Para la Organización mundial de la Salud, la adolescencia es el grupo poblacional de 10
a 19 años de edad, etapa del ciclo de vida donde se dan cambios cruciales en el desarrollo físico, psicosocial, psicosexual e intelectual del individuo, preparándose en la búsqueda de independencia, desarrollo de su personalidad y autonomía, adquisición de valores y capacidades sociales al comunicarse, demostrar afectos, aprender a amar y vivir como mujer o como hombre, expresar y sentir emociones a lo largo de toda la vida y establecer su proyecto para una adultez sana. A su vez subdividen la adolescencia en tres grupos: Adolescencia temprana (10 a 13 años), Adolescencia media (14 a 16 años) y Adolescencia tardía (17 a 19 años). La adolescencia fue considerada por un largo periodo, sólo como un tránsito entre la niñez y la adultez sin que se apreciara mayor preocupación. En la actualidad, el criterio predominante es que la adolescencia constituye un período de la vida donde ocurren una serie de cambios con rapidez vertiginosa, que se reflejan en la esfera anatomofisiológica, social y cultural. (Peláez M J). Según el Fondo de Población de las Naciones Unidas (FNUAP), "la falta de conocimiento de una buena salud sexual y reproductiva en adolescentes menores de 18 años tienen consecuencias irreparables: muchas veces viola sus derechos, con consecuencias potencialmente mortales en términos de salud sexual y reproductiva, y plantea altos costos de desarrollo para las comunidades, en particular para perpetuar el ciclo de la pobreza. Las consecuencias para la salud incluyen que aún no se están físicamente preparados para el comienzo de relaciones sexuales tempranas, lo que genera complicaciones, ya que la mayoría de las adolescentes provienen de hogares de bajos ingresos. El riesgo de contagio de enfermedades de transmisión sexual es potencialmente alto. Varios estudios han examinado el impacto socioeconómico, médico y psicológico de una mala educación sexual y reproductiva en adolescentes; otros factores, como la pobreza o el apoyo social. Se han propuesto muchas soluciones para contrarrestar los hallazgos más negativos. Los y las adolescentes que pueden confiar en el apoyo de la familia y la comunidad, los servicios sociales tienen más probabilidades de llevar una salud sexual y reproductiva relativamente sana. La educación de la sexualidad y la reproducción se constituyen en una expresión de la estrategia promocional de la salud y calidad de vida. La población de adolescentes en Venezuela es de 5.720.154, representa el 19,76% de la población total. Los y las adolescentes de 12 a 18 años constituyen el 15% de jóvenes en edad sexual activa; Instituto Nacional de Estadística (INE) 2011. Venezuela mostró una tendencia a la baja en la tasa de relaciones sexuales entre adolescentes, sin embargo, el grupo de adolescentes no mostró el mismo comportamiento, manteniéndose la tendencia al incremento; esto se explica debido a la prevalencia de enfermedades de transmisión sexual, que conjuntamente con la exclusión escolar afecta a este grupo poblacional. Uno o una de cada 5 adolescentes, conocen los métodos anticonceptivos, pastillas 96%, preservativos 90%, Dispositivos intrauterinos 80%, inyectables 55% pero apenas 8% revela haberlos usado y solo 5% los usa actualmente. Para el año 2011 las cifras continúan por encima del 20% situando a Venezuela entre los países de la región con más altos índices; se destaca que de cada 10 adolescentes tienen relaciones sexuales, solo uno o dos de este grupo conocen la realidad de una buena salud sexual y reproductiva En este mismo orden de ideas, el Estado Monagas no escapa de esta realidad, ya que es una de las entidades del país con mayor índice de adolescentes entre 12 y 18 años de edad que acuden a consultas médicas por presentar enfermedades de transmisión sexual o haber tenido relaciones de forma prematura (Pellín, 2015). El 20% de los adolescentes en el Sector Morichal Punta de Mata, del Municipio Ezequiel Zamora del estado Monagas, inicia las relaciones sexuales sin protección, lo cual conlleva a un alto índice de infecciones de transmisión sexual, siendo el promedio de edad para las adolescentes contagiados, entre los 14 y 18 años, y en los últimos 4 años ha bajado a 12, la mayoría de estos y estas adolescentes suele tener baja autoestima y problemas emocionales, ya que vienen de hogares disfuncionales Es por esta razón o motivo, que se resalta que la educación sexual y reproductiva en la adolescencia se debe más que todo a la falta de educación, y la forma como reciben esa educación en su hogar y el apoyo que le puedan dar los padres, ya que existen hogares donde los padres están ausentes, divorciados y/o tienen conflictos matrimoniales, olvidándose que existe un hijo que necesita orientación y educación permanente.
A pesar que el Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela asume el compromiso
disminuir la morbimortalidad en la población adolescente, mediante el equipamiento y la creación de servicios de salud dirigidos a todas y todos los adolescentes para garantizarles el derecho a una atención de calidad, integral y humanizada, en el Estado Monagas hacen falta más iniciativas públicas y privadas que promuevan el uso de anticonceptivos entre los adolescentes con la finalidad de disminuir las enfermedades de transmisión sexual en los adolescentes, así como campañas de información y prevención. En este abordaje se plantea una estrategia para la prevención de enfermedades de transmisión sexual y promover y educar a los mismos sobre la salud sexual y reproductiva en adolescentes de la comunidad de Morichal a través del CPT II Morichal Punta de Mata, del Municipio Ezequiel Zamora, a través del cual se pretende, modificar y fortalecer el conocimiento en cuanto a la salud sexual y reproductiva, a fin de elevar los niveles de conciencia en estos y estas, y sus consecuencias directas tanto para ellos como para sus familiares. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA
La adolescencia proporciona a cada persona un periodo necesario para adquirir
educación, entrenamiento y destrezas que se requieren para poder sobrevivir en la sociedad como adultos La etapa de la adolescencia incluye comportamientos de experimentación efectuando acciones nuevas que pueden ser dañinas , como por ejemplo encuentros sexuales por curiosidad y de esto un embarazo no deseado; y con esto los adolescentes en la mayoría de los casos deben dejar a un lado sus sueños y aspiraciones de tener una profesión; más aún si es que no hayan el apoyo de familiares para continuar en la formación académica y con ello llevando a tomar decisiones aceleradas que pueden cambiar por completo el rumbo de sus vidas. La sexualidad es un concepto íntimamente vinculado con el adolescente. Esta relación implica un período de cambios a nivel social, físico y psíquico que conducen al joven a mantener relaciones sexuales. Pero lamentablemente se ve influido por una serie de desventajas, entre las que se encuentran la escasa información que brindan entre otros los docentes, padres, amistades y los medios de comunicación. Estimular a las y los adolescentes, en el proceso de toma de decisiones sexuales y reproductivas implica para el mundo adulto y sus instituciones reconocer efectivamente que los y las adolescentes son seres sexuados/as, y que tienen derechos en este campo. Es también reconocer que tienen necesidades y demandas específicas, y que es responsabilidad del mundo adulto y sus instituciones, generar las condiciones para que éstas puedan encontrar respuestas. Es por ello, que se requiere de políticas públicas en educación y salud sexual y reproductiva respetuosas y habilitantes del ejercicio de los derechos.