Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Índice
Objetivo..........................................................................................................4
Introducción....................................................................................................4
1. Liderazgo................................................................................................6
2. Conjunción de esfuerzos........................................................................15
3.1 Coach............................................................................................20
4. Generación de compromiso.....................................................................30
5. Transformación de la institución.............................................................38
6. Líder resonante......................................................................................42
6.1 Conceptos.......................................................................................42
Conclusión....................................................................................................58
Fuentes de consulta.........................................................................................60
Objetivo
Al finalizar el tema 1, el participante será capaz de:
Estamos dejando los albores del siglo XXI, se deja atrás un siglo que se vio definido
por una cantidad de guerras y masacres que la humanidad nunca había visto
en tal escala. Y parece que este nuevo siglo no será tan diferente.
Pero sí puede serlo, a través del surgimiento de personas que sean líderes, que
lleven a un mundo mejor, lo cual es posible.
1. Liderazgo
Dávalos, menciona que un líder muchas veces es ejemplo para los demás, por
lo que debe cubrir cualidades como:
• BUENA COMUNICACIÓN, implica la expresión clara de ideas e instrucciones,
saber hablar y lograr que los seguidores escuchen y comprendan, asimismo,
recíprocamente debe saber escuchar.
En todos los casos, el liderazgo es el acto por excelencia que identifica, desarrolla,
canaliza y enriquece el potencial ya existente en una organización y en sus
miembros. Éste es parte de la dirección pero no abarca toda, a un gerente
se le requiere para planear, organizar, ejecutar, controlar y coordinar, pero lo
más que se pide o espera del líder, es que haga que otros lo sigan. El liderazgo
es esa habilidad para persuadir a otros a que busquen objetivos definidos con
entusiasmo.
Asimismo, los administradores modernos deben saber cómo dirigir y cómo liderar
o en caso contrario, sus organizaciones se extinguirían.
Por ello, existen dos diferencias representativas entre liderar y administrar.
La otra diferencia radica en las habilidades que cada uno posee, como se
observa en la imagen.
2. Conjunción de esfuerzos
El término talento humano en los últimos años es aplicado a los individuos que
dan vida y mueven a la organización, con habilidades que aportan beneficios
a la organización, que generan valor por encima del promedio para los clientes,
que poseen destrezas y un conocimiento profundo del trabajo que desempeñan,
pero sobre todo un saber de cómo hacer que las cosas pasen.
3.1. Coach
En inglés la palabra coach significa entrenador, proveniente del mundo de los
deportes, su práctica se ha extendido a los ámbitos empresarial, organizacional
y educativo.
En una empresa el gerente puede fungir como un coach; sin embargo, para
que ello resulte, la relación de coach
y la persona que se entrena debe
ser de participación, de esfuerzo, de
confianza, de seguridad y una presión
mínima, el ascenso y la amenaza de
despido no tienen ningún lugar aquí,
ya que sólo pueden servir para inhibir
esa relación.
El coaching poco a poco está siendo incorporado cada vez más en empresas y
organizaciones de todo tipo. La intervención de un coach profesional, en grupos
de trabajo o en trabajos individuales con los directivos, está transformándose
rápidamente en una ventaja competitiva de toda organización. Algunas razones
por las cuales el coaching es importante para las organizaciones se observan en
la imagen.
La misión y los objetivos no se conciben por separado, se ven influidos por las
oportunidades, amenazas, fortalezas y debilidades del entorno.
Se establecen controles para asegurar que los planes se lleven a cabo con
base en lo planeado y se evalúan resultados. Los controles ayudan a reducir
desviaciones de los planes y proporcionan información útil para el proceso de
planeación en curso.
Los objetivos orientan decisiones y acciones, así los objetivos generales ofrecen
un rumbo amplio para la toma de decisiones en términos cuantitativos. Los
objetivos no se establecen en el vacío, intervienen clientes, proveedores
y organismos gubernamentales que afectan a la organización y a sus
empleados.
El líder y el personal deben buscar medios alternos para cumplir con los objetivos,
hacer investigaciones, dirigir acciones hacia la creatividad, etcétera.
Para ello, el líder debe influir en el comportamiento de los otros, a fin de alcanzar
los objetivos organizacionales, por lo cual debe contar con un equipo de
alto desempeño y trabajar de manera conjunta, asimismo, debe poseer las
competencias y habilidades específicas para lograr que su equipo le permita
obtener los resultados propuestos por la organización; es decir, trabajar
constantemente en el logro de objetivos para que los resultados sean óptimos.
4. Generación de compromiso
Un líder tiene que estar respaldado por un equipo de trabajo, éste es un grupo
de empleados que poseen habilidades complementarias y que trabajan juntos
en un proyecto, se comprometen con un propósito común y son responsables de
realizar tareas que atribuyen a la consecución de los objetivos de la organización.
La composición de los integrantes de los equipos de trabajo puede variar de
una situación a otra. Unas veces todos trabajan en el mismo departamento,
otras comprenden empleados de diversos departamentos u organizaciones.
• M2: Se caracteriza por una madurez técnica baja, pero una madurez
psicológica alta.
5. Transformación de la institución
Culturas organizacionales
Cultura clan
Se caracteriza por un enfoque interno, son pocas las reglas y procedimientos,
los elementos que dan forma a los comportamientos de los empleados son: la
tradición, la lealtad, el compromiso personal, la amplia socialización y el manejo
personal.
Cultura emprendedora
El enfoque externo y la flexibilidad crean un ambiente que alienta asumir
riesgos. Existe un compromiso con la experimentación, la innovación y estar en
la vanguardia. Genera cambios.
Cultura burocrática
Reglas formales y procedimientos operativos, estándares que rigen el
comportamiento de los empleados y la coordinación se logra mediante
relaciones jerárquicas de información. Se crean reglas y procedimientos que se
aplican a la mayoría de las situaciones y se difunden entre los empleados para
que crean que su deber es “seguir lo que el libro dice”.
Cultura de mercado
En ésta los valores y las normas reflejan la importancia de lograr objetivos
mesurables y exigentes, en especial los que son financieros y se basan en el
mercado. Una competitividad muy intensa y una orientación a las ganancias
predominan en la organización.
6. Líder resonante
6.1. Conceptos
“En este siglo XX, las empresas han sufrido una revolución total que ha ocasionado
también una transformación del ámbito emocional. Hubo un largo período de
dominio directivo de la jerarquía institucional, corporativa, en el que se recompensaba
al jefe manipulador, autoritario, que actuaba como si estuviera luchando en la
selva virgen, pero esa rígida jerarquía empezó a romperse en los años ochenta
debido a la presión de la globalización por un lado y de las tecnologías de la
información por el otro. El luchador de la selva simboliza el pasado de la empresa;
el especialista en relaciones interpersonales es su futuro” (Goleman, 2004, 2013).
En cierto sentido, la labor de hacer una crítica a sus colaboradores es una de las
tareas más importantes de un directivo, pero en la realidad también es una de
las más temidas y más pospuestas. De hecho, la expresión y la recepción de las
críticas determinan en gran medida la satisfacción del individuo con su trabajo,
con sus compañeros y con sus superiores.
Muchos jefes critican con gran facilidad, pero escatiman los elogios, con lo que
sus subordinados se quedan con la impresión de que sólo les dicen algo sobre
su trabajo cuando lo hacen mal.
Competencias asociadas:
La autogestión
Los impulsos biológicos determinan las emociones. No se puede prescindir de
ellos, pero se puede hacer mucho para gestionarlos. La autorregulación, una
especie de conversación interna y continua, es el componente de la inteligencia
emocional que libera de la prisión en la que pueden encerrarnos los propios
sentimientos.
Competencias asociadas:
La empatía
De todas las dimensiones de la inteligencia emocional, la empatía es la que
se reconoce con mayor facilidad. Ésta no equivale a sensiblería, en el caso
de un líder no supone adoptar las emociones de los demás como propias y
tratar de complacer a todo el mundo, lo que sería una verdadera pesadilla y le
impediría actuar. Por el contrario, la empatía implica considerar detenidamente
los sentimientos de los colaboradores, junto con otros factores en el proceso de
toma de decisiones inteligentes.
Competencias asociadas:
1. Empatía
2. Conciencia de la organización
3. Servicio
La capacidad social
Los dos primeros componentes de la inteligencia emocional son habilidades
de autogestión. Los dos últimos, la empatía y la capacidad social, tienen que
ver con la facultad de gestionar las relaciones con los demás. Los individuos
con capacidad social suelen tener un amplio círculo de conocidos y facilidad
para encontrar puntos en común con gente de todo tipo; es decir, para lograr
una compenetración. Eso no quiere decir que alternen constantemente, sino
que trabajan dando por sentado que a solas no se consigue nada importante.
Nadie es una isla.
Competencias asociadas:
Los mejores líderes son aquellos que utilizan con flexibilidad lo que se denomina
“el repertorio del liderazgo”, dividido en seis tipos diferentes.
¿Cuáles son los seis estilos de liderazgo? Sólo con ver el nombre y una breve
descripción, es probable que cualquiera que sea líder, que esté a las órdenes
de un líder o como sucede a la mayoría, que desempeñe los dos papeles se
sienta reflejado. Los líderes visionarios movilizan a la gente hacia una visión.
Los líderes afiliativos generan vínculos emocionales y armonía. Los líderes
democráticos crean consenso mediante la participación. Los líderes timoneles
esperan rendimiento y autonomía. Los líderes coach contribuyen al desarrollo de
la gente para el futuro. Y los líderes autoritarios exigen una sumisión inmediata.
Los primeros cuatro estilos de liderazgo alientan la resonancia y los otros dos, si
bien son útiles en situaciones concretas, deben ser usados con cuidado ya que
pertenecen al estilo disonante.
Los mejores y más eficaces líderes son aquellos que pueden hacer uso con
flexibilidad de las seis modalidades diferentes de liderazgo y que pueden pasar
de uno a otro estilo en función de las circunstancias que se presentan.
Liderazgo Visionario
La visión es lo que forma a este líder
e inspira a los miembros del grupo a
seguirlo. Algunos ejemplos son: Martin
Luther King, Gandhi y Mandela.
Cuando el líder logra sintonizar con esa realidad, que puede ser desde una crisis
transnacional hasta una situación familiar de un colaborador, es cuando se esté
en presencia de un liderazgo efectivo y sobre todo humano.
Liderazgo Coaching
El objetivo de este líder es desarrollar
el talento de las personas que forman
parte del grupo. Suele invertir recursos
de diferente índole para lograr la
capacitación de los miembros y sobre
todo, muestra interés genuino por cada
uno de los que conforma el equipo.
Este estilo, tiene la capacidad de situar
al grupo en una zona de constante
aprendizaje y mejora.
Liderazgo Afiliativo
Se priorizan las relaciones antes que
a las personas u objetivos. Suelen
desarrollarse vínculos estrechos y
personales con los colaboradores, los
cuales en muchas ocasiones pasan
a ser parte de la “familia”. Además,
favorece el buen clima laboral y la
confianza entre los integrantes.
Liderazgo Democrático
Fundamentación en el hecho de que
las decisiones deben ser tomadas de
formada participativa y consensuada.
Es importante que el líder desarrolle
una visión estratégica y de escucha
activa de todas las voces que integran
el equipo de trabajo.
Liderazgo Timonel
Liderazgo Autoritario
Es un estilo tradicional y se enfoca
especialmente en los resultados y
consecución de los objetivos en
el menor tiempo posible. Existen
problemas cuando se abusa de esta
forma: destruye la motivación de los
colaboradores, se estanca en el punto
de vista del jefe y a mediano y largo
plazo puede ser poco productivo
causando fuga de talentos en el
entorno laboral.
La frase que resume a estos líderes en su relación laboral es: “Haz lo que te
digo”
Pocos líderes tienen los seis estilos en su repertorio y aún menos saben cuándo y
cómo emplearlos. Las exclamaciones más frecuentes pueden ser: “¡Pero tengo
sólo dos de ellos!” y “No puedo utilizar todos estos estilos. No sería natural”. El
líder puede formar un equipo con miembros que utilicen estilos de los que él
carece y aprender de su equipo.
Como líder se debe compartir una visión que mejore este mundo y una misión
que implique servir a los demás, a través de la educación, la capacitación, la
justicia, la equidad, la congruencia, la lealtad, el reconocimiento, el respeto, la
humildad y el aprecio, entre otros valores. Toda forma de liderazgo humanista,
sea el de una maestra, una ingeniera, un contador, una hija o el del presidente de
un país, se sustenta esencialmente sobre una base de servicio implícita, puesto
que busca, promueve y genera un servicio; es decir, un impacto benéfico en el
otro y en uno mismo, que se consigue a través de actos de servicio unificadores,
integradores, nunca marginadores.
Este tipo de actos se valen de medios éticos para lograr fines igualmente éticos;
es decir, siempre orientados al bien, incluso ocurre con mucha frecuencia que
la persona que los lleva a cabo se olvida de sí misma y de su comodidad para
actuar con un espíritu de sacrificio. El servir a otros implica una lucha permanente
con el propio egoísmo. Por tanto, se puede encontrar frente a la dimensión ético-
espiritual de la misión del líder. Se tiene la idea de que el servicio, por implicar
sacrificio, es una acción que no siempre se hace de buena gana, lo anterior es
cierto en un nivel básico, no así en un plano ético y trascendente.
Cuantos más seres humanos sean verdaderos líderes que lleven a cabo acciones
valiosas y de beneficio común, será más sencillo resonar en la demás gente y
será más fácil hacer que la probabilidad de que suceda lo negativo sea cada
vez menor y que dependa de las fuerzas de la naturaleza, no de las propias
decisiones.
Es diferente servir pensando que se hace porque soy menos que otros, a entender
que se sirve porque el otro vale tanto como yo, por ello, decido hacerle el bien.
Visto así, las cosas cambian, definitivamente. El servicio, en este sentido, es el
mejor maestro que se puede tener para aprender a controlar el ego, pero se
debe recalcar que ello no significa renunciar al aprecio, cariño y atención que
se tiene para sí mismo, es más bien madurar y eliminar la visión egocéntrica de
que se es el centro del universo, que todo comienza y finaliza en nosotros.
Cualquiera puede ser servil, pero muy pocos son capaces de servir en forma
madura, pues quien sirve enfrenta el reto de construirse personalmente de
manera tan sólida e integral que sin dudarlo puede derramar su ser en otros
mediante actos voluntarios que implican su desarrollo y crecimiento.
Conclusión
Vivir es crear dos veces.
Albert Camus
Sin embargo, resulta vital para la sobrevivencia en todos los ámbitos que, cada
vez que se piense en el liderazgo, se piense en el servicio y se entienda como
algo en lo que se debe participar, para realizarlo de manera distinta y creativa
para hacer de éste algo que en realidad valga la pena y sea un transformador
social en todos los niveles. Se debe enriquecer el concepto y la vivencia del
liderazgo de servicio, llevarlo a la acción, defenderlo, promoverlo y resignificarlo.
Fuentes de
consulta
• Goleman, D. (2004). El líder resonante crea más. Argentina. Plaza
Janés.