Realidad Problemática – Situación actual:

En medio de la pandemia por la covid-19, están los niños y adolescentes quienes, alejados de
sus escuelas, sin poder disfrutar de los espacios públicos y, viviendo en silencio esta pandemia
que, aunque generalmente, no los enferma físicamente, sí está afectando sus vidas para siempre
es por ello que están en mayor riesgo de presentar algún problema de salud mental pues por la
pandemia hubo cambios significativos en sus conductas y emociones ante ellos es sumamente
importante prevenir y manejar los problemas de salud mental para que logren desarrollar su
potencial completamente.

En el Perú, desde el año 2015, se ha implementado el modelo de servicio educativo Jornada

Escolar Completa (JEC) en 2001 instituciones educativas de nivel secundario con el propósito
de acortar brechas educativas y ampliar oportunidades de aprendizaje; el Ministerio de
Educación, por medio de JEC, amplió el horario de 35 a 45 horas pedagógicas semanales,
distribuyendo las 10 horas en el reforzamiento de áreas sumado a esto también están las
actividades de gestión y capacitación con directivos.

Así mismo la Organización Mundial de la Salud – OMS (2020) estima que alrededor de un 20
% de niños y adolescentes presentan dificultades en su salud mental; sin embargo, no tienen un
diagnóstico o no siguen un tratamiento. El estrés es muy común en la vida cotidiana, puede
tomar diferentes formas según la situación. En la etapa adolescente, generalmente esta
condición se presenta como el estrés originado por la sobrecarga de actividades escolares o
comúnmente denominado estrés académico; ocurre cuando se está resolviendo un examen
difícil, cuando se acerca el fin de curso o año escolar o incluso cuando se tiene que entregar
alguna tarea.

Los estudios revelan que los estudiantes perciben la carga curricular como factor relacionado
con estrés, de no ser tomado como un problema que necesita la atención de las autoridades para
ser prevenido y bajar dichas estadísticas mencionadas anteriormente pueden causar problemas
mentales mucho más graves, teniendo como consecuencia niños y adolescentes que en un futuro
no tendrán una buena estabilidad emocional y mental, no podrán desarrollarse socialmente
teniendo problemas para formar lazos de amistad y compañerismo, no pudiendo trabajar en
equipo habilidad que en estos tiempos es muy importante en diversos ámbitos de nuestra vida.

Es por ello, que pretendemos resaltar algunas de las consecuencias que ha ocasionado la
pandemia por el Covid-19 en la salud mental de la población, a causa del aislamiento social y la
gran cantidad de pérdidas humanas sufridas, además se evidenció el nivel de respuesta resiliente
que ha tomado la población ante la problemática y destacar la importancia de la resiliencia.
Por lo tanto, debido a lo mencionado autores Hjmdal y Hegna (2020), afirman que la resiliencia
tiene una participación como protector ante las situaciones de ansiedad y depresión. De esa
forma se concluye que en las intervenciones originadas en la resiliencia favorecen a la salud
mental de las personas. Asimismo, Moreno (2020) refiere que factores como el fortalecimiento
de la resiliencia puede amortiguar este importante impacto sobre su bienestar ya que la
resiliencia brinda oportunidades para generar un cambio positivo y duradero
frente a los cambios que nos rodean.

Por otra parte, Campuzano y Libien (2019), mencionan que para elevar el nivel de resiliencia es
esencial desarrollar estrategias en los alumnos referentes al apoyo social. Su trabajo llamado
“Resiliencia en estudiantes como herramientas para asegurar la calidad educativa”, concluyó
que se necesitan implementar estrategias en los estudiantes pero que estén orientadas en el
apoyo social de esta forma se incrementa los niveles de resiliencia.