Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Conceptos Básicos
(Primera ficha de lectura)
Resumen
Al hablar de la Historia, en general, son muchas las aristas que se cruzan para formar y documentar a
la misma; llámese historia a los relatos o hechos registrados del pasado que se presentan, estudian y
exponen en la actualidad para mayor comprensión del presente. En este sentido, para delimitar la
historia, específicamente en la comunidad de la Iglesia Católica, esta va unida al mismo tiempo con la
historia de la humanidad y que de alguna forma hace memoria de la Historia de la Salvación, la cual,
tiene como punto de partida la encarnación del Verbo y la posterior efusión del Espíritu Santo el día
de Pentecostés.
De aquí que, para validar los hechos de la Historia de la Iglesia Antigua, es necesario desplegar en dos
dimensiones esta disciplina: en primer lugar la ciencia, ya que ésta investiga y expone, en su nexo
causal, el progreso interno y externo de aquella Comunidad fundada por Cristo y dirigida por el
Espíritu Santo, a fin de hacer partícipes de los frutos de la Redención a todos los hombres. De igual
forma, la segunda dimensión, la teológica, se ocupa de los acontecimientos vividos por la Iglesia a lo
largo de los siglos, tratando de comprenderlos y explicarlos, en la medida de lo posible, mediante el
análisis de sus causas y sus consecuencias.
Por otro lado, cabe destacar la importancia de la Historia de la Iglesia, precisamente porque al hacer
memoria del filósofo Friedrich Hegel, en su Libro “Lecciones sobre la filosofía de la historia
universal”, sobre la misma yace un espíritu que lleva las riendas de la historia 1. De esta manera, al
asemejar la filosofía de la historia con Historia de la Iglesia Antigua, sobre esta, y sobre la historia en
general, su proceder es providencial, es decir, es Dios quien lleva las riendas de la historia y, por lo
tanto, las consecuencias de creer en un Dios cuyo obrar se dirige, en primer lugar, en la creación
donde todo lo que ha creado es hecho a su imagen y semejanza 2.
Así pues, para establecer un criterio objetivo acerca del estudio de la Historia, es necesario en primera
instancia tener claro los conceptos que a lo largo de la misma se han originado y que dan fundamento
a la misma, y que tienen que ver con la relación Dios-humanidad descrita anteriormente. Por
consiguiente, los conceptos a definir son:
Disciplina Histórica La historia es la narración de los sucesos del pasado; generalmente los
de la humanidad, aunque, también puede no estar centrada en el
humano . Asimismo, es una disciplina académica que estudia dichos
acontecimientos
1 Tomás de Aquino, Suma Teológica (1) (Madrid: Biblioteca de Autores Cristianos, 2001) C.93 a.1.
2 Georg Wilhelm, Friedrich Hegel. Lecciones sobre la Filosofía de la Historia Universal (Edición digital:
Epublibre, 2016.) 177.
Historicidad La historicidad es la realidad histórica de personas, y tomar varios
eventos, es decir, la cualidad de ser parte de la historia en lugar de ser
un mito, una leyenda o una ficción histórica.
Análisis histórico Tiene como finalidad establecer proyecciones de los hechos más
significativos y de los que al examinar la evolución pasada y la
proyección futura
Referencia histórica Una reseña histórica, en definitiva, es un texto breve que se propone
repasar los hechos históricos de un determinado asunto. Este tipo de
notas brinda una visión general sobre el objeto reseñado con un formato
descriptivo-informativo.
Epístola Epístola es un sinónimo de carta: un texto cuya función principal es la
comunicación entre el remitente o emisor y el destinatario o receptor.
El uso del término suele implicar un registro culto o un contexto
literario.
Documento Antiguo Los documentos antiguos o históricos son documentos originales que
contienen información histórica importante sobre una persona, un lugar
o un acontecimiento, por lo que pueden servir de fuentes primarias
como ingredientes importantes de la metodología histórica.
De esta manera, al definir los conceptos básicos, surge la importancia del estudio de la Historia de la
Iglesia en campos de la formación sacerdotal; no es favorable para la fe los fieles que el pastor
desconozca los orígenes de la Iglesia, la Iglesia de Cristo. Por ello, es importante el estudio de la
misma dado que responde a uno de los fundamentos de fe del fiel católico, la tradición. Sin la
tradición la piedad popular no existiría y a su vez incluso no existiría la práctica y el fervor religioso
de la Iglesia de Cristo.
Conocer la Iglesia de Cristo, resulta necesario no solo para el creyente, sino también para cualquier
agente que se dedique a iluminar y clarificar los hechos históricos de la humanidad mediante el
estudio y sus intervenciones interdisciplinarias. El venerable Teólogo Mons. Fulton John Sheen,
menciona en su libro titulado “La Vida de Cristo” que es lógico pensar en Jesucristo y su Iglesia, ya
que la historia en sí se demarca en un antes y después de Cristo.