos tratos y las ocasionales comidas de cortesía. Realmente todo esto forma parte
de la cultura de atención al cliente, buscando dar el mejor trato posible a los contactos de
quienes comprarán los productos o adquirirán los servicios. Sin embargo, a pesar de que
todas estas acciones son necesarias para llevar una buena relación con el cliente, eso no es
suficiente.
¿Por qué?
La razón es sencilla, en muchas ocasiones todos los esfuerzos de los ejecutivos de venta
están orientados al corto plazo, pues no son producto de un análisis de los objetivos de su
propia empresa. A través de la administración de las cuentas clave se puede diagnosticar cuál
es el estatus de la relación con los clientes, las características de esa relación y, como
resultado de dicho proceso analítico, cuáles serían las estrategias a seguir para cada una de
ellas.
En el presente tema conocerás sobre los niveles de relación entre clientes y proveedores.
Explicación
4.1 Etapas de la relación
Aunque parezca obvio señalarlo, no hay que olvidar que la administración de cuentas clave es
la administración de una relación de un comprador y un vendedor, y a medida que las
empresas crecen en tamaño, la complejidad de esta relación se hace más difícil de manejar.
Para brindar un mejor servicio a los clientes clave, la empresa necesita saber cuál es la
relación que existe con ellos. Tal y como viste en el tema anterior, un primer acercamiento se
realiza al aplicar los criterios de selección y evaluarlos en una tabla, pero otra manera sería
agruparlos de acuerdo a la propuesta de McDonald y Woodburn (2013).
Cooperativa
La relación cooperativa implica un mayor nivel de confianza entre ambas partes, además los
canales de comunicación se multiplican, ya no es sólo el ejecutivo de cuentas clave quien
tiene contacto con el cliente, sino que se abre la posibilidad de interacción entre otros
colaboradores. Otra de las diferencias con el nivel anterior es que se cuenta con un mayor
número de recursos económicos y de personal para invertir en el desarrollo de la cuenta.
Interdependiente
Como su nombre lo indica, la relación interdependiente implica que, tanto cliente como
proveedor, están inmersos en acciones y planes colectivos, han desarrollado confianza, y
comparten procesos y metodologías más allá de la compra. ¿Por qué se dice que existe una
dependencia? Debido a que llega un punto donde la relación es tan estrecha que si uno de los
dos decidiera terminar con ella, habría grandes problemas e inconvenientes.
Integrada
Este nivel de relación es muy difícil de alcanzar pues implica que los actores de ambas
empresas se den cuenta que pueden lograr mayores beneficios si matizan las barreras que
dividen a un ente del otro. En otras palabras, la integración del proveedor con el cliente es tal
que llegan a verse como una sociedad en la que domina la confianza en el otro, donde hay
apertura para el intercambio de información y se busca la manera de que ambos se vean
beneficiados.
Dentro del diagrama se observa que no existe ya una división explícita entre el proveedor y el
cliente, sino que existen equipos de trabajo con tareas definidas. Por otro lado, los ejecutivos
de cuentas clave y los encargados de compra cambian de rol y se convierten en elementos
estratégicos que no se ocupan más de la operación cotidiana:
Ahora bien, McDonald y Woodburn (2013) proponen un cuestionario que permite identificar el
nivel de la relación que existe entre proveedor y comprador. Observa:
De acuerdo a la siguiente escala, califica hasta qué punto aplican las oraciones en tu relación
con tus clientes clave:
1 = completamente en desacuerdo.
2 = en desacuerdo.
3 = de acuerdo.
4 = completamente de acuerdo.
1 2 3
Entre los dos han creado planes estratégicos a largo plazo para el desarrollo de la
relación.
Ambas compañías han diseñado equipos mixtos con personal dedicado a solucionar las
necesidades de los clientes.
Total
Práctica
Cierre
Es imposible afirmar que la relación con las cuentas clave es la misma, y mucho menos decir
que todas deben estar en un mismo nivel, ya que cada una tiene sus propias necesidades.
Además, no todos los clientes son estratégicos ni estrellas, por lo que es posible que no se
compartan objetivos más allá de un periodo establecido.
A través de la administración de las cuentas clave se puede diagnosticar cuál es el estatus de
la relación con los clientes, las características de esa relación y, como resultado de dicho
proceso analítico, cuáles serían las estrategias a seguir para cada una de ellas.
Contexto
Atractivo de la cuenta
Ganancia Porcentaje de
Cuenta Tamaño Estatus
anual facturación
Cervecera Muy
En revisión 2 millones 30%
grande
Aerolínea Reducción de
Grande 0.6 millones 9%
presupuesto
Productora de
Chica Estable 0.1 millones 2%
minerales
Explicación
5.1 Desarrollar las relaciones clave
Una vez que se han seleccionado las cuentas clave y se ha hecho un diagnóstico de los niveles
en que se encuentra la relación con ellas, el paso siguiente dentro del KAM es generar un plan
de desarrollo con cada cuenta en específico. Recuerda que no todas las cuentas deben
manejarse al máximo nivel de relación, que es la integrada, de hecho a veces es más
conveniente que algunas cuentas queden a un nivel básico.
McDonald y Woodburn (2007) señalan que la matriz de selección de cuentas empata con los
niveles de relación existente con los clientes:
De esta manera se puede señalar que:
Ejemplo
Una relación integrada, por ejemplo, puede requerir contactos a cada nivel de la organización,
el director de la empresa que vende debe tener relación con la empresa que compra.
Asimismo, debe existir contacto entre gerentes, jefes, líderes, compradores, vendedores, como
si cada compañía fuera un engrane que ajusta perfectamente con el otro.
Cierre
Tal y como se mencionó en el tema, en ocasiones es necesario que las cuentas permanezcan
en una relación básica, pues quizá no necesite mejorarse debido a los objetivos planteados. Es
importante contar con información y análisis suficiente, tanto para elegir las cuentas clave de
la empresa como para trazar los planes estratégicos subsecuentes.
Contexto
Miguel Urbina, fundador de la empresa LCY, ha pasado las últimas dos semanas en pláticas
con una compañía a la cual le interesan los productos que ofrece. Además de las reuniones
con los ejecutivos de compras ha estado en contacto con el gerente del área. Aparentemente
el interés es genuino y le pidieron que elaborara un plan donde se incluyera la cotización y
las distintas estrategias a seguir durante la relación que establecerían.
Días antes de la fecha pactada, Miguel reúne a su equipo y se ponen a refinar la propuesta
que ofrecieron en un principio. Fueron jornadas maratónicas y extenuantes, pero al final
todos concluyeron que el plan que habían desarrollado era bastante conveniente para LCY.
Estaban conformes con el resultado de su labor.
El día de la junta llegó, Urbina presentó su propuesta y plan de desarrollo, listo para
negociar los términos que consideraba serían rebatidos por los compradores.
Sorprendentemente, al menos para él, rechazaron la propuesta sin dar pie a la negociación.
Preguntas detonadoras o de reflexión:
¿Por qué crees que pudo haber pasado esto?
¿Cuáles factores son los que determinarían que se rechazara esta propuesta?
Explicación
6.1 La relación del cliente y el proveedor
Ningún cliente está obligado a aceptar las propuestas que hagas, inclusive aunque creas que
son la mejor opción para ellos, ya que manejan sus propias prioridades y tienen objetivos
particulares. Uno de los errores más comunes en las empresas es el egocentrismo, de hecho
también le sucede a las personas, ¿por qué? Gran parte de las veces la única perspectiva
que se toma en cuenta en una relación es la propia, de esta manera muchas empresas se
centran en sí mismas y solo toman en cuenta lo que es importante para ellas, olvidándose
por completo del punto de vista de sus clientes. Esto es mucho más común de lo que se
puede pensar y conduce a una ceguera hacia el mercado que puede llevar al fracaso.
¿Por qué es tan importante considerar la perspectiva del cliente?
Fuente: Woodburn, D. y McDonald, M. (2013). El management de las cuentas clave. Argentina: Granica.
Como puedes darte cuenta el ambiente en el que se desarrolla la relación con tu cliente es
bastante complejo, por lo que resultará difícil que te conviertas en una relación clave para
él. De acuerdo con Woodburn y McDonald (2013), para que te conviertas en una relación
clave para tu cliente, necesitas:
Tener una comprensión profunda de lo que motiva a tu cliente.
Saber cuáles son los objetivos que tiene tu cliente con sus proveedores.
Desarrollar estrategias y soluciones para responder a lo que necesita tu cliente.
Enseguida conocerás los principales factores que motivan al cliente en la relación con sus
proveedores.
Anteriormente las compañías compradoras tenían cierto grado de certeza que les permitía
hacer un pronóstico sobre las condiciones del futuro e invertir su capital en activos que les
ayudarían a generar rendimiento a largo plazo. No obstante, en la actualidad esto es
prácticamente imposible, pues los grados de certeza han disminuido y los compradores
prefieren “mantener su flexibilidad y velocidad de respuesta” (Woodburn y McDonald, 2013).
Los factores que actualmente motivan al cliente, de acuerdo con Woodburn y McDonald, son:
Velocidad del cambio y Innovación rápida y ciclos de vida más Rutas hacia los mercados emerge
flexibilidad cortos declinantes
Los compradores, para reducir costos, necesitan tener proveedores que no alienten la práctica
de vender por vender, sino que se interesen por lo que verdaderamente usarán, que les señalen
cuáles son los gastos innecesarios que tienen y cómo están usando ineficientemente los
recursos que compran. Los compradores aprecian a proveedores que sacrifiquen cierto
margen de ganancia para construir una relación más estable.
Cuando existe una relación estrecha entre compañías compradoras y vendedoras, existe la
posibilidad de generar ahorros en los costos de ambas. Pero, para ello “ambas partes tendrán
que invertir significativamente en el desarrollo de la relación, la comunicación y el tiempo
comprometido en los proyectos conjuntos” (Woodburn y McDonald, 2013).
Cerrar
Por otro lado, los riesgos empresariales, según Woodburn y McDonald, pueden ser externos a
la relación (contexto político, económico, social, cultural, la estructura del mercado,
internacionalización, entre otros) o internos (confianza, equilibrio de poder o dependencia). Lo
ideal es contar con estrategias que permitan mitigar los riesgos.
Para entender los motivos del cliente es importante que te pongas en su lugar, comprende qué
es lo que busca lograr y cuáles son los caminos que puede tomar para ello. Si no te pones en
sus zapatos, difícilmente harás crecer la relación. La mejor forma de identificarnos y volvernos
amigos es darle la razón al otro, no enfrentarnos. Hay que coincidir con el cliente, pero también
hay que ser sinceros y honestos, eso es muy importante.
Haz clic aquí para revisar qué herramientas en línea te pueden ser de utilidad para recabar
información desde la perspectiva de tu cliente.
6.3 Estrategias usadas para las relaciones con proveedores
De la misma forma en que los vendedores tienen estrategias para el trato con los clientes,
éstos también desarrollan planes para trabajar con sus proveedores.
Algunas compañías imponen requisitos restrictivos que le ayudan a filtrar y seleccionar a los
vendedores, por ejemplo, que todos estén certificados por cierto organismo internacional, que
los productos pasen una prueba de calidad o que los servicios cumplan con determinadas
reglas. Otras empresas van más allá de establecer requerimientos genéricos para
proveedores, pues deciden recortar su base de proveedores a través de estrategias hechas a
la medida.
De acuerdo con Woodburn y McDonald (2013), las estrategias más utilizadas por las empresas
son las siguientes:
Cierre
Muchos son los factores que pudieron determinar que la compañía desechara la propuesta de
LCY, pero el hecho que ellos se centraran solo en lo que convenía a la empresa y no en lo que
convenía al cliente, fue un punto determinante.
Es fundamental no olvidar que el manejo de una cuenta clave es el proceso de administrar una
relación, por eso es importante no sólo tomar decisiones con base en la perspectiva propia,
sino aún más importante entender la perspectiva del otro. Mientras que el objetivo de un
ejecutivo de cuenta clave es incrementar las ventas, los objetivos de su cliente son muy
diferentes y es crucial que conozca cuáles son para así poder ayudarle a conseguirlos a través
del servicio que la empresa proveedora puede ofrecer a la compradora.
Contexto
Entre los vendedores existe la mentalidad de que siempre será positivo vender los productos o
servicios a una compañía grande, pues ésta puede comprar volúmenes que otras de menor
tamaño no podrían. Para ellos es mejor vender 1 millón de pesos en producto que solo 100
mil, ¿te parece lógico? Los números no mienten, las ganancias percibidas por las ventas son
muy evidentes.
Explicación
7.1 La rentabilidad de las cuentas clave
La cuenta de láminas de acero requería muy poco esfuerzo para generar las ventas de la
misma, pues sólo se realizaba una campaña al año, esto implicaba que solamente se tenían
que lograr aprobaciones a principios del periodo anual. Por el contrario, la cuenta de la tienda
de colchones generaba la necesidad de desarrollar una campaña cada 15 días, obviamente los
niveles de rentabilidad de ambas aunque fueran más o menos comparables en ingresos, eran
muy diferentes.
Este es el tipo de análisis que se tiene que hacer permanentemente para definir la cartera de
cuentas clave de una empresa que está en continua evolución.
Todas las cuentas demandan recursos de operación, de mercadotecnia, de finanzas y hay que
compararlas como si fueran acciones en la bolsa de valores: tú puedes invertir la misma
cantidad de dinero en diferentes bonos de las empresas, pero algunos te darán más que otros,
la decisión lógica es concentrar los esfuerzos de inversión en los que te den más rendimiento,
incluso reduciendo la inversión en aquellas acciones y valores que rinden menos. El
procedimiento de análisis de cuentas clave es exactamente el mismo.
Como puedes ver, este análisis es de gran ayuda para administrar la relación con las cuentas.
Enseguida conocerás cómo llevarlo a cabo.
Fuente: Woodburn, D. y McDonald, M. (2013). El management de las cuentas clave. Argentina: Granica.
Para determinar la contribución que hace el cliente debes establecer el valor bruto de las
ventas y restar los distintos costos involucrados en producir y hacer llegar la propuesta de
valor a los compradores. El proceso inicia enlistando de mayor a menor las principales
cuentas clave bajo el criterio del atractivo existente con base en el potencial de crecimiento en
cuanto a beneficios durante los siguientes tres y cinco años.
Posteriormente, debes hacer una proyección de las futuras compras que hará cada cliente en
el periodo antes citado, considera:
Una vez que hayas realizado el análisis y que observes los resultados, deberás sopesar si es
pertinente conservar la cuenta, ¿vale la pena retener este cliente clave? Quizá aporte una gran
cantidad de dinero en la compra, pero tal vez esté acarreando mayores costos que las
utilidades generadas. Esta es una decisión bastante complicada, pues generalmente se
aconseja la retención de los clientes.
Woodburn y McDonald (2013) aseguran que la retención del cliente debe ser uno de los
objetivos de la empresa, ya que de esta manera se disminuyen una serie de costos enfocados
en la rotación de compradores. Pero, de nueva cuenta, la retención podrá depender de los
resultados arrojados en el análisis de la rentabilidad.
Cierre
Considerando lo que has visto en el tema, ¿realmente vale la pena ser siempre el proveedor de
una compañía de gran tamaño? La respuesta a esta pregunta tendría que ser negativa, pues
antes de tomar una decisión es importante hacer un análisis de la rentabilidad de las cuentas
clave para saber si en efecto las ganancias son mayores a los costos incurridos al hacerle
llegar el producto o servicio al cliente.
De igual manera, este análisis debe ser un punto de partida para tomar la decisión de
conservar o terminar una relación comercial. ¿Vale la pena conservar al cliente o es mejor
buscar otro nuevo?
Contexto
Explicación
8.1 Conocer el segmento de mercado del cliente
Uno de los errores más comunes de las empresas nuevas es ofrecer su producto o servicio a
bajo precio cuando desean ingresar al mercado, esto tarde o temprano deja de ser benéfico
para la compañía porque pocas veces el producto más barato tiene éxito (Woodburn y
McDonald, 2013). Una estrategia efectiva es la segmentación de mercado, la cual ayuda a
diferenciar al producto o servicio de otros, no sólo por su naturaleza misma, sino por el público
al cual va dirigido.
El ejecutivo de cuenta clave también debe tener un conocimiento profundo de la actividad
competitiva de sus clientes y las tendencias de las industrias en las que las cuentas clave
se desempeñan. Esto implica un análisis macro que va más allá del análisis micro de la
compañía del cliente.
8.2 Análisis de la cadena de valor
Una vez que se comprende cuál es o cuáles son los mercados de los clientes, tienes que
pasar a estudiar o analizar los procesos internos que utiliza para satisfacer las necesidades
de sus mercados. Esto implica un estudio de la cadena de valor del cliente tal y como se
planteó desde el inicio del curso.
El análisis de la cadena de valor comprende desde la adquisición de las materias primas y
su logística, la transformación de las mismas en productos terminados, la logística externa,
las actividades de mercadotecnia y ventas, así como la actividad post-venta de los clientes.
Este análisis se hace con el fin de detectar áreas de oportunidad donde tus productos
puedan intervenir para mejorar la productividad de la cuenta clave.
Finalmente es importante entender los procesos de compra de cada cliente que van desde
las simples compras directas en las adquisiciones de poco costo, hasta las complejas
licitaciones de las compras multimillonarias. Por ejemplo, aquí se debe entender quiénes
intervienen y cómo intervienen en la compra de los productos de tu compañía.
Analiza el siguiente ejemplo.
Existen compañías como Rolls Royce, Pratt & Whitney, General Electric, Alfa Romeo, BMW,
Bentley, Dimler Benz, Ford, Kawasaki, Lockheed, Renault, Rockwell, Siemens, Volvo, Westing
House, Yamaha, que proveen turbinas para aviones. En este mercado el análisis de la cuenta
clave empezaría por definir los mercados y segmentar los que más convengan.
La respuesta cambiará el tipo de enfoque que se le dará a las cuentas clave. Si la compañía se
concentrara en las cuentas transcontinentales, los clientes probablemente se reducirían a los
dos grandes fabricantes de Jets para pasajeros: Boeing y AirBoss. Estas son cuentas clave
naturales de los vuelos intercontinentales.
Una vez decidido esto habría que comprender la tendencia de las industrias de las aerolíneas,
es decir los clientes de tus clientes. Tendencias como el ahorro de combustible, reducción de
contaminación y ruido, comodidad de los pasajeros, el uso de materiales ligeros, vuelos más
largos, el aumento de capacidad, son fuerzas que están moviendo a las aerolíneas en la
competencia por más consumidores.
Aquí hay que preguntarse, ¿qué puede hacer un fabricante de turbinas para competir en esas
tendencias?
También habría que analizar si la industria de vuelos transcontinentales está creciendo o no,
así como las perspectivas que tiene, las ventajas competitivas de cada una de las cuentas
clave y estudiar el proceso entero de manufactura de un avión que involucra miles de partes.
Al igual en este ejemplo, esto se puede aplicar en cualquier industria: un proveedor de
botones para una fábrica de camisas, insumos para un restaurante, tornillos para muchas
industrias, microchips para ensambladores de computadoras, entre otros.
Cierre
De acuerdo con Woodburn y McDonald los estudios han demostrado “que las
organizaciones que invierten recursos en el análisis detallado de las necesidades y
procesos de sus cuentas clave tienen mucho más éxito en el desarrollo de relaciones
rentables a largo plazo” (2013). De cierta manera este análisis es una planificación previa
que permitirá que los vendedores identifiquen las áreas de oportunidad de sus clientes y
cómo les pueden ayudar.
Contexto
Toda empresa que busque convertirse en el proveedor de otra o mantener una relación de
ventas constante, debe buscar definir una estrategia para el desarrollo de esta relación. Si no
existe una planeación estratégica será difícil empezar con la implementación de la
administración de cuentas clave.
A lo largo del curso has ido avanzando en la dirección de crear un plan de cuentas clave, se
inició listando las cuentas, fijando criterios para seleccionarlas, haciendo análisis de las
mismas y ahora es momento de plasmar todas estas actividades en un documento central.
Explicación
9.1 La planeación estratégica
Uno de los principios comunes que puedes escuchar en muchos de los ámbitos empresariales
es que si no planeas, no puedes reducir riesgos y ¿qué pasa si no reduces riesgos? Estás más
expuesto a fallar pues careces de las herramientas necesarias para solucionar los posibles
inconvenientes que pudieran surgir.
Esto mismo ocurre en la relación entre vendedores y compradores, ya que si no tienes una
planeación para el desarrollo de la misma, serás vulnerable a los problemas inherentes a la
misma. De acuerdo con Woodburn y McDonald (2013) una planeación estratégica “no solo
produce una mayor rentabilidad y estabilidad a través del tiempo, sino que también ayuda a
reducir la fricción y las dificultades operativas que surgen dentro de las organizaciones”.
Fuente: Woodburn, D. y McDonald, M. (2013). El management de las cuentas clave. Argentina: Granica.
Como puedes ver en el diagrama, actualmente esta posición se ha modificado, pues las
compañías ahora buscan transmitir la estrategia de arriba hacia abajo, buscando
comprometer a todo el personal en la estrategia planeada.
A pesar de ser un concepto que se ha adoptado en los últimos años en diferentes ámbitos
industriales, aún existen muchas empresas que carecen de planeación estratégica y
desarrollan sus actividades de manera reactiva, es decir reaccionan a las situaciones o
adversidades, esto lleva a que la empresa cambie de rumbo constantemente y no avance en
una dirección fija. En las cuentas clave esto también puede suceder. Un síntoma delator es la
rotación de las cuentas, es importante recordar que éstas aumentan su rentabilidad mientras
más duren en la empresa y que adquirir cuentas nuevas constantemente es un ejercicio
costoso que requiere gran esfuerzo y que representa grandes tasas de fracaso.
1. La visión estratégica siempre debe ser proyectada a largo plazo, además debe tener
objetivos claros y concretos que son conocidos por toda la organización.
2. La visión táctica es más a corto plazo y se refiere más a las actividades cotidianas del
ejecutivo de cuenta.
El principal problema de los planes de cuentas clave reside en no saber conciliar ambas
visiones. Para lograrlo, la planeación tiene que ser dinámica y flexible, las buenas empresas
están en un continuo estado de planeación, revisando cambios en la situación de los
mercados y estatus de la relación con los clientes. Por eso el horizonte de planeación
ejecutable oscila entre tres y cinco años. Planear más allá, en esta economía cambiante,
resulta iluso y fútil. En contraparte, planear a muy corto plazo lleva a una falta de visión que
pone en peligro el futuro de la empresa.
Otro aspecto de la planeación es el detalle de la misma, pues no es conveniente planear hasta
el último detalle ya que se debe dejar espacio para que los ejecutivos de cuenta clave puedan
ir adaptando la visión estratégica a las condiciones específicas del terreno en el que ejecutan
sus labores. Es importante que los ejecutivos participen de alguna forma en el proceso de
planeación, porque al sentirse parte del proceso lo aceptan y ejecutan con mayor entusiasmo.
Incluso puede ser conveniente involucrar en la planeación al mismo cliente de la cuenta clave,
ya que él puede orientar sobre futuros desarrollos de su empresa para tener metas de
crecimiento más realistas.
Un elemento clave para que la planeación funcione es que cuente con métricas concretas que
puedan ir señalando el avance hacia los objetivos planteados para cada ciclo de actividad
económica. Estas métricas se revisan constantemente para ajustar el plan según sea
necesario.
Asimismo la planeación debe ser realista, con objetivos alcanzables porque si se plantean
metas demasiado altas e imposibles de lograr, lo único que se genera es una gran frustración
en toda la organización.
¿Cuáles son los aspectos que debe contener este plan por cada una de las cuentas clave?
Revisa en el siguiente documento un formato que puedes usar para el desarrollo de la
planeación. Para descargarlo, haz clic aquí.
Cierre
Es importante realizar un plan para cada cuenta clave, como ninguna cuenta es igual a otra, no
se puede aplicar un plan general para todos los clientes de la empresa. Toma en cuenta que la
suma de los planes de todas las cuentas clave es el gran plan maestro de administración de
cuentas clave que te permitirá iniciar con la implementación del KAM en la empresa.
La actividad que realizarás en este tema te parecerá ardua, sin embargo gran parte de lo que
se pide lo has ido realizando anteriormente. No dudes en consultar a tu facilitador si se te
presenta duda alguna al momento de hacerlo.
Contexto
Francisco Gutiérrez acaba de ser contratado para un puesto de mando medio en una empresa
manufacturera del centro del país que se encarga de proveer piezas especializadas a
compañías del giro automotriz. La primera semana estuvo al lado de la persona a la que
reemplazaría conociendo la cultura general de la empresa, conociendo al equipo de trabajo al
cual supervisaría y algunas labores que le correspondía llevar a cabo en su puesto. Todo
parecía ir viento en popa.
Después de la renuncia de la persona a la que remplazó, Francisco se quedó sólo sin una guía
que le permitiera llevar a cabo las más sencillas labores. Pensó que era hasta cierto punto
algo esperable, pues era la primera ocasión que tenía personal a su cargo y la compañía donde
se desempeñaba previamente era de mucho menor tamaño. Creía que al pasar de las
semanas se acostumbraría al ritmo tan ajetreado de su puesto.
Luego de dos meses en su cargo empezó a notar que muchas de las acciones que realizaban
sus subordinados variaban mucho entre sí a pesar de que se esperaba un resultado parecido.
Cuando se presentaba un problema tenía que inventar una solución como pudiera, tratando de
considerar los impactos que habría para otros departamentos. Pero no estaba seguro de que
lo que se llevara a cabo fuera lo adecuado o si las herramientas necesarias para resolver el
inconveniente estuvieran disponibles en otra parte de la empresa.
No fue sino hasta que pasaron cinco meses que se atrevió a decir algo que se había guardado
desde el primer mes: “No hay procesos en esta empresa”.
Explicación
10.1 ¿Qué son los procesos?
Es común escuchar en las empresas que el personal operativo, los mandos medios y los
mandos directivos hablan de procesos. En ocasiones achacan la falta de resultados a errores
en los procesos, en otras justifican el éxito de una acción al diseño adecuado de los procesos.
Tanto se habla de ellos que pocas veces se hace un alto para revisar realmente qué es un
proceso, cuáles son sus características e importancia en las diferentes áreas de la compañía.
Los procesos se generan para encontrar la forma más eficaz y eficiente de convertir diferentes
recursos, ya sea materiales o intangibles, en salidas específicas.
La estandarización de productos o servicios, es evidencia de la implementación de procesos
en una organización.
Para saber si tu compañía toma en cuenta los procesos internos y los del cliente, se puede
hacer una autoevaluación con base en las cualidades anteriores. Para ello puedes usar la tabla
siguiente, la cual permite calificar tus procesos de acuerdo con lo que espera el cliente.
Proceso
Flexible
Rápido
Proceso
Integrable
Sólido
Transparente
Informativo
De costes estimables
Primero debes identificar cuáles son los procesos que impactan al cliente, posteriormente
calificar cada uno de ellos según sus atributos en una escala del cero al 10. Por último debes
promediar la calificación de cada proceso según su atributo. El resultado que obtengas te
ayudará a tener una perspectiva amplia sobre los procesos en la empresa, cuáles procesos
son satisfactorios y cuáles son los puntos débiles que tiene cada uno.
En todos los niveles de procesos es importante contar con métricas claras que permitan
evaluar el avance de todas y cada una de las actividades involucradas en dichos procesos.
A nivel estratégico, por ejemplo, se puede hablar del número total de cuentas clave
y de los niveles de satisfacción general de los clientes.
A nivel de realización son adecuados los indicadores como las ventas, el precio o
el número de productos en venta.
El número de órdenes entregadas a tiempo, las quejas de los clientes y el nivel de
la cartera de cobranza, son ejemplos de cómo evaluar los procesos del nivel
operativo.
Contexto
Pero, ¿de qué sirve tener una planeación estratégica concienzuda y global si no se implementa
adecuadamente?
Explicación
11.1 ¿Cómo debe ser un ejecutivo de la KAM?
Un error común en las organizaciones actuales es tener un solo perfil de vendedor, cuando en
realidad nunca hay un solo perfil de cliente. Por esta razón en ocasiones la cultura del cliente
no coincide con la del proveedor. Existen casos en que la empresa puede ser proveedor ideal
de un cliente clave, sin embargo el ejecutivo que representa la organización no encaja en la
cultura del comprador. Hay muchos ejemplos de ello, un ejecutivo excesivamente detallista
puede chocar negativamente con un cliente que requiere más flexibilidad, el caso opuesto
también puede darse, en el que un ejecutivo demasiado laxo no sabe darle servicio a un cliente
que pone mucha atención al detalle.
La idea es simple, hay que enviar personal que empate con el perfil de la organización y las
personalidades de los ejecutivos compradores.
Un punto muy importante de esta definición de la personalidad del ejecutivo de la cuenta clave
es tener muy en claro las competencias con las que debe contar. Hoy en día existen
certificaciones de competencias a granel, desde tener la habilidad de usar un programa de
cómputo, hasta la capacidad de liderar grandes equipos de trabajo. Gran parte de la
capacitación de las empresas está orientada a desarrollar tales competencias.
Las competencias implican definir en lo que alguien es competente, es decir, que tiene la
capacidad de realizar una labor con gran efectividad y eficiencia. Las competencias del
ejecutivo de cuentas clave deben estar alineadas con lo que la cuenta clave requiera,
cuestiones como el dominio de idiomas, habilidades de presentación y comunicación verbal,
hasta conocimientos técnicos profundos como el ensamblaje de un producto, pueden ser
necesarios para que un ejecutivo de este tipo haga bien su trabajo.
En otro aspecto de la personalidad del ejecutivo de cuenta clave están los atributos, esto tiene
que ver más en cómo es la persona, se puede ser muy competente, pero no simpático o
viceversa. El ejecutivo de cuenta ideal debe combinar perfectamente todas las competencias y
atributos.
Imagina por un momento que te ofrecen el puesto de ejecutivo de cuenta clave de la empresa
para la cual estás desarrollando tu proyecto profesional cuestiónate qué necesitarías tú para
ser exitoso en ese puesto.
Para definir las competencias y atributos es importante tener claros los roles que tiene que
desempeñar el ejecutivo en sus actividades diarias.
Por ejemplo, un ejecutivo de cuenta de Coca Cola puede tener la necesidad de introducir un
nuevo producto a las cadenas de supermercados que son sus clientes. En la guerra del
anaquel lograr un espacio de exhibición de mercancía es un gran reto para cualquier compañía
aún para corporaciones como Coca Cola.
Los comerciantes son usualmente reacios a darle espacio a un producto no probado, ya que
eso significa que tiene que quitar el espacio de productos que ya le dan rentabilidad
Esta búsqueda de espacio muchas veces tiene como objetivo desplazar a la competencia, por
lo cual es una actividad que tiene una gran importancia estratégica a nivel compañía.
En este sentido las habilidades del ejecutivo de cuenta para demostrarle al comerciante que el
producto generará una rentabilidad superior a los que ya tiene en exhibición es un reto para el
cual se necesitan capacidades analíticas, de conocimiento del negocio del cliente, del
mercado en general y, obviamente, de comunicación y convencimiento para introducir
innovaciones al mercado.
Los requisitos del puesto son producto de las necesidades de la organización y los objetivos
que desea cumplir. De igual manera el ejecutivo necesita cumplir con labores de ejecución,
determinando qué debería ocurrir en una cuenta, y facilitación, desarrollando relaciones que
ayuden a crear una a estrategia comercial.
Cierre
Un aspecto que puede facilitar enormemente la implementación del plan de la KAM en una
empresa, es delimitar específicamente cuáles son las labores de los ejecutivos y gerentes de
departamento. De esta manera se sabrá claramente cuáles tareas realizará cada miembro del
equipo y hasta qué punto deben involucrarse.
Contexto
¿Qué te mueve a hacer algo?
Pregúntate ahora mismo, por qué estas estudiando e invirtiendo tiempo y esfuerzo en llevar a
buen término este curso ¿qué es lo que te motiva? ¿Por qué estás estudiando en este
momento? ¿Es por aprender algo que te va a ser útil, por obtener un título que te pueda ayudar
a conseguir un buen trabajo? ¿Por llevar nuevas ideas a la empresa de tu familia? Si no sabes
porqué estas estudiando este curso, probablemente te cueste mucho trabajo realizar las
actividades y el proyecto que se pide.
Lo mismo sucede con los ejecutivos de cuenta clave, si no tienen la motivación fundamental
para realizar su trabajo, lo harán mal y sin entusiasmo, dañándose ellos mismos y a la
empresa que representan. Imagínate poner en manos de un ejecutivo de cuenta clave sin
motivaciones, a cargo del principal cliente de la empresa, los resultados pueden ser
desastrosos. Es así que una de las principales tareas de un gerente del departamento de
cuentas clave es definir cómo mantener motivados a sus ejecutivos.
Explicación
12.1 Retribución y desempeño en la KAM
Es fácil pensar que lo único que mueve a una persona es el dinero, sin embargo innumerables
estudios han demostrado lo contrario, de hecho el dinero casi nunca es la principal razón por
la que una persona se mantiene y hace su trabajo con entusiasmo. Incentivos como el
reconocimiento, la estabilidad, los regalos especiales, las vacaciones y las bonificaciones
especiales pueden constituir poderosos motivadores para que un ejecutivo de cuenta pase de
lo ordinario a lo extraordinario.
Hay que esforzarse al máximo para evitar que el vendedor de cuenta clave se convierta en un
“Toma pedidos” suele suceder a menudo que la relación entre la cuenta clave y la empresa se
vuelve extraordinariamente estable, rentable y satisfactoria, no hay cambios y la orden de la
mercancía llega con regularidad a la empresa. En algunos casos el ejecutivo ya no hace ningún
esfuerzo adicional por seguir ganando sus incentivos, económicos y no económicos, esta es
una trampa mortal en la que si la empresa no está al tanto de los posibles cambios que se
puedan estar gestando en la compañía del cliente, un buen día le llegará la mala noticia de que
lo ha perdido.
Ahora bien, es necesario comprender que no todos los ejecutivos de cuenta buscarán los
mismos premios, por ejemplo, quizá algunos estén más interesados en las vacaciones y otros
prefieran las bonificaciones económicas. De igual manera muchos ejecutivos jóvenes podrían
tener la predilección por oportunidades de formación y crecimiento.
Woodburn y McDonald (2013) proponen que la estructura del plan de premios sea la siguiente:
1. Objetivos
La primera pregunta que se deben hacer los gerentes de la KAM es ¿por qué existe la
necesidad de tener un plan de premios? y más importante aún, ¿qué es lo que se debe
conseguir con este plan? Si la finalidad es la capacitación y no la motivación, entonces los
premios serán diferentes.
De igual manera, cuando el plan haya concluido se puede evaluar si el objetivo inicial se
cumplió o no.
2. Participantes
¿Quiénes participarán en el plan de premios?
En esta segunda fase se establecerá las personas que serán apercibidas a participar en el
programa. Es muy importante definir si todos los integrantes del equipo serán incluidos o si
solo se considerará a los líderes de cuenta, a los ejecutivos o a los gerentes. Si se decide
incluir a todos, se debe considerar que los premios deben ser proporcionales a su trabajo,
responsabilidades y desempeño.
3. Equilibrio de la compensación
En los equipos de ventas tradicionales muchas compensaciones y premios se hacen con base
en el número de ventas que cerraron los ejecutivos, sin embargo, esta perspectiva no encaja
con la cultura de la KAM. Sencillamente por que vender más no es necesariamente el objetivo
principal de una organización que se rija por la administración de cuentas clave.
Tomando esto en cuenta Woodburn y McDonald sugieren que se defina “el equilibrio
apropiado entre el salario básico, la bonificación monetaria variable, el aumento de salario y el
reconocimiento” (2013).
4. Desempeño
¿Qué se va a premiar?
Es muy importante señalar cuál es el desempeño que se premiará, es decir, ¿se premiarán
todos los resultados?, ¿sólo los sobresalientes?, ¿en qué consiste un resultado sobresaliente?
El desempeño evaluado tiene que ir a la par con los objetivos del plan de desarrollo de cuentas
clave.
5. Premio
En esta fase de la planeación establecerás cuál de los tres tipos de premios se brindarán a los
participantes que definiste previamente.
6. Proporciones
Al definir los premios es importante que consideres cuál será la proporción del premio de
acuerdo al desempeño, los objetivos establecidos previamente y los diferentes niveles de
desempeño. En otras palabras, en esta etapa se determina cuánto se premiará según los
grados de desempeño alcanzados por un ejecutivo.
7. Estimación
Woodburn y McDonald sugieren que tal vez se desee “premiar de acuerdo con la rentabilidad
del cliente, pero si su estimación de esta no concuerda con el examen de la cuenta” se debe
elegir otra alternativa.
8. Oportunidad
En esta penúltima fase debes considerar el periodo de referencia del desempeño, ¿se
evaluarán los resultados anuales o sólo los de un mes crítico en la operación de la compañía?
9. Presupuesto
Al igual que cualquier otro presupuesto del departamento, el costo del plan de premios debe
ser calculado al inicio del periodo, de manera que se sepa la fuente y la cantidad de recursos
destinados. Por otro lado, es necesario que consideres que dependiendo del tipo de premio
elegido, será la fuente del recurso; por ejemplo, los bonos en efectivo se dan a través de los
márgenes de los clientes, los aumentos de salario se descuentan del presupuesto de sueldos,
y así sucesivamente.
Estas fases pueden servirte para el desarrollo del plan de premios, sin embargo no dudes en
modificar lo necesario para cumplir con tus objetivos y los de la empresa.
Cierre
Nunca hay que dar una cuenta por ganada, todas las cuentas se pueden perder de un
momento a otro. La motivación de un ejecutivo de cuenta clave puede ayudar a evitar tal tipo
de sorpresas, por ello debe existir una permanente evaluación del desempeño de cada
ejecutivo de cuenta para mantener las ventas en forma sustentable y creciente.
Aunque realizar un plan de premios es una labor compleja, recuerda que puede convertirse en
un pilar para la implementación de la KAM en una empresa.
Tema 13. Organización de la KAM
Contexto
Toda empresa, sin importar su tamaño, necesita contar con una estructura organizacional
clara que permita vislumbrar los alcances y responsabilidad de cada uno de los
departamentos que la componen. La organización correcta de una empresa ayuda a generar
procesos útiles para la consecución de los objetivos planteados.
Explicación
13.1 Organización de la KAM
Los departamentos de cuentas clave son relativamente recientes en el mundo de los negocios,
de hecho en muchas empresas no existen. Lo más común es que exista un solo departamento
de ventas al que se asignan las diferentes cuentas sin distinción alguna de si son claves o no.
Para que funcione adecuadamente la filosofía que se ha discutido a lo largo del curso, es
indispensable que el departamento de cuentas clave sea una unidad independiente por sí
misma. Esta independencia es la esencia del pensamiento del KAM.
El que sea un departamento independiente implica que debe recibir un trato especial que
pueden llegar a resentir los demás departamentos de venta, es el equivalente a una sección
VIP en un estadio o primera clase de una aerolínea, pues trabajarás con los clientes
consentidos de la empresa.
Existe controversia sobre cuál es el lugar ideal dentro de la organización para ubicar el
departamento de cuentas clave, ¿dónde conviene ubicarlo?
Hay quien piensa que por su importancia debiera reportar a la alta dirección, de
hecho en algunas empresas el dueño de la misma es el principal ejecutivo de la
cuenta clave. Aun en empresas mayores y pensando que dueños deben atender
a dueños, gerentes a gerentes y ejecutivos a ejecutivos, se da el caso que la alta
dirección esté involucrada en desempeñar funciones de los departamentos de
cuenta clave.
PreviousNext
De hecho en la realidad el departamento de cuentas claves llega a estar en los lugares más
insospechados, como finanzas, operaciones y hasta en recursos humanos. A estas decisiones
se llega en la práctica debido al hecho de que las organizaciones son entes dinámicos y vivos
que se van adaptando a la necesidad de sus clientes y a las competencias de los ejecutivos.
Por ejemplo un ejecutivo de finanzas puede resultar un buen director para el departamento de
cuentas clave y la empresa puede decidir fusionar las áreas para que este ejecutivo las maneje
simultáneamente.
Recuerda, finalmente, que lo más probable es que te encuentres con organizaciones en las que
tendrás que innovar, creando el departamento de cuentas clave.
Cierre
Ninguna estructura del departamento de cuentas clave es perfecta, por lo que es necesario
que se evalúe constantemente y se adapte según sean las necesidades de la empresa.
Muchos de estos cambios derivarán del plan de desarrollo de cuentas clave y de la relación y
número de clientes que tengas.
Contexto
Cuando una persona tiene años realizando el mismo proceso con resultados positivos y
alguien externo a sus labores llega y le dice que su esfuerzo no está dando los resultados
máximos y que él conoce una forma diferente de trabajar que le ahorrará recursos, ¿qué crees
que pensaría? Lo más probable es que respondiera de manera negativa, al fin y al cabo tiene
años de experiencia con buenos resultados. Se resistiría enormemente al cambio.
Pero, ¿cómo sería el proceso para lidiar con la transición al KAM?
Has llegado al final del curso, en este momento tienes conocimientos y habilidades que te
servirán para en un fututo desempeñar el rol de un ejecutivo de cuenta clave y realizar planes y
estrategias para atender a los mejores clientes de cada compañía. El tema final habla sobre la
innovación que significa el enfoque de cuentas clave en las empresas y te marca una serie de
etapas que hay que cumplir para que una empresa tradicional haga la transición.
Explicación
14.1 Transición a la administración de cuentas clave
La resistencia al cambio es una constante en las organizaciones y más aún cuando son muy
grandes estables y rentables, siempre resulta muy difícil convencer a alguien que le está yendo
bien, de que le puede ir mejor, en este caso con la filosofía de cuentas clave.
La reticencia de la que se habló al inicio del tema se debe principalmente a que las empresas
tradicionalmente gestionan las cuentas de los clientes de una forma establecida por años y
mover los procesos puede causar gran incertidumbre. Las principales diferencias entre una
empresa con un enfoque tradicional y otra con el enfoque de la KAM, son:
Planes de un año, principalmente Planes empresariales explícitos de 3 a 5 años, que representan toda la
planes de acción interacción del proveedor con el cliente, no solo la actividad de ventas y
marketing
Manejada solo por el gerente de la Manejada por el gerente de cuenta clave y un equipo de cuenta clave con
cuenta dedicación plena
Fuente: Woodburn, D. y McDonald, M. (2013). El management de las cuentas clave. Argentina: Granica.
Muchas de estas diferencias las has notado ya a lo largo del curso, sin embargo vale la pena
reafirmarlas. Por otro lado, para obtener beneficios de la implementación de la KAM se deben
pasar por una curva de transición cuyo horizonte es a largo plazo.
En nuestro país muy probablemente encontrarás una y otra vez el modelo de ventas tradicional
con ejecutivos que están contentos con lo que ganan, cambiarlos y enseñarles la filosofía KAM
es una de las tareas fundamentales para que las empresas mejoren su productividad. Toma
en cuenta que lograr que ese primer acercamiento con la motivación y convencimiento puede
durar al menos dos años y para que la metodología se establezca por completo, se pueden
ocupar al menos siete años.
Cierre
Como director de las funciones de mercadotecnia o ventas, tendrás que tener una relación
directa con este departamento. Incluso como cliente de las empresas podrás demandar algún
día que te atienda un buen ejecutivo de cuenta clave.