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MANUAL DE

KABBALAH PRÁCTICA
SE FER HA N ESHAMAH

EL PROGRAMA DE VIDA
Y LA INVESTIGACIÓN DEL TIKÚN

Jaime Vílfarrubía
María del Carmen Haut
Dulce María Mí/lera

Escuelas de Misterios Ediciones


Barcelona
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núm. 00/1998/28.721, Sección 1

© Jaime Villarrubia
© María del Carmen Haut
© Dulce María Mi llera

Madrid, octubre de 1998


Sevilla, Getafe, Collado Villa Iba, 2003

Adquiera éste y otros libros publicados a través de:


www.iniciatica.com

ISBN: 978-84-96166-46-2
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COLECCIÓN

KABBALAH CLÁSICA
ÍNDICE GENERAL

Índice de tablas 19
Índice de ilustraciones 23
Índice de láminas en color 27
Presentación 29
Referencias bibliográficas 37
Textos sagrados apócrifos y anónimos
y obras colectivas 43
Diccionarios 44

l. Los métodos de trabajo 45


1. La Kabbalah: breve referencia histórica 47
2. El idioma hebreo, vehículo para la Kabbalah 50
3. El alfabeto hebreo: sus sonidos, sus números,
sus significados, sus formas 51
3.1. El alfabeto hebreo, o alefato: números, sonidos
y significados 52
3.2. Las vocales hebreas 53
3.3. Otras normas de pronunciación 54
3.4. Las formas de las letras hebreas 55
3.5. Diferentes tipos o fuentes de letras hebreas 56
Ejercicios 1 - 13 58
4. Visión secuencial y visión holística 62
5. ¿Verdad o ... mentira? Los criterios LUCIS 63
Ejercicio 14 65
6. Niveles de percepción 66
7. Los métodos de la Kabbalah 67
7.1. Capacidad de permutación: temurá. 67
7.2. Uso de las letras como números: guematria 68
7.3. Uso de los significados simbólicos
de las letras: notarikón 71
8. La Kabbalah a la luz de la Kabbalah 73
9. ¿Rigidez o flexibilidad? 78
10. Propuesta de métodos de trabajo 79
10.1. El trabajo por parejas 79
10.2. Algunos conceptos matemáticos 80
10.3. Aplicación práctica al trabajo cabalístico 82
11. Ejemplo de interpretación cabalística:
El simbolismo de la Estrella de David 85
12. El sentido del trabajo en la Kabbalah 88

11. El Árbol de la Vida 91


l. Determinación y libre albedrío 93
2. El Árbol de la Vida: su estructura 96
3. Símbolos y significados del Árbol de la Vida 110
3.1. Las sefirot 110
3.1.1. La primera sefirá, Keter 112
3.1.2. La segunda sefirá, Jokmah 116
3.1.3. La tercera sefirá, Binah 118
3.1.4. La cuarta sefirá, Jesed 122
3.1.5. La quinta sefirá, Guevurah 125
Ejercicio 15 127
3.1.6. La sexta sefirá, Tiferet 129
3.1.7. La séptima sefirá, Netzaj 134
3.1.8. La octava sefirá, Hod 138
3.1.9. La novena sefirá, Yesod 141
3.1.10. La décima sefirá, Maljut 145
3.1.11. Consideraciones generales sobre las sefirot 150
Ejercicios 16 - 18 155
3.1.12. El papel de Daat, la sefirá oculta 160
La sefirá oculta, DAAT, MVi, Conocimiento 162
3.2. Los senderos subjetivos del Árbol 165
3.3. Correspondencias entre el Árbol de la Vida
y el tarot 168
3.3.1. Las sefirot y el tarot 171
3.3.2. Los senderos subjetivos y el tarot 172
3.3.3. Los palos del tarot y el Árbol de la Vida 174
3.4. Las letras hebreas y sus cambios de posición
en el Árbol de la Vida 175
3.5. Correspondencias entre el Árbol de la Vida
y el Ajedrez 184
3.5.1. Generalidades sobre el juego 184
3.5.2. Simbolismo de los objetivos de la partida 187
3.5.3. Correspondencias en el tablero 187
3.5.4. Correspondencias entre las piezas
y el Árbol de la Vida 188
3.5.5. Polaridades de las sefirot deducidas
de su correspondencia con las piezas 191
3.5.6. Las «direcciones» de los senderos 192
3.6. Los senderos subjetivos,
sus símbolos y significados 195
3.6.1. Sendero O (22). El Loco 197
3.6.2. Sendero l. El Mago 199
3.6.3. Sendero 2. La Sacerdotisa (La Papisa) 200
3.6.4. Sendero 3. La Emperatriz 203
3.6.5. Sendero 4. El Emperador 205
3.6.6. Sendero 5. El Papa
(El Sumo Sacerdote, El Pontífice) 208
3.6.7. Sendero 6. Los Amantes (Los Enamorados) 210
3.6.8. Sendero 7. El Carro 213
3.6.9. Sendero 8. La Justicia 215
Ejercicio 19 218
3.6.10. Sendero 9. El Ermitaño 219
3.6.11. Sendero 10. La Rueda de la Fortuna 221
3.6.12. Sendero 11. La Fuerza 225
3.6.13. Sendero 12. El Colgado 228
3.6.14. Sendero 13 230
3.6.15. Sendero 14. Templanza 233
3.6.16. Sendero 15. El Diablo 235
3.6.17. Sendero 16. La Torre (La Casa de Dios) 239
3.6.18. Sendero 17. La Estrella 241
3.6.19. Sendero 18. La Luna 245
3.6.20. Sendero 19. El Sol 247
3.6.21. Sendero 20. El Juicio 251
3.6.22. Sendero 21. El Mundo • 253
3.6.23. Consideraciones generales sobre
los senderos subjetivos 256
3.7. Las polaridades de los senderos subjetivos 257
3.8. Asociaciones por oposiciones y niveles
de los senderos subjetivos 260
3.9. Senderos subjetivos que más armonizan
con cada sefirá 262
3.10. Correspondencias entre sefirot y entre senderos
subjetivos a través de la Escala de Jacob 264
3.10.1. Correspondencias entre sefirot 265
3.10.2. Correspondencias entre senderos
subjetivos 266
Ejercicio 20 267
3.11. Las Tríadas del Árbol 267
3.11.1. Principios generales 267
3.11.2. Las Tríadas del Árbol y el tarot 275
3.11.2.1. Correspondencias generales 275
3.11.2.2. Correspondencias específicas 275
3.11.3. Las Tríadas estructurales 275
3.11.3.1. Tríada de las Raíces 276
3.11.3.2. Tríada de la Fe 281
Ejercicios 21 y 22 285
3.11.3.3 Tríada de la Ética o Conciencia Moral 289
3.11.3.4. Tríada de la Memoria o del Despertar 293
3.11.3.5. Tríada del Temple de Ánimo 297
3.11.3.6. Tríada de la Inserción en el Mundo 302
3.11.4. Las Tríadas activas 305
3.11.4.1. Tríada de la Mística 306
3.11.4.2. Tríada de la Innovación 309
3.11.4.3. Tríada de los Deseos 313
3.11.4.4. Tríada del Impulso 318
3.11.4.5. Tríada de la Iniciativa 321
3.11.5. Las Tríadas pasivas 325
3.11.5.1. Tríada de la Ascética 325
3.11.5.2. Tríada de la Conservación 329
3.11.5.3. Tríada de los Miedos 333
3.11.5.4. Tríada de la Intuición 338
3.11.5.5. Tríada de la Lógica 341
Ejercicios 23 a 33 346
3.11.6. Consideraciones generales sobre las Triadas 347
3.11 .7. Correspondencias entre Tríadas
a través de la Escala de Jacob 348
3.12. Los genios de la Kabbalah 348
Ejercicio 34 349
3.13. Correspondencias de los genios de la Kabbalah
con las Tríadas del Árbol de la Vida
y los arcanos menores del tarot 378
3.13.1. Condiciones previas para
las correspondencias 378
3.13.2. Desarrollo de las atribuciones 380
Tríadas estructurales 380
Tríadas activas 390
Tríadas pasivas 401
3.14. Los ángeles regentes de los cuatro elementos 415
3.15. La danza de los siete velos 416
4. Correspondencias entre la Kabbalah y otros sistemas 421
111. El Árbol de la Vida Personal: Procedimientos
para levantarlo 427
l. El experimento de Alain Aspect 429
2. El programa de vida: sus elementos 432
3. El idioma nativo y la selección de alfabeto 437
4. Normas para la toma de datos 441
5. Las familias de números 443
Los números ocultos 447
6. Los bloques y su desarrollo 448
6.1. Indicaciones previas 449
6.1.1. Actitud 449
6.1.2. Condiciones operativas 450
6.2. Datos y cálculo de los bloques 1, 2 y 3
(nombre y apellidos) 452
6.3. Datos y cálculo de los bloques 4 y 5
(día y mes de nacimiento) 455
6.4. Datos y cálculo del bloque 6
(año de nacimiento) 455
6.5. Cálculo del Bloque 7
(combinado de nombre y apellidos) 455
6.6. Cálculo del Bloque 8
(combinado de fecha de nacimiento) 456
6.7. Cálculo del Bloque 9 (combinado de los bloques 7 y 8) 457
6.8. Cálculo del Bloque 10 (combinado de los bloques 1 y 2) 458
6.9. Cálculo del Bloque 11 (combinado de los bloques 2 y 3) 458.
6.10. Cálculo del Bloque 12 (combinado de los bloques 4 y 5) 459
6.11. Cálculo del Bloque 13 (combinado de los bloques 5 y 6) 460
6.12. Cálculo del Bloque A (combinado de
los bloques 10 y 11) 460
6.13. Cálculo del Bloque B
(combinado de los bloques 12 y 13) 461
6.14. Cálculo del Bloque C (combinado de los
bloques A y B) 462
6.15. Cálculo del acento 462
Ejercicio 35 463
7. Los diferentes tipos de líneas en función de
su bloque de procedencia 464
8. Procedimiento para dibujar el Árbol nativo 466
Ejercicio 36 468
9. Los ciclos cortos y largos: duraciones máximos y mínimos 469
Ejercicio 37 472
10. «Crisis» y «anticrisis» 474
Tablas de crisis y anticrisis de los ciclos simples 477
11. Los promedios del Árbol 495
11.1. Promedio general 495
11.2. Desviación media 496
11.3. Sefirot fuera del rango normal 497
11.4. Promedios y saldos positivos y negativos
por elementos 498
11.5. Promedio por pilares 499
11.6. Equilibrio o desequilibrio
en las cinco dimensiones del Árbol 499
12. Búsqueda del signo oculto en el Árbol 500
13. Las configuraciones incómodas o especiales 501
14. Búsqueda de los tres genios personales 505
Ejercicio 38 508

IV. La interpretación del Árbol personal 519


l. Consideraciones previas 521
2. Acerca del nombre y del tiempo .527
3. El Programa de Vida 530
4. «Sosegar la casa» (= conocer, limpiar,
equilibrar el «programa de vida») 532
5. Los diferentes tipos de líneas en los senderos
subjetivos y su significado 537
6. Secuencia recomendada para la interpretación 539
7. Configuraciones especiales o «incómodas» 543
8. Senderos con cargas normales y senderos
con cargas especiales 570
8.1. Senderos con cargas especiales por sobrecarga 583
8.2. Senderos con cargas especiales por líneas ocultas 596
8.3. Senderos con cargas especiales por líneas áclicas 602
8.4. Senderos con cargas especiales por doctorados 606
8.5. Los senderos semilla y su trabajo 608
8.6. Senderos subjetivos agrupados por afinidades 613
8.7. Significado del acento 621
9. Flujos principales y secundarios de energía 623
10. Bloqueos y tensiones en los puntos de cruce 626
11. Sefirot fuertes y débiles 635
12. Equilibrios y desequilibrios del Árbol 644
12.1. Carga media comparativa por pilares 644
12.2. Balance energético de elementos 645
12.3. Los cinco ejes polares del Árbol según el Sefer Yetzira 649
12.4. Relaciones polares de los senderos subjetivos
y las sefirot 652
13. La desviación media, d, y su significado 657
14. Tríadas completas e incompletas.
Modificaciones en el carácter expansivo, equilibrador
o aglutinante de las Tríadas del Árbol personal 660
15. Las oposiciones polares de las Triadas y sus bloqueos 664
Ejercicios 39 a 42 671
16. Los Árboles especiales 672
16.1. Los Árboles especiales: introducción 672
16.2. Perfil de un posible drogadicto, deducido del análisis
del Árbol de la Vida individual 675
16.3. La esquizofrenia a la luz de la Kabbalah. La relación
entre esquizofrenia y droga 685
16.4. Efectos de las substancias psicotrópicas 686
16.5. Posibles aportaciones de la Kabbalah. El análisis
del Árbol individual en relación con la medicina
y la psicología 690
16.6. Posibles soluciones 695
16.7. Ejemplos reales de Árboles de drogadictos 697

V. La búsqueda del tikún 721


l. Hay otros universos, pero están (quizá) en éste 723
2. Todo se expresa mediante Tríadas 725
Ejercicios 43 y 44 727
3. Poesía para meditar 730
4. Los juegos iniciáticos 750
5. Los números de la espiral iniciática y sus significados 752
6. Los números de la gran pirámide 756
6.1. El número de oro y la gran pirámide 757
6.2. El cosmos, la vida y el número de oro 759
7. El cosmos y la vida a la luz de la Kabbalah 763
8. Vida y muerte a la luz de la Kabbalah 768
Ejercicio 45 777
9. El camino hacia el nombre y el tiempo verdaderos 778
10. Las fases de la investigación del tikún 780
10.1. Fase l. Búsqueda de los números verdaderos
del nombre, apellidos y fecha de nacimiento 781
10.2. Fase 2. Búsqueda de las letras hebreas
y en su caso árabes 785
10.3. Fase 3. Letras solares y letras lunares 788
10.4. Fase 4. Colores, cualidades y conceptos
significativos 791
10.5. Fase 5. Ángeles del tikún 804
10.6. Fase 6. «Mapa» de ángeles 809
10.7. El método de las «matrioshkas» 814
10.8. Métodos auxiliares de búsqueda 817
10.8.1. Los números de las vocales del nombre
y apellidos 817
10.8.2. Análisis de senderos con cargas especiales
en relación con el Sefer Yetzirah 818
10.8.3. Análisis de los senderos ocupados
por líneas sociales 819
10.8.4.. El Árbol vocálico, o la «trama del tapiz» 819
11. El tikún, o misión a cumplir en la vida 821
12. Acerca del desapego 823
13. El sentido del trabajo en la Kabbalah a la luz del tikún 824
Ejercicios 45 y 46 828
Salmo 91 y suras 112, 113 y 114 del Corán 829
14. Los procesos de identificación 831
Ejercicios 47 y 48 835
VI. El centro del Centro 837
1. El gusano que no sabía gusanear 839
2. La cárcel y sus muros 842
2.1. Una pregunta: ¿por qué Dios es invisible? 843
2.2. Propuesta de reflexión:
un tiempo verdaderamente extraño 844
2.3. Un ejercicio sencillo: ¿Recuerdas cuando supiste
tu nombre por primera vez? 850
3. ¿Quién soy cuando salgo de la cárcel? 851
«Nada hay aparte de Allah,
y Su manifestación es puro gozo» 854
Ejercicio 49 857
Ejercicio 50 858
4. Los nombres, los tiempos, los dioses 859
5. El Árbol personal y el tikún a la luz de «sin nombre»
La purificación previa 863
5.1. El trabajo en el Pilar del Centro 865
Ejercicio 51 869
5.2. Piedras marinas 870
Ejercicio 52 874
5.3. El campo de tiempo 874
Ejercicio 53 876
5.3.1. Los colores y sus significados: utilización
para limpieza del aura 877
5.3.2. Trabajo directo sobre el campo de tiempo 878
6. Actualización del Árbol personal 881
6.1. Actualización con el tarot. El juego de la Frontera 881
6.2. El I-Ching y la Kabbalah 885
6.2.1. La actualización del Árbol nativo
mediante el I-Ching 886
6.2.2. Actualización del tikún 890
6.3. El Rocío 894
7. Recuperar la memoria 895
Q~if ~
8. El Retorno 905
9. Propuestas para debate 908

Apéndice l. Glosario de voces y expresiones hebreas 911


Apéndice 2. Propuesta para desarrollo en hoja de cálculo
de datos y gráficos de ciclos combinados. 935
Apéndice 3. Sugerencias de uso del Juego del Rocío 947
ÍNDICE DE TABLAS

I El alfabeto hebreo, o alefato: números,


sonidos y significados 52
II Las vocales hebreas 53
III Otras normas de pronunciación 54
IV Las formas de las letras hebreas 55
V Diferentes fuentes o tipos de letras hebreas 56
VI Niveles de percepción 66
VII Los cinco ejes polares del Árbol de la Vida 152
vm Clasificación de las letras hebreas 166
IX Correspondencias de las sefirot con el tarot 172
X Correspondencias de los senderos subjetivos y el tarot 172
XI Correspondencia de los palos del tarot con el Árbol
de la Vida 173
XII Simbolismo de la partida de ajedrez 187
XIII Correspondencias del Árbol de la Vida y el ajedrez 188
XIV Correspondencias del Árbol de la Vida y los trebejos
(piezas del ajedrez) 190
XV Polaridades de las sefirot 191
XVI Direcciones de los senderos subjetivos 193
XVII Correspondencia general de las Tríadas básicas 274
XVIII Correspondencias específicas de las Tríadas 277
XIX Cuadro para la búsqueda rápida de cada genio
asociado a su correspondiente Tríada 413
XX Las Tríadas con sus genios 414
XXI Ángeles regentes 415
XXII Diferentes alfabetos y sus valores numéricos 439
XXIII Combinaciones de familias de números 446
XXIV Máximos, medios y mínimos en senderos variables 470
XXV Valores de los ciclos cortos 478
XXVI Valores de los ciclos largos 487
XXVII Horas medias de salida del sol en España
cada día del año 509
XXVIII Diferencias horarias en España respecto
al meridiano de Greenwich 510
XXIX Conversión de la hora legal a la hora solar en España 511
XXX Los genios del Árbol de la Vida 514
XXXI Polaridades de los senderos subjetivos 654
XXXII Polaridades de las sefirot 655
XXXIII Carácter expansivo o restrictivo de los senderos 662
XXXIV Las fases de la vida a la luz de la Kabbalah 770
XXXV Conversión de los datos originales de nombres
y apellidos 782
XXXVI Conversión de los datos del día de nacimiento 783
XXXVII Conversión de los datos del mes de nacimiento 783
XXXVIII Conversión de los datos del año de nacimiento 784
XXXIX Alfabetos hebreo y árabe: valores numéricos
y simbólicos 786
XL Letras solares y lunares 790
XLI Colores, cualidades y conceptos significativos
según fórmula personal 792
XLII Conceptos derivados de la fórmula personal. Conj. A 794
XLIII Id. id. id. id. Conj. B 795
XLIV Id. id. id. id . Conj. C 796
XLV Id. id. id. id. Conj. D 797
XLVI Id. id. id. id. Conj. E 798
XLVII Id. id. id. id. Conj. F 799
XLVIIIId. Id. id. id. id. Conj. G 800
XLIX Id. id. id. id. Conj. H 801
L Conceptos derivados de la fórmula personal. Conj. I 802
LI Id. id. id. id. Conj. J 803
LII Genios de la Kabbalah en el tikún 806
LIII Los cambios de posición de las letras hebreas 819
LIV Algunos acontecimientos históricos de
«La Esquina del Tiempo» 845
LV Los mantrams del vacío 858
LVI Los doce colores esenciales más el blanco y el negro,
nombres hebreos y significados 877
LVII Limpieza de los seis polos del campo de tiempo 880
LVIII Clave para localizar los hexagramas del I-Ching 889
,,
INDICE DE ILUSTRACIONES

1 La Estrella de David y su significado simbólico 85


2 Esquema del Árbol de la Vida en su versión clásica 97
3 Los 32 senderos según el Ari 99
4 Los 32 senderos según el Gra 100
5 Los 32 senderos según el Gra, en el diseño de la edición
del Sefer Yetzirah de 1884 hecho en Varsovia 101
6 Diagrama que representa la primera manifestación
según la Kabbalah 102
7 Estructura básica del Árbol de la Vida 103
8 El Rayo Relampagueante, también llamado
Descenso del Poder 106
9 La Escala de Jacob 109
10 Modelo de partición de hoja para dibujar
el Árbol de la Vida 156
11 Los campos externos del Árbol de la Vida 157
12 Los tres niveles del Árbol de la Vida 158
13 Los 5 ejes polares del Árbol de la Vida 159
14 La shemá, profesión de fe básica del judaísmo 161
15 Atribución de las letras hebreas a los senderos
del Árbol según el Sefer Yetzirah 170
16 Atribución de las letras hebreas a los senderos del Árbol
según el tarot 170
17 Los Arcanos Mayores del tarot y su correspondencia
con el Árbol 171
18 Correspondencias entre el Árbol de la Vida y el ajedrez 189
19 Direcciones de los senderos subjetivos según
su correspondencia con el ajedrez 195
20 Las letras iod-he-vav en escritura asurí 202
21 Pasaje del Libro de Zacarías (6: 4), considerado símbolo
del equilibrio espiritual 217
22 Las letras sobrantes de Jesed y Netzaj, y sus conexiones 223
23 Las letras sobrantes de Guevurah y Tiferet (excluidas
las auxiliares o serviles, y la repetida i) 226
24 Comparación de formas entre la he y la jet 236
25 Las sefirot con sus nombres hebreos, formando el Grial 238
26 El trigrama Li, del 1-Ching, comparado con el nombre
hebreo del Sol 250
27 Las seis Tríadas estructurales 271
28 Las cinco Tríadas activas y las cinco Tríadas pasivas 271
29 Las Tríadas del Árbol de la Vida clasificadas por palos
del tarot 272
30 Las Tríadas del Árbol de la Vida clasificadas
por figuras del tarot 273
31 Familia carnal y familia espiritual 286
32 Simbolismo de la Danza de los 7 velos 423
33 Correspondencia de la Kabbalah con otros sistemas 425
34 El experimento de Alain Aspect 431
35 Modelo de hoja de toma de datos 451
36 Tipos de líneas a emplear según bloque del que
procedan sus números 465
37 Plantilla para montar el Árbol de la Vida personal 467
38 Modelo de plantilla para cálculo de magnitudes
y promedios del Árbol 471
39 Curva de desarrollo de un ciclo 473
40 Ejemplo de gráfico de ciclo combinado: sendero de 1 línea 475
41 Ej. de gráfico de ciclo combinado: sendero de 2 líneas 475
42 Ej. de gráfico de ciclo combinado: sendero de 3 líneas 475
43 Ej. de gráfico de ciclo combinado: sendero de 4 líneas 475
44 Ejemplo de «puntos fuertes» de un Árbol personal 500
45 Configuraciones incómodas o especiales (1) 503
46 Configuraciones incómodas o especiales (2) 503
47 Configuraciones incómodas o especiales (3) 503
48 Configuraciones incómodas o especiales (4) 503
49 Ejemplo de flujos de energía principales y secundarios (1) 625
50 Ejemplo de flujos de energía principales y secundarios (2) 625
51 Colocación de las letras finales en los cinco puntos de
cruce del Árbol de la Vida 634
52 Equilibrios y desequilibrios en los cinco ejes polares
del Árbol de la Vida 651
53 Representación esquemática del aumento de
la frecuencia vibratoria (disminución de la amplitud)
a lo largo de la evolución 657
54 Carácter aglutinante, neutro o expansivo de los senderos 663
55 Casos reales: Árbol personal de drogadicto
y/ o esquizofrénico (1) 699
56 Id. id. id. id. id. id. (2) 701
57 Id. id. id. id. id. id. (3) 703
58 Id. id. id. id. id. id. (4) 705
59 Id. id. id. id. id. id. (5) 707
60 Id. id. id. id. id. Id. (6) 709
61 Id. id. id. id. id. id. (7) 711
62 Id. id. id. id. id. id. (8) 713
63 Id. id. id. id. id. id. (9) 715
64 Id. id. id. id. id. Id. (10) 717
65 Id. id. id. id. id. id. (11) 719
66 Triángulo que simboliza la manifestación 728
67 Los «fundamentos del Universo» según un comentario
rabínico al Talmud 729
68 Ideogramas japoneses de los tres fundamentos del shinto 729
69 Restos arqueológicos de la sinagoga de Cafarnaum 731
70 La espiral iniciática 752
71 Cálculo de la relación de superficies entre la base
y las caras externas de la pirámide 759
72 El cosmos y la vida («Hay una intrincada red de relaciones ... ») 761
73 El triángulo de la manifestación dividido
en 100 pequeños triángulos 793
74 Plantilla para levantar el «mapa de ángeles» 811
75 Caso real de un «mapa de ángeles» 812
76 Diagrama que muestra la esencia cabalística del tikún 825
77 Procesos de indentificación 833
78 Desarrollo cabalístico a partir del número 91 834
79 Esquema general del fenómeno de
«La Esquina del Tiempo» 849
80 La raíz del problema 853
81 Diagrama que muestra el análisis cabalístico del
Tetragrama en relación con el tiempo, el nombre
y la experiencia resultante de «quitárselo» 862
82 Esquema del trabajo en el Pilar del Centro 869
83 Esquema general del campo de tiempo 876
84 Esquema de la tirada de 9 cartas del Juego de la Frontera 885
85 Actualización del Árbol de la Vida mediante el I-Clúng 890
86 Actualización del tikún mediante el I-Ching 892
87 El pie y la cabeza 893
LÁMINAS EN COLOR
(En cuadernillo adjunto)

Lámina I. Colores correspondientes a los bloques derivados


de la fórmula personal
Lámina II. Esquema de colores para autosanación
Lámina III. Disposición de los colores para autosanación según
la Estrella de David
Láminas IV a Xill. Juego del Rocío
PRESENTACIÓN

Acerca del presente libro:

Esta obra que ofrecemos es fruto de un trabajo de investigación


que nos ha dejado abundante material a lo largo de veinte años,
durante los cuales se han impartido muchos cursos y se han rea-
lizado centenares de sesiones privadas con consultantes. Durante
este tiempo, y como consecuencia tanto de nuestras investigacio-
nes como de las valiosas aportaciones de los alumnos, los plantea-
mientos iniciales se h an desarrollado notablemente.
La Kabbalah ha sido tradicionalmente una actividad masculina.
Era impensable, sobre todo en el marco del judaísmo, que una mu-
jer pretendiese siquiera entrar en contacto con la sabiduría secreta,
que es otro nombre que recibe la Kabbalah. Así pues, esta obra
es profundamente innovadora dentro de la tradición cabalística,
y, hasta cierto punto, heterodoxa, dado que entre los autores de
la misma hay mayoría femenina. El método que proponemos re-
quiere un acercamiento a los principios cabalísticos, no sólo des-
de la razón, sino sobre todo desde la intuición, y de la aplicación
práctica de este fundamento ha nacido este libro. La Kabbalah, y
sobre todo, la Kabbalah aplicada, como llamamos al método que
proponemos aquí, combina perfectamente el rigor científico yana-
lítico con la espiritualidad y la intuición. Según manifiesta una de
las autoras, que posee un grado de extremo refinamiento en la in-

M ANUAL DE KABB/\LAH PRÁCTICA 29


terpretación de árboles, cuando se enfrenta a un Árbol de la Vida
nativo, éste le habla y le cuenta los secretos más íntimos de sus
consultantes.
La práctica que aquí se ofrece permite efectuar un diagnóstico
muy afinado de problemas de todo tipo (físicos, emocionales, psi-
cológicos, etc.), y su aplicación a terapias alternativas está abrien-
do un campo amplio y profundo que está llevando la Kabbalah a
ser considerada una herramienta útil y eficaz al servicio de la me-
dicina, tanto tradicional como alternativa y de la psicología. Uno
de los aspectos quizá más valiosos es la posibilidad de detectar
a priori una disposición nativa a las adicciones, especialmente a
la drogadicción, así como a sufrir determinadas enfermedades y
trastornos psicológicos, siendo de gran utilidad para ayudar a los
terapeutas y asistentes sociales a diagnosticar y prevenir proble-
mas mucho antes de que se presenten. Todo ello, además, viene
avalado por una experiencia de años en el análisis de los perfiles
de centenares de personas, que, bien como alumnos, bien como
seres en busca de ayuda o de respuesta a problemas existenciales,
nos han aportado sus datos y han compartido con nosotros los
resultados obtenidos. Por ello, nuestra experiencia en estas tareas
a lo largo de todo este tiempo ha permitido descubrimientos que
han sido fundamentales para la elaboración de la presente obra.
Además, los alumnos de nuestros cursos han hecho y siguen
haciendo aportaciones, algunas pequeñas, otras de gran calado,
pero siempre válidas e interesantes. Algunos de ellos imparten ya
sus propios cursos de forma muy creativa, abriendo nuevas líneas
de investigación que cubren diversos campos, lo cual es para no-
sotros un motivo de orgullo y satisfacción. Por eso m ismo, las opi-
niones que se transmiten en esta obra no deben en ningún caso
considerarse como definitivas, sino como algo abierto y en con-
tinua evolución, sujeto incluso a que, por la aparición de nueva
información que contradiga la anterior, se alteren radicalmente los
planteamientos actuales.
Sería injusto por nuestra parte citar a algunos y no a otros, por lo
que preferimos extender nuestro reconocimiento a todos por igual
sin mencionar específicamente a ninguno de ellos. Estas aportacio-
nes muestran que en España la Kabbalah está renaciendo de forma

30 V11. LARRUBIA / HAUT / MILLERA


pujante, lo que no es de sorprender en un país en que floreció el
gran movimiento cabalístico de la Edad Media, hasta que las in-
tolerancias políticas y religiosas expulsaron a nuestros hermanos
hebreos de ,,10 (Sefarad), su segunda patria y segundo paraíso,
Oii~ (Pardés). Si esta obra contribuye a que este interés perdure y
se acreciente, sentiremos que estamos cumpliendo nuestro propio
tikún.
Por la densidad de su contenido, esta obra es un libro de texto en
el que se encuentra toda la información en materia de Kabbalah de la
que disponemos hasta el momento. No nos guardamos nada. Todo
lo que hemos recibido, madurado y comprobado, todo lo que nos ha
sido especialmente útil tanto a nosotros como a aquellos a quienes se lo
hemos transmitido mediante nuestros cursos o consultas, se encuentra
reflejado aquí, con la ilusión de que ayude a adquirir a quien se aden-
tre en el arduo estudio de la Kabbalah conocimiento y comprensión
de sí mismo y del universo que le rodea.
La presente obra está dividida en secciones, correspondiendo
cada una de ellas, de forma aproximada, a unidades didácticas.
Algunas de estas secciones contienen diversos ejercicios prácticos
que se recomienda realizar, bien en soledad, bien por parejas, tal
como se muestra en la parte I del libro. Cuando se cita en sentido
genérico a las esferas del Árbol de la Vida, se emplean indistinta-
mente las denominaciones española y hebrea, para familiarizar al
estudiante con el lenguaje. Las palabras hebreas se acompañan en
todo caso de su pronunciación castellana más aproximada y de su
traducción, y de ellas se ha incluido un glosario al final del mismo.
A veces aparecen conceptos que se repiten en varias secciones, lo
que obedece al tipo de enseñanza apropiado para la Kabbalah, que
debe ser «elíptico», y no lineal, volviendo cuando sea necesario al
mismo concepto para abordarlo desde diferentes puntos de vista.
Quizás extrañe al lector que, junto a capítulos de índole estricta-
mente cabalística, científica o psicológica, aparezcan otros de índo-
le poética o narrativa: todos ellos forman parte de un corpus orien-
tado a ofrecer al estudiante de Kabbalah, no sólo una herramienta
de trabajo, sino también, y lo que es más importante, una filosofía
de fondo, no siempre fácil de exponer de forma directa y explícita.
Ta!fl-poco debe sorprender que, junto a referencias a las Escrituras

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 31


del Antiguo o del Nuevo Testamento, aparezcan otras relativas a
diferentes tradiciones, especialmente taoístas o islámicas. En nues-
tra opinión, ha llegado el momento de dejar de lado los dogmas,
las diferencias doctrinales que han servido para mantener el status
de las castas sacerdotales, pero como la historia ha demostrado
hasta la saciedad, también han sido fuente de sufrimientos y ho-
rrores, impartidos y repartidos en nombre de Dios y de la verdad
que cada uno ha pretendido detentar y administrar en exclusiva.
En lugar de eso, hemos preferido beber de cualquier fuente en la
que, desde nuestro punto de vista, hemos encontrado la esencia
común, independientemente de la cultura, y por lo tanto, atisbos
útiles de verdad.
No existe bibliografía específica ·que se refiera al método que
aquí se propone, dado que es fruto de un trabajo original y nove-
doso que, como hemos dicho, no puede considerarse terminado.
Sí la hay, y abundante, respecto al simbolismo y métodos de la
Kabbalah. Por lo que se recoge al principio del libro una amplia
referencia bibliográfica de autores y títulos de muy diversos temas
y estilos, con cuya lectura podrá, tal vez, alcanzarse un «punto»
de comprensión indirecta del planteamiento general del curso me-
diante aproximaciones sucesivas. Por desgracia, algunas de esas
obras se encuentran agotadas, aunque quizá sea posible su adqui-
sición en librerías de viejo. La bibliografía recoge tanto obras que
tratan específicamente de la Kabbalah, como otras muchas que,
o bien proceden de muy diferentes tradiciones (cristianismo, isla-
mismo, hinduismo, taoísmo ... ), o bien tratan temas de psicología,
sobre todo transpersonal. Hay además un buen número de autores
que escriben sobre espiritualidad, y cuya lectura resulta particular-
mente recomendada. También se citan obras de tipo científico, así
como algunas de pura ficción, sin que falte, por supuesto, la poe-
sía. Quizá también sorprenda que se mencionen diversos mazos
de tarot cuyo simbolismo, como se podrá comprobar, tiene profun-
das conexiones cabalísticas. Todas ellas han contribuido en mayor
o menor medida a conformar el corpus de este libro. Admitimos
que es tarea ardua la lectura de todos los títulos mencionados, por
lo que deben considerarse como sugerencias que necesitarán de la
intuición y de las preferencias de cada cual a la hora de elegir.

32 V iLLARRUB IA / H AUT / M ILLER/\


Creemos que es útil agrupar todos los índices y las referencias
bibliográficas al principio de la obra, para facilitar la tarea de con-
sulta a los estudiantes.

Con respecto a la Kabbalah:

La Kabbalah es ante todo una tradición que viene de tiempos re-


motos. Como tal, su contenido es, entre otras cosas y en sintonía
con otras tradiciones milenarias, una herramienta de autoconoci-
miento y desarrollo personal, que debe ir acompañada de una filo-
sofía de fondo en la cual coinciden en esencia más o menos todas
las tradiciones.
Más de un lector habrá constatado que al comienzo de cual-
quier camino de iniciación, bien sea mediante la práctica del zen,
el yoga, el estudio de la Kabbalah, la astrología, o de terapias
alternativas, disciplinas en las cuales se buscan respuestas que
nos orienten y enriquezcan tanto a nivel personal como espiri-
tual, se empiezan a producir cambios dentro de uno mismo que
se proyectan también en el entorno. Cada vez que algo nos lleva
a ser más nosotros mismos, nos expresamos de forma distinta,
elegimos otras opciones, dejamos de movernos por inercia, y nos
movemos por conocimiento de lo que somos. Y parte de nues-
tro entorno se transforma al atrevernos a ser nosotros mismos:
otras actividades, otros amigos, otras relaciones, otros trabajos ...
El cambio es algo normal y necesario, pero a veces se hace difícil,
y parece que todo se nos pone literalmente patas arriba. Sólo se
va lo que ya no necesitamos. Y a veces el cambio resulta espec-
tacular. En realidad, el objetivo de la Kabbalah o cualquier otra
disciplina de autoconocimiento es sacar a la luz problemas sin
resolver que habían quedado encerrados en el cuarto de las ratas,
el subconsciente.
Sin embargo, no debe considerarse a la Kabbalah como un rece-
tario mágico para resolver problemas. Todo aquello que se resuelva
será consecuencia del proceso de cambio interno que la práctica de
cualquier disciplina de crecimiento personal, incluida la Kabbalah,
produce. Y el milagro vendrá de aceptar el reto de querer ser quien

M ANUAL DE KABBALAI I PRÁCTICA 33


nos energía para ser logrados. A esta edad se está mejor preparado
para recibir y asimilar información referente a uno mismo, y para
comprender el programa de vida y el tikún a realizar.
Las materias que se proponen en el presente libro de texto, aun-
que basadas en la tradición cabalística, son, según queda apunta-
do, nuevas en muchos sentidos. Constituyen un corpus en desarro-
llo, ya que en la actualidad existen varias líneas de investigación
abiertas que, en un futuro, permitirán ampliar conocimientos.
El desarrollo de la Kabbalah siempre ha sido y sigue siendo una
tarea colectiva. Los autores estamos en contacto con diversos ex-
pertos y estudiosos en campos determinados, a los que animamos
para que se pongan a trabajar, y a escribir sobre sus descubrimien-
tos, lo que alguno de ellos ya ha comenzado a hacer. De hecho,
lo deseable sería que la presente obra «Kabbalah Aplicada» pue-
da servir de base a otros para la apertura y desarrollo de nuevos
campos, y contribuya a divulgar el estudio de esta ciencia sagrada
(llamada también la Sabiduría Secreta), dentro de la necesaria pro-
fundidad que esta materia requiere, y que hemos reflejado en todo
momento. Nos gustaría saber que lo hemos conseguido.

Jaime Villarrubia
María del Carmen Haut
Dulce María Millera

Madrid, Getafe, Sevilla, Collado Villalba


octubre de 1998 - septiembre de 2004

36 VII.LAR RUBIA / H AUT / MILLERA


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«Bardo Thodol (Libro Tibetano de los Muertos)». Visión Libros, 1979.
«El Corán». Traducción y comentarios de Juan B. Bergua. Tesoro
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«El Corán». Prólogo y traducción de J. Vernet. Editorial Óptima, 2000.
«El Evangelio del Tao (del Libro Sagrado Tao te Ching)». Editorial
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«El Libro de la Claridad (Sefer ha-Bahir)». Introducción, traducción y
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Swan, 1989.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 43


«La vía del peregrino». Edaf, 1993.
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«Los Apócrifos y otros textos prohibidos». Rea, 1986.
«Nuevo Pacto». (Ed. bilingüe hebreo-castellano del Nuevo Testamento).
Sociedad para la distribución de las Escrituras en lenguaje hebráico.
Middlesex HA87LF, Gran Bretaña.
«Sagrada Biblia». Versión de Eloíno Nácar Fuster y Alberto Colunga, O. P.
Biblioteca de Autores Cristianos, 1960.
«Sefer Yetzirah. El Libro de la Formación». Ed. bilingüe hebreo-español.
(Versión de Isidor Kalish). Edaf, 1993.
«The Jews. A treasury of art and literature» (en inglés). Recopilación de
estampas y textos judíos de todas las épocas. Editado por Sharon R.
Keller. Hugh Lauter Levin Associates, Inc. New York, 1992.
«Upanishads: Isa, Kaivalya, Sarvasara, Amrtabindu, Atharvasira».
(Versión y comentarios de Raphael)- Editorial Edaf, 1993.

0 ICCIONARIOS

Comay, A., Yarden, D .: «Diccionario Español-Hebreo, Hebreo-Español».


E. Achasiaf Ltda. Tel-Aviv, 1981.
Corriente, F.: «Diccionario Árabe-Español, Español-Árabe». Instituto
Hispano-Árabe de Cultura, 1984.
Pabón S. de Urbina, José M.: «Diccionario manual Griego-Español».
Bibliograf, S. A., 1997 (Diccionarios Vox).
Targarona Borrás, Judit: «Diccionario Hebreo / Español». Ríopiedras,
1995.
Villarrubia, Jaime: «Diccionario Numérico Cabalístico Hebreo-Castellano».
Escuelas de Misterios Ediciones, 2004.
1 Los MÉTODOS DE TRABAJO
«La vía del peregrino». Edaf 1993.
«Libro Egipcio de los Muertos». Edicomunicación, 1984.
«Libro de los Salmos». (Bilingüe hebreo-castellano). Sinai Publishing,
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«Los Apócrifos y otros textos prohibidos». Rea, 1986.
«Nuevo Pacto». (Ed. bilingüe hebreo-castellano del Nuevo Testamento).
Sociedad para la distribución de las Escrituras en lenguaje hebráico.
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estampas y textos judíos de todas las épocas. Editado por Sharon R.
Keller. Hugh Lauter Levin Assodates, lnc. New York, 1992.
«Upanishads: Isa, Kaivalya, Sarvasara, Amrtabindu, Atharvasira».
(Versión y comentarios de Raphael)- Editorial Edaf, 1993.

DICCIONARIOS

Comay, A., Yarden, D.: «Diccionario Español-Hebreo, Hebreo-Español».


E. Achasiaf Ltda. Tel-Aviv, 1981.
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Hispano-Árabe de Cultura, 1984.
Pabón S. de Urbina, José M.: «Diccionario manual Griego-Español».
Bibliograf S. A., 1997 (Diccionarios Vox).
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1995.
Villarrubia, Jaime: «Diccionario Numérico Cabalístico Hebreo-Castellano».
Escuelas de Misterios Ediciones, 2004.
1 Los MÉTODOS DE TRABAJO
1. LA KABBALAH: BREVE REFERENCIA HISTÓRICA

L a Kabbalah tiene su origen en el judaísmo. Al principio, se tra-


ta de un sistema que permite hacer una interpretación mística
y, según ciertos autores, también alegórica del Antiguo Testamento.
De este sistema deriva un conjunto de ideas de tipo teosófico, que bus-
can descubrir las doctrinas secretas escondidas de forma cifrada en
la Biblia, doctrinas que buscan el conocimiento de la naturaleza de
Dios y del mundo a través de diferentes métodos esotéricos de inter-
pretación, que en un principio se transmitían sólo entre iniciados.
Las tendencias místicas y esotéricas surgieron en el pueblo ju-
dío a partir de los primeros siglos de nuestra era, aunque muchas
tradiciones las remontan a Moisés, e incluso a Abraham. Conocida
como sabiduría secreta (Jokmah nistarah), la Kabbalah fue durante
muchos siglos transmitida de forma oral, si bien que en el siglo I de
nuestra era ya hay referencias al texto cabalístico más misterioso,
el Sefer Yetzirah («Libro de la FormacióN», ver sección de referen-
cias bibliográficas), e incluso se llega a afirmar que ya se conocía en
tiempos bíblicos. Es, sin embargo, a partir del siglo XII cuando la
Kabbalah se desarrolla, particularmente en Provenza, y poco des-
pués en Cataluña (escuela de Girona) y en el resto de la Península
Ibérica, extendiéndose posteriormente al resto del mundo judío.
La obra más representativa de esta primera etapa de la Kabbalah
es el Sefer ha-Bahir («Libro del esplendor», ver referencias biblío-

MANUAL DE KABl3ALAI-I PRÁCTICA 47


gráficas). De esa época son Yitzak el Ciego y sus discípulos Ezra
ben Shlomó y Azriel, que forman en Girona el primer círculo mís-
tico de la península. Otros miembros de la comunidad de esta ciu-
dad catalana, relacionados de alguna forma con el grupo anterior,
son Abraham ben Isaac, Ya'kov ben Seset y Mesullam de Piera.
Poco después, Moshé ben N ahman (N ahmánides) reúne en Barcelona
un grupo de discípulos, a los que inicia en las doctrinas esotéricas.
Al ser Rabino Mayor de la Corona de Aragón, consigue que la mayo-
ría de sus doctrinas sean aceptadas por el judaísmo más tradicional.
La Kabbalah se extendió por Castilla, siendo algunos de sus re-
presentantes más significados los hermanos Ya' akov e Yitzak ha-
Kohen, en Soria; su discípulo Moshé ben Simeón en Burgos; y los
toledanos Iosef ibn Maza, Yitzak ibn •L atif, Yehudah ibn Matqah
y Todros ben Iosef Abulafia, rabino de la corte y dirigente de la
comunidad de Toledo. Sin embargo, el más famoso cabalista cas-
tellano es Moshé de León, autor del Midrash ne'lam, («Midrás eso-
térico»), que se convertirá en la sección central del Sefer ha-Zohar,
considerado como la exposición más significada de las enseñanzas
cabalísticas. Por su parte, el zaragozano Abraham Abulafia, consi-
derado el representante más significativo de la llamada Kabbalah
profética o extática, viajó a Oriente en busca de «las diez tribus
perdidas», recorriendo numerosos países y consiguiendo tanto en-
tusiastas discípulos como opositores encarnizados.
Durante los siglos XIV y XV la Kabbalah se difundió por
Italia y por Oriente. Al ser expulsados los judíos de España en
1492, los cabalistas se establecieron en varios países ribereños
del Mediterráneo, pero acabaron formando en Safed, al norte de
Palestina, lo que en los siglos venideros sería el centro más impor-
tante de la Kabbalah. Miembros destacados de esta comunidad fue-
ron Yitzak Mar Hayyim, Yehudah Hayyat, David ibn Abi Zimra,
Meir ibn Gabbay o Shlomó Alqabés. En la generación siguiente
destacan Moshé Cordovero, de origen español, gran sistematiza-
dor de la Kabbalah, y sobre todo Yitzak Luria, nacido en Jerusalén
de familia originaria de Polonia o Alemania, aunque educado en
Egipto. En los tres años que pasó en Safed, hasta su muerte en 1572,
se rodeó de discípulos, a los que enseñó de forma exclusivamente
oral su sistema de Kabbalah teórica, así como la manera de llegar a

48 V1I.I.ARRUBIA / H AUT / MI LLERA


la comunión con las almas de los justos mediante prácticas de con-
centración y meditación. De él procede la doctrina de la transmigra-
ción de las almas (los gilgulim) y el cumplimiento del tikún, de gran
importancia en la presente obra. Fueron sus discípulos, en especial
el más destacado de ellos, Jayirn Vital, quienes recogieron por escri-
to las enseñanzas de Luria. Dichas enseñanzas fueron difundidas en
Europa por Israel Sarug, que no había sido su discípulo directo.
En el siglo xv11, Shabetay Zvi (1626-1676), fue la figura más des-
tacada de la Kabbalah, en la que siguió en lo esencial las ideas de
Luria. Zvi convulsionó al mundo judío al autoproclamarse solem-
nemente corno Mesías, y arrastró con ello a gran número de segui-
dores; pero su posterior conversión al Islam provocó una notable
oleada de decepción. Después de su muerte, sus partidarios man-
tuvieron vivo su fervor mesiánico a lo largo del siglo xvm. También,
durante los siglos xvrn y xrx, fueron influidos por la Kabbalah los ja-
sidirn de Europa oriental, los cuales contribuyeron en gran medida
a popularizar y extender sus doctrinas, pese a los esfuerzos de los
judíos «ilustrados», durante el período de la haskalá (ilustración).
La Kabbalah, hoy, sigue viva.
Parelelarnente a este desarrollo, a partir del siglo xv algunos
pensadores cristianos del Renacimiento se sintieron profunda-
mente atraídos por la Kabbalah, que trataron de armonizar con
el cristianismo. Fueron sus exponentes más conocidos Giovanni
Pico della Mirandola en el siglo xv; Johannes Reuchlin, el car-
denal Egidio de Viterbo, Giorgio de Venecia (franciscano) y
Guillaurne Postel en el xvr; Jacob Boehrne, Chirstian Knorr von
Rosenroth y el jesuita Athanasius Kircher en el xvn. Finalmente,
en los siglos xrx y xx destacan Franz Josef Molitor, Papus (Dr. G.
Encause), Eliphas Levi, o los miembros d J-la ocultista orden bri-
tánica Golden Dawn («Alba Dorada»), en especial Dion Fortune
o Gareth Knight, así corno los trabajos de Gershorn Sholern.
En la actualidad son destacables las obras del escritor argentino
de origen judío y residente en España, Mario Satz, del británico
Z' ev ben Simón Halevi y de los hace poco fallecidos Alexandre
Safran (Gran Rabino de Ginebra) y Aryeh Kaplan, cuya versión
del Sefer Yetzirah es, probablemente, la mejor y más documenta-
da que nunca se haya hecho.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 49


En cuanto a la Kabbalah tradicional, sigue viva en Israel,
con centros de enseñanza en Tel-Aviv (Centro para los estudios es-
pirituales de la Kabbalah, dirigido por Yechiel Shemer), Jerusalen,
y sobre todo Safed, pequeña ciudad de Galilea en la que hay varias
escuelas de Kabbalah. Para mayores detalles respecto a estas escue-
las de Kabbalah y su pensamiento es recomendable la lectura de los
artículos de Jacobo Grinberg-Zylberbaum en las Revista Más Allá,
números de septiembre y octubre de 1998.
También es digno de destacar el papel de Escuelas de Misterios,
en Barcelona, dirigida por José Luis Caritg, que desde 1994 trabaja
en la divulgación de la Kabbalah a través de su escuela, la Alta
Escuela de Kabbalah & Alquimia de Barcelona, así como la edición
de la revista del mismo nombre, la publicación de libros de renom-
brados autores de Kabbalah, y la organización de los congresos in-
ternacionales de Kabbalah: «Sharei Orah», Las Puertas de la Luz.

2. EL IDIOMA HEBREO, VEHÍCULO PARA LA KABBALAH

l idioma hebreo pertenece, como el árabe y el arameo,


E al tronco lingüístico semita, caracterizado por formar las pa-
labras radicales o raíces mediante tres letras. A su vez, éstas son
consonánticas, pudiendo vocalizarse una misma letra de diferen-
tes formas. Otra de las características de este idioma es que las
letras son en cierto modo ideogramas, comprendiendo cada una
de ellas una amplia familia de significados. Por esta razón, las pa-
labras que contengan las mismas letras, aunque estén colocadas en
diferente orden, tienen significados o expresan ideas afines.
Antes de la aceptación universal de las cifras actuales, mu-
chos idiomas (y el hebreo no es una excepción) utilizaron,
y todavía siguen utilizando las letras para expresar cantidades.
Por esta razón cada una de las letras hebreas tiene su propio
valor numérico.
Como veremos, serán estas características particulares del idio-
ma hebreo las que nos van a permitir trabajar con la Kabbalah.

50 YILLARRUBIA / HAUT / M ILI.ERA


En las páginas siguientes se recoge el alfabeto hebreo con
sus valores numéricos y algunos de sus significados ontológi-
cos; las formas diferenciales de las letras; las vocales hebreas,
y, finalmente, las normas de pronunciación, para las cuales se
ha preferido seguir el criterio sefardí, más próximo a nosotros,
en lugar del ashkenazí, más ligado a la tradición centroeuro-
pea, o del yemení, de claras concordancias con el idioma árabe.
Se incluye también una sección en la que se comparan diferen-
tes tipos o fuentes de letras hebreas, lo que puede ser de utili-
dad para los principiantes.

3. EL ALFABETO HEBREO O ALEFATO: SUS SONIDOS,


SUS NÚMEROS, SUS SIGNIFICADOS, SUS FORMAS

ara facilitar el aprendizaje del alefato, hemos optado por presen-


P tarlo en cinco cuadros. El primero contiene el alfabeto hebreo,
sus valores numéricos, su fonética respecto a la lengua castellana
y sus significados ontológicos o simbólicos; el segundo recoge la
puntuación masorética (vocálica), con la transcripción fonética de
los nombres hebreos de las vocales; un tercer cuadro contiene nor-
mas complementarias de pronunciación; el cuarto, quizá el más
útil para los principiantes, presenta las letras hebreas agrupadas
en siete conjuntos, que se ordenan en función de las similitudes de
sus formas; el quinto, finalmente, ofrece las formas comparativas
de cuatro fuentes o tipos de letras hebreas, lo que también puede
ser de utilidad para los principiantes.
En todo caso se han seguido, tal como se ha indicado, los crite-
rios de la pronunciación sefardí. El sonido g (suave) con las vocales
e o i se representa como en castellano, mediante la u muda entre
dicha letra y la vocal. En cambio, el sonido de la q, prácticamente
igual al de la k, se representa sin la u muda.
El hebreo, como otras lenguas semíticas, se escribe y lee de derecha
a izquierda. Los puntos vocálicos se leen (salvo excepciones que se
indican) siempre después de la letra a la que están asociados.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 51


3.1. El alfabeto hebreo, o alefato: números, sonidos
y significados simbólicos
Tabla I
Letra Valor L. final Valor Nombre Sonidos Significados simbólicos

N 1 álef (muda) pecho / infinito /buey/ aliento

~ 2 beth b,v casa / dentro de / el Templo

3 guímel g suave retribución / revelación / camello

,' 4 dálet ~ puerta / palabra / cosa

he h aspi rª.
M 5
suave apertura / espíritu / lo femenino

, 6 vav O, U, V hombre / hijo / enlace

7 zayn z centro / semilla / espada / flecha


i francesa / enlace, unión

• j't 8 jeth LI a
espano vida / camino

tQ 9 teth t bien/ ombligo/ serpiente que ataca

~ 10 iod i, y origen / mano cerrada / padre /


lo masculino

~ 20 , 500 caf k,j


espanol a cáliz, copa / mano abierta

~ 30 lámed 1 corazón / m ovimiento/ látigo

~ 40 e 600 mem m madre / nacimiento / agua

~ 50 ¡ 700 nun n percepción / pez

secreto / fundamento, base /


e 60 sá.maj s serpiente que muerde su cola

70 ayín (muda) ojo/ fuente


V

52 VILLARRUBI A / HAUT / MILLERA


~ 80 =, 800 pe p, f boca / hombre que se humilla

,: 90
r 900 tsade ts, tz justicia, equidad/ anzuelo

parte posterior de la cabeza /


¡, 100 kuf k recepción / tradición / llave

, 200 resh r soplo / cabeza / principio, ori-


gen / alma, espíritu vital

~ 300 shin s, sh fuego / consciencia / diente

400 tav t, z materia / cruz / misión a realizar


M española / muerte

3.2. Las vocales hebreas


Se indican mediante puntos y signos colocados en torno a las letras.
En cursiva, debajo de cada vocal, la transcripción fonética de su nom-
bre hebreo.
Tabla 11
Vocal Vocal Vocal Letra sin vocal
Sonido larga corta cortísima o e oscura

~ ~ }f.
a kametz gadol pataj jataf pataj

,l( / 'J.( \ ~ ~ (*)


e tzere sego l jataf sego l shvá naj

i -~
jirik gadol
~
jirik katán

o i X ~
jolam gadol jolarn katán jataf kametz

u 1 !' ?'
shurak kubutz shvá ná'

X representa cualquier letra hebrea .


(*) El signo~ puede pronunciarse como e si aparece en la primera si1aba (shvá naj).

MANU AL DE KAB BALAH PRÁCTI CA 53


3.3. Otras normas de pronunciación

Tabla 111
B V

V con otra
o u puntuación

;:!, O AH y AJ (con J española), respectivamente (y no HA y JA) a final de palabra.

::l K ::i J española

El p El F

2' s 'Ji Sh (como la palabra inglesa SHE)

i:, T r, T - Z española, en el centro


de palabra.

~ Puede pronunciarse como O si aparece en la primera letra

• Se pronuncia como Y cuando va acompañada de algún signo vocálico,


excepto ºy, en cuyo caso se pronuncia i.

Todas las letras, si además de la puntuación mencionada arriba llevasen un punto en


su interior o a su izquierda, enfatizan o doblan su pronunciación. Por ejemplo, ';lt?i se
pronunciará Shaddai (Todopoderoso, uno de los nombres de Dios); la pronunciación
incorrecta shadai significaría mi seno o mi teta. También se aplica esta norma a algunas
letras, como la vav (i) y la iod (') cuando llevan a la vez dos tipos de puntuación; en este
caso suenan como consonantes, respectivamente v e y.

La letra shin (~) puede aparecer con sólo un punto a la derecha, sin otra puntuación, en
cuyo caso producirá el sonido sh, debiendo considerarse a la vez como la vocal corta
o asociada a la letra anterior, más el sonido sh propio de la shin. Si apareciese con un
punto sobre cada trazo lateral, su sonido sería sho . Y si llevase un solo punto sobre su
trazo izquierdo, produciría el sonido so.
La pronunciación figurada que en la presente obra se indica tras cada palabra hebrea
entre paréntesis y en caracteres cursivos es igual a la del castellano, excepto la v, que es
labiodental; lag, que es siempre suave y nunca como j; la h, que es suavemente aspirada
al comienzo o dentro de una palabra, y muda al final; y la z, que es francesa. El apóstrofe
correspondiente en ciertos casos a la u indica una breve detención.

54 ViLLARRUBIA / HAUT / MILLERA


3.4. Las formas de las letras hebreas

Un problema que se plantea a quienes se enfrentan por primera


vez con el idioma hebreo es la similitud de ciertas letras entre sí,
lo que puede dar lugar a confusiones. El siguiente cuadro guía
puede ayudar a distinguir unas de otras cuando presentan formas
parecidas.

Tabla IV

N "I
~ No se parecen a ninguna otra letra
álef iod lamed ruf

~ ~
-
'"'I ~ 1 Letras abiertas por la izquierda

,
beth guímel caf nun pe

, , e¡ Extienden una «visera » hacia la izquierda


dálet resh caf final (*) pe final (*)

j"j n e .n Letras abiertas por debajo


he jet mem tav

~ v. ,: r rz, Letras abiertas por arriba

,
tet aym tsade tsade final (*) shin

i j Las tres letras estrechas


vav zayn nun final (*)

o o Las dos letras cerradas


mem final(*) samaj

(*) Las letras cuyo nombre aparece marcado con asterisco sólo apare-
cen, como es lógico, al final de palabra.

M AN UA L DE K ABBA LA H PRÁCTI CA 55
3.5. Diferentes tipos o fuentes de letras hebreas
A veces nos podemos encontrar con letras hebreas cuyas formas
difieren algo entre sí, según la fuente utilizada. El cuadro siguiente
recoge cuatro de estas fuentes.

Tabla V - Cuatro fuentes o tipos de letras hebreas

Hebrew Shebrew Chaya Torah sofer

N N N N

.:l ::i ::1 ::i,

!
,'
J l

1 , -,

i"1 i1 il :,

, , 1
,

n
i r

n n
T

'r,

tQ ~ ll 'b

~ , . "I

:l ~ :::J ::)

, 7 7 7
~
, 'J ½

56 YILLARRUBIA / HAUT / MILL ER A


.Q ~ n ~

1:1 [J □ e

~ :i ] :
i l 1 í
e o a e

V !} ]J y

~ El !] e:,

~ ~ 9 =,
:l ~ '!:,I ~

r r r V
¡, p jJ
r
, 7 7
.,
tU rt) w t,

M n n r,

En la presente obra se utiliza normalmente la fuente Hebrew


(l.ª columna), y la Shebrew (2.ª) cuando se escribe la puntuación
de vocales (masorética), o para indicar palabras subordinadas a
otras. Excep cionalmente se usará la fuente Torah Sofer.

M AN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 57


'"'l. Escribe las nueve: prfmE:fras ; letras deÍ;:aifábeto he~r~o, de:"r1~
a
ALEF la TETH, tantas vecei{co,m oOs,e a,hecesarip:ha·staa_dquirir
soltura. Anota cuál te resultó m..ás"f~c,i \{cy'ál D:lj§ ,difíc:iL · ·,
• . I , • i .:¿~ . ·-: · -':. ·.: .-<~ · , • •

2. Escribe las letras hebreas'YOD aA'flN,,.ambps. inclw;ive, ,así ,


como las finales CAF, MEM y NUN, tántas. veces cqmq sea,
necesarro hasta adquirir soltura. Anota, qué,letrá te· resültq má? .
fácil y cuál más difícil. . ' . . '

3. Escribe las letras hebreas PE a TAV, induyencl.ó las finales ,PE y


TSADE, las veces que sea necesario.hasta adquidr soltura. inota' .,
cuál resultó más fácil y cuál más difícil. · · ·· •, .

' 4. Revisa las letras hebreas fáciles y difíciles de éada Úno de I~~
tres ejercicios anteriores. ·Con ayuda del ·diccionario (si no: tiet:i'es;
,· pide uno presti::ldp, o únete. a un grupo de apoyo), tra~a de compo:-
ner al menqs ui,a palabra formada exclusivamente por lasJ~tras
,fáciles y ·otra .sól9 pÓr ·las difíciles. Medita sobre :,el 5igni,ficadc/ ,d é
r1mbas .. palabra5; trata de encontrar la, relación que ·pu~da h,aber
'entre, ambas, así como sentir en qué te afecta cada, pafa9r!ty 1~ .
relación entre el.las. · ·• " · , , · . . •·· ' ' :. . , ,

''5. Escribe el alfabeto hebren.comP,leto,. intenta~do que.el r~slJI.,


['t~do 'sea una obra,'de artedelá que te sienta~·o(gull(,lSOla: Utiliza
'e.Ltipo .de letra hebrea que más:,te guste; .. ;" .
...
"-

.· 6.'Medi~a sobre la formade r~s letras del° ~lfabeto hebreo·. Para ,


eHO; dibújalas en cartulinas oen hoJás (úna'. par'a .cada letra),; co~ .
, pÍándolas
: ),
de alguna: de las tablas anteriores, Es importante que
,,:. ; .

seas t~ mismo/a quien las dipµJe, .e n lugar de fotocopiar las de .


µichos cuadros: Empezando' pol'.la ·á/ef, sigue el orden "del al-
.·~· fabeto hasta la tav. Sitúate frente a la 'letra mirándola durante
'.\aproximadamente 2 minuto~. 0espués,. cierra los ojos y obse~-:-
~ ~
va durante 3 minutos más lo que esas formas producen en ti 1 ...

58 VILLARRUBI A / HAU T / MILLERA


,,,/t ; ::- , ,, - ___ ':-,-;\ -.,/ :,_c<:-x;:- __ _ , -_ ._. 'L. _-, - - ,.
.. tarifo a .. riiVél tti.ehtal; como',erñodona+ o físico; CuarrdoJo
,· --, _'· .'- ~-:1);?: "'·· -'' ·.-. :-'s_ ' ':·
creas ._ _,.· : . /. . ,•. "'y _ ·,, ' . -. / -' ..:: ' -'.,' . ¡ ; , _
_"opórfun9, élbre 1?·s_••ój,6s:_y,aoota·_ tus:'impresión_e_s.BepifeJcadá-d,ía>·
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'1;- este $Jercit"io'COQ•lá) ttismaletr'a H(irant~'.;urfa:serryana, y Iitfinal }


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Es recqmendc1bl~ -~osaltarse,.eLor,d~n.deJa a/e,fa'. ta(<flV. En quan~o,;:;
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i<Nuevo J>iícto») ,i; . - ., '· ·- - . -. . '· -

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MANUAL DE l(ABBA LAH PRÁCTICA 59


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60 V1 LLARRUB IA / HAUT / MI LLERA


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· · bre.á-s~Rué ya';,s9:6oz'cafo / Shlo,e2re.ef op~rtugo,· ~usc,a ;esas'
palabr~s eñ ~u'Jl. Diccionario-.Hebreo-Castellan'o ·.(no en . e,_1

. .· :~ij~;i~?c~~~~!:í!\¡:~ff,f f , . l . . . .......· ::, , ¡


-•:: Oh~Efrvi\ láit p~la~ra}. hebreas que-:s"ignific:"án gozo . y::viéla/ y .
·• .tompruebá qdé:ar1Jbá'stiéneh cuatr◊, t~tra?; Com·pafádas Íe'."
• :·.· .:¿"'i. ~_· ... · -.'' · ' .r,,,,' ··:.. _,;C:::::· •..;_ .-;:-. ;, : }:_ -~~- , , t•i~.- ·, •,. : '..,,' "1/ . ._ :: ~'_;: · '

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. Dic:cionario:,Nu_r;nériqoilratq.,:de. ~·nco'htrarp~lahrasq1.17.t~ngán
. '· É()ryió·.. válór.·esa ·afferehci&3<SÍ·l.{s,épcuentra~¿; sác~J us', p.ropia~
: . condusiónes. ' .. - <,. .

MANUAL DE KA1313ALAH PRÁCTICA 61


4. VISIÓN SECUENCIAL Y VISIÓN HOLÍSTICA

1. Todo sistema de trabajo es mental, puesto que se apoya en la


mente y se maneja a través de la mente.
2. Hay una forma de trabajo mental basada en la lógica y en la causali-
dad, o en la búsqueda de enlaces de causas y efectos. Esta forma de
trabajo presupone la existencia de un «tiempo», con un «antes» y un
«después», en el que las cosas suceden unas a continuación de otras.
3. De esta forma de trabajar nacen las categorías y la dualidad:
bueno y malo, sí y no, blanco o negro ...
4. Hay otra forma de usar la mente, que en cierto modo está más allá de la
lógica y de la causalidad, puesto que mediante ella coexisten el antes y
el después, lo bueno y lo malo, el día y la noche ... Es una forma de ver
la realidad que podría llamarse holística (del griego halos, todo), frente
a la forma lógica o secuencial. Ambas se asientan, respectivamente, en
los hemisferios cerebrales derecho e izquierdo.
5. A lo largo de la historia, el ser humano ha dado preferencia al funcio-
namiento de uno u otro hemisferios cerebrales. La civilización occi-
dental utiliza con preferencia el hemisferio izquierdo, y a causa de
ello, la lógica, la ciencia y la objetividad, pero también la falta de sen-
sibilidad, la ceguera ante las consecuencias a largo plazo de nuestros
actos y el sentimiento de aislamiento en medio de la multitud son la
constante de cada día para la inmensa mayoría de la humanidad.
6. Se os propone un trabajo con ambos hemisferios cerebrales; en
otras palabras, la utilización conjunta de la visión secuencial y
de la visión holística. El trabajo ha de ser experimental, y ello
presupone unos determinados pasos a lo largo de un tiempo,
y un orden a seguir. Pero también es necesario usar métodos
tales como la asociación de ideas (alguien la llamó «el dominó
mental»), la inducción (ir de lo particular a lo general, como
complemento necesario de la deducción, que va de lo general a
lo particular) y la analogía («las cosas semejantes tienen algo en
común»).
7. Toda afirmación es, hasta que se prueba, una mera hipótesis de
trabajo, que debe de ser verificada o desechada.
8. Tanto las hipótesis de trabajo verificadas como las desechadas lo
son de manera provisional: nunca hay una seguridad absoluta

62 VILLARRUBIA / HAUT / MI LLERA


ni definitiva acerca de ninguna cosa. Y es muestra de sabiduría
aceptar alegremente esta inseguridad.
9. No hay más autoridad que la que deriva de la propia experi-
mentación, el propio discernimiento y la propia sensibilidad.
Todos los verdaderos Maestros y Guías han mostrado un cami-
no, el que ellos han recorrido. Pero los caminos son infinitos y
cada uno ha de descubrir el suyo propio.
10. Todos los caminos confluyen en un centro único. Los que lle-
gan a él descubren que está en todas partes, y que siempre estu-
vieron en él, porque es la Única Realidad.

5. ¿VERDAD O .•• MENTIRA? (Los CRITERIOS LUCIS)

E n muchas ocasiones es difícil evaluar si la información recibi-


da es verdadera o falsa. Casi siempre contiene proporciones
variables de verdad y de falsedad. Y la presente obra, pese a que
hayamos puesto en ella nuestra mejor voluntad, no está exenta del
riesgo de error. Por esta razón proponemos unos criterios de veri-
ficación que, según nuestra experiencia, son muy útiles para sepa-
rar el trigo de la paja, al ayudarnos a investigar por nosotros mis-
mos la verdad o la falsedad de la información. Llamamos a estos
criterios LUCIS, palabra latina que significa «luces», y ofrecen una
primera aproximación a los métodos de trabajo de la Kabbalah,
que veremos más ampliamente desarrollados en el capítulo 7 de
esta primera parte. Presentamos los criterios en párrafos separa-
dos, presididos por las letras que forman la palabra anterior.

LIBERTAD. El primer criterio para evaluar la información es la liber-


tad. ¿Nos hace sentir más o menos libres? Recordemos el Evangelio de
Juan, 8: 32: «Y conoceréis la verdad, y la verdad os libertará». Cuando
recibimos la información, ¿cómo nos sentimos en comparación con
nuestro estado anterior? ¿Más libres? Entonces nos estamos acer-
cando a la verdad, o nos alejamos de ella en caso contrario. De paso,
la letra hebrea equivalente a la L es la lámed, ',, cuyos significados,
según veíamos en la tabla anterior, son corazón, movimiento y látigo.
Así pues, si la información nos acerca a la verdad, es posible que sin-

MAN UAL DE K ABBALAH PRÁCTICA 63


tamos que nuestro corazón se expande, su espacio se hace más am-
plio, y se mueve, palpita con más intensidad; también es posible que
nos sintamos acuciados a ponemos en marcha, como movidos por un
látigo que nos saca de nuestra inercia.

UNIDAD. La información que recibimos, ¿nos unifica o nos frag-


menta? Uno de los métodos de trabajo de la Kabbalah, la guematria
(ver capítulo 7 de esta I parte), considera que las palabras con el mismo
valor numérico están íntimamente relacionadas entre sí. Por ello, la
palabra hebrea para unidad, iMN (ejad), que tiene un valor de 13 (verifí-
quese en la tabla I), está íntimamente unida a otras con el mismo valor
numérico, como el amor, i'T~iN (ahavá) y el vacío, 'M~ (bohu), concepto
este último que se refiere al vaciado de sí mismo, del ego, para poder-
nos unir al ser amado. Claro que también tiene valor de 13 el odio, ~~N
(ai'b), que no es sino una forma de amor oscurecida por la ignorancia...
Pues el infinito, N, se condensa en un punto, y, por lo que se encierra,
por decirlo de alguna forma, sobre sí mismo, aislándose del entorno y
olvidándose de su verdadera naturaleza, que no es sino la Divinidad:
el resultado es la dualidad, ~, o lo que es lo mismo, la aparición de la
hostilidad entre el sujeto, yo, y el objeto, no-yo.

CONSCIENCIA. Está simbolizada, como vimos en la tabla I, por la


letra hebrea shin, t:\ la cual está asociada, según el Sefer Yetzirah, al fue-
go, y por lo tanto a la manifestación del Espíritu; no es, pues, casual
que un gran iniciado como Dante, en su Divina Comedia, enviase al
infierno a «los que han perdido el don de la inteligencia». Por su par-
te, este concepto, consciencia, corresponde a la palabra hebrea r,vi,r,
(toda'á), cuyo valor numérico, 485, nos remite a c~m (híttemmem),
ser sincero, honesto, pero también a .M'MQ (tahút), error, equivocación.
La consciencia, por tanto, nos invita a examinar nuestras no-verdades
con espíritu imparcial. Otro desarrollo de la letra Ces CRECIMIENTO,
en hebreo ~'li) (guídul), palabra que con la pronunciación gadol signifi-
ca grande. Así pues, la información que estamos recibiendo ¿nos hace
sentimos más abiertos a nosotros mismos, a nuestras «zonas oscu-
ras»? Y a la vez ¿nos engrandece o nos achica?

64 ViLLARRUBIA / HAUT / MILL ERA


INDEPENDENCIA. Concepto íntimamente relacionado con los
á.nteriores1 pero referido sobre todo a la liberación de nuestras depen-
dencias, de nuestros «enganches». ¿Nos está ayudando a ello la infor-
mación1 o nos mantiene en nuestras viejas ataduras, mentales, emocio-
nales, religiosas1sociales, familiares1políticas, laborales, económicas ... ?
La palabra hebrea para independencia es m~~~ ('etsmaút), de la cual,
utilizando el método denominado temurá (ver más adelante) podemos
extraer diversas palabras, mediante la combinación de algunas de sus
letras: O~ ('etzem), fuerza, vigor; .M"IN (ot), letra, y también signo; l'V ('etz),
árbol; y sobre todo m~ (emet), verdad. ¿No sugiere todo ello las carac-
terísticas que debe tener esa independencia (si en verdad lo es) como
resultado de la información recibida? Nos hará sentir más fuertes, de
una forma indeleble (quedará escrita), arraigará y crecerá como un ár-
bol, y nos reconducirá a la verdad y por tanto a la libertad.

SIMPLICIDAD. Este concepto es una advertencia para desconfiar


de los planteamientos excesivamente complicados. Pese a su aparente
complejidad1la Kabbalah es en realidad algo muy simple: si conocemos
los significados de las letras hebreas, nos familiarizamos con ellas y las
combinamos de todas las formas que se nos ocurran, y las conjugamos
con los significados del Árbol de la Vida (que veremos en la II parte de
la presente obra) ya sabemos todo lo que tenemos que saber sobre la
materia, ya hemos plantado la semilla; luego, será necesario trabajar
la tierra y dejar transcurrir el tiempo para que los frutos vayan apa-
reciendo. Por lo demás la palabra hebrea para simplicidad, sencillez,
es t:l.M ( tom) que pronunciada tam significa perfecto. Recordemos en este
1

punto la frase de Jesús: «Sed perfectos como vuestro Padre Celestial es


perfecto»: pues la perfección y la sencillez, la simplicidad, van unidas .

.·· EJERCICIO

14. Aplica los 'criterios LUCIS a todo lo que _h emos visto hasta
este 'purito, y ,saca"\us propias conclusiones, En lo sucesivo,
aplícalos también periódicamente conforme vayas avanzando
en el estudio de la Kabbalah.

M ANU AL DE K A BBALA H PRÁCT ICA 65


6. NIVELES DE PERCEPCIÓN

L a lectura de un texto o la observación de un hecho pueden ha-


cerse a cuatro niveles diferentes. Los estudiosos de la Kabbalah
memorizan estos cuatro niveles mediante las letras que componen
la palabra PARDÉS (oi,~), que significa paraíso. Las cuatro letras
hebreas que forman esta palabra son, a su vez, las iniciales de otras
cuatro palabras que definen a cada uno de los niveles:

Tabla VI

tlt:l~ - pshat, simple


i~i - remez, alusivo
tv-i, - derash, exegético
,,e - sod, secreto

El pueblo de Israel ha sido expulsado numerosas veces de


los países en que residía, pero a ninguno añoró tanto como a
España, cuando los Reyes Católicos ordenaron la expulsión para
todos aquellos que no se convirtiesen al catolicismo. Si obser-
vamos que, en hebreo, España es ,,~o
(Sefarad), se comprende
fácilmente la razón de su apego, pues su temurá es, precisamen-
te, o,,~ (pardés), paraíso. La influencia que este acontecimiento
causó en Yitzak Luria está en el origen de su doctrina sobre el
exilio de la Shejiná y el tikún, como medio para la restitución
(eso significa esta palabra) del reino de Dios en la tierra.
Se dice que estos cuatro niveles de percepción corresponden a
los cuatro Mundos de la Manifestación, cada uno de ellos más pro-
fundo que el anterior, y conteniéndoles, esto es, trascendiéndoles:

Sentido simple: Mundo de la Acción (Olam ha-Assiyah)


Sentido alusivo: Mundo de la Formación (Olam ha-Yetzirah)
Sentido exegético: Mundo de la Creación (Olam ha-Briah)
Sentido secreto: Mundo de la Emanación (Olam ha-Atzilut)

66 V1L1.AR RUBIA / HAUT / MILLERA


Si no se tuviese en cuenta el sentido secreto, se prescindiría por

,,i
lo tanto de la letra samaj (O), y las tres restantes formarían la palabra
(perad), repartido, dividido, separado. O, lo que es lo mismo,
sin el nivel secreto, la lectura de un texto, especialmente si se trata
de un pasaje bíblico, puede conducir (y casi siempre conduce) a la
división, a la fragmentación. La intolerancia religiosa, el fanatis-
mo, tienen muy probablemente su origen en esta omisión.

7. Los MÉTODOS DE LA KABBALAH

L os métodos de trabajo que utiliza la Kabbalah se basan en


las peculiares características del idioma hebreo y sus letras.
Veamos dichas características y los métodos que originan:

7.1. Capacidad de permutación: temurá


Las palabras hebreas básicas, o raíces constan generalmente de
tres letras consonánticas. Una de las características de dichas pa-
labras en el idioma hebreo (compartida por las de otras lenguas
del tronco lingüístico semita, como el árabe y el arameo) es que,
cuando se permutan sus letras, dando lugar a otras nuevas pala-
bras, mantienen una cierta relación de significado con las palabras
originales. Aparece así el primero de los métodos de trabajo, la
temurá. Consiste en permutaciones entre las letras de una palabra,
buscando nuevas palabras resultantes. Incluye el análisis de raíces
comunes a varias palabras, así como la búsqueda de una palabra
dentro de otras. Un ejemplo de permutación nos lo da la palabra
~,,~ (boré), creador, que puede permutarse en ,~,~ (be-or), en la
luz; esta temurá muestra el carácter luminoso o de iluminación de
todo acto creativo, lo que equivale a decir que se trata de una ac-
ción que mantiene un determinado nivel vibratorio. Otro ejemplo,
en este caso de palabra «anidada» o escondida dentro de otra nos
la proporciona la palabra v~¡,,
(rakía), espacio o firmamento, que
contiene las letras que forman la palabra vi
(ra), mal; lo que ex-
plica por qué el libro del Génesis, al contar en su primer capítulo

M ANU AL D E KAllflA LAl-1 PRÁCTICA 67


el proceso de la creación, termina cada uno de los seis días con la
expresión «y vio Dios que era bueno ... » todos los días, excepto el
segundo (pese a que la Biblia Nácar-Colunga traduzca errónea-
mente su conclusión); pues en este día, Dios puso un firmamento
(rakía) en medio de las aguas, que separase las superiores de las
inferiores. Y al contener esta palabra el mal, era imposible que pu-
diese decir que era bueno(~,~~~, ki tov), limitándose a decir «y fue
así» (j~ ~;,~,, ve-ihíken) (Génesis, 1:6).
Este método de trabajo tiene una variante, denominada atbash,
palabra que significa «uso de la letra equivocada». Consiste en susti-
tuir cada letra de una palabra por su opuesta en el orden alfabético.
Por ejemplo, el nombre de Dios, que en occidente conocemos como
Yahvé, (y que los judíos no pronuncifil\ sustituyéndolo por Adonai,
mi Señor, o por ha-Shem, el Nombre), pasa de;,,;,~ a f~::t~, lo que da
lugar, como veremos en el punto 7.3., a una curiosa interpretación.
Otra variante de este método es el denominado tziruf, consistente en
efectuar todas las permutaciones posibles de las letras de una pala-
bra, tomando éstas de dos en dos, tres en tres, etc., hasta completar
la totalidad de las letras que la componen. Las palabras de muchas
letras requieren, como es lógico, apoyo informático.
Otro ejemplo nos lo proporciona la palabra n~w~ (meshiáj), me-
sías, ungido: es aquél cuyo cerebro, n~ (moáj) ha asumido la reali-
dad, lo que es realmente, w~ (iesh), sin ilusiones ni engaños de nin-
gún tipo, por lo que su presencia, su actuación, se hace en nombre
CW (shem) de la vida~ (jaí): en otras palabras significa un estado de
conciencia más elevado que el ordinario.

7.2. Uso de las letras como números: guematria


Hemos visto en el apartado 3.1 que las letras hebreas tienen unos
valores numéricos. Hasta la introducción del moderno sistema de
numeración, procedente de la India a través de Persia y los árabes,
los idiomas occidentales y medio-orientales usaban alguna o todas
las letras de sus respectivos alfabetos para indicar cantidades, y el
hebreo no es una excepción. Incluso en los modernos diccionarios
(ver referencias bibliográficas) se recogen dichos valores. Las pala-

68 V11. LARRUBIA / HAUT / MILLERA


bras, en consecuencia, tienen sus correspondientes valores numé-
ricos, lo que origina el segundo de los métodos de trabajo, la gue-
matria. Consiste en el cálculo del valor numérico de las palabras
mediante la suma del de sus letras, y la búsqueda subsiguiente de
otras palabras que tengan el mismo valor, tratando de encontrar
los significados concordantes entre ellas. Incluye operaciones de
suma o resta, así como reducciones mediante la suma de los dígi-
tos componentes de las palabras, siempre con la intención de bus-
car significados que tengan relación entre sí, o de encontrar, como
con los restantes métodos, la esencia profunda de cada palabra.
Hay un ejemplo de guematria, muy conocido por los cabalis-
tas, que ya vimos al examinar los Criterios LUCIS, que consiste
en comparar las palabras M~i'TN (ahavá, amor), inN (ejad, unidad) y
1il~ (bohu, vacío), todas ellas de valor 13. El amor aparece así como
una aspiración hacia la Unidad, la cual no es posible sin un vacia-
do previo, pues en caso contrario, ¿cómo podríamos hacernos uno
con el Ser amado?
Otro ejemplo, quizá no tan conocido, es el que compara la pa-
labra j)"M (tikún, la misión sagrada que cada hombre y cada mujer
traemos al venir a este mundo, y cuya investigación estudiaremos
en detalle en la parte V de la obra) con .i,,1,n~ ',i)~) (guilgul mejilot),
con valor 556, como la anterior, y el significado de la vuelta o re-
torno de los judíos muertos en la diáspora a la venida del Mesías.
Según Yitzak Luria, el tikún es la cooperación del hombre con Dios
en el perfeccionamiento de la creación, y consiste en el «rescate» de
las chispas perdidas de la Shejiná, la presencia divina en la tierra,
también considerada como el aspecto femenino de Dios, la cual se
encuentra exiliada como consecuencia del desequilibrio energéti-
co sobrevenido al comienzo de la creación. El tikún sería de esta
manera la misión sagrada que cada ser humano trae al nacer, tarea
costosa y difícil, que requiere varias vidas para completarse; de ahí
que la Kabbalah afirme la existencia de la reencarnación. Las al-
mas van así errando de cuerpo en cuerpo, a semejanza del destino
errante del pueblo hebreo, el cual muestra a toda la humanidad, en
su calidad de elegido, el camino a seguir. Según Alexandre Safran,
Gran Rabino de Ginebra, el cumplimiento del tikún provoca como
efecto el perdón de los pecados, no sólo los propios, sino también

M ANUAL DE K A BBALAI-I PRÁCTICA 69


los de los padres y los de los hijos. ¿Y quiénes son «los padres» y
«los hijos», cuando la propia Kabbalah advierte que «no tienes ni
padre, ni madre, ni hijo, ni hija, ni esposo, ni esposa, ni hermano,
ni hermana, pues tú eres en verdad tu propio padre, tu propia ma-
dre, tu propio esposo, tu propia esposa, tu propio hijo, tu propia
hija, tu propio hermano, tu propia hermana»? Sólo considerando
la reencarnación se entiende la frase anterior, por lo que el perdón
de los pecados sería lo que en el hinduismo o el budismo se llama
«liberación del karma». Y así, al ser el Mesías el libertador (el nom-
bre de Jesús, vi~\ Yeshúa, significa literalmente «el que libera» o
«el que redime»), los judíos que murieron en la diáspora (destierro
de Israel) renacen para asistir a su venida, pues, cuando alguien
cumple su tikún, la misión de rescate de la Shejiná, todos los fieles
quedan liberados. Es un simbolismo que aparece repetidamente
en los cuentos de hadas: la princesa (la Shejiná) encerrada por me-
dio de un hechizo (maya, la ilusión, el error de percepción) en un
castillo (el mundo) custodiado por un temible dragón (los aspec-
tos diabólicos, las «cáscaras» o qlifot) es rescatada por el caballero
(el fiel que cumple su tikún, que puede ser tanto varón como mujer),
el cual también conquista el castillo y pone al dragón a su servicio.
En la propia Biblia pueden encontrarse muchos ejemplos signi-
ficativos. Uno de ellos aparece en su segundo libro, el Éxodo, que
como se sabe, relata la salida del pueblo de Israel de Egipto. Las pri-
meras palabras de esta obra en la Biblia, que a la vez titulan el libro
en hebreo, son M~~ ;,',Ni (ve-elé shemot), Y estos son los nombres;
cuyo valor numérico es 788. Por su parte, sus palabras finales
son Cli'T,VC~-,~.:l (be-kol mas'ehem), para todas sus jornadas, con
valor numérico de 277. La diferencia entre ambos números re-
sumiría el contenido del libro, y eso es precisamente lo que
ocurre, puesto que dicha diferencia, 511, proporciona la palabra
m¡,M (tikváh), esperanza: el relato del Éxodo es el relato de una es-
peranza, la de la Tierra Prometida, que no se alcanzará sino en el
libro de Josué.
La guematria, en apariencia la técnica más sencilla, es en realidad
la más complicada, siendo recomendable usar un diccionario nu-
mérico cabalístico (ver referencias bibliográficas). Es fácil, en efecto,
calcular el valor numérico de una palabra, o la diferencia entre los

70 VI LLARRU BIA / H AUT / MI LLERA


valores de otras dos; pero, llegados a este punto, ¿cómo saber qué
otras palabras tienen el mismo valor numérico? Por lo demás, las
reducciones mediante la suma de los dígitos de un número puede
no ser siempre un método válido, pues no debe perderse de vista
que, si bien las letras hebreas representan un sistema de base 10,
corno la numeración que usamos normalmente, no es, sin embargo,
de notación posicional corno éste. Así, en nuestro sistema común no
es lo mismo escribir 543 que 345, pero en hebreo las letras W - ~ - iT
sumarán siempre 345, cualquiera sea su orden de colocación.

7.3 . Uso de significados simbólicos de las letras:


notarikón
Como herencia, probablemente, de idiomas tales como el antiguo
egipcio o el asirio-babilónico primitivo, las letras hebreas tienen,
además de sus sonidos y de sus valores numéricos, unos signifi-
cados simbólicos u ontológicos. Con el tiempo, estos significados
acabaron extendiéndose a todas las palabras que comienzan por
una determinada letra, o incluso a las que terminan por dicha letra,
aunque este último es un sistema menos usado. Aparece así el tercero
de los métodos de trabajo, el notarikón, que consiste en el análisis
del conjunto de significados contenidos en cada palabra. Se trata-
ría, por tanto, del uso de anagramas o abreviaturas, tales como las
que frecuentemente usamos en la vida diaria: ONU, RENFE, VIP, etc.
En ocasiones, permite conocer el significado de una palabra aunque
no se conozca su traducción exacta. En hebreo moderno, por ejemplo,
la palabra~~ (til), con el significado de misil o proyectil, muestra en
sus letras el movimiento(~), el origen y también un punto de fuego
(~) y la serpiente en actitud de atacar (to), lo que indica que se trata de
algo que se mueve, que es peligroso, que tiene un origen, y además
alguna relación con un punto ígneo. Otro ejemplo lo proporciona la
palabra i'TM1'W~ (mishpajá), familia, en la que la madre(~) corno base
de la familia judía, viene acompañada del fuego (W), lo que evoca
inmediatamente el hogar y la boca (1'), usada tanto en la alimenta-
ción como en la comunicación, lo que indica que hay más de uno en
el conjunto; por la vida (n), que es también un camino; y en fin, por el

MANU AL DE KABBALArl PRÁCTICA 71


espíritu (rr), que es también apertura. La familia, por tanto, quedaría
definida como el grupo de personas que conviven, se alimentan y se
comunican al amparo de la madre, como camino para manifestar el
espíritu, que aparece en su aspecto femenino (:·T), es decir, que per-
mite la expresión de la Shejiná.
El notarikón es a veces muy útil en combinación con la téc-
nica especial de temurá denominada atbash (ver antes, al final
del apartado 7.1). La inversión mediante esta técnica del tetragra-
ma, o nombre hebreo de Yahvé, proporcionaba, según veíamos,
la palabra r~:::r.:, que no tiene ningún significado. Pero podemos
observar que aparece dos veces la letra :::, una de ellas en su for-
ma final; letra que, como veíamos en el apartado 3.1. tiene, entre
otros el significado de justicia. Al leerse el hebreo de derecha a
izquierda, vemos que la primera de las letras l sigue a la ~, que
significa agua, mientras que la otra sigue a la ~, que significa boca.
Las emociones, simbolizadas por el agua, expresan una clase de
justicia, mientras que la boca expresa otra («una cosa es predi-
car y otra dar trigo», tal como nos dice el refrán castellano); pues,
el propio concepto de emoción (del latín E-MOVERE, mover hacia
fuera, muestra su carácter de falta de control, de «salirse de sus ca-
sillas», de su centro; es decir, descentrarse. En otro orden de cosas,
la l, con esta forma, comienza la palabra~~::: (tzlab), cruz, símbolo
del cristianismo, pero inicialmente un tipo de patíbulo y por tanto,
instrumento de tortura; mientras que, en su forma final f, termina
la palabra¡>¡, (ketz), destrucción. ¿Se entiende ahora el carácter co-
lérico del Yahvé que nos pinta el Antiguo Testamento?
Uno de los ejemplos más conocidos de notarikón se refiere a la
palabra ji'T (jen), que significa gracia o belleza, y que es la abreviatu-
ra de i'TiMo~ i'T~~M (jokmah nistarah), sabiduría secreta, otro nombre
para designar a la Kabbalah.
Los tres métodos pueden utilizarse simultáneamente, y así se
hace a lo largo de la presente obra. Por ejemplo, en la palabra an-
terior, i'TM~rz!~, familia, podemos encontrar la palabra OW, (shem),
nombre, cuyo origen es precisamente la familia, combinando así
la temurá y el notarikón, lo mismo que en la conocida palabra oi~rz,,
(shalom), paz, en la que el hombre (i) se encuentra entero, comple-
to, O~W (shalem). También se utilizan en ocasiones métodos combi-

72 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


nados, por ejemplo, la temurá numérica consistente en invertir o
recombinar el orden de las cifras que forman el valor numérico de
una palabra para buscar otra u otras con el mismo valor. Un ejem-
plo citado por Aleister Crowley es la que corresponde al nombre
del profeta Moisés, nw~ (Moshé), cuyo valor, 345, se invierte en 543
y da lugar a n~nN iwN n~nN (Ehié asher Ehié), «Yo Soy el Que Soy»,
nombre que Dios se dio a Sí mismo, según Éxodo 3: 14, en la zarza
ardiente; con lo que Dios y Moisés, cada uno frente al otro, eran
sus mutuos espejos... pero esto sólo es cierto con nuestro actual
sistema numérico, que nos vino de India a través de los árabes y
se extendió por todo el mundo a partir del Renacimiento, como si
hubiese sido un mensaje oculto en el texto bíblico, destinado a ser
descifrado sólo en nuestra época actual.
Al anterior conjunto de métodos «externos», que llamamos así
por manifestarse mediante una acción de tipo físico, aunque de base
esencialmente mental, se unen otros tres métodos, que denomina-
mos «internos», por realizarse exclusivamente en la mente de cada
estudiante, sin perjuicio de que sus resultados se puedan manifestar
externamente. Estos tres métodos son: la asociación de ideas, que
produce lo que se ha dado en llamar «el efecto cereza»: al sacar una
del cesto se arrastran otras más con ella; la inducción, ir de lo parti-
cular a lo general, como vía opuesta y complementaria a la deduc-
ción, que va de lo general a lo particular; y la analogía, basada en el
principio de semejanza: si dos cosas se asemejan en su forma, tienen
también algún tipo de coincidencia o parecido en cuanto al fondo.

8. LA KABBALAH A LA LUZ DE LA KABBALAH

A la luz de los métodos expuestos en el capítulo anterior, ¿qué


.r-l.:puede decirnos la propia Kabbalah de sí misma? En otras pa-
labras, ¿cuál es el sentido profundo de la Kabbalah?
Vamos a trabajar con la Kabbalah, y por consiguiente necesita-
mos saber qué es y cómo funciona. Para ello, nada mejor que tomar
como ejemplo a la propia palabra hebrea, ii~~¡, (kabalá), que signi-
fica tanto tradición como recepción y mística. En efecto, si visitáis

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 73


Israel, al entrar en cualquier hotel os encontraréis en el veshbulo,
sobre el mostrador de recepción un cartel con esta palabra.

Guematria:
¡, = 100
~= 2
~= 30
n= 5

Total: 137

Si utilizamos el método de la guematria, que tiene en cuenta los


valores numéricos de las letras hebreas, descubriremos que n~~¡,
(kabalá) tiene un valor de 137. De este número, cualquier científico
que trabaje en Física de partículas nos dirá que es la constante de
estructura fina, una de las magnitudes fundamentales del univer-
so, que relaciona la intensidad de acoplamiento del campo elec-
tromagnético y las partículas cargadas. Además, encontramos con
el mismo valor las palabras Ni,~ (motzá), nacimiento y también
salida, y j.ti1N (afán), rueda. La Kabbalah es, pues, semejante a un
nacimiento, con todas sus posibilidades y todos sus riesgos; y de
la misma forma, y tal como sucede con las ruedas, nos permite lle-
gar a nuestro destino con más rapidez y comodidad ... a condición
de que la utilicemos correctamente. La imagen de la rueda, ade-
más, es una buena referencia para el aprendizaje de la Kabbalah.
Cuando una rueda gira, sus dos semicircunferencias, derecha e iz-
quierda, parecen moverse en direcciones opuestas: mientras una
sube, la otra baja, mientras una avanza, la otra parece retroceder;
la costumbre de contemplar ruedas girando nos impide casi siem-
pre darnos cuenta de esta aparente incongruencia. En el estudio
y aprendizaje de la Kabbalah no se sigue una dirección única, no
es un aprendizaje de tipo lineal, antes bien, se tiene la impresión
de estar unas veces avanzando y otras retrocediendo ... hasta que
nos damos cuenta de que se trata de un único movimiento que en
realidad, nos lleva más deprisa. Por otra parte, la Kabbalah tam-
bién nos permitirá «salir al exterior», abandonar «nuestro mundo»

74 V ILLA RR UB IA / H AUT / M ILLER A


(en palabras del maestro francés del vedanta, Arnaud Desjardins,
citado en la bibliografía) para vivir «en el mundo».

Notarikón:
¡, = llave
~ = casa
, = corazón
:, = apertura

El notarikón de:,',~¡, (kabalá) nos muestra que sus letras alu-


den a una llave (esa es, precisamente, la forma de la letra kuf),
una casa, el corazón y el espíritu. La Kabbalah, pues, sería tam-
bién la llave que abre la casa del corazón al espíritu. Pero, ¿cuál
es la casa del corazón? El pecho, naturalmente, que en el alfabeto
hebreo está simbolizado por la letra N (álef). Y esta letra, a su vez,
simboliza el Infinito. Por tanto, la Kabbalah abre en espíritu el
pecho al Infinito.

Temurá:
Dentro de:,',~¡, aparecen contenidas muchas palabras. Veamos al-
gunas de ellas:

',:, (hel) = luz, claridad


~', (leb) = corazón
',~:, (hevel) = aliento
~:,', (lahab) = llama
:,~', (labah) = entusiasmar
',;,¡,~ (be-kahal) = en comunidad

Todas ellas indican, en conjunto, una vivificación, una ilumi-


nación del subconsciente, simbolizado por la letra kuf, que tiene
también el significado de «parte posterior de la cabeza» (llamada
la «boca de Dios», por recibirse a través de ella los procesos de ilu-
minación). Además, se trata de una tarea que se realiza en y para
la comunidad; así pues, no es válida para la Kabbalah la idea de
salvación personal, y sí la de unión final con Dios, nuestra verda-
dera esencia.

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 75


Si, por su parte, hacernos atbash con la palabra rl,~¡,, obtenernos las
letras f~Wi, que por sí mismas, tornadas en conjunto en cualquiera
de sus combinaciones, no tienen ningún significado, pero cuya suma
de valores numéricos, 414, proporciona una abundante información
complementaria acerca de lo que es la Kabbalah:
• i\~ C"¡'C r~ (aín sof ar), Luz Infinita, el tercero y más próximo nivel
de lo No-Manifestado, a partir del cual la Manifestación nace en la
primera sefirá del Árbol de la Vida, Keter.
• ~m (dati), creyente, religioso, y la práctica de la Kabbalah transfor-
ma, lleva a serlo.
• rm,, (hagut), pensamiento, meditación, lógica, que se usa con profu-
sión en el trabajo cabalístico.
• mi,;, (hadrará), liberación, en línea con lo afirmado en el Evangelio
de San Juan: «Conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres» (ver
antes, Criterios LUCIS). Pues, al trabajar la Kabbalah se profundiza
en la verdad de lo que realmente es el ser humano y el universo,
y nos aproximamos al conocimiento de Dios.
• to¡,w:i, (hashket), silencio, calma, reposo, condición para estudiar la
Kabbalah y consecuencia de hacerlo.
• ~ ,V Q~ ¡,~"" (yatzak mayím al ídé), ser alumno o discípulo de alguien:
el discipulado es esencial a la enseñanza cabalística.
• j'lWM) (najshon), osado, arriesgado, ya que, por las transformaciones
cerebrales que produce, es peligroso estudiarla si no se tiene una
personalidad sólidamente formada, y por ello se recomienda no
empezar a hacerlo antes de los 40 años.
• w~,¡, (kadish), santo, santidad, otra de las condiciones para
iniciar su estudio, y a la vez efecto de hacerlo. Este concepto,
sin embargo, hay que entenderlo como un acceso a la infor-
mación en su más alto nivel, pues, si examinamos el valor
simbólico de estas cuatro letras, encontramos la llave (¡,) de
la puerta (i) que introduce la chispa divina(~) en la conscien-
cia (W).
• ¡,TW (shjok), risa, alegría, y también juego, entretenimiento: todo esto
es la Kabbalah.
• Y también mir, (tugah), tristeza, melancolía, pues se toma plena
consciencia de nuestro exilio y del de la Shejiná.

76 VILLARRUBIA / H A UT / MIL LERA


Además las letras resultantes del atbash anterior, tomadas de dos
en dos, proporcionan dos palabras interesantísimas que refuerzan
el sentido anterior: iw (shej, en este caso con la letra caf en su for-
ma final) 1 tranquilizarse, serenarse, yri (datz), alegrarse. Además,
esas letras contienen la palabra ,w (shad), pecho, seno, teta, por lo
que aluden al acto de amamantar al bebé.
Hay todavía una posibilidad más. Como veremos más adelan-
te, hay una íntima relación entre las letras hebreas y los arcanos
mayores del tarot; por lo tanto, puede completarse el sentido de
la palabra Kabbalah sustituyendo las letras hebreas que la forman
por los significados de sus arcanos:
• ¡,: relacionada con el arcano XIX, El Sol, y con sus significados de
conciliación y trabajo en equipo.
• ~: relacionada con el arcano II, La Sacerdotisa, y con su signifi-
cado de revelación de lo oculto.
• ~: relacionada con el arcano XII, El Colgado, y con su significado
de invertir la postura y detenerse para encontrar lo sagrado.
• M: relacionada con el arcano V, El Pontífice, y con sus significa-
dos de enseñanza y aprendizaje, ritual y risa.
Todo eso, y mucho más, es la Kabbalah. Y sus efectos, si bien
no visibles inmediatamente, son a la larga poderosos y sostenidos.
Según Dion Fortune, la Kabbalah es el Yoga de Occidente. También
se le podría llamar con toda justicia el Yoga de las neuronas ... y las
transformaciones que produce son irreversibles. Pero debe llegar-
se a ella con el debido sosiego, y perseverar con paciencia en su
estudio, hasta que comience a rendir sus frutos. En este sentido,
es ilustrativo un relato sufi que recoge Idries Shah, relativo a ese
personaje de tantas y tantas historias: el mulá N asrudin. Cuenta
este relato que, en cierta ocasión, Nasrudin comentaba apesadum-
brado con sus convecinos que se le había estropeado un campo de
zanahorias que había plantado.
-¿Y cómo ha sucedido, mulá? Tú eres un buen hortelano.
-preguntó uno de ellos.
-Pues no me lo explico -replicó N asrudin-, porque bien que
cuidaba de las zanahorias. Fijaos si las cuidaba bien, que iba todas
las noches al campo, sin faltar una, y tiraba de las matas para que
crecieran más deprisa.

M/\NUAL DE KABBAL/\H PRÁCTICA 77


9. ¿RIGIDEZ O FLEXIBILIDAD?

E l trabajo con la Kabbalah, correctamente realizado, lleva a una gran


flexibilidad en todos los órdenes, aunque se requiera tiempo para
que sus efectos se manifiesten de forma visible. La Kabbalah es ante
todo tradición, entendida como legado de las generaciones que nos pre-
cedieron. Pero no se trata de un legado muerto, sino de un cuerpo vivo,
en constante evolución, que admite aportaciones de todos aquellos, ju-
díos o gentiles, que se hallan comprometidos en una búsqueda sincera
de su Esencia Verdadera. No conviene, por tanto, desdeñar las palabras
que nos llegan desde otra tradición lejana, pero profundamente empa-
rentada con la de la Kabbalah. Nos referimos al taoísmo, en cuyo texto
fundamental, el Tao-te-King, podemos leer (fragmento LXXVI):

El hombre, al nacer, es blando y flexible,


y al morir queda rígido y duro.
Las plantas al nacer son tiernas y flexibles,
y al morir quedan duras y secas.
Lo duro y lo rígido son propiedades de la muerte.
Lo flexible y blando son propiedades de la vida.
Por eso, la fortaleza de las armas es la causa de su derrota,
y el árbol robusto es abatido.
Lo duro y fuerte es inferior
y lo blando y frágil es superior.

En este sentido, conviene también mencionar el «tirón de orejas»


que, según cuenta Arnaud Desjardins en su obra «Zen y Vedanta»,
le propinó su maestro en India, Swami Prajnanpad, cierto día que
se calificó a sí mismo como «buscador de la verdad». «¡No, no
debes ser buscador de la verdad, sino de la no-verdad! Cada vez
que encuentres una no-verdad, se caerá sola, y la verdad irá apa-
reciendo sin ningún esfuerzo por tu parte». Para esta búsqueda de
«no-verdades» sobran todas las rigideces, esto es, los prejuicios,
los dogmas, las opiniones y las creencias de todo tipo. Mediante la
Kabbalah tratamos de averiguar cómo son las cosas y cómo somos
nosotros mismos por dentro, más allá de la superficie. Tratamos,
pues, de encontrar nuestras no-verdades.

78 V!LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


1Ü. PROPUESTA DE MÉTODOS DE TRABAJO

S i reuniéndonos tuviéramos la vía hacia


la Gran Iluminación, todos los granos
de arena se convertirían en santos, las
bandadas de pájaros se quebrarían y cada
uno de ellos se convertiría en un maestro
espiritual, las ovejas ejercerían las funcio-
nes de los iluminados ...
lDRIES SHAH

1O. 1. El trabajo por parejas


¿Por qué se propone que el trabajo se realice, siempre que ello sea
posible, por parejas? Es un hecho conocido que en las escuelas de
Kabbalah es ése, precisamente, el método utilizado: cada uno
de los miembros del equipo plantea preguntas al otro, por turno,
y comenta las respuestas del otro; después, la tarea de ambos es
supervisada por el maestro. Según Mario Satz, en el «Libro de
la Claridad» (Sefer ha-Bahir), la letra i (zayn), inicial de~,, (zug),
pareja, también es a la vez la letra de la memoria, ,~, (zejer) y
la del oído,¡,~ (ozen), lo que encaja muy bien con una tradición
como la Kabbalah que se considera esencialmente oral, con con-
tenidos que se memorizan y se transmiten durante generaciones,
a través de :,~~¡,n M~W~WM (ha-shalshelet ha-kabalá), la cadena de la
tradición. Pero no son los únicos que han trabajado así a lo largo
de la historia.

Los caballeros de la Orden del Temple se representaron a sí


mismos en parejas que cabalgaban un mismo caballo; y esta ico-
nografía templaria, repetidamente representada en códices, mo-
nedas, relieves y otros documentos de la época, sirvió de base
para la acusación de homosexualidad que se formuló contra la
Orden en el sangriento proceso de su disolución. Unos años des-
pués, la secta de los cátaros, también extinguida posteriormente
mediante una cruel «cruzada», tuvo una de sus características
en las parejas de fieles que recorrían los caminos predicando su

MAN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 79


fe. Pero mucho antes, el Antiguo Testamento nos cuenta cómo,
al llegar los hebreos a las puertas de la tierra de Israel, envia-
ron parejas de exploradores a reconocer la que sería su nueva
patria. Posteriormente, tras la muerte y resurrección de Jesús,
las Escrituras nos muestran a sus discípulos que son enviados
también por parejas a predicar el Evangelio. En la actualidad,
los mormones realizan también su trabajo de evangelización por
parejas.

¿Qué tiene de especial el trabajo en pareja para que una y otra


vez aparezca en tareas de gran trascendencia? ¿Por qué en parejas,
y no en grupos mayores de hombres o mujeres? ¿Cómo es ese tra-
bajo que se realiza en parejas, qué características tiene?

70.2. Algunos conceptos matemáticos


Podemos apoyarnos en las matemáticas para intentar una aproxi-
mación al problema. Para ello, recordaremos algunos conceptos
básicos:

Vector. Es una fila (horizontal) o una columna (vertical) de nú-


meros colocados en un orden cualquiera, incluso sin ningún or-
den. También puede adoptar una dirección diagonal. Se represen-
ta mediante una flecha: -

Matriz. Es un bloque de números, de cualquier magnitud o sig-


no (positivo o negativo), pudiendo ser incluso ceros algunos o to-
dos ellos, colocados en forma de filas y columnas que forman un
rectángulo. Para indicar el concepto «matriz» se encierra el bloque
de números entre dos grandes paréntesis:

5 30 6
21 42 35
13 3 6
-2 - 4 o
o -16 109

80 V1L LAR RUB IA / HAUT / MIL LE RA


Determinante. Es una matriz cuadrada, esto es, una matriz
que tiene el mismo número de filas que de columnas. Se repre-
senta encerrando el bloque de números entre dos líneas verti-
cales:

60 56 7
31 41 9
-4 35 o
El determinante puede resolverse, pues es realmente la repre-
sentación de un sistema relacional o de ecuaciones, y por tanto
tiene un valor, que puede calcularse efectuando determinadas
operaciones de suma, resta y multiplicación entre los números que
lo integran. Una de sus propiedades más interesantes es que, si un
determinante de grado 3º o superior (es decir, de 3 X 3 vectores ho-
rizontales y verticales, o más) tiene dos de sus filas o de sus colum-
nas (líneas, por tanto, paralelas entre sí) iguales o proporcionales,
su valor es nulo, equivalente a cero.
Por otra parte, un determinante de grado 3º o superior puede
ser descompuesto en una suma de tantos determinantes del grado
inmediatamente inferior como números compongan uno de sus
vectores. Es decir, un determinante de grado 5º (5 X 5) puede des-
componerse en la suma de 5 determinantes de grado 4º.

Progresión. Es una sucesión de números ordenados con arreglo


a una secuencia determinada. La serie natural: 1, 2, 3, 4, ... es un
ejemplo de progresión. Las progresiones pueden ser, según su ley
de formación, de varias clases; pero aquí nos interesan las llama-
das progresiones aritméticas, cuya ley de formación es la siguien-
te: Un término cualquiera de la progresión es igual al anterior,
más una cantidad constante denominada razón.

La razón puede tener cualquier valor, positivo o negativo. Por lo


tanto, puede haber progresiones aritméticas que sean tanto crecientes
como decrecientes. En términos generales, las progresiones pueden
simbolizarse mediante letras, indicando dos componentes: el primer
término de la progresión, al que llamaremos «A1», y la razón, a la que

MANUA L DE KABBALAH PRÁCTICA 81


llamaremos «d». Llamaremos «n» al número de términos que ten-
ga la progresión, y «A0 », a un término cualquiera de la progresión,
que puede, por lo tanto, representarse de esta manera:

Es decir: cada término de la progresión es igual al primero, más


la razón multiplicada por el número de la posición que el término
ocupa en la serie, menos l. Así, en la serie natural, en la que el pri-
mer término es 1, el octavo término será:

AB = 1 + (8 - 1) x 1 = 8

Determinantes que tienen algunos de sus vectores formando pro-


gresiones aribnéticas. En virtud de las propiedades expuestas ante-
riormente, se deduce fácilmente que un determinante que tenga dos
vectores paralelos (filas o columnas) formando progresiones aritmé-
ticas NO tiene valor nulo, (salvo que exista igualdad o proporciona-
lidad en otras parejas de vectores, o tenga alguna de sus diagonales
formada íntegramente por ceros); pero si tiene TRES o más vectores
paralelos formando progresiones aritméticas, entonces su valor es ne-
cesariamente CERO.
Toda tarea o actividad puede representarse mediante un vector.
De la misma manera, toda colectividad puede ser representada me-
diante una matriz. Cuando el colectivo adopta una filosofía común,
unos ideales similares o un mismo propósito, entonces cabrá esperar
w1 determinado resultado de ese colectivo, en cuyo caso la matriz se
hace cuadrada (¿la «cuadratura del círculo», tal vez?), transformándo-
se en un determinante que puede ser resuelto.

10.3. Aplicación práctica al trabajo cabalístico


Cuando dos miembros de ese colectivo realizan idéntica tarea (vec-
tores iguales o proporcionales), cabe esperar que se produzcan unas
interferencias mutuas tales que el resultado del trabajo(= solución del
determinante) acabe siendo nulo. Sin embargo, es posible el trabajo

82 ViLLARRUBIA / H AUT / MILI.ERA


coordinado de dos personas, dentro a su vez del trabajo que realiza
el colectivo al que pertenecen, con resultado diferente de cero, con la
condición de que las tareas sean complementarias y/ o estén coordina-
das. La máxima complementariedad se alcanza cuando uno de los dos
miembros del equipo adopta una actitud meditativa («escucha pro-
funda») a la vez que el otro desarrolla la actividad, sea ésta material
o intelectual. El objetivo es siempre el autoconocimiento y la limpieza
del inconsciente, para lo cual cada uno de los miembros de la pareja
será como un espejo para el otro.

Quita las coberturas de tu rostro, de modo que puedas verme


como el espejo de tu rostro verdadero, así advertirás que soy un es-
pejo. (Idries Shah)

Esta norma no es aplicable para grupos de tres o más personas.


En efecto, si el trabajo que cada uno realice se representa mediante
una progresión, al combinarse los vectores para crear el «campo de
operaciones» (determinante), en el caso, por ejemplo, de un grupo
de tres individuos (designados por 11, 12, 13) se llegará necesariamente
a una de estas ocho combinaciones (designadas por Cl, C2 ... C8), o a
una suma de parte de ellas o de todas ellas:

11 12 13
e, A, A2 A3
c2 A, A2 A3
c3 A, (n-1 ) d 2 A3
c4 (n-1) d 1 A2 (n-1) d 3

es A, (n-1 ) d 2 (n-1) d 3

c6 (n-1) d, (n-1) d 2 A3
c7 (n-1) d, (n-1) d 2 A3
es (n-1) d, (n-1) d 2 (n-1) d 3

MANUAL DE KABBAL AH PRÁCTICA 83


Todos los componentes Al, A2, A3, (primeros términos de cada
progresión) son proporcionales entre sí; y también todos los com-
ponentes (n - l)d1, (n - l)d2, (n - l)d3, (razones de variabilidad de
cada progresión) son proporcionales entre sí. Consecuentemente,
cada combinación posible, representada por cada una de las filas
horizontales del cuadro anterior, es siempre una suma de valor
cero: resultado del trabajo, nulo.
Diversas experiencias efectuadas tanto en el ámbito de la em-
presa como en el trabajo interior han puesto de manifiesto la plena
validez de este desarrollo matemático en su aplicación práctica.
Por consiguiente, en el trabajo cabalístico, resulta recomendable
utilizar las sesiones colectivas para hacer acopio de información y
plantear y resolver dudas, mientras que para el estudio y las prác-
ticas es mejor el trabajo en solitario o en pareja y nunca en grupos
mayores.
El trabajo en la Kabbalah (ilii~¡:, avodá) no puede ser un medio
para adquirir poderes, ni considerarse una panacea que resuelva
nuestros problemas; más bien nos va a plantear problemas nue-
vos, a veces muy serios, pero en realidad no estará sino sacando
a la luz lo que habíamos escondido en el «cuarto de las ratas».
Tan pronto nos tropecemos la primera vez con la primera letra
hebrea, la álef (N), empezará a actuar en su aspecto de .n~N (emet),
verdad. Por eso, se recomienda genéricamente no comenzar los
estudios de Kabbalah antes de cumplir los 40 años. Esta edad
se refiere al período de la vida en que se ha adquirido madurez
suficiente para afrontar una materia que en definitiva está orien-
tada a cambiar nuestra vida; pero antes la habremos estabiliza-
do, a nivel familiar, profesional y social. Como dice un refrán
de los judíos sefardíes: A la escala con bavas, al fierrero con barvas.
Es decir, a la escuela en la niñez, al trabajo cuando se es adulto.
Y en cualquier caso, el estudio de la Kabbalah debe afrontarse
con seriedad, pero también con alegría, tal como recomendaba
Rabí N ajman de Breslau:

Recuerda siempre: la alegría no es algo meramente incidental en tu


búsqueda espiritual. Es vital para ella.

84 V!LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


11 . EJEMPLO DE INTERPRETACIÓN CABALÍSTICA:
EL SIMBOLISMO DE LA ESTRELLA DE ÜAVID

N o siempre fue la estrella de David, o de seis puntas, el símbolo del


judaísmo. Hasta épocas bien recientes era un símbolo ornamental,
como lo demuestran los frisos encontrados en las ruinas de la sinagoga
de estilo helenístico de Cafarnaum (s. rr a.C., figura 69). Sin embargo,
al estar formada por dos triángulos equiláteros entrelazados, fue adop-
tada en ocasiones como símbolo de la interacción del "Cielo y la tierra.
A principios del s. xvm:, en unos comentarios al Talmud, cierto rabino
de Europa oriental escribió que el Universo tiene tres fundamentos: la
verdad, la justicia y la paz. Años después, otro comentarista aludía a
los tres pilares del Universo: la Torá (que significa a la vez ley y ense-
ñanza, y es uno de los nombres dados por el judaísmo al Pentateuco,
compuesto por los cinco primeros libros de la Biblia), el trabajo (enten-
dido como servicio con espíritu religioso) y la actitud piadosa (ligada
de alguna manera a la misericordia que todo fiel debe practicar con
sus semejantes). A partir de ese momento, resultaba obvio que los tres
últimos conceptos eran, simplemente, la expresión de los tres primeros,
y resultaba fácil representar esta relación mediante la estrella de David
(en hebreo, in¡~, magen David), de la siguiente forma:

n,,ri
Figura 1
La Estrella de David y sus significados. Motivo ornamental en un prin-
cipio, ha llegado a ser el símbolo del judaísmo, y aparece en la bandera
del Estado de Israel.

MAN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 85


En la figura 1 anterior, las palabras que aparecen en cada vérti-
ce del triángulo que apunta hacia arriba son las que se indicaron
como fundamentos del Universo: la verdad, ~N (emet); la justicia,
j"'1 (din); y la paz, c'bw (shalom). En el triángulo cuyo vértice apunta
hacia abajo, aparecen las palabras consideradas como los pilares
del Universo: la Torá, ¡¡iir,, es decir, su estudio; el trabajo, iiii~v
(avodá); y finalmente la actitud piadosa, C"'1Cii r,i~o~ (guemilut jasi-
dim). Es evidente que, desde el punto de vista del judaísmo mís-
tico, la Torá es la expresión de la verdad, el trabajo de la justicia,
y la actitud piadosa de la paz. Conviene aclarar que el trabajo, en
este caso, debe entenderse como el conjunto de actos de adoración
a Dios, mientras que la actitud piadosa se refiere sobre todo a la
lista de actos de amor que los fieles judíos recitan cada mañana al
inicio de la liturgia en la sinagoga, entre los que se incluyen el ser
hospitalarios con los viajeros, visitar a los enfermos, asegurarse de
que los pobres tengan medios suficientes para casarse, y mostrar el
respeto debido por los difuntos, acudiendo a los funerales y conso-
lando a los parientes del fallecido. Todo este conjunto de acciones
se consideran tan importantes que quienes las realizan reciben su
premio en este mundo y por toda la eternidad.
Ahora bien; si se toma la primera letra de cada una de las pala-
bras de cada vértice, y se agrupan por ejes, se estará haciendo un
notarikón, cuyos resultados son los siguientes:
Eje verdad - Torá: Se forman las palabras .MN (et), partícula que
tiene el sentido de totalidad, y N.M (ta), célula. Se indica que este eje
afecta a la totalidad de los seres vivientes.
Eje justicia-trabajo: Se forman las palabras vi (deá), conocimien-
to, y iv (ad), eternidad. Se indica que el conocimiento adquirido
mediante el trabajo (en este caso, en la Kabbalah) es irreversible,
para toda la eternidad.
Eje paz - actitud piadosa (o «actos de los piadosos»): Se forma
la palabra tu~ (guesh), acercarse, aproximarse, en alusión al acerca-
miento entre el hombre y Dios.
El descubrimiento de este notarikon se debe a Mario Satz, du-
rante el primer shabath, en Tel Aviv, en el curso del viaje que hici-
mos con él a Israel en 1990. Posteriormente, pudimos descubrir
que las palabras que bordean la estrella de David admitían, ade-

86 YILLARRUBIA / H AUT / MILI.ERA


más, las correspondientes temurás, combinando las letras que se
encuentran a ambos extremos de cada uno de los tres ejes:
Eje verdad - Torá: Las palabras mN y iiiin permiten combinar
sus letras de esta otra manera: iiNii nn~ (matat ha-or): regalo de la
luz, pues eso es precisamente lo que significa la verdad expresán-
dose a través de la Torá. Por eso afecta a la totalidad de los seres vi-
vos, que dependen de la luz (la energía, en definitiva) para vivir.
Eje justicia - trabajo: las palabras j'l'"f y iiii~v permiten combinar
también sus letras, para explicarnos su efecto: t~n iiiV (idud ha-
bin): estímulo de la inteligencia. Por eso, el conocimiento que se
adquiere aplicando la justicia (búsqueda de equilibrio, y también
«justeza», cualidad de ajustar, de ser precisos) al trabajo permite
adquirir un conocimiento para la eternidad. O más justo sería de-
cir que se recuerda el conocimiento eterno.

«Con información y experiencia, el ser humano puede hacer juicios


más seguros sobre la gente, las ideas y las cosas. Cuanta menos informa-
ción posee, menos capacidad de comprensión tiene». (Idries Shah)

Eje paz - actitud piadosa: En este caso, citamos a Antonio M.


Baragiola, miembro de la comunidad judía de Mendoza (República
Argentina), que critica a Aryeh Kaplan, autor de la mejor versión
actual del Sefer Yetzirah por afirmar que es pura casualidad que en
la palabra c,,w (shalom), paz, aparezca la sílaba sagrada hindú, OM.
Pues, según Baragiola, shalom se puede leerci ,w,
(shel OM), desde
el OM; ya que, como veíamos anteriormente (secc. 7.3) la paz es la
consecuencia del estado de entereza del hombre. Hecha esta ad-
vertencia previa, podemos encontrar las palabras que esconde este
eje:,, ¡',o en ii~W~ e, (OM meshiaj tam seled lo), sobrando la letra
guímel, g: OM Mesías perfecto, alabanza para él. Se reconoce que la
gracia y la salvación (liberación) proceden del cielo, y se muestra
agradecimiento por ello. La letra sobrante, con su significado de
revelación, nos aclara que la realización de estos actos piadosos
propicia la venida del Mesías, que es en realidad un estado eleva-
do de consciencia (ver antes, secc. 7.1). Puede hacerse igualmente

MA NU AL DE KABBALAH PRÁCTI CA 87
otra lectura del conjunto de estas letras, en este caso utilizándolas
todas: +, ,i,o CM i"l"TZ?~ C)i (ve-gam meshiáj tam seled lo), y también el
Mesías [es] perfecto, alabanza a él. En este caso hemos utilizado la
característica que tienen los idiomas semitas (además del hebreo,
el árabe y el arameo) de dejar sobreentendido el verbo ser en las
oraciones gramaticales. Por otra parte, los valores numéricos de los
dos polos de este eje, 611 para la actitud piadosa (C.,On M't,~~), gue-
mílut jasadim), y 378 para la paz (ct,w, shalóm), nos muestran con su
diferencia, 233, conceptos tan interesantes como ~,to ¡,~,v (omék tov),
profundidad del bien, uno de los polos del eje ético del Árbol de la
Vida, tal como veremos en la II parte de esta obra; el propio Árbol
de la Vida, Q'1'1Mi"l rV (etz ha-jayim, una de las formas de escribirlo) y
el recuerdo, iv~, (zikúr), el eje esencial, en definitiva, de la presente
obra. Además, el número 611 es también el de la Torá, MiiM.
De paso, los tres ejes de la estrella mostrarían respectivamente,
en el orden expuesto, los tres aspectos básicos del yoga: ñani (inte-
ligencia), karma (acción) y bhaktí (devoción).

12. EL SENTIDO DEL TRABAJO EN LA KABBALAH

Todo opera en virtud de la conjunción de tres principios o fuerzas:


• Una fuerza expansiva, energía o afirmación. Hace que el
Universo se despliegue constantemente buscando acrecentar
su manifestación, que también es su propio autoconocimiento.
• Una fuerza aglutinante, amor o restricción, que mantiene al
Universo unido cualquiera que sea su grado de expansión.
• Una fuerza equilibradora, la inteligencia, que conoce paso a
paso el desarrollo de todo el proceso.
Esos tres principios, tal como aparecen simbolizados en la estrella
de David (verdad, justicia y paz) están presentes en todas las cultu-
ras, dentro de lo que se ha llamado la filosofía perenne, y han recibido
muchos nombres y apoyo de muchos símbolos: sat-chít-ananda (ser-
consciencia-felicidad) en el hinduismo; fuerza (representada por la
espada), belleza (el crisantemo) y verdad (el espejo) en el shintoismo
japonés ... Tales principios son los que, en definitiva, nos van a guiar

88 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


en la investigación que emprendemos ahora. Los nombres que les
demos y los símbolos que se les asocien son lo de menos, pero sin
ellos no podremos entrar en el mundo de la Kabbalah. Se nos ma-
nifestarán como una fuerza expansiva y afirmativa (energía), como
una fuerza aglutinante y unificadora, aunque también restrictiva
(amor) y como una fuerza equilibradora (inteligencia). Citando a
Idries Shah, «si alguien necesita un estímulo constante de amenaza
o promesa, no está armonizado de forma correcta: se limita a actuar
automáticamente». El estudio de la Kabbalah, y sobre todo, su apli-
cación práctica, requiere, en consecuencia, libertad para el trabajo
(carencia, por tanto, de amenazas -de problemas que nos condi-
cionen-y, sobre todo, de promesas, esto es, de metas a alcanzar) y
también unidad de propósito, que es la consecuencia de otra unidad
más profunda, en muchas ocasiones ausente por fracturas interiores
que nos hacen buscar objetivos contradictorios.
Esas fracturas son las que nos apartan de la verdad, al colocar-
nos ante los ojos algo semejante a un cristal astillado, a través del
cual percibimos vagamente poco más que luces y sombras. Para
descubrir nuestras no-verdades, tal como le recomendaba Swami
Prajnanpad a Arnaud Desjardins, vamos a usar una herramienta
ciertamente potente: el Árbol de la Vida personal, que aprendere-
mos a levantar y a interpretar, como paso previo necesario para
la investigación de nuestro propio tikún. Tal vez los métodos de
aprendizaje no sean siempre convencionales, pero, citando nue-
vamente a Idries Shah, «si realmente quieres aprender, no te sor-
prendas si alguien trata de enseñarte. Y no rechaces a la ligera el
método de enseñanza».
Nosotros buscamos en todo momento expresar cada una de esas
tres fuerzas o principios a lo largo de esta obra: la energía, o fuerza
afirmativa; el amor, o fuerza unificadora; y la inteligencia, o fuerza
equilibradora. Según vimos al estudiar el simbolismo de la Estrella
de David, cada uno de estos principios o fuerzas tiene una forma
particular de expresarse, Así, la fuerza expansiva, fe o afirmación
(sat) se manifiesta en forma de salud, libertad y autorrespeto; la
fuerza aglutinante, amor o felicidad (ananda) lo hace en forma de
gozo y alegría; y la fuerza equilibradora, inteligencia o luz (chit) se
manifiesta en forma de espiritualidad.

M ANUAL DE KABBAI.AH PRÁCTICA 89


A su vez, cada una de estas manifestaciones combina con las de-
más, dando lugar a la prudencia (alegría atemperada por la inte-
ligenciat la justicia (la inteligencia regulando a la libertad), la for-
taleza (la alegría reforzada por la energía), la templanza (el amor
reforzando a la libertad y el autorrespeto), la empatía (el amor
modera, hace más terrenal a la espiritualidad) y el desapego (la
energía dando fuerzas a la espiritualidad).

90 YILLARRU BIA / HAUT / MILLERA


,,
11 EL ARBOL DE LA VIDA
1. ÜETERMINACIÓN Y LIBRE ALBEDRÍO

omos realmente libres? Ésta es la gran cuestión, discutida has-


S ta la saciedad y objeto de múltiples respuestas y enfoques.
En realidad, la pregunta, planteada de esta manera, da por supues-
to que hay unánime acuerdo en lo que significa la palabra libertad,
lo que en realidad no es cierto. En efecto, en su más conocida
obra, El miedo a la libertad, Eric Fromm distingue entre libertad para,
y libertad respecto a, y en este sentido, la primera sería la capacidad
para obrar según nuestra voluntad, que sólo estaría limitada por
las estructuras sociales y/ o morales, mientras que la segunda se
referiría a la ausencia de ligaduras o condicionamientos internos.
En realidad, si se examina la cuestión con algún cuidado, en se-
guida descubriremos que toda acción externa es consecuencia de
motivaciones internas sobre las cuales el sujeto apenas si tiene
algún control, o no tiene ninguno en absoluto. Por consiguiente,
la «libertad para» no sería sino el resultado del juego, o incluso del
conflicto, de motivaciones cuyo origen es generalmente incons-
ciente; y se trataría, por tanto, de una libertad meramente aparen-
te, sin ninguna base real. Ello sería así mientras no se produjese la
liberación de todas las ataduras internas.
Por su parte Arnaud Desjardins, en su obra Le vedanta et
l'inconscient, resalta el hecho paradójico de que llamamos vida a
una situación en la que dedicamos gran parte de nuestra energía
(digamos, de un 30 a un 40 %) a intentar expresar sentimientos

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 93


cuyo origen, casi siempre inconsciente, hunde sus raíces en el pa-
sado; y otro porcentaje similar, a intentar reprimir esa misma ex-
presión, por miedo a sus consecuencias en el futuro. Con el 40, el
30 o el 20 por ciento que nos queda para el presente, vivimos (?).
El sistema propuesto por Desjardins para resolver esta situación
dolorosa arranca del intento de vivir totalmente en el presente,
acompañado de la constatación de que tal hazaña es imposible.
¿Por qué? Por la existencia de cargas inconscientes, de traumas o
heridas procedentes del pasado (a veces, de existencias anterio-
res), y de deseos y miedos pendientes de satisfacción; todo ello
acompañado casi siempre de trastornos físicos que son, a su vez,
consecuencia de los problemas anteriores. Esta situación configura
un conjunto estructurado de condicionamientos que, en la prácti-
ca, hace del libre albedrío poco más que una broma macabra, en
tanto no se limpie a fondo todo ese poso.
Para la Kabbalah, sin embargo, todo este oscuro firmamento
(V~¡,,, rakía) de impulsos, que sin duda condicionan al ser humano
desde su nacimiento, dando origen a la aparición del mal (Vi, ra),
responden realmente a una fuerza básica, de naturaleza sagrada:
el rescate de la Shejiná, la presencia divina en la tierra, o aspecto
femenino de Dios que, a semejanza de muchas princesas de los
cuentos de hadas, se encuentra exiliada de su reino y prisionera en
un castillo guardado por un terrible dragón. Según Yitzak Luria,
este exilio de la Shejiná se reflejaría en el exilio de Israel que, en
su carácter de pueblo elegido, representaría a su vez el exilio de
toda la humanidad. Para Luria, la Shejiná quedó exiliada cuando,
al comienzo de la creación, el desequilibrio energético (tal vez por
eso no hay antimateria en el universo, al menos en el universo más
cercano a nosotros) provocó la rotura de los «vasos» o recipientes,
las primitivas esferas del Árbol de la Vida. Entre los pedazos rotos,
o cáscaras (las Mi~~¡,, qlifot) la Shejiná quedó perdida y destrozada.
La enseñanza de Luria, conocida a través de sus discípulos, nos
dice que Dios creó al hombre y le ordenó multiplicarse para que
pudiese recuperar una por una las chispas perdidas de la Shejiná.
Como se trata de una tarea ardua y pesada, son necesarias muchas
vidas para cumplir la misión (el tikún, ¡i¡,M); de ahí que la Kabbalah
admita la reencarnación.

94 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Por eso, cada hombre y cada mujer lleva en sí un dolor básico,
esencial, que le impulsa a obrar, casi siempre sin saber por qué
ni para qué. Hay un sentimiento oscuro de que algo no funciona
como es debido, de que hay algo que no está bien en el universo;
pues, en caso contrario, ¿para qué hacer algo, si ya todo es perfec-
to, si todo está bien? Ese dolor es, sin embargo, lo que llevará un
día al hombre y a la mujer a recuperar la chispa de la Shejiná que
le fue asignada. Y por eso, cuando esa misión se cumple, cuando la
princesa es rescatada, produce el efecto del perdón de los pecados,
no sólo de los propios, sino también los de los padres y los de los
hijos; en otras palabras, la liberación del karma. A partir de ese mo-
mento, no hay ya ningún impulso para actuar en ningún sentido,
todo es perfecto en el universo. El Tao fluye, y no hay nada que
hacer, perfecta inacción, wu-wei.
Es por ello de una importancia capital descubrir cómo debemos
cumplir nuestro respectivo tikún y con qué herramientas contamos
para conseguirlo. No es que podamos librarnos de esta tarea: la
cumpliremos de todos modos, en una o en muchas vidas, y nues-
tra elección se ceñirá a determinar si elegiremos un camino más o
menos fácil o difícil, cómodo o incómodo, placentero o doloroso.
La dificultad, y también la incomodidad, serán directamente pro-
porcionales a nuestra ignorancia; y al contrario, el conocimiento
de nuestro tíkún y de las herramientas para cumplirlo hará nuestra
existencia más fácil y cómoda.
Para facilitar esta tarea, la Kabbalah ha desarrollado una serie
de procedimientos organizados en torno a su mandala fundamen-
tal: el Árbol de la Vida. En los próximos capítulos se estudiarán la
estructura, las imágenes y los significados asociados a este gran
símbolo cabalístico; se propondrán los procedimientos para levan-
tar el Árbol nativo y se establecerán los principios para su inter-
pretación. Se examinarán también algunos otros temas asociados
al Árbol de la Vida, como son los genios de la Kabbalah y los pro-
cedimientos para conocer los propios de cada uno. Y, finalmente,
se propondrán diversos ejercicios de práctica en cada una de las
secciones o unidades didácticas.
El Árbol de la Vida será, pues, la herramienta que nos va a p er-
mitir detectar, listar e interpretar nuestras tendencias y aptitudes,

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 95


nuestros ciclos, nuestros puntos fuertes o débiles, la propensión a
enfermedades o accidentes, las aficiones y los rechazos. En otras
palabras, nuestro programa de vida, que no es otra cosa que la
herramienta perfecta para cumplir nuestro tikún.
Los nombres de las esferas del Árbol proceden en su totalidad
de la Biblia. En Éxodo 31:3 aparecen las tres primeras sefirot, más
la sefirá oculta, Daat: «Y le he llenado del Espíritu de Dios (Keter),
en sabiduría (Jokm.ah), en inteligencia (Tebunah, después llamada
Binah) y en conocimiento (Daat)» .. Estos conceptos aparecen igual-
mente en Proverbios 3:19-20: «El Eterno creó la tierra con sabiduría,
con inteligencia estableció los cielos. Con Su conocimiento fueron
rotos los abismos ... ». También aparecen estos mismos conceptos
en Proverbios 24:3-4. Las siete sefirot inferiores se mencionan en
I Crónicas 29:11: «Tuya es, oh Eterno, la grandeza (Gedulah, otro
nombre de Jesed), y el poder (Gevurah también tiene esta tra-
ducción), y la belleza (Tiferet), y la victoria (Netzaj) y la majestad
(Hod); porque todo (Kol, otro nombre de Yesod) cuanto hay en el
cielo y en la tierra es Tuyo. Tuyo es el reino (Maljut), oh Eterno, y
Tú eres exaltado como cabeza sobre todas las cosas».

2. EL ARBOL DE LA VIDA: SU ESTRUCTURA

a idea del Árbol de la Vida aparece en la Edad Media, como


L resultado de las interpretaciones que hicieron los cabalistas del
primer capítulo del Sefer Yetzirah («Libro de la Formación»), en re-
lación con los pasajes bíblicos mencionados en la sección anterior.
En su fragmento 1:2 se escribe:

,,o~ ri,~ri,N o~riw, O"itoV, :,~ ~~~ r,i,~10 ,wv


:Mitoito J) :,iwv o~MTZ!i r,i',,i~~ V~TZl, r,i~N TZ!~W

(Asar sefiroth belí mah ve-esrim ve-shtaim otioth yesod


selosh ímoth ve-shebah kafuloth ve-shtaim asrah pshutoth)

«Diez sefirot de la Nada y 22 letras Fundamento


tres Madres, siete Dobles y doce Elementales»

96 VI LLARRUBIA / H AUT / MI LLERA


Figura 2
Esquema del Árbol de la Vida, en su versión «clásica»

Éste será el formato que se utilizará a lo largo de la obra.. Los números roma-
nos indican la jerarquía de las esferas: I, Kether. II, Jokmah. ill, Binah. IV, Jesed.
V, Guevurah. VI, Tiferet. VII, Netzaj. VIII, Hod. IX, Yesod. X, Maljuth. Por su
parte, los números arábigos se refieren al orden de los senderos subjetivos que,
como veremos, se relacionan con los arcanos mayores del tarot. No se indica
la sefirá oculta, Daat, la cual se suele colocar hacia la mitad del sendero 2,
aunque, por ser móvil, no tiene un posición fija. En otros diagramas a lo largo
de la obra se indican con mayor detalle los pilares del Árbol, los senderos y las
Tríadas, así como sus tres barreras.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 97


Vemos cómo aparece la idea de 10 esferas, acompañada de tres
tipos de letras. Éstas, en su momento, darán lugar a la aparición
de tres senderos estructurales, las tres Vigas del Árbol de la Vida,
así como siete senderos verticales, que en conjunto forman los tres
Pilares del Árbol, y doce diagonales. El Árbol de la Vida, tal como
se estudia en la presente obra, no siempre presentó la estructura que
llamaremos «clásica» (fig. 2). Hay otras formas de presentarlo, algu-
nas de las cuales se recogen en las figuras 3, 4, 5 y 6.

98 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Figura 3
Los 32 senderos según el Ari
(Según la versión del Sefer Yetzirah de Aryeh Kaplan)

M AN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 99


Figura 4
Los 32 senderos según el Gra
(versión del Sefer Yetzirah de Aryeh Kaplan)

100 V!LLARRUl31A / HAUT / MI LLERA


Figura 5
Los 32 senderos según el Gra, en el diseño
de la edición del Sefer Yetzirah de 1884 hecha en Varsovia

MANUAL DE KAB13ALA H PRÁCTICA 101


Figura 6
Diagrama que representa la primera manifestación según la Kabbalah

Desde la Nada Absoluta de Ayin (j'N) y el Todo de Ayin Sof (c-¡io j'N) se produce
una contracción, zimzum (cii C:l) que genera un vacío en el que la Voluntad
Divina manifiesta los Diez Atributos Divinos, representados por los diez cír-
culos concéntricos. La Voluntad se representa por un rayo de luz que atravie-
sa el conjunto de los círculos hasta su centro más denso, desde la periferia de
la Luz Eterna de Ayin Sof Or (iiN C'¡10 j'N). La alternancia de los colores gris y
blanco en el conjunto de los círculos es una sugerencia del juego de polari-
dades que se manifiesta en el Árbol de la Vida.

102 VILLARRUBIA / HAUT / MI LLERA


AyinSof
Pilar del
Equilibrio

Pilar de la Pilar de la
Severidad Misericordia

Velo del . Velodel

Templo Templo

Figura 7
Estructura básica del Árbol de la Vida

Antes de entrar en el estudio de los significados del Árbol de la


Vida, examinaremos su estructura, así como los nombres y símbo-
los asociados a él. Las figuras 2 y 7 muestran en lo esencial dicha
estructura y sus principales componentes:

MANUA L DE KABBA LAH PRÁCTICA 1 03


• 10 esferas, en hebreo r,,i~m (sefirot), palabra que es el plural fe-
menino de m.,o (sefirá). Este término está relacionado con im9
(sipur), relato, y tiene su misma raíz, lo mismo que 1~9 (sajar),
contar, numerar, y que ,~9 (sefer), libro. La raíz común a todas
estas palabras es 1~9 (sfar), que significa cuenta o empadrona-
o
miento. Las esferas sefirot son los elementos básicos del Árbol
de la Vida, y tal como se indica en la figura 2, tienen un orden
jerárquico, el cual indica su progresiva densificación, desde la
nada,~ (ayin), llamada en el Sefer Yetzirah ;,~ (mah), hasta el
plano material de la 10ª esfera, Maljut, el Reino. En la presente
obra utilizaremos indistintamente las denominaciones hebreas,
sefirá o sefirot, y españolas, esfera o esferas. No se debe conside-
rar como esfera (aunque a veces se le dé el apelativo de móvil u
oculta) a Daat, que aperece representada en la figura 7 de color
gris oscuro.
• 22 senderos o bandas que unen a las esferas entre sí. En reali-
dad, las esferas o sefirot son también senderos, y por eso los
22 enlaces entre las esferas reciben el apelativo de senderos
subjetivos, puesto que se refieren a los aspectos vivenciales
del universo y del hombre, mientras que las esferas se referi-
rían a sus aspectos objetivos. Utilizaremos la denominación
de sendero subjetivo, o simplemente sendero. Cuando nos
refiramos a uno concreto, escribiremos la palabra con inicial
mayúscula (Sendero ... ), y con minúscula al citarlos en senti-
do general o a un grupo de varios. Estos senderos aparecen
representados sólo en la figura 2, pero no en la 7.
• 3 pilares, que están formados por sefirot alineadas verticalmente.
Estos pilares o columnas reciben los nombres de Misericordia
(pilar derecho, de polaridad activa, o yang), Severidad (pilar iz-
quierdo, de polaridad pasiva, o yin) y Equilibrio (pilar central);
los laterales con tres esferas cada uno, y el central con cuatro. Este
último contiene, de arriba a abajo, las esferas I (Keter, La Corona),
VI (Tiferet, La Belleza), IX (Yesod, el Fundamento) y X (Maljut,
El Reino). Por su parte, la columna de la Misericordia contiene las
esferas II Gokmah, Sabiduría), IV Gesed, Misericordia; también
llamada Guedulah, Grandeza), y VII (Netzaj, Victoria o Eterni-
dad). Finalmente, en la columna de la Severidad aparecen las es-

104 ViLLARRUBIA / HAUT / MILLERA


feras III (Binah, Entendimiento o Inteligencia), V (Guevurah,
Rigor; también llamada Din, Justicia, y Pajad, Temor) y VIII (Hod,
Majestad o Esplendor). Se suele colocar en la cúspide de
cada uno de los pilares laterales las letras hebreas iod ('),
en el de la Misericordia, y beth (~) en el de la Severidad, en re-
cuerdo de las iniciales de los nombres de los dos pilares que flan-
queaban la entrada al Templo de Salomón: fajín (-rito-."') y Boaz
(,vi~). Los tres pilares aparecen representados en la figura 7.
• 16 Tríadas, formadas cada una de ellas por tres esferas conti-
guas entre sí. Las Tríadas son de tres tipos: estructurales (con
un vértice apoyado en cada uno de los tres pilares), en total 6
Tríadas; activas, con vértices apoyados exclusivamente en los
pilares de la Misericordia y del Equilibrio, en total 5 Tríadas;
y pasivas, cuyos vértices se apoyan en los pilares del Equili-
brio y de la Severidad, en total 5 Tríadas. Todas ellas muestran
aspectos relativos a la acción, y relacionan el mundo objetivo
de las esferas con el subjetivo de los 22 senderos. Al igual que
éstos, escribiremos la palabra Tríada con la inicial en mayús-
cu1a cuando nos refiramos a una concreta, y con minúscula en
sentido general o al referimos a varias de ellas. No aparecen
representadas explícitamente en las figuras mencionadas, y sí
más adelante, en la sección dedicada a las Tríadas.
• 3 barreras, que señalan tres niveles básicos a trascender: Qeshet,
(el Arco Iris), a la altura de la 9.ª sefirá, Yesod, (también llamada
Qedesh, palabra que alude a la santidad, ~ , kodesh, entendida
en el sentido de carga de información, puesto que a ese nivel se en-
cuentran los registros astrales o akáshicos); Velo del Templo, ~,~
(parojet, en alusión al que separaba el Santo de los Santos en el tem-
plo de Jerusalem), a la altura de la 6.ª sefirá, Ttleret; y el Abismo,
C"MM (tehom, en alusión al mencionado en Génesis 1:2), a mitad de
camino entre los ejes Jesed-Guevurah y Jokmah-Binah; en el cen-
tro de esta barrera, en su cruce con el sendero subjetivo II, se suele
colocar la sefirá oculta o no-sefirá, Daat, aunque en realidad se tra-
ta, tal como se indica más arriba, de una esfera móvil.
• Un rayo relampagueante, que desciende desde la nada de
Ayin hasta atravesar Maljuth, siguiendo en zig-zag el orden
jerárquico de las esferas (fig. 8).

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 1 05


Kether

Maijut

Figura 8 ·
El rayo Relampageante

También llamado descenso del Poder, indica la progresiva densificación de la mani-


festación divina, desde la esfera más sutil, Keter, hasta la más densa, Maljut.
Además de los elementos citados, debe mencionarse a Najushtan
(¡rwn~), una serpiente que apoya su cola en el sendero subjetivo 21, y va
recorriendo los siguientes en orden ascendente hasta llegar al O(o 22).
Esta serpiente simboliza el progresivo ascenso del alma desde la mani-
festación más densa hasta el reencuentro con su esencia divina1• Tam-
bién debe tenerse en cuenta el entorno del Árbol de la Vida, arriba y
1Un desarrollo detallado de este ascenso se recoge en la obra Las tentaciones
en los senderos del Árbol de la Vida. Un recorrido espiritual por el alfabeto hebreo,
de Mª. Selene Camuñas y Jaime Villarrubia, Miriguano Ediciones.

106 Vil.LA RRU BIA / HAUT / MILLERA


debajo del mismo, y a su derecha y su izquierda. Daremos a ese entor-
no, como veremos, el nombre de campo externo, seguido del apelativo
de la zona a la que se refiere.
Sobre el Árbol de la Vida aparece el Ain Sof, nombre genérico
que se da a los llamados «Tres Velos de la Existencia Negativa», o
niveles de inmanifestación, de los que toda manifestación procede:
¡~N (ayin), Nada; =,,o ¡~N (ayin sof, que da nombre a todo el conjun-
to), Infinito; y iiN C,10 ¡~N (ayin sof or), Luz Infinita. La contracción
de estos niveles sobre sí mismos (cm o,,, zim-zum) genera un vacío
en el que se origina todo el proceso de manifestación. La figura 6
muestra un esquema de este proceso.
El Árbol es, en realidad, una representación de cada uno de los
niveles de manifestación. Hay, en efecto, cuatro de estos niveles, que
reciben los nombres de Mundo de la Emanación, Olam ha-Atzilut
(r,m~'il O~,V), el más elevado, luminoso y sutil y en progresivo oscu-
recimiento, los Mundos de la Creación, Olam ha-Briah, (M~...,~;¡ O~,V),
de la Formación, Olam ha-Yetzirah, (iii~~~ o~iV), y de la Acción,
Olam ha-Assiyah, (ii~WVii 0~1V). Sus relaciones se recogen en el es-
quema llamado «Escala de Jacob», que se examinará más adelante.
Cada nivel tiene, pues, su propio Árbol, aunque también se ma-
nifiesta con más «fuerza» en unos puntos concretos de cada uno
de ellos:
• El mundo de la Emanación se manifiesta sobre todo en la Tríada
Suprema, también llamada por ello Tríada de las Raíces; es la
estructural formada por las sefirot Keter, Jokmah y Binah.
• El mundo de la Creación se manifiesta sobre todo en la Tríada
Ética, o de la Conciencia Moral, que es la estructural formada
por las sefirot Jesed, Gevurah y Tiferet.
• El mundo de la Formación se manifiesta especialmente en la
Tríada del Temple de Ánimo, que es la estructural formada
por las sefirot Netzaj, Hod y Yesod.
• Finalmente, el Mundo de la Acción se manifiesta sobre todo
en la 10.ª sefirá, Maljut,
En cada nivel operan, respectivamente, uno o varios nombres
divinos (Emanación), un arcángel (Creación) un orden angélico
(Formación) y un «chakra mundano» (Acción), terminología que
Dion Fortune asigna a las influencias zodiacales. De las diferentes

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTIC/1 107


formas en que se han representado estos cuatro niveles, la más
conocida es la ya mencionada Escala de Jacob (fig. 9). Esta re-
presentación será utilizada corno una valiosa herramienta auxi-
liar para la actualización del Árbol personal. En efecto, al estar
los cuatro niveles ensamblados, por decirlo así, unos con otros,
es posible establecer determinadas correspondencias de ciertos
senderos subjetivos entre diferentes niveles, así corno entre de-
terminadas sefirot. Dichas correspondencias se estudian en la
sección 3.9 de esta II Parte, y el desarrollo del proceso para la
actualización del Árbol personal mediante la Escala de Jacob se
estudiará en la VI parte de la presente obra.
En realidad, la denominación de Árbol, tal como éste se suele
dibujar, con Keter arriba y Maljut abajo, puede originar confu-
siones, pues se trata en realidad de un Árbol cuyas raíces están
en el cielo, y cuyas ramas están en la tierra. Por esa razón la Tría-
da Suprema recibe también el nombre de Tríada de las Raíces,
denominación que emplearemos cuando estudiemos las Tríadas.
Y también por esa misma razón, la gran Tríada inferior Netzaj-
Hod-Maljut recibe el nombre de Inserción en el Mundo. El Tarot,
gran libro cabalístico en imágenes, recoge este hecho en su ver-
sión más auténtica, el de Marsella, duplicando el palo en la sota
de oros, que es el naipe correspondiente, como veremos, a esta
Tríada: mientras la figura muestra uno en su mano derecha, deja
ver otro en el suelo, a sus pies.
Independientemente de estos aspectos, hay una serie de ener-
gías que, si bien no tienen una ubicación precisa en el Árbol, se
pueden hacer corresponder con diferentes Tríadas, en función de
los significados de éstas, junto con los de los arcanos menores del
tarot asociados a las diferentes esferas, y los propios significados
de los nombres de dichas energías. Son éstos los llamados genios
o ángeles de la Kabbalah, que en número de 72, y cada uno con su
propio nombre, actúan como mensajeros (eso es lo que significa la
palabra «ángel») que llevan información entre unas y otras zonas
del Árbol. En el capítulo correspondiente se analizará cabalística-
mente el nombre de cada uno de ellos y su correspondencia con
cada Tríada, y por lo tanto la función concreta que cada uno de
ellos desempeña.

108 V !LLARRUBIA / H AUT / M ILLERA


DIVINIDAD
Adam Kadmon
ATZILUT
Mundo de la
Emanación
ESPÍRITU
Cielo

BRIAH
Mundo de la
MENTE Creación
Arquetipos

YETZIRAH
Mundo de la
Formación
ASTRAL
Paraíso y
Purgatorio
ASSIAH
Mundo de la
Acción
FÍSICO
Naturaleza

Reino de Reinos

Figura 9
Escala de Jacob

En las secciones que siguen se incluyen diversos apartados para cada una de las
sefirot. El estudiante podrá encontrar, a veces por vías insospechadas, múltiples
sugerencias que le ayudarán a comprender mejor el sentido y el significado de
cada esfera del Árbol de la Vida. Es recomendable que se deje llevar por la in-
tuición, y aplique activamente la analogía (¿a qué se parece?), la inducción (ir
de lo particular a lo general, más que al revés) y la asociación de ideas. Pero,
en cualquier caso, la tarea debe realizarse con calma, sin prisas, dando tiempo a
que las ideas que va a recibir germinen y maduren en su interior. Pues prisas y
Kabbalah son malos compañeros de viaje ...

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 109


No se profundizará demasiado en estos aspectos, y sí en los
que se refieren a las sefirot, los senderos subjetivos, las Tríadas y
sus respectivas relaciones, incluidos determinados aspectos de los
genios de la Kabbalah. Al pretender realizar una obra eminente-
mente práctica, orientada sobre todo al autoconocimiento y a la in-
vestigación sobre el tikún, hemos prescindido de ampliar materias
que, por otra parte, se encuentran suficientemente desarrolladas
en la bibliografía que se ha insertado al principio de la presen-
te obra. No obstante, para quienes deseen profundizar más en la
simbología y significados del Árbol de la Vida, se recomiendan las
obras La Kabbalah Mística, de Dion Fortune; Guía Práctica al Simbo-
lismo Qabalístico, de Gareth Knight, y Árbol de la Vida, de Z'ev ben
Shimon Halevi.

3. SíMBOLOS Y SIGNIFICADOS DEL ARBOL DE LA VIDA

3. 1. Las sefirot

ara su estudio se seguirá el orden jerárquico, empezando en


P Kether y terminando en Maljut. Dentro de cada esfera se segui-
rá el siguiente orden de conceptos:
• Nombre hebreo de la esfera, nombres o títulos adicionales,
y significado de todos ellos. Desarrollo cabalístico (temurá,
guematria y/ o notarikón), que incluye atbash (sustitución de
cada letra hebrea por su opuesta en número de orden en el
alfabeto).
• Nombre divino, que corresponde al Mundo de la Emanación,
o nivel de Atzilut, y otros nombres divinos asociados exclu-
sivamente a la esfera en cuestión. Cuando sea posible, sus
significados. Desarrollo cabalístico (temurá, guematria y/ o
notarikón). Los valores numéricos pueden desarrollarse por
los estudiantes usando el Diccionario Numérico Cabalístico
(ver Bibliografía), lo que en ocasiones puede aportar intere-
santes sugerencias suplementarias.
• Arcángel de la esfera, correspondiente al Mundo de la Crea-
ción, o Briah.

11 Ü V1 LLARRUBIA / H AUT / MIi. LERA


• Orden angélico de la esfera, correspondiente al Mundo de la
Formación, o Yetzirah. Tanto los arcángeles como los ángeles
pueden considerarse como aspectos particulares o limitados
de la Energía Única, que es ilimitada.
• Chakra mundano de la esfera. Es el que recoge las influen-
cias de las energías a nivel denso (Mundo de la Acción,
o Assiyah) y se representa, en su caso, por los planetas tal
como los describe la Astrología. Seguimos en este apartado
la denominación utilizada por Dion Fortune y otros autores.
Los cabalistas clásicos lo han llamado en ocasiones «planeta»,
pero como veremos, este título puede no ser el más adecua-
do, ya que no siempre es un planeta en sentido astrológico el
correspondiente a una esfera concreta: tal es el caso de Keter,
Jokrnah y Maljut.
• Ángeles regentes o genios asociados a las cartas del tarot re-
lacionadas con cada esfera.
• Símbolos, colores, figuras, elementos y polaridad asociados a
la esfera, que enriquecen los significados. Incluye correspon-
dencias con los naipes del tarot y con las piezas del ajedrez,
considerados ambos como juegos iniciáticos. Cuando proce-
de, correspondencia con metales.
• Guía resumida de interpretación, que incluye un resumen
de las correspondencias con el cuerpo humano, las cuales
se contemplan desde dos puntos de vista: «Árbol de frente»,
que es como un espejo del sujeto, y «Árbol de perfil», dando
cara a la columna izquierda.
Las sefirot del pilar central, l.ª (Keter), 6.ª (Tiferet), 9.ª (Ye-
sod) y 10/ (Maljut) indican niveles de consciencia, mientras
que las de los pilares laterales deben considerarse siempre
agrupadas por pares polares: Jokmah-Binah (eje espacio-tem-
poral), Jesed-Guevurah (eje ético) y Netzaj-Hod (eje de la per-
sonalidad). Estos aspectos se desarrollan con mayor detalle en
secciones posteriores.
El capítulo termina con una serie de consideraciones generales
sobre las sefirot, reseñándose a continuación un apartado corres-
pondiente a Daat, la sefirá oculta o no-sefirá.

MANUAL DE KA13BALAH PRÁCTI CA 111


3.1. 1. Primera sefirá: KETER. -,:,~, La Corona
Valor numérico: 620.

Otros títulos de la sefirá:


OR PNIMI, ~~~~~ iiN, Luz Interna. V. n. : 397.
NEKUDÁ RISHONÁ, miwNi :ii¡,~, Punto Primordial. V. n.: 721.

Por temurá, el nombre de la esfera contiene la palabra i.n (tar),


explorar, investigar. La caf (~) inicial sugiere una copa o cáliz,
un receptáculo que puede contener una bebida. Por guematria,
el valor 620 proporciona dos conceptos muy interesantes:~,~~
(mifrash), que significa línea divisoria de las aguas, y c~ivw (shea-
rim), puertas, entradas, y también medidas y capítulos. Todo ello
apunta a la naturaleza de esta esfera: es la puerta de entrada a la
manifestación, y a la vez la frontera entre ésta y la inmanifesta-
ción. Su naturaleza es pasiva o yin respecto al Ayin Sof; por eso
se dice que Keter es el Maljut de lo Inmanifestado. Se sugiere la
creación de universos sucesivos, creación de la que éste no sería
sino un capítulo más. La idea de exploración o investigación está
recogida en un bello poema de Hakim Jami, sufí afgano que vivió
en el siglo XV:

Desde toda la Eternidad el Bienamado descorrió el velo que ocultaba


Su Belleza, en la soledad de lo invisible.
Acercó a Su rostro el espejo, para mirarse, y desplegó ante Sí mismo su
encantadora hermosura.
Era Él a un tiempo el espectador y el espectáculo; únicamente Su mi-
rada había contemplado el Universo.
Todo era Uno, no había dualidad, ni germen o huella de «tuyo» o «mío».
El vasto orbe de los cielos, con todo cuanto en él penetra y de él deriva,
estaba escondido en un solo punto.
La Creación dormía el sueño de la inexistencia, como un niño que no
ha alentado todavía.
Los ojos del Bienamado, al mirar el no ser, consideraban la nada como
existencia.
Aunque Él contemplaba Sus atributos y cualidades como un con-
junto perfecto de Su propia esencia, deseó, sin embargo, admirarlas en

11 2 VIL LARRUBIA / HAUT / MILLERA


otro espejo, y que cada uno de Sus eternos atributos se manifestara con
distinta forma.
Por eso creó los verdes campos del Tiempo y del Espacio y el jardín
vivificante del mundo, para que cada rama y cada hoja y cada fruto mani-
festara sus respectivas perfecciones.

El atbash de Keter es ~N,,conjunto de letras que no poseen nin-


gún significado en este orden, y que con otras ordenaciones pro-
duce palabras sin relación con la naturaleza de la sefirá. Sin embar-
go, la suma de valores de estas tres letras es 34, que proporciona
dos conceptos de profunda relación con ella: .:N ',tie (El Ab), Dios

divinos de Keter, y ,¡
Padre, que como veremos inmediatamente es uno de los nombres
(dal), puerta, ya que lo es de entrada desde
el Ayin Sof a la Manifestación.

Nombre divino principal, regente de la esfera en el Mundo de la


Emanación:
EHIÉ. n,iN - V. n. : 21. El Que Es. Este nombre evoca al Infinito (N)
aspirando el universo anterior (M) hasta que sólo queda un punto
(t a partir del cual se exhala otra creación (M).
Otros nombres divinos, asociados exclusivamente a la 1.ª sefirá:
ADAM HA-KADMON: j"OiJ'M OiN - V. n. : 250. El Adán Celestial.
ADAM KADMON: jbi)'M OiN - V. n.: 245. Variante del anterior.
EHIÉ ASHER EHIÉ: n~MN iWN n~MN - V. n. : 543. (Es la expre-
sión completa del nombre principal). Yo soy el Que soy (Exo-
do, 3:14).
EL AB: .:N ,tie - V. n. : 34. (Nombre de inspiración cristiana).
Dios Padre.
ILAT HA-ILOT: M1,VM M'V - V. n.: 1011. La Causa Primera.
NIKRÁ PSHUT: M1rz!~ ni¡,~ - V. n. : 945. (Asignado por la O . Gol-
den Dawn). El Punto Pequeño.
RAM VE-NISHÁ: Nrz!~1 oi - V. n.: 597. Elevado y Exaltado.
RISHON RÚAJ ELOHIM: o~n,N nii jirz!Ni - V. n. : 857. Primer
Espíritu de Dios (Génesis, 1:2).
SIBAT HA-SIBOT: M1:lCM NO - V. n. : 935. Causa de las causas.
VE: m- V. n. : 11. (El nombre más oculto de Dios. No se pronuncia).
YOTZER RESHIT: m,,~-, ,~ - V. n. : 1217. Creador del Principio.

MAN UAL DE KABllALAH PRÁCTICA 113


Arcángel: METATRÓN, regente de la esfera en el Mundo de la Crea-
ción. fi1tQtQ~ - V. n.: 314. De dice que Metatrón es el patriarca Enoc,
que no murió, pues fue arrebatado al cielo. El valor numérico es
el mismo que el de ¡,m (rajok), remoto, inaccesible, pero por te-
murá el nombre contiene la raíz toro~ (metet), caída, desplome. Así,
Metatrón tendría un aspecto de pérdida de la cualidad divina, que
quedaría reservada a la trascendencia del Ayin Sof. En este sentido,
el ideario cátaro apuntaba a la creación del mundo por un demiur-
go, de naturaleza más bien oscura, y no al propio Dios.
Orden angélico: JAIOTH HA-KADESH, regentes de la esfera
en el Mundo de la Formación. toi¡,;, Mi~n - V. n.: 833. Santas
Criaturas Vivientes. La santidad debe entenderse como acceso
a la máxima información, o poseedor de la misma. En efec-
to, el notarikón de la palabra toi¡, (kodesh), santidad, muestra
una llave(¡,), una puerta (i) que es a la vez el Verbo Creador,
y la consciencia (to); el significado ontológico de esta palabra
es, por lo tanto, la apertura a toda la información, el fin de la
ignorancia; de ahí que un gran iniciado como Dante escribiera
que el infierno es el lugar destinado a los que han perdido el
don de la inteligencia (Divina Comedia, Infierno, Canto III).
El valor numérico es el mismo que el de Mi.~M~li (hijatbut), es-
critura. De ahí la gran importancia dada a los textos sagrados
en el judaísmo y la Kabbalah.
Chakra mundano: RESHIT HA-GUILGALIM, regente de la es-
fera en el Mundo de la Acción. e~,,,,;, M~~Ni, Primum Mobile,
Primeros torbellinos. V. n. : 1032. Se le asigna en ocasiones co-
rrespondencia con el planeta Neptuno.
Símbolos: El punto. La svástica. La corona.
Imagen mágica asociada: un rey anciano, barbudo, visto por su
perfil derecho, tal como lo indica el Zohar.
1
Experiencia espiritual: Unión con Dios.
\ Virtud: Logro. Completar la Gran Obra, la consciencia de Brahma.
\ Vicio: No tiene.
~ Correspondencia en el ser humano: El cráneo (de frente), y espe-
cialmente la coronilla (de frente y de perfil).
~ Colores: en Atziluth: Brillo.
en Briah: Brillo blanco puro.

114 VILLARRUBIA / HAUT / MI LLERA


en Yetzirah: Brillo blanco puro.
en Assiyah: Oro blanco, manchado.
Correspondencias con el tarot: los cuatro ases:
As de bastos, raíz de los poderes del fuego.
As de copas, raíz de los poderes del agua.
As de espadas, raíz de los poderes del aire
As de oros, raíz de los poderes de la tierra.
Ángeles regentes de los cuatro elementos, asociados a los cuatro ases:
Fuego, asociado al As de Bastos: ',NiN, AREL, v. n. 232. Con
el mismo valor numérico, iiN ~ii~ (ihí or), Hágase la luz
(Génesis 1:3).
Agua, asociado al As de Copas: i¡i~',~, TELIHED, v. n. 58.
Con el mismo valor numérico, ¡n (jen), gracia, belleza, pa-
labra que es a la vez el notarikón de la sabiduría secre-
ta, iiiMC~ ii~~n (jokmah nistará), la Kabbalah; también ¡iN
(ozen), oído, necesario para la transmisión oral del cono-
cimiento.
Aire, asociado al As de Espadas: ¡en, JASÁN, v. n. 118. Con
el mismo valor numérico, =,~;, ~~N (aví hakaf), el ibis, ave
asociada en la mitología egipcia al Thot, el Hermes Tris-
megisto griego, el trasmisor de la sabiduría. Por otra par-
te, el nombre contiene la palabra en (jas), proteger, sal-
vaguardar, en concordancia con el significado del naipe
asociado.
Tierra, asociado al As de Oros: ~,,~, KORAB, v. n. 228. Con el mis-
mo valor numérico, c.,-¡ }'V (etz jayim), el Árbol de la Vida .
Correspondencia con el ajedrez: el rey blanco. No puede apenas
hacer nada por sí mismo, pero su presencia en el juego es fun-
damental.
) significados básicos: El Punto primordial. El Origen. La raíz de
todas las cosas. El Absoluto. La idea de Absoluto. La chispa di-
vina que todos llevamos escondida en nuestro ser más profun-
, do. El loto de mil pétalos (chakra sahasrara).
j Elemento: Fuego, como potencialidad. Aire, como expresión.
Polaridad: Negativa.

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 115


3. 1.2. Segunda sefirá: JOKMAH. MQ~M, Sabiduría
Valor numérico: 73

Por temurá, el nombre de la esfera puede leerse no i'T~ (ki moáj), como
un cerebro, y con diferente vocalización, (ko moáj), aquí [hay] un ce-

numérico es el mismo que el de la palabra e,~


rebro, en línea con el nombre de la esfera. Curiosamente, el valor
(golem), nombre tanto
de un hombre artificial o robot construido con técnicas cabalísticas,
como una palabra que aparece en el salmo 139:16, materia informe.
Lo cual es lógico, puesto que la forma no aparece sino a partir de la
tercera esfera, Binah, tratándose, por consiguiente, de energía toda-
vía no moldeada. Pues, como dice Dion Fortune, «Jokmah no es sino
Kether puesto en movimiento».

Nombre divino principal, regente de la esfera en el Mundo de la


Emanación: YAH. ~ (en el judaísmo no se pronuncian así, sino
Adonaí, mi Señor)- V. n. : 15. Eterno. Se considera una abreviatura
del Tetragrama, i'T'VT'. Puede observarse que este nombre no es sino
la segunda parte del nombre principal de Keter, m,t,C (ver antes),
y evoca la expansión del aliento a partir del Punto primordial.
Otros nombres divinos, asociados exclusivamente a la 2. ª sefirá:
AB: .=N - V. n. : 3. Padre.
IYAH (pronunciado Adonai): ~~ - V. n. : 20. Simboliza, se dice,
los ojos de Dios.
Arcángel: RATZIEL, regente de la esfera en el Mundo de la Crea-
ción. ,N~::i:, -
V. n.: 331. Este nombre está relacionado con la raíz
ri (ratz), mensajero, correo, y también corredor, velocista, lo
que indica que es quien trae la energía necesaria para poner en
marcha el proceso creativo, y a la vez que este proceso es rápi-
do. Su valor numérico, 331, proporciona la palabra ,Nt:: (shaal),
preguntar, interrogar, lo que nos muestra el proceso de auto-
conocimiento emprendido por Dios, tal como relataba Hakim
Jami (ver antes, Keter) en su poema sobre la creación.
Orden angélico: OFANIM, regentes de la esfera en el Mundo de la
Formación. e~)~\~ - V. n. : 187. Ruedas. Las ruedas de fuego están
relacionadas con la merkabah, el carro de fuego que se le apareció al
profeta Ezequiel. Con este nombre alusivo al carro se ha desarrolla-

116 VILLARRUBIA / H AUT / MILLERA


do una técnica de meditación cabalística. El singular de ofanim es
afán (j~iN), con el mismo valor numérico que kabbalah (ver antes I, 7),
lo que sugiere un vehículo que facilita el proceso de la creación.
Chakra mundano: MAZLOTH, regente de la esfera en el Mundo
de la Acción. r,,i,,o, el Zodíaco. V. n. : 483. Se le ha relacionado
modernamente con el planeta Urano, por el carácter eléctrico de
esta sefirá. El valor numérico proporciona también la expresión
¡roirzt i,m (naja! shoten), torrente, en perfecta correspondencia con
la naturaleza torrencial de la energía de Jokmah.
Símbolos: El lingam, o falo sagrado. La letra iod (~) del Tetragrama ii'n".
El menhir. La torre. El Cetro del Poder, en alto. La línea recta.
; Imagen mágica asociada: una figura masculina con barba.
J, Experiencia espiritual: Visión de Dios.
J ¡Virtud: Devoción.
J¡Vicio: No tiene.
J Correspondencia en el ser humano: el ojo, el oído y el hombro de-
rechos; el lado derecho del cuello (de frente); los oídos (de per-
fil). Al interpretar el Árbol nativo debe tenerse en cuenta este
doble significado. El hemisferio cerebral derecho (de frente).
El cerebelo y el bulbo raquídeo (de perfil).
j Colores: en Atziluth: Celeste puro.
en Briah: Gris.
en Yetzirah: Gris perla iridiscente.
en Assiyah: Blanco con manchas rojas, azules y amarillas.
,/ Correspondencias con el tarot: los cuatro doses:
Dos de bastos: dominio.
Genios asociados: 49º, Vehuel, i,i-c,m, v. n. 48.
50º, Daniel, i,i-c~~,, v. n . 95.
Dos de copas: amor.
Genios asociados: 67º, Eiael, i,i-cv~i-c, v. n. 112.
68°, Jabuiah, ii~i.:m, v. n . 31.
Dos de espadas: paz restablecida, equilibrio de fuerzas.
Genios asociados: 13º, lezalel, ,i-ci,,\ v. n. 78.
14º, Mebahel, i,Nii~O, v. n . 78.
Dos de oros: El cambio armónico. La oposición a este cambio
transforma su acción en una trituradora que disuelve o deshace
los «grumos» energéticos.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 11 7


Genios asociados: 31º, Lekabel, ~H~~~, v. n. 83.
32º, Vasariah, i'T.-,wi, v. n. 521.
Correspondencia con el ajedrez: el alfil blanco de rey, y la torre
negra de dama. Desde el punto de vista del bando blanco, pue-
de «recibir la visita» del rey en su casilla, pero no puede ir a la
casilla de su rey. Desde el punto de vista del bando negro, la se-
firá está gobernada por una pieza potente, pero poco flexible.
Significados básicos: El Espacio. La Energía. Urano. El Padre
Cósmico, y por extensión, la figura arquetípica del Padre.
Los antepasados masculinos. Los varones de más edad. Yang.
Lo luminoso. El contenido del recipiente. El chakra Ajna, entre
esta sefirá y la siguiente, Binah.
Elemento: Fuego, como potencialidad y como expresión.
Polaridad: Positiva.

3.1.3. Tercera sefirá: 8/NAH. i"T)~~, Inteligencia


Valor numérico: 67

Otros títulos de la sefirá:


AIMÁ: n~~H - La Madre Fértil y Brillante. V. n.: 56.
ARETZ ELIONAH: m,~V riH -Tierra Superior. V. n.: 462.
IMMÁ: N~N - La Madre Oscura y Estéril. V. n.: 42.
JORSIÁ: H~i,n -El Trono. V. n.: 297.
RUÁJ IMMÁ: H~N n,i - Espíritu de la Madre. V. n.: 256.
TEBUNAH: i'TmM - Comprensión, Entendimiento, Razón. V.n.: 463.

Por temurá, el nombre de la esfera puede leerse jM ~~ (bi hen), en


mí [están] ellas. ¿Y quiénes son ellas? Recordemos a este respecto
el texto básico del taoísmo chino, el Tao-te-King, que en su frag-
mento I dice: «Sin nombre es el principio del universo, y con nom-
bre es la madre de todas las cosas». De la misma forma que Jokmah
se relaciona con el padre, la naturaleza de Binah es la de la madre.
El «nombre» a que alude el Tao-te-King es equivalente a las formas
con las que Binah reviste la energía recibida de Jokmah. De acuerdo
con esta misma naturaleza, el valor numérico 67 proporciona las
palabras to~M (jenet), germen, y M~C (sabah), vieja, anciana, abuela.

11 8 VILL/\RRUBIA / HAUT / MILLERA


Como veremos, ambas expresiones tienen una profunda relación
con lo que Binah representa en el Árbol de la Vida. Por su parte,
el atbash de Binah es l'tl~tv, que suma 439, que incluye la palabra
ero (shem), nombre, que se utiliza para aludir al impronunciable
n,n~ (traducido correctamente como Eterno), y proporciona dos le-
tras sobrantes, ti y i, cuyos significados son, respectivamente, bien
y justicia. La guematria del atbash proporciona por su parte n,,~
(galut), destierro, diáspora, exilio, como lo es el de la Energía, que
comienza su limitación en el mundo de la Forma.

Nombre divino principal, regente de la esfera en el Mundo de la


Emanación:
YAHVÉ o YEHOVÁ, Mff (los judíos no lo pronuncian así, sino
Adonaí, mi Señor; o Ha-Shem, el Nombre) . V. n . : 26. Eterno.
Se considera en el judaísmo el nombre más importante, aunque
en el Árbol de la Vida no corresponda a la esfera más elevada.
Si se compara este nombre con el de las esferas l.ª y 2.a, podemos
observar que, respecto a M~N (Ehié), mantiene las dos letras he,
cambiando la a1ef por la iod y la iod por la vav. Respecto a n~ (Yah)
ha añadido las letras vav (i) y he (M). El espacio en expansión que
aparecía en Jokmah es curvo, tal como nos enseña la relatividad,
por lo que en algún punto la energía chocará consigo misma,
y de las interferencias de ese choque surgirán ondas que serán el
primer arquetipo de las formas, y también el tiempo, como cuarta
dimensión del espacio. La ciencia nos dice que eso ocurrió cuan-
do el universo, en su expansión, fue perdiendo densidad hasta
hacerse transparente, tal como es ahora. En un universo opaco,
como lo era en los primeros momentos tras el big-bang, el tiempo,
sencillamente, no existía, estaba totalmente detenido, tal como
ocurre en el interior de los agujeros negros.
Otros nombres divinos asociados a la 3. ª sefirá:
HA-SHEM: eron - V. n.: 345. El Nombre.
SHEM HA-VAYAH: n~,n ero. - V. n.: 366. Nombre Esencial.
SHEM HA-MFORASH: rv-,~r, ero - V. n.: 965. Tetragrammaton.
Arcángel: TZAFKIEL, regente de la esfera en el Mundo de la
Creación. 'Ni'~l - V. n.: 311. El nombre está relacionado con
la raíz ¡,~i (tzefek), peritoneo. Nuevamente alusión al vientre

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 119


como sede de la gestación, y al envoltorio, pues eso es precisa-
mente el peritoneo respecto a los intestinos. Su valor numérico
proporciona la palabra w,~~ (guibush), cristalización, concen-
tración, consolidación. ¿No es esa, precisamente, la acción que
desarrolla Binah?
Orden angélico: ARALIM, regentes de la esfera en el Mundo
de la Formación. o~~NiN - V. n. : 282. Héroes. Realmente, es
heroico el acto de la energía libre de encerrarse en formas !i-
mitadores. Pero se trata de un sacrificio necesario, pues la vida
necesita un receptáculo, un «envase» para manifestarse. Por eso,
no resulta sorprendente que el valor numérico 282 también
proporcione c~~n n,,(ruaj jayim), soplo de vida, y también es-
píritu de vida.
Chakra mundano: SHABETAI, regente de la esfera en el Mundo
de la Acción. ~Nri~ru, Saturno. V. n.: 713.
Otro nombre de este planeta: KIYUN (¡,~~), con v. n. 86, el mismo
que el del nombre divino ELOHIM (o~n~N).
La Madre y el Tiempo van juntos en esta esfera, lo que, si se
mira bien, es de todo punto lógico, pues la cualidad de madre
implica un tiempo de gestación. Pero el tiempo de gestación es
también tiempo de reposo, y por eso se celebra como festivo el
día de Saturno, el ;,~w (shabat) .
Símbolos: El yoni, u órgano sexual femenino en su aspecto sa-
grado. La copa o el cáliz. La Túnica Externa que cubre. El en-
voltorio.
Imagen mágica asociada: una mujer madura.
J Experiencia espiritual: Visión de la Aflicción.
~ Virtud: Silencio.
J Vicio: Avaricia.
j Correspondencia en el ser humano: El ojo, el oído y el hombro
izquierdos, y el lado izquierdo del cuello (de frente). Los ojos,
la nariz y el sistema olfativo (de perfil) El hemisferio cerebral
izquierdo (de frente).
\ Colores: en Atziluth: Carmesí.
en Briah: Negro.
en Yetzirah: Marrón oscuro.
en Assiyah: Gris con manchas rosadas.

120 ViLLARRUBIA / HAUT / MI LLERA


/ Correspondencias con el tarot: los cuatro tres:
Tres de bastos: fuerza establecida.
Genios asociados: 51 º, Hajasiah, i!~~ni!, v. n. 328.
52º, Imamiah, ii~oov, v. n. 165.
Tres de copas: abundancia, fertilidad.
Genios asociados: 69º, Rohel, ~NiiNi, v. n. 237.
70º, Yabamiah, ii~O~\ v. n. 67.
Tres de espadas: dolor.
Genios asociados: 15º, Hariel, ~N~i!, v. n. 246.
16º, Hakamiah, i!~O¡,ii, v. n. 160.
Tres de oros: las obras materiales.
Genios asociados: 33º, Iejuiah, ii~in\ v. n . 39.
34º, Lehajiah, i!~i'T~, v. n. 58.
Correspondencia con el ajedrez: el alfil blanco de dama, y la torre
negra de rey. Desde el punto de vista del bando blanco, puede
«recibir la visita» de la dama (representada por la 6.ª sefirá, Tife-
ret) en su casilla, pero no puede ir a la casilla de su dama. Desde
el punto de vista del bando negro, y como en el caso anterior la
sefirá es gobernada por una pieza potente, pero poco flexible.
J Significados básicos: El Tiempo. La Forma. Saturno. La Madre Cós-
mica, y por extensión, la figura arquetípica de la Madre. Las an-
tepasadas femeninas. Las mujeres de más edad. Yin. Lo oscuro.
La matriz. El recipiente que contiene. El hemisferio cerebral izquier-
do. El chakra Ajna, entre esta sefirá y la anterior, Jokmah.
Elemento: Fuego, como potencialidad y Agua, como expresión.
Polaridad: Negativa.
J Correspondencia con metal: OFERET, m~,v, plomo. V. n.: 756.
Las dos primeras sefiroth no tienen correspondencia con metales,
por su naturaleza exclusivamente energética. El valor numérico co-
incide con el de expresiones relacionadas con el tiempo, pero siem-
pre en plural, en consonancia con la sentencia del Tao-te-King ex-
puesta más arriba: rl'U~ (shanot), años; y ri,i~m (sefirot), eras, épocas,
y también las esferas del Árbol de la Vida. Por otra parte, dentro del
nombre hebreo de este metal, encontramos V, (ra), mal, en alusión
al aspecto restrictivo de la sefirá, así como a la aparición del vicio,
ligado a la de la forma; yi,v ('ar), piel, concepto estrechamente rela-
cionado con el simbolismo de Binah.

MAN UA L DE KABBALA H PRÁCTICA 121


3. 7.4. Cuarta sefirá: JESED. it:)M, Misericordia, Amor
Valor numérico: 72

Otros títulos de la sefirá:


GUEDULAH, ;¡',iJ, Grandeza. V. n.: 42.
HEJAL AHAVÁ, ii~iiN ',:m, Palacio de Amor. V. n.: 78. Este títu-
lo se aplica en relación al Mundo de la Creación, Briah.

El nombre de la esfera contiene la palabra in (jad), uno, pues el


amor no es un sentimiento, sino una fuerza que tiende a la uni-
dad. Y también contiene on (jas), proteger, salvaguardar, pues eso
es el efecto de la misericordia. La guematria de Jesed, 72, apor-
ta unos conceptos interesantísimos. Destacamos ,,e~ (be-sod),
en secreto, ya que actúa desde lo profundo del corazón;¡~,;¡ (hezin),
alimentar, nutrir, mantener, pues la alimentación está relaciona-
da con esta sefirá; y, sobre todo, ',iJ',J (guilgul), término que sig-
nifica tanto cfrculo o esfera, como causa, o como reencarnación.
Es evidente el carácter amoroso de la reencarnación, desde el
punto de vista de la Kabbalah, pues obedece al hecho de no haber
encontrado todavía la chispa perdida de la Shejiná (presencia di-
vina en la Tierra, aspecto femenino de Dios) que nos comprome-
timos a buscar y que, como princesa encerrada en algún remoto
castillo, espera que vayamos a rescatarla de la guarda del dragón
de la ignorancia. El atbash de Jesed es ¡,no, de valor numérico 168
y sin significado en ninguna de sus permutaciones; la guematria;
en cambio, proporciona v,~i
(tzabuá), hipócrita, en línea con uno
de los vicios de esta esfera, como se verá de inmediato, y esta
misma palabra, leída tzaboá significa hiena. Recordemos en este
sentido el film «El rey león», en el que las hienas establecían una
tiránica dictadura sobre el resto de los animales, siendo así que la
tiranía es otro de los vicios de la sefirá. Por su parte, leyendo las
letras por sus significados encontramos Recibe(¡,) el fundamento
y el secreto (O) de la vida (n), que no es otro que el Amor. Jesed es
la primera sefirá por debajo del Abismo, lo que indica que en su
naturaleza se inicia el proceso de separación entre sujeto y objeto,
que terminará conduciendo a la Individualidad en Tiferet.

122 YILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Nombre divino principal, regente de la esfera en el Mundo de
la Emanación: EL, ,N. V. n .: 31. La comparación de este nombre
con el de las esferas anteriores muestra la reaparición de la letra
álef (N) con que comenzaba el nombre principal de la l.ª sefirá,
y la aparición de una letra nueva, la lámed (',). Ello sugiere las
ideas de infinito y movimiento (y también corazón), indicando que
ahora la energía está pulsando en un gigantesco sístole-diástole.
Como la primera letra del nombre significa vida, que ya estaba la-
tente en la segunda sefirá, Jokmah, indica que ahora esa vida está
presta para nacer, lo que se producirá al surgir la individualidad
en Tiferet.
Otros nombres divinos, asociados exclusivamente a la 4. ª sefirá:
BAAL HA-BRAJOT: r,i~i~i'T
diciones.
'V~ - V. n .: 735. Señor de las Ben-

BAAL HA-RAJAMIM: c~~nii'T 'l1~ - V. n .: 405. Señor de la Mise-


ricordia.
BAAL NEJAMOT: r,i~m
dias.
'V~ - V. n.: 606. Señor de Misericor-

BAAL RAJAMIM: r~m 'l1~ - V. n.: 400. Señor de Misericor-


dias.
HA-KADOSH: ruii¡,M - V. n.: 415. El Uno Santo.
KADOSH: rui,¡, - V. n.: 410. El Uno Santo.
Arcángel: TZADKIEL, regente de la esfera en el Mundo de la
Creación. ',Nj,i~ - V. n.: 235. El nombre está relacionado con ¡,ii
(tzedeq), justicia o equilibrio. Se trata de la justicia interna, que
se manifiesta, como veremos, en la justicia externa (?~,, din) de
la 5.ª sefirá. Jesed, a través de su arcángel Tzadkiel. Suministra
«combustible» para la acción de Gevurah, a semejanza de un le-
ñador (c~JV ~~in, joteb etzim), palabra que tiene también el valor
numérico de 235.
Orden angélico: JASHMALIM, regentes de la esfera en el Mun-
do de la Formación. C~~wn - V. n. : 428. Eléctricos o Brillan-
tes. La palabra ,~wn (jashmal) ha sido adoptada por el hebreo
moderno para designar la electricidad. Pero la naturaleza de
los Jashmalim, establecida mucho antes del desarrollo de la tec-
nología actual, es precisamente esa, la de eléctricos. La vida,
simbolizada por la letra jeth (n) es un proceso eléctrico, de na-

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 123


turaleza a la vez ígnea (W) y acuática(~), en constante cambio,
en constante movimiento(',). Sin embargo, la vida que mani-
fiesta el orden angélico de los Eléctricos no está generada por
ellos, pues es sólo un reflejo (iiin iiN, or jozer, v. n . 428) de la que
se genera en la 2.ª sefirá Jokmah.
Chakra mundano: TZEDEK, regente de la esfera en el Mundo
de la Acción. ¡,i::t, Júpiter. V. n.: 194. Nuevamente aparece la
raíz tzdq, presente en todos los niveles de la esfera. El carác-
ter expansivo de Júpiter concuerda perfectamente con las ideas
de grandeza y de alimentación, que ya aparecían en el análisis
cabalístico del nombre de la sefirá. Como esfera situada en un
polo del eje ético, representa el bien, entendido como fuerza que
tiende a expandirse.
Otro nombre del chakra mundano: GABAB . .:i.:i~. V. n.: 7. Con
el mismo valor numérico aparecen N.:ii (dové), abundancia;
i.:iN (aved), perderse, extraviarse, y también morir, perecer;
y .:iNi (daav), entristecerse, indicando con todo ello el carácter
ambivalente de la sefirá, cuando se manifiesta en los niveles
más densos del Mundo de la Acción, Assiyah.
Símbolos: La figura sólida. El tetraedro. La pirámide. La cruz de
brazos iguales. La esfera (recordemos que la palabra hebrea gil-
gul, que significa esfera, tiene el mismo valor numérico, 72, que
el nombre de la sefirá). El basto. El cetro. El cayado.
Imagen mágica asociada: un rey poderoso, coronado y entronizado.
Experiencia espiritual: Visión del Amor.
Virtud: Obediencia, entendida como sumisión a las leyes de la
Naturaleza. En lenguaje taoísta diríamos «fluir con el Tao». O,
si recordamos a Meister Eckhart: «Dios permite que gocemos
a manos llenas de las bendiciones de la existencia, con la única
condición de que sepamos soltarlas en el mismo instante en
que se terminan». (Citado por Arnaud Desjardins en «Le Ve-
danta et l'inconscient» ).
Vicios: Fanatismo. Hipocresía. Glotonería. Tiranía.
Correspondencia en el ser humano: El hígado, la mano derecha
(de frente). La espalda con sus huesos y músculos (de perfil).
Colores: en Atziluth: Violeta oscuro.
en Briah: Azul.

124 V!LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


en Yetzirah: Púrpura oscuro.
en Assiyah: Azul profundo moteado de amarillo.
Correspondencias con el tarot: los cuatro cuatros:
Cuatro de bastos: la obra perfeccionada.
Genios asociados: 53º, Nanael, ,NN.l.l, v. n. 132.
54º, Nithael, ,NM~.l, v. n. 491.
Cuatro de copas: goce.
Genios asociados: 71 º, Hayaiel, ,N~il, v. n. 56.
72º, Mumiah, n~~,~, v. n . 101.
Cuatro de espadas: descanso en la pelea.
n~,~,,
,N~,~,
Genios asociados: 17º, Lauviah,
18º, Kaliel, v. n . 91.
Cuatro de oros: poder terrenal.
v. n . 52.

Genios asociados: 35º, Javakiah, n~¡,,~, v. n. 141.


36º, Menadel, ,Ni.l~, v. n. 125.
Correspondencia con el ajedrez: el caballo blanco de rey y el caballo
negro de dama. Sus movimientos imprevisibles y a saltos concuer-
dan con las características del amor, que salta por encima de los
obstáculos sin que sea posible predecir su destino.
Significados básicos: El Amor. El principio Constructivo. Lo Ex-
pansivo. Júpiter. La Paz. La alimentación. Los varones de la pro-
pia generación, de la misma edad aproximada. Junto con la 5.ª
esfera, Guevurah, el chakra Anahata (de perfil).
Elemento: Agua, como potencialidad y como expresión.
Polaridad: Negativa.
Correspondencia con metal: BDIL, ,..-,.= , estaño. V. n.: 46. Em-
pleado para soldar, el estaño es, como el amor, unitivo. Puede
hacerse una temurá con esta palabra, que se leería.=',,~ (iad leb),
poder del corazón, que eso es sin duda la misericordia.

3. 7.5. Quinta sefirá: CUEVURAH. m'O,, Rigor, Severidad1 Poder


Valor numérico: 2 76.

Otros títulos de la sefirá:


DIN, ti, Justicia. V. n.: 64.
PAJAD, 1MJ:l, Temor. V. n.: 92. Se refiere al temor que origina en

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 125


quienes perseveran en el error. A este respecto, la l.ª sura del Co-
rán, en sus aliyas (versículos) finales pide a Allah: «Guíanos por
el camino recto, vía de aquéllos en los que Tú te complaces, y no
están en el error».
NOTZER JESED, iOM i::ru, Guardián de la Misericordia. V. n. : 418.
Vuelve a aparecer en uno de los nombres de la esfera (Fajad)
la palabra in (jad), uno, como ocurre en Jesed, indicando que,
pese a las apariencias, se trata de un solo eje con dos polos.
La diferencia es que allí teníamos la letra samaj (O), símbolo de
lo secreto, mientras que en esta esfera aparece la letra pe (.~),
que indica comunicación, la expresión de la «fuerza que une»,
el amor. Por lo tanto, no hay diferencia esencial entre ambas
esferas. En cuanto al nombre prinéipal, su valor numérico pro-
porciona varias sugerencias interesantes. El mismo nombre de
Guevurah, además de rigor, también significa fuerza y valor,
lo que nos dice que el verdadero amor no es blandengue, rosa
y acaramelado, sino todo lo contrario: en ocasiones, fuerte y
áspero. Aparece con el mismo valor la palabra,~~, (debir), que,
además de santuario, designa al Santo de los Santos, la parte
más oculta y sagrada del Templo de Jerusalem, en la que sólo
podía entrar una vez al año el sumo sacerdote para pronunciar
en voz baja el nombre más oculto de Dios. También aparecen
ii~¡,¡,~ (akakía). acacia, el árbol que es símbolo de inmortalidad
por su madera incorruptible, y p~¡,J (nekión), limpieza, pureza .
Vemos así que el rigor, a veces duro y violento, como cuando
Jesús expulsó del templo a los mercaderes, es sagrado y tie-
ne por finalidad limpiar y depurar. Finalmente, el atbash de
esta sefirá es r~~t:ti, sin significado en las permutaciones de
sus letras, pero con un valor numérico de 673 que proporciona
la palabra Mii~~J (nezirut), abstinencia, sobriedad, frugalidad,
en perfecta concordancia con el sentido de Guevurah.

126 VILLARRUB IA / HAUT / MILLERA


•'s~ p'or.,;el ·la.9b) :le. lá?~<saht9- resfgnádo11» rfrJárnpqco por ,el de
1

C, hiijéii méritdf pOía} r'ª yi dil;;, l,'J,sa l\J ínf? ti~~-~éíaJ ·

Nombre divino principal, regente de la esfera en el Mundo de la


Emanación:
ELÓAH. ni,N - V. n.: 41. Sería un posible aspecto femenino de
Dios, por su letra final M.
Otros nombres divinos, asociados exclusivamente a la 5. ª sefirá:
ADIR: i~N - V. n.: 215. Fuerte.
AGLA: N,JN - V. n.: 35. Es el notarikon de ~~,Ne,,µ,,,~~,
MMN,
«Tú eres fuerte por siempre, mi Señor». Ver más abajo la pronun-
ciación.
ATÁ GUIBOR LEOLAM ADONAI: ~nN e,,µ,,,~, Ml'\~ - V. n.: 858.
Este nombre se abrevia en el notarikon AGLA. Ver más arriba.
BAAL GUEVUROT: r,ii,~J 'V~ -
V. n.: 296 . Señor de los Ri-
gores.
BAAL IJOLET: rb~~ 'V~ - V. n.: 562. Señor de la Fuerza.
BAAL MILJAMOT: n,~n,~ 'V~ - V. n.: 626. Señor de las Ba-
tallas.
ELOÁH: n,N - V. n.: 36. Variante del nombre principal, que se
pronuncia con o corta.
ELOHIM GUIBOR: ,,~, c~n,N - V. n.: 297. Dios Riguroso.
EYELUT: ni,~N - V. n.: 447. Fuerza.
IHEVID: ,,n~ -
V. n.: 25. Único. Nueva alusión a la Unidad que
se manifiesta en la 4.ª sefirá, Jesed.
JAZAK: ¡,'in - V. n.: 115. Fuerte.
SHOMER: ,~,w -V. n.: 546. Dios Guardián.
SHOMER ISRAEL: ,Niw~ ,~,w - V. n.: 1087. Guardián de
Israel.
TZADIK: ¡,~w - V. n.: 204. El Uno Justo.

MANUAL DE KABBALA H PRÁCTICA 127


Arcángel: JAMAEL, regente de la esfera en el Mundo de la Creación.
~~~ - V. n.: 91. Una interesante temurá de este nombre reafirma el as-
pecto femenino del rigor, pues puede leerse como~~ CH (em kol), ma-
dre de todo, lo que en definitiva no es sino una proyección de Binah
en Guevurah. Pero lo más significativo es su guematria, que nos lleva
a las expresiones ~N (que puede leerse tanto aman, criar o educar,
como amén, así sea o así es), en alusión a su función de eliminar lo
desviado, tal como hacen los podadores con los árboles frutales; C't:rr
(ia.jalóm), diamante, el mineral de mayor dureza y, a la vez, transpa-
rente y bello; o ~~ (meubal), digerido, consumido, como resultado
de la actividad que sigue a la alimentación simbolizada por Jesed.
Orden angélico: SERAFIM, regentes de la esfera en el Mundo de la
Formación. c~~,tz: - V. n.: 630. Serafines. El singular de esta palabra
es c-¡itz: (saraf), que por temurá se transforma en ,~w (siper), mejorar,
perfeccionar, y también embellecer. Vuelve a mostrarse así el efecto
de limpieza y saneamiento de esta esfera, que en este caso se mani-
fiesta en el mundo de las formas astrales, Yetzirah.
Chakra mundano: MADIM, regente de la esfera en el Mundo de
la Acción. C'l"'!~O, Marte. V. n.: 95. La raíz de esta palabra es iNO
(mead), fuerza, vigor. Por su parte, la guematria nos proporciona
la palabra i1ii~ (podeh), redentor, libertador.
Símbolos: El pentágono. La rosa de cinco pétalos. La espada.
La lanza. La balanza. La cadena. El azote.
Imagen mágica asociada: un guerrero poderoso, en su carro de guerra.
Experiencia espiritual: Visión del Poder.
Virtudes: Energía. Valor.
Vicios: Crueldad. Destructividad.
Correspondencia en el ser humano: El bazo y el páncreas, la mano
izquierda (de frente). Las manos (de perfil). Junto con la sefirá
anterior, Jesed, el chakra Anahata (de perfil).
Colores: en Atziluth: Anaranjado.
en Briah: Rojo escarlata.
en Yetzirah: Escarlata brillante.
en Assiyah: Rojo con manchas negras.
Correspondencias con el tarot: los cuatro cincos:
Cinco de bastos: lucha.
Genios asociados: 1º, Vehuiah, ri~ii'Ti, v. n. 32.

128 VII. LARRUBIA / HAUT / MILLERA


2.º, Yeliel,,N~,\ v. n. 81.
Cinco de copas: pérdida en el placer.
Genios asociados: 19º, Leuviah, n~,,,, v. n . 57.
20°, Pahaliah, n~n~, v. n. 130.
Cinco de espadas: derrota.
Genios asociados: 37º, Aniel, ,N~~N, v. n . 92.
38º, Jaamiah, n~~vri, v. n . 133.
Cinco de oros: trastorno en el plano terrenal.
Genios asociados: 55º, Mebahiah, n~¡¡~~, v. n. 62.
56º, Poiel, ,N~i~, v. n. 127.
Correspondencia con el ajedrez: el caballo blanco de dama y el
caballo negro de rey. Aplíquese lo dicho en Jesed, en relación
con el rigor.
Significados básicos: Rigor. El principio Destructivo. Lo Restricti-
vo. Marte. La Violencia. La asimilación. Las mujeres de la propia
generación, de la misma edad aproximada. El costado y el brazo
derechos y el hígado, si se ha iniciado el proceso d e individua-
ción, o el costado y el brazo izquierdos, el páncreas y el bazo en
caso contrario.
Elementos: Agua, como potencialidad, y Fuego, como expresión.
Polaridad: Positiva.
Correspondencia con metal: BARZEL, ,,,~, hierro. V. n.: 239.
En este caso, la correspondiente temurá nos proporciona~~ 'li
(raz leb), secreto del corazón. Pues el rigor de Gevurah esconde
siempre en lo más profundo la misericordia, el amor de Jesed.

3. 7.6. Sexta sefirá: TIFERET. MiNIM, Belleza


Valor numérico: 708 7

Otros títulos de la sefirá:


ZEBUL, ,,~i,El Cuarto Cielo. V. n.: 45.

La palabra Tiferet deriva del verbo iN~ (peer), adornar, embelle-


cer. Una temurá lo transforma en N~i (rajá), sanar, curar. La razón
hay que buscarla en su naturaleza, que se muestra de varios mo-
dos a través de la Kabbalah:

M ANUAL DE KAllllALAH PRÁCTICA 129


• Es el centro en el que la energía mantiene su unidad por última
vez antes de continuar su descenso a través de las sefirot siguien-
tes. Y, ni la belleza ni la salud son a la larga posibles sin unifica-
ción y, para confirmarlo puede ponerse el ejemplo del gran sabio
y místico hindú Jaddu Krishnamurti, fallecido a una edad muy
avanzada, que seguía siendo en sus últimos años, con todo su
aspecto de anciano, un hombre extraordinariamente bello.
• Su valor numérico reducido es el 1 (1 +0+8+1 = 10; 1 +O = 1).
• Sin reducir, es igual al de la palabra r,iir,v;, (heatrut), acepta-
ción, la clave fundamental para vivir el dolor sin sufrimiento.
La aceptación es el reconocimiento de que los hechos son como
son, sin perjuicio de poner los oportunos remedios sanadores.
Sin embargo, la palabra ~~, significa también debilitar, lo que
significa que la esfera, si bien es sede de la curación considerada
como una meta desde las sefirot inferiores; también supone una
merma vista desde las superiores, puesto que a partir de este punto
el descenso de la energía pierde su unidad y se transforma en mul-
tiplicidad.
El atbash de Tiferet, ~~r,,~, se puede leer tal corno está escrito
ot ga, signo o señal del arrogante, en perfecta concordancia con
el vicio atribuido a esta sefirá, el orgullo. Su guernatria, 411, nos
proporciona además i;,r, (tohu), el caos primordial, tal corno lo
menciona Génesis 1:2; esta palabra significa también laberinto.
En efecto, quien tiene la experiencia de Tiferet sin una previa
unificación de sus «yoes» inferiores puede disolverse en dicho
caos. En realidad, se puede considerar a Tiferet como im;, ri,,~
(guedot ha-nahar), orillas del río, como un borde o límite, el de la
individualidad, más allá del cual fluye el río de la Energía Una.
En Tiferet aparece la segunda de las barreras del Árbol, la deno-
minada Velo del Templo, que, a semejanza del que existía en el
de Jerusalern, nadie puede traspasar salvo que esté investido de
la dignidad del Sumo Sacerdote, o, en otras palabras, que haya
trascendido la Individualidad.

Nombre divino principal, regente de la esfera en el Mundo de la


Emanación: ELOHIM. o~;,5~- V. n.: 86. Es el primer nombre que
aparece en la Biblia, en Génesis 1:1:

130 V1LLARRU BIA / HAUT / MILLERA


Y-,NM ri.~, o~w;, MN o-rl,N ~-,; m,~-,; (Bereshit bará Elohim et ha-
shamayím ve-et ha-aretz), que se traduce usualmente por «En el prin-
cipio creó Dios los cielos y la tierra». El nombre divino Elohim
tiene unas curiosas características, que han hecho correr ríos de
tinta. Se trata de un nombre femenino con terminación plural
masculina, pero cualquiera que sea lo que esto signifique, no
hay duda de que se trata del Dios Creador. Es coherente con-
siderar este nombre en asociación con Tiferet, puesto que la 6ª
esfera es el centro del segundo nivel de manifestación, Olam ha-
Briah, el Mundo de la Creación. En cuanto a la guematria del
nombre, proporciona cuatro conceptos interesantes, relaciona-
dos todos ellos con la naturaleza de esta esfera: :i~i',',;,, aleluya,
la exclamación de gozo por excelencia, asociada íntimamente
al acto creativo; ',i;j (nibdal), separarse, aislarse, puesto que en
Tiferet la energía, hasta ese momento única, va a separarse en la
individualidad y la multiplicidad; e,~
(kas), copa o cáliz, pues
esta esfera es el centro erístico del Árbol de la Vida, por su cua-
lidad sanadora; y O~MN (ahalim), áloe, planta de particular efica-
cia como neutralizadora de influencias negativas.
Otros nombres divinos, asociados exclusivamente a la 6. ª sefirá:
EJAD HU ELOHIM: o~n',N N1M inN - V. n .: 111. Sólo Él es Dios.
Su valor numérico es igual al del nombre de la letra álef: =,,N.
También tiene el mismo valor la palabra e,~,,
(lotus), el loto,
símbolo en muchas tradiciones orientales de la realización es-
piritual.
ELOKIM: Oj'',N - V. n.: 181. Es una variante del nombre Elohim,
de origen ashkenazí (judaísmo procedente de Europa central y
oriental, diferente de la sefardí, procedente de España y Ma-
rruecos, y de la yemení, de Oriente Medio).
HU ELOHIM: c~n',N NiM - V. n. : 98. Él es Dios. Variante de las
anteriores.
YEHOVAELOAH BA-DAAT: rivi; m',N m;i~ - V. n.: 544.
YEHOVA ELOAH VE-DAAT: rivii m',N m;i~ - V. n.: 548. Dios
manifestado en la esfera del conocimiento. Tanto este nom-
bre como el anterior tienen su origen en los estudios de la
orden esotérica inglesa Golden Down, «Alba Dorada», que se
mantuvo activa en los últimos años del siglo XIX y principios

M AN UAL D E K ABBALAH PRÁCTICA 131


del XX. Se utiliza como invocación en el Trabajo en el Pilar del
Centro, técnica propuesta por Israel Regardie que se estudia en
la última parte de la presente obra.
Arcángel: RAFAEL, regente de la esfera en el Mundo de la Crea-
ción. ,toe~,. V. n .: 311. El nombre significa Dios cura, en línea
con lo expuesto más arriba sobre la sefirá. Su valor numérico
es el mismo que el de Tzafkiel, arcángel de la 3.ª sefirá, por lo
que hay una relación estrecha entre ambos, que indica que las
formas que aparecen en Binah son necesarias para la creación
de Tiferet. La relación, por lo demás, puede representarse por
el sendero que une ambas esferas, el 6, que como veremos más
adelante, corresponde al Arcano VI del tarot, Los Amantes,
el cual muestra la necesidad de cortar el cordón umbilical para
que el nuevo ser emprenda una vida independiente. En el ni-
vel de Briah, o Mundo de la Creación, el feto está todavía en
gestación; de ahí la coincidencia de valores numéricos entre los
nombres de ambos arcángeles.
Orden angélico: MELEJIM, regentes de la esfera en el Mundo de la
Formación. c~~,o - V. n.: 140. Reyes. Como veremos más adelante,
una de las imágenes mágicas asociadas a esta esfera es precisamen-
te la de un rey majestuoso. La guematria proporciona diversas pa-
labras con este mismo valor numérico: e¡, (kam), levantarse, y tam-
bién despertar; C'¡C (se/), umbral, y esta esfera lo es, puesto que, para
traspasarlo, hay que trascender la individualidad; j~'C (memán),
hidrógeno, el combustible de las estrellas, y entre ellas nuestro Sol,
que es, como vemos más abajo, el chakra mundano de esta esfera;
y ¡f¡,,¡, (kehilá), uno de los nombres que se da a la comunidad judía,
en muestra de unidad en la multiplicidad.
Chakra mundano: SHEMESH, regente de la esfera en el Mundo
de la Acción. WQW, Sol. V. n.: 640. La temurá de esta palabra nos
muestra CW (shem), nombre, al que se puede dar el doble senti-
do del Nombre Divino i'Tii'T~, y la aparición de la individualidad,
lo que conlleva la atribución de un nombre; y WW (shesh), seis,
el número de la sefirá y también el del hombre, puesto que, según el
Génesis, fue creado el sexto día. En cuanto a la guematria, ·aparece
nuevamente la idea del Grial, con la expresión C'CTI~M e,~ (kas tan-
jumim ), copa de consolación.

132 V ILLJ\RRU BIJ\ / H AUT / MI LLERA


Otro nombre del chakra mundano
JAMAH, ;mn . V. n.: 53. La expresión significa también calor.
La temurá de la palabra muestra al espíritu (;,) en el cerebro,
(n~, moáj), mientras que la guematria proporciona la palabra j.:lN
(iben), hijo, de acuerdo con el simbolismo general del Árbol en
relación a la teología cristiana: el Padre correspondería a Keter,
el Hijo a Tiferet y el Espíritu Santo a Yesod. Otra palabra con
el mismo valor numérico es¡; (gan), el jardín, que sería el del
Edén, en el que la Unidad todavía no se había roto.
Símbolos: El cubo. La Rosa Cruz. La cruz del Calvario. La pirámi-
de truncada.
Imágenes mágicas asociadas: un niño. Un dios que se sacrifica.
Un rey majestuoso. Al ser esta esfera el Centro Crístico del Ár-
bol, presenta las tres imágenes conocidas de Jesucristo: el Niño
en la cuna, Jesús en la cruz y Cristo Rey.
Experiencias espirituales: Visión de la armonía de las cosas. Vi-
sión de los misterios de la Crucifixión.
Virtud: Devoción a la Gran Obra, en terminología ocultista, tal
como la cita, por ejemplo, Dion Fortune. Desde el punto de
vista cabalístico diríamos «Devoción para el cumplimiento del
tikún».
Vicio: Orgullo.
Correspondencia en el ser humano: El pecho, el corazón, el
plexo solar, el estómago (de frente). El corazón y el estómago
(de perfil).
Colores: en Atziluth: Rosado claro.
en Briah: Amarillo.
en Yetzirah: Asalmonado vivo.
en Assiyah: Ámbar dorado.
Correspondencias con el tarot: los cuatro seis:
Seis de bastos: victoria.
Genios asociados: 3º, Sitael, ~Nti~c, v. n. 110.
4º, Elemiah, i1~~~V, v. n. 155.
Seis de copas: alegría.
Genios asociados: 21 º, Neljael, ~N~~~, v. n. 131.
22º, Yeyayel, ~N~'l'I, v. n. 61.
Seis de espadas: triunfo ganado.

MAN UAL DE KABBAI.AH PRÁCTICA 133


Genios asociados: 39º, Rehael, 'NVi'li, v. n . 306.
40°, Ieiazel, ,Ni~\ v. n. 58.
Seis de oros: triunfo en el plano material.

58º, Ieialael,,N,~,
Genios asociados: 57º, Nemamiah, il~~~J, v. n. 145.
v. n. 81.
Correspondencia con el ajedrez: la dama blanca, la pieza más po-
tente de su bando.
Significados básicos: El Centro de la Individualidad. El sen-
timiento de YO-SOY. La Armonía. La Belleza. El Equilibrio.
La Distribución. La Conservación como arquetipo. La intuición
manifestada en la esfera de la mente. El centro de la mente. Sol.
El chakra Anahata (de frente).
Elementos: Agua, como potencialidad, y Aire, como expresión.
Polaridad: Positiva.
Correspondencia con metal: PAZ, W, oro. V. n.: 87.
Otro nombre para designar al metal: ZAHAB, ~m. V. n.: 14.
Ambas denominaciones hebreas para el oro contienen la letra
zayn (i), uno de cuyos significados ontológicos es centro, que es
precisamente la posición que ocupa la 6.ª sefirá en el Árbol de

rico que el chakra mundano de Yesod, la Luna, m~,


la Vida. La primera denominación tiene el mismo valor numé-
(levanah);
ver el comentario al respecto en el apartado 3.1.9. La segunda
denominación, mediante una temurá, se transforma en i'li~ (be-
Zé), en Dios, pues este nombre, zé, que también significa éste,
el más próximo, está contenido en esta palabra: no se trata del
Dios lejano de alguna de las sefirot superiores, sino del que
está muy próximo, escondido en lo más profundo de nosotros
mismos, y también el que se manifiesta en los sencillos sucesos
de cada día.

3. 7.7. Séptima sefirá: NETZAJ. MJ~, Victoria. Eternidad


Valor numérico: 748

El nombre de esta esfera contiene la palabra m(naj), descansar. ¿Eligie-


ron los cabalistas este nombre porque, según el libro del Génesis, Dios
descansó al séptimo día? En todo caso, se trata de una sefirá con hon-
das connotaciones en el judaísmo, puesto que su valor numérico es el

134 V!LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


mismo que el de no~ (pesaj), la Pascua, la principal fiesta judía, que
conmemora, como sabemos, la salida de Egipto del pueblo de Israel.
Y, en consonancia con este acontecimiento, también tiene el mismo va-
lor numérico ¡,~M 0amak), escaparse, evadirse. Por su parte, el atbash
de Netzaj, orno, proporciona una rica información complementaria,
tanto por temurá, como por notarikon, como por guematria, en mu-
chos casos ligada al mundo emocional y a la sexualidad en su aspecto
erótico, más que en el reproductor. La temurá nos lleva a l:OOl"T (hetés),
conmoción, y a l"Tl:QO (seteh), libertino. Las letras del atbash, leídas en
notarikón, tienen el sentido de apertura (l"T) del bien (C) secreto (O),
la vagina. Y finalmente, la guematria nos permite encontrar, además
de ,V (ad), eternidad, sinónimo de Netzaj, palabras tan cargadas de
sexualidad como m~~N (avíyonah), concupiscencia, deseo carnal; iruj
(netiyah), erección, o la palabra anterior ,V, que si se lee ed significa,
además de testigo, trapo menstrual, lo que no es contradictorio por-
que dicho trapo, la compresa, es el testimonio, la prueba, de que no
existe en ese momento un embarazo.

Nombre divino principal, regente de la esfera en el Mundo de


la Emanación: YHVH TZEBAOT. riiN~J nin~ (se pronuncia
Adonaí Tzebaot)- V. n.: 525. Eterno de las Huestes. En este caso,
«las huestes» son las energías que, por primera vez en el proceso
de manifestación, se pluralizan, como consecuencia de la apari-
ción de la individualidad. Por consiguiente, todas las formas de
la vida física tienen aquí su manifestación, si bien necesitarán el
concurso de los aspectos de forma de Hod para concretarse en
Yesod y tomar cuerpo en Maljut. Es curioso que esta multipli-
cidad de energías tenga su reconocimiento en la guematria de
este nombre, que nos proporciona el término ,,j
"-i im (nahar di
nur), nombre que se da a la Vía Láctea, nuestro hogar galáctico,
con 100.000 millones de estrellas girando en torno al agujero
negro central.
Otros nombres divinos, asociados exclusivamente a la 7. ª sefirá:
ELOHAY YISRAEL: ~Niw~ ~il~N - V. n .: 587. Dios de Israel.
Se entiende esta asignación, a la vista de lo señalado al comien-
zo de la presente sección, sobre la guematria de Netzaj.
NETZAJ YISRAEL: ~Niw~ MJj - V. n.: 689. Gloria de Israel.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 135


Arcángel: HANIEL, regente de la esfera en el Mundo de la Crea-
ción. ~N~jNit V. n.: 97. La guematria de este nombre proporciona
la palabra¡~, (zman), tiempo. Y es que, cuando se desciende des-
de el Mundo de la Emanación, o Atzilut, en la que rigen aspec-
tos divinos, al Mundo de la Creación, Briah, la eternidad deja de
vivirse como tal y se particulariza en tiempo.
Orden angélico: ELOHIM, regentes de la esfera en el Mundo de
la Formación. c~i'T~N - V. n .: 86. Dioses. Tal vez empecemos a
comprender ahora el significado del/ de los Elohim creador/
creadores de los cielos y de la tierra: las formas de ambos son
dadas en este nivel, y no en los superiores.
Otro nombre del orden angélico: BENI EL, ~N ~i~. V. n.: 93. Hijos
de Dios.
Chakra mundano: NÓGAH, regente de la esfera en el Mundo de la
Acción. i'TSU, Venus. V. n.: 64. En este nombre hebreo está contenido p
(gan), jardín o huerto. Como las dos letras restantes forman el nombre
más oculto de Dios, m, puede leerse como jardín de Dios. En cierto
modo, este chakra es un reflejo reducido del Sol, puesto que su valor
numérico es la décima parte del de W'fSJJ, que es, como vimos al ana-
lizar Tiferet, de 640. Además, el valor numérico de Nógah proporcio-
na dos conceptos de claras connotaciones sexuales, asociadas a esta
sefirá: Off (ijum), pasión, y también embarazo, y p.,,., (dagdegan),
clítoris. Recordemos que el nombre de este planeta se dio desde la
antigüedad en homenaje a la diosa del amor, Venus, llamada Afrodi-
ta en Grecia, Isis en Egipto e Ishtar en Oriente Medio.
Otros nombres del chakra mundano:
NOGÁH, mj. V. n.: 58. Es una variante del nombre principal, pero lla-
ma la atención que su guematria nos lleve a ¡n (jen), gracia, belleza,
y también notarikón, como ya vimos, de mr0j i'T~:n (jokmah nista-
rah), sabiduría secreta, que es otro nombre de la Kabbalah.
KOJEBET, M~~,~- V. n.: 448. La guematria proporciona .ni~M~i'T (hibha-
lut), susto, temor, espanto. Muestra el aspecto corrosivo de esta
esfera cuando actúa a través de sus aspectos negativos, de sus
qlifot. El símbolo para designar al planeta Venus, !i?, indica que, si
bien superficialmente es amable (el círculo superior del signó, O),
en el fondo (la cruz inferior, +) puede tener ese carácter corrosi-
vo mostrado por la guematria.

13 6 VILLARRUBIA / HAUT / MI LLERA


Símbolos: La lámpara y la guirnalda. La rosa.
Imagen mágica asociada: una bella mujer desnuda.
Experiencia espiritual: Visión de la belleza triunfante.
Virtud: Desinterés, desapego.
Vicio: Incontinencia. Lujuria.
Correspondencia en el ser humano: El riñón derecho, la cadera y
la rodilla derechas (de frente). Las caderas (de perfil).
Colores: en Atziluth, ámbar.
en Briah, verde esmeralda.
en Yetzirah, verde amarillento brillante.
en Assiyah, verde oliva con manchas doradas.
Correspondencias con el tarot: los cuatro siete:
Siete de bastos: valor.
Genios asociados: 5º, Mahasiah, ;,,wi'T~, v. n. 360.
,Nn,,,
6º, Lelahel, v. n. 96.
Siete de copas: triunfo ilusorio.
,Nn,~,
Genios asociados: 23º, Melahel, v. n. 106.
24º, Hahiniah, ¡¡,Ji'Tii, v. n. 75.
Siete de espadas: esfuerzo inestable.

,N~~~,
Genios asociados: 41 º, Hehahel, , v. n. 46.
42º, Mikael, v. n. 101.
Siete de oros: triunfo incumplido.
Genios asociados: 59º, Harajel, ,Nniii, v. n. 244.
60º, Mitzrael, ,Ni~~, v. n . 361.
Correspondencia con el ajedrez: el alfil de rey negro. La torre de
dama blanca.
Significados básicos: El Centro emocional. El Centro de las pa-
siones. Las energías manifestadas como «materia», base para
la manifestación del deseo. La sexualidad como pasión. Venus.
Junto con Hod, se relaciona con el chakra Manipura.
Elementos: Aire, como potencialidad, y Fuego, como expresión.
Polaridad: Positiva
Correspondencia con metal: NAJOSHET, nwm, cobre. V. n.: 758.
Otro nombre del metal:
NAJUSHAH, iiWim. V. n.: 369. Ambos nombres comparten la
misma raíz, wm (najash), augurio, sortilegio, lo que relaciona
a esta sefirá con la magia; esta palabra significa también ser-

MANUAL DE KABB/\LAH PRÁCTICA 13 7


piente. Por otra parte, el valor numérico del primero de ellos
conduce a la expresión c~,V M.,~
(brit olam), Pacto eterno, que
es el de Dios con Abraham, continuado después por el pueblo
de Israel y manifestado mediante la circuncisión de sus varones:
de nuevo la connotación sexual de la sefirá, en este caso a través
de su metal simbólico.

3.1.8. Octava sefirá: HOO. iiM, Esplendor/ Magnificencia


Valor numérico: 75

En el descenso de la energía por el Árbol de la Vida surge una


palabra que nos habla explícitamente de dualidad. Pues, aparte
de que el propio nombre de la esfera sugiere que alguien debe
contemplar ese esplendor, esa magnificencia, (lo que ya venía su-
cediendo desde la 6.ª esfera, Tiferet), contiene en su interior ,,
(du), dos o doble. La relación de esta esfera con la magia y la adi-
vinación se deduce de su guematria, que proporciona también
las palabras in (jaz), pronosticar o profetizar, y Nii, (dudá), man-
drágora. Las letras ¡,~l forman el atbash de Hod, que leído tzefek
significa peritoneo, la membrana que envuelve a los intestinos
(ver antes, 3.1.3). ¿No son éstos el asiento del mundo emocional,
y Hod la envoltura de las emociones? Permutando las letras, en-
r
contramos ~¡,, que puede leerse kafatz, apresurarse, en línea con
el carácter mercurial de la sefirá, o kefetz, articulación o coyuntu-
ra, que es precisamente la función de Hod, articular las energías
informes procedentes de Netzaj. Y también hallamos C,li' (katzaf),
irritar, enojar, no a sí mismo, sino a otro, que es el efecto que
producen las palabras faltas de veracidad, vicio, como veremos
de inmediato, de esta sefirá.

Nombre divino principal, regente de la esfera en el Mundo de la


Emanación:
ELOHIM TZEBAOT. MiN~l Cl"l"l~N - V. n.: 585. Dios [en tanto que
Creador] de las Huestes. Ver comentario al respecto en Netzaj so-
bre «las huestes». Ahora, las energías se revisten de formas para
manifestarse en los planos inferiores. Que esto representa un ver-

1 38 VILLARRU131A / HAUT / MILLERA


dadero sacrificio nos lo indica la guematria de este nombre, que
proporciona la palabra Mii¡,v:i (haakdut), sacrificio o inmolación.
Pero todo sacrificio es, en verdad, «hacer sagrado» algo; por eso,
que la energía se materialice es para el judaísmo una buena cosa.
También el mismo valor numérico proporciona la palabra :iw,~
(parashá), versículo; por eso, los versículos son, como veremos in-
mediatamente, símbolos de esta sefirá.
Otro nombre divino, asociado exclusivamente a la 8. ª sefirá:
ELOHÉ HA-TZABAOT: MiH~Wl"I ~:i~H - V. n.: 550. Es una va-
riante del anterior, con su mismo significado. La guematria, sin
embargo, proporciona datos que refieren esta esfera a la aplica-
ción práctica de las leyes, especialmente en el mundo futuro, en
los tiempos mesiánicos: c~,w (sharim), gobernantes, ministros;
y ~'M~ ~~W (shebet barzel), vara de hierro, concepto recogido
tanto en el Antiguo Testamento (Salmo 2: 9) como en el Nuevo
(Apocalipsis 12: 5): «Los quebrantarás con vara de hierro; como
vaso de ollero los desmenuzarás» (Salm. vers. cit.); «Y ella pa-
rió un hijo varón, el cual había de regir a todas las gentes con
vara de hierro». (Ap. vers. Cit.)
Arcángel: MIKAEL, regente de la esfera en el Mundo de la Crea-
ción. ~N~~e. V. n.: 101. Significa Quién como Dios. Su guematria
nos proporciona i!~Nl"I (heatzá), aceleración, en línea con el sen-
tido mercurial de esta sefirá.
Orden angélico: BENI ELOHIM, regentes de la esfera en el Mun-
do de la Formación. c~:i~N ~J~. V. n .: 148. Hijos de los Dioses.
Si comparamos este nombre con él del orden angélico de Netzaj,
nos daremos cuenta inmediatamente del progresivo proceso de
diversificación y multiplicación de la energía.
Otro nombre del orden angélico: BENI EL, ',N ~J~. V. n.: 93. Hijos
de Dios.
Chakra mundano: KOJAB, regente de la esfera en el Mundo de
la Acción. ~~,~, Mercurio. V. n .: 48. La guematria nos proporcio-
na ne (moáj), cerebro, indicando la relación de esta sefirá con la
mente concreta.
Símbolos: nombres y versículos. El mandil masónico.
Imagen mágica asociada: un hermafrodita.
Experiencia espiritual: visión del esplendor.

M ANUAL DE KABBA LAH PRÁCTICA 139


Virtud: veracidad.
Vicios: falsedad. Falta de honradez.
Correspondencia en el ser humano: el riñón izquierdo, la cadera y
la rodilla izquierdas (de frente). Las rodillas (de perfil)
Colores: en Atziluth: púrpura violáceo.
en Briah: anaranjado.
en Yetzirah: bermellón.
en Assiyah: negro amarillento con manchas blancas.
Correspondencias con el tarot: los cuatro ocho:
Ocho de bastos: celeridad.
Genios asociados: 25º, Nith-Haiah, n~;,n~, v. n. 470.
26º, Haaiah, i1~NNi1, v. n. 22.
Ocho de copas: triunfo abandonado ..
Genios asociados: 43º, Vewaliah, ;,~,,,, v. n. 57.
44º, Ielahiah, i1~i1,\ v. n. 60.
Ocho de espadas: fuerza reducida.
Genios asociados: 61, Umabel, ,N~e,, v. n. 79.
62º, Iah-hel, ,Ni1i1\ v. n. 51.
Ocho de oros: prudencia, sensatez.
Genios asociados: 7º, Ajaiah, n~N~N, v. n. 37.
8º, Kahetel, ,NMi1~, v. n. 456.
Correspondencia con el ajedrez: el alfil de rey negro. La torre de
dama blanca.
Significados básicos: la mente concreta. El sentido práctico.
El molde que da forma a los deseos. La rapidez. Mercurio. La comu-
nicación en todas sus vertientes. El comercio y el dinero. Junto
con el anterior, se relaciona con el chakra Manipura.
Elementos: Aire, como potencialidad, y Agua, como expresión.
Polaridad: Negativa.
Correspondencia con metal: KASPIT, n~~c~, mercurio, azo-
gue. V. n.: 570. Su guematria proporciona: irvv (osher), riqueza,
opulencia, y i°"~M (tefilin), filacterias, dos cajitas de cuero, con
cuatro trozos de la Torá en su interior, usadas en el ritual judío;
ambas palabras, la primera relacionada con la economía y la
segunda con el ritual, tienen, evidentemente, el valor de 570.

140 V!LLARRUBIA / H AUT / MI LLERi\


3. 7.9. Novena sefirá: YESOD. iiO'\ Fundamento
Valor numérico: 80

Otro título de la sefirá:


KOL, ~~, Todo. V. n.: 50. Este título es el nombre que aparece por
primera vez, en I Crónicas 29:11. Su valor numérico corresponde
al mar, c:r (iam), en consonancia tanto con el título como con el
significado de la sefirá, y a la letra nun (~) que, como hemos vis-
to, tiene el significado de percepción; pues es a través de Yesod
como la individualidad formada en Tiferet percibe el mundo.

Nuevamente aparece la palabra,, (du), dos en el nombre de la


sefirá, lo que nos proporcionará una información interesante en el
momento en que estudiemos el sendero subjetivo 19. La palabra
Yesod, por su parte, nos da idea de un soporte, de una base para
sustentar algo. Por eso, no es extraño que encontremos con su mis-
mo valor numérico la palabra O~ (kes), silla, asiento, y también tro-
no o gobierno. No es un reino, sino aquello en lo que se apoya el
reino, que aparecerá, como veremos, en Maljut. El carácter sexual
de esta sefirá, relacionada con los órganos genitales, se manifiesta
en la palabra i1~'V ('agavá), lujuria, sensualidad, también con valor
numérico 80. Por último, con el mismo valor tenemos también i1.l~ii
(hajaná), preparación, preparativo, pues Yesod actúa preparando
los «moldes» que servirán para la aparición de las formas materia-
les. El atbash de esta sefirá es ¡,~M~, con valor numérico 228, que es
el mismo que 1'M~ (Baruj), Bendito, palabra con la que comienzan
muchas oraciones hebreas (ver sección I, 3.5, ejercicio núm. 7), y
muy ligada, según un conocido midrash (enseñanza en forma de pa-
rábola) del Talmud, a la creación, y por tanto a la reproducción, que es
una de las funciones de Yesod. También tiene el mismo valor que C"il YV
('etz jayim), el Árbol de la Vida, cuyo trabajo interior de elevación em-
pieza precisamente en esta sefirá. La temurá del atbash, por su par-
te, nos muestra el carácter ambivalente de Yesod, que bien utilizado
muestra al inteligente, r,¡,~ (mefukáj), pero que en caso contrario lleva
a lo erróneo, n~,~ (mekupáj), siendo un impedimento, n~ (paj) para le-
vantarse, e¡, (kam) hacia los niveles superiores de consciencia. A la al-
tura de Yesod corre la tercera de las barreras del Árbol, Qeshet, el Arco

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTI CA 141


Iris de colores astrales (también llamada Kedesh, palabra derivada de
r:,,¡,, kodesh, santo), que es el límite de lo fenoménico, el límite de las
formas, sin cuya trascendencia no es posible subir más arriba.

Nombre divino principal, regente de la esfera en el Mundo de la


Emanación: SHADDAI EL JAI. 'n ,~ ~t!' - V. n .: 363. Todopodero-
so Dios Viviente. Mientras que hasta Tiferet los nombres divinos
principales poseen una sola palabra, a partir de Netzaj ya constan
de varias, recogiendo el hecho de la multiplicidad que se manifes-
taba en esa sefirá; y Yesod no es una excepción a esa regla.

EL JAI: TI,~ -
Otros nombres divinos, asociados exclusivamente a la 9. ª sefirá:

EL SHADDAI: ~,r:,
V. n.: 49. Dios Viviente.
,N -
V. n.: 345. Dios Todopoderoso. La gue-
matria de este nombre proporciona Ct!'i'T (ha-shem), el Nombre,
alusión al Tetragrama Sagrado i'Tii'T~. Con las mismas letras, aun-
que ordenadas de otra manera, aparece el libertador de Israel
de la esclavitud de Egipto, Moisés, i'Tt!'~ (moshéh), lo que no es
sorprendente, al referirse esta sefirá a la muerte, que es una libe-
ración del alma de su envoltura carnal. Pero en sentido inverso
también representa el nacimiento, en el que tanta importancia
tiene la placenta, i'T~,w (shilyah), y que es como una cristaliza-
ción, t:l~~~ (migbash), del espíritu al encarnar; ambas palabras,
por supuesto, también con valor 345.
ELOHIM JAYIM: c~-n c~n,N. - V. n.: 154. Dios de vida, Dios de
vivos (Sefer Yetzirah, 1: 1). Este número, 154, debe considerar-
se de esperanza, puesto también es el valor de N~ii c,,v
(olam
ha-ba), que significa tanto el otro mundo, el más allá, como el
mundo futuro en tiempos del Mesías.
SHADDAI: ~,?!'. - V. n .: 314. Todopoderoso. ¿Tal vez una indica-
ción de la fuerza que se halla escondida en el sexo?
Arcángel: GABRIEL, regente de la esfera en el Mundo de la
Creación. ,N~,~~-
V. n.: 246. Significa Héroe de Dios, y también
Fuerza Divina. Su papel en la Anunciación, tal como lo relatan
los Evangelios, corresponde al simbolismo de la sefirá en la que
actúa, relacionado con los partos y los nacimientos. Además,
246 es también el valor numérico de,~,~ (medaber), portavoz o
heraldo, el que anuncia algún acontecimiento; de iiNi~ (mareh),

142 VILLARR UBIA / H AUT / MI LLERA


aparición; y de ¡,~~¡, (kinamón), canela, especia cuyos efectos
son afrodisíacos.
Orden angélico: KERUBIM, regentes de la esfera en el Mundo
de la Formación. e~~,,~- V. n.: 278. Querubines. Es interesante
constatar que ,,~v ('ibur), con el mismo valor numérico, signifi-
ca preñez o embarazo.
Chakra mundano: LEVANAH, regente de la esfera en el Mundo
de la Acción. m~~, Luna. V. n.: 87. Esta palabra procede de la
raíz 1~~ (labán), blanco, por el color de la luz de nuestro satélite,
que también aparece en el nombre del chakra como ~i! (hel), afec-
tando, cuando está en fase llena, a los sentimientos del corazón,
~~ (leb). La guematria, por su parte, nos proporciona toda una se-
rie de interesantes sugerencias respecto a la naturaleza del acto
creativo, mediante un conjunto de palabras, todas ellas con valor
numérico 87: el trabajo (i!ii~J;, 'avodá) es ante todo de naturale-
za mental (o~,, zamam, pensar, discurrir) y semejante a un flujo
constante (~,~, nazal, fluir, verterse) que, surgiendo de la nada
(:,~~~, belímah, desde la nada; según Sefer Yetzirah, 1: 2, «Dios
creó las 10 sefirot desde la nada»), forma una red (ii~~O, sbajah) de
modelos o pautas (o,,~, midgam) que son a modo de ladrillos
(m~~, levenah) con los que se construye todo lo existente; don-
de no había nada hay ahora algo (QiN~, meúm). Por otra parte,
la Luna aparece como la fuerza actuante a través de Yesod, sien-
do el oro (,~, paz) el resultado de la transmutación alquímica que
el trabajo ha producido. Pues 'avodá, además de trabajo, signifi-
ca también servicio religioso, adoración, culto (ver sección I, 10
sobre el simbolismo cabalístico de la estrella de David).
Otros nombres del chakra mundano:
SAHAR: ,nw - V. n.: 505. Tanto por guematria como por te-
murá, este nombre ofrece nueva información, en consonancia
con la esencia de la 9.ª sefirá. Así, aparece Sara (n,w), la esposa
del patriarca Abraham, que adoptó este nombre frente al ante-
rior de Saray cuando quedó embarazada a edad avanzada (idea
de fertilidad); la misma palabra, pronunciada shara, tiene entre
otros el significado de desatar o desanudar, dando así la idea de
un movimiento que termina por deshacer cristalizaciones (qui-
zá era ese el problema de Saray, que le impedía quedar embara-

M ANUAL DE K ABBALAH PRÁCTICA 143


zada). Con el mismo valor numérico aparece ri,~~,,!i (gueloniyut),
ondulación, ondulatorio (nuevamente el carácter cíclico de la
sefirá).
YAREAJ: n,~ - V. n.: 218. Con diferente vocalización puede leerse
yeraj, mes, por lo que se contempla con este nombre el carácter
cíclico de la Luna, que también lo es de Yesod.
Símbolos: perfumes y sandalias.
Imagen mágica asociada: un bello hombre desnudo, muy fuerte.
Experiencia espiritual: visión de la maquinaria del universo.
Virtud: independencia. Es el indicio de que se ha nacido verda-
deramente, que se han cortado todos los cordones umbilicales.
Es el principio del trabajo de unificación interior, sin el cual no
es posible la vía espiritual.
Vicio: pereza.
Correspondencia en el ser humano: los órganos genitales (de
frente y de perfil).
Colores: en Atziluth: índigo, añil.
en Briah: violeta.
en Yetzirah: púrpura muy oscuro.
en Assiyah: amarillo limón con manchas azules.
Correspondencias con el tarot: los cuatro nueve:
Nueve de bastos: gran fortaleza.
Genios asociados: 27º, Ierathel, ,Nrii~, v. n. 641.
28º, Seehiah, ii~iiNTV, v. n. 321.
Nueve de copas: felicidad material.
Genios asociados: 45º, Sealiah, ii~,Nc, v. n., 106.
46º, 'Ariel, ,N~iv, v. n . 311.
Nueve de espadas: desesperación y crueldad. Encierro.
Genios asociados: 63º, 'Anauel, ,N,~V, v. n. 157.
64º, Mejiel, ,N~n~, v. n. 89.
Nueve de oros: ganancia material.
Genios asociados: 9º, Haziel, ,N~iii, v. n., 53.
10º, Aladiah, ii~,N, v. n. 50.
Correspondencia con el ajedrez: la dama negra. La personalidad
está, como en el ajedrez, al servicio del plano material, simbo-
lizado por Maljut. En otras palabras, simbolizaría el instinto de
conservación.

144 VILLARRU BIA / HAU T / MILLERA


Significados básicos: Centro de los deseos y los miedos. El sexo
como generador de nueva vida. El nacimiento y la muerte.
La Luna y la magia lunar. El ego. El instinto de conservación.
El chakra Swadhisthana.
Elementos: Elementos: Aire, como potencialidad y como expre-
sión.
Polaridad: Negativa.
Correspondencia con metal: KESEF, C,C:), plata. V. n . : 160. Este
nombre incluye la palabra C:l (kes), silla, trono, vista anterior-
mente, y C,:) (kaf), autoridad, poder. La guematria, por su parte,
nos proporciona varios interesantes significados relacionados
con la 9.ª sefirá. Así, vemos¡,~~ (ianak), mamar, y también nu-
trirse, alimentarse; kosef, escrito con las mismas letras que kesef,
deseo, anhelo;~~~ (nefel), aborto;¡~~ (simán), augurio, presagio;
C~:l (tzelem), imagen, figura; o j~ (kayán), de grandes testículos,
palabra que, además, puede también leerse como Caín, el her-
mano homicida de Abel.

3. 7. 7O. Décima sefirá: MALJUT. Mi.~~~, Reino


Valor numérico: 496

Otros títulos de la sefirá:


SHEJINÁ, m~:ltv. - V. n.: 385. la Presencia Divina en la Tierra.
MATANÁ TOVÁ, i'T~itQ mM~. - V. n.: 517. El Buen Don.
KALÁ, i'T~:l. - V. n.: 55. La Novia.

Para quienes la muerte es una tragedia y un problema sin solución,


la temurá de Maljut es, cuando menos, inquietante: M~ ~:) (kol mavet),
todo muere. Y su guematria confirmaría esta impresión, pues con su
mismo valor encontramos la expresión M~ 4,~M (jeblé mavet), esterto-
res de la muerte. Sin embargo, si observamos que 496 es el «número
suma» de 31 (es decir, la suma de los primeros 31 números de la serie
natural), deberemos investigar la información contenida en este nú-
mero. Y, sorprendentemente, aparte del nombre divino ~~ (El), que
es el principal de la 4.ª sefirá, Jesed (y, por tanto, el que manifiesta el
Amor), encontramos ~~~~i"T JM (hag ha-aviv), fiesta de la Primavera,

MANUAL D E KABBALAt-1 PRÁCTICA 145


Pésaj, la Pascua judía, que, como sabemos conmemora la liberación
de la esclavitud de Egipto y el comienzo del camino hacia la Tierra
Prometida. En este sentido, conviene citar dos pasajes, uno del pro-
feta Daniel (12: 3), y el otro ya mencionado de la «Divina Comedia»,
de Dante (Infierno, Canto ID). El primero nos recuerda: «Y los sabios
resplandecerán con la lucidez del firmamento, y los que hayan vuelto
a la justicia a muchos brillarán como las estrellas por siempre». El se-
gundo lo tomamos de la traducción de Juan Eugenio Hartzenbusch.
Tras haber llegado ante la puerta del Infierno, sobre la cual leen el
pavoroso cartel, Renunciad para siempre a la esperanza, el poeta muestra
su temor a Virgilio, que le guía en su viaje:
-Maestro, me espanta lo que dice ahí.
Y él, como quien sabía la causa de·mi terror, respondió:
-Aquí conviene no abrigar temor alguno; que no desmaye el cora-
zón. Hemos llegado al sitio que te había dicho, donde verás las almas
acongojadas de los que han perdido el don de la inteligencia.
Observemos que Dante no coloca en el Infierno a los «malos», sino
a los «tontos», en línea con lo afirmado por el profeta Daniel: los sa-
bios, al Cielo, los tontos, al Infierno. Así que la muerte no es lo quepa-
rece, por lo que debemos investigar su naturaleza usando los medios
que nos proporciona la sabiduría secreta, jokmah nistarah, la Kabbalah.
Y así, vemos que M~ (mavet), muerte, incluye la letra vav (1), que sim-
boliza al hombre, y las dos letras restantes forman la palabra CM (tam),
uno de cuyos significados es perfecto, completo. El hombre perfecto,
pues, es aquel que sabe morir en cada momento a su pasado y vivir
en el presente. Y, para confirmárnoslo, el valor de mavet, 446, nos lleva
al río Pisón, uno de los del Paraíso, que circundaba la tierra de Javilá
(~=palacio), en la que, según el texto bíblico (Génesis 2: 11-12)
había oro, bedelio (posiblemente se trataba de cristal de roca) y ónix.
Por su parte; el título adicional de la sefirá, El Buen Don, confirma
que el plano físico, el mundo material es, como afirma el judaísmo,
una buena cosa, y además apetecible, como una novia. Por su parte,
la tradición islámica abunda en la misma idea, al mencionar a Adam
como vicario de Allah en la tierra (Corán, II: 28-32). Y todo ello, pese a
que la guematria también proporciona la palabra fi'tV (shikutz), abo-
minación, impureza; pero, al relacionarse esta sefirá, como veremos,
con el ano, es lógico que aparezcan productos impuros de deshecho.

146 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


El atbash de Maljut, N~,~\ por su parte, no aporta directamente datos
de interés, tal vez a causa de la multiplicidad del nivel ñsico. Se en-
cuentran, eso sí, palabras dispersas (Dios, todo ... ); sin embargo, puede
hacerse, con un pequeño esfuerzo, una lectura de estas letras, a condi-
ción de utilizar una palabra que, si bien no es del todo correcta escrita
de esta forma, hemos encontrado en ocasiones con esta graña: N~~ (iafé),
hermoso, bonito, cuya ortograña correcta actual, con sonido casi igual,
es ii~~. Con ello, tendríamos la frase Todo es hermoso, lo que, pese a que
pueda parecer lo contrario, es rigurosamente cierto ... a condición de
que se haya alcanzado la suficiente serenidad y paz espiritual. Como
dice Arnaud Desjardins, se trata de situarse en la orilla del río de la
vida y contemplarlo: «Mira, ahora pasa flotando una rosa. Mira, $ora
pasa flotando una rata muerta».

Nombre divino principal, regente de la esfera en el Mundo de la


Emanación:
ADONAI ~JiN - V. n .: 65. Mi Señor. Al llegar al nivel físico, el nom-
bre se personaliza, se vuelve «algo nuestro». Dentro de él aparece
la raíz ji (dan), juzgar, o, lo que es lo mismo, aplicar las leyes; y eso
es, precisamente, lo que sucede en esta esfera, en la que se aplican
las leyes que emanan de las nueve que están por encima de ellas.

ves fundamentales: por una parte, ,~TI


La guematria de Adonai nos proporciona, por su parte, dos cla-
(héjal), santuario, palacio,
y también el Santo de los Santos, el lugar más sagrado del Templo
de Salomón; y por otra, :,r,~ (mezuzá), la cajita de metal o madera
que contiene un pergamino con los textos de Deuteronomio 6: 4-9
y 11: 13-21, y que se coloca a la entrada de las casas judías para indi-
car que se entra en lugar sagrado. Todo ello nos indica que la esfera
de Maljut es, como las otras nueve, sagrada.
Otros nombres divinos, asociados exclusivamente a la 10. ª sefirá:
ADONAI HA-ARETZ: yiNM ~jiN - V. n.: 361. Mi Señor de la Tie-
rra. Este nombre se invoca asociado al 5.0 centro en el trabajo en
el Pilar del Centro, técnica de autosanación que se propone en la
última parte de la presente obra. Su valor numérico es el mismo
que el de Monte Sión (ji~J iii).
ADONAI HA-MELEJ NEEMÁN: jONj ,,o:i ~jN - v. n.: 301.
Mi Señor el Rey Fiel. La guematria proporciona C'N (esh), fuego .

MAN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 147


ADONAI MELEJ: ,,o~~iN. - V. n. : 155. Mi Señor Rey.
AHÁ: Ni'iN. - V. n. : 7. Iniciales de ADONAI HA-ARETZ. Ver más
arriba.
ALUFÓ SHEL OLÁM: r::h'r') ~ ,~t,N. - V. n.: 599. Gobernador del
Mundo . La guematria de este nombre proporciona la palabra rin¡,~,
(hipakjut), apertura, por lo que se trataría de un Gobernador bené-
volo y democrático, y no autocrático, como nos lo han pintado.
ELOJAI HA-OLAMIM: C~,ViT -n',N. - V. n.: 250. Dios Vivo de los
Mundos. La sustitución de la he (i'i) por la jet (n) refuerza la idea de
«vida». La guematria refuerza la idea de que el plano ñsico es una
«buena cosa», pues proporciona la palabra ¡, (ron), canto, alegria.
MELEJ OLAM: c','f!) ~- - V. n.: 236. Rey del Universo. Este nom-
bre aparece en muchas oraciones de} ritual judío, generalmente an-
teponiendo el artículo a la segunda palabra (C',ji'i ~). Ver, por
ejemplo, la del lavatorio ritual de manos en el ejercicio n.º 7
de la sección I, 3.5. La guematria de este nombre proporciona
¡,,:i:o (mitzuk), condensación, solidificación, en consonancia con
la naturaleza de la 10.ª sefirá.
Arcángel: SANDALFÓN, regente de la esfera en el Mundo de
la Creación. ¡,~,,~o.V. n .: 280. Este nombre contiene la palabra
',¡~o, (sandal), zapato, calzado, en concordancia con la corres-
pondencia microcósmica de la sefirá, con los pies.
Orden angélico: ESHIM, regentes de la esfera en el Mundo de la
Formación. C~N- V. n.: 351. Seres de Fuego. La guematria nos pro-
porciona conceptos que aluden tanto al ser humano y a su desa-
rrollo cultural (W~N, inesh, humanizar), como a la vida como misión
de rescate de la Shejiná de su destierro, para lo cual los humanos
debemos ir también al destierro, a la diáspora (i~ yiN, aretz nod).
Chakra mundano: GUILGAL HA-ISODOT, regente de la esfera
en el Mundo de la Acción. ri,,io~i'i ,,,,, Esfera de los Elementos.
V. n .: 557. La expresión se refiere a los cuatro elementos clásicos,
fuego, agua, aire y tierra, que se manifiestan juntos en Maljut.
En cierto modo, pero sólo para los tontos (ver antes), este mun-
do es una cárcel (i'ii~Oi'i i:i:n, jatzar ha-mamará, v. n. 557).
Símbolos: altar de doble cubo. La cruz de brazos iguales. El círcu-
lo mágico. El triángulo del arte (símbolos todos ellos mágicos y
relacionados con la masonería).

148 VJLLARRUB IA / HAUT / MILLERA


Imagen mágica asociada: una mujer joven, coronada y entro-
nizada.
Experiencia espiritual: visión del Santo Ángel de la Guarda.
Virtud: discriminación, la capacidad de «separar el trigo de la
paja».
Vicios: avaricia, inercia.
Correspondencia en el ser humano: los pies (de frente). El ano,
los pies y los tobillos (de perfil).
Colores: en Atziluth: amarillo.
en Briah: limón, verde oliva, bermellón y negro moteado de oro.
en Yetzirah: limón, verde oliva, bermellón y negro.
en Assiyah: negro con rayas amarillas.
Correspondencias con el tarot: los cuatro dieces:
Diez de bastos: opresión.
Genios asociados: 29º, Reiiel, ~N~.-,, v. n . 251.
30°, Omael, ~NNOi, v. n. 78.
Diez de copas: triunfo.
Genios asociados: 47º, 'Asaliah, i'T~~WV, v. n. 415.
48º, Mihael, ~Ni"T~, v. n. 86.
Diez de espadas: ruina, el cumplimiento definitivo de la Ley de
Murphy («La tostada que se cae tiene tantas más probabilida-
des de caer con la mantequilla hacia abajo, cuanto más cara sea
la alfombra»). Es, en realidad, el gran maestro del desapego.
Genios asociados: 65°, Damabiah, i"T~~o,, v. n. 61.
66º, Manakel, ~N¡,~o, v. n. 221.
Diez de oros: Riqueza.
Genios asociados: 11º, Lauviah, i"T~,N~, v. n. 52.
12º, Hahaiah, i"Tli"li"I, v. n. 95.
Correspondencia con el ajedrez: el rey negro. Su escasa movili-
dad necesita el apoyo de otras piezas.
Significados básicos: El plano físico, incluyendo el doble etéri-
co. La expresión en el plano material. La realización. Lo denso.
La excreción. La Tierra. El chakra Muladhara.
Elemento: Tierra, como potencialidad y como expresión,
si bien esta última se manifiesta a través del conjunto de las
10 sefirot.
Polaridad: Positiva.

MANUAL DE KABBALAJ-1 PRÁCTICA 149


3. 7. 7 7. Consideraciones generales sobre las sefirot

El Árbol de la Vida no es una estructura que pueda considerarse,


ni tampoco estudiarse, analizando sus componentes por separado.
Es, por el contrario, una unidad orgánica, mayor que la suma de sus
partes; o, si utilizamos la terminología del gran psicólogo norteameri-
cano Ken Wilber, un holón que trasciende a sus componentes. No se
aparta tampoco la Kabbalah de otras tradiciones, y así, veríamos en el
budismo la imagen de múltiples perlas, cada una de las cuales refleja
a todas las demás. En este sentido, cada sefirá del Árbol de la Vida
incluye la totalidad del Árbol, en sus cuatro niveles. Hay, por tanto, un
Keter actuando en Maljut, como hay un Maljut en Keter.
Pero el Árbol no es sólo lo que se trata de representar con su figura.
Hay un contorno, al que no suele prestarse atención, si exceptuamos
a algún autor como Z'ev ben Shimon Halevi. En efecto, el exterior del
Árbol tiene suma importancia, pues representa su interacción respecto
a la energía (a la derecha del Pilar de la Misericordia) y respecto a la
forma (a la izquierda del Pilar de la Severidad). La parte superior, por
su parte, sería el campo de interacción del Cielo, entendido en
el mismo sentido que le dan los textos taoístas, como el Tao-te-King o
el I-Ching, mientras que la parte inferior sería el campo de interacción
de la Tierra, considerada en el mismo sentido. A su vez, los campos
de energía y forma pueden dividirse en dos mitades, a las que deno-
minaremos personal la inferior y transpersonal la superior. También
Cielo y Tierra pueden dividirse en dos mitades, derecha, regida por
la energía, e izquierda, regida por la forma (fig. 11). Esta circunstancia
debe de tenerse en cuenta al considerar las polaridades de las sefirot
«periféricas» (todas, menos Tiferet y Yesod). Por tanto, sin perjuicio de
la polaridad específica de cada esfera, la cual actúa según su propia
naturaleza en el interior del Árbol:
• Las esferas del Pilar de la Misericordia son activas, en sentido
general, respecto al interior del árbol, pero pasivas respecto al
campo energético de la derecha del Árbol. De estas esferas, Jok-
mah es puramente transpersonal, mientras que Netzaj es pura-
mente personal, y Jesed participa de ambas cualidades.
• Las esferas del Pilar de la Severidad son pasivas, también en senti-
do general, respecto al interior del Árbol, pero activas respecto al

150 VJLLARRUBIA / HAUT / M!LLERA


campo de formas (campo social) situado a la izquierda del Árbol.
De ellas, Binah es puramente transpersonal, Hod puramente per-
sonal, y Guevurah participa de ambas cualidades.
• Las esferas de la Tríada superior son pasivas respecto al Cie-
lo, pero activas respecto al interior del Árbol. De ellas, Jokmah
es energética, Binah formal, y Keter no tiene ninguna cualidad,
al carecer de atributos. Las tres operan a nivel transpersonal.
• Las esferas de la Tríada inferior son pasivas respecto al inte-
rior del Árbol, y activas respecto a la Tierra. De ellas, Netzaj es
energética, Hod es formal, y Maljut reúne ambas cualidades.
Las tres operan a nivel personal.
Otro aspecto a considerar es el campo de consciencia en que
cada parte del Árbol actúa. También puede considerarse que cada
esfera participa de uno o más de los niveles social, psicológico
o espiritual. De este último participan Keter, Jokmah y Binah, y,
compartido con el psicológico, Jesed, Guevurah y la sefirá oculta,
Daat. Puramente social o exterior es Maljut, y compartido con el
psicológico, Netzaj y Hod. Finalmente, Tiferet es la única esfera
que participa de los tres niveles (fig. 12).
El Sefer Yetzirah (1:5) define al Árbol como la representación
de un universo de cinco dimensiones, o las «diez direcciones», tal
como las llama Aryeh Kaplan. El pasaje en cuestión dice así:

Diez Sefirot de la Nada: su medida es diez que no tienen fin.


La profundidad del principio, la profundidad del fin,
La profundidad del bien, la profundidad del mal,
la profundidad de arriba, la profundidad de abajo,
la profundidad del este, la profundidad del oeste,
la profundidad del norte, la profundidad del sur.
El Maestro único, Dios, Rey fiel, domina sobre todas ellas
desde su Santa morada hasta la eternidad de las eternidades.

No ha habido acuerdo entre los cabalistas para la atribución de cada


una de estas diez direcciones a cada una de las sefirot. Por parecemos
la más lógica y coherente elegimos la de Ramban Raavad, sin perjuicio
de remitir a los lectores interesados en este punto a la obra de Aryeh
Kaplan, ya mencionada. Dicha atribución es la siguiente:

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 151


Tabla VII
Los cinco ejes polares del Árbol de la Vida

Eje polar, direcciones Parejas de sefirot


Principio - Fin Jokrnah - Binah
Bien-Mal Jesed - Guevurah -
Arriba - Abajo Keter - Maljut
Este -Oeste Tiferet - Yesod
Norte -Sur Hod- Netzaj

Se configuran así las tres dimensiones espaciales, la dimensión


temporal y la dimensión ética. Resp'e cto a esta última deben en-
tenderse las expresiones bien y mal como relativas una a la otra,
y referidas respectivamente a la expansión y a la contracción.
Pues en virtud de este proceso semejante al latido de un corazón,
las otras cuatro dimensiones del espacio-tiempo se modifican,
tal como ha demostrado Einstein en su teoría de la relatividad.
La consecuencia de este agrupamiento de las sefirot por parejas
es que, cuando se produzcan desequilibrios energéticos entre dos
miembros de un mismo eje polar, la sefirá más vacía tenderá a
absorber energía de la más llena, lo que tendrá suma importancia
para la interpretación del Árbol personal. La figura 13 muestra un
esquema de estos agrupamientos polares.
En otro orden de cosas, determinadas sefirot se agrupan en con-
juntos que proporcionan una interesante información adicional.
Así, las tres primeras esferas, Keter, Jokrnah y Binah, reciben el
nombre de ¡"~JN 1"'iN (Arij Anpín), El Gran Rostro, con valor numé-
rico 422, y simbolizan la unión del Padre y la Madre Cósmicos. Por
su parte, las siete sefirot inferiores reciben en conjunto el nombre
de ¡"~JN ,~v~(Ze'ír Anpin), El Pequeño Rostro, con valor numérico
478; para Yitzak Luria es la parte de la creación que quedó sepa-
rada de la Shejiná, y que por su anhelo de reconstruir la Unidad
Perdida recibió el nombre de «el Impaciente».
Un aspecto interesante es el derivado de la atribución de los nom-
bres divinos a cada una de las esferas, especialmente los que
llamamos principales. Como en tantas otras materias hay opi-

152 VILLA RRUBIA / HAU T / MILLERA


niones de todo tipo. Creemos que la que exponemos en la pre-
sente obra es sumamente coherente con la naturaleza de cada
una de las esferas. Veamos brevemente la razón para estas atri-
buciones, que es un resumen de lo expuesto en la sección co-
rrespondiente a cada una de ellas, a fin de proporcionar una
visión de conjunto al respecto:
Esfera de Keter. Su nombre divino, il~i'IN (Ehiét El Que Es,
muestra al Infinito, representado por la letra N, aspirando (il)
un Universo anterior, hasta concentrarlo en un punto(~), a par-
tir del cual exhala el Universo actual (la segunda il). Ello está
además en línea con la teoría del big-bang, así como de la in-
terpretación esotérica que el Islam hace del nombre de Allah:
El Principio Generador que con su soplo crea los Universos visibles
e invisibles.
Esfera de Jokmah. Su nombre divino principal, il\ es la mi-
tad exhalada del nombre anterior. Recordemos que Jokmah no es
sino Keter puesto en movimiento.
Esfera de Binah. Aquí aparece el Tetragrama ilil"I~, formado por
el nombre anterior, al que se añade el más escondido del Absoluto,
ill Si en Jokmah aparecía el espacio, el aspecto de unión o enlace
de la letra i es el generador del tiempo. En efecto, y además de la
asociación de esta esfera con la Gran Madre (lo que implica un pe-
ríodo de gestación), el Tetragrama suele traducirse como El Eterno,
debido a que puede considerarse como un notarikón de :i~m m, il~~
(ihyé hové va-hayá; las iniciales se indican en negrita), que puede
traducirse como será, es y fue.
Esfera de Jesed. Una vez aparecen el espacio y el tiempo,
la energía y la forma, el Infinito empieza a moverse. Pero ¿ha-
cia dónde puede moverse, si es todo lo que existe, y nada hay
aparte de Él? Sólo le es posible el movimiento a través de Su
expansión, como un latido, en un gran sístole y diástole cósmi-
co. Por eso, el nombre divino principal de esta esfera, ~N (Él),
asocia ambos aspectos, Infinito y movimiento.
Esfera de Guevurah. Como ocurre con la pareja Jokmah-Bi-
nah, aquí también la esfera de la forma es un reflejo de la de la
energía con el añadido del nombre oculto, formándose así ili~N
(Eloáh).

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 153


Esfera de Tiferet. En este caso, el texto bíblico es explícito: si
la sexta esfera es el centro del nivel de Briah o Creación, desde
el primer momento el libro del Génesis (1 :1) dice que «En el
principio creó Dios (t:l~M~N, Elohim) los cielos y la tierra». Este
nombre divino es el plural del anterior, y como ocurre con fre-
cuencia en los idiomas semitas, vemos en este caso un nombre
femenino cuya terminación plural es masculina. Es lógica la
atribución del nombre plural, puesto que, como vimos, es en
Tiferet el nivel en que aparece la individualidad, y por tanto la
multiplicidad.
Esfera de Netzaj. Aparece por primera vez un nombre com-
puesto, MiN~::t mM~ (Yahvé Tzebaot), expresión traducida usual-
mente por Eterno de las Huestes. Ambas palabras estan plena-
mente justificadas: la primera, por cuanto uno de los significa-
dos de Netzaj es precisamente eternidad, y la segunda, por el
aspecto de multiplicidad que aparecía en Tiferet.
Esfera de Hod. También en este nivel, la esfera de la forma es
un reflejo de la de la energía. En este caso, las formas infundidas
por Hod a la multiplicidad hacen que el Tetragrama que aparecía
en Netzaj se sustituya por el nombre del Dios creador. Por eso,
el nombre divino principal no puede ser sino MiN~::t o~M~N (Elohím
Tzebaot), Dios Creador de las Huestes.
Esfera de Yesod. La correspondencia de esta esfera con el naci-
miento, la sexualidad y la muerte requiere un nombre que mues-
tre a la vez el poder y la vida. Por eso, el nombre divino principal
es ~n ~N -.,rv (Shaddai El Jai), Todopoderoso Dios Viviente. Es real-
mente el mismo nombre que aparecía en la 4.ª sefirá, ~N, con los
citados atributos añadidos de poder y vida.
Esfera de Maljut. El nombre divino, ~JiN (Adonaí), Mi Señor,
es la conclusión lógica del proceso: ahora hay unas criaturas
en el plano físico que reconocen a su Creador desde la lejanía,
en tanto que seres individuales que se perciben separados de
Él. Por último, destaquemos que a Maljut se le da el nombre de
Madre Tierra (M~iN ON, Em adamá), por su valor 91, igual a j~N
(amén), la culminación de la creación.

154 ViLLARRUBIA / HAUT / MI LLERA


]{6?~r[~~~~;~9n~:lreJ;i!:1;1ii~ift ¡,¿¡~gL.~~~str¡m
.. la manifestación de lasdHeréntes séfir()tdel Árbbl de''láVidá;:~

··, ~~Ezt(E ~¡:~?k!&{]j~j f!f!i~lftfi ~i;:;~


·"·• . "tel·sifva'de'record~forió niás·ádelañfe.,Anofa fambién_si;'•en.{ü ·.
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MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 155


Figura 10
Modelo de partición de una hoja tamaño A-4 y colocación de las diez esferas del
Árbol de la Vida en los puntos de intersección indicados. El espacio en el inte-
rior de las esferas debe quedar en blanco, para anotar en él la frase que mejor
resuma la esencia de cada una.

156 YILLARRUBIA / H AUT / MILLERA


Forma Energía

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Forma Energía

Figura 11
Los campos externos del Árbol de la Vida

MANUAL DE KABBA LAH PRÁCTICA 157


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Figura 12
Los tres niveles del Árbol. Se trata de un buen recordatorio de los significados de
cada uno de sus aspectos, a condición de profundizar en su estudio. Obsérvese
que en bastantes áreas del Árbol se entremezcla lo espiritual con lo psicológico,
y esto con lo social. En Tiferet, su centro a la vez que el de la vida psicológica,
se encuentran los tres niveles.

158 YILL/\RRUBIA / HAUT / MILLER/\


8

8
Figura 13
Los cinco ejes polares y las diez direcciones según la versión del Sefer Yetzirah
de Ramban Raavad. Configura un universo de cinco dimensiones, de las que tres
son espaciales (Norte-Sur, Este-Oeste, Arriba-Abajo), una temporal (Principio-
Fin, es decir, Pasado-Futuro) y una ética (Bien-Mal). Esta última puede conside-
rarse también como los aspectos de expansión y contracción, en concordancia
con la teoría de la relatividad de Einstein.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 1 59


3. 1.12. El papel de Oaa( la sefirá oculta

Como vimos anteriormente, Daat, el Conocimiento, aparece desde


un primer momento en la Biblia (Éxodo 31:3, y Proverbios 3:19 y
24:3-4). Sin embargo, los cabalistas establecieron que no se trataba
de una sefirá más, sino de la confluencia de la Sabiduría de Jokmah
y la Inteligencia o Entendimiento de Binah. Y, si bien se comporta
en ocasiones como otra sefirá, no se la debe considerar como tal,
pues como indica el Sefer Yetzirah en 1:2: «Diez sefirot de la nada»,
y recalca en 1:3, y sobre todo en 1:4: «Diez sefirot de la nada, diez y
no nueve, diez y no once. Entiende con Sabiduría, sé sabio con En-
tendimiento». Vemos en esta última cita, no sólo que hay diez sefirot
(«en el número de los diez dedos, cinco·opuestos a cinco»), sino que se
debe producir una confluencia entre la Sabiduría y el Entendimiento.
Para muchos cabalistas, Daat es la conjunción o unión mística
entre el Padre (~N, Ab) Jokmah y la Madre (NON, Amá) Binah, la
cual, tras la cópula quedará fertilizada pasando a ser no~N (Aimá),
la Madre Fértil y Brillante. Se suele colocar a Daat en el punto en
que se cruzan el Abismo con el Sendero de la Flecha (formados por
el 2, el 14 y el 21, v. figs. 2 y 7), y al ser este último la vía por la que
se eleva la consciencia, así como la guía de elevación de la ener-
gía kundaliní en el ser humano, nos indica que Daat es una clave
fundamental tanto para la generación como para la regeneración.
Si examinamos con atención la Escala de Jacob (fig. 9), comproba-
remos que el Daat de Assiyah es a la vez el Yesod de Yetzirah; que,
a su vez, el Daat de Yetzirah es el Yesod de Briah; y que el Daat de
Briah es el Yesod de Atzilut. Por tanto, hay una profunda relación
entre la 9.ª sefirá y Daat.
El Sendero de la Flecha, en el que Daat tiene un papel funda-
mental, aparece de una u otra forma en diferentes tradiciones. Las
más próximas a nosotros, el cristianismo y el islam, además del
judaísmo, la recogen de diferentes formas. San Juan de la Cruz,
en su Subida al Monte Carmelo, describe y dibuja un monte a cuyo
«Sendero de la Flecha» llama Senda estrecha de la perfección, y en
él escribe cuatro veces (¿los cuatro niveles de la Manifestación?)
la palabra nada. Y el Corán, en su sura l.ª, hace una única petición
a lo largo de sus siete versículos o alíyas: «Guíanos por el camino

160 VILLARRUBIA / H A UT / Mi l.LERA


recto, vía de aquellos en los que Tú te complaces y no están en el
error» (Áhdina-s-siratal mustaqima, sirata-l-ladina an 'amta 'alaihim,
gairi-l magdubi 'alaihim wa la ad-dálina).
La grafía hebrea de Daat es rivi, palabra que contiene a su vez
r,i (dat), religión, lo que vuelve a enlazar al hombre con Dios. Sin
embargo, se trata de una religión ciega, mientras no tenga la apor-
tación de la visión, representada por la letra ayin (V), que, como
sabemos, significa ojo; es así mismo una religión petrificada, pues-
to que la ausencia de esta letra le quita también la fuente, que es
otro de sus significados. Además, al perder la letra V respecto al
conocimiento (recordemos el sentido que el texto bíblico da a esta
palabra, de encuentro sexual), la religión se vuelve también estéril,
en cuanto no es susceptible de generar nueva vida, y consecuen-
temente aburrida, al perder también su cualidad orgásmica. Daat,
por otra parte, contiene también, por ser su raíz, vi
(deá), con el
mismo significado de conocimiento; pero, inviertiendo el orden de
las letras, aparece iv (ad), eternidad, y con diferente vocalización,
ed, testigo. Son precisamente esas dos letras, dálet y ayin, las que
aparecen de mayor tamaño que las demás en el pasaje de Deutero-
nomio 6:4 de las Biblias hebreas, llamado la Shemá, por ser ésta su
primera palabra. (fig. 14).

Figura 14
La shemá (Deuteronomio 6:4) es la profesión básica de fe del judaísmo; el texto
está reproducido de una Biblia hebrea. Las letras finales de la primera y última
palabra, u y d, respectivamente, se escriben siempre de mayor tamaño en las
Biblias hebreas, y además se resaltan mediante un grueso punto en forma de
estrella. La pronunciación es: Shemá Yisrael Adonai Elohenu Adonaí ejad. El signi-
ficado, por su parte, es: «Escucha, Israel, el Eterno es nuestro Dios, el Eterno es
Uno». A la derecha de la primera palabra, el número 4 indica el del versículo
reproducido, mientras que la h debajo del número indica el 5 (en este caso seña-
lado por el valor de la letra hebrea), que corresponde al comienzo del versículo
siguiente, en la misma línea de escritura que el que se reproduce.

MAN UAL DE K A BBALAH PRÁCTICA 161


Este pasaje, considerado la profesión de fe básica del judaísmo, se
incluye con otros del mismo libro en las mezuzás, las cajitas que se
ponen en los dinteles de las puertas de entrada de las casas judías.
Las letras Vy ,, como se ve, de mayor tamaño, son las finales de
la primera y la última palabra. Su significado, que todos los ju-
díos saben, es que, quien conoce este pasaje, se hace testigo de la
Eternidad, recordándonos el versículo de Isaías 43:10: «Vosotros
sois mis testigos, ha dicho el Eterno». Se recita en todos los aconte-
cimientos importantes, especialmente en el nacimiento de un hijo
o en el momento de la muerte, y son las primeras palabras que se
enseñan a los niños judíos. Hace algún tiempo se descubrió en la
India una comunidad judía que había perdido todas sus tradicio-
nes, hasta olvidar quiénes eran; lo úpico que conservaban era la
Shemá, y por eso se supo su condición de hebreos. La frase, dice el
Talmud, no está dirigida a los oídos, sino al corazón: oye, Israel,
en cualquier idioma que oigas, aun cuando no comprendas lo que
oigas, pues lo que aquí te dicen debe penetrar en tu corazón y en tu
alma. Vemos así el carácter regenerador de Daat, actuando sobre
los centros no verbales y movilizando energías que de otro modo
quedarían estancadas y se corromperían.
A continuación se recogen de forma resumida los principales
conceptos que tradicionalmente se vienen asociando a Daat, si-
guiendo la misma sistemática que con las sefirot. Los comentarios,
en cada caso, irán completando lo expuesto en los párrafos ante-
riores.

La sefirá oculta, DAAT. MVi, Conocimiento


Valor numérico: 474.

Nos remitimos a lo dicho en párrafos anteriores sobre la temu-


rá de esta palabra. Además, permutando sus letras encontramos
i:iv (itted), preparar, disponer: Daat prepara la manifestación en
las sefirot inferiores, ya que es el movilizador de la energía. Suele
colocarse en el punto de cruce entre el Sendero 2 y el Abismo, aun-
que en realidad no tiene un sitio fijo, por lo que sería más correcto
situarlo fuera del plano o lámina en que esté dibujado el Árbol,
bien delante o bien detrás, en tercera dimensión.

1 62 V1LL ARRUBI A / H AUT / MILLERA


Nombre divino principal, regente de la no-esfera en el Mundo
de la Emanación: YEHOVA ELOHIM. o~:i~N nin~. - V. n.: 112.
Eterno de los Dioses, podría ser su traducción aproximada. Es
un nombre adoptado por los círculos ocultistas a partir del si-
glo XIX para el Trabajo en el Pilar del Centro, que se describe
en la última parte de esta obra. La guematria de este nombre
proporciona interesantes conexiones. En primer lugar, aparece
otra forma de decir preparar o disponer, tOiM (hizmín); también
encontramos ¡,i~i (dabuk), cópula, coito, que es, como vimos,
lo que Daat representa respecto a Jokmah y Binah; y en esta
misma línea, y para indicarnos que la unión se produce a to-
dos los niveles y en todos los ámbitos, aparece con el mismo
valor numérico ¡,~~ (Yabok), el vado que pasó Jacob, según re-
lata Génesis 32:23, cuando fue a reconciliarse con su hermano
Esaú, y que es el símbolo de la reconciliación entre enemigos
y, en un sentido más amplio, el de la unión de los opuestos.
De paso, observemos que la referencia bíblica nos remite al 32
(el corazón,~~, leb, y los 32 senderos de sabiduría del Árbol de
la Vida), mientras que el 23 nos habla de unidad, iiinNM (haaja-
dah) entre la alegría, i'Tiin (jedvá) y la luz,,~¡ (zív) por una parte,
lo que representaría a Jokmah, y por otra el sufrimiento, el do-
lor, ~N~ (keeb) consecuencia de la limitación que imponen las
formas de Binah.
Arcángel: no tiene uno propio, aunque Gareth Knigth asigna los
Arcángeles de los Puntos Cardinales.
Orden angélico: NAJASHIM, regentes de la no-esfera en el Mundo
de la Formación. C"Wm - V. n. : 408. Serpientes. La serpiente tiene
mucho que ver con la expulsión de Adán y Eva del Paraíso. Pero las
cosas no son como a primera vista parecen, pues el singular, WM~ (na-
jash) tiene el mismo valor numérico, 358, que n"WO (meshiáj), mesías,
ungido, mientras que el del plural, 408, nos remite a ¡,wr, (jishek),
componer, ligar, atar, y a ¡,riw (shájak y shijék), que significa tanto
reír como hacer travesuras. Pues el Paraíso no es un estado idílico al
que haya que regresar, una trans-consciencia, sino, como muy bien
ha visto Ken Wilber, una pre-consciencia que debe trascenderse
en el camino hacia la Conciencia de Absoluto; y es imprescindible
abandonar el Paraíso pre-consciente para alcanzar la individuación

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 1 63


y la adquisición de la mente racional como paso, aunque doloroso,
necesario para llegar a la meta.
Chakra mundano: SOTHIS o SIRIO, la Estrella Perro, regente de
la no-esfera en el Mundo de la Acción:. ¡,i ~N (Abrek). - V. n.: 303.
Según otras concepciones, sería PLUTÓN, ir.o,~~, v. n . 181),
el planeta descubierto en 1930. La guematria de Sirio propor-
ciona tz!~ (guesh), acercarse, que es precisamente la función de
Daat, establecer un puente entre las tres sefirot superiores, lla-
madas el Gran Rostro, ¡~~~N , ~,N, (arij anpín) y las siete in-
feriores, llamadas el Pequeño Rostro, t~~N ,~v,(ze'ir anpín),
y que para Yitzak Luria es la parte de la creación que quedó
separada de la Shejiná; por su anhelo de reconstruir la unidad
p erdida la llamó «el Impaciente», Por su parte, Plutón, cuyo
nombre es de origen latino, lleva a ¡,~N (afek), horiz onte, y eso
es, precisamente el Abismo del Árbol, y a n~,~(tzofé), que sig-
nifica a la vez observador, profeta y explorador. ¿No son éstas
las funciones de Daat, el medio para que Dios contemple su
creación, dé testimonio de Sí Mismo y explore la creación y su
evolución?
Símbolos: La celda del condenado. El prisma. La habitación vacía.
La Montaña Sagrada de todas las tradiciones. Un grano de ce-
real. La ausencia completa de símbolo.
Imagen mágica asociada: una cabeza con dos caras, mirando a
ambos lados.
Experiencia espiritual: Visión de Dios.
Virtudes: Desapego. Perfección de la Justicia, y la aplicación de las
virtudes no contaminada por la personalidad. Confianza en el
futuro. Como veremos al estudiar los senderos subjetivos, Daat
es la fuerza complementaria de Tiferet, o si se prefiere, su polo
opuesto, en la manifestación del sendero 8, La Justicia.
Vicios: Duda del futuro. Apatía. Inercia, inmovilismo. Cobardía.
Orgullo, que según Gareth Knigth conduce al aislamiento y alá
desintegración.
Correspondencia en el ser humano: El chakra Visudha, laríngeo.
Está relacionado con la creatividad.
Colores: en Atziluth: Lila.
en Briah: Gris plateado.

16 4 V11. LARRUBI A / H AUT / M1 U.ERA


en Yetzirah: Violeta puro.
en Assiyah: Gris moteado de oro.
Correspondencias con el tarot: el respaldo de todas las cartas.
Correspondencia con el ajedrez: el desarrollo de la partida.
Significados básicos: La unión, la cópula. Los universos paralelos
y la clave que conecta con ellos.
Elementos: Fuego, Agua y Aire, como potencialidad y como ex-
presión.
Polaridad: Positiva y Negativa a la vez.

Daat, la sefirá oculta, ofrece una gran riqueza de significa-


dos, que ayudan a una mejor comprensión del simbolismo de
cada una de las partes o aspectos del Árbol de la Vida. Sin em-
bargo, en la interpretación del Árbol personal, no tendremos
generalmente en cuenta estos significados de una forma direc-
ta (aunque sí indirecta), por cuanto pretendemos que esta obra
sea eminentemente práctica y como punto de apoyo al auto-
conocimiento y a la investigación del tikún, la misión sagrada
que todo ser trae al venir al mundo.

3.2. Los senderos subjetivos del Árbol


El Sefer Yetzirah nada dice acerca de los senderos subjetivos.
La única base que, de forma oscura, podría interpretarse como
corrientes en el Árbol de la Vida lo encontramos en su sección 1:8,
en la que, citando a Ezequiel 1:14, dice: «Y si tu corazón corre, re-
gresa al lugar. Por eso está escrito: las Jayot corrían y regresaban».
Y comenta al respecto Aryeh Kaplan que el «correr» consiste en
una rápida profusión de simbolismo, ya sea verbal o visual; y si
el corazón «corre», el Sefer Yetzirah advierte que se debe «regre-
sar al lugar», focalizándose en algo físico para restaurar el equili-
brio espiritual, tal como hacen las Jayot, los «ángeles vivientes»,
oscilando entre «correr y regresar». Serían las corrientes que,
no sólo descienden por el Árbol (lo que sería el proceso de ma-
nifestación de las diez sefirot), sino que también ascienden (lo
que vendría representado por las letras hebreas).

MANUAL D E KABBAL AH PRÁCTICA 165


Es indudable que el concepto de unos senderos que uniesen
entre sí las diez sefirot es relativamente moderno, probablemente
de la época en que aparecieron textos claves en la Kabbalah como
son el Sefer ha-Bahir y el Zohar. Sea como fuere, lo primero que se
encuentra es una correspondencia entre letras hebreas y senderos
que resulta obvia:

Tabla VIII
Clasificación de las letras hebreas

Tres letras madres, ~, Q, W Tres senderos horizontales


Siete letras dobles,~.,,,, :=, .E), , , r, Siete senderos verticales
Doce letras simples, :i, \ ', n, t:i, ~, i,, .l, e, V, '!i:, ¡, Doce senderos diagonales

Como se ha mencionado, hubo varios modelos de Árbol,


algunos de los cuales se han recogido en las figuras 3, 4 y 5.
Sin embargo, la aparición del tarot, probablemente a finales
del siglo XIII, supuso a la larga una revolución de la que no
fueron menos responsables (a veces, responsables irrespon-
sables) muchos ocultistas, en ocasiones relacionados con ór-
denes masónicas, a partir del último tercio del siglo XVIII.
Un siglo después, ya en los albores del XX, la Orden Hermética
del Alba Dorada (Golden Down) completó los trabajos de relacio-
nar los senderos del Árbol de la Vida, las letras hebreas y el tarot.
La tarea no fue fácil, y, como veremos inmediatamente, a veces
incurrió en errores, probablemente por la simple razón de que
los miembros de la Golden Dawn desconocían, muy probable-
mente, el texto hebreo de la Biblia. El ejemplo más notorio lo
tenemos en la obra de Arthur Edward White Claves del tarot que
estudia el mazo de naipes creado por él mismo con el concurso
como dibujante de Pamela Colman Smith, y conocido por Tarot
Rider. Al comentar el arcano VIII, que en el tarot de Marse-
lla corresponde a La Justicia y él cambia por La Fuerza, alega
como justificación para dicho cambio: «Por razones que me sa-
tisfacen a mí mismo ... » Y añade: «Como la variación no tendrá
ningún significado especial para el lector, no hay motivo para

1 66 VI LLARRUBIA / H AUT / MILLERA


que dé una explicación sobre el cambio». Sin embargo, si White
hubiese conocido el texto hebreo del salmo 92, habría descubier-
to en su versículo 13 algo que tal vez le hubiese hecho cambiar de
opinión. Veamos dicho texto hebreo:

(Tzadik ka-tamar ifraj ke erez ba-Lebanón isgué)

El justo como palmera florecerá,


como cedro en el Lfbano crecerá

¿Qué podemos observar en el versículo anterior? Lo prime-


ro, que comienza con la palabra tzadik, justo; y sabiendo que en
la Biblia hebrea el contenido de un texto se cita por su primera
palabra, debemos colegir que el versículo se refiere a la justicia.
Después observamos que el versículo tiene 6 palabras (núme-
ro de la letra vav, y del hombre, por haber sido éste creado el
sexto día) y 26 letras, número del Tetragrama ;,,¡¡~ ; luego, de
alguna forma, está estableciendo un puente de unión entre el
hombre y Dios. ¿Y cómo es ese puente? La clave nos la dan los
números del salmo y del versículo; pues 92 es (ref. sección 3.1.5
de esta II Parte) uno de los nombres de la 5.ª sefirá: in~ (pajad),
Temor, mientras que 13 es (ref. sección 6.2 de la I parte y 3.1.6
de esta II Parte) ¡¡_:¡¡~ (ahavá), amor, la 4.ª sefirá. La respuesta
es por tanto obvia: la Justicia ocupa su lugar siendo el puente
de unión entre la Misericordia y el Rigor, entre las esferas 4.ª
y 5.ª. Como comprobaremos de inmediato, la colocación de los
senderos subjetivos en el Árbol, tras los cambios introducidos
al relacionarlo con el tarot, sigue un orden riguroso, y es el que
aplicamos en la presente obra.
Debemos antes intentar comprender las razones que hicie-
ron que las letras hebreas (al menos diez y ocho de ellas) hayan
modificado su posición en el Árbol de la Vida, pues, de esta
forma, podremos entender mejor el significado de cada uno de
los senderos subjetivos. Partiremos, pues de las letras coloca-
das en los senderos subjetivos del Árbol de la Vida antes del

MANUAL DE KA138ALAH PRÁCTICA 167


cambio originado por el tarot (fig. 15), y las compararemos con
la posición después del cambio (fig. 16). Comprobaremos así
que las letras~,~, ;t y M permanecen en sus lugares originales,
mientras que las restantes son desplazadas de sus ubicaciones
anteriores.
La aproximación al simbolismo y significado de los senderos
subjetivos también recibe apoyo en otro juego iniciático: el aje-
drez. Nacido en la India y llegado a Occidente a través de Per-
sia y los árabes, representa una batalla entre dos bandos que,
en realidad, es la danza del Yang y el Yin. Todo en el universo
es función de dos fuerzas que se sintetizan en una tercera, y,
como hemos visto, el Árbol de la Vida es un diagrama de po-
laridades, no sólo entre los pilares del Rigor y la Misericordia,
sino entre las propias sefirot consideradas por parejas (fig. 13).
El ajedrez es, en este sentido, una representación muy ajustada
del universo, tanto macrocósmico como microcósmico, y muy
en consonancia con los principios a que responde el Árbol de
la Vida.
Antes de estudiar en detalle cada sendero subjetivo, se de-
dican las dos siguientes secciones a contemplar las corres-
pondencias del Árbol de la Vida con el tarot y con el ajedrez.
Un avance de ambas aparece en el estudio de las sefirot que se
ha realizado a lo largo de la sección 3. l. de esta II parte.

3.3. Correspondencias entre el Árbol de la Vida


y el tarot
El tarot, en sus versiones más conocidas, consta de 78 naipes,
divididos en cuatro palos o series de catorce naipes cada una,
llamadas Bastos, Varas o Cetros, Copas o Cálices, Espadas y
Oros o Pentáculos, más una serie de 22 naipes sin palo deno-
minados comúnmente Arcanos Mayores, para distinguirlos de
las cartas de palo, que se denominan Arcanos Menores. Cuan-
do en la presente obra se emplea la palabra Arcano, se entiende
la referencia a los Mayores. A su vez, las cartas de palo son de
dos tipos: de número, ordenadas del 1 o As, al 10, y cuatro fi-

168 ViLLARRUBIA / HAUT / MILI.ERA


guras de corte, denominadas, de menor a mayor. Sota o Paje,
Caballero (o, en la terminología española, Caballo), Reina y
Rey. Los Arcanos Mayores suelen tener, en ocasiones, nombres
diferentes, dependiendo de las diferentes escuelas o, simple-
mente, de las modas de cada momento. Corno se ha venido
señalando, desde el siglo xrx se estableció una relación entre
los Arcanos Mayores y las letras hebreas, relación en la que hay
dos escuelas básicas: la que arranca asignando la letra álef (N)
a El Loco, el Arcano sin número, y la que parte del Arcano I,
El Mago. Lo curioso es que los seguidores de cada una de estas
dos tendencias, al explicar su sistema, no hagan la menor alu-
sión al otro. Dulce María Millera ha hecho un descubrimiento
sorprendente: ambas tendencias están en lo cierto, pero cada
una en su propio nivel. Según su punto de vista, «la razón
por la cual cada autor se haya hecho adepto de una de las dos
sin pronunciarse sobre la otra, intuyo que depende de haber
experimentado mejor una de ellas, la primera modalidad (asig-
nar la N a El Loco) en relación con el Tarot y la Astrología, o
la segunda modalidad en relación con la Kábala y el Tarot».
En nuestro caso, pues, seguiremos la segunda de las escuelas,
lo cual, además, presenta la ventaja de no forzar los números de
los Arcanos respecto a los de orden de las letras en el alefato.
En los cuadros que siguen se recogen todas las relaciones en-
tre el Árbol de la Vida, el tarot y, en su caso, las letras hebreas.
Siempre que nos refiramos a los Arcanos Menores ordenaremos
los palos en el sentido Bastos, Copas, Espadas y Oros, que es
el natural descendente en el Árbol de la Vida. Conservaremos
también la denominación tradicional española de estos palos,
así como la de caballos para la figura correspondiente, en lu-
gar de la propuesta por las Escuelas Ocultistas, pues, al estar
orientada la presente obra tanto a personas con conocimientos
de Kabbalah como a aquellas otras que se topan con ella por
primera vez, creemos conveniente evitar en lo posible términos
ajenos a nuestra cultura. La figura 17 es un resumen de lasco-
rrespondencias entre el Árbol de la Vida y los Arcanos Mayores
del tarot.

MANUAL DE KABBAI.AH PRÁCTICA 169


Figura 15
Una de las atribuciones de las letras he-
breas a los senderos subjetivos, deducida
del Sefer Yetzirah: 3 madres en las hori-
zontales, 7 dobles en las verticales. 12 sim-
ples en las diagonales.

Figura 16
Atribución de letras hebreas a los senderos
subjetivos, adoptada por el tarot en virtud
de la jerarquia de las sefirot. Las cuatro le-
tras encerradas en círculos no cambian de
posición respecto a la Figura 15.

1 70 YILLA RRUB IA / H AUT / MILLERA


Figura 17
Los Arcanos Mayores del tarot y su correspondencia con los senderos subjeti-
vos del Árbol de la Vida. Si bien hay varias maneras de distribuir los Arcanos
en el Árbol, la de la figura sigue en lo esencial la propuesta por la Golden
Dawn, sin más cambio respecto a la misma que el cambio de posición entre
La Justicia y La Fuerza.

3.3. 7. Las sefirot y el tarot

En la correspondencia Tarot - Árbol de la Vida, son las cartas de palo


numeradas del 1, o As, al 10, las correspondientes a las sefirot del
Árbol. Recordemos que el Sefer Yetzirah habla de diez números y
veintidós letras, por lo que aquellos son los que deberán correspon-

MAN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 1 71


der con las diez sefirot. La tabla siguiente resume las corresponden-
cias que se han expuesto a lo largo del capítulo dedicado a cada una
de las sefirot.

Tabla IX
Correspondencias de las sefirot con el tarot

Sefirot Na_ipes

Kether As (bastos, copas, espadas, oros)


Jokmah 2 ( « (< / « « )
Binah 3 ( « (< / « I
« )
Jesed 4 ( « (( / « « )
Guevurah 5 ( « « « « )
Tifareth 6 ( « « « « )
Netzaj 7 ( « « « « )
Hod 8 ( « « « « )
Yesod 9 ( « « « « )
Maljuth 10 ( « I « I « I
« )

Las sefirot representan, en general, los aspectos objetivos en sus diferen-


tes niveles de manifestación: bastos para Atzilut, copas para Briah, espa-
das para Yetzirah, y oros para Assiyah.

3.3.2. Los senderos subjetivos y el tarot

Las correspondencias se refieren en este caso a los aspectos


subjetivos de la manifestación, cualquiera que sea el sujeto de
dicha manifestación. Las atribuciones de los Arcanos Mayores
y las letras hebreas a los senderos subjetivas se recogían en las
figuras 16 y 15, respectivamente.

1 72 V!LLARRUBIA / HAUT / MILL ERA


Tabla X
Correspondencias de los senderos subjetivos y el tarot

Senderos Subjetivos Arcanos Mayores Letras hebreas

De Kether a Jokrnah O / 22 - El Loco1 ru


De Kether a Binah 1-ElMago N

,.
De Keter a Tiferet 2 - La Sacerdotisa2 ~
De Jokmah a Binah 3 - La Emperatriz .,¡

De Jokmah a Tiferet 4 - El Emperador


De Jokrnah a Jesed
De Binah a Tiferet
5 - El Pontífice3
6 - Los Amantes ,il
De Binah a Guevurah 7 - El Carro
De Jesed a Guevurah 8 - La Justicia4 n
De Jesed a Tiferet 9 - El Ermitaño ~
DeJesed aNetzaj 10 - La Rueda de la Fortuna '
De Guevurah a Tiferet 11 - La Fuerza 4 ~
De Guevurah a Hod 12 - El Colgado ~
De Tiferet a Netzaj 13- 5 ~
De Tiferet a Yesod 14-Templanza6 )
De Tiferet a Hod 15 - El Diablo o
De Netzaj a Hod 16 - La Torre 7 V
De Netzaj a Yesod 17 - La Estrella .e
De Netzaj a Maljut 18- La Lw1a ~
De Hod a Yesod
De Hod a Maljut
19 - El Sol
20 - El Juicio ,
¡,
De Yesod a Maljut 21-ElMundo M

Notas a la Tabla X:

1. La serie comienza por la letra ru. Ello es así porque El Loco, aunque no tiene
número, se suele colocar en varias posiciones; o al principio de la serie, en
cuyo caso se corr~sponde con la N, o entre El Juicio y El Mundo, tal como
hace por ejemplo Balbi. En este caso, la ru ocupa su lugar entre la, y la M.
2. También llamada La Papisa.
3. También llamado El Papa, El Sumo Sacerdote y El Hierofante .
4. Se respeta el orden de los Arcanos según el tarot de Marsella, y no, por tanto,
el propuesto por el sistema del Tarot Rider.
5. Aunque conocido como La Muerte, por representar un ser esquelético con una
guadaña, en realidad no lleva nombre. Y, en muchas tradiciones de pueblos
primitivos, lo que no tiene nombre no existe.
6. Es el único Arcano que, en el Tarot de Marsella, no lleva su nombre precedido
por artículo, como los restantes.
7. En ciertos tarots antiguos, y en general en el marsellés, su nombre es « La
Maison Dieu», La Casa de Dios.

MANUAL DE K ABBA LAH PRÁCTICA 1 73


3 .3 .3. Los palos del tarot y el Árbol de la Vida

Tabla XI
Correspondencias de los palos del tarot con el Árbol

Bastos
Corno madera que son, llevan implícito el Fuego, y se relacionan con la
Energia y con el Espiritu. El trabajo, a todos los niveles, es su princi-
pal manifestación. Su correspondencia con el Árbol es el Mundo de la
Emanación, Atzilut.
Copas
Corno recipientes de líquidos que son, se relacionan con el agua y con
todos los líquidos; por consiguiente, también se relacionan con la cir-
culación sanguínea y con la vida; como -formas que contienen lo sin
forma, se relacionan con la mente; y corno vacíos que buscan llenarse,
se relacionan también con el mundo emocional. Al ser recipientes, son
también envolturas de aquello que envuelven, a semejanza de una ma-
triz respecto al feto, y por eso tienen íntima relación con la maternidad,
lo femenino y el hogar. Su correspondencia con al Árbol se manifiesta
en el Mundo de la Creación, Briah.
Espadas
Son aceradas, y su movimiento alcanza su mayor eficacia en el aire, re-
lacionándose por esta razón con dicho elemento; pero su finalidad no es
quedarse en el aire, sino llegar a los cuerpos, en los que abren heridas,
que son como ventanas hacia el exterior, y por ello tienen mucho que ver
con la comunicación, con la apertura y con el cierre, pero también con el
ataque y la defensa, con el dolor y con su aceptación. Su silbido, cuando
se mueven rápidamente, evoca todo el mundo de sonidos de la palabra,
con la que tienen íntima relación. Los nombres son sus armas más pode-
rosas, pues, al servir para designar, por lo mismo también separan, como
lo hacen las espadas cuando cortan. Su correspondencia con el Árbol se
pone de manifiesto en el Mundo de la Fonnación, Yetzirah.
Oros o pentáculos
Están construidos con un metal noble y pesado; por eso evocan lo denso,
y a la vez la manifestación de lo sagrado en el plano físico; pues, como
afirman los cabalistas, todas las sefiroth (incluida la décima, Maljuth),
son igualmente sagradas. En efecto, para el judaísmo el mundo ma-
terial, corno obra de Dios, es intrínsecamente bueno. Los oros, por lo
tanto, se relacionan con todos los aspectos de la vida en el plano físico,
y con la inserción del ser humano en dicho plano. Se corresponden en
el Árbol con el Mundo de la Acción, Assiyah.

174 V1LLARRUBIA / HAUT / Mi l. LERA


3.4. Las letras hebreas y sus cambios de posición
en el Árbol de la Vida
Conforme se vio en secciones anteriores y quedó reflejado en las
figuras 15 y 16, hay notables diferencias entre la atribución de las
letras a los senderos subjetivos, según la hagan el Sefer Yetzirah o
el tarot. Al aparecer este último en un período histórico muy pos-
terior al primero (al menos once siglos, y probablemente muchos
más), cabe preguntarse si el cambio obedeció a la caprichosa razón
de forzar la correspondencia, o si, por el contrario, lo fue por razones
más profundas y legítimas.
Sin duda, la época en que apareció el tarot no fue fácil para quie-
nes buscaban la sabiduría o intentaban caminos espirituales al mar-
gen de las normas de la Santa Madre Iglesia. La Inquisición iniciaba
sus primeros pasos, que continuarían en los siglos posteriores en
medio de baños de sangre y humo de hogueras. Dadas las profun-
das conexiones entre ambas disciplinas, Kabbalah y tarot, hay que
pensar que los cambios posteriores, que acabaron plasmándose en
el siglo XIX (¡justamente cuando la Inquisición acababa de ser aboli-
da!) obedecieron a razones que, no por ignoradas, fueron menos po-
derosas. Por nuestra parte, hemos intentado aproximarnos a lo que
pudo ser el punto de vista que llevó al cambio de posición de diez y
ocho de las veintidós letras hebreas. Los párrafos que siguen deben,
en consecuencia, considerarse como una mera opinión por nuestra
parte, sujeta a todo tipo de controversias y desacuerdos, hecho que
aceptarnos de antemano.
El versículo 2.º del primer capítulo del Génesis nos cuenta que, tras
crearse el cielo y la tierra, ésta era caos y vacío (TI~, i,-,.n, tohu ve-bohu),
y que el Espíritu de Dios (O"'ii~~ ni,, Rúaj Elohim) se cernía sobra la
faz de las aguas (o~~, mayím). Las letras permaneáan en sus posicio-
nes originales, a semejanza de ladrillos que esperan en la fábrica al
camión que vendrá a recogerlos y llevarlos a la obra. Y después dijo
Dios: Haya luz, y hubo luz. Esto significó que el universo era ya lo
suficientemente grande para que comenzase a hacerse transparente,
y que por tanto las letras podían empezar a moverse, agrupándose y
separándose para ser de esta manera el vehículo a través del cual se
manifestaría todo lo que ha existido, existe y existirá.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 175


Como dice Alexandre Safran, Dios hizo su creación deliberada-
mente imperfecta, para que cada criatura sintiese en lo más profun-
do de sí misma el dolor de su imperfección, que no es sino la año-
ranza, quizá oscura, pero siempre presente, de la Unidad Perdida,
la Shejiná en el exilio, que busca en todo momento su propia recons-
trucción, volver a encontrar lo que nunca ha dejado de ser pero ha
sido olvidado. Pero, para volver a la Unidad, era necesario que los
«ladrillos» que forman el Palacio del Universo (C~,VM ~.:-"M, hejal ha-
olam) pudiesen cambiar de sitio: aunque no todos, o quizá el edificio
podría derrumbarse. Esos «ladrillos» son, pues, las letras hebreas.
Veamos cómo se movieron, aunque no todas, pues quedaron pistas
para que, siguiendo a Daniel (12:3), los que hayan sido sabios brillen
como el fulgor del firmamento.

El aire es el elemento de la álef, y sin él no es posible la

N combustión; por eso, la letra dejó el puesto que se le había


asignado en un principio en la viga horizontal central y su-
bió a lo más alto del Árbol de la Vida, situándose a la izquierda
para unir Keter y Binah, puesto que el aliento es una relación,
del interior con el exterior, del pasado con el futuro. La álef, si-
tuada en su nuevo lugar, se relacionaría con el Arcano I, El Mago,
que mueve sus artes sin descanso, pues, si se detiene, el fuego se
apaga por falta de aire.

La beth permaneció en el lugar que se le había asignado desde


el principio, entre Keter y Tiferet, ya que uno de sus significa-
dos es el Templo, que en este caso es el de la Jerusalem Celeste,
situado en la cima del Monte Santo, y en este sitio deberá seguir
hasta el fin de los siglos. El Arcano II, La Sacerdotisa, con el que se
corresponde, es uno de los dos únicos en el Tarot de Marsella en que
se da la circunstancia de que el dibujo desborda el marco por arriba,
siendo el otro El Mundo: partes superior e inferior, respectivamente,
del Sendero de la flecha.

Al cambiar de posición, la guímel dejó la parte superior del Pilar


de la Misericordia y fue a ocupar el sendero que une a Jokmah y
Binah, al Padre Cósmico y la Madre Cósmica, lo que hizo posible

176 VtLLARIW BIA / HAUT / MtLLERA


que la revelación se manifestase, pues así quedaban unidos Espa-
cio y Tiempo, Energía y Forma. De esa forma se unieron también
el Pasado y el Futuro a través del Presente, en el que todo se revela.
La Sabiduría se expresa a través de la Inteligencia, y no puede ser de
otro modo, pues sin el cauce selectivo de Binah la fuerza de Jokmah
sería sólo pura radiación. Por eso, este sendero simboliza ahora la
Síntesis, la Gran Magia Blanca y la unión de los polos opuestos, Yang
y Yin. De esta forma se unió al Arcano III, La Emperatriz que, con su
embarazo, une las energías del Padre y las formas de la matriz de la
Madre.

Por la puerta que es la letra dálet el universo entró en la


, manifestación, tal como está escrito en el Evangelio de San
Juan: «En el principio era el Verbo (i~i, dabar), y el Verbo era
con Dios, y el Verbo era Dios. Éste era en el principio con Dios.
Todas las cosas por Él fueron hechas; y sin Él, nada de lo que es
hecho, fue hecho». (Juan, 1:1-3). Ocupaba, en efecto, el sendero
que une Binah con Gevurah, que es el que establece las relaciones
transpersonales (fig. 11). Después, la letra se retrajo, ya que no era
necesaria como puerta exterior, y sí en el interior, para permitir a
todos los seres volver al Origen, al Reino de los Cielos, que, como
dijo Jesús el Nazareno, está dentro de cada uno de nosotros. Por
eso, pasó a unir Jokmah, que representa el Padre, con Tiferet, que
es el Hijo. Y como la conservación requiere tino y medida, se ha
asociado la letra al Arcano IV, El Emperador, que representa el
orden y la disciplina, especialmente a nivel interno.

Colocada inicialmente en la parte superior derecha del Árbol


, ,de la Vida, la abertura de la he al Cielo de Keter fue el orificio
por el que penetró la primera manifestación energética del Ayin
Sof, el primer soplo del Creador. Pero una vez iniciada la creación,
'debía abrirse a la Fuerza del Conservador, que llega al Árbol desde
su campo exterior derecho, entre Jokmah y Jesed. Habiendo ocupa-
do antes un papel tan importante, no se toma a sí misma demasiado
en serio en su nuevo cargo; por eso, su asociación con la solemnidad
del Pontífice en el Arcano V la hace estallar de vez en cuando en
alegres risas.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 1 77


Fue la vav la encargada de representar al hombre como imagen
, de Dios y, tal como dice el Corán (2:28-32), Como su vicario en
la tierra. Y así, como enviado Suyo, tuvo que abandonar la par-
te superior izquierda del Árbol, donde estaba permanentemente
a la vista del Cielo, y pasar a unir las esferas de Binah y Tiferet,
la Madre y el Hijo. Desde entonces, el hombre busca completarse
(C~W, shalem, entero, completo) para regresar a la Unidad, y lo-
grar así la Paz (Ci~w, shalom). Para trabajar en esa búsqueda,
el hombre elige una y otra vez entre las alternativas que le pre-
senta la vida, y por eso la letra se asoció al Arcano VI, Los Enamo-
rados, que representa el libre albedrío, la elección y la renuncia
consiguiente a dicha elección, así como el cordón umbilical que
debe ser cortado para separar al hijo de la madre y permitirle su
vida independiente.

Midióse la zayn con las tareas que le imponían sus significados,


, y supo que debía abandonar su puesto en el interior del Árbol,
entre Jokmah y Tiferet. Había sido, en efecto, como una flecha que
apuntaba desde Jokmah al corazón del Árbol, Tiferet. Pero ahora su
aspecto de espada debería coronar el Pilar de la Severidad, y por eso
fue a ocupar el sendero que une Binah, la Inteligencia, con Gevurah,
el Rigor, que también es la Justicia y el Temor. En su posición, asu-
mió su responsabilidad, pero también la ambición, ya que no podía
olvidar su significado de «centro»; la visión de futuro, y también los
méritos y las culpas. Todo ello la relacionó en su nueva posición con
el Arcano VII, El Carro.

La letra jet no se sentía cómoda en su posición inicial, pues,

M al representar la vida (C~, jayim), necesitaba de un equilibrio


que allí, entre las esferas de Binah y Tiferet, no tenía. Por eso
solicitó ser cambiada a la viga central y unir Jesed y Gevurah. Pues
la vida necesita un equilibrio muy delicado para su manifestación: ni
demasiado calor ni demasiado frío, ni demasiada expansión ni de-
masiada contracción, ni demasiada dureza ni demasiada blandura,
ni demasiada luz ni demasiada oscuridad. En su nueva posición se
asoció con el Arcano VIII, La Justicia, que es también justeza, cuali-
dad de ser justos, precisos.

1 78 V ILLARRUBIA / HAUT / M ILLERA


La teth fue una de las cuatro letras que no cambiaron su posi-
ción, ya que, al ser la inicial de ~ ,to (tov), bueno, debía necesa-
riamente seguir uniendo las esferas de Jesed, la Misericordia,
y Tiferet, la Belleza. Pues, corno diría al cabo de los siglos un filósofo
español, la Ética va siempre unida a la Estética. En su posición, ocu-
pa uno de los tres lados de la Tríada de la Conciencia Moral, y sim-
boliza por ello una de las cuatro virtudes cardinales, la Prudencia, y
en tal condición se asoció la letra al Arcano IX, El Ermitaño.

a En su puesto primitivo, la iod había sido la chispa que inició la


7 creación, pero, pequeña y humilde corno era, se encerró como en
una vestidura (rrtz?, shit), para permitir que el acto de crear O~i~,
bará) se produjese; por eso el Génesis empieza con la palabra rl'W~.,~
(bereshit), En el principio. Una vez la creación en marcha, dejó su
puesto entre Tiferet y Gevurah, y pasó al sendero que une Jesed y
Netzaj, con la responsabilidad de mantener en pie la creación, pues
ella es la inicial del futuro y del imperativo (en la tercera persona sin-
gular de los verbos hebreos). Al ser el universo dinámico, como mani-
festación del Espíritu que es, está sujeto a constante cambio, y eso es
lo que representa el Arcano X, La Rueda de la Fortuna.

La letra caf abandonó su primitiva ubicación, en la base de la


Columna de la Misericordia, y se trasladó hacia el centro del
Árbol, para enlazar las esferas de Tiferet y Gevurah; pues,
al ser copa y receptáculo, debía recibir, contener y medir todo aquello
que procediese del exterior social, a través de la 5.ª sefirá. El aspecto
objetivo de esta esfera se haría subjetivo para poder llegar a Tiferet
convenientemente filtrado; pero este filtro debía hacerse con suavi-
dad y control, o en caso contrario el Centro Crístico habría podido
quedar desbordado. Por esta razón se asoció la letra en este nuevo
puesto al Arcano XI, La Fuerza.

Recibió la lámed el encargo de representar al corazón y a su


movimiento de sístole y diástole; por eso, debió abandonar
su primitiva ubicación, entre Tiferet y Netzaj, la cual, al estar
destinada a la muerte, no podía recibir a la letra que mantiene la
vida mediante la circulación de la sangre. Pasó, en consecuencia,

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 1 79


a unir las esferas del Rigor, Gevurah, y la Majestad, Hod, ya que
corresponde a lo personal en sus relaciones con el entorno del Ár-
bol, pero, aun así, se trata de un proceso que es observable por otros,
a diferencia de los procesos psíquicos y espirituales (y la muerte lo
es, más allá de su aspecto ñsico), que sólo son conocidos por quien
los está viviendo. Pero la letra mantuvo el recuerdo de su lugar ini-
cial y su sacralidad, y en su nuevo puesto descubrió que el corazón
se mueve, pero no se desplaza. Por eso se ha asociado al Arcano XII,
El Colgado, para simbolizar lo exterior vuelto hacia adentro y lo
interior vuelto hacia fuera, lo superior vuelto hacia abajo y lo infe-
rior vuelto hacia arriba.

La capacidad de poner nombres·es la capacidad de distinguir a


unos seres de otros. Pero la mem, que representa el agua, repre-
senta también lo indiferenciado. En su posición inicial, unien-
do en la viga inferior del Árbol las esferas de Netzaj y Hod, formaba
una barrera que impedía que los seres se diferenciasen y apareciesen
en el mundo. Cuando cambió su posición y pasó al sendero que co-
munica Netzaj y Tiferet, se llevó su capacidad de in-nominar, de
quitar nombres, la cual, si antes pertenecía al reino de lo subcons-
ciente, entonces pertenecería al olvido y al perdón. Lógicamente, en
su nueva posición se asoció la letra al Arcano XIII al que, aunque
no lleva nombre, muchos llaman «La Muerte». Pero, según muchas
tradiciones, lo que no tiene nombre no existe ...

También se desplazó la nun de su posición inicial, de Tiferet a


Hod. Pues, significando «percepción», de haberse mantenido en
esta posición la percepción habría llegado al Centro a través de la
mente, y no de los sentidos. Por eso, fue desplazada al sendero que
une Tiferet y Yesod, por ser el mundo una escuela de aprendizaje.
Sin embargo, la percepción se produce entre dos umbrales, máximo
y mínimo: vemos así que el ojo no percibe más acá del color rojo ni
más allá del violeta, o que el oído desconoce los sonidos por encima
y por debajo de unas determinadas frecuencias. Por eso la letra nun
fue asociada al Arcano XIV, Templanza, que nos habla de la flexi-
bilidad, la capacidad de adaptación y la moderación en todos los
órdenes.

130 VILLARRUl31A / HAUT / MILLERA


e Al representar la samaj lo secreto, también representa su
revelación. Y la manera de revelar lo que está oculto en el
subconsciente es recordar, dejar que la memoria traiga su
carga de información. Por esta razón debió abandonar su posi-
ción primitiva, entre Netzaj y Yesod, demasiado interna para lo
que se esperaba de ella, y pasar al sendero que une Tiferet y Hod.
En este caso, la mente era necesaria para dar forma a los recuer-
dos que fuesen apareciendo, y a la vez, también era aconsejable
la cercanía al entorno social, pues de él podrían venir estímulos
para el recuerdo en forma de asociaciones de ideas. Pero todo
recuerdo es siempre fragmentario, porque falta el elemento esen-
cial del presente, del aquí y ahora. A causa de esta fragmenta-
ción, se asoció la letra con el Arcano XV, El Diablo, símbolo de lo
que se recuerda y de lo que no se recuerda, del subconsciente, de
lo inferior por debajo de lo consciente.

Para que el ojo pudiese contemplar la profundidad del mar de

v. lasemociones(dellatínEMOVERE,moverhaciafuera,mover
fuera del centro) y transmutarse así en sentimientos, la letra
ayin abandonó su puesto, excesivamente mental, entre Hod
y Yesod, y pasó a la viga inferior, que une Hod con Netzaj. Y al
tratarse de un proceso, aunque saludable, doloroso, fue asignada
al Arcano XVI, La Torre, como símbolo de la crisis liberadora y del
aprendizaje que impulsa el crecimiento.

La letra pe representa la boca, y parecía estar en una posición


idónea para mantenerse allí, entre las esferas de Gevurah y
Hod; pero en ese lugar su expresión estaba totalmente des-
conectada del mundo emocional. Por eso fue cambiada al sendero
que une Netzaj y Yesod, para permitir la expresión de las emo-
ciones y conseguir así hacerse conscientes de ellas. Ello tiene un
efecto sumamente beneficioso, pues las emociones expresadas de-
jan espacios vacíos, desnudos, y permiten por tanto la fluidez y
la renovación. ¿Qué mejor Arcano para hacerlo corresponder con
esta letra que el XVII, La Estrella, símbolo de la renovación según el
curso de la Naturaleza, de la Esperanza, de la Verdad y de la sumi-
sión del hombre a Dios?

MANUAL DE KAB BALAH PRÁCTICA 1 81


Otra de las letras que mantuvo su posición incial fue la
tzade, entre las sefirot Netzaj y Maljut. Al ser uno de sus
significados, «anzuelo», era necesaria en aquel puesto
para ir capturando a todos los seres que habían caído en la
trampa del Tiempo, elevándolos hacia la Eternidad. Para con-
seguirlo, debe vaciar los viejos contenidos que mantienen a los
seres aferrados a su ilusión, y la letra tiene capacidad para ha-
cerlo, pues ocupa la posición central de la palabra ¡,i~ (yatzak),
vaciar. Se le asoció, por tanto, al único Arcano capaz de hacer
la misma tarea, y éste es el XVIII, La Luna.

r, Al ser letra kuf la inicial de i'T~.:li' (kabalá), recepción, tra-


dición, la Kabbalah, no podía mantenerse en su puesto,
entre Hod y Maljut, pues el cuerpo por sí mismo no está
apacitado para esta misión: necesita que la mente dirija su in-
formación hacia niveles superiores, y por eso la letra cambió su
'posición al sendero que une Hod con Yesod. Ello presentaba,
además, la ventaja de que ambas esferas contienen dos letras
comunes, vav y dálet, que juntas forman la palabra,, (du), dos,
doble, mientras que con las diferentes, he, iod y samaj , puede
formarse la expresión ~ci'T (hasi), mi silencio. Y ello está en per-
fecta concordancia con la naturaleza del estudio de la Kabba-
lah, que se recomienda se haga por parejas, de tal modo que
por turno, uno plantea las cuestiones mientras otro escucha en
silencio. Por eso, se asoció la letra al Arcano XIX, El Sol, que
simboliza la hermanación de opuestos y el trabajo en equipo.

Recibió la resh el encargo de ser el principio (n~wN~, reshit)


, de todo lo creado, y para ello, debió tomarlo en su mis-
ma base y elevarlo; así, cada ser conocería el camino que
habría de llevarle a reencontrar la Unidad. Pues, como cantó el
poeta persa Rumí, el sufi, «Yo dije: 'Muéstrame la escalera que
pueda subir· hasta el cielo'. Él dijo: 'Tu cabeza es la escalera,
pon tu cabeza bajo tus pies'. Cuando coloques tus pies sobre
tu cabeza, colocarás tus pies sobre la cabeza de las estrellas;
cuando te abras paso por el aire, pon tu pie sobre el aire, así ¡y
adelante!». Por eso, la letra abandonó su puesto en el Pilar del

182 V1LLARRUll lA / HAUT / MILLERA


Equilibrio, entre Tiferet y Yesod, y se trasladó hasta el sendero
que une Hod con Maljut. Y de esa forma la cabeza (tztNi, rosh)
se puso debajo y asumió su papel de pie(~~,, regel). En su nue-
vo puesto, la resh actúa como un viento (ni,, rúaj) semejante al
sonido de una trompeta, por lo que el Arcano XX, El Juicio, fue
el designado para acompañarla en el Árbol de la Vida.

Impulsada por el aliento de la álef que alimenta su na-

W turaleza ígnea, la shi'!: abandonó su posición inicial en


la viga superior del Arbol, subió a lo más alto y pasó a
unir las esferas de Keter y Jokmah, que realmente no son dos,
sino una, distinguiéndose sólo por ser los aspectos estático y
móvil, respectivamente, de la Primera Manifestación. Al no ha-
ber aparecido todavía la forma, ni siquiera en su nivel arquetí-
pico, la Energía no se podía pesar ni medir. Por eso, el Arcano
designado para acompañar a la letra fue el único que no lleva
número: El Loco. Los humanos, a veces, dan a este Arcano los
valores O o 22 y se confunden, porque no se dan cuenta de que
es como una cinta de Moebius, la cual, pese a su apariencia, no
tiene más que una sola superficie.

r, Quiso la tav mantener el puesto que se le había asignado


desde un principio en la base del Pilar del Equilibrio, unien-
do las esferas de Yesod y Maljut; así recordaría a todos los
seres de la creación que tienen una misión sagrada, el tikún (¡i¡,M)
que, cuando se cumpla, reconstruirá la Unidad en el Fin de los
Tiempos, que es la Vida Eterna en el Aquí y Ahora. Es una misión
para la cual es necesario vivir el mundo material, el plano físico.
Aunque esta letra ocupa el último lugar entre sus hermanas, eligió
el Arcano XXI, El Mundo, para asociarse con él, pues representa el
principio del aprendizaje para reencontrar nuestra condición di-
vina, mediante el dolor y los esfuerzos necesarios para cumplir la
misión. Ello supuso ceder a la shin, como ya hemos visto, el puesto
de honor en el Árbol de la Vida.

* * *

MANUAL DE KABBALAt-1 PRÁCTICA 183


Hay una profunda correspondencia entre la Kabbalah y el taoís-
mo chino, y este baile de letras es semejante a la ordenación de los
ocho trigramas que son la base del I-Ching, el Libro de las Muta-
ciones, de dos formas a las que llama Cielo Previo y Cielo Posterior.
En el caso de la colocación de las letras en el Árbol, la ordenación del
Sefer Yetzirah podría considerarse semejante al Cielo Previo, de tipo
macrocósmico, mientras que la ordenación del tarot sería semejante
al Cielo Posterior, de tipo microcósmico. El Rayo Relampagueante, o
Descenso del Poder, estaría relacionado con la primera ordenación,
mientras que la serpiente Nejushtán, que indica el ascenso de retor-
no a la Unidad, lo estaría con la segunda.
El retorno requiere, sin embargo, una condición previa: la conver-
sión, el arrepentimiento, la teshubá (:i;:wr,), palabra que tiene el sen-
tido de darse la vuelta y mirar en la dirección correcta. Sólo a partir
de ese momento empieza a despertar la consciencia de que hemos
venido a este mundo para hacer algo concreto, aunque todavía no
sepamos de qué se trata.

3.5. Correspondencias entre


el Árbol de la Vida y el ajedrez
3.5.1. Generalidades sobre el juego

Aunque el ajedrez está ampliamente difundido en todo el mundo,


se recoge a continuación un extracto de sus reglas de juego, sin
cuyo conocimiento podría dificultarse el contenido de las seccio-
nes siguientes. Dichas reglas son las siguientes:
l. La partida se desarrolla entre dos jugadores, cuyos bandos reci-
ben los nombres de blancas y negras, por el color de sus piezas,
las cuales reciben el nombre común de trebejos.
2. La partida se juega sobre un tablero de 8 x 8 casillas, en total 64,
en colores alternos blancos y negros, mediante movimientos al-
ternativos de cada jugador.
3. La posición de inicio es tal como se indica en la figura 16, siem-
pre colocando el tablero de modo que la esquina blanca quede

1 84 V1LLARRU131A / H AUT / MILLERA


a la derecha de cada jugador. Las piezas de cada bando son las
siguientes:
• El rey (indicado en la figura 16 por una corona cubierta,
con una esfera encima), que comienza la partida en una casi-
lla de color contrario al suyo, situada en el centro del lado del
tablero más próximo al jugador.
• La reina o dama (indicada en la figura por una corona de cin-
co puntas), que comienza la partida al lado del rey, en la otra
casilla central del lado del tablero, que es lógicamente de su
mismo color.
• Dos alfiles por bando (indicados en la figura por una tiara
episcopal; a veces se representan por una celada de caballe-
ro), que flanquean al rey y a la reina, recibiendo por tanto los
nombres respectivos de «alfil de rey» y «alfil de reina».
• Dos caballos por bando, situados a continuación de los alfi-
les, «de rey» y «de reina».
• Dos torres por bando en cada uno de los extremos.
• Ocho peones por bando, colocados delante de cada una de las
piezas anteriores.
4. La partida la comienzan siempre las piezas blancas. Su objetivo
es la captura del rey contrario.
5. Movimiento de las piezas:
• El rey, una sola casilla en cualquier dirección, en horizontal,
vertical o diagonal, hacia adelante o hacia atrás. Por excep-
ción, puede mover dos casillas en horizontal una sola vez,
hacia la derecha o hacia la izquierda, saltando por encima de
la torre de su lado, a condición de que ni rey ni torre se hayan
movido todavía y no haya ninguna otra pieza entre ambos.
Esta jugada se llama «enroque», que es «corto» si se hace con
la torre de rey, y «largo» si con la de dama.
• La dama o reina, una o más casillas hasta el borde del tablero, en
horizontal, vertical o diagonal, hacia adelante o hacia atrás.
• Los alfiles, una o más casillas hasta el borde del tablero, hacia
adelante o hacia atrás, exclusivamente en diagonal, por las
casillas del color en que hayan comenzado la partida.
• Los caballos son las únicas piezas que pueden saltar por en-
cima de otras (excepción hecha de la jugada del enroque),

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 1 85


tanto del bando propio como del contrario, dos casillas en
horizontal y una en vertical, o dos en vertical y una en hori-
zontal, hacia adelante o hacia atrás.
• Las torres, una o más casillas en horizontal o vertical hasta
el borde del tablero, tanto hacia adelante como hacia atrás, a
derecha o a izquierda.
• Los peones, siempre hacia adelante, una o dos casillas al salir
de su posición de partida, y sólo una cuando ya han abando-
nado la segunda línea de casillas.
• Todas las piezas pueden «comer» a las contrarias ocupan-
do la casilla de éstas, siguiendo su movimiento natural.
Se exceptúan los peones, que no comen de frente, sino
en diagonal. También pueden comer «al paso» a un peón
enemigo, cuando éste sale de su línea de partida avanzan-
do dos casillas, si el peón propio está en la quinta línea,
que es la cuarta contraria, en una columna al lado de la
del peón enemigo.
• Una misma casilla no puede estar ocupada por dos piezas a
la vez.
• Cuando un peón llega a su octava línea (primera del bando
enemigo), «corona», pudiendo cambiarse por cualquier pie-
za propia, excepto otro peón o el rey.
• Si un movimiento plantea una amenaza directa al rey ene-
m igo, se anuncia de viva voz mediante la palabra «jaque».
Si el rey contrario no tiene escapatoria a la amenaza, es «ja-
que mate», y la partida termina. También termina cuando un
jugador, a la vista de la posición de las piezas, comprende
que está p erdido, y entonces «abandona», poniendo su rey
en posición horizontal, en señal de rendición.
• Finalmente, la partida puede terminar en empate (»ta-
blas», en la terminología del juego), bien por imposibili-
dad de dar jaque mate por parte de ninguno de los juga-
dores; por repetición de movimientos; o por acuerdo de
los jugadores.

186 VII.LARRUBIA / H A UT / M ILLERA


3.5.2. Simbolismo de los objetivos de la partida

Lo más importante en el juego del ajedrez, como en cualquier otro


de competición, sea o no deportiva, es que, aunque los jugadores
sean rivales, cada uno necesita del otro, pues en caso contrario no
hay juego. El ajedrez, por tanto, simboliza muy bien la esencia del
trabajo espiritual y del autoconocimiento, pues no se puede eliminar
la sombra, como han pretendido tantas organizaciones, grupos, re-
ligiones y sistemas a lo largo de la historia, sin que, como apuntaba
humorísticamente Alan Watts, hagamos del mundo un lugar chato
y sin dimensiones, lleno de aburrimiento. El combate entre la Luz y
la Sombra es en último extremo una danza, y como aspectos de ella
deben considerarse todos los hechos de la vida. El simbolismo de la
partida de ajedrez así lo recoge.

Tabla XII
Simbolismo de la partida de ajedrez

* Para el bando blanco: El espíritu en busca de la experiencia


de la encarnación en el plano físico.
* Para el bando negro: La materia en busca de reencontrar su
origen divino.

Los fines de ambos bandos, que a primera vista pueden parecer


contrapuestos, son en realidad complementarios, y lo que parece
una lucha es en verdad un juego amoroso.

3.5.3. Correspondencias en el tablero

El propio tablero de ajedrez, en su simplicidad, contiene multitud


de simbolismos que se apuntan en el cuadro siguiente y se desa-
rrollan en las correspondientes secciones relativas a las sefirot, los
senderos subjetivos y las Tríadas (figura 18).

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 187


Tabla XIII
Correspondencias del Árbol de la Vida y el ajedrez

El tablero El Árbol de la Vida

El cuadrante de rey blanco Atziluth, mundo de la Emanación


El cuadrante de reina blanca Briah, mundo de la Creación
El cuadrante de reina negra Yetzirah, mundo de la Formación
El cuadrante de rey negro Assiyah, mundo de la Acción

La gran diagonal blanca Los elementos fuego y aire, todo lo


y sus cuadrantes asociados: que tiende a subir.
La gran diagonal negra Los elementos agua y tierra, todo
y sus cuadrantes asociados: lo que tiende a bajar.
Los cuadros blancos Los aspectos polares positivos,
Yang, lo activo, lo luminoso,
lo masculino, lo caliente y lo seco.
Los cuadros negros Los aspectos polares negativos,
Yin, lo pasivo, lo oscuro, lo femeni-
no, lo frío y lo húmedo.

3.5.5. Polaridades de las sefirot deducidas


de su correspondencia con las piezas

Según se señaló al estudiarlas, cada sefirá tiene, según esta corres-


pondencia, un «color» o polaridad, que se corresponde con el color
o polaridad de la casilla del tablero sobre la que el trebejo que le
corresponde inicia la partida:

1 88 VILLARRUB IA / H AU T / MILL.ERA
At;ziluth Briah

E e
M R
A E
N A
A e
e ¡ 1
1 ó
ó N
N
F
o
A R
e M
e A
1 e
ó 1
N ó
N

Asslah Yetzirah

Figura 18
Correspondencias entre el Árbol de la Vida y el ajedrez

El tablero se ha dividido en cuatro cuadrantes, que gobernados por los reyes


y reinas de ambos bandos, simbolizan los cuatro elementos (indicados en
el interior del tablero) y los cuatro niveles de manifestación (indicados en
los márgenes). El color de fondo de los cuadros dobles colocados sobre las
seis sefirot laterales del Árbol (a la izquierda), con sus respectivas piezas,
se corresponde exactamente con la posición de cada una de éstas en el ta-
blero de juego. En el esquema del Árbol no se han señalado los cuadros de
las sefirot del Pilar del Equilibrio, en el que se han colocado, sin embargo,
los reyes y las reinas con sus respectivos colores. Así, el rey blanco se sitúa
sobre Keter, la reina blanca sobre Tiferet, la reina negra sobre Yesod y el rey
negro sobre Maljut; esta esfera queda representada por un triángulo oscuro,
pues encierra realmente una Tríada condensada en sí misma.. Finalmente, se
destaca que los dos elementos livianos (fuego y aire) se sitúan en los cua-
drantes atravesados por la gran diagonal blanca, mientras que los pesados
(agua y tierra) lo hacen sobre la gran diagonal negra.

M ANUAL DE KABB ALAH PRÁCTICA 1 89


Tabla XIV
Correspondencias del Árbol de la Vida
y los trebejos (piezas del ajedrez)
Los trebejos Las sefirot

El rey blanco Keter, La Corona


La reina blanca Tiferet, Belleza
El alfil de rey blanco y la torre de reina negra Jokmah, Sabiduría
El alfil de reina blanca y la torre de rey negro Binah, Inteligencia
El caballo de rey blanco y el caballo de reina negra Jesed, Misericordia
El caballo de reina blanca y el caballo de rey negro Guevurah, Rigor
La torre de rey blanco y el alfil de reina negra . Netzaj, Eternidad
La torre de reina blanca y el alfil de rey negro Hod, Esplendor
La reina negra Yesod, Fundamento
El rey negro Maljut, El Reino

Los cuatro peones blancos del cuadran- El Palo de Bastos (1 +2+3+4 = 10) (naipes
te de rey del as al 10), el Fuego, las corrientes del
Árbol en Atzilut, los nombres divinos de
Atzilut en todas las sefirot.

Los cua;tro peones blancos del El Palo de Copas, (1+2+3+4 = 10) (nai-
cuadrante de reina pes del as al 10), el Agua, las corrientes
del Árbol en Briah, los Arcángeles de
Briah en todas las sefirot.

Los cuatro peones negros del El Palo de Espadas, (1 +2+3+4 = 10) (nai-
cuadrante de reina pes del as al 10), al Agua, las corrientes del
Árbol en Yetzirah, los Órdenes angélicos
de Yetzirah en todas las sefirot.

Los cuatro peones negros del El Palo de Oros, (1+2+3+4 = 10) (naipes
cuadrante de rey del as al 10), la Tierra, las corrientes del
Árbol en Assiyah, los chakras mundanos
de Assiyah en todas las sefirot.

3.5.4. Correspondencia entre las piezas


y el Árbol de la Vida

Esta correspondencia es esencial para comprender mejor los sig-


nificados de cada uno de los aspectos del Árbol. Muy especialmente,
las direcciones de las corrientes de los senderos nos darán pautas
que después se podrán aplicar al estudio de las Tríadas.

1 90 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Tabla XV
Polaridades de las sefirot deducida
de su correspondencia con las piezas

Polaridad negra o femenina Polaridad blanca o masculina

Kether Jokmah
Binah Guevurah
Jesed Tifereth
Hod Netzaj
Yesod Maljuth

En cualquier caso, toda polaridad es siempre relativa, positiva


respecto a un nivel y negativa respecto a otro, ya que de otra for-
ma la energía quedaría estancada. No obstante, hay algunas sefi-
rot cuya polaridad hace, en ocasiones, difícil salir de ellas. La más
significativa en este aspecto es Binah, ya que, si se contemplan sus
«salidas» hacia la parte inferior del Árbol, se observa que es un
centro que absorbe, por decir así, las energías de las esferas que se
comunican con ella a nivel igual o inferior: Jokmah, Guevurah y
Tiferet. Actúa, pues, como un «agujero negro», por lo que no debe
extrañar que ese sea su color en el nivel de Briah. Sólo saltando
a través del Abismo hacia Jesed, el centro de la Misericordia y el
Amor, es posible escapar de su fatal atracción; pero, al no haber
sendero alguno entre esta esfera y Binah, y sí sólo el Rayo Relam-
pagueante, el «salto» únicamente es posible «sin paracaídas», esto
es, abandonando todas las creencias, todo conocimiento, y entrando
en lo que un anónimo monje inglés del siglo XIV llamó La nube del
no-saber (ver referencias bibliográficas). En menor medida, esta ca-
racterística es compartida por Hod, la esfera mental en el nivel con-
creto, cuya salida debe producirse hacia Yesod mediante el trabajo
por parejas (ver desarrollo del Sendero 19). Todas las esferas de po-
laridad negativa son en último extremo absorbentes, pero algunas
de ellas, como Jesed y Keter, por su propia naturaleza expansiva,
compensan y atemperan una posible polaridad negativa demasia-
do fuerte. En cambio, también Yesod, asiento de la Personalidad,

M ANUA L DE KAB BALAH 1-'RÁCT IC:A 191


ofrece este peligro, que puede ponerse de manifiesto en los casos
en que la fuerza de su par polar opuesto, Tiferet, sea comparativa-
mente débil. Estos puntos se desarrollarán con mayor detalle en
los capítulos relativos a la interpretación del Árbol personal.

3.5. 6. Las direcciones de los senderos

Es interesante efectuar un breve análisis semántico del nombre de


las piezas del juego del ajedrez que en castellano se denominan
alfiles. La palabra alfil procede del árabe, y significa literalmente «el
elefante»; recordemos que el ajedrez procede de Persia y la India,
y que allí, durante la Edad Media, los elefantes flanqueaban y pro-
tegían al rey durante la batalla. Pero estas piezas reciben diferentes
nombres en otros idiomas. Así, por ejemplo, en inglés el alfil recibe
el nombre de bishop, «obispo». ¿Y quiénes son los obispos? Natu-
ralmente, los vicarios o representantes personales de la divinidad
en la Tierra. Comprenderemos así mejor la razón de que se esta-
blezca la correspondencia entre estas piezas y las sefirot Jokmah
y Binah (para las piezas blancas) o Netzaj y Hod (para las piezas
negras); pue& su posición en el Árbol es de flanqueo, y en cierto
modo de protección de, respectivamente, Kether y Tiferet (blan-
cas) y Maljuth y Yesod (negras).
En el juego del ajedrez, los alfiles son las únicas piezas que
no pueden pasar a una casilla de color distinto del de su casilla
de salida. De modo semejante, la analogía de las sefirot Jok.mah,
Binah, Netzaj y Hod con los alfiles hace que ciertos senderos del
Árbol tengan, en cierto modo, una naturaleza tal que funciones
como «direcciones prohibidas», o incluso, «circulación prohibida».
En cualquier caso, la energía circula siempre, pero, subjetivamen-
te, se sienten así. Veamos la «dirección» de cada sendero, al que
identificaremos con el nombre de los Arcanos Mayores del tarot co-
rrespondientes:

192 VILLARRUBIA / HAUT / MJLLERA


Tabla XVI
Direcciones de los senderos subjetivos

Sendero Dirección

O(22) El Loco Única, de Keter a Jokmah, para las piezas blancas


lElMago Sin restricciones(* O)
2 La Sacerdotisa Sin restricciones
3 La Emperatriz Prohibida en ambos sentidos para las piezas blancas
4 El Emperador Sin restricciones (* 6)
5 El Pontífice Única, de Jesed a Jokmah, para las piezas blancas
6 Los Amantes Única, de liferet a Binah, para las piezas blancas
7El Carro Única, de Guevurah a Binah, para las piezas blancas
8 La Justicia Sin reshicciones
9 El Ermitaño Sin restricciones
10 Rueda de la Fortuna Única, de Jesed a Netzaj, para las piezas negras
U La Fuerza Sin restricciones
12 El Colgado Única, de Hod a Guevurah, para las piezas negras
13 (In Muerte) Sin restricciones (* 15)
14 Templanza Sin restricciones
15 El Diablo Única, de Ttferet a Hod, pai-a las piezas negras
16 La Torre Prohibida en ambos sentidos para las piezas negras
17 La Estrella Única, de Yesod a Netzaj, para las piezas negras
18 La Luna Sin restricciones (* 20)
19 El Sol Sin restricciones(* 17)
20 El Juicio Única, de Maljut a Hod, para las piezas negras
21E1Mundo Sin restricciones

La llamada (*) seguida de un número indica el sendero polar opuesto,


afectado por alguna restricción. El mantenimiento de la paridad impo-
ne en estos senderos un cierto debilitamiento para el bando afectado
por la restricción del sendero polar opuesto, que consiste generalmente
en la circulación alternativa (es decir, no simultánea en ambas direccio-
nes) de la energía.

Los únicos senderos no afectados por ninguna restricción ni


por la de sus polares opuestos son el 2 (La Sacerdotisa), el 14 (Tem-
planza), el 21 (El Mundo), el 8 (La Justicia), el 9 (El Ermitaño) y
el 11 (La Fuerza). Estos senderos evocan, en su conjunto, la figura
de un hombre, visto de espaldas, con los brazos extendidos hacia

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTI CA 1 93


adelante y abiertos, como en actitud de abrazar. Los extremos del
sendero 8 son, a su vez, los centros de las columnas laterales, mien-
tras que el 2, el 14 y el 21 constituyen su eje, y el 9 y el 11 son los que
unen las sefirot Jesed y Gevurah, respectivamente, con el centro de
Tiferet. Por eso, estos seis senderos son la esencia, el «esqueleto», por
decir así, del Árbol de la Vida.
Este número, 6, es el de la letra hebrea , (vav), cuyo significa-
do simbólico es hombre. También es el de la sexta sefirá, Tiferet,
la cual, por ocupar el centro del Árbol, ha sido llamada por los ca-
balistas cristianos el Centro Crístico del Árbol, siendo sus figuras
simbólicas asociadas: la de un Dios que se sacrifica (puesto que la
Energía primordial, al llegar a ese punto desde Keter, se diversifica
y se aparta de la Unidad); la de un niño recién nacido (pues eso es
la aparición de la individualidad, que se produce en Tiferet); y la de
un rey, por ocupar el centro y relacionarse directamente con todas
las demás sefirot de naturaleza no material, es decir, todas menos
Maljut. Estas tres imágenes simbólicas tienen íntima relación con las
tres figuras con que se representa a Cristo: crucificado (el Redentor),
en el pesebre (el Niño Jesús) y en un trono (Cristo Rey).
Las direcciones y restricciones en los senderos nos permiten com-
prender mejor la naturaleza y el significado de cada uno de ellos y
perfeccionar así la interpretación del Árbol personal. La figura 19
recoge un esquema de estas direcciones.

194 VILLARRUBIA / H AUT / M ILLERA


La indicaci6n "negra s'' o
"blancas" en los sendems
cerr.idos sign ifk.:1que son
~ 1 dirección excl t1siv.1mente las piez;:1s
de dicho.s colores respectivo s
IJs Jfecladas por el ci,~rre.
HíMMm1 cer rado

Figura 19
Direcciones de los senderos superiores según
su correspondencia con el ajedrez

3. 6. Los senderos subjetivos, sus símbolos


y sus significados
Mientras que las sefirot se refieren al desarrollo objetivo del Uni-
verso, los senderos subjetivos tratan, como su nombre indica, de las
relaciones que el sujeto percibe entre aquellos centros objetivos y del
efecto que sobre él mismo ejercen tales relaciones. Podría decirse
en otras palabras que las sefirot describen lo que está sucediendo,

M ANUA L DE KABBALAH PRÁCTICA 195


mientras que los senderos subjetivos representan lo que se siente en
relación con lo que sucede. Se trata, sin duda, de una simplificación
quizá excesiva, pero que ilustra bien de las características de unas
y otros.
Para el estudio de los senderos subjetivos se ha optado por se-
guir su orden descendente en el Árbol de la Vida. Ciertos autores,
como Gareth Knight (ver referencias bibliográficas) adoptan el or-
den inverso, por considerar que desde el nivel material debe irse
ascendiendo hasta los planos superiores. Nuestro punto de vista,
en cambio, es que el ser humano es ante todo espiritual, y no se tra-
ta de ascender a ningún nivel, puesto que el Espíritu está presente
desde el principio en todos los planos de manifestación. El que no
sabe adónde va acaba yendo a otra parte, y este es un riesgo que
pretendemos evitar desde el principio. No se trata de ir a ninguna
parte sino, en último extremo, recordar lo que somos y nunca he-
mos dejado de ser.
En cada uno de los senderos se incluye el Arcano Mayor del
tarot y la letra hebrea que le corresponde, los colores en cada
uno de los cuatro niveles de manifestación, y un breve estudio
cabalístico basado en las dos sefirot que une. Se incluyen tam-
bién las correspondencias que cada letra tiene con los elementos,
las partes del cuerpo humano, las funciones del ser humano, los
días de la semana o los meses hebreos (con su equivalencia en
el calendario occidental), según los casos, tal como lo cita el Se-
fer Yetzirah. Termina con una breve guía de significados, la cual
puede enriquecerse con las investigaciones que cada uno realice,
a través de la observación y la práctica. Se incluye también una
indicación esquemática de las correspondencias con el cuerpo
humano, la cual se amplía más adelante en diversos capítulos de
la IV Parte referidos a la interpretación del Árbol nativo. Dicha
correspondencia distingue, como en el estudio de las sefirot, la vi-
sión especular del Árbol (de frente) de la visión energético-social
(de perfil). También incluye una breve nota sobre los problemas
que puede originar el bloqueo específico (en definitiva, la conse-
cuencia última del incumplimiento) del programa de vida que el
sendero propone. La numeración que se asigna a cada uno de los
senderos subjetivos es la correspondiente a los Arcanos, por ser

196 V1L1. ARRUl31A / HAUT / MILLERA


la que se seguirá para levantar e interpretar los Árboles persona-
les. Para quienes prefieran la numeración tradicional, tal y como
la recogen numerosos autores, basta con sumar 11 al número que
figura al principio de cada encabezamiento. Todas las referencias
al tarot se refieren al de Marsella, que es, a la vez, uno de los más
populares y también de los más próximos a la tradición cabalísti-
ca. El análisis por guematria de cada sendero se efectúa restando
los valores nwnéricos de las esferas a las que une, ya que esa
diferencia es, precisamente, el recorrido del sendero.

3.6. 7. Sendero O (22). El Loco. De Keter a Jokmah

Letra hebrea: shin, 'C'


Letra madre.
Significados: fuego / consciencia / diente.
Tipo de sendero: estructural del Espíritu.
Colores del sendero:
Atzilut: Amarillo pálido brillante.
Briah: Azul celeste.
Yetzirah: Azul verdoso esmeralda.
Assiyah: Esmeralda moteado de oro.
Estudio del sendero.
• Dirección. El sendero O(o 22) une las esferas de Keter y Jokmah,
y tiene, según el simbolismo derivado del juego del ajedrez, di-
rección única hacia Jokmah. En efecto, al simbolizar la entrega
y el abandono en manos de la Providencia, no cabe hacer nada
para forzar a Dios a que nos envíe la Su gracia: nos la dará cuan-
do Él quiera. Por eso, El Loco no hace peticiones de ningún tipo,
simplemente se entrega a la Divina Providencia, pues en lo pro-
fundo reconoce que Ella sabe perfectamente lo apropiado para
cada situación, que es aceptada tal como viene.
• Análisis cabalístico. La diferencia de valores numéricos entre
ambas esferas (620 - 73 = 547) proporciona: e~,.,~~ ni,,~,~(maor
ruaj Elohím), luz del Espíritu de Dios, con clara referencia al ver-
sículo 2.0 del primer capítulo del Génesis. La única letra común
a ambos nombres es la caJ(:;), la mano abierta para recibir la pri-

MAN UAL DE KABBAL/\H PRÁCTICA 197


mera manifestación, mientras que las letras sobrantes forman
las palabras,~ (kar), ariete, y M~M (jaman), calor: un «ariete de
calor», como un lanzallamas o un soldador. ¿No fue eso, precisa-
mente, el big-bang? El sendero es, por tanto, la representación en
el plano subjetivo de la fuerza expansiva del Universo.
• Sefer Yetzirah. El fuego, el calor, la cabeza.
• Nombre hebreo del Arcano del tarot. La palabra hebrea, por su
parte, equivalente a loco es V.lW~ (meshugá), con valor numérico
413, el cual proporciona las expresiones ii;i ~~.l (guil tza'ir). ni-
ñez, juventud, (¿no es acaso el sendero más joven?); n¡,r,w (sha-
jaká), sonrisa, la que producen en nosotros las hazañas del loco
por excelencia, el sufi mulá Nasrudin; y i¡,i¡,n-civ (etzem-ha-
kadkod), parietal, hueso que, por su posición en el Árbol, es
una de las correspondencias de este sendero. Por su parte, en
meshugá encontramos CW (shem), nombre, que en el judaísmo
y la Kabbalah alude al Nombre Divino i"Tiir; y V.l (ga), llegar,
arribar: llega Dios, la llegada de Dios, que se aproxima, W.l
(gesh, aproximarse) a toda la muchedumbre, CV ('am), de los
seres creados. Por último, al no ser Jokmah sino Keter en
movimiento, son en realidad Uno, por lo que no es sorpren-
dente que el arcángel de Keter, Metatrón (¡iitol:Q~) aparezca
como valor en la temurá numérica de 413, que es, al invertir
sus cifras, 314.
Significados básicos y correspondencias en el ser humano:
La entrega. El desapego. La paciencia. La pasividad expectante.
El wu-wei taoísta. Ser uno mismo. La aceptación con alegría,
al saber que todo es expresión del Espíritu. El ojo, el oído y el
hemisferio cerebral derechos, la clavícula derecha, los huesos del
cráneo (de frente). El cuello, la nuca, el cabello, las vértebras cer-
vicales (de perfil).
Problemas en caso de bloqueo: Impaciencia, o su opuesto, desin-
terés. Temor a lo desconocido. Tendencia a actuar contra el flujo
natural de las cosas. Obsesiones.
Posibles problemas de salud: hemiplejías, jaquecas, hemicráneas,
tumores cerebrales, problemas de oídos, de vista (nervio óptico),
cervicales, vértigo, tortícolis, derrames cerebrales.

198 VILLARRU BIA / HAUT / MILLERA


3.6.2. Sendero 7. El Mago. De Keter a Binah

Letra hebrea: álef, ~


Letra madre.
Significados: pecho / infinito / buey / aliento.
Tipo de sendero: estructural del Espíritu.
Colores del sendero:
Atzilut: Amarillo.
Briah: Púrpura.
Yetzirah: Gris.
Assiyah: Índigo moteado de violeta.
Estudio del sendero.
• Dirección. El sendero 1, que une las esferas de Keter y Binah, se
puede considerar como de dirección alternativa. Es como esos tra-
mos de carretera estrecha, que mediante un semáforo, permiten el
paso alternativo de vehículos en una u otra dirección. Y en efecto,
al simbolizar la voluntad, sólo permite que actúe en una dirección
cada vez. La hipocresía religiosa oficial ha intentado saltarse esta
condición, con una actitud que podría plasmarse en la frase «há-
gase la voluntad de Dios, a condición de que coincida con la mía».
Pues no, esto no es posible: o es la voluntad de Dios (dirección
hacia abajo), o es mi voluntad (dirección hacia arriba).
• Análisis cabalístico. En la diferencia de valores numéricos exis-
tente entre ambas esferas (620 - 67 = 553) hemos encontrado una
sola palabra, ~)"i'i rr~ (beit ha-kol), glotis; la traducción literal sería
casa de la voz. Por tanto, el sendero se relaciona, no con la voz,
con la palabra (de eso se encarga el sendero 20) sino con el órga-
no encargado de emitirla. Por otra parte, la ausencia de letras co-
munes en ambas sefirot indica que la naturaleza de este sendero
representa una completa innovación respecto a lo que, hasta ese
momento, había sido la Manifestación. En efecto, implica la apa-
rición subjetiva de la forma.
• Sefer Yetzirah. El aire, lo templado, el pecho.
• Nombre hebreo del Arcano del tarot. El Arcano I, El Mago, nos
avisa, colocado tras de su mesa, que se dispone a iniciar el jue-
go, para el que las herramientas están ya preparadas. La palabra
hebrea para mago es cci, (kosem), que contiene en su interior e¡,

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 199


(kam), despertar, levantarse, en línea con el significado de creati-
vidad e iniciativa del sendero. Su valor numérico, 206, es el mis-
mo que el del Verbo creador, i.:li (dabar). ¿No es asombroso?
Significados básicos y correspondencias en el ser humano: La vo-
luntad. La iniciativa. La creatividad. El impulso. Empezar las co-
sas. La agresividad, si el sendero se presenta mal aspectado o se
bloquea. El ojo, el oído y el hemisferio cerebral izquierdos, la cla-
vícula izquierda (de frente). La garganta, y los mecanismos aso-
ciados con ella, los ojos, la frente (de perfil).
Problemas en caso de bloqueo: Agresividad, dispersión, pereza o
su opuesto, la hiperactividad.
Posibles problemas de salud: hemicráneas, jaquecas, hemiplejías,
tumores cerebrales, problemas de oídos, problemas de ojos (parti-
cularmente en el globo ocular).

3.6.3. Sendero 2. La Sacerdotisa (La Papisa) . De Keter a Tiferet

Letra hebrea: beth, ..:l


Letra doble.
Significados: casa/ dentro de.
Tipo de sendero: de enlace entre el Espíritu y la Mente.
Colores del sendero:
Atzilut: Azul.
Briah: Plata.
Yetzirah: Azul pálido frío.
Assiyah: Plata con rayas azul celeste.
Estudio del sendero.
• Dirección. El sendero 2 une las sefirot Keter y Tiferet, y es el
tramo superior del Sendero de la Flecha, el de la expansión de
la consciencia, estando por tanto abierto en ambas direccio-
nes todo el tiempo. Representa, pues, la conexión directa entre
Brahman, el Absoluto, y Atman, el Ser.
• Análisis cabalístico. Las esferas que une tienen una diferencia de
valores numéricos de 461 (1081 - 620), la cual ilustra mediante dos
conceptos acerca de la naturaleza del sendero. Uno es m,~ i.:l (bar
nidrá), hijo de la Promesa, el Mesías, que liberará a su venida al

2 00 VIL LARRU BIA / H AUT / MILLERA


pueblo judío; el otro es un título dado a preclaros cabalistas y rabi-
nos, el Señor del Buen Nombre(~~ Ct!' "v~, baal shem tov). ¿No su-
gieren ambos conceptos que el Mesías es ante todo un estado de
consciencia, en el que tienen mucho que ver el estudio, el trabajo
y la devoción, tal como veíamos al principio de la presente obra
(secc. I, 10) en el simbolismo de la Estrella de David? Por otra par-
te, podemos observar que en la esfera superior, Keter, aparece una
letra tav, M, en posición central, mientras que en la inferio1~ Tiferet,
aparecen dos, una a cada extremo de la palabra, en una perfecta
simetría. Después veremos que la 10.ª esfera, Maljut, aparece otra
más, pero ahora al final de la palabra, no en el centro. Podemos en
consecuencia interpretar que en el sendero 2, el Uno se desdobla
para que aparezca el Dos, y que luego, en el 10, queda en último
lugar (es decir, escondido en lo más profundo) el recuerdo, en for-
ma de dolor que impulsa a la misión de reconstruir la Unidad
perdida, el tikún.
• Sefer Yetzirah. La sabiduría y su contraria, la locura (la estupi-
dez), la Luna en el cielo, el ojo derecho en el cuerpo humano y el
día domingo en la semana.
• Nombre hebreo del arcano del tarot. El término hebreo para
la Sacerdotisa o Papisa es M~,~ M~M~ (kohenet gadolah), literal-
mente Gran Sacerdotisa, de valor numérico 517. Y este núme-
ro proporciona una clave de suma importancia. Cuando Aryeh
Kaplan, en su obra Sefer Yetzirah. El Libro de la Creación. Teoría
y Práctica, comenta el pasaje 1:14 del mismo, dice: «Lo que de
hecho está haciendo el texto es describir dos diferentes esta-
dios de iniciación en los misterios de las Sefirot» . El pasaje en
cuestión, críptico por demás, dice así:

Estas son las Diez Sefirot de la Nada:


el Aliento del Dios Vivo, Aliento del Aliento,
Agua del Aliento, Fuego del agua.
Arriba, abajo, este, oeste, norte, sur.

Se trata de una serie de ejercicios personales para atraer el influjo


de las sefirot superiores a las inferiores. Y añade Kaplan: «El modo
de atraer el influjo a estas Sefirot inferiores implica la contempla-

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 201


ción de las tres letras del Yud Heh Vav (i;i~). Su visualización debe
hacerse como si estuvieran en escritura Ashurí, con fuego negro
sobre fuego blanco .. . Las letras deben aparecer enormes, llenando
por completo la mente». Esta es precisamente la clave. La escritura
ashurí, muy similar a la Torah Sofer (v. secc. I, 3.5) presenta las tres
letras tal como aparecen en la figura 20:

,:,.,
Figura 20
Las letras iod-he-vav en escritura asurí

Pues bien; la palabra ashurí (~ituN) tiene un valor numen-


co de ... 517, lo mismo que la Gran Sacerdotisa o Papisa. Queda
ahora claro que este sendero, en su asociación con el Arcano II,
nos muestra una vía iniciática sumamente interesante. Confir-
mando todo lo anterior, la temurá numérica de 517, esto es, 715, es el
valor numérico de iliMCj (nistarah), oculta, escondida, que precisa-
mente en femenino, y aplicado a la sabiduría, habla de la Kabbalah,
con la que este Arcano tiene una profunda relación.
Significados básicos y correspondencias en el ser humano:
La intuición del Absoluto, la intuición superior. Saber ser uno con.
El amor impersonal. La devoción. La inspiración (conexión con
el Cielo). La búsqueda de Dios a través de la mística. La colum-
na vertebral, la médula espinal, el cerebelo y el bulbo raquídeo,
la glándula tiroides, los bronquios y los pulmones (de frente). Los
pulmones y los huesos (de perfil).
Problemas en caso de bloqueo: Tendencia misionera, fanatismo, fe
ciega y exagerada, prepotencia. O bien sensación de abandono de
Dios, tristeza interi01~ falta de autoestima, tendencia a iiúravalo-

202 VIL LARRUB IA / H AUT / M tL LERA


rarse; confusión interior; falta de ánimo; egoísmo. En otros casos,
búsqueda de lo divino, acompañada de un paradójico «miedo a
Dios», que muchas veces concluye en un rechazo de Dios. Ten-
dencia a escaparse, tendencia a «cuelgues», a huir de la realidad,
a rechazar el mundo.
Posibles problemas de salud: los asociados con la respiración; ti-
roides; alergias; problemas de huesos, especialmente de columna
vertebral.
Información adicional: Es uno de los cinco senderos que atraviesa
la barrera del Abismo. Ello quiere decir que es posible superar la
dualidad sujeto-objeto mediante la intuición superior y las demás
cualidades indicadas en el párrafo anterior.

3.6.4. Sendero 3 . La Emperatriz. De Jokmah a Binah

Letra hebrea: guímel, ~


Letra doble.
Significados: retribución / revelación / camello.
Tipo de sendero: estructural del Espíritu.
Colores del sendero:
Atzilut: Verde esmeralda.
Briah: Azul celeste.
Yetzirah: Verde claro luminoso.
Assiyah: Rosa brillante, o alternativamente rojo cereza con rayas
verde pálido.
Estudio del sendero.
• Dirección. El sendero 3, viga superior o espiritual del Árbol, es el en-
lace entre Jokmah y Binah, siendo por tanto el enlace entre el Padre
Cósmico y la Madre Cósmica, en el que todo se gesta y del que to-
das las cosas nacen. Es un sendero que, visto desde los planos infe-
riores permanece abierto, pero que, en la visión superior, está cerra-
do, pues en realidad es inexistente. En efecto, un padre y una madre
lo son en tanto existe un hijo; pero no basta que exista cópula, sino
que, además, el cigoto masculino se una con el cigoto femenino.
Mientras esto no sucede, los padres lo son sólo en sentido potencial,
y esta potencialidad puede frustrarse. Por lo tanto, padre y madre

MAN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 203


lo son en la medida en que el espermatozoide se una al óvulo, pero,
paradójicamente, lo son sólo en el acto de unión de dichos cigotos,
ya que, en el momento en que tal unión se ha producido, ya no
hay cigotos, sino un huevo fecundado. A partir de ese momento,
los que habían sido padre y madre asumen nuevas funciones: ella,
incubadora de un feto, y él, responsable del cuidado del proceso de
gestación y de sus protagonistas. Esto es particularmente cierto en
el caso de este sendero, puesto que la unión del Padre y la Madre
.Cósmicos no es algo que se produjese en un momento histórico de-
terminado, sino que está sucediendo en todo momento, más aún,
fuera del tiempo, en la Eternidad, en un perpetuo orgasmo Energía-
Forma, en el Aquí y Ahora. Es por tanto un sendero de síntesis, de
unificación.
• Análisis cabalístico. La diferencia de valores numéricos entre las es-
feras que une es 6: el valor de la letra vav (i), ¡el Hijo! Y, separando la
letra común a ambos nombres, la he (iT), con las seis letras restantes
de ambos puede plantearse una pregunta que irá teniendo su co-
rrespondiente respuesta según vayamos recorriendo los senderos:
n~ 1~ ~ (mi ben koáj) ¿ Quién es el Hijo de la Fuerza, quién es el Hijo
del Valor? Si los lectores quieren alguna pista, recuerden la saga de
filmes de La Guerra de las Galaxias, y la despedida que «los buenos»
se hacían: «Que la Fuerza te acompañe» ...
• Sefer Yetzirah. La riqueza y su opuesto, la pobreza, el oído dere-
cho, Marte en el cielo y el día lunes en la semana.
• Nombre hebreo del Arcano del tarot. La palabra hebrea para
emperatriz, n.-,Ci' (kesarit) es de origen latino, y no ofrece datos
interesantes por su guematria (v. n. 780); tampoco hemos descu-
bierto por temurá nada que concuerde con el sentido del sendero,
toda vez que su raíz es la misma que la del nombre del sendero 4,
El Emperador, de cuyo nombre es el femenino. Tan sólo, la temu-
rá numérica, 087, es decir, 87, número que encontramos repetidas
veces a lo largo de la presente obra, nos habla en este caso de un
fluir, ~U (nazal), que es el del tiempo, desde Jokmah a Binah a
través del Sendero 3, pues, como ya vimos (fig. 12) es el enlace
desde el Principio al Fin, según el Sefer Yetzirah. Es, por tanto,
la sensación subjetiva de transcurso del tiempo lo que este sende-
ro representaría.

204 VJLLARRUlllA / H AUT / MJLLERA


Significados básicos y correspondencias en el ser humano: Viga
de la espiritualidad. Capacidad de síntesis. Inteligencia abstrac-
ta. Unión de polos opuestos: manifestación del Tao. Las relacio-
nes entre los padres, y también la relación de pareja. La Gran
Magia Blanca, el conocimiento bien utilizado; si se bloquea pue-
de producir efectos contrarios. La sensación subjetiva de trans-
curso del tiempo. Los sentidos de la vista y el oído. El encéfa-
lo, considerado en su conjunto, los ojos y los oídos (de frente).
El cabello, el sistema circulatorio de la cabeza (de perfil; posibi-
lidad de migrañas en caso de bloqueos del sendero).
Problemas en caso de bloqueo: Nerviosismo. Mente parlante.
Bloqueo mental. Confusión en la asociación de ideas: se busca
la unión de los opuestos, aunque sea «de cualquier manera»,
lo que obligará a una búsqueda posterior de mejores métodos
para alcanzar la síntesis. Tendencia a creerse torpe, o al contra-
rio, demasiado inteligente, lo que revela en definitiva falta de
autoconocimiento. Tendencia a la hiperactividad. Dudas y reac-
ciones lentas ante los retos importantes de la vida.
Posibles problemas de salud: los derivados del estrés y del exceso
de nerviosismo; vértigos; problemas de vista (posible estrabis-
mo) y oído (pérdida progresiva de la audición); locura, esqui-
zofrenia; migrañas; parálisis cerebral; alteraciones del sueño,
insomnio. Obsesiones. Fiebres elevadas con ocasión de deter-
minadas enfermedades.

3.6.5. Sendero 4. El Emperador. De Jokmah a Tiferet

Letra hebrea: da'let, ,


Letra doble.
Significados: puerta / palabra / cosa, objeto.
Tipo de sendero: de enlace entre el Espíritu y la Mente.
Colores del sendero:
Atzilut: Rojo escarlata.
Briah: Rojo puro.
Yetzirah: Rojo llama brillante.
Assiyah: Rojo fulgente.

MAN UA L DE KABBALAH PRÁCTICA 205


Estudio del sendero:
• Dirección. El sendero 4, entre Jokmah y Tiferet, se puede conside-
rar como de direcciones alternativas. La relación padre-hijo, sím-
bolo de este sendero, es de una sola dirección, pues nadie puede
ser a la vez padre e hijo del mismo varón. La frase, tan repetida
por los cabalistas, «tú no tienes ni padre, ni madre, ni hijo, ni hija,
ni esposo, ni esposa, ni hermano ni hermana, pues tú eres tu pro-
pio padre, tu propia madre, tu propio hijo, tu propia hija», encaja
perfectamente en este sendero. En un sentido más humano, nadie
puede estar siendo, a la vez, padre e hijo del mismo ser.
• Análisis cabalístico. La diferencia de valores numéricos en-
tre las dos esferas que une, 1008, nos habla de la vena yugular,
iNi~;, ~W ¡,iw (orek shel ha-tzavar), que lleva la sangre del cerebro
al corazón. Por su parte, el vaso sanguíneo que lleva la sangre
del corazón al cerebro, la arteria carótida, tiene un nombre he-
breo casi igual al anterior, ,~,~il
¡,iiv (orek ha-tzavar), sin más
diferencia con aquélla que la palabra ~W (shel), de, lo que con-
firma que ambas forman parte de un mismo circuito, así como
la doble dirección del sendero. Es interesante constatar que,
si prescindimos de las letras tav (M), serviles, esto es, auxiliares
en la palabra Tiferet, queda la raíz,~~ (péer), adornar, y también
glorificar; y haciendo lo mismo con Jokmah, a la que elimina-
mos la he (il), queda la raíz ~n (jajam), instruirse. Comparando
· ahora las letras de ambas raíces, primera con primera, segunda
con segunda, etc, aparecen las palabras n~ (paj), impedimento,
y c¡n (jaf), ganzúa, en el primer par; ,~ (aj), desgracia; en el se-
gundo; y e, (ram), alto, elevado, en el tercero. Por su parte, la
diferencia de valores numéricos entre ambas raíces (281 - 68 =
213), proporciona la p alabra,~~~ (abir), fuerte, robusto, y tam-
bién héroe. El sendero, pues, nos propone un camino de disci-
plina interior, pues sólo mediante la actitud del samurai podrá
abrirse la puerta (i, letra del sendero); y se nos avisa que tendre-
mos que afrontar grandes obstáculos y desgracias, como bien
saben los caminantes del Sendero Espiritual.
• Sefer Yetzirah. La semilla y por tanto la fertilidad y su opuesta la
esterilidad, el orificio derecho de la nariz, el Sol en el cielo y el día
martes en la semana.

206 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


• Nombre hebreo del Arcano del tarot: El valor numérico de la
palabra hebrea correspondiente a emperador, iCi' (késar), como
en el caso anterior, y femenino de éste, de origen latino, es 370,
proporciona algunos conceptos en línea con los significados del
sendero y del Arcano. Así, encontramos ~~Q (mashal), gobernar,
y su degeneración, f.,V ('aritz), déspota, tirano. Y, sobre todo,
la palabra O~~ (shalem), entero, completo, y también acabado,
terminado; por cierto, que esta palabra está, como vimos, conte-
nida en o,~~ (shalom), paz. Por tanto, este sendero tiene también
una profunda relación con el cumplimiento del tikún. Algunos
autores (p. ej. Gareth Knight) intercambian en el Árbol lapo-
sición del Arcano de El Emperador con el de La Estrella, que
es, precisamente, el que más directamente se refiere al cumpli-
miento del tikún.
Significados básicos y correspondencias en el ser humano: La
autoridad. La perfección. Terminar las cosas, rematar las tareas.
El orden. La disciplina. La constancia. La rigidez. Lo masculino.
Las relaciones con el padre y, en general, con los antepasados
masculinos y con los varones ancianos. El lado derecho del pecho,
incluido el seno derecho en las mujeres, el ojo derecho, el pulmón
derecho (de frente). Las vértebras dorsales (de perfil).
Problemas en caso de bloqueo: machismo, que se manifiesta a veces
en la posibilidad de homosexualidad, las mujeres por su excesiva
masculinidad, los varones por no reconocer sus propios aspectos
masculinos. Militarismo o su opuesto, la rebelión ante cualquier
tipo de orden u obligación impuesta. Aburrimiento en la perseve-
rancia, incapacidad para rematar las tareas comenzadas. Suciedad,
o su opuesto, afán compulsivo de limpieza. Abandono de la disci-
plina interna, o su opuesto, la rigidez en la autodisciplina, por la
búsqueda de un modelo al que parecerse para «ser muy bueno»;
ello puede llevar, por ejemplo, a hacer continuamente cursos de au-
toayuda, buscar el régimen alimenticio más severo (por ejemplo,
las formas extremas de la macrobiótica), y a acumular «sabiduría»,
pero sólo en su aspecto mental, para hacer cada vez más grande su
propio archivo de conocimientos. Problemas de relación con el pa-
dre. Atracción hacia relaciones de sometedores o sometidos (relaciones
masoquistas o sádicas, respectivamente). Testarudez.

MANUAL DE KABBALI\H PRÁCTICA 207


Posibles problemas de salud: artrosis y artritis, problemas en las
articulaciones, pinzamientos de vértebras.
Información adicional: Es uno de los cinco senderos que atraviesan
la barrera del Abismo. Por lo tanto, se nos indica que la dualidad
sujeto-objeto puede superarse mediante el trabajo interior disci-
plinado.

3.6.6. Sendero 5 . El Papa (El Sumo Sacerdote, El Pontífice)


De Jokmah a Jesed

Letra hebrea: he, ii


Letra simple.
Significados: apertura / espíritu / lo femenino.
Tipo de sendero: de influjo del Espíritu sobre la Individualidad.
Colores del sendero:
Atzilut: Rojo anaranjado.
Briah: Índigo (añil) profundo.
Yetzirah: Verde oliva, a la vez vivo y profundo.
Assiyah: Marrón vivo.
Estudio del sendero.
• Dirección. El sendero 5, junto con el 6, el 7, el 17 y el 20, es uno
de los pocos de dirección exclusivamente ascendente. En este caso,
· al simbolizar tanto el ritual como la risa y el placer de estar haciendo,
es claro que se trata de aspectos puramente humanos. El ritual tiene
como finalidad que lo de abajo se conecte con Lo de Arriba; pero, en
realidad, Lo de Arriba está en todo momento conectado, pero lo de
abajo no lo sabe, y de ahí el ritual, recordar lo que se olvidó. De la
misma forma, la risa requiere, como muy bien sabe e imparte Mario
Satz en sus seminarios, algo sorprendente o insólito y, cuando es
contagiosa, que haya más de uno a quien contagiar. ¿Hay algo insó-
lito para Dios, hay alguien aparte de Dios que Le pueda contagiar
la risa? En cuanto al placer de estar haciendo, responde en realidad al
dolor profundo, básico, aunque oscuro que todos llevamos dentro,
de que algo no marcha como es debido en el universo pues, en caso
contrario, ¿para qué hacer nada?; y, aunque se trate sólo de aburri-
miento, eso ya es algo que requiere remedio.

208 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


• Análisis cabalístico, y nombre hebreo del Arcano del tarot. Cuan-
do se comparan los nombres de las esferas que une, Jokmah y
Jesed, observamos de inmediato que ambas comparten la inicial,
M (jet), la letra de la vida, lo que indica que aquello que simboliza
el sendero 5 es esencial a la vida: unos determinados ritos para
acomodarse a los ciclos de la naturaleza, la risa y la actividad lú-
dica. La diferencia de valores numéricos (73-72 = 1), no tiene más
respuesta que la letra álef, N, que al simbolizar el Infinito nos dice
que la Vida es Eterna, sin principio ni fin, y que es lo que está suce-
diendo en este preciso momento. Pero la álef simboliza también al
pecho, una de cuyas acepciones es ¡,i, (jek), de valor numérico 118,
el mismo que~,,~ jM~ (kohen gadol), sumo sacerdote o pontífice,
y cuyo femenino ya vimos en el Sendero 2. Por otra parte, esta
última acepción significa el que hace puentes, y esa es la función
de este sendero, tender puentes a través del Abismo.
• Sefer Yetzirah. El habla, el pie derecho en el cuerpo humano,
el signo de Aries en el cielo, y el mes hebreo de Nissán, correspon-
diente a marzo-abril.
Significados básicos y correspondencias en el ser humano: Lo lú-
dico. El ritual. El porqué subjetivo de las cosas y los actos. La auto-
satisfacción en la motivación. El placer de vivir. El juego y el niño
interior. La ilusión, el entusiasmo, la alegría. La mano y el brazo
derechos (de frente). Los músculos de la espalda, los omóplatos,
las cervicales, los oídos (de perfil).
Problemas en caso de bloqueo: Infantilismo, ignorancia. Ciclos alter-
nativos de entusiasmo y depresión, así como de espontaneidad y
vergüenza. Sentimientos de vacío y de decepción de la vida, miedo
a perder la ilusión de la vida, falta de estímulo. Necesidad impacien-
te de crecer, basada en la creencia de que la niñez no tiene ningún
valor. Respecto a las relaciones sociales, el sujeto con bloqueos en
este sendero puede ser muy influenciable por el entorno, tenden-
cia a ser manipulados, engañados. La necesidad de alegría les hace
caer con facilidad en vicios y adicciones (peligro de drogadicción,
ver IV parte, cap. 16, sobre Árboles especiales). La incapacidad de
expresar su espontaneidad de forma fluida les lleva muchas veces a
trabajar en asuntos que no le satisfacen, llegando a considerar como
una pesada carga su actividad laboral. Tendencia a faltar el respeto

MAN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 209


a los demás, o a ponerse en situaciones en las que son el objeto de
dicha falta de respeto. Oscila entre una total falta de estímulos y un
exceso de ellos. Tendencia a desarrollar actitudes de astucia para
defenderse de lo que consideran un mundo hostil. En otras ocasio-
nes, dedicación obsesiva al trabajo, con la consiguiente ausencia de
ocio y descanso, o bien excesos en estos últimos, con la consiguiente
dificultad para asumir responsabilidades.
Posibles problemas de salud: falta de desarrollo de los genitales (in-
fantilismo); problemas de oídos y vista. Problemas en la mano, bra-
zo y hombro derechos; cervicales (mareos, tortícolis); posibles mu-
taciones genéticas que son causa de enfermedades hereditarias.
Información adicional: Es uno de los cinco senderos que atravie-
san el abismo. Es la indicación de que esta barrera puede supe-
rarse a través de la risa y el juego. En realidad, los rituales son
formas particulares de las reglas de un juego, por lo que ambos
aparecen juntos en este sendero.

3.6.7. Sendero 6. Los Amantes (Los Enamorados)


De Binah a Tiferet

Letra hebrea: vav,,


Letra simple.
Significados: hombre / hijo / enlace.
Tipo de sendero: de conexión entre el Espíritu y la Mente.
Colores del sendero:
Atzilut: Naranja.
Briah: Malva pálido.
Yetzirah: Cuero nuevo amarillento.
Assiyah: Gris rojizo tirando a malva.
Estudio del sendero.
• Dirección. El sendero 6 es otro de los de dirección ascendente,
pues al representar el libre albedrío, también representa la elec-
ción, y por tanto la renuncia y la eliminación, aspectos todos
ellos exclusivamente humanos, ya que para Dios no hay elec-
ción al tenerlo todo presente. El aspecto «Madre» de Binah nos
habla de una absorción por parte de un ser terrible que exige pe-

21 Ü V!LLARRUB IA / H AUT / MILLERA


riódicos sacrificios para mantener la fertilidad de la tierra, como
indica Ken Wilber acerca de las primitivas culturas agrícolas,
a diferencia del aspecto «Diosa», que es pródiga y benevolente:
ello se representa con los títulos de Ama, la Madre Oscura y Esté-
ril, y Aima, la Madre Fértil y Brillante. Así pues, el sendero 6 sería
el cauce por el cual el agujero negro de Binah absorbería todo
aquello que deberá ser objeto de renuncia.
• Análisis cabalístico. Al no haber letras comunes en los nombres
de las esferas que une, y tener ambos distinto número de letras,
optamos por comparar a ambas por guematria, pero en la dife-
rencia de sus valores numéricos (1081 - 67 = 1014) no aparece
nada significativo, y ello es posiblemente porque, al simbolizar
la libertad, no se sujeta a reglas, al contrario del sendero 4, que
es el de las normas y la disciplina. Buscando las raíces de ambos
nombres, al igual que hicimos en el estudio del sendero 4 en-
contramos iN~ (péer), embellecer y glorificar, y r~ (bin), inteli-
gencia: «embellecer o glorificar la inteligencia». La diferencia de
valores numéricos entre ambas raíces (281 - 62 = 219) proporcio-
na iiitoii (hiteher), purificarse, y i1toii1 (hirtah), curar: «purificarse
para curar, para sanar». Es, por tanto, un sendero de purifica-
ción, de eliminación de los aspectos ajenos a nosotros mismos.
Por eso, es un sendero de elección y de renuncia.
• Sefer Yetzirah. El pensamiento, el riñón derecho en el cuerpo
humano, el signo de Tauro en el cielo y el mes hebreo de Iyar,
correspondiente a abril-mayo.
• Nombre hebreo del arcano del tarot. Puede expresarse en he-
breo el nombre del Arcano, Amantes, con dos palabras dife-
rentes. La primera es C\~iiN (ahevirn), con valor numérico de 58,
el mismo que el de ¡n (jen), gracia, belleza, palabra que es, como
ya vimos, el notarikón de sabiduría secreta, (jokmah nístarah),
la Kabbalah. La segunda es e~,,, (dodím), cuyo valor numérico,
64, proporciona e~~ (yadayim), las dos manos, el _nombre de un
tratado del Talmud que regula lo relativo a la impureza de las
manos y su purificación, en perfecta concordancia con el análi-
sis cabalístico anterior.
Significados básicos y correspondencias en el ser hu.mano:
La libertad, el libre albedrío. La elección. La selección. La renun-

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 211


cia. La sutileza. La manipulación. Las relaciones con la madre y,
en general, con las antepasadas femeninas y con las mujeres an-
cianas. La femineidad y los ciclos naturales. El cordón umbilical y
la necesidad de cortarlo al nacer. El pulmón y el oído izquierdos,
el lado izquierdo del pecho, incluido el seno izquierdo en las mu-
jeres (de frente). El sistema respiratorio, especialmente los pul-
mones, el pecho, incluidos los senos en las mujeres (de perfil).
Problemas en caso de bloqueo: Tendencia a rechazar el propio fí-
sico, lo que puede hacer del sujeto un cliente habitual de los qui-
rófanos de cirugía estética. Dificultades para tomar decisiones de
elección, lo que muchas veces conduce al bloqueo. La necesidad
de libertad puede ser tan fuerte que lleve al extremo opuesto, un
excesivo autoritarismo, lo que en personas que ejercen labores
de dirección origina con frecuencia estados caóticos en las orga-
nizaciones que dirigen. Dependencia excesiva de la madre, que
en ocasiones lleva al sujeto varón a buscar parejas que le ofrezcan
ese mismo rol materno. Homosexualidad femenina, lesbianismo.
Problemas con la femineidad, inseguridad de la mujer respecto a
su naturaleza como tal. Puede caer en comportamientos duros y
ásperos, o en sus contarios, excesivamente sutiles hasta el punto
de enredarse en ellos. Apegos o desapegos excesivos; tendencia
a quedar sujetos (en su aspecto positivo-atracción- o negativo
-rechazo) a personas percibidas como dotadas de mayor segu-
ridad que uno mismo, lo que en realidad es una muestra de que
algún «cordón umbilical» no ha sido aun cortado. Tendencia exce-
siva a la revisión del propio pasado: «Qué hubiera sucedido si. ..»,
lo que en la práctica impide la vivencia y el disfrute de las situacio-
nes presentes. Sensibilidad emocional que empaña la razón.
Posibles problemas de salud: en la lactancia, problemas con la
leche materna, por posible incompatibilidad de los grupos san-
guíneos de la madre y el bebé, o bien por falta de leche. Pulmo-
nes, sistema respiratorio. Problemas con los senos en la mujer.
Problemas con la alimentación, originados por ansiedad; ano-
rexia o bulimia. Ojos, oídos. Válvula mitral. Tendinitis.
Información adicional: Es otro de los senderos que cruza el Abis-
mo. El medio para hacerlo es la renuncia y la purificación que
conlleva.

212 ViLLARRUBIA / H AUT / MILLERA


3.6.8. Sendero 7. El Carro. De Binah a Guevurah

Letra hebrea: zayn, i


Letra simple.
Significados: centro / semilla / espada / flecha.
Tipo de sendero: de influjo del Espíritu sobre la Individualidad.
Colores del sendero:
Atzilut: Ámbar dorado.
Briah: Marrón.
Yetzirah: Bermellón vivo.
Assiyah: Marrón verdoso oscuro.
Estudio del sendero.
• Dirección. También el sendero 7 es otro de los de dirección as-
cendente, y es así porque representa la responsabilidad (capa-
cidad de responder), el propósito y los objetivos, así como la
ambición, actitudes todas ellas que siempre tienen a la vista al-
canzar algo superior o subir a un puesto más elevado.
• Análisis cabalístico. La diferencia de valores numéricos entre las
esferas que une (216 - 67 = 149) no proporciona datos de interés, y
lo mismo sucede de la comparación de las letras de ambas. La com-
paración de raíces, t~ (bin), inteligencia, con valor numérico 62,
y,~~ (gabar), ser fuerte, vencer, y también crecer en intensidad,
con valor numérico 205, define un sentido de incremento y forta-
lecimiento de la inteligencia, de crecimiento y desarrollo mental.
Si sacamos la letra común a ambas palabras, ~, con las restantes
podemos formar las palabras ~~ (gai), desfiladero; ¡, (ron), canto,
alegría; y,~ (guer), extranjero, que también puede leerse gar, re-
sidir, habitar. Todo ello que da idea de un camino estrecho que
lleva a cambiar nuestro lugar habitual (y por extensión, nuestra
forma usual de vida) por otro en el que nos sentiremos extranje-
ros. Una vez que se crece, no es posible retroceder al pasado.
• Sefer Yetzirah. El movimiento, el pie izquierdo en el cuerpo hu-
mano, el signo de Geminis en el cielo y el mes hebreo de Siván,
correspondiente a mayo-junio.
• Nombre hebreo del Arcano del tarot. En el nombre hebreo para
carro hay c01motaciones bíblicas y cabalísticas sumamente inte-
resantes: recordemos al carro de fuego de la visión de Ezequiel

MANUAL DE KABBALA H PRÁCTICA 213


(cap. I de su libro), ii~~,o (merkaváh), de valor numérico 267,
el mismo que j""ii~ (oryán), palabra que significa tanto estudio o
enseñanza como la Ley, la Torá, y que tiene en su raíz,,~
luz; y con el mismo valor, ii""itoO~, guematria, el método cabalís-
(or),

tico basado en los valores numéricos de las letras que estamos


siguiendo justo en este mismo instante, y,~,~ (nazir), nazareno,
anacoreta. Todo ello nos indica que se trata de un sendero que,
a diferencia del 5, busca unos objetivos superiores que están de
alguna forma en el futuro; y en este sentido, recordemos la figu-
ra 12, en la que Binah aparece como polo futuro del eje temporal.
Y propone emplear para alcanzar esos objetivos vehículos tales
como la merkavah, que, además de carro, designa a un método
de meditación e introspección cabalística, el estudio y el cum-
plimiento de la Ley, y el uso de técnicas cabalísticas. Por eso,
el príncipe que aparece en el Arcano VII subido al carro tiene,
desde su posición elevada, una visión superior, pero se nos re-
cuerda que no es ése el objetivo, sino que los métodos de trabajo
deben ser abandonados tan pronto el carro vaya a volcar, ya que,
al no haber riendas con que guiar a los caballos, no es posible
controlar su marcha ni evitar los peligros que conlleva.
Significados básicos y correspondencias en el ser humano: El
adulto. El trabajo. La responsabilidad. El para qué subjetivo de las
cosas y los actos. La búsqueda de un objetivo, generalmente exter-
no y futuro para el sujeto. La ambición, que deriva en sentimien-
tos de culpabilidad en caso de fracaso, y su remedio: abandonar
el autocastigo, por la comprensión de que no tiene ningún sentido.
La mano y el brazo izquierdos (de frente). La nariz, el rostro, los
ojos, los músculos pectorales, las costillas (de perfil).
Problemas en caso de bloqueo: Son típicos los relacionados con el tra-
bajo; así, lo que en un sendero armónico se manifiesta en la actua-
ción de un buen profesional, cuando se produce bloqueo deriva,
bien en pereza y abandono, o bien en una obsesión por el trabajo, lo
cual es, en definitiva, similar a cualquier otra drogadicción. Exceso en
la asunción de responsabilidades, o abandono de las mismas. Ideas
rígidas. Búsqueda obsesiva de la «buena imagen». Vergüenzas, ten-
dencia a caer en las apariencias; esta tendencia se manifiesta encasi-
llando a los demás en estereotipos o modelos de comportamiento:

214 Y!LLARRUBIA / H AUT / MI LLERA


y si éstos actúan de forma diferente a la acostumbrada, son muchas
veces considerados como locos o asociales («no está siendo él mismo,
¿qué le está pasando?»). Sentimientos de culpa, al no comprender
el sentido del error como una forma de aprendizaje. Es típica la ten-
dencia a bloquearse a causa de que no se muestran facetas de la
propia personalidad por miedo al ridículo. Inflexibilidad mental.
Propensión a envidiar a los demás por sus conocimientos o por su
capacidad de superación, lo que se manifiesta en forma de competi-
tividad excesiva y «piques» laborales. Tendencia al lujo como forma
de ostentación del propio triunfo. Mal empleo del tiempo. Rechazo
a los niños y a las manifestaciones infantiles. Tendencia a acumular
«valores». Celos y envidias enfermizas. Avaricia.
Posibles problemas de salud: Hipocondría. Rigidez. Propensión a re-
cibir golpes en el rostro, como forma inconsciente de autocastigo
(accidentes laborales y caseros). Rojeces en el rostro (rubor excesivo,
a veces incluso marcas y manchas permanentes). Ansiedad patoló-
gica. Problemas de vista. Problemas en el brazo izquierdo.
Información adicional.
Es el quinto sendero que cruza el Abismo, junto con el 2 (La Sa-
cerdotisa), el 4 (El Emperador), el 5 (El Papa) y el 6 (Los Aman-
tes). El medio para conseguirlo es la responsabilidad, esto es,
la capacidad de responder a los retos, para lo que se requiere
alcanzar la madurez del ser adulto en todos los sentidos: físico,
emocional, mental y espiritual.

3.6.9. Sendero 8. La Justicia. De jesed a Cuevurah

Letra hebrea: jet, M


Letra simple.
Significados: vida / camino.
Tipo de sendero: estructural de la Mente o Individualidad.
Colores del sendero:
Atzilut: Amarillo verdoso.
Briah: Púrpura profundo.
Yetzirah: Gris.
Assiyah: Amarillo rojizo.

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 21 5


Estudio del sendero.
• Dirección. El sendero 8 es la Viga de la Individualidad, y es
uno de los que permanecen abiertos constantemente en ambas
direcciones. El flujo entre Rigor y Misericordia, Misericordia y
Rigor, es constante, como ya vimos al estudiar Guevurah, pues
no son sino dos aspectos de una misma realidad.
• Análisis cabalístico. La diferencia de valores numéricos entre las
esferas que une (216 - 72 = 144) proporciona dos datos adicionales
interesantes. Uno es directo, mediante la palabra-.,¡,¡ (dikli), palme-
ral, y ya sabemos la estrecha relación entre la Justicia y la palmera,
según vimos en Salmo 92: 13. El otro, indirecto, ya que 144 es el cua-
drado de 12, por lo que es el mismo 12 en una «octava superior»; y
12 nos proporciona la palabra ~.:l (bi): en mí, diciéndonos así que se
trata de algo que corresponde al fuero interno
• Sefer Yetzirah. La vista, la mano derecha en el cuerpo humano,
el signo de Cáncer en el cielo y el mes de Tamuz (correspon-
diente a junio-julio) en el calendario judío.
• Nombre hebreo del Arcano del tarot. La expresión hebrea para
justicia, no tanto en su sentido externo, sino en el interno de
actitud justa, de búsqueda del equilibrio interior, es ¡,¡i (tzedek),
frente a su aspecto externo, j~ (din), que, como vimos, es uno de
los títulos de la 5. ª sefirá, Guevurah. Esa expresión, tzedek, tiene
también el sentido de piedad, rectitud, y también los de virtud
y salvación. Por otra parte, es también el nombre del chakra
mundano de la 4.ª sefirá, Jesed. Vemos, pues, que se trata de un
sendero que nos habla de equilibrio entre el Rigor y la Miseri-
cordia, de justeza, según la afortunada expresión de Mario Satz.
Las letras que forman el nombre hebreo del sendero, considera-
das como ideogramas, nos hablan, además del equilibrio y la
justicia, de un anzuelo (l), de la puerta y la palabra creadora
(i), y de la recepción y la tradición, además de la parte posterior
de la cabeza y de una llave (¡,). ¿Qué sugiere todo esto? Ante
todo, algo que corresponde esencialmente a aspectos mentales,
basados en contenidos («palabra creadora») que entran por la
«boca de Dios» (nombre que recibe esa parte posterior de la ca-
beza), y que son captados y recibidos («anzuelo» y «recepción»)
conforme a unas determinadas pautas trasmitidas a lo largo de

21 6 VtLLARRUBIA / HAUT / MILLERÁ


generaciones («tradición») para proporcionar una herramienta
que permita abrir («llave») los niveles inferiores. Por su parte,
en la palabra tzedek se encuentran contenidas otras, que ilustran
sobre los aspectos de la Individualidad relacionados con este
sendero, aspectos en ocasiones contradictorios entre sí, como
corresponde a un nivel en que empieza a perfilarse la frontera
que separa al Yo del No-Yo, como, por ejemplo, ri(datz), rego-
cijarse, frente a y¡, (katz), repugnar; o bien presentan el aspecto
analítico de la mente, como ¡,, (dak), profundizar, investigar, lo
que puede llevar a transformar la polaridad en enfrentamiento,
viendo a la propia sombra como adversario,,~ (tzad). Pero tam-
bién aparece la palabra y¡, (ketz), destrucción, para indicarnos
que una de las funciones de este sendero es eliminar a nivel
subjetivo lo que ya ha cumplido su función, o bien todo aquello
cuya permanencia sería patológica, y que se plasmará luego a
nivel externo en Guevurah a través de las Tríadas de la Conser-
vación, la Conciencia Moral y los Miedos. En lo que respecta a
la guematria, el valor 194 de tzedek proporciona también la pala-
bra t:l"n,¡,~ (likujím), casamiento o desposorio, reforzando la idea
de que se trata de un sendero de armonización y equilibrado
de energías, y no de fuerza. Es por tanto errónea, desde nues-
tro punto de vista, la atribución del Arcano de La Fuerza a este
sendero. En apoyo de ello, recordemos las palabras del profeta
Zacarías (fig. 21).

No por poder ni por fuerza sino por Mi Espíritu,


dice el Eterno de las huestes

Figura 21
Pasaje del Libro de Zacarías, 6: 4,
considerado símbolo del equilibrio espiritual

M AN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 21 7


EJERCICIO
19. El texto hebreo recogido en la figura 21, escrito con su ,,
puntu~ción masoréticá, aparece grabaRo ,en los ,dos brazos
inferiores de la gran menorah (candelabro de 7 brazos) si-
tuada en la moderna Jerusalem ante el edificio de la J<neset
(Parlamento). ¿Te atreves a escribir su transcripción fonéti~a?

Con ese mismo espíritu aparece una de las oraciones del Islam,
que se recita en determinados actos solemnes, como entierros de
personajes importantes o nacimiento de un hijo: Al hamdul-lil-lah
wa la jawal wa la kawwa il-la bil-lahi: «Gracias sean dadas a Dios, que
no es por engaño ni por fuerza, sino·por [gracia de] Dios». Con lo
que parece claro que la relación entre Misericordia y Rigor, entre
Amor y Severidad, no se establece mediante la fuerza, sino me-
diante el equilibrio armónico.
Significados básicos y correspondencias en el ser humano: Viga
de la Individualidad. Equilibrio, en especial entre el Amor,
como esencia, y el Rigor, como manifestación. Discernimiento.
La razón. Capacidad de juzgar. Capacidad de seleccionar entre
lo que hay que conservar y lo que hay que renovar. La esencia de
la conciencia ética. La búsqueda de Dios a través de la razón.
El análisis. La investigación. La conciencia ecológica. El cora-
zón, la garganta, los pechos, la glándula timo, las manos (de
frente). El corazón, la garganta, los pechos (de perfil).
Problemas en caso de bloqueo: miedo al desequilibrio respecto al entor-
no social. Rigidez mental, cabezonería, tozudez. Tendencia a juzgar,
a calificar de «bueno/malo», «favorable/desfavorable»; y a la vez,
y paradójicamente, miedo a ser juzgado por los demás. La tenden-
cia que proporciona este sendero de buscar el justo término medio,
de búsqueda de exactitud y precisión, se transforma en caso de blo-
queo en una propensión a tomar partido por uno de los extremos,
olvidando en cierto modo toda idea de justicia. Intentos de «tener ra-
zón» a toda costa, lo que puede llevar a juicios destructivos, priman-
do el aspecto rigor y olvidando el aspecto misericordia. Tendencia a
vivir complicaciones burocráticas de todo tipo: pleitos, malas relacio-
nes con socios, complicaciones de tipo económico y fiscal, etc.

218 ViLLARRUBIA / HAUT / Mil. LERA


Posibles problemas de salud: afecciones de garganta y vías respi-
ratorias, zona pulmonar, catarros, gripes; accidentes que afectan
a las manos; en la mujer, afecciones de los senos; enfermedades
cardíacas: las ocho arterias principales se corresponden con los
ocho senderos que confluyen en Tiferet, cuya expresión básica
está precisamente en el sendero 8.

3.6.10. Sendero 9. El Ermitaño. De jesed a Tiferet

Letra hebrea: teth, ~


Letra simple.
Significados: bien / ombligo / serpiente.
Tipo de sendero: estructural de la Mente o Individualidad.
Colores del sendero:
Atzilut: Verde amarillento.
Briah: Gris pizarra.
Yetzirah: Gris verdoso.
Assiyah: Verde ciruela.
Estudio del sendero.
• Dirección. El sendero 9, uno de los cuatro que mantienen in-
variable su letra hebrea, es también uno de los de doble direc-
ción abierta en todo momento. Si observamos el conjunto de
este tipo de senderos (fig. 17), nos daremos cuenta de que, junto
a los enlaces que la Mente mantiene con el Cielo (sendero 2) y
con la Tierra (sendero 21), aparecen las virtudes cardinales de
que habla el Catecismo católico: Prudencia (sendero 9), Justicia
(sendero 8), Fortaleza (sendero 11) y Templanza (sendero 14);
las cuatro dibujando a modo de una copa con su pie. Al ser la
copa o cáliz una vasija que recibe, quiere decir que los senderos
que la forman tienen, en el ámbito mental, la función de recibir,
como ya vimos en el análisis cabalístico del sendero 8.
• Análisis cabalístico. En la diferencia de valores numéricos entre
las esferas que enlaza (1081 - 72 = 1009) no hemos encontrado
datos de interés. Tampoco hay letras comunes a ambas esferas.
La comparación de raíces nos permite, mediante guematria, en-
contrar en el número 209, diferencia entre los valores de iN~

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 219


(péer), embellecer, (ver antes, senderos 4 y 6) y iCM (Jesed), mi-
sericordia, la palabra ~,,~ (boré), creador; y es precisamente en
Tiferet donde la creación N.,,~ (briáh) se manifiesta, ya que su
nombre divino asociado es Elohim, que, según el Génesis, es el
creador del cielo y de la tierra. Es por tanto un sendero funda-
mental en el proceso creativo.
• Sefer Yetzirah. La audición, el riñón izquierdo en el cuerpo hu-
mano, el signo de Leo en el cielo y el mes de Av, correspondien-
te a julio-agosto, en el calendario judío.
• Nombre hebreo del Arcano del tarot. En la antigua Judea, los
nazirim o nazarenos tuvieron mucho que ver con las comuni-
dades esenias de Qumram. Hacían determinados votos tem-
porales, no se cortaban el pelo ni la barba y dedicaban su vida
a la oración y la meditación. El singular nazir (i~u) es la palabra
hebrea para el arcano IX, y nos la encontrábamos al estudiar el
nombre hebreo del arcano VII, cuyo valor numérico compar-
te, lo que indica una relación profunda entre ambos senderos.
Si observamos la ubicación de ambos, veremos que, mientras
el 7 es exterior y orientado hacia lo social transpersonal, el 9 es
interior; pero ambos se refieren a la responsabilidad (la capa-
cidad de responder), y a la búsqueda de un objetivo: allí se tra-
taba de uno externo, de servicio a la comunidad, mientras que
aquí el objetivo es la investigación sobre el Yo, la búsqueda del
sujeto. Por otra parte, debemos recordar que, antes de que las
letras hebreas modificasen su posición en el Árbol de la Vida,
la, (zayn) y la~ (tet) tenían un punto de contacto en la 6.ª sefirá,
Tiferet (fig. 13), formando dos de los tres lados de la Tríada de la
Innovación. Al desplazarse la zayn a su nueva posición, pasó a
ser uno de los tres lados de la Tríada de la Conservación, lo que
indica que todo desarrollo es nuevo mientras pertenece al fuero
interno, y comienza a hacerse viejo tan pronto se plasma en el
plano físico, como saben muy bien los expertos en informática:
por muy moderno y avanzado que sea un ordenador, será poco
más que chatarra dentro de un año.
Significados básicos y correspondencias en el ser humano:
El Maestro interior. Lo individual, como polaridad opuesta a
lo social. Aceptación o búsqueda de la soledad. La prudencia.

220 VILL/\RRUBIA / HAUT / MILLERA


La autosuficiencia. La búsqueda del médico interno. Las rela-
ciones con los varones de la misma edad y/ o generación, consi-
derando como tales a los que tienen demasiados años para ser
hijos nuestros, y demasiado pocos para ser nuestros padres: en
general, la edad propia + / - 10 años. El hígado y la vesícula bi-
liar, la mano y el brazo derechos, el lado derecho del pecho, in-
cluido el seno derecho en las mujeres (de frente). Las vértebras
dorsales, sobre todo las centrales (de perfil).
Problemas en caso de bloqueo: búsqueda continua de compañía,
aun a costa de prescindir de la expresión y el contacto amoroso;
miedo a quedarse solos: en bastantes ocasiones, las víctimas de
la llamada «violencia doméstica» o «de género» (malos tratos,
en definitiva) aguantan situaciones que les llevan incluso a la
muerte ante este miedo, consecuencia del bloqueo del sende-
ro. En otras ocasiones, el bloqueo produce el efecto contrario,
conduciendo a la introversión excesiva y al aislamiento social.
Rechazo a la medicina. Problemas económicos. Cuando el blo-
queo es muy fuerte puede producir personas ruines, avaras y
«oscuras», que emplean su saber y los medios a su disposición
de forma egoísta.
Posibles problemas de salud: enfermedades del hígado, hepatitis,
cirrosis en los casos más extremos. Diabetes. Problemas en las
vértebras dorsales superiores. problemas y lesiones en la mano
derecha.

3.6.11. Sendero 10. La Rueda de la Fortuna. De fesed a Netzaj

Letra hebrea: iod, ~


Letra simple.
Significados: origen / padre / mano cerrada.
Tipo de sendero: de influencia de la Mente sobre la Personalidad.
Colores del sendero:
Atzilut: Violeta.
Briah: Azul.
Yetzirah: Púrpura rico . .
Assiyah: Azul brillante rayado de amarillo.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 221


Estudio del sendero.
• Dirección. El sendero 10 tiene su dirección descendente, indican-
do que Jesed ejerce su influjo sobre Netzaj, pero no lo contrario.
Pues, si Jesed es el mundo de los sentimientos, Netzaj tiene que
ver con todo el mundo emocional; y entre ambos niveles hay
una diferencia esencial, que el propio sentido de las palabras
pone de manifiesto: el sentimiento implica que la consciencia de
lo que sucede está presente, mientras que la emoción pone, por
decirlo así, una nube ante los ojos que impide ver con claridad.
No importa si la nube es gris, blanca, negra, rosa o verde, el he-
cho es que impide ver, pues e-movere es una expresión latina que
significa «mover hacia fuera», sacar del centro, descentrar. Las
propias características del senderd son, como veremos de inme-
diato, proclives a presentar estímulos para enseñar a dominar
este descentramiento.
• Análisis cabalístico. La diferencia de valores numéricos entre
las esferas que une (148 - 72 = 76) proporciona dos conceptos in-
teresantes: ',i"T~~ (mibhal), separación, distinción, división, pues
es en este sendero en el que, al transformarse el sentimiento en
emoción, aparece el aspecto separativo a nivel anímico; y ,~V
('ábad), trabajar, y también servir, adorar, que es la función in-
versa (respecto a la anterior) de este sendero, proporcionar los
medios para recuperar la consciencia que se nubló mediante la
emoción. Al ser un sendero de dirección descendente, se nos
indica, por tanto, que su función es llevar la consciencia a los
niveles inferiores. Por otra parte, el primero de los conceptos in-
dicados tiene, según podemos observar, tres de sus cuatro letras
comunes con i"T~~¡, (kabbalah), recepción, tradición y también
la Kabbalah; estas tres letras forman las palabras ~~i"T (hevel),
aliento, y ~i"T~ (lahab), llama, tal como vimos en la primera parte
de esta obra; las diferentes letras forman, según se ordenen, las
palabras e¡, (kam), levantarse, despertar, y también volver, lo
que indicaría un sentido ascendente, y ¡,~ (mak), podredumbre,
putrefacción, en sentido contrario, aunque también puede in-
dicar la renovación y la curación, tal como vemos en los párra-
fos siguientes. Por tanto, la operación de llevar la consciencia a
los niveles inferiores, correctamente desarrollada, pretende un

222 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


despertar de estos niveles, pero en caso contrario producirá su
disolución, la desintegración en sus partes componentes. En lo
que se refiere a la comparación entre las esferas que une, Jesed
y Netzaj, la letra común a ambas, n (jet), nos habla de la vida, y
con las restantes podemos hacer un interesante ejercicio. Para
ello colocamos las letras en su posición natural, las de Jesed so-
bre las de Netzaj, tras eliminar la M (fig. 22).

Figura 22
Las letras sobrantes de Jesed y Netzaj, y sus conexiones

Leyendo las letras en el sentido alternativo que marcan las


flechas aparecen cuatro palabras que ilustran sobre el significa-
do del sendero:
¡o (sen), grapa, la pequeña pieza metálica que mantiene uni-
das las páginas de un escrito.
CJ (nes), milagro, algo aparentemente maravilloso, sucedido
gracias a la intervención de fuerzas celestiales, o al me-
nos suprahumanas.
y, (datz), alegrarse, regocijarse, significado obvio que no
precisa de mayor comentario.
,~ (tzad), cazar, y también adversario, lo que sugiere vigi-
lancia, atención y algo que debe hacerse procurando la
sorpresa.
¿No nos habla todo ello de un universo en constante cambio,
que exige permanecer en estado de alerta, proporcionando la
alegría de los nuevos acontecimientos que vamos capturando,
que nos llegan como un milagro de la vida y nos mantienen uni-
dos a nosotros mismos? Recordemos que la grapa, como cual-
quier otro sistema de encuadernación o unión de documentos,
es un sistema para mantener la unidad en la multiplicidad.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 223


• Sefer Yetzirah. La acción, la mano izquierda en el cuerpo huma-
no, el signo de Virgo en el cielo y el mes de Elul, correspondien-
te a agosto-septiembre, en el calendario hebreo.
• Nombre hebreo del Arcano del tarot. Rueda de la Fortuna
responde en hebreo a la expresión ,,~n ',),)
(galga[ ha-maza[),
con un valor numérico de 148, que proporciona varias pala-
bras de significado en línea con el del sendero: j1~.!l (bitzón),
curación por el barro, la terapia conocida desde la antigüedad,
que en sentido simbólico apunta a lo informe (lo sin forma) del
futuro, y que, a semejanza del barro, limpiará y vitalizará, y
en consonancia con el concepto anterior de putrefacción; n~¡,,
(lakiáj), combustible, inflamable, pues es a través de este sen-
dero que penetra la energía en e1 Árbol desde el campo exter-
no personal (fig. 11); y jM v,,~
(iodeá jen), cabalista, conocedor
de las ciencias ocultas, a través de las cuales lo desconocido
se hace conocimiento, y confirmando así la comparación con
la sabiduría secreta que hacíamos dos párrafos más arriba: de
esta forma, la Kabbalah se muestra verdaderamente como una
ciencia del futuro.
Significados básicos y correspondencias en el ser humano:
El cambio que viene del entorno. La movilidad. Lo nuevo. La an-
ticipación. El futuro. Los viajes. El conocimiento a través de la
Kabbalah. El costado, la mano y el riñón derechos (de frente).
Los riñones y las glándulas suprarrenales (de perfil).
Problemas en caso de bloqueo: movimientos desordenados, afán
excesivo de novedades y soluciones milagrosas, de tipo «ciencia
ficción». Miedo al futuro; miedo a desear; letargo; incapacidad
para rematar tareas iniciadas, como consecuencia del aporte de
nuevas ideas que provocan el desinterés respecto a las antiguas;
miedo a viajar.
Posibles problemas de salud: hígado, riñones, sobre todo el de-
recho, vesícula biliar, zona lumbar. Las caderas, como conse-
cuencia de no haberse movido a tiempo, cuando correspondía,
lo que acaba provocando malformaciones.
Información adicional: El Sendero 10 atraviesa la barrera del Velo
del Templo, lo que indica que es uno de los medios para tras-
cender la Individualidad. Vivir lo nuevo, lo desconocido, es,

224 Vil.l.ARRUBIA / HAUT / MI LLERA


por tanto, una de las formas de conseguirlo. Y la Kabbalah pue-
de ayudar a alcanzarlo.

3. 6. 12. Sendero 11. La Fuerza. De Cuevurah a Tiferet

Letra hebrea: caf, ~


Letra doble. Tiene la forma final ,.
Significados: cáliz, copa / mano abierta.
Tipo de sendero: estructural de la Mente o Individualidad.
Colores del sendero:
Atzilut: Verde esmeralda.
Briah: Azul.
Yetzirah: Azul-verde profundo.
Assiyah: Verde pálido.
Estudio del sendero.
• Dirección. El sendero 11, como los demás estructurales de la
individualidad es de doble dirección abierta en todo momento.
En este caso, el sendero corresponde a la virtud de la Fortale-
za (ver antes, sendero 9). Forma parte de la «copa» receptora
que es la mente, remitiéndonos al estudio de las Tríadas, en que
se desarrolla este punto con más detalle. La doble dirección
indica que Guevurah y Tiferet están interactuando entre sí en
todo momento, al igual que sucede entre Tiferet y Jesed y en-
tre Guevurah y Jesed. En otras palabras, hay en todo momento
una tensión de las sefirot mencionadas, consideradas dos a dos;
o mejor sería decir una polaridad que las mantiene actuando
todo el tiempo. Por eso, la mente es sobre todo y ante todo ten-
sión, pues supone la aparición de una membrana, una frontera,
dentro de la cual aparece el Yo, quedando el No-Yo fuera de ella.
Y ello implica necesariamente un peligro, al menos potencial,
puesto que la desaparición de esa membrana es la desaparición
del Yo; por eso, la Individualidad también significa la aparición
del deseo y del miedo: de vencer a ese enemigo potencial que
el Yo intuye en el No-Yo, y de miedo a ser vencido por él. Por
eso no es extraño que sea el Arcano de La Fuerza la que apunte
desde el centro de la Individualidad de Tiferet al exterior social

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 225


a través del guerrero que hay en Guevurah, el cual es el encar-
gado, entre otras cosas, de defender el preciado tesoro, el Yo;
pero, al tratarse de un sendero de doble dirección, también es
la vía por la que penetran los ataques procedentes del exterior,
o al menos, lo que el sujeto vive como ataques.
• Análisis cabalístico. La diferencia de valores numéricos entre
las esferas que une (1081 - 216 = 865) nos permite encontrar un
concepto plenamente en línea con lo expuesto en el párrafo an-
terior: ri,,~~r,¡¡ (hitlakdut), coherencia, precisamente la función
de este sendero, proporcionársela al Yo para evitar su disgre-
gación. Al comparar las letras de ambas esferas, comprobamos
que, dejando de lado las letras serviles (la ii y la, de Guevurah
y las dos Mri de Tiferet), se pueden- formar palabras que, todas
ellas, nos hablan de este «efecto frontera» que el sendero trata
de paliar. El diagrama de la figura 23 muestra la selección de las
letras, dejando aparte las serviles y la letra coincidente.

Figura 23
Las letras sobrantes de Guevurah y Tiferet, excluidas
las auxiliares o serviles, y la repetida,,

Así, nos encontramos con la referencia a la propia frontera,


cp (gaf), extremidad, borde, y también con el significado de ta-
par, poner corchos, esto es, una alusión a la tarea de impedir
que la frontera se perfore y vacíe su contenido en el temido No-
Yo. Pues, si eso sucediese, el Yo se desvanecería, se volatiliza-
ría, ~~ (pag). Pero este sector del Árbol de la Vida está todavía
muy próximo a la Unidad; por eso, cuando la amenaza se siente
próxima, queda memoria del origen, y entonces el Padre, ~~
(ab) viene,~~ (ba) en ayuda del Yo en apuros.
• Sefer Yetzirah. La vida y su opuesta la muerte, el ojo izquierdo en el
cuerpo humano, Venus en el cielo y el día miércoles en la semana.

2 26 VILLA RRUBIA / H AUT / MILLERA


• Nombre hebreo del Arcano del tarot. Hay varias acepciones he-
breas para fuerza, por lo que optamos por la más conocida, que
ya aparece en el pasaje de Zacarías recogido antes en la sección
correspondiente al Sendero 8. Nos referimos a M~ (koáj), cuyo va-
lor, 28, remacha lo expuesto en los párrafos anteriores. En efec-
to, con dicho valor numérico encontramos ,~n~;, (heohid), unir,
unificar, la función de la «frontera» respecto a lo que contiene
en su interior; o ,,n~
(yihud), que significa tanto designación o
fijación como separación o aislamiento, conceptos todos ellos
de clara referencia a la consolidación del Yo y a su separación
respecto al Espíritu.
Significados básicos y correspondencias en el ser humano: Lo
social, como par polar opuesto a lo individual. La fortaleza.
El autodominio. La sociabilidad2 • La defensa y el mantenimien-
to del Yo, de la individualidad, frente a las fuerzas irracionales.
Las relaciones con mujeres de la misma generación, conside-
rando como tales a las que por su edad, no pueden ser ni ma-
dres ni hijas nuestras (en general, la edad presente+ /-10 años).
El instinto de superación. La capacidad de conocer los propios
límites y aceptarlos. El páncreas y el bazo, la mano, el antebrazo
y el lado izquierdo del pecho, incluido el seno izquierdo en la
mujer, el sistema de defensas orgánico (de frente). El corazón, el
pecho, incluidos los senos en las mujeres (de perfil).
Problemas en caso de bloqueo: debilidad; violencia, a veces
acompañada de crueldad; exagerado instinto de lucha. Según
los casos, necesidad compulsiva de relacionarse con otros,
o bien rechazo a las relaciones sociales. Afán de asimilar en ex-
ceso que lleva finalmente a la saturación, o bien rechazo a crecer
(«síndrome de Peter Pan»). Según que el sendero aparezca bien
o mal aspectado (cargas normales o especiales, ver III y IV par-
tes), la fuerza vital tenderá a utilizarse bien o mal. En ocasiones,
pacifismo exagerado, que puede conducir a colocar al sujeto en
2
Autodominio y sociabilidad son los dos aspectos, interno y externo respecti-
vamente, del carácter transpersonal del sendero, que hace que veamos al otro
como un aspecto de nosotros mismos. Recordemos que este sendero es el último
(en sentido descendente) que enlaza Tiferet, sede del Yo, con el primer punto en
el que lo social transpersonal se manifiesta, que es Guevurah.

MAN UAL OE K ABBALAH PRÁCTICA 22 7


situaciones en las que será humillado, provocando a la larga
rechazo social.
Posibles problemas de salud: los relacionados con bazo y pán-
creas (diabetes); anemias; problemas con glóbulos blancos, has-
ta llegar a la leucemia; manos; digestiones lentas y pesadas.

3.6. 73. Sendero 72. El Colgado. De Cuevurah a Hod

Letra hebrea: lámed, ~


Letra simple.
Significados: corazón / movimiento / látigo.
Tipo de sendero: de influencia de la Mente sobre la Personalidad.
Colores del sendero:
Atzilut: Azul profundo.
Briah: Verde mar.
Yetzirah: Verde oliva profundo.
Assiyah: Blanco moteado de púrpura.
Estudio del sendero.
• Dirección. El sendero 12 es de dirección descendente desde Gue-
vurah, lo mismo que sucede con el 10, al ser ambos de influen-
cia de la mente sobre la personalidad. Es un sendero fronterizo
con el mundo social, y actúa a nivel personal, y no transperso-
nal, como ocurría con el Sendero 7. Quiere ello decir que hay
una tendencia a enviar los estímulos llegados del exterior desde
Guevurah a Hod, que es la esfera encargada de evaluar la utili-
dad o el posible perjuicio que aquel estímulo va a originar en la
imagen que el Yo hace de sí mismo, esto es, en el Ego. Se trata
por tanto de un sendero de tipo eminentemente conservador,
a diferencia del 10, que es innovador, por lo que su tendencia al
inmovilismo queda plasmada en el Arcano XII, El Colgado, que
se encuentra inmovilizado y sin posibilidad de actuar.
• Análisis cabalístico. La diferencia de valores numéricos entre
las esferas que une (216 - 15 = 201) proporciona un concepto cier-
tamente curioso, v:i:r.:N (emtzáh), medio, centro o mitad, que, si lo
relacionamos con la postura de El Colgado, sugiere de inmedia-
to esa inmovilidad a que aludíamos: no es ni frío ni caliente, por

22 8 V1LLARRUBIA / H AUT / MIi.LERA


lo que las palabras del Libro del Apocalipsis (3:15-16) pueden
serle, si esa actitud se hace patológica, de plena aplicación: «Co-
nozco bien tus obras, que ni eres frío, ni caliente. ¡Ojalá fueras
frío, o caliente! Mas por cuanto eres tibio, y no frío, ni caliente,
estoy para vomitarte de mi boca». El sendero cumple, de todas
formas, una función necesaria, cual es la de llevar las influencias
mentales al área de la personalidad, por lo que el posible proble-
ma no es que su carácter sea eminentemente conservador, sino
que no esté equilibrado respecto al sendero 10, su opuesto polar.
• Sefer Yetzirah. El coito, la vesícula biliar, el signo de Libra en
el cielo y el mes de Tishré, equivalente a septiembre-octubre, en el
calendario hebreo.
• Nombre hebreo del Arcano del tarot. La palabra para designar
a un colgado, a un ajusticiado, es ~,i,,n (talui), con el mismo valor
numérico, 446, que M"IO (mavet), muerte, en clara alusión a la in-
movilidad (los muertos no se mueven). Pero hay otras palabras
que aclaran y completan este sentido. Así, con 446 encontramos
n',o ,~ ,,~ (bul shel meláj), grano de sal, para dar sabor a las comi-
das, o lo que es lo mismo, a la vida, y también conservador de los
alimentos; C,~)~ (yanshuj), buho, símbolo de la sabiduría en la anti-
gua Grecia;,~ (maror), apio o hierba amarga, verdura usada en la
festividad de Pésaj, la Pascua judía; o j~~, Pisón, uno de los cuatro
ríos que circundaba el Paraíso, y que ya nos habíamos encontra-
do anteriormente. Así pues, la inmovilidad tiene una vertiente con
aspectos muy positivos, vertiente que es la verdadera esencia del
sendero, y que se deducen de los conceptos anteriores. Entre ellos
queremos destacar el aspecto sagrado y sacramental de los aspectos
amargos de la vida, así como su carácter de fuente de sabiduría.
Significados básicos y correspondencias en el ser humano:
La inmovilidad, la quietud. La paralización. La entrega. La ca-
pacidad de sacrificio. Lo antiguo. El pasado. La reconciliación
con el propio pasado. La capacidad de dar un giro, de modi-
ficar las estructuras heredadas. El riñón, la mano y el costado
izquierdos (de frente). El abdomen (de perfil).
Problemas en caso de bloqueo: Tendencia a creerse estancado en
la vida. Melancolía tristeza. Propensión a quedar enganchado al
pasado, o al contrario, rechazo a examinarlo.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 229


Posibles problemas de salud: Intestinos, sobre todo el grueso,
problemas digestivos, aerofagias, acumulación intestinal de ga-
ses; vómitos. Problemas de gestación en la mujer, cesáreas. Ri-
ñón izquierdo y bazo. Inmovilidad en alguna parte del cuerpo,
parálisis; o al contrario, propensión a accidentes por exceso de
velocidad en los movimientos. Mano y costado izquierdos.
Información adicional: Es el otro sendero que permite trascender
la Individualidad, tal como lo indica su trayectoria que atravie-
sa el Velo del Templo. Las cualidades señaladas por los signifi-
cados del sendero son la clave para conseguirlo.

3.6.14. Sendero 13
Conocido como La Muerte, aunque en realidad sin nombre
De Tiferet a Netzaj

Letra hebrea: mem, ~


Letra madre. Tiene la forma final l:l.
Significados: agua / madre / nacimiento.
Tipo de sendero: de vínculo entre la Mente y la Personalidad.
Colores del sendero:
Atzilut: Azul verdoso.
Briah: Marrón oscuro.
Yetzirah: Marrón muy oscuro.
Assiyah: Cárdeno (entre marrón, añil y gris claro).
Estudio del sendero.
• Dirección. Es uno de los cinco senderos de dirección alterna-
tiva o intermitente, esto es, la dirección puede ser ascendente
de Netzaj a Tiferet o descendente en sentido inverso, pero no
ambas cosas a la vez. Al simbolizar el olvido y el perdón, resulta
claro que no se está todo el tiempo olvidando ni perdonando,
y que en los intervalos el Yo Superior, en su centro de Tiferet,
actúa sobre el centro emocional de Netzaj. El olvido y el perdón
representarían el sentido ascendente, mientras que la actuación
de Tiferet marcaría el sentido descendente. Es esta actuación o
sentido descendente el que permite superar la Noche Oscura
del alma en el aspecto emocional, las tormentas de emociones

230 V!LLARRUB!A / H AU T / M!LLERA


que, como furiosos huracanes, nos zarandean y bambolean sin
misericordia; sólo abriéndose a lo Superior, que en este caso se
manifiesta a través de Tiferet, es posible pasarlo. Por eso, uno
de los nombres divinos asignados a Tiferet es Yehova Eloah be-
Daat, Dios Manifestado en la Esfera del Conocimiento, o, lo que
es lo mismo, de la Mente. Es, por otra parte, interesante analizar
cabalísticamente la palabra hebrea correspondiente a perdón,
i'Trt~~c (slijá): contiene, en efecto, a ~~ (li), para mí; ~n (jai), vivien-
te, y también un nombre de Dios con este mismo significado;
~i! (hel), luz, claridad; i"T~ (Yah), un nombre de Dios asociado a
la 2/ sefirá Jokmah, lo que indica a la vez la doble polaridad
masculina y femenina, y su aspecto sumamente energético; ~CM
(jasal), asunto concluido, punto final; y ~e (sel), cesto, canasto,
recipiente que deja ir los líquidos (asociados a las emociones)
y retiene lo sólido (eso serían los hechos objetivos, sin ninguna
connotación de bueno o malo). Pues bien: todo ello muestra las
condiciones inherentes al verdadero perdón, sin las cuales no
hay tal. El sendero 13 es el primero por debajo de Tiferet, y por
tanto en él comienza lo subjetivamente individual. Por ello, es
lógico que los aspectos transpersonales que se manifestaban en
el sendero 11 se olviden al llegar al 13 (por eso, este sendero
representa también el olvido), y así el perdón se hace necesario,
no para el otro, sino para uno mismo. Ver en este sentido VI
Parte, cap. 8, nota 6, acerca del perdón.
• Análisis cabalístico. La diferencia de valores numéricos entre las
esferas que une (1081 - 148 = 933) proporciona de forma directa
.ni,¡,~ iiN (ar ika.rot), luz agradable, y eso es justamente el sendero,
puesto que lleva la luz del centro erístico del Árbol (o, lo que es lo
mismo, la luz del Redentor, del Libertador) a un centro proclive a
oscurecerse en su mar de emociones. Además, el número 933 pro-
porciona de forma indirecta otros conceptos. Llamamos forma in-
directa a la guematria obtenida asignando a las letras finales que
cambian de forma su valor «alto» (ver sección I, 3.1.). De esta for-
ma obtenemos i!ii!~ ¡i,N (arón Adonaí), el Arca de la Alianza, que
permitía la comunicación del pueblo judío con Dios (¿no es eso
lo que hace precisamente el Sendero 13?); ¡i,~, (zika.rón), recuer-
do, memoria, lo que nos da la sorprendente información de que

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 231


el olvido y el perdón son la forma de recordar; o ~i't'n ii:in (jituj
ha-zahab), la proporción áurea, fundamental en la estructura del
universo, tanto macrocósmico como microcósmico. Como vere-
mos en la V Parte, esta proporción, cuyo valor es 0,6180339887...,
se encuentra en el cuerpo humano y en el tiempo que dura su
período de gestación, y la utilizaremos para iniciar la búsqueda
del tikún individual; pero no adelantemos acontecimientos, nos
limitaremos de momento a decir que la aparición de este concep-
to en el sendero 13 nos habla de una especie de muerte iniciática,
sin la cual la investigación del tikún no es posible. Por su parte,
la comparación de letras entre las de Netzaj y las raíces de Tiferet
proporciona ideas adicionales de sumo interés:
a) Las primeras letras respectivas de cada raíz, ~ y .E), forman
i:p (naj), vaciado, derramado; y j.E) (pan), dudar, vacilar.
La energía, a semejanza de un riego por aspersión, se di-
vide en múltiples individualidades que, pese a conser-
var todavía el recuerdo de la unidad recién abandonada,
vacilan ante la inminente caída en la densidad.
b) Las segundas letras, =:at y N, forman N=:at (tzé), sal, fuera,
que puede interpretarse como el mensaje hormonal que
la madre transmite al feto cuando llega la hora del par-
to; y también }'N (atz), apurar, correr, así como estrecho,
angosto: la individualidad se dispone a nacer, revistién-
dose de formas.
c) Por último, las terceras letras, n y ,, forman ,n (jor),
hoyo, hueco, y también ministro, noble, lo que concuer-
da asombrosamente con la 2.ª sura del Corán, en la que
vemos cómo Allah pone a Adam en la tierra como Su
vicario, Su enviado (Corán II: 28ss.)
• Sefer Yetzirah. El agua, lo frío, el vientre.
• Nombre hebreo del Arcano del tarot. Al no llevar nombre este
Arcano, se le viene llamando La Muerte; pero en realidad se
trata de un ser, aunque esquelético, bien vivo y activo. Como ya
se indicó, en muchas tradiciones el no tener nombre significa no
existir, por lo que, en realidad, la ausencia de nombre nos está
diciendo algo que Antonio Blay repitió hasta la saciedad en sus
cursos: la muerte no existe.

232 V,u. ARRUBIA / HAuT / MIi.LERA


Significados básicos y correspondencias en el ser humano: El olvido.
El perdón de las ofensas, y sobre todo el perdón de sí mismo. La «no-
che oscura» del alma en los aspectos emocionales. La aceptación de
las tormentas emocionales. El desprendimiento. El amor humano y
el amor erístico. Las relaciones con los hijos y con los descendientes
varones en general, así como con aquellos que por su edad podrían
ser nuestros hijos. La región lumbar y el intestino ciego (de frente).
Las vértebras lumbares y el nervio ciático (de perfil).
Problemas en caso de bloqueo: Autocrítica, odio, ira, represión de las
emociones, que acaban por desencadenarse de forma destructiva.
Exceso de aguante, bajo la creencia de ser merecedor de ello, y sen-
timientos de culpabilidad tras el estallido. En los casos extremos,
tendencia a robos y asesinatos: en efecto, este sendero forma parte
de la Tríada de la Memoria, cuyos vértices son las sefirot 6.ª, 7.ª y
8.ª y está, por tanto unido a Tiferet y opuesto a Hod. Pero estas dos
esferas se relacionan a su vez con los mandamientos 6.º y 8.º del
Decálogo (5.º y 7.º según la Iglesia Católica), «No matarás» y «No
robarás», respectivamente (ver referencias bibliográficas, J. Villarru-
bia, «El Decálogo a la luz de la Kabbalah»).
Posibles problemas de salud: artrosis, problemas en zona lumbar,
cadera y rodilla derechas, riñón derecho.

3. 6. 15. Sendero 74. Templanza. De Tiferet a Yesod

Letra hebrea: nun, J


Letra simple. Tiene la forma final¡.
Significados: p ercepción / pez.
Tipo de sendero: de vínculo entre la Mente y la Personalidad.
Colores del sendero:
Atzilut: Azul
Briah: Amarillo.
Yetzirah: Verde.
Assiyah: Azul oscuro muy vivo.
Estudio del sendero
• Dirección. Pertenece al Sendero de la Flech a, por lo que es de do-
ble dirección y perrhanen temente abierto. Es el principal vínculo

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 2 33


entre la Individualidad y la Personalidad, y su cualidad principal
es la flexibilidad y la adaptabilidad a todas las situaciones.
• Análisis cabalístico. La diferencia de valores numéricos entre
las esferas que une (1081 - 80 = 1001) aporta de forma directa
c~~w Mt\.,~ (irat shamayim), devoción, en perfecta concordancia con
el significado del sendero, que prepara para asumir la Noche Os-
cura del Alma en el aspecto devocional. Esta Noche Oscura aparece
cuando nos falla alguien en quien habíamos puesto toda nuestra
confianza. Confianza (ir'\', kevayah) aportada por la diferencia de
valores numéricos, 121, entre la raíz de Ttleret (i~.a,) y el nombre
completo deYesod, pero restando dos veces el valor de esta última
(281 - 80 - 80) pues la confianza debe jugar en las dos direcciones,
hacia arriba y hacia abajo, de inferior·a superior y viceversa.
• Sefer Yetzirah. El olfato, el intestino, el signo de Scorpio y el
mes hebreo de Jehván (también llamado Marjeshván), que co-
rresponde a octubre-noviembre.
• Nombre hebreo del Arcano del tarot. La palabra para Templan-
za es ri,~~m (metinut), con valor numérico 906, en el que no en-
contramos otras que sean significativas. Sin embargo, de forma
indirecta (esto es, computando las letras finales que cambian de
forma, o sofitot, por su valor alto), aparecen e,,¡, (krum), mem-
brana, piel, la que en sentido figurado recubre el ego para ais-
larse del entorno, y iiri (tivej), mediar, intermediar, papel que
corresponde a este sendero.
Significados básicos y correspondencias en el ser humano: Templan-
za. Flexibilidad. Alejarse de los extremismos. Ponderación. Adapta-
bilidad. La aceptación de la ambigüedad. La «noche oscura» en su
aspecto devocional: aceptación de «los fallos del otro». La capaci-
dad del «salto cuántico», de trascender la personalidad para alcan-
zar la conciencia pura de individualidad. El orgullo, en caso de so-
brecarga. La vista de frente relaciona este sendero con el estómago,
la próstata en los varones y el útero en las mujeres; igualmente, el
punto hara y el ombligo. De perfil, la cintura y el duodeno.
Problemas en caso de bloqueo: Tendencia al exhibicionismo, como
consecuencia de la búsqueda de la pureza del niño, lo que lleva al
sujeto a confundirla con la desnudez y la consiguiente exhibición
corporal. Búsqueda compulsiva de maestros y gurús. Tristeza,

234 VILLARRUHIA / HAUT / MILLERA


exceso de sensibilidad, incapacidad de mostrar sus propios de-
fectos, que el sujeto interpreta como ignorancia. Miedos origina-
dos por la ignorancia, lo que provoca sufrimientos hmecesarios.
El sujeto tiende a expresarse de forma cambiante, impredecible.
Necesidad de ser valorados y destacar por algo especial. El exhi-
bicionismo se muestra en ocasiones como mediumnidad públi-
ca, como espectáculo, por el afán de llamar la atención. Miedo al
nacimiento y a la muerte. Susceptibilidad. Tendencia a idealizar.
Tendencia a la decepción y la apatía. Tozudez, inflexibilidad, ex-
tremismo egoísta. En ocasiones, el sujeto busca inconscientemente
ponerse en situaciones en las que será objeto de violación. Exceso
de confianza en los demás, sin ver su posibles malas intenciones,
o al contrario, desconfianza extrema, con juicios erróneos hacia el
otro. Adaptación excesiva, camaleonismo, que, cuando se combina
con un sendero 7 también bloqueado puede originar el clásico
trepa que se encuentra en muchas organizaciones. Tendencia a so-
matizar los problemas de los demás, viviéndolos como propios.
Posibles problemas de salud: próstata; útero; aparato urinario; in-
fecciones genitales. Estómago. Vértebras lumbares; coccix. En el
nacimiento, problemas con el cordón umbilical.

3.6.16. Sendero 15. El Diablo. De Tiferet a Hod

Letra hebrea: samaj, C


Letra simple.
Significados: secreto / base, fundamento / ourobouros (serpiente
que muerde su cola).
Tipo de sendero: de vínculo entre la Mente y la Personalidad.
Colores del sendero:
Atzilut: Índigo (añil).
Briah: Negro.
Yetzirah: Azul negruzco.
Assiyah: Gris frío muy oscuro.
Estudio del sendero.
• Dirección. Sendero descendente, de Tiferet a Hod. Mientras la
Mente o Individualidad puede controlar los contenidos y las
funciones del centro de la mente concreta, no ocurre lo mismo a

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 235


la inversa. En cierto modo, los aspectos mentales de Hod, aun-
que expresión de los contenidos energéticos de Netzaj, se hallan
disociados de éstos, mientras que en Tiferet hay una integración
perfecta mente-sentimiento.
• Análisis cabalístico. No encontramos aspectos significativos alana-
lizar la diferencia de valores numéricos entre las esferas que une
(1081 - 15 = 1066), aunque sí en el estudio comparativo de sus letras
raíces. Hacemos notar, por otra parte, que, mientras las tres esferas
del Pilar de la Misericordia tienen en sus nombres la letra jet (M), las
tres del Pilar de la Severidad contienen la letra he (M, que también
aparece en Jokmah), de forma casi igual a la anterior, excepto por la
pequeña abertura en la parte superior de la pata izquierda de esta
última (fig. 24). Si observamos los nombres hebreos de las sefirot
de ambos pilares laterales, podemos constatar que las tres letras jet
de la columna derecha tienen una posición simétrica de las tres le-
tras he de la columna izquierda (fig. 25), lo que da origen a la forma
«griálica» del Árbol, como veremos más adelante.

if n
Figura 24
Comparación de formas entre la he y la jet

Según esto, Hod es una esfera en la que, una vez que recibe la
influencia de Tiferet a través del Sendero 15, la letra he, uno de
cuyos significados es «apertura», pasa al principio de la palabra,
de la misma forma que en el Sendero 13, y por el mismo influjo
de Tiferet sobre Netzaj, es la letra jet la que pasa a final de palabra.
Allí era la vida la finalidad, aquí es la apertura el comienzo. Es
Tiferet quien controla lo que Hod va a utilizar y lo que no, y por
eso el Sendero 15 se relaciona con la memoria. Una forma de com-
probarlo es analizar las letras raíces de ambas esferas, por parejas:
la boca, representada por la pe, ~, se abre en la he, l"'T; el Absoluto,
álef, ~, se humaniza en la vav, ,, y como consecuencia, la cabeza,
resh, ,, toma contacto con las palabras y las cosas, cuya letra es en
ambos casos la dálet, ,.

236 VILL ARRUBIA / H A UT / MILLERA


• Sefer Yetzirah. El sueño, el estómago, el signo de Sagitario y el
mes hebreo de Kislev, correspondiente a noviembre-diciembre.
Nombre hebreo del Arcano del tarot. La palabra hebrea más conocida
para diablo es jtQW (Satán), con valor numérico 359, en la que tam-
bién hemos encontrado la expresión·t5~W .::~~ (kojab shevet), cometa.
¿Quizá por eso han tenido siempre los cometas fama de anunciado-
res de desgracias? Dejando aparte este aspecto, que consideramos
anecdótico, encontramos también j~\'-'l"I ,,.::~ (tahur ha-afán), cubo
de la meda, que no se mueve pero permite el movimiento de aqué-
lla, y también la expresión ~ w~N (ish jail), héroe, valiente. Y esto
merece una explicación. En efecto, hasta llegar a Tiferet, la energía
adopta en su descenso formas diferentes, se reviste de atributos di-
versos, pero es, y esto resulta lo más importante, una. Sin embargo,
a partir de ahí, lo que era uno se hace múltiple, y olvida (no del
todo, pero casi) su esencia divina; pese a lo cual sigue descendien-
do en proceso de progresiva densificación. El héroe representa esta
actitud de bajar deliberadamente a lo oscuro, abandonando su ver-
dadera naturaleza.
Significados básicos y correspondencias en el ser humano: El sub-
consciente. La memoria, especialmente de las experiencias desagra-
dables. La «noche oscura» en su aspecto mental: aceptación de la
propia confusión. Las relaciones con las hijas y con las descendien-
tes femeninas en general, así como con las mujeres cuya edad posi-
bilitaría que fuesen nuestras hijas. El intestino grueso, de frente y de
perfil. Obsérvese que este sendero pertenece a la familia del 6 (ver
más adelante, III Parte), puesto que sus cifras, 1 + 5, suman 6. Y este
último se corresponde con los pulmones, los cuales en la medicina
china, tienen una íntima conexión con el intestino grueso.
Problemas en caso de bloqueo: Sensación de «ser malo», oscuro,
o necesidad de serlo efectivamente. Sentimientos de creerse
loco. Miedos, psiquismo oscuro. Atracción hacia sitios oscuros,
grutas. Confusión mental. Naturaleza destructiva y rebelde
ante normas establecidas: en realidad es la búsqueda de rup-
tura de las viejas creencias que le limitan. Atracción o rechazo
por lo diabólico (nunca indiferencia), lo que es en el fondo una
necesidad de comprender el lado oscuro de la vida. Miedo a las
«magias», y consiguiente creencia excesiva en ellas. Ignorancia.

MANUAL DE KA13BALAH PRÁCTICA 23 7


Posibles problemas de salud: intestino grueso, estómago. Cáncer
(gestación de algo oscuro). Enfermedades mentales; pérdida
de memoria, demencia senil, mal de Alzheimer, esquizofrenia;
desorientación, despiste. La enfermedad mental puede ser vista
por otros como una forma de posesión.

Figura 25

Las sefirot del Árbol de la Vida con sus nombres hebreos, formando el Grial.
Aparecen en mayor tamaño las letras jet del Pilar de la Misericordia, y las letras
he del Pilar de la Severidad, para apreciar mejor la simetría de ambos grupos,
los cuales, además, aparecen unidos por sendas líneas que confluyen en Yesod
y se apoyan en Maljut, formando una especie de copa o cáliz, un «Grial» cuyo
contenido es Tiferet y cuya santidad procede de Keter. La superficie del «vino» que
contiene la copa (señalada por una línea horizontal de mayor grosor) sería Daat,
la sefirá oculta. La santidad de Keter se comprende mejor si se observan las letras
de esta palabra, tui¡, (kodesh): ¡,, la recepción, el acto de estar recibiendo; ,, que
es a la vez palabra, cosa designada y puerta; y tu, consciencia. Santidad es, pues,
la apertura a toda la información, que procede de la Nada, de Ayin Sof.

23 8 VII. LAR RUBI A / HAUT / MI LLERA


3.6.17. Sendero 16. La Torre (La Casa de Dios)
De Netzaj a Hod

Letra hebrea: ayin, V


Letra simple.
Significados: ojo / fuente.
Tipo de sendero: de estructura de la Personalidad.
Colores del sendero:
Atzilut: Escarlata.
Briah: Rojo.
Yetzirah: Rojo Venecia.
Assiyah: Rojo brillante con rayas verde esmeralda y azul claro.
Estudio del sendero.
• Dirección. Sendero cerrado para las piezas negras, que repre-
sentan los niveles inferiores, según la simbología del juego del
ajedrez. Es la Viga de la Personalidad, y une el centro emocio-
nal de Netzaj y el centro mental de Hod. Desde el punto de
vista de la personalidad, los pensamientos y contenidos de la
mente concreta no pueden dejar de estar marcados por todo el
campo energético-emocional, mucho de cuyo contenido, lama-
yoría, es, no sólo inconsciente, sino pre-consciente, puesto que
las formas mentales todavía no han ocupado su lugar. Y si bien
desde los niveles superiores es posible actuar distinguiendo
los aspectos emocionales y mentales, no así desde el nivel de la
personalidad. No olvidemos que esta palabra deriva de persona,
y tiene su origen en el latín del Bajo Imperio Romano, época en
que se aplicaba a las máscaras que los actores se ponían para
salir a escena, para amplificar su voz y ser escuchados desde las
localidades más alejadas del escenario (per sonare, para sonar).
Así, pues, el Sendero 16 es esencialmente el eje de esa máscara
para relacionarnos con los demás, la cual evidentemente no está
viva, por lo que no hay fluidez entre sus polos.
• Análisis cabalístico. Hay varios conceptos derivados de la diferen-
cia de valores numéricos de Netzaj y Hod que aclaran y emiquecen
el sentido de este sendero. Dicha diferencia (148 - 15 = 133) es el
valor numérico de conceptos tales como¡,~~~~ (ke-abik), como un
alambique, puesto que el sendero actúa a semejanza de este arte-

M ANUAL DE K ABBALAH PRÁCTICA 239


facto, pues es el encargado de destilar las energías libres de Net-
zaj y obtener de ellas su esencia para manifestarla en Hod; i,o~ j
~N (eben yesod), primera piedra, piedra fundamental, pues lo es de
la Personalidad; =,~~ (neguef), tropiezo, obstáculo, en línea con uno
de los significados del sendero, cual es la superación de las crisis y
el aprendizaje a través de ellas; y hasta la ausencia de vida pro-
pia de la personalidad viene indicada por el mar Muerto, n,~¡¡ e~
(iarn ha-rnelaj), en este caso en su acepción de «mar de la Sal», por
el alto contenido salino de sus aguas.
• Sefer Yetzirah. La ira, el hígado, el signo de Capricornio y el mes
hebreo de Tevet, correspondiente a diciembre-enero.
Nombre hebreo del Arcano del tarot: La torre recibe en hebreo el
nombre de',,~~ (rnigdal), con un valor numérico de 77. Dentro de
esta palabra encontramos~~ (gal), ola, y e, (darn), sangre, ola de
sangre, la que provoca cada uno de los latidos del corazón, por
lo que este sendero está relacionado con la circulación sanguí-
nea. También aparece,~ (Gad), nombre de uno de los doce hijos
de Jacob, con el significado de buena suerte, y ~, (dag), pescar,
en sentido figurado una de las funciones del sendero, capturar
de Netzaj contenidos para pasarlos a Hod. Por su parte el va-
lor numérico 77 proporciona ¡,i~, (zedón), con intención, adrede,
las motivaciones que son la base del pensamiento y de sus con-
secuencias, la palabra y la acción, y también con el significado de
fogoso, furioso, violento, tal como aparece el rayo en el diseño
del Arcano, derribando las almenas (la protección) de la torre; V'
(za), moverse, trasladarse, en alusión al movimiento de energías
a través del sendero, y también horrorizarse, en consonancia con
su relación con las crisis;~~ (mazal), uno de cuyos significados
es suerte, pero no ya buena, como anteriormente, o mala, sino en
el sentido de destino, algo que escapa al control humano; t,ti',~
(miló), fortaleza, plaza fuerte, que es el verdadero sentido de este
Arcano, aunque en este caso herida por el rayo, tal como lo in-
dica la palabra o~~¡¡ (habis), derrotar. Pero este aspecto violento
del sendero y del Arcano no debe hacernos olvidar la finalidad,
que es la de purificarse, ,,~ (nazaj), y adquirir fuerza, W('az) de
ánimo; por eso, este sendero forma parte de la Tríada del Temple
de Ánimo.

240 V1L1.ARRUBIA / HAUT / MILLERA


Significados básicos y correspondencias en el ser humano: Viga
de la personalidad. La crisis y su superación: eliminación de
la atadura al pasado, del peso de la autoridad y de las defen-
sas inconscientes. La capacidad de aprendizaje, especialmente a
través de medios duros y drásticos, y de romper las estructuras
personales. El fortalecimiento a través de las vicisitudes de la
vida. Lo instintivo. Los intestinos y la circulación sanguínea (de
frente). El intestino delgado (de perfil).
Problemas en caso de bloqueo: Melancolía y depresión. Tenden-
cia a quedar bloqueado en experiencias del pasado. Propensión
a repetir sistemáticamente los mismos errores. Ausencia de una
personalidad concreta, se trata de personas polifacéticas en ex-
ceso, que se pierden en la variedad de sus gustos, expresando
tal variedad como falta de confianza en los ámbitos personal y
laboral. Incapacidad para definirse en aspectos concretos de la
vida. Atracción hacia situaciones que le hagan sentirse culpable.
Propensión a equivocaciones y errores continuos. Tendencia a
imitar la personalidad de otros a quienes se cohsidera como
modelos a seguir, como consecuencia de desconfianza hacia sí
mismo. Atracción sistemática de situaciones de crisis violentas
y/ o dolorosas. Con cierta frecuencia, las personas cuya fecha
de inscripción de su nacimiento en el Registro Civil no coincide
con la fecha real, suelen presentar problemas en este sendero,
lo que indica tendencia a vivir con una «falsa identidad».
Posibles problemas de salud: Composición y circulación de la
sangre; estancamiento de la sangre y de los demás fluidos cor-
porales, con los consiguientes problemas de varices; divertícu-
los intestinales. Caderas; riñones; rodillas. Tendencia a somati-
zar problemas emocionales. Depresiones.

3 .6. 18. Sendero 17. La Estrella. De Netzaj a Yesod

Letra hebrea: pe,~


Letra doble. Tiene la forma final =,
Significados: boca / hombre que se humilla.
Tipo de sendero: de estructura de la Personalidad.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 241


Colores del sendero:
Atzilut: Violeta.
Briah: Azul celeste.
Yetzirah: Malva azulado.
Assiyah: Blanco con un ligero tono purpúreo.
Estudio del sendero.
• Dirección. Sendero de dirección ascendente, desde Yesod a
Netzaj. El centro de fertilidad de Yesod no sólo irradia hacia
abajo, hacia Maljut, sino también hacia arriba. Sabemos la gran
fuerza de la sexualidad y su influencia en todos los ámbitos.
En este caso, y por ceñirnos a lo más obvio, el impulso a la
reproducción influye en Netzaj, coloreando, por decirlo así,
las energías que recoge la 7.ª sefirá desde Tiferet, Jesed y el
campo energético externo, y luego las canaliza, bien hacia Hod,
en cuyo caso adquirirán un aspecto mental, o bien hacia Mal-
jut, vía sendero 18, en cuyo caso se manifestarán directamente
a nivel físico. En este caso, la función del sendero 17 es aportar
savia nueva, procedente de la tierra, a los aspectos energéticos,
renovándolos con nueva información, de la misma forma que
las hojas de un árbol captan la energía solar y el anhídrido
carbónico de la atmósfera, el cual, convenientemente transfor-
mado, terminará formando parte de la estructura vegetal.
• Análisis cabalístico. El valor numérico resultante de la dife-
rencia entre los de los nombres de Netzaj y Yesod proporciona
importantes datos para comprender el significado del sendero.
Pues 68 (= 148 - 80) es ante todo el número de la vida, c~-n (ja-
yím), palabra que, además en contener en su interior el nombre
de Dios ~, lleva también CM (jom), calor, y M~ (moáj), cerebro,
y significa igualmente alimento. También encontramos con va-
lor 68 tM (jin), gracia, hermosura, y~,,, (lulab), rama de palme-
ra, de uso en el ritual de la fiesta judía de Sucot o Tabernáculos,
correspondiente a la recogida de la cosecha. Como vemos, con-
ceptos todos ellos ligados a la fertilidad y a la sexualidad. Este

tales como m,~ (zonah), prostituta; ,,n


mismo ámbito, pero en sentido negativo, aparece en conceptos
(jilel), matar, y también
profanar, violar; o ,,,, (dildel), debilitar, empobrecer, conse-
cuencia todo ello de un mal uso de las fuerzas de la fertilidad.

242 ViLLARRUBIA / HAUT / MILI.ERA


Aparece también la recomendación para prevenir estos efectos
indeseables: OM (jas), economizar estas energías, no derrochar-
las; alimentarse, ji'iM (jizón), no sólo físicamente, sino también
en los aspectos culturales, instruirse, t:l!lM (jajam) sin lo que no es
posible un desarrollo ulterior. El hecho de que el sendero forme
parte, entre otras, de la Tríada del Temple de Ánimo dice mucho
la clase de alimento que debe tomarse.
• Sefer Yetzirah. El dominio y su contrario, la sumisión, el oído
izquierdo, el día jueves en la semana; y Mercurio en el cielo.
Nombre hebreo del Arcano del tarot. La palabra hebrea para
estrella es ~:i,:i (kojab), con un valor numérico de 48, el mismo
que it~~~ (guilah), alegría;~~ (jail), fuerza, valor, y también opu-
lencia, pero que leído jil adopta el significado de angustia. En-
contramos también, además del cerebro, i"t~ (moáj), y el calor, CM
(jom), que habían aparecido antes, la cosecha,~,~~ (iabul), que se
recoge en la paz y deja un residuo de escaso aprovechamiento,
el rastrojo, otro de los significados de it~~~, palabra que veíamos
al comienzo de este mismo párrafo; pero también el soldado,
el militar, ~~n (jayal). Con el mismo valor numérico aparece i:ii:i
(kadkod), pórfido, roca de origen volcánico. ¡De nuevo la relación
con el calor! La temurá numérica de 48, que es 84, ilustra una de
las funciones de este sendero, que no es otra que la de desha-
cer las cristalizaciones que se originan cuando la energía queda
bloqueada; pues 84 es el valor numérico de o~toit (hetís), hacer
volar, obligar a despegar del suelo lo que había quedado fijado
a él indebidamente. Otra forma de «hacer volar» es mediante
la magia, tal como fue ilustrado por Francisco de Goya en sus
láminas sobre brujería. Y es que hay un detalle en el Arcano de
La Estrella, en su versión de Marsella, que nos llama la atención
y que no ha sido comentado, que sepamos, por ningún autor.
Nos referimos a un extraño pliegue que aparece bajo la rodilla
izquierda de la mujer desnuda que vierte sus jarras de agua,
justamente la rodilla que apoya en el suelo. Nos recuerda el he-
cho, al parecer histórico, por el que se instituyó en Inglaterra
la Orden de la Jarretera. Se cuenta que la orden nació en cierta
ocasión en que a la condesa de Salisbury se le cayó una jarretera
o liga en presencia de la corte. El rey Eduardo III, al recogerla,

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 243


observando las malignas sonrisas de los presentes, pronunció
al parecer la frase (en francés, idioma por entonces oficial de la
corte inglesa) Honni soit qui mal y pense, «Maldito el que piense
mal sobre ello», que hoy figura en la divisa de la mencionada
orden. Y se dice que aquella liga o jarretera que perdió la conde-
sa de Salisbury, de color rojo, era distintivo usado por las brujas,
lo que indicaba que su dueña lo era. La actitud del rey, de ser
cierta la historia, habría salvado a la condesa de una muerte
inmediata en la hoguera. Así pues, el pliegue bajo la rodilla iz-
quierda de la mujer desnuda (otro signo de la brujería Wicca)
del Arcano XVII hablaría de su carácter mágico, unido a ritos de
fertilidad, lógicos por otra parte si se considera que el sendero
17 une las esferas de Netzaj y Yesoé:i.
Significados básicos y correspondencias en el ser humano: La reno-
vación a través del curso de la Naturaleza. El trabajo realizado en
soledad. El obrar conforme a la naturaleza de las cosas. La capaci-
dad de crear el propio trabajo. La creatividad aplicada a las tareas
prácticas de tipo individual. La capacidad de desarrollar el pro-
pio tíkkún (misión para la que venimos a este mundo). El estímulo
sexual. La magia sexual. La purificación a través de medios natu-
rales. El funcionamiento hormonal. La ingle; el ovario y el testículo
derechos (de frente). Los glúteos (de perfil).
Problemas en caso de bloqueo: al referirse este sendero a los tra-
bajos y actividades que se desarrollan en soledad, los problemas
que aparecen como consecuencia de un sendero bloqueado son,
o bien de incapacidad para desarrollar este tipo de acciones, o
bien de exceso en las mismas. Si el bloqueo produce incapaci-
dad, se manifestará como falta de sentido práctico a la hora de
desarrollar la propia creatividad, y también en forma de nece-
sidad de «integrarse en equipos» para cualquier tipo de tarea,
aunque la naturaleza de esto requiera precisamente lo contrario.
Si, en cambio, el bloqueo lleva al exceso, aparecerá la tendencia
a «ser diferentes», a la originalidad a toda costa, aunque ello
suponga incurrir en dificultades serias para la vida cotidiana.
No olvidemos que en este campo, como en todos los demás, lo
deseable es un equilibrio entre ambas tendencias, sin caer en
ninguno de sus extremos.

244 ViLLARRUBIA / HAUT / M I LLERA


Posibles problemas de salud: los que afectan a los órganos genita-
les, especialmente del lado derecho (ovario en la mujer, testículo
en el hombre). Infantilismo, falta de desarrollo de los órganos
sexuales. Problemas hormonales. Lesiones o malformaciones en
la cadera y rodilla derechas. Apendicitis.

3.6. 79. Sendero 78. La Luna. De Netzaj a Maljut

Letra hebrea: tzade, l


Letra simple. Tiene la forma final r
Significados: justicia, equidad / anzuelo.
Tipo de sendero: de comunicación con el Ser Físico.
Colores del sendero:
Atzilut: Carmesí.
Briah: Ante moteado de -blanco plata.
Yetzirah: Marrón rosado claro traslúcido.
Assiyah: Gris azulado.
Estudio del sendero.
• Dirección. Doble y alternativa, entre Netzaj y Maljut. En este sendero
se produce el intercambio de información entre el nivel emocional y
el plano físico, los cuales se influyen mutuamente, como bien saben
los terapeutas de gestalt o bioenergética. Se trata de flujos alterna-
tivos, no simultáneos, y dada la densidad del plano físico, pueden
producirse «nudos» energéticos que requerirán tratamiento tanto a
nivel de Netzaj (emocional) como de Maljut (físico, mediante ma-
sajes, por ejemplo). Cada célula de los organismos vivos está reco-
giendo constantemente información del entorno, que es asimilada
por sus campos pránicos o energéticos, y a la vez, las energías su-
tiles del nivel astral son recibidas por Netzaj e influyen en el com-
portamiento del organismo. Pero, insistimos, el sendero no permite
sino el paso alternativo en uno u otro sentido.
• Análisis cabalístico. Entre Maljut (496) y Netzaj (148) hay una di-
ferencia de valores numéricos de 348, en el que aparece una alu-
sión a esa transferencia de información, generalmente de forma
tumultuosa, como un líquido que hierve, tv~li (higlish). Parece
que se trata de una comunicación que no es fácil, a juzgar por la

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 245


lejanía, ¡,m~ (merjak) de niveles vibratorios entre Netzaj y Maljut;
pero si en esta palabra se efectúa una temurá conservando el mis-
mo valor numérico, aparece -,¡,n~ (mejkar), estudio, investigación,
exploración, que es lo que debe ser este camino, y no sólo un mero
vehículo para la transferencia de energías. Por otra parte, hay una
aportación sumamente interesante entre el nombre de la 7.ª sefi-
rá y la raíz de la que procede el de la 10.ª, que es i,,o (melej), rey.
Comparando la letra de cada palabra con la correspondiente de la
otra, encontramos j~ (man), maná, que leído min significa desde;
~~ (tzel), sombra; y M~ (koáj), fuerza, valor: «desde la sombra pro-
cede el maná que da fuerza». La sombra, naturalmente, es la Ma-
dre Tierra, el nivel físico Maljut, expresión visible de la fuerza Yin.
El valor 843, temurá numérica de 348, proporciona jMWM '¡.~~ (mo-
vil ha-sheten), uréter, el conducto que lleva la orina de los riñones
a la vejiga, lo que, teniendo en cuenta la relación de Netzaj con la
zona lumbar, es una ¿coincidencia? más que notable ...
• Sefer Yetzirah. El gusto, el esófago, el signo de Acuario en el cie-
lo y el mes hebreo de Shevat, correspondiente a enero-febrero.
Nombre hebreo del Arcano del tarot. Hay varias palabras he-
breas para decir luna, y de ellas seleccionamos m~~ (levanah),
por las interesantes conexiones que ofrece con el significado del
sendero y del Arcano asociado con él, el XVIII, La Luna. Pues
aparecen m~~ (libná), linfa, asociada con el trasiego de energías
entre Netzaj y Maljut; ~U (nizel), ese mismo fluir; c~,o (midgam),
muestra, patrón, pauta, tal como la establece Netzaj sobre el
plano físico; o no~,~ (belimah), nada, sin nada, tal como nos deja
vacíos y sin energías la actuación del Arcano XVIII, para pre-
parar la efusión de las energías solares. El valor numérico de
levanah, 87, ha aparecido en repetidas ocasiones, por lo que nos
remitimos a lo dicho entonces. (v. 11, 3.1.6 y 3.1.9).
Significados básicos y correspondencias en el ser humano: La ex-
presión corporal. La sexualidad como expresión de emociones
y, en general, todas las expresiones emotivas. La expresión no
verbal (miradas, gestos, actitudes ... ). La magia, en especial la li-
gada a la tierra. La comunicación no verbal en su sentido recep-
tivo. El contacto físico. Capacidad mímica. El baile y la danza.
La intuición en su sentido más terreno, captando, por ejemplo,

246 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


las señales invisibles de la naturaleza o el tipo de vibración exis-
tente en determinados lugares, tanto en sentido positivo como
negativo. La capacidad de vaciarse de las viejas energías para
hacer lugar a la renovación (no es específicamente la renova-
ción, sino el vaciado preparatorio previo). La Madre Tierra y
los trabajos en su favor. El mundo de la energía yin. La pierna
derecha, la sangre (de frente). La parte trasera de las piernas, los
talones, los pies (de perfil).
Problemas en caso de bloqueo: el bloqueo en este caso, cuando se
produce por defecto en la configuración energética, afecta no-
tablemente a la expresión y manifestación de estados emocio-
nales. Por el contrario, si el bloqueo se produce por exceso, los
problemas se manifestarán en forma de tendencia excesiva al
erotismo, incluso como prostitución. En todo caso, sea por de-
fecto o por exceso, hay una clara tendencia a confundir las emo-
ciones con los sentimientos, por lo que encontraremos muchos
casos de sentimentalismo y de confusión en la entrega afectiva.
Tristeza, depresión, melancolía.
Posibles problemas de salud: al ser el sendero el que corresponde
al contacto sensual (y no sólo erótico), es lógico que los proble-
mas que antes se manifiestan son los que afectan a la piel: der-
matitis, soriasis, acné, erupciones cutáneas, etc. También apare-
cen relacionados con este sendero los problemas en la química
de la sangre y su circulación. Lesiones y problemas reumáticos
en los pies, especialmente el derecho. Problemas sexuales, tanto
orgánicos como funcionales.
Información adicional: El sendero atraviesa Qeshet; el Arco Iris,
lo que indica que es uno de los medios para superar esta barrera
ilusoria y no quedarse atrapados en ella.

3.6.20. Sendero 19. El Sol. De Hod a Yesod

Letra hebrea: kuf, ¡,


Letra simple.
Significados: parte posterior de la cabeza/recepción/tradición/llave.
Tipo de sendero: de estructura de la Personalidad.

MANUAL DE KABBALA H PRÁCTICA 247


Colores del sendero:
Atzilut: Naranja.
Briah: Amarillo oro.
Yetzirah: Ámbar vivo.
Assiyah: Ámbar con rayas rojas.
Estudio del sendero
• Dirección. Doble y alternativa, entre Hod y Yesod. Como represen-
ta la cooperación y el trabajo en equipo, es lógico el tipo de direc-
ción de este sendero, pues de no ser así no es posible desarrollar las
actividades a que se refiere. Como veremos inmediatamente, esta
cooperación y trabajo en equipo requiere actitudes de actividad
y actitudes de silencio y quietud. Ello implica que «el otro» tiene
razón, que tiene siempre razón, que ·tiene toda la razón, su razón.
Y lo aceptamos alegremente. También simboliza el sendero la unión
sexual, que es ante todo el trabajo en equipo por excelencia.
• Análisis cabalístico. La diferencia de valores numéricos entre Yesod
(80) y Hod (15) es 65, número que proporciona diversos conceptos
relacionados con, o que aluden simbólicamente a, el ámbito en que
el sendero actúa. Así, encontramos la mandrágora, C,,,_.,,,
(dudaím),
de carácter mágico o afrodisíaco, según los casos. Cuenta el libro
del Génesis (30: 14) que Rubén, hijo de Jacob y Leá, encontró man-
drágoras en el campo y se las llevó a su madre. Al verlas, Raquel,
hermana de Leá y segunda esposa de Jacob, se las pidió, y ante su
negativa a dárselas, Raquel dispuso que Jacob se acostara con Leá,
de esa unión nacería Issacar. Hay que recordar que, según el rela-
to bíblico, Leá era poco agraciada, mientras que Raquel era bella.
Por tanto, encontrar la mandrágora en este sendero significa situar
la fertilidad por encima del placer. Otros conceptos con valor 65 son
i'TliM (hehenah), gozar, placer, agradar, lo que indica que el placer no
está excluido, y sí sólo subordinado a fines superiores; ,~,., (héjal),
santuario, y más concretamente, el Santo de los Santos, la parte
más secreta, sagrada y escondida del Templo de Jerusalem, para
indicar el aspecto sagrado de la sexualidad; T'i'f
(halij), costumbre,
lo que indica que el uso de la sexualidad debe ser algo habitual y
no esporádico, aunque sujeto a temporadas o períodos de abstinen-
cia, tal como indica el tipo de dirección del sendero, alternativa; ',',jj
(hilel), alabar, ensalzar, glorificar, el agradecimiento a Dios como

248 V1LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


complemento necesario de todo acto participativo, sea o no de ca-
rácter sexual; y, finalmente, con el mismo valor numérico de 65,
la mezuzá, ~ , la cajita de metal o madera que los judíos colo-
can a la entrada de sus casas, con fragmentos del Deuteronomio en
su interior y la inscripción ~ (Shaddai), Todopoderoso, en el exte-
rior, para indicar que se entra en un lugar sagrado; pues la entrada
en el nivel de la Personalidad debe ser siempre un acto sagrado,
como lo son todos y cada uno de los aspectos del Árbol de la Vida.
En otro orden de cosas, la comparación entre las letras que forman
los nombres de las dos esferas nos permite constatar que ambas
tienen dos letras comunes, da1et (i) y vav (i), que juntas forman la
palabra i, (du), dos o doble, mientras que con las letras restantes
puede formarse la expresión 'CM (hasz), mi silencio; por lo que se
indica, no sólo el aspecto de cooperación que simboliza este sen-
dero, sino que además cada uno debe guardar su propio silencio,
su silencio interio~ para que esa cooperación, ese trabajo en equipo
(incluso en el ámbito sexual) se produzca. Y como el sendero es de
direcciones alternativas, el silencio de uno debe corresponderse con
la actividad del otro. Recordemos que han habido muchos casos en
que determinadas tareas se han hecho por parejas: los exploradores
que Moisés envió al llegar a la tierra de Canaán, los discípulos que
salieron a predicar después de la resurrección de Jesús, las predica-
ciones de los cátaros o las de los primitivos franciscanos ... Incluso
los templarios se representaron compartiendo por parejas el mismo
caballo, lo que, en el proceso en que les condenó a la disolución de
la Orden, valiera para ser acusados de homosexualidad (¡otra vez el
aspecto sexual de este sendero!) (v. I, 9.1)
• Sefer Yetzirah. La risa, el bazo, el signo de Piscis en el cielo y
el mes hebreo de Adar, correspondiente a febrero-marzo. Este
mes se dobla siete años en cada período de diez y nueve, para
acomodar el calendario lunar hebreo al solar.
Nombre hebreo del Arcano del tarot. El Sol recibe en hebreo el
nombre de tzn~w (shemesh), aunque también se le conoce como
M~Ti (jamah), pero optamos por la primera denominación, pues-
to que la segunda deriva de la raíz en (jom), calor, mientras que
la primera resalta su aspecto de fuente de luz. En efecto, vemos
en esa palabra, shemesh, que contiene dos veces la letra shin (W),

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 249


que, como sabemos, significa fuego, mientras que el calor es la
sensación provocada por dicho fuego. Esconde, sin embargo,
en su interior la letra mem (~), que corresponde al agua, por lo
que es una expresión perfecta del trigrama Li del I-Ching chino,
que significa precisamente fuego, y en especial todos los fuegos
vivos, como el sol o un relámpago (fig. 26). Debe advertirse que
el trigrama es de carácter femenino o Yin, y recordarse que el
Sendero 19 une los Pilares del Equilibrio y del Rigor, este último
de carácter pasivo o Yin, por tanto femenino.

Figura 26

El trigrama Li, del I-Ching, que simboliza el Fuego, y en general las gran-
des luminarias como el Sot comparado con el nombre hebreo de este astro
1

(a la derecha en sentido vertical).


1

Significados básicos y correspondencias en el ser humano: La


conciliación de los opuestos. El trabajo en equipo. El obrar con-
forme al ingenio humano. La creatividad aplicada a las tareas
prácticas de tipo colectivo. La capacidad de aceptar la «razón»
del otro. La capacidad de unir la luz y la sombra. La unión
sexuat en tanto que actividad compartida de común acuerdo,
y también como expresión física de dicha unión luz-sombra.
La «reconstrucción» del ser. La visión de frente ofrece la corres-
pondencia con la ingle el testículo y el ovario izquierdos. Por
1

su parte en la visión de perfil se encuentran las gónadas, tanto


1

femeninas (ovarios) como masculinas (testículos), y los órganos


sexuales en general.
Problemas en caso de bloqueo: Incapacidad para reconocer aspectos
propios, la propia luz y la propia sombra, y por tanto para apreciar
los propios errores. Inadaptación al colectivo, que se manifiesta en

2 50 V1 LLARRUBIA / HAU T / MILLERA


dificultades para el trabajo en equipo. Racismo y xenofobia. Miedo
a expresar las ideas propias. Problemas en el coito.
Posibles problemas de salud: zona genital, sobre todo testículo u
ovario izquierdos (varones o mujeres, respectivamente); rodilla
y riñón izquierdos.

3.6.21 . Sendero 20. El Juicio. De Hod a Maljut

Letra hebrea: resh, ,


Letra doble.
Significados: soplo / cabeza / principio / alma.
Tipo de sendero: de comunicación con el Ser Físico.
Colores del sendero:
Atzilut: Escarlata anaranjado fulgente.
Briah: Bermellón.
Yetzirah: Escarlata moteado de oro.
Assiyah: Bermellón moteado de carmesí y esmeralda.
Estudio del sendero
• Dirección. Ascendente, desde Maljut hacia Hod. De esta forma esta-
blece la vía de comunicación que permite a la mente concreta captar
la información procedente del plano material. Pero al ser la inercia
la característica de este último, necesita ser constantemente estimu-
lado, y eso es la expresión verbal y el sonido a todos los niveles,
característica de este sendero. Por eso tiene mucho que ver con la
música, especialmente la de tipo rítmico, que es una gran moviliza-
dora de energías físicas, como bien sabían desde antiguo muchos
pueblos primitivos y ha descubierto Occidente en el siglo XX. Y
siendo la música matemática, además de arte, se relaciona también
con las aplicaciones científicas, imposibles sin ésta.
• Análisis cabalístico. La diferencia de valores numéricos entre
las esferas que une (496 -15 = 481) nos habla de cualidad, mi~M
(tejunah), palabra que también significa proyecto, preparación y
astronomía, ciencia esencialmente matemática. Por otra parte,
si se comparan ambas palabras separando las letras auxiliares
de Maljut (~ y M, como ya vimos) y la vav (i), común a ambas
palabras, queda~~ (kol), todo, en la sefirá inferior, y i¡¡ (hed), eco,

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 251


en la superior: justamente la forma como actúa el sendero 20: «eco
de todo», o, en otras palabras, la caja de resonancia para que la
mente perciba mejor el mensaje del nivel material.
• Sefer Yetzirah. La paz y su contraria, la guerra, el orificio iz-
quierdo de la nariz, el planeta Saturno en el cielo y el día viernes
en la semana.
• Nombre hebreo del Arcano del tarot. Una palabra hebrea para
Juicio es¡~ (din), nombre que ya encontramos al estudiar el sim-
bolismo de la Estrella de David. En este caso, sin embargo, pre-
ferimos matizarlo, de manera que quede¡~ ¡,e~ (psak din), expre-
sión que recoge mejor el espíritu del Arcano, puesto que se refiere
específicamente al momento procesal en que se dicta sentencia,
justamente como aparece en las imágenes del naipe: se va a dictar
sentencia universal en el Juicio Final. La expresión mencionada
tiene un valor de 304, lo que lleva a palabras directamente rela-
cionadas con el concepto anterior:,,¡, (kaddar), ollero, alfarero, el
que da forma y consolida el barro informe (en este caso, puede
ser la naturaleza inferior, tal como muestra la dirección ascen-
dente del sendero); o ~!\W (sagá), crecer, elevarse, subir. Todo ello
se completa con la temurá numérica, 403, que proporciona w~~;,
(hejpish), liberar, libertar, evidentemente a la materia de su in-
consciencia; o ii!I (garar), empujar, arrastrar, tirar, lo que indi-
ca la tarea del sendero, cual es forzar la inercia del plano físico,
arrastrándolo hacia niveles superiores.
Significados básicos y ·correspondencias en el ser humano: La
expresión oral. Capacidad oratoria. La capacidad técnica, mate-
mática y científica. Aceptación de lo sorprendente, lo repentino.
La capacidad de asombro. La comunicación verbal en su sentido
receptivo. La expresión musical, especialmente la música de tipo
rítmico. La escritura. Los conocimientos recibidos de la Mente
Cósmica. Los descubrimientos y los inventos en su sentido prác-
tico. La linfa y la pierna izquierda (de frente). La parte delantera
de las piernas, los huesos de las piernas y los pies (de perfil).
Problemas en caso de bloqueo: necesidad de expresar la divinidad a la
que inconscientemente se siente pertenecer, de palabra y por escrito,
unida a miedo a la crítica que esta expresión pueda acarrear; tarta-
mudez; timidez o, al contrario, tendencia a la verborrea; dificultades

252 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


para la expresión oral de forma moderada, decantándose, bien por
los gritos, o bien por un tono casi inaudible; instinto de crítica.
Posibles problemas de salud: autismo; problemas linfáticos; boca,
dientes; huesos; acumulación de líquidos; problemas en el pie
izquierdo.
Información adicional: Sendero que atraviesa Qeshet el Arco Iris,
lo que indica que contiene los recursos necesarios para no que-
dar atrapados en esta barrera.

3.6.22. Sendero 21. El Mundo. De Yesod a Maljut

Letra hebrea: tav, .n


Letra doble.
Significados: materia / cruz / misión a realizar.
Tipo de sendero: de comunicación con el Ser Físico.
Colores del sendero:
Atzilut: Índigo o añil.
Briah: Negro.
Yetzirah: Negro azulado.
Assiyah: Negro con rayas azules.
Estudio del sendero
• Dirección. El sendero 21 une las esferas de Yesod y Maljut, y es
de doble dirección, abierto permanentemente. Pertenece al Sen-
dero de la Flecha, del que es su tramo inferior. Hay, por lo tanto,
una comunicación entre los niveles físico y astral o de la Perso-
nalidad, comunicación que en muchas ocasiones se transforma
en identificación, por lo que conviene tener siempre presente el
poema Sat Darshanam (vers. 16), de Ramana Maharsi (ver bi-
bliografía): «Espacio y tiempo me atan, sólo si yo soy el cuerpo».
Al ser la unión más directa entre ambos niveles, es el que tiene
la sensibilidad al dolor, por lo que lo han llamado los cabalistas
«el sendero Tau, o de la Cruz de los Dolores». También es el que
permite escuchar en profundidad, que es un tipo de comunica-
ción diferente a la de los senderos 18 (flujos de energías) y 20
(información de formast y se refiere a la capacidad empática,
a saber «hacerse uno con» el otro.

MANUAL DF. KABBALAH PRÁCTICA 253


• Análisis cabalístico. La diferencia de valores numéricos entre am-
bas esferas (496 - 80 = 416) proporciona dos conceptos que com-
pletan el sentido de este sendero: el primero de ellos es .:, ~.: i.:
(barbé rab), discípulo, alumno, aprendiz; y el segundo, 'l'JM (tvaí),
marca, señal, y también ruta. Por su parte, de las letras que for-
man los nombres de ambas esferas sólo una es común, la vav (i),
que simboliza al ser humano, mientras que las restantes forman
en Yesod la palabra ,o~ (íased), fundar, establecer, y con las que
restan de Maljut aparece 1'~(melej), rey, y queda sobrante la tav
(M), que simboliza la materia. Todo ello configura la idea general
de un camino de aprendizaje, cuya finalidad es que el hombre
descubra y establezca su condición de rector o rey en el plano
material. El número 614, temurá numérica de 416, proporciona
dos palabras de gran interés, por su concordancia con el signifi-
cado del sendero: Mi~-i;n (híbraot), creación, que por él fluye des-
de Keter, pasando por Tiferet y Yesod a lo largo del Sendero de
la Flecha, y mini (hítdarah), frecuencia, regularidad, constancia,
en alusión a su carácter de sendero abierto permanentemente
en ambas direcciones. Además, 614 = 613 + 1; pero al ser 1 el
número de N, que es el Infinito o Absoluto, y 613 el número
de preceptos de la Torá, el sendero se refiere, precisamente, al
cumplimiento de estos preceptos, o, de forma más universal,
al cumplimiento de la Ley de Dios, en otras palabras, del tikún, de
la misión sagrada que cada ser trae a este mundo para reconstruir
la Unidad Perdida; y ese es, precisamente, el tercero de los signi-
ficados de la letra tav, asociada al Sendero 21.
• Sefer Yetzirah. La gracia o belleza y su contraria la fealdad, la
boca, el planeta Júpiter en el cielo y el día sábado, el shabath,
en la semana.
• Nombre hebreo del Arcano del tarot. Hay dos palabras que sig-
nifican en hebreo mundo: c',iv (olam), con valor numérico 146, y
i,,::, (tíbel), que vale 432. Si bien la segunda ofrece menos datos
de interés, resaltemos que contiene en su interior la palabra ;i,
(leb), corazón, cuyo valor alude a los 32 Senderos de la Sabidu-
ría, el Árbol de la Vida, y que con la letra tav sobrante aludiría al
«corazón de la materia»; esta palabra, leída tevel, significa impu-
reza, con lo que apunta a que el nivel material tiene este aspecto

254 VILLARRUBIA / HAUT / MIi.LERA


negativo. Como esto contradice la filosofía básica del judaísmo,
de que este mundo es una buena cosa, a pesar de su imperfec-
ción por el exilio de la Shejiná, preferimos la primera palabra,
que podría leerse al om, hacia el Om, hacia el Absoluto, pues
en verdad el sendero 21 es la «pista de despegue» para empren-
der el vuelo hacia la Eternidad. Este concepto queda reforzado
cuando encontramos en el número 146 la palabra N~¡, N.:.: (bavá
kamá), primera puerta, que también es el primer versículo de
cualquier texto sagrado. Con el mismo valor numérico apare-
cen r~Nii (heemitz), fortalecer; j'fl~C (sikaión), contemplación, y
también esperanza; c,,v ('alúm), escondido, secreto; ,,,.a,
(pilul),
oración; y ~,~I) (panui), vacuidad, cualidad necesaria para escu-
char y aceptar el dolor. Todo ello, como se ve, concuerda con el
sentido del propio Sendero 21. Entonces, ¿cómo interpretar la
relación con el Arcano XXI, El Mundo, que tiene el significado
de la culminación del camino? Sólo es posible resolver esta apa-
rente contradicción si nos fijamos en el diseño del Arcano, en el
que un ser, presumiblemente andrógino, desnudo, salvo un velo
que cubre su sexo, danza dentro de una mandorla o guirnalda
ovalada de hojas de laurel, de los tres colores básicos, azul, ama-
rillo y rojo, sosteniendo una vara en su mano izquierda y un
pomo en su mano derecha. En las cuatro esquinas del naipe, los
cuatro animales de la visión de Ezequiel, después ampliamen-
te adoptados por muchas tradiciones, desde la católica hasta la
ocultista. En efecto, se trata de un aprendizaje, pero cuya meta
no es humana, sino divina: aprender a reconocer nuestra natu-
raleza de un Dios que está jugando a olvidar que Lo que es.
Significados básicos y correspondencias en el ser humano: La
escucha profunda, yendo más allá de las apariencias. La acepta-
ción del dolor y la capacidad de trascenderlo. La capacidad de
aprender de los demás y de las propias experiencias, mediante
la introspección. El comienzo del proceso de regeneración espiri-
tual. La capacidad de aprender del dolor y a travé_s del dolor. Sa-
ber meterse en la piel del otro (pues cada uno es, en lo profundo,
«el otro»). La receptividad para lo que no tiene forma, ni verbal,
ni no verbal. Ser uno mismo. La realización material. Los pies,
el recto, el ano y la excreción, tanto de frente como de perfil.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 255


Problemas en caso de bloqueo: Incapacidad de cumplir la voluntad
propia,por contar demasiado con la familia. Tendencia excesiva
a ocuparse de los demás, con olvido de cuidar de sí mismo; o al
contrario, actividad personal que bloquea al entorno. Sufrimien-
to innecesario que bloquea a la autorrealización. Tendencia a vol-
verse «sufridor», o bien a hacer sufrir a los demás («la vida es
un valle de lágrimas, cualquier otra consideración es un pecado
nefando»). Tendencia a dejarse pisar, o al contrario, a ascender en
la vida pisando sistemáticamente a los demás.
Posibles problemas de salud: Próstata en los varones; en la mujer,
partos dolorosos y problemas en la menstruación. Problemas en
las zonas genitales. Estreñimiento y colon irritable. Problemas
de pies. Pérdidas de orina. Hemorragias intestinales, especial-
mente en el recto. Hemorroides.

3.6.23. Consideraciones generales sobre los senderos subjetivos


Además del estudio de los senderos recogido en las secciones an-
teriores, debe indicarse que algunos senderos deben agruparse con
otros para completar sus respectivos significados, sin perjuicio de
las polaridades que se estudian en el capítulo siguiente. Las agrupa-
ciones que completan significados son las siguientes:
• Las tres vigas del Árbol, Senderos 3, 8 y 16. Representan las
estructuras subjetivas de, respectivamente, la espiritualidad, la
individualidad y la personalidad. Se manifiestan, también res-
pectivamente, como síntesis, análisis e instinto.
• Los cuatro senderos de los Pilares laterales, Senderos 5 y 10
(Pilar de la Misericordia) y 7 y 12 (Pilar de la Severidad). Repre-
sentan las puertas de comunicación con los campos externos,
energético y social, respectivamente, a nivel transpersonal (Sen-
deros 5 y 7) y personal (Senderos 10 y 12).
• Los tres senderos de la Flecha, de abajo a arriba, 21, 14 y 2. Re-
presentan las fases de expansión de la consciencia.
• Los cuatro senderos diagonales largos, 4, 6, 18 y 20. Son las vías
de comunicación energética de Tiferet con el Absoluto manifes-
tado (los dos primeros) y con el plano físico (los dos últimos).

256 VJLLARRUB IA / H AUT / MILLERA


• Los ocho senderos diagonales cortos, O, 1, 9, 11, 13, 15, 17 y 19,
que establecen líneas de relación del Espíritu (O y 1), la Mente (9,
11, 13 y 15) y el nivel Astral (17 y 19) con sus respectivos polos
energéticos: Jokmah y Binah para Keter; Jesed, Guevurah, Netzaj
y Hod para Tiferet, que comparte los dos últimos con Yesod.

3. 7. Las polaridades de los senderos subjetivos


Salvo los senderos pertenecientes a La Flecha (2, 14 y 21), que sim-
bolizan la expansión de la consciencia, cada uno de los restantes
muestra algún tipo de polaridad respecto a otros senderos, cuando
su posición es simétrica, paralela o semiparalela (en estas dos últi-
mas posiciones la polaridad se manifiesta sólo en los más próximos).
A continuación se relacionan los significados básicos de las pola-
ridades que se manifiestan en cada sendero. Se trata, en cualquier
caso, de simplificaciones que sería recomendable que el lector estu-
dioso de la Kabbalah intentase completar para mejor comprensión
de los senderos subjetivos.

Sendero O(22). Respecto a:


Sendero l. La entrega frente a la iniciativa y la voluntad
Sendero 6. El abandono a la voluntad de Dios frente al libre
albedrío.

Sendero 1. Respecto a:
Sendero O. La iniciativa y la voluntad frente a la entrega.
Sendero 4. El comienzo de las tareas frente a su finalización.

Sendero 2. No presenta polaridad, por pertenecer a La Flecha.

Sendero 3. Respecto a:
Sendero 8. La síntesis frente al análisis.

Sendero 4. Respecto a:
Sendero l. La finalización de actividades frente a su comienzo.
Sendero 6. La disciplina y el orden frente a la libertad.

MANUAL DE KABllALAH PRÁCTICA 257


Sendero 5. Respecto a:
Sendero 7. La actitud lúdica, vivir el presente, frente a la actitud
responsable, vivir previendo las consecuencias futuras.
Sendero 10. Vivir el presente, frente a la aceptación de lo
nuevo que viene del futuro.

Sendero 6. Respecto a:
Sendero O (22). El libre albedrío y la elección, frente a la ac-
titud de entrega a la voluntad de Dios.
Sendero 4. La libertad frente al orden y la disciplina.

Sendero 7. Respecto a:
Sendero 5: Hacer «para» alcanzar un objetivo, frente a hacer
«por el gusto de estar haciéndolo».
Sendero 12: La acción frente a la inmovilidad.

Sendero 8. Respecto a:
Sendero 3. Análisis frente a síntesis.
Sendero 16. Racionalidad frente a instinto.

Sendero 9. Respecto a:
Sendero 11. Aceptación de la soledad, frente a sociabilidad.
Sendero 15. Introspección frente a memoria.
Sendero 13. Prudencia frente a olvido.

Sendero 10. Respecto a:


Sendero 12. La mirada al futuro, frente a la mirada al pasado.
Sendero 5. La aceptación del futuro, frente a vivir el presente.

Sendero 11. Respecto a:


Sendero 9. Sociabilidad, frente a aceptación de la soledad.
Sendero 13. Autodominio, frente a perdón.
Sendero 15. Autodominio, frente al apoyo en la memoria.

Sendero 12. Respecto a:


Sendero 10. Visión del pasado, frente a visión del futuro.
Sendero 7. Visión del pasado, frente a actuación futura.

258 V!LL ARRUBIA / HAUT / M ILLERA


Sendero 13. Respecto a:
Sendero 9. Olvido, frente a prudencia.
Sendero 11. Perdón, frente a autodominio.
Sendero 15. Olvido, frente a memoria.

Sendero 14. No presenta polaridad, por pertenecer a La Flecha.

Sendero 15. Respecto a:


Sendero 9. Memoria, frente a introspección.
Sendero 11. Apoyo en la memoria, frente a sociabilidad.
Sendero 13. Memoria, frente a olvido.

Sendero 16. Respecto a:


Sendero 8. Instinto frente a racionalidad.

Sendero 17. Respecto a:


Sendero 19. El trabajo en soledad, frente al trabajo en equipo.

Sendero 18. Respecto a:


Sendero 20. La comunicación mediante transferencia de
energías, frente a la comunicación por transferencia de
formas.

Sendero 19. Respecto a:


Sendero 17. El trabajo en equipo, frente al trabajo en so-
ledad.

Sendero 20. Respecto a:


Sendero 18. La comunicación por transferencia de formas,
frente a la comunicación por transferencia de energías.

Sendero 21. No presenta polaridad, por pertenecer a La Flecha.


Todas estas polaridades actúan a nivel exclusivamente sub-
jetivo. Hay otras, sin embargo, que actúan a nivel objetivo y
subjetivo a la vez, lo que es la consecuencia de las oposicio-
nes que se ponen de manifiesto en las Tríadas del Arbol de
la Vida, las cuales se analizan en la sección siguiente.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 259


3.8. Asociaciones por oposiciones y niveles
de los senderos subjetivos
Estas asociaciones son un resumen de todos los significados desa-
rrollados a lo largo de la presente obra respecto a los senderos sub-
jetivos. En todos ellos, excepto en las tres vigas y en los «senderos
de la flecha», se producen estas oposiciones polares. Las tres vigas
(senderos 3, 8 y 16) y los tres «senderos de la flecha» (2, 14 y 21),
muestran, en cambio, diferencias de nivel. Pueden utilizarse estas
asociaciones como repaso de los significados, y a la vez como una
guía útil de apoyo a la interpretación, pues permitirá descubrir
tendencias escondidas en senderos de carga normal que se ponen
de manifiesto a través de las cargas especiales de los opuestos3*; o
bien, una sobrecarga en una de las vigas o de los «senderos de la
flecha» puede estar proyectándose en la carga normal de otro de
la misma serie. Los resúmenes que siguen definen al sendero por
su relación con el arcano correspondiente del tarot, para facilitar
su memorización. Recordemos que los significados que se mencio-
nan se refieren en todo caso a los aspectos subjetivos, mientras que
los aspectos objetivos son recogidos por los significados de las sefi-
rot, y los relacionales a las Tríadas. Por lo tanto, estas asociaciones
muestran esencialmente actitudes y tendencias.

1. Asociaciones por senderos opuestos:

SENDERO y sus significados SENDERO y sus significados

O(22) EL LOCO lELMAGO


La paciencia El impulso
La espera El comienzo
La energía La materia
El espacio El tiempo
Las ideas Las formas

3Ver más adelante el desarrollo de estos conceptos en las partes III y IV de la


presente obra.

2 60 V1LLARRU BIA / HAUT / MI LLERA


SENDERO y sus significadns SENDERO y sus significadns

4 EL EMPERADOR 6 LOS AMANTES


La rigidez La flexibilidad
La disciplina La libertad
La dirección El libre albedrío
El padre La madre
Lo masculino Lo femenino

5 EL PONTÍFICE 7ELCARRO
El niño El adulto
La devoción La obligación
El ocio El trabajo
El juego La responsabilidad
La expansión La restricción

9 EL ERMITAÑO 11 LA FUERZA
La nutrición La asimilación
La introspección La extroversión
La intimidad La publicidad
La soledad La compañía

10 RUEDA DE LA FORTUNA 12 EL COLGADO


El futuro El pasado
La anticipación El letargo
El movimiento La quietud
La actividad La pasividad
La rapidez La lentitud

13 (LA MUERTE) lSELDIABLO


El olvido La memoria
El perdón El recuerdo
El desprendimiento La posesión
La conclusión El retorno
La emoción La mente

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 261


SENDERO y sus significados SENDERO y sus significados

17 LA ESTRELLA 19 EL SOL
Creatividad individual Creatividad colectiva
Desarrollo individual Desarrollo social
La separación La unión
La fluidez La cooperación

18LALUNA 20ELJUICIO
La expresión corporal La expresión verbal
El dibujo y la pintura La escritura
El descenso El ascenso
El hacer El decir

2. Asociaciones en las tres vigas del Árbol, y sus significados:

3 LA EMPERATRIZ 8 LAJUSTICIA 16 LA TORRE


El espíritu · La mente El cuerpo
La síntesis El análisis La vivencia
Los pensamientos Los sentimientos Las emociones

3. Asociaciones en los senderos de la flecha, y sus significados:

21 EL MUNDO 14 TEMPLANZA 2 LA SACERDOTISA


Yo inferior Yo interior Yo superior
Lo bajo Lo medio Lo alto
Lo físico Lo instintivo Lo intuitivo
El cuerpo El alma El espíritu

3.9. Senderos subjetivos que más definen a cada sefirá

La experiencia de análisis de múltiples casos personales a lo largo


de varios años nos ha mostrado que existen ciertas corresponden-
cias de senderos que definen con preferencia a cada esfera con-
creta. Si bien en cada parte del Árbol se encuentra su totalidad,
también es cierto que sus aspectos objetivos, representados por las

262 Vill.ARRUBIA / HAUT / MILLERA


sefirot, se manifiestan con preferencia (o, si se prefiere, mejor o con
mayor afinidad) en un sendero concreto. Estas afinidades o corres-
pondencias son las siguientes:
Keter. Se manifiesta con preferencia a través del sendero 2, La Sacer-
dotisa. La frase de Jesús que recoge el Evangelio expresa perfectamente ·
esta afinidad: «El Padre y yo somos uno». Si es así, entonces el sendero
2, que une a las esferas 1ª y 6ª, en la que se sitúa el centro erístico del
Árbol, participa en lo subjetivo de la propia naturaleza de Keter.
Jokmah. Su carácter de «padre» hace que su sendero subjetivo
más afín sea el 4, El Emperador. Cuando este sendero es armónico
y no se bloquea, produce en la relación con la 6.ª sefirá (valga decir,
en la relación padre-hijo) efectos similares a los del sendero 2 en la
relación Keter-Tiferet.
Binah. A semejanza del anterior, en este caso el sendero afín es
el 6, Los Amantes, que representa, además de la relación con la madre,
el cordón umbilical en el plano físico. Durante un tiempo, el de la ges-
tación, la madre y el hijo comparten un órgano, que es precisamente
este cordón. Luego, el cordón se corta y el hijo debe emprender su an-
dadura independiente: es lo que representa el carácter de «tiempo li-
mitado» de esta esfera, cuyo chakra mundano, recordemos, es Saturno,
el regente del tiempo, encargado con su guadaña de cortarlo.
Jesed. Su afinidad es semejante a las de las dos esferas ante-
riores, si bien en un nivel inferior: en este caso, es el sendero 9,
El Ermitaño, el afín, el maestro interior que comunica el amor con
el centro de la individualidad.
Guevurah. La afinidad es semejante a la de las tres esferas an-
teriores, al mismo nivel que Jesed. Es el sendero 11, La Fuerza,
el más afín a esta esfera, que además del rigor representa también
la justicia y la propia fuerza. La palabra hebrea Mii~) (guevurah)
deriva de,~~ (gábar), verbo que significa ser fuerte, ser poderoso.
Tiferet. En este caso la afinidad no se produce por contacto o
unión, como en las cinco esferas superiores, sino por expresión o
manifestación. Se trata del sendero 8, La Justicia, lo que es tanto
como decir la justeza, la cualidad de ser justo, equilibrado. Tiferet,
centro de la individualidad, es la manifestación del equilibrio en-
tre los principios constructivo o expansivo (Jesed) y destructivo o
restrictivo (Guevurah), unidos precisamente por el sendero 8.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 2 63


Netzaj. El carácter de centro emocional de esta esfera encuentra
su mayor afinidad en el sendero que es la manifestación de las
emociones y se encuentra asociado a ellas, el 18, La Luna.
Hod. En este caso se rompe la simetría respecto al caso anterior,
puesto que el sendero más afín es el 15, El Diablo, como expresión
de la mente concreta, fragmentada, que es típica de la naturaleza de
esta esfera. Se trata de una fragmentación, aunque dolorosa, necesa-
ria, como vía para trascender el nivel pleromático (ver más adelante,
en esta II Parte, secc. 4. «Correspondencias entre la Kabbalah y otros
sistemas») y afianzar, consolidar la individualidad, la cual a su vez
también debe ser trascendida.
Yesod. La afinidad en este caso se dirige hacia arriba, a través del
sendero 14, Templanza. La personalidad, cuyo centro es la 9.ª esfera,
debe adquirir flexibilidad para descubrir su verdadero papel, que
no es sino el de vehículo de expresión de la individualidad.
Maljut. Su afinidad es semejante a la del caso anterior, manifestán-
dose a través del sendero 21. La esfera corresponde al plano material,
y el sendero se relaciona con la letra M, uno de cuyos significados es
precisamente materia.

3. 1O. Correspondencias entre sefirot y entre


senderos subjetivos a través de la Escala de Jacob
La estructura del Árbol de la Vida como un proceso de manifes-
tación del Absoluto se desarrolla, según vimos, a través de cuatro
niveles o mundos: Atzilut (Emanación), Briah (Creación), Yetzi-
rah (Formación) y Assiyah (acción). La figura 9 muestra el en-
samblaje de estos cuatro niveles a través de la Escala de Jacob.
Uno de los efectos, quizá el más útil para los fines de la presente
obra, es la posibilidad de establecer correspondencias, por una parte
entre sefirot de diferentes niveles, y por otra entre senderos subjetivos
de diferentes niveles. Estas correspondencias se podrán utilizar cuan-
do se trabaje la actualización del Árbol de la Vida personal, cuyos pro-
cedimientos se desarrollan en la VI parte de la presente obra. Veamos
estas correspondencias (indicadas por flechas horizontales), las cuales,
por lo demás, pueden verificarse en la mencionada figura 9.

2 64 VI LLARRU BIA / HAUT / MI LLERA


3. 7O. 7. Correspondencias entre sefirot
Nivel de Nivel de Nivel de Nivel de
ATZILUT BRIAH YETZIRAH ASSIYAH
Keter

l
Jokmah
Binah
Daat
Jesed
Guevurah
Tiferet Keter
Netzaj Jokmah
Hod Binah
Yesod Daat
Jesed
Guevurah
Maljut Tiferet Keter
Netzaj Jokmah
Hod Binah
Yesod Daat
Jesed
Guevurah
Maljut Tiferet Keter
Netzaj Jokmah
Hod Binah
Yesod Daat
Jesed
Guevurah
Maljut Tiferet
Netzaj
Hod
Yesod
Maljut

Obsérvese que las únicas sefirot que no tienen correspondencia


en ningún caso son Jesed y Guevurah, y ello es así porque, al ser
los polos del eje ético (la Profundidad del Bien y la Profundidad
del Mal, según el Sefer Yetzirah), establecen las reglas del juego es-
pecíficas para cada uno de los cuatro niveles. Además, este hecho
confirma que es el sendero de La Justicia, y no el de La Fuerza,
el que los une.

MANUAL DE KABBALt\H PRÁCTICA 2 65


3.10.2. Correspondencias entre sender_
o s subjetivos

Nivel de Nivel de Nivel de Nivel de


ATZILUT BRIAH YETZIRAH ASSIYAH
Sº. 13 Sº O (22)
Sº. 14 Sº. 2 (mitad)
Sº. 15 Sº. 1
Sº. 16 Sº. 3
Sº. 18 Sº. 4
Sº. 20 Sº. 6
Sº. 21 Sº. 2 (mitad)
Sº. 13 Sº. O (22)
Sº. 14 Sº. 2 (mitad)
Sº. 15 Sº. 1
Sº. 16 Sº. 3
S0 • 18 Sº. 4
Sº. 20 Sº. 6
Sº. 21 Sº. 2 (mitad)
Sº. 73 - ------ Sº. O (22)
Sº. 14 Sº. 2 (mitad)
Sº. 15 Sº. 1
Sº. 16 Sº. 3
Sº. 18 Sº. 4
Sº. 20 Sº. 6
Sº. 21 Sº. 2 (mitad)

En este caso las correspondencias son proporcionalmente menos


abundantes que en las sefirot, pero no por ello menos interesantes.
Recogemos únicamente las que efectivamente se producen (como
en la sección anterior, indicadas por líneas horizontales), omitien-
do los senderos sin correspondencia. Por su extensión, el sendero 2,
la Sacerdotisa, se corresponde con dos senderos, el 14 y el 21.

A destacar que los senderos sin correspondencia en ningún nivel


(5, 7, 8, 9, 10, 11, 12, 17 y 19) representan también rasgos específi-
cos en cada uno de ellos, no extrapolables a otro. Así, por ejemplo,
las responsabilidades derivadas del funcionamiento del sendero 7
son diferentes en el nivel espiritual (Atzilut) del mental (Briah),
del astral (Yetzirah) y del físico (Assiyah). ·

2 66 V!LLARRUBIA / H AUT / M!LLERA


EJERCICto ·

,. <20, Busca loS moti;o~ cabalísticos por los que los senderos
. ,, sin ·c;:orrespondencia tienen Llti funcipnar,niento indepen-
>dien.te' én ca'qi,uno de. los ,niveles. No hay una solución
úniéar así qú1t pón en j~ego tú imaginación y tus cono- .
•cimientos 9e'Kahbalah. Y, cuando-encuentres, respuestas,
aplfc~les'Jos criterios: LUCIS;.por si acaso ...

3. 11. Las Tría das del Árbol


3.11. 1. Principios generales

Según quedó indicado en la sección 2, el Árbol de la Vida tiene,


en su configuración clásica, que es la que venimos utilizando, diez y
seis Triadas, formadas cada una de ellas por tres sefirot contiguas entre
sí y los tres senderos subjetivos que las unen dos a dos. El concepto
de Tríada aparece en la obra de Z' ev ben Shimon Halevi, si bien no la
desarrolla totalmente, y ello nos llamó la atención desde un principio.
Por otra parte, también nos sorprendía que, frente a tanta literatura
que establecía relaciones y correspondencias entre la Kabbalah y el ta-
rot, y más concretamente, entre éste y el Árbol de la Vida, no hubiese
la menor referencia a las figuras de corte del tarot que, en número de
cuatro por palo, responden a los nombres de Rey, Reina, Caballero o
Caballo, y Paje o Sota, ni menos aun a una posible correspondencia con
el Árbol. Cuando estudiamos a diferentes autores nos queda la impre-
sión de que el tema les resulta incómodo, y se salen de él como buena-
mente pueden. Posiblemente, quien más cerca ha estado de descubrir
la verdad ha sido Z'ev ben Shimon Halevi, pero, al no desarrollar de
forma sistemática (al menos, que nosotros sepamos) su investigación
sobre las Triadas, y quizá también por no ocuparse del tarot, tal vez no
se dio cuenta de que su número coincidía con el de figuras del mazo
de naipes, o no dio importancia a este hecho.
Las Tríadas, sin embargo, tienen un papel fundamental en el
Árbol de la Vida, y muy especialmente en su aplicación al Árbol

MAN U/\L DE KAB BALAH PRÁCTIC/\ 267


personal. Muchas pautas de comportamiento, muchos bloqueos,
difícilmente se explican si no se tienen en cuenta las Tríadas y su
configuración. Al estar formadas por sefirot y senderos subjetivos,
todas ellas participan tanto del carácter de las unas como de los
otros.
Pero las Tríadas reciben también influencia de los campos ex-
ternos del Árbol, Cielo, Tierra, Energético y Social. Esta influencia
opera en según qué casos, bien a través de senderos subjetivos y
sefirot a la vez, o bien exclusivamente a través de sefirot. Ello de-
penderá del tipo de Tríada y de su ubicación en el Árbol. A su
vez, cada elemento constitutivo de una Tríada es en cierto modo el
resultante de los elementos que tiene frente a él. Estas resultantes
obedecen a las siguientes reglas:
• Cada sefirá resulta de los senderos subjetivos opuestos en cada
una de las Tríadas a que pertenece, y del influjo de la parte de
campos externos con que esté en contacto, si es que lo está.
• Cada sendero subjetivo resulta de las sefirot opuestas en cada
una de las Tríadas a que pertenece, y del influjo de la parte de
campos externos con que esté en contacto, si es que lo está.
• Por excepción, el Sendero 8 es también resultante de la sefirá
oculta Daat.
Al estudiar cada Tríada se analizará cada una de estas fuerzas
resultantes, como complemento a sus significados. Haremos refe-
rencia a las sefirot y los senderos subjetivos que la constituyen,
las letras hebreas asociadas y sus contactos con los campos externos
al Árbol (ver fig. 11). También se examinarán las relaciones polares
internas entre sefirot y senderos subjetivos, las Tríadas de polari-
dades opuestas entre sí y el naipe del tarot asociado. Finalmente,
se estudiará el nombre hebreo de la Tríada desde el punto de vista
de la Kabbalah, lo que, como veremos, ofrece información comple-
mentaria sumamente interesante.
La situación en el Árbol de la Vida de cada una de las Tríadas
aparece en las figuras 27 y 28, la primera de las cuales contiene las
seis Tríadas estructurales, mientras que la segunda recoge las diez
Tríadas laterales, cinco activas y cinco pasivas. Por su parte, las rela-
ciones de las Tríadas con las figuras del tarot quedan resumidas en
las figuras 29 y 30, en la primera de las cuales, que clasifica las Tría-

2 68 ViLLARRUBI A / HAUT / MI LLERA


das por palos del tarot, podemos observar unas formas que corres-
ponden con la naturaleza de dichos palos. En los Bastos, símbolo del
Espíritu, o nivel de Atzilut, puede verse al Rey en la Tríada Suprema
o de las Raíces, completamente separado del resto de las figuras de
su palo, dando una imagen muy acertada del exilio de la Shejiná.
El resto de los palos tiene sus cuatro figuras enlazadas, pero cada
una tiene unas peculiaridades que merecen ser resaltadas. Así, las
Copas, símbolo de lo Anímico, los sentimientos y el nivel creativo
de Briah, no tienen conexión con Keter, lo que nos dice que mediante
este nivel se llega solamente hasta el eje Jokmah-Binah, pero como
éste representa el espacio-tiempo, se queda atrapado en él y no lo
trasciende en la Eternidad. Las Espadas, por su parte, símbolo de lo
Mental y el nivel de Yetzirah, se quedan sin poner los pies en el sue-
lo de Maljut. Tan sólo los Oros, símbolo del nivel físico de Assiyah,
tocan todos los niveles, aunque dejan en una especie de isla a Yesod,
lo que confirma la opinión judaica de que el mundo físico, con to-
das sus imperfecciones, es una buena cosa, necesaria para realizar el
Plan Divino de reconstrucción de la Unidad Perdida, para rescatar
a la Shejiná. En todos los palos, excepto los Bastos, el sentido ascen-
dente se desvía a veces en «callejones sin salida», trampas que impi-
den continuar el ascenso si no se abandona el palo, lo que equivale
a dejar el método de trabajo o la herramienta usada hasta entonces.
Tales «callejones» lo son, total o parcialmente, las Tríadas de la Ló-
gica (Sota de Copas), de los Miedos (Caballo de Espadas), de los
Deseos (Caballo de Oros), de la Innovación (Reina de Espadas) y de
la Conservación (Reina de Oros).
En cuanto a la figura 30, que clasifica las Tríadas por figuras,
nos permite ver que las de los Reyes, cuyo elemento es el Fuego,
adoptan una forma que recuerda la de una antorcha; las Reinas,
elemento Agua, configuran algo que recuerda poderosamente una
copa; los Caballeros, elemento Aire, recuerdan con sus Tríadas a un
ave con las alas extendidas; y las Sotas, relacionadas con la Tierra,
se concentran en un triángulo con el vértice hacia abajo, símbolo
de este elemento.
Observemos finalmente que la totalidad de las superficies de
las Tríadas de los Deseos y de los Miedos no tienen coincidencia
con otras Tríadas, por lo que se trata de experiencias que deben ser

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 269


vividas, y después abandonadas, cuando hayan cumplido su mi-
sión de enseñanza. Y de la misma forma, parte de las Tríadas de la
Innovación y de la Conservación quedan fuera del área de influen-
cia de cualquier otra Tríada, y en especial de la Ética, lo que indica
que ciertos aspectos de aquéllas (no todos) deben ser abandonados
una vez se hayan experimentado; o que, alternativamente, ofrecen
la posibilidad de crear unas nuevas escalas de valores, lo que im-
plica procesos de selección y eliminación.

2 70 VILLARRUBIA / H A UT / MI LLERA
Tríada de las ralees
Kether - Jokmah - Binah

Tríada de la Ética o de la
Triada de la Memoria
Conciencia Moral
o del Despertar
Jesed - Guevurah - Tiferet
Tiferet - Netzaj - Hod

Triada de la Triada del


Inserción en el Mundo Temple de Animo
Netzaj - Hod - Maljut Netzaj - Hod - Yesod

Figura 27
Las seis Tríadas estructurales.

Triada de la Ascética Triada de la Mlstica


Kether - Binah - Tiferet Kether - Jokmah - Tiferet

Triada de la Conservación Triada de la Innovación


Binah - Guevurah - Tiferet Jokmah - Jesed - Tiferet

Triada de los Miedos Triada de los Deseos


Guevurah - Tiferet - Hod Jesed - Tiferet - Netzaj

Triada del Impulso


Tiferet - Netzaj - Yesod

Triada de la Lógica Triada de la Iniciativa


Hod - Yesod - Maijut Netzaj - Yesod - Maljut

Figura 28
Las cinco Tríadas pasivas (izquierda, en gris)
y las cinco Tríadas activas (derecha, en blanco).

M AN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 271


BASTOS
Fuego
COPAS
Ag.ia o

ESPADAS
AirB

Caballo
DESEC6

Figura 29
Las Tríadas del Árbol de la Vida clasificadas por palos del tarot. Obsérvese
la «brecha» que presenta el palo de bastos, entre el Rey y el resto de las figu-
ras, y que simboliza el exilio de la Shejiná, el aspecto femenino de Dios.

2 72 V11. LARRUBIA / HAUT / MI LLERA


REYES REINAS

o
8ASTOS - R.f<et
Fuego (en epi, ,:!aro) ~

o o
o M,mo,lo

CABALLOS
o SOTAS
o
Aire
o Tierra
o
o
ESPADAS
Miedos
oOROS
Ots:t o:
o o
o
ESPADAS
Templidtkítn<>
o

o Inserción tn ti
Mundo

Figura 30
Las Tríadas del Árbol de la Vida clasificadas por figuras. La forma de cada
conjunto evoca poderosamente el elemento que representa.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 273


Tabla XVII
Correspondencia general de las Tríadas básicas
Triadas Básicasill Figuras y Palosill Nivel de Manifestación

Keter - Jokmah- Binah Reyes / Bastos Atzilut, Emanación


Jesed - Guevurah - Tiferet Reinas / Copas Briah, Creación
Netzaj - Hod - Yesod Caballos / Espadas Yetzirah, Formación
Maljut<2l Sotas/ Oros Assiyah, Acción

<1>Junto a esta correspondencia básica, hay otra específica, que asigna cada
figura a una Tríada concreta. Ver más adelante.
2
< l Maljuth se considera como una Tríada completa, por condensar en sí a los cuatro

elementos, incluidos, naturalmente, los tres más livianos, fuego, agua y aire.

Todos los reyes se relacionan con el poder, la autoridad, la pa-


ternidad y la enseñanza. Como consecuencia, les corres-
ponden los diversos aspectos de la maestría.
Todas las reinas se relacionan con la protección, la sumisión,
la maternidad y la palabra. Una forma de protección,
quizá la más eficaz, es la de impedir determinadas ac-
ciones potencialmente peligrosas a quienes no están
preparados para realizarlas; por eso su acción se con-
creta en las pruebas o evaluaciones.
Todos los caballos se relacionan con la acción, el movimien-
to, el riesgo y lo desconocido. Las prácticas previas a
las evaluaciones o pruebas son su campo específico de
acción.
Todas las sotas se relacionan con el aprendizaje y la dependen-
cia. Por eso también tienen que ver con los comienzos
prácticos de cualquier tipo.

2 74 VILLARRUBIA / HAUT / MI LLERA


3. 7 1.2. Las Tríadas del Árbol y el tarot
Antes de estudiar cada Tríada específica consideramos interesan-
te proporcionar una visión de conjunto de todas ellas en relación
con el tarot. Ello facilitará su comprensión posterior en cada caso
concreto. Existen muchos mazos de tarot, muchos de ellos muy
válidos y de gran belleza; sin embargo, hemos preferido seguir la
iconografía del Tarot de Marsella, tal como se ha presentado en
los senderos subjetivos en relación con los Arcanos Mayores, pues,
como se podrá comprobar, hay múltiples detalles en los dibujos
de las cartas que permiten confirmar las correspondencias entre
Tríadas y figuras, lo que sucede, en cambio, pocas veces cuando se
utilizan otras cartas de tarot.

3. 11.2. 1. Correspondencias generales

Hay tres Tríadas que se consideran básicas, porque resumen la


esencia de cada uno de los cuatro niveles o Mundos de la Mani-
festación. No debe olvidarse, sin embargo, que cada punto del
Árbol concentra en él la totalidad de los cuatro niveles o Mun-
dos, es decir, las diez sefirot y los veintidós senderos, así como
las diez y seis Tríadas resultantes y todos los demás elementos
derivados de ellos.

3.11.2.2. Correspondencias específicas

Además de las correspondencias generales, cada una de las Tría-


das se relaciona con una figura del tarot. El significado de cada una
de las Tríadas se desarrolla más adelante.

3. 7 7.3. Las Tríadas Estructurales


Las seis Tríadas Estructurales tienen sus tres vértices apoyados
en cada uno de los tres pilares del Árbol de la Vida. Uno de sus

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 2 75


lados, por lo tanto, es siempre una de las tres vigas. Manifiestan
aspectos de la expresión de la Consciencia. De arriba a abajo son
las siguientes:
• Dos de las Tríadas tienen común entre sí la Viga de la Espiritua-
lidad: la de las Raíces, que es puramente espiritual, y la de la Fe,
predominantemente espiritual, pero con aspectos mentales.
• Una sola Tríada se apoya en la Viga de la Individualidad,
la de la Conciencia Moral, Ética, o de las Escalas de Valores,
que es plenamente mental, pero está en íntimo contacto con
el mundo espiritual, y mantienen también relaciones con la
Personalidad.
• Tres Tríadas, finalmente, tienen común la Viga de la Personalidad:
la de la Memoria o del Despertar; plenamente mental, pero en
íntimo contacto con la Personalidad, y manteniendo relaciones
con el mundo espiritual; la del Temple de Ánimo, perteneciente
a la vez a la Individualidad y la Personalidad; y la de la Inserción
en el Mundo, esencialmente asociada a la Personalidad, pero en
contacto en los niveles mentales o de la Individualidad.

3 . 11.3. 1. Tríada de las Raíces

Sefirot que la forman: Keter - Jokmah- Binah.


Senderos subjetivos: O, El Loco - 1, El Mago - 3, La Emperatriz.
Letras-hebreas de los senderos: to - N - J
Relaciones con los campos externos:
Las sefirot. Keter contacta directamente con el Cielo en su doble
aspecto de Energía y Forma. Jokmah contacta con el Cielo en su
aspecto Energía, así como con el Campo Energético Transper-
sonal. Binah tiene contacto directo con el Cielo en su aspecto
Forma, así como con el Campo Social Transpersonal.
Los senderos subjetivos. El Sendero O recibe el influjo directo
del Cielo en su aspecto Energía; el Sendero 1, del Cielo en su
aspecto Forma; mientras el Sendero 3 no recibe influjos directos
de los campos externos.
Relaciones polares con el interior del Árbol. Estas relaciones
muestran la interdependencia entre los aspectos objetivos y subje-

276 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Tabla XVIII
Correspondencias específicas de las Tríadas

Tríada Sefirot Figura del Tarot

Tríadas de maestría

Raíces Kether-Jokmah-Binah Rey de bastos


Mística Kether-Jokmah-Tifareth Rey de oros
Ascética Kether-Binah-Tifareth Rey de espadas
Fe Jokmah-Binah-Tifareth Rey de copas

Tríadas de evaluación o examen

Innovación Jokmah-Jesed-Tifareth Reina de espadas


Conservación Binah-Guevurah-Tifareth Reina de oros
Conciencia moral Jesed-Guevurah-Tifareth Reina de copas
Memoria Tifareth-Netzaj-Hod Reina de bastos

Tríadas de práctica

Deseos Jesed-Tifareth-N etzaj Caballo de oros


Miedos Guevurah-Tifareth-Hod Caballo de espadas
Impulso Tifareth-Netzaj-Yesod Caballo de copas
Intuición Tifareth-Hod-Yesod Caballo de bastos

Tríadas de aprendizaje teórico

Temple de ánimo Netzaj-Hod-Yesod Sota de espadas


Iniciativa Netzaj-Yesod-Malju th Sota de bastos
Lógica Hod-Yesod-Maljuth Sota de copas
Inserción
en el mundo Netzaj-Hod-Maljuth Sota de oros

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 277


tivos, y mediante ellas se comprueba que tanto las sefirot como los
senderos subjetivos reciben influencia de más de una Tríada.
Las sefirot.
Keter se relaciona con los senderos 3, 4 y 6.
Jokmah se relaciona con los senderos 1, 2, 6 y 9.
Binah se relaciona con los senderos O, 2, 4 y 11.
Los senderos subjetivos.
El Sendero O se relaciona con Binah y Tiferet.
El Sendero 1 se relaciona con Jokmah y Tiferet.
El Sendero 3 se relaciona con Keter y Tiferet.
Tríada con oposición polar: la Tríada de la Fe.
Relación con el tarot: Rey de Bastos.
Comentario: La Tríada de la Raíces expresa todo aquello a lo
que cada uno se siente pertenecer: su familia, su cultura,
su patria, su lugar de nacimiento, pero también su época,
el tiempo en que le ha tocado vivir. En otras palabras, es
la manifestación de las coordenadas espacio-temporales en
las que nace; vive y muere. En su aspecto negativo se ma-
nifiesta mediante apegos, generalmente excesivos (aunque
todo apego lo es en el fondo) a valores tales como la patria,
la tradición, la familia, la lengua o la cultura.
Al estar formada por las tres primeras sefirot, tiene profun-
das conexiones con el Ser, con la Esencia de cada cual, pues no
es sino su verdadera manifestación. Cuando se utiliza la expre-
sión «ser uno mismo», o, como decía Antonio Blay, se manifies-
ta la «mismidad», es esta Tríada la que está actuando. Es, pues,
la síntesis de Energía y Forma en su manifestación más pura.
Desde el punto de vista subjetivo, los tres senderos que la
delimitan indican la entrega, la voluntad y creatividad, y la sín-
tesis de todas las oposiciones en un todo armonioso.
Las letras hebreas asociadas a los senderos, juntas, forman las
palabras ~NTU (shaág), bramido, rugido, grito, que nos habla del
clamor de la Esencia que es imposible acallar; y N~TU, que leído
sagá significa crecer, subir, leído segé significa grandeza, superio-
ridad, expresiones ambas en consonancia con la significación de
la Tríada. Además, el valor 304, que es lo que suman estas tres
letras, proporciona también la palabra =,,ii (zarzi/), uno de cuyos

278 VILLA RRUBIA / HAUT / MILLERA


significados es chorro o brote, como el que mana de una fuente,
pues es la Tríada de cuya corriente nacen todas las demás.
Las relaciones con los campos externos al Árbol nos muestran
que se trata de la Tríada que mayor contacto mantiene con ellos,
y que ese contacto es esencialmente celestial, y apenas trans-
personal, pero éste sólo en sentido objetivo, pero no subjetivo,
esto es, no susceptible de ser experimentado en tanto que sujeto.
La única posibilidad de tener alguna relación subjetiva con los
campos externos es mediante una actitud, bien de entrega (sen-
dero O), bien de creatividad (sendero 1, pero ambas requieren va-
ciarse previamente, no sólo de cualquier sentido del yo, sino de
cualquier contenido de la consciencia: recuerdos, prejuicios, etc.
En cuanto a las relaciones de polaridad interior, nos mues-
tran cómo actúan tanto las sefirot como los senderos subjetivos
que forman la Tríada. De las primeras, la interacción de Keter
se produce con los senderos subjetivos que se le oponen en la
propia Tríada de las Raíces (el 3), en la de la Mística (el 4) o en
el de la Ascética (el 6), lo que nos indica que la sefirá se ma-
nifiesta mediante las cualidades respectivas de síntesis, orden
y libertad. Por su parte, la interacción de Jokmah se produce
con los senderos subjetivos 1, 2, 6 y 9, lo que nos indica que su
manifestación tiene aspectos de creatividad y voluntad, de in-
tuición e iluminación, de libertad y de interiorización y mesura.
Por último, Binah interactúa con los senderos O, 2, 4 y 11, por lo
que su manifestación tendrá aspectos combinados de entrega,
intuición e iluminación, orden y disciplina, y autodominio den-
tro de las relaciones sociales.
Entre tanto, también puede contemplarse la actuación de la
Tríada en la interacción de sus senderos subjetivos. El Sendero O,
El Loco, al ser el opuesto polar de Binah y Tiferet, nos habla de
manifestaciones combinadas de los aspectos tiempo-forma con la
mente individual. El Sendero 1, El Mago, por su parte, combina
las manifestaciones de Jokmah (energía y espacio) con Tiferet, que
es la mente individual. Por último, el Sendero 3, La Emperatriz,
recibe plenamente los influjos combinados de Keter y Tiferet,
Brahman y Atman si hay armonía, y una frontera infranqueable
en caso contrario.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 2 79


En efecto, como las Tríadas de las Raíces y de la Fe son opues-
tas polares, por ser simétricas y tener un sendero subjetivo co-
mún, éste, el 3, actúa en caso de desarmonía como un frente de
batalla. Todos hemos conocido a personas (y puede que algunos
de nosotros estemos en ese caso) que creen en unos determi-
nados valores, en una determinada situación, pero se sienten
pertenecer a otra muy distinta, se sienten desplazados, sea es-
pacialmente («este no es mi sitio»), o temporalmente («he naci-
do en una época equivocada, he nacido en un tiempo que no es
el mío»).
El naipe del tarot correspondiente a esta Tríada es el Rey de
Bastos. Los Bastos, como madera que son, llevan en su interior
implícito el Fuego, que a su vez· simboliza el espíritu. Al ser
el rey la figura de mayor categoría entre las de corte de cada
palo, es lógica la asociación entre la Tríada y la carta. Los re-
yes indican maestría, mientras que las reinas son las encarga-
das de evaluar, de juzgar. Por su parte, los caballeros podrían
equipararse a los períodos de práctica que se realizan tras la
instrucción teórica (correspondiente a las sotas o pajes) previa
al examen simbolizado por las reinas. Tras éste, el aprendizaje
continúa, pero ahora de forma activa, impartiendo la enseñan-
za, que es como más se aprende.
El nombre hebreo para raíz es w,w (shoresh), con valor numé-
rico 800, el mismo que r,rz,¡, (keshet), el arco iris, que en muchas
mitologías se considera lazo de unión entre el Cielo y la Tierra.
La estructura de la palabra se similar a shemesh, el Sol, con la
diferencia de que sustituye la mem por la resh, o lo que es lo
mismo, el agua por el viento. De esta forma, se nos indica que
el Sol que ilumina todo el Universo, Keter, no está quieto, como
el agua, sino que fluye constantemente. El plural de «raíz» es
c~rv,w (shorshím), cuyo valor numérico de 850 remite a rl,:m (te-
jelet), azul celeste, que es el color ritual de las 32 bandas del chal
de oraciones judío, según las prescripciones de Números 15: 37.
Hay a este respecto un bello pasaje en el Libro de la Claridad
(Sefer ha-Bahir, XCII), que relaciona este color con el Árbol de
la Vida:

280 VILLARRU BIA / HAUT / MILLERA


«Él preguntó: ¿Por qué es azul el chal de nuestro manto de re-
zar, según figura en Números 15:37, etc? ¿Y por qué las franjas
que lleva son treinta y dos?. Eso es comparable a un rey que te-
nía un hermoso jardín con treinta y dos senderos vigilados por un
guardián a quien confiaba la existencia de ese laberinto. Para que lo
vigilara le dice: síguelos todos los días y toda vez que te demores en
sus dibujos y formas, la paz será contigo. ¿Y qué hace el guardián?
Compromete a otros guardianes en la vigilancia puesto que piensa:
Si lo hago solo n_o podré verlos todos, además la gente podría pensar
que el rey es avaro. Por ello otros más vinieron al jardín para vigilar
con el guardián los treinta y dos senderos mencionados».

Y escribe Mario Satz, traductor y comentarista del Sefer ha-Bahir:

«Los 32 senderos de los que habla el Séfer Yetzirá (1 : 1) y que


tienen por guardián a leb ~,, el «corazón». El azul o tejelet es
en realidad .i,,~M «celeste», el color del cielo. Discernible como lo
que está «debajo», tat nn de «todo», ,~ . Tras cualquier entidad
brilla el Paraíso, cuyas vías interiores son los famosos senderos».
(Nota 132).

Se confirma nuevamente, por tanto, el carácter de puente de


unión de esta Tríada con el Absoluto Inmanifestado de Ayin,
la Nada, nivel al que hemos dado en esta obra el nombre de campo
externo celeste.

3. 11.3.2 Tríada de la Fe

Sefirot que la forman: Jokmah - Binah-Tiferet.


Senderos subjetivos: 3, La Emperatriz - 4. El Emperador - 6. Los
Amantes.
Letras hebreas de los senderos:) - , - ,
Relaciones con los campos externos:
Las sefirot. La relación se produce exclusivamente en Jokmah y
Binah, respecto a los cuales nos remitimos a lo expuesto en la sec-
ción relativa a la Tríada de las Raíces. Tiferet, por su parte, es la úni-

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 2 81


ca, junto con Yesod, que no tiene relación con los campos externos.
Los senderos subjetivos. Ninguno de los tres senderos subjeti-
vos que forman la Tríada está en contacto directo con los cam-
pos externos.
Relaciones polares con el interior del Árbol.
Las sefirot.
Jokmah se relaciona con los senderos 1, 2, 6 y 9.
Binah se relaciona con los senderos O, 2, 4 y 11.
Tiferet se relaciona con los senderos O, 1, 3, 5, 7, 8, 10, 12, 16, 17 y 19,
todos los cuales son los opuestos a la sefirá en las Tríadas de las
que forman parte junto con la propia Tiferet.
Los senderos subjetivos.
El Sendero 3 se relaciona con Keter y Tiferet.
El Sendero 4 se relaciona con Keter, Binah y Jesed.
El Sendero 6 se relaciona con Keter, Jokmah y Guevurah.
Tríada con oposición polar: la Tríada de las Raíces.
Relación con el tarot: Rey de Copas.
Comentario: La Tríada de la Fe expresa, por una parte, la afirma-
ción que busca reconstruir la Unidad Perdida, y por otra, todo
el sistema de creencias y esperanzas, esencialmente las de tipo
no racional o mental. Y, como decía Krishnamurti, la fe (enten-
dida de la segunda forma) «engendra inevitablemente violen-
cia», como muy bien aprendieron las víctimas de la Inquisición
y hoy en día siguen aprendiendo las de los fanáticos religiosos,
sean cristianos fundamentalistas, musulmanes wahabíes o ju-
díos ortodoxos. Tiene, por tanto, como las demás Tríadas, un
aspecto positivo y otro negativo. Al ser una de las Tríadas que
superan la barrera del Abismo, es una de las vías para trascen-
der la división sujeto-objeto.
Está formada por las sefirot que representan al Padre Ookmah),
la Madre (Binah) y el Hijo (Tiferet), por lo que tiene profundas co-
nexiones con la familia y todo lo que significa. También aquí puede
contemplarse este aspecto en dos vertientes, una a nivel inferior,
de tipo esencialmente personal, que estaría representada por la fa-
milia camal, la cual está unida por lazos de sangre, y otra a nivel
elevado, de tipo esencialmente transpersonal, que se refiere a la fa-
milia espiritual, caracterizada por su unión mediante lazos que tie-

282 VILLARRUBIA / HAUT / M ILLERA


nen mucho que ver con objetivos concordantes en el cumplimiento
del tikún de cada uno de sus miembros. La figura 31 es una síntesis
de los aspectos más destacados de ambos tipos de familias. En rea-
lidad, puede considerarse que la familia carnal se expresa a tra-
vés de la Tríada de la Fe cuando ésta opera en el nivel de Assiyah,
el Mundo de la Acción.
Desde el punto de vista subjetivo, los tres senderos que la de-
limitan indican la síntesis entre la autoridad y el orden, por una
parte, y la libertad de elección y la renuncia por otra.
Las letras hebreas asociadas a los senderos, juntas, forman la
palabra ~i! (dug), pescar, lo que significa obtener un fruto de las
aguas, pero como las aguas representan todo el campo anímico
y emocional, en este caso, la palabra hebrea parece aludir a una
fe que, en último extremo, busca «obtener algo a cambio». Pero
no se refiere la Tríada tan sólo al contenido de las aguas (en este
caso, los peces que se pretende pescar), sino también a su con-
tinente, pues las tres letras citadas forman también la palabra
,,~ (god), odre. Y la prueba de que el planteamiento es en último
extremo insuficiente para alcanzar el Objetivo Último aparece
en la tercera palabra que se forma con estas letras, ,,~ (gadó) su
(de él) suerte, su felicidad. En otras palabras, las letras mues-
tran aquí el aspecto negativo de la Tríada, más que el positivo,
pues se trata de una fe de tipo mágico, primaria, en cierto modo
infantil, orientada a la obtención de cosas para cubrir necesida-
des. Y para ello, es preciso ofrecer a los dioses sacrificios que
casi siempre son sangrientos. Sin embargo, al hacer atbash de
las letras de la Tríada, los dioses que exigían tales sacrificios son
olvidados (i¡,1, pakar, ser ateo), y el hombre se encuentra en una
encrucijada, ¡,il) (pérek), que es a la vez el medio para despojarse
de sus adherencias (la misma palabra anterior, pronunciada pe-
rék, significa desnudar), para aliviarse de peso innecesario (con
otra pronunciación, parak, significa aliviar, liberar).
Las escasas relaciones con los campos externos al Árbol in-
dican que, por su carácter de Tríada interna, lo que manifiesta
pertenece casi exclusivamente a este ámbito. Luego, para la
manifestación externa, la Fe se deberá apoyar en las Tríadas
laterales.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 2 83


Las relaciones de polaridad interior de la Tríada son comple-
jas, en parte por la influencia que ejercen los campos externos
sobre Jokmah y Binah (ver antes, Tríada de las Raíces), pero so-
bre todo por la gran cantidad de senderos con oposición polar
con Tiferet. Es precisamente esta sefirá la que aporta mayor car-
ga de complejidad, lo cual no debe sorprender, puesto que, al
ser la que da lugar al nacimiento de la Individualidad, también
es la de la aparición del sentimiento de frontera, de límite sepa-
rador entre el Yo y el No-Yo. Por eso, encontramos influencias
a veces contradictorias entre sí: la voluntad propia y el aban-
dono a Dios, el espíritu lúdico frente a la actitud pragmática
que busca a toda costa resultados, los tirones del pasado y
del futuro que le roban energía ál presente, la búsqueda de
colaboración para las tareas frente a la necesidad de hacerlas
en soledad ... Pero quizá las fuerzas más desgarradoras que
recibe Tiferet, tanto en esta Tríada como en las de la Ética y la
Memoria se refieren a la contradicción que se plantea entre la
síntesis que propone el Sendero 3, frente a la actitud instin-
tiva del 16; entre ambos, el 8 debe ejercitar su discernimiento,
su racionalidad, dándose la paradoja de que por su esencia se
encuentra más próximo a lo que la Emperatriz simboliza, pero
por su naturaleza cercana a lo individual se siente más próximo
a los significados de La Torre.
En cuanto a los senderos subjetivos, ya vimos que el 3 recibe
la influencia simultánea de Keter y Tiferet, influencia que puede
acabar en choque frontal en caso de que el sendero esté mal as-
pectado. Los dos laterales, el 4 y el 6, reciben cada uno de ellos
la influencia de tres sefirot; de ellos, los dos inferiores desarro-
llan aspectos complementarios entre sí, mientras Keter actúa a
modo de árbitro. Así, en el 4 la fuerza expansiva de Jesed es
recogida y envuelta, enfriada podría decirse, por la oscuridad
de Binah; mientras que en el 6 es el fulgor relampagueante de
Jokmah el que es recortado por el rigor de Guevurah.
En el apartado anterior, al que nos remitimos, se examinó la
oposición polar entre las Tríadas de las Raíces y de la Fe.
La carta del tarot correspondiente a esta Tríada es el Rey de
Copas. Es la única de las Tríadas de Reyes que no contacta con

2 84 VILLAR RUBIA / HAUT / MILLERA


Keter por lo que, pese a su posición central, ocupa una posi-
ción en cierto modo subordinada. El agua y todos los líquidos,
muy especialmente la sangre, están representados en el palo de
Copas. Otro líquido de gran importancia, tanto en la liturgia
cristiana como en el ritual de Pésaj, la Pascua judía, es el vino,
que, si bien está prohibido por el Corán para los musulmanes
por su contenido alcohólico, ha sido sin embargo cantado por
los poetas sufis, como Rumi u Ornar Kheyyam como símbolo
del éxtasis y la entrega al Amado. La palabra hebrea para vino
es¡~~ (iaín), que, por contener en su interior el nombre divino~~
(leído Adonaí) y la letra nun, que significa percepción, es leída por
los cabalistas como percepción de Dios. Esta es una buena palabra
para designar lo que la Tríada de la Fe representa: se percibe
a Dios, pero no se llega a la unificación con ÉL De cualquier
modo, se trata de una Tríada de maestría, como las de los res-
tantes reyes de la baraja de tarot.
El nombre hebreo para fe, ;m~~ (emuná), con su valor de 102,
nos indica el carácter estabilizador (~:t\ ítzeb, estabilizar) de
esta Tríada.

EJÉRCICIOS

. 21 . Con lo qúe sabes hasta este momento, observa la figura 31


y trata de situar en e'I Árbol de la Vida todas ycada una de
las ~firmaciones que aparecen a continuación de dicha
figura, l.as cuales tienen una ubkación precisa.
22.Dibuja a lápiz ·un ,esquema de los senderos.subjetivos del ·
Árbol de la Vida, y escribe sobre cada una de las 22 líneas
,una frase que resuma el significado de ese sendero. - · ·
, , ·r ,,

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 285


Figura 31
Familia carnal y familia espiritual

Familia carnal Familia espiritual

Es base de partida para encon- Objetivo: realización del tikún y


trarse con la familia espiritual, encuentro con el Absoluto.
y no una meta en sí misma. Esencia: luminosa, energética
Su centro: la personalidad, el y no sometida a la forma.
sexo, el nacimiento y la muer- Forma: se mantiene oculta y
te, en función de todo lo cual nunca es permanente; tiene
actúa. cambios continuos.

286 YILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Se apoya en el mundo mate- Contenido: el amor, como acti-
rial, que es su punto de arran- tud de búsqueda perenne de
que y su escuela. la unidad.
Meta espiritual: unificación del Manifestación externa: basada
Yo, conseguida la cual podrá en el rigor, la justicia, la pre-
iniciarse el encuentro con la fa- cisión y la austeridad.
milia espiritual. No tiene un centro fijo, sino
Su eje: aprendizaje de la flexibili- que éste es móvil y cambian-
dad y de la capacidad de escu- te en todo momento.
char en profundidad a través Busca volver a las propias
del dolor. raíces, a la propia esencia.
Características subjetivas de sus Características subjetivas de
miembros: se basan en la co- sus miembros: la creativi-
municación oral, los bienes dad, la entrega y el desape-
materiales, las cantidades y la go, la capacidad de síntesis
econonúa doméstica. También de los opuestos, la discipli-
se manifiesta la comunicación na, la libertad con su capa-
no verbal, en especial el con- cidad de renuncia, el gozo,
tacto ñsico, la expresión de los la responsabilidad, el discer-
afectos y la magia doméstica. nimiento y la sociabilidad
Su polo interno: los contenidos unida a la capacidad para
del plano emocional y su fun- vivir la soledad.
cionamiento. Sus miembros se expresan
Su polo externo: la comunicación, mediante la Fe, entendida
la utilidad y los contenidos de como un gran Sí a la vida;
la mente concreta. la ascética, como vía para
Sus crisis tienen como finalidad encontrarse a sí mismos;
la disolución de las cristaliza- la mística, como búsqueda
ciones y la movilización de las permanente de lo Bueno,
inercias paralizantes. lo Bello y lo Verdadero; y la
También se manifiestan el espíri- aplicación a sus vidas de la
tu de cooperación, de concilia- Ética y la Estética.
ción y de trabajo en equipo, así Su eje: la identidad esencial
como la renovación, la gesta- con el Absoluto.
ción de nueva vida y el trabajo
en soledad.

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 287


Estímulos energéticos: iniciativas Sus contenidos no conscientes:
que ponen en marcha nuevos son sobre todo de naturale-
proyectos. za supraconsciente, numi-
Estímulos mentales: se apoyan nosos y relacionados con los
en la lógica y apuntan a un de- grandes arquetipos.
sarrollo de la intuición. Su proyección exterior, y por
Amplios contenidos subcons- tanto su influencia social,
cientes, en parte debidos a con- es importante a la vez que
dicionamientos genéticos, y en generalmente invisible.
parte a influencias sociales. Su punto de arranque: la unifi-
Cuando uno de sus miembros cación del Yo. Para alcanzar-
se acerca al encuentro con su la, cada uno debe vivir sus
familia espiritual comienzan propios miedos y deseos,
a aflorar los contenidos men- como experiencia, y después
tales del subconsciente y las debe abandonarlos, una vez
energías reprimidas por los que han cumplido su fun-
condicionamientos. ción de enseñanza.
La familia carnal puede sim- Su símbolo podría ser la estre-
bolizarse por la figura de la lla de seis puntas, que mues-
cruz, que tiene el sentido de tra que así como es arriba,
«densidad», pero también también es abajo.
el de «misión», o búsqueda
del cumplimiento del tikún a
través del manejo de los cua-
tro elementos.

Fuera del ámbito de ambos tipos de familia


Así quedan los medios y los deseos. Salvo como una referencia
para la unificación del Yo, son un estorbo para el cumplimiento de
los fines de una y de otra.

288 VILLARRUl31A / HAUT / MILLERA


3. 11.3.3 Tríada de la Ética o de la Conciencia Moral

Sefirot que la forman: Jesed - Guevurah - Tiferet.


Senderos subjetivos: 8, La Justicia - 9. El Ermitaño - 11. La Fuerza.
Letras hebreas de los senderos: M - ~ - ~
Relaciones con los campos externos:
Las sefirot. La relación se produce exclusivamente en Jesed y
Gevurah, sefirot ambas que están en punto fronterizo entre los
niveles personal y transpersonal, por lo que, recibiendo influjos
de los campos Energético y Social, respectivamente, actúan en
el Árbol como enlaces entre lo Individual y lo Cósmico.
Los senderos subjetivos. Ninguno de los tres senderos subjetivos
que forman la Tríada está en contacto directo con los campos
externos.
Relaciones polares con el interior del Árbol.
Las sefirot.
Jesed se relaciona con los senderos 4, 11 y 13.
Gevurah se relaciona con los senderos 6, 9 y 15.
Tiferet se relaciona, como ya vimos, con los senderos O, 1, 3, 5,
7, 8, 10, 12, 16, 17 y 19, todos los cuales son los opuestos a la
sefirá en las Tríadas de las que forman parte junto con la propia
Tiferet.
Los senderos subjetivos.
El Sendero 8 se relaciona con Tiferet y con la sefirá oculta,
Daat.
El Sendero 9 se relaciona con Jokmah, Guevurah y Netzaj.
El Sendero 11 se relaciona con Binah, Jesed y Hod.
Tríadas con oposición polar: A la vez las Tríadas de las Raíces y de
la Fe, hacia arriba, y las de la Memoria, el Temple de Ánimo y la
Inserción en el Mundo hacia abajo.
Relación con el tarot: Reina de Copas.
Comentario: La Tríada de la Ética es la que actúa expresando los
principios del Bien y del Mal, tal como los denomina el Sefer
Yetzirah, los cuales representan la Expansión y la Contracción,
y también se llaman Constructivo y Destructivo. Es, por tanto,
la Tríada que pone de manifiesto el discernimiento, la capaci-
dad de «separar el trigo de la paja», y es de particular impor-

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 289


tanda para determinar qué es útil y qué ha dejado de serlo o no
ha sido nunca. Como las decisiones en este sentido se toman
en función de escalas de valores, también es esta Tríada la que
las pone en marcha, como sistemas de referencia o «pilotos au-
tomáticos» para ciertas decisiones referidas a hechos repetiti-
vos. El problema es que en realidad los hechos nunca se repiten,
aunque a veces algunos se parezcan a otros, por lo que el apego
a una determinada escala de valores puede derivar en prejuicio
y llevar, a la larga, a clamorosos fracasos.
Está formada por las sefirot que representan a los principios de
Expansión y Contracción, los cuales, como enseña la Teoría de
la Relatividad, modifican las otras cuatro dimensiones, las tres
espaciales y la temporal. Estas dos esferas, como hemos visto,
están en contacto con los campos exteriores, por lo que actúan
la una, Jesed, como captadora de energía, a veces con predomi-
nio de la personal, a veces de la transpersonal, y como transfor-
madora con ayuda de la influencia social captada por la otra,
Guevurah, para terminar de configurar la Individualidad que
se manifiesta en Tiferet. Por eso, la Tríada de la Ética pone en
comunicación a la Mente Individual con la Mente Cósmica, que
opera, no sólo arriba, sino también en todo lo ancho de los cam-
pos externos del Árbol.
Desde el punto de vista subjetivo, los tres senderos que la de-
limitan indican el equilibrio entre la prudencia y la fuerza, así
como el control de ambas. El conjunto es semejante a los me-
canismos de control de un automóvil, en el que el acelerador
(Sendero 11) y el freno (Sendero 9) llevan la guía del volante
(Sendero 8), el cual es el que señala la dirección. Pero, en cual-
quier caso, con coordinación entre los tres aspectos.
No existe palabra alguna que pueda formarse combinando las
tres letras hebreas asignadas a los senderos subjetivos. Esta au-
sencia de palabras indica que los Principios Morales son ante-
riores a la creación de la misma luz (Génesis 1:3) y nacidos a
la vez que el Cielo y la Tierra (Génesis, 1:1). Era necesario, en
efecto, que existiesen unas «reglas del juego» antes de que co-
menzase el juego, en este caso la creación, que se produce en el
nivel de Briah, cuyo centro es precisamente Tiferet.

290 ViLLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Las escasas relaciones con los campos externos al Árbol indican·
que, por su carácter de Tríada interna y como en el caso de la
Tríada de la Fe, lo que manifiesta pertenece casi exclusivamen-
te a este ámbito. En la manifestación externa, la Ética se apoya
también en Tríadas laterales, tanto activas como pasivas.
También son complejas las relaciones de polaridad interior de la
Tríada, en parte por la influencia que ejercen los campos externos
sobre Jesed y Guevurah, pero sobre todo por la gran cantidad
de senderos que se relacionan polarmente con Tiferet, tal como
vimos en la Tríada de la Fe, a cuyo texto correspondiente nos re-
mitimos. La influencia sobre Jesed, esto es, sobre el Amor y la
Misericordia, además de la proveniente de los campos energéti-
cos externos, impone un orden y disciplina por parte del Sendero
4, el autodominio del 11 y la capacidad de perdón del 13. Por su
parte, la influencia sobre Guevurah se refleja en la elección y
renuncia del Sendero 6, la prudencia del 9 y la capacidad de re-
cordar del 15, senderos que recogen y reflejan la expresión polar
de dicha sefirá.
En cuanto a los senderos subjetivos, el 8 es un caso especial,
puesto que es el único que recibe el influjo de Daat, la sefirá
oculta, influjo que es necesario para equilibrar el procedente de
Tiferet. Por tanto, como Daat es la clave de conexión con los uni-
versos paralelos, pueden aparecer en el Sendero 8 motivaciones
a veces extrañas y desconcertantes, y sin embargo apuntando
a la solución correcta de los problemas. El Sendero 9, por su
parte, recibe la influencia de Jokmah (energía), Guevurah (ri-
gor) y Netzaj (el mundo emocional). Finalmente, el Sendero 11,
caracterizado por la fuerza interior y el autodominio, recibe la
influencia expansiva de Jesed, la cual es recogida por la envol-
tura oscura de Binah y la regulación de los detalles que practica
Hod.
Al ser la Tríada de cuya manifestación depende la expansión
o contracción de todas las demás (es decir, su mayor o menor
grado de manifestación), tiene polares opuestas tanto hacia arri-
ba (el sistema Raíces/Fe) como hacia abajo (sistema Memoria/
Temple de Ánimo/Inserción en el Mundo). Ello hace de esta
Tríada el centro de todo el Árbol a efectos de manifestación, con-

MANUAL DE l<ABBALAH PRÁCTICA 2 91


cordando con el carácter de esenciales o de doble dirección de
los tres senderos que la flanquean. Este carácter viene también
confirmado por el hecho de que, siendo la regente del Mundo
de la Creación, (Olam ha-Briah), los colores de las esferas en este
nivel son precisamente los tres primarios, azul, rojo y amarillo,
de los que derivan todos los demás. Pero no debemos olvidar
que, con todo y con eso, no es la Tríada suprema, cuyos tres
colores en ese mismo nivel son el blanco brillante, el gris y el
negro; o, lo que es lo mismo, en esta Tríada, la de la Ética, se ha
iniciado ya el proceso de diferenciación que conducirá a la uni-
dad, mientras que en la de las Raíces la Unidad se mantiene.
La carta del tarot correspondiente a esta Tríada es la Reina de
Copas. De las cuatro figuras, tres de ellas, Reyes, Reinas y Sotas,
presentan cada una dos Tríadas estructurales, una activa y una
pasiva. Tan sólo los caballeros no tienen Tríadas estructurales,
presentando dos activas y dos pasivas. En este caso, la Tríada es,
de las dos estructurales correspondientes a las Reinas, la supe-
rior, siendo el receptáculo de las influencias de la parte superior
del Árbol, como «fondo de la copa» que es (fig. 30). Como todas
las copas, tiene relación con los líquidos: ver a este respecto lo
dicho en la Tríada de la Fe sobre el agua, la sangre y el vino.
El aspecto femenino de las Reinas del tarot se manifiesta en el
plano anímico en sentido yin, receptivo, por lo que, por ejem-
plo, respecto a la sangre, mientras el Rey de Copas simbolizaría
a la propia sangre, la Reina correspondería al sistema venoso-
arterial, el Caballo al movimiento que la sangre lleva en las ve-
nas, y la Sota a su composición hemática y química.
El carácter de cáliz o receptáculo de la Tríada viene confirmado
por la palabra iill~ (kfor), uno de cuyos significados es precisa-
mente éste, y cuyo valor numérico, 306, es también el de io,~
(musar), que significa precisamente ética. Con el mismo valor
encontramos ,,~~ (tziur), que tiene los significados de dibujo,
figura, imagen, y también los de descripción, idea o concepto,
dando, con esta sola palabra, una buena aproximación, a la vez
amplia y precisa de la función de esta Tríada: la formación de
conceptos e imágenes mentales con arreglo a determinadas nor-
mas o pautas.

2 92 VILLARRUBIA / HAUT / MI LLERA


3. 7 7.3.4 Tríada de la Memoria o del Despertar

Sefirot que la forman: Tiferet - Netzaj - Hod.


Senderos subjetivos: 13, (sin nombre) - 15. El Diablo - 16. La Torre.
Letras hebreas de los senderos: ~ - O - V
Relaciones con los campos externos:
Las sefirot. La relación se produce exclusivamente en Netzaj y
Hod, sefirot ambas que están en punto fronterizo entre los ni-
veles externos personales, energético y social, con los sectores
externos de Tierra, energético y social o formal, en ambos casos
respectivamente.
Los senderos subjetivos. Ninguno de los tres senderos subjetivos
que forman la Tríada está en contacto directo con los campos
externos.
Relaciones polares con el interior del Árbol.
Las sefirot.
Tiferet se relaciona, como ya vimos, con los senderos O, 1, 3, 5,
7, 8, 10, 12, 16, 17 y 19, todos los cuales son los opuestos a la
sefirá en las Tríadas de las que forman parte junto con la propia
Tiferet.
Netzaj se relaciona con los senderos 9, 14, 15, 19, 20 y 21.
Hod se relaciona con los senderos 11, 13, 14, 17, 18 y 21.
Los senderos subjetivos.
El Sendero 13 se relaciona con Jesed, Hod y Yesod.
El Sendero 15 se relaciona con Guevurah, Netzaj y Yesod.
El Sendero 16 se relaciona con Tiferet, Yesod y Maljut.
Tríadas con oposición polar: las de la Ética, del Temple de Ánimo
y de Inserción en el Mundo.
Relación con el tarot: Reina de Bastos.
Comentario: La Tríada de la Memoria actúa de forma similar a la
de la Ética, pero a un nivel inferior, nunca definitivo, y siem-
pre provisional y transitorio. En efecto, en la Tríada de la Ética
veíamos cómo las escalas de valores vigentes en cada momen-
to conservaban o eliminaban contenidos según la aplicación
de normas que, en último extremo, aparecen grabadas desde
una instancia superior. En cambio, la conservación o elimina-
ción que efectúa la Tríada de la Memoria se efectúa mediante

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 293


el recuerdo y el olvido. Es una actuación necesaria, si se tiene
en cuenta que, de Tiferet para abajo, la Individualidad es ya
operativa, por lo que hay áreas que quedan fuera del Yo y son
contempladas como algo ajeno al mismo. Como consecuencia,
la capacidad de almacenamiento de datos se ha vuelto limitada,
y es necesario ceder paso a contenidos nuevos para evitar des-
bordamientos. De todas formas, se trata de una situación tran-
sitoria, puesto que el mismo hecho de ejercitar la memoria va
produciendo una expansión del recipiente, que se va haciendo
progresivamente mayor. Eso lo saben muy bien quienes reali-
zan tareas en las que la memoria se ejercita, que comprueban
cómo aumenta la capacidad de recordar cuanto más se utiliza.
Pero no es posible recordar lo que realmente no interesa; por
ello, el campo de interés al usar la memoria se vuelve también
cada vez mas vasto. Y ello, por su parte, genera otro efecto en
el nivel físico, también constatado por la Medicina: el retraso
en el envejecimiento de quienes mantienen activa su memoria,
o incluso el rejuvenecimiento. Por tanto, el eje espacio-tempo-
ral Jokmah-Binah se manifiesta en esta Tríada a niveles micro-
cósmicos, esto es, humanos.
La Tríada está formada por las sefirot que representan los nive-
les Emocional y Mental Concretos, dependiendo ambas del cen-
tro del Árbol que es Tiferet. Se trata en realidad de un solo nivel
con dos polos, el primero energético (aunque ya no de energía
unitaria, sino múltiple), y el segundo formal (también con mul-
tiplicidad de formas mentales). Al ser las sefirot laterales par-
te de muchas Tríadas a la vez, reciben influencias sumamente
complejas, a las que se añaden las de los campos externos perso-
nales y terrestres, energéticos y sociales. En todo este conjunto,
Tiferet actúa a modo de un centro de control y pilotaje.
Desde el punto de vista subjetivo, los tres senderos que la deli-
mitan indican el aprendizaje que se alcanza mediante fases al-
ternativas de recuerdo y olvido. En estas fases se producen pe-
riódicamente lo que en psicología del aprendizaje se denominan
«plataformas» (traducción del francés, plateau), períodos en los
que aparentemente no se está aprendiendo nada, y en realidad
son de asimilación de lo aprendido hasta ese instante. Son los

2 94 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


períodos en los que está operando el Sendero 13, a diferencia de
los de aprendizaje activo, en que opera el 15. El 16 actúa, como
todas las vigas del Árbol, de regulador; pero, al juntarse en esta
Tríada tal amalgama de influencias, cualquier intento de forzar
la máquina, sea en el sentido de acelerar el aprendizaje, o sea en
el de prolongar el plateau (lo más frecuente), genera inmediata-
mente una crisis, de resolución generalmente violenta.
Las tres letras hebreas asignadas a los senderos subjetivos de
esta Tríada forman algunas palabras que completan su senti-
do. Una es O~V ('amas), cargar, llevar, levantar, en línea con
uno de los títulos de la Tríada, el Despertar, que se consigue
asumiendo la carga de los recuerdos; cuando se pronuncia
ornes significa carga o peso. Otra palabra es VO~ (massá), via-
je, marcha, expedición, y también itinerario y movimiento: la
memoria nos pone en marcha y nos marca el camino a seguir.
¿El destino? La Unidad.
Las escasas relaciones con los campos externos al Árbol indi-
can que, por su carácter de Tríada interna y como en el caso
de las dos anteriores, lo que manifiesta pertenece casi exclusi-
vamente a este ámbito: el interno. En la manifestación externa,
la Memoria tiene su entronque, lógicamente, en lo personal, y no
en lo transpersonal, que es holístico y no secuencial, como lo es
la acción de esta Tríada.
Si eran complejas las relaciones de polaridad interior de la Tríada
de la Ética, más aun lo son las de la Tríada de la Memoria. Hasta
once senderos subjetivos están afectando a Tiferet, seis a Netzaj
y otros tantos a Hod, por lo que las influencias en la Tríada son
variopintas y siempre cambiantes. En aras a no extender dema-
siado estas líneas, nos remitimos a lo expuesto para cada uno de
esos senderos, en la sección 3.7. de esta II Parte.
En cuanto a los senderos subjetivos, cada uno de ellos recibe
influencias de tres sefirot. El 13 y el 15 reciben ambos la influen-
cia formativa de Yesod, y además, la de la sefirá superior de su
propio lado y de la inferior del lado contrario. En otras palabras,
mientras el 13 (lado derecho) recibe influencia de Jesed (Pilar de-
recho) y de Hod (Pilar izquierdo), el 15 las recibe de Guevurah
(Pilar izquierdo) y de Netzaj (Pilar derecho). Por tanto, el 13 es

MANUAi. DE KABBALAH PRÁCTICA 295


expansivo y mental, contrariamente al 15, restrictivo, energético
y emocional. Un caso especial es el sendero 16, que es el único
en todo el Árbol que recibe a la vez influencias de tres sefirot
del Sendero de la Flecha: Tiferet, Yesod y Maljut, por lo que sus
contenidos se refieren exclusivamente a niveles de consciencia,
pero no a polaridades; por eso es el 16 el sendero relacionado
con el aprendizaje.
Que se trata de una Tríada potencialmente conflictiva se com-
prueba a la vista de las otras con las que tiene oposición polar.
Su simetría respecto a Tiferet la opone a la Tríada de la Ética, por
lo que el conflicto entre ambas se manifestará entre el aprendi-
zaje y las escalas de valores. Por su parte, la coincidencia del
sendero 16 la opone a la vez a las 1'ríadas del Temple de Ánimo
y de Inserción en el Mundo. Respecto a la primera, un posible
conflicto se manifestará en dificultades para el aprendizaje si las
pruebas son demasiado duras o demasiado blandas; respecto a
la segunda, la dificultad para el aprendizaje se manifestará en
forma de apego conservador a la Tierra, que cuando se vuelve
«Madre Tierra», se traducirá en conservadurismo y tradiciona-
lismo a ultranza.
La carta del tarot correspondiente a esta Tríada es la Reina de
Bastos. Al corresponder los Bastos al elemento Fuego, represen-
ta el Espíritu en su aspecto femenino, esto es, la Shejiná, en el
exilio (ver fig. 29). Es el retorno a la Unidad Perdida el que im-
pone el aprendizaje, que no es sino recordar la verdadera esen-
cia. La idea del recuerdo viene señalada en el naipe por la figura
de la mujer madura que es la que muestra sus sueltos cabellos
de una longitud mayor. Por la misma razón hay una referencia
al tiempo, por lo que el naipe y la Tríada tienen una profunda
relación con la 3.ª sefirá, Binah. Por todo ello, esta carta repre-
senta mejor que ninguna otra a la Princesa secuestrada y ence-
rrada en el castillo, que está siendo custodiado por el dragón de
la ignorancia.
La palabra hebrea para memoria es¡,,~, (zikarón), término de-
rivado de,~, (zajar), recordar y con valor numérico 283. Este
número proporciona dos conceptos de suma importancia para
recalcar la esencia de esta Tríada. Uno es,,,,~~ (migdalor), faro,

296 VILLARRUBIA / HAUT / MILI.ERA


que guía a los barcos en la oscuridad de la noche, y que, como
tal palabra hebrea, es la contracción de iiN ~,~~ (migdal or), torre
de luz. ¡La Torre del Sendero 16, eje de esta Tríada, y la Luz de
la Memoria! La segunda expresión con valor numérico 283 es si
cabe más importante todavía: ;·w,, ¡iiN (arón Adonaí), el Arca de
la Alianza, que, tal como nos relata la Biblia, era utilizada para
que el pueblo judío, a través del Sumo Sacerdote, se comunicase
con Dios. Así pues, la Memoria, manifestándose en esta Tríada,
es la que establece la comunicación con Dios, puesto que permi-
te reconstruir el camino de retorno a nuestro propio Ser, cuya
esencia es divina.

3.11.3.5 Tríada del Temple de Ánimo

Sefirot que la forman: Netzaj - Hod - Yesod.


Senderos subjetivos: 16. La Torre -17. La Estrella -19. El Sol.
Letras hebreas de los senderos: V- ~ - ¡,
Relaciones con los campos externos:
Las sefirot. Como sucede en la Tríada de la Memoria, también en la
del Temple de Ánimo se produce la relación tan sólo en Netzaj
y Hod, sefirot que están ambas en punto fronterizo entre los
niveles externos personales, energético y social, con los sectores
externos de Tierra, energético y social o formal, en ambos casos
respectivamente.
Los senderos subjetivos. Ninguno de los tres senderos subjetivos
que forman la Tríada está en contacto directo con los campos
externos.
Relaciones polares con el interior del Árbol.
Las sefirot.
Netzaj se relaciona con los senderos 9, 14, 15, 19, 20 y 21.
Hod se relaciona con los senderos 11, 13, 14, 17, 18 y 21.
Yesod se relaciona con los senderos 13, 15, 16, 18 y 20.
Los senderos subjetivos.
El Sendero 16 se relaciona con Tiferet, Yesod y Maljut.
El Sendero 17 se relaciona con Tiferet, Hod y Maljut.
El Sendero 19 se relaciona con Tiferet, Netzaj y Maljut.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 297


Tríada con oposición polar: la de la Memoria. Como caso especial,
la Tríada del Temple de Ánimo es amplificada o «resonada» por
la de Inserción en el Mundo.
Relación con el tarot: Sota de Espadas.
Comentario: La Tríada del Temple de Ánimo tiene como mi-
sión la de fortalecer los aspectos anímicos primarios del Ser
para iniciar su elevación de consciencia. El concepto de alma
recibe en el Sefer ha-Bahir cinco nombres diferentes, los cua-
les son en realidad cinco tipos o categorías diferentes. La infe-
rior de todas ellas, correspondiente al alma vegetativa es W~~
(nefesh, valor numérico 430). Le sigue ni, (rúaj, v. num. 214),
que es el aliento vital, ya que esta palabra significa también
viento. El tercer nivel es i!~n (jayah, v. num. 23), el princi-
pio de la vida. A continuación, en orden ascendente, aparece
i!~W~ (neshamah, v. num. 395), que es el alma propiamente
dicha. Por último, en el nivel más elevado está i!i~n~ (yeji-
dah, v. num. 37), el más alto nivel alcanzable por el hombre,
lo que Jung denominó principium individuationis, el prin-
cipio de individuación, y que es en realidad su chispa espiri-
tual, su naturaleza divina. Pues bien, la misión de esta Tríada
es la transformación sucesiva desde nefesh hasta yejidah, pa-
sando por cada uno de los niveles intermedios. Se trata de
un proceso similar al del temple del acero, a cuyo final la
espada toledana o la katana del samurai se habrán vuelto a
la vez resistentes y flexibles, cortantes y elásticas.
El eje polar de los niveles Emocional (Netzaj) y Mental Concreto
(Hod) se vuelca aquí en el centro de la Personalidad, Yesod. Ello
significa que el Temple de Ánimo tiene mucho que ver con la
máscara, que eso es lo que significa la palabra «persona», o con-
junto de roles sociales que se van desempeñando progresiva-
mente. Es, por tanto, necesario que el entorno social interactúe
con el individuo, como mecanismo de formación y consolida-
ción de sus aspectos anímicos, mentales y espirituales. O mejor
sería decir «actualización» de esos aspectos, que de cualquier
forma se encuentran en el individuo de forma potencial, pero
que necesitan de un desarrollo y fortalecimiento para manifes-
tarse en toda su gloria. ·

298 VILLARRUBIA / Hi\UT / MI LLERA


Los senderos subjetivos que delimitan la Tríada indican ante todo
que se trata de un proceso de aprendizaje (Sendero 16), pero a un
nivel diferente del que pone en marcha la Tríada de la Memoria:
para poder ejercitar y desarrollar ésta, son necesarios un fortale-
cimiento y una flexibilización previos (el temple es precisamente
eso), pues, en caso contrario, los recuerdos, al hacerse presentes,
pueden desbordar, e incluso destruir a un alma inmadura. De ahí
la gran sabiduría de la Naturaleza, que no permite el recuerdo de
vidas pasadas sino cuando se está preparado para ello. De hecho,
los recuerdos de vidas pasadas surgen tras una preparación pre-
via de limpieza, de supresión de impurezas: el temple, mediante
el uso del fuego (en este caso, proporcionado por Netzaj) es el en-
cargado de quemar dichas impurezas, y entonces, tal como dice
Patañjali en sus Yoga-Sutras (3:18), «practicar samyama sobre las
propias tendencias y hábitos conduce a sus orígenes. En conse-
cuencia, se adquiere un conocimiento profundo del propio pa-
sado». Aclaremos que samyama no es sino el aspecto yóguico del
Temple de Ánimo: vivir a fondo cada situación hasta sus últimas
consecuencias, y hacerse uno con ella.
Puede formarse una palabra con las letras hebreas asignadas
a los senderos subjetivos de esta Tríada: Vi'~, que puede leer-
se paká, y entonces significa cortar, romperse, reventar, o peká,
cuyo significado es tanto brote, pimpollo, yema, como estré-
pito, o también grieta o hendidura. Todos estos significados
sugieren poderosamente la idea de una germinación o de la
eclosión de un huevo. Por tanto, se _trata de una fase necesaria
en el proceso de crecimiento. Pero, como esta fase es en reali-
dad un viaje hacia el interior de uno mismo, se nos equipa con
lo necesario para el mismo, tal como lo muestra el atbash, que
proporciona la palabra ,,, (zvad), valija, maleta, y también
equipo de soldado.
Como en el caso de las tres Tríadas anteriores, las relaciones
con los campos externos son escasas, por lo que se trata de otra
Tríada que también pertenece al fuero interno de cada ser, tan-
to humano como no humano. Nadie puede, en efecto, crecer
por nosotros ni fortalecerse por nosotros. Las escasas relaciones
con el exterior se realizan a nivel puramente personal, igual que

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 299


en la Tríada de la Memoria, lo que nos dice que el crecimiento
nunca vendrá dado por la pertenencia a un grupo determinado,
sea de tipo religioso, académico, iniciático, político o deportivo,
ni tampoco a una familia o a una clase social determinada.
Las relaciones de polaridad interior en la Tríada del Temple de
Ánimo son complejas, aunque no tanto como en las Tríadas en
las que participa Tiferet. De todas formas, tanto Netzaj como
Hod reciben cada una el influjo de seis senderos subjetivos, y
Yesod de cinco. Todos ellos son senderos de tipo mental o aní-
mico en diferentes niveles, lo que en términos generales signifi-
ca que la Tríada está recibiendo influencias tanto de los niveles
superiores como de los inferiores, debiendo asimilar y expresar
tendencias a veces de signo muy opuesto. Y de nuevo debemos
referirnos al proceso de temple del acero, el cual es sometido
alternativamente al calor del fuego y al frío del agua, y de esa
forma las cristalizaciones de los elementos que se añaden al hie-
rro (carbono, tungsteno, cromo, níquel, etc.), al tener diferentes
temperaturas de fusión van disolviéndose y haciéndose unas
con el hierro, hasta forjar el mejor acero; en resumen, una forma
de samyama metalúrgica.
Otra imagen útil para comprender mejor la naturaleza de esta
Tríada es observar que su superficie en el Árbol de la Vida coin-
cide totalmente con una parte de la de Inserción en el Mundo,
la cual sería semejante a la caja de resonancia de un instrumento
musical cuyas cuerdas serían precisamente la Tríada del Temple
de Ánimo. ¿No se dice «templar una guitarra», o una vihue-
la? Opera, pues, como un proceso de afinación de un instru-
mento, previo al concierto. Son los senderos subjetivos los que
deben afinarse, apoyándose en las clavijas que son las sefirot
de la Tríada, mientras que las sefirot opuestas a cada uno de
los tres senderos subjetivos serían como los dedos del guitarris-
ta, que pulsan ahora el 16, para comprobar como va el proceso
de aprendizaje respecto al nivel físico (Maljut), al nivel astral
(Yesod) y al nivel mental superior (Tiferet); o bien el 17, que a
los aspectos mental superior y físico añadirá el mental concreto
de Hod; o, finalmente, al 19, en el que Hod será sustituida por
las sutiles energías múltiples de Netzaj.

300 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


La carta del tarot correspondiente a esta Tríada es la Sota de
Espadas. Las espadas corresponden al elemento Aire, lo que in-
dica que se trata de una carta de actividad mental. Y, como las
sotas representan el aprendizaje en sus primeras fases, esa es,
precisamente, la naturaleza de esta Tríada. La carta es denomi-
nada a veces el Centinela, por su actitud de vigilancia extrema,
lo que indica que la Tríada a la que está asociada actúa estimu-
lando la vigilancia sobre las pulsiones internas (los samyamas,
como dice Patañjali) para conocerlos en su integridad. Pero al
moverse en relación con el ámbito social, cumple una función
importante, que es la de identificar y separar todos aquellos
contenidos de la consciencia (las impurezas) que entran en ella
«por la puerta trasera» y ocupan un lugar que no les corres-
ponden: sería como decir «a cada uno lo suyo, quédate con tu
basura, no la vuelques sobre mí, que la Madre Tierra tiene una
capacidad casi infinita para reciclarla y transformarla en buen
abono». Y paralelamente, también tiene la función de impe-
dir que nuestras propias energías y contenidos mentales sean
robados, «vampirizados» desde el exterior. Es, en definitiva,
la Tríada que enseña a decir NO cuando es necesario, por enci-
ma de la necesidad de ser aceptados por los demás.
Preferimos para temple de ánimo la expresión hebrea i'Ti~n~ ~~N
(ofí yejidah), con un valor numérico de 128, por presentar varios
conceptos que confirman contundentemente todo lo expuesto
en los párrafos anteriores. Encontramos en primer lugar l~~n (ja-
latz o jiletz), que significa tanto librar, expulsar o desembara-
zar (a la propia consciencia, en este caso, de contenidos ajenos),
como armarse o fortalecerse (crecer, en definitiva). También en-
contramos n~J (tzlaj), con los significados de hender, atravesar,
así como lograr, conseguir, triunfar, y también aparecer, surgir,
manifestarse: aquí tenemos la salida del cascarón, tras denoda-
dos esfuerzos. La finalidad de la acción de esta Tríada la encon-
tramos en otra palabra, también con valor 128: ¡~on (jásin o jasín),
fuerte, poderoso, o resistencia, con la primera de las pronuncia-
ciones, e incombustible con la segunda de ellas. ¿Es necesario
aclarar estos conceptos?

MANUAL DE KABBAI.AH PRÁCTICA 301


3.17.3.6. Tríada de la Inserción en el Mundo

Sefirot que la forman: Netzaj - Hod - Maljut.


Senderos subjetivos: 16. La Torre - 18. La Luna - 20. El Juicio.
Letras hebreas de los senderos: V - ~ -,
Relaciones con los campos externos:
Las sefirot. Netzaj y Hod se relacionan con los niveles personales
de los campos externos respectivos de la energía y de la for-
ma, ya la vez con el campo terrestre en sus aspectos respectivos
energético y formal. Maljut se relaciona con el campo terrestre,
en posición fronteriza entre los aspectos energético y formal.
Los senderos subjetivos. Mientras que el sendero 16 no tiene rela-
ción con el exterior del Árbol, el 18 está en contacto directo con
el campo terrestre energético, y el 20 con el terrestre formal.
Relaciones polares con el interior del Árbol.
Las sefirot.
Netzaj se relaciona con los senderos 9, 14, 15, 19, 20 y 21.
Hod se relaciona con los senderos 11, 13, 14, 17, 18 y 21.
Maljut se relaciona con los senderos 16, 17 y 19.
Los senderos subjetivos.
El Sendero 16 se relaciona con Tiferet, Yesod y Maljut.
El Sendero 18 se relaciona con Hod y Yesod.
El Sendero 20 se relaciona con Netzaj y Yesod.
Tríada con oposición polar: la de la Memoria. Como caso especial,
la Tríada de la Inserción en el Mundo actúa como resonadora o
reforzadora de la del Temple de Ánimo.
Relación con el tarot: Sota de Oros.
Comentario: La Tríada de la Inserción en el Mundo, como su nom-
bre indica, es la que opera directamente en el plano físico, por
lo que es la que hace posible la encarnación; en otras palabras,
la que proporciona la densidad y la inercia del plano material,
pero también la oportunidad de realizar el tikún, la búsqueda y
rescate de las chispas perdidas de la Shejiná. Tiene la particu-
laridad de ocupar una gran superficie en el Árbol, tanta como
la Tríada de la Fe, pero con la diferencia de que incluye otras
tres Tríadas completas, así como una sefirá, en su interior, por
lo que, en cierto modo, es una Tríada compuesta. Además, es

302 V!LLARRUBIA / HAUT / MILLERA ·


atravesada por Qeshet, la barrera del Arco Iris de colores astra-
les, por lo que es la manifestación práctica de un medio para
superar dicha barrera; lo que incluso es recogido por el lenguaje
popular: «¡Déjate de fantasías y pon los pies en el suelo!» Si exa-
minamos la naturaleza de su sefirá base, Maljut, nos daremos
cuenta de que es un resumen de los cuatro elementos. También
su semejanza a la Tríada de la Fe la hace comportarse a su nivel
de forma semejante a ésta: es un paso necesario para iniciar el
camino, pero también debe ser transcendida, pues en caso con-
trario, y al igual que aquella, no alcanzará jamás la meta; en el
caso de la Tríada de la Fe, Keter; en el de la Inserción, Tiferet.
Sin embargo, su asociación con el palo de oros del tarot le hace
pertenecer al único plano que está a la vez en contacto con los
mundos superiores y con los inferiores (ver fig. 29), a efectos de
la actuación individual.
Los senderos subjetivos que delimitan la Tríada indican que tam-
bién en este caso se trata de un proceso de aprendizaje (Sendero 16),
que aquí opera al nivel más primario, en contacto directo con
las fuerzas telúricas mediante los senderos 18 (en simpatía con
las energías) y 20 (con las formas). A través de Hod y Netzaj, en
cualquier caso, se mantiene una cierta relación con los niveles
personales más inmediatos.
Las letras asociadas a los senderos subjetivos de la Tríada for-
man varias palabras que complementan su significado. Pero to-
das ellas pueden agruparse en dos tipos básicos de significados.
la mayoría alude a la limitación que impone el plano físico y al
dolor que ello conlleva, y así encontramos,~ ('atzar), apresar,
contener; r,v ('aratz), asustar, temer; ,vi (tzaar, tzear o tzier), que
según se pronuncie significa respectivamente empequeñecer, do-
lor o aflicción, y afligir o atormentar. Sin embargo, una de las
palabras anteriores, riv, leída eretz, significa fuerza, vigor, lo
F

que llena de significado todo el conjunto: la limitación y el dolor


asociado a ella tienen como misión fortalecer. En otras palabras,
el nivel físico sería semejante a un centro de adiestramiento de
marines norteamericanos, sólo que algo más refinado.
Ya hemos visto que las relaciones con los campos externos son
amplias en esta Tríada. En realidad se trata de la Tríada cuyas

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 303


relaciones son más amplias y abiertas, pues no se trata sólo de
un proceso de aprendizaje nuestro, sino también muy probable-
mente de Gaia, la Madre Tierra, que está creciendo en busca de
la supraconsciencia junto con nosotros, sus hijos.
Las relaciones de polaridad interior en la Tríada de la Inserción
en el Mundo son algo más simples que en las Tríadas superio-
res, quizá con la excepción de la de las Raíces. Ello se explica por
el relativamente escaso número de conexiones que tiene Maljut,
sefirá que, por su inercia y densidad, es incapaz de manejar
simultáneamente un gran haz de polaridades, tal como hace
Tiferet. Las influencias sobre Maljut, en todo caso, al proceder
de los senderos 16, 17 y 19, hablan de un aprendizaje mediante
el trabajo, simultáneamente a un fluir conforme a los ritmos de
la naturaleza. Por la coincidencia de dos de sus sefirot, la Tríada
de Inserción en el Mundo tiene bastantes semejanzas con las de
la Memoria y del Temple de Ánimo, pudiendo decirse que ope-
ra a semejanza de éstas, si bien es obvio que a un nivel inferior,
que en este caso es el del nivel físico, en el que energías y formas
adquieren su fusión final.
Según se indicó en la sección anterior, la Tríada de la Inserción
en el Mundo actúa también como un resonador, una caja de re-
sonancia de la del Temple de Ánimo. No produce la melodía,
pero la hace audible.
La carta del tarot correspondiente a esta Tríada es la Sota de
Oros. Debe destacarse que se trata del único naipe, entre los 56
de palo, que lo dobla, por decirlo así. Esto se aprecia claramente
en el Tarot de Marsella y en aquellos otros que, como el Balbi,
están su misma línea. En efecto, podemos ver a la figura del
paje o sota, de frente, con un gran sombrero sobre su cabeza,
similar al que también llevan la Sota de Espadas, el Caballero de
Bastos, los cuatro Reyes y los Arcanos Mayores I (El Mago) y XI
(La Fuerza). El sombrero, en forma de signo del infinito oo alude
al mundo del Espíritu, Olam ha-Atzilut, que se asienta sobre la
mente (la cabeza). Lo más interesante es que la figura sostiene
con su mano derecha (la de la acción voluntaria y consciente) el
disco de oro que indica el palo, disco que se repite en el suelo,
junto a su pie derecho, indicando que es un camino que se ini-

304 VILLARRUBIA / H AUT / MILLERA


cia en ese momento. Pues, aunque el oro representa lo denso,
también representa lo incorruptible. También es una alusión a la
máxima hermética «Como es arriba así es abajo». En definitiva,
se indica la necesidad de encarnar para realizar la misión sagra-
da del cumplimiento del tikún, del rescate de la Divina Princesa.
Y encarnar significa poner los pies en el suelo, tal como los
asienta sólidamente la figura de la Sota de Oros, y no «colgar-
se». Por muy agradable y gratificante que sea este estado, por
muy espiritual que parezca .. .
La expresión hebrea para inserción en el mundo es c~,V~ =,,,~
(tzeruf be-olam), con un valor numérico de 524, para el que en-
contramos un solo concepto, aunque bastante significativo de
por sí: n,, -ip~ (ikar rúaj), de noble espíritu. En muchas de las
canalizaciones que se han publicado (algunas han llegado ser
grandes éxitos editoriales) se insiste una y otra vez en el gran
valor, la gran altura de miras que tienen las almas cuando deci-
den encarnar en el plano físico. Y es lógico pues, ¿quién sino un
caballero - no importa si su sexo es femenino o masculino - pue-
de partir al rescate de la Princesa, que permanece secuestrada
en un lejano castillo y guardada por el Dragón de la Ignorancia,
un ser de noble espíritu?. En resumen, la Tríada de la Inserción
en el Mundo, no sólo es necesaria para el desarrollo del Plan
Divino, sino que también es un timbre de honor aceptar lo que
representa y cumplir lo que en ella se propone.

3. 1 7.4. Las Tríadas activas

Se apoyan en los pilares del Equilibrio y la Misericordia, y son


esencialmente energéticas, esto es, expresan cada una en su nivel
diferentes grados de energía, tanto más sutil y unitaria cuanto más
alta está situada en el Árbol de la Vida. Dos de ellas son predomi-
nantemente de interiorización, la de la Mística y la del Impulso,
aunque la primera está abierta al campo externo celestial. Otras
dos, la de los Deseos y la de la Innovación, se abren hacia el cam-
po energético externo, por tener uno de sus senderos subjetivos
en contacto con éste. La quinta, la de la Iniciativa, está abierta al

MAN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 305


campo terrestre energético, del que recibe su influencia. Pasemos a
estudiarlas, empezando por la más elevada.
Por otra parte, en dos de ellas predominan los aspectos espirituales,
aunque tienen aspectos relacionados con la Individualidad, y mantie-
nen un cierto contacto con la Personalidad. Son la de la Mística y la
de la Innovación. Otra, la de los Deseos, es puramente mental, pero
contacta con los mundos del Espíritu y de la Personalidad. Las dos
últimas, la del Impulso y la de la Iniciativa, pertenecen a la vez a los
ámbitos de la Individualidad y de la Personalidad, pero con predomi-
nio del primer aspecto en la del Impulso (la cual, además, tiene algún
contacto con el nivel espiritual), y del segundo en la de la Iniciativa.

3. 11.4. 1. Tríada de la Mística

Sefirot que la forman: Keter - Jokmah -Tiferet.


Senderos subjetivos: O (22). El Loco - 2. La Sacerdotisa.
4. El Emperador.
Letras hebreas de los senderos: t:,t - .: - i
Relaciones con los campos externos:
Las sefirot. Keter, la sefirá suprema, está abierta al campo celeste
en su doble vertiente energética y formal. Jokmah también está
abierta al campo celestial energético, y además al campo energé-
tico transpersonal. Tiferet, por su parte, al ser una de las sefirot
interiores, no tiene contacto directo con ningún campo externo.
Los senderos subjetivos. El Sendero O(22) se mantiene abierto al cam-
po celeste energético, mientras que los otros dos senderos son inte-
riores y sin relación directa, por tanto, con campos externos.
Relaciones polares con el interior del Árbol.
Las sefirot.
Keter se relaciona con los senderos 3, 4 y 6.
Jokmah se relaciona con los senderos 1, 2, 6 y 9.
Ttleret se relaciona con los senderos O, 1, 3, 5, 7, 8, 10, 12, 16, 17 y 19.
Los senderos subjetivos.
El Sendero O (22) se relaciona con Binah y Tiferet.
El Sendero 2 se relaciona con Jokmah y Binah.
El Sendero 4 se relaciona con Keter, Binah y Jesed.

306 VII. LARR UBIA / HAUT / M I i.LERA


Tríada con oposición polar: la de la Ascética.
Relación con el tarot: Rey de Oros.
Comentario: La Tríada de la Mística manifiesta el empuje energéti-
co sobre la consciencia para intentar ver en cada cosa y en cada he-
cho la Belleza de la Creación. El místico, si en verdad lo es, trata de
acomodarse en todo momento a la voluntad de Dios, como bien su-
premo. Como consecuencia de ello, se dice a sí mismo: « Todo lo que
sucede, todo lo que hay, todo lo que existe, responde a la voluntad
de Dios, pues en caso contrario no existiría; por lo tanto, debe ser
bueno, debe ser una manifestación del Bien Supremo. Si a mí no me
lo parece no es porque no sea así, sino porque debe de haber algo
en mi visión que me lleva a una percepción errónea que debe ser
corregida. Así pues, no haré nada para arreglar lo que veo mal, sino
que lo haré para arreglar mi propia visión». Con otras palabras, es
lo mismo que propone Amaud Desjardins: «Si mi mundo (es decir,
mi visión del mundo) no coincide con el mundo, y la infelicidad
consiste en la falta de concordancia entre mi mundo y el mundo,
trabajo para que sea mi mundo el que coincida con el mundo, y no
al revés». Es una Tríada que atraviesa el Abismo, por lo que es uno
de los caminos para superar la dualidad sujeto-objeto.
Los senderos subjetivos que fijan el contorno de la Tríada mues-
tran un grado de maestría en el que la consciencia de Unidad
(o al menos de su búsqueda) del Sendero 2 se coordina con la
entrega del Sendero O y con la disciplina interior y el afán de
perfección del Sendero 4.
Todas las palabras que pueden formarse con las letras asocia-
das a los senderos subjetivos de la Tríada tienen relación con
la dulzura y la miel, variando sólo su pronunciación para te-
ner diferentes significados. En efecto, w~,, pronunciado dabash
significa endulzar; si la pronunciación es dabosh, meloso; si do-
besh, miel; si dibash, preparar hidromiel; y si dubash, «hidrome-
lado». Todo ello indica la característica dulce de la mística, que
si se tornase negativa podría llegar a empalagar e indigestar.
La clave está en la inversión de las letras mediante el método de
atbash, que proporciona las palabras w¡,~ (bikash), buscar; ~w¡,
(kesheb), atención, que leída kashob significa escuchar con aten-
ción; y ¡,~w (shabak), abandonar, dejar. El conjunto apunta a que

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 307


no basta con saborear la dulzura del encuentro, sino que se debe
buscar y prestar atención, permanecer a la escucha, hasta que,
tras haber comprendido que los esfuerzos son en último extre-
mo inútiles, abandonarse, pues era la tensión de la búsqueda la
que le impedía unirse con el Amado.
La relación a través del Sendero del Loco con el campo celes-
te energético indica que las influencias recibidas de él no son
filtradas, sino que tal como vienen, informes (es decir, sin for-
ma), así entran. Tales influencias energéticas serán canalizadas
por la intuición del Sendero 2 y la disciplina del 4 hasta llegar
a Tiferet, donde se unirán a las influencias que procedentes
del campo celeste formal, son moldeadas por• el Sendero 1 y
canalizadas entre el 2 y el 6, tal como se verá en la Tríada de la
Ascética.
Las relaciones de polaridad interior en la Tríada de la Mística
respecto a las sefirot que la integran nos muestra a Keter frente
a los senderos 3, 4 y 6, tal como vimos al estudiar la Tríada de las
Raíces. Jokmah recibe por su parte influencias de los senderos
1, 2, 6 y 9, Mientras que Tiferet, como hemos visto repetidas ve-
ces, tiene frente a sí hasta un total de once senderos subjetivos.
La consecuencia es que hay una gran carga de influencias en
la sexta sefirá, mientras que es comparativamente escasa en las
dos sefirot superiores, y puesto que la tendencia es que lo más
lleno ocupe el espacio de lo más vacío, se produce un fuerte
empuje ascensional, que es, precisamente, la característica fun-
damental de esta Tríada.
En cuanto a las influencias polares recibidas por los senderos
subjetivos, hay que señalar que la fuerza amortiguadora de
Binah afecta al Sendero Omediante la aparición de los primeros
arquetipos de formas, que apenas organizan la fuerza ascen-
sional de Tiferet. Por su parte, el Sendero 2 recibe la influencia
equilibrada de Jokmah y Binah, influencia que en muchas oca-
siones se transforma en fricción entre ambas sefirot, al modo de
un rifirrafe de esos que ocurren de vez en cuando en las parejas
bien avenidas. Es la influencia amorosa de Jesed la que afecta a
la Tríada a través del Sendero 4, poniendo casi siempre armonía
en ella.

308 YILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


La carta del tarot correspondiente a esta Tríada es el Rey de Oros,
que, sorprendentemente, es el único que en el Tarot de Marsella no
lleva corona, conformándose con una bordada o dibujada en el gran
sombrero con que cubre su cabeza. Otro detalle significativo es que
es el único de los cuatro que aparece con las piernas cruzadas, en
posición similar a la que mantienen El Emperador (Arcano IV) y,
pese a colgar de un patibulo, El Colgado (Arcano XII). Dada la épo-
ca en que nació el tarot, esta posición debe interpretarse como signo
de realeza, pues en ciertas cortes medievales el rey era el único que
tenía derecho a cruzar las piernas. Por lo tanto, el Rey de Oros sim-
boliza la verdadera realeza, que se explica a la vista de la figura 28:
sólo quien ha recorrido todos los niveles, desde lo más bajo, puede
considerarse en justicia rey, pues su reino no es heredado, sino ad-
quirido con su esfuerzo. El místico ha debido partir de lo más bajo,
pues, para llegar a conocer y vivir lo Bueno, lo Bello y lo Verdadero,
antes ha tenido que experimentar lo Malo, lo Feo y lo Falso.
La expresión hebrea para mística es precisamente rl,~-, (kabbalah)
(ver en I,7, su estudio cabalístico), la Kabbalah, que es sin más,
la mística del judaísmo. Y como la mística de la Kabbalah es sobre
todo sabiduría, pues es llamada mrc~ nc~n (jokmah nistarah), sa-
biduría secreta, hace buena la observación que Virgilio le hace a
Dante en la Divina Comedia: el Infierno no es el lugar destinado a
los malos, sino a los tontos. Ello está en línea también con la doc-
trina de Buda de que la ignorancia es la raíz de todo sufrimiento; o
de tantas imágenes hindúes del dios Shiva, que en su danza aplasta
con los pies el demonio de la ignorancia. Por tanto, el Rey de Oros
lanza un mensaje de sabiduría, y nos recuerda las palabras del pro-
feta Daniel (ver antes, ref. versículo 12: 3): los que hayan sido sabios
brillarán como el resplandor del firmamento.

3. 11.4.2. Tríada de la Innovación

Sefirot que la forman: Jokmah- Jesed -Tiferet.


Senderos subjetivos: 4. El Emperador - 5. El Pontífice.
9. El Ermitaño.
Letras hebreas de los senderos:, - M - to

M A NUAL D E KABBALAH PRÁCTICA 3 09


Relaciones con los campos externos:
Las sefirot. Como en todas las Tríadas laterales, la de la Innovación
tiene dos sefirot en contacto con los campos externos; en este
caso, se trata de Jokmah y Jesed, mientras que Tiferet es una
sefirá interna. En cuanto a Jokmah, su contacto es fronterizo
entre los sectores energéticos celeste y transpersonal, mientras
que Jesed lo es entre los sectores energéticos transpersonal y
personal.
Los senderos subjetivos. El Sendero 5 está en contacto directo con
el campo energético transpersonal, no así los otros dos que con-
figuran la Tríada.
Relaciones polares con el interior del Árbol.
Las sefirot.
Jokmah se relaciona con los senderos 1, 2, 6 y 9.
Jesed se relaciona con los senderos 4, 11 y 13.
Tiferet se relaciona con los senderos O, 1, 3, 5, 7, 8, 10, 12, 16, 17 y 19.
Los senderos subjetivos.
El Sendero 4 se relaciona con Keter, Binah y Jesed.
El Sendero 5 se relaciona exclusivamente con Tiferet.
El Sendero 9 se relaciona con Jokmah, Guevurah y Netzaj.
Tríada con oposición polar: la de la Conservación.
Relación con el tarot: Reina de Espadas.
Comentario: La Tríada de la Innovación es la encargada de poner en
marcha todo lo nuevo que es ideado mediante los senderos subjeti-
vos, por lo que tiene una profunda relación con todos aquellos que
de alguna forma trabajan con lo nuevo o lo desconocido: el 1, el 10
y el 19, en sentido directo, y el O, el 18 y el 20 en sentido indirecto.
Esto es así, pese a que ninguno de ellos pertenece a la Tríada de la
Innovación, porque, recordémoslo, en cada punto del Árbol está
el Árbol entero, a modo de un holograma grabado mediante láser.
En este caso, la Tríada corta, a veces drásticamente, con todo lo vie-
jo e inservible, siendo por ello una de las maestras del desapego.
Además, al atravesar el Abismo, es también una de las herramien-
tas para superar la dualidad sujeto-objeto.
Para que la innovación se plasme en resultados concretos es ne-
cesario que se den las condiciones adecuadas, tanto objetivas
como subjetivas. Así, respecto a las primeras, las sefirot de la

31 Ü VILLARRUBIA / HAUT / MI LLERA


Tríada exigen ante todo lugar la existencia de la adecuada ener-
gía (Jokmah) dentro de un entorno social y cultural que facilite
su manifestación, aunque este entorno puede ser a veces hostil,
en cuyo caso las fuerzas de las otras dos sefirot de la Tríada debe-
rán presentar una sobrecarga importante; después, será necesario
que el objeto u objetivo a que se refiere la innovación sea atracti-
vo (Jesed); por último, se requiere que haya una individualidad
que cree, lo que significa a efectos prácticos que haya un grado
razonablemente bueno de unificación del ser individual (Tiferet).
En cuanto a los senderos subjetivos de la Tríada, imponen como
condiciones para la manifestación de lo nuevo, de lo verdadera-
mente nuevo, un orden y disciplina en el trabajo (Sendero 4), un
gozo por el «estar haciendo» (Sendero 5), y reflexión en soledad.
Si no recordarnos mal, parece que fue Newton quien dijo que in-
ventar requería un diez por ciento de inspiración y un noventa
por ciento de transpiración.
La imposibilidad de formar ninguna palabra con las letras he-
breas asociadas a los senderos subjetivos de la Tríada nos mues-
tra que no es posible saber a priori en que consistirá la innova-
ción, pues, en caso contrario, ya no sería innovación. Tan solo el
significado de las letras aisladas indica que se trata de abrir (~)
una puerta (i), tras la que nos podernos encontrar con algo que
puede ser tanto bueno como peligroso (la letra teth, ti, significa,
además de bien, serpiente en posición de ataque). Por su parte,
la necesidad de abandonar la actitud innovadora en un momen-
to dado aparece cuando se hace atbash de las letras asociadas a
los senderos, con la palabra f)i' (kanetz), término, límite, extre-
mo; en otras palabras, la innovación es un callejón sin salida si
se prolonga más allá de lo necesario.
El campo energético transpersonal incide en la Tríada a través
del sendero 5, por lo que las energías son filtradas por éste y
coloreadas con gozo. El verdadero innovador es siempre, a su
manera, un gran humorista, porque no se torna en serio lo viejo,
lo antiguo, corno sería de desear según el punto de vista de los
bienpensantes. Por eso, el innovador es muchas veces un hereje,
y condenado corno tal, pese a que su intención es siempre abrir
nuevos caminos, tender puentes que establezcan comunicación

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 3 11


por encima de abismos y precipicios. Para que la innovación sea
verdaderamente servidora del Bien, debe efectuarse mediante
la conjunción de los senderos 4 y 9, el orden interior y la pru-
dencia, respectivamente.
En las relaciones de polaridad interior de las sefirot de la Tríada
también se produce una fuerte diferencia de potencial, pues los
once influjos que recibe Tiferet son escasamente compensados
por los cuatro de Jokmah y los tres de Jesed. En realidad de trata
de un hecho que afecta a las cuatro Tríadas activas superiores,
lo mismo que a las cuatro Tríadas pasivas superiores. Sólo la
activa de la Iniciativa y la pasiva de la Lógica escapan a este alto
voltaje, lo que explica la inercia que ambas poseen.
En cuanto a los senderos subjetiv6s, llama la atención la única
polaridad que enfrenta el Sendero 5, correspondiente a Tiferet,
frente a las tres que mantienen los senderos 4 y 9. Por eso, tam-
bién se produce a nivel subjetivo una diferencia de potencial,
en la misma dirección que la que procede de las sefirot. El sen-
dero clave de la Tríada es, sin embargo, el 9, ya que las tres in-
fluencias que recibe de sus sefirot opuestas (Jokmah, Gevurah y
Netzaj) son de carácter «ígneo», ya que estas esferas se expresan
en el elemento Fuego. Por eso, se habla de la innovación como
de una chispa que enciende la llama, .:lii~ (Iahab), pudiendo lo
mismo iluminar que destruir. La prudencia simbolizada por el
sendero 9 es la encargada de regular y seleccionar lo que se debe
y lo que no se debe innovar, pues la Tríada tiene aspectos que,
en caso de descontrol, podrían tornarse peligrosos. En la super-
ficie coincidente con la de la Tríada de la Ética se simbolizan los
aspectos positivos de la Innovación, y en el resto los negativos.
La Tríada polarmente opuesta a la de la Innovación es la de
la Conservación, cuyo impulso hacia el exterior puede ser tan
fuerte como el de aquélla, pero de sentido contrario. Como en
este caso el campo externo es social y transpersonal, el innova-
dor puede encontrarse enfrentado a presiones fortísimas de su
entorno, que pueden llevarle a serios peligros, como bien pro-
baron tantos innovadores cuyas ideas chocaban con lo estable-
cido. Un caso patente es el de Galileo, cuya teoría heliocéntrica
mereció la condena de la Santa Madre Iglesia.

312 VILLARRUBIA / H AUT / MILLERA


La carta del tarot correspondiente a esta Tríada es la Reina de
Espadas, que en la imagen que nos da el Tarot de Marsella apa-
rece sentada de frente (está en el aquí y ahora) mirando de reojo
a su derecha (la izquierda del espectador, el pasado), mientras
sostiene en alto una espada cuya hoja es de color rojo lo que
indica que acaba de cortar de raíz algo viejo. Su mano izquierda
reposa sobre su vientre, puesto que está gestando un nuevo ser.
Es, por tanto, una buena imagen para representar la Tríada de
la Innovación.
La expresión hebrea para innovación es w,in (jidush), palabra
con valor numérico 318 que deriva de win (jadash), nuevo. Debe
destacarse que dicha palabra contiene otras muy importantes:
in (jad), que significa a la vez uno, único, y filo, algo agudo, en
consonancia con el carácter individual del proceso innovador
(que siempre tiene trascendencia más allá del individuo) y lo
agudo del corte que lo nuevo da a lo viejo. Por su parte, el nú-
mero 318 proporciona la palabra nw~N~ (beishah), que significa
tanto hediondez como agraz, inmadurez. Normalmente, la in-
novación llega cuando lo antiguo ha muerto y ya hiede, aunque
su llegada sea prematura, inmadura. Ello provocará un período
intermedio de vacío, necesario para terminar de barrer los res-
tos de lo viejo ya muerto.

3.11.4.3. Tríada de los Deseos

Sefirot que la forman: Jesed -Tiferet - Netzaj.


Senderos subjetivos: 9. El Ermitaño - 10. La Rueda de la Fortuna.
- 13. (sin nombre).
Letras hebreas de los senderos: tQ - ~ - ~
Relaciones con los campos externos:
Las sefirot. La Tríada tiene dos sefirot en contacto con los campos
externos, Jesed y Netzaj, siendo Tiferet la sefirá interna, como en
las otras tres Tríadas activas superiores. Jesed se encuentra en la
frontera entre los sectores energéticos transpersonal y personal,
mientras que Netzaj contacta con este último y con el campo
terrestre energético.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 313


Los senderos subjetivos. El Sendero 10 está en contacto directo
con el campo energético personal, no así los otros dos que con-
figuran la Tríada. ·
Relaciones polares con el interior del Árbol.
Las sefirot.
Jesed se relaciona con los senderos 4, 11 y 13.
Tiferet se relaciona con los senderos O, 1, 3, 5, 7, 8, 10, 12, 16,
17 y 19.
Netzaj se relaciona con los senderos 9, 14, 15, 19, 20, y 21.
Los senderos subjetivos.
El Sendero 9 se relaciona con Jokmah, Guevurah y Netzaj.
El Sendero 10 se relaciona exclusivamente con Tiferet.
El Sendero 13 se relaciona con Jesed, Hod y Yesod.
Tríada con oposición polar: la de los Miedos.
Relación con el tarot: Caballo de Oros.
Comentario: La Tríada de los Deseos es, como su opuesta polar la
de los Miedos, un camino que debe ser recorrido y explorado,
y después abándonado, como lo indica el hecho de que su super-
ficie no coincida con la de ninguna otra Tríada. ¿Por qué? Pues
porque está dividida por la barrera del Velo del Templo, lo que
significa que es una de las herramientas del Árbol para supe-
rar el límite (ilusorio, en último extremo) de la Individualidad.
En muchas tradiciones iniciáticas se somete a los aspirantes a
diversas pruebas que, en esencia, significan vivir a fondo toda
una batería de deseos y miedos, precisamente para superar esta
barrera. Dos seres tan diferentes como el maestro Antonio Blay
y el cantante de rock Miguel Ríos lo han expresado, cada uno a
su manera. El primero recomendaba vivir a fondo cada situa-
ción, añadiendo: «Porque no sólo no hay nada prohibido, sino
que todo está perfectamente recomendado». El segundo, en una
de sus canciones titulada «Extraños en el escaparate», decía:
«Hermano, si hay fronteras / están en tu imaginación».
Todo deseo responde en el fondo a un anhelo profundo, y so-
bre todo legítimo, de reconstruir la unidad, esa Unidad Perdida
que se traduce en la Kabbalah en el exilio de la Shejiná. Lo que
sucede es que, al no saber cuál es la raíz última de ese anhelo,
se suele emprender el camino tomando una dirección equivo-

314 V!LLARRUBIA / HAUT / MILI.ERA


cada. Laurence J. Peter, el escritor canadiense autor de varias
conocidas obras sobre gestión de empresas, al plantear la direc-
ción por objetivos añadía la apostilla: «El que no sabe a dónde va
acabará yendo a otra parte». Por su parte, el escritor sufi Idries
Shah lo expresa en términos similares: «Me temo, oh peregrino,
que no alcanzarás La Meca, pues estás de camino al Turquestán».
Las sefirot externas que forman la Tríada, Jesed y Netzaj, son
de naturaleza parecida, aunque la primera es unitaria y en la
segunda ya ha aparecido la multiplicidad. Tiferet, con su fuerte
carga polar, lanza un potente empuje hacia el campo externo
energético, a través del sendero 10. Y como éste representa el fu-
turo, quiere decir que todo deseo tiene su objetivo en el futuro.
Los otros dos senderos de la Tríada nos hablan de soledad (el 9),
pues todo deseo es siempre individual, aunque se inserte en un
colectivo, y olvido (el 13), que no por casualidad está situado por
debajo del Velo del Templo, zona a partir de la cual la Unidad
ha quedado rota, y, lo que es más importante, olvidada.
Las letras hebreas asociadas a los senderos subjetivos no forman
ninguna palabra con significado, puesto que todo deseo se refie-
re a algo futuro, y por tanto desconocido, aunque tenga seme-
janza con algo del pasado; y sin embargo nada se repite, nada
es exactamente igual. Por eso, Richard Bach, en su bella novela
«Ilusiones», decía: «Hay que tener muchísimo cuidado con lo
que se desea, porque inevitablemente se consigue». Puede, sin
embargo, formarse una expresión con dichas letras,~~~· (mat(),
que podría traducirse como mi desplome, mi caída, y que nos
dice que, una vez alcanzada la individualidad («mi»), ello supo-
ne también una caída, una pérdida de la Unidad.
El campo energético personal incide en la Tríada a través del
sendero 10, por lo que, como se indica más arriba, hace que
todo deseo sea siempre individual. Lo que ocurre es que,
al tener Jesed la posición fronteriza entre los niveles personal
y transpersonal, es posible que un mismo tipo de deseos afecte
a un colectivo; y simultáneamente, como Netzaj es también
fronteriza entre los campos energéticos personal y terrestre,
es frecuente que el empuje transpersonal acabe «tiñéndose»
de energías bajas. Esta posibilidad ha sido aprovechada a lo

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 315


largo de la historia por políticos, clérigos, militares, expertos
en marketing y otras especies depredadoras para manipular a
las masas.
En realidad, los deseos no son un problema, aunque sí sean a
veces una molestia, sino sobre todo un síntoma de algo profun-
do que debe ser cuidadosamente explorado. Por eso, cuando
se descubre la causa que originó el deseo, el deseo puede ser
cumplido, si es legítimo y hay medios para ello, «aparcado» en
espera de obtenerse los medios, o abandonado si no es legítimo.
¿Y qué es un deseo legítimo? El que responde a una necesidad
real, frente a aquel otro que no es sino una inducción impuesta
desde el exterior, como muy bien saben los grandes gurús de la
sociedad de consumo. ·
Ya se ha mencionado la fuerte diferencia de potencial entre las
sefirot de la Tríada: los once influjos internos que recibe Tiferet
se enfrentan a los tres de Jesed y los seis de Netzaj. Ello hace que
el vacío relativo se produzca en Jesed, por lo que el impulso de
la Tríada es ascendente hacia esta esfera, lo cual es lógico si se
tiene en cuenta que todo deseo se basa en algo que atrae, que
promete algún tipo de gratificación, que es justamente la natu-
raleza de esta sefirá.
Como en el caso de la Tríada de la Innovación, también en la de
los Deseos se da el caso de la única polaridad que enfrenta el
Sendero 10, correspondiente a Tiferet, frente a las tres que man-
tienen los senderos 9 y 13. Por eso, también a nivel subjetivo se
produce en esta Tríada una diferencia de potencial, en la misma
dirección que la que procede de las Sefirot.
La Tríada de polaridad opuesta a la de los Deseos es la de los
Miedos, y cuando esta polaridad es muy fuerte puede producir
desgarros sumamente dolorosos. La diferencia con la oposición
polar Innovación-Conservación es que, mientras allí la influen-
cia de los campos externos era transpersonal, y tenía gran im-
portancia el entorno social y cultural, en este nivel inferior la
influencia de los campos externos es individual, por lo que es
mucho más concreta, mucho más directa e inmediata, quizá no
tan fuerte y sutil como aquélla, pero sí mucho más aguda y pun-
zante.

316 V1LLARRUlllA / HAUT / MILLERA


La carta del tarot correspondiente a esta Tríada es el Caballo
de Oros, que en el Tarot de Marsella presenta tres particula-
ridades que lo diferencian del resto de los Caballos. La pri-
mera es la posición de la figura, dirigida decididamente ha-
cia su izquierda (la derecha del espectador), lo que indica la
proyección hacia el futuro que tiene todo deseo, a diferencia
del Caballo de Bastos, en posición aproximadamente frontal,
aunque dirigiendo su atención hacia la derecha del espectador,
y de los dos restantes, que se dirigen hacia la izquierda, al paso
el de copas y al galope el de espadas. La segunda particulari-
dad es que se trata de la única de las diez y seis figuras que
no sostiene la representación del palo, en este caso el oro, en
sus manos, el cual parece flotar en el aire frente a su rostro:
¿No es así como vemos aquello que deseamos intensamente?
La tercera particularidad es que el caballero sostiene con su
mano derecha y apoya en su hombro un bastón algo más liviano
que el que muestra en su mano izquierda el caballero de Bastos.
Al ser los bastones madera, llevan implícito el fuego, y por
tanto el Espíritu está en marcha. Por esa razón, quizá, es el
palo de oros el único cuyas figuras conectan a la vez la primera
y la décima sefirot. El bastón que sostiene el caballero de Oros
nos indica que, aunque de alguna forma degradado respecto
al origen, el Espíritu está presente en el deseo y hay voluntad
(mano derecha) de que sea así.
La palabra hebrea ;i¡,-wM (teshukah), con un valor numérico de 811,
significa deseo; su plural, r,i¡,iwr, (teshukot), tiene un valor nu-
mérico de 1.212. En ninguno de estos valores hemos encontra-
do otras palabras significativas. Sin embargo, observamos que
contiene en su interior Mtz?¡, (keshet), el Arco Iris, que, si bien es
en muchas mitologías el puente de comunicación entre el Cielo
y la Tierra, también es, para la Kabbalah, la barrera ilusoria que
dificulta pasar más allá de Yesod. En este caso, la barrera se re-
fiere al Velo del Templo, tal como se indicó más arriba. Las dos
letras sobrantes en la palabra en singular, Mi, forman el nombre
más escondido de Dios, por el cual, según el conocido midrash
del alfabeto hebreo y la creación (recogido en el Diccionario
Numérico Cabalístico Hebreo-Castellano; ver referencias bi-

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 31 7


bliográficas), ambas letras fueron excluidas del comienzo del
proceso creativo por ser demasiado elevadas para el servicio
mundano. Por tanto, el conjunto de este nombre nos indica que,
en efecto, el deseo lleva en una dirección, aunque agradable,
ilusoria, pero también que en el fondo de esa ilusión está escon-
dido el mismo Dios.

3. 11.4.4. Tríada del Impulso

Sefirot que la forman: Tiferet - Netzaj - Yesod.


Senderos subjetivos: 13. (sin nombre) - 14. Templanza - 17. La
Estrella.
Letras hebreas de los senderos: ~ - j - ~
Relaciones con los campos externos:
Las sefirot. Únicamente Netzaj tiene contacto con los campos ex-
ternos, en el límite entre las áreas energéticas personal y terres-
tre. Las otras dos sefirot son interiores. Por esta razón es, junto
con la Tríada de la Intuición, la más interior de todas.
Los senderos subjetivos. Ninguno de los senderos está en contac-
to directo con los campos externos.
Relaciones polares con el interior del Árbol.
Las sefirot.
Tiferet se relaciona con los senderos O, 1, 3, 5, 7, 8, 10, 12, 16,
17 y 19.
Netzaj se relaciona con los senderos 9, 14, 15, 19, 20, y 21.
Yesod se relaciona con los senderos 13, 15, 16, 18 y 20.
Los senderos subjetivos.
El Sendero 13 se relaciona con Jesed, Hod y Yesod.
El Sendero 14 se relaciona con Netzaj y Hod.
El Sendero 17 se relaciona con Tiferet, Hod y Maljut.
Tríada con oposición polar: la de la Intuición.
Relación con el tarot: Caballo de~Copas.
Comentario: La Tríada del Impulso es casi totalmente interior,
la que más, junto con su opuesta polar. El impulso viene de
dentro, y es lo que nos mueve a seguir una vez puestos en
marcha. Es por tanto una Tríada esencialmente energética,

318 ViLLARRUBIA / H AUT / MILLERA


y actúa de modo semejante a los cilindros de un motor de ga-
solina, que concentran en su interior la mezcla de combustible
y aire, la comprimen y la hacen estallar para mover el pistón,
el cual, a su vez, transmitirá el movimiento a través de diver-
sos mecanismos a las ruedas del vehículo. Del mismo modo,
la Tríada de Impulso recoge la energía que procede en parte
de la Manifestación Primera, Keter {la gasolina) a través del
Descenso de Poder, y en parte de los campos externos (el aire:
en último extremo, la Nada, Ayin Sof, sustrato último de toda
manifestación). La vía de entrada es Netzaj, que actúa como
una válvula de admisión, Tiferet, actuaría como el pistón que
comprime la mezcla, los senderos subjetivos serían las paredes
del cilindro y Yesod la bujía que enciende la mezcla con la iod
('1) de su nombre.
Por esta razón, la letra jet (M), que en las sefirot Jokrnah y Jesed
están a la derecha, pasa en Netzaj a la izquierda, hacia el interior
del Árbol. Pues, siguiendo con la analogía del motor de gasoli-
na, al ser la letra que representa la vida, debe penetrar y situarse
de cara al interior para llevar a él la Vida: la Tríada del Impulso
es la que la mantiene en marcha en los niveles inferiores del
Árbol.
Las letras hebreas, asociadas a los senderos subjetivos de la
Tríada, tampoco forman ninguna palabra. Sin embargo, es curio-
so observar cómo anticipan la función de la Tríada como «cámara
de combustión». En efecto, les falta la chispa (que será aportada
por Yesod) para formar la palabra Q'1~~ (pnim), interior.
Los campos externos apenas si influyen directamente en esta
Tríada, salvo la energía que entra canalizada a través de Netzaj,
procedente en parte del campo energético personal, y sobre todo
del campo energético terrestre. Por eso, al estar la Tríada íntima-
mente relacionada con la vida física, señala la gran importancia
que tiene el mantener el contacto con la Madre Tierra.
También en este caso mantiene la Tríada una notable diferencia
de potencial, necesaria para que el Yo superior de Tiferet infun-
da su hálito a los niveles inferiores. Sin embargo, en este caso
esa diferencia es menor, por lo que el soplo de Tiferet llega a las
áreas inferiores con más suavidad.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 319


Las polaridades que soportan los senderos subjetivos están en
cambio bastante equilibradas: tres sefirot en los senderos 13 y
17, frente a sólo 2 en el 14. Pero como éste último pertenece al
Sendero de la Flecha, a efectos prácticos pueden considerarse
en perfecto equilibrio. Como es lógico, esto es necesario para la
Tríada que es, en último extremo, la que debe soportar el delica-
do equilibrio de la vida física.
La Tríada polarmente opuesta a la del Impulso es la de la
Intuición. Si el equilibrio entre ambas es armónico, Intuición e
Impulso se complementan para el mantenimiento de la vida. En
caso de desequilibrio entre ambas, podemos encontrarnos con
impulsos vitales que ahogan a la intuición, o con intuiciones
que ponen en peligro la vida.
La carta del tarot correspondiente a esta Tríada es el Caballo
de Copas. Simboliza de alguna forma el dejar de lado el pensa-
miento racional, por lo que uno de los significados del naipe es
la proposición amorosa que, de llegar a buen fin, servirá para
perpetuar·la vida. Si la copa que porta el caballero estuviese
llena de vino, t~ (íaín), sabríamos que en esta Tríada tenemos la
posibilidad de percibir (significado de la letra ~) a Dios, uno de
cuyos nombres es~ (pronunciado Adonaí). Pues, ¿qué es la vida,
c~,i (jayim), sino Dios en el cerebro, r,~ (moáj)?
La palabra hebrea para impulso es c-¡r,i (dajaj), con un valor nu-
mérico de 92, en el que encontramos también otras como ¡t,,~
(bidalón), separación, pues la vida física de un organismo impo-
ne su separación, una frontera respecto al medio en el que vive;
,~r,~ (mijmad), delicia, gracia, y su opuesta, ~~O (sabe[), carga,
peso, y también sufrimiento, los dos aspectos de la vida. Pero,
además, la palabra impulso esconde en su interior dos claves
importantes: ir, (jad), uno, único, solo, para recordarnos que,
pese a su multiplicidad, la Vida es Una; y =,, (daj), página, para
indicar que cada vida física no es sino una página de un gran
libro que se extiende a lo largo de múltiples c~,,~~ (gilgulim),
retornos, reencarnaciones, de valor numérico 122, resultado del
impulso (valor 92) y del movimiento que genera, representado
por la letra~-

320 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


3. 1 7.4.5. Tríada de la Iniciativa

Sefirot que la forman: Netzaj - Yesod - Maljut.


Senderos subjetivos: 17. La Estrella - 18. La Luna - 21. El Mundo.
Letras hebreas de los senderos: ~ - ::: - .n
Relaciones con los campos externos:
Las sefirot. Dos de las tres esferas que forman la Tríada, Netzaj y
Maljut, contactan directamente con el campo terrestre energé-
tico; la primera, en posición fronteriza con el campo energético
individual, la segunda, compartiendo contacto con el campo so-
cial terrestre.
Los senderos subjetivos. El 18 contacta directamente con el campo
energético terrestre, mientras que los otros dos son interiores.
Relaciones polares con el interior del Árbol.
Las sefirot.
Netzaj se relaciona con los senderos 9, 14, 15, 19, 20, y 21.
Yesod se relaciona con los senderos 13, 15, 16, 18 y 20.
Maljut se relaciona con los senderos 16, 17 y 19.
Los senderos subjetivos.
El Sendero 17 se relaciona con Tiferet, Hod y Maljut.
El Sendero 18 se relaciona con Hod y Yesod.
El Sendero 21 se relaciona con Netzaj y Hod.
Tríada con oposición polar: la de la Lógica.
Relación con el tarot: Sota de Bastos.
Comentario: La Tríada de la Iniciativa es semejante al motor de
arranque del automóvil, pues es la encargada de poner en mar-
cha las acciones que desarrolla el sujeto, las cuales empezaron
a gestarse a nivel subjetivo en el Sendero l. Es una Tríada que
tiene un profundo arraigo en la tierra, aunque desde el punto de
vista cabalístico corresponda a las ramas del Árbol de la Vida;
por eso, otra buena imagen de la Tríada vendría dada por la
función clorofi1ica que desarrollan las partes verdes de la planta,
función que pone en marcha la vida vegetal. Al ser una Tríada
externa, resulta muy influida por el entorno ambiental.
De las tres sefirot que la forman, dos de ellas, Yesod y Maljut,
están situadas en el Pilar del Equilibrio, mientras que la tercera
pertenece al de la Misericordia, lo que indica que la Tríada es

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 321


esencialmente expansiva. Y es que toda iniciativa, como en úl-
timo extremo busca el reencuentro de la Shejiná con el Amado,
actúa como el despliegue de un papel de seda que. conforme
va alisando sus arrugas, muestra más y más lo que en él está
escrito. Esta imagen es, por cierto, muy utilizada por los cabalis-
tas, puesto que seda, ~w~ (mesh{) en hebreo, contiene CW (shem),
el Nombre del Eterno, al que le falta una letra, precisamente la
jet (M), que representa la Vida, para que se pueda escribir la pa-
labra Mesías, n~w~ (meshíáj). Y esa letra la aporta Netzaj (Ml~),
la moldea Yesod y se manifiesta en Maljut, actuando en la Tríada
de la Iniciativa. Los senderos subjetivos de la Tríada, por su par-
te, inician el proceso de aportar consciencia a la propia vida,
mediante una interacción que supone en verdad un diálogo que
no tiene palabras y sí, en cambio, continuas transferencias ener-
géticas de los campos externos al Árbol y viceversa.
Las letras hebreas de los senderos subjetivos pueden formar una
sola palabra de valor numérico 570, ~ l (tzefet), capitel, la parte
superior de la columna que constituye la pieza arquitectónica in-
termedia entre el fuste y el arquitrabe. En ocasiones, y según los
estilos, puede llevar esculpida alguna escena que represente una
enseñanza espiritual, tal como podemos ver en muchas catedra-
les e iglesias románicas. En una época en que la inmensa mayoría
de la población era analfabeta, esas imágenes servían para intro-
ducirse en la enseñanza de la doctrina religiosa. Por eso, no es
extraño que ese aspecto del capitel de servir para soportar una
determinada carga de la estructura del edificio, se confirme con
la palabra, también con valor 570, i'MV (otek), resistencia. Y el as-
pecto de entrada nos lo da otra palabra del mismo valor numéri-
co, ivw (shaar). En realidad el Árbol de la Vida es una imagen de
una Realidad cuyas raíces están en el Cielo y cuya copa está en la
tierra, y esto es algo que no debe olvidarse en ningún momento;
por ello la imagen del capitel asociada a la Tríada de la Iniciativa
es perfectamente coherente. Hay que llegar, sin embargo, al atbash
de las letras de la Tríada para encontrar su esencia verdadera: i'TiN
(ivah), anhelar, desear, que nos muestra que no hay iniciativa si
no responde a un anhelo profundo por mejorar o encontrar algo
(el tikún), anhelo que surge de la propia «mismidad» (en palabras

322 V !LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


de Antonio Blay) del sujeto, tal corno nos lo muestra la palabra
Nin (hu), él, él mismo.
El campo energético terrestre tiene una gran importancia en
esta Tríada, que además recibe algunas influencias de los sec-
tores externos fronterizos a aquél, el energético personal y el
formal terrestre. La tierra es, con su potente energía telúrica,
la que afecta sobremanera a las iniciativas, impulsándolas o fre-
nándolas según las fuerzas de marea originadas en su interior.
Todos hemos experimentado que, en según qué días, o incluso
que momentos a lo largo del día, nos «ponernos las pilas» sin
ninguna dificultad, o al contrario, nos sentirnos poco menos que
incapaces de mover un dedo. Las personas sensibles, y lama-
yoría de los animales, son bien conscientes de estas variaciones
energéticas de la tierra, y obran en consecuencia, acomodando
a ellas su actividad.
Las polaridades específicas de las sefirot respecto a los senderos
subjetivos indican cierto desequilibrio en relación a Maljut, que pre-
senta sólo tres oposiciones, frente a cinco de Yesod y seis de Netzaj.
Por tanto, la tendencia es a que la energía fluye hacia abajo, puesto
que Maljut es un vacío relativo respecto a las otras dos.
Por su parte, las polaridades de los senderos subjetivos, en com-
paración con las de las sefirot, están mejor equilibradas, por lo
que, una vez la Tríada tiene completa su carga energética, tiende
a mantenerse, aunque fluyendo suavemente hacia el Sendero 21,
que es el que presenta una carga menor. Al ser este sendero el
inferior del Pilar del Equilibrio, el resto de la Tríada actúa corno
alimentador, por decirlo así, de la consciencia, a la que propor-
ciona la energía necesaria para su funcionamiento.
La Tríada opuesta polar a la de la Iniciativa es la de la Lógica.
Como consecuencia, en caso de desequilibrio, o bien la Lógica
paraliza a la Iniciativa, o en caso contrario, es esta última la que
prescinde de aquélla, adoptando iniciativas por completo irra-
cionales. Si el equilibrio es armónico, la Lógica será un apoyo
adecuado para las tomas de decisiones.
La carta del tarot correspondiente a esta Tríada es la Sota de Bastos.
Es una de las dos figuras de corte (la otra es el Caballo de Oros) que
aparece en el Tarot de Marsella dibujada en posición de avanzar

MAN UAL DE KAB F!ALAH PRÁCTICA 3 23


hacia el futuro, que, como se ha dicho repetidas veces, es la dere-
cha del espectador, o izquierda del personaje. En realidad sólo otros
dos naipes, además de los mencionados, de los 78 que componen el
mazo completo aparecen con la misma orientación: El Loco, que no
tiene número, y el Arcano XIII, que no tiene nombre. Por lo tanto,
la atribución de la Sota de Bastos a esta Tríada es totalmente obli-
gada. El hecho de que su palo sea el Basto muestra la naturaleza
espiritual de la Iniciativa, aunque, como en este naipe, se encuentre
en sus primeros balbuceos o, si se quiere, dando el primer paso en
su «peregrinación a La Meca», tal como repiten los místicos sufis:
«El primer paso, ¡oh, hadj (peregrino)! en el camino a La Meca em-
pieza en la misma puerta de tu casa».
La palabra hebrea para iniciativa. es il~i~ (yazmah), con un va-
lor numérico de 62, el mismo con el que aparecen dos pala-
bras necesarias para que la iniciativa llegue a buen fin: i'IJ~il
(havanah), comprensión, entendimiento, en el aspecto men-
tal, y jiil (hezén), nutrición, alimentación, en el plano físico.
En otras palabras, es necesario comprender el alcance y los
procedimientos que pondrán en marcha la iniciativa, y contar
con los medios materiales necesarios para ello, incluida una
correcta alimentación. Además, hay que contar con el momen-
to propicio, tal como recomienda repetidamente el Libro de las
Mutaciones chino, el I-Ching, y como lo indica también otra
palabra con el mismo valor numérico, il~~), (deguimah), prue-
ba, muestra, señal. Otro aspecto sumamente interesante de la
palabra hebrea correspondiente a iniciativa es la temurá que
puede obtenerse de ella, puesto que contiene en su interior las
palabras Ci (zam), pensar, discurrir, y dos nombres de Dios,
il~ (pronunciado Adonaí), que puede considerarse que alude al
Dios Andrógino por contener los dos principios, masculino (~)
y femenino (n), y ili (Zeh), que puede traducirse como Éste,
el Dios que está más próximo a nosotros. Se trata, por tanto, de
darnos cuenta, al poner en marcha cualquier iniciativa, de la
proximidad inmediata de Dios, en su doble aspecto luminoso,
expansivo, Yang, y oscuro, restrictivo, Yin. Por lo que, tanto los
apoyos que recibamos como los obstáculos que encontremos
no son sino aspectos del Sin Nombre.

324 ViLLARRUBIA / HAUT / MILI.ERA


3. 11.5. Las Tríadas pasivas

Se apoyan en los pilares del Equilibrio y la Severidad, y son esen-


cialmente de tipo social o formal, entendiendo estos términos como
centros de relación con el entorno. Dicha relación es, como sucede
con las Tríadas activas respecto a la energía, tanto más sutil y uni-
taria cuanto más alta esté situada en el Árbol de la Vida. Dos de
ellas son predominantemente de interiorización, la de la Ascética y
la de la Intuición, aunque la primera está abierta al campo externo
celestial en su vertiente formal. Otras dos, la de los Miedos y la de
la Conservación, se abren hacia el campo social externo, por tener
uno de sus senderos subjetivos en contacto con éste. La quinta,
la de la Lógica, está abierta al campo terrestre formal, del que re-
cibe su influencia. También en este caso se estudian siguiendo su
orden, desde la superior hasta la inferior.
Las cinco Tríadas pasivas expresan esencialmente aspectos de
relación social. En dos de ellas predominan los aspectos espiritua-
les, aunque tienen aspectos relacionados con la Individualidad,
y mantienen un cierto contacto con la Personalidad: la de la Ascética
y la de la Conservación. Otra, la de los Miedos, es fundamental-
mente mental, y mantiene contactos con los niveles del Espíritu y
de la Personalidad. Las dos últimas, como sus correspondientes de
tipo activo, pertenecen a la vez a los ámbitos de la Individualidad
y de la Personalidad, p ero con predominio del primer aspecto en
la de la Intuición (la cual, además, tiene algún contacto con el nivel
espiritual), y del segundo en la de la Lógica.

3. 11.5. 7. Tríada de la Ascética

Sefirot que la forman: Keter - Binah - Tiferet.


Senderos subjetivos: l. El Mago - 2. La Sacerdotisa - 6. Los Amantes.
Letras hebreas de los senderos: N - ~ - ,
Relaciones con los campos externos:
Las sefirot. Keter, la sefirá suprema, está abierta al campo celeste
en su doble vertiente energética y formal. Binah también está
abierta al campo celestial formal, y además al campo formal

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 32 5


transpersonal. Tiferet, por su parte, al ser una de las sefirot inte-
riores, no tiene contacto directo con ningún campo externo.
Los senderos subjetivos. El Sendero 1 se mantiene abierto al cam-
po celeste formal, mientras que los otros dos senderos son inte-
riores y sin relación directa, por tanto, con campos externos.
Relaciones polares con el interior del Árbol.
Las sefirot.
Keter se relaciona con los senderos 3, 4 y 6.
Binah se relaciona con los senderos O, 2, 4 y 11.
Tiferet se relaciona con los senderos O, 1, 3, 5, 7, 8, 10, 12, 16,
17 y 19.
Los senderos subjetivos.
El Sendero 1 se relaciona con Jokmah y Tiferet.
El Sendero 2 se relaciona con Jokmah y Binah.
El Sendero 6 se relaciona con Keter, Jokmah y Guevurah.
Tríada con oposición polar: la de la Mística.
Relación con el tarot: Rey de Espadas.
Comentario: En la Tríada de la Ascética se manifiesta la búsqueda
del sujeto, y para ello, se prescinde de los objetos, hasta que
nada queda: esa «nada» es el sujeto buscado. La diferencia con
su opuesta polar, la Tríada de la Mística, estriba en que en ésta sí
se tienen en cuenta los objetos, para tratar de ver en ellos la be-
lleza de la creación como una manifestación de Dios, mientras
que la de la Ascética busca al Creador mediante la búsqueda del
propio sujeto. Es, por tanto, una Tríada en la que se manifiesta
el desapego. Atraviesa el Abismo, por lo que es uno de los cami-
nos para superar la dualidad sujeto-objeto.
Los senderos subjetivos que fijan el contorno de la Tríada mues-
tran un grado de maestría en el que la consciencia de Unidad
(o al menos de su búsqueda) del Sendero 2 se coordina con la
voluntad y creatividad del Sendero 1 y con la capacidad de elec-
ción, y por tanto de renuncia, del Sendero 6.
Las escasas palabras que pueden formarse con las letras aso-
ciadas a los senderos subjetivos de la Tríada parecen presentar
un conjunto sin apenas coherencia. Encontramos tan sólo i~N
(abó), su (de él) padre, su creador, única en que parece aludirse a
esa búsqueda del sujeto que señalábamos antes; Ni~ (bo), venir,

326 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


entrar, quizá en referencia a la necesaria interiorización para
buscar al sujeto pero, en alguna forma, de sentido opuesto al
carácter social de la Tríada; y~,~ (ob), odre, y también hechicero
y adivino. Ahora bien, cuando se hace atbash, las letras pasan a
ser r, - W - ~, y entonces aparecen una serie de conceptos que se
refieren a la necesidad de una preparación previa en busca de la
transparencia. Así, encontrarnos !i~W (shafat), preparar, colocar,
causar, y también cocinar, cocer; i:,riw (shitef), asociar, partici-
par, concepto sobre el que se encuentran claras referencias tanto
respecto al pacto entre Dios y Abraharn, corno a la designación
de Adán corno vicario de Allah en la tierra, tal y corno lo recoge
la 2.ª sura del Corán; y W~M, que leído tajas significa agarrar,
tomar, y también conquistar y adquirir, y leído tafés significa
comprensión o entendimiento. Se plantea así la Ascética corno
una lucha interior en asociación con la Divinidad, para llegar al
conocimiento de sí mismo.
La relación a través del Sendero de El Mago con el campo ce-
leste formal indica que las influencias recibidas de él son movi-
lizadas, puestas en funcionamiento, para actuar en el interior
de la Tríada. Esas influencias formales recibirán su concreción
mediante la intuición del Sendero 2 y la renuncia selectiva del 6
hasta llegar a Tiferet, donde se unirán a las influencias proce-
dentes del campo celeste energético a través de la Tríada de la
Mística, las cuales proporcionarán el «combustible», por decirlo
así, para que la Tríada se haga operativa.
Las relaciones de polaridad interior en la Tríada de la Ascética res-
pecto a las sefirot que la integran nos muestran a Keter frente a los
senderos 3, 4 y 6, tal corno observarnos al estudiar la Tríada de las
Raíces. Binah recibe por su parte influencias de los senderos O, 2, 4
y 11, mientras que Tlferet, corno hemos visto repetidas veces, tiene
frente a sí hasta un total de once senderos subjetivos. La consecuen-
cia es que hay una gran carga de influencias en la sexta sefirá, mien-
tras que es comparativamente escasa en las dos sefirot superiores,
y puesto que la tendencia es que lo más lleno tienda a ocupar el es-
pacio de lo más vacío, se produce, al igual que sucedía en la Tríada
de la Mística, un fuerte empuje ascensional, que es, precisamente,
la característica fundamental de esta Tríada. No de otra forma pue-

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 32 7


de entenderse la necesidad de encontrar el verdadero sujeto de
todo cuanto sucede, que es, a nivel de manifestación, el Absoluto
que asoma en la primera sefirá, Keter.
En cuanto a las influencias polares recibidas por los senderos
subjetivos, hay que señalar que la fuerza impulsora de Jokmah
afecta al Sendero 1, llenando de contenido su creatividad. Por su
parte, el Sendero 2 recibe, como ya vimos al estudiar la Tríada
de la Mística, la influencia equilibrada de Jokmah y Binah, in-
fluencia que, en muchas ocasiones, se transforma en fricción
entre una y otra sefirá, que pueden llegar a bloquear el funcio-
namiento de ambas Tríadas, Mística y Ascética.
La carta del tarot correspondiente a esta Tríada es el Rey de
Espadas, en cuya figura según el modelo de Marsella merece
la pena detenerse. Aparece sentado de frente, pero, mientras
los pies aparecen prestos a iniciar la marcha hacia la izquier-
da del espectador (el pasado), su mirada se dirige hacia la
derecha (el futuro). Por tanto, indica su disposición a reco-
rrer el pasado (esto es, a revisarlo), con la expectativa de
encontrarse a sí mismo en el futuro. Las dos caras colocadas
sobre sus hombros, al mirar en ambas direcciones, refuerzan
este sentido. Lo más significativo, sin embargo, aparece en
un pequeño recuadro trapezoidal en la base de su asiento, en
el que, junto a un adorno de color negro en forma de rama
con dos hojas, hay un signo que podría ser, bien una letra
G mayúscula invertida, una letra wau árabe(--'), o una pe(~)
hebrea, solución por la que nos inclinamos sin desdeñar las
otras dos; en efecto:
• La G mayúscula es un símbolo masónico, inicial de la palabra
inglesa God, Dios, por lo que se referiría a esa búsqueda del
Sujeto Último.
• La wau árabe equivale a la vav (i) hebrea, una de las letras de
la Tríada, precisamente la relacionada con el Sendero 6, que
se refiere a la renuncia.
• La pe hebrea es el resultado de hacer atbash a la vav. Pero el
atbash significa realmente darse la vuelta, esto es, i'T~iw.n (tes-
hubah), arrepentimiento, palabra que en su raíz ~,w.n (tashub)
tiene el sentido de girarse y mirar en la dirección correcta,

328 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


volver a la esencia primigenia, lo que está en concordancia
con el sentido que apuntábamos de preparación y de revisión
del pasado.
La expresión hebrea para ascética es Mi~!,~ (sagfanut), con valor nu-
mérico de 599, en el que hemos encontrado otros dos conceptos de
extraordinario interés. El primero es un nombre de Dios atribuido a
la 10.ª sefirá, Maljut: C~,V ',t!, ,1t,~ (Alufó shel 'olam), Gobemador del
mundo; recordemos ahora que todas las Triadas, sin excepción, se
refieren a la expresión mediante la acción de los aspectos subjetivos
indicados por los senderos, por lo que, en último extremo, siem-
pre actúan en el nivel de Maljut, esto es, en el plano físico: por eso,
el título de Gobernador del mundo se refiere a actuación a nivel
material. El segundo concepto con valor 599 es Mn¡,~, (hipakjut),
apertura, y también viveza, condición necesaria para el trabajo de
ascesis, que no puede realizarse con una actitud cerrada, ni tampo-
co sin estar plenamente alerta, despierto.

3.11.5.2. Tríada de la Conservación

Sefirot que la forman: Binah- Guevurah-Tiferet.


Senderos subjetivos: 6. Los Amantes - 7. El Carro - 11. La Fuerza.
Letras hebreas de los senderos: i - , - ~
Relaciones con los campos externos:
Las sefirot. Binah está abierta al campo celestial formal, y además
al campo formal transpersonal. Guevurah, abierta a los campos
externos formales, es fronteriza entre ambos, transpersonal y
personal. Tiferet, por su parte, al ser una de las sefirot interiores,
no tiene contacto directo con ningún campo externo.
Los senderos subjetivos. El Sendero 7 se mantiene abierto al cam-
po formal transpersonal, mientras que los otros dos senderos
son interiores y sin relación directa, por tanto, con campos ex-
ternos.
Relaciones polares con el interior del Árbol.
Las sefirot.
Binah se relaciona con los senderos O, 2, 4 y 11.
Guevurah se relaciona con los senderos 6, 9 y 15.

M ANUAL DE K ABBALAH PRÁCTICA 329


Tiferet se relaciona con los senderos O, 1, 3, 5, 7, 8, 10, 12, 16,
17 y 19.
Los senderos subjetivos.
El Sendero 6 se relaciona con Keter, Jokrnah y Guevurah.
El Sendero 7 se relaciona con Tiferet.
El Sendero 11 se relaciona con Binah, Jesed y Hod.
Tríada con oposición polar: la de la Innovación.
Relación con el tarot: Reina de Oros.
Comentario: La Tríada de la Conservación actúa de cara al campo
exterior transpersonal, y es una de las fronteras que defienden
al Yo del No-Yo, cualquiera que sean las definiciones que de-
mos a uno y otro y los límites que establezcamos entre ambos.
Es por tanto una Tríada con fuerte tendencia a la cristalización,
sobre todo si el influjo de la Tríada de la Innovación es débil.
Sin embargo, es necesaria para dar fijeza, de tal manera que sir-
va de punto de apoyo en la tarea de superación de la dualidad
sujeto-objeto, ya que es una de las cinco Tríadas que atraviesan
el Abismo. En otras palabras, no será posible superar esta dua-
lidad mientras no haya una Individualidad (esto es, un Sujeto,
un Yo) unificado y firmemente asentado.
Los senderos subjetivos de la Tríada muestran el aspecto de re-
nuncia del Sendero 6 coordinándose con la búsqueda de obje-
tivos superiores del 7 y el autocontrol de cara al entorno social
del 11.
Las letras asociadas a los senderos subjetivos forman la palabra
ii~ (kuz), vaso, cántaro, indicándonos que la conservación no
es un fin en sí, sino una herramienta que tiene un determinado
uso, y que, realizado éste, debe ser abandonada. Al hacer atbash
aparece el doble aspecto, positivo y negativo, o relativo al buen
y al mal uso de la Tríada. Respecto a lo primero, apuntamos
por una parte ~V~ (po'al), tarea, trabajo, y por otra t'J~V (ilef),
cubrir, y también desmayar, reforzando la idea anterior de que
la Tríada es esencialmente funcional, y que una vez realizada
la tarea y cubierto el objetivo que se proponía, se debe dejar de
lado, desmayar su acción. Respecto al aspecto negativo, el riesgo
es de endiosar el aspecto conservador, tal como nos lo muestra
la palabra ~~V, que leída 'upal significa elevado o alzado, y con

33 0 ViLLARRUBIA / H AUT / M !LLERA


la vocalización ofel tiene el significado de acrópolis, que, como
sabemos, era el lugar más alto de una ciudad como Atenas, en
el que se concentraban sus principales templos.
La relación a través del Sendero de El Carro con el campo for-
mal o social transpersonal indica que la influencia que recibe
es esencialmente de tipo colectivo o cósmico, aunque a través
de Guevurah llega también cierta influencia de tipo individual,
y de Binah otra de tipo celeste formal. Son los senderos 6 y 11
los encargados de canalizar esa influencia para hacerla llegar
hasta Tiferet, y, corno deducimos fácilmente de la naturaleza de
ambos senderos, se trata de una canalización de tipo restrictivo,
selectivo, pues es la sefirá central la que, en-definitiva, determi-
nará, en función de la información recibida, el contenido de lo
que debe ser conservado y de lo que no debe serlo.
Las relaciones de polaridad interior en la Tríada de la
Conservación respecto a las sefirot que la integran nos mues-
tran a Binah recibiendo influencias de los senderos O, 2, 4 y 11,
y mientras Guevurah sólo tiene enfrente a tres senderos (6, 9 y
15), Tiferet se enfrenta a un total de once senderos subjetivos.
La consecuencia es, de nuevo, que hay una gran carga de in-
fluencias en la sexta sefirá, mientras que es comparativamente
escasa en las dos sefirot superiores, y puesto que la tendencia
es que lo más lleno tienda a ocupar el espacio de lo más vacío,
se produce, al igual que sucedía en la Tríada de la Innovación,
un fuerte empuje ascensional, que es, precisamente, una de las
características de esta Tríada, como medio para atravesar el
Abismo. Al ser una Tríada cuya superficie coincide en parte con
la de la Conciencia Moral, otra de sus características es la discri-
minación. La Ética o Escala de Valores será la que seleccionará
los contenidos a conservar y aquellos otros que deben ser des-
echados. En este sentido, actúa de forma semejante a su opuesta
polar, la Tríada de la Innovación.
Al examinar las influencias polares recibidas por los senderos
subjetivos vemos que es el 6 el que recibe la máxima energía,
por los influjos combinados de Jokmah, Keter y Guevurah.
En sentido opuesto, las influencias recibidas por el Sendero 11
son de tipo más anímico, más «acuoso», puesto que las tres se-

MANUAL DE KABllALAI-I PRÁCTICA 331


firot que se le enfrentan son, precisamente, las que se refieren a
la expresión de este elemento. Por su parte, el sendero 7 recibe
sólo, como su opuesto polar, el 5 y los inferiores 10 y 12, la ex-
clusiva influencia de Tiferet, lo que indica que es, como los otros
tres, una proyección de la Individualidad o, si se prefiere otra
terminología, una parte de las fronteras del Yo frente al No-Yo.
La carta del tarot correspondiente a esta Tríada es la Reina
de Oros. A diferencia de sus compañeras del mazo marsellés,
no lleva corona sobre su cabeza, sino sólo diadema, como indi-
cando una jerarquía algo menor que la de sus compañeras de
los restantes palos. Y mientras las demás muestran algún tipo
de arma (el Basto y la Espada las Reinas de estos palos, y un
estoque la Reina de Copas, apoyado en su hombro izquierdo),
la de Oros porta un fino cetro coronado con una flor de lis,
lo que indica su carácter pacífico de acuerdo con el significado
de la Tríada. Sostiene el disco de oro en su mano derecha frente a
su cara, que aparece, como el resto de su cuerpo, de perfil hacia
su derecha (izquierda del espectador), lo que indica nuevamen-
te su carácter decididamente conservador y apoyado en el pa-
sado. Su actitud contrasta notablemente, por tanto, con la de las
otras tres reinas, que, aparecen de frente, aunque mirando ha-
cia su izquierda (Bastos) o hacia su derecha (Copas y Espadas).
A destacar también sus cabellos de color azul, que indican pen-
samientos teñidos por el mundo de los sentimientos o de las
emociones, a diferencia de sus tres compañeras, que lucen cabe-
llos blancos, color que simboliza en este caso la pureza.
La palabra hebrea para conservación es ;i,~~w (shmirah), con
valor numérico de 555, en la que encontramos los conceptos
Ml~,n .n~~ (bet jalitzah), planta del pie, confirmando la idea de
soporte de esta Tríada; ¡,~.:,~;, (himtik), endulzar, y también de-
salar, en referencia al necesario abandono de lo que ha cumpli-
do ya su función, tal como se hace, por ejemplo, con el bacalao
salado antes de su cocción, del que se debe eliminar el factor o
elemento conservador, en este caso la sal, una vez cumplida su
función; y dos palabras que aluden al aspecto negativo de la
conservación, .ni-YCllJi (hipasdut), perdición, y MMllV (efatah), oscu-
ridad, tinieblas, y también desierto. El resultado de la guema-

332 VII.LARR UB IA / HAUT / M ILLERA


tria se completa con :iw,,¡, :,~;,¡, (kehilah kedoshah), la comunidad
judía, que a lo largo de la historia ha ejercitado vigorosamente
la Tríada de la Conservación frente a todo tipo de persecucio-
nes y presiones. Mediante temurá encontramos otros conceptos
interesantes: O~ (shem), nombre, que en Kabbalah se considera
que alude al Tetragrama nin~, indicando con ello que, en senti-
do espiritual, la conservación debe hacerse en nombre de Dios,
en función de intereses sagrados, que no son otros, en definiti-
va, que el cumplimiento del tikún, y a un nivel inferio1~ que el
uso de nombres es un método para conservar, para cristalizar
una determinada cosa o situación; y ,~w (shir), canto, himno,
pero que leído shyar significa viajero, señalando de nuevo el
carácter provisional de la conservación. No conviene terminar
esta sección sin resaltar que toda conservación se extiende a lo
largo del tiempo, por lo que éste es su factor gobernante; de ahí
que el punto más alto de esta Tríada sea la sefirá Binah, cuyo
chakra mundano es Saturno, Dios del tiempo, y cuyo nombre
divino es, precisamente, el Tetragrama Miii\

3. 1 7.5.3. Tríada de los Miedos

Sefirot que la forman: Guevurah - Tiferet - Hod


Senderos subjetivos: 11. La Fuerza-12. El Colgado-15. El Diablo.
Letras hebreas de los senderos: ~ - ~ - C
Relaciones con los campos externos:
Las sefirot. Guevurah, abierta a los campos externos formales,
es fronteriza entre ambos, transpersonal y personal. Tiferet, por
su parte, al ser una de las sefirot interiores, no tiene contacto
directo con ningún campo externo. Finalmente, Hod, sefirá ex-
terna, es fronteriza entre los campos social, personal y terrestre
formal.
Los serideros subjetivos. El Sendero 12 se mantiene abierto al
campo social p ersonal, mientras que los otros dos son interiores
y sin relación directa, por tanto, con campos externos.
Relaciones polares con el interior del Árbol.
Las sefirot.

M ANUAL DE l<ABllALAI I PRÁCTICA 333


Guevurah se relaciona con los senderos 6, 9 y 15.
Tiferet se relaciona con los senderos O, 1, 3, 5, 7, 8, 10, 12, 16,
17 y 19.
Hod se relaciona con los senderos 11, 13, 14, 17, 18 y 21.
Los senderos subjetivos.
El Sendero 11 se relaciona con Binah, Jesed y Hod.
El Sendero 12 se relaciona exclusivamente con Tiferet.
El Sendero 15 se relaciona con Guevurah, Netzaj y Yesod.
Tríada con oposición polar: la de los Deseos.
Relación con el tarot: Caballo de Espadas.
Comentario: La Tríada de los Miedos recoge, como su opuesta,
la de los Deseos, uno de los aspectos que deben ser recorridos
como experiencia, y después abandonados por completo. No es
fácil, en principio, ver la necesidad de abandonar definitivamen-
te todos los miedos, sobre todo cuando durante siglos, y proba-
blemente durante milenios, la llamada educación se ha basado en
la política del «palo y la zanahoria». De hecho, ya en el Código de
Hammurabi se definía al hombre como un ser que emplea todo
su tiempo en comer, dormir, intentar reproducirse y tener miedo.
Pero si consideramos que el miedo no es sino el reverso de una
única medalla cuyo anverso es el deseo, se comprenderá la nece-
sidad de abandonar uno y otro una vez realizada su experiencia.
En efecto, ¿es concebible un deseo cuya naturaleza sea de nunca
ser realizado? Al contrario, todo deseo busca realizarse, bien al-
canzando el objeto del deseo, o bien comprendiendo (en el sen-
tido de «incluir», «de hacerse uno con») la motivación escondida
tras él, en cualquiera de estos dos casos el deseo desaparecerá.
De la misma forma, los miedos desaparecerán una vez haya suce-
dido aquello que se temía, o bien cuando se comprenda la esencia
del propio miedo. Por esa razón, Antonio Blay recomendaba en
todos sus cursos afrontar los miedos mediante el planteamiento
de la pregunta «¿Qué es lo peor que puede suceder?», y aceptarlo
a continuación con todas sus consecuencias.
Los senderos subjetivos de la Tríada muestran las tres fuen-
tes en que se originan los miedos: el entorno social represen-
tado por el Sendero 11, las formas que llegan sin control (por
proceder del campo externo formal o social) a través del 12,

3 34 V1 LLARRU BIA / HAUT / MILLERA


y los «demonios interiores» del 15. Recordemos a este res-
pecto uno de los más famosos grabados de la serie negra de
Francisco de Goya, titulado «El sueño de la razón produce
monstruos».
Las letras asociadas a los senderos subjetivos revelan una serie
de palabras que aclaran con extrema precisión la naturaleza de
los miedos. Así, encontramos ~~Q (sajál), tonto, idiota, recor-
dándonos nuevamente que Dante define en su Divina Comedia
al Infierno como «el lugar destinado a aquellos que han perdido
el don de la inteligencia»; ~Q~ (kesél), que significa a la vez ton-
tería o necedad, en línea con el concepto anterior, e intestinos o
entrañas, justamente donde se sienten y somatizan los miedos;
y si se lee la palabra anterior como késel tendremos confianza o
esperanza, una forma particular de estupidez, puesto que divi-
de nuestra energía, nuestro amor y nuestra consciencia entre un
aquí y ahora que tal vez no nos guste, pero que es real, pues es
lo que verdaderamente está sucediendo, y un allí y luego que
todavía no existe y que puede no llegar a existir nunca; el resul-
tado es la división, füaf30Am (diaboloi), lo diabólico, lo separati-
vo; y para terminar, está la palabra ~~Q, que leída sajal significa
embrutecerse, y como sejel, imprudencia, los dos efectos del uso
inadecuado de la Tríada, el primero por exceso y el segundo

,n~,
por defecto. El atbash de las letras completa los significados:
(jelej), pobre, miserable; cuya vocalización como kajol es el
,,n
color azul, asociado al amor (ver el capítulo correspondiente a
la 4.ª sefirá, Jesed), que es el antídoto del miedo, y leído kejal es
ubre, de la que se amamantará el recién nacido, que crecerá para
pacer, in, (lajaj), señalándonos el origen del miedo como algo
que pertenece al aspecto animal, y por tanto antiguo,
del ser humano.
n,~
(kelaj)

La relación a través del Sendero de El Colgado con el campo for-


mal o social personal nos indica que la influencia que recibe la
Tríada es esencialmente de carácter individual, aunque con al-
gunos matices marginales de tipo tanto transpersonal (a través
de Gevurah) como terrestre (a través de Hod). Esta influencia
es canalizada por los senderos 11 y 15, que son de naturaleza
social-energética y mental-anímica, respectivamente.

MANUAL OF. KABBJ\LAH PRÁCTICA 335


Las relaciones de polaridad interior en la Tríada de los Miedos
respecto a las sefirot que la integran muestran a Guevurah frente
a sólo tres senderos (6, 9 y 15), mientras Tiferet recibe influjos de
once senderos subjetivos y Hod de seis. Por el principio de la
diferencia de potencial entre las diferentes sefirot, la tendencia
de la Tríada es expansiva en dirección a Gevurah, por lo que los
miedos son un poderoso estímulo para la acción, sobre todo la de
tipo defensivo, que se manifiesta a través de esta última esfera.
Por su parte, en las influencias polares recibidas por los sende-
ros subjetivos vemos que, mientras el 11 y el 15 reciben influen-
cias de tres sefirot cada uno, el 12 sólo recibe la de Tiferet. Y,
mientras el 11 es de naturaleza acuosa en su manifestación, tal
como vimos en el capítulo anterior, -el 15 es predominantemente
ígneo, aunque con la influencia a veces perturbadora de Yesod,
por su carácter de máscara, de personalidad, de luz lunar refle-
jada y no de luz solar propia. Será por tanto el sendero 12, con
todo y su debilidad aparente, el que se transforme en árbitro
de la situación. En efecto, frente a la oscuridad que emana del
Sendero 15 y las convenciones sociales que afectan al 11, es el 12
el encargado de detenerse, observar y decidir. Si tomásemos
como símil una corrida de toros, el sendero 15 sería el toro y el 11
el público que, a decir de muchos diestros, asusta más que el
primero; el torero, simbolizado por el Sendero 12, en su soledad
frente a uno y otro, es el encargado de parar, templar y mandar
los miedos que van surgiendo de los otros dos senderos.
La carta del tarot correspondiente a esta Tríada es el Caballo de
Espadas. Como su compañero del palo de Copas, avanza hacia su
derecha (izquierda del espectador), pero a diferencia de éste, lo hace
al galope y no al paso, en alusión a lo rápidamente que aparecen los
miedos. Y, aunque el caballero mira en dicha dirección, tiene sobre
su hombro izquierdo una cara orientada en sentido contrario. Su
cabeza está protegida por un casco metálico, lo que indica cierta ri-
gidez de ideas, y, a semejanza de su compañero del palo de Bastos,
sujeta la espada con su mano izquierda, lo que indica que su acción
no es voluntaria, sino instintiva y hasta cierto punto obligada.
La palabra hebrea para miedo es il~,, (irah), con valor numérico
de 216, y cuyo plural es Mi~,, (iraot), con valor numérico 617.

336 VILLARRUBIA / H AUT / MILLERA


En el primero aparece el nombre de la 5.ª sefirá, i1ii~~ (Gevurah),
que tiene, además del de rigor, los significados de bravura, co-
raje y heroísmo; ,~~, (debir), el Santo de los Santos, la parte
más ocu_l_ta del Templo de Jerusalem, en la que sólo podía en-
trar el Sumo Sacerdote una vez al año; i~Ni1 (heir), que significa
iluminar y también aclarar, esclarecer, y es por otra parte una
temurá de la palabra hebrea que define al miedo; ;,i~ii1 (hadba-
rah ), con los significados de aniquilación y subyugación, efectos
que puede causar el miedo; ¡,¡,iii1 (hizdakek), purificar, refinar,
la verdadera función del miedo, que debe experimentarse por
ello antes de continuar la expansión de la consciencia en el ca-
mino de retorno a la Unidad, como saben en muchas tradicio-
nes iniciáticas, que hacen pasar al neófito por esa prueba antes
de otorgarle la iniciación; de pasarse esa prueba, i1~N, (reayah),
se comprenderá que el miedo es a la vez un mago, un hechicero,
,~,n (jover), palabra que también tiene el significado de amigo
o compinche que nos prepara con vistas a la peregrinación, i1~N,
(reiyah) que nos llevará finalmente a la unión, ,,~n(jibur), con el
Amado, tal como cantaron en su poesía tantos místicos, como
san Juan de la Cruz en su Noche oscura (ver más adelante el poe-
ma completo):

Amada en el Amado transformada

Y no es sólo una unión simbólica, sino muy real y a todos los


niveles, pues jibur además de unión significa también coito, y
reiyah, además de peregrinación, tiene también el significado de
eyaculación. Por último, en cuanto a la palabra plural, miedos,
aporta una información directa y otra indirecta. Un valor directo
de 617 lo tiene .t,,i~ii1 (hidabru t), diálogo, coloquio, mientras que,
al computarse la mem final, O(mem sofit), por su valor alto de 600,
encontrarnos oi~N (iyum), amenaza, espanto, intimidación: en
este caso se nos ofrece un consejo sumamente interesante, que
consiste en que los miedos deben ser trabajados, corno los de-
seos, uno a uno, dialogando con ellos, y no en bloque, no de
forma plural, pues en este caso lo único que conseguiremos será
asustarnos sin ningún resultado práctico.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 33 7


3. 11.5.4. Tríada de la Intuición

Sefirot que la forman: Tiferet - Hod - Yesod.


Senderos subjetivos: 14. Templanza - 15. El Diablo -19. El Sol.
Letras hebreas de los senderos: ~ - e - ¡,
Relaciones con los campos externos:
Las sefirot. La única esfera abierta al exterior es Hod, fronteriza
entre los campos social personal y terrestre formal. Tiferet y
Yesod son las dos esferas internas del Árbol de la Vida.
Los senderos subjetivos. Ninguno de los tres senderos que
forman la Tríada está en contacto directo con los campos
externos.
Relaciones polares con el interior del Árbol.
Las sefirot.
Tiferet se relaciona con los senderos O, 1, 3, 5, 7, 8, 10, 12, 16,
17 y 19.
Hod se relaciona con los senderos 11, 13, 14, 17, 18 y 21.
Yesod se relaciona con los senderos 13, 15, 16, 18 y 20.
Los senderos subjetivos.
El Sendero 14 se relaciona con Netzaj y Hod.
El Sendero 15 se relaciona con Guevurah, Netzaj y Yesod.
El Sendero 19 se relaciona con Tiferet, Netzaj y Maljut.
Tríada con oposición polar: la del Impulso.
Relación con el tarot: Caballo de Bastos.
Comentario: La Tríada de la Intuición es la que lleva a la práctica
el resultado del conocimiento instantáneo, no lineal, que llega
por cauces casi siempre inesperados, y muchas veces incom-
prensibles. No importa que, a nivel subjetivo, los senderos que
manifiestan la intuición permanezcan en apariencia cerrados,
pues la intuición funciona sin que el sujeto sepa en ocasiones
por qué lo hace, e incluso sin que sea consciente de que está
funcionando. Es, por tanto, una Tríada que habla de lo insólito,
de lo inesperado, por lo que muchas veces parece estar en opo-
sición operativa con su Tríada polar, la del Impulso. Pero esa
oposición es aparente, fruto más bien de la torpe intervención
del Ego a través de su esfera privativa, Yesod. Y como ésta es el
centro de los deseos y los miedos (que luego se expresarán en

338 V!LLARRUBI A / HAUT / MILLERA


sus correspondientes Tríadast es a través de la coloración que
unos y otros marcan como la intuición queda perturbada, y mu-
chas veces bloqueada.
Sus senderos subjetivos son todos ellos internos, por lo que se tra-
ta de una Tríada de introspección, la de más profunda interioriza-
ción junto con su polar opuesta, la del Impulso. El Sendero 15 actúa
como un captador de información a través de sus daimones, debien-
do entenderse esta palabra, no tanto como «demonios», sino como
genios o fuerzas, energías específicas que operan en al Árbol. Como
veremos en el capítulo correspondiente, estos genios, en número de
72, pueden ser considerados como nuestros «socios», no siempre
cómodos, en la sagrada tarea del cumplimiento del tikún. Y mien-
tras el sendero 14 es el que mantiene abierta la vía de comunicación
entre la Individualidad y la Personalidad, el 19 actúa como soporte
o base de colaboración entre ambos centros de consciencia. En efec-
to, si observamos un diagrama del Árbol de la Vida, comprobare-
mos que este último sendero, el 19, recibe las influencias de Tiferet,
por ser polarmente opuesto a esta esfera, y que esas influencias son
canalizadas, bien hacia el centro de la Personalidad de Yesod, bien
hacia la mente concreta que se manifiesta en Hod, dado que este
sendero es, como sabemos, de dirección doble, aunque alternativa.
Las letras asociadas a los senderos subjetivos forman palabras
que muestran el carácter paradójico, y a veces hasta incómodo,
de la intuición. Así, encontramos ¡,e~, que según la vocalización
que lleve, puede significar subir o elevarse (násak), sostenido
(nasek) o encendido, prendido (nissek), conjunto que sugiere una
elevación que perdura e ilumina a quien la experimenta. Junto
a ella, están ¡,~e, rechazar con la vocalización sanak, y apartar
cuando se pronuncia sinnek. Finalmente, aparece también e~¡,
(kanas), multar. Según esto, la intuición ofrece posibilidades de
seleccionar o rechazar algo sin razón aparente ... lo que a veces
puede llevar al intuitivo a situaciones un tanto embarazosas,
desde el punto de vista de los «razonables», que quizá casti-
guen tamaña osadía ...
Al ser todos los senderos subjetivos de la Tríada internos en
el Árbol de la Vida, no reciben ninguna influencia directa de
los campos exteriores. Es, junto a la Tríada del Impuso, la que

MANUAi. DE KABBALAH PRÁCTICA 339


más intensamente representa la interiorización, el entrar den-
tro de sí mismo; lo que es tanto como decir que la intuición (y
también el impulso, entendido como fuerza vital) casan mal
con la acción exterior para manifestarse, aunque después la
acción exterior sea el resultado de la intuición o del impulso
anteriores.
Las relaciones de polaridad interior en la Tríada de la Intuición
respecto a las sefirot que la integran muestran a Tiferet enfren-
tada a once senderos subjetivos, a Hod a seis y a Yesod a cinco.
La diferencia de potencial se reparte alternativamente entre las
dos sefirot inferiores, Yesod y Hod, hacia las cuales se orienta
la energía (que en este caso se reviste de formas) procedente de
Tiferet.
Las influencias polares que reciben los senderos subjetivos apa-
recen bastante equilibradas, ya que los senderos 15 y 19 tienen
frente a ellos a tres sefirot cada uno, y el 14 a dos. El ligero vacío
relativo que ello comporta dirige un suave flujo energético ha-
cia el interior, confirmando el carácter de esta Tríada como de
interiorizacion.
Le corresponde como carta del tarot el Caballo de Bastos, el úni-
co de los cuatro en el que el animal aparece (en la versión de
Marsella) de color blanco, indicando así el carácter espiritual de
la Tríada, pese a su baja ubicación en el Árbol. Si bien el caballo
tiene su cabeza orientada a su derecha (izquierda del especta-
dor), tanto él como el caballero están en actitud de volverse hacia
su lado opuesto, indicando que la intuición abarca tanto el pasa-
do como el futuro; y, evidentemente, también el presente, pues
el caballero aparece en el naipe en esta posición. No obstante,
una gran parte de la montura aparece cubierta con un paño de
color carne, el mismo que tienen los cuerpos de las otras tres ca-
balgaduras, indicando que la esencia espiritual de la Tríada está
cubierta por la apariencia carnal. El tocado de cabeza del caba-
llero es un sombrero en forma de signo de infinito, tal como apa-
rece en otros naipes, como los Arcanos I El Mago, XI la Fuerza,
las Sotas de Espadas y Oros y los cuatro Reyes, lo que refuerza
su idea de contacto, o al menos intención de él, con el Absoluto.
Finalmente, el caballero sostiene en su mano izquierda un Basto

340 ViLLARRUBIA / HAUT / MILLERA


poco trabajado, aunque algo más que el de la Sota del mismo
palo y menos que los de la Reina y el Rey; su actitud al mos-
trar el Basto, indica un estado de alerta, que sin embargo es de
pasividad activa, lo que sería el wu-wei taoísta, el no-hacer; por
ello, esta Tríada está íntimamente relacionada con el sendero O,
El Loco, que tiene ese mismo significado a nivel subjetivo.
La expresión hebrea equivalente a intuición es ri~~~~~ nw,nn
(tejushah pnimit), que puede traducirse literalmente corno per-
cepción interior, confirmando el carácter de interiorización de la
Tríada. En su guernatria, 1309, encontramos un concepto que de
forma simbólica indica otra faceta de la intuición; nos referimos
a,,w~ nw¡, (keshet gishur), arco [iris] de conexión, recordando que
en muchas culturas, se ha considerado a este fenómeno meteo-
rológico corno un puente de unión o conexión entre el cielo y la
tierra.

3. 11.5.5. Tríada de la Lógica

Sefirot que la forman: Hod - Yesod - Maljut.


Senderos subjetivos: 19. El Sol - 20. El Juicio - 21. El Mundo.
Letras hebreas de los senderos: ¡, -, - n

Relaciones con los campos externos:


Las sefirot. Hod es fronteriza entre los campos social personal y
terrestre formal. Maljut, por su parte, al ser la esfera inferior
del Árbol, se encuentra en pleno contacto con el campo externo
terrestre, repartido entre sus dos mitades, energética y formal.
Finalmente, Yesod no contacta con campos externos, al ser una
de los dos esferas interiores del Árbol de la Vida.
Los senderos subjetivos. El Sendero 20 está en contacto direc-
to con el campo terrestre formal. Los otros dos senderos que
forman la Tríada no están en contacto directo con los campos
externos.
Relaciones polares con el interior del Árbol.
Las sefirot.
Hod se relaciona con los senderos 11, 13, 14, 17, 18 y 21.

MANUAL DE KABBAI.AH PRÁCTICA 341


Yesod se relaciona con los senderos 13, 15, 16, 18 y 20.
Maljut se relaciona con los senderos 16, 17 y 19.
Los senderos subjetivos.
El Sendero 19 se relaciona con Tiferet, Netzaj y Maljut.
El Sendero 20 se relaciona con Netzaj y Yesod.
El Sendero 21 se relaciona con Netzaj y Hod.
Tríada con oposición polar: la de la Iniciativa.
Relación con el tarot: Sota de Copas.
Comentario. La de la Lógica es la inferior del grupo de Tríadas
pasivas. La lógica implica siempre un razonamiento ligado
a partir de unas premisas de las que al menos una es un
hecho que se supone indubitado y por tanto no susceptible
de discusión ni demostración previa. En consecuencia, parte
siempre de una base no lógica.
De los senderos subjetivos que la configuran, uno, el 20,
es externo y en pleno contacto con el campo terrestre formal,
mientras que los otros dos, el 19 y el 21, son internos, por lo
que se trata de una Tríada de conexión con el entorno, en este
caso que recibe y envía influencias a la tierra, esto es, a los
aspectos más yin. Es, pues, en este sentido una Tríada que,
pese a su carácter pasivo, tiene características activas frente
al entorno terrestre. La comunicación del Sendero 20 está he-
cha fundamentalmente de sonidos, lo que implica, de alguna
manera, que sea la expresión en el plano material del sonido
básico del Universo, el Om, por lo que su misión es despertar
y movilizar a los niveles densos de su inercia. El Sendero 19,
por su parte, se ocupará de armonizar y conciliar, limando, por
decirlo así, las aristas que se produzcan como consecuencia
de los diferentes niveles vibratorios de la información recibi-
da. El 21, finalmente, se encargará de concienciar el proceso,
lo que a veces puede resultar doloroso por dichas diferencias
de nivel vibratorio; pero esa es precisamente otra de las mi-
siones del 21, tomar conciencia del dolor, que es útil como re-
ferencia para avisar de las desviaciones del «recto camino)).
Tres son las palabras que pueden formarse con las letras
asociadas a los senderos subjetivos de la Tríada: Mi¡, (keret),
villa o ciudad, idea que da la imagen de seres que viven jun-

342 VJLLARRUBIA / HAUT / MILLERA


tos, pero cuyo grado de unidad es imperfecto, algo así como
el comienzo del proceso de unificación; ¡,Mi, que leída como
ratak significa golpear, y como rittek, unir, y también cauti-
var; y finalmente, i¡,M (teker), pinchazo. La lógica aparece así
como algo que une, un instrumento para la convivencia, tal
como lo indica la palabra ciudad, pero que puede también
ser utilizado como arma y como atadura. Y en tal sentido
funciona, hasta que «pincha», y entonces aparece con todas
sus limitaciones, obligando a mirar en la dirección correcta,
a la M~iWM (teshubah), el arrepentimiento, que aparece sim-
bolizado por la inversión de las letras mediante el atbash.
Entonces se confirma el carácter de instrumento de ligazón
de la lógica, en la palabra i,N (agad), unir, ligar, pero también
que la seguridad que parecía ofrecer la lógica se derrumba,
apareciendo el temor (,Ni, dáag, inquietarse, temer, recelar).
Como ha quedado señalado, el Sendero 20, al estar en con-
tacto directo con el campo terrestre formal, es uno de los lí-
mites o fronteras del Yo, mientras que los otros dos, internos
en el Árbol de la Vida, no reciben ninguna influencia directa
de los campos exteriores y actúan como transmisores y mo-
dificadores de las influencias llegadas a través de aquél.
Las relaciones de polaridad interior en la Tríada de la Lógica
respecto a las sefirot que la integran muestran a Hod frente
a seis senderos, a Yesod a cinco y a Maljut a tres, por lo que
es en esta última sefirá en la que se produce la diferencia de
potencial negativa que atraerá las energías de las dos sefirot
superiores. Desde este punto de vista, la misión de la Lógica
es traer la racionalidad a los niveles inferiores, o lo que es
lo mismo, ayudar el despertar de esos niveles a la indivi-
dualidad. Luego, esa racionalidad deberá ser transcendida,
integrando en un todo armónico lo que hasta ahora era pura
indiferenciación y pretende ser, como fase intermedia, indi-
vidualidad separada.
Las influencias polares que reciben los senderos subjetivos
también aparecen en este caso bastante equilibradas, pues los
senderos 19 y 20 tienen frente a ellos a tres sefirot cada uno, y
el 21 a dos, siendo en este caso su comportamiento similar al

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 343


de la Tríada de la Intuición. Por eso, también el ligero vacío re-
lativo que ello comporta dirige el flujo energético hacia el inte-
rior, confirmando el carácter de esta Tríada como de interiori-
zación, pese a su situación periférica en el Árbol. La diferencia
con la Tríada de la Intuición es que, mientras en ésta el flujo de
información llegaba de forma espontánea, en la de la Lógica
es necesario un constante estímulo. Al llegar la información al
interior de la Tríada, procedente en su mayor parte del campo
terrestre formal, tenderá primero a subir hasta Hod, aprove-
chando el sentido ascendente del Sendero 20, y desde allí, una
vez revestida de las formas que le proporciona la 8. ª sefirá,
bajará hasta Maljut y el Sendero 21, aprovechando la suave
diferencia de potencial que este· sendero y la décima sefirá
tienen respecto al resto de la Tríada.
Le corresponde corno carta del tarot la Sota de Copas que, en
el modelo de Marsella, aparece avanzando decididamente
hacia su derecha (izquierda del espectador) con la cabeza
descubierta, aunque adornada con una diadema de flores
blancas al igual que los cabellos, lo que indica pureza de
intenciones. Pero, según dicen, el Infierno está sembrado
de buenas intenciones .. . Los cabellos sueltos indican que
los pensamientos fluyen libremente. Lo más significativo
de este naipe, además de la dirección de su caminar, que
apunta decididamente hacia el pasado, son los objetos que
lleva en ambas manos. Con su derecha, que indica la acción
voluntaria, sostiene con el pie una gran copa descubierta,
mientras que su izquierda, expresión de lo instintivo, cuelga
a lo largo de su cuerpo sosteniendo la tapa de la copa. ¿No
estará diciéndonos que está dispuesta a aceptar en su copa
líquidos, a condición de que sean de su agrado, y por eso
lleva preparada la tapa, por si fuere necesario usarla? Claro
que también podría usarse para tapar la copa una vez llena
y evitar que se derrame su contenido. Y es que, en realidad,
la Sota de Copas, corno la lógica, es una gran tramposa, pese
a la pureza de sus intenciones. La clámide o capa corta que
cuelga corno un p equeño poncho de sus hombros levantada,
quizá por el viento, ni, (rúaj, que también significa espíri-

344 V !LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


tu), dejando ver la parte delantera de su jubón. Los colores
de estas prendas acaban finalmente de revelar lo que esta
Tríada esconde: la clámide es dorada por fuera, pero color
carne en su interior, revelada por el soplo de viento, por lo
que presenta una apariencia inteligente y un fondo instinti-
vo, carnal. Toda lógica esconde en lo profundo, en efecto, un
grito no lógico: «jTengo hambre! ¡Tengo miedo! jMe siento
inseguro!». Y para confirmarlo, el pecho, la sede de los sen-
timientos, aparece revestido con un jubón de intenso color
rojo, manifestando así que lo que se está expresando es, en
efecto, lo más primario.
La palabra hebrea para lógica es ¡,~~;, (higaión), cuya gue-
matria es 74. Con este valor aparecen numerosas palabras
que muestran diversos aspectos, contradictorios algunos de
ellos entre sí, pero siempre relacionados con la lógica o con
las motivaciones que se esconden en su origen: m,~~~ (avi-
yonah), concupiscencia; vi (deá), conocimiento; tQCM (hesset),
sacudida, vibración; o,~n (jikúm), comprensión, y también
picardía, sagacidad; ,~, (lamad), estudiar, aprender, ins-
truirse; ;i~roJ (netiyah), deseo, inclinación; y iv, que leída ad
significa eternidad, y también botín, y leída ed, testigo, y
también prueba. Creemos innecesario comentar estos signifi-
cados, por demás obvios, en relación a la Tríada de la Lógica.
Como remate, digamos que en la palabra ¡,~~;, está contenida
otra, p;, (hegen), que significa refugio, protección o defensa,
y esto es también la lógica, un sistema de defensa, por lo de-
más necesario, para proteger al Yo mientras se desarrolla su
proceso de unificación.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 345


. EJERCICIOS

23. Dibuja uri;Árbol .de la Vida con los colore~ de At:z:ilut. Aplic,?
todo lo que has aprendido hasta ahora/ y esmérate, que sea
· · uníl obra de arte de la que te ,sientas orgulloso/a: ' · · · ··
24. Dibuja otro Árbol de la Vida, pero ahora con los colores de
Briah, tanto en las sefirotcomo en los senderos subjétivos.
25. Repite el dibujo, pero ahora con los colores de Yetzirah. · ·
26. Haz lffmismo con los,colmes de Assiyah. . ·
27. Trata de hacer ahora TU PROPIO Árbol,. en los'colores que
sientas más adecuados eri cada punto del Árbol. Si sabes di- .
bujar, coloca imágenes que en tU opinión reflejen el espíritu
de aquella parte e.n las que las sitúes. Si nosabes dibujar, bus-
ca en revistas o libros los dibujos que creas que correspo'í1den
a cada par;te del Árbol, y, o bie,11 r~córtalos y pégalos en sus
sitios correspondientes, o bJen hazlo con sus fotocopias; sean
en blanco y negro. o ~.n color. No desdeñes esta técnica, que
se llam.a collage («pegadura»1 en francés);·la han utili1ado los
mayores-artistas de este siglo. · · · .·. . . · ·
28. Dibuja un Árbol exclusivamente.con las seis Tría9as estruc- .
turales1 y colocá sobre cada una de ellas, o asocia.do a ellas
mediante flechas, un dibujo que exprese sus significados. ·
29. Haz lo mismo con las Trfadas activas. ··
. 30. Haz lo mismo cori las Tríadas pasiva.s. . ,
31 . Busca alguno de los t~xtos.hebreos que pan aparecido hasta·.
ahora en la presente obra y cópialo, embelleciéndolo como .
lo hacían los monjes medievales conJos:códices. ·
32. Si has completado los' ejercicios anteriores, plastifis1 las lá- '
. minas que dibujaste, o mételas en c.1rpetas de plástico, detal .
forma qúe las puedas uríificar·en un mismo ·cl!aderno o car-
peta. Si alguno de los dibujo? 110 te gusta demí15iado,..repítelo ·
. · hasta que te guste. · ·· ·.· ·
33. Busca en tu vida tipos, cosas o situaciones y sitúíllas en la,
parte del Árbol de la Vida con la quete pa,rezca que tienen
más afinidad. · 1 ·

346 VI LLA RRUBIA / HAUT / MILLERA


3. 11. 6. Consideraciones generales sobre las Tríadas

Como expresión hacia el exterior de las vivencias interiores


simbolizadas por los senderos subjetivos, las Tríadas, cualquie-
ra que sea su naturaleza, comparten una característica común,
que puede ser más o menos evidente, pero que no escapará a
un lector atento: todas ellas manifiestan la tendencia a la ex-
pansión, hacia el agrandamiento, si se quiere aceptar esta ex-
presión, del Árbol de la Vida más allá de sus límites. Tal vez la
expansión sea una constante del Universo, y a nivel físico lo es,
tal como han demostrado las ciencias cosmológicas.
En algunas Tríadas se nota menos esta característica expan-
siva, tal como sucede en las de la Mística, Ascética, Intuición e
Impulso, que podrían considerarse de interiorización, necesa-
ria, por otra parte, para evitar que la expansión lleve a la dis-
gregación. En las demás, tanto activas como pasivas, la fuerza
de expansión es patente. En cuanto a las Tríadas estructurales,
la tendencia expansiva se manifiesta con fuerza ascendente en
las de las Raíces y de la Fe; por su parte, las de la Ética y de
la Memoria manifiestan su fuerza expansiva hacia los campos
externos laterales, tanto energéticos como sociales o formales,
y la de la Inserción en el Mundo lo hace en dirección al campo
externo terrestre. Sin embargo, la Tríada del Temple de Ánimo
muestra tendencia a la interiorización, por lo que se puede con-
siderar que forma parte del sistema aglutinante, que es el en-
cargado de mantener la unidad e impedir la disgregación.
¿Qué significado tiene la tendencia a la expansión de las
Tríadas del Árbol de la Vida? En último extremo, esta fuerza
tiene su origen en Tiferet, el centro de la Individualidad, por
lo que bien puede decirse que es una característica del Yo, que
busca el dominio del Universo mediante la ocupación de los
campos externos. Pero esta tendencia, esta energía que tiende a
expandir las fronteras del Yo, no es sino una manifestación de
añoranza de la Unidad Perdida, del dolor que esta pérdida re-
presenta, y del anhelo profundo de restaurarla. En otras pala-
bras, es la llamada constante que todos los seres recibimos para
cumplir el tikún. Como veremos en su momento, esta tendencia

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 347


a la expansión está hecha de lo más Bueno, lo más Bello y lo
más Verdadero de cada ser, cualquiera que sea su naturaleza.

3. 11. 7. Correspondencias entre Tríadas


a través de la Escalera de Jacob
Estas correspondencias son escasas, y se refieren exclusivamente
a las Tríadas estructurales de la Memoria y de la Inserción en el
Mundo de cada nivel superior, que se corresponden, respectiva-
mente con las de las Raíces y la de la Fe en el nivel inmediatamente
inferior. Como es lógico, el nivel de Atzilut no tiene corresponden-
cia hacia arriba, ni el de Assiyah hacia abajo. Por lo demás, no hay
correspondencias que afecten a ninguna de las Tríadas activas o
pasivas, ni tampoco a las estructurales de la Ética y del Temple de
Ánimo, lo que por una parte confirma que cada nivel tiene sus pro-
pios valores, sus propias «reglas de funcionamiento», y por otra,
que también son diferentes las pruebas que el alma debe superar
en cada uno de los niveles para afianzarse en ellos.

3.12. Los genios de la Kabbalah


Este concepto tiene su origen en el fragmento CX del Sefer ha-Bahir,
el Libro de la Oaridad, citado frecuentemente en la presente obra. Sin
embargo, este fragmento alude, no a los genios de la Kabbalah, sino a
nombres divinos, tal como podemos leer en el texto mencionado:

«El nombre divino que surge de los tres encabezamientos vaisá, baia-
bó, vaiet en Éxodo 14: 19-21, es revelador. Las letras del primero, vai-
sá, siguen el orden acordado por el mismo versículo; el pasaje en donde
figura vaiabó aparece en orden inverso, y en fin, las letras del tercer ver-
sículo en donde está vaiet aparecen en el Nombre del mismo modo que en
el primer caso. Cada uno de estos versículos contiene setenta y dos letras.
De donde las tres palabras claves: vaisá, vaiabó y vaiet dan lugar a los
setenta y dos nombres, número que se divide en tres partes, a veinticuatro
letras por fracción».

348 VILI.ARRUBIA / HAUT / MILLERA


Veamos, pues, estos tres versículos en su texto hebreo y su tra-
ducción al castellano:
14: 19.
·tt1;:i □";:T°'?~::r =l~?~ !7º~1
CQ"Jr]~~ il?.~l ?~j-~: ;,~[J~ "~~7
□;J"JO~~
. . 1~~~1 □ Oi1"~;l~
. 1~~CT . . 1:i~~ !7º~1
Y el ángel de Dios, que hasta entonces andaba delante del campamento
de Israel, se puso detrás de ellos, de modo que la columna de nube que iba
delante se puso detrás de ellos,
14: 20.
,~:,~: ;,~o~ r.;,.:i □:'Jt~ i1~r]~ 1"~ ~·:J.~l
i1t. :r:,~-rf'?1. ;,7~~;:i-n~. 7~~1 il~ n;:i1 1~lJCT ";:T"l
. :i1~"'yi1:...?~
T : T - T
iir-,~
entre el campamento de los egipcios y el de Israel, y fue extremadamen-
te oscura la noche, y no se acercó uno a otro en todo su transcurso.
14: 21.
;,ti~ il?.i~l □~J-',~ ii:-n~ i1~~ ~~l
□~~l ;,7~'pb-,~ i1·W □:,~ o:i·1f □~-:i-n1.
:□:~iJ :¡17~~~1 ;-¡~ 'J!J?.
Y extendió Moisés su mano sobre el mar y el Eterno hizo soplar un
fuerte viento solano toda la noche que puso el mar en seco, siendo dividi-
das las aguas.

EJERCICIO.

34. Escribe la transcripción fonética de los tres versículos an-


teriores, y cuando la tengas recítala en .voz alta. Según 1.o
.·haces, observa cómo te sientes, así como las sensaciones,
imágenes 6 inclt,Jso recuerdos que acudan a tu mente.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCT ICA 349


Siguiendo, pues, las instrucciones del Sefer ha-Bahir se forman
los 72 nombres divinos. Posteriormente a la aparición de esta obra
cabalística, para formar los nombres de los genios o ángeles del
Árbol de la Vida se añadieron a aquellos las terminaciones ;r~ o ~N,
que son precisamente los nombres de Dios relacionados respecti-
vamente con las sefirot 2.ª y 4.ª. Por consiguiente, la actuación de
estos seres tiene las características del sendero que une a ambas
esferas. Y como este sendero está relacionado a su vez con el arca-
no del Pontífice en el tarot, tendrán también relación con sus sig-
nificados. Les gusta, pues, todo lo relativo a los rituales; y tienen
mucho que ver con la capacidad de tender puentes para unir las
orillas de los abismos y con la risa y el sentido del humor. Se dice
que los ángeles vuelan porque, al na tomarse a sí mismos en serio,
son livianos ... Debe señalarse que el número de terminaciones de
uno y otro tipo, ~No il\ es diferente, ya que hay 40 de las primeras y
sólo 32 de las segundas. Como se verá en el apartado siguiente 3.13,
estas terminaciones y la correspondencia de los genios con los
Arcanos menores del tarot permitirán relacionar directamente a
los genios con las Tríadas del Árbol, aspecto sumamente útil para
la interpretación del Árbol personal.
Las relaciones de los genios con los arcanos del tarot se han esta-
blecido, según se ha indicado, con las cartas de número del 2 al 10
de cada uno de los cuatro palos, bastos, copas, espadas y oros, tal
como se recoge en la III Parte de esta obra. Los ases quedarían re-
servados para Ángeles regentes de los cuatro elementos, los cuales
se relacionan también con los cuatro palos del tarot; este aspecto se
trata en el apartado 3.14.
Hay varios tratados sobre los genios de la Kabbalah, que se re-
fieren esencialmente a exhortos y oraciones correspondientes a
cada uno de ellos. Por nuestra parte, consideraremos a los genios
de la Kabbalah como energías que fluyen a través del Árbol de la
Vida, lo que es tanto como decir que traen y llevan información, ya
que la palabra 1N~~ (malaáj) significa a la vez ángel y mensajero.
Se manifiestan a través de cualquier Tríada, aunque con preferen-
cia de aquélla con la que tengan su correspondiente afinidad.
Un principio de Kabbalah nos dice que, en hebreo, el nom-
bre y lo designado son lo mismo, lo que, por otra parte, sucede

350 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


también en otros idiomas que se consideran auténticos, como el
sánscrito, el chino mandarín o el quechúa que hablan los indios
del altiplano boliviano; y también en el árabe, tal como ya ma-
nifestaba respecto a Allah el gran maestro sufi Muhiyuddin ibn
el-Arabi en su Risalat-ul-ahadiyyah («Tratado de la Unidad»). Por lo
tanto, lo interesante es tratar de descubrir, usando los métodos de la
Kabbalah, qué significan realmente los nombres de los 72 genios, y eso
es lo que hacemos a continuación. El orden es el que se deriva de las
instrucciones del Sefer ha-Bahir sobre los versículos citados del Libro
del Éxodo. Obsérvese que los genios números 11 y 17 tienen el mismo
nombre. No deben sorprender las continuas referencias al Éxodo que
aparecen en muchos de los 72 nombres, ya que, como acabamos de
ver, están formados mediante las letras de tres de los versículos de di-
cho libro bíblico. Se trata, en realidad, de energías que nos van a asistir
en nuestras particulares salida de Egipto y travesía del desierto, a veces
adoptando la forma de fuerzas benéficas, y a veces de las del Lado
Oscuro. Pero, cualquiera que sea su aspecto, están ahí para ayudarnos
a cumplir nuestra sagrada misión. En cada genio se indica brevemente
su correspondencia con un determinado Arcano menor del tarot y con
la Tríada específica; el desarrollo de estos aspectos se efectúa, según se
indicó más arriba, en el apartado 3.13.

Genio n. º 1, n~ii'T\ Vehuiah. Valor numérico del nombre, 32.


Contiene en su interior el Tetragrama i'Tii'T~, y la letra sobrante es
la , (vav), que simboliza tanto unión como hombre. El valor nu-
mérico remite a,.~ (leb), corazón, así como a los 32 senderos de la
Sabiduría, esto es, al Árbol de la Vida. Otros significados de esta
palabra son centro, mente y conciencia. Además, con el mismo va-
lor numérico aparecen 1ii'T (hezij), purificar; ,~,n (jaziz), con los sig-
y
nificados de relámpago, también telegrama; y,,,.~ (kavod), glo-
ria, que en el judaísmo se refiere a la gloria de Dios. Resumiendo,
el nombre significaría un mensaje que llega como un relámpago
para purificar el corazón, la mente y la conciencia y permitir que
se manifieste la gloria de Dios en el hombre. Tarot: 5 de bastos.
Tríada de los Miedos.
Genio n. º 2, ~N~~~, Yeliel. V. n., 81. Prescindiendo de las dos le-
tras finales, comunes a 40 de los genios, dos de las restantes evocan

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 351


el nombre de Dios ~\ que representa los ojos del Creador. Al ser la
tercera de ellas la lámed, ,, que simboliza corazón y movimiento,
el nombre aludiría a la necesidad de tener en el corazón la mirada
de Dios, pues Él es Quien lo hace mover. Y, cuando el corazón está
en Dios, Dios está en el corazón, por lo que no es extraño que se pro-
duzca la revelación, ¡i~ii1 (hizaión), de valor 81, como el nombre del
genio. Por eso, dicho nombre podría muy bien interpretarse como la
revelación de la mirada de Dios que mueve el corazón. Por tener su

,N,~~,
misma guematria, este genio está relacionado con el del número 58,
Ieialael. Tarot: 5 de bastos. Tríada de la Ética.
Genio n. º 3, ,Nto'l0, Sitael. V. n., 110. Las tres primeras letras del
nombre forman la palabra f.Q'IQ (sit), palmo, medida de longitud equi-
valente a la distancia entre las puntás de los dedos pulgar y meñi-
que en una mano extendida. Por tanto, se refiere este nombre a lo
inmediato, a lo que está al alcance de la mano. Dentro del nombre
encontramos también Of.Q (tas), bandeja, y~ (tal), rocío. Por su par-
te, de las muchas palabras con valor 110, seleccionamos ¡,,, (duk),
reflexionar, examinar, profundizar. ¿Podría, pues, aceptarse como
significado del nombre de este genio el que examina o investiga
el rocío recogido en la bandeja? Recordemos que el rocío ayuda
a mantener la vida, aún en las zonas más áridas. Sería, pues, una
fuerza que profundizaría en el misterio del mantenimiento de la
vida. Tarot: 6 de bastos. Tríada de la Innovación.
Genio n. º 4, n~o,v, Elemiah. V. n., 155. En el nombre del genio,
además de la terminación del nombre divino i'T\ reconocemos las
'V
palabras ~o (mi), ¿quién?, y (al), encima, arriba, por lo que el sig-
nificado sería ¿Quién por encima de Dios? Y la respuesta vendría
dada por la guematria, que proporciona ,,o ~j,N (Adonai Melej),
un nombre de Dios: nadie está por encima de Él, sino Él mismo.
Tarot: 6 de bastos. Tríada de la Mística.
Genio n. º 5, M"tti'i10, Mahasiah. V. n., 360. Al contener la palabra
CiZ! (shem), nombre, el significado de este genio sería el Nombre de
Dios. Pero se trata de un nombre que aparece con todo su poder,
ya que la guematria nos remite al Sefer Yetzirah, que en su frag-
mento 1:6 habla de la aparición del rayo, ¡,i~i1 i'TN,o (marah ha-ba-
zak) y su consecuencia, los truenos, c~ovi (raamím), con toda su
fuerza, yiv ('eretz). El color carmesí, ~jr:t (shan{), con el mismo valor

352 V ILL/\RRUBIA / HAUT / MtLLERA


numérico, indica la actuación preferente de este genio en relación
con la esfera de Binah, en el nivel de Atzilut. Como el nombre di-
vino regente de esta esfera es el Tetragrama, MiM\ todo ello evoca
la aparición de Dios en el monte Sinaí y la entrega a Moisés de las
Tablas de la Ley. Tarot: 7 de bastos. Tríada del Impulso.
Genio n. º 6, ',Nr,',',, Lelahel. V. n., 96. El nombre incluye ',r, (hel),
luz, claridad; y como la letra lámed, ',, significa tanto movimien-
to como corazón, el conjunto significaría movimiento de la luz de
Dios en el corazón. La guematria confirma plenamente este signifi-
cado, puesto que, además del nombre de Dios ~JiN ',N (El Adonaí),
contiene las palabras e~,~ (íomam), la luz del día; ,,,~M ,n (jag
ha-molad), fiesta de Navidad; y MiM~ i,o (sod Adonaí), el secreto del
Eterno, según lo recoge el salmo 25:14. Tarot: 7 de bastos. Tríada
de la Memoria.
Genio n. º 7, M~N~N, Ajaiah. V. n., 37. Observamos en este nombre
el cáliz, ~, entre dos signos de infinito, NN, lo que, en sentido sim-
bólico, nos remitiría al Centro Crístico del Árbol, Tiferet (el cáliz,
el Grial), como Hijo, entre el Padre Cósmico (Jokmah) y la Madre
Cósmica (Binah). Se trata de una concepción luminosa, en la que
se funden el fuego y el aire, puesto que la guematria proporciona
tanto ~r,', (lahab), llama, como ',~r, (hebel), aliento. Y el resultado es
(con el mismo valor), Mi~~ (yejídah), el alma en su sentido más ele-
vado, el príncipíum índívíduationis, tal como la designó Jung. Pero
como esta última palabra significa también unidad, tendríamos en
conjunto un sentido que aludiría a las Bodas místicas entre el Ani-
ma y el Animus. Tarot: 8 de oros. Tríada de la Intuición.
Genio n. º 8, ',Nr,M~, Kahetel. V. n., 456. Contiene en su interior
la palabra ',~r,, que leída tájol es el color azul celeste, pero que
con la pronunciación tejel significa fin o término. Por su parte, la
guematria remite a ,,~r, (tajól), el color azul (en este caso, oscuro),
y también a M~~Nri (teimah), armonía. El nombre, pues, podría leer-
se como Armonía azul de Dios, pero se trata de una armonía que
combina lo claro (celeste, es decir, lo que tiene su origen o su na-
turaleza en el cielo) con lo oscuro (puede simbolizar las aguas del
mar, las profundidades, en definitiva), y además con carácter de-
finitivo, concluyente, como lo indica el concepto de fin o término.
El genio, pues, estaría cooperando a la conjunción armónica de lo

MAN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 353


de arriba con lo de abajo, del yang y el yin. Tarot: 8 de oros. Tríada
de la Inserción en el Mundo.
Genio n.º 9, ~~,¡;,, Haziel. V. n., 53. El nombre contiene ~,¡¡i (hi-
zil), derramar, verter, y ~i1 (hel), luz, claridad. Por su parte, con el
mismo valor numérico citamos,,~¡ (zikúj), limpio, puro, diáfano,
por lo que este nombre podría leerse como El que derrama la luz
diáfana. Tarot: 9 de oros. Tríada de la Lógica.
Genio n. 0 10, i1'1'"f~~. Aladiah. V. n., 50. Observamos que este
nombre contiene a su vez dos de los divinos, el correspondiente
a la terminación i"I\ y el formado por las dos primeras letras, ~ti,;
(EZ). La letra que los une es la dálet, ,, que significa puerta. Pero
como estos nombres son los correspondientes a las sefirot 2.ª y 4.a,
respectivamente, está claro que la puerta que los une es El Puente
que El Pontífice tiende a través del Abismo, hecho de risas y de
espíritu lúdico. Tarot: 9 de oros. Tríada del Impulso.
Genio n. º 11, i"l,,e,,;~, Lauviah. V. n., 52. Este genio y el número 17
tienen el mismo nombre, por lo que ambos comportan las mismas
características. Dentro de este nombre aparece la partícula N~ (lo),
que significa no. Como dicha partícula es la inversión del nombre
divino ~ti,; (el), y la letra central es la vav (i), que representa al hom-
bre, el conjunto podría leerse No el hombre, sino Dios. La guema-
tria nos lleva aj~ (ben), hijo, y confirma que el hombre, en tanto
que hombre, que ser individual, no es Dios; pero es hijo de Dios,
puesto que Él lo creó, y este genio tiene como misión recordárselo:
ése es el contenido de su mensaje. Tarot: 10 de oros. Tríada de las
Raíces. Es uno de los cuatro genios cuya polaridad, marcada en
principio por la carta del tarot, se invierte, pasando de femenina a
masculina (ver desarrollo en la sección siguiente).
Genio n. 0 12, i11i1i1, Hah' aiah. V. n., 95. La letra central del nom-
bre es la ayin (V), que representa el ojo, por lo que este genio está
relacionado con la visión. Por su parte, las dos primeras letras son
dos he (i1i1), que indican apertura, en este caso doble. El mensaje
que transmitiría sería, por tanto, Abre bien los dos ojos y verás a
Dios. ¿Cómo? La guematria nos responde, puesto que 95 es tam-
bién el valor numérico de i"l~~Q (maljah), reina, y también un título
que se da a la Shejiná, la Presencia Divina en la tierra: abre bien los
ojos, y verás a Dios en todas las cosas. El valor numérico es, por lo

354 VILLARRU BIA / H AU T / MILLERA


demás, el mismo que el del genio n.º 50, con el que comparte, por
tanto, determinadas características. Tarot: 10 de oros. Tríada de la
Ascética. Como en el caso del genio anterior, también en éste se
produce una inversión de polaridad.
Genio n .º 13, ,N,'r, Iezalel. V. n., 78. Este valor numérico es com-
partido por tres genios, caso único que se da en la relación. En efec-
to, también tienen la misma guematria los números 14 y 30, y los
tres tienen la terminación ,K Por tanto, se trata de energías rela-
cionadas con la 4.ª sefirá, Jesed. Las tres primeras letras, por su
parte, forman la palabra,~, (zil), que significa tanto barato como
llovizna. La lluvia que cae del cielo es naturalmente barata, no
nos cuesta nada. Y contribuye a todo aquello cuyo valor es 78,
empezando por el pan, cM, (lejem), y continuando por alimentos
menos materiales, como el regocijo, vi.: (búa, regocijarse), los sueños,
c,M (jalam, soñar, ensoñar), o la compasión, ,~M (jemel) . Sin embargo,
llega la enfermedad, ,M~
también está dispuesto a actuar cuando por el desvío del camino
(majal), y a usar, si es necesario, el bisturí,
,oiN (izmel). Tiene también, por último, relación con la hospitalidad,
ya que, además del pan, aparecen con valor 78 la sal, M,o (melaj), y
el refugio, MOMM (hejesah, refugiar, y también proteger). Baste añadir
que el 78 también se refiere al tarot, que tiene 78 cartas. Tarot: 2 de
espadas. Tríada de la Innovación.
Genio n. º 14, ,N;i..:o, Mebahel. V. n ., 78. En este nombre aparece
la pregunta MO (mah), ¿qué?, y la partícula -..:, que colocada ante
una palabra significa en. Por tanto, la pregunta que hace es: ¿ Qué
hay en Dios? Y la respuesta son todos los contenidos del número
78, que hemos visto en el genio n.º 13, al cual nos remitimos. Tarot:
2 de espadas. Tríada de la Innovación.
Genio n. º 15, ,N~i;i, Hariel. V n., 246. Este nombre significa li-
teralmente Naturaleza de Dios, pues ~,;, (pronunciado harei) sig-
nifica eso, naturaleza. Lo asombroso es que el número 246 nos lle-
va a los conceptos M~j'ON (askupah), umbral, portal; ¡_:¡o (midbar),
desierto, pero también palabra, y así mismo, y simbólicamente,
el nombre que se daba al atrio de los gentiles en el Templo de Jeru-
salem; este nombre, leído medaber, significa tanto portavoz o heral-
do como persona, ser humano; MNiO (mareh), aspecto, palabra que
con la pronunciación marah significa espejo; y ¡,,o~ (pasuk), expre-

MANUAL DE KABBALAI I PRÁC TICA 355


sión que significa versículo, y que en sentido más amplio se refiere
a la Biblia. La Naturaleza de Dios es semejante a una llamada que
nos sitúa en el umbral del Templo, en el que veremos nuestro propio
aspecto como un espejo Suyo. Tomar conciencia de ello representa
una elevación de la consciencia, pues el nombre de este genio tam-
bién podría leerse como iil (har), Montaña (o mi montafi.a, 'liil, harí)
de Dios. Tarot: 3 de espadas. Tríada de la Conservación.
Genio n. º 16, il~Qj'il, Hakamiah. V. n., 160. La palabra e¡, (kam),
contenida en el nombre de este genio, significa levantarse, desper-
tar, y en un sentido más alegórico, resucitar. Por tanto, el nom-
bre significa El que despierta en Dios. Por su parte, la guematria
proporciona una palabra tan significativa como C"¡C::l (kosef), deseo,
anhelo, añoranza (¿cabe forma más-viva de añoranza que «ser
despertado en Dios»?), palabra que, leída kesef significa dinero;
y es que el dinero es realmente vacío, un vacío que puede llenarse
de cualquier cosa susceptible de ser comprada, de ahí su potente
energía. Otra palabra de suma importancia es e~~~~ iTQ (moáj bením),
cerebelo, el que recibe la «llamada de los cielos»; su ubicación en
torno a la nuca hace que a ésta se le haya llamado «la boca de Dios».
Terminamos la relación de palabras de valor 160 con º'V ('eles), ale-
gría, regocijo. Así pues, ser despertado en Dios significa abrirse a
un vacío lleno de poder y de alegría. Tarot: 3 de espadas. Tríada de
las Raíces.
Genio n. º 17, il~iN',, Lauviah. V. n ., 52. Por coincidir el nombre
con el del genio número 11, valga aquí lo dicho para éste. En todo
caso, puede considerarse como un camino que se recorre por se-
gunda vez, volver sobre los propios pasos. Tarot: 4 de espadas.
Tríada de los Deseos.
Genio n. º 18, ',N+,!:), Kaliel. V. n., 91. La palabra ',!:) (kol), todo,
unida a la iod (~) que significa origen, nos indica que todo procede de
Dios. El número 91, uno de los más ricos en simbolismo cabalístico,
nos lo confirma. En él encontramos, desde el soporte físico que nos
sustenta, la Madre Tierra, il~iN CN (em adamah), hasta el alimento
que nos proporciona, ',!:)N~ (maajal), la educación, ¡QN (aman, criar,
educar, que puede leerse también amén, así sea) y con todo su valor
tanto de ornato como de terapia, las piedras preciosas, C~ (íahalóm,
diamante), pasando por el propio portador del mensaje, 1N',Q (malaáj,

35 6 Y ILI.ARRUillA / HAUT / MI LLERA


ángel, mensajero), el que anuncia a Dios, il' ,~v (ebed Adonaí, pro-
feta), el que bautiza a quienes escuchan Su palabra, ~'~l:Q~ (matbíl,
bautista, el que bautiza), y el que, como consecuencia de ello
es ungido~ ioin (husáj) y revestido con la dignidad sacerdotal,
,,~N (efod, la capa del sumo sacerdote). Tarot: 4 de espadas.
Tríada de la Innovación.
Genio n. º 19, n~,,~, Leuviah. V. n., 57. Aparecen en este nombre
dos letras vav (ii), que juntas forman la palabra vav, con el signi-
ficado de clavo o gozne, lo que da una idea de sujeción y a la vez
punto de apoyo para el giro de la hoja de una puerta o ventana.
Por otra parte, la palabra,~ (lo), contenida en el nombre del ge-
nio, significa a él, para él, le pertenece a él. ¿Qué le pertenece al
hombre (i)? Pues ~il (hel), la luz de Dios. Por tanto, Leuviah es el
encargado de servir de apoyo para que la puerta se abra y el hom-
bre contemple la luz que le pertenece, la que emana de Dios. Y, tal
como nos revela la guematria, según la reciba, según su grado de
preparación, esa luz puede alimentarle, ¡, (zan, alimenta,·, nutrir)
y darle fuerza, ¡,~ (on) o producirle miedo, pánico (il~~n,, dejílah),
e incluso destruirle, ¡i~N (ibdán, destrucción, ruina, exterminio).
Esta guematria es compartida por el genio n.º 43, por lo que se
aplicará a éste lo dicho para Leuviah. Tarot: 5 de copas. Tríada de
los Miedos.
Genio n. º 20, i'i'~i'i~, Pahaliah. V. n., 130. La letra pe (~), con su
doble significado de boca y de hombre que se humilla, aparece uni-
da a la luz, ~i'i (hel) de Dios, i'i\ Alude, por tanto, a la necesidad de
humillarse ante la gloria del Creador y cantarla. La guematria nos
dice cómo debe ser esa humillación. Ante todo, debe mantenerse
tanto en las circunstancias favorables (C~J, nejés, riqueza) como en
las desfavorables ('JV, 'oní, pobreza), procurando mantener siem-
pre la ecuanimidad (jl, 'iyen, ver, y también reflexionar, meditar),
y no tomarse uno a sí mismo demasiado en serio (y~, litz, bro-
mear), llevando de modo ligero, liviano(~¡,, kal), tanto el hecho de
poder comer (~l, tzalí, asado) y beber, 1CJ (nissej), como si hay que
ayunar, Cl (tzam). Esa gloria, esa luz de Dios, es la que apareció
ante Moisés en el monte Sinaí, 'J~, y el cumplimiento del mensaje
de Pahalia lleva a la liberación, il~lil (hatzalah). ¿No está acaso es-
crito Guan, 8:32) que «conoceréis la verdad, y la verdad os libertará»?

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 357


En esto han coincidido los místicos de muchas tradiciones: la libe-
ración consiste en cumplir la voluntad de Dios. Es decir, en aceptar
plenamente todo lo que está sucediendo, sin perjuicio de intentar
poner el remedio que creamos oportuno, pero aceptando también,
y con la misma serenidad, tanto el éxito como el fracaso que resul-
ten de nuestros esfuerzos. Tarot: 5 de copas. Tríada de los Miedos.
Genio n. º 21, ,N~,), Neljael. V. n., 131. Nos trae este genio el
mensaje de permanecer alegres (,;mi:, tzohel, contento, gozoso)
mantenerse fuertes (f~N, amatz, ser fuerte, ser valiente), incluso
cuando las cosas adoptan su peor cara. La guematria de ambas
palabras, 131 como la de Neljael, también habla de ili)V (anavah),
modestia, humildad, sumisión, a pesar de cio;i (hisús), la duda,
e incluso de Samael, ,N~O, el Demonio. Pero en el nombre del ge-
nio está la palabra,~) (najal), engañar. Por eso, Neljael es el que
nos somete a todo tipo de pruebas, para verificar si de verdad esta-
mos o no creciendo. Es, en otras palabras, un Gran Tramposo que
recorre los caminos del Árbol de la Vida jugando con sus luces y
sus sombras. Tarot: 6 de copas. Tríada de la Conservación.
Genio n. º 22, ,N~'1", Yeyayel. V. n., 61. Las tres letras iod (~~) evocan
los tres vértices de un triángulo, que representarían las tres fuerzas
básicas: la expansiva, la aglutinante y la equilibradora. Estas tres
fuerzas se encuentran representadas por los tres colores primarios,
respectivamente el rojo, el azul y el amarillo. Como estos colores
son los de las tres esferas de la Tríada de la Ética (Gevurah, Jesed
y Tiferet) en el nivel de Briah o Mundo de la Creación, sería de
esperar que la guematria confirmase este extremo, y eso es justo lo
que sucede. Con valor 61 aparece ~~N (an{), el yo, que, como sabe-
mos, aparece en la Tríada mencionada, y itN)it (hanaah), embellecer,
acción que corresponde precisamente a la sexta sefirá, Tiferet, en la
que aparece el Yo. Por tanto, Yeyayel sería el encargado de asistir a
la creación de la Individualidad, y operaría fundamentalmente en
torno a las tres esferas mencionadas. Al ser la guematria la misma
que la del genio n.º 65, comparte con éste muchas de sus caracte-

Genio n. º 23, ,Nn,~,


rísticas. Tarot: 6 de copas. Tríada de la Ética.
Melahel. V. n., 106. Las tres letras raíces del
nombre forman la palabra',;,~, que leída mahal significa a la vez
mezclar y circuncidar, y leída mohal, savia o zumo. La guematria,

358 VILL ARRUBIA / H AUT / MI i.LERA


coincidente con la del genio n.º 45, proporciona las palabras ¡,i.:l (be-
dek), con los significados de grieta o fractura, y de arreglo o correc-
ción; ¡,.:li (debek), pegamento, y también con los significados de sol-
dadura o ligadura, así como matrimonio; y ,~,~~ (megulgal), reen-
carnación. ¿No será Melahel el encargado de ayudarnos a reparar
los desperfectos que vamos originando con nuestras torpezas a lo
largo de la vida, y a crear las condiciones para una reencarnación
futura un poco más amorosa e inteligente? No olvidemos que, en
el judaísmo, la circuncisión tiene el carácter de renovación del pac-
to de Abraham con Dios, lo que equivale a renovar el propósito
de cumplir el tikún. Melahel puede ser en esto un buen ayudante.
Tarot: 7 de copas. Tríada de la Inserción en el Mundo.
Genio n. º 24, ii')iiii, Hahiniah. V. n., 75. El nombre de este genio
es casi igual al del número 12, sin más diferencia de que allí apare-
cía en el centro la letra ayin (V), mientras que ahora es la nun ()) la
que ocupa su puesto. Como la primera significa ojo, mientras que
la segunda es la percepción, quiere ello decir que se trata de dos
caras, externa e interna, respectivamente, de una misma realidad.
La propuesta que allí se hacía («abre bien los ojos, y verás a Dios en
todas las cosas») ha sido atendida, y ahora el genio nos muestra la
piedra preciosa, ii.:lie j.:lN (eben tovah, con valor numérico 75) y nos
infunde seguridad, confianza, ¡ine.:l (bitajón) para elevarnos, para
volar, c,e (tus), quizá para regresar a nuestro hogar que, a decir
de algunos, se encuentra en las Pléyades, ii~~~ (kimah). Tarot: 7 de
copas. Tríada del Impulso.
Genio n. 0 25, ii~iiM), Nith-Haiah. V. n., 470. Las letras que for-
man el nombre de este genio pueden leerse percepción ()) de la
materia (M) como espíritu (ii) de Dios (ii~). La guematria, por su
parte, nos habla de wi¡,¡¡ im (neveh ha-kodesh), la Tierra Prome-
tida de Israel, y de t:l~)i .:l',.:l (be-leb va-nefesh), en cuerpo y alma.
Nos confirma la idea judaica de que el mundo físico es una buena
cosa. Tarot: 8 de bastos. Tríada de la Intuición.
Genio n. º 26, ii~NNi"I, Haaiah. V. n., 22. Dos letras álefjuntas (NN)
evocan a una yunta de bueyes, y por tanto un trabajo que se hace
en el campo, bien tirar de un arado, o bien arrastrar una carreta.
La he inicial sería entonces el boyero, por lo que el genio sería el
Boyero de Dios. ¿No se estará refiriendo a Arcturus, la estrella a de

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 359


la constelación del Boyero? La guematria parece confirmarlo, pues
con valor 22 aparece iM~ (iajad), juntos, al unísono, tal como van
los bueyes unidos por el yugo. En realidad, el número 22 propor-
ciona todo un catálogo de palabras relacionadas con la asociación,
con la unión: ,,,,, que leída zavug significa atado, apareado, y zivug,
casamiento, cópula y también pareja; nin (joáj), que además de zar-
za o espino (¡ciertamente podemos quedarnos enganchados en él!)
significa también corchete o gancho; y la primera de las palabras
citadas, que con la pronunciación yijed tiene el significado de uni-
ficar, unir. Por otra parte observamos que 22 son las letras del alfa-
beto hebreo, y que también este número es el valor de ilmN (agozah),
nogal, árbol que por sus frutos se ha asociado desde antiguo a la
Kabbalah, ya que, una vez despojada la nuez de su cáscara, aparece
con una forma que recuerda poderosamente a los dos hemisferios
cerebrales. ¡Esta es, precisamente, la tarea de Haaiah, ayudar al fun-
cionamiento unificado de ambos hemisferios cerebrales! Completa
la información el número del genio, 26, que, como sabemos es el del
Tetragrama i1ii1\ Tarot: 8 de bastos. Tríada de la Intuición.
Genio n. º 27, ,N.n,\ Ierathel. V. n., 641. Tras el genio de valor
numérico más bajo, sigue el del más alto, que apenas si aporta la
palabra WWNO (meushash), firme, consolidado. Si, por otra parte,
tenemos en cuenta que en el nombre del genio se esconde -,r, (tar),
explorar, investigar, pero también espiar, reconoceremos que su
misión es similar a la de los exploradores que Moisés envió al
llegar frente a la tierra de Canaán. En otras palabras, se trataría
de la exploración de los contenidos del Árbol y su consolidación,
es decir, su puesta negro sobre blanco para hacerlos comprensibles y
asimilables por el Yo. Tarot: 9 de bastos. Tríada de la Lógica.
Genio n. º 28, i1~i1NW, Seehiah. V. n., 321. La guematria propor-
ciona ro~~w (shabit), cometa. Cada vez cobra más fuerza la hipó-
tesis científica de los cometas como sembradores de vida en los
diferentes mundos planetarios. Y, como en el nombre del genio
aparece WN (esh), fuego, convendremos en que el significado del
nombre de este genio es El fuego que siembra la vida. Tarot: 9 de
bastos. Tríada del Impulso.
Genio n. º 29, ,N~'l"i, Reiiel. V. n., 251. ¿Qué hay más natural que,
tras la siembra de vida, aparezca el protoplasma, ,on~N (abjomer,

360 VILLARRU BIA / H AU T / MILLERA


con la misma guematria que el genio)? Como Reiiel contiene dos
nombres de Dios,~~ y ,N, asociados respectivamente a la 2.ª y 4.ª se-
firot, unidas por el sendero 5, además de la letra resh (i), que tiene
el significado de viento o soplo, descubrimos que el significado de
este genio es el aliento de Dios en el protoplasma, en el interior de
cada una de las células. Tarot: 10 de bastos. Tríada de la Inserción
enel Mundo.
Genio n. º 30, ,NNQ\ Omael. V. n., 78. La guematria es la misma
que la de los genios 13 y 14, por lo que nos remitimos a ellos para
este aspecto. Añadiremos la misma observación que sobre las dos
letras álefjuntas hacíamos en el número 26, y la completaremos con
la palabra contenida en el nombre del genio, ON (emt madre, acom-
pañada de su hijo (la letra vav, i). Tal como veíamos en los genios
mencionados, había una pareja de bueyes, que en este caso simbo-
lizan a la madre con el hijo, presente en las iconografías de tantas
tradiciones espirituales, desde la Isis egipcia hasta la Virgen María,
pasando por la Laksmi hindú, y se nos advierte del doble aspecto
de esta madre, que puede ser tanto benéfica y misericordiosa como
terrible y devoradora. Pero en este caso, no lo es por capricho, sino
para restaurar el orden perturbado por la enfermedad. El nombre,
por tanto, aludiría a La Madre Divina benéfica y sanadora. Tarot:
10 de bastos. Tríada de la Inserción en el Mundo.
Genio n. º 31, ,N~~,, Lekabel. V. n., 83. Encontramos en este
nombre las palabras,~ (kol), todo, y~, (leb), corazón, además de
la partícula -~, en, dentro de: por tanto, todo está en el corazón de
Dios. Los latidos de ese corazón llevan la Sangre Divina a todos
los rincones del Universo, como olas, o~,) (galim, con valor 83), de
Vida y de Amor. Tarot: 2 de oros. Tríada de la Innovación.
Genio n. º 32, 0"'i?V\ Vasariah. V. n., 521. La palabra itv (shar),
con el significado de cantar, entonar alabanzas, ocupa el espacio
entre la vav (i), símbolo del hombre, y el nombre divino de la ter-
minación. Por tanto, es el canto o himno que une al hombre con
Dios. El efecto de este himno de alabanza aparece en la guematria,
en tres conceptos: Miiv;, ,iiN (ohel ha-edut), el Arca de la Alianza;
,~wN (eshkar), regalo; y ¡¡i,i~;, yiN (eretz ha-bejiraht la tierra pro-
metida, Israel. En efecto, el regalo es la propia Arca de la Alianza,
la cual, como sabemos por el texto bíblico, habría sido un instru-

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 3 61


mento que permitía comunicarse al sumo sacerdote con Dios. ¿Tal
vez un transmisor con una potente carga eléctrica? En todo caso,
peligroso, como nos lo indican las muertes que se produjeron en-
tre el pueblo judío por no adoptar en su manejo las debidas pre-
cauciones. Pero, sobre todo, el regalo es también un instrumen-
to práctico, puesto que su ayuda es imprescindible para hacer el
camino hacia la tierra prometida, lo que es sin duda un símbolo
del cumplimiento del tikún, pues, como vimos en la primera parte,
los judíos muertos en la diáspora, según la tradición, resucitarán
o reencarnarán cuando se acerque la venida del Mesías, concep-
to que tiene el mismo valor, 556, que tikún. Y como la venida del
Mesías es realmente la realización de un estado de consciencia
superior, la misión de Vasariah es cantar el advenimiento de este
estado. No parece casual que el número de orden de este genio
sea precisamente el 32, correspondiente a~~ (leb), corazón, y a los
32 Senderos de la Sabiduría, esto es, al Árbol de la Vida, y por ex-
tensión a la propia Kabbalah. Vasariah, pues, nos trae un medio de
comunicación con lo Alto y nos facilita las mejores herramientas
para el cumplimiento del tikún, herramientas que, si no tratamos
con el debido cuidado, con sumo respeto, puede darnos más de un
disgusto. Tarot: 2 de oros. Tríada de la Mística.
Genio n. º 33, il'in', Iejuiah. V. n., 39. Sólo una letra, la vav (i) es
diferente de la palabra que representa el grado más elevado al-
canzable por el hombre, ni'1i' (yejidah), que significa tanto alma
como unidad, en la que dicha letra es sustituida por la dálet (i).
Con ambas letras diferentes puede formarse la palabra ii (du), dos,
doble, lo que alude al trabajo cabalístico, tal como vimos en la pri-
mera parte de la obra, así como al estudiar las sefirot Hod y Yesod.
El número 39, por su parte, proporciona ~,~N (ebul), pasaje o galería
secreta; n~i (dalah), elevar, y también redimir;~~, (zabal), habitar,
y también unir; y ~?Q - (tal), rocío. Como el nombre del genio con-
tiene, además del divino del final de palabra, otro más, ,i (jai), Vi-
viente, aparece claro que en este caso el mensaje es que el hombre
que se ha unificado es la expresión de Dios vivo, pues su existencia
es, tal como apuntaba Yitzak Luria, necesaria para que la Shejiná
sea rescatada, es decir, para que los aspectos masculino y femenino
de Dios se unan. El concepto de «galería secreta» indica finalmente

3 62 VI LLARRU BIA / H AUT / MILLERA


que este papel del hombre queda oculto, en la sombra. Y el genio
sería el encargado de susurrar este mensaje en el oído de quienes
permanezcan despiertos. Tarot: 3 de oros. Tríada de la Ascética.
Genio n. º 34, mm',, Lehajiah. V. n., 58. El Padre y el Hijo, la iod (~)
y la vav (i) del genio anterior son ahora sustituidas por otras dos
letras, que forman la palabra ~il (hel), luz. En las tres letras restan-
tes encontramos nuevamente a Dios vivo (ver número anterior);
y la guematria, por su parte, nos lleva a ji! (jen), gracia, belleza,
pero también el notarikón o anagrama de iliMOj :io.:n (jokmah nis-
tarah ), sabiduría secreta, la Kabbalah; y puesto que ésta es ante
todo tradición oral, no es de extrañar que con el mismo valor nu-
mérico aparezca j'IN (ozen), oído. La Luz de Dios vivo nos llega a
través del oído, de las palabras, en la sabiduría secreta, dándonos
la protección, pi! (heguen), del cielo, o~m (gahim), tal como le fue
dada a Noé, m (noaj), y permitiéndonos florecer, ~,j (nob), pala-
bras todas ellas que, como las anteriores, tienen un valor de 58.
Este genio comparte valor numérico con el que lleva el número
de orden 40, por lo que comparte algunas de sus características.
Tarot: 3 de oros. Tríada de la Fe.
Genio n. º 35, ilj,i~, Javakiah. V. n., 141. Las cuatro últimas letras
del nombre de este genio forman la palabra il~i¡, (keviyah), que sig-
nifica esperanza o confianza. Como la primera letra, la caf (~) tiene
los significados de copa y de mano abierta, sugiere una actitud de
expectativa confiada para recibir algo. La guematria confirma este
sentido, con la palabra i:,oN, que leída asaf significa recoger o re-
colectar, y con la vocalización osef tiene los significados de tesoro
y cosecha. Sin duda, esta expectativa responde a una necesidad,
tal como nos indica el vocablo i'INO:lil (hatzmaáh), sed, con el mismo
valor numérico. Pero recordemos que la esperanza, de alguna for-
ma, nos divide y debilita, al apartarnos del aquí y ahora. Por eso,
hay que entender el mensaje de Javakiah como un apoyo provisio-
nal para pasar un mal momento, pero no como una energía en la
que debamos apoyarnos indefinidamente. Tarot: 4 de oros. Tríada
de los deseos.
Genio n. º 36, ~Nijt:l, Menadel. V. n., 125. La palabra jt:l, con-
tenida en el nombre de este genio, puede leerse man, y significa
maná, o min, en cuyo caso señala procedencia respecto a algo,

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 363


la preposición de. Por su parte, uno de los significados de la letra cen-
tral, dálet (.,), es palabra. Por eso el nombre de Menadel significaría
El maná que procede de la palabra de Dios. En la guematria des-
taca con el mismo valor la expresión j~i'T o,~ (iom ha-din), Día del
Juicio Final, en consonancia con la atribución del genio a la Tríada.
Tarot: 4 de oros. Tríada de la Ética.
Genio n. º 37, ~N~~N, Aniel. V. n ., 92. Uno de los significados
más rotundos, pues es, literalmente, Yo soy Dios. No es, pues,
sorprendente que este nombre infunda temor, pues esta palabra
en hebreo es in~ (pajad), con el mismo valor numérico que el del
genio. Tarot: 5 de espadas. Tríada de la Conservación.
Genio n.º 38, ii~~vn, Ja'amiah. V. n ., 133. Las tres primeras letras
del nombre forman una única palabra, V~M (jimáh), acidificar, que
debe ser aclarada a través de su guematria. En este valor, en efecto,
encontramos palabras que están relacionadas con algún tipo de
enfermedad contagiosa (uno de cuyos efectos es la acidificación de
la sangre) y con remedios para su tratamiento. Así, aparecen la
propia plaga o peste, cp~ (neguef>, que puede ser también conta-
giar con pronunciación nagaf; =,~~n¡¡ (hejelij), uno de cuyos signifi-
cados es renovar o restaurar; la planta de ruda, ti~,~ (pégam), cuyo
humo de combustión tiene efectos purificadores; y la expresión
¡,~.=N~ (ke-abik), semejante a un alambique, el cual es utilizado para
destilar, entre otras cosas, los principios curativos de las plantas,
pero también símbolo de la búsqueda de lo esencial. La tarea de
Ja'amiah sería, por tanto, avisar de que algo no marcha bien en el
campo de la salud física, para que se emprendan las oportunas
acciones de limpieza y purificación. Tarot: 5 de espadas. Tríada de
los Miedos.
Genio n. º 39, ~NViT"\ Reha'el. V. n ., 306. Los conceptos derivados
de este nombre tienen connotaciones inquietantes. Así, de la raíz for-
mada por las tres primeras letras obtenemos Viii (hara), hacer mal;
i'TiV ('arah), destruir, y también derramar y desnudar; o iTVi (ra'ah),
mal, y también destruir. Claro que esta última palabra tiene otro
significado más, el de asociarse, y si se cambia la vocalización por
ra'áh o por ra'éh, tenemos amiga o amigo, respectivamente; sig-
nificados estos últimos que parecen contradecir a los anteriores.
El enigma, sin embargo, se aclara cuando recurrimos a la guema-

364 V!LLARRUBIA / HAUT / M!U.F.RA


tria, en la que encontramos ~,to~i'T (hítztareb), quemarse;,,~~ (kí-
pur), expiación, perdón (recordemos que en el judaísmo, la fies-
ta del Yom Kipur es la de la expiación de los pecados); o ,e,~
(masar), moral o ética, y también castigo, reprensión. Y es que,
como veíamos en la I parte (secc. 6.1), el mal no sólo es relativo,
sino que ejerce un efecto terapéutico, ayudándonos a despertar y a
comprender. Reha' el es, pues, el que hace el papel de «malo de la
película», con la misión de despojarnos, de desnudarnos de todas
las adherencias que entorpecen nuestro crecimiento interior. Tarot:
6 de espadas. Tríada de la Ética.
Genio n. º 40, ~Ni~~, Ieiazel. V. n., 58. Dios Se ve a Sí Mismo desde
Su propio centro, podría ser el lema derivado de este genio, pues
contiene dos nombres de Dios, ~~ y ~N, unidos por la letra zayn (i),
uno de cuyos significados es precisamente el de centro. Al com-
partir guematria con el genio n.º 34, se pueden aplicar aquí los
conceptos derivados de ella, que tienen relación con la Kabbalah.
Pues ésta es nada menos que el procedimiento que Dios utiliza
para contemplarse a Si Mismo. No es el único, por supuesto, pero
sí al menos uno de extraordinaria precisión y eficacia. Tarot: 6 de
espadas. Tríada de la Memoria.
Genio n. º 41, ~Ni'Ti'TiT, Hehahel. V. n., 46. A semejanza de los genios
12.º y 24.º, aparecen varias letras he (i'T), en este caso tres, en Hehahel.
Y como esta letra significa apertura, se trata de una triple apertura a
Dios: del cuerpo, del alma y del espíritu (v. fig. 12). La guematria nos
indica que esa triple apertura es semejante a la que el embarazo, ~,~n
(jibul), produce en la matriz, i'T~N (immd), y necesaria para la glorifi-
cación, ~Ni'T (haalahah) de todos los seres. Por lo demás, los aspectos
relacionados con el embarazo tienen lógicamente relación con este ge-
nio. 41. Tarot: 7 de espadas. Tríada de la Iniciativa.
Genio n. º 42, ~N~~~, Mikael. V. n., 101. Este genio tiene el mismo
nombre que el Arcángel regente de la 8.ª sefirá, Hod, y su signifi-
cado es, como ya vimos, Quién como Dios. Comparte, además,
guematria con el genio número 72, último de la relación, por lo
que algunas de sus características son comunes. Los conceptos
más interesantes derivados del valor numérico tienen que ver con
la cosecha y su almacenamiento, lo que no es sorprendente, dado
el pragmatismo asociado a Hod. Encontramos Cl!:IN (osem), cosecha

MANUAL DE Ki\BBALAH PRÁCTICA 3 65


abundante, palabra que leída asam significa granero o almacén, e
issem, almacenar. Otro aspecto de Hod, asociado a este número
es la rapidez, característica del chakra mundano, Mercurio, por lo
que encontramos i'!iNi'! (haatzaht aceleración. Tarot: 7 de espadas.
Tríada de la Memoria.
Genio n. º 43, ¡¡+,i\ Vewaliah. V. n., 57. Como ya vimos, este ge-
nio comparte guematria con el número 19.Y no sólo eso: las letras
son las mismas, aunque colocadas en un orden diferente. Allí la
lámed (~) era la inicial, y aquí ocupa el lugar central, por lo que
procede reconocer el significado de corazón en ella: unirse (ii, vav,
clavo, enganche) en el corazón a Dios. Tarot: 8 de copas. Tríada de
la Intuición.
Genio n. º 44, i'T~i'!~~, Ielahiah. V. n., 60. Prescindiendo de la lámed
(~), las restantes letras componen el tiempo futuro será. Por tanto,
Ielahiah es quien asegura la continuidad de los latidos del cora-
zón. Pero también es el encargado de examinar en todo momento
su grado de pureza, tal como nos muestra su guematria, en la que
encontramos ¡n~ (bojan), examen, prueba, y también grado de pu-
reza del oro; tras ella, el genio dará cuenta si encuentra orgullo,
¡,N~ (gaón, palabra que también significa sabio), o si se trata de un
ser duro de corazón, ,~~ ~~~ (be-leb kaved), mezquino, ~~~ (keU),
o simplemente 10 (majt mediocre, aunque este último puede ser
también humilde. El genio es, pues, el encargado de llevar al día la
contabilidad de las miserias que cada ser esconde en su corazón.
Son asuntos que normalmente se envían directamente al «cuarto
de las ratas», al subconsciente, tal como nos indica la letra samaj
(O), también de valor 60 y asociada, como vimos, al sendero 15 y al
Arcano de El Diablo. Ielahiah es el encargado de guardar fielmente
todos estos «trapos sucios», hasta el momento en que deban ser
enviados a la «lavandería», mediante el proceso de la teshubah, el
arrepentimiento. Ello nos lo confirma el atbash del nombre del ge-
nio, que produce las letras yoi~o, que con su valor numérico totat
280, proporciona las palabras ,~o
(sejer), dique, presa, lo que impi-
de fluir las aguas (las emociones); o,~
(keres), vientre, abdomen, el
asiento físico de las emociones reprimidas; y ioo (memer), amar-
gura o mortificación, la sensación que toda esta situación produce.
Tarot: 8 de copas. Tríada de los Miedos.

3 66 V! LLARRU BIA / HAUT / MI LLERA


Genio n. º 45, ii~~NO, Sealiah. V. n., 106. El nombre de este genio
está relacionado con la evaluación y con instrumentos que tienen
que ver con el equilibrio. Encontramos N~O (silá), pesar, evaluar,
y ~ON (esel), balancín, y también palanca. En la guematria coincide
con el genio n.º 23. Puesto que en éste último aparecía la idea de
efectuar algún tipo de reparación, trasladada a Sealiah es la restau-
ración del equilibrio. Por eso, el nombre podría representarse por
la frase El que evalúa los desequilibrios y los corrige. Tarot: 9 de
copas. Tríada de la Intuición.
Genio n. º 46, ~N~V, 'Ariel. V. n., 311. Varias son las palabras
contenidas en el nombre del genio. La primera y más directa, por
tener el mismo orden de letras, es ~V ('an), con los significados de
temporalmente, y accesorio, insignificante. Alterando el orden de
las letras, aparecen .,V\ que con la pronunciación ya'ar significa a la
vez panal de miel y bosque, y con vocalización yi'er, forestar, plan-
tar bosques. Otras formas de ordenar las tres primeras letras pro-
porcionan v,~ (yará), temblar y vacilar; o,,:, borrico o asnillo con
la pronunciación 'ayir, y ciudad, y también ángel, pronunciando 'ir.
La guematria, por su parte, nos habla de un proceso de recupera-
ción de tierras que estuvieron degradadas, tal como hicieron los
judíos cuando fueron regresando a Palestina. Y así, con valor 311
encontramos w~N (iyesh), humanizar, poblar; se trata de un proceso
tanto de consolidación, w,~, (guibush), como de levantar lo que
se había degradado, lo que obliga a transportar piedra (la misma
palabra anterior, pronunciada guebush) y a trabajarla: nos lo con-
firman las palabras, ambas con valor 311, iiNWii (hassaáh), con los
significados de levantamiento, transporte y aguzamiento; y ~~W
(shabat), batir, golpear. Por último, sería de esperar que este pro-
ceso estuviese protegido, si en verdad se trata de un acto creativo,
por algunos grandes Arcángeles, en su doble vertiente consolida-
dora y saneadora, y eso es precisamente lo que sucede, ya que, con
el mismo valor numérico, aparecen Tzafkiel y Rafael, regentes de
las esferas 3.ª y 6.ª en el Mundo de la Creación (v. secciones 3.1.3. y
3.1.6. de esta II Parte). Al unirse ambas sefirot a través del Sendero 6,
Ariel tiene también relación con el libre albedrío (si es que verda-
deramente existe) y con la renuncia inevitablemente asociada a la
elección. Tarot: 9 de copas. Tríada de la Iniciativa.

MANUAL DE KABBALAI-I PRÁCTICA 367


Genio n.º 47, i'T~t?!V, Asaliah. V. n., 415. Uno de los significados
de la letra ayin (V) es fuente; y ,w
(shel) significa desde. Por tanto,
el nombre de este genio significa Desde la fuente de Dios. El agua
que así mana, ,~,i'T (harir, con valor 415) circula por una acequia,
i'Ti'W (shakyah), que también es el campo de riego. El genio pone en
el corazón palabras de agradecimiento, ;,iiM (todah), que lo son a
la vez de glorificación y alabanza al Creador. Tarot: 10 de copas.
Tríada de las Raíces. Es el tercero de los genios que invierte supo-
laridad.
Genio n. º 48, ,~~, Mihael. V. n., 86. Dentro del nombre de este ge-
nio están las dos preguntas básicas: ¿quién?, b (mi) y ¿qué?, i'T~ (mah) .
Es decir, ¿quién ha creado todo esto, y qué es esto? Y la respuesta viene
dada por la guematria, que habla del Dic;,s creador, Cl~N (Elohim, Gé-
nesis 1:1), y del canto de alegría, aleluya (i'T~i,,;,, halel-luyáh) cuan-
do se descubre que, como dice el haditz básico del Islam, Nada
existe aparte de Allah, no existe sino el Absoluto, y lo Relativo es
Su expresión gozosa. Tarot: 10 de copas. Tríada de la Inserción en
el Mundo.
Genio n.º 49, ,Nii'T1 Vehuel. V. n., 48. Las dos primeras letras for-
man el nombre más oculto de Dios, ni, y las dos últimas una de Sus
manifestaciones, ,N.
El lazo de unión es la letra vav (i), que simboliza
al hombre. Por tanto, el nombre del genio nos transmite el mensaje de
que El Dios oculto Se manifiesta a través del hombre. La guematria
nos dice cómo es este proceso de manifestación y el efecto que produ-
ce: el cerebro, n~ (moaj) es el órgano a través del cual la manifestación
se produce, fluyendo como un torrente, ,~,~ (iubal) a lo largo de un
canal, i'T~~ (gumah), y produciendo a veces angustia,,,, (jil), enfer-
medad, ~n (jal() y fiebre, en (jom), y a veces fuerza (,ii, leída jail) y
éxtasis, alegría, i'T,~~ (guz1ah). Son los efectos contrapuestos, según
se reciba el Rayo Divino que trae Vehuel sin una preparación y as-
cesis previas, o con ellas. Vehuel nos previene, pues, de no buscar
la iluminación sin una anterior limpieza o purificación del sub-
consciente, tal como propugnaba constantemente el maestro An-
tonio Blay y reitera a lo largo de toda su obra Arnaud Desjardins.
Tarot: 2 de bastos. Tríada de la Innovación.
Genio n.º 50, ,N~~,,
Daniel. V. n., 95. Otro de los genios cuyo
nombre se traduce directamente, pues significa Juicio de Dios.

3 68 VILLARRU BIJ\ / HAUT / MI LLERA .


El valor numérico, coincidente con el del genio número 12, propor-
cionaba, según recordamos, a la Shejiná, la presencia divina en la
tierra, el aspecto femenino de Dios. Al tratarse ahora de un Juicio,
se nos pregunta a través de Daniel por el grado de cumplimiento de
nuestro tikún particular. Según como sea éste, o bien seremos cen-
surados (:,',e, salah, censurar, humillar), o bien recibiremos la consa-
gración ('7"0:"I, hisij, consagrar) para desarrollar nuestra sagrada tarea
de rescatar de su encierro a la Divina Princesa (mi~, podeh, redentor,
libertador). Tarot: 2 de bastos. Tríada de la Innovación.
Genio n. º 51, ii"t!'M:"I, Hajasiah. V. n., 328. El nombre de este genio
está asociado al sufrimiento y a la oscuridad. La palabra WM (jash),
contenida en dicho nombre, significa sufrir, mientras que la he (:,)
inicial indica apertura. Por tanto, Hajasiah trae el mensaje de abrir-
se al sufrimiento; o de, como dijo Jesús de Nazaret, no poner resis-
tencia al mal. La guematria confirma este mensaje mediante la pala-
bra iwn (joshej), tinieblas, tal como aparecen en Génesis 1:2. Y será
necesario, pues, soportar la dominación o presión, w,~~ (kibush) y la
mentira (WM~, kijesh, mentir). Pero el mal no es sino uno de los dos
polos, que están en perpetuo movimiento, ~m:~ v~~~ (rneniá nitzj(),
tal como saben muy bien los taoístas: el Yang y el Yin prosiguen su
eterna danza, ahora uno está arriba, ahora está debajo ... Tarot: 3
de bastos. Tríada de la Ascética.
Genio n. º 52, ii~~~V, Imamiah. V. n., 165. El nombre de este ge-
nio contiene C~V (irnrnern), oscurecer, volver opaco, y la guematria
es un buen muestrario de palabras relacionadas con este concepto.
Está presente la propia oscuridad, i11l1 ('efah), palabra que tiene
además el significado de desierto, con lo que evoca poderosamen-
te los peligros que cabía esperar en las oscuras noches y las arenas
desérticas, tal y como indican el Salmo 91 y la sura 113 del Corán.
Esas potencias, Cj,'iM (jezkim), quizá maléficas, y muchas veces pe-
ligrosas, aparecen también con la mismo valor numérico, acom-
pañadas de conceptos poco tranquilizadores, como por ejemplo
c~,V ~~~ (bigdé olam), mortaja; i1~~¡, (kelalah), maldición, anatema;
M01~ (ke'isah), cólera, ira; o :,~1 ('ayafah), fatiga, cansancio. Hay,
sin embargo, algunos otros conceptos con la misma guematria que
aclaran los motivos de este oscuro conjunto. En primer lugar, un
pasaje del Salmo 25:14, cv~ii¡-,~ (lehodiam), les hará saber; después,

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 3 69


M~~VJ (neilah), con el significado de cierre, pero también el nombre
de la última oración del Día del Perdón (Yom Kipur). La oscuridad
aparece entonces como consecuencia de un proceso de purifica-
ción próximo a terminar. En este sentido, la actuación de Imamiah
tiene una profunda relación con el Arcano 18 del tarot, La Luna, y
su sendero asociado, junto con la letra tzade (:::). Se trata de agotar
las viejas energías, para hacer sitio a las nuevas que no tardarán
en aparecer. El poema de San Juan de la Cruz «La Noche Oscura»
relata en versos maravillosos (v. IV Parte) este proceso. Tarot: 3 de
bastos. Tríada de la Fe.
Genio n. º 53, ~NNJJ, Nanael. V. n., 132. Al igual que los ge-
nios 26 y 30, aparecen nuevamente las dos letras álef (NN) juntas.
Les anteceden dos letras nun (JJ) también juntas, que nos hablan de la
doble percepción, que hay que presumir sensorial y extrasensorial.
Como ya vimos, la pareja de bueyes que son las dos álef ha trabajado
(o está trabajando) el campo, a la vez que se está percibiendo algo
que está más allá de lo físico. Esto recuerda poderosamente el mila-
gro que, según la tradición, le sucedió al madrileño san Isidro, que,
mientras oraba, era ayudado por un ángel que conducía la yunta de
bueyes, tal como lo vio su patrón, Iván de Vargas. En este caso, el
ángel sería semejante a un contratista, ~~¡, (kebal) del propio Isidro,
y el nombre de Nanael vendría a significar la ayuda del Cielo a quien
practica la oración. Tarot: 4 de bastos. Tríada de la Ética.
Genio n. º 54, ~Nri~J, Nithael. V. n., 491. Este nombre esconde en
su interior ¡r, (tan), chacal, por lo que significaría chacal de Dios.
El dios-chacal, Anubis era, en el panteón egipcio, el encarga-
do de vigilar el peso de los corazones de los muertos ante el
tribunal de Maat, por lo que la letra tav (r,), que simboliza la
muerte, está lógicamente presente en el nombre de este genio.
Hemos encontrado una palabra con valor 491 que refuerza la idea de
la muerte: n~::: (tzet), salir, pero que, curiosamente, contiene la raíz N::t,
contenida en N::ti~ (motzá), nacimiento, que ya encontramos en la
I parte al estudiar el significado de la palabra «Kabbalah». Nithael,
pues, sería el genio que ayuda al tránsito desde la Orilla Real (del
latín res, reí, «cosa»), o Mundo de los Vivos, a la Orilla Verdadera,
o Mundo de los Muertos, que son los verdaderamente vivos. Tarot:
4 de bastos. Tríada de la Ética.

3 70 V1 LLAR RUBIA / HAUT / MILLERA


Genio n. 0 55, il1'i~~. Mebahiah. V. n., 62. Una posibilidad de pro-
fundizar en el nombre de este genio es mediante un notarikón de las
tres primeras letras, con las que se forma una respuesta a la pregunta
¿Qué?, il~ (mah), formada por la primera y la tercera de ellas. Tome-
mos, pues, la primera letra, mem (~), que nos habla del agua, y por
tanto de las emociones; después, la beth (~), que nos remite al interior
de algo, y por último la he (i"T), que significa a la vez espíritu y aper-
tura: las emociones abriendo su interior, mostrando sus entrañas,
por decirlo así, al espíritu. Y, como dice san Pablo en I Corintios, 13,
el amor actúa sobre las emociones (E-MOVERE, lo que se rechazó y
nos sacó del centro) perdonando y sanando: «El amor es sufrido, es
benigno; el amor no tiene envidia, el amor no hace sinrazón, no se
ensancha; no es injurioso, no busca lo suyo, no se irrita, no piensa
mal; no se huelga en la injusticia, sino de la verdad; todo lo sufre,
todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta». (I Cor. 13:4-7). Me-
bahiah es, pues, el encargado de sacar a la luz las emociones que, de
quedar demasiado tiempo encerradas, se corromperían y acabarían
enfermando a su dueño. Y ello lo confirma la guematria, que mues-
tra il~iiVI (hazhamá), infección (en caso de reprimirse, de retenerse
dichas emociones), y m~;i (havaná), comprensión, entendimiento, en
el caso contrario. Tarot: 5 de oros. Tríada de los Miedos.
Genio n. º 56, ~N~i!l, Poiel. V. n., 127. Hay que operar de forma
semejante al anterior, ya que no pueden formarse palabras con las
tres primeras letras, y la guematria tampoco proporciona en este
caso datos significativos. La primera letra, pues, es la pe (~), que
significa a la vez boca y hombre que se humilla. La vav (i) es, como
hemos visto repetidas veces, el hombre, mientras que la iod (~) nos
remite al origen. Así queda claro el significado del nombre del ge-
nio, que se refiere a la confesión de los pecados, si se utiliza la ter-
minología religiosa, o la descarga del subconsciente, si preferimos
la psicoanalítica. Tarot: 5 de oros. Tríada de la Conservación.
Genio n. º 57, :"lb~~, Nemamiah. V. n., 145. Aparecen en el nombre
de este genio dos palabras significativas: O~ (nam), donnir, y¡~ (man),
maná. Por su parte, la guematria proporciona V'10il (hissíá), trasla-
dar, conducir; i'~ii (hanetz), salida, palabra que pronunciada henetz
significa brillar o centellear; i"l~i' (kamah), mies; y~,¡,~ (líkut), reco-
lección. Todo ello evoca la salida de los hebreos de Egipto, que se

MANUAL DE KABBAI.AH PRÁCTICA 371


produjo de noche, mientras los egipcios dormían, cuando fueron
seleccionados por la señal que brillaba en sus puertas para el án-
gel de la muerte (la sangre del cordero degollado), el cual segó a
los primogénitos egipcios como si de mieses se tratase. El conjun-
to, por tanto, apunta en Nemamiah a una energía que se encarga
de apartar y seleccionar determinados aspectos cuando llega el
momento oportuno, cuando «la cosecha está madura». Tarot: 6 de
oros. Tríada de la Ascética.
Genio n. º 58, ~N~'l'I, Ieialael. V. n ., 81. Las letras de su nombre son
las mismas que las del genio número 2, con el que comparte, por
tanto, el mismo valor numérico. La diferencia estriba en el orden
de colocación, que en aquél situaba a la lámed (~) entre las dos iod
(~~), mientras que ahora separa este hombre divino del correspon-
diente a la terminación,~~ (El). Como este último rige la 4.ª sefirá,
mientras que el anterior es uno de los regentes de la 2.a, es eviden-
te que la lámed actúa en este caso de enlace entre ambas esferas,
o, lo que es lo mismo, se relaciona plenamente con el sendero 5,
El Pontífice. Y como éste, aparte de sus gestos rituales, es dado a
bromas y chanzas, también lo es Lelalael, al que puede considerar-
se como el Bufón de la Corte Celestial, o cualquier otro título de
similar naturaleza. Los bufones cumplen una importante función,
cual es la de desarrollar el valor terapéutico de la risa. Tarot: 6 de
oros. Tríada de la Innovación.
Genio n. º 59, ~Nnin, Harajel. V. n., 244. Las letras raíces forman
la palabra nin (jarah), encolerizarse. Por su parte, la guematria pro-
porciona i"1i"1~ M'M (rúaj kehah), pesar, depresión. En realidad, ambas
palabras se refieren a un único proceso, que será cólera cuando
se pueda expresar, o al menos admitir su existencia, y depresión
cuando el objeto de la cólera se vuelva moralmente inaceptable
para el sujeto, tal como reconoce la psicología psicoanalítica. En-
tonces, Harajel es el encargado de mover «hacia fuera» y «hacia
dentro» las energías derivadas de la agresividad, que en definitiva
no son sino actos de autodefensa. Tarot: 7 de oros. Tríada del Tem-
ple de Ánimo.
Genio n. º 60, ~Ni::te, Mitzrael. V. n., 361. La raíz i::te puede vo-
calizarse de varias maneras, pero todas ellas tienen, especialmente
para los judíos, un sentido de limitación y opresión. Ante todo,

3 72 V1LLARRU BIA / H AUT / MILLERA


la pronunciación mitzr significa Egipto, país que aparece varias ve-
ces de una u otra forma en el desarrollo cabalístico de los nombres
de los genios, y al cual nos remitimos; después, tenemos métzer,
límite, frontera; metzar, desfiladero, y también angustia o tormen-
to; o mitzer, atormentar. La guematria presenta algunos signifi-
cados que refuerzan el sentido anterior, personalizándolo, y aña-
diendo uno nuevo que simboliza la liberación. En efecto, aparecen
tWN (ashín), rígido, severo, duro, tal como era el comportamiento
del faraón con los judíos; y ¡wi;, (hushán), fibras de lino, que com-
ponían el tejido de sus vestiduras. Junto a estas palabras tiene el
mismo valor numérico ¡,~:lit ii'T (har tzión), monte Sión, meta y des-
tino de los judíos en el Éxodo. Así pues, Mitzrael es el encargado
de hacernos la vida incómoda para que nos decidamos a iniciar
nuestro particular éxodo, que nos llevará ante el castillo en el que
la Divina Princesa espera que vayamos a rescatarla. Tarot: 7 de
oros. Tríada de la Iniciativa.
Genio n. º 61, ~N~Q\ Umabel. V. n., 79. Las letras raíces combi-
nan alternativamente con las dos finales para formar sendas pala-
bras que extienden el significado que hemos hallado en el genio
anterior: ~,:iQ (moval), conducido, y Ni~Q (mavó), entrada; el pueblo
de Israel es conducido hasta la entrada de la Tierra Prometida. Y la
guematria nos aclara que se trata de un proceso interior, que im-
plica un morir a lo viejo y nacer a lo nuevo. Ante todo destacamos
i'Tiµ ('adah), comunidad, colectividad, que el camino lo emprenden
todos los aspectos de nosotros mismos, y no sólo unos pocos, los
que nos hacen salir «guapos en la foto», pues, como dice Arnaud
Desjadins (Le vedanta et l'inconscient, v. ref. bibliográficas), «no pue-
des dejar a la puerta del Cielo tus aspectos indeseables, o entras
entero, o no entras». La travesía del desierto tiene por objetivo debili-
tar lo viejo en nosotros (~~~ii'T, hidlil, debilitarse) hasta morir a ello,
µ,~ (gavá), lo que debe hacerse valerosamente, ,V~ (be'oz), con la
comprensión, nµ, (de'ah) que da la madurez, ~,Q~ (guimmul). Esto se
alcanza cuando se han aceptado plenamente los aspectos polares
de luz y de sombra de sí mismo, que en este caso se simbolizan por
los pilares laterales del Árbol de la Vida, cuyos nombres, iguales
que los de las dos columnas que flanqueaban la entrada del Tem-
plo de Salomón, son j~N~(Iajín), la del lado derecho, y¡µ.= (Boaz) la

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 373


del lado izquierdo; ambas. Como puede comprobarse fácilmente,
también con valor numérico 79. Tarot: 8 de espadas. Tríada de la
Memoria.
Genio n. º 62, ~Ni'ii"'r, Iah-hel. V. n., 51. Dios respirándose a Sí
mismo, este podía ser un buen significado para el nombre de este
genio. La respiración simbolizada por la letra he (m central es en
este caso el flujo que asciende por el sendero 5, que, recordémoslo,
es de dirección ascendente. Se trata, como nos muestra la guematria,
de una absorción, ~!lN (ajal, absorber, alimentarse), en virtud de la
cual el espíritu asimila la información de la Individualidad, lo que
para ésta, sin duda, es algo terrible, o~N (ayom) que tapa, que empa-
ña, ~~i'iNi'i (heehil, cubrir, empañar) el sentimiento del Yo, que está
por eso en trance de desaparecer. Iah-hel asiste, pues, en otro as-
pecto de la noche oscura del alma. Tarot: 8 de espadas. Tríada del
Temple de Ánimo.
Genio n.º 63, ~N,)V, Anauel. V. n., 157. La palabra ,jv ('anav),
que constituye la raíz de este nombre, tiene un doble significado:
menesteroso o pobre, y humilde, modesto. También aparece dentro
del nombre V) (na), móvil, errante, en el sentido de ir sin rumbo
fijo. Al encontrar en la guematria la palabra ¡¡,~, que según la vo-
calización puede significar barba (zakan) o anciano, sabio (zoken),
comprendemos que Anauel es como esos viejos vagabundos que
han renunciado a las comodidades de la civilización y van de acá
para allá contentándose con muy poco; pero a la vez, con una gran
sabiduría y con una gran humildad, evocando la figura de los he-
sicastas (del griego hesychia, reposo), que tal como nos lo relata
La vía del peregrino (v. referencia bibliográfica) recorrían los cami-
nos recitando un tipo de oración contemplativa llamada «oración
continua del corazón». Anauel es la energía que guía en este cami-
nar sin rumbo en busca de la experiencia mística de la Presencia
Divina. Tarot: 9 de espadas. Tríada del Temple de Ánimo.
Genio n. º 64, ~N,i~, Mejiel. V. n., 89. El cerebro, M~ (moáj) apare-
ce en el nombre de este genio. La letra iod (~) que viene a continua-
ción puede considerarse como el pronombre afijo de la primera
persona, por lo que el conjunto sería mi cerebro. Por su parte, me-
diante la guematria encontramos li~~, (demamah), silencio, cal-
ma; ne~~i'I (hamlatah), con el triple significado de salvación, puesta

3 74 V1L1.ARRUBIJ\ / HAUT / MI LLERA


de huevos y parto; y C'Ji) (guf), también con tres significados: tapar o
cerrar, cuerpo (de una persona) y esencia, elemento. ¿Qué nos dice
todo este conjunto acerca de Mejiel? Todo apunta a transformacio-
nes cerebrales profundas, que están creando, o si se quiere, parien-
do un nuevo ser. Ahora el cerebro se está liberando del habitual
bla-bla del parloteo mental y permanece en calma. Se ha cerrado
sobre sí mismo, para preparar el alumbramiento de ese nuevo ser.
La energía que es Mejiel actuará como comadrona de ese parto.
Tarot: 9 de espadas. Iniciativa.
Genio n. º 65, il~~~,, Damabiah. V. n., 61. La transformación no
tiene lugar solamente en el cerebro, es toda la sangre (Ci, dam) la
que está adquiriendo ahora un nuevo estado: el nombre del ge-
nio puede leerse también dam be-Adonaí, la sangre [está] en Dios
(en hebreo, como en árabe, el verbo «ser» se da por sobreenten-
dido en la mayoría de las frases). Y, tal como veíamos en el genio
número 22, con el que comparte guematria, se produce un embe-
llecimiento, iliJ (navah, embellecer), no sólo en lo que se refiere a los
aspectos individuales (~JN, aní, yo), sino que se difunde también
en el entorno, a veces en forma de un sutil aroma, N~J (ni). Ello
supondrá diversos cambios corporales, tanto en el tronco (j~~, be-
ten, vientre, abdomen), como en las extremidades (iJi, zened, codo).
Damabiah, por consiguiente, es el continuador en el cuerpo de la
obra asistida por el genio anterior, Mejiel, a nivel cerebral. Tarot:
10 de espadas. Tríada de la Mística. Es el cuarto de los genios que
invierte su polaridad.
Genio n. º 66, ~N¡,J~, Manakel. V. n., 221. El nombre de este
genio tiene una letra diferente respecto al número 36, Menadel.
La dálet (i), letra de la palabra y de la puerta, ha sido sustituida por
la kuf (¡,), que representa la tradición, pero también la parte pos-
terior de la cabeza (llamada «la boca de Dios», pues es por donde
llega la inspiración) y la llave que abre o cierra la puerta. El «maná
que procede de Dios» es ahora el maná recibido de Dios; aquél
era el aspecto externo, éste el interno. Y en línea con esta interiori-
zación, la guematria permite descubrir que aquí está la sanación,
el restablecimiento, iiN (erej) de la herida (ilii~il, haburah), en una
experiencia resplandeciente, niii (zaruaj); tras la sequía, llega Ioré,
;rii\ la primera lluvia del año, que es celebrada con música, il¡,c,~,

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 375


y poesía, "in (jaruz, rima o ritmo). Manakel es la energía que ayu-
da a recibir el maná y a celebrar el comienzo de la curación. Tarot:
10 de espadas. Tríada de la Inserción en el Mundo.
Genio n. º 67, ~NV~N, Ei' ael. V. n., 112. El nombre de este genio es
una pregunta, pues ~N (e) significa ¿dónde?, por lo que Ei'ael pre-
gunta: ¿Dónde está el ojo (V) de Dios? Para responderla, elegimos
en el valor 112 a¡,~~ (Yabok), el vado que, según Génesis 32:23, pasó
Jacob cuando fue a reconciliarse con su hermano Esaú, y que des-
de entonces es el símbolo de la reconciliación entre enemigos. Así
pues, el mensaje del genio es que Dios pone su mirada allí donde
los enemigos (exteriores o, lo que es más importante, interiores
a nosotros mismos) se reconcilian. Tarot: 2 de copas. Tríada de la
Innovación. ·
Genio n. º 68, iT'i~n, Jabuiah. V. n., 31. Como ya vimos en los ge-
nios números 1 y 48, las letras in forman el nombre más escondido
de Dios; y, como entre ellas aparece en este caso la letra beth (~), que
significa en o dentro de, el genio apunta a lo más profundo de ese
Dios desconocido. La guematria, por su parte, nos dice que 31 es el
número de ~N (El), que además de ser un nombre de Dios asociado
a la 4.ª sefirá, significa también.fuerza o poder. En el mismo número
encontramos también i"!N~i"! (hijá), afligir, mortificar, y ~~~Ni"! ~i"! (hag
ha-aviv), fiesta de la primavera, Pesaj, la Pascua judía, que con-
memora el comienzo de la marcha hacia la libertad. Por lo tanto,
el mensaje de Jabuiah es El poder de Dios Trascendente e inmanen-
te que, a través de la aflicción, empuja hacia la liberación. Tarot: 2
de copas. Tríada de las Raíces.
Genio n. º 69, ~Ni"!Ni, Rohel. V. n., 237. La palabra in (har), mon-
taña, se esconde en el nombre de este genio. Por su parte, de en-
tre los significados de la letra álef (N), colocada entre las dos ante-
riores, elegimos buey, por lo que el nombre de Rohel significaría
El buey de la montaña de Dios. No hemos encontrado datos de
interés en la guematria de este genio. Tarot: 3 de copas. Tríada de
la Conservación.
Genio n. º 70, n~~~~, Yabamiart. V. n., 67. La guematria de este ge-
nio es la de la 3.ª sefirá del Árbol de la Vida, Binah, por lo que está
relacionado con ella. Encontramos en efecto en su nombre e~ (iam),
el mar, que, como sabemos, tiene una profunda relación con esta

3 76 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


esfera. Además, pueden formarse otras dos palabras con las tres
letras raíces:~~ (mi), ¿quién?, y~~ (bi), en mí. La inteligencia, Binah,
comienza a diversificarse y distinguirse de la sabiduría cuando se
toma consciencia de sí mismo: ¿Quién soy? En el Gran Mar de la
Mente Cósmica empiezan a formarse los primeros arquetipos de
las formas, que pueden ser contempladas, iniciando el principio de
la distinción sujeto-objeto que acabará por manifestarse en Daat,
la sefirá oculta. Pero, en esos niveles, la distinción opera en ambos
sentidos, y por eso Yabamiah es el genio que, a semejanza de un
barquero, va y viene entre las dos orillas de lo Uno y lo Múltiple.
Tarot: 3 de copas. Tríada de la Ascética.
Genio n. 0 71, ,N~il, Hayaiel. V. n., 56. Como sucede en los nom-
bres de otros varios genios, aparecen nuevamente las dos iod (~~)
del nombre de Dios que simboliza Sus ojos. La he (il) inicial evoca
con su suave aspiración el aliento, por lo que se trata del soplo por
el que la primera sefirá, Keter, se pone en movimiento y se trans-
forma en Jokmah. Como eso sucede a través del Sendero O, que es
el de El Loco, Haiaiel participa de la naturaleza de éste: paciencia,
entrega y abandono, pero también extravagancia a ojos de los «ra-
zonables y sensatos». En cuanto a la guematria, no aporta datos
adicionales de interés. Tarot: 4 de copas. Tríada de la Ética.
Genio n. º 72, il~~,~, Mumiah. V. n., 101. Las letras raíces del
último genio proporcionan una palabra sorprendente: o,~ (mum),
defecto, imperfección, y también mutilación, invalidez. Recorde-
mos que este genio comparte valor numérico con el número 42,
y que en él aparecían conceptos relacionados con la recogida y al-
macenamiento de la cosecha y con la velocidad. A éstos vamos a
añadir iil~N ~,,~ (guiluí Eliyahu), aparición del profeta Elías, hecho
que, según la tradición judaica, estará anunciando la inminente ve-
nida del Mesías. Y como ya hemos visto que el Mesías es realmente
un estado superior de consciencia, es lógico que el último genio de
la lista venga a decirnos que ha llegado la hora de la recolección y
que Elías está a punto de llegar. Puede que adopte la forma de al-
guien con defectos físicos, o puede que si, como creían en tiempos
de Jesús, ya reencarnó en Juan el Bautista, le quede alguna huella de
su martirio. Tarot: 4 de copas. Tríada de los Deseos.

MANUA L DE KABBA LAH PRÁCTICA 3 77


3.13 Correspondencias de los genios de la Kabbalah
con las Tríadas del Árbol de la Vida y los arcanos
menores del tarot
3.13. 1. Condiciones previas para las correspondencias

A) Las Tríadas del Árbol se dividen en masculinas y feme-


ninas. Las primeras se corresponden con los reyes y los
caballeros (príncipes) del tarot, y son:
Raíces (Rey de bastos)
Fe (Rey de copas)
Mística (Rey de oros)
Ascética (Rey de espadas)
Deseos (Caballero de oros)
Impulso (Caballero de copas)
Intuición (Caballero de bastos)
Miedos (Caballero de espadas)
Las segundas se corresponden con las reinas y sotas
(princesas) del tarot, y son:
Ética (Reina de copas)
Memoria (Reina de bastos)
Innovación (Reina de espadas)
Conservación (Reina de oros)
Temple de ánimo (Sota de espadas)
Iniciativa (Sota de bastos)
Lógica (Sota de copas)
Inserción en el mundo (Sota de oros)

B) Cada Tríada está formada por tres esferas o sefirot y por


tres senderos subjetivos. Como a su vez los genios de la
Kabbalah se relacionan con los arcanos menores del tarot
del 2 al 9 de cada palo (según el Sefer Sefirot de Crowley),
la primera condición que debe cumplirse necesariamen-
te es que la atribución de un genio a una Tríada se haga
en aquella en la que uno de sus tres vértices (esferas)
tenga el mismo número de orden jerárquico que el del

3 78 VILLARRUl31A / HAUT / MI LLERA


arcano atribuido al genio. Como recordatorio, el orden
de las esferas es el siguiente:

l. Keter
2.Jokmah
3. Binah
4. Jesed
5. Guevurah
6.Tiferet
7. Netzaj
8.Hod
9. Yesod
10. Maljut

La primera de las esferas, Keter, no recibe atribución


de ningú.n genio, y por tanto de ningún arcano (los ases
quedan reservados a los ángeles regentes de los cuatro
elementos), por lo que quedan 9 cartas de número por
palo (del 2 al 10), lo que hace un total de 36 cartas. Como
hay 72 genios, se atribuyen dos genios por carta o arca-
no menor. El primero de ellos, de número impar, se con-
sidera nocturno, por lo que opera preferentemente en los
planos interiores, mientras que el segundo, de número
par, es diurno, y actúa por tanto en los niveles externos.
C) Los nombres de los genios terminan en IAH (il~) o en EL
(~N), habiendo 32 de los primeros y 40 de los segundos;
en total, 72. i!" es un nombre divino atribuido a la 2.ª sefi-
rá, cuya naturaleza tanto de potencial como de expresión
es fuego (yang, masculino), mientras que ~N es otro nom-
bre divino, atribuido en este caso a la 4.ª sefirá, Jesed,
cuya naturaleza, tanto de potencial como de expresión
es agua (yin, femenino). En consecuencia, se atribuyen
los genios por la terminación de su nombre a una Tría-
da masculina o femenina, según proceda, cumpliendo
siempre la condición del párrafo B anterior.
D) Hay cuatro genios cuya terminación es il~ que se rela-
cionan con cartas de número 10: son los que llevan los

MAN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 3 79


números de orden 11, 12 (ambos en correspondencia con
el 10 de oros), 47 (rige el 10 de copas) y 65 (rige el 10 de
espadas), por lo que, en principio, no es posible cum-
plir con ellos la condición del párrafo B. En este caso, se
considera que se trata de aspectos plenamente mascu-
linos que se manifiestan en el nivel físico (sotas), pero
que, por los significados de sus nombres corresponden
a Tríadas de reyes como expresión de la primera sefirá,
Keter. De las cuatro Tríadas de reyes, sólo la de la Fe no
toca a Keter, por lo que ésta queda excluida para reci-
bir alguno de estos genios. Las otras tres Tríadas reciben
desde las cartas del 10 dos genios la de las Raíces, y uno
cada una de las de la Místíca y la Ascética.
E) Hasta donde sea posible, también, y como condición adi-
cional, el significado de la carta del genio debería con-
cordar con el de la Tríada, o al menos no contradecirlo,
y eso, como veremos, es precisamente lo que ocurre.

3.13.2. Desarrollo de las atribuciones


(entre comillas resumen del significado del nombre, deducido de la
sección anterior)

TRÍADAS ESTRUCTURALES. Incluyen un total de 26 genios:


Raíces: 4.
Fe: 2.
Ética o Conciencia Moral: 7.
Memoria o Despertar: 4.
Temple de Ánimo: 3.
Inserción en el Mundo: 6.

TRÍADA DE LAS RAÍCES. Las letras de sus tres sende-


ros forman la palabra ~~ro, shaag, rugir, bramar: evoca el
«big-bang», el sonido de la Creación. Figura del tarot: Rey
de bastos. Naturaleza: yang, masculina. Esferas: 1, Keter -
2, Jokmah- 3, Binah. Senderos: O El Loco -1 El Mago - 3 La
Emperatriz. Genios en la Tríada: 4.

380 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Genio n.º 11. Lauviah (iT~iN',). Valor numérico 52.
«No el hombre, sino Dios». Correspondencia:
10 de oros: riqueza (la verdadera riqueza pro-
cede de Dios). El valor numérico proporciona
tanto las palabras N~Ni N~N (aba ve-imá), papá
y mamá, como también p (ben), hijo, en plena
concordancia con el sentido de la Tríada.
Genio n. º 16. Hakamiah (ii~o¡,iT). Valor numérico 160.
«El que despierta en Dios con regocijo». Corres-
pondencia: 3 de espadas: dolor. La guematria
aclara el sentido: vale también 160 la palabra
=,e~, (kosef), deseo, anhelo, añoranza. El dolor
es siempre un eco de la ausencia de Dios.
Genio n. º 47. Asaliah (;i"',rzi,-V) , Valor numérico 415.
«Desde la fuente de Dios». Correspondencia:
10 de copas: triunfo. Es una carta que evoca el
hogar, la familia, y la guematria lo confirma:
~N .n~~ (bet ab) significa familia, clan, linaje, y
vale precisamente 415. Se trata realmente de
nuestro verdadero hogar, nuestras raíces.
Genio n. º 68. Jabuiah (ii~i~M). Valor numérico 31.
«El poder de Dios trascendente e inmanente
que a través de la aflicción empuja hacia la li-
beración». Correspondencia: 2 de copas: amor.
El amor es semejante al velero, que emplea a la
vez la suavidad y la aspereza para conseguir
la unión; pero si no es libre no es amor, sólo
posesión y por tanto ignorancia. La guematria
del nombre lo confirma, pues presenta a la vez
iTN~il (hijáh), herir, afligir, mortificar, y la pre-

genio anterior: ,~N


gunta esencial de la añoranza indicada por el
(ayejá), ¿dónde estás?

TRÍADA DE LA FE. Las letras de sus tres senderos forman


la palabra,,,, gadó, su suerte, su felicidad. La fe es ante todo
un gran SÍ a la Vida y a todo lo que conlleva, alegre o tris-
te, placentero o doloroso. Figura del tarot: Rey de copas.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 381


Naturaleza: yang, masculina. Esferas: 2, Jokmah - 3, Binah
- 6, Tiferet. Senderos: 3 La Emperatriz - 4 El Emperador
- 6 Los Amantes. Genios en la Tríada: 2.
Genio n. º 34. Lehajiah (:i~:,',). Valor numérico 58.
«La luz de Dios que llega a través del oído».
Correspondencia: 3 de oros: obras mate-
riales. La guematria proporciona ¡~~ (ozen),
oído, y ¡n (jen), gracia, belleza, que es a la vez
el notarikón de :iir,o~ :,~~M (jokmáh nistaráh),
sabiduría secreta, la Kabbalah. El estudio de
la Kabbalah no está aparte del mundo y del
trabajo que hacemos en él, siendo la manifes-
tación más elevada de este trabajo el cumpli-
miento del tikún. Esto implica el gran SÍ a la
Vida que es la esencia de la Tríada.
Genio n'.º 52. Imamiah (rl~~V), Valor numérico 165.
«El que ayuda a terminar de consumir las vie-
jas energías para culminar el proceso de purifi-
cación». Correspondencia: 3 de bastos: fuerza
establecida. La guematria confirma este último
significado: Clj.'m (jezkím), fuerzas, potencias.
Este proceso de purificación, naturalmente do-
loroso, exige de nuevo el gran Sí a la Vida.

TRÍADA DE LA ÉTICA o DE LA CONCIENCIA MORAL.


Las letras de sus tres senderos, ~~r,, no forman ninguna pala-
bra, porque la Ética o Conciencia Moral es la que establece las
reglas, no la que se somete a ellas, porque es anterior a dichas
reglas. Figura del tarot: Reina de copas. Naturaleza: yin, feme-
nina. Esferas: 4, Jesed - 5, Guevurah - 6, Tiferet. Senderos: 8, La
Justicia - 9 - El Ermitaño - 11 La Fuerza. Genios en la Tríada: 7.
Genio n. º 2. Yeliel (',~,). Valor numérico 81. «Reve-
lación de la mirada de Dios que mueve el co-
razón». Correspondencia: 5 de bastos: lucha.
La guematria proporciona m"C (kavaná), la inten-
ción mística que acompaña a todo acto religioso,
lo que indica que se trata de una lucha interior.

382 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Genio n. º 22. Yeyayel (',N~~). Valor numenco 61.
«El que asiste en la creación de la individua-
Hdad». Correspondencia: 6 de copas: alegría,
la del nacimiento de un nuevo ser en los ni-
veles espirituales. También es la alegría de
un juego, puesto que el yo NN, aní, valor 61),
en realidad no existe (tN, aín, nada).
Genio n. º 36. Menadel (',Ni~t:). Valor numérico 125.
«El maná ,que procede de la palabra de Dios».
Correspondencia: 4 de oros: poder terrenal.
Realmente, la palabra de Dios es un alimento
que da poder.
Genio n.º 39. Reha'el (',NVi"!'"1). Valor numérico 306.
«El que nos despoja de las adherencias que
entorpecen el crecimiento interior». Corres-
pondencia: 6 de espadas: triunfo ganado.
La guematria proporciona conceptos relacio-
nados, con este significado y con el de la Tría-
da: nw~ (ishéh), holocausto, ofrenda, sacrificio;
w~, (dobésh), miel (¡la del triunfo!), y sobre
todo icit: (musar), ética, y también castigo,
corrección.
Genio n.º 53 Nanael (',NN~~). Valor numérico 132.
«La ayuda del cielo a quien practica la oración».
Correspondencia: 4 de bastos: la obra perfeccio-
nada. Se trata de la obra en los planos internos,
mientras que el genio siguiente la manifiesta en

muestra la palabra ,~¡,


los externos. Es un aspecto retributivo, como lo
(kibel), recibir, de la que
deriva la palabra kabbalah. Es, por tanto, el fruto
de la ética que retribuye los buenos actos.
Genio n. º 54. Nithael (',Nri~~). Valor numérico 491.
«Chacal de Dios (Anubis, el que vigila el peso
de los corazones de los muertos según la mi-
tología egipcia)». Correspondencia: 4 de bas-
tos: la obra perfeccionada, que es, como se
dice en el párrafo anterior, el aspecto externo.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 383


La guematria proporciona la palabra MN:I
(tzet), salir, que además de referirse a lama-
nifestación externa de la retribución interna,
apunta también al juicio tras la muerte, el exa-
men después de la salida del cuerpo físico.
Genio n. º 71. Hayaiel (~N~). Valor numérico 56.
«Los ojos de Dios examinan la entrega y lapa-
ciencia». Correspondencia: 4 de copas: goce.
La guematria proporciona i'TN~ (naéh), hermoso,
agradable, y también conveniente, correcto.
Se trata del aspecto benévolo de la justicia.

TRÍADA DE LA MEMORIÁ o DEL DESPERTAR. Las le-


tras de sus tres senderos forman las palabras OQV (amas),
que significa cargar o llevar algún peso, y VOQ (massá), via-
je o expedición, indicando así la naturaleza de la memoria,
que es un viaje a través del tiempo en el que se lleva con-
sigo algún tipo de carga. Figura del tarot: Reina de bastos.
Naturaleza: yin, femenina. Esferas: 6, Tiferet - 7, Netzaj
8, Hod. Senderos: 13 (sin nombre) - 15 El Diablo - 16 La To-
rre. Genios en la Tríada: 4.
Genio n. º 6. Lelahel (~Ni'T~). Valor numérico 96.
«Movimiento de la luz de Dios en el corazón».
Correspondencia: 7 de bastos: valor. El signi-
ficado del arcano muestra la primera y funda-
mental condición para recuperar el contenido
de la memoria: el valor, para afrontar los con-
tenidos del «cuarto de las ratas». La guema-
tria proporciona toda una serie de contenidos
en armonía con los conceptos anteriores: mQN
(amná), educación, crianza; co,, (iomám), la luz
del día; i'T~N~Q (malajáh), trabajo, labor; y has-
ta el moderno satélite artificial,¡,', (laviyán).
Genio n. º 40. Ieiazel ~~~). Valor numérico 58. «Dios
se ve a Sí Mismo desde su propio centro». Co-
rrespondencia: 6 de espadas: triunfo ganado.
La guematria es la misma que la del genio n.º 34,

384 VILLARRUBIA / H AUT / MILLERA


asignado a la Tríada de la Fe, por lo que vale lo
dicho en ese párrafo. Es un triunfo conocerse a
sí mismo, y el 6 de espadas se sitúa en Tiferet,
que actúa en su aspecto mental, correspondien-
te al palo de espadas.
Genio n. º 42. Mikael (',N~~o). Valor numérico 101.
«Quién como Dios». Correspondencia: 7 de es-
padas: esfuerzo inestable; el del ego, enfren-
tado al Absoluto. La guematria proporciona
dos interesantes conceptos: moNM (haamanáh),
fidelidad, creencia, fe, y ii'T~i,N ~,i,~ (guílui Eliy-
ahu), aparición del profeta Elías, que según la
tradición judía, se producirá cuando sea inmi-
nente la venida del Mesías; pero como éste es
realmente un estado superior de conciencia,
abrirá a la percepción de la grandeza de Dios.
Genio n. º 61. Umabel (',N~Oi). Valor numérico 79.
«Las pruebas y penalidades de la travesía del
desierto para matar a lo viejo». Correspon-
dencia: 8 de espadas: fuerza reducida, para-
lización. Recordemos que el pueblo de Israel
se vio obligado a deambular durante 40 años
por el desierto, para hacer un recorrido que
se puede hacer fácilmente en un mes. La gue-
matria confirma plenamente los significados:
'IV~ (boáz) y j"MN~ (iajín), los nombres de las
dos columnas que flanqueaban la entrada al
templo de Salomón, y por extensión los pila-
res laterales del Árbol de la Vida, hablan de la
necesidad de equilibrar las energías; ',,o~ (gui-
mul), maduración, nos indica la necesidad de
esperar el momento adecuado; ',~;,, (hidlil),
debilitarse, flaquear, confirma el significado
del nombre del genio, lo mismo que vi~ (gavá),
morir; y finalmente, ;,iv ('adá), comunidad,
asamblea, nos habla de realizar esta tarea en
la totalidad de los aspectos de uno mismo.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 385


TRÍADA DEL TEMPLE DE ÁNIMO. Las letras de sus tres
senderos forman la palabra Vi'~ (Jaká), que significa cortar,
romperse, y también brote o yema. Alude con ello a algo
que se rasga anunciando un florecer próximo. Figura del
tarot: Sota de espadas. Naturaleza: yin, femenina. Esferas:
7, Netzaj - 8, Hod - 9, Yesod. Senderos: 16, La Torre - 17,
La Estrella - 19, - El Sol. Genios en la Tríada: 3.
Genio n. 0 59. Harajel (~Nnii'T). Valor numérico 244.
«El que moviliza las energías de la agresivi-
dad». Correspondencia: 7 de oros: triunfo in-
cumplido. Aparece entonces, naturalmente,
un sentimiento de frustración, que debe expre-
sarse en forma de-agresividad para evitar que
se corrompa en el fuero interno. La guematria
proporciona tres conceptos asociados a los con-
ceptos anteriores: ~,in (jarul), zarza, espino,
el obstáculo que nos dificulta el avance; i'Ti'T~ ni,
(rúaj kaháh), pesar, depresión; y un nombre de
Dios, c~~~,Vii ~il~ (gadol ha-olarním), Grande de
los Mundos, que invita a descubrir la grandeza
de Dios tras el fracaso sufrido, como medio de
avanzar en el crecimiento espiritual.
Genio n. º 62. Iah-Hel (~~"iff). Valor numérico 51. «Dios
respirándose a Sí Mismo». Correspondencia:
8 de espadas: fuerza reducida, paralización.
El naipe es el mismo que el del genio n.º 61, pero
aquél, por ser impar, era nocturno, y actuaba en
los planos internos, mientras que éste es diurno y
actúa por tanto a la luz del día. La guematria nos
habla del enemigo, Ci!N, Edom, que aparece con
una apariencia terrible, c~N (ay6m), pero que sin
embargo no es sino un aspecto más de Dios que
se nos ofrece para nuestro alimento, ~~N (ojel).
Genio n. º 63. Anauel (~N,~V)- Valor numérico 157.
«El que guía al vagabundo de Dios». Corres-
pondencia: 9 de espadas: desesperación y
crueldad, encierro. El sentido del naipe pare-

386 V1 LLARRUBIII / HIIUT / MIi. LERA


ce contradictorio con el significado del nom-
bre del genio, pero en realidad, el vagabundo
de Dios (el hesicasta) recorre los caminos oran-
do, pues es un anciano sabio, ¡¡,¡ (zaken), que
vive la crueldad de la tempestad, C,Vi (za'afJ sin
sentirse afectado por ella, como si la recorriese
a través de un túnel, i'T.~¡,~ (nikebáh).

TRÍADA DE LA INSERCIÓN EN EL MUNDO. Las letras


de sus tres senderos forman las palabras iiv ('atzar), apresar,
contener; riv ('aratz), asustarse, temer, palabra que pronun-
ciada 'eretz significa fuerza o vigor; ivi (tza'ar), empequeiie-
cer, palabra que pronunciada tzi'er significa apesadumbrar o
afligir; yvi, (ratza), penetrar, y pronunciada ritzé, fustigar y
recortar. Todos estos conceptos aluden claramente a las ca-
racterísticas, consecuencias y propósitos que tiene el hecho
de encarnar en un cuerpo físico. Figura del tarot: Sota de
oros (única figura que en el tarot de Marsella «dobla» el palo,
en este caso el oro o pentáculo). Naturaleza: yin, femenina.
Esferas: 7, Netzaj - 8, Hod - 10, Maljut. Senderos: 16 La Torre
18 La Luna - 20 El Juicio. Genios en la Tríada: 6.
Genio n. º 8. Kahetel (~NMi1~). Valor numérico 456.
«Armonía azul de Dios». Correspondencia:
8 de oros: prudencia, sensatez. La guematria
del genio proporciona cuatro conceptos que
están en concordancia, uno con el significado
del naipe: ri~~Ni'T (heemit), verificar (actitud sin
duda prudente y sensata en cualquier situa-
ción), y otros tres con el de la propia Tríada:
o~~Vi'T riN (eretz ha-amím), extranjero, la diás-
pora (pues en realidad todos estamos aquí
desterrados, aunque sería mejor decir «en co-
misión de servicio»); mMN (etnáh), presente,
don, regalo (la encarnación en el plano físico
lo es, pues permite la realización del tikún);
y =,,i~ (partzufJ, rostro, semblante, apariencia,
la manifestación del alma en el plano físico.

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 387


Genio n.º 23 Melahel (,N:i,~). Valor numérico 106.
«El que ayuda a reparar los errores del hom-
bre y a preparar una encarnación futura más
armoniosa». Correspondencia: 7 de copas:
triunfo ilusorio. Todo triunfo supone siem-
pre un vencedor y un vencido, y por tanto, en
último extremo, un refuerzo de la dualidad.
La guematria nos aclara la función del genio
en este campo:¡,,~ (berek), corrección, arreglo,
y también investigación; y ,),~ (megulgal),
reencarnación.
Genio n. º 29. Reiiel (,N~~). Valor numérico 251.
«Aliento de Dios en el protoplasma». Corres-
pondencia: 10 de bastos: opresión, necesaria
para «embutir» el espíritu en un cuerpo ma-
terial. La guematria del genio aporta esca-
sa información, pero las letras de su nombre
contienen dos divinos: ~, que simbolizan los
ojos de Dios y se relacionan con la 2.ª sefirá,
y ,N,
relacionado con la 4.ª sefirá. La naturale-
za ígnea del primero se une en este caso con la
naturaleza acuosa del segundo, y la letra so-
brante, ,, simboliza el aliento, el soplo, que en
este caso tendrá una gran potencia, por unir
polos en cierto modo opuestos. Esta potencia
o fuerza aparece en la palabra 0-r:it:1~:, (neptu-
nium), el neptunio, un elemento químico fuer-
temente radioactivo, también con valor 251.
Genio n. º 30 Omael (,NN~i). Valor numérico 78.
«La Madre Divina benéfica y sanadora»,
sin duda la Shejiná en su aspecto luminoso.
Correspondencia: 10 de bastos: opresión,
como en el caso anterior. Sin embargo, ahora
se trata de una opresión diferente: la necesa-
ria para sanar la enfermedad, proporcionar
refugio, alimentar, entretener, educar y librar
de peligros. Todos estos conceptos pueden

3 88 V 1LL/\RRUlllA / H AUT / M ILLERA


encontrarse en el número 78 (ver Diccionario
Numérico Cabalístico) y se omiten por su gran
extensión.
Genio n. º 48 Mihael (~Ni'T~~). Valor numérico 86. «La
alegría de descubrir que sólo el Absoluto exis-
te, y que lo Relativo es Su expresión gozosa».
Correspondencia: 10 de copas: triunfo, feli-
cidad. La guematria nos recuerda la necesi-
dad de compartir y repartir esa alegría con la
palabra i'TN.i:l (peáh), la parte no cosechada del
campo que se debe dejar para los pobres se-
gún las prescripciones de Levítico, 19, 9. Pues
la inserción en el mundo tiene como finalidad
principal trabajar para el descubrimiento de la
Unidad.
Genio n. º 66 Manakel (~N¡,~~). Valor numérico 221.
«Maná recibido de Dios». Correspondencia:
10 de espadas: ruina, el cumplimiento defi-
nitivo de la Ley de Murphy; «si algo puede
salir mal, saldrá mal; incluso cuando no pue-
da salir mal». El realidad, el naipe es el gran
maestro del desapego. El maná fue el alimen-
to que recibió del cielo el pueblo de Israel en
su peregrinar por el desierto. La guematria
del genio proporciona, junto a conceptos
relacionados con el significado del arcano,
tales como ;,i,~n (jaburáh), herida, llaga,
o ,,~.,i'T (hidbir), someter, subyugar, otros
esperanzadores: iiN (erej), cura, restable-
cimiento; nii¡ (zaruáj), resplandeciente, bri-
llante, refulgente; o ;,,,~ (ioréh), la primera
lluvia del año . Todo el conjunto muestra la
enseñanza que predicaba Meister Eckhart:
«Dios permite que gocemos a manos llenas
de las bendiciones de la existencia, con la
única condición de que sepamos soltarlas en
el mismo instante en que se terminen».

Mi\NUJ\I. DE KABBA I.AH PRÁCTICA 389


TRÍADAS ACTIVAS. Incluyen un total de 23 genios:
Mística: 3.
Innovación: 9.
Deseos: 3.
Impulso: 4.
Iniciativa: 4.

TRÍADA DE LA MÍSTICA. Las letras de sus tres senderos


forman la palabra ti!~i (dabash), endulzar, que pronunciada
dovesh significa miel. La experiencia mística es esencialmen-
te dulce, y los conceptos anteriores lo confirman. Figura del
tarot: Rey de oros. Naturaleza: yang, masculina. Esferas:
1, Keter - 2, Jokmah - 6, Tiferet. Senderos: O El Loco - 2 La
Sacerdotisa - 4 El Emperador. Genios en la Tríada: 3.
Genio n. º 4 Elemiah (i!~~',V). Valor numérico 155.
«Quién por encima de Dios». Corresponden-
cia: 6 de bastos: victoria. En este caso se trata
de la victoria en los planos interiores, como
lo indica la naturaleza del palo, la madera,
que lleva implícito el fuego, el cual a su vez
representa el espíritu. La guematria del genio
añade varios temas interesantes: ?ON~ i i i (dad
neemán), Amigo Fiel, un nombre de Dios; v~~~i!
(hijniá), derrotar, vencer; o i!~~¡, (kimáh), levan-
tamiento, erección (señala o apunta hacia lo
alto); pero sobre todo n,¡,,~ (mokidáh), crisol,
lo que alude a la transmutación alquímica, y
confirma la naturaleza espiritual de la victoria
simbolizada por el arcano.
Genio n. º 32 Vasariah (i!"iti!i). Valor numérico 521
«El que proporciona los medios para comuni-
car con Dios y facilita las herramientas para
el cumplimiento del tikún». Correspondencia:
2 de oros: cambio armónico; la oposición a él
lo transforma en una especie de «triturado-
ra» que deshace los grumos o cristalizaciones
energéticas subsiguientes. La guematria in-

390 V1L1. ARRUBIA / H AUT / MILLERA-


dica que el genio actúa como un director de
orquesta: la palabra ro~~-irz, (sharvit) significa
batuta, y que el incumplimiento de las reglas
transforma a la mística (comunicación con
Dios, en definitiva), en una herramienta su-

Alianza, rl'MVi! ,¡¡~


mamente peligrosa, como lo era el Arca de la
(ohél ha-'edut).
Genio n. º 65 Damabiah (ii~~~.,). Valor numérico 61.
«La sangre está en Dios)>. Correspondencia:
10 de espadas: ruina: ver antes, en Tríada de In-
serción en el Mundo, genio n.º 66; en aquel caso
se trataba de ruina externa (naturaleza diurna
del arcano), mientras que ahora es la ruina en los
planos interiores, el vacío de la Noche Oscura.
Laguematrianosmuestraal yo,~~~ (am), que real-
mente no existe, es una ilusión: tN (aín), nada.
Completan el significado otras palabras como
,,N (ilel), inquirir, investigar; ~rii (hiyull), prís-
tino, original; o ~~,~ (kelaiJ, pérdida, destruc-
ción. Es significativo que con el mismo valor
numérico aparezca ii~'j'! (yoman), nombre de un
tratado del Talmud que recoge el ritual a seguir
en el Yom Kipur o Día del perdón. Pues hay
una clave secreta escondida en el capítulo XX
del Libro del Éxodo, que indica, mediante sus
letras punteadas, que todas las vivencias que-
dan grabadas en las células, confirmando así el
significado del nombre del genio.

TRÍADA DE LA INNOVACIÓN. Las letras de sus tres sen-


deros, tom, no forman en conjunto ninguna palabra, lo que es
lógico, pues la innovación parte siempre desde lo desconocido.
Sin embargo, puede extraerse de ellas la palabra iii (hed), eco,
y como la letra restante, t:l, significa a la vez bien y serpiente
atacando, ello nos indica la naturaleza unos veces beneficiosa
y otras peligrosa de toda innovación. Figura del tarot: Reina
de espadas. Naturaleza: yin, femenina. Esferas: 2, Jokmah

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 391


4, Jesed- 6, Tiferet. Senderos: 4 El Emperador- 5 El Pontífice
- 9 El Ermitaño. Genios en la Tríada: 9. Se trata de la Tríada
con mayor número de ellos.
Genio n. º 3 Sitael (,N~~). Valor numérico 110. «El que
examina e investiga el rocío recogido en la ban-
deja». Correspondencia: 6 de bastos: victoria,
que, por tratarse de un genio de número impar,
consiste en una victoria en los planos internos
del ser, y consiste en saber recoger lo que, a se-
mejanza del rocío, viene del Cielo. La palabra
¡,¡¡ (duk), profundizar, examinar, reflexionar,
con valor también 110, nos lo confirma.
Genio n. 0 13 Iezalel ~&-,.-','I"). Valor numérico 78. «El que
proporciona refugio, alimento y sanación en
caso de enfermedad». Correspondencia: 2 de
espadas: paz restablecida, equilibrio de fuer-
zas, conceptos plenamente en línea con el sig-
nificado del nombre. Es uno de los aspectos
benéficos de la innovación, que en este caso
actúa en los planos internos, por ser impar el
número del genio. El número 78 tiene múlti-
ples significados en esta línea, como se puede
comprobar en el Diccionario numérico.
Genio n. º 14 Mebabel (,Ni'T~~). Valor numérico 78.
«¿Qué hay en Dios?». Correspondencia: 2 de
espadas: paz restablecida, equilibrio de fuer-
zas. Ahora estos efectos son exteriores, se ma-
nifiestan en la vida social, pues el número del
genio es par. La innovación puede ser también
beneficiosa (muchas veces lo es) en las relacio-
nes humanas.
Genio n. º 18 Kaliel (,N~~). Valor numérico 91. «Todo
procede de Dios». Correspondencia: 4 de es-
padas: descanso en la pelea, tregua. El nú-
mero 91 es, probablemente, uno de las más
ricos en significados de toda la guematria.
Nos muestra los múltiples medios y efectos de

392 V1LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


un correcto uso de la innovación: MOiN QN (em
adamáh), la Madre Tierra, que crece y se en-
riquece con la innovación; la propia riqueza,
representada por el diamante, ci~:,~ (iahalóm),
la piedra preciosa de más valor; jON (amen),
verdad, veracidad, en cuya búsqueda se debe
aplicar siempre la innovación; esta palabra,
leída aman, significa criar o educar; ,~NO (maa-
jal), comida; coi:, (homem), asombrar, pasmar,
desconcertar; 1N',o (maaláj), ángel, mensajero,

novación; o el color añil, ,~~N


el inspirador por cuenta del Cielo de toda in-
(anil), símbolo de
la empatía y la unidad entre los seres; y todo
ello sin que se agoten las posibilidades de este
número en cuanto a significados.
Genio n. º 31 Lekabel ~N~~',). Valor numérico 83. « Todo
está en el corazón (también puede decirse 'en la
mente') de Dios». Correspondencia: 2 de oros:
cambio armónico. El significado del arcano está
en plena línea con uno de los aspectos benéficos
de la innovación. El número impar del genio nos
indica que este cambio es interno, a diferencia
del genio n.º 32, Vasariah (ver Mística), que re-
presenta la manifestación al exterior de este cam-
bio interno previo. Los conceptos derivados del
número 83 son en general sombríos y dolorosos,
por lo que representan en realidad el acicate para
que el cambio se produzca. Pueden repasarse en
el Diccionario Numérico.
Genio n. 0 49 Vehuel ~N'Mi). Valor numérico 48. «Dios
oculto se manifiesta a través del hombre». Co-
rrespondencia: 2 de bastos: dominio. La mani-
festación de Dios puede provocar enfermedad y
dolor,~ (jal11, y también tormento y angustia,
m (jil), como bien saben tantos místicos y profe-
tas,·pero puede ser también la fuente del valor,
la fuerza y la fortuna, pues esta última palabra,

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 393


pronunciada jail, significa precisamente todo eso.
La manifestación de Dios ha recibido en diferen-
tes culturas muchos nombres, como por ejemplo
en la antigua Grecia el de Mercurio, ..::l!li!l (kojab),
y actúa como un torrente, ~.::l'I" (iubal), de calor,
e incluso de fiebre, CM (jom), a través de un ca-
nal. i'TO.:i (guman) que es el cerebro, MO (moáj), que
lleva finalmente al éxtasis, ib.:i (gu11ah); palabras
todas ellas de valor 48 que muestran cómo actúa
la aparición de lo nuevo en el alma y en el cuerpo
del ser humano.
Genio n. º 50 Daniel (~N~~i). Valor numérico 95. «Jui-
cio de Dios». Cotrespondencia: 2 de bastos:
dominio, como en el genio anterior, pero ac-
tuando ahora hacia el exterior. Pone este genio
sobre aviso acerca de la responsabilidad que
supone toda innovación, pues es, en definiti-
va, la manifestación de la Shejiná, la Reina,
i'T!l~O (maljáh), la presencia divina en la Tierra,
que si bien puede aparecer en su aspecto ama-
ble, como una mujer hermosa, i'T~~ (iafáh), tam-
bién puede presentarse en su aspecto guerre-
ro, pues no debe olvidarse que Marte, Q'ljNO
(madím), ocupa el centro de la columna de la
Severidad en el Árbol de la Vida. En definitiva,
el genio viene a recordarnos que la finalidad
de toda innovación es la de liberar al ser hu-
mano de sus limitaciones y condicionamien-
tos, como lo prueba la palabra Mii~ (podéh),
redentor, con este mismo valor numérico.
Genio n. º 58 Ieialael (~N~~~). Valor numérico 81.
«El bufón de la Corte Celestial». Correspon-
dencia: 6 de oros: triunfo en el plano mate-
rial. La actuación del genio tiene lugar en el
mundo físico. Consiste en movilizar median-
te la risa estructuras que, en caso contrario,
tienden a cristalizarse. Se trata de una función

394 V! LLARRUBIA / H AUT / M!LLERA


importante, como lo muestran diversas pala-
bras con valor numérico 81: ¡,:,~ (kihún), sacer-
docio; ',,o:, (himul), circuncidado, el que lleva
la señal del pacto entre Dios y Abraham; iiiV
('idud), estímulo, acicate; j'riM (jizaión), revela-
ción, apocalipsis; o m,~ (kavaná), la intención
mística que acompaña a todo acto religioso.
Vemos cómo el triunfo en el plano material
viene acompañado de una actitud profunda-
mente religiosa en el interior: es el verdadero
triunfo espiritual de la innovación.
Genio n. º 67 Ei'ael (',~v~~). Valor numérico 112.
«¿Dónde están los ojos de Dios? En la reconci-
liación». Correspondencia: 2 de copas: amor.
Contundente correspondencia entre los sig-
nificados del nombre del genio y del arcano
menor. El vado de Yabok, ¡,~\ que Jacob cruzó
para ir a reconciliarse con su hermano Esaú,
es una buena muestra de ello.

TRÍADA DE LOS DESEOS. Las letras de sus tres sende-


ros, ro~~, no forman tampoco en conjunto ninguna palabra,
pues el deseo es, en último extremo, la manifestación de
un sentimiento de vacío que anhela la reconstrucción de la
Unidad perdida. Puede plantearse, no obstante, una pre-
gunta: ?ro ~~, que sería algo así como: ¿quién es el Bien?
Jesús responderá: «Buscad el Reino de los Cielos, y lo de-
más se os dará por añadidura». Figura del tarot: Caballe-
ro de oros. Naturaleza: yang, masculina. Esferas: 4, Jesed -
6, Tiferet - 7, Netzaj. Senderos: 9, El Ermitaño - 10, La Rueda
de la Fortuna - 13, (sin nombre). Genios en la Tríada: 3.
Genio n. º 17 Lauviah (~~-',). Valor numérico 52. «No
el hombre, sino Dios». El nombre del genio es
igual que el del número 11 (ver antes, Tríada de
las Raíces), y por lo tanto también su significa-
do ..Sin embargo, la correspondencia no es la
misma, pues en este caso el arcano es el 4 de es-

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 395


padas: descanso en la pelea, tregua, igual que
el genio 18 (ver antes, Tríada de la Innovación);
pero de trata de descanso en la pelea interior, en
la yihad espiritual, pues, como indica el sentido
oculto del cuarto mandamiento (relacionado
con este arcano), hasta para cumplir el tikún de-
ben tomarse descansos periódicos. Por último,
hay que resaltar que con valor numérico 52 apa-
rece la palabra ir.:n (jamad), desear, anhelar.
Genio n.º 35 Javakiah (iij''C). Valor numérico 141.
«El que da apoyos provisionales durante los ma-
los momentos». Correspondencia: 4 de oros: po-
der terrenal, uno de los más frecuentes objetos de
deseo, lo que nos confirman varias palabras con
este valor numérico: l'1W (metzavéh), gobernante,
comandante, palabra que leída mitzvá tiene entre
sus significados el de orden, mandamiento; o j~
(tzón), rebaño, manada, el otro «polo» (en este caso
negativo, receptivo) del ejercicio del poder. En de-
finitiva, el genio nos muestra el aspecto más burdo
y descarnado del deseo, y nos avisa de que siem-
pre se trata de una solución provisional, y no debe
tender a perpetuarse, como suele ser habitual.
Genio n.º 72 Mumiah (M~~ir.:). Valor numérico 101.
«El lisiado que anuncia la venida del profe-
ta Elías». Correspondencia: 4 de copas: goce.
Este genio está relacionado con el número
42, Mikael, con el comparte valor numérico.
El goce, en este caso, es por la inminente apa-
rición del Mesías, el cual, según la tradición ju-
día, será precedido por el profeta Elías. Ver lo
relativo a Mikael en la Tríada de la Memoria.

TRÍADA DEL IMPULSO. Las letras de sus senderos no for-


man ninguna palabra, aunque participan en e~~ (pnim), inte-
rior; pero le falta la iod, \ que representa la chispa divina; se-
ría pues esta Tríada semejante al carburador de un automóvil,

396 Vi LLARRUBIA / H AUT / MI LLERA


que no podrá funcionar si le falta el encendido. Se nos dice
así que todo impulso viene en realidad de Dios. Figura del
tarot: Caballero de copas. Naturaleza yang, masculina. Esfe-
ras: 6, Tiferet - 7, Netzaj - 9, Yesod. Senderos: 13 (sin nombre) -
14 La Templanza - 17 La Estrella. Genios en la Tríada: 4.
Genio n. º 5 Mahasiah (il~Wil~). Valor numérico 360.
«El nombre trascendente de Dios». Corres-
pondencia: 7 de bastos: valor. Evidentemen-
te, el impulso necesita valor, y en este caso
la guematria proporciona interesantes datos
adicionales: riv ('eretz), poder, fuerza, deci-
sión ,vigor; iJV ('etzer), gobierno, autoridad,
dominio; o mwil (hishnáh), enseñar, instruir.
Llama la atención que con el mismo valor nu-
mérico aparezca o~,~ (karpás), apio o perejil,
verduras que se consumen en la cena de Pésaj,
la Pascua judía, la cual, como sabemos, con-
memora la salida de los israelitas de Egipto;
he ahí un claro ejemplo del impulso.
Genio n. º 10 Aladiah (il.,~N). Valor numérico 50.
«El puente que el Pontífice tiende sobre el Abis-
mo». Correspondencia: 9 de oros: ganancia
material, que es uno de los estímulos para el
avance, pues los medios materiales son nece-
sarios para la vida espiritual, sin perjuicio del
necesario desapego de ellos. El número 50 es el
de la letra nun, J, uno de cuyos significados es
pez. Con este valor encontramos la palabra ~~
(kal), medir, actividad necesaria para obtener
y controlar las ganancias materiales; esta pala-
bra, pronunciada kol, significa todo, que es a la
vez el nombre primitivo de la 9.ª sefirá Yesod,
la cual es uno de los tres vértices de la Tríada
del Impulso. A destacar también la palabra ~,
(gemez), sicómoro, árbol espinoso al cual, según
nos cuenta el evangelista Lucas (19, 1-10) se su-
bió Zaqueo para poder ver a Jesús, lo que no

MANUAL DE KAB BALAH PRÁCTICA 397


conseguía desde el suelo por su pequeña esta-
tura. Zaqueo era el principal de los publicanos
(recaudadores de impuestos) y era rico. Jesús,
al verlo, le dijo: 'Zaqueo, date prisa, desciende, por-
que hoy es necesario que me aloje en tu casa'. Ante
las murmuraciones de todos diciendo que ha-
bía entrado en la casa de un hombre pecador,
Zaqueo dijo: 'He aquí, Señor, que doy la mitad de
mis bienes a los pobres; y si en algo he defraudado a
alguno, lo devuelvo .con intereses'. Y Jesús le dijo:
'Hoy ha venido la salvación a esta casa; por cuanto él
también es hijo de Abraham. Porque el Hijo del hom-
bre vino a buscar y a·salvar lo que se había perdido'.
Genio n. º 24 Hahiniah (M~~MM). Valor numérico 75.
«El que infunde seguridad para regresar al
hogar». Correspondencia: 7 de copas: triun-
fo ilusorio. El impulso debe basarse, precisa-
mente, en lo que Alan Watts llamó en el título
de una de sus obras 'La sabiduría de la inse-
guridad'. De entre las palabras con valor 75
seleccionamos M'r~~ (guenizáh), el armario de la
sinagoga en el que se guardaban los manuscri-
tos de los libros sagrados ya inservibles para
el uso litúrgico, en espera de ser enterrados
en tierra sagrada. La seguridad, realmente, es
una apuesta por el pasado muerto, aunque a
veces sirva para impulsarse en alguna acción.
Genio n. º 28 Seehiah (m,~-ru). Valor numérico 321.
«El fuego que siembra la vida». Corresponden-
cia: 9 de bastos: gran fortaleza. En este caso,
la fortaleza viene dada por el número de orden
del genio, pues M~ (koáj), fuerza, vale precisamen-
te 28. La guematria de su nombre proporciona
i~N (amper), amperio, la unidad de intensidad
de la corriente eléctrica, y C~~ ~M (jomer golem),
materia prima, confirmando así la potencialidad
necesaria para desarrollar el impulso.

398 VILLARRUBIA / H A UT / MILLERA


TRÍADA DE LA INICIATIVA. La única palabra que pue-
de formarse con las letras de sus senderos es rl~!l (tzefet),
capitel, la pieza colocada sobre el fuste o parte superior de
la columna de ciertos estilos arquitectónicos. En varios de
dichos estilos se aprovecha el capitel para incluir una esce-
na relativa a una determinada enseñanza moral. De alguna
forma, la iniciativa se basa siempre, aunque sea de forma
vaga, en algún modelo previo. Figura del tarot: Sota de bas-
tos. Naturaleza yin, femenina. Esferas: 7, Netzaj - 9, Yesod -
10, Maljut. Senderos: 17 La Estrella -19 La Luna - 21 El Mun-
do. Genios en la Tríada: 4.
Genio n. º 41 Hehahel (~Nililil). Valor numérico 46.
«El que ayuda a la triple apertura a Dios, en espí-
ritu, alma y cuerpo, semejante a la que el emba-
razo produce en la matriz». Correspondencia:
7 de espadas: esfuerzo inestable. Otro caso de
clara correspondencia entre el nombre del ge-
nio y la Tríada. De entre las palabras con valor
46 seleccionamos dos: il~i~i! (habdaláh), el him-
no que se canta a la salida del sábado según el
ritual judío, lo que indica que la iniciativa debe
ser precedida por un acto religioso, una dedica-
ción espiritual previa; y ~"1~ (bdil), estaño, me-
tal asociado a la 4.ª sefirá, Jesed, cuyo nombre
divino principal es precisamente ~N (El), que es
también la terminación de todos los nombres
de los genios asociados a Tríadas de naturaleza
femenina; además, el estaño se utiliza para sol-
dar, esto es, unir dos piezas metálicas, y por su
parte, su nombre hebreo puede transformarse
mediante una temurá en~~ ,~ (iad leb), fuerza
del coraz ón, de donde sale, precisamente, toda
iniciativa.
Genio n.º 46 Ariel (~~""iV). Valor numérico 311.
«El que ayuda a repoblar el desierto». Corres-
pondencia: 9 de copas: felicidad material, que
es uno de los motores para poner en marcha la

M AN UAL DE K A BBALAI I PRÁCTICi\ 399


iniciativa si se carece de ella, pero que puede
ser un obstáculo cuando se tiene; es una na-
turaleza, por tanto, dual. En cualquier caso,
se trata de actitudes muy humanas, como lo
prueba el hecho de que con el mismo valor
numérico del genio aparezcan las palabras
~rN (ish), hombre, varón, marido, y también
valiente; y los nombres de los arcángeles re-
gentes de la 3.ª y 6.ª sefirot, 'Ni'!ll Tzafkiel,
y ,N!li Rafael, respectivamente; y como estas
esferas están unidas por el sendero 6, que sim-
boliza la relación con la madre, representa por
tanto sus primeras fases en el cordón umbili-
cal (primera fuente de alimentación de la vida
física), que, a semejanza del motor de arran-
que de un automóvil, sirve durante un tiem-
po y luego debe ser cortado, lo mismo que la
iniciativa.
Genio n. º 60 Mitzrael (',Ni:it~). Valor numérico 361.
«El que hace la vida incómoda, para impulsamos
a marchar». Correspondencia: 7 de oros: triunfo
incumplido. El genio y el arcano podrían ajus-
tarse perfectamente al título de 'El Gran Frustra-
dor'. Recordemos que la raíz i:it~ (mitzr) sig-
nifica Egipto, y la guematria confirma la opre-
sión que obligó al pueblo de Israel a ponerse
en marcha siguiendo el mandato de Yahvé
transmitido por Moisés; pues con valor 361
aparecen las palabras j,VN (ashín), rígido, seve-
ro, duro; i!N)WiT (hasnadh), odio; y ,Niv~, Kasiel,
el ángel regente de Saturno, planeta que repre-
senta astrológicamente todo lo anterior.
Genio n.º 64 Mejiel (,N~M~). Valor numérico 89.
«El que ayuda al nacimiento del hombre nue-
vo». Correspondencia: 9 de espadas: desespe-
ración y crueldad, encierro. Los trabajos del
psicólogo transpersonal Stanislav Grof mues-

400 V !LLARRU BIA / HAUT / MILLERA ·


tran hasta qué punto el nacimiento genera lo
que él denomina 'el trauma perinatal'. Todo
nacimiento es doloroso, y la experiencia es
precisamente la que corresponde al significa-
do del arcano. La guematria aporta la expre-
sión n,~ ~~~M (jeblé ledáh), dolores del parto.

TRÍADAS PASIVAS. Incluyen un total de 23 genios:


Ascética: 5.
Conservación: 5.
Miedos: 6.
Intuición: 5.
Lógica: 2.

TRÍADA DE LA ASCÉTICA. Las palabras que pueden for-


marse con las letras de sus senderos son i~N (abó), su padre
(de él), quizá referido al hombre y a su Creador; ~,N (ob),
odre, y también hechicero o adivino; y Nt~ (bo ), venir, entrar.
El conjunto no parece aportar ninguna información cohe-
rente, pero es lógico que sea así, pues sin una conversión,
sin un arrepentimiento previo (es a lo que puede aludir el
signo en forma de 9 abierto en la base del trono de la carta
asociada a la Tríada, el Rey de espadas en el tarot de Mar-
sella) no es posible ningún ascetismo: 'entra en ti en busca de
tu Padre, y olvida la embriaguez (el odre) de la magia', parecen
decirnos estas letras; pues la magia es, en definitiva, un con-
junto de actuaciones para modificar alguna cosa respecto a
la situación actual, lo que indica, de entrada, que la situa-
ción no nos gusta. El Rey de espadas nos invita a pregun-
tarnos: '¿ Quién es ese al que no le gusta lo que está pasando?'
En otras palabras, llama a poner el énfasis en el sujeto en
lugar de en los objetos. Naturaleza yang, masculina. Es-
feras: 1, Keter - 3, Binah - 6, Tiferet. Senderos: 1 El Mago
- 2 La Sacerdotisa - 6 Los Amantes. Genios en la Tríada: 5.
Genio n.º 12 Hah'aiah (i1,mn). Valor numérico 95.
«Abre bien los ojos y verás a Dios». Corres-
pondencia: 10 de oros: riqueza. La guematria

M ANUAL DE KABBALAli PRÁCTICA 401


es la misma que la del genio n.º 50, (ver antes
Tríada de la Innovación), por lo que compar-
te con él determinadas características. La más
importante es la palabra;,~~~ (maljáh), reina,
que también es uno de los títulos de la Shejiná,
el aspecto femenino de Dios, que es también
Su presencia en la Tierra. Ello muestra que la
ascética no está reñida con la mística, aunque
los procedimientos de trabajo de ambas son
en cierto modo opuestos. El número par del
genio nos indica que la ascética no debe des-
cuidar los aspectos mundanos y sociales de la
vida humana, y ello lo confirma el significado
del arcano.
Genio n.º 33 lejuiah (n~,n~). Valor numérico 39.
«El hombre unificado es la expresión de Dios
vivo». Correspondencia: 3 de oros: las obras
materiales. Es la confirmación del mensaje
del genio n.º 12 (ver párrafo anterior), enfati-
zando la necesidad del trabajo desde una ac-
titud interior correcta. Diversas palabras con
valor 39 confirman todo lo anterior. Además,
el nombre del genio contiene las cuatro letras
del Tetragrama Sagrado ;ii;i~ y también la le-
tra vav (i) que simboliza al hombre, y a la vez
unión o enlace. Vemos, pues, cómo aparecen
las ideas de unificación del hombre con Dios y
el trabajo, pues la carta asociada, el 3 de oros,
se relaciona con la 3.ª sefirá, Binah, cuyo nom-
bre divino principal es precisamente mn~.
Genio n. º 51 Hajasiah (;i~~m;i). Valor numérico 328.
«Ábrete al sufrimiento y no opongas resis-
tencia al mal». Correspondencia: 3 de bastos:
fuerza establecida. Corresponde al aspecto
oscuro o sombrío de Binah, y la guematria lo
confirma con diversos conceptos. De ellos se-
leccionamos la palabra irzm, que según la vo-

402 VILLARRUBIA / HAUT / MI LLERA


calización tiene diferentes significados: jashaj,
oscurecerse, empañarse; jashej, oscuro, sombrío;
jashoj, ignorante; joshej, oscuridad, tinieblas, y
también la novena plaga de Egipto; o jasháj, pau-
sa o cese. La clave, sin embargo, aparece en otro
concepto con el mismo valor numérico: i,JJ v~~
(míneá nítzji), el movimiento perpetuo; pues,
en efecto, todo está en movimiento, todo cam-
bia constantemente, y como decía en una de
sus películas el personaje interpretado por el
cómico Mario Moreno «Cantinflas», 'No hay
mal que cien años dure, ni cuerpo que lo resista'.
Genio n. º 57 Nemamiah (M~QQJ). Valor numérico 145.
«El que selecciona el fruto cuando la cosecha
está madura». Correspondencia: 6 de oros:
triunfo en el plano material. Nueva confir-
mación de la necesidad de vivir en el plano
físico para desarrollar una ascesis verdadera;
se trata de una filosofía muy en línea con toda
la doctrina judaica. A través de la guematria
se encuentran varios conceptos que lo confir-
man: ,~~~i! (híjpíl), multiplicar; ,~c.j;, (hins{j),
coronar a un príncipe; f.ji! (henetz), brillar, lu-
cir; ro,¡,,(likut), recolección; o ;,1,VQ (meuléh),
superior, mejor, excelente.
Genio n. 0 70 Yabamiah (i!~o.:~). Valor numérico 67.
«El que muestra los primeros arquetipos de las
formas». Correspondencia: 3 de copas: abun-
dancia. El nombre del genio tiene el mismo va-
lor numérico que Binah, la 3.ª sefirá, con la que
se corresponde precisamente el 3 de copas.
En este caso, el genio propone que la abun-
dancia se ofrezca a Dios, y en este sentido apa-
rece con el mismo valor numérico la palabra
trn.:, (zebajim), ofrendas, sacrificios, y también
matanzas; es, además, el nombre de un trata-
do del Talmud que regula el sistema sacrificial

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 403


del Templo. El sacrificio presupone un des-
prendimiento de bienes (de cosas, de objetos
en definitiva), para así poder descubrir quién
es verdaderamente el sujeto, pues en el pro-
pio nombre del genio está la pregunta ~~ (mi),
¿quién?, además de~~ (bi), en mí.

TRÍADA DE LA CONSERVACIÓN. La única palabra que


puede formarse con las letras de sus senderos son,,~ (kuz),
vaso, cántaro, y también el nombre de una medida equiva-
lente a 90 gramos. La conservación significa selección, y por
consiguiente eliminación y renuncia, desapego, sólo pue-
de guardarse lo que quepa én el cántaro. Figura del tarot:
Reina de oros. Naturaleza yin, femenina. Esferas: 3, Binah
- 5, Guevurah - 6, Tiferet. Senderos: 6, Los Amantes - 7, El
Carro - 11, La Fuerza. Genios en la Tríada: 5.
Genio n. 0 15 Hariel (~N.,i'T). Valor numérico 246.
«Naturaleza de Dios». Correspondencia: 3 de
espadas: dolor. En el desarrollo de la guema-
tria, la palabra ,~,~ (midbar), desierto, sole-
dad, evoca el aspecto de eliminación y renun-
cia de la Tríada. Por su parte, el significado del
nombre del genio está en concordancia con c,i
(rum), altura, elevación, pues, según el Sefer
Yetzirah, 1:6, existe en el Árbol de la Vida la
'Profundidad de Arriba' que es precisamente
Keter, la 1ª sefirá, la más patente en cuanto a la
naturaleza de Dios. Por otra parte, la termina-
ción~~ (el) del nombre del genio confirma que
esta naturaleza es esencialmente femenina.
Genio n. 0 21 Neljael (~N~~~). Valor numérico 131.
«El que somete a pruebas para verificar el
crecimiento». Correspondencia: 6 de copas:
alegría. El arcano, además, se relaciona con la
infancia, por lo que está clara la relación con
el nombre del genio. Otras palabras significa-
tivas con valor 131 completan las correspon-

404 VII.LARRUBIA / HAUT / MILLERA


dencias: r~N (amatz), ser fuerte, ser valiente;
Ni~ (matzá), descubrir, hallar, lo que implica
la investigación y verificación previa; ~~,i (tzo-
hel), alegre, contento.
Genio n.º 37 Aniel ~N".lN). Valor numérico 92. «Yo soy
Dios». Correspondencia: 5 de espadas: derrota,
en este caso la del ego individual cuando se des-
cubre el Gran Secreto: Yo soy Dios. Según el gra-
do de preparación previa (ascética, en definitiva,
que es la Tríada superior a la de la Conservación),
el descubrimiento puede recibirse como algo be-
llo:,~n~ (majamad, delicia, gracia, hermosura), o
bien terrorífico: in1 (pajad, temor, espanto, pa-
vor), palabras ambas con valor 92, mismo que el
del nombre del genio. El aspecto divino que se
manifiesta a través de este genio sería el equiva-
lente al dios hindú Vishnú, el Conservador, que
puede adoptar un aspecto tanto hermoso y bené-
volo como terrible y poderoso.
Genio n. º 56 Poiel (~N'i~). Valor numérico 127.
«El que ayuda a la confesión de los pecados y
a la descarga del subconsciente». Correspon-
dencia: 5 de oros: trastorno en el plano mate-
rial. Es ese trastorno el que impulsa a revisar
el pasado para emprender la reconquista de
nuestro espacio sagrado. Así, mientras que
las palabras j~~N (almón), viudez, soledad,
y ;,~,i, (dejikáh), estrechez, depresión, aluden
a dichos trastornos, ~~ii'T (hutzlab), cruzado,
se refiere a la lucha para reconquistar dicho
espacio sagrado. Ello significa eliminar, selec-
cionar, desapegarse, en suma.
Genio n. º 69 Rohel (~NiiM). Valor numérico 237.
«El buey de la montaña de Dios». Correspon-
dencia: 3 de copas: abundancia. Alude al hecho
de conservar los bienes de todo tipo, pero elimi-
nando los innecesarios, que no son en definitiva

MANUAL DE KABBAI.AH PRÁCTICA 405


sino una carga. Lo confirma la palabra ,~TI
(_yi-
zkor), recordará, que es a la vez el nombre de una
oración que se reza en recuerdo de los muertos.

TRÍADA DE LOS MIEDOS. Puede formarse una palabra


con las letras de sus senderos: ~~O, que según su vocaliza-
ción tiene varios significados, todos ellos relacionados con
el verbo embrutecerse; el miedo, en efecto, embrutece, pero
uno de los significados, imprudencia, pone sobre aviso de la
utilidad del miedo, que radica en proporcionar un estímulo
para la huida o la defensa en caso de peligro. Figura del ta-
rot: Caballero de espadas. Naturaleza yang, masculina. Esfe-
ras: 5, Guevurah - 6, Tiferet - 8, Hod. Senderos: 11 La Fuerza
- 12 El Colgado - 15 El Diablo. Estos tres senderos, al mani-
festar los aspectos subjetivos del miedo, evocan una corrida
de toros: el público (sendero 11, lo social), el toro (sendero
15, los demonios del subconsciente) y el torero (sendero 12,
el Colgado, que se mantiene voluntariamente quieto frente
a la embestida, confiando en su saber hacer y en su expe-
riencia y no en su fuerza. Genios en la Tríada: 6.
Genio n. º 1 Vehuiah (i"Mm). Valor numérico 32. «Men-
saje que llega como un relámpago para purificar
el corazón, la mente y la conciencia, y permitir
así que se manifieste la gloria de Dios en el hom-
bre». Correspondencia: 5 de bastos: lucha, en
consonancia con la imagen de la corrida de toros
o el combate del gladiador. El nombre del genio
contiene a la letra vav (i), que representa al hom-
bre, y las cuatro letras restantes son las del Tetre-
grama, Mff, y como el valor numérico es el de los
senderos del Árbol de la Vida, es claro que se tra-
ta de una lucha espiritual cuyo campo de batalla
es precisamente el Árbol, o lo que es lo mismo,
la totalidad del Universo, externo e interno.
Las palabras i!~i, (zikan), purificar, y -:h (leb), a la
vez corazón, mente y consciencia, ambas con va-
lor 32, se han recogido en el nombre del genio.

406 VILLi\RRUBIA / HAUT / MILLERA


Genio n.º 19 Leuviah (i'M'r:'). Valor numérico 57. «El que
apoya al hombre para que contemple la luz de
Dios». Correspondencia: 5 de copas: pérdida en
el placer. La guematria proporciona abundantes
muestras de la concordancia del nombre del ge-
nio con el significado del arcano y con la propia
Tríada: ¡,~~ (abdán), destrucción, ruina, extermi-
nio; j\~ (avén), iniquidad, desgracia; CT~ (iyúm),
amenaza, espanto, intimidación; o ii~ffl (de-
jílan), susto, temor, pánico, fobia. Todos estos
conceptos se presentan como aspectos negati-
vos del miedo, y junto a ellos, y con el mismo
valor numérico, su contrapartida: la palabra ¡,~,
vocalizada on, significa fuerza, vigor y riqueza,
aunque también pena y aflicción. Muchas ve-
ces necesitamos sufrir desgracias para abrirnos
a la luz de Dios.
Genio n. º 20 Pahaliah (ii~i'T~). Valor numérico 130.
«El que insta a humillarse ante Dios en toda
circunstancia, favorable o desfavorable, pero
manteniendo la ecuanimidad, y con una acti-
tud de ligereza». Correspondencia: 5 de copas:
pérdida en el placer, como en el genio anterior.
Aquél tiene su campo de acción en los senti-
mientos, mientras que Pahalia opera a nivel de
actitudes. Todos los conceptos recogidos en el
nombre del genio tienen un valor de 130. Junto
a ellos añadimos ii~::tit (hatzalá), salvación, li-
beración, que esa es en definitiva la finalidad
del miedo, y ¡~v (ayín), ojo, y también fuente,
lo que nos indica la necesidad de mirar con
atención el miedo (otra vocalización de esta
última palabra tiene este sentido), y permitir
que fluya, que no se cristalice, lo que es el re-
quisito necesario para la liberación.
Genio n.º 38 Ja'amiah (ii~~vn). Valor numérico 133.
«El encargado de purificar y avisar de las

MAN UAL D E K AB BA LA H PRÁCTICA 407


desviaciones del camino a través de la enfer-
medad y su sanación». Correspondencia: 5
de espadas: derrota. Con el mismo valor del
nombre del genio aparecen i:¡.:i~ (nagaf), derro-
tar, palabra que leída neguef significa peste o
plaga; c~~I (pégam), la planta de ruda, cuyo
humo tiene efectos purificadores; y i:¡-+,r,;i (he-
jelif), renovar, restaurar.
Genio n. º 44 Ielahiah (;i~;i~~). Valor numérico 60.
«El que lleva al día la contabilidad de los' trapos
sucios'». Correspondencia: 8 de copas: triunfo
abandonado. La guematria del genio coincide
plenamente con.el significado del arcano. Em-
pezando por la letra samaj (O), con su significa-
do de lo secreto y del subconsciente (está rela-
cionada con el arcano de El Diablo), aparecen
las palabras ¡,~~ (bubón), muñeco, marioneta
(uno lo es hasta que se libera de los miedos);
¡r,~ (bajan), escudriña1', examinar; i~~ ~~~ (be-
leb kabed), duro de corazón; o i'1N~tQ;i (hatmaáh),
mancha, pecado, impureza.
Genio n. º 55 Mebahiah (~~). Valor numérico 62.
«El que saca a la luz las emociones». Correspon-
dencia: 5 de oros: trastorno material. Natural-
mente, el trastorno material es el mejor procedi-
miento para hacer que las emociones se manifies-
ten. Y es necesario que sea así, para alcanzar la
comprensión, el entendimiento,;,~;,,;, (hazhaman),
pues en caso contrario, si no se acepta la eviden-
cia, ;,~~~¡ (deguiman), que el genio nos presenta,
sobreviene la infección, i'1~i'n (hízhaman) que en
último extremo nos puede llevar a prostituimos,
a vendemos(;,~~, zanan, prostituirse).

TRÍADA DE LA INTUICIÓN. Con las letras de sus senderos


pueden formarse tres palabras: ¡,o~, (nasak), subir, alzar, ele-
varse; la misma palabra, vocalizada nasek significa sostenido,

408 VILLARRU BIA / H AUT / MILLERA


y con sonido nissek, encendido, prendido; ¡,x, (sinnek), recha-
zar; y e~, (kanas), multar. La intuición ofrece posibilidades de
seleccionar o rechazar la información recibida sin razón apa-
rente ... lo que a veces puede llevar al intuitivo a situaciones
un tanto embarazosas, desde el punto de vista de las personas
«razonables», que quizá castiguen tamaña osadía. Figura del
tarot: Caballero de bastos. Naturaleza yang, masculina. Esfe-
ras: 6, Tiferet - 8, Hod - 9, Yesod. Senderos: 14 La Templanza -
15 El Diablo -19 El Sol. Genios en la Tríada: 5.
Genio n. º 7 Ajaiah (ii~~t~N). Valor numérico 37. «Las
bodas místicas entre el Animus y el Anima».
Correspondencia: 8 de oros: prudencia, sen-
satez. El arcano avisa de los riesgos de seguir
la intuición sin la virtud de la prudencia; pues
con valor numérico 37 aparecen tanto iii~n~
(yejidah), unidad, el nivel más elevado del
alma, junto a~~¡¡ (hevel), futilidad, frivolidad,
tontería, y también vanidad, y el nombre del
personaje bíblico Abel (que ya sabemos cómo
terminó ... ). Claro que, con el mismo valor está
también ii:=i¡¡ (hazakáh), purificación, limpieza,
sin la cual la intuición puede jugarnos malas
pasadas.
Genio n. º 25 Nit-Haiah (;i~¡¡r,~). Valor numérico 470.
«Percepción de la materia como Espíritu de
Dios». Correspondencia: 8 de bastos: celeri-
dad. En verdad, Dios es ante todo vacío, como
lo muestra el sentido oculto del primer man-
damiento del Decálogo: «No tendrás otros
dioses frente a mi faz» significa realmente
«No tendrás otros dioses ante la vacuidad»,
pues la palabra hebrea ~~~ significa ambas
cosas. Por su parte, la física moderna ha des-
cubierto que la materia es realmente vacío,
un vacío en el que partículas de todo tipo na-
cen y mueren a la velocidad de la luz: cele-
ridad. Es lo que el hinduismo llama «la dan-

MANUAL DE KABBALAli PRÁCTICA 409


za de Shiva». Los conceptos W.Em ~~~ (be-leb
ve-nefesh), en cuerpo y alma, y ~¡,w~ (mishkal),
uno de cuyos significados es ritmo, métrica,
ambas con valor 470, confirman este aspecto
de la intuición.
Genio n. º 26 Haaiah (if'NNiT). Valor numérico 22.
«El boyero de Dios, que ayuda al funcionamien-
to unificado de ambos hemisferios cerebrales».
Correspondencia: 8 de bastos: celeridad. Si Nit-
Haiah coopera en el aspecto interno de la cele-
ridad, es Haaiah el encargado de los aspectos
externos, físicos, y el más próximo al hombre es
precisamente el ·recogido en el significado del
nombre del genio. Varias palabras con valor 22
inciden en este funcionamiento unificado del
cerebro: i'Tii,N (egozan), nogal, cuyo fruto, la nuez
ha sido desde antiguo un símbolo cabalístico
del propio cerebro, por su semejanza con él; ,m
(zivug), casamiento, unión conyugal; o ,n~ (ya-
jad), unirse, asociarse. Y lógicamente, cuando
ambos hemisferios funcionan unificados su ac-
tividad es mucho más rápida y armónica.
Genio n . º 43 Vewaliah (i'T..i,i,). Valor numérico 57.
«Unirse en el corazón a Dios». Correspon-
dencia: 8 de copas: triunfo abandonado.
La guematria coincide con la del genio n.º 19
(ver antes, Tríada de los Miedos), por lo que
nos remitimos al mismo para los contenidos.
El número impar de Vewalia nos indica ya que
hay un primer impulso intuitivo que lleva al
abandono de lo que se tenía ganado. Luego,
ese abandono se manifestará en los planos ex-
ternos, y a ello ayudará el genio 44, también
tratado en la Tríada de los Miedos, y con la
misma correspondencia con el tarot.
Genio n. 0 45 Sealiah (i'T~NO). Valor numérico 106.
«El que evalúa los desequilibrios y los corri-

41 Ü V 1L1.AR RUBIA / HAUT / M ILLERA


ge». Correspondencia: 9 de copas: felicidad
material, que es muchas veces el resultado de
esa corrección de los desequilibrios. En el 106
encontramos varias sugerencias en este senti-
do: ¡,,~ (bedek), investigación, y también co-
rrección, arreglo; ',i:i',:i (kilkul), alimentación,
manutención; ',~',~~ (megulgal), reencarnación;
o ',,V ('ul), criatura, bebé, en clara alusión, jun-
to con la palabra anterior, al nacimiento del
hombre nuevo. Este genio comparte guema-
tria con el n.º 23 (ver antes, Tríada de la Inser-
ción en el Mundo), por lo que ambos tienen
muchas características comunes.

TRÍADA DE LA LÓGICA. Con las letras de sus senderos


pueden formarse varias palabras: ¡,rii, (rittek), con los signi-
ficados de unir, ligar, y también interesar, cautivar; la mis-
ma palabra, vocalizada ratak significa golpear; y i¡,r, (teker),
pinchazo. La lógica une, liga ideas, lo que interesa y cauti-
va; pero llevada demasiado lejos, puede golpear hasta herir,
y esa es a la vez su limitación, porque en su base siempre
está lo no-lógico, el dar por supuesto algo indemostrable.
Figura del tarot: Sota de copas. Naturaleza yin, femenina.
Esferas: 8, Hod - 9, Yesod - 10, Maljut. Senderos: 19 El Sol -
20 El Juicio - 21 El Mundo. Genios en la Tríada: 2.
Genio n. º 9 Haziel (',N~iil) . Valor numérico 53. «El
que derrama luz diáfana». Correspondencia:
9 de oros: ganancia material. El nombre del
genio está en plena consonancia con la Tríada.
La guematria concuerda también con la Tría-
da y con el significado del arcano. Así, apare-
cen la huerta, p (gan), y uno de sus frutos, i~
(moz), el plátano; il~M (jammáh), el sol, conside-
rado no como el astro en sí, sino como el calor
y la luz que reparte; y el aspecto diáfano de
esa luz, ii:i¡ (zajúj); pero también la adverten-
cia del peligro de atarse demasiado a la lógica,

MANUAL DE KABBALAl-1 PRÁCTICA 411


en definitiva si la luz no es diáfana, mediante
conceptos tales como ¡.:iN (ibén), petrificar, fo-
silizar; ~,~, (diguli), artificial, ficticio; hasta
llegar a la ira, la cólera, i'l~M (jaman, la misma
palabra que significa el calor del sol, con una
ligera variación vocálica).
Genio n. 0 27 Ierathel (~Nrii~). Valor numérico 641.
«El que explora los contenidos del Árbol de la
Vida y su consolidación, para hacerlos com-
prensibles». Correspondencia: 9 de bastos:
gran fortaleza. Se trata de un trabajo en los
planos interiores, como lo muestra el número
impar del genio, por lo que es lógica la gran
fortaleza alcanzada con el mismo. La guema-
tria aporta la palabra TVTVN~ (meushásh), fuer-
te, firme, consolidado, y el nombre hebreo del
número 3 (masculino), i'lTVi~rz, (shlosháh), y to-
mando el valor alto de la letra final, c:ii~i'l (hi-
lúm), armonía, conformidad, acuerdo.

41 2 YILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Tabla XIX
Cuadro para la búsqueda rápida de cada genio asociado
a su correspondiente Tríada
1.2.Vehuiah: MIEDOS 40.Reha'el: ÉTICA o CONCIENCIA
3. Yeliel: ÉTICA o CONCIENCIA MORAL MORAL
4. Sitael: INNOVACIÓN 41.leiazel: MEMORIA o DESPERTAR
5. Elemiah: MÍSTICA 42.Hehahel: INICIATIVA
6. Mahasiah: IMPULSO 43.Mikael: MEMORIA o DESPERTAR
7. Lelahel: MEMORIA o DESPERTAR 44.Vewaliah: INTUICIÓN
8. Ajaiah: INTUICIÓN 45.lelahiah: MIEDOS
9. Kahetel: INSERCIÓN EN EL MUNDO 46.Sealiah: INTUICIÓN
1 0.Haziel: LÓGICA 47.Ariel: INICIATIVA
11.Aladiah: IMPULSO 48.Asaliah : RAÍCES
12.Lauviah: RAÍCES 49.Mihael: INSERCIÓN EN EL MUNDO
13.Hah'aiah: ASCÉTICA 50.Vehuel: INNOVACIÓN
14.lezalel: INNOVACIÓN 51.Daniel: INNOVACIÓN
15.Mebahel: INNOVACIÓN 52.Hajasiah: ASCÉTICA
16.Hariel: CONSERVACIÓN 53.lrnamiah: FE
17.Hakamiah: RAÍCES 54.Nanael: ÉTICA o CONCIENCIA
18.Lauviah: DESEOS MORAL
19.Kaliel: INNOVACIÓN 55. Nithael: ÉTICA o CONCIENCIA
20.Leuviah: MIEDOS MORAL
21.Pahaliah: MIEDOS 56.Mebahiah: MIEDOS
22 .Neljael: CONSERVACIÓN 57.Poiel : CONSERVACIÓN
23.Yeyayel: ÉTICA o CONCIENCIA 58.Narnarniah: ASCÉTICA
MORAL 59.leialael: INNOVACIÓN
24.Melahel: INSERCIÓN EN EL MUNDO 60.Harajel: TEMPLE DE ÁNIMO
25.Hahiniah: IMPULSO 61.Mitzrael: INICIATIVA
26. Nith-Haiah: INTUICIÓN 62.Urnabel: MEMORIA o
27.Haaiah: INTUICIÓN DESPERTAR
28.lerathel: LÓGICA 63.lah-Hel: TEMPLE DE ÁNIMO
29.Seehiah: IMPULSO 64.Anauel: TEMPLE DE ÁNIMO
30.Reiiel: INSERCIÓN EN EL MUNDO 65.Mejiel: INICIATIVA
31.Omael: INSERCIÓN EN EL MUNDO 66.Darnabiah: MÍSTICA
32.Lekabel: INNOVACIÓN 67.Manakel: INSERCIÓN EN EL
33.Vasariah: MÍSTICA MUNDO
34.lejuiah: ASCÉTICA 68.Ei' ael: INNOVACIÓN
35.Lehaji ah: FE 69.Jabuiah: RAÍCES
3 6.Javakiah: DESEOS 70.Rohel: CONSERVACIÓN
37.Menadel: ÉTICA O CONCIENCIA 71.Yabarniah: ASCÉTICA
MORAL 72.Haiaiel: ÉTICA o CONCIENCIA
38.Aniel: CONSERVACIÓN MORAL
39.Ja'amiah : MIEDOS 73.Mumiah: DESEOS

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 41 3


Tabla XX
Las Tríadas con sus genios
(se indica sólo el número de orden)

Tríadas estructurales: 26 genios.


Raíces: 11 -16 - 47 - 68
Fe: 34-52
Ética o Conciencia Moral: 2 - 22 - 36 - 39 -53 - 54 - 71
Memoria o Despertar: 6 - 40 - 42 - 61
Temple de Ánimo: 59 - 62 - 63
Inserción en el Mundo: 8 - 23 - 29 - 30 - 48 - 66

Tríadas activas: 23 genios.


Mística: 4 - 32 - 65
Innovación: 3 -13 - 14 - 18 - 31 - 49 - 50 - 58 - 67
Deseos: 17 - 35 - 72
Impulso: 5 -10 - 24 - 28
Iniciativa: 41 - 46 - 60 - 64

)
Tríadas pasivas: 23 genios
Ascética: 12 - 33 - 51 - 57 - 70
Conservación: 15 - 21 - 37 - 56 - 69
Miedos: 1 - 19 - 20 - 38 - 44 - 55
Intuición: 7 - 25 - 26 - 43 - 45
Lógica: 9 - 27

El número de genios por conjunto es muy significativo: 26 es el


número de Dios, puesto que lo es del Tetragrama iiiii\ mientra~
que 23 es el número de la genética humana, ya que esos son sus
pares de cromosomas: 23 x 2 = 46.

414 VILLARRUBIA / H AUT / MILLERA


3. 14. Los ángeles regentes de los cuatro elementos
Los ángeles regentes de los cuatro elementos deben examinarse,
a los efectos de la presente obra, como un complemento de las sec-
ciones anteriores, relativas a los genios de la Kabbalah. Hemos vis-
to, en efecto, que los genios se relacionaban con las cartas de palo
del tarot, desde el 2 hasta el 10, quedando fuera los ases, con los
que se relacionan dichos ángeles. Creemos interesante desarrollar
cabalísticamente el significado de sus nombres, lo que puede re-
sultar de suma utilidad en los trabajos de actualización del Árbol
nativo (ver VI Parte de la presente obra).

Tabla XXI
Ángeles regentes

Fuego: Arel. ~.. : - V. n.: 232. Se relaciona con el As de bastos.


Agua: Telihed. v''?rp V. n .: 58. Se relaciona con el As de copas.
Aire: Jasán. 1g:r V.n.: 118. Se relaciona con el As de espadas.
Tierra: Korab. :r:ii:::i V. n.:228. Se relaciona con el As de oros.

Significados de sus nombres


(Tomados del Diccionario Numérico Cabalístico Hebreo Caste-
llano. v. referencias bibliográficas)

FUEGO: ~NiN (Arel). 2 letras N muestran dos aspectos del infi-


nito. Unidos los dos signos de infinito, forman una hélice, la cual
es movida (letra~) por el soplo del espíritu (i) que al girar sobre el
centro configura a su vez una svástica, uno de los símbolos asocia-
dos a Keter, la lª. sefirá. El valor numérico de este nombre es 232,
que proporciona la expresión de Gén. 1, 3, iiN ~\ (íhí or), «Hágase
la luz», en completa concordancia con el elemento del que Arel es
regente, el fuego.
AGUA: ,n~ro (Telihed). Contiene las palabras ~ro (tal), «rocío»,
y in (hed), «eco». La letra iod (~) restante tiene el significado del pro-
nombre posesivo mío, por lo que la expresión literal sería «Eco de
mi rocío». Por otra parte, la guematria proporciona, por su valor

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 415


numérico 58, la palabra ¡n (jen), que significa gracia, belleza, pero
que es también, como hemos apuntado repetidas veces, el notarikón
de la sabiduría secreta, :i,r-c~ :,~~ (jokmah nistarah), la Kabbalah. Leí-
das estas letras en sentido inverso aparece m (noáj), Noé, el único
salvado con su familia del diluvio, según la Biblia, Vemos, pues,
cómo el simbolismo de este nombre se asocia por varios caminos
al agua, a la vez que se subraya el hecho de que la Kabbalah re-
quiere ser abordada con la mente y el sentimiento, simbolizados
ambos por el agua. Pero la Kabbalah es esencialmente tradición
oral, como lo prueba la palabra fiN, (ózen), oído, también de valor
numérico 58.
AIRE: ¡on (Jasán). Nuevamente aparecen la gracia (jM) y Noé
(m), como en el caso anterior, pero ahora acompañados de la le-
tra sámaj (O), cuyo significado ontológico es secreto. Alude, pues,
al secreto de la Kabbalah, cual es la transmisión oral, íntimamente
relacionada con el aire. Por guematria, con el valor 118, mismo que
el del nombre, encontramos=,~:,~~~ (avíhakáf), ibis, ave asociada al
dios egipcio Thot, equivalente a Hermes Trismegisto, el transmisor
de la sabiduría. También, con el mismo valor, está la palabra ¡on
(josén), que se escribe igual que el nombre de este ángel regente,
aunque con diferente vocalización: esta palabra significa fuerza, po-
der, («¡que la fuerza te acompañe!»), aludiendo con ello al valor de
las palabras (mantrams) como elemento creador.
TIERRA: ~,,~ (Korab). Contiene las palabras~, (rab), maestro,
y,~ (bar), hijo, junto con las letras,, que significa hombre, y~, que
significa cáliz. ¿No hay en todo ello una clara alusión a la figura
de Cristo? Además, la guematria, a través del valor numérico del
nombre, 228, nos proporciona c~n l'V (etz jayím), el Árbol de la
Vida, confirmando la conexión con la Kabbalah.

3.15. La danza de los siete velos


Los 72 genios de la Kabbalah parecen contar una historia semejante
a la narrada por el Libro del Éxodo: la salida de todo un pueblo de la
esclavitud de Egipto, la larga travesía del desierto y la llegada ante la
Tierra Prometida. En algunos de ellos, nos ha parecido encontrar refe-

416 VIU.ARRUB IA / H AUT / MILLERA


rencias que apuntan en este sentido, de tal manera que habría «genios
buenos» y «genios malos» que ayudarían u obstaculizarían nuestra
personal travesía del desierto. Aunque mejor sería decir «genios có-
modos» o «genios incómodos». En los últimos, sin embargo, parece
haber indicaciones de una «vuelta a los orígenes». Pero, si estos oríge-
nes son a su vez la consecuencia de vidas pasadas, cabe preguntarse si
no estaremos dando vueltas sin saber dónde vamos. Quizá, lo que los
genios están diciéndonos es que todo esto es un juego, y que ellos son
algo así como bytes de información que llevan dócilmente de un lado
para otro los mensajes que les entregamos. Pero, ¿y si hubiese algo
más? La idea de la vuelta del profeta Elías, que podría ser también la
de Juan el Bautista, nos hace preguntarnos por qué éste terminó deca-
pitado, tal como lo cuentan los Evangelios.
Seguramente, casi todo el mundo sabe que Juan el Bautista fue
encarcelado por Herodes por recriminarle que tomara por esposa
a Herodías, la mujer de su hermano; así lo cuentan los evangelios
de san Mateo y san Marcos, mientras que los de san Lucas y san
Juan apenas si hacen una breve mención del asunto. También nos
cuentan que la hija de Herodías bailó ante Herodes y que éste,
entusiasmado, prometió a la muchacha darle cuanto le pidiera.
La petición, a instancias de Herodías, fue la cabeza del Bautista,
que Herodes, atado por su promesa, no tuvo más remedio que
darle. Seguramente muchos sabrán que el nombre de esa mucha-
cha era Salomé, y que encandiló a su padrastro con la danza de los
siete velos. Pero nada de esto es cierto, pues ni en los evangelios
canónicos ni en los apócrifos hay la menor referencia al nombre de
la muchacha ni al tipo de danza que bailara.
Parece que este nombre proviene de ciertas tradiciones esotéri-
cas, que verían en Salomé (idumea y no hebrea) el vocablo árabe
salam ma', paz del agua, que sería tanto como decir pacificación del
mundo emocional. Y los siete velos pueden referirse al proceso en
virtud del cual se a.bren siete puertas o se desvelan siete misterios.
Permítasenos seguir esta danza en un esquema del Árbol de la
Vida, lo que, de paso, puede servir para un repaso rápido de los
significados de las sefirot (fig. 32).
Si observamos cualquier modelo del Árbol, nos daremos cuenta
de que en él hay siete niveles, algunos de los cuales están forma-

M ANUA L DE KABBALAH PRÁCTICA 41 7


dos por una sola esfera, y otros por un par de ellas. De abajo a
arriba, estos siete niveles son:
Primer nivel: Maljut, el mundo material. Comprende todos los as-
pectos de la materia, el plano físico y su doble etérico.
Segundo nivel: Yesod, la expresión del nivel astral y centro de la
Personalidad. Es también el centro de los deseos y los miedos,
y comprende todo lo relativo al nacimiento y a la muerte.
Tercer nivel: La pareja Netzaj - Hod, que comprende el mundo emo-
cional, los aspectos mentales concretos y su relación mutua.
Cuarto nivel: Tiferet, el centro de la Individualidad, el más alto
nivel alcanzable por el ser humano ordinario, el individuo per-
fecto. La sede del llamado Yo Superior.
Quinto nivel: La pareja Jesed - Guevurah, los principios éticos,
constructivo y destructivo, respectivamente. La alimentación y
la asimilación, la expansión y la contracción.
Sexto nivel: Daat, la sefirá oculta, donde se establece la relación
sujeto - objeto.
Séptimo nivel: La pareja Jokmah - Binah, la energía y la forma,
el espacio y el tiempo, los principios Yin y Yang.
Y entonces, Keter, ¿no ocupa ningún nivel? Pues no, Keter es el
origen y el sustrato de todos los niveles, es el punto sin dimen-
sión y representa el Tao. Y, tal como dice el Tao-te-King, «El Tao
que puede ser expresado no es el verdadero Tao».
Hechas estas aclaraciones, veamos lo que puede simbolizar la
danza de los siete velos de Salomé.
Preparación. Se inicia la danza. Es el comienzo de la búsqueda, la
elección o la atención a la llamada («vocación»). Esta fase dura-
rá un tiempo indeterminado, y la mayor parte de la humanidad
se encuentra en este nivel.
Cae el primer velo. Toda caída de velo supone la pérdida de una
ilusión, y por tanto el hallazgo de una no-verdad. La materia,
que se creía densa, estable y sólida, se revela como un vacío
en el que danzan haces de relaciones, como expone magistral-
mente Gary Zukav (V. ref. Bibliográficas). Los científicos más
avanzados de nuestro tiempo se encuentran en esta fase. La 10.ª
sefirá, Maljut, aparece no ya como un nivel denso, sino como un
campo de una elevada vibración.

41 8 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Cae el segundo velo. El gran temor de la inmensa mayoría de la
humanidad es la muerte. Cuando cae el segundo velo, Yesod re-
vela su secreto: la muerte no existe, la vida es eterna y es ahora.
Cae el tercer velo. La contraposición emociones-mente se debe al
desconocimiento que de las primeras tenemos. O bien se en-
cuentran reprimidas porque se trata de algo reprensible, o bien
nos dejamos arrastrar por ellas, lo que nos impide darnos cuenta
del proceso que está detrás. El tercer velo, al caer, permite acce-
der al subconsciente, y entonces las cosas empiezan a aclararse.
Este velo está realmente ligado al segundo (el conjunto forma la
Tríada del temple de Ánimo), por lo que ambos pueden caer al
mismo tiempo, o con un intervalo muy pequeño entre ellos.
Cae el cuarto velo. La Individualidad, cuya sede está en Tiferet, es
ciertamente un velo difícil de arrancar, y sólo unos pocos lo con-
siguen. Para ello deben renunciar a la tensión con la que están
defendiendo sus fronteras, deben relajar completamente todas
sus defensas hasta dejarlas inactivas. El problema es que muchas
de esas defensas, muchas de esas fronteras, son inconscientes,
por lo que no es posible trascenderlas hasta hacerlas totalmen-
te conscientes. Otras muchas son consideradas como esenciales,
vitales para el Yo; y el problema, el gran problema, es que ello
es rigurosamente cierto. En realidad, no se trata de eliminar
las fronteras que delimitan el Yo, sino darse cuenta cuál es real-
mente la esencia de ese Yo. Sólo entonces podrá ser trascendido,
lo que significa, no su eliminación, sino su inclusión en un con-
junto mucho más vasto y profundo. Cuando eso sucede, el cuar-
to velo cae, mostrando un poco más de «Salomé», de salam ma',
la «paz del agua».
Cae el quinto velo. Otro velo sujeto, como el tercero, por sus dos
extremos, que en este caso son las sefirot Jesed y Guevurah,
los polos que el Sefer Yetzirah denomina «Profundidad del
Bien» y «Profundidad del Mal», los principios Constructivo y
Destructivo, la Expansión y la Contracción, modificadoras de
las otras dimensiones. En este sentido, un conocido cuento de la
tradición oculta del Islam ilustra sobre la relatividad del bien y
del mal. Se cuenta que un maestro sufi se ganaba la vida criando
caballos, y una noche éstos rompieron la cerca del corral y se

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 419


escaparon. Sus vecinos, al enterarse, acudieron a expresarle sus
condolencias:
- ¡Qué desgracia! Se han escapado los caballos, y ahora estás arruinado.
El sufi, por toda respuesta, dijo:
- Tal vez. Si esa es la voluntad de Allah ...
A la noche siguiente, los caballos volvieron, trayendo con ellos a
una manada de caballos salvajes. Al enterarse, los vecinos acu-
dieron a darle la enhorabuena:
-¡ Eso sí que es tener suerte! ¡Ahora eres rico!
Nuevamente, el sufí volvió a contestar:
- Tal vez. Si esa es la voluntad de Allah ...
A los pocos días, el hijo del sufí estaba domando uno de los caballos
salvajes, cuando éste lo derribó, romr,iéndole una pierna.
-¡Qué desgracia! -dijeron sus vecinos- Ahora tu hijo tal vez
quede cojo para el resto de su vida. ¡Eso sí que es tener mala suerte!
Y otra vez el sufí dio su acostumbrada respuesta:
-Tal vez. Si esa es la voluntad de Allah ...
No había transcurrido una semana cuando llegó la noticia de
que un ejército enemigo había invadido el norte del país. En se-
guida llegaron los reclutadores y se llevaron a todos los jóvenes
de la aldea, excepto al hijo del sufí, ya que éste tenía la pierna
rota. Y cuando los vecinos se lamentaron de su mala suerte y en-
vidiaron la fortuna del sufí, cuyo hijo quedaría a salvo de los pe-
ligros de la guerra, volvieron a oír la acostumbrada respuesta:
-Tal vez. Si esa es la voluntad de Allah .. .
Cuando cae el quinto velo, se comprende que el Universo está
vivo, y que sus ciclos de expansión y contracción son como el
sístole y diástole de su corazón. No sólo es que la alternancia del
Bien y del Mal no sea nada alarmante, al contrario, es la propia
manifestación de la Vida.
Cae el sexto velo. Cada uno es más difícil de arrancar del cuerpo de
«Salomé». Ahora se trata de resolver la dualidad sujeto-objeto. Y es
un velo engañoso, porque aparece una y otra vez pegado a su cuer-
po, cada vez que cree habérselo quitado. En realidad el velo sigue
porque la Individualidad no ha desaparecido del todo, no cae de
golpe, sino a lo largo de un proceso que Ken Wilber denomina «las
bandas transpersonales» (ver sección siguiente).

420 YILLARRU131A / HAUT / MILI.E RA


Cae el séptimo velo. La ilusión del espacio y del tiempo, re-
presentada por el par Jokmah - Binah, es el último de los ve-
los en caer. Esperamos ver entonces a «Salomé», desnuda
en su espléndida belleza... y nos encontramos el vacío. Pues, al
igual que le sucede a Juan el Bautista, los siete velos han hecho
que quedemos sin cabeza, tv~., -1:,~ (beli rosh), expresión cuyo va-
lor numérico, 543, iguala al del nombre divino principal de la
primera sefirá, Keter: miN itvN miN (Ehié Asher Ehié), Yo Soy El
Que Soy. Se explica así la afirmación de Jesús de Nazaret, cuan-
do dice «El Hijo del Hombre no tiene donde posar su cabe-
za», pues, al ser, tal como Él mismo indica, «Uno con el Padre»,
su cabeza (esto es, sus contenidos mentales) es puro vacío, es de
todas partes y de ninguna.

4. CORRESPONDENCIAS ENTRE LA KABBALAH


Y OTROS SISTEMAS

P ese a ser la Kabbalah una tradición más próxima a Occidente


que los sistemas venidos de la India y Extremo Oriente, éstos se
han popularizado en el presente siglo mucho más. Por otra parte,
un conjunto de técnicas modernas, muchas de ellas adaptaciones
más o menos completas de las anteriores, ha irrumpido con fuerza
en el panorama de lo que se ha venido en llamar «el crecimiento
personal» Sin embargo, al haber permanecido la Kabbalah en cír-
culos restringidos, y pertenecer su estudio a la tradición de una
minoría que ha sido perseguida y marginada durante siglos, se ha
popularizado mucho menos, y quienes se la encuentran por prime-
ra vez sienten en ocasiones que no son capaces de encuadrar sus
enseñanzas con las que proceden de otros campos o sistemas como
los mencionados anteriormente. Sin embargo, todas estas técnicas,
sistemas, terapias o filosofías, en mayor o menor medida, orien-
tales u occidentales, antiguas o modernas, tienen un propósito co-
mún: tratan de paliar el sufrimiento humano. Ken Wilber, el gran
gurú de la psicología transpersonal, se pregunta a este respecto por

M ANU/\L DE KABBALAH PRÁCTICA 42 1


la razón de que todas estas técnicas o sistemas tengan propuestas,
métodos u objetivos que muchas veces parecen contradecirse en-
tre sí, y llega a la conclusión de que todas ellas están en lo cierto, si
bien se refieren a diversos niveles del ser humano.
Simbolismo de la danza de los siete velos
Como hemos ido viendo a lo largo de los capítulos anteriores,
solo hay un problema básico, la rotura de la Unidad esencial, y de
él derivan todos los demás. Según el grado de aproximación a este
problema, los sistemas, filosofías o terapias propuestas tendrán
uno u otro enfoque, pero siempre buscarán suavizar, paliar, y en
último extremo eliminar las fronteras del Yo.
Para establecer las correspondencias de la Kabbalah con otros
sistemas hemos optado por la presentación gráfica, tal como apa-
rece en la figura 33. De las obras de Wilber El proyecto Atman y La
conciencia sin fronteras se han seleccionado los datos que aparecen
en ese cuadro, en el que, para facilitar una presentación simple,
se incluyen tan sólo referencias del hinduismo vedanta, por su
sencillez y precisión; del sistema de Aurobindo, por emplear una
terminología que creemos al alcance de una mayoría de lectores;
y del propuesto por el propio Wilber, para el sentido aproximado
del yo, lo que puede facilitar la comprensión para futuros lecto-
res de este autor, que es por lo demás de lectura obligada para
cuantos se interesen por el ser humano y su desarrollo espiritual.
Junto a estos sistemas, tomada de la primera de las obras citadas,
se incluye el planteamiento realizado en La conciencia sin fronteras
acerca de los diferentes niveles de terapias y sistemas espirituales
(terapias del espíritu, al fin y al cabot puestos en corresponden-
cia tanto con la Kabbalah como con los otros sistemas. Para res-
petar el formato del Árbol de la Vida y facilitar la comprensión
a los lectores de la presente obra, los datos tomados de las obras
de Wilber se presentan invertidos respecto a la presentación que
éste hace, y no hay contradicción en ello: donde Wilber dice «pro-
fundidad», y de ahí que su orden sea descendente, decimos «ele-
vación», por lo que nuestro orden de presentación es ascendente;
pero se trata del mismo punto de vista con dos terminologías
distintas. Por último, debemos señalar que los sistemas «funda-
mentalistas», sean cristianos, judíos, musulmanes o de cualquier

422 VII.I.ARRUBIA / H AUT / MILLERA


otro origen, son reforzadores del yo, es decir, de sus límites, por
lo que, por separativos respecto a la Unidad, no tienen cabida en
este esquema.

t'Ni -1,.::¡ = 543 = M"MN "'IWN i'!"i"'IN


Sin cabeza Yo Soy el que Soy

7°. Velo: la ilusión


del espacio y del tiempo

e;:>
L-¡¡¡¡;__¡¡;¡,_- 6°. Velo: la ilusión de la
separación real entre
sujeto y objeto

5°. Velo: la
Ilusión del Bien
Y del Mal como
Conceptos reales

L-__.¡¡__ _ _ 4°. Velo: la ilusión


del yo separado

3er. Velo: la
Ilusión de la
separación entre
la mente y las
emociones

2°. Velo: la ilusión de la


existencia de la muerte
como algo real

1•r. Velo: la ilusión de


la solidez de la materia

Figura 32

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 423


Como aclaración al gráfico de la figura 33 deben hacerse algunas pre--
cisiones sobre la terminología utilizada. La columna correspondiente a la
Kabbalah aparece en forma de Árbol de la Vida, en el cual se han inser-
tado, además, los cinco niveles del alma según el judaísmo, en sus ubica-
ciones más aproximadas. Del inferior al superior, estos niveles son:
• W~~, nefesh, el alma vegetativa, que corresponde básica-
mente al nivel de Maljut.
• n,-,, rúaj, relacionada con el aliento vital (esta palabra
significa también «viento»), y cuya correspondencia se
situaría a nivel de la Tríada del Temple de Ánimo, centra-
da en la 9.ª sefirá, Yesod.
• ni,, jayah, el principio de la vida, que se centraría en torno
a la esfera de Tiferet.
• MOW~, neshamah, el alma propiamente dicha, que podía si-
tuarse en torno al Abismo, y próxima a la pareja Jokmah-
Binah.
• n,~n\ yejídah, que tiene el sentido de unidad o singulari-
dad, y que para Jung sería el príncipium individuationis; su
correlato sería Keter, la esfera suprema.
En cuanto a la columna titulada «Hinduísmo-Vedanta», todas las
cajas, excepto la superior, terminan con el doble sufijo mayakosha.
«Maya» significa ilusión, lo que engafia, y «kosha», cuerpo o en-
voltura. Por tanto se trata en todos los casos de un «cuerpo iluso-
rio», lo que equivale a decir, por una parte, que si hay un cuerpo
hay un límite, una frontera, por sutil que ésta sea, pero que (¡otra
vez la canción de Miguel Ríos!) esta frontera es ilusoria, está sólo
en la imaginación. Aclarado esto, los diferentes niveles, de abajo a
arriba, pueden traducirse como «cuerpo material (anna) ilusorio»,
«cuerpo energético (prana) ilusorio», «cuerpo mental (mano) iluso-
rio», «cuerpo iluminado (vijnana) ilusorio» y «cuerpo de felicidad
o bienaventuranza (ananda) ilusorio». La única realidad es Brah-
ma, el Absoluto, idéntico a Atman, el Sí mismo. El Islam reconoce
esta realidad en su haditz básico: La ilaha il-l-Allah wa Muhammadu
rasul Allah, que suele traducirse como «No hay más Dios que Allah
y Mahoma es su enviado», pero que en realidad tiene un significa-
do profundamente esotérico: «No existe sino el Absoluto (Brama,
Ayin Sof) y lo Relativo es Su expresión gozosa», pues el nombre

424 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


del Profeta significa «El Muy Agradecido», el que agradece con
gozo, con exaltación, del mismo modo que, tal como nos relata la
Biblia, el rey David bailando y tocando el arpa delante del Arca de
la Alianza (II Samuel, 6:5).

Hinduismo Sentido del Yo Aurobindo Niveles de consciencia


KABBALAH
Vedanta Wilber Terapias
Brahma/ Consciencia de Unidad
Brahma Universo {en tanto que divino)
Definitivo Paramatman
Atman Hinduismo vedanta
Taolsmo
Budismomahayana
Causal superior Budismo va1i•ay:1na
Anandamaya Supermente Crisfianismo esotérico
Islam esotérico (sufismo)
kosha Causal inferior Judat'smo esotérico (cábala}

Sutil superior Sobremente Bandas transpersohalef4


Psicologla analifica ju,fg/i¡_~
Ps,coslnfe.sis
Sutil inferior Mas/ow- Progr~
Vijnanamaya
kosha Centauro
Mente intuitiva
Biosocial
Mente iluminada
Manomaya Ego maduro Cuerpo mental
kosha superior
Egoico:
Avanzado Mente ideadora

Pranamaya
kosha
Medio
Temprano
Cognición social
Ego físico
Mente razo nadara
Voluntad
Et T

Cuerpo imagen

Cuerpo pránico Subconsciente:


Cuerpo axial Emocional
Annamaya Vital
kosha Urobórico
Pleromático Físico

Figura 33
Correspondencias de la Kabbalah con otros sistemas, y terapias para cada
nivel según Wilber. En la columna de Kabbalah, en cursiva, los cinco
niveles del alma según el Sefer ha-Bahir.

En cuanto a la columna titulada «Sentido del Yo (Wilber)», debe


indicarse que éste da el nombre de «pleromático» al sentido del
feto cuando se siente uno con la madre. Progresivamente, este sen-
tido va diferenciándose, a través de los estadios «urobórico» (uro-
boros, la serpiente que muerde su cola, símbolo del círculo de vida

M AN UAL DE KABBALAl-1 PRÁCTICA 425


cerrado en sí mismo) y «cuerpo axial» (de axis, eje; el bebé se siente
el eje del mundo). Después, la diferenciación lleva al cuerpo práni-
co (energético), hasta hacerse una «imagen» de sí mismo. Cuando
el niño empieza a tornar conciencia de «los otros», empieza a for-
mar su ego, proceso necesario, aunque doloroso por la limitación
que conlleva. Cuando el ego madura, sus relaciones con el entorno
social se vuelven más firmes y a la vez menos agresivas, pues en
el estadio de «centauro» (Wilber lo llama así por representar una
perfecta fusión cuerpo-mente) el ego se siente completo. Pero este
ego debe ser trascendido, lo que sucede en un proceso a través de
los niveles sutiles y causales, hasta desembocar en el «Definitivo»,
equivalente al Brahrna-Atman del vedanta.
La columna dedicada a Aurobindo,.de gran claridad, sirve para
explicar perfectamente el sentido de las dos anteriores, pese a que
presenta respecto a ellas algunas diferencias en cuanto a los límites
entre los diferentes niveles.
Por último, en la columna «Niveles de consciencia - Terapias»,
las zonas en color gris se refieren a aspectos que el sujeto no reco-
noce corno propios, por lo que tiende a proyectarlos en el entorno,
manteniendo esta actitud hasta que los reconoce y acepta corno
aspecto de sí mismo. En la zona de las bandas transpersonales se
producen experiencias que van más allá de los límites del Yo, pero
sin alcanzar la consciencia de unidad del recuadro superior. Puede
observarse en este último que hay varias filosofías que apuntan al
Absoluto. En los recuadros inferiores, cada terapia suele reconocer
sólo la existencia de los niveles del yo que están a igual o inferior
altura, pero no los superiores. Otra indicación es que cada nivel de
terapia tiene, según parece, su mayor eficacia en el nivel de cons-
ciencia para el que fue creada, empezando a ser ineficaz a partir
de dos niveles por debajo. Resaltemos, finalmente, que, tal corno
decíamos párrafos atrás, las religiones y sistemas «fundarnenta-
listas», es decir, todos aquellos que separan drásticamente a «los
nuestros» de «los otros», no tienen cabida en este esquema.

42 6 V iLLARRUB IA / HAUT / MILLERA


,
111 EL ARBOL DE LA VIDA PERSONAL:

PROCEDIMIENTOS PARA LEVANTARLO


1. EL EXPERIMENTO DE ALAIN ASPECT

(Los místicos y los científicos empiezan a coincidir ... )

«Cuando conoces a Allah, descubres que


Él no es en modo alguno diferente de Su
Nombre. Pues el nombre y la cosa nomi-
nada son una sola y única cosa, y tienen
idéntica esencia».
MUHAYDDIN IBN-EL-ARABí.
(Murcia 1164, Damasco 1240)
Risalat-ul-ahadiyya,
(Tratado de la Unidad)

D esde hace años, el científico francés Alain Aspect ha venido


desarrollando en la Universidad de París-Sur un experimento
que ha sido calificado como «el experimento del siglo» (fig. 34).
De la fuente FO salen simultáneamente dos fotones en direc-
ciones opuestas. El suministrador de energía es un rayo láser que
excita átomos de calcio: los átomos se cargan energéticamente, con
lo que sus electrones exteriores aumentan su energía y saltan a ór-
bitas de giro más altas. Este estado de excitación se mantiene sólo
durante unas milbillonésimas de segundo; luego los electrones
caen de nuevo a su estado normal, liberándose la energía absorbi-

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 429


da en forma de un par de partículas de luz, o fotones, que son los
que salen en direcciones opuestas.
Conforme los fotones vuelan en direcciones opuestas, se en-
cuentran con sendos interruptores, LA., que efectúan conexiones y
desconexiones totalmente casuales e independientes uno del otro.
Si los interruptores están en la posición de desconectado, las par-
tículas pasan sin ningún impedimento a su través, y continúan su
camino en línea recta hacia los filtros F.1 y F.2, situados frente a
frente. Por contra, si un interruptor se encuentra en posición de
conectado, comienza a vibrar, mediante ultrasonidos, un tubito
de cristal lleno de agua que está situado dentro del interruptor.
El agua en vibración conduce la partícula de luz hacia otro filtro,
F.3 o F.4, que se encuentra a un lado de la trayectoria de vuelo.
Las partículas que pasen a través de un filtro de polarización se-
rán detenidas por el otro. Dado que los interruptores se conectan y
se desconectan casual e independientemente entre sí, sólo depende
de la casualidad que los fotones sean conducidos al filtro 1 o al 3
(fotón A), y al 2 o al 4 (fotón B). Lo decisivo es que el tiempo de
conmutación sea más breve que el tiempo de recorrido de las par-
tículas hacia los filtros; por consiguiente, ninguna partícula podrá
COMUNICAR nada a la otra.
Con este dispositivo, sería esperable que cada fotón, aleatoriamen-
te, siguiese un comportamiento igual al de su compañero en un 50
por 100 de las veces, y diferente en el otro 50 por 100. Sin embargo,
en todas las ocasiones, repitiendo el experimento millones de veces a
lo largo de varios años, los detectores D han enviado al contador C un
resultado muy diferente: o bien pasarán ambos fotones siempre por
el filtro, o bien ambos serán detenidos. Lo que nunca ocurre es que
el fotón A atraviese el filtro y el B sea detenido. Y ello está llevando a
algunas conclusiones sorprendentes:
• El Universo está configurado de tal modo que, en todas partes
hay «un poco de SI» y «un poco de NO», un poco de «blanco» y
un poco de «negro».
• Lo que nosotros vemos como «separado», en realidad no lo está.
Lo en apariencia separado pertenece a un mismo campo más pro-
fundo de la realidad, el que David Bohm, profesor de física teóri-
ca de la Universidad de Londres, llama «el orden implícito».

430 V1L1.ARRUBIA / HAUT / MILLERA


Emisor de láser

D3 D4
♦ •
•• Cables de ••
• ♦ conexión ••
•• ••
. _ __ __¡ •••••••••©•••••••• D2

Figura 34

El experimento de Alain Aspect

FO - Fuente de fotones. Un rayo láser excita átomos de calcio, los cuales emiten dos
fotones que salen en direcciones opuestas.
IA - Interruptores aleatorios, que adoptan la posición ON y OFF después de que los
fotones inicien su camino.
F1, F2, F3, F4 - Filtros polarizadores que pueden dejar el fotón o detener su marcha,
lo que es detectado por los detectores D1, D2, D3 y D4.
C - Contador del número de fotones que llegan a cada uno de los detectores. En contra
de lo esperado (probabilidad del 25 % de que pase A y B, no pasen ni A y B, pase A
pero no B, pase B pero no A), pasan los dos Cono pasa ninguno, con el 50 % de pro-
bablidades para cada opción.

MANUAL DE KA13BALAH PRÁCTICA 431


• Causas y efectos se confunden, como se confunden pasado y
futuro. La distinción entre unos y otros es puramente ilusoria.
• El Universo es HOLISTICO, es decir, en cada partícula, por pequeña
que sea, está contenida toda la información del Universo entero.
Lo que percibimos como «múltiple» y «material» es realmente
el «reverso» de un «anverso» que es «único» y de naturaleza pura-
mente espiritual.
Otro experimento realizado en la Universidad de Munich ha con-
firmado el hallazgo de Alain Aspect. El experimento se refiere a la
clásica dualidad onda-partícula. Se demostró que el fotón se compor-
taba como onda si el dispositivo aleatorio movía el interruptor hacia
el detector de ondas, y como partícula en caso contrario. La dualidad
onda-partícula procede solamente de la ·observación del experimenta-
dor: la onda es la partícula, y la partícula es la onda.
Las palabras de El-Arabí cobran así toda su importancia. En efec-
to, ¿qué es el «nombre», sino una vibración sonora, es decir, una
ONDA? ¿Y qué es la «cosa nombrada» sino lo «concreto», lo «só-
lido» (aunque sea inmaterial), esto es, la PARTíCULA? Y ello nos
lleva a esta hipótesis de trabajo (a verificar experimentalmente):

En el nombre y en el tiempo de una persona está contenida


toda la información que la describe.

La investigación de esta hipótesis de trabajo es el primer objeti-


vo de este libro.

2. EL PROGRAMA DE VIDA: SUS ELEMENTOS

escendemos de toda una línea de antepasados, y somos hijos


D de nuestro tiempo. La confluencia de ambas líneas, la de la
sangre (que incluye, por supuesto, la del espacio, y está represen-
tada por los nombres) y la del tiempo, determina las coordenadas
a partir de las cuales nacemos, vivimos y morimos.

43 2 ViLLARRUBIA / H A UT / MILLERA
Para levantar el Árbol de la Vida personal nos bastan dos tipos de
datos: los que se refieren a nuestros nombres (personal, o nombre de
pila, y familiares, o apellidos paterno y materno), y los que se refieren a
nuestro tiempo, es decir, la fecha de nacimiento. La experiencia de más
de veinte años y los cientos de casos reales estudiados nos muestran
que no son necesarios ni el lugar ni la hora de nacimiento. Todos este
conjunto de datos, considerados aisladamente o agrupados de deter-
minada forma, constituyen los bloques, que en número de 13 nos per-
mitirán levantar el Árbol de la Vida personal. De momento nos fijare-
mos solamente en los aspectos numéricos, dejando para más adelante
el uso directo de letras y palabras hebreas.
A partir de los bloques, además, pueden obtenerse tres grupos adi-
cionales de datos que se refieren a la «vocación» y al «estilo» de reali-
zación de ciertos aspectos del Programa de Vida. Los datos referentes
a la «vocación» pueden también ser considerados, bien como relativos
al perfeccionamiento o refinamiento de determinados aspectos de la
personalidad, o bien como enlaces de tipo kármico, tanto hacia el pa-
sado como hacia el futuro. Puede haber Árboles que contengan sólo
aspectos de perfeccionamiento, pero no enlaces kármicos; también
puede haberlos con sólo enlaces kármicos, pero no aspectos de perfec-
cionamiento; y puede darse el caso de que haya en un mismo Árbol
aspectos de los dos tipos. Lo que no puede haber son Árboles que no
tengan ni aspectos de perfeccionamiento ni enlaces kármicos.
Veremos que casi siempre hay algunos aspectos que parecen
estar ausentes. Aparecen zonas vacías, sin ninguna indicación.
En este caso se trata de aspectos de nuestro Programa de Vida
que no están destinados a ser trabajados por nosotros. Sin em-
bargo, como estos aspectos siempre están activos, aunque no
seamos conscientes de ellos, quedan a cargo de unos socios muy
peculiares que colaboran con nosotros: nuestros ángeles custo-
dios, (a veces cómodos, a veces incómodos), también conoci-
dos como genios de la Kabbalah. En la II Parte hemos tenido
ocasión de conocerlos. Después, a la hora de la interpretación
del Árbol personal, investigaremos cuáles de ellos son nuestros
socios particulares y cómo podemos relacionarnos con ellos.
En este caso se utilizará la hora de nacimiento, aunque sólo
para la búsqueda de uno de los tres genios personales.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 433


Daremos diferentes nombres a todos estos aspectos. La multi-
plicidad de denominaciones pretende ayudar a comprender mejor
su naturaleza. Para ello recurriremos a diversas imágenes que nos
permitirán aproximarnos a su comprensión de forma no verbal.
Imaginemos en primer lugar un árbol. Tiene raíces, tronco, ra-
mas y hojas. Pero se trata de un árbol muy peculiar, pues da a
la vez las flores y los frutos. Pues bien: podemos comparar a ese
árbol con nuestro propio Árbol de la Vida. Las raíces, el tronco,
las ramas y las hojas son los aspectos que trabajamos a nivel ordi-
nario, aunque, como es lógico, desarrollando diferentes funciones
y con diferente intensidad. Las flores equivaldrían, con su perfu-
me y su fragilidad, a los aspectos al cuidado de nuestros ángeles.
Los frutos serían, por su parte, equivalentes a esos aspectos de
refinamiento o perfeccionamiento a los que antes aludíamos.
Y quedan las simientes, que pueden estar tanto en el árbol como ya
apartadas de él, y equivaldrían a los enlaces de tipo kármico.
Otra imagen que puede ayudarnos a la comprensión de la natu-
raleza de los aspectos recogidos en el Árbol es la de la enseñanza
que recibimos a lo largo de nuestra vida académica. Los aspectos
ordinarios de nuestro programa de vida equivaldrían al trabajo rea-
lizado durante el período que pasamos desde el parvulario hasta
que nos licenciamos en alguna especialidad profesional o carrera
universitaria. Tras la licenciatura o diplomatura, nos dedicarnos (es
un suponer) a recorrer mundo durante una especie de período sabá-
tico, a lo largo del cual recibimos otras enseñanzas completamente
diferentes a las que habíamos recibido en las aulas: serían los aspec-
tos vacíos del árbol, o aspectos al cuidado de los ángeles. Después
volvemos a la Universidad, pero ahora para hacer el doctorado,
y eso es lo que podrían ser los aspectos de perfeccionamiento o refi-
namiento. Y un día nos jubilamos, iniciando un período que se pa-
rece mucho al de la primera infancia, cuando nos llevaban a la guar-
dería y alguien se ocupaba de nuestras necesidades básicas: a eso
podrían corresponder los aspectos que hemos dado en equiparar a
las semillas en la anterior imagen del Árbol. A eso, y al período de la
guardería, cuando incluso ni sabíamos regular nuestros esfínteres.
Como vernos, no sólo aparecen en el Programa de Vida aspectos
de diferentes funciones, sino también de diferentes antigüedades,

434 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


de diferentes grados de experiencia. Junto a aspectos muy ancia-
nos, muy sabios, hay otros que no lo son tanto; los hay más juveni-
les, e incluso muy infantiles. ¿A qué se debe esto?
Podemos intentar una respuesta a esta pregunta apoyándonos
en tres ramas de la física moderna: la astrofísica, la mecánica cuán-
tica y la relatividad.
La astrofísica parece haber probado, sin lugar a dudas, que
este universo nació a partir de un punto primordial que estalló
y se expandió hasta ser lo que está siendo hoy. La física cuántica,
al demostrar que la dualidad onda-partícula no es tal, sino que
depende de la postura del observador, liga indisolublemente a la
conciencia con la energía y la materia. Y la relatividad, en sus dos
ramas, general y especial, demuestra que la energía y la materia
son intercambiables (lo que tuvieron la desgraciada ocasión de
comprobar los habitantes de Hiroshima o los vecinos de la central
de Chernobil) y que la gravedad afecta al tiempo: a mayor grave-
dad mayor lentitud en el transcurso del tiempo.
Unamos todo ello. Imaginemos un momento poco después del
Big-Bang. El universo, formado por una sopa de partículas en vio-
lenta ebullición, es todavía opaco, pues no tiene un tamaño sufi-
cientemente grande como para que su densidad lo haga transpa-
rente. En ese momento empiezan a aparecer las primeras arrugas
en el tiempo, como las ha llamado George Smoot. Las primeras
fluctuaciones cuánticas son las semillas de lo que un día serán ga-
laxias, soles, masas de materia oscura interestelar, planetas y ra-
diación libre.
Los mundos van naciendo. Algunas estrellas, muy masivas, tie-
nen una vida muy corta, estallando al cabo de poco más de cien
millones de años en cegadoras explosiones de supernova. Algunas
otras, por su parte, emiten una energía mayor que una galaxia en-
tera: serán llamadas quasares. Otras seguirán una vida más tran-
quila, y durante miles de millones de años no experimentarán cam-
bios aparentes; hasta que un día, quemado casi todo su hidrógeno,
se inflan y enrojecen, volatilizando los planetas de su sistema solar,
cuando lo tienen.
La materia se recicla así una y otra vez, haciendo nacer a los
elementos químicos más pesados, que forman parte de estrellas

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 435


de segunda, de tercera, de cuarta generación quizás .. . Parte de esa
materia va a parar a mundos más pequeños, en algunos de los cua-
les surgen las condiciones propicias para la aparición de la vida.
... Y aquí estamos, con una materia-energía-consciencia forma-
da por componentes de muy diversos orígenes: tal vez algo de no-
sotros haya estado alguna vez en el interior de un agujero negro,
y algo haya vagado durante eones por los espacios intergalácti-
cos. Probablemente, algo de esa materia-energía-consciencia pro-
cede de un marco de referencia relativista en la que la gravedad
apenas se ha hecho notar: su tiempo, por consiguiente, ha pasado
muy deprisa, por lo que ha transcurrido mucho desde el Origen.
Otra materia-energía-consciencia ha estado, por el contrario, con-
finada en un marco de referencia relativista de alta gravedad,
y su tiempo, por tanto, transcurrió muy despacio, lo que equivale
a decir que es una materia muy joven, casi infantil. Y entre ambas,
existen todas las situaciones intermedias imaginables.
Estamos, pues, hechos de pedazos de diferentes edades; por lo
que no es de extrañar que a veces estalle dentro de nosotros algún
que otro «conflicto generacional»... Esta guerra interior, a veces
sumamente incómoda, es sin embargo una poderosa herramienta
(si sabemos usarla adecuadamente) para descubrir y realizar nues-
tra misión en la vida, nuestro tikún.
Según expone Álvaro Cunqueiro en su obra Tesauros novas e
vellos (ver referencia bibliográfica), es posible hablar con los te-
soros, y de este idioma o lengua de los tesoros se podría llegar al
idioma inicial, primordial, a las primeras palabras que fueron las
de Dios Creador, y entonces se podría ser dueño del Universo.
Se refiere también a las historias chinas de los siete emperadores
míticos, los cuales, para poner orden en el Imperio, lo primero
que hacían eran poner orden en el lenguaje. Cuando había ade-
cuación entre las palabras y las cosas, todo iba bien, y el tesoro
de la paz y la abundancia era concedido a las gentes. Y añade
que se veía a la vez al Ave Fénix (símbolo de la resurrección) y
al Unicornio (símbolo del amor); pues muchas veces el tesoro es
mucho más que oro.
La mayoría de las lenguas que se hablan actualmente en el pla-
neta han perdido esa adecuación entre las palabras y las cosas, por

436 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


lo que no es de extrañar el estado de desorden reinante. Siguiendo
a la máxima sufí, ya citada, el camino a La Meca empieza a la puer-
ta de tu casa. Para llegar al orden (encontrar nuestro tikún) debe-
mos partir de nuestro desorden actual, reconocerlo y aceptar su
existencia, pues en caso contrario, ¿cómo puede un esclavo salir
de su esclavitud, si ignora que lo es? Por esta razón nos basamos
en nuestro propio idioma nativo y en nuestro propio calendario,
y sólo cuando hayamos extraído las consecuencias que se derivan
de nuestras coordenadas espacio-temporales estaremos en dispo-
sición de iniciar la búsqueda de nuestro tikún.

3. EL IDIOMA NATIVO Y LA SELECCIÓN DE ALFABETO

S omos el resultado de una serie de factores que pueden resu-


mirse en dos: los que se refieren al espacio, y los que se refieren
al tiempo. Los primeros harán que nazcamos en un determinado
país y dentro de una familia concreta, lo que significa la influencia
de aspectos genéticos, culturales y sociales. Los segundos nos han
permitido nacer en una época determinada y no en otra. Como se
deduce fácilmente, unos y otros están enlazados entre sí y se in-
fluyen mutuamente. Quienes hemos nacido en España, nos guste
o no, estamos influidos por la forma de ser española, sus costum-
bres, sus tradiciones (aunque sea para rechazarlas) y su idioma.
También nos influye el hecho de que el calendario que usamos
arranca de un acontecimiento y una doctrina religiosa como es el
cristianismo. Pero quienes han nacido en la tradición judía, islámi-
ca o hindú, por ejemplo, se basan en hechos y doctrinas religiosas
diferentes para establecer su propio calendario, por lo que la in-
fluencia temporal que reciban será diferente.
Es frecuente encontrar en diversos tratados de numerología
tablas con el valor numérico de las letras del alfabeto, y llama la
atención que esos valores correspondan al alfabeto inglés o francés,
los cuales tienen diferente número de letras que, por ejemplo, el cas-
tellano, el euskara o el italiano. La incógnita, sin embargo, se aclara
cuando en la portada de esos tratados leemos el nombre del autor:

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 43 7


casi sin excepción, resulta ser nativo de algún país en el que esos
idiomas, inglés o francés, son los oficiales. Sin entrar a discutir si la
transposición al castellano de los valores numéricos es o no válida,
nosotros seguiremos un sistema diferente, que tendrá en cuenta el
idioma nativo del sujeto cuyo Árbol se va a levantar. Ello planteará,
por lo demás, interesantes problemas en los casos de bilingüismo
(por ejemplo, en Cataluña) o cuando se haya producido un «tras-
plante cultural» como consecuencia de la emigración a otro país.
Debemos añadir, por otra parte, que no tenemos respuesta para
algunas preguntas: ¿Qué sucede con los idiomas cuya escritura es,
como el chino, ideográfica? Para el japonés, al fin y al cabo, queda-
ría un hipotético recurso de pasar la escritura en ideogramas (¡hay
1850 toyo kanjis!) al alfabeto silábico' en sus modalidades, hiragana
o katakana, pero en ese caso deberían ser los propios japoneses
quienes determinasen acerca de la validez de tal procedimiento.
Otra pregunta se refiere a los pueblos cuya cultura es oral, por
ejemplo los aborígenes australianos: ¿Qué puede hacerse al res-
pecto? En este caso, la respuesta sería «nada», pues tenemos serias
dudas de que a alguno de ellos se le ocurriese levantar su Árbol
de la Vida. En estos casos u otros similares, lo mejor es empezar
pidiendo su opinión al interesado, y aceptar de antemano la solu-
ción que él proponga, sea la que sea. Al fin y a cabo, los genios de
la Kabbalah están para casos como éstos, por lo que lo mejor es
dejar el asunto en sus manos.
Por tanto, nos centraremos exclusivamente en algunos de los
alfabetos occidentales más próximos a nuestra cultura, recogiendo
en la tabla XXII los pertenecientes a los idiomas español (castella-
no), en su doble versión anterior y posterior a 1995, año en que
la Real Academia de la Lengua suprimió como independientes la
«ch» y la «11»; el gallego y el euskara, que junto al catalán son idio-
mas oficiales en algunas comunidades de España; el alfabeto in-
ternacional, que incluye, además del catalán, el francés y el inglés;
el alemán, el italiano y el portugués, que tienen variaciones respec-
to al internacional; y finalmente el griego.

438 ViLLARRUBIA / HAUT / MI LLERA


Tabla XXII
Diferentes alfabetos occidentales y sus valores numéricos

1. Alfabeto castellano hasta 1994


Mult. l 2 3 4 5 6 7 8 9

X 1 A B e Ch D E F G H
X 10 1 J K L LI M N Ñ o
X 100 p Q R s T u V w X

X 1000 y z

2. Alfabeto castellano desde 1995


Mult. 1 2 3 4 5 6 7 8 9

X 1 A B e D E F G H 1
X 10 J K L M N Ñ o p Q
X 100 R s T u V w X y z

3. Alfabeto internacional (*)


Mult. 1 2 3 4 5 6 7 8 9
X1 A B e D E F G H 1

X10 J K L M N o p Q R
X 100 s T u V w X y z
(*) Aplicable al catalán, inglés y francés

4. Alfabeto euskara
Mult. 1 2 3 4 5 6 7 8 9
X 1 A B D E F G H 1 J
X 10 K L M N Ñ o p R s
X 100 T u X z

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 439


5. Alfabeto gallego
Mult. 1 2 3 4 5 6 7 8 9

X 1 A B e Ch D E F G H
X 10 1 L LI M N Ñ o p Q
X 100 R s T u V X z

6. Alfabeto italiano
Mult. 1 2 3 4 5 6 7 8 9
X 1 A B e D E F G 1 H
X 10 L M N o p Q R s T
X 100 u V z

7. Alfabeto portugués
Mult. 1 2 3 4 5 6 7 8 9
X 1 A B e D E F G H 1

X 10 J K L M N o p Q R
X 100 s T u V X y z

8. Alfabeto alemán
Mult. 1 2 3 4 5 6 7 8 9

X 1 A B e D E F G H 1

X 10 ) K L M N o p Q R
X 100 s T u V w X z

9. Alfabeto griego
Mult. l 2 3 4 5 6 7 íl 9
X 1 A B r 6 E 7. IT 0 T

X 10 K ¡\
y
M N - o TT p ¿
X 100 T cf, X ':P o

440 VILLARRUB IA / H AUT / M I LLERA


Es conveniente advertir que, según nuestra experiencia, cuando
se produce lo que podría llamarse un trasplante cultural, esto es,
el caso de una persona que, nacida en un determinado país pasa a
residir en otro de diferente idioma, determinados aspectos del su-
jeto se reflejan mediante el Árbol levantado con datos del alfabeto
del idioma nativo, mientras que otros aparecen como consecuen-
cia del alfabeto del idioma de adopción. Este último caso es noto-
rio sobre todo en la propensión a enfermedades, lo que induce a la
sospecha de que en la génesis psíquica de muchas de ellas tienen
más influencia los aspectos sociales que los nativos, o también el
choque entre las tendencias nativas y las sociales.

4. NORMAS PARA LA TOMA DE DATOS

• Según se indica en la sección anterior, los datos necesarios para


levantar el Árbol de la Vida personal son el nombre, los apelli-
dos y la fecha de nacimiento del sujeto. Respecto a estos datos
conviene hacer una serie de precisiones:
• En cuanto al nombre. Es aquél con el que figuramos inscritos en
el Registro Civil. Si se trata de un nombre compuesto, lo ade-
cuado es considerar todo el conjunto de nombres propios como
uno solo, sin tener en cuenta los espacios ni los guiones entre
sus distintos componentes. Sin embargo, es frecuente el caso de
personas que, inscritas o bautizadas con un nombre determina-
do, son llamadas de otra forma diferente. Lo adecuado en este
caso es preguntar al sujeto por su preferencia, aunque al final
es probable que haya que hacer más de un Árbol pues, como
veremos, un cambio en uno de los componentes (a los que lla-
maremos «bloques») modifica por completo la configuración.
En este caso, se trataría de algo similar a un ordenador que tie-
ne cargados en memoria varios programas, pudiendo invocarse
uno u otro según las necesidades operativas. Un caso que se
presenta en ocasiones es el de personas que, inscritas con un d e-
terminado nombre en el Registro Civil, fueron bautizadas con

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 441


otro diferente, por supuesto con valor numérico diferente de
aquél. En este caso, consideramos que el primero (y el árbol per-
sonal resultante) corresponde a los roles sociales, mientras que
el segundo, el de bautizo, a la parte interna del alma.
• En cuanto a los apellidos. Distinguiremos entre apellidos paterno
y materno. En aquellos países en los que la mujer pierde su ape-
llido cuando se casa, se tendrá en cuenta, no obstante, el apellido
materno, pues salvo casos específicos de clonación o encarna-
ción de origen divino (no tenemos experiencia sobre estos casos,
así que no podemos aportar ninguna solución), lo normal es que
cada uno sea hijo de su padre y de su madre, y tenga por tanto ge-
nes de ambos al 50 por 100. En los casos de adopción considera-
remos los apellidos otorgados por los adoptantes, y lo mismo se
hará con los hijos de madre soltera, la cual es frecuente que ponga
a su hijo sus mismos apellidos, en el mismo orden o en el inverso.
Pero si con estos datos la interpretación del árbol personal tuvie-
se manifiestas divergencias con lo que el sujeto sabe (o cree saber)
de sí mismo, quizá pueda ser necesario considerar también los
apellidos nativos, si es que se conocen. En todo caso, los apelli-
dos compuestos se considerarán como uno solo, incluyendo en
cada uno las partículas que les anteceden, tales como «y» o «de».
En algunos países, como Portugal, el apellido materno antecede
al paterno; cuando esto suceda se respetará ese orden.
• En cuanto a la fecha de nacimiento. Separaremos el día, el mes
(expresado en cifras) y el año, que escribiremos con todas sus
cifras. Debemos tener en cuenta la existencia de distintos ca-
lendarios, y deberá ser el propio sujeto el que determine cuál
es el que prefiere usar. Nos referimos aquí a los problemas de
«falsa identidad» que pueden producirse cuando la fecha de
nacimiento real no es la que figura en el Registro Civil; en este
caso es frecuente un sendero 16 con cargas especiales (ver más
adelante este concepto).
Si no disponemos de una plantilla preparada para la toma
de datos, puede usarse una hoja blanca tamaño A-4 o similar,
escribiendo los datos anteriores en un solo renglón en la parte
superior de la hoja, y dibujando una línea continua debajo de
cada uno de los seis datos: nombre, primer apellido, segundo

442 V11.1. ARRUBIA / HAUT / MILLERA


apellido, día, mes y año, por este orden, de izquierda a derecha.
Estos seis datos constituyen los seis primeros bloques, o bloques
nativos. Veamos en la sección siguiente su desarrollo.

5. LAS FAMILIAS DE NÚMEROS

1 Árbol de la Vida personal es un diagrama en el que los as-


E pectos que se ponen de manifiesto como consecuencia del de-
sarrollo de los valores numéricos del nombre, apellidos y fecha de
nacimiento, se hacen coincidir con alguno o algunos de los sen-
deros subjetivos. Por lo tanto, hay un máximo de 22 posiciones a
las que se pueden trasladar dichos datos, ya que 22 son los sende-
ros subjetivos del Árbol de la Vida. De la configuración resultante
aparecerán los demás datos: sefirot, Tríadas, aspectos, corrientes,
trasvases y balances de energías, etc.
En muchas ocasiones, sin embargo, los números resultantes son
mayores que 22, y algunos otros, los más pequeños, casi nunca
aparecen directamente, o lo hacen con menor frecuencia relativa
que los demás. De ahí que sea necesario corregir estas desviacio-
nes y efectuar determinadas operaciones con los datos, de las cua-
les surge el concepto de las familias de números. ¿Qué es una fa-
milia de números?
A los efectos de la presente obra, consideramos que dos o tres
números enteros positivos, comprendidos entre el 1 y el 22 ambos
inclusive, son de la misma familia, cuando sumando sus cifras
componentes una o dos veces, el resultado arroja un mismo dígi-
to. Hay, pues, nueve familias de números, ya que ninguna suma
de números positivos puede dar como resultado el cero. Estamos
partiendo de un supuesto, y esto conviene advertirlo previa-
mente: operamos con un sistema numérico de base 10 y notación
posicional, que es el usado universalmente por su comodidad y
sencillez, pero hay otros sistemas numéricos; de hecho, es po-
sible la existencia de infinitos sistemas numéricos. Recordemos

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 443


la numeración romana, usando algunas letras mayúsculas, que
aunque se sigue usando para determinadas aplicaciones, es su-
mamente incómoda, e inadecuada para cálculos de una mínima
complejidad. Las propias letras hebreas, según hemos visto, pue-
den emplearse como números, y operan en base 10, pero no con
notación posicional. Los ordenadores, por su parte, sí funcionan
con un sistema de este tipo, pero no en base 10, sino en base 2 o
en la de alguna de sus potencias, 8 o 16. Aclaremos, para los no
versados en matemáticas, que la notación posicional hace que se
tenga en cuenta, no sólo la cifra, sino también el lugar que ocupa
en el número: no es lo mismo 345 que 543. En cambio, usando
las letras hebreas como sistema numérico de base 10, W~i'T valdrá
siempre 345, cualquiera que sea el' orden que demos a estas le-
tras: QWi'T, Wi'T~, i'TW~, Qi'TW, i'T~W.
Hay tres tipos de familias de números: secuencial, de tres ele-
mentos o números, formado por una sola familia, la del 1; alter-
nativas, también de tres elementos o números, formado por tres
familias, las del 2, 3 y 4; y simples, las cinco familias restantes, 5,
6, 7, 8 y 9. Los nombres dados a cada tipo de familia son la conse-
cuencia de su desarrollo:

A) Tipo secuencial
Familia del 1: formada por los números 19, 10 y l.

19 1+9= 10:

B) Tipos alternativos
Familia del 2: formada por los números 20, 11 y 2.

20 2+0=
'2
,11 1+1=

No se puede llegar al 11 partiendo del 20, ni al 20


partiendo del 11.

444 V1UARRUBIA / HAUT / MILLERA


Familia del 3: formada por los números 21, 12 y 3.

2+1=

12 1+2=

No se puede llegar al 12 partiendo del 21, ni al 21 partiendo


del 12.

Familia del 4: formada por los números 22, 13 y 4.

22 2+2=
4.
1+3=

No se puede llegar al 13 partiendo del 22, ni al 22 partiendo


del 13.

C) Tipos simples
Familia del 5: formada por los números 14 y 5.

14 1+4= 5
--~,

Familia del 6: formada por los números 15 y 6.

1+5= 6 .

Familia del 7: formada por los números 16 y 7.

16 1+6= 7

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 445


Familia del 8: formada por los números 17 y 8.

;17,, 1+7=

Familia del 9: formada por los números 18 y 9.

18 1 +8=

La combinación de números de dos familias proporciona números


de otra familia diferente. Se exceptúa el caso de que una de las dos fa-
milias sea la del 9, en cuyo caso el resultado siempre será uno o varios
números de la otra familia con la que está combinando la del 9. Las 45
combinaciones posibles son las siguientes:

Tabla XXIII
Combinaciones de familias de números
,, ,'

Fam.A Fain.B ·. Fam,C Fam.A. Fam.B Fam.C Fam.A Fam;B Fa·m.C


1 1 2
' 2 8 1 5 5 ', . ' ,
.1 ., X

1 2 3 2 9 2 ,5 6 2

1 3 4 3 3 6 •, 5 7 3

1 4 5 3 4 7 5 8 ; 4
'
1, ,
1 5 6 3 5 8 5 ,9 5
,.
' 1 6 7 3 6 9 6 ,,
6 3, " ,

,;
1 7 8 3 7 1 6 ,7 "4
,,,
' , ,

,;
1 8 9 3 8 2 '' 6' ,· ,c'. 1 8 5:,,\
\,
1 9 1 3 9 3 6, 9v 6
2 2 4 4 4 8 7 7 5 1•
" '
,, • , , ,

2 3 5 4 5 9 ,, 7 8 6 , ,
,. , '<,
2 4 e- 6 4 6 1 ·7 9 7
'
·2 •. 5 7 4 7 2 ;, 8 8 7
'
2 6 8 4 8 3 8 ' 9 8 '
,, 2 7 9 4 9 4 9 9 9

446 VJLLARRUBIA / H AUT / MILLERA


El cuadro anterior puede resultar de utilidad para verificar las
operaciones de combinación de bloques tomados de dos en dos,
tal como veremos en la sección siguiente. Si se tratase de compro-
bar la combinación de tres bloques, el proceso se haría en dos fases:
primero verificaríamos cual es el resultado de la combinación de los
dos primeros, y después combinaríamos dicho resultado con el ter-
cero de los bloques, obteniendo un nuevo resultado que también ve-
rificaríamos. Así, si suponemos que las familias a que corresponden
cada uno de los tres bloques son el 7, el 3 y el 5 (resultado final 6),
combinaríamos en primer lugar los dos primeros bloques (7 y 3, re-
sultado 1), y después el tercero (5, con el 1, procedente de los dos an-
teriores: resultado 6). En cualquier caso, la mayoría de las personas
podrán prescindir de esta fácil verificación.
Las familias de números son algo más que una simple curiosi-
dad matemática. Como veremos en la IV parte, la interpretación
del Árbol personal utiliza en muchas ocasiones la resonancia entre
los números de la misma familia para obtener una información
riquísima sobre el cuerpo y el alma del sujeto estudiado. Y no sólo
sobre ellos, sino también sobre sus relaciones familiares y sociales,
sus tendencias, sus ciclos, sus actitudes y sus aptitudes.

Los números ocultos

Denominamos número oculto a aquél que completa (o al menos


complementa de forma parcial) una familia de números median-
te una operación matemática especial, que usa los factores de las
columnas encabezadas por la expresión Mult. en los cuadros de la
Tabla XXII. Su desarrollo y forma de cálculo se recogen en la sec-
ción siguiente, apartados 6.2.H; 6.5.C y 6.5.D; 6.7.D; 6.8.D; y 6.9.D.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 447


6. Los BLOQUES Y su DESARROLLO

lamamos bloques a cada uno de los elementos que constituyen el


L conjunto de datos de una persona, a partir de los cuales construire-
mos el Árbol personal, o Mapa del Universo Interior. Estos bloques son
13 principales (identificados por números del 1 al 13) y tres adicionales,
a los que llamamos «vocacionales» (identificados por letras, A, B y C):

A) Bloques Nativos Originales:

Bloque 1. Nombre.
Bloque 2. Primer apellido, nombre familiar de la línea paterna.
Bloque 3. Segundo apellido, nombre familiar de la lmea materna.
(Ver .respecto a estos tres primeros füoques las
observaciones .reseñadas en la sección 4 de esta m Parte).
Bloque 4. Día de nacimiento.
Bloque 5. Mes de nacimiento, expresado por sus cifras.
Bloque 6. Año de nacimiento, con todas sus cifras.

B) Bloques Nativos Derivados:

Bloque 7. Formado por suma de números resultantes de com-


binación o combinaciones de los procedentes de los
bloques 1, 2 y 3.
Bloque 8. Formado por suma de números resultantes de combina-
ción o combinaciones de los procedentes de los bloques
4, 5 y 6.
Bloque 9. Formado por suma de números .resultantes de combinación
o combinaciones de los procedentes de los bloques 7 y 8.

C) Bloques Sociales Derivados:

Bloque 10. Formado por suma de números resultantes de com-


binación o combinaciones de los procedentes de los
bloques 1 y 2. (Bloque de adolescencia).
Bloque 11. Formado por suma de números resultantes de com-
binación o combinaciones de los procedentes de los
bloques 2 y 3. (Bloque escolar).

448 V11.1.ARRUBIA / HAUT / M 1LLERA


D) Bloques Cíclicos Derivados:

Bloque 12. Formado por suma de números resultantes de com-


binación o combinaciones de los procedentes de los
bloques 4 y 5. (Bloque del ciclo corto).
Bloque13. Formado por suma de números resultantes de com-
binación o combinaciones de los procedentes de los
bloques 5 y 6. (Bloque del ciclo largo).

E) Bloques adicionales o Vocacionales. En este caso se designan por una


letra y no por un número, y se describen con diferente tipo de letra,
para indicar su diferente naturaleza respecto a los trece anteriores:

Bloque A. Conjunto formado por suma de números resultantes


de combinación o combinaciones de los procedentes
de los bloques 10 y 11.
Bloque B. Conjunto formado por suma de números resultantes
de combinación o combinaciones de los procedentes
de los bloques 12 y 13.
Bloque C. Conjunto formado por suma de números resultantes
de combinación o combinaciones de los procedeqtes
de los bloques A y B.

Con el fin de facilitar la toma de datos, se sugiere usar plantillas


similares a la que se presenta esquemáticamente en la figura 35.
Las normas para la toma de datos y el desarrollo de los bloques
son las siguientes:

6. 1. Indicaciones previas
6. 1. 1. Actitud

• No se levantará ningún Árbol nativo sin permiso del interesado.


Este principio admite, sin embargo, algunas excepciones:
• Cuando se trate de personajes públicos, cuyos datos sean noto-
rios, y sólo con fines de práctica y aprendizaje. Esta excepción,

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 449


sin embargo, se aplicará sólo en último extremo, si no hay otra
posibilidad de práctica. Puede hacerse, sin embargo, con perso-
najes históricos ya fallecidos sin ninguna limitación.
• Niños recién nacidos, para estudiar las configuraciones más
favorables en función del nombre, y siempre que el estudio
haya sido solicitado por los padres. No se hará este estudio si
uno de los progenitores se opone a ello. En este caso, así como
en todos los que siguen, es necesaria la confidencialidad de los
datos y de los resultados.
• Confines terapéuticos, por terapeutas profesionales, y sólo cuan-
do la petición de permiso previo del paciente pudiese poner en
peligro, en opinión del terapeuta, la eficacia del tratamiento.
• En selección de personal para- empresas y entidades, con la
condición de que los datos y Árboles personales de los candi-
datos no admitidos se destruyan al final del proceso de selec-
ción y el candidato admitido sea informado de la prueba rea-
lizada. En todo caso, un árbol personal, por sí mismo, no debe
considerarse nunca como un elemento decisorio, y sí como un
apoyo a otras pruebas que se les realicen a los candidatos al
puesto de trabajo.
• En casos en que se estime grave peligro de no llevarse a cabo
el estudio, y en este caso el autor de dicho estudio se hará res-
ponsable de sus consecuencias.

6.1.2. Condiciones operativas

• No se puede repetir número en el mismo bloque. Es en cam-


bio válido que un mismo número aparezca en varios bloques
del mismo Árbol.
• Todos los números del mismo bloque, cualquiera que sea la
forma en que se hayan calculado, deberán pertenecer a la mis-
ma familia de números. Si no es así, es que se ha producido un
error en los cálculos, que deben ser reiniciados en el punto en
que se produjo el error.
• Debe intentarse completar familias de números en cada blo-
que, mediante los procedimientos que se describen en los
apartados siguientes.

450 VILLARRUB IA / HAUT / MILLERA


Nombre Núm.

2° apellido

Fecha de nacimient

Nombre: Valor original


Valores Bloque 1 °
1•• apellido: Valor original
Valores Bloque 2 °
"' apellido: Valor original
Valores Bloque 3 °
Dfa: Valor original
Valores Bloque 4
Mes: Valor original
Valores Bloque 5
Año: Valor original
Valores Bloque 6

BLOQUES VOCACIONALES ACENTOS


Valores Bloque A (BL. 1O+ BL. 11) Valores de las vocales
Valores Bloque B (BL. 12+ BL. 13) do d:: ,.. re
Valores Bloque C (BL. A+ BL. B) "" --= Suma de valores
Reduc.al22 fg

Figura 35
Modelo de hoja de toma de datos para levantar el Árbol personal

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 451


• No es recomendable hacer los cálculos de los números de los
bloques con ordenador o máquina calculadora, pues de esa
forma no se podría detectar, a través de nuestros errores, los
bloqueos inconscientes que el sujeto puede estar oponiendo en
un área concreta de su Árbol o de sus fuentes de información.
• Los bloques se calcularán siempre siguiendo su número de
orden, primero los designados por números y después los que
se indican mediante letras.
• Cuando se trate de bloques combinados, se verificará que la
combinación de los dos que se están utilizando produce como
resultado números de la familia correcta, usando para ello
el cuadro que aparece al final de la sección 5 anterior (Tabla
XXIII).

6.2. Datos y cálculo de los bloques 1, 2 y 3 (nombre


y apellidos)

A) Respecto a los bloques nativos originales procedentes del


nombre y apellidos, se utilizará el alfabeto que corresponda,
según el idioma nativo del sujeto, o el que él mismo designe.
Si se tratase de alfabeto castellano, se aplicará el del cuadro I
para los nacidos hasta el 31 de diciembre de 1994, y el del
cuadro II para los nacidos después de dicha fecha. Si el suje-
to tuviese otro idioma nativo, lo mejor es pedirle que escriba
previamente el alfabeto de dicho idioma.
B) El valor numérico de cada letra es el que figura en el cuadro
alfabético correspondiente encabezando la columna en que la
letra esté colocada.
C) El valor numérico de cada uno de los bloques 1, 2 y 3 es la suma
de los valores numéricos de las letras que lo componen. Se in-
dicará, si se sigue el modelo de plantilla de la figura 35, en la
casilla (a) de cada bloque. En lo sucesivo, todas las referencias a
casillas y sus letras se refieren a esta figura.
D) Si la suma es igual o menor que 22, el resultado se conside-
rará válido, y se anotará en la casilla (b). Si, por el contrario,
es mayor que 22, se sumarán sus cifras, y el resultado, ya igual
o menor que 22, se anotará en la casilla (b).

452 VILLARRU BIA / HAUT / MILLERA


E) Si el resultado anotado en la casilla (b), igual o menor que 22,
es a la vez igual o mayor que 10, se sumarán sus cifras, y este
segundo resultado, considerado también válido, se anotará en
la casilla (c).
F) Si el resultado anotado en la casilla (e) es igual o mayor que 10,
se volverán a sumar sus cifras, y este tercer resultado, también
válido, se anotará en la casilla (d).
G) Se examinará si la familia de números reseñada en las casillas (b),
(c) y (d) está completa. Si lo está, se pasará al bloque siguiente.
H) Si por el contrario no lo está, se buscará un número oculto, que
puede o no existir. Para ello, se volverá a calcular el valor numé-
rico del bloque con que se esté trabajando (Bloque 1, nombre;
Bloque 2, primer apellido; o Bloque 3, segundo apellido), pero
ahora usando los factores multiplicadores que aparecen a la iz-
quierda del cuadro alfabético que se esté usando. Este factor
multiplicador significa que el valor que tiene cada letra, indica-
do en lo alto de la columna en la que esté situada, se multiplica
por el factor que aparece a la izquierda en la fila de la propia le-
tra. Así, por ejemplo, si calculamos con alfabeto castellano anti-
guo (cuadro I) el apellido Ortega, encontraremos un valor de 32,
que pasaremos a la casilla (a) de la ficha. Como este valor es
mayor que 22, sumamos sus cifras y obtenemos 5, que pasamos
a la casilla (b). En este punto, es evidente que la familia no está
completa, puesto que falta el 14. Para averiguar si este último
número, el 14, está oculto, hacemos las siguientes operaciones:

Letra Valor Multiplicador Resultado


o 9 X 10 90
R 3 X 100 = 300
T 5 X 100 = 500
E 6 X 1 = 6
G 8 X 1 8
A 1 X 1 1

Total 905
El resultado, 905, es mayor que 22, pero sumando sus cifras
(9 +O+ 5) obtenemos 14, el número que completa la familia.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 453


Cuando un número se obtiene por este procedimiento y no
por el anterior, decimos que es oculto y también válido, hecho
que indicaríamos en la casilla correspondiente, en este caso,
la (c), escribiendo el 14 entre paréntesis, de esta forma: (14).
El oculto así encontrado se anota, pues, entre paréntesis, en la
siguiente casilla libre del bloque que se esté calculando, (c) o
(d). Todos los ocultos, cualquiera que sea el bloque en el que
aparezcan, son siempre números de dos cifras.
I) Si al realizar una operación como la anterior no completa-
mos la familia de números, sino que volvemos a encontrar-
nos con alguno de los que ya ocupaban las casillas (b) y en
su caso (c), obtenidos por el sistema simple (párrafos an-
teriores, 2.D y 2.E), consideramos que no existen números
ocultos, y pasamos al bloque siguiente.
J) Es normal que, cuando se realiza este tipo de operaciones
por primera vez, se produzcan errores. Esto se debe en par-
te a que nos enfrentamos a un método nuevo, que obliga a
disciplinarnos mentalmente, pero también a que aparezcan
resistencias inconscientes, pues el ego recela (y tiene toda
la razón) que su juego va a quedar por completo al descu-
bierto; en otras palabras, que el espejito de la madrastra de
Blancanieves no va a seguir engañándole. Acéptense estos
errores como parte del juego, pero tómese buena nota de
dónde se producen, pues ello nos dará pistas adicionales a
la hora de interpretar.
K) Si en un bloque aparecen números de diferentes familias,
es que nos hemos equivocado, por lo que hay que reiniciar
todos los cálculos. N o obstante, tomaremos también nota
del punto exacto del cálculo en que se originó el error, pues
también nos dará pistas valiosas en la interpretación. Esta
es la razón que hace recomendable hacer esta parte de los
cálculos, hasta completar los 16 bloques, sin la ayuda de un
ordenador, ya que nos restaría información, pues estas má-
quinas suelen tener la mala costumbre de no equivocarse.
L) Una vez completadas las familias de números de cada uno
de los bloques 1, 2 y 3, sea o no con ocultos, o constatado
que no se puede completar, se pasará al bloque siguiente.

454 V !LLARRUB IA / H AUT / M ILLERA


6.3. Datos y cálculo de los bloques 4 y 5 (día y mes de
nacimiento)
A) En este caso, la operativa es muy sencilla. Se indicarán el día
y mes de nacimiento en las casillas marcadas con la letra (e).
En cuanto al día, si es mayor que 22, se reduce sumando sus
cifras, y si el resultado es mayor que 10, se vuelven a sumar.
Los primeros números válidos obtenidos se escribirán en la
casilla (f), y si aparecen más números, también válidos, de la
misma familia por este sistema, a las (g) y (h).
B) En cuanto al mes, se copiará su número directamente en su
casilla (f), además de en la original (e), y si tiene dos cifras,
se sumarán éstas y se pasará el resultado a la casilla (g).
C) Los bloques 4 y 5 no tienen números ocultos.
D) Una vez completado cada uno de estos bloques o constatado
que no se puede completar, se pasará al bloque siguiente.

6.4. Datos y cálculo del bloque 6 (año de nacimiento)


A) Se anotará con sus cuatro cifras en la casilla (i), y se sumarán
éstas. Si el resultado es mayor que 22, se volverán a sumar,
como en los casos anteriores, anotando los resultados en las
casillas (j) y (k), y cuando proceda, en la (1).
B) El Bloque 6 no tiene números ocultos.
C) Una vez completado el Bloque 6, o constatado que no se
puede completar, se pasará a calcular el Bloque 7.

6.5. Cálculo del Bloque 7 (combinado de nombre y


apellidos)
A) Se tomará un número cualquiera no oculto (y solamente
uno) de cada uno de los bloques 1, 2 y 3, y se sumarán. Si el
resultado es menor que 22, se considerará válido y se ano-
tará en la casilla (m). Si por el contrario es mayor que 22,
se reducirá sumando sus cifras, y este segundo resulta-
do, ya menor de 22, se considerará válido y se anotará en
la casilla (m).

MANUAL DE KAllBAI.AH PRÁCTICA 455


B) Si el número anotado en la casilla (m) tiene dos cifras, se su-
marán, y este resultado se anotará en la casilla (n) como váli-
do. Si este último tiene también dos cifras, se sumarán éstas,
y este resultado, también válido, se anotará en la casilla (ñ).
C) Si no se ha completado la familia de números en el Bloque 7,
se buscará otra combinación de números no ocultos, uno
solo de cada uno de los bloques 1, 2 y 3, tantas veces como
sea necesario para encontrar el número que completa la fa-
milia o para constatar que no se puede completar. Cada vez
que aparezca un número de la familia que no hubiera apare-
cido antes en el bloque, se anotará como válido en la casilla
correspondiente, (n) o (ñ).
D) Si después de todas las operadones anteriores no se ha com-
pletado la familia de números del bloque, se buscarán nuevas
combinaciones, pero usando ahora, y no antes, los ocultos que
pueda haber en los bloques 1, 2 y 3. Si como consecuencia de
esta búsqueda se completa la familia, este número es un oculto
derivado, y tal como hacíamos en 2.H, lo anotamos en la casilla
correspondiente, (n) o (ñ), entre paréntesis.
E) Una vez completada la familia de números del bloque 7,
sea o no con ocultos, o constatado que no se puede comple-
tar, se pasará al bloque 8.

6.6. Cálculo del Bloque 8 (combinado de fecha de


nacimiento)
A) Se tomará un número cualquiera (y solamente uno) de cada
uno de los bloques 4, 5 y 6, y se sumarán. Si el resultado
es mayor que 22, se reducirá sumando sus cifras, y este se-
gundo resultado, ya menor de 22, se considerará válido y se
anotará en la casilla (o).
B) Si el número anotado en la casilla (o) tiene dos cifras,
se sumarán, y este resultado se anotará en la casilla (p) como
válido. Si este último tiene también dos cifras, se sumarán
éstas, y este resultado se anotará en la casilla (q).
C) Si no se ha completado la familia de números en el Bloque 8,
buscar otra combinación de números, uno solo de cada uno

456 VIJ.LARRUBIA / HAUT / MILLERA


de los bloques 4, 5 y 6, tantas veces como sea necesario para
encontrar el número que completa la familia o para consta-
tar que no se puede completar.
D) El bloque 8 no tiene números ocultos.
E) Una vez completada familia de números, sea o no con ocul-
tos, o constatado que no se puede completar, se pasará al
bloque 9.

6.7. Cálculo del Bloque 9 (combinado de los bloques 7 y 8)

A) Se tomará un número cualquiera no oculto (y solamente


uno) de cada uno de los bloques 7 y 8, y se sumarán. Si el
resultado es mayor que 22, se reducirá sumando sus cifras,
y este segundo resultado, ya menor de 22, se considerará
válido y se anotará en la casilla (r).
B) Si el número anotado en la casilla (r) tiene dos cifras, se su-
marán, y este resultado se anotará en la casilla (s) como vá-
lido. Si este último tiene también dos cifras, se sumarán, y
este resultado, también válido, se anotará en la casilla (t).
C) Si no se ha completado la familia de números en el Bloque 9,
se buscará otra combinación de números no ocultos, uno solo
de cada uno de los bloques 7 y 8, tantas veces como sea nece-
sario para encontrar el número que completa la familia o para
constatar que no se puede completar. Cada vez que aparezca
un número de la familia que antes no estaba, se anotará como
válido en la casilla correspondiente, (s) o (t).
D) Buscar combinaciones de números usando ahora, y no an-
tes, los ocultos que pueda haber en el bloque 7, con los del
bloque 8 (recordemos que en este bloque no puede haber
ocultos). Si, como consecuencia de esta búsqueda se com-
pleta la familia, este número es un oculto derivado, y tal
como hacíamos en casos anteriores, lo anotamos en la casilla
correspondiente, (s) o (t), entre paréntesis.
E) Una vez completada la familia de números del bloque 9, sea
o no con ocultos, o constatado que no se puede completar,
se pasará al bloque 10.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 457


6.8. Cálculo del Bloque 10 (combinado de los bloques 1 y 2)

A) Se tomará un número cualquiera no oculto (y solamente


uno) de cada uno de los bloques 1 y 2, y se sumarán. Si el
resultado es mayor que 22, se reducirá sumando sus cifras,
y este resultado, ya menor de 22, se considerará válido y se
anotará en la casilla (u).
B) Si el número anotado en la casilla (u) tiene dos cifras, se suma-
rán, y este resultado se anotará en la casilla (v) como válido.
Si este último tiene también dos cifras, se sumarán, y este cuarto
resultado, también válido, se anotará en la casilla (w).
C) Si no se ha completado la familia de números en el Bloque 10,
se buscará otra combinación de números no ocultos, uno solo
de cada uno de los bloques 1 y 2, tantas veces como sea nece-
sario para encontrar el número que completa la familia o para
constatar que no se puede completar. Cada vez que aparezca
un número de la familia que antes no estaba, se anotará como
válido en la casilla correspondiente, (v) o (w).
D) Buscar combinaciones de números usando ahora, y no an-
tes, los ocultos que pueda haber en los bloques 1 y 2. Si,
como consecuencia de esta búsqueda, se completa la fami-
lia, este número es un oculto derivado, y tal como hacíamos
en casos anteriores, lo anotamos en la casilla correspondien-
te, (v) o (w), entre paréntesis.
E) Una vez completada la familia de números del bloque 10,
sea o no con ocultos, o constatado que no se puede comple-
tar, se pasará al bloque 11.

6.9. Cálculo del Bloque 11 (combinado de los bloques 2 y 3)

A) Se tomará un número cualquiera no oculto (y solamente


uno) de cada uno de los bloques 2 y 3, y se sumarán. Si el
resultado es mayor que 22, se reducirá sumando sus cifras,
y este resultado, ya menor de 22, se considerará válido y se
anotará en la casilla (x).
B) Si el número anotado en la casilla (x) tiene dos cifras, se suma-
rán, y este resultado se anotará en la casilla (y) como válido.

458 V !LLARRUB IA / HAUT / M!LLERA


Si este último tiene también dos cifras, se sumarán, y este cuarto
resultado, también válido, se anotará en la casilla (z).
C) Si no se ha completado la familia de números en el Bloque 11,
se buscará otra combinación de números no ocultos, uno
solo de cada uno de los bloques 2 y 3, tantas veces como
sea necesario para encontrar el número que completa la
familia o para constatar que no se puede completar. Cada
vez que aparezca un número de la familia que antes no
estaba, se anotará corno válido en la casilla correspon-
diente, (y) o (z).
D) Buscar combinaciones de números usando ahora, y no
antes, los ocultos que pueda haber en los bloques 2 y 3.
Si, como consecuencia de esta búsqueda se completa la fa-
milia, este número es un oculto derivado, y tal como hacía-
mos en casos anteriores, lo anotamos en la casilla correspon-
diente, (y) o (z), entre paréntesis.
E) Una vez completada la familia de números del bloque 11,
sea o no con ocultos, o constatado que no se puede comple-
tar, se pasará al bloque 12.

6.1 O. Cálculo del Bloque 12 (combinado de los bloques 4 y 5)


A) Se tomará un número cualquiera (y solamente uno) de cada
uno de los bloques 4 y 5, y se sumarán. Si el resultado es
mayor que 22, se reducirá sumando sus cifras, y este resul-
tado, ya menor de 22, se considerará válido y se anotará en
la casilla (aa).
B) Si el número anotado en la casilla (aa) tiene dos cifras, se
sumarán, y este resultado se anotará en la casilla (ab) como
válido. Si este último tiene también dos cifras, se sumarán,
y este cuarto resultado, también válido, se anotará en la
casilla (ac).
C) Si no se ha completado la familia de números en el Bloque 12,
se buscará otra combinación de números, uno solo de cada
uno de los bloques 4 y 5, tantas veces como sea necesario
para encontrar el número que completa la familia o para
constatar que no se puede completar. Cada vez que aparez-

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 459


ca un número de la familia que antes no estaba, se anotará
como válido en la casilla correspondiente, (ab) o (ac).
D) Una vez completada la familia de números del bloque 12, o
constatado que no se puede completar, se pasará al bloque 13.
E) En este bloque no pueden aparecer números ocultos.

6.11. Cálculo del Bloque 13 (combinado de los bloques 5 y 6)

A) Se tomará un número cualquiera (y solamente uno) de cada


uno de los bloques 5 y 6, y se sumarán. Si el resultado es mayor
que 22, se reducirá sumando sus cifras, y este resultado, ya me-
nor de 22, se considerará válido y se anotará en la casilla (ba).
B) Si el número anotado en la casilla (ba) tiene dos cifras, se suma-
rán, y este resultado se anotará en la casilla (bb) como válido.
Si este último tiene también dos cifras, se sumarán, y este cuar-
to resultado, también válido, se anotará en la casilla (be).
C) Si no se ha completado la familia de números en el Bloque 13,
se buscará otra combinación de números, uno solo de cada
uno de los bloques 5 y 6, tantas veces como sea necesario para
encontrar el número que completa la familia o para constatar
que no se puede completar. Cada vez que aparezca un núme-
ro de la familia que antes no estaba, se anotará como válido
en la casilla correspondiente, (bb) o (be).
D) Una vez completada la familia de números del bloque 13, o
constatado que no se puede completar, se pasará al bloque A.
E) En este bloque no pueden aparecer números ocultos.

6.12. Cálculo del Bloque A (combinado de los


bloques 1O y 11)

A) Se tomará un número cualquiera (y solamente uno) de cada


uno de los bloques 10 y 11, y se sumarán. En este caso pueden
usarse, si fuere necesario, números ocultos de dichos bloques.
Si el resultado es mayor que 22, se reducirá sumando sus ci-
fras, y este resultado, ya menor de 22, se considerará válido
y se anotará en la casilla (ca). No importa que se hayan o no
utilizado números ocultos de los bloques 10 u 11.

460 V !LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


B) Si el número anotado en la casilla (ca) tiene dos cifras, se suma-
rán, y este resultado se anotará en la casilla (cb) como válido.
Si este último tiene también dos cifras, se sumarán, y este cuarto
resultado, también válido, se anotará en la casilla (ce).
C) Si no se ha completado la familia de números en el Bloque A,
se buscará otra combinación de números, uno solo de cada
uno de los bloques 10 y 11, tantas veces como sea necesa-
rio para encontrar el número que completa la familia o para
constatar que no se puede completar. Cada vez que aparezca
un número de la familia que antes no estaba, se anotará como
válido en la casilla correspondiente, (cb) o (ce).
D) Una vez completada la familia de números del bloque A, o
constatado que no se puede completar, se pasará al bloque B.

6.13. Cálculo del Bloque B (combinado de los


bloques 12 y 13)

A) Se tomará un número cualquiera (y solamente uno) de cada


uno de los bloques 12 y 13, y se sumarán. En este caso, como
en el del bloque A, pueden usarse, si fuere necesario, núme-
ros ocultos de dichos bloques. Si el resultado es mayor que 22,
se reducirá sumando sus cifras, y este resultado, ya menor
de 22, se considerará válido y se anotará en la casilla (da).
B) Si el número anotado en la casilla (da) tiene dos cifras, se suma-
rán, y este resultado se anotará en la casilla (db) como válido.
Si este último tiene también dos cifras, se sumarán, y este cuarto
resultado, también válido, se anotará en la casilla (de).
C) Si no se ha completado la familia de números en el Bloque B,
se buscará otra combinación de números, uno solo de cada
uno de los bloques 12 y 13, tantas veces como sea necesa-
rio para encontrar el número que completa la familia o para
constatar que no se puede completar. Cada vez que aparez-
ca un número de la familia que antes no estaba, se anotará
como válido en la casilla correspondiente, (db) o (de).
D) Una vez completada la familia de números del bloque B, o
constatado que no se puede completar, se pasará al bloque C.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 461


6.14. Cálculo del Bloque C (combinado de los
bloques A y B)
A) Se tomará un número cualquiera (y solamente uno) de cada
uno de los bloques A y B, y se sumarán. Si el resultado es
mayor que 22, se reducirá sumando sus cifras, y este resul-
tado, ya menor de 22, se considerará válido y se anotará en
la casilla (ea).
B) Si el número anotado en la casilla (ea) tiene dos cifras,
se sumarán, y este resultado se anotará en la casilla (eb)
como válido. Si este último tiene también dos cifras, se su-
marán, y este cuarto resultado, también válido, se anotará
en la casilla (ec).
C) Si no se ha completado la familia de números en el Bloque C,
se buscará otra combinación de números, uno solo de cada
uno de los bloques A y B, tantas veces como sea necesario
para encontrar el número que completa la familia o para
constatar que no se puede completar. Cada vez que aparez-
ca un número de la familia que antes no estaba, se anotará
como válido en la casilla correspondiente, (eb) o (ec).
D) Una vez completada la familia de números del bloque C,
o constatado que no se puede completar, se pasará a calcu-
lar el acento.

6.15. Cálculo del acento


A) Se sumarán los valores numéricos de las vocales del nombre
y apellidos que lleven el acento tónico. Para ello no se ten-
drán en cuenta los factores multiplicadores de los cuadros
alfabéticos. Recordemos que, en algunos idiomas, como el
catalán, el gallego o el francés, ciertas vocales pueden lle-
var diferentes tipos de tildes, que en castellano indican el
acento tónico, pero no necesariamente así en esos otros idio-
mas. Por lo demás, también en la mayoría de esos idiomas
el acento tónico puede aparecer sin que lo indique una tilde.
Por tanto, se trata de sumar los valores de las vocales en
las que en la pronunciación oral recae en el acento tónico,

462 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


y no de las que lleven algún tipo de tilde o signo ortográfico
adicional.
B) En los casos de nombres o apellidos compuestos, cada
bloque puede llevar más de un acento; por ejemplo, José
Luis lleva acentos en la e y en la i, por lo que, si se apli-
ca la escala del idioma castellano antiguo, su acento será
7. Los valores de las vocales acentuadas de los bloques 1,
2 y 3 (y, en el caso de nombres o apellidos compuestos,
los resultados de sus sumas), se anotarán en las casillas
(fa), (fb) y (fe), respectivamente. La suma de estas tres casi-
llas se anotará en la (fd).
C) Si la suma anotada en la casilla (fd) es mayor que 22, se re-
ducirá sumando sus cifras, para conseguir un número igual
o menor que 22. El resultado se anotará en la casilla (fg).
D) Si el número anotado en la casilla (fg) es igual o menor
que 22, ése será el número del acento. Si, por el contrario, este
número es mayor que 22, se volverán a sumar sus cifras, ano-
tándose el resultado en la casilla (fh), resultado que ya será
igual o menor que 22, y por tanto, el número del acento.

EJERCICIO

35~u;~ndo ,plantiHas similáres á lade fa figür~ 35., o bien foto-


copias de la misma, pra_ctica lc:1 toma de _datos hasta adquirir
soJtura. Acqstúmbraté a llevar desde el prifoer momento un
fichero o carpetai'.cóh tus anotaciones·. Te será útil nume-
Jar' 1a~:t9mas/ µsindo/para ello el ~ecuadro de la esquina
\ supgriór derecha. Anota también Ja :fecha de -la toma de
o
. "da~os,yd~bajo poq tu nombre tus iniciales. Puede serte
útitcuandoJe r~ú:na.s con otros compañeros para trabajos
de práéticas.,Si la plantilla te p_a rece rnejorable, ca.mbia el
. rr:iodelo ror' otro qµé te resulté más práctico .. En la medida
en quete seip_osible, mantén el tamaño de la plantilla den~
tro dedos límites de urÍá hoja tamaño A-4 (21 x 29,7 cm.);
te·fªcjljtara el archivo P?Sterior: . .

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 463


7. Los DIFERENTES TIPOS DE LÍNEAS
EN FUNCIÓN DE SU BLOQUE DE PROCEDENCIA

ada uno de los números obtenidos según los procedimientos


C desarrollados en la sección anterior se va a reflejar en el Árbol
nativo en forma de líneas que ocuparán los senderos subjetivos en
la posición que indique el propio número. Estas posiciones, desa-
rrolladas a todo lo largo de la sección 3.7 de la II Parte, aparecen
resumidas en la figura 2. Recordemos que en el Sendero O(El Loco)
deben colocarse las líneas correspondientes al número 22.
Es evidente que algunos números habrán aparecido en dos o
más bloques, y otros, en cambio, no habrán aparecido en ninguno.
Cuando dibujemos el Árbol, por tanto, encontraremos senderos
con sobrecarga y otros vacíos. Además, es necesario saber qué tipo
de líneas hay en cada uno de los senderos, y para eso usaremos
una notación determinada, una forma concreta de dibujar cada
tipo de línea. Esta notación no responde a ningún criterio de signi-
ficados específicos, sino que se ha ido desarrollando con la práctica
de los cursos y es útil mantenerla para facilitar el intercambio de
información entre los estudiantes de Kabbalah mediante el uso de
un «lenguaje común».
Resulta recomendable usar un solo color para dibujar los dife-
rentes tipos de líneas, pues de lo contrario el dibujo puede resul-
tar confuso. Excepcionalmente, puede usarse otro color (recomen-
dable el rojo) para marcar las líneas procedentes de los bloques
A, B y C, algunas de las cuales, como veremos, pueden no ser ni
siquiera líneas, sino unas pequeñas cruces al lado del sendero co-
rrespondiente. Puede en cambio ser útil disponer de rotuladores
de colores claros (o mejor aún, marcadores de colores fosforescen-
tes), para marcas posteriores: Tríadas formadas, puntos fuertes y
débiles, zonas de desequilibrio, configuraciones incómodas o es-
peciales, etc.
Al situarse los números de los bloques en los senderos subjeti-
vos, cabe hacerse la pregunta respecto a las sefirot y a las Tríadas.
¿Es que no se marcan? En realidad, las sefirot y las Tríadas son la
consecuencia de los senderos subjetivos, puesto que, al dibujar en

464 VILLARRUBIA / HAUT / Mil.LERA


Visibles Números procedentes de los
bloques 1, 2, 3, 7 y 9 (visibles y
ocultos) y de los bloques 4, 5, 6
Ocultos y 8 (visibles)

Visibles
Números procedentes del
bloques 1O (visibles y ocultos)
Ocultos +++++++++++++

Visibles -·-·-·- Números procedentes del


bloques 11 (visibles y ocultos)
Ocultos +·+·+·+·+·+

Números procedentes del


....••..................
bloques 12 (ciclo corto)

Números procedentes del


••••••••••••• bloques 13 (ciclo corto)
Sin repetir
números
anteriores
í:l í:l í:l 1:::,.1:l 1:::,. 1:::,.
Números procedentes de los
bloques A, B y C
Repitiendo
números
anteriores + Dibujar al lado del sendero

'------ ocupado por líneas procedentes


de los bloques 1 a 13 tantas veces
como aparezca el número)

Figura 36
Tipos de líneas o marcas a emplear según el bloque del que procedan sus números.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 465


éstos las líneas correspondientes, los restantes elementos se mues-
tran por sí mismos. Y no sólo en el sentido del dibujo, sino tam-
bién en el de los significados, puesto que «el mundo» y «la acción
respecto al mundo» son la consecuencia directa de «mi visión del
mundo».
La figura 36 muestra la notación de los diferentes tipos de líneas
en función de su bloque de procedencia.

,,
8. PROCEDIMIENTO PARA DIBUJAR EL ARBOL NATIVO

l final de la sección 3.1.11 del~ II Parte se plantea el ejercicio 18,


A consistente en dibujar un Arbol de la Vida, para lo cual se
acompaña una plantilla en la figura 10 («Árbol vacío»). Dicha
plantilla puede ser utilizada para dibujar también el Árbol nativo,
partiendo de la base de los números obtenidos en cada uno de los
16 bloques. Si los datos se anotaron en una plantilla realizada a
partir del modelo de la figura 35, se irá dibujando en el modelo de
«Árbol vacío» las líneas en su lugar correspondiente.
Es conveniente seguir el orden de los bloques para dibujar las
líneas en el Árbol, marcando con un rotulador de color claro las
casillas de cada número según se vaya pasando al «Árbol vacío».
Es casi seguro que en varios senderos habrá más de una línea,
a veces varias, por lo que conviene ayudarse con una regla para que
el dibujo quede limpio, lo que facilitará después la interpretación.
Podemos usar un bolígrafo rojo para marcar las líneas de triángu-
los o las cruces, en su caso, de los bloques A, B y C. Recordemos que
si en un sendero hay alguna línea procedente de los bloques 1 a 13,
ambos inclusive, no puede tener a la vez una línea de «triángulos ro-
jos»; en este caso, si apareciese en los bloques A, B o C algún número
que ya hubiese aparecido en los anteriores, se indicará marcando
una sola cruz roja por número al lado del sendero correspondiente.
El «acento» lo indicaremos colocando una letra A mayúscula en el
sendero correspondiente, esté o no ocupado por líneas.
En lugar de usar un «Árbol vacío» (fig. 10), y para facilitar la
tarea de dibujar el Árbol nativo, puede usarse una plantilla similar
a la de la figura 37, en la cual los números de los senderos aparecen

466 VILLARRUBI A / H A UT / MILLERA


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C:::::rl8 0

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Árbol de la vida de - - - - - - - - - - - - -
Nacida/o el - - - d e - - - - - - - de - - -

Figura 37
Plantilla para montar el Árbol de la Vida personal

MANUAL DE K ABBALAH PRÁCTICA 4 67


en unos pequeños círculos en el lugar en que procederá dibujar
las líneas correspondientes; en este caso, el uso de la regla es casi
obligado, debiendo «saltarse» el pequeño círculo con el número
del sendero cada vez que se dibuje una línea en el mismo. En la
misma figura aparecen al lado de cada sefirá un rectángulo dividi-
do por una línea diagonal en dos triángulos, el superior en blanco
y el inferior con un número. Este último es el número de senderos
que confluyen en la esfera, mientras que en el superior anotaremos
el número de líneas (sin contar las procedentes de los bloques A,
B o C) que efectivamente llegan a la sefirá desde cualquier direc-
ción. Ello nos va a dar un número quebrado, que transformaremos
después en decimal dividiendo el superior entre el inferior, y cuyo
resultado anotaremos en una plantilla similar a la de la figura 38.
Utilizaremos dicha plantilla para calcular y anotar todas las mag-
nitudes que se derivan del Árbol personal. Su desarrollo se explica
en la sección 11, «Los promedios del Árbol».
En cualquier caso, pueden examinarse diversos Árboles persona-
les en las figuras que acompañan al capítulo 16 de la IV Parte, «Los
Árboles especiales», y los comentarios que acompañan a cada uno.

EJERCICIO 36

Con las fichas que has .abierto aL realizar el ejercido 35, ·


comienza a levantar Árboles personales;· De momento, di-.
bújalos solamente, utilizando «Árboles vacíos», o, si lo pre-·
. fieres, una copia de la plantilla que aparece en lp figura 37.
No olvides marcar cada línea según su naturaleza,.y proce-
dencia conforme a los modelos de la figura 36. ·

468 V!LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


9. Los CICLOS CORTOS v LARGOS:
DURACIONES, MÁXIMOS Y MÍNIMOS

L os bloques 12 y 13 proporcionan una líneas sumamente intere-


santes: las cíclicas, relativas, respectivamente, a los ciclos cor-
tos, medidos en meses, y los largos, medidos en años. El cálculo de
la duración de unos y otros es muy sencillo:
Respecto al ciclo corto, la duración en meses es la suma de los
valores del día y del mes de nacimiento. Si, por ejemplo, esta fecha
fuese el 14 de septiembre, la duración del ciclo sería:
14 + 9 = 23 meses

En cuanto al ciclo largo, la duración en años es el resultado de su-


marle al número del mes las cuatro cifras del año de nacimiento. Un
nacido en el mes de marzo de 1948 tendría un ciclo largo de duración:
3 + 1 + 9 + 4 + 8 = 25 años

Todo ciclo puede representarse mediante una línea en forma de si-


nusoide, tal como aparece dibujada en la figura 39. Tiene por tanto
un máximo al alcanzarse la primera cuarta parte del ciclo, después
desciende hasta el valor inicial, alcanzado a la mitad del ciclo, sigue
descendiendo hasta un mínimo en las tres cuartas partes del ciclo,
y finalmente sube hasta el valor inicial al final del ciclo, para iniciar
una nueva fase. Es como si la línea empezase con un valor O (cero),
para subir en la cuarta parte del ciclo (25 por 100 del recorrido) a un
máximo de +1 (más uno), descender en la mitad del ciclo (50 por 100
del recorrido) hasta O(cero), y alcanzar un mínimo de -1 (menos rmo) a
las tres cuartas partes del ciclo (75 por 100 del recorrido). Estos valores
pueden considerarse como potenciales de la línea, a semejanza de las
que marcan los biorritmos. La diferencia con éstos últimos es que las
líneas variables del Árbol personal son diferentes para cada persona,
y la duración de los ciclos es más larga, muchas veces mucho más lar-
ga. También afectan a diferentes aspectos para cada persona, y así mis-
mo el grado de intensidad puede variar de unos a otros.
Por otra parte, es muy frecuente que estas líneas móviles o cíclicas,
tanto si son de ciclo corto como de ciclo largo, compartan el sendero

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 469


en que están situadas con otras procedentes de uno o varios de los
bloques 1 a 11, ambos inclusive, a las que denominamos fijas, porque
no varían su potencial como las de los bloques 12 o 13. Entonces, los
valores máximo(+1), medio (O) y mínimo (-1) de la línea variable reci-
ban la suma de tantas unidades como líneas fijas haya en el sendero.
El cuadro siguiente indica los valores del ciclo en función del número
de líneas fijas acompañando a la móvil:

Tabla XXIV
Máximos, medíos y mínimos en senderos variables

N. º de líneas fijas Máximo Medio Mínimo

o 1 o -1
1 2 1 o
2 3 2 1
3 4 3 2
4 5 4 3
etc

Como puede observarse, el mínimo es siempre el valor máximo


menos 2, mientras que el valor medio es el máximo menos 1, o visto
de otra manera, igual al número de líneas fijas. Lo interesante de es-
tos ciclos, a cuyo significado dedicaremos un capítulo especial en la
N Parte, es que nos permiten conocer varios datos importantes:

• El momento del ciclo, corto o largo, en el que estamos. Para el del


ciclo largo bastará dividir la edad actual entre la duración de di-
cho ciclo; el cociente de la división, sin decimales, indica el número
de veces que se ha repetido el ciclo, mientras que el resto señala el
momento actual del ciclo. Si, por ejemplo, una persona de 52 años
tiene un ciclo de 23, lo habrá pasado 2 veces (52 : 23 = 2), y sobra
un resto de 6, por lo que habrá terminado de pasar por el máximo,
que es 23 x 0,25 = 5,75 años. Para el ciclo corto, la duración del ciclo
se calcula en meses, por lo que es en meses como debe calcularse
la edad. En el ejemplo anterior, si nos encontramos en el mes de

470 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


CÁLCULO DE MAGNITUDES Y PROPORCIONES

Fecha de realización
1---~~ 2- Desviación.,,;m:.:,:.;;ed=-i:.::a"=-~--~---1
Promedio Valor (2)
X (A)<(X

4
4
8
5
5
4
3
Suma e va ores Suma de diferencias
Promedio eneral: Suma (B) 10
(A) Resultados con dos decimales
V

3- Sefirot fuera del rango normal Dentro Fuera

Rango típico MÁXIMO (X) + (D)


Rango típico MÍNIMO (X) - (D)

Suma
Promedio
Potencial A ua Promedio
Jesed Equilibrio
Guevurahl----1-l~I Kether
Tiferet Tiferet
Suma Suma Yesod
Promedio Promedio Maljut
Potencial Aire Expresión Aire Suma
Netzaj - - - - J·,.•i Kether Promedio
Hod Tiferet Misericordia
Yesod Yesod Jokmah
Suma Jesed
Promediol---1''8
Netzaj
~'."'--O==t•í:i Suma/3
Promedio

Figura 38
Plantilla para el desarrollo de magnitudes y promedios de Árbol personal.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 471


marzo y el sujeto cumple 53 años el 23 de octubre (redondeamos el
mes por exceso o por defecto), su edad será de (52 x 12) meses, más
los transcurridos desde octubre del año anterior hasta el momento
actual, esto es, 7 meses, por lo que resultará un total de 631 meses.
Al ser su ciclo corto de 33 meses (23 + 10), la división arroja un cociente
de 19 (las «vueltas» dadas hasta ahora al ciclo corto) y un resto de 4,
lo que nos indica que se encuentra hacia la mitad de la primera
cuarta parte, por lo que la curva seguirá creciendo durante otros
cuatro meses.
• La posibilidad de detectar las «crisis» y las «anticrisis». Las primeras
tienen lugar cada vez que un sendero toma un valor O(cero). Las se-
gundas comienzan a partir del momento en que un sendero supera
el valor de 2, aunque pu~de permanecer en estado latente hasta el
momento en que sobrepasa el máximo, a partir del cual se produ-
ce algo semejante a un desbordamiento repentino. En la sección si-
guiente desarrollaremos con mayor detalle este concepto. Como es
lógico, esta detección de «crisis» o «anticrisis» puede hacerse tanto
de cara al pasado como de cara al futuro; en el primer caso, puede
explicarnos, a veces con gran detalle, las razones profundas de de-
terminados acontecimientos claves en nuestra vida; en el segundo,
nos permitirá prepararnos con antelación, no para evitarlas (no sólo
no es posible, sino que tampoco resulta recomendable intentarlo),
sino para aprovecharlas mejor de cara a nuestro crecimiento inte-
rior y al cumplimiento de nuestro tikún.

EJERCICIO ·

37. Calcula tus ciclos corto y largo, y e'n dos gráficos semejan-
. tes al de la figura 39, sitúa los momentos de c~da cuarto de
ciclo: máximo, medio y mínimo, en meses el primero y en
años el segundo. Respecto ~I primero, calcula el· momento .
actual de tu ciclo. Respecto al segundo, sitúa los momentos
. de tu vida pasada que corresponden al máximo, medio y,mí-
nimo; marcando la edad a que sucedieron, o las edades, si el
ciclo ha dado ya más de una vuelta.

472 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Curva de desarrollo de un ciclo corto
de 42 meses

1,5
o 1
"6
·¡;
0,5
7ii
"ts
11)
o
CD
o -0,5
~

'ii
> -1
-1,5
Meses

Figura 39
Curva de desarrollo de un Árbol nativo.
La duración total del ciclo equivale al porcentaje 100%

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 473


1 Ü. «CRISIS» Y «ANTICRISIS»

egún se apuntó en la sección anterior, el desarrollo de los ciclos


S significa que los senderos afectados pueden quedar temporal-
mente vacíos o, por el contrario, recibir también por un tiempo una
sobrecarga. Llamamos a estas situaciones «crisis» o «anticrisis»,
según que se produzca el fenómeno de vaciado o de sobrecarga,
respectivamente. El principio general, avalado por la experiencia
a lo largo de varios años de observación, es que siempre hay algún
aspecto del ser humano que está sometido a uno o a otro de estos
vaivenes, a veces sólo de crisis, a veces sólo de anticrisis, a veces
de ambas. Como hemos visto al desarrollar los bloques, es del 12 y
del 13 de donde proceden estas líneas variables. Lo interesante no
es tanto poder dibujar la curva del ciclo y fijar en ella exactamente
el momento actual (a veces puede ser de alguna utilidad saberlo),
sino, sobre todo, conocer los momentos de las crisis o del comien-
zo de las anticrisis, aunque estas últimas, como quedó indicado,
tienen a veces un período de gestación oculto que termina con un
desbordamiento generalmente violento y repentino. Sin entrar de
momento a valorar el significado de unas y otras, lo que se desa-
rrollará en la IV Parte de esta obra, constatamos la existencia de
dos tipos de crisis:
A) Las que se producen a mitad y al final de cada ciclo. Son con-
secuencia de que haya una sola línea en el sendero, precisamente
la variable; llamamos a este tipo de líneas «lanzaderas», por la
semejanza de su funcionamiento con la pieza del mismo nom-
bre de los telares. Suelen ser crisis en general rápidas y un tanto
violentas, aunque de corta duración. Tienen semejanza con los
biorritmos, ya que en la primera mitad del ciclo el sendero afec-
tado se manifiesta fundamentalmente en sus aspectos activos o
yang, mientras que en la segunda mitad lo hacen en sus aspectos
pasivos o yin. La crisis se produce en los momentos de transición
de una a otra fase.
B) Las que se producen en el mínimo del ciclo, cuando se lle-
van recorridas las tres cuartas partes de su duración. Son la conse-
cuencia de una línea fija acompañando en el sendero a la variable.

47 4 ViLLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Figura 40 •Ciclo combinado sin lineas fijas Figura 41 • Ciclo corminado con 1línea fija

~
3,--------------------, Crisis constantes con
4..----------- ----------,
2 .,~ 3 +---+-....------ = =----- - -- - - ---!

~
.:;
.."'
e 1
altibajos en su manifestación

QO~~rnti,mrmhm1'1nnt11~nt\iirfm1Pml~mAnmnft111~1""1,-,.~
-es
c2-~~~~---~--~-----~-----l
,::,
.,
"'
Q1r~~~-~~-➔r+r~H=~~~~~➔+-l
-es
~

~~ .....
~
"' -1
""
~ ·-32 ,__línea Osignifica
_ _ _una _crisis
~ºr:;:;:~~=~===~~~:~:~~sii;ti:tt;;t~~
;;;.1 +
u
5l ~
.:i.. '"I
__ _ _ _ _ _ _ _ _ __ __,
-2 ----------------------->
~ - ll,l Ciclo largo en meses (25 años. 300 meses) Ciclo largo en meses (2 5anos, 300 meses)
(") lll
~-
R.. o
~
o ...
fJ> ~
('j
o ...
f,-1. Figura 42 •Ciclo combinado con 2líneas fijas Figura43. Ciclo corrbinado con 3líneas fijas
~ ~
~ N
3;::
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e
~-~
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05-------------------------,
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: 3 -JA-' U I \ I \ I \ !V'. 1
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~1
-L--\-1--\--;l--t.-+4-- - -~
"' +--- - - - - - - - - - - - ' - -.......---"''--- -- f
s:
I
"'
uo 1 -- ~ .\L l,l L ...... . . J
iilllidflhliliiílllrilliiliiiliiiliilillihiilllfNlüiliiliiUhilbiiiiidiiil,.1fflJl!J)JJU!,..rnmrmmrli u o -1imrmnn1111111nmmnmmmmnl'lffllllllfflllllffll!mtmllllffllllffllllftlffllllllfflffl1111ffll'll'l'll'mml
">,
,o
19 37 55 73 91109 127H5 163 181 199 ?1 7235253271289 1 19 37 55 73 ~1 109127 HS 163 181 199 217 235 253 271 289
n
-,
Ciclo largo en meses (25 anos, 300 meses) Ciclo largo en meses (25 anos, 300 meses)
~
.¡,.
'-.!
lJl
La crisis empieza y termina gradualmente, ya que durante un pe-
ríodo relativamente largo la carga del sendero se mantiene muy
próxima a cero.
En cuanto hay en un sendero dos o más líneas fijas acompañan-
do a una variable ya no se producen crisis, sino anticrisis, puesto
que la carga nunca puede bajar de +l.
La duración mínima de un ciclo corto es de 2 meses (nacidos
el 1 de enero), y la máxima de 43 (nacidos el 31 de diciembre).
En cuanto a los ciclos largos, la duración mínima es de 3 años para
los nacidos en enero de 2000, y de 40 años para los nacidos en di-
ciembre de 1999. Hay cifras diferentes en los ciclos largos (y a veces
también en los cortos) para quienes se rigen por otros calendarios.
Aunque es un aspecto evidente, no debe dejar de recordarse que
la duración del ciclo, sea la que sea, es un número que, al reducirlo
sumando sus cifras componentes, nos debe indicar la familia a que
pertenece el sendero o senderos afectados: si no coinciden, se ha
producido un error.
En las páginas siguientes se incluyen diversos cuadros que
indican los momentos de crisis y/ o anticrisis de los ciclos cor-
tos y largos en, respectivamente, meses y años, en función de
la duración del ciclo y del número de líneas fijas que acompa-
ñen en el sendero a la variable. Un caso especial se produce
cuando en un mismo sendero hay líneas de ciclo corto y de
ciclo largo. La curva resultante es de gran complejidad, y según
sean las duraciones de uno y otro ciclo puede resultar un ciclo
combinado que se repite cada pocos años o, por el contrario,
no aparecer situaciones semejantes a otras a lo largo de toda la
vida. En el Apéndice 2 se proponen las pautas de un programa
informático a través de hoja de cálculo para el estudio de ciclos
combinados. Las figuras 40, 41, 42 y 43 muestran algunos ejem-
plos de ciclos combinados (corto y largo en el mismo sendero),
con diferente número de líneas fijas acompañándolos. En los
casos extremos de 4 o más líneas fijas acompañando a las dos
variables (no recogidos en las figuras mencionadas), puede de-
cirse que el sujeto vive en situación permanente de anticrisis.

4 76 VILLAR RUBIA / H AUT / MILLERA


TABLAS DE CRISIS Y ANTICRISIS

DE LOS CICLOS SIMPLES


Tabla XXV
Valores de los ciclos cortos

Duración 2 meses
.
Nº: Mes Mes Mes Mes
líneas 0,5 l 1,5 2 .
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 3 meses
.
Nº. Mes . Mes fyles Mes
líneas 0,75 . 1,5 2,25 3
1 Crisrs Crisis
2 Crisis
3+ Anti cri sis

Duración 4 meses
Nº . . Mes. Mes Mes .Mes
líneas 1 '; ._:.
. 2 3 4
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anti crisis

Duración 5 meses
·.
Nº. Mes i\'le~ Mes Mes
líneas 1,25 2,5 3,,75 5
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anti crisis

Duración 6 meses
,
Nº. Mes Mes Mes _Mes
líneas 1,5 . 3 4;5. .{ 6

1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

478 VILLARRUBIA / H AUT / MILLERA


Duración 7 meses
:-
Nº. Més Mes ·Mes Mes
lín~as 1;7,5 ·¼ 3,5 5~25 7

1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 8 meses
,

Nº. Mes Mes . Mes .Mes


líneas 2 4 .; 6 8
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anti crisis

Duración 9 meses
,

Nº. . Mes Mes. Mes ' Mes


líneas ' 2,25 4,5 6,75 9
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 1O meses
.. k
N?. 1, Mes Mes .. Mes Mes ,
líl)ea_s 2,5 , 5' I:, 7,5 ró :·
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 11 meses
. /' M ·. ,· . , .. ·· . .
. ·Nº. .· M. ,e s. , es ./ Mes / <Mes\
líneas ,. 2,75 ,,: ·. 5;5·' 8,25 : . ll .
Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anti crisis

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 479


Duración 12 meses
·. ,.·
'. Nº: Mes Mes Mes Mes
líneas 3 6 9 12
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 13 meses
Nº. Mes Mes · Mes .Mes

líneas 3,25 . 6,5 9,75 13 "
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 14 meses
.
Nº. Mes Mes Mes Mes
líneas 3,5 7 10,5 14
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 15 meses
. Mes· · Mes
Nº. Mes · . •Mes
líneas 3,75 7,5 , 11,25 15
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 16 meses
Nº. Mes ·Mes Mes , Mes ,
líneas 4 8 12 ' 16
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

480 ViLLARRUBIA / H AUT / MILLERA


Duración 17 meses
Nº. Mes Mes Mes _, Mes .
líneas 4,25 8,5 12,75 17
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anti crisis

Duración 18 meses
Nº. Mes 'Mes Mes Mes
líneas 4,5 9 13,5 18
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 19 meses
Nº, Mes. Mes Mes Mes
' ,

líneas 4,75 9,5 14,25 19


1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anti crisis

Duración 20 meses
-Nº- NÍés Mes -Mes Mes
línea~ 5 10 15 20
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 21 meses
Nº. - -Mes Mes -. Mes Mes
lín_eas 5,25 ·10,5 15,75 21
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anti crisis

MANUAL DE KABBAL/\H PRÁCTICA 481


Duración 22 meses
Nº. , Mes M~s ·Mes Mes
líneas 5,5 11 ·16,5 . 22
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 23 meses
Nº. ',
Mes Mes Mes Mes
líneas 5,75 11 ,5 17,25 · 23
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticri sis

Duración 24 meses
Nº. Mes Mes Mes Mes
líneas 6 12 .18 I 24
1 Crisis Crisis
2 Cri sis
3+ Antic risis

Duració n 25 meses
Nº. Mes · Mes Mes Mes
líneás 6,25 12,5 , 1a)·5: 25
1 Crisi s Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 26 meses
',

Nº. Mes Mes. Mes , Mes


¿:
líneas 6,5 , 13 - ''19,s · 26
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anti crisis

482 VILLARRUBIA / H AU T / M ILI. ERA


Duración 27 meses
1,
Nº. Mes , Mes Mes Mes
líneas 6,75 13;5 . 20,25 .· 27
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anti crisis

Duración 28 meses
7
Nº,' Mes Més , Mes ',· Mes
· "líneas 7., 14 21 28
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 29 meses
Nº. '' Mes Mes Mes Me,s
líneas .'
7 , 25
. ....14,5 21,75 29
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 30 meses
.,., :--
Nº: ··. ·Mes "' Mes Mes Mes
línea.s 7,5 . . 15 22,5 ' 30
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 31 meses
Nº. / /'ytes Mes- Mes. M,es
líneas 1 ' ' 7, 75 ' 15,5 •· 23,25 31
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

M ANUAL DE KA13 13ALAH PRÁCTICA 4 83


Duración 32 meses
Nº. Mes Mes·•· Mes Mes
líneas 8 16 , ·. 24 32
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 33 meses
Nº. Mes Mes Mes Mes
líneas 8,25 16,5 25;75 33 ,
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 34 meses
Nº. Mes Me_s Mes Mes
líneas 8,5 17 25,5 34
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 35 meses
Nº. Mes Mes Mes
. ' · Mes
líneas 8,75 17,5 26,25 35
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 36 meses
..

Nº. Mes. 'Mes •Mes· .Mes ?


líneas 9 18 27 . 36
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

484 VII.LARRUBIA / HAUT / MILLERA


Duración 3 7 meses
' Nº. Mes Mes Mes Mes
líneas 9,25 18,5 27,75 37
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anti crisis

Duración 38 meses
Nº'.' /vÍes ' Mes Mes Mes
líneas 9,5 19 28,5 38
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anti crisis

Duración 39 meses
Nº. Mes . Mes Mes Mes
líneas 9;.75 .. 19,5 29,25 39
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 40 meses
Nº. Mes Mes Mes Mes
líneas ro 20 30 40
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 41 meses
,. '
Nº.,- Mes -Mes Mes Mes
.líneas e 10,25 20,5 30,75 41
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 485


Duración 42 meses
Nº. Mes Mes Mes Mes. ·.
: 42 .,,
líneas · 10,5 ·21 31;5
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anti crisis

Duración 43 meses
Nº. Mes Mes Mes ·.Mes .
1 líneas 10,75 21,5. ·32,25 4)
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

486 VILLARRUBlt\ / HAUT / MILLERA


Tabla XXVI
Valores de los ciclos largos

Duración 3 años
Nº. ·, Año · Año ., Año Año
.. ' líneas 0,75 .1,5 2,25 3
1 Crisis Crisi s
2 Crisis
3+ Anti crisis

Duración 4 años
Nº. Año Año . Año , Año
líneas 1 2 3 4
1 Crisis Crisis
2 Crisis

3+ Anticrisis

Duración 5 años
l';Jº, Año ?
Año Año A ño
líneas 1,25 2,5 3,75 5

1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 6 años

' . Año
' J,5
AñO Año· Año
' ,l íneas 3 4,5' 6·
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 487


Duración 7 años
Nº.' Añó A ño Año Año
:
líneas 1,75 3 ,5 5,25 7
1 Crisis Crisis

2 Crisi s

3+ Anticrisis

Duración 8 años
Nº. Año Año Año Año
líneas 2 4 6 8
1 Crisis Crisis

2 Crisis

3+ A ntic risis

Duración 9 años
Nº. Año Año Ano Año
líneas 2,25 4,5 6, 75 9
1 Crisis Cri sis

2 Cri sis
3+ Anticri sis

Duración 1O años
..
Nº.. Año A ño Año l" Año
líneas .· 2,5 5 7,5 10
'
1 Crisis Crisis
2 Crisis

3+ A nt ic risis

Duración 11 años
Nº. A ño Á ño A ño A ño
l íneas 2,75 5,'.5· 8,25 11
1 Crisis Crisis
2 Crisis

3+ A nti crisis

488 V!LLARRUB IA / H AUT / M ILLERA


Duración 12 años
Nº. Año Año Año Año
líneas 3 6 9 12
1 Crisis Crisis
2 Crisis

3+ Anti crisis

Duración 13 años
Nº. Año Ano Año Año
líneas 3,25 6,5 9,75 13
1 Crisis Crisis
2 Crisis

3+ Anti crisis

Duración 14 años
Nº. Año Año Año Año
líneas 3,5 7 10,5 14
1 Crisis Crisis
2 Crisis

3+ Anti crisis

Duración 15 años
Nº: Año Año Año Año
líneas 3,75 7,5 11,25 15
l Crisis Crisis
2 Crisis

3+ Anticrisis

Duración 16 años
Nº. Año Año Año Año
líneas 4 8 12 16
l Crisis Crisis
2 Crisis

3+ Anti crisis

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 489


Duración 17 años
Nº. Año Año Año Año
líneas 4,25 8,5 12,75 . · 17
1 Crisis Crisis
2 Crisis

3+ Anti crisis

Duración 18 años
Nº. Año. Año Año Año
líneas 4,5 9 13,5 1~
1 Crisis Crisis
2 Cri sis
3+ Anticri sis

Duración 19 años
Nº. Año Año Año Año
líneas 4,75 9,5 14,25 19
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anti crisis

Duración 20 años
Nº. Año A ño ' A ño Año
líneas 5 . 10 15 ·20
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ A nticrisis

Durac ión 21 años


Nº. Año Año · A fio Año
líneas 5,25 10,5 ,15,75 · 21 •
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

490 V ILLARRUl31A / H AUT / MIi.LERA


Duración 22 años
Nº. Año Año Año Año
líneas 5,5 11 16,5 22
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 23 años
Nº. Año Año Año Año
líneas 5,75 . 11,5 17,25 23
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 24 años
Año Año Año Año
Nº. líneas 6 12 18 . 24
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anti crisis

Duración 25 años
· Nº. · Año Año Año Año
líneas 6,25 12,5 18,75 25
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anti crisis

Duración 26 años
Nº. .
Año Año Año Año.
líneas · 6,5 l3 19,5 26
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anti crisis

MANUAL OF. KABBALA H PRÁCTICA 491


Duración 27 años
Nº. Año Año Año Año
líneas 6,75 13,5 20,25 27
1 Crisis Crisis

2 Crisis

3+ Anticrisis

Duración 28 años
Nº. Año Año Año Año
líneas 7 14 21 28
1 Crisis Crisis

2 Crisis
3+ Anti crisis

Duración 29 años
Nº. Año Año Año Año
líneas 7,25 14,5 21,75 29
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 30 años
Nº. Año Año Año Año
líneas 7,5 15 22,5 .. 30
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 31 años
Nº. Año Año Año Año
líneas 7,75 15,5 23,25 31
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

492 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Duración 32 años
Año Año Año Año
Nº. líneas 8 16 24 32
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 33 años
Nº. Año Año Año Año
líneas 8,25 16,5 24,75 33
l Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 34 años
Año Año Año Año
Nº. líneas 8,5 17 25,5 34
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anti crisis

Duración 35 años
Nº. Año Año Año Año
líneas 8,75 17,5 26,25 35
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 36 años
Año Año Año Año
Nº. líneas 9 18 27 36
l Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anti crisis

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 493


Duración 3 7 años
Nº. Año Año Año Año
líneas 9,25 18,5 .. 27,75 37
1 Crisis Crisis

2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 38 años
· Año Año Año Año
Nº. líneas 9,5 19 28,5 38
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anti crisis

Duración 39 años
Nº. Año Año Año Año
líneas 9,75 19,5 29,25 39
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

Duración 40 años
Nº. Año Año Año Año
líneas 10 20 30 40
1 Crisis Crisis
2 Crisis
3+ Anticrisis

494 V iLL/\RRUB IA / HAUT / MJ LLERA


,,
11 . Los PROMEDIOS DEL ARBOL

U na vez dibujadas las líneas en el Árbol de la Vida y estable-


cidas, por tanto, las cargas relativas de cada una de las se-
:firot (esto es, el número de líneas que confluyen en cada una de
ellas, dividido entre el número de senderos que llegan o parten de
la esfera), pueden empezar a calcularse una serie de magnitudes
que nos van a ilustrar sobremanera acerca de multitud de aspec-
tos del sujeto. Para facilitar los cálculos, se ha dividido la plantilla
de la figura 38 en diversas partes, que se examinan por separado.
La hoja, además del encabezamiento, que incluye espacio para
anotar el nombre, apellidos y fecha de nacimiento del sujeto,
así como para un número de serie, si se quieren conservar los estu-
dios que se vayan realizando a lo largo del tiempo, contiene cinco
grupos de cálculos, numerados del 1 al 5. Cada uno de estos gru-
pos se encuentra separado de los demás por zonas más o menos
anchas de color gris oscuro. Debe advertirse que los nombres de
las se:firot que aparecen en el grupo 2 son válidos, cada uno en
su correspondiente fila, para los grupos 3 y 4, los cuales no los
llevan escritos por razones de espacio. Varía también la forma de
cada grupo: los grupos 1 y 2 tienen forma rectangular, lo mismo
que el 5, aunque este último es mucho más pequeño y apaisado.
Los grupos 3 y 4 tienen, en cambio, la forma de una L mayúscula
tumbada. Veamos en detalle la forma de realizar los cálculos de
cada uno de ellos. En este punto del estudio sí resulta aconsejable
utilizar calculadoras para facilitarnos la tarea.

11. 7. Promedio general


Este promedio se calcula en la zona correspondiente al grupo 1.
Al lado del nombre de cada se:firá anotaremos el número de líneas
(excluidas las procedentes de los bloques A, B o C) que confluyen
en cada una. Cuando un sendero tenga líneas de alguno de los
bloques 1 a 13 ambos inclusive, a la vez que alguna marca (+) que
indique procedencia de los bloques A, B o C, se tendrán en cuenta

M ANUAL DE K ABBALAH PRÁCTICA 4 95


las primeras, pero no las segundas. Recordemos que no es posible
la coincidencia en el mismo sendero de líneas procedentes de los
bloques 1 a 13 junto a otras formadas por pequeños triángulos,
las cuales proceden de los bloques A, B o C y se dibujan cuando no
hay previamente ningún otro tipo de línea.
Una vez anotado el número de líneas de cada esfera, se divide
por el que aparece en la plantilla, que es el de senderos de dicha
esfera. El cociente de la división será un número inferior, igual o
superior a 1, y de él sacaremos un máximo de 3 decimales. Si el
tercer decimal es igual o mayor que 5, redondearemos el segundo
a la unidad inmediatamente superior, o lo dejaremos como está
en caso contrario, dejando sin anotar el tercer decimal, cuyo uso
es sólo auxiliar para un posible redondeo. Una vez hecho este re-
dondeo, anotaremos el resultado en la casilla correspondiente de
la columna encabezada por el título de Valor
Sumaremos después los diez valores, y el resultado lo anotare-
mos en la casilla que tiene al lado la letra (b); seguidamente, divi-
diremos este resultado (b) entre 10, y el nuevo resultado pasará a
la casilla que tiene al lado la letra (x), como promedio general del
Árbol.

7 1.2. Desviación media


Cuando el número de datos es grande, refleja mejor la realidad
una variable estadística llamada desviación típica, la cual es, por
otra parte, fácilmente determinable usando muchas de las máqui-
nas calculadoras existentes en el mercado. Sin embargo, en este
caso tenemos sólo diez datos, y si no se cuenta con una calculadora
adecuada o no se tienen conocimientos matemáticos suficientes,
calcular la desviación típica puede llegar a ser verdaderamente en-
gorroso. Por esa razón preferimos usar la desviación media que,
si bien ofrece una imagen menos adecuada de la realidad, no es
tan inexacta como para que no se deba tener en cuenta, y resulta
además mucho más fácil de calcular.
Para ello, usaremos el grupo 2 de la plantilla, y empezaremos
escribiendo diez veces el valor (x) en las diez casillas de la co-

496 V1LLARRUlllA / HAUT / MI LLERA


lumna titulada Promedio (x). Después, anotaremos los valores
(a) de cada una de las 10 sefirot, según aparecen en el cuadro del
grupo 1, de dos formas diferentes:
• Si el valor (a) es mayor que el promedio (x), en la casilla corres-
pondiente de la columna titulada Valores (1), (a) > (x).
• Si el valor (a) es menor que el promedio (x), en la casilla corres-
pondiente de la columna titulada Valores (2), (a) < (x).
Los valores (a) iguales a (x) pueden anotarse en cualquiera de
las dos columnas, pero sólo en una.

El paso siguiente es hallar la diferencia entre cada valor (a) y


el promedio (x), diferencia que se anota en la casilla correspon-
diente de la columna titulada Diferencia. Después será necesa-
rio sumar las diez diferencias y anotar el resultado en la casilla
que tiene al lado la letra (c), para, a continuación, dividir este
último resultado entre 10, para obtener finalmente el promedio
de desviaciones, o desviación media, que anotaremos en la ca-
silla (d).

11.3. Sefirot fuera del rango normal

Para saber qué sefirot se apartan por exceso o por defecto del
rango normal, usaremos el grupo de datos 3, que es uno de los
que tienen forma de L tumbada. En primer lugar, anotaremos
en las casillas situadas junto a las letras (f) y (g) los resultados
respectivos de sumar primero [MÁXIMO (x) + (d)], y restar
después [MÍNIMO (x) - (d)], los valores hallados del prome-
dio general (x) y la desviación media (d), tal como quedaron
calculadas en las secciones anteriores. Después, haremos una
marca (por ejemplo, con rotulador de color azul) en la casilla
de la parte vertical del grupo frente a los nombres de las sefirot
cuyo valor (a) sea mayor que la suma (f), y otra de diferente
color (por ejemplo rojo) en la casilla frente a las sefirot cuyo
valor (a) sea menor que la diferencia (g). Aquellas esferas cuyo
valor esté comprendido entre (f) y (g), incluidos estos últimos
valores, no recibirán marca alguna.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 497


11.4. Promedios y saldos positivos y negativos
por elementos
Utilizaremos en este caso la parte inferior del grupo 4, tomando
la parte superior como guía o ayuda memoria. En primer lugar
calcularemos el cuadro izquierdo, titulado Potencial: promedio de
los valores (a) de cada elemento. Los valores (a) son los que se han
calculado para cada sefirá en el cuadro 1 anterior.
• Fuego: Valores (a) de Keter, Jokmah y Binah. Se suman y el
resultado, dividido entre 3, se anota a la derecha del segundo
signo = de la fila.
• Agua: Valores (a) de Jesed, Gevurah y Tiferet. Se suman y el
resultado, dividido entre 3, se anota a la derecha del segundo
signo = de la fila.
• Aire: Valores (a) de Netzaj, Hod y Yesod. Se suman y el re-
sultado, dividido entre 3, se anota a la derecha del segundo
signo = de la fila.
• Tierra: Valor (a) de Maljut. Se anota a la derecha del primer signo
=dela fila.
Después calculamos el cuadro derecho, titulado Expresión: pro-
medio de los valores (a) de cada elemento.
• Fuego: Valores (a) de Jokmah, Gevurah y Netzaj. Se suman y
el resultado, dividido entre 3, se anota a la derecha del cuar-
to signo = de la fila.
• Agua: Valores (a) de Binah, Jesed y Hod. Se suman y el resulta-
do, dividido entre 3, se anota a la derecha del cuarto signo = de
la fila.
• Aire: Valores (a) de Keter, Tiferet y Yesod. Se suman y el resul-
tado, dividido entre 3, se anota a la derecha del cuarto = de la
fila.
• Tierra: Valor promedio (x). Se anota a la derecha del segundo
signo = de la fila.
El tercer paso es calcular la diferencia entre expresión y po-
tencial de cada elemento. Por tanto, si el valor de la expresión es
mayor que el del potencial, el resultado será positivo, y negativo
en caso contrario. En las tres casillas de la derecha, bajo el título
Comprob. (comprobación), verificaremos que la suma algebraica

498 V1LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


(positivos menos negativos) de los tres elementos Fuego, Agua
y Aire sea cero o próxima a cero, con una desviación máxima,
positiva o negativa, de 0,02. Si es mayor debemos revisar nuestros
cálculos, pues hay un error en alguna fase del proceso. En cuanto
al elemento Tierra, puede ser positivo, negativo, y muy raras ve-
ces cero, pero no hacemos más comprobación, si es que queremos
hacerla, que revisar los cálculos.

11.5. Promedio por pilares


Este último cálculo tiene por objeto determinar cuál de las tres co-
lumnas tiene mayor carga relativa. Sumando tal como se indica en
el cuadro del grupo 5, y efectuando las correspondientes divisio-
nes por 3 o por 4, según proceda, se obtienen estos promedios.

11. 6. Equilibrio o desequilibrio


en las cinco dimensiones del Árbol
Según quedó expuesto anteriormente (II Parte, sección 3.1.11, Tabla
VII y figura 13) el Sefer Yetzirah presenta al Árbol de la Vida como
el mapa dinámico de un universo de cinco dimensiones. Como
consecuencia de ello, aparecen en él cinco ejes polares, de los que
tres son espaciales, uno temporal y otro ético. Es, pues, posible
comparar las cargas relativas de los correspondientes polos en un
Árbol personal. Dicha comparación se hará por pares de sefirot, se-
gún la secuencia mencionada más arriba, y que es, recordémosla,
la siguiente:
Norte - Sur : Hod - Netzaj
Este - Oeste: Tiferet - Yesod
Aniba - Abajo: Keter - Maljut
Pasado - Futuro: Jokmah - Binah
Bien - Mal: Jesed - Guevurah
También recordaremos, finalmente, que los conceptos de bien y
mal se deben entender como expansión y restricción, respectivamente,
y son por lo tanto modificadores de las otras cuatro dimensiones.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 499


/

12. BúSQUEDA DEL SIGNO OCULTO EN EL ARBOL

hora estamos en disposición de encontrar en el Árbol personal un


A signo oculto, lo que no siempre es posible. Para ello, marcaremos
en un color determinado todas las esferas cuya carga (relación entre
líneas y senderos) sea superior a l. El conjunto de puntos así señalado
tal vez forme o evoque (o tal vez no) una figura concreta, una letra he-
brea, una runa, un signo conocido ... Nos fijaremos sobre todo en los
senderos subjetivos que unen esferas «fuertes», sobre todo si tales sen-
deros también aparecen con varias líneas. Miraremos el papel en que
hayamos dibujado el Árbol desde todas las posiciones, también boca
abajo y de lado, e incluso al trasluz por el dorso. Si encontramos algo,
lo anotaremos, así como la posición en la que lo encontramos. Si no
encontramos nada, haremos no obstante un pequeño diagrama, como
el de la figura 44, que incorporaremos al «expediente». Quién sabe si
eso que no hemos encontrado hoy podemos encontrarlo mañana .. .

o
o

o
o
o
Figura44
Ejemplo de puntos «fuertes» de un Árbol person,aJ (en gris, unidos por
líneas), los cuales parecen configurar una letra hebrea lámed ~).

500 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


13. LAS CONFIGURACIONES INCÓMODAS O ESPECIALES

S on consecuencia del flujo de circulación de la energía a lo


largo de los senderos del Árbol. La energía, procedente del
Ain Sof (Lo Imnanifestado), fluye desde Keter hacia Maljut,
como si fuese un sistema de canales que se unen en las sefiroth
(no así en los cinco puntos de cruce de las senderos 2 y 3, 4 y
8, 2 y 8, 6 y 8, y 14 y 16, que son a modo de puentes, en los que
pueden producirse interferencias y bloqueos). En consecuen-
cia, la energía puede ir en sentido vertical, de arriba a abajo;
diagonalmente, también de arriba a abajo; y horizontalmente,
en ambos sentidos.
En algunos árboles personales, sin embargo, se presentan configu-
raciones que denominamos «incómodas», pues eso es precisamente lo
que originan en el programa natal de esa persona: una incomodidad
mayor o menor, según su naturaleza, que afecta a su «forma de ser»,
a sus relaciones con los demás, y pone de manifiesto una fractura sub-
jetiva particularmente dolorosa entre los diferentes «pedazos» o «yoes
inferiores» de aquel ser humano. También las denominamos configu-
raciones especiales, las cuales tienen la función de disolver cristaliza-
ciones, facilitando así los flujos de energía y acelerando la evolución.
Los nombres de estas configuraciones aluden, bien a la naturaleza de
la incomodidad que manifiestan, bien a la forma que sugieren, y son
las siguientes:

Idolos Se aplica a Jokmah y/ o a Binah cuando no reciben


energía de Keter, ni directamente, ni de forma in-
directa a través de la sefirá opuesta. Significa, por
lo tanto, que aparecen en blanco los senderos Oy 3
(si el ídolo está sólo en Jokmah), o el 1 y el 3 (si está
sólo en Binah, figura 45) o el Oy el 1 (si es un ídolo
doble, figura 48).
Complejos Configuración similar a la anterior, pero aplicable a
Jesed y/ o a Gevurah (fig. 45). Significa que perma-
necen en blanco a la vez los senderos 5 y 8 (complejo
en Jesed), o bien el 7 y el 8 (complejo en Gevurah,
figura 45), o bien el 5 y el 7 (complejo doble).

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 501


Vampiros o «chupadores de sangre». Se aplica a Netzaj
y/ o a Hod en casos similares a los anteriores.
Permanecen en blanco a la vez los senderos 10, 13 y
16 (vampiro en Netzaj, figura 46), o bien el 12, el 15
y el 16 (vampiro en Hod), o bien el 10, el 12, el 13 y
el 15 (vampiro doble, figura 47)
Muertos Aplicable a cualquier sefirá en la que todos los
senderos subjetivos que confluyen estén vacíos de
líneas (figura 45). Esta configuración puede apare-
cer en cualquier sefirá, excepto en Tiferet.
Víbora Aplicable a Yesod cuando se encuentra unida al
resto del Árbol sólo por el sendero 21, es decir, el
que le comunica cort Maljut (figura 47).
Fractura El Árbol aparece cortado en dos o más pedazos,
generalmente por la parte inferior del Árbol.

Además de estas configuraciones, que pueden denominarse las


«grandes incómodas», hay otras cuatro (las «pequeñas incómo-
das») en las que, si bien llega a una sefirá determinada la energía
procedente de Keter, o bien no tiene salida, o bien ésta se produce
con dificultad. Estas configuraciones son:

Mosquito Yesod se encuentra unido solamente con Tiferet;


y a la vez están presentes los senderos 18 y 20.
No hay «mosquito» si no se cumplen a la vez to-
das las condiciones. Un «mosquito» imperfecto
implicaría que permanecen en blanco uno o am-
bos senderos, 18 y 20. Es en realidad una forma
exaltada de represión (ver más abajo).
Dictador Consiste en una unión directa (vertical) de Tiferet
a Yesod, y de aquí a Maljut, y, simultáneamente,
vacíos en los senderos 17 (La Estrella) y 19 (El Sol)
y con líneas el 18 y el 20. Si alguno o ambos de
estos últimos está en blanco, se trata de una confi-
guración en cierto modo degradada de dictador.
Vía Muerta Configuración que afecta exclusivamente a las se-
firot de las columnas laterales. Consiste en que una

502 V1L1.ARRUBI/\ / HAUT / MILLERA


Ídolo en
Binah

o
Muerto en
Netzaj

1 Figura45 I 1 Figura46 I

1 Figura47 I 1 Figura48 I

Ídolo en Binah Ídolo en Jokmah

El doble ídolo
enmascara un
Inserción está doble complejo
separada del resto yun doble vampiro

Algunos ejemplos de configuraciones especiales o incómodas

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 503


(o más de una, excepcionalmente) de estas sefirot
se halla unida al resto del Árbol exclusivamente
por una de las tres «vigas» horizontales (senderos
3, 8 o 16).
Represión Puede afectar a cualquier sefirá, excepto a Keter
y a Maljut. La energía entra, pero no tiene salida,
por estar cerrados todos los senderos inferiores a
esa sefirá.

Hay, finalmente, las incómodas o especiales temporales.


Cuando una sefirá tiene su entrada (o su salida) unida por una
línea oscilante, de tal modo que el sendero subjetivo correspon-
diente puede alcanzar en algún momento un valor cero (crisis),
durante unas horas o días (sendero de ciclo corto), o incluso
durante semanas o algunos meses, aparece la configuración in-
cómoda. Transcurrido el plazo de nulidad, el sendero vuelve
a abrirse (tomando un valor positivo: actividad YANG; o un
valor negativo: actividad YIN) y la configuración incómoda
desaparece.
Sin que deban considerarse en sí mismas como configura-
ciones incómodas, generan un cierto grado de incomodidad,
tensión o incluso conflicto todos aquellos senderos en los que
aparezcan tres o más líneas (sin contar las vocacionales, proce-
dentes de los bloques A, B o C).
Finalmente, existen otras configuraciones a las que damos el
nombre de semi-incómodas, o pseudo-configuraciones especia-
les, las cuales afectan sólo a las sefirot de los pilares laterales.
En estos casos, la energía procedente de Keter llega a la sefirá de
la columna lateral exclusivamente de su opuesta en la columna de
enfrente, aunque luego continúa hacia abajo en el Árbol. Pueden
verse configuraciones de este tipo en las figuras 46 (afectando a
Binah), 47 (también a Binah) y 48 (afectando a Netzaj).

504 V!LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


14. BúSQUEDA DE LOS TRES GENIOS PERSONALES

S egún diversos autores, cada ser humano tiene tres genios perso-
nales de entre los 72 que quedaron estudiados en la sección 3.10
de la II Parte. Uno de estos genios corresponde al cuerpo, otro a la
mente y el tercero al espíritu. No entraremos a examinar los exhor-
tos e invocaciones que varios de esos autores, sobre todo Lenain y
Kabaleb, proponen para cada uno de estos genios. Remitimos a su
obra a los lectores interesados, ya que en ella encontrarán cumpli-
da información sobre este asunto.
Lo que nos proponemos en esta sección de la obra es dar unas
pautas claras para la búsqueda de los tres genios personales.
Los dos primeros son de fácil búsqueda, ya que se asignan en fun-
ción del día y mes de nacimiento del sujeto. El tercero, en cam-
bio, es más complicado, pues hay que calcular las horas y minutos
transcurridos en el día de nacimiento desde la anterior salida del
sol hasta el momento de dicho nacimiento. Y ello plantea algunos
problemas:
• Conocer la hora de salida del sol cada día del año. El calendario
se desfasa, y esa es la razón de la existencia de los años bisiestos;
por eso, según los años, el sol no sale a la misma hora un mismo
día del año. Sin embargo, esta variación es pequeña, pudiéndo-
se estimar en aproximadamente 1 minuto y medio al año, hasta
alcanzarse los 6 minutos en el año bisiesto, en el cual esa varia-
ción se compensa.
• La curvatura de la superficie terrestre hace que los días sean más
largos en verano cuanto más al norte (hemisferio norte, verano
en junio-septiembre) o cuanto más al sur (hemisferio sur, vera-
no en diciembre-mazo). En países de gran diferencia de latitud
entre el norte y el sur, como Chile, Argentina, Rusia o Canadá,
el efecto de la curvatura impone notables diferencias en cuan-
to a la hora de salida del sol entre el norte y el sur del país.
Sin embargo, en países relativamente pequeños, como España,
este efecto puede despreciarse.
• Mayor importancia tiene la diferencia de longitud este-oeste.
Sin salir de España, la diferencia horaria entre Mahón, en la isla

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 505


balear de Menorca, y Santa Cruz de la Palma, en Canarias, es de
casi hora y media. Por eso es necesario corregir el efecto de la
longitud en función de la localidad de nacimiento.
• Por último, la hora real no coincide con la hora oficial, que en
el caso de España, es única para todo el territorio nacional, ex-
cepto para Canarias, que lleva una hora de retraso. Además del
adelanto de una hora de la hora oficial respecto a la real, que se
ha mantenido durante largos períodos a lo largo del siglo XX,
periódicamente se incrementa en otra hora más, lo que ha ocu-
rrido muchos años durante los meses de verano.
Las tablas XXVII, XXVIII y XXIX recogen los datos necesarios
para efectuar estos ajustes y correcciones. La naturaleza de esta
obra, dirigida al lector español, impone que no se tengan en cuenta
similares circunstancias para otros países, por lo que, si el nativo es
natural de otro país, deberán realizarse las oportunas correcciones
para encontrar los datos necesarios de cara a la búsqueda del ge-
nio espiritual. Dichos cuadros son los siguientes:
• Tabla XXVII. Hora media local de salida del sol en España.
• Tabla XXVIII. Corrección por diferencia horaria según locali-
dades españolas. Esta corrección debe aplicarse sobre la hora
de nacimiento. En caso de no figurar en la tabla la localidad de
nacimiento, debe buscarse la que tenga la longitud (meridiano)
más aproximada que aparezca en la tabla, ayudándose si fuere
preciso con un mapa. El detalle que tienen los mapas de carrete-
ras los hace recomendables para este fin.
• Tabla XXIX. Conversión de la hora legal en España a la hora
solar, desde 1 de enero de 1901 hasta 31 de diciembre de 2002,
que se aplica igualmente a la hora de nacimiento.
Una vez corregida la hora de nacimiento con los datos de las
tablas XXVII y XXVIII, se restará de ella la de salida del sol de
ese día, según la tabla XXIX, y el resultado permitirá buscar direc-
tamente el genio del espíritu en la segunda columna empezando
por la derecha de la tabla XXX. Si el nacimiento se hubiere produ-
cido durante la madrugada, y por tanto antes de la salida del sol,
se debe buscar el tiempo transcurrido desde la aurora del día an-
terior, sumando 24 a la hora de nacimiento, a la vez que quitamos
un día. Por último, si los minutos de la hora de nacimiento fuesen

506 V!LLARRUBIA / H AUT / MILLERA


inferiores a los de la hora de salida del sol, para efectuar la resta
hay que hacer una conversión previa, consistente en quitar una
hora a la de nacimiento, y sumar a la vez 60 a los minutos.
Dos ejemplos ilustrarán el párrafo anterior. Si la hora de naci-
miento, una vez corregida por localidad y hora legal, fuesen a las
4 horas y 10 minutos del día 21 de septiembre, comprobamos en la
tabla XXVII que ese día el sol sale a las 5,42 horas. Entonces, como
primera operación, deberemos buscar la hora de salida del sol
del día anterior, 20 de septiembre, y comprobaremos que es a las
5,41 horas. Pero como también los minutos de la hora de nacimien-
to son menores que los de la salida del sol, deberemos corregir
aquélla, transformando las 4,10 horas en las 3,70 horas; y como hay
que hacer también la corrección horaria, sumaremos 24 a las horas,
y diremos que las 4,10 horas del 21 de septiembre son las 27,70 ho-
ras del 20 de septiembre. Ahora ya podemos efectuar la operación
de resta respecto a la hora de salida del sol:

Hora de nacimiento: 27 horas 70 minutos


Hora de salida del sol (día anterior): 5 horas 41 minutos
Diferencia 22 horas 29 minutos

Una consulta a la Tabla XXX nos permitirá averiguar, finalmen-


te, que el genio del espíritu en este caso es el número 68, Jabuiah,
puesto que su hora es el intervalo comprendido entre las 22:20 y
las 22:40 horas.
Después de dichos cuadros se insertan una tablas más en la que
aparecen los nombres de los genios y sus fechas y horas corres-
pondientes, así como la carta del tarot (naipes del 2 al 10 de cada
palo) asignada a cada genio. Como puede observarse, cada carta
tiene dos genios, por lo que se debe considerar al primero de ellos
(de número de orden impar) como nocturno y al segundo como
diurno, ya que en el judaísmo se considera que el día comienza a
la puesta del sol, tal como relata los seis días de la creación el libro
del Génesis:

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 507


« Y llamó Dios a la luz, día, y a la oscuridad llamó noche. Y fue
tarde y fue mañana: día uno» (Génesis 1: 5).

EJERCICIO
38. Escribe la transcripción fonética deltexto hebreo ante.:c
rior, y trata de localizar las palabrashebreas equivalentes ª"
· tarde y mañana. · ·

La Tabla XXX se ha dividido a su vez en tres, cada una de las


cuales contiene 24 genios. De esta forma, su contenido se ajusta al
texto del Sefer ha-Bahir (ver antes II Parte, sección 3.12), lo que a su
vez será de suma utilidad para buscar los genios del tikún según
la fórmula personal, concepto que se desarrolla en la V Parte de la
obra, sección 10.5.
Los significados de los nombres de cada uno de los genios (y por
consiguiente, su naturaleza amable o áspera) puede repasarse en
la II Parte de la obra, sección 3.12. Por su parte, las conexiones o
correspondencias entre los genios, los arcanos menores del tarot
y las Tríadas del Árbol aparecen desarrolladas en dicha II Parte,
sección 3.13.

508 VJLLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Tabla XXVII

Horas medias de salida del sol en España cada día del año
Hora media solar de la salida del sol en España cada día
del año (Enero-Junio)
Ene Hora Feb Hora Mar Hora Abr Hora Mav Hora Jun Hora
01 07:22 01 7:08 01 6:31 01 5:40 01 4:53 01 4:25
02 07:22 02 7:07 02 6:30 02 5:38 02 4:52 02 4:24
03 07:23 03 7:06 03 6:28 03 5:36 03 4:51 03 4:24
04 07:23 04 7:05 04 6:26 04 5:35 04 4:50 04 4:23
05 07:23 05 7:04 05 6:25 05 5:33 05 4:48 05 4:23
06 07:23 06 7:03 06 6:23 06 5:31 06 4:48 06 4:23
07 07:22 07 7:01 07 6:22 07 5:30 07 4:47 07 4:22
08 07:22 08 7:00 08 6:20 08 5:28 08 4:46 08 4:22
09 07:22 09 6:59 09 6:18 09 5:26 09 4:44 09 4:22
10 07:22 10 6:58 10 6:17 10 5:25 10 4:42 10 4:22
11 07:22 11 6:57 11 6:15 11 5:23 11 4:41 11 4:22
12 07:21 12 6:55 12 6:13 12 5:22 12 4:40 12 4:21
13 07:21 13 6:54 13 6:12 13 5:20 13 4:39 13 4:21
14 07:21 14 6:53 14 6 :10 14 5:18 14 4:38 14 4:21
15 07:20 15 6:51 15 6:08 15 5:17 15 4:37 15 4:21
16 07:19 16 6:50 16 6:06 16 5:15 16 4:36 16 4:21
17 07:19 17 6:49 17 6:04 17 5:14 17 4:35 17 4:21
18 07:19 18 6:47 18 6:03 18 5:12 18 4:34 18 4:22
19 07:18 19 6:46 19 6:02 19 5:11 19 4:33 19 4:22
20 07:18 20 6:45 20 6:00 20 5:09 20 4:32 20 4:22
21 07:17 21 6:43 21 5:58 21 5:07 21 4:32 21 4:22
22 07:16 22 6:42 22 5:57 22 5:06 22 4:31 22 4:22
23 07:16 23 6:40 23 5:55 23 5:05 23 4:30 23 4:22
24 07:15 24 6:39 24 5:53 24 5:03 24 4:29 24 4:23
25 07:14 25 6:37 25 5:51 25 5:02 25 4:29 25 4:23
26 07:13 26 6:36 26 5:50 26 5:00 26 4:28 26 4:23
27 07:13 27 6:34 27 5:48 27 4:59 27 4:27 27 4:24
28 07:12 28 6:33 28 5:46 28 4:57 28 4:27 28 4:24
29 07:11 29 5:45 29 4:56 29 4:26 29 4:25
30 07:10 30 5:43 30 4:55 30 4:26 30 4:25
31 07:09 31 5:41 31 4:25
Nota: En los anos bisiestos, el dia 29 de febrero se puede estimar la hora media de la salida del sol en
las 6:32.

Hora media solar de la salida del sol en España cada día


del año (Julio-Diciembre)
Jul Hora Ano Hora Set Hora Ocl Hora Nov Hora Die Hora
01 04:25 01 4:50 01 5:22 01 5:52 01 6:27 01 7:02
02 04:26 02 4:51 02 5:22 02 5:53 02 6:28 02 7:03
03 04:27 03 4:52 03 5:23 03 5:54 03 6:30 03 7:04
04 04:27 04 4:53 04 5:25 04 5:55 04 6:31 04 7:05
05 04:28 05 4:54 05 5:26 05 5:56 05 6:32 05 7:06
06 04:28 06 4:55 06 5:27 06 5:57 06 6:33 06 7:07
07 04 :29 07 4:56 07 5:28 07 5:58 07 6:34 07 7:08
08 04:30 08 4:57 08 5:29 08 6:00 08 6:36 08 7:09
09 04:30 09 4:58 09 5:30 09 6:01 09 6:37 09 7:10
10 04:31 10 4:59 10 5:31 10 6:02 10 6:38 10 7:11
11 04:32 11 5:00 11 5:32 11 6:03 11 6:39 11 7:12
12 04:33 12 5:01 12 5:33 12 6:04 12 6:41 12 7:13
13 04:33 13 5:02 13 5:34 13 6:05 13 6:42 13 7:13
14 04:34 14 5:03 14 5:35 14 6:06 14 6 :43 14 7:14
15 04:35 15 5:04 15 5:36 15 6:07 15 6:44 15 . 7:16
16 04:35 16 5:05 16 5:37 16 6:09 16 6:45 16 7:16
17 04:36 17 5:06 17 5:38 17 6:10 17 6:47 17 7:16
18 04:37 18 5:07 18 5:39 18 6:11 18 6:48 18 7:17
19 04:38 19 5:08 19 5:40 19 6:12 19 6 :49 19 7:18
20 04:39 20 5:09 20 5:41 20 6:13 20 6 :50 20 7:18
21 04:40 21 5:10 21 5:42 21 6:14 21 6 :51 21 7:19
22 04:41 22 5:11 22 5:43 22 6:15 22 6:52 22 7:19
23 04:42 23 5:12 23 5:44 23 6:16 23 6 :53 23 7:20
24 04:42 24 5:13 24 5:45 24 6:18 24 6:55 24 7:20
25 04:43 25 5:14 25 5:46 25 6:19 25 6 :56 25 7:21
26 04:44 26 5:15 26 5:47 26 6:20 26 6:57 26 7:21
27 04:45 27 5:16 27 5:48 27 6:21 27 6:58 27 7:21
28 04:46 28 5:17 28 5:49 28 6:22 28 6 :59 28 7:22
29 04:47 29 5:18 29 5:50 29 6:23 29 7:00 29 7:22
30 04:48 30 5:19 30 5:51 30 6:24 30 7:01 30 7:22
31 04:49 31 5:21 31 6:26 31 7:22

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 509


Tabla XXVIII
Diferencias solares en España respecto a la hora solar de Greenwich
-Las cifras se refieren a minutos-

Sumar o restar el tiempo, que se refiere a horas y minutos

Sumar: Restar: Restar:


Barcelona 0,09 Cádiz O 25 Oviedo O 24
Gerona O 11 Calatavud O 05 Palencia 0,18
Ibiza 0,07 Cartaoena 0,05 Pamolona 007
Lérida 0,02 Ceuta O 24 Ponferrada 0,25
Mahón 0,17 Ciudad Real 0,16 Pontevedra O 34
Manacor O 13 Ciudad Rodri□o O 26 Puebla de Sanabria 0,25
Manresa 0,08 Córdoba 0,19 Pt•. de la Cruz 1 06
Palma de Mallorca O 11 Cuenca O 09 PI'. Rosario 0,56
Tarragona 0,05 El Ferrol 0,33 Puertollano 0,16
Tortosa 0,02 Finislerre O 35 Ribadeo 0,28
Fuenlabrada 0,16 Salamanca O 23
Sin variación: Getafe 0,15 San Sebastián 0,08
S. Sebastián de la
Castellón de la Plana 0,00 Gijón 0,23 1,08
Gomera
Denia 0,00 Granada 0,14 Santander 0,15
Guadalaiara 0,13 Santa Cruz de la Palma 1,12
Restar: Huelva 0,28 st•. Cruz de Tenerife 1,04
Albacete 0,07 Huesca 0,02 Santiaao de Comoostela 0,33
Alcalá de Henares 0,14 lrún 0,07 Seaovia 0,17
Alcázar S. Juan 0,13 Jaén 0,15 Sevilla O 24
Alcorcón 0,15 Jerez de la Frontera 0,25 Soria 0,10
Alaeciras 0,24 La Coruña 0,33 Talavera 019
Las Palmas de Gran
Alicante 0,02 1,00 Teruel 0,05
Canaria.
Almadén O 20 León O 22 Toledo 0,16
Almería 0,10 Loaroño 0,10 Toro O 20
Aranda de Duero 0,15 Luao O 30 Torrelaveaa 0,15
Arenas de San Pedro 0,18 Madrid 0,15 Tudela 0,07
Arrecife de Lanzarote 0,54 Málaqa 018 Valdeoeñas 0,14
Avila 0,19 Marbella 0,20 Valencia 0,02
Astorga 0,24 Melilla 0,12 Valverde de Hierro 1,12

51 Ü VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Tabla XXIX
1. Conversión de la hora legal en España a la hora solar
De 1/01/1901 a 31/12/1973

1901 Hasta las O h. del 1 de enero Ninauna


1901 Desde 1/01 a las O h. Hora legal iguai a solar hasta
15/04/1918
1918 De 15/04 a 23 h. a 7/10 a 1 h. Restar 1 h.
1919 De 6/04 a 23 h. a 7/10 a 24 h. Restar 1 h.
1924 De 16/04 a 23 h. a 4/1 O a 24 h. Restar 1 h.
1926 De 17/04 a 23 h. a 2/10 a 24 h Restar 1 h.
1927 De 17/04 a 23 h. a 1/10 a 24 h. Restar 1 h.
1928 De 17/04 a 23 h. a 1/10 a 24 h. Restar 1 h.
1929 De 17/04 a 23 h. a 1/10 a 24 h. Restar 1 h.
Período de la guerra civil
Zona fran<1uista
1937 De 22/05 a 23 h. a 2/1 O a O h. Restar 1 h.
1938 De 26/03 a 23 h. a 1/10 a O h. Restar 1 h.
Período de la guerra civil
Zona republicana
1937 De 16/06 a 23 h. a6/10 a O h. Restar 1 h.
1938 De 2/04 a 23 h. a 30/04 a 23 h. Restar 1 h.
De 30/04 a 23 h. a 2/10 a 24 h. Restar 2 h.
Resto del año Restar 1 h
1939 Hasta el 2/04 Restar 1 h
Totalidad de Esoaña
1939 De 15/04 a 23 h. a 7/10 a O h. Restar 1 h.
1940 De 16/03 a 23 ha fin de año Restar 1 h.
1941 Todo el año Restar 1 h.
1942 Hasta el 2/05 a 23 h. Restar 1 h.
De 2/05 a 23 h. a 1/09 a1 h. Restar 2 h.
Resto del año Restar 1 h.
1943 Hasta el 17/04 a 23 h. Restar 1 h.
De 17/04 a 23 h. a 3/10 a 1 h. Restar 2 h.
Resto del año Restar 1 h.
1944 Hasta el 15/04 a 23 h. Restar 1 h.
De 15/04 a 23 h. a 1/1 o a 1 h. Restar 2 h.
Resto del año Restar 1 h.
1945 Hasta el 14/04 a 23 h. Restar 1 h.
De 14/04 a 23 h. a 30/09 a 1 h. Restar 2 h.
Resto del año Restar 1 h.
1946 Hasta el 13/04 a 23 h. Restar 1 h.
De 13/04 a 23 h. a 29/09 a 1 h. Restar 2 h.
Resto del año Restar 1 h.
1947 Todo el año Restar 1 h.
1948 Todo el año Restar 1 h.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 511


Tabla XXIX
2. Conversión de la hora legal en España a la hora solar
De 1/01/1974 a 31/ 12/1989

Hasta Operación
año Período
a realizar
1974 Hasta el 13 de abril a las 23 h. Restar una hora
Del 13 de abril a las 23 h. al 6 de octubre a la 1 h. Restar dos hora
Resto del año Restar una hora
1975 Hasta 12 de abril a las 23 h. Restar una hora
Del 12 de abril a las 23 h. al 4 de octubre a la 1 h. Restar dos hora
Resto del año Restar una hora
1976 Hasta el 2 7 de marzo a las 23 h. Restar una hora
Del 27 de marzo a las 23 h. a l 25 de septiembre a las 24 h. Restar dos hora
Resto del año Restar una hora
1977 Hasta el 2 de abril a las 23 h. Restar una hora
Del 2 de abri l a las 23 h. a l 24 de septiembre a las 24 h. Restar dos hora
Resto del a ño Restar una hora
1978 Hasta el 2 de abril a las 23 h. Restar una hora
Del 2 de abri l a las 23 h. a l 1 de octubre a las 3 h. Restar dos hora
Resto del año Restar una hora
1979 Hasta el 1 de abril a las 2 h. Restar una hora
Del 1 de abri l a las 2 h. a l 30 de septiembre a las 3 h. Restar dos hora
Resto del año Restar una hora
1980 Hasta el 6 de abril a las 2 h. Restar una hora
Del 6 de abril a las 2 h. a l 28 de septiembre a las 3 h. Restar dos hora
Resto del a ño Restar una hora
1981 Hasta e l 29 de marzo a las 2 h. Restar una hora
Del 29 de marzo a las 2 h. al 27 de septiembre a las 3 h. Restar dos hora
Resto del a ño Resta r una hora
1982 Hasta es 28 de marzo a las 2 h. Restar una hora
Del 28 de marzo a las 2 h. al 26 de septiembre a las 2 h. Restar dos hora
Resto del a ño Resta r una hora
1983 Hasta el 27 de marzo a las 2 h. Restar una hora
Del 27 de ma rzo a las 2 h. al 25 de septie mbre a las 3 h. Restar dos hora
Resto del a ño Restar una hora
1984 Hasta el 24 de marzo a las 2 h. Restar una hora
Del 24 de marzo a las 2 h. al 30 de septiembre a las 3 h. Restar dos hora
Resto del a ño Restar una hora
1985 Hasta el 31 de marzo a las 2 h. Restar una hora
Del 31 de marzo a las 2 h. al 29 de septiembre a las 3 h. Restar dos hora
Resto del a ño Resta r una hora
1986 Hasta e l 29 de marzo a las 2 h. Restar una hora
Del 29 de marzo a las 2 h. al 28 de septiembre a las 3 h. Restar dos hora
Resto del año Resta r una hora
1987 Hasta e l 29 de marzo a las 2 h. Restar una hora
Del 29 de marzo a las 2 h. al 27 de septie mbre a las 3 h. Restar dos hora
Resto de a ño Restar una hora
1988 Hasta e l 27 de marzo a las 2 h. Restar una hora
Del 27 de marzo a las 2 h. a l 25 de septie mbre a las 3 h. Restar dos hora
Resto del año Resta r una hora
1989 Hasta el 26 de marzo a las 2 h. Restar una hora
Del 26 de marzo a las 2 h. a l 24 de septiembre a las 3 h. Restar dos hora
Resto del año Restar una hora

5 12 ViLLARRU BIA / H AUT / MI LLERA


Tabla XXIX
3. Conversión de la hora legal en España a la hora solar
De 1/01/1990 a 31/12/2002

Hasta Operación
Período
año a realizar
1990 Hasta el 25 de marzo a las 2 h. Restar una hora
Del 25 de marzo a las 2 h. hasta el 28 de octubre a las 3 h. Restar dos hora
Resto del año Restar una hora
1991 Hasta el 31 de marzo a las 2 h. Restar una hora
Del 31 de marzo a las 2 h. hasta el 27 de octubre a las 3 h. Restar dos hora
Resto del a,10 Restar una hora
1992 Hasta el 29 de marzo a las 2 h. Restar una hora
Del 29 de marzo a las 2 h. hasta el 25 de octubre a las 3 h. Restar dos hora
Resto del año Restar una hora
1993 Hasta el 28 de marzo a las 2 h. Restar una hora
Del 28 de marzo a las 2 h. hasta el 31 de octubre a las 3 h. Restar dos hora
Resto del a ño Restar una hora
1994 Hasta el 2 7 de marzo a las 2 h. Restar una hora
Del 27 de marzo a las 2 h. hasta e l 30 de octubre a las 3 h. Restar dos hora
Resto del año Restar una hora
1995 Hasta el 26 de marzo a las 2 h. hasta el 29 de octubre a las 3 h. Restar una hora
Del 26 de marzo a las 2 h. hasta el 29 de octubre a las 3 h. Restar dos hora
Resto del año Restar una hora
1996 Hasta el 31 de marzo a las 2 h. Restar una hora
Del 31 de marzo a las 2 h. hasta el 2 7 de octubre a las 3 h. Restar dos hora
Resto del año Restar una hora
1997 Hasta el 30 de marzo a las 2 h. Restar una hora
Del 30 de marzo a las 2 h. hasta el 2 6 de octubre a las 3 h. Restar dos hora
Resto del año Restar una hora
1998 Hasta el 29 de marzo a las 2h. Restar una hora
Del 29 de marzo a las 2h. hasta el 31 de octubre a las 3 h. Restar dos hora
Resto del año Restar una hora
1999 Hasta el 28 de marzo a las 2 h. Restar una hora
Del 28 de marzo a las 2 h. hasta el 31 de octubre a las 3 h. Restar dos hora
Resto del año Restar una hora
2000 Hasta el 25 de marzo a las 2 h. Restar una hora
Del 25 de marzo a las 2 h. hasta el 29 de octubre a las 3 h. Restar dos hora
Resto del año Restar una hora
2001 Hasta el 25 de marzo a las 2 h. Restar una hora
Del 25 de marzo a las 2 h. hasta el 28 de octubre a las 3 h. Restar dos hora
Resto del año Restar una hora
2002 Hasta el 31 de marzo a las 2 h. Restar una hora
Del 31 de marzo a las 2 h. hasta el 27 de octubre a las 3 h. Restar dos hora
Resto del año Restar una hora

MAN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 513


Tabla XXX
l. Genios del Árbol según fecha y hora de nacimiento

Nº Nombre Hebreo Cuerpo - - - - M e n t e - - - - Espíritu Tarot


1 Vehuiah :,,,,, 21/03-25/03 03/06 18/08 31/1 O 09/01 00:00-00:20 5Bn

2 Yeliel ',N"'' 26/03-30/03 04/06 19/08 01/11 10/01 22/03 00:20-00:40 SBd
3 Sitael ',Nto"O 3 1/03-04/04 05/06 20/08 02/11 11 /01 23/03 00:40-01 :00 6Bn

4 Elemiah il'º'V 05/04-09/04 06/06 21/08 03/11 12/01 24/03 01 :00-01 :20 6Bd

5 Mahasiah i!"!UilO 1 0/04-15-04 07/06 22/08 04/11 13/01 25/03 01 :20-01 :40 7Bn
23/08
6 Lelahel ',Nil',', 16/04-20/04 08/06 24/08 04/11 14/01 26/03 01 :40-02:00 7Bd

7 Ajaiah ¡,-~N~~ 21/04-25/04 09/06 25/08 05/11 15/01 27/03 02:00-02:20 8On

8 Kahetel ',Nni:i 26/04-30/04 10/06 26/08 06/11 16/01 28/03 02:20-02:40 8Od

11/06
9 Haziel ',N''lil O1/05-05/05 12/06 27/08 07/11 17/01 29/03 02 :40-03 :00 9On
10 Aladiah :,-,',N 06/05-11/05 13/06 28/08 08/11 18/01 30/03 03:00-03:20 9Od

11 Lauviyah i!'iN', 12/05-1 6/05 14/06 29/08 09/11 19/01 31/03 03 :20-03 :40 10On
12 Hahaiah il'j1ilil 17/05-21/05 15/06 30/08 10/11 20/01 01/04 03:40-04:00 10Od
13 lezalel ',N','f' 22/05-26/05 16/06 31/08 11/11 21/01 02/04 04:00-04:20 2En
14 Mebahel ',N:,.:o 27/05-31/05 17/06 01/09 12/11 22/01 03/04 04:20-04:40 2Ed
15 Hariel ',N-,il 01/06-06/06 18/06 02/09 13/11 23/01 04/04 04:40-05:00 3En

16 Hakamiah il'Oj'il 07/06-11 /06 19/06 03/09 14/11 24/01 05/04 05:00-05:20 3Ed
17 Lauviah il'iN', 12/06-1 6/06 20/06 04/09 15/11 25/01 06/04 05:20-05:40 4En
18 Kaliel ',N-',:i 1 7/06-21 /06 21/06 05/09 16/11 26/01 07/04 05:40-06:00 4Ed

19 Leuviah il,,,, 22/06-2 7/06 22/06 06/09 17/11 27/01 08/04 06:00:06:20 sen

20 Pahaliah il'',illl 28/06-02/07 23/06 07/09 18/11 28/01 09/04 06:20-06:40 sed
10/04
21 Neljael ',t(:)',J 03/07-07/07 24/06 08/09 19/11 29/01 11/04 06:40-07:00 6en

22 Yeyayel ,N.,.., 08/07-12/07 25/06 9/09 20/11 30/01 12/04 07:00-07:20 6ed
23 Melahel ',N:,',o 13/07-18/07 26/06 10/09 21 /11 31/01 13/04 07:20-07:40 7en
11/09
24 Hahiniah i!'Jilil 19/07-23/07 27/06 12/09 22/11 01/02 14/04 07:40-08:00 7ed

514 V1LLARRU BIA / HAUT / MILLERA


Notas:
Nº - Indica número de orden según aparecen los nombres de los genios en la
II Parte.
Tarot: B: Bastos - C: Copas - E: Espadas - O: Oros. La indicación 'n' o 'd' indica la
naturaleza, nocturna o diurna, respectivamente, del genio, la cual puede dedu-
cirse del Libro del Génesis, cap. I, en el que se describe el proceso de la Creación,
señalándose que cada uno de sus días empieza siempre por 1a noche, esto es,
a la puesta del sol. El ritual judío tiene en cuenta esta circunstancia, por ejemplo,
para establecer el comienzo y el fin del shabath.
Las horas indicadas en la columna 'Espíritu' son las transcurridas desde el últi-
mo amanecer hasta la hora del nacimiento del sujeto.

Para la búsqueda del tikún los genios incluidos en esta página se consideran de
carácter unificador (v. V Parte).

MANUAL DE KABBALAH PRÁCT/Ci\ 515


Tabla XXX
2. Genios del Árbol según fecha y hora de nacimiento

Nº Nombre Hebreo Cuerpo - - - - M e n t e - - - - Espíritu Tarot


25 Nit-Haiah il'i'U"1J 24/07-28-07 28/06 13/09 23/11 02/02 15/04 08:00-08:20 8Bn
26 Haaiahl il'NNil 29/07-02/08 29/06 14/09 24/11 03/02 16/04 08:20-08:40 8Bd
30/06
27 lerathel ',Nm' 03/08-07/08 01/07 15/09 25/11 04/02 17/04 08:40-09:00 9Bn
28 Seehiah il'ilKW 08/08-13/08 02/07 16/09 26/11 05/02 18/04 09:00-09:20 9Bd
29 Reiiel ',N''i 14/08-1 8-08 03/07 17/09 27/11 06/02 19/04 09:20-09:40 lOBn
30 Omael ',NK01 19/08-23/08 04/07 18/09 28/11 07/02 20/04 09:40-10:00 l0Bd
31 Lekabel ',N.,::)', 24/08-28/08 05/07 19/09 29/11 08/02 21/04 10:00-1 0:20 2On
32 Vasariah n,,w, 29/08-02/09 06/07 20/09 3'0/11 09/02 22/04 10:20-10:40 2Od
33 lejuiah i1'1M' 03/09-08/09 07107 21/09 01/12 10/02 23/04 1 0:40-11 :00 3On

34 Lehajiah il'Mil', 09/09-13/09 08/07 22/09 02/12 11/02 24/04 11:00-11:20 3Od
35 Javakiah ilj-11:) 14/09-18/09 09/07 23/09 03/12 12/02 25/04 11 :20-11:40 4On
36 Menadel ',Ki~ 19/09-23/09 10/07 24/09 04/12 12/02 26/04 11 :40-12 :00 4Od
37 Aniel ,~..,J~• 24/09-28/09 11/07 25/09 05/12 13/02 27/04 12:00-12:20 5En
38 Jaamiah n•~pn 29/09-03/1 O 12/07 26/09 06/12 14/02 28/04 12:20-12:40 5Ed
39 Rehael ,~pn, 04/1 0-08/1 O 13/07 27/09 07/12 15/02 29/04 12 :40-13 :00 6En

40 leiazel ,~r" 09/1 O-13/1 O 14/07 28/09 08/12 16/02 30/04 13:00-13:20 6Ed
41 Hehahel ',~;¡;¡;¡ 14/1 O-1 8/1 O 15/07 29/09 09/12 17/02 01/05 13:20-13:40 7En
42 Mikael ',I'(:)~ 19/1 0-23/1 O 16/07 30/09 10/12 18/02 02/05 13:40-14:00 7Ed

43 Vewalia ;,.,i,,, 2 4/10-28/1 O 17/07 01/10 l 1/12 19/02 03/05 14:00:14:20 8Cn

44 lelah iah il'il" 2 9/1 0-02/11 18/07 02/1 O 12/12 20/02 04/05 14:20-14:40 8Cd
45 Sealiah ;,.,i,~c 03/11-07/1 l 19/07 03/10 13/12 21/02 05/05 14:40-15:00 9Cn

46 Ariel ',K'ip 08/11 -l 2/11 20/07 04/10 14/12 22/02 06/05 15:00-15:20 9Cd
47 Asaliah ;,.,i,wp 13/11-1 7/11 21/07 05/10 15/12 23/02 07/05 15:20-15:40 10Cn
22/07
48 Mihael ',l'(il'~ 18/11-22/11 23/07 06/10 16/12 24/02 08/05 15:40-16:00 lOCd

Notas: Ver tabla anterior

Para la búsqueda del tikún los genios incluidos en esta página se


consideran de carácter de apoyo a la consciencia (v. V Parte).

51 6 V ILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Tabla XXX
3. Genios del Árbol según fecha y hora de nacimiento

Nº Nombre Hebreo Cuerpo - - - - M e n t e - - - - Espíritu Tarot


49 Vehuel ',i,c1,,, 23/11-27/11 24/07 07/10 17/12 25/02 09/05 16:00-16:20 2Bn
50 Daniel ',i,c•Ji 2 8/11 -02/12 25/07 08/1 O 18/12 26/02 10/05 16:20-16:40 2Bd
51 Hajasiah i!"',1lrii! 03/12-07/12 26/07 09/10 19/12 27/02 11/05 16:40-17:00 3Bn
28/02 12/05
52 lmamiah il'tlQ): 08/12-12/12 27107 10/1 O 20/12 29/02 13/05 17:00-17:20 3Bd
53 Nanael ',~i,cJJ 13/12-17/12 28/07 11/1 O 21/12 01/03 14/05 17:20-17:40 48n
54 Nithael ',N.n'J 18/12-22/12 29/07 12/1 O 22/12 02/03 15/05 17:40-18:00 4Bd
55 Mebahiah i!'il=c 23/12-27/12 30/07 13/1 O 23/12 03/03 16/05 18:00-18:20 5On
56 Poiel ',N'1tl 28/12-31 /12 31/07 14/1 O 24/12 04/03 17/05 18:20-18:40 5Od
57 Nemamiah i!"t;t)J 01/01-05/01 01/08 15/ 1O 25/12 05103 18/05 18:40-19:00 6On
58 leialael 06/01-10/01 02/08 16/1 O 26/12 06/03 19/05 19:00-19:20 6Od
59 Harajel
'l'C'"
',i,cmi! 11/01 -15/01 03/08 17/1 O 27/12 07/03 20/05 19:20-19:40 7011

60 Mitzrael ,,,Je 16/01-20/01 04/08 18/1 O 27/12 08/03 21/05 19:40-20:00 7Od
61 Umabel ,~=e, 21/01-25/01 05108 19/1 O 28/12 09/03 22/05 20:00-20:20 8En
62 lah-hel ',Kili!' 26/01 -30/01 06/08 20/10 29/12 10/03 23/05 20:20-20:40 8Ed
63 Anauel ',i,c'U¡: 31/01 -04/02 07/08 21/10 30/12 11/03 24/05 20:40-21 :00 9En
64 Mejiel ',N'l"!Q 05/02-09/02 08/08 22/10 31/12 12/03 25/05 21 :00-21 :20 6Ed

65 Damabiah il'=Qi 10/02-14/02 09/08 23/1 O 01/01 13/03 26/05 21 :20-21 :40 10En
66 Manakel ,1-t¡,JC 15/02-19/02 10/08 24/1 O 02/01 14/03 27105 21 :40-22:00 lOEd
67 Eiael 'NV'K 20/02-24/02 11/08 25/10 03/01 15/03 28/05 22:00-22:20 2Cn
68 Jabuiah i!•i~rr 25/02-01 /03 12/08 26/10 04/01 16/03 29105 22:20-22:40 2Cd
69 Rohel 1,1-ti!Ni 02/03-06/03 13/08 27/10 05/01 17/03 30/05 22:40-23:00 3Cn
70 Yabamiah l'l'tl=' 07/03-11 /03 14/08 28/1 O 06/01 18/03 31/05 23:00-23:20 3Cd
15/08
71 Hayaiel ',i<"i! 12/03-1 6/03 16/08 29/1 O 07/01 19/03 01/06 23:20-23:40 4Cn
72 Mumiah il'Qitl 17/03-21/03 17/08 30/10 08/01 20/03 02/06 23:40-24:00 4Ccl

Notas: Ver tabla anterior

Para la búsqueda del tikún los genios incluidos en esta página se


consideran de carácter expansivo (v. V Parte).

MANUAL DE KABB/\LAH PRÁCTICA 51 7


/

IV LA INTERPRETACIÓN DEL ARBOL PERSONAL


1. CONSIDERACIONES PREVIAS

L a Kabbalah nos ofrece el cálculo e interpretación del Árbol de


la Vida personal como una herramienta inestimable para cono-
cernos a nosotros mismos y descubrir nuestro Programa de Vida
personal, con el objeto de aprender a valorarnos adecuadamente
para poder realizarlo.
Vivimos en un mundo en el cual nos llega información dis-
torsionada acerca del ideal o modelo de persona adecuada para
triunfar. Cada uno de nosotros es como es por una buena razón.
Podemos cambiar muchas cosas en nosotros siempre que vayan
en sintonía con lo que somos, pero no podemos convertirnos en
radicalmente otros sin resentirnos en algún punto de nuestra
estructura personal. Si nos comparamos con herramientas de
trabajo, un martillo está diseñado para ejercer de martillo, para
dar golpes, y puede ser un experto en golpear con efectos sor-
prendentes. Si se ve obligado por las circunstancias o por sí mis-
mo a comportarse como un cincel, nunca alcanzará la maestría
necesaria para hacer un trabajo delicado, porque su cuerpo está
diseñado para otro fin. Al final, no será ni un buen martillo ni
un buen cincel. Será una herramienta frustrada, porque ni puede
ser quien es, ni quien quisiera ser.

MANUAL DE KAllllALAI-I PRÁCTICA 521


Determinados intereses que crean modas como negocio para
fomentar el consumo, o que favorecen ciertos convencionalis-
mos socioculturales, inciden en la manera en como nos miramos
al espejo. Siempre nos vemos de forma distorsionada cuando nos
comparamos con los modelos que nos quieren vender, porque nos
parece que en muchos aspectos no damos la talla. No nos vemos
guapos, o emprendedores, ingeniosos, valerosos, inteligentes, se-
ductores, etc. Por el contrario, nos sentimos mal, desafortunados,
inadecuados para las exigencias de los tiempos que vivimos.
Para mirar adecuadamente dentro de nosotros mismos, para
conocer lo que verdaderamente somos, es necesario tener una ac-
titud abierta para poder apreciar todos los aspectos valiosos que
poseemos, y la idea de que si somos de una forma concreta y de-
terminada en cada plano de manifestación, del espiritual al físico,
de Keter a Maljut, es por una buena razón. Y todo aquello que no
tenemos, que no está en nosotros, y que acostumbramos a mirar
como carencias, también obedece a esa buena razón. Por encima
de lo que el resto del mundo nos quiera vender.
Por ello, a la hora de abordar la delicada tarea de interpretar
un Programa de Vida personal utilizando como herramienta la
Kabbalah, la astrología o la psicología, bien sea nuestro Programa
o el de otra persona, la primera actitud que debemos adoptar es la
de un profundo respeto, ya que al iniciar el estudio de una indivi-
dualidad entramos en una forma sagrada. Cada Programa de Vida
personal lo es, incluido el nuestro.
Cada forma ha sido concebida para un propósito concreto. Por ello
tiene unas características precisas, y no otras. Muchas veces, lo que
vemos como carencias o limitaciones no son más que límites nece-
sarios para que no nos perdamos en otros derroteros distintos que
nos alejen de los que se corresponden con nuestra forma y el pro-
pósito para el cual ha sido especialmente diseñada. Si por ejemplo,
todos midiésemos lm. 80, fuésemos muy guapos, o tuviésemos
aptitudes deportivas a un nivel de competición, nos sentiríamos
tentados o inclinados por las pasarelas, el cine, o a la lucha por el
oro, sin lugar para nada más, porque llevar a la perfección dichas
tareas ocuparía todo nuestro tiempo y necesitaría de toda nuestra
energía.

522 VILLARRU BIA / H AUT / MILLERA


Cada forma es perfecta en sí misma, y está diseñada para un
propósito concreto. Como todos no hemos venido a realizar la
misma tarea, no tenemos las mismas aptitudes, capacidades, y for-
mas. Por ello realizaremos el estudio de nuestro Árbol con una
actitud de apertura, como los niños, dispuestos a mirarnos desde
nuestras capacidades y no desde nuestras carencias, y abordando
los puntos difíciles o críticos de nuestro programa de vida des-
de su propósito. Comprender la utilidad de un conflicto hará que
perdamos el miedo a descubrirnos plenamente dando un paso im-
prescindible para aceptarnos, y realmente no podemos hacerlo sin
comprensión.
Todo aspecto o configuración que genera incomodidad o crisis
es ineludible, y nos fuerza a identificar la raíz de un conflicto, se-
gún la naturaleza de los senderos implicados. Para poder regene-
rar desde esa raíz todo aquello que necesite evolucionar, es preciso
remover, sacudir y modificar todas las caras de un conflicto, y ello
nos obliga a asumir riesgos por instinto, con el objetivo de lograr
conexión permanente con el Yo Soy como afirmación de la con-
ciencia. Estos puntos críticos, a pesar de su dureza e incomodidad
son herramientas muy valiosas para nuestra evolución y debemos
aprender a apreciarlas. Para ello las estudiaremos con detalle, des-
cubriendo lo que nos pretenden enseñar, por encima del dolor o
de la incomodidad, que a veces es fruto de nuestra tendencia a
compararnos con los demás.
Si logramos valorarnos adecuadamente, conseguiremos bende-
cir lo que somos, y llevar nuestra sagrada forma a su culminación
realizando nuestro tikún, nuestra misión de restitución, que real-
mente es lo que nos gusta y sabemos hacer, y lo que le da sentido
a nuestra existencia, y para cuyo cumplimiento nuestra forma ha
sido diseñada con precisión, amor y belleza, como un verdadero
traje de Alta Costura realizado a medida para cada uno de noso-
tros por el mejor modisto del Universo.
Aunque la palabra misión resulte pretenciosa y grandilocuen-
te, la verdad es que todos tenemos nuestra misión o tikún que
cumplir. Las habrá de gran trascendencia pública e histórica,
pero la mayoría son humildes, pueden pasar inadvertidas por
los demás y se desarrollan en círculos pequeños, o en el entorno

MAN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 523


más inmediato como es la familia y amigos íntimos, pero no por
ello dejan de ser esenciales en conjunto para la evolución de la
humanidad.
Lo ideal para todos es que cada uno de nosotros realice en la
vida aquello que le gusta realmente hacer, y para lo que está plena-
mente capacitado, por encima de lo que opinen los demás. Hacer
lo que a uno le gusta no cansa, no agobia, resulta absolutamente
satisfactorio, grato y estimulante, y le da sentido a la vida. Eso es el
tikún. Pero para poder descubrirlo y realizarlo, primero debemos
conocer nuestro Programa de Vida sin desenfoques ni distorsiones,
y esto es lo que se pretende en el desarrollo de esta IV parte de la
obra. Para ello analizaremos paso a paso todas las configuraciones
y rasgos especiales que pueden presentarse en un Árbol de la Vida
Personal, ofreciendo así la posibilidad de que cada cual pueda en-
contrar todo aquello que le afecte, con el objeto de que aprenda a
valorarlo y a valorarse a sí mismo desde su utilidad.
Cuando observamos diferentes Árboles personales encontra-
mos sensibles diferencias entre unos y otros. Algunos tienen sus
senderos equilibrados y otros no; encontramos diferencias de car-
ga en los senderos subjetivos o en las sefirot; a veces los bloques A,
B y C proporcionan «líneas de triángulos» y a veces no; las Tríadas
pueden estar abiertas o cerradas, puede haber configuraciones in-
cómodas o puede no haberlas ... En realidad, si tenemos en cuen-
ta las posibilidades de Árboles diferentes que pueden obtenerse
sólo con los bloques 1 a 6, descubriremos que hay casi 74 millones.
Si combinamos además los bloques derivados (del 7 en adelante),
la cifra se hace astronómica. Quiere ello decir que es imposible
tabular las diferentes posibilidades de significados, por lo que de-
beremos partir de una serie de principios generales.
El primero es que la interpretación del Árbol personal debe abor-
darse con una actitud de encuentro con lo sagrado, cualquiera que
sea el aspecto que tenga y el sujeto a quien pertenezca. Se trata del
listado de un programa, el Programa de Vida. Al levantar un Árbol y
enfrentarnos a él para interpretarlo podemos preguntarnos: ¿Cuál es
el sentido de este ejercicio? ¿Por qué un diagrama como éste permite
conocer con gran detalle múltiples aspectos del ser humano? ¿Qué
significa todo esto?

524 ViLLARRUBIA / HAUT / MILLERA


El Árbol nativo es un mapa de las tendencias que traemos al na-
cer, y de las predisposiciones a adquirir nuevas tendencias por el
influjo del medio en que nos desenvolvemos. Si empleásemos la ter-
minología del Vedanta Advaita, el Árbol es un mapa dinámico de
los samskaras. ¿Qué es un samskara? Un ejemplo nos ayudará a una
mejor comprensión. Si preferimos ir de vacaciones al mar, y no a la
montaña (o viceversa), no es porque uno u otra tengan algo en es-
pecial, sino porque hay en nosotros algo que armoniza mejor con el
mar o con la montaña. Ese algo que armoniza es el samskara, la ten-
dencia latente que traemos, generalmente de vidas pasadas, aunque
también pueden crearse en la vida presente, casi siempre originada
por una vivencia mal digerida, mal asimilada. El maestro Antonio
Blay repetía muchas veces que «la acción perfecta es la que no deja
huella». Por tanto, un samskara es la huella que dejó una acción im-
perfecta.
La utilidad de tener este mapa de samskaras es que podemos tener
una visión de conjunto de ellos, examinar y comprender su funcio-
namiento, sus interacciones, los efectos que originan en nuestro com-
portamiento y en nuestras relaciones, en nuestra visión del mundo y
en nuestra visión de nosotros mismos ... Podremos, tal vez, llegar a
comprender por qué determinadas experiencias se repiten sistemá-
ticamente una y otra vez, de forma a veces compulsiva, golpeando
en la misma herida, que nunca se cura.
En ese punto, nos será útil comprender a fondo algún aspecto de
nosotros mismos; aspecto que podemos utilizar como herramienta
de trabajo para descubrir el origen de todo ello. El segundo princi-
pio, pues, es esta utilización del Árbol como herramienta de trabajo
personal.
En los Yoga-Sutras de Patanjali puede leerse: «practicar samya-
ma sobre las propias tendencias y hábitos conduce a sus orígenes.
En consecuencia, se adquiere un conocimiento profundo del propio
pasado». (Sutra III-18). Este ejercicio, samyama, consta de tres fases:
l. DHARANA, concentración: éste es mi samskara (o, si pre-
ferimos la terminología que empleamos en esta obra, mi sen-
dero o mi sefirá con una carga especial), con todos sus sig-
nificados. Lo acepto tal cual es, y aparto de mí cualquier otro
pensamiento.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 525


2. DHYANA, meditación: examino mi samskara (mi sendero,
mi sefirá, mi Tríada, mi aspecto incómodo) desde todos los án-
gulos posibles, quito todas las anestesias, todas las justificacio-
nes, todas las culpas del otro, y dejo que duela sin oponer nin-
guna resistencia, saboreando suavemente (todo lo suavemente
que sepa y pueda) el dolor y la amargura; poniendo toda mi
atención en lo que está sucediendo, para no perderme ni uno
solo de los detalles.
3. SAMADHI, me hago uno con aquello que está sucediendo,
ya no es yo y el dolor, yo y mi sufrimiento, sino soy el dolor
y esto es precisamente lo que elijo ser, porque es lo que está
sucediendo, y por tanto es mi derecho y no renuncio a él.
Tal vez entonces descubramos (recordemos) nuestras prime-
ras experiencias, hace más de tres millones de años, cuando la
especie humana empezó su marcha hacia la Consciencia Plena;
cuando algo se formó en una silenciosa implosión de trozos
de ... ¿qué? ... venidos de ninguna parte que confluyeron en el
no-centro, construyendo eso que ahora llamamos YO. Acaso
entonces recordemos (descubramos) que todo lo que somos y
todo lo que nos está sucediendo lo hemos elegido libremente.
Y entonces, libremente, podremos abandonar el juego, o ju-
garlo a fondo.
El Árbol nativo, mapa de los samskaras, se obtiene partiendo
de los datos del nombre y del tiempo (fecha de nacimiento).
Por esta razón, conviene repasar lo que acerca de nombre y
tiempo dicen las diferentes tradiciones espirituales. Una lectu-
ra atenta de algunos de estos textos tal vez podrá darnos más
luz sobre este punto: ¿qué efectos tienen el nombre y el tiempo
sobre el libre albedrío?

526 VILLARRU BIA / H AUT / MILLERA


2. ACERCA DEL NOMBRE Y DEL TIEMPO

H agamos al hombre a imagen y semejanza nuestra, y domine a los peces


del mar, y a las aves del cielo, y a las bestias, y a toda la tierra, y a todo
reptil que se mueve sobre la tierra.
(Génesis 1:26)

Formado, pues, que hubo de la tierra el Señor Dios todos los animales
terrestres, y todas las aves del cielo, los trajo a Adam, para que viese cómo
los había de llamar; y en efecto todos los nombres puestos por Adam a los
animales vivientes, esos son sus nombres propios. Llamó, pues, Adam por
sus propios nombres a todos los animales, a todas las aves del cielo, y a
todas las bestias de la tierra.
(Génesis 2:19-20)

Los dos pasajes anteriores muestran que, si bien inicialmen-


te Dios propone al hombre que domine sobre todos los animales,
al ponerles nombres sólo lo hace con los del cielo y los de la tierra,
pero no con los del mar.

Enseñó (Allah) a Adam el nombre de todos los seres. Luego, presen-


tándoselos a los ángeles, dijo: «Llamadlos por sus nombres si sois capa-
ces de hacerlo diciendo verdad». Ellos dijeron: «¡Sé glorificado! Ningún
saber hay en nosotros, a no ser lo que Tú nos has enseñado. En verdad,
Tú eres el Sabio y el Prudente». Allah dijo: «¡Oh, Adam! Hazles cono-
cer los nombres». Y entonces, Adam les hizo conocer los nombres (... )
Y cuando Nos dijimos a los ángeles: «¡Prosternaos ante Adam!», ellos
se prosternaron, excepto Iblis, que, lleno de orgullo, se negó, llegando a
ser uno de los descreídos .
(Corán, II: 29-32)

Para nuestra mente occidental y racionalista resulta cuando me-


nos sorprendente la insistencia, tanto de la tradición judía como de
la islámica, en la importancia de los nombres como instrumento de
dominio de todos los seres por el hombre.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 527


¿Puede haber espacio, puede haber tiempo, excepto para mí? Espacio
y tiempo me atan, sólo si yo soy el cuerpo. No estoy en ninguna parte, soy
atemporal. Existo en todas partes y siempre.
(«Treinta versos sobre la realidad», Sat-Darshanam,
16. Sri Ramana Maharsi)

Un místico moderno de la tradición védica pone de manifiesto las


ataduras del espacio-tiempo, pero sólo si se es el cuerpo. Veremos
de inmediato cómo se aclara este significado.

Cuando lo irreal se desvanece, el eterno Atman se revela. En consecuen-


cia, el hombre debe separar el libre y eterno Atman de todas las irrealidades,
tales como el sentimiento del yo.
(«La Joya Suprema del Discernimiento»,
Viveka-Suda-Mani, 205. Sankaracharya)

He conocido a mi Señor, por mi Señor, sin confusión ni duda. Mi natu-


raleza íntima es la Suya, realmente, sin falta ni defecto. Entre nosotros dos
no hay tiempo, y en mi alma el mundo oculto se manifiesta...
(«Tratado de la Unidad»,
Risalat-ul-ahadiyya, 2.4.6. Muhayddin ibn-el-Arabi)

Yo me oculté de mi tiempo, tras el velo de sus alas. Mis ojos ven a mi


tiempo y mi tiempo no me ve. Si a los días se pregunta cuál es mi nombre,
lo ignoran; y dónde está mi lugar, no conocen mi lugar.
(«Mahasin al-majalis», í°. 151 vtº. Abulabás ibn-al-arif)

Los tres fragmentos anteriores se refieren con diferentes palabras


al tiempo y al nombre como algo de lo que merece la pena liberarse,
algo que nos está encorsetando y manteniéndonos en un estado de
oscuridad.

No tomarás en vano el nombre del Señor tu Dios: porque no dejará el


Señor sin castigo al que tomare en vano el nombre del Señor Dios suyo.
(Éxodo, 20:7)

528 V!LLARRUBIA / H AUT / MI LLERA


De nuevo la tradición bíblica advierte de la necesidad de tratar
a los nombres con el máximo respeto. Pues el conocimiento de los
nombres es, como hemos visto, un instrumento de poder.

El Tao que puede ser expresado no es el verdadero Tao. El nombre que


se le puede dar no es su verdadero nombre. Sin-Nombre es el principio del
Universo; y Con-Nombre es la madre de todas las cosas. Desde el no ser com-
prendemos su esencia; y desde el ser sólo vemos su apariencia. Ambas cosas,
ser y no ser, tienen el mismo origen, aunque distinto nombre. Su identidad
es el misterio. Y en este misterio se halla la puerta de toda maravilla.
(Tao-te-king, I. Lao Tzu)

Pese a su críptica redacción, el primer fragmento del Tao-te-


king contiene la clave de todo el proceso: la Unidad emanada
del Sin-Nombre se reviste de multiplicidad por la acción de Con-
Nombre ...

Alcanza la total vacuidad para conservar la paz. De la aparición


bulliciosa de todas las cosas, contempla su retorno. Todos los seres
crecen agitadamente, pero luego, cada uno vuelve a su raíz.
Volver a su raíz es volver a su destino.
Volver a su destino es conocer la Eternidad.
Conocer la Eternidad es ser iluminado.
Quien no conoce la Eternidad camina ciegamente a su desgracia;
quien conoce la Eternidad da cabida a todos.
Quien da cabida a todos es grandioso.
Quien es grandioso es celestial.
Quien es celestial es como Tao.
Quien es como Tao es perdurable.
Aunque su vida se extinga, no perece.
(Tao-te-king, XVI. Lao-Tzu)

Este último fragmento resume por completo los objetivos de la


presente obra. Medita sobre él, y ponlo en relación con los anterio-
res. Pronto descubrirás que la clave ha estado a tu disposición en
todo momento ...

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 529


3. EL PROGRAMA DE VIDA

i de unos datos tan simples como los nombres (propios y familia-


S res) y los números del nacimiento puede extraerse un cúmulo tal
de datos como el que vamos a estudiar en las secciones siguientes,
la conclusión inmediata es que esos datos definen un conjunto de
instrucciones que constituyen un programa, el Programa de Vida.
Cabe preguntarse si nuestra vida hubiese sido igual en el caso de
que nuestro nombre de pila hubiese sido diferente, o si hubiésemos
nacido un día antes o un día después. Las investigaciones realizadas
hasta el momento muestran que, en estos casos, se habrían produci-
do cambios significativos, si bien dentro de una cierta banda de varia-
bilidad. El ejemplo más típico lo muestra la elección de nombre para
un recién nacido. Las variaciones que se observan en los posibles
Árboles resultantes se refieren a ciertos aspectos de la personalidad,
de los ciclos, de las relaciones o de la salud física, mientras que otros
(a veces más, a veces menos) se mantienen constantes.
Acostumbrados como estamos a escuchar que somos libres y res-
ponsables de nuestros actos, nos encontramos, sin embargo, con la
paradoja de que las tendencias, motivaciones, aptitudes y actitudes
son perfectamente predecibles, apuntando en efecto a la existencia
de un programa que condiciona a cada ser humano. ¿Se cumplen
las condiciones para que exista ese programa? Veamos:
1. Un programa debe consistir en una serie, conjunto o relación de
instrucciones, encadenadas entre sí conforme a unos determina-
dos criterios, y encaminadas a la ejecución de unas tareas con-
cretas para la obtención de unos resultados predeterminados,
al menos en un sentido general. Los criterios de encadenamien-
to de instrucciones deben ser consistentes ·consigo mismos,
es decir, coherentes con las tareas a realizar, con los fines a al-
canzar y, naturalmente, con la propia dinámica del programa y
de cada una de sus instrucciones concretas.
2. Un programa debe estar escrito en un lenguaje determinado,
con sus propias reglas de coherencia interna; lenguaje que debe
poder ser interpretado, así como aprendido y enseñado por
quien se tome la molestia de hacerlo.

530 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


3. Su funcionamiento, su interpretación, su enseñanza y su apren-
dizaje deberán acomodarse a unas determinadas reglas objeti-
vas, las cuales deben mantenerse invariables a todo lo largo del
proceso de aprendizaje y de la ejecución del programa. Deberán
estar previstos los criterios de variabilidad de las normas del
programa y las reglas para llevarla a cabo.
4. Conocida la lista de instrucciones del programa, una vez que
éste se pone en marcha deberá producir unos efectos que sean
predecibles dentro de un cierto rango, de acuerdo con las nor-
mas de interpretación del lenguaje en que está escrito.
Todas estas condiciones se cumplen, evidentemente, en el
Programa de Vida, en el programa listado a través del Árbol de
Vida nativo. Procede, pues, que nos planteemos algunas cuestio-
nes importantes:
• Sobre los méritos y las culpas por los actos, las omisiones, las
palabras, los silencios, los miedos, los deseos, los sentimientos,
los pensamientos, los éxitos y los fracasos ... de los que somos
actores a lo largo de nuestras vidas.
• Sobre los premios y castigos inherentes (según se nos ha en-
señado) a los méritos y culpas anteriores, en esta vida y en la
otra vida.
• Sobre el sentido que tienen conceptos tales como salvación o
condenación (punto de vista judea-cristiano) o ley del karma
(punto de vista oriental).
• Sobre la repercusión a nivel tanto individual como social de
todo ello.
• Sobre los beneficiarios de este sistema de méritos, culpas, pre-
mios y castigos; preguntándonos si nosotros somos alguno de
esos beneficiarios, o más bien pertenecemos a la clase perjudi-
cada.
Dado que, al plantearnos estas cuestiones, lo más probable es
que nos encontremos metidos en un callejón sin salida, proponemos
la búsqueda en otra dirección. Esta búsqueda tendrá un doble com-
ponente: de eliminación del ruido de fondo, y de encuentro con la
armonía básica; los místicos nos han dejado de ambos numerosos
testimonios.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 531


4. «SOSEGAR LA CASA»

( = conocer, limpiar, equilibrar el «programa de vida»)

a investigación que hemos venido realizando a lo largo de


L años nos lleva a unas conclusiones que están en lo esencial de
acuerdo con la noción tántrica de que nos hablan tanto el budismo
tibetano como el sufismo islámico, la cual es recogida a su vez por
Ken Wilber: «Si usted se adentra consciente en un estado inferior
-o incluso un estado manchado- terminará transformando ese es-
tado en su correspondiente sabiduría (si usted entra despierto en
la pasión descubrirá la compasión, por ejemplo; si entra despierto
en la angustia encontrará la claridad, etcétera)» (Breve historia de
todas las cosas, p. 281). Con otras palabras, pero con el mismo sen-
tido hablamos de la necesidad de «tocar» el defecto, porque de su
mano viene la virtud. A su vez, San Juan de la Cruz nos da otra
pista: se trata de un paso obligado para iniciar la gran aventura.
Un ejercicio muy interesante consiste en levantar el propio Árbol
nativo, observando sus zonas oscuras, sus desequilibrios, sus frac-
turas internas. Una vez asimilado, leer el poema del gran místi-
co castellano La Noche Oscura, buscando en qué medida el poema
describe una situación en que los desequilibrios, las zonas oscuras,
las fracturas internas de nuestro programa ya no existen.

LA NOCHE ÜSCURA

En una noche oscura,


con ansias, en amores inflamada,
¡oh, dichosa ventura!,
salí sin ser notada,
estando ya mi casa sosegada.

A escuras y segura,
por la secreta escala, disfrazada,
¡oh dichosa ventura!,

532 YILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


a escuras y en celada,
estando ya mi casa sosegada.

En la noche dichosa,
en secreto, que nadie me veía,
ni yo miraba cosa,
sin otra luz y guía,
sino la que en el corazón ardía.

Aquesta me guiaba
más cierto que la luz del mediodía
adonde me esperaba
quien yo bien me sabía,
en parte donde nadie parecía.

¡Oh noche, que guiaste!


¡Oh noche, amable más que la alborada!
¡Oh noche, que juntaste
Amado con amada,
amada en el Amado transformada!

En mi pecho florido,
que entero para él solo se guardaba,
allí quedó dormido,
y yo le regalaba,
y el ventalle de cedros aire daba.
El aire del almena,
cuando yo sus cabellos esparcía,
con su mano serena
en mi cuello hería,
y todos mis sentidos suspendía.

Quedéme, y olvidéme,
el rostro recliné sobre el Amado;
cesó todo, y dexéme,
dexando mi cuidado
entre las azucenas olvidado.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 533


El poema La Noche Oscura, una de las joyas más excelsas de la
mística universal, nos proporciona además indicaciones muy pre-
cisas del objetivo a alcanzar y de los métodos para llegar a él.
El origen de todos los problemas del hombre es la ruptura de la
Unidad, y el deseo, casi siempre inconsciente (y por lo tanto, me-
diatizado por una visión errónea) de reconstruirla. Teniendo esto
presente, La Noche Oscura nos dice:
• Que la tarea previa a todo el proceso es el sosiego de la casa,
es decir, el cumplimiento del Programa, que está ahí por una
buena razón; lo que se basa en la fiel aplicación del principio
«Conócete a ti mismo».
• Que se trata de un trabajo interior, para llevar a cabo a solas, y
no en grupo.
• Que el motor del proceso es el amor, entendido éste, no como un
sentimiento o una emoción, sino como una actitud consciente y
decidida a favor de la unidad.
• Que el trabajo a desarrollar durante el proceso es de una natura-
leza un tanto insólita (a donde me esperaba / quien yo bien me sabia
/ en parte donde nadie parecía. Ver también Dante, Divina Comedia,
«Infierno», Canto XXXIV).
• Y que, finalmente, durante el proceso debe mantenerse una ac-
tiva pasividad (amada en el amado transformada), que desemboca
en una entrega consciente e incondicional a lo que suceda(.. . y
dexéme / dexando mi cuidado/ entre las azucenas olvidado.)
El Amor, definido como la actitud consciente y decidida a fa-
vor de la unidad, busca en definitiva la reconstrucción de esa
unidad en nosotros mismos. Como muestra Ken Wilber a lo largo
de su obra, hay una serie de fracturas que apartan al hombre más
y más de la totalidad de su esencia verdadera, hasta desligarle
en último extremo de la sombra, o conjunto de aspectos que, por
indeseados, no se reconocen como propios y son proyectados en
el entorno.
Sin embargo, tal vez un día se produzca, por sorpresa, la reconcilia-
ción con esos aspectos indeseados, que a partir de entonces empiezan
a reconocerse como propios. Ese día se hace patente el sentimiento de
que una nueva cualidad ha aparecido en nuestra vida, cualidad que
tiene un carácter irreversible. La experiencia que se vive entonces po-

534 V1L1.ARRUB IA / HAUT / MILLERA


dría resumirse en el siguiente poema (escrito originalmente en árabe)
que recoge este aspecto de la reconciliación:

.JJI ~., ~I.J ¡~I


i.$.J.>IJ <fl e:J~
.J? Jl;,11 ~ l 0l1I
~ .);:.¡ 1J
I_# JJ., 41,>..o J w
~.)~ ~ '-,>_J""""; lo.&; M•;
~ ...._..1.,

Hoy he visto el rostro de Allah, / pues se han reconciliado mi


sombra y mi luz. / Ahora, la sombra se ha vuelto semejante
a luz, / y la luz semejante a sombra. / Cada una de ellas permanece
en su sitio,/ pero mutuamente se han perdonado/ pues entre ellas
fluye una brisa fresca,/ y su nombre es 'Amor' ...

Tras esa experiencia, aspectos tales como salvación y conde-


nación, o ley del karma, no se ven ya como un premio o un casti-
go por los actos realizados, sino como una herramienta de traba-
jo, cuidadosamente elegida para ejecutar una determinada tarea.
Puede que esa tarea no esté a la vista, por el momento; puede que
ni siquiera se haya producido la reconciliación de la sombra y la
luz; pero existe siempre la posibilidad de aceptar, al menos como
hipótesis de trabajo, que hay un objetivo de alguna clase, que
puede ser investigado y descubierto. La técnica para levantar e
interpretar el Árbol de la Vida, NO es ese objetivo, pero está en el
camino que nos puede llevar a él. No es el objetivo, como señala
Anis Ahmad ibn el-Alawi (citado por Idries Shah en El Camino
del Sufí) :

«Presta atención a esta enseñanza: el conocimiento de cómo ver


las características de otros no tiene ningún valor para el hombre
con respecto a su mayor necesidad, él mismo».

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 535


Pero está en el camino que nos puede llevar al objetivo, como
dice Rabí Janina ben Dosa (citado por Mario Satz en Senderos en el
Jardín del Corazón):

«Todo aquel que se deleita en el espíritu de sus semejantes es objeto de


deleite para el Espíritu del que está en todas partes. Y todo aquel que no
siente deleite en el espíritu de sus semejantes tampoco es objeto de deleite
para el espíritu que está en todas partes».

Es, pues, importante saber, o al menos intuir, cuál pueda ser ese
objetivo a encontrar.

* * *·

«El que no sabe a dónde va, acaba yendo a otra parte ... »
(Laurence J. Peter: Las fórmulas de Peter).

El sosiego de la casa es el paso previo para iniciar la Gran


Aventura. ¿Cuál es esa Gran Aventura? ¿Puedo ponerme en mar-
cha si no sé a dónde tengo que ir?
Entramos en una fase del trabajo que merece, cuando menos, el ca-
lificativo de la fase extraña. Pues la interpretación del Árbol es un tra-
bajo de investigación, un viaje de des-cubrimiento (quitar lo que cubre)
que nos va a exigir toda nuestra atención, toda nuestra inteligencia, todo
nuestro corazón, toda nuestra fuerza unitiva. Es el viaje que nos puede
acercar a descubrir quiénes somos realmente y para qué y por qué es-
tamos aquí. El viaje comienza con la interpretación del Árbol, y su obje-
tivo es descubrir nuestro tikún, nuestra misión sagrada en la Tierra.

536 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


5. Los DIFERENTES TIPOS DE LÍNEAS
EN LOS SENDEROS SUBJETIVOS Y SU SIGNIFICADO

uesto que la toma de datos derivó en determinados números,


P los cuales a su vez han dado origen a diferentes tipos de líneas,
tal como las hemos dibujado basándonos en los modelos propues-
tos en la figura 36, incluyendo los senderos que han quedado en
blanco, sin ninguna línea, procede que estudiemos lo que cada tipo
significa. Ante todo, cualquier línea, y por tanto cualquier sendero
que la contenga, representa algún tipo de tarea a realizar, aunque
no siempre seamos nosotros quienes tengamos que llevarla a cabo.
Daremos diferentes nombres a todos estos aspectos, aparezcan o
no dibujados en el Árbol personal. La multiplicidad de denomina-
ciones pretende ayudar a comprender mejor su naturaleza.
Según vimos anteriormente (III Parte, Capítulo 2), hay diferen-
tes antigüedades en cada Árbol nativo. Las imágenes del mundo
vegetal, un árbol con sus raíces, tronco, hojas, flores y frutos, o las
de la vida escolar, según quedaron expuestas, son un ejemplo, una
muestra de los diferentes pedazos de que estamos hechos: peda-
zos bebés, niños, adolescentes, adultos jóvenes, maduros, sabios
ancianos ... o viejecitos que ya chochean. No es, pues, de extrañar
que a veces estalle dentro de nosotros algún que otro conflicto ge-
neracional ... Esta guerra interior, a veces sumamente incómoda, es
sin embargo una poderosa herramienta (si sabemos usarla ade-
cuadamente) para descubrir y realizar nuestra misión en la vida,
nuestro tikún.
Estas diferentes «edades» o grados de madurez quedan refle-
jados en los senderos según los diferentes tipos de líneas que los
cubren:
• Senderos de ancianidad, sabiduría o maestría. Aparecen con
cualquier tipo de línea, nativa, social o cíclica, oculta o visible,
procedente de los bloques 1 a 13. Pueden tener cualquier núme-
ro de líneas, del mismo o de diferentes tipos (ver fig. 36). Y van
siempre acompañados por una o dos cruces procedentes de los
bloques A, B o C (tres en los casos de los senderos 9 y 18), como

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 537


máximo. Sus imágenes son los frutos del árbol y el maestro que
enseña desde su experiencia. No están presentes en todos los
Árboles nativ~s.
• Senderos de madurez. No tienen ninguna línea, aunque pue-
den llevar el acento, y están por tanto al cuidado de nuestros
«socios», los genios de la Kabbalah. Recordemos que no siem-
pre su actuación es suave, a veces pueden ser extremadamente
ásperos (ver significados de sus nombres al final de la II Parte).
Sus imágenes son las flores del árbol y el período sabático, tras
la titulación profesional. Por cierto, que nuestros socios tienen
una inquietante tendencia a «armar bulla» en las Tríadas en las
que hay algún sendero con carga especial; en el próximo capítu-
lo 9 de esta IV Parte se desarrollan con detalle estos aspectos de
las cargas especiales.
• Senderos de aprendizaje. Llevan marcas y líneas iguales a las
de los senderos de ancianidad, pero no van acompañados de
cruces procedentes de los bloques A, B o C. Sus imágenes son
las raíces, el tronco, las ramas y las hojas del Árbol, y la vida
escolar, desde el parvulario hasta la titulación profesional.
• Senderos de infancia. Llevan solamente líneas de triángulos,
procedentes de los bloques A, B o C. Puede haber en un sendero
una o dos líneas de triángulos (tres en los senderos 9 y 18), como
máximo. Sus imágenes son las semillas del Árbol y el período
de la guardería infantil.

Nos basaremos en estos tipos de línea como uno de los puntos


de arranque de la interpretación.

538 VII. LARRUl31A / HAUT / M I LLERA


6. SECUENCIA RECOMENDADA
PARA LA INTERPRETACIÓN

L a gran cantidad de información que puede extraerse de la in-


terpretación del Árbol personal hace aconsejable seguir una
determinada secuencia, al menos hasta familiarizarse con sus
contenidos y adquirir soltura interpretativa. En este punto resulta
oportuno recordar lo siguiente:

l . Las sefirot y todo lo que se relaciona con ellas tiene que ver con
los hechos objetivos, con el mundo que nos rodea y a todos los
niveles, físico y suprafísico.
2. Los senderos subjetivos y todo lo que se relaciona con ellos tiene
que ver con nuestro mundo subjetivo, nuestra capacidad subje-
tiva de respuesta a los hechos objetivos. Recordemos que cada
sendero tiene su propio contenido, pero dado que un Árbol tam-
bién refleja nuestra relación con el entorno, determinados sen-
deros reflejan nuestra relación subjetiva con nuestro entorno, y
es útil tenerlo en cuenta a la hora de interpretar. El Árbol de la
Vida plantea una estructura de relaciones que se desarrollan a
partir de su centro, Tiferet, en el que se focaliza el Yo. Tomando
este punto como centro de observación, consideraremos a la
pareja Jokmah-Binah como el conjunto, no sólo del padre y la
madre, sino también de todos los antepasados, masculinos y
femeninos, respectivamente. Y, por extensión a los varones y las
mujeres que tengan edad suficiente para haber podido ser nues-
tro padre o nuestra madre. De la misma forma, consideraremos
a la pareja Jesed-Guevurah como a nuestros contemporáneos,
incluyendo en este grupo a nuestros compañeros sentimentales,
maridos o esposas, a los hermanos y a todos aquellos que son
demasiado jóvenes para ser nuestros progenitores, y demasia-
do mayores para poder ser nuestros hijos. Si en alguno de estos
grupos se diese una diferencia de edad notable, pero tuviese la
cualidad de esposo/ a, compañero/ a sentimental, hermano/ a,
etc., lo mantendremos en él. Finalmente, los hijos y descendien-
tes se sitúan en la pareja Netzaj-Hod. Por otra parte, en los gru-

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 539


pos anteriores situamos a los varones en las esferas del Pilar de
la Misericordia, Jokmah, Jesed y Netzaj, y a las mujeres en las
del Pilar de la Severidad, Binah, Guevurah y Hod. Establecidos
estos principios, resulta coherente con ellos que las diferentes
relaciones familiares, cuasi-familiares y para-familiares, en su
sentido más amplio, se establezcan a través de los senderos que
unen las diferentes esferas. Para el significado concreto de cada
una de ellas nos remitimos a las correspondientes secciones de
la II Parte, y para los tipos de senderos, a lo expuesto en las
secciones anteriores de esta IV Parte, así como a las afinidades
entre ellos, recogidas en su sección 8.6. Demos un repaso a cada
una de estas relaciones:
• Sendero 4: Relaciones con el padre, los antepasados masculi-
nos y los varones de más edad.
• Sendero 6: Relaciones con la madre, los antepasados femeni-
nos y las mujeres de más edad.
• Sendero 3: Relaciones de los padres entre sí, desde la óptica
del sujeto.
• Sendero 9: Relaciones con varones de la misma generación
(+ /- 10 años aprox.).
• Sendero 11: Relaciones con mujeres de la misma generación
(+ / - 10 años aprox.).
• Sendero 8: Relaciones de varones y mujeres de la misma ge-
neración entre sí, tal como las percibimos desde nuestra pro-
pia subjetividad. Como este sendero es el de «La Justicia»,
es en él donde se establece el juicio personal de cada genera-
ción, el que cada uno hace sobre el conjunto social y cultural
en el que ha nacido y vive.
• Sendero 13: Relaciones con hijos y descendientes varones,
y varones más jóvenes.
• Sendero 15: Relaciones con hijas y descendientes femeninas,
y mujeres más jóvenes.
• Sendero 16: Actitudes hacia la generación de hijos e hijas o gente
más joven. Relaciones con generaciones jóvenes.
3. Las Tríadas y lo que se relaciona con ellas tiene que ver con la
expresión de nuestra capacidad subjetiva de respuesta a los he-
chos objetivos.

540 V1L1.ARRUBIA / HAUT / MILLERA


Para facilitar la interpretación de un Árbol de la Vida personal
es conveniente seguir un orden. Proponemos el siguiente:
• Contemplar la figura del Árbol en su conjunto y observar qué
impresiones y sensaciones nos produce su aspecto en gene-
ral: fluido, estructurado, desestructurado, complejo, cómodo,
incómodo, nos agrada, nos agobia, nos sorprende, etc.
• Detectar a continuación todos los puntos críticos especiales, mar-
cándolos en el Árbol, para proceder seguidamente a su análisis:
A) Configuraciones y pseudoconfiguraciones especiales o in-
cómodas.
B) Senderos. Examinar el Árbol por familias de números, obser-
vando si algunos o todos los senderos de la familia presentan
algún tipo de bloqueo. Puede ocurrir que en una familia de nú-
meros haya algún sendero con carga normal y otro u otros con
carga especial. En todo caso es conveniente seguir un orden sis-
temático respecto a estos últimos:
a) Bloqueos por sobrecargas.
b) Senderos con líneas ocultas.
c) Senderos con líneas cíclicas: crisis y anticrisis.
d) Senderos con «doctorados».
e) El trabajo con los senderos semilla o «jardines de infancia».
C) Consideraremos además los siguientes aspectos respecto a los
senderos:
a) Senderos agrupados por afinidades.
b) Significado del acento.
D) Flujos de energía en el Árbol: circuitos primarios, secundarios
y terciarios.
E) Bloqueos en los cinco puntos de cruce.
F) Sefirot fuertes y sefirot débiles. Las sefirot fuera del rango de
variabilidad media.
G) Equilibrios y desequilibrios: por pilares, por elementos y por
polos dimensionales.
H) Desviación media y nivel de integración: almas viejas, almas
jóvenes.
I) Tríadas completas e incompletas: Modificaciones en el carácter
expansivo, equilibrador o aglutinante de los diferentes aspectos
al Árbol personal.

M AN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 541


J) Tríadas opuestas y sus posibles bloqueos.
K) Los genios personales, sus significados y su relación con las
Tríadas y los senderos del Árbol personal. Este aspecto no se
trata por separado, y debe estudiarse en cada caso comparando
cada aspecto del Árbol con los significados de los nombres de
los genios y sus relaciones, tal como quedan expuestas en las
secciones 3.11 y 3.12 de la II Parte, a las que nos remitimos.
L) Los Árboles especiales.

Este mismo será el orden que seguiremos en las secciones si-


guientes.

542 V!LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


7. CONFIGURACIONES ESPECIALES O « INCÓMODAS»

E stas configuraciones quedaron definidas en la III Parte, sección


13, por lo que nos remitimos a la misma para las normas de
su formación. Son aspectos que presentan una dinámica de ener-
gías proyectadas hacia un propósito concreto y muy especial en el
Árbol de la Vida personal. Por ello las llamamos Configuraciones
Especiales. Cada configuración tiene un propósito y una dinámica
con su particular modo de operar para el aprendizaje de algo esen-
cial en un aspecto de la vida mediante vivencias muy concretas y
particulares, que predisponen en ocasiones a dar saltos drásticos
en su momento de lo particular e individual a lo transpersonal
y universal. Cuando este propósito se ha cumplido se abre una
nueva perspectiva de comprensión de uno mismo y del mundo
que permite entender el mundo visible en sintonía con lo sutil,
lo invisible, pero no por ello menos real.
Generalmente, una configuración especial se vive con mayor o
menor grado de incomodidad, por lo que también resulta perfecto
y adecuado llamarlas configuraciones incómodas. Nos hacen sen-
tir distintos del resto del mundo, incomprendidos, hasta que el
proceso se culmina y se comprende el propósito de las vivencias
y la forma de operar de la configuración. Entonces se percibe la
totalidad del proceso desde otra perspectiva, y la comprensión de
lo vivido nos permite reconciliarnos con la vida.
Hay configuraciones inmensamente duras y difíciles, y a ve-
ces hay un cúmulo de ellas que se traducen en un sufrimiento
de gran magnitud. Como nos parece interesante la idea de que
elegimos nuestras vidas de antemano con las circunstancias cla-
ves de nuestros procesos de aprendizaje, no nos parece adecuado
analizar nuestro Árbol ni el ajeno con un sentimiento de lástima.
Muy al contrario, estas configuraciones son en sí mismas un acto
de valor inconmensurable, de confianza en los procesos de trans-
formación de la vida y de afirmación esencial, un sí quiero a lo
mejor de uno mismo, cueste lo que cueste. Por ello manifestamos
nuestro más profundo respeto por los caminos del dolor que bus-
can la perfección.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 543


Generalmente, todo aquél que posee una configuración espe-
cial suele vivirla de una manera bastante o muy incómoda. Suele
sentirse distinto del resto de su mundo, incomprendido durante
mucho, muchísimo tiempo, hasta que el proceso se culmina y se
llega a comprender el «para qué» de la configuración. Entonces
se percibe la totalidad del proceso desde otra perspectiva: desde
lo pasado, y esto le permite al sujeto reconciliarse con la vida.
El nivel de incomodidad de una configuración depende de otros
matices del Árbol, de las características de la propia individua-
lidad, y también del marco sociocultural en el que cada persona
se desenvuelve, el cual agudiza o minimiza la intensidad con la
que se viven, y por lo tanto, el grado de facilidad o dificultad del
propio programa de vida.
Veamos ahora estas configuraciones, descendiendo por el Árbol
desde Keter a Maljut:

Ídolo
Esferas afectadas: Jokmah y/o Binah.

• Se aplica a Jokmah y/ o a Binah cuando no reciben aparente-


mente energía de Keter, es decir, cuando no hay senderos 1
(El Mago) y/ o 0-22 (El Loco), ni conexión con la sefirá opuesta
a través del sendero 3 (La Emperatriz) que le proporcione la
energía de Keter de forma indirecta.
• Pueden ser ídolos sencillos o dobles, según sea una la sefi-
rá afectada, o ambas a la vez. Si el ídolo es doble, se produce
cuando faltan los senderos 0-22 y 1, aunque exista el sendero 3
La Emperatriz.

Esta configuración fuerza al sujeto a deificar a hombres mayo-


res, el padre y/ u otros hombres en el caso de Jokmah, hasta en-
contrar el ideal supremo de figura masculina, Padre Universal o
Dios, y a mujeres mayores, la madre y/ u otras mujeres en el caso
de Binah, hasta encontrar el ideal supremo de figura femenina,
Madre Universal o Diosa, y que supondría en ambos casos, llevar
la configuración de ídolo a la perfección. También puede el sujeto

544 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


experimentar incomunicación entre los progenitores (en el caso de
que el sendero 3 aparezca en blanco), siempre desde su subjetivi-
dad, y verse obligado a trabajar sobre este aspecto, para llevarlo
hasta la perfección hasta donde le sea posible, con sus padres y con
la familia que pueda crear en un futuro.
El propósito de esa configuración es una depuración constante
de los valores arquetípicos y cualidades de los sucesivos ídolos
que el nativo toma como modelos para crecer, de manera que se
vayan asemejando cada vez más a la perfección, a Keter, dentro
del nivel de comprensión de cada individuo.

Complejo
Esferas afectadas: Jesed y/o Guevurah.

• Es una configuración similar a la anterior. Aplicable solamen-


te a Jesed y/ o a Guevurah, se produce cuando faltan a la vez,
como mínimo, dos de los senderos 5 (El Papa) y 8 (La Justicia),
o bien 7 (El Carro) y 8 (La Justicia).
• No basta con que falten sólo el 5 o el 7, porque la conexión con
el resto se hace a través del sendero 8 cuando está presente con
algún tipo de línea (excepto las de «jardín de infancia»).
• Esta configuración puede ser también sencilla o doble, según afecte
solo a una sefirá, o a ambas a la vez. Si es doble, el complejo se pro-
duce si faltan los senderos 5 y 7, aunque esté presente el 8.
En este caso, la deificación se traslada a personas de la mis-
ma generación (hombres en el caso de Jesed y mujeres en el de
Guevurah), frente a los cuales aparece un sentimiento de inferio-
ridad.
Si el complejo aparece en Jesed, genera falta de confianza en
uno mismo, que crea inseguridad, y que afecta a las relaciones
transpersonales, a la expansividad, a la expresión del afecto y de la
alegría, y a la capacidad de realizar metas a largo plazo. Una per-
sona con esta configuración tiende a creer que no es merecedora de
amor, de que la quieran, se infravalora a sí misma y a sus circuns-
tancias. Siente no estar a la altura con respecto a otras personas de
su generación, con quienes tiende a compararse constantemente,

MANU Ai. DE KABBALAH PRÁCTICA 545


pueden ser hombres del entorno más próximo a quienes toma sub-
conscientemente como modelos, o individuos que le hagan sentir
de esta manera, lo cual crea sentimientos de inferioridad. En los
casos de que la configuración venga acompañada por otras (ído-
los, vampiros, Árbol partido, etc.) es bastante común que el sujeto
busque la compañía, e incluso la convivencia, de otras personas
que, enmascarándolo bajo la forma de amor, pueden infligir malos
tratos a cualquier nivel: físico, emocional o mental.
El propósito de esta configuración es hacerle comprender que to-
dos somos seres hermosos en escencia, merecedores de amor, que
todos tenemos algo hermoso que dar a los demás, que se puede y
debe expresar Lo Que Somos con verdadera alegría. Y que las li-
mitaciones impuestas por la vida están para enseñar, enriquecer y
orientar hacia el camino verdadero, y no para limitarse a sí mismo.
Muchas de las limitaciones están solamente en su propia mente:
pensamiento y destino son una misma cosa, si quieres que tu desti-
no cambie, debes atreverte a cambiar tus esquemas mentales (¡nue-
vamente, el recuerdo de la canción de Miguel Ríos!)
Si el complejo aparece en Guevurah, el sujeto se percibe a sí
mismo como alguien que carece o no ha desarrollado un carácter
combativo, luchador, emprendedor o valeroso, siempre con res-
pecto a mujeres próximas de la misma generación a quienes toma
subconscientemente como modelos, o individuos que se compor-
ten de esta manera, lo cual le genera sentimientos de inferioridad.
El propósito de esta configuración es una búsqueda constante de
la verdadera motivación para luchar o hacer en función de Quien
Se Es realmente y del sentido del propio destino, aceptando y di-
solviendo los miedos, valorando positivamente las cualidades y
capacidades que ofrecer, para mirarse a sí mismo desde sus habili-
dades, con la aceptación de sus carencias.
El reto es llegar a bendecir tanto a lo que es en sí mismo como a
la personalidad a través de la cual se expresa. En síntesis, encontrar
su propia guerra dentro de este mundo, y atreverse a ser movido,
si cabe, por otros intereses de mayor alcance que el entorno tal vez
no comprenda al principio. Cuando este propósito se cumple, se
libera del efecto del complejo, porque ya no se necesita de la apro-
bación de los demás, ni se es vulnerable a las críticas.

546 VILLARRUBIA / HAU T / MILLERA


Los senderos que permanecen en este caso angélicos, el 7 y
el 8, tienen que ver con la depuración del concepto de valoración
o medida de las máscaras sociales, y llevan a una paulatina desi-
dentificación respecto a los modelos convencionales, para arraigar
valores cósmicos que el nativo descubre en sí. mismo y en todo lo
que le rodea.
En caso de complejo doble, los senderos que como mínimo per-
manecen angélicos son el 5 y el 7, por lo que la ayuda cósmica que
en ese caso recibe el nativo tiene por finalidad enseñarse a obte-
ner placer de aquello que debe realizar por deber. Debe advertirse
que, en el caso de un ídolo doble, por debajo de él siempre existe
también un complejo doble, que puede quedar enmascarado por
aquél; pero, si observamos atentamente, descubriremos sus mani-
festaciones junto con las del doble ídolo que le cubre. Los senderos
que faltan, 5 (El Papa) y 8 (La Justicia), obligan a depurar los valo-
res tradicionales y dogmáticos, las máscaras, los roles y las respon-
sabilidades sociales, transformándolos en valores transpersonales
y universales, y enseñan al sujeto a ser flexible, a mirarse a sí mis-
mo con menos rigor crítico, a tomarse la vida con más sentido del
humor, estimulando la capacidad lúdica de disfrutar de la vida,
en vez de compadecerse.
Es interesante resaltar un aspecto de los complejos que afecta es-
pecialmente a las relaciones de pareja. La configuración requerida
para ello es, en el caso de los varones, complejo en Guevurah, y en
Jesed en el caso de las mujeres. Pueden en este caso presentarse dos
tipos diferentes, con manifestaciones en cierto modo opuestas:
• Carga relativa débil de Tiferet (7 / 8 o inferior). En este caso,
el sentimiento de inferioridad puede adoptar manifestaciones
que pueden llegar al masoquismo. El sujeto necesita depender,
por lo que buscará una pareja fuerte que lo domine, física, emo-
cional y/ o mentalmente, lo que propiciará, bien malos tratos,
bien constantes conflictos de sentimientos, bien despiadadas
luchas de poder.
• Carga relativa fuerte en Tiferet (10 / 8 o superior). El sentimiento
de inferioridad aparece en cierto modo escondido bajo una ne-
cesidad de conquista del sexo opuesto, propiciando así las figu-
ras del Don Juan o de la Mujer Fatal. Esta necesidad de conquis-

M ANUAL DE l<ABBALAt-1 PRÁCTICA 547


ta no siempre adopta aspectos eróticos, pudiendo manifestarse,
por ejemplo, en el ámbito laboral: un ejemplo sería el jefe que
necesita (¡verdaderamente lo necesita!) mujeres bajo su mando,
aunque es posible que alegue que, para aquel tipo de trabajo,
las mujeres lo hacen mejor que los hombres.

Vampiro
Esferas afectadas: Netzaj y/o Hod.

• Se produce esta configuración cuando faltan como mínimo los


senderos 10 (La Rueda de la Fortuna), 13 (sin nombre) y 16 (La
Torre), produciéndose un vampiro en Netzaj, o vampiro emocio-
nal, y cuando faltan los senderos 12 (El Colgado), 15 (El Diablo)
y 16 (La Torre), produciéndose un Vampiro en Hod, o vampiro
mental.
• Si sólo faltan dos de los tres senderos mencionados, no hay
vampiro; pero si faltan a la vez el 10, el 13, el 15 y el 12, entonces
hay un vampiro doble, es decir, a la vez en Netzaj y en Hod.
Esta configuración obliga al sujeto a tomar (o «chupar») energía
mental, o emocional, o ambas, de las personas más próximas de su en-
torno, y opera de dos maneras: una activa que le hace comportarse de
forma inquisidora, controladora, dominadora, celosa, perfeccionista,
neurótica, haciendo chantajes mentales y emocionales, y otra pasiva
que le hace comportarse de forma reservada, como un tímido invisi-
ble, intentando crear a veces una aureola de misterio a su alrededor,
para poder despertar el interés de los demás.
Hacia sí mismo, sentirá como las áreas emocional o mental (se-
gún la sefirá afectada) demandan por su cuenta gran cantidad de
energía receptiva, sin que pueda hacer nada por evitarlo. La acti-
tud que la persona toma hacia el entorno (inquisitiva o reservada)
es la manera de proyectar sus vampiros interiores.
No hay que olvidar que ambos patrones por lo general se trans-
miten en el seno familiar y educacional, por lo tanto, si una perso-
na adopta la forma reservada, es muy probable que alguien próxi-
mo a ella la ha tratado de manera inquisidora (lo ha vivido así),
y tal vez se ha sentido controlada y expiada, y viceversa. Puede

548 V1 LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


ser útil examinar en el Árbol si en los senderos 3 (La Emperatriz),
4 (El Emperador) y 6 (Los Amantes) en conexión con las relaciones
paterna y materna, existe algún conflicto y de qué tipo.
El propósito de esta configuración, en ambos casos, es enseñar
al sujeto a identificar este mecanismo interior que le lleva a nutrir-
se subconscientemente de la energía de los demás por estar desco-
nectado de su propia fuente de energía universal interior, y lo hace
para compensar el desgaste que le produce su propia inseguridad.
Puede desenmascararlo y disolverlo, superándose a sí mismo, sus
miedos e inseguridades, y la falta de confianza en los procesos de
la vida.
En Netzaj (igualmente en ambas modalidades, inquisidora y re-
servada) le obliga a desarrollar su capacidad expansiva personal y
transpersonal, a expresar emociones con alegría, autoconfianza y
amor, a establecer relaciones armónicas con los demás para trans-
formar y depurar adecuadamente las emociones, y a tener confian-
za en los ciclos de crecimiento y en las enseñanzas de la vida.
Esta configuración en Netzaj provoca una falta de consciencia
de los ciclos de evolución mientras se desarrollan, hasta que se
inicia un nuevo ciclo largo y periódico, que suele comenzar con
grandes cambios en los que se refleja la propia transformación in-
terior. Nada cambia en la vida hacia afuera que previamente no
haya cambiado en nuestro interior.
En Hod (y en ambas modalidades, inquisidora y reservada),
le fuerza a integrar su manera de actuar con la de pensar, a experimen-
tar un constante cambio de valores desde lo individual a lo transperso-
nal y universal, a explorar la sombra para comprenderla e integrarla,
a recordar todo el proceso, y a confiar en las enseñanzas de la vida.

Víbora
Esfera afectada: Yesod.

• Esta configuración es aplicable a Yesod cuando se encuentra


unido al resto del Árbol sólo por el sendero 21 (El Mundo) que
le comunica con Maljut, la cual recibe comunicación de Hod
y/ o de Netzaj, a través de los senderos 20 (El Juicio) y/ o 18 (La
Luna), respectivamente.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 549


• No está el sendero 14 Templanza.
La ausencia, a la vez, de los senderos 14 (Templanza), 17 (La
Estrella) y 19 (El Sol) exige confiar siempre en la capacidad de
adaptación, flexibilidad, comprensión y conciliación, recursos que
están presentes a un nivel subconsciente, y que no se pueden con-
trolar conscientemente, proporcionando la comprensión y el equi-
librio necesarios para estar reconciliados con la vida.
Quienes tienen esta configuración son personas muy sensibles,
vulnerables y susceptibles, que padecen o han padecido algún
tipo de intimidación o de agresión, y que como defensa emocio-
nal y mental han desarrollado una conducta de autocompasión
de tipo pobre de mí. Tímidos disfrazados, se sienten como vícti-
mas, son sensibles a padecer chantájes mentales y emocionales
de quienes les rodean, y se ven obligados a descargar gran parte
de su agresividad acumulada con reacciones de histeria. Es pro-
bable que el intimidador o agresor sea alguien en su entorno más
próximo, quien a su vez ha desarrollado este comportamiento
como defensa de otros «pobre de mí». Por lo que se debería ana-
lizar los senderos 3, 4 y 6, de las relaciones paterna y materna,
y determinar los posibles conflictos para comprender la causa de
esta configuración.
El propósito de la misma es que el sujeto aprenda de su propio
dolor, asuma las necesidades de su individualidad que son esen-
ciales para su evolución, acepte y exprese sus miedos para disol-
verlos, se atreva a realizar sus deseos, y que aprenda a vivir su
propia vida.

Dictador
Sistema afectado: la esfera de Yesod y los senderos 14, 17, 19 y 21.

Consiste en una unión directa y vertical de Tiferet a Yesod,


y a través de esta última, a Maljut, a la vez que quedan vacíos los
senderos 17 (La Estrella) y 19 (El Sol), y con líneas de cualquier
tipo (excepto jardines de infancia) los senderos 18 (La Luna) y 20
(El Juicio).
Las personas con esta configuración tienden a comportarse de ma-
nera autoritaria e intimidatoria, y en ocasionas agresiva, mostrando a

550 VILLARRUBIA / H AUT / MILI.ERA


menudo en sus comportamientos actitudes de liderazgo. Tienen gran
fuerza de voluntad, y creen que el mundo puede girar a su antojo.
Dominantes, imponen su voluntad y agobian al imponer ideas, con-
sejos y ayuda, lo que hacen de forma afilada. Pueden ser perfeccio-
nistas y neuróticos. Su autoritarismo genera agresividad, que muchas
veces se manifiesta como ironía en su forma suave, y como sarcasmo
cruel en su aspecto duro. El propósito de esta configuración es que
sepan considerar a otras individualidades, y que aprendan a descu-
brir y respetar los límites sutiles de los demás, el aspecto sagrado de
la otredad, aunque no se esté de acuerdo con el otro.
La causa de esta conducta proviene de una conducta victimista,
de «pobre de mí», en segunda generación: el abuelo agredió/ inti-
midó al padre, el cual a su vez hizo lo mismo con su hijo. La con-
figuración de «dictador» es en sí misma un mecanismo de defensa
tanto mental como emocional, y esto queda históricamente corrobo-
rado por las infancias desgraciadas que tuvieron muchos dictadores.
Si esta configuración aparece unida a una carga muy baja en
Guevurah, el resultado casi inevitable es la crueldad.
Sería conveniente, por lo demás, observar los senderos 3, 4 y 6,
en lo que se refiere a las relaciones con los padres y de éstos entre sí,
para ver si hay algún conflicto que permita comprender el alcance
de esta configuración en el Árbol personal.

Mosquito
Sistema afectado: Tríada de la Inserción en el Mundo, Yesod y los
senderos que confluyen en esta esfera.

Para que se produzca esta configuración, Yesod debe tener unión


directa y única con Tiferet a través del sendero 14 (Templanza), y
a la vez deben estar presentes los senderos 18 (La Luna) y 20 (El
Juicio), y faltar el 17 (La Estrella), el 19 (El Sol), y sobre todo el 21 (El
Mundo). Si este última falta pero no se cumplen todas y cada una las
restantes condiciones no puede hablarse de esta configuración, sino
de Represión.
Debe considerarse como una forma particularmente virulenta de
la represión, por lo que se estudia junto con ella.

MAN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 5 51


Represión
Esferas afectadas: todas, excepto Keter, Jokmah y Maljut.

Cualquier represión es una contención de energía, la cual, cuando


alcanza una «masa crítica», es descargada de golpe, de forma repen-
tina, como un estallido. La energía que llega desde arriba se acumula
en la esfera afectada por la represión, y como desde el punto de vista
subjetivo no puede seguir fluyendo hacia abajo por la ausencia de
senderos (verticales, diagonales u horizontales) que unan a la sefirá
con la parte inferior del Árbol respecto a ella, se contiene hasta ese
punto crítico mencionado, en el cual la explosión repentina fuerza a
fluir por los senderos de salida hacia abajo, a los que activa mientras
el suceso tiene lugar. Tras el estallido; la experiencia de los sende-
ros colaterales es apoyada por los vacíos inferiores a la sefirá, si los
hay, los cuales suministran información cósmica, para que la expe-
riencia adquiera un nivel de comprensión particular. El propósito
de esta configuración es precisamente obligar al nativo a trabajar
estos senderos adyacentes presentes en el Árbol, con el refuerzo de
la activación de los senderos vacíos inferiores a la esfera afectada
por la represión. Estos senderos son un atisbo de la realidad a nivel
cósmico, que le obligan a contrastar sus experiencias cotidianas del
área afectada desde una perspectiva superior, suministrando infor-
mación que está en su inconsciente, información en la que puede
confiar, pero que escapa a su control. Esta información hace que la
experiencia en los senderos colaterales sea mucho más profunda.
Al recibir información por un canal cósmico (senderos vacíos) el
nativo evalúa constantemente todo lo cotidiano. El área implicada
por la esfera afectada por la represión y los senderos correspondien-
tes están en continua retroalimentación, y sus contenidos en incesan-
te cambio, creando así continua inseguridad. El sujeto debe aprender
a confiar en sí mismo y a tener fe en sus propios recursos.
No es posible la represión ni en la primera ni en la última esferas,
y en cuanto a Jokrnah tampoco, puesto que la ausencia del Sendero 4
implicaría también la del 22, y entonces ya no sería represión, sino otra
configuración especial como vía muerta o muerto (ver más adelante).
La represión actúa de forma algo diferente según sea la esfera
afectada. Así, en Binah (caso por lo demás poco frecuente) afecta so-

552 VILLARRU BIA / HAUT / Mil.LERA


bre todo a los aspectos creativos, que operan en fases alternativas
de contención y explosión. En Jesed (también muy poco frecuente)
los procesos expansivos son los sometidos a estas fases de represión
y explosión; además, como esta esfera es la relacionada con la ali-
mentación, podría provocar episodios de bulimia. Más frecuente es
la represión en Guevurah, y sus fases alternativas pueden moverse
en torno a la acción y/ o la violencia. El caso particular de represión
en Tiferet puede provocar, como ya quedó apuntado, taquicardias
o problemas de estómago. Nos detendremos en las represiones que
afectan a Netzaj, Hod y Yesod, que son las más frecuentes.
Represión en Netzaj. El proceso alternativo de carga-des-
carga afecta al área emocional, y obliga a trabajar los deseos,
a disolver los miedos y los fantasmas emocionales, a asentar
las relaciones armónicas en general sobre verdades universales,
transformando continuamente los sentimientos y las emociones
mediante la apertura al contacto con energías sutiles y el cono-
cimiento de sí mismo, información del subconsciente que pro-
viene de los senderos vacíos 17 Estrella y 18 Luna, que se activan
para que exprese su personalidad conscientemente mediante el
área mental, las ideas, los miedos, la intuición y la lógica, como
vía de resolución.
Represión en Hod. El proceso alternativo de carga-descarga
afecta al área de la mente concreta y de los aspectos pragmáticos
de la vida. Así, en lo relativo por ejemplo al dinero (relacionado
con esta esfera) pueden producirse fases de ahorro seguidas de
otras de derroche, con respecto al aprendizaje (estudios, cursos)
fases de mucha actividad intelectual y mental seguidas de otras de
quietud, que ayudan a asentar información.
La configuración fuerza al sujeto a transformar las ideas para
llegar a comprender la finalidad de la propia existencia, mediante
la integración de la sombra en luz, la aceptación y disolución de
los miedos mentales, y la perspectiva que ofrece la comprensión
del pasado integrado en el presente que se proyecta hacia el futuro
en función de El Que Se Es, información del subconsciente que
le suministran los senderos vacíos 19 (El Sol) y 20 (El Juicio), y
que se activan para que exprese su personalidad conscientemente
mediante el área emocional, la expresión de los sentimientos y los

MANUAL DE KAB BA LAH PRÁCTICA 553


deseos, la armonía en las relaciones humanas, el impulso y la ini-
ciativa, como vía de resolución.
Represión en Yesod. Esta configuración es la única en su especie
que depende de la ausencia de un solo sendero, el 21 El Mundo,
por lo que está íntimamente relacionada con la familia de senderos
del 3: La ausencia del sendero 21 obliga a desarrollar la escucha
profunda y a modificar constantemente todo lo aprendido sobre
el dolor y los mecanismos que lo producen, mediante conceptos
universales y transpersonales del subconsciente, influyendo en el
desarrollo de la capacidad de síntesis (sendero 3, La Emperatriz) y
de sacrificio (sendero 12, El Colgado).
Fuerza el sujeto a trabajar los senderos colaterales del árbol: la
lógica, la intuición, la comprensión de los procesos de desarrollo
del Yo y la finalidad de la propia vida en el lado izquierdo (área
exterior), o bien la iniciativa, el impulso, la búsqueda de la verdad
y el conocimiento de sí mismo y del contacto con las energías suti-
les en el lado derecho (área interior). A la vez, se activan de forma
simultánea los senderos ausentes en cada caso.
En este grupo se incluye la configuración de Mosquito,
que obliga a trabajar ambos lados (interno y externo) al mismo
tiempo, en lugar de uno de los dos. En esta configuración la Tríada
de Inserción en el Mundo está completa, a la vez que Yesod tiene
como único enlace el sendero 14 (Templanza).
Recibe este nombre por sus efectos que pueden resultar especial-
mente molestos, ya que la persona que la tiene necesita sublevar
a los demás, incordiando con sus teorías a su entorno de manera
persistente y machacona, como vía para ser valorado y apreciado
por quien le interesa. Por lo que esta configuración manifiesta la
forma más virulenta de expresión de este aspecto de Yesod.
El propósito para todas las formas de represión en Yesod es la
comprensión profunda de todos los mecanismos que crean dolor y
sus causas, desde lo invisible hasta lo visible, cómo se materializan
las realidades físicas que tienen su origen en otras sutiles, como
pensamientos y emociones distorsionados cargados de negativi-
dad y error. Esto hace que se vea todo lo relativo al dolor y a la
miseria con un cierto desapego, desde una perspectiva mucho más
amplia, sin involucrarse, pero con una profunda comprensión y

554 V !LLARRUBIA / HAUT / M ILLERA


respeto por cada existencia, las razones de cada persona, y lo que
enseña cada experiencia, por muy fuerte o dolorosa que ésta sea.

Vía muerta
Esferas afectadas: cualquiera de las laterales,
las seis de los pilares de la Misericordia y la Severidad. Se produce cuando
una cualquiera de estas seis sefirot se encuentra unida al resto del Árbol
exclusivamente por la viga horizontal que le toca: sendero 3 en los casos de
Jokmah y Binah (este última muy poco frecuente), sendero 8 en los de Jesed
y Guevurah, y sendero 16 en los de Netzaj y Hod.

Al ser uno de estos senderos la única conexión existente con la


sefirá afectada, el efecto que se produce es de caos, indecisión, in-
seguridad, desconcierto y crisis (no en el sentido que le damos en
relación con las líneas variables, sino en el común de fase llena de
perturbaciones, generalmente violentas), ya que la información no
visible de los senderos blancos o «angélicos» no es manejada por el
sujeto a voluntad, y el único sendero estructurado existente es a la
vez, desde el punto de vista subjetivo, vía de entrada y de salida de
energía y de información, por lo que no puede explicarse muchos de
sus mecanismos y reacciones, y esto genera tensión.
Si la vía muerta aparece en el lado derecho (esto es, si las esferas sin sa-
lida pertenecen al Pilar de la Misericordia), todas estas tensiones afectan
al sujeto en su interior~ es decir, a su relación con aspectos de sí mismo,
aspectos que pueden referirse a su energía y espiritualidad 0-okmah),
a su mente expansiva transpersonal y a su individualidad 0-esed) o a sus
emociones, a su ego y a su personalidad o nivel astral (Netzaj), que sin
embargo acaban proyectándose en las relaciones con los demás. Y si apa-
recen en el lado izquierdo (esferas sin salida en el Pilar de la Severidad)
afectan a su manera de expresarse y relacionarse con lo que para él es el
mundo exterio~ desde el punto de vista de la responsabilidad espiritual
(Binah), de su mente activa transpersonal (Guevurah) y su mente con-
creta, sus ideas, el plano astral y la personalidad (Hod).
El propósito de estas configuraciones es desprogramar al sujeto
de concepciones muy estructuradas y muy cristalizadas en el área
en la que la vía muerta tiene lugar, creando condiciones extremas

M ANUAL DE KABBALJ\H PRÁCTICA 555


que le obliguen a enfocar ese área hacia valores cósmicos y no con-
vencionales, y a comprender todos los mecanismos invisibles que
producen lo visible en esos aspectos del aprendizaje.
Si afecta al Sendero 3 (La Emperatriz) obliga al sujeto a trabajar
la chispa de la creatividad, la capacidad de síntesis y de unir polos
opuestos para desprogramar:

• En Jokmah, el concepto de padre y de hombre convencional,


obligándole a ser independiente de convencionalismos, de la
moral tradicional, y dependiente sólo de sí mismo, de su propia
fuerza y del Absoluto.
• En Binah, el concepto de madre y de mujer convencional, im-
pulsándole a ser responsable de sí mismo y a fundamentar su
sentido del deber en lo que él es en sí mismo, y no en conven-
cionalismos socioculturales.

Si afecta al Sendero 8 (La Justicia), le obliga a depurar el discer-


nimiento, la capacidad de juzgar y el sentido de medida, así como
la capacidad de enjuiciar con respeto y tolerancia hacia las diferen-
cias, y a seleccionar qué conservar y qué renovar, (ya que se verán
afectadas las Tríadas de la Innovación y de la Conservación) para
desprogramar. La desprogramación actuará de forma diferente se-
gún en qué esfera se manifieste la vía muerta:

• En Jesed el concepto de amar y ser amado, las metas elevadas y


los objetivos transpersonales a largo plazo, rompiendo moldes
tradicionales, con maestría, independencia, autosuficiencia, in-
trospección y con aceptación o búsqueda (casi siempre de forma
inconsciente) de la soledad.
• En Guevurah, el concepto de lucha y combatividad, desmarcán-
dose de las máscaras de los valores convencionales y su respon-
sabilidad, en una constante búsqueda de la verdadera motiva-
ción para luchar y combatir.

Si finalmente afecta al Sendero 16 (La Torre), obliga a despertar


a través de sucesivas crisis de crecimiento y de su superación, así
como de la capacidad de aprender del dolor, para desprogramar:

556 V1LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


• En Netzaj, los sentimientos, emociones y deseos muy cristaliza-
dos en el ámbito de las relaciones, para adaptarse a una cons-
tante renovación, aceptando el olvido y descubriendo la valía
personal y la verdad acerca de sí mismo para a realizar su pro-
pio tikún.
• En Hod, las ideas, pensamientos y miedos muy cristalizados
en el ámbito de la comunicación y el aprendizaje, que exigen el
recuerdo necesario de determinados aspectos de la sombra para
valorarla adecuadamente, disolver sus miedos e integrarla en la
luz de la consciencia del Yo-Soy.

Otra forma de estudiar la configuración de vía muerta es a través


de las pseudoconfiguraciones especiales o semiincómodas, que se
explican más adelante, ya que toda vía muerta está afectada por una
conjunción de dos de aquéllas.

Muerto
Esfera afectada: puede serlo cualquiera, aunque es casi imposible que se
dé en Tiferet, la sefirá central. Se produce la configuración cuando todos
los senderos que confluyen en una esfera determinada quedan en blanco
(senderos angélicos).

El propósito de esta configuración es desprogramar por completo


el área de vida que tiene que ver con la sefirá aislada, obligando al
sujeto a vivir esa área desde valores transpersonales, incluso cósmi-
cos, y desde luego nada convencionales. Al estar la sefirá totalmente
aislada, y por tanto desestructurada, su reacción tanto hacia dentro
como hacia fuera es imprevisible, y esto le crea al sujeto caos, con-
fusión y alteraciones de todo tipo, ya que él no maneja los cambios
que se van produciendo en los aspectos regulados por dicha sefi-
rá, que está sometida exclusivamente a información procedente del
subconsciente o del supraconsciente.
Por ello, la configuración actúa disolviendo drásticamente («al
ácido», podría decirse) los aspectos de la vida que se habían cristali-
zado en exceso, de tal modo que limitaban, se cerraban a cualquier
posibilidad de evolución en esas áreas, creando desfases y desequi-

M AN UAL D E K ABRALAH PRÁCTICA 55 7


librios importantes con respecto al resto del Árbol. Son una forma
muy fuerte y muy sutil a la vez de hacer reaccionar estas áreas para
que no sólo equilibren y reajusten el resto del Árbol, sino que tam-
bién, por la misma culminación del proceso, hagan de vórtice alre-
dedor del cual gira el resto del Árbol.
Seguidamente se analizan los efectos de esta configuración en
cada una de las diez sefirot:
Muerto en Keter. Se produce cuando faltan a la vez los senderos
22 (El Loco), 1 (El Mago) y 2 (La Sacerdotisa).
Ocasiona una fuerte desubicación, un fuerte desarraigo interno.
El sujeto se siente como un exiliado, como un extranjero fuera de
su patria. El propósito de esta configuración es que se conecte con
El Que Es en realidad, con la Raíz Universal, buceando en su caos
(que en realidad es una manifestación de la energía sin forma), en su
mente y en su alma, guiándose tan sólo por su instinto y su intuición
superior.
Muerto en Jokmah. Se produce cuando faltan a la vez los sen-
deros 22 (El Loco), 3 (La Emperatriz), 4 (El Emperador) y 5 (El Pontífice).
Origina una fuerte necesidad de independencia, de originalidad
y de continuo movimiento. El sujeto se ve a sí mismo diferente de
la mayoría, es imprevisible y siente que la fuerza que lo anima le es
desconocida y escapa a su control. El propósito de esta configura-
ción es que se atreva a saltar al vacío para lograr la conexión con la
Fuerza Universal, a través de la cual podrá adquirir consciencia de
sí mismo y de su capacidad creativa para encontrar la estabilidad
que necesita fuera de los patrones convencionales de familia, para
aprender a valorarse y quererse, a no tomarse a sí mismo demasiado
en serio, a modificar los conceptos de autoridad y de moral conven-
cionales, y a expresar alegría de vivir con valores universales y no
convencionales.
Muerto en Binah. Configuración menos frecuente que la anterior,
se produce cuando faltan a la vez los senderos 1 (El Mago), 3 (La
Emperatriz), 6 (Los Amantes) y 7 (El Carro).
Origina un fuerte rechazo del sentido del deber convencional y
de las responsabilidades que le exigen la familia, los padres y la so-
ciedad. Inconformista y desorientado, se verá forzado a asumir la
responsabilidad de su existencia y de sus propias necesidades, se-

558 V11. LARRUBIA / HAUT / MILLERA


gún su propia manera de ser y de comprender la vida, y a tomar
decisiones que le hagan acercarse a su objetivo. El propósito de esta
experiencia es hacerle comprender desde sí mismo para qué debe
luchar, cuál es su auténtico y verdadero sentido del deber, para que
asuma su responsabilidad respecto a sí mismo, confíe en su capaci-
dad creativa fuera de lo convencional, y para depurar las máscaras
sociales y sus roles y así encontrar su lugar en el mundo por encima
de convencionalismos socioculturales.
Muerto en Jesed. Se produce cuando faltan a la vez los senderos 5
(El Papa), 8 (La Justicia), 9 (El Ermitaño) y 10 (La Rueda de la Fortuna).
El afectado por esta configuración es un soñador que se crea inter-
namente una meta muy elevada, casi quimérica; el «no tener los pies
en el suelo» le crea problemas de adaptación a la realidad. Puede lle-
gar a despreciar todo aquello que no sea elevado, mostrando cierta
intransigencia que hace de él una persona de trato difícil e incómo-
do. Pero este comportamiento enmascara la dificultad para valorar-
se a sí mismo y para sentirse querido y apreciado, por lo que busca
alcanzarlo sólo por méritos propios; de ahí que se imponga, junto
a las metas altas, caminos sumamente difíciles para alcanzarlas.
El propósito de esta experiencia es impulsar al sujeto a ser consciente
de sí mismo, y que se vea como un ser hermoso merecedor de todo
el amor y todo el respeto, y como consecuencia, a ser flexible con los
demás, guiándose por leyes universales en vez de por dogmas terre-
nales, leyes que sólo encontrará si se busca a sí mismo a través de los
ciclos de crecimiento. De esa manera, logrará despertar su capacidad
de discernimiento y de amor transpersonal a la hora de enjuiciar,
analizar o valorarse a sí mismo y a los demás.
Muerto en Guevurah. Se produce cuando faltan a la vez los sende-
ros 7 (El Carro), 8 (La Justicia), 11 (La Fuerza) y 12 (El Colgado).
En esta configuración el sujeto padece falta de motivación e indo-
lencia porque no se identifica con los valores que impulsan a la ac-
ción a la mayoría, pero en ocasiones muy determinadas causas muy
nobles le llevan a comportarse como un quijote o como un samurai,
con gran fervor. El propósito de esta experiencia es hacer del sujeto
un verdadero guerrero, que mediante el conocimiento de las leyes
universales coopere con su instinto y descubra su verdadera fuerza,
transmutando su manera de mirarse a sí mismo y al mundo, des-

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 559


de su corazón, de dentro hacia afuera, para comprender cabalmente
que la acción más perfecta está justo en el «no hacer» consciente.
Muerto en Tiferet. Es una configuración muy poco frecuente,
podría decirse que casi imposible, y en todo caso siempre matiza-
da por senderos semilla o «jardines de infancia» en contacto con la
esfera. Para que se produzca, deben faltar a la vez los senderos 2
(La Sacerdotisa), 4 (El Emperador), 6 (Los Amantes), 9 (El Ermitaño),
11 (La Fuerza), 13 (sin nombre), 14 (Templanza) y 15 (El Diablo).
Fuerza al sujeto a una búsqueda constante de su individualidad, de
una identidad de sí mismo. Genera una escisión profunda entre el
yo y el no-yo, y una fuerte sensación de vacío interior. Nada ni nadie
llena lo suficiente, nada satisface plenamente, por lo cual el nativo
puede padecer una depresión profunda en momentos críticos, inse-
guridad y miedo, y gran autocompasión, ya que se siente a menudo
incomprendido, agredido e intimidado por el entorno, desarrollan-
do una conducta de «pobre de mí». Puede que esta configuración
sea una de las más duras y complejas, pues depura muchos aspectos
al mismo tiempo, sin una pauta definida y consciente. A la vez, los
senderos semilla o «jardines de infancia», y según dónde aparezcan,
ofrecen posibilidades de realizar un «salto cuántico», si se asumen
los riesgos que ello conlleva (véase más adelante la sección dedicada
al trabajo con este tipo de senderos). El propósito de esta configura-
ción es agudizar la intuición para crear la estabilidad que el sujeto
necesita, y la visión y la energía necesarias para poder elegir adecua-
damente cuando se enfrenta a una encrucijada, visión y energía que,
al encontrarlas en su interior, le permitirán perdonarse y perdonar,
para transmutar su sombra e integrarla en el Yo. Debe, por tanto,
aprender a confiar en su intuición, a tener fe en sí mismo y a recono-
cerse en su interior; y a aceptar alegremente sus propios fallos en el
reconocimiento de esa intuición.
Muerto en Netzaj. Configuración que aparece pocas veces, se pro-
duce cuando faltan a la vez los senderos 10 (La Rueda de la Fortuna),
13 (sin nombre), 16 (La Torre), 17 (La Estrella) y 18 (La Luna).
Afecta al área de los sentimientos, emociones. deseos y de las rela-
ciones afectivas armónicas en general y con el sexo opuesto en parti-
cular. El sujeto tiende a idealizar demasiado, no sólo a su príncipe o
a su princesa azul, sino también a todos aquellos a quienes considere

560 V !LLARRUBIA / H AUT / Mil.LERA


sus amigos. Suscita un gusto excesivo por lo exquisito, mostrando
en muchas ocasiones aversión por «lo vulgar». El propósito de esta
configuración es desprogramar los contenidos del área emocional.
Es posible que el conflicto aparezca cuando la realidad no cuadre con
el ideal de belleza, sea en la relación de pareja o en cualquiera otra,
produciendo frustraciones hasta que, a través de sucesivos ciclos de
evolución, aprenda a transformar los elementos que le producen los
trastornos y las crisis, resurja de sus cenizas y renueve su forma de
mirar el mundo, tomando contacto con él para superar sus propios
miedos, inseguridades y frustraciones, y para descubrir que la belle-
za habita en todas las formas, sin despreciarlas, que en todo habita lo
sagrado, culminándose así el propósito de esta experiencia.
Muerto en Hod. Configuración más frecuente que la anterior,
se produce cuando faltan a la vez los senderos 12 (El Colgado), 15 (El
Diablo), 16 (La Torre), 19 (El Sol) y 20 (El Juicio).
Afecta al área de los pensamientos, las ideas y la mente concreta.
Esta configuración obliga al sujeto a disolver las cristalizaciones de
este área y hacerla mucho más flexible y más rica, y esto le causa
inseguridad de tipo nervioso, ya que se ve a sí mismo como una
persona fácilmente influenciable, que cambia a menudo de forma
de pensar, que no tiene ideas propias y a la que, por todo ello, le es
difícil expresar sus sentimientos. El propósito de esta experiencia es
que aprenda a amarse, que transmute sus sentimientos negativos
sobre sí mismo, que acepte su sombra y que aprenda de sus errores y
de sus crisis, para que, una vez conciliados sus opuestos, comprenda
la razón de su destino, de todo lo que ha vivido y aprendido has-
ta ese momento y de todo lo que le queda por hacer en un futuro,
de su meta.
Muerto en Yesod. Configuración relativamente frecuente, se
produce cuando faltan a la vez los senderos 14 (Templanza), 17
(La Estrella), 19 (El Sol) y 21 (El Mundo).
Se trata de un aspecto duro y doloroso, porque busca depurar el
ego como centro de la personalidad. El sujeto es una persona hiper-
sensible, muy susceptible, fácil de herir, a quien le es difícil expresar
sus sentimientos y sus emociones. Inseguro y falto de autoestima,
reacciona con actitudes de autocompasión. En algunos casos pue-
de tender a buscar la vía de la drogadicción para superar el miedo,

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 5 61


la angustia, la timidez y la ansiedad que le produce intentar expresar-
se. Toda la riqueza de su mundo interior se encuentra encerrada, y el
centro de su personalidad «encapsulado», sin poder tocar tierra, con
un cúmulo de deseos y miedos contenidos, que al no ser liberados,
producen gran tensión y frustraciones. El mundo se convierte en un
lugar incómodo y desagradable, a veces hostil, y se generan miedos
y angustia para enfrentarse al entorno. Sería interesante observar si
en las líneas paterna y materna (senderos 4 y 6, respectivamente), así
como en la de las relaciones de los padres entre sí (sendero 3) hay
algún tipo de conflicto, ya que detrás de un sentimiento de autocom-
pasión suele haber un intimidador o agresor que dinamiza todo lo
anterior. El propósito de esta configuración, una de las más duras y
dolorosas por los elementos que hay en juego, es obligar al sujeto a
que confíe en su inconsciente y lo libere, que lo haga en su capacidad
interna de comprensión para perdonar cuando hay oportunidad,
de renovar su forma de sentir y de pensar, de mirarse y de aceptarse
a sí mismo tal como es, de conciliar sus opuestos y de expresar todo
lo que es en sí mismo, con seguridad, amor y confianza. Pero el per-
dón es ante todo hacia sí mismo, y así lo indica su palabra hebrea,
~ (slíjá), que entre otras contiene 9' (lí), para mí.
Muerto en Maljut. Se produce cuando faltan a la vez los sen-
deros 18 (La Luna), 20 (El Juicio) y 21 (El Mundo).
Esta configuración es, como puede observarse, una conjunción
de tres represiones, en Netzaj, Hod y Yesod, o al menos en esta
última si hay alguna conexión entre las tres esferas mencionadas.
En todo caso, de forma más o menos visible o velada, comparte las
características de las tres. Por lo demás, el conflicto afecta a la Tríada
de la Inserción en el Mundo, y en muchos casos también a las de
la Iniciativa y la Lógica. Tiene una vertiente interna, con respecto a
sentimientos, emociones y manera de relacionarse armónicamente
con el entorno, y con una vertiente externa, con respecto a la manera
de expresar pensamientos concretos como vehículo de comunica-
ción. Como el área a trabajar es muy amplia y tiene que ver con la
inseguridad de expresar deseos y miedos, emociones y opiniones,
y debido a los constantes cambios que se producen en el sujeto tras
las sucesivas crisis, el proceso resulta doloroso y difícil, lo que se ve
acrecentado además por producirse en el área de mayor densidad

562 VILLARRU BIA / HAUT / MILLERA


del Árbol. El propósito de la experiencia que para el nativo repre-
senta esta configuración es obligarse a depurar el concepto de lo real,
lo sólido, y a tomar contacto con el plano ñsico sin miedo ni insegu-
ridad, abriéndose a la vez al contacto con las energías sutiles. Como
se trata de disolver las cristalizaciones de este área, la cual, por ser la
de mayor densidad, es precisamente la más proclive a formarlas y
la que más dolor produce cuando se trata de hacerlas fluir; podrá en
definitiva tomar contacto pleno con un mundo en perpetuo cambio
y comprender la razón última de su destino, que no es otra que el
rescate de su Divina Princesa. Comprendido esto, podrá desarrollar
su escucha profunda y comprender el dolor en él y en los demás.
Y así, sus miedos e inseguridades tendrán un objetivo trascendente,
y serán alegremente aceptados.

Árboles partidos
Estas escisiones se producen siempre en la parte baja del Árbol, debido a
que de Tiferet hacia arriba se sitúan los números de una sola cifra, a la vez
que hay un mayor número de senderos confluyendo en la sefirá central.
A veces, la escisión se sitúa en la parte media, afectando a algún área en
torno a Jesed o a Guevurah.

La primera impresión que producen es la de una desconexión


profunda entre el espíritu y el alma (individualidad) del sujeto por
una parte, y su personalidad (pensamientos, emociones y ego) por
otra. O bien, si la fisura afecta a las áreas medias, a una desconexión
entre el yo y la acción (fisura en torno a Guevurah) o entre el yo y
los sentimientos (fisura en torno a Jesed). Un caso real que puede
servir de ejemplo de la primera de estas últimas se recoge en la
sección dedicada a los Árboles especiales (ver más adelante, sec-
ción 16 de esta IV Parte). El nativo se siente a caballo entre ambas
partes, pero sin tener una consciencia exacta de ninguna de las dos,
y como si ambas tirasen de él en direcciones opuestas. Esto produce
necesariamente inseguridad, incomodidad y dificultad en expresar
tanto lo que se es en profundidad como la personalidad.
Si observamos las distintas posibilidades de Árboles partidos,
nos encontramos con estructuras ya conocidas: doble vampiro en
un caso, represión en Hod con vampiro en N etzaj, en otro, o al con-

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 563


trario, represión en Netzaj con vampiro en Hod. Y todo ello unido a
una franja de senderos vacíos, que a veces queda disfrazada en una
estructura de mosquito, en la que el Sendero 14 (Templanza) pene-
tra como una lanza en la Tríada de la Inserción en el Mundo, la cual,
por lo demás, está desconectada del resto del Árbol.
Los Árboles partidos son duros y difíciles, ya que contienen dos o
tres configuraciones especiales a la vez, cada una de ellas con su pro-
pósito particular. Habrá momentos claves y drásticos en la vida del
sujeto, que se habrán ido gestando previamente, y en los que tomará
decisiones importantes y se verá en experiencias muy especiales que
le llevarán a unificar sus aspectos separados de forma progresiva,
hasta que se active finalmente la franja vacía y suceda lo que para
cada caso se indica a continuación. Pero hay quetener en cuenta que,
además del grado de incomodidad que aportan las propias configu-
raciones, hay que añadirle la incomodidad e inseguridad que genera
la franja vacía, ya que le obliga a estar modificando y evaluando con-
tinuamente el contenido del área y los senderos afectados, sin que el
sujeto tenga a dónde agarrarse por mucho tiempo, lo cual le supone
un gran desgaste por tensiones de tipo mental y emocional que esta
inseguridad genera.
El Sendero 14 (Templanza), como única vía que conecta la
Individualidad con la Personalidad, exige ser consciente de la nece-
sidad de conciliar opuestos, alejarse de los extremismos, ser flexible
y aprender a perdonar por comprensión tanto de las razones de los
demás como de las propias. La delicada posición de este sendero
genera un continuo hervor interno que obliga a limpiar las emocio-
nes contradictorias para armonizar ambas partes. Recordemos que,
según el Sefer Yetzirah, este sendero une los polos que aparecen sim-
bolizados por el Este y el Oeste, la Vida y la Muerte, y su lección
es mostrarnos que ambas son las dos caras de un mismo aspecto,
necesario para la evolución. El propósito de cualquier Árbol partido
es elevar la personalidad hacia el ser, ya que se ha ido estructurando
con una trama muy compleja, centrada en el ego, y cada vez más
alejada del Centro, del Ser transpersonal y espiritual, y se ve forzada
a soltar y descristalizar los aspectos más pesados y densos, pasados
los momentos de ofuscación. El proceso es doloroso, y a veces re-
quiere convalecencia debido al desgaste mental, emocional y físico,

564 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


pero es necesario pasar por ello para que el objetivo final se cumpla.
En los casos de fisura lateral, el propósito sería conectar mediante
información «cósmica» al yo, bien con la acción y la purificación (fi-
sura en torno a Guevurah), bien con el sentimiento y el crecimiento
(fisura en torno a Jesed).
Examinemos con algún detalle las posibilidades cuando se trata
de fisuras en tomo a Yesod, las más comunes:
Árbol partido con doble vampiro.
Las Tríadas afectadas con senderos vacíos son, a nivel inter-
no, Deseos e Impulso, y a nivel de expresión externa, Intuición y
Miedos, y como estructurales, las de la Memoria y del Temple de
Ánimo. Al no tener el sujeto control sobre estas áreas, en las opor-
tunidades «claves» de reunificación de ambas partes los deseos son
reales y auténticos, y son los que le impulsan a actuar, sin los miedos
previsibles de esta Tríada si estuviese completa, ya que puede ver
claro gracias a su intuición y a que no recuerda todo el dolor de sus
procesos de aprendizaje.
Árbol partido con represión en Hod y vampiro en Netzaj.
Las Triadas afectadas con senderos vacíos son Deseos e Impulso en
el lado derecho, Intuición y Lógica en el lado izquierdo, y Memoria,
Temple de Ánimo e Inserción en el Mundo como estructurales.
En las oportunidades claves, los deseos también son reales y autén-
ticos, así como el impulso a actuar, dado que el sujeto tiene la capa-
cidad de ver las cosas muy claras, aprende a fiarse de su intuición y
a la vez a pensar con lógica, gracias a que recuerda la síntesis y la fi-
nalidad de lo que aprende, por la ausencia del Sendero 16 (La Torre),
lo cual favorece que las vías de expresión y la capacidad de respues-
ta sean a la vez certeras e imprevisibles.
Árbol partido con represión en Netzaj y vampiro en Hod.
En este caso, las Tríadas con senderos vacíos son las opuestas a
las del anterior: Impulso e Iniciativa en la mitad activa, Miedos e
Intuición en la pasiva, junto a Memoria, Temple de Ánimo e Inserción
en el Mundo como estructurales. En las oportunidades «claves» el
impulso de actuar de forma creativa e imprevisible obedece a una
necesidad real y auténtica de expresar lo que se es según le dicta su
intuición, y sin miedo a equivocarse, ya que su experiencia le enseña
a confiar en sus procesos de aprendizaje.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 565


Configuraciones especiales o incómodas temporales

Cuando en los senderos afectados por líneas cíclicas se producen


crisis (valor cero en algún momento del ciclo) pueden aparecer
configuraciones especiales o incómodas temporales, por lo que les
será de aplicación lo dicho para ellas en tanto la carga del sendero
se mantenga en cero o próxima a cero, lo que, según la duración
del ciclo y su naturaleza, corto o largo, puede durar desde unas
horas hasta un año o dos. El propósito de estas configuraciones
temporales, sobre todo las de ciclo corto, es disolver cristalizacio-
nes en las áreas afectadas, no mediante una presión continua, como
sucede en las especiales permanentes, sino mediante una serie de
impulsos cortos sucesivos, tal como· hace el fontanero cuando usa
un desatascador para limpiar una tubería obstruida.

Pseudoconfiguraciones especiales, o configuraciones


semiincómodas

Esferas afectadas: las de los pilares laterales. Se producen cuan-


do falta algún sendero lateral, a la vez que está presente la viga
que llega a la sefirá en la que se presenta la pseudo-configuración.
Las que pueden producirse son las siguientes:

En]okmah:
Pseudoídolo si falta el sendero 22 (El Loco), estando a la vez pre-
sentes el 3 (La Emperatriz) y el 1 (El Mago).
Pseudorrepresión si faltan los senderos 4 (El Emperador) y 5 (El
Pontífice), y están a la vez presentes el 3 (La Emperatriz), y el 7
(El Carro) y/ o el 6 (Los Amantes).

EnBinah:
Pseudoídolo si falta el sendero 1 (El Mago), estando a la vez pre-
sentes el 3 (La Emperatriz) y el 22 (El Loco).
Pseudorrepresión si faltan los senderos 6 (Los Amantes) y 7 (El
Carro), y están a la vez presentes el 3 (La Emperatriz), y el 4
(El Emperador) y/ o el 5 (El Pontífice).

566 V!LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


En]esed:
Pseudocomplejo si falta el sendero 5 (El Pontífice), estando a la vez
presentes el 8 (La Justicia) y el 7 (El Carro).
Pseudorrepresión si faltan los senderos 9 (El Ermitaño) y 10
(La Rueda de la Fortuna), y están a la vez presentes el 8 (La Justicia),
y el 11 (La Fuerza) y/ o el 12 (El Colgado).

En Guevurah:
Pseudocomplejo si falta el sendero 7 (El Carro), estando a la vez
presentes el 8 (La Justicia) y el 5 (El Pontífice).
Pseudorrepresión si faltan los senderos 11 (La Fuerza) y 12
(El Colgado), y están a la vez presentes el 8 (La Justicia), y el 9
(El Ermitaño) y/ o el 10 (La Rueda de la Fortuna).

EnNetzaj:
Pseudovampiro si faltan los senderos 10 (La Rueda de la Fortuna)
y 13 (sin nombre), estando a la vez presentes el 16 (La Torre), y el
12 (El Colgado) y/ o el 15 (El Diablo).
Pseudorrepresión si. faltan los senderos 17 (La Estrella) y 18
(La Luna), y están a la vez presentes el 16 (La Torre), y el 19 (El Sol)
y/ o el 20 (El Juicio).

EnHod:
Pseudovampiro si faltan los senderos 12 (El Colgado) y 15
(El Diablo), estando a la vez presentes el 16 (La Torre), y el 10 (La
Rueda de la Fortuna) y/ o el 13 (sin nombre).
Pseudorrepresión si faltan los senderos 19 (El Sol) y 20 (El Juicio),
y están a la vez presentes el 16 (La Torre), y el 17 (La Estrella) y/ o
el 18 (La Luna).

Cualquier configuración especial actúa desbordando aspectos


rezagados o muy cristalizados que habían creado un desfase tal
de evolución en el Árbol que resultaba incluso peligroso para
la vida. Si una goma se tensa al límite, cualquier tirón pequeño
puede partirla, y esto ilustra el peligro que conlleva este desfase,
la escisión o diabolé (del griego bt,a-BoA11, desavenencia, desa-
cuerdo, querella) creada por partes que, por estar en niveles muy

M A NUAL D E KAB BALAH PRÁCT ICA 567


distintos, son irreconciliables, pueden crear tensiones tan enor-
mes que lleguen a originar rupturas irreparables. Las configu-
raciones especiales son un instrumento al servicio de la evolu-
ción, para preservar la vida, una oportunidad para facilitar la
unificación del Yo, una tienta de nuestros conflictos para restituir
nuestra unidad interior perdida. La restauración de esta unidad
es obviamente necesaria pues, de no lograrse, es imposible el tra-
bajo de restitución, el tikún.
A diferencia de las anteriores, una pseudoconfiguración crea
una inadecuación par parte del sujeto respecto al marco de cir-
cunstancias personales, familiares y sociales, que le obliga a vivir
en disconformidad consigo mismo y con el entorno, generando
inseguridad y sentimientos de inferioridad, hasta que la pseu-
doconfiguración cumple su propósito y el sujeto comprende el
para qué, la finalidad de sus circunstancias, en cuyo momento la
inadecuación se disuelve.
El sujeto observa con interés los mecanismos de consolidación
de fuerzas y formas a nivel personal y social (seguridad en sí
mismo, prestigio social, fama, éxito, etc.) ya que él en sí mismo
no se siente seguro de nada. Este es precisamente el propósito de
la pseudoconfiguración, desamoldar al nativo de todos los patro-
nes sociales convencionales, a nivel interno y externo, para que
recupere lo que él es en sí mismo, al margen de lo convencional
de la época o de la cultura.
Si aparece un pseudoídolo es probable que, en vez de idealizar
a una persona femenina o masculina, el sujeto tenga un ideal de
mujer o de hombre en el que convertirse, aunque no tenga rostro
ni nombre, o bien ese ideal sea el modelo que busca para com-
partir su vida.
Si se trata de un pseudocomplejo, el nativo tendrá circunstan-
cias especiales, un tanto difíciles, que le mantendrán desclasado;
se sentirá inadecuado, no se identificará con lo que lo hace lama-
yoría, no tendrá una máscara (personalidad) estable con la cual
mostrarse fuerte y seguro frente al mundo y presumir de ello,
o tal vez no se sentirá amado en algún momento de su vida, pero
a diferencia del complejo, podrá amarse a sí mismo e intentar dis-
frutar fuera del ambiente que le causa dolor, podrá amar a otros,

568 ViLLARRUBIA / HAUT / MIi.LERA


e intentará no proyectar lo que ha recibido, y cuando comprenda,
podrá recuperar la seguridad en sí mismo y en su capacidad de
amar, por encima de lo que recen las diferencias de clase, tradi-
ción, raza, etc. Un aspecto a destacar del pseudocomplejo es que
aparece siempre que hay un pseudoídolo, en la sefirá inmediata-
mente debajo de este último, aunque puede quedar enmascarado
por él; pero una atenta observación revelará que está plenamente
operativo.
Si aparece un pseudovampiro mental, las circunstancias ha-
rán sentirse al sujeto inadecuado respecto a su forma de pensar,
y necesitará unirse a personas que le proporcionen seguridad,
al sentir afinidad o atracción hacia sus ideas, siempre en continuo
movimiento o cambio, y casi se convertirá para estas personas en
un ser perfectamente «pegajoso», tan difícil de despegar como
una lapa. Si aparece un pseudovampiro emocional, las circuns-
tancias le harán sentirse inadecuado con respecto a sentimientos
y emociones, y a veces se «pegará» a los demás, no por afinidad
de ideas, como en el caso anterior, sino en demanda de afecto y
atención, pero en ambos casos será a temporadas, y durante un
período de la vida, hasta que el propósito se cumpla, el sujeto
comprenda y se nutra con su propio conocimiento y de su propia
energía. Al saber quién es y a quién pertenece, dejará de necesi-
tar de la forma en la que lo ha hecho, y pasará a intercambiar y
compartir, ideas o sentimientos, pero ya sin crearse adicciones
ni dependencias. Debe indicarse que los pseudovampiros, sean
mentales o emocionales, pueden aparecer enmascarados por
pseudocomplejos si, junto a la existencia de éstos, sean a su vez
directos o enmascarados por pseudoídolos, al mismo tiempo fal-
tan los senderos 15 o 13, respectivamente.

MANUAL DE KABBAl.i\H PRÁCTICA 569


8. SENDEROS CON CARGAS NORMALES
Y SENDEROS CON CARGAS ESPECIALES

L os senderos con una o dos líneas sin marca de doctorados se


consideran de carga normal, así como los que aparecen en
blanco («senderos angélicos», llamados así por estar al cuidado de
los ángeles personales). Si el sendero tiene una o dos líneas, el su-
jeto vive la cualidad correspondiente como algo propio, sintiendo
que ese aspecto de sí mismo le pertenece, aunque no son aspectos
fuertes en la personalidad. En cambio, en los senderos angélicos,
el sujeto considera que aquel aspecto no es suyo; y es que, en cierto
modo es así, ya que se trata de tareas que ya quedaron realizadas,
a semejanza de asignaturas aprobadas. «Dedícate a estudiar ahora
geografía, porque las matemáticas ya las aprobaste», podía ser un
buen ejemplo de este tipo de senderos. Sin embargo, a efectos sub-
jetivos, los senderos blancos se viven como si no existiesen, pese
a lo cual pueden manifestar sus efectos en el funcionamiento de
las Tríadas. Para evitar innecesarias repeticiones, nos remitimos
a los significados de cada sendero subjetivo tal como quedaron
estudiados en las secciones 3.7.1 a 3.7.21, ambos inclusive, de la
II Parte, considerándolos como presentes o positivos cuando estén
representados por una o dos líneas, y como ausentes o negativos
cuando sean senderos angélicos.
Los senderos con carga especial son aquellos en los que el su-
jeto debe prestar especial atención y/ o dedicación a la tarea que
representan. Obligan a contrastar incesantemente los contenidos
de los demás senderos presentes, normalmente encasillados, me-
diatizados e influidos por valores educativos socioculturales li-
mitados, con la información que proporcionan del subconsciente,
completa y fundamentada en valores espirituales universales, pro-
porcionando respuestas imprevisibles y recursos sorprendentes
sobre los que no tenemos control consciente. Causan inseguridad,
pues no permiten asirse conscientemente a los contenidos, ni crear
pautas fijas de respuesta, y como consecuencia, pueden provocar
sentimientos de inferioridad. Se considera que los senderos tienen

570 V!LLA RRUBIA / HAUT / M !LLERA


carga especial cuando concurre en ellos alguna o varias de las cir-
cunstancias siguientes, salvo las excepciones indicadas:
Tienen tres o más líneas de cualquier tipo. Indican anclajes
procedentes de vidas anteriores y por tanto aspectos dolorosos que
deben ser trabajados con dedicación. En la terminología que utili-
za Ken Wilber, se trataría de «fulcros» (fases de crecimiento de la
consciencia hacia la Última Realidad) que por cualquier causa han
quedado bloqueados en una fase de su desarrollo. La aceptación
de esta tarea produce una fluidificación de la energía, y entonces
el sendero se transforma en un verdadero maestro interior, pues-
to que se actualiza un gran potencial que estaba latente; en cam-
bio, el rechazo de la tarea provoca una paralización de la energía,
que si se prolonga puede acabar conduciendo a la enfermedad.
Puede decirse, por tanto, que desde este punto de vista no exis-
te ninguna grabación o propensión genética a enfermar, sino una
energía a desarrollar que, de paralizarse, produce la enfermedad.
Puede, no obstante, haber bloqueos energéticos de tipo kármico
que, por inconscientes, sean de difícil acceso para su movilización.
Son incompatibles con los «jardines de infancia», o líneas de trián-
gulos. Este tipo de senderos suponen una recomendación al sujeto
para buscar, en los aspectos concretos que definen, la vía del medio,
la moderación, huir de los extremismos por exceso o por defecto.
Van acompañados de una o más «cruces de doctorado». La ta-
rea especial impuesta tiene que ver con la enseñanza, no sólo a ni-
vel teórico, sino también práctico, a través del ejemplo y mediante
la incorporación a la vida cotidiana del aspecto a que se refieran.
Indican dones o potenciales innatos que obligan, en alguna me-
dida, a asumir responsabilidades; si se aceptan estas tareas hacen
que el sujeto se manifieste con suma profesionalidad en sus activi-
dades, obteniendo en ellas un merecido brillo. Puede haber en un
sendero concreto una o dos cruces de doctorado, como máximo,
excepto en los senderos 9 y 18, en que puede haber un máximo de 3.
Son incompatibles con los «jardines de infancia».
Tienen alguna línea cíclica. Las líneas cíclicas operan de la mis-
ma forma que los senderos de tres o más líneas, pero de forma
dinámica, bien mediante crisis o bien mediante anticrisis. El objeti-
vo de estas oscilaciones es provocar una movilización de energías

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 571


que están estancadas, generando periódicamente vacíos (crisis) o
aumentos de presión (anticrisis). La naturaleza del sendero afec-
tado indicará el tipo de energía que busca ser movilizado. Se trata
de herramientas para desarrollar los potenciales que en principio
aparecen como cristalizados, a base de repeticiones periódicas.
Pueden originar enfermedades, incluso graves, hasta que el suje-
to «se aprende la lección». Son incompatibles con los «jardines de
infancia».
Tienen alguna línea oculta. Las líneas ocultas representan tam-
bién un trabajo especial a realizar. Se trata en este caso de aspectos que
permanecen casi siempre en el subconsciente, en general procedentes
de vidas pasadas, por lo que se pueden considerar como nudos que
quedaron sin desatar. Aunque escondidos, se manifiestan mediante
un estímulo fuerte, por lo que no pueden considerarse del todo in-
conscientes. Incompatibles con los «senderos semilla».
O bien son senderos «semilla», o de «guardería infantil» (lí-
neas de triángulos). Los senderos semilla son, como su denomina-
ción apunta, enlaces kármicos. A semejanza de una semilla que se
separa de una planta y, viajando a través del espacio y del tiempo,
cae lejos de ella para crear una nueva vida, también estas líneas,
siempre sin compañía de otras en los senderos (salvo otra u otras
del mismo tipo), indican un enlace a través del tiempo. En ciertos
casos, cuando hay nombres de pila abreviados (por ejemplo, Paco
respecto a Francisco, o Carmen respecto a María del Carmen),
la realización de Árboles comparativos puede indicar si una par-
te o todo ese karma se limpia o no en la vida presente, o incluso
aparece karma nuevo, según disminuya, se mantenga o aumente
el número de líneas de este tipo en el Árbol levantado con el nom-
bre abreviado respecto del de nombre oficial. Son, por otra parte,
las oportunidades en la vida (cuando están presentes en un Árbol)
para el «salto cuántico», el acceso a un nuevo nivel de consciencia
más elevado. También se puede considerar a estos senderos los
únicos en los que, con la limitación de referirse exclusivamente a
los aspectos regulados por el sendero en cuestión, se es verdadera-
mente libre de elegir.
Tanto si la carga del sendero es normal como si es especial, hay
un caso particular que se refiere a las líneas sociales, las cuales indi-

5 72 V1U. ARRUBIA / HAUT / MI LLERA


can los aprendizajes dolorosos que tienen lugar durante la primera
infancia (líneas procedentes del bloque 11) como de la adolescen-
cia (líneas procedentes del bloque 10). Las primeras comprenden
el período en el que, a nivel externo, de comportamiento, se desa-
rrollan la movilidad (aprender a andar) y la comunicación verbal
(aprender a hablar), y a nivel interno, de expansión de la cons-
ciencia, surgen el yo emocional y el yo conceptual. Por su relación
con las primeras fases de la vida, tienen una componente básica-
mente egocéntrica y narcisista, no en sentido negativo, sino en el
del niño que es todavía incapaz de sentir y pensar como «el otro»,
y tiene una visión del mundo mágico-mítica. Las líneas sociales
de adolescencia, procedentes del bloque 10, se relacionan, a nivel
externo o de comportamiento, con la necesidad de independencia
y el desarrollo de la sexualidad, y a nivel interno o de expansión
de la consciencia, con la aparición del yo-rol social, que implica la
necesidad de pertenecer a algún grupo y merecer su aprobación.
De alguna forma, se trata de líneas no permanentemente abiertas
sino más bien intermitentes; en efecto, no estamos todo el tiempo
andando, hablando, haciendo el amor o enarbolando la bandera
de nuestra independencia; pero la tendencia a que eso sea así indi-
caría una fijación en los momentos de infancia o adolescencia que
dependería de los senderos afectados. Estas líneas, sin embargo,
tienen una gran importancia, puesto que muestran las dificultades
que se manifiestan en la infancia y en la adolescencia, las cuales,
según se van superando (lo que no necesariamente ocurre en el
transcurso de la vida) terminan por presentarse como potenciales
maestros, algo así como haber obtenido la graduación a fuerza de
dolor. Por ello tienen una íntima relación con el tikún, la misión sa-
grada a realizar en la vida. Si alguna de estas líneas aparece oculta,
muestran el miedo del sujeto a realizar dicha misión sagrada.
La gran paradoja de los senderos con cargas especiales es que,
si muestran aquello que hemos venido a hacer es porque, en rea-
lidad, es lo que mejor sabemos y lo que más nos gusta hacer. Pero
un sistema educativo «chato» (nuevamente debemos citar a Ken
Wilber) basado en un paradigma igualmente «chato» desemboca
necesariamente en un lavado de cerebro colectivo cuya verdad ofi-
cial es que, como todos somos iguales, todos debemos recibir el

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 573


mismo tipo de formación, tener las mismas capacidades y los mis-
mos gustos. Lo cual, de entrada, es monstruosamente falso, y trae
como consecuencia dolor e infelicidad en dosis masivas. La pro-
puesta que hacen los senderos con cargas especiales es: «Descubre
qué es lo que más te gusta hacer y lo que mejor sabes hacer, y ¡por
Dios, hazlo!, y asume todas las consecuencias de tu acción».
En todo caso, debe de tenerse en cuenta que también los sende-
ros con carga «normal» pueden originar problemas físicos en caso
de incumplimiento. Tal vez no lleguen al nivel de lo que se entien-
de como enfermedad, pero si el bloqueo perdura, pueden terminar
desembocando en ella. Por ello es conveniente vigilarlos, no tanto
en ellos mismos, sino a través de sus senderos polares opuestos,
los cuales, si presentan algún tipo de bloqueo, pueden trasladarlo
al sendero con carga normal.
Para facilitar la sistemática en la exposición de esta parte de la
obra, se presentan por separado los senderos con sobrecarga (tres
o más líneas), los que tienen líneas ocultas, los que incluyen líneas
cíclicas, los doctorados y los senderos semilla; estos últimos, como
veremos, permiten la realización de un trabajo especial de creci-
miento.
Como paso previo para el estudio de los senderos con cargas
especiales, es conveniente repasar las características generales de
los senderos agrupados por familias de números, por el efecto de
resonancia antes mencionado:
Familia de senderos del 1: 1, El Mago - 10, La Rueda de la
Fortuna - 19, El Sol. Las personas en las que destaca esta familia
de números traen un potencial creativo y un compromiso con la
humanidad, ya que están aquí para abrir el camino a los demás.
Su previo trabajo de unificación de los yoes inferiores, que se mani-
fiesta en el reconocimiento y aceptación de sus defectos y virtudes,
hace que no encuentren dificultades para entender a los demás,
ya que han terminado amando del mismo modo su error y su gra-
cia, lo que permite ayudarles a avanzar sin juicios separativos que
impidan la unificación. Su naturaleza de «iniciados» les permite,
desde el último escalón de su _ascenso, tener una visión de futuro
distinta a la de aquellos que permanecen todavía en los escalo-
nes inferiores. Y así, para estos últimos, aparecen como poderosos

574 ViLLARRUBIA / HAUT / MILLERA


magos, cuando en realidad se trata de seres que manejan el cono-
cimiento sin miedo. Mientras que los otros creen en su «magia»,
los iniciados crean, a través de la unidad del Yang y el Yin, el estí-
mulo que necesitan los que todavía sufren la creencia de que están
«errados», expulsados del Paraíso o castigados. Éste es el verdade-
ro ilusionista, el que puede estimular al que todavía no ha llegado
arriba. La «visión de futuro» no es sino la lógica imagen global que
se percibe desde ahí arriba. Nunca un verdadero iniciado nos hará
sentir que tiene el don de la Sabiduría, porque sabe que su único
mérito es que llegó antes. Su corazón estará demasiado ocupado
en transmitir a la humanidad la idea de que el «juicio destructi-
vo» separa, deshace, desintegra lo que en el Origen estaba unido.
Su Sabiduría hará manifestaciones de Origen OR-DI-NARIO, esto
es, manejará las leyes en el ORDEN DIARIO, y esto provocará el
estímulo que necesitan las nobles almas niñas que deseen alcanzar
la Única y Verdadera Fuente de Poder. Un iniciado enseña conti-
nuamente su defecto y su virtud, su alegría y su tristeza, su salud
y su enfermedad, porque sabe que ni la muerte le separará de sí
mismo. Es íntegro, vive aquí y ahora viendo la dualidad. Admite a
todos en su grupo porque sabe, y confía en ese pegamento llamado
AMOR, que todo lo une. Su compromiso es la capacidad que tiene
de materializar las ideas que su mente hace aflorar, fruto de su
conocimiento, de una actitud útil para un colectivo. Así, alcanza
a unir las cosas más extremas de modo armónico, y cuando lo ha
conseguido, se mezcla y se diluye en ese colectivo, olvidando entre
sus discípulos, magos ahora, que fue él quien les abrió el camino.
Su felicidad reposa en que ha generado VOLUNTAD.
Familia de senderos del 2: 2, La Sacerdotisa - 11, La Fuerza - 20,
El Juicio. La fuerza que todo ser humano busca se encuentra en el
instinto de superación, esto es, de llegar a realizar la acción supe-
rior, algo que destaque respecto a los actos ordinarios de cada día.
No es tanto superarse respecto a los demás, sino sobre todo en rela-
ción con las propias acciones. Sólo esto nos hace sentirnos a la vez
humanos y diferentes. Pero ¿qué es una acción superior? Algo que
sea útil y del agrado de uno mismo y de los demás, y que, una vez
realizado, no deja ninguna huella, sino sólo el sentimiento de de-
ber cumplido. La autoestima (no la autocomplacencia) pertenece a

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 575


las personas respetuosas, y el respeto nos nace del convencimien-
to de que somos sagrados en nuestra dualidad (defecto y virtud).
De ella nace la seguridad, que es la expresión característica esen-
cial de esta familia de senderos, y se reconoce porque la palabra ex-
presada lleva fuerza en sí misma, pero no humilla; lleva sabiduría,
pero no se presenta como la más sabia; lleva intención de ayuda,
pero no busca el reconocimiento. Esta seguridad se manifiesta en
el tono, a la vez firme y dulce, que suena a música, a melodía, sin
agresividad; en la capacidad de retener las palabras hirientes, y de
ayudar a levantarse al humillado. Sólo aquél que sabe apreciar la
dualidad como un aspecto de la manifestación puede mostrarlas,
ayudando a verlas de un modo armónico, pues en definitiva no
hará sino mostrar los dos caminos· que llevan a una misma meta.
Pues sólo el que respeta mostrará la fuente en lugar dé dar agua al
sediento. Y el respeto a los otros es en realidad el reflejo del respeto
a sí mismo característico de quienes tienen fuerte en su Árbol per-
sonal esta familia de senderos.
Familia de senderos del 3: 3, La Emperatriz - 12, El Colgado
- 21, El Mundo. Las personas en las que predomina esta familia
buscan ante todo la lógica de las cosas de los actos, propios y aje-
nos. Tienen una naturaleza esencialmente unificadora: su necesi-
dad es simplificar y sintetizar, tendiendo a unir cosas y situaciones
de la mejor manera posible (búsqueda del denominador común).
· Intentan siempre encontrar la mejor utilidad del conocimiento.
Necesitan formar un hogar estable, vivir en familia con buena ca-
lidad de vida, antes que con posesión de cantidad de cosas y ob-
jetos. Buscan tener una casa bien decorada, aunque sea humilde
(tendencia instintiva a organizarla con buenfeng-shuí, aunque no
se conozca esta técnica china). La visión de cosas o personas se-
paradas les causa dolor; cuando así ocurre, necesitan investigar
este hecho desde diferentes puntos de vista para conseguir la uni-
ficación de la mejor manera posible. Si la fuerza de esta familia de
senderos se manifiesta en el 12, surgen actitudes de romanticismo.
Tendencia a tomarse la vida con calma, a detenerse frecuentemen-
te para disfrutar de ella; pero también, cuando aparecen aspectos o
hechos desfavorables, incómodos, surge la creencia de la necesidad
de sufrir para aprender. Fascinación por el pasado, y en sentido

576 V1 L1.ARRUlllA / HAUT / MILLERA


negativo rechazo del mismo: tienen por tanto aptitudes para la
investigación histórica, muchas veces acompañadas de búsqueda
de sus puntos oscuros para revisión de los hechos comúnmente
aceptados por la ortodoxia científica; por tanto, son casi siempre
considerados herejes, cuando no terroristas espirituales. En lo que se
refiere al sendero 21, aparece la necesidad de realizar la voluntad,
los deseos, si bien procurando no herir a los demás. La vivencia
del dolor es la gran escuela para estos nativos, aunque en muchos
casos se desarrolla de forma exagerada, por su gran sensibilidad.
Necesitan hacer algo importante en la vida, que les reconforte y
compense el esfuerzo de haber buscado siempre la mejor calidad.
Mantienen una actitud de hacer algo bueno para los demás y para
ellos mismos. Buscan un funcionamiento de la mente que tenga
claridad y precisión y les proporcione sosiego frente a la actividad
a que se ven obligados por la vida: en el fondo es un deseo de de-
jar de sufrir, de desprenderse del dolor que les acompaña desde la
cuna a la tumba.
Familia de senderos del 4: O (22), El Loco - 4, El Emperador -
13, (sin nombre). Los seres impacientes, característicos de un sen-
dero 22 fuerte, tienen una creencia errónea acerca de la Creación.
Es para ellos difícil confiar en que los procesos de la evolución
funcionan, especialmente cuando nadie nos ha explicado que pri-
mero las cosas son «deformes» y luego «formadas». Ello provoca
una postura rígida ante la vida que lleva al individuo a un hacer o
un intentar cambiar mediante su voluntad los procesos naturales
y el tiempo de formación que se necesita para entender el «caos»
previo a algo ya concluido (recordemos a este respecto el cuento
de mulá N asrudin y sus zanahorias echadas a perder, ver I Parte
de la obra). Aquellos cuyo Árbol tiene la familia del 4 destacada
son almas que vienen a terminar las tareas, o la «gran tarea» de
entender que el Universo sigue en expansión, por lo que el final de
las cosas es impredecible; pero pese a ello, deben hacerlo a través
de un acto de fe, en el que su constancia y perseverancia les lleve a
ver el resultado final de las cosas, sabiendo que este final consiste
en comprender que no se debe forzar ni anticipar. Deberán rom-
per o «morir» a la idea de estar DES-ORIENTADOS, separados del
Oriente, de donde sale el Sol, simplemente porque no comprenden

MANUAL DE KA13BALAJ-I PRÁCTICA 577


el proceso. No se pueden cambiar la leyes Originales: las Reglas
del Juego están establecidas desde el Principio, y el transcurso de
este proceso cósmico se seguirá produciendo, lo aceptemos o no.
Las estructuras básicas no se pueden cambiar por la simple razón
de que no las entendamos, de la misma forma que no deformaría-
mos nuestra estructura ósea sabiendo que es el soporte, el pilar
central de nuestro cuerpo. El Universo, aunque a veces parezca
otra cosa, no deforma su estructura, es el hombre el que impide
(casi siempre) el fluir natural de las cosas. La muerte no existe (el
propio tarot nos lo recuerda, al no asignar nombre al Arcano 13:
en muchas tradiciones, lo que no tiene nombre no existe); los cam-
bios sí existen, y es la falta de comprensión de este hecho lo que
se traduce en miedo a la muerte, que a su vez es el que termina
alterando el orden natural. Por eso tal vez busque la perfección del
ser individual, pues cree que al ser perfecto no morirá, sin darse
cuenta que ya es perfecto. El error es creer en la perfección como
un objetivo a alcanzar, cuando lo verdaderamente perfecto es la
aceptación incondicional, el Gran Sí a Lo Que Es. Una familia del 4
destacada invita a la perseverancia y a la paciencia para lo que no
se entiende, y confianza para entender que todo está bien.
Familia de senderos del 5: 5, El Pontífice - 14, Templanza. Las
personas que presentan destacada de forma armónica esta familia
de senderos se caracterizan por un fuerte potencial de felicidad,
entendida ésta en el sentido de capacidad de disfrutar con todos
los hechos de la vida, incluso los que para otras personas pueden
parecer más trágicos. Pero esto sólo es cierto si, en efecto, estos
senderos son armónicos. En este sentido, puede decirse que se tra-
ta de seres que han alcanzado la gracia, porque han atravesado
(trascendido) la ignorancia y alcanzado el estado de pureza. Son,
pues, como niños, pero en un nivel superior: armónicamente ale-
gres, no sometidos a ciclos de bienestar y malestar, pues, aunque
las situaciones se les presenten desfavorables, saben sacar partido
de ellas y «darles la vuelta». En este grupo encontraremos a los
mejores humoristas, sean o no profesionales, que siempre encon-
trarán la forma de alegrar su vida y la de los demás aunque sea en
medio de un funeral. Una visión superficial quizá haga decir de
ellos que se trata de seres con suerte, pero en realidad se trata de

578 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


los vencedores de una dura batalla. El hecho de haber trascendido
su ignorancia es, en realidad, la consecuencia de haber trascendido
su ego al realizar la enseñanza del sendero 14. Viven a fondo y dis-
frutan de todos los pequeños detalles y son sumamente flexibles
y adaptables. Cuando esta adaptabilidad se presenta inarmónica
encontraremos al ser camaleónico, capaz de encontrarse como pez
en el agua en todas las situaciones; y si este «camaleonismo» se
combina con una fuerte ambición (sendero 7 sobrecargado) apare-
ce el «trepa», capaz de ejercer los peores excesos sobre el prójimo
con tal de alcanzar sus objetivos. El sendero 14, La Templanza,
tiene, como su propio nombre indica, una profunda relación con
el Temple de Ánimo: de hecho, su mitad inferior es el eje central
de esta Tríada; y también con el Templo; pero no debe olvidarse
que un templo nunca puede ser una meta en sí mismo, y sí sólo un
medio para canalizar el hecho religioso. Pues el sendero 5 es uno
de los dos (el otro es el 2, La Sacerdotisa) que habla del hecho reli-
gioso. Y la verdadera religión está hecha de alegría y gozo, carac-
terísticas esenciales del sendero 5. Como observaciones finales, las
personas que tienen fuerte esta familia de senderos tienen además
las características de su entusiasmo (palabra que significa «Dios
está en mí»), su indiferencia respecto a las opiniones ajenas, y su
capacidad de superar y corregir los vicios. Si el sendero 5 aparece
sobrecargado (por tanto, inarmónico, ver sección siguiente), entra-
ña un riesgo cierto de adicción, muchas veces derivado, como se
verá más adelante, hacia el terreno de las drogas. Pero en realidad,
el vicio está íntimamente relacionado con el sentimiento de vacío,
que trata de llenarse por procedimientos muchas veces erróneos.
Familia de senderos del 6: 6, Los Amantes - 15, El Diablo.
La característica más acusada de aquellos en los que es fuerte el
sendero 6 es su actitud de seleccionar y separar los aspectos im-
puros de las mezclas adulteradas, en cualquier sentido. Pues hay
una búsqueda de protección y nutrición materna: debe recordarse
que este sendero representa la unión con la madre y por tanto el
cordón umbilical. En sentido activo, el sendero se manifiesta como
una necesidad de proteger, de «abrigar» a los demás y a sí mismo.
Por lo tanto, hay también un impulso a ayudar a los demás a con-
seguir su propia independencia, pero cuando el sendero se torna

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 5 79


negativo, entonces aparece la actitud de castración de la libertad
propia y de los demás; en otras palabras, no se niega formalmente
la libertad, pero se procura quitarle todo su impulso, dejándola
en cierto modo descafeinada. Las personas con estas característi-
cas buscan expresarse con sutileza. Tienen una sensibilidad a ve-
ces excesiva, que atrae a las personas que buscan ser dirigidas.
Sienten atracción por los animales y la naturaleza en general, o al
contrario, tienen relaciones ásperas con ellos. Muchas veces pre-
sentan naturaleza femenina (incluso en los varones), en ocasiones
con manifestaciones homosexuales. Necesidad de comprender el
tiempo y sus ciclos. Tendencia a conservar recuerdos del pasado y
cosas materiales con las que tengan algún tipo de relación afectiva.
Si el sendero 15 aparece fuerte, ello indicará la búsqueda profunda
de la parte negativa de la vida, para llegar a comprenderla mejor:
por ello puede muchas veces atraer inconscientemente situaciones
conflictivas. Se plantean como objetivo liberarse de pensamientos
!imitadores que impidan la libre expresión. Por ello, necesitarán
hurgar en su propia mente, buscando una comprensión lógica de
aspectos en apariencia irracionales. Sentirán el impulso de liberar-
se de tabúes, pero en sentido negativo experimentarán miedos que
les condicionarán sobremanera, lo que hará que desarrollen el an-
helo de superarlos y trascenderlos, sean de la naturaleza que sean.
Buscarán extraer de sus zonas de sombra las pequeñas y sutiles
cosas que proporcionan la paz. Las personas con este sendero fuer-
te manifiestan un fuerte psiquismo; se trata de seres muy instinti-
vos que generalmente tienen percepción extrasensorial y un fuerte
magnetismo. Sienten la necesidad de ser coherentes sin perder su
sensibilidad emocional.
Familia de senderos del 7: 7, El Carro -16, La Torre. Las perso-
nas en las que predomina esta familia de senderos buscan actuar
noblemente, aunque de una forma seria y severa, y un tanto rígi-
da, lo que en la mayoría de las ocasiones produce un bloqueo del
«niño interior», sin permitirles el ocio y el juego. Hay en ellas una
profunda ambición, que puede manifestarse en la búsqueda de
objetivos externos (alcanzar una posición cumbre en la vida, por
ejemplo) o internos (altas metas de desarrollo mental o espiritual).
Necesidad de ser mejor persona, y búsqueda de «buenos ambientes»

580 VILLA RRU BIA / H AU T / MILLERA


que frecuentar: gente adinerada y selecta (si la ambición se dirige
a campos externos), o gente santa y espiritual (si se dirige hacia
los campos internos). El objetivo es llegar a ser «impecable», obte-
niendo así el máximo respeto de los demás. Buscan el crecimiento
interior, y alcanzar una alta nobleza de espíritu. En su aspecto más
positivo, el predominio del sendero 7 nos presenta a unos seres
que buscan el desarrollo de los demás, bien a través del ejemplo,
bien de la enseñanza, o simplemente proporcionando puestos de
trabajo; en este caso comparten sin ningún problema su riqueza.
Las personas en las que predomina el sendero 16 mostrarán las
mismas características, aunque a un nivel más bajo, no necesaria-
mente negativo. Son seres sensibles, viscerales, resueltos y libres
de la carga de condicionamientos y experiencias pasadas. Intentan
controlar sus aspectos más animales o viscerales para educarlos y
canalizarlos de una forma constructiva. necesitan abandonar ata-
duras y autoridades personales, en definitiva aspectos rígidos de
la propia personalidad. Buscan vivenciar a fondo sus propias ex-
periencias para crecer. Hay en ellos deseo de encontrar diversión
en la trayectoria de su vida; por ello, necesitan comprender las
dificultades y descubrir su utilidad, para qué les sirven.
Familia de senderos del 8: 8, La Justicia-17, La Estrella. Aquellos
en los que esta familia de senderos predomina o se muestra fuerte
se caracterizan ante todo por su necesidad de ser «justos», lo que
es tanto como decir «exactos» y «precisos». El sendero 8 propicia
mantener a salvo la propia individualidad, pero sin afectar por ello
al entorno social, respecto al cual son respetuosos; sin embargo, la
defensa de su propia individualidad hace que no permitan inter-
ferencias en lo que su corazón les dicte. Esta situación se mantie-
ne hasta el momento en que aparece una nueva escala de valores
que demuestra ser más válida que la anterior y genera un cambio
de paradigma, de modelo de creencias y de comportamiento: este
cambio, semejante en realidad a una conversión religiosa, puede
producir en ocasiones profundas y dolorosas crisis de crecimien-
to. Buscan en todo momento investigar y descubrir las leyes de
la vida. Son sumamente observadores, y capaces de emprender
«cruzadas» frente a lo que consideran injusto. Su capacidad de dis-
cernimiento hace que tiendan continuamente a «separar el trigo

M ANUAL DE KAB BALAH PRÁCTIC/\ 581


de la paja», aunque con la actitud de aprovechar ambas. Desde el
punto de vista de la profesión, con un potencial alto del sendero 8
se encuentran investigadores, jueces y analistas financieros, entre
otros. Son en general personas que conocen bien lo que es justo y lo
que no, e inconscientemente tratan de acomodarse al orden celeste
(si utilizamos la terminología taoísta). Por su parte, el sendero 17
proporciona la necesidad de estímulos creativos que permitan al
sujeto desarrollarse a sí mismo. Sienten estas personas rechazo a
las tecnologías que puedan «adulterar lo sencillo», por lo que son
partidarios decididos de los métodos naturales. Buscan la restau-
ración de lo sagrado, de la unidad perdida, de la que sienten, mu-
chas veces sin saberlo conscientemente, una gran añoranza. Son
personas por lo general originales, que buscan sus propios méto-
dos de trabajo y expresión, por lo que se acomodan mal a tareas
rutinarias. En resumen, las personas con esta familia de senderos
fuerte están en una continua evolución como consecuencia de su
necesidad de ser equilibrados y justos. Son verdaderos ilusionis-
tas, pero también animadores que tienen gran facilidad para crear
continuamente o para desvelar realidades ocultas de sí mismos o
del entorno.
Familia de senderos del 9: 9, El Ermitaño - 18, La Luna. Las
personas en las que predomina esta familia de senderos sienten
la necesidad de autosuficiencia, acompañada de la sensación de
que su conquista puede ser muy costosa, pese a lo cual merece
la pena el esfuerzo a realizar para conseguirla. Buscan el silen-
cio, el contacto con la naturaleza y una alimentación sana, y se
apoyan en muchas ocasiones en métodos oraculares (astrología,
tarot, I-Ching, runas ... ) para comprender mejor sus necesidades.
Recurren a antiguas tradiciones, siempre que sientan que son au-
ténticas, genuinas. Sienten también una particular necesidad de
ayudar a los que consideran «abandonados». Buscan, en general,
vivir con los recursos más básicos, pues sienten una fuerte tenden-
cia a la austeridad. Si mantienen la línea que el sendero 9 les traza,
acabarán desarrollando la capacidad de escuchar a su cuerpo y
sus emociones para aplicar en consecuencia la «medicina» correcta
en cada caso. Su sabiduría deriva de la experiencia y del silencio.
Longevos, tienen buena capacidad de autosanación. Reciben mu-

582 VI LLARRUBIA / HAU T / MILLERA


cha información a través de los sueños. Tienen capacidad artística,
sobre todo para la pintura, el dibujo y la danza. Y saben «nave-
gar» con soltura en el mundo de la oscuridad y las emociones.
Precisamente, es la fuerza del sendero 18 la que les proporciona el
deseo de encontrar sentido a esa oscuridad, pues sienten que, de
no hacerlo así, su ansia de fluir sin rigideces se vería entorpecida.
No sólo exploran su propia oscuridad: también cooperan para lle-
var a la luz a los demás, tanto en el aspecto físico como en el emo-
cional y en el mental. Su necesidad de entregarse sexualmente a
una sola persona puede derivar, en caso de bloqueo, al extremo
contrario, la promiscuidad y la prostitución. La característica sen-
sual de este sendero promueve en los sujetos que lo tienen fuerte la
necesidad de mover el cuerpo y manifestar así sus aspectos emo-
cionales. Tienen buena capacidad para acercarse y relacionarse
con los animales, y buscan disfrutar de la vida, por encima de los
problemas. Un caso especial se presenta cuando ambos senderos
de la familia, 9 y 18 aparecen fuertes en un Árbol personal; pues si
bien el primero incita a la búsqueda de soledad, el segundo ansía
el contacto sensual, lo que origina problemas serios de relación y
situaciones desconcertantes. En realidad, esta configuración (que
no es «incómoda», pero que tiene características parecidas) es un
acicate para que el sujeto realice una profunda introspección y des-
cubra que ambas actitudes no son simultáneas, sino que están se-
paradas por un «instante sin tiempo» en el que se está producien-
do el «cambio de chip» desde una a la otra; y trate de «colarse» en
dicho instante, en el que brilla la Eternidad.

8. 1. Senderos con cargas especiales por sobrecarga


agrupados por familias de números
Las sobrecargas se producen cuando un sendero cualquiera tiene
tres o más líneas. Ello provoca bloqueos, que son estáticos cuando
las líneas que lo forman son fijas, y dinámicos, cuando algunas son
variables. Un bloqueo es una densificación de la energía que nece-
sita madurar y evolucionar dentro de un proceso mucho más len-
to y paulatino. Cuando un sendero está afectado por un bloqueo,

MAN UA L DE KABBALAH PRÁCTICA 583


su contenido se vive de una forma restrictiva y severa. El aparen-
te estatismo (sobre todo si es un bloqueo fijo) causa inhibiciones
como una respuesta natural al lento proceso de maduración, que a
su vez ocasionan miedos, temores e incomodidades. Si un bloqueo
es dinámico, es más fluido. Las crisis renuevan de manera cíclica la
información en el contenido del sendero afectado. Revelan nuevos
recursos, «descristalizan» y dinamizan la capacidad de respuesta,
disminuyendo el grado de inhibición.
Las inhibiciones reflejan dificultad en la comprensión, percep-
ción, respuesta y aprendizaje del contenido del sendero afecta-
do, que tiende a vivirse más bien como una carencia. Un Árbol
Personal que tenga varios senderos con bloqueos puede reflejar
una tendencia a las neurosis. Cualquier sendero bloqueado hará
que su contenido se viva de una forma más o menos neurótica, se-
gún el tipo de bloqueo. Las neurosis son manifestaciones de sínto-
mas psíquicos y emocionales molestos y penosos, producidos por
un conflicto psicológico sin resolver, que se han hecho crónicos.
A efectos de estudio separaremos los senderos con bloqueos es-
táticos (sólo líneas fijas) de los que los tienen dinámicos (alguna
línea variable).
Las sobrecargas (tres a más líneas) en los senderos afectan de
forma diferente según la familia de números a que pertenezcan.
Sin pretender ser exhaustivos, veamos algunos ejemplos de la
forma en que cada grupo es afectado, advirtiendo que alguna de
esas líneas puede ser oculta y/ o cíclica, por lo que su significado
se reforzaría con estas circunstancias adicionales. Las sobrecargas
originan bloqueos similares a los que se produciría en un conducto
por el que se intenta hacer pasar un flujo superior al que permite
su capacidad. Imponen determinadas tareas que, de no llevarse a
cabo, pueden originar trastornos en la salud física o de tipo psí-
quico.
Familia del 1. Senderos 19, 10 y 1. Indican aspectos a trabajar re-
lacionados con la creatividad, la iniciativa, la aceptación de los he-
chos nuevos que proceden del entorno, la conciliación de opuestos
y el trabajo en equipo. A nivel corporal, los bloqueos de energía se
manifiestan en problemas en la vista, cervicales y hemisferio cere-
bral derecho si se manifiestan por el Sendero l. El 10, por su parte,

584 VILLA RRUBI A / H AUT / MILLERA


provocará manifestaciones en las vértebras lumbares y en los ri-
ñones, órganos éstos que también se verán afectados por bloqueos
en el Sendero 19, el cual, además, nos indicará la paralización de
energía en episodios de apendicitis y en problemas con las gónadas
(ovarios y testículos). La energía que pide fluir se relacionará con
todo lo que signifique compartir, desde la sexualidad hasta tareas
laborales comunes. De los aspectos particulares de los bloqueos
por cada sendero, destacamos que el 1 manifiesta la necesidad de
madurar e integrar los sueños e ideales con el deber verdadero,
por lo que, hasta que se alcance ese objetivo, habrá dificultad en
percibirlo; miedo a hacer lo que se debe en función de lo que se
es y a rechazar deberes impuestos; conflicto con la voluntad, que
debe madurar de fuerza bruta a verdadera motivación; la persona
se ve a sí misma carente de voluntad y de iniciativa. En cuanto al
sendero 10, el bloqueo manifiesta la necesidad de madurar e inte-
grar las metas elevadas con las relaciones personales, lo afectivo
transpersonal con lo afectivo personal; así que su resultado, hasta
que se alcance esa madurez, será la dificultad en percibir los ciclos
de evolución y crecimiento, y de reaccionar ante los cambios ex-
ternos, así como para ver el futuro, acompañada de la sensación
de que el entorno apenas cambia. Por último, el bloqueo del sen-
dero 19 mostrará la necesidad de madurar e integrar la manera de
pensar con el ego; y ello se dejará ver en la dificultad para integrar
opuestos, para trabajar en equipo, y para comprender e integrar la
sombra a un nivel mental.
Familia del 2. Senderos 20, 11 y 2. Si estos senderos tienen so-
brecarga es indicativo de que el sujeto trae como tarea el desarrollo
de la seguridad en sí mismo. Seguridad que implica una total con-
fianza en el Absoluto, puesto que un Sendero 2 sobrecargado por
el que la energía fluye es el que permite decir las palabras de Jesús
el Nazareno: «El Padre y yo somos uno» (Juan 10: 30). Por tanto,
las sobrecargas en este sendero, y en general en los de esta fami-
lia, son el indicativo del don de profecía, entendido este concepto
de profeta como el que da testimonio de Dios. La falta de fluidez
en estos senderos se manifiesta en timidez y en baja autoestima,
aspectos que en el fondo esconden una relación conflictiva con su
esencia divina: «Si no creo en Dios tampoco creo en mí», podía

MANUAL DE KA1313ALAH PRÁCTICA 585


ser su lema. Caen fácilmente en el extremo opuesto del fanatismo.
Cuando el sendero afectado es el 20, el sujeto se esfuerza en comu-
nicarse, pese a lo cual suele tener escaso éxito Recordemos a este
respecto que la letra hebrea asociada a este sendero es la resh (i),
uno de cuyos significados es precisamente soplo o viento. Si la so-
brecarga afecta al Sendero 11, los problemas serán de sociabilidad
y autodominio. Los problemas físicos que afectan a esta familia de
números en caso de retención de energía se pueden manifestar en
la columna vertebral, y en el corazón, así como en las piernas (ciáti-
ca) y sistema linfático. En determinados casos, pueden manifestarse
problemas de asma. En cuanto a los bloqueos por senderos, desta-
quemos que en el 2 mostrará la necesidad de madurar e integrar los
sueños e ideales con la individualidad; por ello, habrá dificultad en
percibir el Absoluto, con miedo a expresar intuiciones; miedo a de-
sarrollar y expandir la individualidad hacia lo absoluto; y dificultad
en percibir y explorar las propias capacidades, y en creer en ellas,
incluso cuando el entorno las muestra desde fuera. Para el sende-
ro 11, el bloqueo manifestará la necesidad de madurar e integrar la
forma de actuar con la individualidad, y aparecerá como dificultad
en comprender el rigor, lo restrictivo; para percibir y comprender el
instinto; y al sujeto viéndose a sí mismo carente de fortaleza ante la
adversidad. Por último, para el sendero 20, señalamos que el blo-
queo pone de manifiesto la necesidad de madurar e integrar la ma-
nera de pensar en el plano físico; sus problemas serán la dificultad
de evaluar el presente con perspectiva, de percibir por qué, para qué
y hacia dónde nos lleva la vida; y la dificultad en expresar lo que se
piensa, así como el temor a hablar en público.
Familia del 3. Senderos 21, 12 y 3. Las sobrecarga en los senderos
de esta familia indican una necesidad de pararse y mirar, tanto ha-
cia el entorno como hacia dentro, hacia uno mismo, pero cada uno
de ellos con sus propias peculiaridades. El Sendero 21 presenta el
reto de afrontar (es decir, mirar de frente) el dolor y abrirse en acti-
tud de indefensión ante los demás, para así realizar la escucha pro-
funda. El Sendero 12 es particularmente sensible al exterior, puesto
que forma la barrera del yo respecto al campo social personal y es a
la vez representación del sacrificio, entendiendo esta palabra en su
sentido de hacer sagrado algo, liberar ciertas energías en los niveles

586 V!LLARRUBIA / H AUT / MI LLERA


inferiores para que florezcan en los superiores; la sobrecarga en este
sendero, además, requerirá investigar la situación de su opuesto
polar, el lÓ. Por su parte, el Sendero 3 con sobrecarga pide trabajar
la capacidad de síntesis, la unión de los opuestos, lo que obliga a
pararse y mirar con suma atención. Si no se atiende esta necesidad
de pararse, es frecuente que la vida proporcione ese frenazo, en for-
ma de problemas en el vientre (Sendero 12), en la cabeza, los ojos y
los huesos (Sendero 3) y en el ano, el recto y los pies (Sendero 21).
Los bloqueos se manifiestan en el sendero 3 como una expresión de
la necesidad de madurar e integrar el deber verdadero con la capa-
cidad de independencia, que suele coincidir con dificultades en la
relación entre los padres; y sus efectos visibles son la dificultad en
aceptar y comprender dichos conflictos, lo que le impedirá involu-
crarse; también, la dificultad en la comprensión y síntesis de con-
ceptos abstractos: la persona se ve a sí misma poco creativa. Para el
sendero 12 aparece la necesidad de madurar e integrar la forma de
actuar con la de pensar; y la expresión del bloqueo será la dificultad
para percibir la propia escala de valores y para cambiarla integran-
do valores nuevos, para percibir los valores que hay que cambiar,
darles forma concreta y llevarlos a la práctica; también aparecerá el
miedo al cambio interno; dificultad en realizar voluntariamente sa-
crificios para cambiar a mejor, o aprender algo esencial, pues se ven
más inconvenientes de los que hay, y se viven como una obligación
impuesta desde fuera. En cuanto al sendero 21, por último, si apa-
recen los bloqueos mostrarán la necesidad de madurar e integrar el
ego en el plano físico y sus síntomas serán la dificultad de expresar
el ego por inhibición; para comprender el dolor ajeno, para meterse
en la piel del otro e involucrarse. También se experimentará una
tendencia a sumergirse en el propio dolor y a no permitir que otros
penetren en él, participen o se involucren.
Familia del 4. Senderos 22, 13 y 4. Al conjunto de senderos de
esa familia le damos el nombre de «El Dragón», por la forma que
adoptan cuando aparecen con sobrecarga, y por representar en ese
caso los problemas derivados del cumplimiento de la disciplina
interna, y a mayor profundidad, los manifestados por conflictos
con el padre biológico. En realidad, si la sobrecarga está en el 22
y en el 4, estos conflictos pueden ser con Dios, pero se disfrazan

MANUAL DE KABBA LAH PRÁCTIC/1 587


de conflictos con el padre y con la autoridad que representa, como
forjador del arquetipo del padre interno universal. Significan la
necesidad de humillarse (esto es, de practicar la humildad), y la
negativa a hacerlo se manifestará en forma de problemas en la co-
lumna vertebral; pues la humillación es en realidad un mecanismo
para adquirir flexibilidad, y su negativa una cristalización de la
energía que termina por transformarse en rigidez. En este caso,
la vida impondrá más y más presión, en forma, por ejemplo, de un
jefe tiránico o de una mujer o un marido dominantes. Si la sobre-
carga está en el 4 y el 13, se impone la necesidad de perdonar, y el
rechazo al fluir de la energía se manifestará en forma de lumbago
(no querer agacharse, no querer pedir perdón). En este sentido,
es muy útil analizar brevemente qué nos dice la Kabbalah acerca
de la humildad, ;mv (anavá) y del perdón, i'!M~O (slíjá). La primera
de estas palabras contiene la letra ayin, V, que significa ojo, y la
letra nun, ), que significa percepción. Como las dos letras restantes
forman Mi, el nombre más oculto de Dios, que es el que se esconde
en el corazón del todos los seres, puede deducirse que la humildad
consiste en la capacidad de percibir nuestra esencia divina: «No soy
inferior a ti, porque Dios es mi esencia; y tampoco soy superior a ti,
pues Dios es tu esencia». La humildad es, pues, la vía para un pro-
fundo respeto hacia lo sagrado como manifestación de Lo Que Es.
En cuanto al perdón, observemos que, además de ~ (li), para mí,
contiene también ~n (jai), la vida; ,i'!
(hel), la luz, la claridad; y ~;i
(Yah), el nombre de Dios que contiene ambas polaridades, mascu-
lina y femenina. Por tanto, el perdón es ante todo para rrú mismo,
y si verdaderamente es perdón debe ser un acto de vida, lumi-
noso y de carácter sagrado, a la vez activo y pasivo. Por último,
anotamos una característica de la sobrecarga en el sendero 4, en
que el sujeto, mientras no se realiza el aprendizaje que el sendero
propone, necesita establecer a su alrededor un área de influencia
en que ejercitar su dominio; por ello, no es extraño que los n~tivos
con estas características tiendan, bien a tener muchos hijos, bien a
rodearse de animales domésticos, más o menos convencionales,
o bien ambas cosas. Hemos conocido casos de convivencia hasta con
siete gatos, o con dos perros, dos gatos, un periquito y dos tortugas,
amén de numerosas plantas en los balcones de su casa. En cuanto a

588 VILLARRUFll A / H AUT / MILLERA


los aspectos particulares de los bloqueos según los senderos, el 22
expresa la necesidad de madurar e integrar los sueños e ideales
con la capacidad de independencia; y su manifestación será el mie-
do al caos previo a un cambio importante o a un ciclo nuevo. El 4,
por su parte, indica la necesidad de madurar e integrar la capaci-
dad de independencia con la individualidad, así como la de de-
sarrollar el verdadero sentido de la autoridad. La dificultad para
comprender el concepto de autoridad suele coincidir con un padre
excesivamente autoritario. Al no aceptarse al padre como modelo
y no haber otro disponible, aparece la tendencia a inhibirse en si-
tuaciones relacionadas con mostrar o ejercer autoridad. También la
tendencia a ser excesivamente blando y la dificultad en terminar
lo que se empieza, paradójicamente, por exceso de perfeccionis-
mo. En cuanto al sendero 13, el bloqueo muestra la necesidad de
madurar e integrar la individualidad con el área emocional en las
relaciones personales; y sus aspectos visibles, la dificultad y mie-
do de soltar, de dejarse ir, de percibir lo que se debe dejar atrás;
el miedo a la muerte, y la dificultad para comprender su significa-
do; la tendencia a retener lo que se debe abandonar; la dificultad
en soltar lazos emocionales; el temor a no saber orientar y ayudar
en este aspecto a los hijos.
Familia del 5. Senderos 14 y 5. Las sobrecargas en este grupo
de senderos indican la necesidad de trabajar el binomio orgullo-
autoestima. Un sendero 5 sobrecargado puede, por su parte, llevar
al sujeto a actitudes irresponsables (por su oposición polar al 7),
que, como veremos al tratar los árboles especiales, pueden origi-
nar actitudes tendentes a la drogadicción, o al menos a algún tipo
de adición de la que sea difícil salir. Por su parte, el Sendero 14 se
refiere a la adaptabilidad y a la capacidad de cambiar. No debe
confundirse con el Sendero 10, ya que este último se refiere a la
aceptación de cambios que vienen del entorno, mientras que el 14
recoge el cambio interior, y al ser un sendero de La Flecha, quie-
re decir que el cambio implica una expansión d e la consciencia.
En ambos senderos, conviene revisar más adelante lo relativo a las
líneas cíclicas que son las que más les pueden afectar. En cuanto a
los bloqueos que pueden aparecer, el sendero 5 manifiesta la nece-
sidad de madurar e integrar la capacidad de independencia con la

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 589


elección y realización de metas transpersonales a largo plazo; sus
síntomas, la tendencia a tomarse a sí mismo demasiado en serio,
el escaso sentido del humor, la dificultad para reírse de uno mismo
y para disfrutar del aspecto lúdico de la vida; también, la tenden-
cia a culpabilizarse por todas las carencias que se ven al compa-
rarse con otras personas de su edad, y a pensar que no se da la
talla, por lo que se crean sentimientos de inferioridad, tendencias
a comportarse con excesiva seriedad y responsabilidad, e inflexi-
bilidad para con uno mismo. En cuanto al sendero 14, destacamos
la necesidad de madurar e integrar la individualidad con el ego,
el centro transpersonal con el centro personal; sus manifestaciones,
la dificultad para aceptar los fallos del otro; la tendencia a com-
portarse de forma intransigente con los demás y con uno mismo;
la dificultad para conciliar opuestos, y para perdonarse y perdo-
nar; y para ser adaptable, o al contrario, volverse tan adaptable
que se llegue a ser camaleónico, fundiéndose con el entorno. Si esta
última circunstancia viene acompañada por una sobrecarga en el
sendero 7, aparece entonces el tre-pa, que con tal de escalar puestos
adoptará las formas, aspectos, ideas o creencias que le ayuden a
medrar a costa de los demás.
Familia del 6. Senderos 15 y 6. De la misma forma que el
Sendero 4 establece el enlace con el padre, el 6 lo hace con lama-
dre; por tanto, si hay sobrecarga en este sendero es que hay rela-
ciones de tipo kármico con la madre. Según el principio general,
todo sendero con sobrecarga pide una actualización y expresión
de su potencial energético, con la alternativa de la enfermedad
en caso contrario. En este caso, la enfermedad afectará funda-
mentalmente a los pulmones y bronquios, pudiendo darse en los
casos más severos episodios de tuberculosis o neumonías; a nivel
psíquico se manifestará en forma de angustia. La fluidificación
de la energía exigirá el ejercicio del libre albedrío, que es una for-
1
ma de decir «de la renuncia», puesto que elegir significa renun-
ciar a lo que no se elige. Esta renuncia, en definitiva, es una forma
sutil de cortar el cordón umbilical; Por su parte, la sobrecarga en
el Sendero 15 habla de la necesidad de ser selectivo, pues en una
existencia anterior se tocaron aspectos de magia negra y/ o culto
satánico que deben ser limpiados en la presente: la existencia de

590 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


líneas cíclicas y/ u ocultas en este sendero refuerza sobremanera
esta interpretación. Se trata, en otras palabras, de llegar a lo os-
curo de vidas pasadas para «darle la vuelta» y tornarlo a la luz.
El rechazo a este trabajo en las áreas escondidas (lo inferior, el
«infierno» en el que habita el Diablo, regente de este sendero) se
traducirá en trastornos en el aparato digestivo, especialmente en
el intestino grueso. Los bloqueos en el sendero 6 manifiestan la
necesidad de madurar e integrar el deber verdadero con la indi-
vidualidad, y suelen ser consecuencia de una madre posesiva o
demasiado protectora; habrá dificultad en tomar decisiones, en
elegir la mejor opción; miedo a equivocarse; necesidad de ma-
durar largo tiempo cada decisión. En cuanto al sendero 15, los
bloqueos muestran la necesidad de madurar e integrar la indivi-
dualidad con la manera de pensar; aquí se hace necesario madu-
rar y comprender la utilidad de la sombra; sus manifestaciones,
la dificultad y temor para percibir el subconsciente; el miedo ha-
cia los aspectos oscuros del alma humana, el miedo a los miedos;
el temor y dificultad en defender y hacer valer el propio territo-
rio; el temor de no ser de ayuda en este aspecto a los hijos.
Familia del 7. Senderos 16 y 7. La sobrecarga en el Sendero 7
habla en general de la responsabilidad (capacidad de responder),
de la ambición y de su contrapartida en caso de fracaso, del sen-
timiento de culpabilidad. La ambición del sujeto le lleva a asumir
cargas o tareas excesivas, ocultando así el miedo el fracaso («si fra-
caso en una tarea menor me lo reprocharán, pero si la tarea es titá-
nica y fracaso nadie me lo echará en cara»). Puede darse el caso de
que el Sendero 7 esté reflejando el espíritu lúdico del 5, y entonces
el exceso de responsabilidad se transforma en irresponsabilidad (el
exceso de yang volviéndose yin, según el principio taoísta; ver más
arriba lo apuntado en la Familia del 5). En cuanto al Sendero 16, al
estar relacionado con los procesos de aprendizaje, implica un fluir
de la energía, sin el cual el aprendizaje no es posible, pues se trans-
forma en una mera acumulación de datos sin verdadera compren-
sión. Los fallos en el aprendizaje pueden ser vividos como fracasos,
y entonces aparece también aquí el sentimiento de culpabilidad. En
este caso, los bloqueos de energía del sendero se van a manifestar en
forma de trastornos circulatorios, y a nivel psíquico, en tendencias

MANUAL DE KABBA LAH PRÁCTICA 591


depresivas o en hiperactividad para tratar de evitar «pararse a pen-
sar» y caer precisamente en la depresión, lo que produciría perso-
nas cambiantes que, para huir de las incomodidades que derivan de
un esfuerzo continuado en el aprendizaje, cambian constantemente
de dirección (de objetivos), siendo como los meandros de un río en
busca del recorrido de flujo más fácil. Pero, si el sentido de respon-
sabilidad es muy elevado (más líneas en el Sendero 7 que en el 16),
el sujeto vive atrapado en su propia trampa, y ello le impide cam-
biar, aun a costa de poner en peligro sus más caras ambiciones.
Para estos últimos, la vida es una perpetua «cuesta arriba» llena
de esfuerzos y penalidades, a las cuales, por lo demás, atrae con su
fuerte carga del 16, como si fuese una punta electrificada en plena
tormenta («atractores de crisis»). Los bloqueos en el sendero 7 son
la consecuencia de la necesidad de madurar e integrar el deber ver-
dadero en función de lo que se es, fuera de los convencionalismos,
en la forma de actuar, lo que se puede manifestar en un exceso de
responsabilidad y de ambición que puede dificultar otras parcelas
de la vida, y en una tendencia a culpabilizarse por no llegar a cum-
plir los objetivos; dificultad en percibir los verdaderos objetivos en
función de lo que se es; dificultad de comprender el sentido de la
responsabilidad. En cuanto al sendero 16, destacamos la necesidad
de madurar e integrar el área mental con la emocional, las ideas con
las emociones, el aprendizaje con las relaciones personales; todo
ello se manifestará en la dificultad en percibir la finalidad de las cri-
sis, que se superan con dolor, penalidades y lentitud, y en valorar
y percibir los propios procesos de aprendizaje; también para perci-
bir las ataduras al pasado y las defensas inconscientes, y liberarse
de ellas. Según quedó señalado, un caso que se presenta concierta
frecuencia es el de personas inscritas en el Registro Civil con una
fecha de nacimiento diferente a la real; lógicamente, las dos fechas
originarán árboles personales diferentes. Esta discordancia suele
coincidir con un sendero 16 con carga especial, mostrando en el
sujeto una falta de identidad de sí mismo.
Familia del 8. Senderos 17 y 8. El Sendero 8 tiene unas carac-
terísticas especiales, que lo hacen diferente de los demás. Es, en
cierto modo, el mediador y, tal como vimos al estudiar los cam-
bios de posiciones de las letras hebreas en el Árbol de la Vida

592 VILLARRUBIA / H A UT / MILLERA


(II Parte, sección 3.6) representa e inicia la vida, C~ (jayím), por lo
que debe guardar un delicado equilibrio entre múltiples extremos.
No es el motor del vehículo, pero sí el cubo de la rueda. Como es
la viga intermedia, representa la racionalidad, frente a la conscien-
cia superior o síntesis del Sendero 3 y el instinto apenas superior
al animal del 16. Este sendero se relaciona con el juicio y el análi-
sis; es por eso frecuente que aparezca con sobrecarga en personas
que se dedican a la analítica en cualquier campo: bioquímica, físi-
ca, economía, finanzas, así como a los profesionales del derecho.
El aprendizaje que estas cargas especiales imponen al sujeto es
agudizar su visión objetiva y subjetiva, para juzgar a cada uno se-
gún la vara de medir que le corresponda, y no a todos por igual.
Por eso, lo que viven como perfectamente justo puede ser en reali-
dad una gran injusticia, pues su excesivo individualismo les impi-
de muchas veces apreciar el punto de vista de los demás. Y así, es
un sendero en el que la energía puede bloquearse tanto por exceso
corno por defecto, siendo más frecuente lo primero que lo segundo,
debido al modelo de pensamiento racionalista y cartesiano vigente
desde el final de la Edad Media. Por su proximidad a Tiferet, que
es a la vez su sefirá opuesta polar, sus enfermedades típicas son las
cardíacas. Su «fluir con el Tao» se manifiesta a través de la sefirá
oculta, Daat, la cual, como vimos en su momento, es la conjunción
o coito místico entre el Padre Cósmico Jokrnah y la Madre Cósmica
Binah; quiere ello decir que por sí mismo el Sendero 8 no tiene ca-
pacidad para salir de esta encerrona, y que la liberación sólo puede
venir del Cielo. En cuanto al Sendero 17, ya vimos la fuerte carga
de sexualidad que conlleva. Un uso inadecuado de ella o una re-
presión provocará, lógicamente problemas de impotencia o, por el
contrario, de sexualidad desbordante; todo dependerá del sendero
de salida del 17, que es el 21. Pero la sexualidad es, tanto desde
el punto de vista masculino como del femenino, una renovación
constante, y por tanto una creación constante de espermatozoides
y de óvulos. Pero también es la renovación continua de todas las
fuerzas de la naturaleza. En todo caso, el 17 recoge la misión del
alma., y así podemos comprobarlo repasando las ideas desarrolla-
das en el estudio de este sendero (sec. 3.7.18), de entre las cuales
resaltamos las de instruirse y hacer volar, ambas en consonancia

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 593


con la dirección ascendente de este sendero, desde Yesod a Netzaj.
Por eso, una sobrecarga en este sendero hará que al sujeto el traba-
jo siempre se le esté «quedando pequeño»; y es una situación que
perdurará hasta que comprenda que debe abandonarse a las leyes
de la naturaleza, lo que implica aceptar alegremente tanto la vida
como la muerte, pues ambas son dos aspectos de una misma reali-
dad: «No hay vida sin putrefacción ni muerte sin renovación». La
gran pregunta que se plantea en el Sendero 17 cuando lleva sobre-
carga, «¿qué he venido a hacer aquí?» puede tener su respuesta en
el 8, especialmente en el punto de cruce 3 (ver más adelante, sec-
ción 10), si supone un bloqueo del flujo que desciende a través del
Sendero 2: «abrirme a la intuición superior, permitiendo que per-
fore mi fuerte barrera mental». En lo que se refiere a los bloqueos
específicos de los senderos, en el 8 se manifiesta la necesidad de
madurar e integrar la percepción y elección de metas elevadas a
largo plazo con la forma de actuar, la misericordia y los principios
constructivos con el rigor y lo restrictivo o destructivo; su expresión
será la dificultad de discernir, de evaluar y de juzgar con equidad.
Por su parte, en el 17 el bloqueo muestra la necesidad de madurar
e integrar el área emocional y las relaciones personales con el ego;
y se pondrá de manifiesto en la dificultad en expresar emociones
y deseos, en percibir la verdad acerca de uno mismo, el tikún y la
forma de realizarlo; y también, en la dificultad para el trabajo en
soledad, con la tendencia a depender de otros para realizar cual-
quier actividad.
Familia del 9. Senderos 18 y 9. El Sendero 9 puede considerarse
como el de la autosuficiencia, por lo que quienes tengan sobre-
carga en él se verán enfrentados a la necesidad de desarrollarla y
ponerla en práctica. Pero es una tarea que puede tener serias con-
tradicciones, entre el afecto que necesitan y su expresión a través
del contacto físico, por una parte, del Sendero 18, y su necesidad
de autosuficiencia, y por tanto de soledad e independencia exigi-
dos por el Sendero 9. La sobrecarga en este último sendero suele,
por otra parte, proporcionar un sentido de prudencia a veces exa-
gerado, por lo que el sujeto puede tener serias dificultades para
entregarse, especialmente en la relación sexual; si por el contrario
fluyen de forma adecuada serán capaces de un gran refinamiento

594 VILLI\RRUBIA / HAUT / MILLERA


en su sexualidad, que puede llevarles a un nivel de consciencia
más elevado. El rechazo a la tarea de conseguir ser autosuficien-
tes puede acabar desembocando en problemas de páncreas, cuya
principal manifestación es la diabetes. En cuanto al 18, su tarea
básica es, como se ha dicho, el contacto y la comunicación no ver-
bal con las energías de la tierra, comunicación que es esencialmen-
te de nivel mágico y chamánico; en este caso, estas energías son,
no sólo las del «suelo», sino también las de todos los seres vivos,
personas y animales incluidos. La comunicación puede venir acla-
rada y enriquecida por el maestro interior que se manifiesta a tra-
vés del Sendero 9, en muchas ocasiones a través de los sueños.
Otro efecto de la sobrecarga en el Sendero 18 es que se busque in-
sistentemente el contacto físico (personas pegajosas), pero que, por
influjo del Sendero 9, se pase al otro extremo y entonces ese contac-
to se rechace (personas ariscas). El incumplimiento del Programa
de Vida en cuanto al Sendero 18, lo que en definitiva es un bloqueo
de su flujo de energías (por ejemplo, llevando una vida exclusiva-
mente ciudadana, «de asfalto») se va a traducir en problemas de
falta de vitalidad, pérdida de fuerza, frigidez sexual e impotencia.
Los bloqueos muestran, en cuanto al sendero 9, la necesidad de
madurar e integrar la percepción y elección de metas elevadas a
largo plazo con la individualidad; entre tanto habrá un exceso de
prudencia y sensación de soledad. Por su parte, el bloqueo en el 18
manifiesta la necesidad de madurar e integrar el área emocional y
las relaciones personales con el plano físico y tangible; por ello, ha-
brá dificultad y temor en percibir energías sutiles; temor a la magia
elemental y a lo sutil; dificultad en la expresión corporal; miedo
al ridículo; dificultad en expresar emociones en la intimidad y en
comprender la comunicación no verbal.
La relación anterior es meramente orientativa, y las perso-
nas dedicadas profesionalmente a la terapia, sea convencional
o alternativa, pueden encontrar, mediante la observación y tra-
tamiento de sus pacientes, nuevos datos que la completen y
enriquezcan.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 595


8.2. Senderos con cargas especiales por líneas ocultas
Los números ocultos, tanto por razones matemáticas como por ra-
zones ontológicas, sólo pueden aparecer en los senderos definidos
por números de 2 cifras superiores al 10. Estos números ocupan en
general la mitad inferior del Árbol, con la excepción del 22, que se
sitúa en lo más alto (relación Keter-Jokmah), estableciendo un oculto
de naturaleza en cierto modo diferente de los demás.
En general, las líneas ocultas definan aspectos del sendero afec-
tado que no se expresan salvo en caso de necesidad. Manifiestan
reticencias, temores no resueltos y susceptibilidades hacia los con-
tenidos del sendero. Actúan de forma semejante a aisladores, de tal
modo que exigirán un estímulo particularmente fuerte para vencer
la resistencia del aislamiento. En los casos en que el sendero apa-
rezca cubierto por una sola línea oculta, sin ningún acompañamien-
to de otro u otras, el comportamiento en la mayoría de los casos es
como si el sendero no existiese ... hasta que surge el estímulo fuerte,
en cuyo caso se manifiesta con toda su crudeza. Si, en cambio, la lí-
nea oculta aparece acompañada de otras en el mismo sendero, aqué-
lla actúa como un reforzador, como una especie de «as en la manga»
que el tahúr saca sólo cuando el jugador contrario tiene una buena
jugada. Si aparecen en un sendero en que existe un bloqueo (tres
líneas o más), cuando el sendero oculto se manifiesta, desencadena
fuertes temores a expresar sus contenidos, así como la necesidad de
asegurarse muy bien antes de responder.
Veamos seguidamente la incidencia de los ocultos en los senderos
afectados.
Familia del 1: sendero 19. Al tratarse del sendero que se refiere a la
cooperación, las actividades en equipo (incluido el sexo) y la concilia-
ción, la línea oculta requerirá estímulos suplementarios para manifes-
tarse. Un caso muy especial puede presentarse cuando el sendero 19
tiene una sola línea, precisamente la oculta, y el sendero 1 es el único
enlace de Keter con el resto del Árbol, esto es, con los senderos 22
y 2 angélicos. Si se da esta circunstancia, hay un alimento que pue-
de provocar, bien trastornos de tipo sexual, bien fuerte estimulación
erótica. Nos referimos al pimiento. Aunque parezca broma, en rea-
lidad esta hortaliza, especialmente si se consume cruda, junto a la

596 YILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


gran cantidad de vitamina C que contiene, muestra en su nombre
hebreo, rl,~~~ (pilpelet) el mismo valor numérico que Keter, ,.n~, 620,
por lo que de alguna forma comparte la naturaleza de esta esfera.
Al aparecer el sendero 19 con una única línea oculta, recoge con vio-
lencia la energía de la manifestación (en definitiva, un acto creativo),
provocando los efectos mencionados. Si, por el contrario, la configu-
ración es otra, la línea oculta del 19 provocará, cuando se coma pi-
miento, tendencia a trastornos de tipo digestivo. La sugerencia para
el sujeto afectado, en estos casos, puede comprender actividades de
tipo creativo, fundamentalmente realizadas en equipo, sin desdeñar,
por supuesto, la sexualidad, que es una de las formas más elevadas,
quizá la que más, de actividad en equipo.
Familia del 2: senderos 20 y 11. Una línea oculta en el 11 es la
manifestación de dificultades y reticencias para la relación social,
susceptibilidad. Cuando el 20 tiene alguna línea oculta, se trata de
personas que tienen el poder de la palabra, con la que pueden hacer
mucho bien o mucho mal, según la utilicen, siéndoles de aplicación
algunas de las invocaciones que hace la sura 113 del Corán[.. .] con-
tra el mal de las brujas que [hacen encantamientos cuando] soplan sobre
los nudos, y contra el mal del envidioso que escupe envidia. La respuesta
que estos senderos demandan tiene que ver con la consideración de
la otredad como manifestación de lo Sagrado. Al tratarse de una fa-
milia de números de tipo alternativo, un bloque determinado puede
proporcionar línea oculta en uno de los dos números, aunque no en
los dos. Pero sí es perfectamente posible que los números ocultos
procedan de diferentes bloques.
Familia del 3: senderos 21 y 12. Las características especiales de
estos senderos cuando tienen líneas ocultas son un refuerzo de lo
expuesto respecto a las sobrecargas, con la particularidad del estí-
mulo suplementario necesario para la manifestación de la línea. Esta
característica impondrá esfuerzos suplementarios, a veces muy do-
lorosos, para adquirir la conciencia de lo sagrado y para la conexión
con la tierra. No es, pues, de extrañar que cualquier incumplimiento,
incluso inconsciente, de fas tareas que imponen las líneas ocultas,
se manifieste, bien en desarreglos digestivos que pueden afectar al
intestino delgado, o bien, en trastornos en el ano y los pies. Se trata,
en todo caso, de personas muy sensibles respecto a las energías ne-

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 597


gativas, bien por la propia configuración o naturaleza del lugar en
que se manifiestan, bien por el tipo de personas que lo frecuentan,
o por las actividades que allí se realizan. Estas energías pueden lle-
gar a enfermarles por poco tiempo que estén recibiéndolas. Deben,
por tanto, ser muy cuidadosos al respecto, para apartarse de estas
energías, o al menos aprender a cubrirse protegiéndose de ellas, has-
ta que aprendan a transmutarlas. Valga lo dicho respecto a las fami-
lias alternativas en el párrafo anterior.
Familia del 4: senderos 22 y 13. Las líneas ocultas en estos dos
senderos muestran aspectos de naturaleza diferente. Cuando apa-
recen en el 22 indican que el conflicto con la figura de Dios es par-
ticularmente grave, por considerar que el Ser Supremo es, en rea-
lidad, un personaje maligno que goza haciendo sufrir y poniendo
obstáculos. Sin duda, gran parte de la responsabilidad por esta
creencia hay que apuntársela al Debe de las castas sacerdotales,
que con honrosas (y más bien escasas) excepciones han practicado
a lo largo de la historia múltiples actividades de terrorismo espiri-
tual. Las líneas ocultas en el sendero 13, en cambio, se refieren a un
conflicto particularmente virulento consigo mismo; en realidad,
con la propia sombra, aquellos aspectos de nosotros mismos que
rechazamos por inaceptables. En ambos casos, las líneas ocultas en
estos senderos demandan el desarrollo de la entrega desinteresada
y de la autoestima, cosas que parecen contradictorias entre sí pero
que en realidad no son posibles la una sin la otra: las alternativas,
entrega sin autoestima o autoestima sin entrega, llevan de forma
casi inevitable al escapismo o a la egolatría, respectivamente. Valga
lo dicho respecto a las familias alternativas en los dos párrafos an-
teriores.
Familia del 5: sendero 14. Una línea oculta en el sendero 14,
especialmente si aparece sola, corresponde a una persona en apa-
riencia rígida e intolerante, pero en realidad acomodaticia cuando
tiene enfrente algo o alguien que considera más fuerte que ella.
En este caso dará la impresión de que cede a la presión o a la de-
manda que está recibiendo, pero en realidad está reacomodando
sus parámetros. Pero esa adaptación no se hace sin sufrimiento,
por lo que es frecuente que aparezcan trastornos de tipo gástrico.
En realidad, la misión de la línea oculta en este sendero es poner

598 ViLLARRUBIA / HAUT / M ILLERA


de manifiesto que existen otras alternativas a la actividad o al en-
torno hostil, impulsando a su búsqueda.
Familia del 6: sendero 15. La aparición de líneas ocultas en el
sendero 15 refleja que en una existencia anterior ha habido en
mayor o menor grado una falta de impecabilidad y respeto ha-
cia las decisiones de los demás, bien manipulándoles consciente
o inconscientemente, o bien incluso practicando actividades de
brujería y magia negra. Ante todo conviene aclarar qué enten-
demos por magia negra: es cualquier actividad que tienda a tor-
cer, alterar, impedir o corromper la manifestación de la voluntad
de otra persona. También lo es manipular para ganar poder por
lástima mal enfocada, o comportarse de manera excesivamen-
te protectora o salvadora por miedos personales no resueltos.
Por tanto, no es sólo magia negra la que usa los instrumentos
y los procedimientos que tradicionalmente se han considerado
como propios de esta actividad; de hecho, la corrupción de lavo-
luntad ajena puede efectuarse por otros muchos procedimientos,
que abarcan desde lo más grotesco a lo más sutil: desde las armas,
pasando por las leyes injustas, los llamados «libros sagrados», las
técnicas de lavado de cerebro o los talonarios de cheques, ponga-
mos por caso. Todas esas acciones dejan una huella indeleble en
quienes las realizan, huella que se manifiesta en las vidas siguien-
tes, y hasta que se limpien, en líneas ocultas en el sendero 15.
Estas líneas ocultas constituyen un aprendizaje acerca de la im-
pecabilidad, y la oportunidad de comprender los mecanismos,
miedos e inseguridades que consciente o inconscientemente obli-
gan a actuar de manera equivocada, dialogando con los demonios
internos cuando se muestran, en vez de rechazarlos, ya que, al
tratarse de un sendero oculto, lo hacen en situaciones especiales
o extremas. La propuesta en estos casos pasa por un respeto ex-
quisito a los demás y a sus manifestaciones de voluntad, sin per-
juicio de mantener nuestras posturas si las creemos justas. Sólo
así podremos limpiar algo que, en caso contrario, nos originará
serios problemas, tanto a nivel físico, sobre todo en el intestino
grueso, como psíquico, en forma de trastornos emocionales que
afectarán sobremanera a nuestras relaciones con nuestro entorno
más próximo, sobre todo en el ámbito familiar.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 599


Familia del 7: sendero 16. La nota más característica de esta
configuración es, por parte del sujeto, la búsqueda, casi siem-
pre inconsciente, de fuertes trastornos periódicos que le ayuden,
en cierto modo, a «despertarse». En efecto, como la característica
de cualquier línea oculta es la necesidad de sobreestimulación para
manifestarse, si la línea aparece sola en el sendero es imprescindi-
ble una buena «movida» de vez en cuando para que la conexión
entre Netzaj y Hod (es decir, entre la energía emocional y la mente
concreta) se manifieste. Si la línea oculta aparece acompañada por
otra u otras, actúa como un amplificador, siendo paradójicamen-
te más soportable, menos incómoda, si el número de líneas son
sólo dos. De tres en adelante, en cambio, deberemos empezar a
hablar de «atractores de crisis», tal como vimos en la sección ante-
rior. Reseñemos, finalmente, que las líneas ocultas en el sendero 16
pueden originar trastornos circulatorios en caso de incumplimien-
to del programa. Recordemos a este respecto la sección 3.6.17 de la
II parte, en la que veíamos cómo la palabra hebrea para torre, ~i)~
(migdal, nombre del Arcano del tarot asociado al sendero) contiene
a~) (gal), la ola, y Ci (dam), la sangre. Por su parte, uno de los sig-
nificados de la letra asociada a este sendero, la ayin (V) es fuente,
confirmando así la idea de un líquido que fluye.
Familia del 8: sendero 17. Una línea oculta en este sendero mues-
tra una seria dificultad para la expresión de la sexualidad (no im-
posibilidad), pero sobre todo, una búsqueda de objetivos elevados
en aras al cumplimiento del tikún. En efecto, esta búsqueda suele
ser sumamente laboriosa, erizada de dificultades, no sólo internas,
sino también externas, de tipo social; pero estas últimas son en
realidad una proyección inconsciente de las primeras, puesto que
el sujeto tiene en sus zonas más oscuras el sentimiento de que, si no
existen esas dificultades, es que el objetivo no merece la pena. Hay,
por tanto, tendencia al quijotismo, a pelear con molinos de viento
y a buscar rebaños de ovejas guiados por pastores que le midan
las costillas a estacazos. Así pues, nacerá en una familia en la que
la armonía sea un bien escaso; elegirá trabajos cuyos jefes le enco-
mendarán el incómodo papel de chivo expiatorio; y así sucesiva-
mente, hasta que descubra que ha venido a desarrollar una misión
sagrada, su tikún. Como el sendero se relaciona con el Arcano 17,

600 V!LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


«La Estrella», ese descubrimiento incluirá afrontar para sí mismo,
y sobre todo expresar hacia su entorno, la verdad desnuda, que es
ante todo el respeto sagrado hacia sí mismo y hacia los demás; en
otras palabras, el cumplimiento cabal de las normas de la caballería
andante: la entrega, el honor, el valor y la compasión. Pero, para-
dójicamente, el descubrimiento sólo será posible cuando, tras ha-
ber realizado todos los esfuerzos posibles, se abandone a la Divina
Providencia; o, si se prefiere otra terminología, al fluir del Tao.
Familia del 9: sendero 18. La principal característica originada
por una línea oculta en este sendero es la hipersensibilidad emo-
cional, que se traduce en comportamientos extremos en sus rela-
ciones con los demás, comportamientos que pueden llegar a lo
patológico por la necesidad del sujeto de vivir «emociones fuer-
tes». No es por tanto raro que aparezcan fracasos en las relaciones
de pareja, o simplemente en las de convivencia. Seres sumamente
susceptibles, a poco que lo intenten conseguirán sentirse lastima-
dos por cualquier actitud, cualquier comentario de los seres que
les rodean. Son personas de difícil trato, y sea en la vida de fami-
lia o en la de cualquiera otra comunidad (conventos o escuelas,
por ejemplo), originaran constantes problemas. El objetivo de esta
configuración es el «aprendizaje del florecer». ¿En qué consiste?
Cuando se cumple el consejo evangélico de no oponer resistencia
al mal, o el taoísta de buscar el lugar del infierno en el que las
llamas sean más altas y tirarse allí de cabeza, como medio de esca-
par de aquel infausto lugar (tal como lo relata Arnaud Desjardins),
el primer efecto es el sentimiento de desgarro desde lo más profun-
do de uno mismo: «¡Estoy atrapado y no tengo salida!» Sin embar-
go, a continuación, por entre los «escombros» de aquel desgarro
hay algo que florece, algo de una cualidad radicalmente diferente:
ya no hay conflicto, ya no hay dolor, hay sólo amor y belleza.
Consideraciones finales respecto a los senderos con líneas ocul-
tas. Aunque se trata de configuraciones raras, pueden aparecer
dos o más líneas ocultas en un mismo sendero. En este caso no
cambia el significado, sino que se refuerza y se hace más intenso,
más duro, más incómodo, en definitiva, exigiendo del sujeto es-
fuerzos adicionales para el aprendizaje, según la naturaleza del
sendero afectado.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 601


8.3. Senderos con cargas especiales por líneas cíclicas
Mientras que las líneas ocultas pueden aparecer solamente
en los bloques en los que intervienen directa o indirectamen-
te el nombre y los apellidos (bloques 1, 2, 3, 7, 9, 10 y 11), las
líneas cíclicas derivan exclusivamente de los bloques 12 y 13.
Ello quiere decir que una línea no puede ser a la vez oculta y
cíclica, aunque nada se opone a que en un mismo sendero haya
líneas de ambos tipos.
Recordemos que los ciclos cortos, que expresan su duración
en meses, afectan a los senderos a los que se aplican los núme-
ros del bloque 12, y los largos, expresados en años, a los sende-
ros a los que se aplican los números del bloque 13. Recordemos
también que las duraciones los ciclos se calculan, para los cortos,
sumando los números del día y del mes de nacimiento, y para
los largos, mediante la suma del mes y de las cuatro cifras del
año. A diferencia de las líneas ocultas, pueden afectar a cualquier
sendero del Árbol, y aunque cada tipo de ciclo afecta exclusiva-
mente a parte o a todos los senderos de una misma familia de
números, no siempre tienen éstos la misma concurrencia de crisis
y/ o anticrisis, ya que ello depende del número de líneas fijas que
acompañen a la variable. Como hemos visto, se trata de movili-
zadores especiales de aspectos que están bloqueados, pudiendo
llegar a ser nuestros maestros interiores si somos capaces de fluir
con arreglo a la demanda que de ellos surge, o a la larga, provo-
car enfermedades si nos negamos a hacerlo.
Ante un sendero en el que aparezcan líneas variables, sea que
provoquen crisis o anticrisis, deberemos prestar atención a su
sendero opuesto polar, para obtener en él la información que
completará el sentido del primero. En otras palabras, toda línea
variable va a imponer al sujeto retos en sus senderos de polari-
dad opuesta, retos que se manifestarán en su vida familiar, so-
cial, profesional, económica, etc. Los senderos de la flecha (el 2,
el 14 y el 21), cuando tienen líneas cíclicas, se enfrentan a retos
procedentes de los campos externos, tanto energéticos como for-
males, mientras que el sendero 8 recibirá los retos simultánea-
mente del 3 y del 16.

602 V1L1.ARRUBIA / HAUT / MILLERA


En cualquier caso, la actuación de las líneas cíclicas se pone
de manifiesto en las crisis o en las anticrisis, conceptos que que-
daron explicados en la III Parte. Ampliando dichos conceptos,
añadamos que las crisis, al ser desapariciones temporales del
sendero o senderos afectados, pueden representar para el sujeto
incluso la angustia de creer que está iniciándose un declive físico
de facultades. Por lo mismo, pueden originar la aparición tem-
poral de alguna configuración incómoda o especial. Por su parte,
las anticrisis representan un desbordamiento, algo así como la
rotura de una presa. Pero este hecho no se produce de repente,
aunque el sujeto pueda vivirlo así. Si examinamos los gráficos de
las figuras 41, 42 y 43, que aunque se refieren a ciclos combinados
pueden aplicarse también a ciclos simples, veremos que toda an-
ticrisis tiene previo a su desbordamiento o salida un período de
incubación. Se trata de una fuerte movilización de energías que
busca, por el método opuesto a la crisis, algo semejante a la ta-
rea de un fontanero cuando intenta desatascar una tubería. En la
crisis el «desatascador» es el vacío, mientras que en la anticrisis
es la sobrecarga de presión. Cuando existen ciclos combinados,
es decir, corto y largo en los mismos senderos, tanto crisis como
anticrisis se organizan en largas series a lo largo de varios años,
produciendo en el sujeto la sensación de estar viviendo en una
continua «movida» (figs 40, 41, 42 y 43). La concurrencia de ci-
clos corto y largo en una misma familia de números dará origen
a curvas de gran complejidad, para cuyo cálculo será necesario el
apoyo informático (ver Apéndice 2).
Un aspecto interesante a la hora de interpretar los efectos de
los senderos con líneas cíclicas es que la crisis o anticrisis da la
oportunidad de contemplarse en el espejo del otro. También es de
señalar que este tipo de senderos muestran de alguna forma un
movimiento pendular, por lo que es posible que el sujeto esté en
uno u otro lado de la oscilación; por lo tanto, estos senderos deben
verse en sus dos vertientes, yang y yin, exigiendo una exploración
complementaria, incluso a través de una entrevista para llegar a
una conclusión válida.
Otro aspecto que afecta a las líneas de ciclo corto es que, cuanto
más frecuentes sean las crisis o anticrisis, más viveza manifestará

MANUAL DE KABBAI.AH PRÁCTICA 603


el sujeto; y en cambio, en las crisis o anticrisis de ciclos cortos de
larga duración, mayor tendencia hay en el sujeto a sentimientos
depresivos, aunque no haya motivos aparentes para ello. Parece,
pues, que los nacidos en los últimos días y los últimos meses del
año son más propensos a estos estados depresivos.
Al tratarse de impulsos para el aprendizaje, los ciclos cortos su-
ponen repeticiones de situaciones en períodos más breves que en
los ciclos largos. Por tanto se trata de tareas que necesitan de más
lecciones para ser aprendidas.
Un caso especial de senderos con líneas cíclicas son las llama-
das «lanzaderas», en las que no hay líneas fijas acompañando a
la variable. Como consecuencia, en el mismo momento del na-
cimiento la línea toma el valor O (crisis), por lo que es frecuente
que haya habido problemas en la vida fetal y en el momento del
parto. Al parecer, y según algunas experiencias recogidas duran-
te varios años, los senderos vacíos o «angélicos» también produ-
cen crisis. Aunque el nativo no viene a trabajarlos como los que
están presentes en el Árbol, pues ya lo hizo en otro momento
de su evolución, le están suministrando información constan-
temente de manera subconsciente, y le obligan a contrastar de
continuo aspectos mundanos con valores espirituales elevados,
aportándole respuestas imprevisibles y recursos sobre los cua-
les no tiene ningún control. A veces puede llegar a confiar en sí
mismo, pero los mecanismos que le traen lo invisible a la cons-
ciencia siguen siendo un misterio, y el nativo debe aceptar que
estos mecanismos siguen sus propias leyes, y por lo tanto sólo le
queda tener fe y confiar. El tipo de información que llega a tra-
vés de los senderos vacíos está relacionado con la naturaleza de
los tres genios personales, según el significado de sus nombres.
Como veremos al estudiar los procedimientos de búsqueda de
la misión que traemos al mundo (V Parte), existen también los
ángeles del tikún, que pueden ser o no los mismos que los perso-
nales, y que también aportan información cósmica según la natu-
raleza deducida de sus nombres.
Destaquemos seguidamente algunos casos especialmente signi-
ficativos de líneas cíclicas o variables.

604 VILLARRUBIA / HAUT / Mi l.LERA


• Las que aparecen en el Sendero 5 apuntan a un cambio de
gustos, de apetencias, por lo que serán probables cambios de
actividad, y por tanto tendencia a la inestabilidad en el traba-
jo y en las aficiones. Si en el mismo Árbol el Sendero 7 tiene
también carga especial (sobre todo si tiene una línea cíclica)
indica un conflicto entre el deber y la vocación. Por otra par-
te, cuando el 14 entra en crisis (no en anticrisis) y en tanto
dura, impide ver lo que debe aprenderse, por lo que impone
un período de espera y quietud. También es el 14 el que ayuda
a superar la noche oscura del alma en el aspecto devocional,
por lo que una carga especial puede conducir a la búsqueda de
apoyo en un «gurú» de cualquier tipo. Por último, las líneas
variables en este sendero impulsarán a un continuo romper
con la personalidad (los roles sociales) o, al contrario, a verse
desbordado por ella, según que las cargas relativas de Tiferet
y Yesod sean, respectivamente, mayores en la primera esfera o
en la segunda. Si el sujeto no puede adaptase a estos continuos
cambios (que, no lo olvidemos, afectan también al Sendero 5),
puede enfermar gravemente, siendo sus puntos vulnerables el
hígado, el páncreas, la próstata en los varones y el útero en las
mujeres.
• Si en el Sendero 6 hay anticrisis, es muy probable que el naci-
miento del sujeto se haya producido mediante un parto difícil y
de larga duración.
• Si el sendero 7 tiene anticrisis (por tanto contendrá tres o más
líneas) su exigencia es asumir totalmente la responsabilidad sin
cargársela a otros; pero en el caso contrario, el de crisis (línea
variable sola o con una sola fija acompañándola), la propuesta
es la renuncia periódica a las responsabilidades, o lo que es lo
mismo, la renuncia al control y la adopción de una actitud de
indefensión. En estos casos su Programa de Vida les pide que
«pongan la otra mejilla», que «no opongan resistencia al mal»,
tal como recomienda el Evangelio. Los sentimientos de culpabi-
lidad asociados al fracaso en caso de anticrisis son, en realidad,
el síntoma de que la energía está siendo bloqueada. Pues no
es sorprendente que, al compartir la Tríada de la Conservación
este Sendero con el 6 y el 11, se planteen periódicas pruebas de

MANUA L DE KABBALAH PRÁCTICA 605


desapego, que en este caso son respecto a los resultados de la
acción. Vivekananda decía: «Apégate al trabajo, pero no al re-
sultado del trabajo». Bien, de eso precisamente se trata. Cuando
se asumen responsabilidades sin, a la vez, este desapego al re-
sultado, la energía deja de fluir, y las vértebras cervicales a re-
sentirse («complejo de Atlas», llevar el mundo a cuestas).

8.4. Senderos con cargas especiales por doctorados


Los senderos acompañados por cruces de doctorado (una o dos,
excepto el 9 y el 18, que pueden tener hasta tres), funcionan en
principio exactamente igual que los demás, según su naturaleza.
Pueden tener una o más líneas (nunca cero, porque entonces no
habría doctorado, sino jardín de infancia), y esas líneas pueden ser
visibles u ocultas, fijas o cíclicas, nativas o sociales (estas últimas,
recordemos, proceden de los bloques 10 y 11), pero funcionarán
exactamente igual, hasta que el aprendizaje se haya completado.
A partir de ese momento los doctorados comienzan a activarse,
y entonces aparece la necesidad de enseñar. La enseñanza puede
adoptar la forma habitual: «Explícanos eso que has descubierto,
que nos parece interesante». O bien puede manifestarse en forma
de ejemplo vital, de ejemplo vivo, que no parece enseñanza, pero
que en realidad lo es.
El doctorado es, en cierto modo, un don de profecía. No debe-
mos entender esta palabra como anuncio de lo que sucederá, sino
como dar testimonio de Dios, pues ese es el significado de una
de las expresiones hebreas para designar al profeta: i"T, i~V (ebed
Yah), servidor o esclavo de Dios. En otras palabras, la maestría co-
mienza a manifestarse cuando el ego ha sido ya razonablemente
erosionado, cuando desaparece (¡de forma natural, por supues-
to!) el sentimiento de yo hago, yo digo, yo actúo ... Por lo tanto, la
manifestación del doctorado es, de alguna manera, una prueba,
una referencia, un hito en el camino que indica que se ha cubier-
to una etapa en el desarrollo espiritual. Y por esa misma razón,
y una vez que las etapas «normales» se han cubierto, cuando los
doctorados empiezan a manifestarse lo hacen siguiendo el orden

606 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


inverso a los senderos ordinarios, que son los que no llevan la
compañía de las cruces que indican esta circunstancia; en otras
palabras, mientras que una familia de números habrá funcio-
nado en su fase «ordinaria» empezando por el sendero situado
más abajo en el Árbol (y por tanto el que tiene un número más
alto), en el caso de que exista un doctorado, y una vez cubiertos
los objetivos de aprendizaje relacionados con dicha familia de
números, se empezará a manifestar siguiendo un orden descen-
dente, o lo que es lo mismo, activándose en primer lugar los sen-
deros de números más bajos de cada «familia» (en este sentido,
el sendero 22 debe considerarse como el más bajo de la familia
del 4), tal como lo hacen también, como veremos en la sección si-
guiente, los senderos semilla o «jardines de infancia». Con razón
unos y otros proceden de los bloques A, B y C, que hemos veni-
do en llamar vocacionales, puesto que la palabra latina vocatio,
de la deriva dicho nombre, significa llamada; y son ciertamente
la indicación de que en esas áreas concretas hay en efecto una
llamada del Cielo para desarrollar una tarea que es en definitiva
de enseñanza, o en el caso de los jardines de infancia, de puesta
en marcha de algo que estaba sólo en estado potencial.
La aparición en un sendero de más de una cruz de doctorado
refuerza estos aspectos, en el sentido de volverlos más sutiles, más
elevados. Y también, más difíciles para el sujeto, que deberá afron-
tar retos por lo general apartados de los comunes para la mayoría.
Las enfermedades que pueden presentarse en caso de negarse a
la realización de doctorados aparecen muy bien representados por
el episodio del profeta Jonás. Nos cuenta la Biblia que, habiéndole
ordenado Dios que fuese a predicar a Nínive, y como Jonás se ne-
gase, fue tragado por un gran pez, que a los tres días lo vomitó en
la playa frente a aquella ciudad. La negativa a desarrollar un doc-
torado es en realidad el rechazo al crecimiento, no ya propio, sino
sobre todo del resto del Universo, por lo que no es extraño que ese
crecimiento aparezca, por decirlo así, por la puerta falsa, en forma
de tumores malignos.
Bastantes de los aspectos derivados de los doctorados se reco-
gen más adelante, en la sección 8.6 de esta IV parte.

MANUAL DE KABBALAli PRÁCTICA 607


8.5. Los senderos semilla y su trabajo
Como vimos, los senderos semilla, o «jardines de infancia», apa-
recen cuando, al desarrollar los bloques vocacionales, A, B y C,
algunos o todos los números resultantes no habían aparecido en
ninguno de los bloques anteriores, 1 a 13. Son, en cierto modo,
los opuestos a los doctorados, los cuales, procedentes también de
los bloques vocacionales, se manifiestan en senderos que sí habían
aparecido en los bloques anteriores. Por lo tanto, no es posible que
en un mismo sendero haya a la vez líneas semilla y cruces de doc-
torado. A los efectos de cálculos de las magnitudes del Árbol per-
sonal, estos senderos no se tienen en cuenta, son algo a sí como
líneas virtuales, proyectos no realizados.
Hay varias imágenes que pueden ilustrar acerca de la natura-
leza de este tipo de senderos. En la III Parte veíamos las de las
semillas de una planta, de la que son las únicas partes que pueden
viajar en el espacio y en el tiempo, o las de la guardería infantil,
a donde los niños son llevados, no para aprender, sino para iniciar
su socialización y sobre todo jugar. Hay una tercera imagen que
puede completar las anteriores. En las dehesas de Extremadura,
el ganado porcino se alimenta de las bellotas que caen de las enci-
nas; y estas bellotas, simientes en definitiva de estos árboles, están
destinadas a germinar en el suelo y criar nuevos árboles; pero es
posible que un cerdo se las coma, en cuyo caso ya no se transfor-
marán en encinas, sino que sufrirán un proceso de transformación
químico y biológico en el organismo del animal, pasando una par-
te a ser cuerpo del animal y otra sus heces, las cuales, a su vez, fer-
tilizarán la tierra y mantendrán así el ciclo vital de la naturaleza.
Quiere ello decir que los senderos semilla le ofrecen al sujeto la
oportunidad de efectuar un trabajo de transmutación. Pero antes
de eso, ¿de donde proceden? ¿Cómo se formaron?
Podemos considerar a los senderos semilla como la huella de-
jada en existencias anteriores por tareas no realizadas. En efecto,
parte de la energía de aquellas existencias no se utilizó, quedó, por
decirlo así, encapsulada, en espera de cumplir la tarea de germinar
en un punto posterior del espacio-tiempo. Representan, por tanto,
los enlaces kármicos con esas vidas anteriores.

608 ViLLARRUBIA / HAUT / MILLERA


El karma, en efecto, puede considerarse como el resultado de un
sentimiento de que queda algo por hacer. Pero la visión cabalista
de este proceso es diferente de la oriental. Para el hinduismo y el
budismo, el karma es la consecuencia de las buenas o malas ac-
ciones realizadas en una vida, consecuencia cuyos efectos o frutos
se recogen en la siguiente vida. Tiene, por tanto, una cualidad de
premio o castigo. Pero para la Kabbalah, el planteamiento es otro.
Pues, como todos nacemos con una misión sagrada que realizar,
el tikún, consistente en la actualización de la presencia divina en
la Tierra, o si se prefiere, el rescate de la Shejiná (aspecto femenino
de Dios) de la cárcel de la ignorancia, está claro que esa misión
es larga, compleja, y requiere muchas vidas para llevarse a cabo;
tal era el planteamiento que hacía, en el siglo XVI, Yitzak Luria.
La reencarnación, por lo tanto, no tiene el carácter de premio o cas-
tigo, sino de propósito, y de ahí que Alexandre Safran, el que fuera
Gran Rabino de Ginebra (ver bibliografía), afirme que el efecto del
cumplimiento del tikún es el perdón de los pecados, no sólo de
los propios, sino también de los de los padres y los de los hijos.
Ante todo, el pecado debe entenderse como un bloqueo energé-
tico, como lo muestra la palabra hebrea NtQM (jatté), en la que un
camino a lo largo de la vida (M) hacia el Absoluto, el Infinito (N) es
bloqueado por una serpiente en posición de ataque (to); esta últi-
ma letra, la teth, si se toma en su sentido de bien, se relacionaría
con esta profundidad, que en el Árbol es, según el Sefer Yetzirah,
la sefirá Jesed, cuyo chakra mundano, Júpiter, representa la expan-
sión, y por tanto la inflamación: nueva muestra del bloqueo de la
energía. Pero si el cumplimiento del tikún lleva al perdón de los
pecados, no sólo los propios, sino también los de los padres y los de
los hijos, ¿cómo entenderlo, si los propios cabalistas afirman que
«tú no tienes padre, ni madre, ni hijo, ni hija, ni esposo, ni esposa,
ni hermano, ni hermana, pues en verdad tú mismo eres tu propio pa-
dre, tu propia madre, tu propio hijo, tu propia hija, tu propio hermano,
tu propia hermana»? Sólo es posible entenderlo como la rotura de
las cadenas que significaban un propósito incumplido. Una vez
que el tikún se ha realizado, la energía fluye, todo es perfecto: he
hecho lo que tenía que hacer, he dicho y escuchado lo que tenía que
decir y escuchar, he dado y recibido lo que tenía que dar y recibir;

M ANUAL DE KABllALAH PRÁCTICA 609


mi misión, pues, ha terminado; y los efectos suceden fuera del es-
pacio y del tiempo. Por todo ello, los enlaces kármicos puestos de
manifiesto por los senderos semilla indican que hay un aspecto de
la misión que está esperando su realización en la vida presente.
La diferencia que tienen estos senderos con los que tienen líneas
ocultas es que, mientras que los primeros indican una tarea no rea-
lizada, los últimos muestran que la tarea se comenzó, pero que, o
bien no se terminó, o bien se torció en alguna parte del camino.
Comprendido esto, la cuestión fundamental es: ¿cómo trabajar
con estos senderos?
Según vimos en el apartado anterior relativo a los doctorados,
mientras los senderos con líneas de cualquier tipo suponen un
trabajo que se desarrolla de abajo hacia arriba, como lo muestra
la serpiente Nejushtán, que se suele dibujar apoyando su cola
en el sendero 21, y progresivamente se va enroscando hasta alcan-
zar el O, sobre el que apoya la cabeza; en cambio, los senderos se-
milla germinan, por decirlo así, de arriba hacia abajo. Lo cual tiene
sentido, puesto que la Tríada de las Raíces ocupa, precisamente,
la posición más alta del Árbol. Y al igual que en el caso de los doc-
torados, se trata de una llamada que procede del Cielo: allí, para
desarrollar una enseñanza, aquí para despertar potencialidades
hasta entonces dormidas.
Evidentemente, si hay un solo sendero semilla en el Árbol per-
sonal sólo puede trabajarse éste, pero si hay varios, el trabajo siem-
pre debe comenzar por el más alto, o, en otras palabras, por el que
tenga el número más bajo, considerando en este caso como O al de
El Loco. El trabajo en estos senderos es siempre el ejercicio de una
opción que, a costa de esfuerzos y dolor, permitirá al sujeto un cam-
bio de dimensión, una metamorfosis, podría decirse, semejante a la
del gusano que se encierra en su capullo para transformarse en ma-
riposa. Por consiguiente, se trata de un ejercicio de libertad, el úni-
co que verdaderamente permite un Árbol personal, puesto que el
resto de los senderos, sean o no angélicos, están marcando desde
el nacimiento hasta la muerte un conjunto de condicionamientos.
Incluso cuando hay un solo sendero semilla en el Árbol, se trabaja
desde arriba (esto es, desde la sefirá de mayor rango, o lo que es lo
mismo, la que tenga un número de orden menor) hacia abajo.

61 Ü VILL/\RRUBIA / HAUT / MI LLERA


Un ejemplo real permitirá comprender mejor este trabajo.
Se trataba de una mujer, a la que llamaremos A., actualmente de
una profunda y rica espiritualidad, y cuyo Árbol presenta nume-
rosas configuraciones incómodas y cargas especiales. Las más des-
tacadas son:

• Familias de senderos del 1 y del 4 con jardines de infancia,


lo que implica un doble ídolo Jokmah-Binah.
• Sobrecargas en los senderos 2, 11, 3, 12 y 21.
• Árbol partido, siendo las sefirot Yesod-Maljut-Netzaj y los sen-
deros de enlace, 21 y 18, un conjunto separado del resto, unido
sólo a éste por los jardines de infancia del 13 y 19. Ello implica-
ba, por tanto, las configuraciones especiales de «víbora» (Yesod)
y «vampiro» en Netzaj.
• Complejo enJesed, siendo angélicos (vacíos) los senderos 5 y 8.
• Todo ello viene acompañado de una carga relativa baja en
Tiferet.

Esta persona había nacido (¡había elegido nacer!) en una fami-


lia de religiosidad muy tradicional: misa y rosario diarios eran las
pautas obligatorias para todos sus miembros, lo que, respecto a
ella, era evidentemente una manifestación del doble ídolo Jokmah-
Binah (padre-madre).
Hacia la edad de 7 años sintió que aquel ambiente familiar
estaba ahogándola: desde su punto de vista, no tenía sentido
esa forma de religiosidad, y se rebeló contra ella. Tuvo que so-
portar los castigos que le impusieron sus padres y el rechazo de
sus hermanos. Pero esta rebelión estaba, en realidad, activando,
despertando los senderos 1 (iniciativa, voluntad) y 22 (entrega
y aceptación de las consecuencias de su postura), y como conse-
cuencia, empezaron también a activarse por resonancia los res-
tantes senderos de esas familias de números. Y así, la activación
del 10 y del 19 (familia del 1) ha facilitado la unión de las dos
partes separadas del Árbol, lo que también era propiciado por
la activación del 13, perteneciente a la familia del 4, mientras
este último, al despertarse, ha hecho que esta transmutación
se realizase dentro de un cierto orden. Las configuraciones del

M ANUAi. DE KABBAL/\H PRÁCTICA 611


«vampiro» en Netzaj y la «víbora» quedaron así desactivadas,
o mejor aún, trascendidas.
Pero estaba el complejo en Jesed, y en este caso no había for-
ma de trabajarlo, puesto que el Árbol de A. tiene los senderos 5
y 8 angélicos, así que no quedaba otra solución que la experien-
cia. Y la experiencia ha sido en verdad dura. Como este complejo
propicia el sentimiento de inferioridad frente a varones de la mis-
ma generación, especialmente cuando la carga relativa de Tiferet
es, como en este caso, baja (inferior a 7 / 8), la interesada tuvo la
suficiente habilidad para encontrar sucesivos compañeros senti-
mentales que, a base de sufrimientos, le permitiesen armonizar su
Árbol. El primero de ellos la sometió a todo tipo de vejaciones y
maltrato físico; con el segundo, el sufrimiento fue de tipo emocio-
nal («aquello parecía un culebrón venezolano de los que pasan por
TV», cuenta ella con gran humor); y con el tercero (hasta el mo-
mento, el último), que además de compañero sentimental era tam-
bién socio en su negocio, los problemas se presentaron en forma
de lucha de poder, una lucha despiadada, en sus propias palabras.
Observemos que el aprendizaje que le han proporcionado estas re-
laciones sentimentales han seguido el orden inverso que el de los
senderos semilla: primero, el plano físico (palizas), después el pla-
no astral (sufrimiento y chantaje emocional) y por último el plano
mental (lucha de poder); de abajo hacia arriba por tanto. Cuando
nos contaba su vida y sus experiencias (nos ha dado autorización
para referir su caso), nos comentó finalmente lo que la Kabbalah y
el trabajo de comprensión sobre su propio Árbol le habían ayuda-
do. Actualmente compagina su trabajo en la sanidad pública con
la colaboración comprometida con una ONG. Al conocer su caso,
referido por ella misma ante el dibujo de su propio Árbol perso-
nal, constatamos hasta qué punto era cierta la comprensión que
tenía de su proceso. Sólo pudimos comentar: «Ojalá no necesites
encontrar al cuarto hombre para que te permita aprender de forma
dolorosa en el nivel espiritual, como necesitaste a los otros tres en
los niveles inferiores».

61 2 YILLA RRUBIA / HAUT / MILI.ERA


8. 6. Senderos subjetivos agrupados por afinidades
Si se examinan con cierto cuidado los símbolos y significados que
se asocian a cada uno de los senderos subjetivos, podremos obser-
var que hay más de un sendero en relación con bastantes áreas de
actuación. Las afinidades entre senderos son de suma utilidad para
la interpretación, pues los aspectos de un ámbito concreto pueden
estar expresándose a través de más de un camino, de tal modo que,
lo que en apariencia es un ámbito cerrado, en realidad se manifies-
ta por otro lado; y esto es así porque, recordemos, en cada punto
del Árbol de la Vida se encuentra su totalidad; en otras palabras,
se trata de un diagrama o mapa que, a semejanza de un holograma
creado y reproducido mediante un rayo láser, presenta la totalidad
de la figura reproducida, incluso con aspecto de relieve, y aunque
el soporte se divida en varios trozos, sigue permitiendo reprodu-
cir la totalidad en cada uno de ellos. De ahí que muy bien puede
calificarse al Árbol de la Vida (y, por supuesto, también al Árbol
personal) como holístico.
En los párrafos siguientes se agrupan, pues, los senderos en fun-
ción de su mutua afinidad. Como cada uno de los senderos tiene
varios significados, sería de esperar que todos ellos aparezcan en
más de un apartado, y eso es precisamente lo que sucede.
Senderos unitivos. Son aquellos que propician algún tipo de
unión, especialmente la amorosa, pero también la sexual y la de
cualquier otra actividad o actitud puesta en común. Son los sende-
ros 3, La Emperatriz, y 19, El Sol. El primero se refiere a la unión
en el cielo, y el segundo en la tierra; por ello, el 3 recoge la unión
entre el Padre y la Madre Cósmicos (y por extensión la realizada
entre nuestros propios padres, desde el punto de vista subjetivo),
mientras que el 19 se refiere a todas las actividades que se realizan
en común, incluido en el nivel sexual el coito. El aspecto celeste
del sendero 3 y su relación con el 19 se pone de manifiesto en la
costumbre que hay en ciertas zonas de que la novia lleve una liga
azul el día de su boda.
Senderos separativos. Senderos 8, La Justicia, y 6, Los Amantes.
El primero representa el discernimiento, que actúa a modo de un
separador del trigo y la paja, pero aprovecha ambos; también se

MANUI\L DE KABBALAH PRÁCTICA 61 3


simbolizaría con un alambique, que separa en la destilación di-
ferentes productos, aprovechándolos todos. Por su parte, el sen-
dero 6 actúa mediante la separación, selección y eliminación de lo
no aprovechable.
Senderos fortalecedores del ego. El objetivo de todo trabajo
espiritual serio no es el fortalecimiento del ego, sino su desapari-
ción, o mejor sería decir, la constatación de su inexistencia, de su
irrealidad, pues el ego, el yo, ~~N (aní), es en efecto tN (aín), nada.
Pero esa constatación, o desaparición (como se prefiera decir) no
es posible sin una unificación y consolidación del yo. Pues, ¿cómo
dejarlo cuando no hay uno, sino muchos, centenares o miles tal
vez, en constante pugna y contradicción unos con otros? En este
sentido, el maestro francés Arnaud Gesjardins (v. refs. bibliográ-
ficas) propone en su obra un conjunto de ejercicios enfocados a
alcanzar esta unificación y consolidación, desde el punto de vista
del hinduismo vedanta. Desde nuestro punto de vista, observa-
remos que los tres senderos que se manifiestan como apoyo para
esta gran tarea son el 13 (sin nombre), el 14, Templanza, y el 15,
El Diablo, encargados de apoyar al sujeto en las noches oscuras
del alma: respectivamente en lo emocional, en lo devocional y en
lo mental.
Senderos de cambio. Son el 10, Rueda de la Fortuna, y el 14,
Templanza; el primero actúa en el ámbito externo, el segundo en el
interno, pero interactúan y se potencian el uno al otro.
Senderos de quietud. Desde el punto de vista humano son el
O (22), El Loco, y el 12, El Colgado. El primero se refiere a la mo-
vilidad de los aspectos celestes, de las energías celestes, que para-
dójicamente imponen paciencia al hombre en el ámbito personal,
y por tanto quietud de espíritu. La paralización del segundo pue-
de implicar, además de al ámbito interno, al plano físico.
Senderos de lentitud. Son el inismo sendero 12, cuando la para-
lización no es total, y el 9, El Ermitaño, cuya figura del tarot es un
anciano que avanza lentamente.
Senderos de sociabilidad. Como hemos visto, el 19, El Sol, se
refiere a actividades desarrolladas en común, por lo que este as-
pecto mantiene afinidad con el 11, La Fuerza, que es el aspecto de
la sociabilidad y las relaciones con el entorno.

614 ViLLARRU Bli\ / HAUT / M ILLERA


Senderos de soledad. Son los dos opuestos polares a los anterio-
res: el 17, La Estrella, que se refiere al desarrollo individual, cuya
máxima expresión es la exploración y la aplicación del principio
de 'prueba y error', y el 9, El Ermitaño, que recoge los aspectos de
introspección y escucha del maestro interior, con el consiguiente
vaciado emocional.
Senderos de rigidez. El sentido de responsabilidad, y hasta de
ambición, del sendero 7, El Carro, viene en este caso acompañado
del disciplinario del sendero 4, El Emperador, y del de búsqueda
de lo justo y de equilibrio del sendero 8, La Justicia. La sobrecarga
en los tres puede originar una personalidad de extraordinaria ri-
gidez y ausencia de flexibilidad, tanto respecto a los demás como
hacia uno mismo
Senderos de perdón. El sentimiento de culpa del sendero 7,
El Carro, en caso de fracaso, cuando la ambición es su tónica dominan-
te, tiene contrapartida en el 13 (sin nombre), que representa sobre todo
el perdón a sí mismo, único verdaderamente válido.
Senderos de desprendimiento o desapego. En este caso son
tres los senderos que comparten esta área de actividad: el 6
(Los Amantes, la elección, y por tanto la renuncia a lo no elegido),
el 13 (sin nombre, el final de un ciclo, el olvido del pasado) y el 16
(La Torre, la ruptura violenta de una situación ya finalizada, pero
que se mantiene en pie por pura inercia). Obsérvese que, conforme
se baja en el Árbol de la Vida, el desprendimiento es más involun-
tario, y por tanto más forzado.
Senderos emocionales. Son los cinco que confluyen en la
séptima sefirá, Netzaj: el 10, Rueda de la Fortuna, la emoción
provocada por los cambios impuestos por el entorno, por la
aparición de lo nuevo; el 13, (sin nombre), la emoción que se
origina en el final de un proceso, a semejanza de una muerte ini-
ciática; el 16, La Torre, en el que viene provocada por la ruptura
violenta con las viejas inercias, y que a su vez afecta en gran
medida a la circulación sanguínea; el 17, La Estrella, que lleva la
emoción asociada al funcionamiento hormonal y a los procesos
corporales; y el 18, La Luna, que recoge los aspectos emociona-
les de la sensualidad y las relaciones no verbales, gestuales y de
contacto con el entorno.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 61 5


Senderos estimuladores. Estos senderos son, en términos gene-
rales, el 1, El Mago, en su aspecto de iniciativa y creatividad, y el 5,
El Pontífice, que actúa a través de los aspectos lúdicos, el juego y
la risa. Cuando el estímulo se refiere al desarrollo personal (desa-
rrollo del alma), interviene también el 17, La Estrella que, recorde-
mos, recoge la renovación a través del curso de la naturaleza.
Senderos mentales. Lo son el 3, La Emperatriz, reguladora so-
bre todo del pensamiento abstracto; el 4, El Emperador, que es el
encargado de dar forma y poner orden en las ideas abstractas, para
facilitar su expresión; y el 15, El Diablo, que recoge el material no
asimilado y lo conserva en el subconsciente para su posterior re-
ciclado.
La fuerza de voluntad. Se manifiesta en los senderos 1, El Mago,
y 11, La Fuerza. El primero es esencialmente indicador de la volun-
tad interna, mientras que el segundo opera sobre todo de cara al
exterior, a las relaciones sociales.
Senderos de integridad. La persona íntegra, valga decir honra-
da, sincera, desinteresada, se caracteriza por tener los senderos de
las familias de 1 (1,10 y 19), el 2 (2, 11 y 20) y el 8 (8 y 17) con carga
normal (esto es, sin sobrecargas, ocultos o cíclicos), y se refuerza
cuando vienen acompañados de cruces de maestría.
Senderos que muestran la calidad humana, la nobleza de
espíritu. Se trata de los senderos 4, El Emperador; 7, El Carro; y 8,
La Justicia, siempre que aparezcan acompañados de cruces de maes-
tría. Basta que uno de los tres senderos tenga esta característica para
que este aspecto se manifieste, aunque, lógicamente, depende del sen-
dero o senderos afectados por esta circunstancia para que el aspecto
de la nobleza de espíritu se muestre de una u otra forma. Así, si la
maestría aparece en el 4 se tratará de una tendencia a la disciplina in-
terior, que se expresará de cara al exterior en forma de búsqueda de
ordenación de los aspectos caóticos de la vida. Si la maestría aparece
en el 7, se manifestará en forma de búsqueda de objetivos elevados y
asunción de responsabilidades para su cumplimiento. Y por último, si
aparece en el 8, la nobleza de espíritu adoptará la forma de búsqueda
de justicia y equilibrio en todos los aspectos de la vida.
Senderos que muestran un alma evolucionada. También puede
llamarse a este aspecto como «descendiente de ancestros reales».

61 6 VJLLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Esta circunstancia se produce cuando aparecen cruces de maes-
tría acompañando a la vez a los senderos 2, La Sacerdotisa, y 3,
La Emperatriz.
Senderos que expresan la creatividad en el plano físico.
La mayor expresión de la creatividad en este nivel se refiere a la
sexualidad. Al referirse a actividades que se realizan, bien en so-
ledad, bien en cooperación con otros, es lógico que la creatividad
se manifieste en el sendero 19, El Sol, en lo referente al coito, y en
el 17, La Estrella, respecto a la masturbación. Ahora bien, en uno y
otro caso debe tenerse presente que este nivel no es sino el reflejo
de los planos superiores, cuya acción se manifestaría en las relacio-
nes respectivas (no senderos) entre Binah y Jokmah, por una parte,
y la sefirá oculta Daat, por otra.
Senderos relacionados con aspectos familiares. Además de los
seis senderos diagonales que confluyen en Tiferet, y que se refieren
a las relaciones con los padres (4, El Emperador, y 6, Los Amantes);
los hermanos y cónyuge (9, El Ermitaño, y 11, La Fuerza) y los hi-
jos (13, sin nombre, y 15, El Diablo), también se relacionan con la
familia el sendero 3, La Emperatriz, que simboliza todo lo relativo
al hogar, y el 18, La Luna, que se refiere al contacto físico, el cual
tiene precisamente en la familia su máxima expresión.
Senderos relacionados con las tendencias sexuales. Son los
senderos 9, El Ermitaño, y 11, La Fuerza. Una tendencia hetero-
sexual se manifestará en forma de cargas normales en ambos sen-
deros, aunque puede haber acompañamiento de cruces de doc-
torado en uno de los senderos o en ambos. Si el sujeto es varón,
las tendencias homosexuales se manifestarán en la ausencia (angé-
lico) del sendero 9, a la vez que el sendero 11 aparece con sobrecarga.
La tendencia homosexual de la mujer puede verse en un sendero 11
angélico, mientras que el 9 tiene sobrecarga. Estas tendencias ha-
cia la homosexualidad (la cual puede o no haberse desarrollado)
tienen más probabilidades de desarrollarse y acentuarse cuan-
do el sendero 18 es angélico o por el contrario tiene sobrecarga.
En cambio, si este sendero tiene carga normal, es un sendero se-
milla o va acompañado de cruces de doctorado, la tendencia del
sujeto será heterosexual. En estos casos, el aspecto masculino in-
terno tan acentuado en la mujer y el femenino interno en el hom-

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 617


/
bre se proyectarán en aficiones por roles, profesiones y prendas
de vestir que son tradicionalmente de hombres o de mujeres res-
pectivamente (por ejemplo el gusto por ropa masculina, deportes
de riesgo, el ejército, la mecánica, la ingeniería, etc. en la mujer;
y la costura, la moda, la cocina, la peluquería, el estilismo, la de-
coración, etc. en el hombre), con el objetivo de romper una lanza
en contra de los convencionalismos culturales acerca de los ro-
les de género, y defendiendo la esencia natural del ser humano,
con sus gustos y aptitudes, que están por encima de ser hombre o
ser mujer. En ambos casos de heterosexualidad, la masculinidad
en la mujer se equilibrará como pareja con hombres yin femeninos,
sensibles, cariñosos, delicados, etc., igual que la feminidad en el
hombre lo hará con mujeres yang masculinas, independientes, lu-
chadoras, activas, etc.
Senderos de sensualidad. Recogen este aspecto el 18, La Luna,
y el 6, Los Amantes. Cuando este último lleva carga especial (ex-
cepto doctorado), la amante se transforma en madre, y entonces
pierde su erotismo.
Lo visceral. Está representado por los senderos 21, El Mundo,
y 16, La Torre, que operan tanto a nivel físico como emocional e
incluso mental. Como mucha de la información queda a nivel in-
consciente, también interviene el 15, El Diablo, el encargado de re-
cogerla y guardarla hasta el momento de su puesta en consciencia.
Senderos relacionados con la nutrición. El sendero 6, Los
Amantes, por representar el cordón umbilical, también representa
la leche materna. Por su parte, el sendero 9, El Ermitaño, al unir las
esferas de Tiferet (el Yo) y Jesed (la alimentación, frente a la asimi-
lación, representada por Gevurah), representa no sólo el aspecto
material del alimento, sino también todo tipo de nutrición espiri-
tual, pues el sendero es, recordemos, la manifestación del maestro
interior.
Senderos de potencial mágico. Entendemos como potencial
mágico la capacidad para influir en el entorno por medios no físi-
cos. Estos senderos son el 1, El Mago, y el 18, La Luna.
Senderos de percepción extrasensorial. A diferencia de los an-
teriores, que pueden considerarse de carácter activo, los de per-
cepción extrasensorial son eminentemente pasivos, y se manifies-

61 8 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


tan en tres niveles: el del sendero 2, La Sacerdotisa, respecto a la
intuición y la clarividencia; el 14, Templanza, respecto al instinto
y la mediumnidad; y el 21, El Mundo, respecto a la sensitividad.
Son, pues, los tres senderos de la flecha, relacionados con la expan-
sión de la consciencia.
Los sueños y la magia. Están recogidos en los senderos 15,
El Diablo, y 18, La Luna. El primero se refiere al subconsciente y a la
necesidad de su purificación, de su limpieza, mientras que el segun-
do recoge los aspectos conscientes de los sueños: el sueño lúcido,
podría decirse, que es un poderoso aspecto de la magia lunar.
Problemas con el sueño. Los dos senderos anteriores, junto con
el 3, La Emperatriz, que es, como vimos en la sección correspon-
diente, la que rige la Gran Magia Blanca. Estos problemas pue-
den referirse tanto a insomnio como a pesadillas durante el sueño.
En ambos casos pueden estar avisando de que las energías mági-
cas están funcionando de forma incorrecta.
Senderos relativos a los celos. Como manifestación de un afán
de posesión del otro, los celos pueden considerarse como un as-
pecto en cierto modo patológico del amor. Se manifiestan a través
de los senderos 4, El Emperador; 6, Los Amantes; y 18, La Luna,
todos los cuales deberán tenerse en cuenta para estudiar este as-
pecto de la personalidad.
Senderos que se refieren a la expresión como vía de comuni-
cación. Son el 20, El Juicio, en lo relativo a la escritura en todas sus
formas, y el 18, La Luna, respecto al dibujo.
Senderos relacionados con el dinero y la riqueza. En este caso
se trata de dos polos opuestos: mientras que el 7, El Carro, muestra
las aspectos de opulencia, las joyas, el relumbrón, el 9, El Ermitaño
es el de la sencillez y la austeridad.
Senderos de escucha. Estos senderos se pueden considerar
como las vías a través de las cuales el sujeto recibe información
esencialmente de tipo oral. Cuando esta información procede del
entorno exterior es el sendero 20, El Juicio, el que opera, mientras
que lo hace el 21, El Mundo, cuando la información procede de
nuestro propio interior.
La religión. Se encuentra representada por los senderos 2,
La Sacerdotisa, y 5, El Pontífice. El primero se refiere a las expe-

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 619


riendas religiosas internas, subjetivas, mientras que el segundo
recoge los aspectos dogmáticos y rituales del hecho religioso.
Lo profético. En este caso entendemos como profecía la capaci-
dad de anticiparse en el tiempo a los acontecimientos, de predecir
de alguna manera el futuro. Los tres senderos que actúan en este
campo son el 7, El Carro, que une las esferas de Binah y Guevurah;
el 10, Rueda de la Fortuna, que anticipa y prepara emocionalmente
para la llegada del futuro; y el 3, La Emperatriz, que por su enlace
entre Jokmah y Binah (o lo que es lo mismo, Espacio y Tiempo,
o Pasado y Futuro), es en verdad la máquina del tiempo.
Senderos de expresión de lo profético. Son los tres anteriores,
y además el 21, El Mundo, este último por su conexión con la ca-
pacidad de escucha y de vivir el dolor.
Senderos de dirección y mando. El sendero 4, El Emperador,
manifiesta este aspecto de forma directa, mientras que el 6, Los
Amantes, lo hace de forma solapada. Excusado es decir que cuan-
do uno de estos senderos aparece con una carga especial (salvo
doctorado), y el mando se transforma en poder, sustituyendo el
aspecto unitivo de la dirección (el buen director agrupa a los su-
bordinados en busca del cumplimiento de una tarea común) por
el separativo del poder: el déspota mantiene separados a sus su-
bordinados, que son tratados como herramientas de su voluntad,
como cosas, y no como sujetos con los que comparte la tarea.
Senderos de elegancia. En este caso nos referimos a la ele-
gancia de tipo físico, especialmente en el vestir y en el porte cor-
poral. Para los varones, son los senderos 2, La Sacerdotisa, y 4,
El Emperador, y para las mujeres, además del 2, el 6, Los Amantes.
En efecto, en estos casos, recordemos que los senderos 2 y 4 se re-
fieren a la columna vertebral, mientras que el 6 se refiere al sistema
respiratorio y a los senos, en el caso de las mujeres. Se requiere que
los senderos afectados no tengan cargas especiales (salvo cruces
de doctorado).
La autoestima femenina. Tiene una íntima relación con el as-
pecto de elegancia, por lo que los senderos son los mismos: el 2,
La Sacerdotisa, y el 6, Los Amantes. Mientras que la elegancia
muestra el exterior, la autoestima es el interior. Puede darse el
caso de que la autoestima se presente distorsionada (baja o nula, o

620 ViLLARRUBIA / H A UT / MI LLERA


bien sobreelevada) por tener uno de estos senderos carga especial,
mientras que externamente el sujeto ofrezca una apariencia ele-
gante, e incluso atildada; cuando esto sucede, el aspecto externo
actúa como una tapadera de la baja autoestima.
La autoestima masculina. Es semejante a la anterior, pero refe-
rida, además del sendero 2, al 4, El Emperador. Valga lo dicho, por
lo demás, en el párrafo anterior.

8. 7. Significado del acento


Una antigua tradición cabalística recoge la idea de que, si bien el
hombre escribe las consonantes, es Dios quien pone las vocales.
Como es sabido, las letras hebreas son consonantes, anotándose
las vocales mediante la denominada puntuación masorética. Esta
palabra deriva de n,o~ (masoráh), tradición, una tradición que tra-
ta sobre todo de la parte material de la Torá, y contiene dos puntos
principales:

• Enseña la forma de leer los pasajes dudosos con la ayuda de los


puntos vocálicos, así como el ensamblaje y pronunciación de las
frases mediante el uso de los acentos.
• Considera las consonantes como la parte externa o material de
la Biblia, proporcionando un registro de los jeroglíficos expre-
sados mediante el estilo peculiar de la Torá (división en libros,
capítulos y versículos), pero sin explicar su significado.

Los idiomas occidentales proceden en su mayoría del tronco in-


doeuropeo, y han adoptado el alfabeto latino (el griego o el cirílico
en Europa oriental) incluso los que tienen otros orígenes, como el
euskara, el magiar, el turco o el vietnamita. Pero en cualquier caso,
siempre cuentan con letras consonantes y con letras vocales, cual-
quiera que sea el número de unas y otras en cada idioma.
Otro aspecto de los diferentes idiomas es la forma que tienen de
acentuar las palabras. Mientras que el francés, por ejemplo, acen-
túa la última sílaba, el inglés lo hace en la primera, y el castellano
acentúa de muchas formas: contiene palabras agudas, graves, es-

MAN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 621


drújulas y sobreesdrújulas. En bastantes idiomas se utilizan signos
auxiliares, tales como tildes, diéresis o puntos. En lo que respecta
al castellano, el acento tónico, según la estructura de la palabra,
o bien está indicado mediante una tilde, o bien no lleva ninguna
indicación, aunque hay reglas precisas sobre la acentuación.
Según nuestra experiencia, desde el punto de vista cabalísti-
co el acento de las palabras que forman el nombre y apellidos
del sujeto proporciona una valiosa información suplementaria.
En efecto, si seguimos la tradición apuntada más arriba para el
idioma hebreo, y la trasponemos al nuestro, observaremos que el
acento proporciona unos números que, con arreglo a los criterios
de reducción al 22 seguidos para los diferentes bloques, señalan de
alguna forma la influencia en el sujet0 de las fuerzas «celestiales».
Las indicaciones que pueden hacerse al respecto son las siguientes:

• El sendero o senderos que llevan el acento, si son angélicos o


«jardines de infancia», no se considerarán a efectos de calcular
los promedios y magnitudes del Árbol.
• Si el acento aparece en un sendero «de trabajo» (es decir, cual-
quiera cuyos números procedan de alguno de los bloques 1 a 13,
lleven o no cruces de doctorado), se considerará como una tarea
en la que las fuerzas celestes están actuando directamente.
• Si el acento aparece en un sendero «angélico» (esto es, en blan-
co), consideraremos que las tareas a realizar pueden ser muy
perfectas o muy imperfectas (no parece haber término medio),
según que el sujeto las realice con entrega, o por el contrario
como una penosa obligación; esto último suele ser lo habitual al
principio, hasta que se comprende este aspecto de entrega.
• Si el acento aparece en un sendero semilla, puede considerarse
como una especial invitación del Cielo al sujeto para poner en
marcha su proceso de despertar; recordemos en este caso que
el trabajo con este tipo de senderos empieza siempre por los de
número más bajo (considerando en este caso al 22 como O).

Junto al acento, existe la posibilidad de desarrollar el «Árbol


vocálico», el cual, por su relación con el tikún y su complemento,
se estudia en la V Parte de la obra.

622 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


9. FLUJOS PRINCIPALES Y SECUNDARIOS DE ENERGÍA
/

EN EL ARBOL PERSONAL

C asi siempre, los Árboles personales tienen alguno de sus sen-


deros sin líneas («angélicos») o con «jardines de infancia».
En estos casos el sujeto siente esas áreas como vacías, como inexis-
tentes, y así es desde el punto de vista subjetivo. Como consecuen-
cia, pueden formarse flujos de energía que, partiendo de Keter,
tienen (o parecen tener) predisposición a fluir por unos senderos
o grupos de senderos frente a otros, hasta terminar en Maljut.
Se trata de unas configuraciones que no siempre son perceptibles,
y que a veces no existen, pero que cuando están nos muestran unas
preferencias del sujeto frente a otras, unas formas de pensar, sentir
y decidir frente a otras.
Las pautas a seguir para detectar estas corrientes de energía son
las siguientes:

• La energía siempre fluye de arriba a abajo, con independencia


de la dirección de los senderos. Este flujo puede producirse en
sentido vertical, diagonal u horizontal, pero no hacia arriba.
Si para llegar a una esfera es necesario un flujo ascendente, en-
tonces nos encontramos ante alguna de las configuraciones «in-
cómodas» o «especiales».
• La vertical tiene preferencia sobre la diagonal, y ésta sobre la
horizontal.
• El camino más corto tiene preferencia sobre el más largo, el más
directo sobre el que da más rodeos.
• Los senderos con sobrecargas tienen preferencia sobre los sen-
deros con carga normal.
• En igualdad de carga, tienen preferencia los senderos de maes-
tría, es decir, los «doctorados».

Sobre la base de estos criterios pueden descubrirse corrientes


principales y secundarias, así como caminos que parecen no llevar
a ninguna parte. El sentido de cada uno de estos tipos de circuitos
es fácil de determinar en función de los senderos y las esferas que

MAN UAL DF. KABBALA!i PRÁCTICA 623


recorren. En ocasiones, todos los circuitos principales y secunda-
rios de una determinada parte del Árbol confluyen en una determi-
nada sefirá intermedia, la cual actúa como un filtro que «colorea»
la energía de la parte superior antes de que continúe su descenso.
En estos verdaderos cuellos de botella pueden entonces producir-
se atascos, condensaciones energéticas que, de no fluir, acabarán
por llevar al sujeto a la enfermedad. Así, un cuello de botella en
Tiferet (lo que implica que los senderos 10 y 12 son «angélicos»)
producirá un carácter fuertemente centralizador y controlador,
y la falta de fluidez puede llegar a originar problemas de sobrecar-
ga cardiaca. Si el cuello de botella se produjese en Netzaj, toda la
expresión estaría fuertemente teñida de emotividad, y si fuese en
Hod, de rasgos mentales y utilitarios:
Las figuras 49 y 50 muestran ejemplos de estos flujos de energía.
En esta última, los senderos 6 y 7 se pueden considerar «tercia-
rios», puesto que forman con Binah una configuración especial de
ídolo, lo mismo que los senderos 14 y 17, unidos a Yesod en una
configuración de represión.
Una observación atenta de ambos Árboles permite constatar que
en cada uno de ellos están ausentes sólo dos familias de números:
las del 2 y del 4 en la figura 49, y las del 1 y el 3 en la figura 50.
Ambos diagramas corresponden a casos reales.

62 4 V !LLARRU BIA / H AUT / M ILLERA


ecb \ 0
®

:
2

\~
\

Figura 49 Figura 50

Ejemplos esquemáticos de Árboles persona/es, con indicación de flujos de energía prin-


cipales o primarios, en líneas gruesas; secundarios en líneas finas continuas; y terciarias,
en líneas de trazos. Estos últimos aparecen sólo en el Árbol de la figura 50, al estar siempre
asociados a configuraciones especiales o incómodas. En efecto, en este último aparecen un
ídolo en Binah, lo que provoca flujos terciarios en los senderos 6 y 71 y una represión en
Yesod, con los consiguientes terciarios en los senderos 14 y 17. Por otra parte, el Árbol de la
figura 49 es esencialmente yin o pasivo, al canalizarse preferentemente los flujos primarios
a través del Pilar de la Severidad, mientras que el de la figura 50 es preferentemente yang
o activo, si bien la expresión fina/-se canaliza indistintamente en ambos aspectos (senderos
18 y 20). A destacar también en este último el cuello de botella en Tiferet.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 625


1Ü. BLOQUEOS Y TENSIONES EN LOS PUNTOS DE CRUCE

L lamamos puntos de cruce a aquellos en !os que algunos sende-


ros se cruzan con otros en lugares del Arbol de la Vida en los
que no hay ninguna sefirá. Estos puntos, por razones meramente
didácticas, han sido numerados del 1 al 5, de arriba a abajo y de
derecha a izquierda:

Punto de cruce 1. Senderos 2 y 3.


Punto de cruce 2. Senderos 4 y 8.
Punto de cruce 3. Senderos 2 y 8.
Punto de cruce 4. Senderos 6 y 8. ·
Punto de cruce 5. Senderos 14 y 16.

En cada uno de estos puntos se produce una transferencia mutua


de energías entre los senderos implicados, destinada a amplificar,
completar y desarrollar los contenidos de ambos senderos, como
si necesariamente evolucionaran uno a la luz del otro y viceversa,
manteniendo a la vez su propia subjetividad. Son puntos críticos.
Por lo tanto, son otro aspecto importante a considerar.
Si el cruce es armónico, esta transferencia se realiza de manera
fácil y fluida. Si es inarmónico por bloqueos, la transferencia se
realiza de manera más dificultosa, o no se llega a producir.
Los puntos de cruce manifiestan bloqueos a nivel subjetivo
cuando uno de los senderos tiene dos o más líneas que el otro.
Lo «más» bloquea a lo «menos». En este caso, los senderos semilla
o «jardines de infancia» no cuentan, ya que están como «dormi-
dos», en hibernación, y los doctorados, o senderos de maestría,
equilibran la situación, ya que la madurez y sutilidad existente
en un sendero con doctorado puede ayudar a resolver el bloqueo
existente en el mismo sendero o en el otro con el que se cruza con
mayor precisión y exactitud.
Si el sendero bloqueado está vacío, la información cósmica que-
da bloqueada, sepultada y escondida.
Los cruces Oxü y lxl son armónicos, los cruces lxü y 2xl son neu-
tros, y los cruces 2x2 generan tensiones, aunque no llegan a producir

626 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


bloqueos. Las tensiones del cruce son tanto más fuertes cuantas más
líneas tengan ambos senderos, pero no se produce bloqueo mientras
que la diferencia de lmeas entre ambos sea de Oo l.
Las cinco configuraciones posibles de cruces, cuando generan
bloqueos, obligan a que la experiencia de un sendero se realice
desde el marco vivencia! del otro implicado, en vez de aislada-
mente. Son las siguientes:

Punto de cruce 1: sendero 2 (La Sacerdotisa) con sendero 3 (La


Emperatriz). Conflicto entre la lógica superior (síntesis) y la in-
tuición superior (unión con el Absoluto). Letra hebrea asociada:
caffinal (i). Significados: Bendito,,,,~ (baruj); lo tuyo (pronombre
personal afijo que se indica con esta letra al final de la palabra).
La intuición del Absoluto y el amor impersonal (sendero 2) se
subordinan a la inteligencia abstracta, a la capacidad de síntesis, a la
comprensión de los principios masculino y femenino a nivel cósmi-
co, y a poder creador y consciente que permite comprender la magia
sagrada. O bien es la intuición superior la que bloquea a la inteli-
gencia abstracta, haciendo que el sujeto se viva y se sienta aparte de
toda racionalidad (lo que suele denominarse «cuelgue»).
Un bloqueo en este área muestra una fisura interior entre in-
tuición y lógica, relacionando las causas con el tiempo, pero de
forma un tanto rudimentaria y, podría decirse, hercúlea, es decir,
haciendo un gran esfuerzo interno por constatar que ambas evo-
lucionan.
Si el sendero 2 es más fuerte que el 3. Exceso de autoconfianza
y de creer en sí mismo, que bloquea la mente abstracta: la necesi-
dad de creer en sí mismo perturba la capacidad de síntesis. Lo que
se siente se expresa tal y como viene, sin detenerse a «desmenu-
zar» la información, a sopesarla y a analizarla, antes de cuidar de
no hacer daño en la expresión. El problema es que llega demasia-
da luz y no se ve otra cosa, por lo que no se le puede dar forma.
Se trata de personas que defienden sus ideas «a capa y espada».
El punto de bloqueo nos dice que se debe profundizar más y tratar
de revestir con lógica y con sensatez las intuiciones antes de po-
ner en marcha sus efectos mediante la expresión. Esta situación de
bloqueo plantea en efecto el reto, ciertamente difícil, de buscar la

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 62 7


visión racional mediante un gran trabajo de depuración rigurosa
de los contenidos suministrados por el Cielo.
Si el sendero 3 es más fuerte que el 2. Hay una tendencia casi in-
salvable a pensar continuamente, tratando de desmenuzar todas las
ideas, todos los conceptos, y a la vez la gran capacidad de smtesis que
proporciona el sendero 3 impulsa a verlo todo como conjunto, buscan-
do abarcar cada vez más. Como consecuencia, se bloquea el maestro
interno, impidiendo el acceso a la sabiduría, con incapacidad para ver
desde la intuición. El sujeto puede padecer frecuentes dolores de ca-
beza, viviendo bloqueado en el pasado. Al ser de la misma familia
que el 3 el sendero 12, es frecuente que en éste último haya muchas
lmeas, lo que amplifica el enganche al pasado. Este bloqueo pide silen-
cio interior para escucharnos, para lo que puede ser de gran ayuda el
tercer sendero de la familia el 21, lo que implica «bajar a tierra», tomar
contacto con la realidad inmediata. El que tiene fuerte el sendero 3
respecto al 2 deberá esforzarse en acallar su mente. Las técnicas de
meditación pueden ser necesarias en este sentido.
La letra hebrea asociada a este punto de cruce indica la sacrali-
dad del otro, que sólo es posible percibir desde el equilibrio entre
los senderos afectados.

Punto de cruce 2: Sendero 4 (El Emperador) con sendero 8


(La Justicia). Conflicto entre autoridad y equidad. Letra hebrea
asociada: mem final (O). Significados: los Cielos, o~~w (shamayím);
el día, o,~ (iom).
Si el sendero 8 es más fuerte que el 4. La autoridad, el orden y
la disciplina, en su aspecto interno, así como la necesidad de ter-
minar lo que se empieza, la relación con el padre y la asunción in-
terna de responsabilidades (frente a la asunción externa, propicia-
da por el sendero 7), se vuelven dependientes de la capacidad de
medir, de discernir y de juzgar, y de saber seleccionar entre lo que
debe conservarse y lo que debe desecharse. Entonces la tendencia
es a racionalizar y a someter a juicio crítico cada disposición, por lo
que las tareas tenderán a eternizarse sin ser acabadas, y el espacio
y el tiempo disponibles serán cada vez bienes más escasos, propi-
ciando una decidida marcha hacia el caos y el desorden internos.
Se trata en este caso de personas fácilmente manipulables, pues su

628 VrLLARRUBIA / HAUT / MrLLERA


punto débil es la escala de valores que aplica en cada caso. Temerá
ser injusto, y en casos extremos preferirá sufrir un daño antes que
causarlo, «dejarse matar antes que matar».
Si el sendero 4 es más fuerte que el 8. En este caso, la autori-
dad, generalmente la paterna, se ha interiorizado, por lo que la
vida se transforma en la ordenada sucursal de un cuartel prusiano.
Un exceso de autoridad (mejor sería decir de autoritarismo) anu-
la a la justicia, al equilibrio. Existe exceso de disciplina interior y
un gran perfeccionismo. Por otra parte, hay problemas de relación
con el padre o con las personas que en cada momento representen
el poder. En realidad, la situación arranca de una niñez en la que
las relaciones con el progenitor se basaban en el principio del «sí,
bwana», y en el que, al alcanzarse la edad adulta, se copia el mode-
lo ocupando el lugar del padre autoritario. Esta configuración tiene
dos aspectos, que pueden considerarse como negativo y positivo.
El primero es el exceso de autoritarismo, la rigidez, mientras que
el segundo puede ser de utilidad en determinadas actividades ya
que hace de quien posee esta configuración un gran perfeccionista;
pero, como en todo exceso, el de perfeccionismo puede llegar a
bloquear la actividad, que nunca termina de considerarse perfec-
tamente concluida.
Los bloqueos en este punto de cruce son mecanismos que pro-
porcionan la necesaria mansedumbre para aceptar la parte áspera
y dura del conflicto, obligando a remover los lodos para compren-
der las causas profundas que subyacen bajo ellos. Las palabras
asociadas a la letra hebrea invitan a considerar los fines superiores
(el Cielo), que no son ni la razón, ni la disciplina, sólo herramientas
al fin y al cabo para dichos fines; y a vivir en el momento presen-
te, lo que no es posible en cuanto una u otra, razón o disciplina,
se desequilibren entre sí.

Punto de cruce 3: sendero 2 (La Sacerdotisa) con sendero 8 (La


Justicia). Conflicto entre espiritualidad y sentido común. Letra
hebrea asociada: nun final (j). Significado: ¡i4,v ('Elión), el Alto, un
nombre de Dios (ref. salmo 91 : 1).
Si el sendero 2 es más fuerte que el 8. Este punto de bloqueo
se encuentra en el centro del sendero de la Justicia, y al ser ésta

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 629


diferente para cada uno, puede situarse, desde una -perspectiva
subjetivista, en un nivel diferente para cada individuo; se trata,
por tanto, de un punto en cierto modo móvil, lo que indica la nece-
sidad del aprendizaje en el arte de ser justo. Si la energía que llega
a través del sendero 2 se entendió ya en el punto de cruce 1 con
los aspectos mentales abstractos del sendero 3, al llegar al punto
de cruce con la Justicia, impone la necesidad de darle una forma
determinada para poder expresarla. En este caso, el bloqueo en
el punto de cruce 3 representa la eterna duda, la incapacidad (o
al menos la gran dificultad) para discernir. El exceso de autosufi-
ciencia, el alto concepto que se tiene de sí mismo y de las propias
opiniones y creencias, anula la capacidad para juzgar, pudiendo
llegarse con gran facilidad a adoptat actitudes injustas y dañinas
para los demás, en los que no se percibe el dolor que se les puede
causar. La historia está llena de ejemplos de fanáticos que ponen
su verdad personal por encima incluso de la vida de quienes les
rodean. Los casos en los que el sendero 2 es el fuerte muestran a
personas generalmente iluminadas, bien por un ideal (patriótico,
político, religioso, deportivo, económico ... ) o bien por un «gurú)).
Y entonces, no importa la razón, porque la patria/ el partido/ la
religión/ el equipo de fútbol/ el jefe/ el gurú/ ... siempre tienen ra-
zón, aunque no la tengan.
Si el sendero 8 es más fuerte que el 2. En sentido inverso, un
sendero 8 fuerte frente al 2 nos hablará de una racionalidad chata,
sin lugar para el mundo del espíritu. En este sentido, un chiste sin
palabras de Quino, el genial dibujante argentino autor del perso-
naje de Mafalda, mostraba la imagen de una city por la que presu-
rosos ejecutivos iban de un lado para otro llevando gruesos porta-
folios. Una señal de tráfico advertía de una prohibición: se trataba
de una señal circular, en cuyo centro un corazón aparecía tachado
por una gruesa banda roja. En este caso, la intuición de Absoluto
y la expresión del amor impersonal quedan, pues, subordinados
a un equilibrio y un discernimiento cuyo objetivo es proporcionar
una profunda comprensión de los sistemas de medida universales,
al trascender el concepto de lo justo desde lo terrenal a lo cósmico.
El sujeto está en constante lucha contra la justicia exterior, man-
teniendo esta postura hasta que se da cuenta de que existe una

630 YILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


justicia superior, y es ésta la que debe actuar. Se trata de personas
que anhelan la justicia por encima de todo: «Si el de arriba no pone
justicia, no pone las cosas en su sitio, aquí estoy yo para deshacer
el entuerto». Este bloqueo indica que debe vivirse tal como se sien-
ta la justicia, y como ésta es oscilante, dependiendo de lo que se
viva, habrá una justicia u otra. Por eso, se tiene la sensación de que
la ley (que, a diferencia de la justicia personal, no es oscilante. sino
fija) arrebata cosas que el sujeto siente que le pertenecen.
El bloqueo en este punto produce en cualquier caso fatiga, de-
bido a una gran agitación mental, y su propósito es alcanzar la
humildad, como madura expresión de la inteligencia. La palabra
asociada a la letra hebrea, el nombre divino que significa Alto o
Altísimo, indica la necesidad de contar en todo caso con los as-
pectos superiores, a la vez de iluminación y de justicia (justeza,
actitud de búsqueda de lo justo, de lo exacto), para equilibrar este
punto de cruce. Y para ello se hace necesaria una constante lim-
pieza (eliminación de basura, podría decirse) tanto en una como en
otra, como lo prueba el valor numérico de ¡,~V, 'Elión, 166, que es
también el de la palabra ~i¡,~ (niku(), purificación.

Punto de cruce 4: sendero 6 (Los Amantes) con sendero 8


(La Justicia). Conflicto entre libertad y sensatez. Letra hebrea aso-
ciada: pe final(=,). Significado: =,,e (sof), límite, frontera.
Si el sendero 6 es más fuerte que el 8. La capacidad de elec-
ción bloquea el sentido de justicia. Como consecuencia, las op-
ciones elegidas hacen caso omiso de la posibilidad de hacer daño
a terceros. No hay, pues, ningún problema para decidir: las con-
secuencias que esa elección pueda tener no son problema para
el sujeto, aunque lo sean para su entorno. El bloqueo indica la
necesidad de atender a la justicia, a la coherencia de la situación,
antes de decidir. En este caso, habrá tendencia a decisiones insen-
satas, poco «razonables», a veces alocadas o perjudiciales para
él o para los demás, aunque desde el punto de vista del sujeto
se trata de algo vital. Es el caso de personas que, ocupando una
buena posición social, un día la tiran por la borda y se retiran a
un lugar pequeño viviendo con poco más que lo imprescindible,
y a veces ni con eso.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 631


Si el sendero 8 es más fuerte que el 6. El sentido de justicia
bloquea la capacidad de elección, y por tanto de decisión. No se
ve claro qué camino se debe tomar y a cuál se debe por tanto re-
nunciar: es la eterna duda, la continua indecisión. Al estar en el
Sendero 6 de los apegos emocionales (unión con la madre, en cier-
to modo el «cordón umbilical»), este bloqueo le pide al sujeto vi-
vir con desapego. En realidad, la dificultad para decidir esconde
el temor a equivocarse. Si el sujeto no resuelve esta duda, lo más
probable es que la vida lo haga por él, presentándole, por ejemplo,
personas manipuladoras que decidirán por él. En este caso, la bús-
queda de discernimiento y racionalidad dominarán sobre la capa-
cidad de elección y de renuncia, de selección y de libre albedrío,
así como sobre la comprensión del rol de madre y del arquetipo
femenino. Y entonces, la racionalidad estará disfrazando una cons-
tante indecisión, o una serie de indecisiones que hacen de la vida
algo semejante a un río que en su curso medio recorriese muchos
meandros.
El trabajo a realizar por el sujeto pasa por la comprensión de los
valores universales de justicia y los sistemas cósmicos de medida.
Un bloqueo en este punto hace inevitable un cambio de mentali-
dad para resolver los errores de elección, salir del impasse de las
continuas indecisiones y evitar repetir una y otra vez los mismos
episodios que causan dolor y frustración. La palabra hebrea aso-
ciada invita a reconocer los límites de cada situación, lo que está
en perfecta concordancia, tanto con la idea de renuncia, como con
la idea de mesura y equidad.

Punto de cruce 5: sendero 14 (Templanza) con sendero 16 (La


Torre). Conflicto entre aprendizaje y adaptación. Letra hebrea
asociada: tsade final (f). Significados: la Tierra yiN (aretz), y su des-
trucción en los últimos días, y¡, (ketz).
Si el sendero 14 es más fuerte que el 16. Se trata de una perso-
na muy adaptable, muy acomodaticia a los cambios, camaleónica,
tanto, que cuando se presenta una crisis tiene gran facilidad para
huir de ella, impidiéndose así el aprendizaje que toda crisis propi-
cia. Abandonan todo dolor y sufrimiento tan pronto se presentan,
lo que les impide el desarrollo espiritual. Pero este punto de blo-

632 ViLLARRUBIA / HAUT / MILLERA


queo está en realidad diciendo: «no huyas, quédate en la crisis y en
el dolor, ya que a través de ellos aprenderás lecciones muy impor-
tantes». Un ejemplo muy claro es el de los estudiantes que estu-
dian simplemente para aprobar los exámenes, importándoles bien
poco la materia de la que se examinan. Un sendero 14 dominante
mostrará, pues, al sujeto que busca adaptarse a todas las situacio-
nes, «aprobar como sea», incluso con malas artes. Se aceptarán y
comprenderán los fallos del otro, siempre que contribuyan a facili-
tar al sujeto sus objetivos.
Si el sendero 16 es más fuerte que el 14. Las personas con esta
configuración tienden a mantenerse en sus depresiones, sin am-
biciones u objetivos que les movilicen. De alguna forma, vienen
a este mundo engañadas, viéndose sorprendidas por la existencia
del dolor tanto físico como psíquico. En estos casos, la capacidad
de despertar a través de las crisis será tan fuerte que el sujeto po-
dría volverse algo así como un «atractor de crisis», un buscador de
situaciones conflictivas, a las que necesita para seguir sintiéndose
vivo. En realidad, estas personas sienten una imperiosa necesidad
de liberarse del peso de la autoridad (mejor sería decir del poder),
de las ataduras del pasado y de las defensas inconscientes, cono-
ciéndolas, aceptándolas y finalmente disolviéndolas. El bloqueo
impulsa a no quedarse en la depresión a levantar la vista, a buscar
la alegría y la felicidad. La historia de Gautama Buda nos muestra
cómo, tras el primer impacto, es posible aprender y, a través de
este aprendizaje, llegar a ser un gran maestro espiritual. Supone
realmente el preludio de un cambio de estado, de una especie de
salto cuántico similar al que un día dieron las primeras plantas que
sacaron sus raíces de la tierra y desarrollaron mecanismos de lo-
comoción.
Un bloqueo en este punto obliga a resolver un conflicto entre
adaptación y aprendizaje, forzando durante largo tiempo a te-
ner siempre dispuesta en el interior la fragua en la que deben ser
transmutados todos los miedos y rencores, los lastres viejos, para
hacer de uno mismo un santuario. Las palabras hebreas asociadas
nos muestran dos cosas importantes. En primer lugar, sirven para
recordarnos que si estamos aquí, en la Tierra, es porque hemos
firmado voluntariamente un contrato para venir y realizar nuestra

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 633


misión. Y en segundo lugar, que ese contrato siempre es temporal,
y que un día se acabará, por lo que tenemos un tiempo limitado
para llevarlo a cabo.

Figura 51
Colocaxión de las cinco letras finales en los cinco puntos de cruce
del Árbol de la Vida.

634 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


11 . SEFIROT FUERTES Y DÉBILES

P odemos contemplar el Árbol como un sistema cerrado que


tiende a expandirse sin perder su coherencia. Este aspecto que-
dó apuntado en los significados de las Tríadas que se estudiaron
en la II Parte. Ahora debemos examinar la carga de cada esfera y
observar el conjunto.
Unas esferas, sin duda, tendrán una carga relativa superior a 1
(numerador superior al denominador), y otras puede que sean in-
feriores a 1 (caso inverso); alguna puede incluso que tenga una
carga igual a l. Recordemos que hemos buscado el signo oculto
en el Árbol (III, 12), y tal vez lo hayamos encontrado, o tal vez no;
si apareciese, echaremos mano de todo lo que tengamos a nuestro
alcance para interpretarlo: ¿evoca la forma de una letra hebrea?
Buscaremos su significado, porque indicará una pauta de funcio-
namiento general en el sujeto. ¿O acaso presenta la forma de un
signo de interrogación? ¿Evoca las posiciones de alguna constela-
ción celeste conocida, tal vez la W de Casiopea? ¿O más bien nos
recuerda a una runa vikinga? Todo es válido, siempre que guarde
coherencia con el resto del Árbol. .. aunque esa coherencia perma-
nezca en ocasiones muy escondida.
Ahora se trata de ver el conjunto del Árbol en función de sus
puntos fuertes y débiles. Tal vez nos encontremos con una esfera
Tiferet más débil que las sefirot que la rodean, aun teniendo una
carga igual o superior a l. ¿No nos está indicando acaso que la
coraza que está protegiendo al yo es fuerte, a modo del caparazón
de un crustáceo? En este caso, el sujeto estará defendiéndose de
un entorno que considera hostil, pero, si alguien logra penetrar
esa dura barrera, entonces le abrirá toda su intimidad. Por el con-
ti::ario, si Tiferet es muy fuerte, mientras que las sefirot periféricas
son más débiles, tendremos a una persona muy celosa de su inti-
midad, que estará constantemente «marcando su territorio» para
dejar bien claro quién manda en él.
Se puede afirmar que existe una relación clara entre el mundo
objetivo de las sefirot y el mundo subjetivo de los senderos: Los
bloqueos y los senderos que se muestren más definidos y reforza-

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 635


dos se relacionan con las sefirot fuertes y los senderos menos defi-
nidos y vacíos, con las débiles.
Las sefirot fuertes tienen un marcado papel activo dentro de la
dinámica del Árbol. Se es consciente del aspecto del mundo objeti-
vo concreto que representan, y definen una trama concreta impor-
tante en la manifestación del mundo objetivo en un Programa de
Vida. Consideramos sefirot fuertes a aquellas cuya carga es igual o
superior a la media, X, más la desviación media, d.
Las sefirot deviles, al contrario, tienen un papel pasivo-receptivo
dentro de la dinámica del Árbol. No se es consciente del aspecto
del mundo objetivo que representan, y por ello se viven más bien
como una carencia hasta que se aprende a valorar su potencial y se
comprende tanto su finalidad como su funcionamiento. Igual que
las fuertes, definen una trama concreta importante en la manifes-
tación del mundo objetivo en un Programa de Vida. Consideramos
débiles a las sefirot cuya carga es igual o inferior a la media, X,
menos la desviación media, d.
Las sefirot en equilibrio, es decir, las que están dentro del ran-
go, no marcan rasgos predominantes, pero los aspectos del
Árbol que representan se manifiestan de forma activa moderada.
Consideramos que están dentro del rango a las sefirot cuya carga
es inferior a la hallada para las sefirot fuertes, según se indica en
los dos párrafos anteriores, y superior a la hallada para las sefirot
débiles. Más adelante se desarrollan los aspectos relativos a la des-
viación media, d.
En algunos Árboles existen sefirot con carga 1, pero por deba-
jo del rango. Esto indicaría una receptividad-pasiva moderada,
es decir, con un mayor potencial de comprensión, desarrollo y
consciencia de tales aspectos del Árbol que en los casos de las sefi-
rot receptivas con un valor menor a la unidad.
En el campo de las relaciones, las sefirot fuertes-activas y las débi-
les-receptivas determinan en conjunto las cualidades que valoramos
en los demás para establecer relaciones armónicas, sobre todo en el
plano afectivo. Este punto puede ser de gran utilidad para analizar
la compatibilidad e interacción de Árboles de dos personas en todo
tipo de relaciones además de las afectivas, estudiando con profundi-
dad y de manera comparativa dos Programas de Vida.

636 ViLLARRUBIA / H AUT / Mil.LERA


Reconocemos con mayor facilidad las características correspon-
dientes a las sefirot polares a la hora de establecer nuestras prefe-
rencias en las relaciones, dado que las del pilar central se yuxtapo-
nen, y las vamos descubriendo a medida que avanzamos en una
relación, aunque todas las sefirot en conjunto nos definen, y defi-
nen asimismo nuestras necesidades. Pero son las características de
las sefirot polares las que con más evidencia determinan la pauta
de lo que nos atrae y de lo que no. Por ello se incluye una informa-
ción adicional en estas sefirot en el análisis que seguidamente se
hace de cada una de ellas.
No hay que olvidar el hecho de que cada Árbol personal tiene
un potencial en perfecta sintonía con El Que Se Es, cada Árbol es
un diseño en exclusiva, perfecto y sagrado. Cada uno de nosotros
tiene un Árbol con todos los elementos adecuados y necesarios
para crecer y poder desempeñar perfectamente su tikún, indepen-
dientemente de su nivel de incomodidad. Y la interacción con otros
Árboles o Programas de Vida diferentes nos enriquece.
El propósito de las sefirot fuertes-activas es guiar para vencer
obstáculos, y de las débiles-receptivas es dejarse guiar desde el
interior, desarrollar el instinto subconsciente para llevar la recepti-
vidad a la perfección, ya que cada modalidad conlleva cualidades
excepcionales propias, y cada uno de nosotros está provisto de lo
adecuado para desarrollar hasta su máximo potencial. Ambas mo-
dalidades reflejan dos aspectos perfectos de una misma realidad,
dentro de todas las posibilidades existentes para la expresión de
los contenidos de una sefirá.
La información que revela este punto completa la visión de
conjunto de un Árbol, y ayuda a definir el delicado entramado
de cada Programa de Vida y su propósito. Veamos estos aspectos
individualmente en cada sefirá:

KETER
Fuerte: Se es consciente de la necesidad de tener sueños e idea-
les y de la necesidad de búsqueda de lo Absoluto, o de lo subli-
me, aunque no se sepa cómo encontrarlo, o ·cómo hacer realidad
un sueño. Elevado misticismo. En algunos casos, si Maljut es dé-
bil, tendencia a buscar quimeras, rechazando el mundo material.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 63 7


Si Maljut es fuerte, le ayudará a valorar el mundo material, y ese
tirón en direcciones opuestas, puede reflejarse en una elevada es-
tatura física.
Devil: Dificultad para dar forma concreta a un ideal o a un sue-
ño, y de definir lo Absoluto. Receptividad del inconsciente colec-
tivo, que a veces se confunde con aspectos más personales. Caos
interno y dudas existenciales. Compasión.

. JOKMAH
Fuerte: Persona con mucha energía, y muy independiente.
Necesidad de libertad. Capacidad para mirar al pasado con la fi-
nalidad de comprenderlo e integrarlo desde el futuro. Capacidad
innovadora. Inteligencia abstracta. Persona no convencional, entu-
siasta, progresista y liberal, con necesidad de cambios constantes.
Capacidad de reacción hacia lo inesperado. Necesidad de expresar-
se en colectividad. Mente científica. Tendencia a la excentricidad.
Si hay un bloqueo en el sendero 4, un padre autoritario le forzará a
salir de un régimen restrictivo impuesto para poder expresar su ne-
cesidad de independencia, libertad y liberalidad. Pero hasta que lo
consiga mientras madura su necesidad de libertad e independen-
cia, puede mostrar cierta pereza mental, y una tendencia a actuar
de manera estereotipada, y en los lugares donde se sienta seguro.
Con Jokmah fuerte, se sentirá atracción hacia personas activas e
independientes, originales, innovadoras, liberales, abiertas a todo
lo nuevo.
Devil: Receptividad con respecto a la energía. Persona con di-
ficultad para percibir su necesidad de independencia. Dado que
este aspecto se vive como una carencia, quien lo tiene se percibe
a sí mismo como una persona que depende más de lo que quisie-
ra de los demás. Reserva ante lo novedoso o vanguardista, ante
las ventajas de las nuevas tecnologías. Capacidad para vincular
lo científico a los planos sutiles, entre las ciencias oficiales y las
otras ciencias no ortodoxas. Un Jokmah devil necesitará de per-
sonas mucho más sensitivas y tranquilas, más asentadas y menos
revolucionarias. Es probable que se tenga cerca (tal vez el padre, y
si hay ídolo) hombres mayores que muestren el perfil ideal en este
aspecto, para ayudar a madurar lo que se necesita. ·

638 VILLARRUBIA / HAUT / MIi.LERA


BINAH
Fuerte: Persona que busca su verdadero sentido del deber, según
su Programa de Vida. Se verá obligada a realizarlo, cuestionando los
deberes convencionales, con todo lo que ello conlleva. Capacidad
de saltar al futuro, una vez que se ha resuelto e integrado el pasado.
Capacidad de comprender el propósito de los lúnites y de las formas
concretas. Carácter fuerte. Capacidad de comprensión. Temperamento
paciente y prudente. Sentimiento excesivo del deber y la responsabi-
lidad. Tendencia a la austeridad. Inteligencia científica, matemática y
abstracta. Gusto por la exactitud. Perseverancia. Tenacidad. Tendencia
conservadora. Tendencia al pesimismo, al excesivo materialismo.
Tendencia a la frialdad y al distanciamiento. Si existe un bloqueo en
el sendero 6, tal vez una madre dominante y protectora obligue a to-
mar decisiones diferentes a las que ella pueda proponer, o le interesen,
asumiendo así deberes y responsabilidades por uno mismo y hacia
uno mismo, para lograr la emancipación. Si Binah es fuerte, se sentirá
atracción hacia personas con carácter fuerte, conservadoras, pragmáti-
cas, capaces de asumir deberes y responsabilidades. En algunos casos,
y en algunos hombres, se puede manifestar cierto recelo ante las muje-
res por temor a ser poseído y dominado.
De'bil: Dificultad para dar forma y percibir los límites de su ver-
dadero sentido del deber, sin dejar de ser responsable. Se cues-
tionan los deberes convencionales, y se buscan parámetros y ele-
mentos más justos, y más acordes con uno mismo. Capacidad de
liberarse de deberes convencionales. Diplomacia y prudencia.
Dificultad para concretar y percibir los límites. Sabiduría y com-
prensión. Si Binah es de'bil, se necesitará de personas mucho más
sensitivas, flexibles, comprensivas y receptivas que sepan asumir
responsabilidades y deberes en función de lo que son. Igualmente,
como en el caso anterior, es probable que se tenga cerca (tal vez
la madre, y si hay ídolo) mujeres mayores que muestren el perfil,
para forzar a la persona a madurar lo que necesita.

JESED
Fuerte: Búsqueda de metas elevadas a largo plazo. Necesidad
de mirar el mundo con una visión amplia. Búsqueda de la expansi-
vidad y la magnanimidad. Búsqueda del placer de la buena mesa.

MAN UAL DE K A BBA LA H PRÁCTICA 639


Tendencia a ponderar o exagerar. Gran capacidad de amar a nivel
transpersonal, que puede llegar al sentimentalismo si la carga es
muy alta. Gusto por la filantropía, la tradición, la moral, la filoso-
fía y la religión. Capacidad para convencer con argumentos im-
personales. Gusto por dirigir, ordenar y lograr orden. Liberalidad.
Tendencia a ser dogmático, y a expresarse con brusquedad y aspe-
reza, como un exceso de esa capacidad de amar. Según aspectos,
tendencia al derroche, a la glotonería, a la autoindulgencia, a la
extravagancia, a la vida fácil, y a no cumplir las leyes que rigen
para los demás. Un Jesed fuerte se sentirá atraído por personas
generosas, magnánimas, optimistas, divertidas, con metas claras a
largo plazo, que les guste la buena mesa, la buena vida, la filosofía
y la filantropía, los viajes y la aventura.
De'bil: Dificultad para percibir con claridad las metas a largo pla-
zo. Cambios en las metas. Capacidad de razonamiento con buen cri-
terio, inseguridad. Expansividad moderada. Benevolencia y genero-
sidad. Magnanimidad. Homadez. Se mezcla la mente y el corazón.
Optimismo. Honorabilidad, respeto y lealtad. Un sujeto con Jesed
de'bil sentirá rechazo hacia las personas de la misma generación que
se perciban como fantasmas prepotentes, temerarias, o superficiales,
dogmáticas o autoindulgentes, exageradas, y se sentirá atracción
por personas más sensibles, de mente amplia, benevolentes, gene-
rosas, nobles, homadas, responsables, menos idealistas, asentadas
que aporten estabilidad. Tendencia a mostrar como defensa cierto
distanciamiento con las personas por temor a involucrarse demasia-
do, que puede parecer frialdad o pasividad afectiva.

GUEVURAH
Fuerte: Búsqueda de causas nobles por las que luchar y comba-
tir. Capacidad para actuar con seguridad y valor. Rigor. Iniciativa,
fuerza, disciplina, austeridad, intensidad, destreza, dominio.
Severidad. Combatividad. Arrojo. Competitividad. Heroísmo.
Voluntad, audacia. Franqueza. Afectos ardientes, entusiasmo y
fogosidad en deseo de poseer. Mente dinámica, audaz y pene-
trante, apta para planear con estrategia. Según otros aspectos,
falta de indulgencia hacia los demás. Tendencia a no respetar los
derechos del otro. Irritabilidad e intolerancia. Actitud violenta.

640 ViLLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Temeridad y precipitación al actuar. Bravuconería. Grosería. Celos.
Comportamiento pendenciero o destructivo. Un Gevurahfuerte se
sentirá atraído por personas luchadoras, combativas, fuertes, se-
guras de sus actos, entusiastas, audaces y valerosas.
Débil: Dificultad de percibir cómo actuar, temor a equivocarse,
tendencia a no involucrarse en luchas de ningún tipo, ni sociales
ni personales. Tendencia a culparse cuando algo no sale como uno
desea, aunque no salga mal del todo. Tendencia a exigirse dema-
siado. Dificultad para actuar de forma competitiva. Actividad mo-
derada. Tendencia a la falta de entusiasmo y a la pereza. A veces
falta iniciativa. Franqueza. En casos extremos, apoyado por otros
rasgos en el árbol personal, una excesiva debilidad puede trans-
formarse en crueldad y pueden aparecer actitudes dictatoriales.
Este rasgo aparece en el Árbol de algunos dictadores y tiranos, que
presenta con mucha frecuencia una esfera de Guevurah muy débil.
Si Guevurah es devil se tenderá al rechazo de las personas muy
combativas, o con demasiada actividad, o bravuconas, pendencie-
ras y temerarias, y se sentirá atracción por personas no competi-
tivas, capaces de aceptar sus errores, que se exijan lo adecuado,
francas y galantes, que trabajen su valía personal, y depuren su
ética, capaces de actuar de forma noble, altruista y desinteresada.

TIFERET
Fuerte: Necesidad de manifestar el Yo, la individualidad.
Autoridad. Capacidad de organizar y dirigir de manera cons-
tructiva y de brillar con luz propia. Nobleza. Instinto paternal,
más emocional que mental. Generosidad. Gusto por la armonía
y la belleza. Inteligencia sintética y brillante. Inteligencia ejecu-
tiva y ambiciosa. Facultad para dar consejos. Vitalidad y fuerza.
Capacidad para sanar. Según aspectos, tendencia al dramatismo,
egocentrismo, despotismo y orgullo desmedido, a centralizado y
controlarlo todo, con dificultad para delegar. Excesivo celo de pre-
servar la intimidad y el territorio.
Devil: Dificultad para percibir y manifestar el Yo, la propia in-
dividualidad. Dificultad para brillar y para afirmarse. Capacidad
de aconsejar. Nobleza. Generosidad. Pereza, falta de ambición.
Capacidad para organizar y delegar con otros aspectos, tendencia

MANUAL DE KABl3ALAli PRÁCTICA 641


a proyectarse y vivirse a través de los demás. Excesiva apertura de
su intimidad.

NETZAJ
Fuerte: Necesidad de expresar emociones y afectos en las re-
laciones en general, y de disfrutar de los placeres de las relacio-
nes armónicas. Se quiere con energía e intensidad. Imaginación.
Emotividad y sexualidad elevadas. Sensualidad. Amabilidad.
Simpatía. Según otros aspectos, tendencia a la lujuria y a los ce-
los, a la vanidad, a la frivolidad o a la vulgaridad. Un sujeto con
Netzaj fuerte sentirá atracción por personas amables y simpáticas,
con facilidad para expresar emociones, sensuales, que amen con
intensidad.
Devil: Dificultad para expresar emociones y afectos en el área
personal. Receptividad e imaginación. Inseguridad en las relacio-
nes. Sensibilidad a los sentimientos ajenos y a las energías ambien-
tales. Amabilidad, afecto, caridad, finura, sutilidad. Indolencia.
Tendencia a mostrar cierta frialdad afectiva y emocional como de-
fensa inconsciente de su vulnerabilidad e inseguridad emocional.
Si el sujeto tiene la carga en N etzaj devil, al ser más vulnerable,
sentirá atracción por personas más sensibles, cariñosas, sutiles,
tiernas, con emociones menos intensas y más profundas.

HOD
Fuerte: Necesidad de expresar ideas. Mente ordenada, lógi-
ca y analítica. Agudeza intelectual. Inteligencia para lo concre-
to. Buena memoria. Persona observadora, práctica y racional.
Capacidad para todo lo relacionado con el comercio y el dine-
ro. Necesidad de aprender, apertura a nuevas ideas. Inquietud,
vivacidad. Diplomacia. Capacidad de comunicar. Elocuencia.
Simpatía. Tendencia al nerviosismo. Según otros aspectos, desho-
nestidad. Tendencia a mentir. Una carga fuerte en Hod hará que el
sujeto sienta atracción hacia personas ingeniosas, de mente rápida,
lógica, racional y analítica, comunicativas y sociables, que expre-
sen sus ideas con facilidad, que sean prácticas e intelectuales.
Devil: Receptividad mental. Sutilidad y finura. Emotividad,
sentimentalismo. Prudencia. Simpatía. Búsqueda de ideas pro-

642 VILLARRUl.l!A / HAUT / MILLERA


pías. Dificultad para expresar o concretar ideas. Adaptabilidad.
Capacidad para mediar. Dificultad en ordenar las propias ideas.
Inseguridad en la comunicación. Persona vulnerable e influencia-
ble por su inseguridad mental. Sentido poco práctico, tendencia a
no saber valorar o administrar los propios recursos, bienes o po-
sesiones. Si Hod es de'bil, el sujeto sentirá atracción por personas
más receptivas, de ideas flexibles, más intuitivas y sensibles, emo-
tivas, abiertas, sutiles y con gracia y finura.

YESOD
Fuerte: Capacidad para percibir y expresar el propio Ego.
Autoestima. Capacidad de superar temores, de expresar deseos,
y de autoafirmarse. Necesidad de conocer o percibir el inconscien-
te, y facilidad para hacerlo con cierta confianza. Persona instintiva,
versátil e intuitiva, plástica, creativa e imaginativa. Instinto para
proteger. Capacidad para procrear. Según otros aspectos, tenden-
cia al egoísmo. Persona caprichosa.
Débil: Dificultad para expresar el propio Ego. Autoestima vul-
nerable. Recelo, desconfianza y temor para relacionarse con el
inconsciente. Receptividad muy acusada. Miedo a lo descono-
cido. Dificultad de concentración. Necesidad de ser protegido.
Necesidad de echar raíces. Modestia. Generosidad. Inconstancia.
Pereza. Dificultad para percibir deseos con nitidez y disolver mie-
dos, que tiende a obstaculizar la capacidad creativa y de procrear.

MALJUT
Fuerte: Necesidad de asentarse y vivir en el mundo real. Búsqueda de
estabilidad material. Necesidad de posesiones materiales. Capacidad
para vivir con los pies en el suelo, de adoptar posturas realistas ante la
vida. Según balance energético, capacidad de dar, a través de la ense-
ñanza como vocación, como terapeuta, etc., todas aquellas actividades
que se relacionen con el servicio a la humanidad.
De'bil: Capacidad para percibir los mundos sutiles en el mun-
do real. Capacidad de comprender el aspecto relativo de lo mate-
rial. Desapego hacia lo material. Tendencia a vivir en las nubes.
Idealismo. Tendencia a reciclar o limpiar las energías negativas
del entorno.

MANUAL D[ KABBALAH PRÁCTICA 643


,,
12. EQUILIBRIOS Y DESEQUILIBRIOS DEL ARBOL

l levantar el Árbol siguiendo los procedimientos expuestos en


A la III Parte, encontramos unas cargas determinadas en cada una
de las diez sefirot. Estas cargas, como vimos, son la consecuencia
del número de senderos que confluyen en cada una de las esferas.
De ellas podemos obtener informaciones sumamente útiles. Dado
que las sefirot pueden agruparse de diversas formas, podemos tam-
bién examinar qué equilibrios o desequilibrios están presentes des-
de diferentes puntos de vista. Examinaremos cuatro: la carga media
comparativa por pilares, el balance energético de elementos, las re-
laciones polares de las cinco dimensiones del Árbol, y los equilibrios
y desequilibrios de los senderos subjetivos entre sí.

12. 1. Carga media comparativa por pilares


Obtuvimos esta primerc1_información cuando comparábamos la
carga media de cada uno de los tres pilares, y esto nos proporciona
ciertas conclusiones acerca de su equilibrio o desequilibrios, y sus
tipos, en relación con dichos pilares. Y así:

• Mayor carga en el Pilar de la Misericordia que en el de la


Severidad. Persona dada a tomar iniciativas, a la actividad,
energética, expansiva, yang.
• Mayor carga en el Pilar de la Severidad que en el de la
Misericordia. Persona pasiva, propensa a actuar reactivamente,
en función de los estímulos procedentes de su entorno, reflexi-
va, mental, restrictiva, yin.
• El Pilar del Equilibrio tiene mayor carga que cada uno de los la-
terales. Tendencia a ejercer control sobre las situaciones, aunque
j puede ser simultánea a un predominio yang o yin.
• El Pilar del Equilibrio tiene menor carga que cada uno de los
dos laterales. El sujeto se ve arrastrado hacia uno u otro lado, se-
gún sea la carga de los laterales; no hay control ni de la energía
ni de la forma.

644 ViLLARRU BIA / HAUT / MILI.ERA


• La carga del Pilar del Equilibrio es mayor que la de uno de los
laterales y menor que la del otro. El sujeto se ve dominado por
la carga del pilar más fuerte, y a la vez domina al más débil;
por tanto, el Pilar central actúa como un intermediario desde la
carga mayor a la menor.
En realidad, este principio quedó ya expuesto en la II Parte: siem-
pre que hay una diferencia de potencial entre dos polos, el relati-
vamente más vado atrae la energía del relativamente más lleno.
El principio se aplica a cualquier nivel o situación del Árbol.

12.2. Balance energético de elementos


Recordemos que esta información se obtenía, como la anterior, de
las cargas relativas de las sefirot, y quedó recogida en la III Parte,
según la plantilla propuesta en la figura 38. En este caso, compa-
ramos las diferencias entre el potencial y la expresión del Fuego
(que representa esencialmente el Espíritu y la Energía, sobre todo
la energía vital); el Agua (la Individualidad, el alma, el mundo de
los sentimientos y de la mente abstracta, el nivel anímico); el Aire
(la Personalidad, la mente concreta y la comunicación); y la Tierra
(el Cuerpo, el plano físico y las relaciones del sujeto con si mismo).
Lo más interesante de este análisis es el significado de las diferen-
cias que se producen entre potencial y expresión. Según quedó di-
cho, los tres primeros elementos deben quedar compensados entre
sí, con un saldo máximo entre diferencias positivas y negativas
de 0,02, que deben considerarse la consecuencia de los redondeos
de decimales que hayamos podido hacer. Siempre considerare-
mos como minuendo de la resta a la expresión de cada elemento,
y como sustraendo al potencial, de tal forma que si el primero es
mayor que el segundo la diferencia será positiva, y negativa en
caso contrario. El elemento Tierra no está relacionado con los res-
tantes de forma directa, aunque sí indirectamente, por lo que la di-
ferencia puede ser positiva o negativa con independencia de cuál
sea el saldo de los otros tres elementos.
Los casos que pueden darse en cuanto a los tres primeros ele-
mentos son doce:

MAN UA L D F. KABBALAH PRÁCTICA 645


• Trasvase de Fuego a Agua y a Aire (Fuego negativo igual a
suma de Agua y Aire positivos). Una parte de la energía poten-
cial del nivel espiritual es desviada a los niveles anímico y men-
tal. El centro receptor de este movimiento, que es de naturaleza
descendente, se reparte entre las Tríadas del Temple de Ánimo,
la Memoria y la Ética, en proporción a las magnitudes o valores
positivos de cada uno de los elementos receptores: cuanto más
reciba el elemento Aire, menos recibirán las Tríadas superiores
Memoria y Ética, y viceversa.
• Trasvase de Fuego y Agua a Aire (Suma de Fuego y Agua negati-
vos igual a Aire positivo). Una parte de la energía potencial de los
niveles espiritual y anímico es d.esviada al nivel mental. El centro
receptor de este movimiento, de naturaleza también descenden-
te, se focaliza en torno a la Tríada del Temple de Ánimo.
• Trasvase de Fuego y Aire a Agua (Suma de Fuego y Aire nega-
tivos igual a Agua positivo). Una parte de la energía potencial
de los niveles espiritual y mental es desviada al nivel anímico.
El centro receptor de este movimiento, que es de naturaleza
centrípeta (hacia el centro del Árbol), se focaliza en las Tríadas
de la Memoria y el Ética
• Trasvase de Agua a Fuego y Aire (Agua negativo igual a suma
de Fuego y Aire positivos). Una parte de la energía potencial
del nivel anímico es desviada a los niveles espiritual y mental.
Los centros receptores de este movimiento, de naturaleza con-
traria a la anterior (centrífuga por tanto, hacia la periferia del
Árbol) son las Tríadas de la Fe y del Temple de Ánimo, en pro-
porción a las magnitudes o valores positivos de cada uno de los
elementos receptores.
• Trasvase de Agua y Aire a Fuego (Suma de Agua y Aire nega-
tivos igual a Fuego positivo). Una parte de la energía potencial
de los niveles anímico y mental es desviada al nivel espiritual.
El centro receptor de este movimiento, de naturaleza ascenden-
te, es la Tríada de la Fe.
• Trasvase de Aire a Agua y Fuego (Aire negativo igual suma
de Agua y Fuego positivos). Una parte de la energía potencial
del nivel mental es desviada a los niveles espiritual y mental.
Los centros receptores de este movimiento, de naturaleza as-

646 ViU. ARRUBIA / HAUT / MILLERA


cendente, son las Tríadas de la Memoria, la Ética y la Fe, en pro-
porción a las magnitudes o valores positivos de cada uno de los
elementos receptores.
• Trasvase de Fuego exclusivamente a Agua (Fuego negativo
igual a Agua positivo, Aire igual a cero). Una parte de la ener-
gía potencial del nivel espiritual es desviada al nivel anímico,
sin que haya intervención del nivel mental. El centro receptor
de este movimiento, de naturaleza descendente, es la Tríada de
la Ética.
• Trasvase de Fuego exclusivamente a Aire (Fuego negativo igual
a Aire positivo, Agua igual a cero). Una parte de la energía poten-
cial del nivel espiritual es desviada al nivel mental, sin que haya
intervención del nivel anímico. El centro receptor de este movi-
miento, de naturaleza descendente, es la Tríada del Temple de
Ánimo.
• Trasvase de Agua exclusivamente a Fuego (Agua negativo igual
a Fuego positivo, Aire igual a cero). Una parte de la energía po-
tencial del nivel anímico es desviada al nivel espiritual, sin que
haya intervención del nivel mental. El centro receptor de este
movimiento, de naturaleza ascendente, es la Tríada de la Fe.
• Trasvase de Agua exclusivamente a Aire (Agua negativo igual
a Aire positivo, Fuego igual a cero). Una parte de la energía po-
tencial del nivel anímico es desviada al nivel mental, sin que
haya intervención del nivel espiritual. El centro receptor de
este movimiento, de naturaleza descendente, es la Tríada del
Temple de Ánimo.
• Trasvase de Aire exclusivamente a Fuego (Aire negativo igual
a Fuego positivo, Agua igual a cero). Una parte de la energía po-
tencial del nivel mental es desviada al nivel espiritual, sin que
haya intervención del nivel anímico. El centro receptor de este
movimiento, de n aturaleza ascendente, es la Tríada de la Fe.
• Trasvase de Aire exclusivamente a Agua (Aire negativo igual
a Agua positivo, Fuego igual a cero). Una parte de la energía
potencial del nivel mental es desviada al nivel anímico, sin que
haya intervención del nivel espiritual. Los centros receptores de
este movimiento, de naturaleza ascendente, son las Tríadas de
la Memoria y de la Ética.

MANUAL DE KABBALA H PRÁCTI CA 647


En cuanto al elemento Tierra, si el saldo es positivo significará
que el nativo da o expresa más de su potencial, por lo que la di-
ferencia deberá tomarla del entorno, y ello puede hacerse de dos
formas, no necesariamente excluyentes entre sí:

• En sentido vertical, tomando energía del Cielo y de la Tierra


mediante actividades tendentes a buscar una elevación del ni-
vel de consciencia, tales como el yoga en cualquiera de sus mo-
dalidades, la oración de contemplación, la meditación, el con-
tacto con la Naturaleza, el deporte en sentido no competitivo,
la danza, la expresión plástica, etc.
• En sentido horizontal, tomándola del entorno, con lo que, en
los casos de un alto valor positivo de la diferencia en Tierra
puede llegar a originar vampirismo psíquico y energético,
con la consiguiente pérdida de fuerzas de las personas del entor-
no, que, casi siempre sin sospechar nada, se sienten sin energías
y con necesidad de dormir a horas intempestivas. En nuestra
experiencia hemos encontrado a personas de este tipo que, aun-
que hubiésemos dormido un sueño reparador, nos provocaban
sueño y falta de fuerzas tan pronto estábamos a su lado, aunque
fuesen las primeras horas del día. Otra consecuencia de la toma
de energías «en horizontal» es que, si estas personas frecuen-
tan ambientes poco «limpios», desde discotecas o bares de co-
pas hasta sedes bancarias, hospitales, e incluso ciertos templos
(afortunadamente no todos), empezarán en seguida a absorber
negatividad del entorno, encontrándose en pocos minutos fran-
camente mal.

Lo recomendable para las personas cuya diferencia en el ele-


mento Tierra sea positiva es que, en la medida en que les sea po-
sible, practiquen la «toma de energía» en sentido vertical, y que
cuando la deban hacer en sentido horizontal, procuren mantener
la consciencia de que están contribuyendo a limpiar el ambiente.
Cuando la diferencia de Tierra es negativa, se trata de personas
que expresan menos de su potencial, por lo que tienen un sobrante
energético que deberán repartir en el entorno, so pena de conges-
tión. Será, pues, necesario que realicen actividades de servicio, sea

648 VIL LARRUB IA / H AUT / MIi.LERA


en la enseñanza, en ayuda humanitaria, en cooperación activa con
ONG' s, etc. De no hacerlo, la enfermedad no tardará en hacer su
aparición en forma de problemas circulatorios, trombosis, etc.

72.3. Los cinco ejes polares del Árbol


según el Sefer Yetzirah
Respecto a las propias sefirot hay que examinar también las di-
ferencias de potencial que puedan aparecer entre los polos de las
cinco dimensiones del Árbol, al como las define el Sefer Yetzirah
(v. II Parte, 3.1.11 y figs. 13 y 52). En todo caso, si el sendero que
une dos de estos polos, salvo en el caso de la dimensión espacial
arriba-abajo, Keter-Maljut, tiene carga especial, habrá entre ambos
tensiones o bloqueos. Para dicha dimensión habrá que comparar
las cargas relativas de ambas esferas.

• Eje temporal: Principio (Jokmah) - Fin (Binah). Un predomi-


nio en la carga de Jokmah sobre Binah producirá una tendencia
a «colorear» con aspectos antiguos, del pasado, a toda la acti-
vidad presente; en los casos en que esta diferencia de potencial
sea elevada, sería semejante a conducir un automóvil miran-
do casi constantemente el espejo retrovisor, con lo que puede
perderse la perspectiva de la carretera que se abre ante el con-
ductor. Si, por el contrario, es Binah quien predomina sobre
Jokmah, el efecto es el inverso: tendencia a cargar de «futuris-
mo» cualquier contenido que provenga del pasado, por lo que
en estos casos habrá un constante intento de innovar, venga o
no a cuento. La igualdad de cargas entre ambas esferas puede
indicar tanto equilibrio como estancamiento, dependiendo ello
de la configuración general del Árbol. Por otra parte, estas es-
feras representan también al espacio (Jokmah) frente al tiempo
(Binah), especialmente en sentido de cómo son vividos por el
sujeto: predominio de uno u otro aspecto, según proceda. Y lo
mismo cabe decir respecto a los aspectos energía-forma o pa-
dre-madre, los cuales, como sabemos, están asociados a este par
de sefirot. En este sentido, nos remitimos a la II Parte, en la que

MANUAL DE i<ABBALAH PRÁCTICA 649


estos aspectos se desarrollan más en detalle. El sendero que las
une, el 3 (La Emperatriz) tiene, como consecuencia, gran impor-
tancia a la hora de determinar la naturaleza de las relaciones
entre ambos polos.
• Eje espacial arriba (Keter) - abajo (Maljut). Este par de sefirot
representan respectivamente el Cielo y la Tierra. La diferencia
de potencial indicará una tendencia a atraer las fuerzas celestes
sobre la tierra (predominio de Keter) o bien a elevar el nivel de
conciencia de la tierra (predominio de Maljut). La igualdad de
cargas puede significar estancamiento si las cargas son peque-
ñas (menos de 1 en ambas esferas), o lucha entre ambas fuerzas.
Cuando esta lucha es muy fuerte, sobre todo si Tiferet y Yesod
son más débiles, el sujeto se siente "tironeado en ambas direccio-
nes, lo que muchas veces se traduce en estatura elevada, incluso
tendencia al gigantismo. Al no haber comunicación directa en-
tre ambas esferas, sus relaciones se desarrollan a todo lo largo y
lo ancho del Árbol, por lo que deberá prestarse particular aten-
ción a las configuraciones especiales y flujos de energía.
• Eje espacial este (Tiferet) - oeste (Yesod). En este caso, las dife-
rencias de potencial se mueven en el ámbito de las relaciones en-
tre la Individualidad o Mente, por una parte, y la Personalidad
o Nivel Astrat por otra. Al ser dos esferas contiguas, es el sen-
dero 14 el que las une, por lo que sus características deberán
tenerse en cuenta al estudiar estas relaciones polares. Como en
casos anteriores, el predominio de carga en una de las dos esfe-
ras impulsa su energía, por decirlo así, hacia la otra, pudiendo
llegar a «invadir su territorio» si la diferencia es muy grande.
En los casos de igualdad de cargas, y según la configuración del
Árbol, puede tratarse de estancamiento o de equilibrio.
• Eje espacial norte (Hod) - sur (Netzaj). Las posibles diferencias
de potencial se refieren a la polaridad mente concreta/ emocio-
nes, y su igualdad de cargas manifiesta casi siempre un estan-
camiento de la energía, lo que muchas veces se traduce a nivel
físico en trastornos circulatorios. En este caso debe prestarse
particular atención al sendero 16, que une ambas esferas.
• Eje ético bien o expansión (Jesed) - mal o restricción
(Guevurah). Una carga demasiado alta en Jesed respecto

650 VILLARR U BIA / HAUT / MILLERA


LAS CINCO DIMENSIONES DEL ÁRBOL DE LA VIDA
1«, . PRINCIPIO -:PASADO- IOKMAH/FIN • FPTURO -"Bli'jAH
E uilibrio BINAH • OKMAW . INAH débil • Ol<MAH fuerte

Predomina el futuro. Se tiende a Equilibrio entre ambas.


o.---
Predomina el pasado. Se tiende a
mirar hacia el futuro para resolver Estancamiento cuando hay mirar al pasado para intentar
el pasado. Sensación de tiempo. bloqueos, o las cargas relatí10s comprender el futuro. Sensación de
Responsabilidad. La tradición. de ambas son débiles. espacio. Rebeldía. Lo nue\O. Fuert
Fuerte sentido del deber. Se sentido de independencia. Nue1,0s
trabaja con la forma. tecnologías. Se trabaja la energía.
,? , •2° · BIEN·- EXl'ANSION~ ESEO/MAt • RESTRICCI N · GUEVURAH
GUEVURAH fuede - ESEO débil

Predominio del rigpr sobre la mise-


E uilibrio GUEVURAH • JESED

o.,___.
.GLJEVURAH Mbit -

Predominio de la misericordia
Equilibrio, o estancamiento sobre el rigor. Indulgencia. Malas
ricordia. Exceso de actividad. cuando hay bloqueos o ambas digestiones, tendencia al sobre-
Delgadez extrema. Violencia, rigor. esreras tienen cargas relati1,0s peso. Retención de líquidos. Sen-
Falta de comprensión hacia las débiles siblería. Autorít arísmo y crueldad
debilidades propias y ajenas
si Jesed es muy fuerte y Guevurah
muy débil, reforzado con Dictador
3° ·NORTE. HOD -ASPECTOS MENJALES/SUR · NETZAJ ; ASPECTOS EMOCIONALES ·
HOD fuerte· NETZA c!ébil E. uilibrio HOD- NETZA HOD débil -NETZA

-.....o
Predominio de los aspectos
0 4 ~o o...,__
Equilibrio o estancamiento Predº_minio de los aspectos
mentales sobre los emocionales según ni..eles de cargas relati1,0s emocionales sobre los mentales

4• -'ESTE--TIFJ:RET - INDIVIDUALIDAD/OESTf · YESOD · PERSONALIDAD


YESOD fuerte - TIFERETdébil E uilibrioYESOD. TiFERET YESO() ¡lébil. TIFERET fuerte.
Predominio del ego y de

ot la personalidad sobre la
indiwalidad. En casos O
Equilibrio o estanca-
miento, según ni\8les
de cargas relati1,0s.
Predominio de la
indi'Ádualidad y de lo
transpersonal sobre el ego

o
de gran direrencia de Puede llegarse a la o la personalidad. Si la

Ó
cargas, superficialidad,
indecisión constante en direrencia de cargas es
"esclaws de la moda'
caso de cargas muy grande, presunción
débiles o bien falta de autoestima

s• ·ARRIBA· KETHER • EL CIEto/ABA O - MALJUT. • l,A TIERRA


MAL UT fuerte ,: l):ETHER débil 'E uilibrio KETHER • MALJUT MALJ!JT débil • KETHER fuerte
La conciencia tiende a
Estancamiento si las
Ot ele1,0rse. Predominio o
atracción de fuerzas O cargas son débiles.
Tensión si son fuertes.
Atracción de fuerzas
o energías celestes.
Idealismo, no poner

6
terrestres. Materialismo.
Tendencia a estatura los pies en el suelo
Dificultad para conectar
con los ni\8les sutiles
Ó elevada si Tiferef y
Yesod son débiles.

Figura 52
Esquema de los equilibrios y desequilibrios en los cinco ejes polares
del Árbol personal

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTI CA 651


a Guevurah puede provocar, desde tendencia a la gula y su
consecuencia, el sobrepeso, hasta la acumulación de líquidos
con dificultades de eliminación, malas digestiones y, en los
casos más extremos, tendencia a desarrollar tumores, inclu-
so Cancerosos; en los aspectos psíquicos, tendencia a la sensi-
blería o falta de rigor, pudiendo llegarse incluso en los casos
extremos a la crueldad, sobre todo si va asociada a una con-
figuración especial de dictador. Por el contrario, una excesiva
diferencia de potencial a favor de Gevurah llevará a un exceso
de actividad (incluso hiperactividad), y posibilidad de delga-
dez extrema, violencia y rigor y dureza, falta de comprensión
hacia las debilidades propias y ajenas.

La figura 52 recoge un resumen de los equilibrios y desequili-


brios resultantes de la interacción a través de los cinco ejes polares
del Árbol personal. Esta figura puede utilizarse como ayuda para
recordar sus puntos esenciales.

72.4. Relaciones polares de los senderos


subjetivos entre sí
Este aspecto quedó apuntado en la II Parte, sección 3.7, a la que
nos remitimos. A efectos prácticos, deben tenerse en cuenta algu-
nos criterios para estudiar este tipo de equilibrios:

• Se compara tanto el número de líneas de los senderos como su


tipo: nativo, social, cíclico, con doctorado y sendero «semilla».
• Se considera una diferencia de potencial sin problema cuando
hay una diferencia máxima de una línea entre uno y otro sen-
dero, y ninguno de ellos tiene más de dos líneas. Es decir, las
comparaciones 0-0, 0-1, 1-1, 1-2 y 2-2. Los senderos «semilla»
(líneas formadas por pequeños triángulos) se consideran siem-
pre problemáticos, al menos hasta que empiecen a «activarse»,
a despertar.
• Si no hay diferencia entre senderos, o la diferencia entre ambos
es sólo de una línea, pero uno de los dos, o los dos, tienen tres o

652 VILLARRUBIA / HAUT / MI LLERA


más, manifiestan un conflicto en forma de tensiones, tanto más
fuertes cuanto más líneas haya en los senderos.
• Diferencias entre senderos de dos o más líneas significan blo-
queos, del de más líneas sobre el de menos.
• Las líneas cíclicas pueden originar, según el número de fijas que
las acompañen, vacíos (crisis) o sobrecargas temporales (anti-
crisis), que se deberán tener en cuenta conforme a las normas
anteriores.

Con independencia y como complemento de todo lo anterior,


las tablas XXXI y XXXII son un resumen de todas las polarida-
des que aparecen en el Árbol personal, referidas, respectivamente,
a los senderos subjetivos y las sefirot.

M ANUAL DE KABB/\1.i\H PRÁCTICA 653


Tabla XXXI
1- Polaridades de los senderos subjetivos
Sen- Sefirá o_campo Tríada en que se
dero en oposición produce Aspectos·manifestados

O (22) Campo Cielo Energía Raíces - Mística Energía del Ayin Sof (yang)
O (22) Binah Raíces Forma - Tiempo
O (22) Tiferet Mística Individualidad
1 Campo Cielo Forma Raíces - Ascética Forma del Ayin Sof (yin)
1 Jokmah Raíces Energía - Espac io
1 Tiferet Ascética Individualidad
2 Jokmah Mística Energía - Espacio
2 Binah Ascética Forma - Tiemoo
3 Keter Raíces Primera manifestación
3 Tiferet Fe lndivirl, •alirl~rl
4 Keter Mística Primera manifestación
4 Binah Fe Forma - Tiempo
4 lesed Innovación Misericordia - Exoansión
5 Cº. Energía Transpersonal Innovación Energía transpersonal
5 Tiferet Innovación Indiv idualidad
6 l<eter Ascética Primera manifestación
6 Guevurah Fe Rigor - Restricción
7 Cº. Forma Transpersonal Conservación Forma transpersonal
7 Tiferet Conservación Individualidad
8 Daat, la sefirá oculta Ética Conocimiento
8 Tiferet Ética Individualidad
9 Jokmah Innovación Energía - Espacio
9 Guevurah Ética Rigor - Restricción
9 Netzai Deseos Emociones
10 Campo Energía Personal Deseos Energía personal
10 Tiferet Deseos Individualidad
11 Binah Conservación Tiempo - Forma
11 Jesed Ética Misericordia - Expansión
11 Hod Miedos Aspectos mentales concretos
12 Campo Forma Personal Miedos Forma - Personal
12 Tiferet Miedos Individualidad
13 Jesed Deseos Misericordia - Expansión
13 Hod Memoria Aspectos mentales concretos
13 Yesod Impulso Construcción formas oor los deseos
14 Netzaj Impulso Emociones
14 Hod Intuición Asnectos mentales concretos
15 Guevurah Miedos Rigor - Restricción
15 Netzaj Memoria Emociones
15 Yesod Intuición Construcción formas por los deseos
16 Tiferet Memoria Individualidad
16 Yesod Temple de Ánimo Construcción formas por los deseos
16 Maliut Inserción en Mundo Densidad - Plano físico
17 Tiferet Impulso Individualidad
17 Hod Temple de Ánimo Aspectos mentales concretos
17 M aliut Inic iativa Densidad - Plano físico

654 VILLARRU BIA / H AUT / MILLERA


Tabla XXXI
2- Polaridades de los senderos subjetivos
Sen- Sefirá o campo Tríada en que se
dero · en oposición - produce Aspectos manifestados

18 Campo Tierra Energético Energía de la Tierra


18 Hod Inic iativa Aspectos mentales concretos
18 Yesod Inserción Mundo Construcción de formas por los deseos
19 Tiferet Intuición Individualidad
19 Netzaj Temple de Ánimo Emociones
19 Maljut Lógica Densidad - Plano físico
20 Campo Tierra Forma Lógica Aspectos formales de la Tierra
20 Netzaj Inserción Mundo Aspectos emocionales
20 Yesod Lógica Construcción de formas por los deseos
21 Netzaj Iniciativa Emociones
21 Hod Lógica Aspectos mentales concretos

Tabla XXXII
1- Polaridades de las sefirot
Sen- Sefirá o campo Tríada en que se
dero en oposición produce Aspectos manifestados

Keter Campo Cielo Energético Raíces Ayin Sof, aspecto energético (yang)
Keter Campo Cielo Formal Raíces Ayin Sof, aspecto formal (yin)
Keter 3 - La Emperatriz Raíces Síntesis
Keter 4 - El Emperador Mística Orden interior - Disciplina
Keter 6 - Los Amantes Ascética Libertad - Renuncia

Jokmah Campo Cielo Energético Raíces Ayin Sof, aspecto energético (yang)
Jokmah Cº. Energía Transpersonal Innovación Aspectos energéticos transpersonales
Jokmah 1 - El Mago Raíces Creatividad - 1n iciativa
Jokmah 2 - La Sacerdotisa Mística Intuición superior
Jokmah 6 - Los Amantes Fe Libertad - Renuncia
Jokmah 9 -El Ermitaño Innovación Prudencia - Soledad - Austeridad

Binah Campo Cielo Formal Raíces Ayin Sof, aspecto formal (yin)
Binah Cº. Forma Transpersonal Conservación Aspectos formales transpersonales
Binah O (22) - El Loco Raíces Paciencia - Entrega
Binah 2 - La Sacerdotisa Ascética Intuición superior
Binah 4 - El Emperador Fe Orden interior - Disciplina
Binah 11 - La Fuerza Conservación Autodominio - Sociabilidad

Jesed Cº. Energía Transpersonal Innovación Aspectos energéticos transpersonales


Jesed Campo Energía Personal Deseos Aspectos energéticos personales
Jesed 4 - El Emperador Innovación Orden interior - Disciplina
Jesed 11 - La Fuerza Ética Autodominio - Sociabilidad
Jesed 13 Deseos Olvido - Perdón

MANUAL DE KALlllAI.AH PRÁCTI CA 655


Tabla XXXII
2- Polaridades de las sefirot
Sefirá o ~a~po Tríada en que se
Sendero Aspectos manifestados
en opos1c1on produce

Guevurah Cº. Forma Transpersonal Conservación Aspectos formales transpersonales


Guevurah Campo Forma Personal Miedos Aspectos formales personales
Guevurah 6 - Los Amantes Conservación Libertad - Renuncia
Guevurah 9 - El Ennitai'io Ética Prudencia - Soledad - Austeridad
Guevurah 15 - El Diablo Miedos Recuerdo - Acceso al subconsciente
O (22) - El Loco
Tiferet Mística Paciencia - Entrega
1 - El Mago
Tiferet Ascética Creatividad - Iniciativa
3 - La Emperatriz
Tiferet Fe Síntesis
5 - El Papa
Tiferet Innovación Aspectos lúdicos - Tender puentes
7 - El Carro
Tiferet Conservación Responsabilidad -Ambición
8 - La Justicia
Tiferet Ética Discernimiento
1 O - La Rueda de la
Tiferet Deseos Aceptación del futuro
Fortuna
Tiferet Miedos Aceptación del pasado
12 - El Colgado
Tiferet Memoria Aprendizaje - Instinto
16 - La Torre
Tiferet Impulso Renovación - Trabajo en soledad
1 7 - La Estrella
Tiferet Intuición Conciliación - Trabajo en equipo
1q-Fl<;ol
Campo Energía
Deseos
Netzaj Personal Aspectos energéticos personales
Iniciativa
Netzaj Campo Tierra Aspectos terrestres energéticos
Deseos
Netzaj Energética Prudencia - Soledad - Austeridad
Impulso
Netzaj 9 - El Ermitaño Adaptación - Flexibilidad
Memoria
Netzaj 14 - Templanza Recuerdo - Acceso al subconsciente
Teryiple de
Netzaj 15 - El Diablo Conciliación - Trabajo en equipo
Animo
Netzaj 19 - El Sol Comunicación verbal - Técnica
Inserción Mundo
Netzaj 20 - El Juicio Aceptación del dolor - Escucha
Iniciativa
'.) 1 - FI ~A.. nrln
Miedos
Hod Campo Forma Personal Aspectos formales personales
Lógica
Hod Campo Tierra Formal Aspectos terrestres forma les
Miedos
H od 11 - La Fuerza Autodominio - Sociabilidad
Memoria
Hod 13 Olvido - Perdón
Intuición
Hod 14 - Templanza Adaptación - Flexibilidad
Te~1ple de
Hod 17 - La Estrella Renovación - Trabajo en soledad
Animo
Hod 18 - La Luna Comunicación no verbal - Magia
Inserción Mundo
Hod 21 - El Mundo Aceptación del dolor - Escucha
Lógica

Yesod 13 Impulso Olvido - Perdón


Yesod 15 - El Diablo Intuición Recuerdo - Acceso al subconsciente
Yesocl 16 - La Torre Temple ele Ánimo Aprendizaje - Instinto
Yesocl 18 - La Luna Iniciativa Comunicación no verbal - Magia
Yesod 20 - El Juicio Lógica Comunicación verbal - Técnica

Maljut Campo Tierra Energética Inic iativa Aspectos terrestres energéticos


Maljut Campo Tierra Formal Lógica Aspectos terrestres forma les
Malhut 16 - La Torre Inserción Mundo Aprendizaje - Instinto
Maljut 1 7 - La Estrella Iniciativa Renovación - Trabajo en soledad
Maljut 19 - El Sol Lógica Conciliación - Trabajo en equipo

656 VILLi\RRUBIA / HAUT / MILLERi\


13. LA DESVIACIÓN MEDIA, O, Y SU SIGNIFICADO

ste concepto quedó apuntado en la sección 11.2 de la III Parte,


E y consiste simplemente en una magnitud, generalmente me-
nor que 1 (aunque alguna vez puede superar este límite), que mide
el grado de desviación media, d, respecto a la media de las cargas
relativas de las diez sefirot.
Una situación ideal que, en nuestra experiencia, es imposible
que se alcance, es un valor de d igual a cero, pues ello indicaría que
las diez sefirot tienen cargas iguales y que hay por tanto un equili-
brio total entre ellas. Pero también indicaría que no hay diferencias
de potencial en ningún nivel del Árbol ni, por tanto, ningún flujo
de energía. Lo normal es que siempre haya una desviación mayor
o menor respecto a la media, y en este sentido puede establecerse
el principio general de que cuanto más pequeño sea el valor de la
desviación media, d, mayor será el grado de evolución del sujeto.
Para comprender cómo puede entenderse esta afirmación, nos sir-
ve como pauta o modelo comparativo la conocida clasificación que
el hinduismo y el yoga hacen de lo que llaman las tres cualidades
(Yoga-Sutras de Patanjali, sutra II-18): pesadez (tamas), actividad

Figura 53
Representación esquemática del aumento de la frecuencia vibratoria
(disminución de la amplitud) a lo largo de la evolución.

MANUAL DE KABl3ALAli PRÁCTICA 657


(rajas) y claridad (sattva). La característica de estas tres cualidades,
tal como quedan enunciadas, es el cada vez mayor nivel vibra-
torio, o lo que es lo mismo, una frecuencia más pequeña del tren
de ondas: la actividad tiene mayor nivel vibratorio (menor fre-
cuencia) que la pesadez, pero menor nivel vibratorio (mayor frecuen-
cia) que la claridad. El ejemplo de la pesadez es la materia inerte,
el de la actividad, el movimiento físico, y el de la claridad, la luz.
Una representación gráfica de este proceso aparece en la figura 53,
en la que, para mayor claridad, la frecuencia está representada por
la distancia de la curva al eje horizontal.
El sentido del gráfico a continuación es que la evolución sigue
la dirección de la flecha, y que a mayor grado de evolución, menor
grado de desviación. Esta desviación respecto a la media puede
también verse como el inverso del grado de integración. Estamos,
en efecto, acostumbrados a hablar de nosotros mismos como uni-
dad, cuando en realidad, y en tanto no se hayan unificado (al
menos hasta un grado razonablemente bueno) las diferentes ten-
dencias, muchas veces contrapuestas, que conviven en nosotros,
no podemos afirmar que somos esa unidad. Como dice Arnaud
Desjardins, somos como un parlamento en el que los diputados
mantienen posturas contrapuestas, discuten, y a veces hasta se
pelean. En la medida en que esas tendencias se van unificando,
el grado de integración va siendo mayor o, lo que es lo mismo, la
desviación respecto a la media va siendo menor.

A título orientativo se aportan las siguientes referencias sobre


niveles de integración:

Desviación media

Integración muy elevada........................ . Máximo 0,20


Integración elevada.................................. Entre 0,21 y 0,35
Integración media .................................... . Entre 0,36 y 0,49
. , b ªJª······
Integrac1on . ................................... Entre 0,50 y 0,69
Integración muy baja............................... . A partir de 0,70

65 8 VIU.ARRU BIA / H AUT / MILI.ERA


Cualquiera que sea el nivel de integración del sujeto, y al igual
que el resto de los datos que resulten de la interpretación del Árbol
personal, debe considerarse como una herramienta sagrada, que
puede estar en una fase cualquiera del desarrollo para el cumpli-
miento del tikún. La integración muy elevada nos habla de almas
antiguas, con gran experiencia acumulada, y de Árboles fluidos
que integran todos sus aspectos de forma gradual a lo largo de la
vida, mientras que la integración muy baja será la de almas jóve-
nes, que apenas han comenzado su camino, o de Árboles difíciles,
que conllevan una elevada fragmentación interna, y que tienen la
posibilidad de integrar y hacer florecer todos sus aspectos en la
edad madura, no antes. En cualquier caso, recordemos que las al-
mas primitivas son semejantes a niños pequeños, que, aunque a
veces incordien, no por ello merecen ser castigados, sino que es
necesario ayudarlos en su crecimiento y educación con amor, in-
teligencia y energía. Cuando estas personas llegan a comprender
su programa de vida, la razón de sus vivencias, todo les encaja,
y entonces es frecuente que se produzcan en ellas cambios especta-
culares, manifestando entonces su gran potencial espiritual.
Según apuntábamos en la sección 11 anterior, referente a las se-
firot fuertes y débiles, la desviación media d, sumada a la media X
nos proporcionará el nivel por encima del cual se manifiestan las
primeras, mientras que la diferencia entre ambas magnitudes mar-
ca el límite inferior por debajo del cual se manifiestan las sefirot
débiles. Nos remitimos a dicha sección para el desarrollo de estos
conceptos.

MANUAL DE KA1313ALAH PRÁCTICA 659


14. TRíADAS COMPLETAS E INCOMPLETAS
Modificaciones en el carácter expansivo, equilibrador
o aglutinante de las Tríadas del Árbol personal

egún vimos en la II Parte de la obra, las Tríadas se consideran


S formadas por la unión a través de senderos subjetivos de tres
sefirot contiguas entre sí, así como de los propios senderos subjeti-
vos que las unen. Participan, pues, de las características subjetivas
de los propios senderos, y de las objetivas de las sefirot, y repre-
sentan por lo tanto el nexo de unión entre el Yo y el No-Yo, entre el
ámbito interior y el exterior de cada ihdividuo. ·
Según resulten los senderos subjetivos, pueden llevar diferen-
tes tipos de líneas o no llevar ninguna. A efectos de las Tríadas,
los senderos semilla, o «jardines de infancia», formados por líneas
de pequeños triángulos, se consideran como vacíos, al igual que
los que aparecen sin ninguna línea («angélicos»). Por ello, es posi-
ble que algunas Tríadas aparezcan en el Árbol nativo con alguno,
o incluso con los tres lados sin cubrir.
El sentido general de todas las Tríadas es que se trata de tareas o
tipos de tareas que vienen a ser realizadas por el sujeto. Recordemos
que en la II Parte asociábamos los senderos subjetivos a las letras
hebreas y a los arcanos mayores del tarot, las sefirot a los diez pri-
meros números y a las cartas del tarot del as al 10 de cada palo, y las
Tríadas a las figuras de corte, sotas, caballeros, reinas y reyes, naipes
que también han sido considerados con razón por muchos tratadis-
tas como enlaces entre los mundos externo e interno. Ahora estable-
cemos un criterio básico para la interpretación: las Tríadas con sus
tres lados cubiertos por líneas de cualquier tipo, procedentes de los
bloques 1 a 13, indican comportamientos de alguna manera predeci-
bles, mientras que si falta alguna línea el comportamiento del sujeto
en ese área se vuelve más imprevisible.
La razón de que esto sea así hay que buscarla en la naturale-
za expansiva o de interiorización de cada Tríada, tal como queda-
ron estudiadas en la II Parte. En general, la mayoría de las Tríadas
son expansivas, excepto las cuatro laterales inferiores: Iniciativa e

660 VILLARRU BIA / HAUT / MI LLERA


Impulso entre las activas, Lógica e Intuición entre las pasivas, que
son aglutinantes o de interiorización en cuanto a su manifestación
o forma de operar. A pesar de ello, las de la Iniciativa y el Impulso
tienen naturaleza intrínseca expansiva, por apoyarse en los pilares
central y de la Misericordia. A su vez, el carácter de cada Tríada
viene dado por el carácter expansivo o contractivo de los senderos
subjetivos que la forman, pues en último extremo, toda tendencia
de la Individualidad en uno u otro sentido es siempre subjetiva.
Por ello conviene tener presente el carácter expansivo, neutro o
aglutinante de cada sendero subjetivo pues, de faltar alguno en un
Árbol personal, puede modificar o reforzar el sentido expansivo o
aglutinante de las Tríadas a las que pertenecen.
Si en una Tríada cualquiera un sendero está en blanco, su au-
sencia subjetiva modificará su sentido, lo reforzará, lo debilitará
o lo dejará como estaba. Como existen unas posibilidades de con-
figuración casi infinitas, nos limitaremos a dar a título orientativo
algunos ejemplos:

• Tríada de la Conservación, con ausencia del Sendero 11. Al tratarse


de un sendero neutro (ver seguidamente, Tabla XXXIII), el senti-
do expansivo de la Tríada no varía, pero se vuelve más brusco,
pues los senderos neutros actúan en cierto modo de forma se-
mejante a los amortiguadores de las ruedas de un vehículo.
Por tanto, el comportamiento del sujeto tenderá a manifestarse
de forma extremada, con dificultad para ajustarse a un «centro
moderador».
• Tríada de los Deseos, con ausencia del Sendero 10. El carácter
expansivo de la Tríada se pierde por completo, ya que sus dos
restantes senderos, el 9 y el 13, son neutros. A cambio, los in-
flujos sociales del campo externo personal harán del sujeto un
ser vulnerable, lo que puede manifestarse incluso a nivel físico,
con trastornos de tipo sobre todo intestinal, a poco que el entor-
no se le muestre desfavorable (en el ámbito laboral o familiar,
por ejemplo).
• Tríada del Temple de Ánimo, con ausencia de los senderos 16 y
17. Pierde fuerza, pero no del todo, ya que el sendero que que-
da, el 19, es muy expansivo.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 661


• Tríada de la Mística con sus tres senderos en blanco. Gana expan-
sión, ya que pierde un sendero expansivo, pero también dos agluti-
nantes. A cambio, el sujeto manifestará su mística de forma poco o
nada convencional, lo que, desde el punto de vista de las religiones
establecidas, le hará aparecer como un hereje redomado.
• Tríada de la Intuición con el Sendero 14 en blanco. Cambia su
carácter, de aglutinante a expansiva, ya que de los dos sende-
ros que quedan, el 15 es neutro, pero el 19 es muy expansivo.
A cambio, la intuición se vuelve anárquica, poniendo al sujeto, a
poco que se descuide, en más de una situación embarazosa.

El carácter de cada sendero, así como las Tríadas a las que perte-
nece, se recogen en la tabla XXXII1 y en la figura 54.

Tabla XXXIII
Carácter expansivo o restrictivo de los senderos
Sendero Tipo Tríadas a las que pertenece

O - El Loco Muy expansivo Raíces - Mística


1 - El Mago Muy expansivo Raíces - Ascética
2 - La Sacerdotisa Muy aglutinante Mística - Ascética
3 - La Emperatriz Expansivo Raíces - Fe
4 - El Emperador Aglutinante Mística - Innovación - Fe
5 - El Pontífice Muy expansivo Innovación
6 - Los Amantes Aglutinante Ascética - Conservación - Fe
7 - El Carro Muy expansivo Conservación
8 - La Justicia Expansivo Ética
9 - El Ermitaño Neutro Ética - Innovación - Deseos
1O - La Rueda de la Fortuna Muy expansivo Deseos
11 - La Fuerza Neutro Ética - Conservación - Miedos
12 - El Colgado Muy expansivo Miedos
13 - Neutro Memoria - Deseos - Impulso
14 - Templanza Muy aglutinante Impulso - Intuición
15 - El Diablo Neutro Memoria - Miedos - Intuición
16 - La Torre Expansivo Memoria - Temple Á. - Inserción M .
17 - La Estrella Muy expansivo Temple Á. - Impulso - Iniciativa
18 - La Luna Muy expansivo Inserción M. - Iniciativa
19 - El Sol Muy expansivo Temple Á. - Intuición - Lógica
20 - El Juicio Muy expansivo Inserción M. - Lógica
21 - El Mundo Muy aglutinante Iniciativa - Lógica

Abreviaturas:
Temple Á: Temple de Ánimo
Inserción M.: Inserción en el Mundo

662 V iLLARRUB IA / H AUT / MILI.ERA


Tipos de
senderos

Muy expansivo

Expansivo

•••••••••••
Neutro

Aglutinante

fm$-~!:~
Muy aglutinante

Figura 54
Carácter aglutinante, neutro o expansivo de los senderos

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 663


1 5. LAS OPOSICIONES POLARES DE LAS TRÍADAS
Y SUS BLOQUEOS

nte todo, creemos oportuno recordar que las sefirot y todo


A lo que se relaciona con ellas tiene que ver con los hechos ob-
jetivos, con el mundo que nos rodea, a todos los niveles, físico y
suprafísico; por su parte, los senderos subjetivos y todo lo que se
relaciona con ellos tiene que ver con nuestras vivencias de los he-
chos objetivos; y finalmente, las Tríadas y todo lo que con ellas está
relacionado tiene que ver con la expresión de nuestra respuesta a
los hechos objetivos. ·
A partir de estas consideraciones, una Tríada con sus tres la-
dos ocupados por líneas, excepto las que denominamos «jardines
de infancia» o «senderos semilla», indica una forma de expresión
estructurada, tanto más cuanto más reforzadas estén las líneas.
Si éstas están reforzadas por «doctorados» (cruces de maestría),
las respuestas alcanzan gran refinamiento y sutileza.
Cuando hay Tríadas completas en oposición polar a otras Tríadas
también completas se produce un bloqueo en la expresión de aque-
llos aspectos a que se refieren dichas Tríadas. Al estudiar cada una
de las Tríadas en las secciones 3.9.1, 3.9.2 y 3.9.3 de la II Parte que-
daron indicadas en cada caso las oposiciones polares de todas ellas.
El criterio general es que las Tríadas más reforzadas predominan
sobre las que menos líneas tienen, aunque éstas, por su parte,
no dejan de influir en aquéllas, debilitándolas de alguna forma,
ya que detraen parte de su energía para establecer el bloqueo. El grado
de previsibilidad de las respuestas, pese a este debilitámiento, es ma-
yor en la Tríada fuerte, y se puede decir que también lo es su grado de
«cristalización», a causa de la tensión producida por el bloqueo.
Por otra parte, una Tríada muy «cristalizada» (con varias líneas
en sus tres senderos) puede sepultar, bloquear, las respuestas de
la Tríada polarmente opuesta que provienen de senderos vacíos,
que son los que suministran información cósmica. Este aspecto tie-
ne que ver con rachas de «mala suerte», cuyo propósito es hacer
experimentar al sujeto a dónde le llevan determinadas respuestas

664 V!LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


cristalizadas, para que a través de una experiencia más o menos
difícil pueda abrirse hacia el otro lado, hacia la Tríada opuesta,
para recibir otros tipos de respuesta más adecuados a la experien-
cia que debe vivir.
Cualquier oposición es en sí misma un complemento. Aparecen
enfrentadas dos partes que se complementan y que se necesitan la
una a la otra para expresarse con plenitud, ya que juntas componen
un aspecto completo. El propósito de toda oposición es la unifica-
ción, el abrirse a comprender que no hay una de las partes mejor
que la otra, sino que cada una es imprescindible para la otra.
Aquellas respuestas que proceden de una Tríada muy cristali-
zada pueden resultar, a los ojos del sujeto, más conscientes, previ-
sibles, automáticas y sencillas que las que vienen de Tríadas con
senderos vacíos, que son imprevisibles y aparecen en su momento
fuera de su control, por lo que pueden parecer más complicadas en
su funcionamiento y no dejan otra actitud que la de confiar en sí
mismo, ya que, oportunamente, las respuestas siempre están ahí.
La consecuencia de todo ello es que siempre hay un lado preferi-
do, un polo más fuerte que impide, o al menos dificulta al otro su
manifestación.

Las oposiciones de Tríadas son de dos tipos:

a) Las Tríadas que se oponen en el mismo nivel o plano de


manifestación, y que se sitúan a los lados derecho e izquierdo del
Árbol, por lo que, a su vez, localizan el conflicto a niveles inter-
nos o energéticos si la Tríada bloqueada es activa, y a niveles
externos o sociales si la Tríada bloqueada es pasiva. En este caso,
la Tríada bloqueadora es la que arroja la mayor cristalización de
respuesta. Las Tríadas en este tipo de oposición sonJ agrupadas
por pares, las siguientes:
• Ascética (pasiva, externa) - Mística (activa, interna). Es la
búsqueda del Absoluto mediante «resta» o mediante «suma».
Recordemos que, mientras que el asceta trataba de prescindir
de los objetos para encontrar al sujeto, el místico reconocía a
los objetos como algo bueno, por ser una manifestación de
Dios. El propósito de este bloqueo es aprender a utilizar la

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 665


resta o la suma según su circunstancia y según que su necesi-
dad sea interior o exterior. Si una forma de respuesta está más
cristalizada y es por tanto la más usual, deberá permitir que
la otra se manifieste oportunamente. Así, podrá comprender
que el encuentro con el Absoluto puede producirse apren-
diendo de sus errores por los caminos de la religión estableci-
da, que deberá llegar a trascender para encontrar su esencia y
localizar el papel que juega su propia individualidad. Sentirá
necesidad de abrirse a lo nuevo e integrar aspectos de la otra
forma de respuesta cuando sienta zozobra interior por la nos-
talgia del Absoluto, y de expresarse a través de la lírica (ver
antes La Noche Oscura del alma, de San Juan de la Cruz).
• Conservación (pasiva, externa) - Innovación (activa, inter-
na). El conflicto se sitúa en este caso entre la tradición y el
progreso, por lo que tiene una profunda relación con el tiem-
po, cuyos dos extremos polares, Binah y Jokmah, son los vér-
tices superiores respectivos de ambas Tríadas. El propósito
de esta oposición es conciliar tradición y progreso, haciendo
de la primera un cuerpo vivo en desarrollo y del segundo
una útil herramienta y no un fin en sí mismo. Se trata de pro-
piciar la investigación para descubrir los aciertos y errores de
la tradición a través de las nuevas posibilidades que abre el
progreso. Las verdades inmutables son siempre las mismas a
la luz del pasado y del futuro, de la tradición y del progreso.
• Miedos (pasiva, externa) - Deseos (activa, interna). Ahora el
conflicto adopta el carácter paradójico de temer lo que a la
vez se está deseando. El propósito es llegar a conocer y acep-
tar los miedos para que puedan disolverse, y aceptar y depu-
rar los deseos, que forman un aspecto dinámico interno que
permite trabajar los miedos, para que los deseos verdadera-
mente importantes se puedan finalmente materializar. Si los
miedos impiden realizar los deseos, causarán frustraciones y
resentimientos, que nos pueden llevar a culparnos a nosotros
mismos o a los demás. En cualquier caso, recordemos que
tanto miedos como deseos son caminos que deben ser reco-
rridos y después abandonados, una vez que han cumplido su
misión de enseñarnos.

666 VJLLARRUBIA / HAUT / MILLERA


• Intuición (pasiva, externa)- Impulso (activa, interna). El «ver»
y el «actuar» se bloquean mutuamente, pero eso es debido
a que en realidad no se ve, pues como decía Krishnamurti,
ver es actuar, no hay separación entre uno y otro. Pero el blo-
queo denota que el sujeto mantiene una barrera interna que,
como todas las demás, «está en tu imaginación», tal como
cantaba Miguel Ríos. El propósito de este bloqueo es enseñar
a confiar en la intuición para generar acciones más positivas,
y a su vez, que los resultados obtenidos permitan confirmar
la veracidad de las intuiciones, para poder disolver esa barre-
ra que en este caso afecta a la personalidad.
• Lógica (pasiva, externa) - Iniciativa (activa, interna). Este blo-
queo es la manifestación del conflicto entre «pensar» y
«crear». El propósito es revelar al sujeto que el pensamiento
lógico del mundo real y previsible es una herramienta esen-
cial para comprender el mundo oculto, sutil, invisible y apa-
rentemente imprevisible, ya que le impulsa a buscar las leyes
que lo mueven, que resultan ser bastante lógicas cuando se
las conoce con mayor profundidad. La apertura a ese mundo
invisible, sutil y creativo no excluye la lógica, dado que am-
bas Tríadas se complementan, se necesitan y forman en ese
aspecto una unidad.
b) Las Tríadas que se oponen en planos distintos, o en distin-
tos niveles de manifestación. Constituyen las Tríadas estructurales
del Árbol y forman dos bloques: de Keter a Tiferet, Raíces y Fe,
y de Tiferet a Maljut, Memoria, Temple de Ánimo e Inserción en el
Mundo. Entre ambos conjuntos, la Tríada de la Ética o Conciencia
Moral constituye un importante eslabón a considerar de una ma-
nera especial. No puede bloquear a las restantes, aunque aparezca
muy estructurada, debido a que en este caso define un Camino
de Iniciación, que es el del Guerrero; y en cambio sí puede ser
bloqueada tanto por la unidad superior Raíces/Fe, desde arriba,
y desde abajo por la unidad inferior Memoria/Temple de Ánimo/
Inserción en el Mundo. Esta Tríada de la Ética o Conciencia Moral
es en sí misma una estructura que tiene como propósito hilar y
soldar el mundo del espíritu (el arriba) con el mundo de la per-
sonalidad, el ego y su expresión en el plano físico (el abajo), a tra-

MANUAL DE K A BBA LAH PRÁCTICA 667


vés del Yo Soy, en el centro. Recordemos que ésta es la Tríada del
Alma Transpersonal. En caso de conflicto u opresión, el propósito
de esta Tríada será llevar a cabo la legitimidad del Ser que renace
de sus cenizas, como el Ave Fénix. Hacia arriba, tiene como fun-
ción enseñarnos a «hilar» en nosotros los mundos superiores del
Espíritu mediante la comprensión y el apoyo hacia los otros yoes,
para poder valorar con realismo el propio Yo Soy en el centro.
Hacia abajo, es un rebosadero de energía que se diversifica en for-
mas muy diferentes, creándonos un universo multiforme a partir
de una misma energía, de lo Uno y Trino a la Heptarquía, mediante
un oscurecimiento progresivo de la luz que encarna en la materia,
y que se densifica. Por otra parte, recordemos que, al aplicar los
criterios de la Escala de Jacob (v. II Parte), las esferas laterales de
esta Tríada, Jesed y Guevurah, unidas por el sendero 8, La Justicia,
no tienen correspondencia con otras en los diferentes niveles del
Árbol, lo que indica que cada uno de estos niveles se rige por sus
propias leyes de funcionamiento. Hecha esta salvedad respecto a
la Tríada de la Ética, exponemos las oposiciones que pueden darse
en planos distintos, y que son las siguientes:

• Raíces - Fe. Conflicto entre «pertenecer a» y «creer en».


Un ejemplo de este conflicto sería el que se produce entre los
valores tradicionales de la familia, la patria, la religión oficial,
etc., por una parte, y los nuevos valores que el sujeto considera
más en consonancia con su propia esencia. El propósito supre-
mo es saber que se pertenece al Absoluto en Keter (en realidad
que se es el Absoluto), y que este conocimiento mueva la Fe,
como un gran Sí, como afirmación de la Verdad contrastada.
Pues, como dice Arnaud Desjardins, Ser y Sí son lo mismo.
• Raíces/Fe - Conciencia Moral. Conflicto entre la creencia del
«pertenecer a» y lo que la ética nos dice, lo que proclaman
nuestras escalas de valores. Como ya se indicó, la Ética no pue-
de bloquear, pues sus normas, pues corno se vio al estudiarla en
detalle (II Parte, sección 3.9.1.3), los Principios Morales son an-
teriores a la creación de la misma luz (Génesis 1 :3) y nacidos a
la vez que el Cielo y la Tierra (Génesis, 1 :1). En efecto, tal como
vimos, no existe palabra alguna que pueda formarse combinan-

668 V1L1.ARRUBIA / HAUT / MILLERA


do las tres letras hebreas asignadas a los senderos subjetivos.
Era necesario, en efecto, que existiesen unas «reglas del juego»
antes de que comenzase el juego, en este caso la creación, que
se produce en el nivel de Briah, cuyo centro es precisamente
Tiferet. En cambio, puede ser bloqueada desde arriba. En este
caso, el propósito del bloqueo es depurar la ética, es decir, las
escalas de valores y la manera de enjuiciar o medir, dirigién-
dola hacia lo transpersonal y universal, para que se asiente la
certeza de que se pertenece al Absoluto. Si en esta Tríada, la de
la Ética, predominan los senderos vacíos y está poco estructu-
rada, la información subconsciente facilita recursos universales
claves para resolver este conflicto. Si está muy estructurada,
señala, como se apuntaba antes, el Camino de Iniciación del
Guerrero, que necesita ser consciente de un sistema ético y mo-
ral definido y estable para realizar su cometido.
• Conciencia Moral - Memoria/Temple de Ánimo/Inserción en el
Mundo. El conflicto afecta a la ética, la forma de valorar y me-
dir, en contradicción con los recuerdos de nuestros procesos de
aprendizaje, las crisis y sus causas, y su superación. Igual que en
el caso anterior, la Tríada de la Ética no puede bloquear, pero sí
ser bloqueada por la estructura formada por las tres Tríadas es-
tructurales inferiores, Memoria - Temple de Ánimo - Inserción
en el Mundo. El propósito de este bloqueo es depurar la ética
hacia valores transpersonales y universales, para ser conscien-
tes de Lo Que Somos, tenerlo presente cada día, comprender la
finalidad de nuestros procesos de aprendizaje y de las crisis vi-
vidas, para permitir que Lo Que Somos se proyecte en el mundo
mediante la realización de nuestro tíkún. Del mismo modo que
se indicaba en el caso anterior, cuando la Tríada de la Ética o
Conciencia Moral está poco estructurada, el subconsciente faci-
lita recursos universales esenciales para resolver este conflicto.
Si por el contrario está muy estructurada, señala, como en los
casos anteriores, el Camino de Iniciación del Guerrero, el cual
necesita disponer de unas normas de conducta claras y precisas.
• Memoria - Temple de Ánimo. En este bloqueo los recuerdos se
interfieren con los procesos de aprendizaje. Puede causar difi-
cultad para recordar determinados aspectos de las crisis y de

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 669


los procesos de aprendizaje que en otro caso evitarían repetir
sistemáticamente las mismas pautas, haciendo de todo ello una
experiencia dolorosa, o bien determinados recuerdos pueden
dificultar el aprendizaje de algo nuevo, o de algún aspecto so-
bre uno mismo. El propósito de este conflicto es impulsar al
sujeto a recordar lo esencial de todo lo que va aprendiendo y
experimentando, de las enseñanzas de las crisis y de lo que es
realmente importante, para poder ser consciente de su verda-
dero Ser y abrirse a la realización de su tikún.
• Memoria - Inserción en el Mundo. Los recuerdos interfieren
en este caso con la necesidad de «poner los pies en el suelo»,
de vivir en el aquí y ahora. El propósito de este bloqueo es el
desarrollo de la capacidad de la ·a tención distribuida, ya que
puede haber una cristalización que induzca a la atención con-
centrada. Es semejante a la reducción del campo visual que
se produce por la ingestión de ciertas drogas, por lo que el
bloqueo busca llegar a hacer esa atención focalizada tan su-
mamente incómoda que el nativo se vea obligado a abrirse a
nuevos campos de atención. Como es el recuerdo (pasado) el
que está interfiriendo con el aquí y ahora (presente), quiere
ello decir que la cristalización se encuentra relacionada con el
eje tempora}Jokmah-Binah, aunque a través de su manifesta-
ción subjetiva, que se produce en los senderos relacionados
con la 7/ sefirá, Netzaj, ya que este nombre significa también
Eternidad, que es justamente el no tiempo, la no existencia de
cristalizaciones en ese ámbito.
• Temple de Ánimo - Inserción en el Mundo. El aprendizaje
y el vivir en el mundo se interfieren. El propósito es que, si
sabemos lo que tenemos que hacer, lo hagamos. Es el disol-
ver la creencia de que la espiritualidad está en nuestro santua-
rio particular, mientras que la vida sigue ahí fuera, caótica y
despreciable a veces, sin que veamos ninguna conexión entre
ambas. Se nos invita a que venzamos todas las resistencias y
nos atrevamos a mirar la vida y el mundo desde lo sagrado,
a ampliar nuestro santuario particular a todo lo que nos rodea,
y a realizar nuestro tikún con absoluta impecabilidad y con
plena consciencia.

670 VILLARRUB IA / HAUT / MILLERA


EJERCICIOS

38~Levanta e interpreta tu propio Arbol perso11ál (r,io trates de .


. . . salir <<guapo» en la foto, pero tamppcóte flageles ... )
e
, 39. Levanta jriterpreta. Árboles personales .de otras perso-
nas. Pero no lo.hagas sin explicarles antes previamente
.· .de qué se trata (si es que no Jo saben), y recabar su con-
sentimiento; Despúés/ reúnete con cada uno de ellos' y, .
$0Segadamente, en torno .a una mesa en Ja ,que hayáal-
. gún palo o cono de incienso encendido, y si es posible¡
'·. acompañados de la lüz de una vela y de algún buen cris-
tal de cuarzo o de amatista, c9méntalo con el interesado.
· Recuerda qu~ lqs dátos que toines y el resultado ·de la •
.interpretá~ión del Árbol.son ab~olutamente confidencia-,
l~s. ·Rec;hazá levantar árholes ele alguien por enc::argo de .
otra persona. . ' ' . . ...
40~ :Si ·en. alguno de' los Árboles que levantas e interprefas ',
·aparece ~alguna configuración ~special, trata de encon-
trar en ella su aspecto sagrado. Si el Árbol en cuestión es
~! tuyo;Teéóg~te eri oración ,o meditación y agradece al ·
,Cielo"el iqriJenso privilegio que se te ofrece. Si es de otra ·.
, person·a, trata de mostrarle ese aspecto sagrado, y com-
parte.con ella su.sentimiento al'respectp. . ·.,. . ,
41. Dibujé:1'tu pr9pio Árbol personal ·enuna c.artuli!Ja rígitla,:cr·
· . · · de Ja manera más artística que; puedas y sepas,· pero de •
, forma austera,sin recargarlo innece'sariamenté~orí di.bu~
jos o; colpres\ ,Si tienes .un aparato, de grabación; graba
co~ typropia·voz el.p9emá .de SanJu~n de la;(;:rúz ,<<Ia ' •..
;Ng~be 'Oscura.'deL,11r,na» :(IY,.á4/ pág. 433); . pra~ti5=a•.·10,.
,q üé necesites, ' hasta que quedes; satisfecho gel: .res,ultado. . .·
Guando; ló tengáshecffo, busca un.riné,ón tranqurlo/y co~· .
IOci frente a ti. él 9ibujo de túi>ropió Árbol, y .:mientras .
lo tontemplas, pon"en níarchaJa grabé;ldora y es.cucha el
· poema:Y disfrúta de lo qüe resulté de todo ello. .

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 67 1


,,
1 6. Los ARBOLES ESPECIALES

Id por todos los mundos,


y llevad la luz a las esquinas más densas de la razón.
Os sentiréis extranjeros
y os mirarán como a locos,
no comprenderán vuestros horizontes,
y conoceréis el caos, el vacío.y la oscuridad.
Sólo si sobrevivís
seréis como Prometeo,
y en vuestro dolor florecerá la lámpara sagrada
que guíe a otros en la oscuridad,
pues en verdad
sois
ángeles caídos.

16. 1. Árboles especiales: introducción


Este trabajo surge gracias a la valiosa oportunidad de conocer los
Árboles de la Vida personales de un grupo de muchachos que per-
tenecen a un colectivo muy especial: son personas jóvenes que es-
tán recibiendo apoyo para salir del oscuro mundo de la droga y
sus consecuencias, entre las cuales está como una posibilidad la
delincuencia.
El estudio de estos Árboles ha permitido no sólo establecer un
perfil o prototipo de un posible drogadicto, sino también ser cons-
ciente del importante factor de riesgo existente para padecer otros
problemas serios, que tal vez se puedan evitar si conocemos qué
tipo de conflictos sufren estas personas, y podemos prestarles a
tiempo la ayuda más conveniente.
La apreciación de que estos Programas de Vida son verdade-
ramente especiales se pone de manifiesto al profundizar en ellos,
y queda constatado al conocer a estos muchachos: son personas
preciosas, seres muy especiales, y en algunos aspectos frágiles

672 ViLLARRU BIA / HAUT / MILLERA


como el cristal. Necesitan ser comprendidos, educados y tratados
de una manera especial desde su nacimiento.
Y es ahí donde comienza nuestra responsabilidad para poder
evitar un desastre. Ellos están aquí con un Programa de Vida com-
plejo, muy delicado y de una gran sensibilidad, repleto de cualida-
des personales y espirituales especiales que en un momento deter-
minado les llevan a no encajar con el entorno, no saben cómo tocar
tierra, cómo dar forma a sus sueños, y se encierran en su mundo
interior, cada vez mas alejado del que pisan sus pies.
Las personas que tienen un Árbol Especial de este tipo, estructu-
rado con un cúmulo de configuraciones incómodas determinadas,
están dotadas de una gran sensibilidad y de un gran potencial hu-
mano y espiritual, que si es debidamente desarrollado e incentivado
y se les ayuda a integrar sus áreas de mayor dificultad, conseguirán
vencer sus conflictos, miedos, inseguridades y bloqueos para llegar
a florecer como seres plenos, seguros de sí mismos, y capaces de
darse a los demás, cada cual en su forma y estilo particular.
Otro rasgo característico de este tipo de Árboles es un buen
número de senderos vacíos, lo que significa que se está continua-
mente en contacto con los planos sutiles, y que las vivencias y el
aprendizaje del plano físico, las ideas, las emociones, etc. se están
contrastando con la información universal transpersonal subcons-
ciente que proviene del acceso permanente a esos planos sutiles,
lo cual genera toda una serie de aspectos incómodos tales como
la inseguridad, el miedo a equivocarse, la sensación de no pisar
un terreno seguro y firme a niveles emocional y mental, la nece-
sidad de ser aceptado y aprobado por los demás, no tener clara
una meta, no identificarse con roles preestablecidos, sentirse des-
arraigado y diferente, la necesidad de buscar la propia identidad,
lo cual tiene el propósito de hacerle crecer y comprender, y desper-
tar su consciencia.
Tal vez cualquiera de nosotros tenga alguna persona muy alle-
gada con un Árbol de este tipo que responda al perfil de un posible
drogadicto. Si alguien con un Programa de vida de este tipo no re-
cibe la debida atención, orientación, ayuda y todas las respuestas
que necesita para su perfecto desarrollo, puede llegar a serlo en un
futuro.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 673


Hay que traspasar la barrera de las ideas preconcebidas, los
juicios y prejuicios que nos asaltan al vislumbrar todo lo rela-
cionado con el mundo de la droga rondando nuestra puerta, y si
queremos ayudarles y ayudarnos de verdad, hay que empezar
por comprender, ya que la propia dinámica de este problema,
una vez en marcha, no permite que sea eludido. Por ello este tra-
bajo se centra en el análisis de la drogadicción y de la esquizofre-
nia, que aunque puede estar asociada o no al consumo de drogas,
su reflejo en el Árbol de la Vida personal se corresponde con el
perfil de Árbol Especial detectado entre el colectivo de estos mu-
chachos que consumen droga, y que todavía pueden ser recupe-
rables. Además este tema nunca nos ha sido indiferente por la
existencia de personas cercanas, que laceradas con este mal nos
han enseñado a comprender.
El objetivo de este capítulo no es sembrar la alarma. La droga-
dicción es una consecuencia, una salida equivocada que aparece
en el momento oportuno. Es un mal social. Por otro lado este tipo
de Árboles es bastante corriente, es decir, que a un nivel estadístico
es más común de lo que podamos imaginar. Las nuevas oleadas
de niños que están naciendo vienen con un potencial que se refleja
en determinados rasgos. De alguna manera, parece que sean per-
sonas nacidas aparentemente a destiempo, ya que no encajan con
los valores sociales y culturales competitivos, deshumanizados e
insolidarios que tanto abundan en nuestro mundo actual.
Todo está cambiando muy deprisa. Y todo nos encamina hacia
otras posibilidades más acordes con los valores espirituales de la
Nueva Era. Creemos firmemente que este tipo de Árboles está en
perfecta sintonía con los nuevos tiempos. Y además, creemos fir-
memente que las personas que hayan caído en el mundo oscuro de
la drogadicción y hayan logrado superarlo son las más capacitadas
para ayudar a otros a salir de la oscuridad. En esta tarea también
están en sintonía con los nuevos tiempos. Son como ángeles caídos.
Estos Árboles Especiales que tienen un número importante y de-
terminado de configuraciones incómodas constituyen Programas
de Vida muy especiales, que pueden ser verdaderamente difíciles en
determinados momentos de la vida, hasta que se cumpla el propó-
sito para el cual todas esas configuraciones están ahí.

674 ViLLARRUBIA / HAUT / M ! LLERA


Nuestra responsabilidad es prevenir. No podemos prevenir si
no conocemos, aceptamos y valoramos adecuadamente todas las
peculiaridades de estos Árboles, y si no disponemos de una in-
formación precisa necesaria para introducir cambios positivos que
nos permitan estimular la comunicación, la confianza, el apoyo y
la orientación de este colectivo tan especial.
No debemos ejercer de policías, pero sí de detectives, debemos
estar alerta a los cambios de conducta que observemos para poder
estar ahí, con todo nuestro amor, apoyo y comprensión. Y para
ello tenemos que conocer de dónde vienen sus conflictos, cuál es
su propósito, qué es lo que tienen que aprende1~ y cómo podemos
ayudarlos a resolverlos.
La Kabbalah, mediante el estudio del Árbol de la Vida per-
sonal, es una magnífica herramienta para comprender los me-
canismos que pueden llevar a una persona a consumir drogas.
En estos Árboles existen notables similitudes estructurales
como para poder agruparlas y establecer un perfil o prototipo
de Árbol Especial, que al contener un determinado cúmulo de
configuraciones incómodas refleja un patrón de conflictos co-
munes en este colectivo.
Aunque este trabajo se centra en el tema que nos ocupa, este
perfil es útil y válido para detecta1~ comprender y tratar estos con-
flictos, que también pueden derivar en cualquier otro tipo de adic-
ción, por ejemplo, al alcohol, juego, sexo, trabajo, tabaco, etc.

16.2. Perfil de un posible drogadicto1 deducido


del análisis del Árbol de la Vida individual
El estudio de bastantes casos nos ha permitido comprobar que
existe un perfil muy concreto de Árbol de la Vida personal que
refleja un cúmulo de conflictos-tipo comunes en personas dro-
gadictas, entendiendo la drogadicción como una consecuencia
de la no resolución de dichos conflictos. Otro problema grave
vinculado a este tipo de Árbol es la esquizofrenia. Un brote de
esquizofrenia aparece cuando el cúmulo de conflictos sin re-
solver produce una especie de «cortocircuito», desconectando

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 675


a la persona del mundo exterior. En ocasiones, la esquizofrenia
aparece como consecuencia de las secuelas de la droga. Por ello
es tan importante que podamos identificar estos conflictos a
tiempo para poder prestar cuanto antes la ayuda necesaria.
Este tipo de Árboles especiales contiene las siguientes confi-
guraciones incómodas o especiales, una o varias en cada plano o
Tríada fundamental, todas o la mayoría de ellas a la vez:

• Tríada de las Raíces, centro de la manifestación del Espíritu


(Keter - Jokmah - Binah): Configuración de ídolo, bien doble o
bien simple en Jokmah o en Binah, o pseudoídolo en alguna de
estas dos sefirot. Carga especial en el sendero 3 por tres o más
líneas.
• Tríada de la Ética o Conciencia Moral, centro de la manifes-
tación del Alma (Jesed - Guevurah - Tiferet): Configuración
de complejo, en Jesed, en Guevurah o doble (observamos más
frecuencia de esta configuración en Jesed). Carga especial en el
sendero 5 por tres o más líneas.
• Tríada del Temple de Ánimo, centro de la manifestación
de la Personalidad (Netzaj - Hod - Yesod) + Maljut; en
realidad, también la Tríada de la Inserción en el Mundo:
a primera vista faltan o están en blanco muchos senderos,
o algunos de los existentes tienen cargas especiales. Las con-
figuraciones que aparecen son: el vampiro, doble o parcial en
Netzaj o en Hod; la represión, que puede aparecer en cual-
quiera de las tres esferas del Tríada del Temple de Ánimo;
muerto en Yesod, o casi muerto, de tal forma que las únicas
conexiones de la 9.ª sefirá son senderos semilla o jardines
de infancia. Además, pueden aparecer cargas especiales de
tres o más líneas en los senderos 12 y 21.
• Aspectos secundarios importantes: no constituyen el perfil-
prototipo de Árbol especial en estudio, pero incrementan el
grado de dificultad de Árboles como los que nos ocupan,
con varias configuraciones especiales o incómodas. Son otras
cargas especiales de segundo orden que siempre hay que
considerar, en los senderos de las familias del 1 (19-10-1),
2 (20-11-2), 4 (22-13-4), 6 (15-6), 7 (16-7) y 9 (18-9). En el caso

676 ViLLARRUlllA / H AUT / MIi.LERA


particular del 7, es particularmente incómodo si el Sendero 12
tiene también carga especial.
Queremos señalar que consideramos a los senderos con car-
gas especiales (tres o más líneas) como generadores poten-
ciales de bloqueos, y que el concepto de bloqueos de primer
orden y de segundo orden es particularmente aplicable a la
estructura y perfil de este tipo de Árboles. Sobre todo en
éstos, en muchas ocasiones se produce un bloqueo cuando
un sendero cualquiera tiene tres o más líneas. El bloqueo
es estático cuando las líneas que lo forman son fijas (proce-
dentes de los bloques 1 a 11, ambos inclusive), y dinámico
cuando alguna de sus líneas es variable (procedente de los
bloques 12 o 13). Todo bloqueo obliga a vivir el contenido
del sendero afectado de una forma restrictiva y severa. Los
bloqueos reflejan inhibiciones, por la dificultad de compren-
sión del contenido del sendero afectado, que se vive como
un handicap.
Un Árbol personal que contenga varios senderos con blo-
queos puede reflejar una tendencia a la neurosis. Cualquier
sendero bloqueado hará que ese aspecto se viva de una
forma más o menos neurótica, según el tipo de bloqueo.
Las neurosis son manifestaciones de síntomas psíquicos y
emocionales molestos y penosos, producidos por un conflic-
to psicológico, que se han hecho crónicos.
Un bloqueo cristaliza el contenido y la energía de un sende-
ro determinado para obligarla a madurar. En este sentido,
la inhibición es la respuesta al proceso de maduración del
contenido del sendero, con toda su incomodidad. Obliga a
tomar contacto con el contenido del sendero desde la renun-
cia y la severidad que uno mismo se impone. El propósito es
una maduración lenta, paulatina e incómoda. Si el bloqueo
es dinámico resulta más fluido, pues las crisis o anticrisis
aportan información y recursos nuevos, «descristalizan)) y
disminuyen cíclicamente las inhibiciones en el contenido del
sendero.
Según hemos podido observar, en todos los Árboles estudia-
dos, algunos de los cuales se recogen en las figuras 55 a 65,

MANUAL DE KAflBALAH PRÁCTICA 677


ambas inclusive, aparece un tipo de configuración incómo-
da y/ o un bloqueo de primer orden (cargas especiales en
alguno de los senderos 3, 5, 12 y 21) en cada uno de los
planos:

• En la Tríada de las Raíces (área del Espíritu), ídolos, pseudoí-


dolos o bloqueo en el Sendero 3.
• En la Tríada de la Ética (área del Alma o Individualidad), com-
plejos, pseudocornplejos o bloqueo en el Sendero 5.
• En la Tríada del Temple de Ánimo (área de la Personalidad),
vampiros, pseudovarnpiros, Yesod muerto o casi muerto, repre-
siones o bloqueos en los senderos 12 y/ o 21, y varias Tríadas o
áreas vacías o cósmicas (con senderos angélicos).
Se podría por tanto afirmar que un Árbol con este cúmulo de
configuraciones y con esta estructura refleja el perfil-prototipo
general de personas que tienen la posibilidad de caer en algún
tipo de drogadicción, o padecer un brote de esquizofrenia, o am-
bas. El tipo de ídolo, de complejo o de represión varía de un
Árbol a otro. Hay Árboles con mayor potencial de riesgo que
otros, según el nivel de severidad de las configuraciones y del
número de senderos cósmicos y de configuraciones existentes.
Porejernplo,esrnásseverouncornplejoenJesedqueenGuevurah,
un complejo que un pseudocornplejo, y un muerto en Yesod es
más duro y severo que una represión en la misma sefirá.
Conviene aquí destacar que por drogadicción entendernos,
no sólo el consumo de sustancias legalmente prohibidas (he-
roína, cocaína, hachís o drogas de diseño, por ejemplo), sino
también el de otras que son social y legalmente aceptadas,
e incluso sometidas al control del Estado, corno el tabaco y el al-
cohol. Pues las configuraciones que se describen en el presente
capítulo se encuentran también en personas con clara drogode-
pendencia alcohólica o tabaquera. E incluso, en las que padecen
de dependencia al trabajo ... o al poder.
Es importante considerar que una persona puede utilizar di-
ferentes nombres, tal corno quedó indicado en capítulos ante-
riores, y esto daría lugar al estudio de más de un Árbol de la
Vida personal. Considerarnos que es necesario analizar el Árbol

678 V1LLJ\RRUBIJ\ / HAUT / MILI.ERA


o Árboles complementarios si, en presencia de un nombre com-
puesto, a la persona se la nombra por uno de de las partes que
lo conforman y no por todas; y lo mismo debe hacerse en el caso
de utilización de diminutivos, nombres abreviados, sustitutivos
o alias, para ver el efecto de cada uno de ellos, el programa que
manifiestan. En algunos casos, el diminutivo, nombre abrevia-
do o nombre sustitutivo (Pepe por José, Mari por María, Cherna
por José María, Lola por Dolores, Juan por Juan Luis, etc.) pue-
de ayudar a suavizar y expresar el programa original, mientras
que en ob·os ocurrirá lo contrario o será simplemente indiferen-
te; todo dependerá de la combinación que los datos numéricos
procedentes del bloque 1 forme con los de los restantes. A veces,
un Árbol complementario refleja conflictos que no aparecen en
el Árbol del programa principal.
Veamos qué cúmulo de dificultades contiene un Árbol de estas
características, sobre todo referidas a los años de la infancia:
• Ídolos. Estas personas necesitan madurar tomando como mo-
delos a otras personas del entorno próximo a las que admiran,
generalmente los padres, pero también pueden llegar a ser per-
sonajes de ficción (televisión, cine, mitología .. . ) quienes les sir-
ven de modelo para crecer y asemejarse en algún sentido, físico,
moral, conductual, etc., o para conocer las características y valo-
res de la pareja ideal, dependiendo de la posición y tipo de ídolo
en el Árbol. Es, en definitiva, una manera de buscar la propia
identidad. La figura de Don Quijote es un buen ejemplo de esta
búsqueda de identidad, en este caso a través de los héroes de los
libros de caballería.
• Bloqueo del Sendero 3 (sobrecarga y/o líneas cíclicas). Dificultad
de sintetizar las vivencias con el padre y con la madre. Este blo-
queo refleja un aislamiento del niño respecto a sus progenitores.
Puede que no entienda lo que sucede, pero no quiere involu-
crarse. Puede que perciba problemas entre ellos, y que crea que
por ello no pueden ocuparse de él como necesita. Tal vez los
perciba simplemente demasiado ocupados como para atenderle
como él lo necesita. También puede reflejar que ambos tienen
una postura común con respecto a él que le despierta cierta hos-
tilidad hacia ambos.

M ANUAL DE KABBAI.AH PRÁCTICA 679


• Complejos. El complejo en Jesed, que es más frecuente en este
tipo de Árboles y el más duro, produce un fuerte y profundo sen-
timiento de no merecer ser querido, o serlo sólo si previamente se
es merecedor de ello. En su infancia han sido niños difíciles que
vivieron como una tragedia cualquier amonestación, reprimen-
da, etc., en su educación, lo que sigue sucediendo al alcanzar la
edad adulta. A veces se manifiestan excesivamente rebeldes e in-
corregibles. Se enfurruñan con mucha facilidad. Cualquier amo-
nestación leve les hace sentirse lastimados y vejados. El enfurru-
ñamiento es en estos casos un síntoma frecuente de sentimientos
de inferioridad, de obstinación y de terquedad. Necesitan más
afecto de lo habitual, y que se les haga saber continuamente que
se les quiere y se les acepta de forma incondicional. Necesitan
también que se les demuestre el afecto (besos, abrazos, ternura,
cariño) y que se les enseñe a expresarlo. Es entonces cuando se les
puede hacer razonar y comprender, y cuando permiten el diálogo
de forma constructiva. A veces exigen una atención constante con
muestras de impaciencia, por ejemplo pidiendo un juego distinto
a cada instante, lo que es su forma de demandar afecto; por ello
cada juego por sí mismo no cumple esta expectativa. El trabajo
de este complejo en estos niños requiere una buena dosis de pa-
ciencia y de energía y una atención extraordinaria. Un complejo
en Guevurah hará que el niño se sienta desclasado, más o menos
inconveniente, diferente de los demás por algún motivo: clase so-
ciocultural, raza, nivel económico o cultural de su familia, etc.,
y más adelante puede sentirse tal vez poco involucrado, poco
combativo con respecto a quienes se compare, como consecuen-
cia de no sentirse nunca integrado del todo, hasta que despierte a
sus verdaderas motivaciones esenciales.
• Bloqueo del Sendero 5 (sobrecarga y/o líneas cíclicas). Estos ni-
ños se toman a sí mismos muy en serio. Tienen dificultades para
tomarse a broma y para disfrutar del aspecto lúdico de la vida.
Tienden a culpabilizarse por todas las carencias que se encuen-
tran al compararse con otros niños de su edad. Si piensan que
no dan la talla, se crean sentimientos de inferioridad. Tienden
a comportarse con excesiva seriedad y responsabilidad, y a ser
inflexibles con ellos mismos.

680 V1LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


• Vampiros. Los niños con esta configuración necesitan crecer a
niveles emocional, mental o ambos a la vez, dependiendo del
tipo de vampiro existente en su Árbol, mediante su pertenencia
a grupos. Los grupos aparecerán de forma espontánea a lo largo
de la vida. Pueden ser personas de la escuela, de la pandilla de
barrio, del gimnasio, de las clases de idiomas, del trabajo, etc.
En cada momento, cada grupo permitirá que el niño sea nutrido
de ideas nuevas, sentimientos afines, se podrá expresar y reco-
nocer en los otros, y expandir sus deseos y sus miedos más allá
del núcleo familiar. A veces viven como una contradicción su
necesidad de estar solos y de estar en el grupo. Son niños que
necesitan mucho de los demás para desarrollarse, descubrir con
qué identificarse, madurar y crecer. Podemos ayudar a reforzar
su autoestima, a estimular la comunicación, a ser cómplices de
sus aficiones, gustos y hobbies. Un niño con este tipo de Árbol
y con todas estas configuraciones probablemente sea reserva-
do, tímido, inseguro de sus pensamientos o de sus emociones,
o de ambos. Intentará ser aceptado y valorado, y hará méritos
para ello. Podemos imaginar qué sucede cuando tropieza con
el «grupo» que le quiere y le acepta mientras consume, y que le
exige «fidelidad» al «rollo del grupo», es decir, a la droga.
• Bloqueo del Sendero 12 (sobrecarga y/o líneas cíclicas u ocul-
tas). Los niños con esta configuración tienen dificultad para
comprender su esquema o escala de valores, y de cambiarlos
aceptando valores nuevos. Les cuesta tener claro qué valo-
res necesitan cambiar, porque les resulta difícil darles forma
concreta y llevarlos a la práctica. También les resulta difícil
aceptar voluntariamente un sacrificio para cambiar a mejor,
o aprender algo esencial, ven más inconvenientes de los que
hay en realidad, y los viven como una obligación impuesta
desde el exterior.
• Yesod muerto. El niño tiene dificultades en expresar su ego.
Su nivel de autoestima es bajo. Es vulnerable, susceptible y dañable.
Toda su riqueza interior contenida encuentra dificultades para ser
canalizada y expresada de una forma constante, ya que su manifes-
tación es imprevisible y escapa a su control, le genera inseguridad e
incomodidad cuando busca ser aceptado y valorado por los demás.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 681


Esta configuración en un Árbol es w10 de los rasgos más claros que
señalan un alto potencial de riesgo de drogadicción.
• Represiones. Aumentan el nivel de inseguridad en la expresión
de ideas, inquietudes, emociones, sentimientos, en reafirmar el
ego y las preferencias, ya que se tiende a considerar las necesi-
dades de los egos, las emociones y las inquietudes de los demás
por encima de las propias. Incrementan la sensación de ser
raro o diferente, por la incesante actitud comparativa con los
demás. Las represiones están emparentadas con los comple-
jos, porque éstos se pueden ver y analizar, en cierto modo,
como represiones o semirrepresiones de las esferas Jokmah
y Binah.
• Bloqueo del Sendero 21 (sobrecarga y/o líneas cíclicas
u ocultas). Dificultad de expresar el ego por inhibición.
Dificultad de comprender el dolor ajeno, de «meterse en la
piel del otro», y de involucrarse. Tienden a sumergirse en el
propio dolor y a no permitir que otros penetren en él, parti-
cipen o se involucren, y les cuesta trabajo compartirlo.

Una vez esbozado el marco principal de conflictos visibles,


también hay que considerar las líneas variables (procedentes
de los bloques 12 y 13), los bloqueos secundarios, las líneas
paterna (Sendero 4) y materna (Sendero 6), y todo aquello que
llame nuestra atención.
Como dato importante a considerar, hemos observado que
en estos Árboles predomina en los ciclos largos una anticrisis
vivida en la infancia, entre los 5 y los 10 años, que refleja cam-
bios circunstanciales importantes vividos en el ámbito familiar,
como pueden ser la separación o muerte de algún familiar im-
portante para el niño: padre, abuelo, hermano; algún accidente
traumático o cualquier otro percance; o un cambio de residen-
cia que pueda suponer un nuevo comienzo a nivel familiar, so-
cial (amigos, colegio) o cultural, despertando inseguridades,
miedos, etc., seguida de otra crisis de ciclo largo (hacia los ¾
de la duración del ciclo, que podría llamarse «crisis yin», por
producirse en la rama inferior de la curva, v. fig. 39), vivida en
algún momento entre los 20 y los 30 años. Si en el intervalo en-

682 V1L1.ARRUB IA / H AUT / MI LL ERA


tre la anticrisis y la crisis, con la etapa adolescente por medio,
han caído en la droga y han intentado salir, se produce una
recaída cuando se acercan a la crisis yin.
En otros casos, hay senderos de la misma familia con líneas
variables, presentando en alguno de ellos la configuración de
lanzadera, esto es, sin líneas fijas, y en otros crisis de tipo yin,
por venir la línea variable acompañada de una fija. Entonces
se produce una primera crisis en la lanzadera en la etapa de la
adolescencia, seguida de una crisis yin en el otro u otros sen-
deros de la misma familia entre los 25 y 30 años, repitiéndose
la lanzadera hacia los treinta y tantos años, y así sucesivamente,
de forma cíclica en cada caso. Esto nos permite prever en qué
momento van a necesitar mayor apoyo, o en su caso, refuerzo
de las terapias para evitar las caídas y recaídas.
La líneas afectadas nos pueden facilitar datos acera de las
causas de las crisis, cómo se vivencian, y de qué manera han
afectado y siguen afectando. La primera crisis o anticrisis de
ciclo largo nos puede revelar la raíz de un conflicto importan-
te, y de un posible problema grave que tal vez podamos evitar
que se arrastre hasta la segunda crisis, si no se ha resuelto. Si a
esto le sumamos los conflictos que se trae un niño con un Árbol
especial, podemos hacernos una idea de su dificultad y de la
necesidad de una atención especial.
Es importante tener en cuenta, si disponemos de dos Árboles de
una misma persona (por cambios de nombre, usos de diminutivos
o cualquiera otra causa similar), que si cambia el número de líneas
de los senderos variables de uno a otro, hay que refundir todos los
datos relativos a crisis o anticrisis de ciclo largo en un cuadro co-
mún, de tal manera que los tengamos todos a la vista, para obtener
así una buena visión de conjunto del problema.
Los senderos con líneas variables de ciclo corto funcionan
como la «gota serena». Mucho más frecuentes, implacables,
obligan a trabajar constantemente la totalidad del Árbol reca-
pitulada desde el contenido de los senderos variables, tanto
de ciclo corto como largo. Si son lanzaderas, las crisis son más
continuas. Si son anticrisis, reflejan circunstancias externas que
van a provocar el desarrollo de los acontecimientos. Si son cri-

M AN UAL DE KABBAI.AH PRÁCTICA 683


sis de tipo yin, son realmente internas, y la persona las vive en
soledad, sin dejarlas aflorar al exterior. Su dinamismo templa
y desarrolla los contenidos de los senderos afectados, prepa-
rando el terreno para afrontar el reto de superar los cambios
que se producirán a su vez en los contenidos de los senderos
afectados por el ciclo largo.
Todos vivimos a un ritmo acelerado. Es parte de nuestra
época: problemas, tensiones, preocupaciones, obligaciones y
prisas. Por ello, y debido a que los niños afectados por estas
configuraciones son más bien reservados, tímidos y más o me-
nos retraídos, no nos va a ser fácil percatarnos con detalle de
sus conflictos y necesidades extraordinarias, de que nos necesi-
tan más de lo que consideramos normal, o de que su proceso de
desarrollo interior requiere una atención especial, hasta que los
problemas serios aparecen, nos desconciertan y nos sacuden,
haciendo temblar nuestros cimientos internos y externos.
La adolescencia es la edad más crítica. Se puede definir como
una etapa de autodescubrimiento y de toma de conciencia
de los problemas sociales, no exenta de frescura e inocencia.
Un adolescente piensa por lo general que ya ha crecido, que ya
no es un niño, y que se conoce lo suficiente como para tomar
sus propias decisiones de forma autónoma. La toma de concien-
cia de problemas sociales, y la necesidad de resolverlos por sí
mismo o bien mediante la colaboración con grupos organizados
(políticos, espirituales, humanitarios, religiosos, etc.) le hace to-
mar posturas radicales y contestatarias. Necesita demostrarse
a sí mismo y al mundo de lo que es capaz, y no duda en ser
arriesgado. Necesita darle al mundo un orden nuevo, La efer-
vescencia mental, emocional y hormonal le llevan a vivir y a en-
tregarse con fervor a todo su universo. Es el momento de crear
sin límites, y todos los sueños parecen posibles a sus esfuerzos.
Necesita pertenecer a un grupo y ser aceptado y aprobado por
los demás. Aunque un adolescente se comporte de forma fanfa-
rrona y osada, en el fondo es más vulnerable e influenciable de
lo que cree. Es una etapa de cristal, luminosa y delicada.
Un niño con un Árbol especial encuentra dificultades para
autoafirmarse, vive con dificultad la gran competitividad inhe-

684 VILLA RRU BIA / H AU T / MILLERA


rente a la adolescencia, y ello hace que aumenten su inseguri-
dad y su vulnerabilidad. Es muy probable por tanto que todos
los conflictos que conlleva un Árbol especial se manifiesten en
esta etapa.
La necesidad de liberar la angustia, de ser aceptado y valorado
en un grupo, la presión interior de tener algo que demostrar, pue-
den ser factores suficientes para que se produzca un cortocircui-
to a modo de brote de esquizofrenia, o para decir sí a sustancias
que prometen seguridad en uno mismo, una rápida evasión de las
preocupaciones y problemas cotidianos, y que además desinhiben
con facilidad. En cierto momento no pueden valorar adecuada-
mente el precio que hay que pagar por probar, ya que todos los
que se inician creen que van a controlar la situación y que van a
poder dejarlo con facilidad. Sobreestiman su voluntad por desco-
nocimiento. Y del infierno que les espera no les suelen advertir los
colegas que se las ofrecen.
La mayoría de estos Árboles tienen ausente (angélico) el
Sendero 14, La Templanza. Debido a que estas personas no se
ofenden fácilmente, y por lo tanto «no tienen apenas nada que
perdonar», pueden mostrar un aguante y una resistencia ma-
yor a las pruebas de fidelidad o de «iniciación» que se les pidan
para integrarse en estos dudosos grupos.

76.3. La esquizofrenia a la luz de la Kabbalah


La relación entre esquizofrenia y droga
Los Árboles personales de niños esquizofrénicos que hemos
podido estudiar pertenecen al perfil que estamos analizando.
Esto no quiere decir que todos los niños con un Árbol personal
de este tipo sean esquizofrénicos ni que consuman o vayan a
consumir droga. Si bien la esquizofrenia puede aparecer como
consecuencia de la droga, también puede presentarse de for-
ma espontánea en cualquier momento de la vida, en el cual se
produce una especie de «cortocircuito». Y también puede no
aparecer nunca. Tal vez esto último dependa de la capacidad
de aceptación, integración y comprensión de sí mismos y de

M A N UAL D E KABBALAH PRÁCTICA 685


sus vidas. Deberán encontrar su sitio en el mundo, asimilar y
resolver sus conflictos y sus crisis o anticrisis, tanto las de ciclo
corto como las de ciclo largo.

76.4. Efectos de las substancias psicotrópicas

El consumo de substancias psicotrópicas o drogas abre canales de


percepción extrasensorial, sin que la persona que consume tenga
ningún control ni conocimiento de lo que sucede, ni de lo que ve,
ni de lo que percibe, pues habitualmente no está dotada de una
iniciación o documentación del contenido de los planos sutiles.
Desde muy antiguo, en todas las civilizaciones y culturas
milenarias de oriente y de occidente, se han ingerido substan-
cias psicotrópicas para ampliar los canales de percepción, y hoy
en día todavía se utiliza y se enseña su uso en pueblos donde
se practica el charnanisrno, como una forma de tomar contacto
con planos sutiles y energías superiores y resolver problemas.
Estos pueblos conocían y conocen la forma de utilizar estas
substancias sin riesgo alguno para la salud, ya que las ingestas
van acompañadas de una iniciación espiritual, y a un neófito
nunca se le deja solo. También van acompañadas de ayunos an-
tes y después de la toma para evitar dañar el cuerpo físico, con-
siderado como regalo y herramienta indispensable y sagrada,
que hay que mantener en perfecto estado. La forma, la dosis,
el momento adecuado de dar la sustancia a un neófito siempre
lo determina un charnán experimentado responsable del pro-
ceso de iniciación. Además le da al neófito la oportunidad de
comprender sus visiones y sus percepciones, y posee técnicas
para controlar las posibles alteraciones de los estados de su
consciencia. Por otro lado esta iniciación y esta práctica son
utilizadas únicamente con aquellos miembros que manifiestan
cualidades espirituales adecuadas incluso para convertirse en
futuros charnanes, no con cualquier miembro de la tribu o del
grupo que lo solicite. Actualmente en algunos pueblos ameri-
canos se utiliza el peyote o la ayahuasca, y en algunos pueblos
orientales plantas opiáceas.

686 ViLLA RRUBIA / HAUT / MI LLERA


El cerebro está compuesto principalmente por dos hemis-
ferios separados por un profundo surco. Cada hemisferio está
dividido en diferentes secciones o lóbulos. La superficie del ce-
rebro tiene una capa de materia gris llamada corteza cerebral,
que contiene el 90% de todas las células nerviosas. Esta región
del cerebro recibe los impulsos y los interpreta.
Todos nacemos con un hemisferio cerebral más desarrollado
que otro. El hemisferio izquierdo rige el lenguaje, la lógica y
la razón del pensamiento lineal. Se concentra en lo tangible
y mensurable. Trabaja con las partes y las relaciones de causa
a efecto entre ellas antes de percibir una totalidad correlacio-
nada. Percibe el detalle. Su funcionamiento es masculino-ac-
tivo-yang. Controla la mitad derecha del cuerpo. El hemisfe-
rio derecho trabaja con imágenes y símbolos, rige la intuición,
la visión de conjunto, la imaginación. Trabaja con los conjuntos
y configuraciones, las ambigüedades y los pares de opuestos.
Percibe la totalidad. Su funcionamiento es femenino-receptivo-
yin. Controla la mitad izquierda del cuerpo.
Normalmente predomina la acción de un hemisferio sobre
otro, pero ambos progresan y evolucionan de forma equili-
brada e integradora, mediante el desarrollo del aprendizaje y
de las habilidades y capacidades potenciales de cada persona.
Siempre existe una comunicación entre ambos, como un inter-
cambio de diálogos, cada uno con su lenguaje.
Como vemos en la estructura del cerebro, y aunque es un
órgano que no se conoce en su totalidad, ambos hemisferios
están separados, pero existe un puente en el cual se encuen-
tran las partes mas internas del cerebro, como son el tálamo,
el hipotálamo, el sistema límbico, (núcleo del alma), el área
integradora de las emociones vinculadas a la memoria de las
sensaciones (situada en la parte interna de la cisura central),
la hipófisis y la glándula pineal, íntimamente relacionada con
el llamado tercer ojo.
Hay técnicas limpias que potencian el desarrollo de ambos
hemisferios, como son el yoga, la meditación, los juegos de ló-
gica, la resolución de problemas, ejercicios matemáticos, etc.
En las escuelas espirituales se considera importante y necesa-

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTI CA 687


rio que esta comunicación se produzca de forma equilibrada,
con un desarrollo gradual del potencial de cada hemisferio,
de lo espiritual a lo físico, como un todo equilibrado. Y este
desarrollo lleva años. La glándula pineal, que se va abriendo
poco a poco como consecuencia de un trabajo interior previo,
tiene que ver con la función integradora de las experiencias
relacionadas con ambos hemisferios.
No a todo el mundo le interesa la meditación u otras técnicas
para despertar capacidades extrasensoriales. Igualmente, no a
todo el mundo le interesan los ejercicios de lógica. De esta for-
ma, según necesidades y aptitudes, cada uno se orienta en la
vida para obtener lo que necesita.
El autor Carlos Castaneda se refiere a las funciones del he-
misferio derecho como nagual, y a las funciones del hemisferio
izquierdo como tonal. En los libros de Carlos Castaneda, instrui-
do en las tradiciones chamánicas, se refleja el hecho de que en
nuestra cultura no se permite una buena y fluida comunicación
entre las funciones del Tonal y las del Nagual, es decir, la razón
se ha convertido en carcelera de la intuición y de la percepción
extrasensorial natural, en vez de ser una valiosa herramienta
de comprensión.
Las personas con Árboles Especiales, y con numerosos sen-
deros vacíos de Kether a Maljuth, tienen necesidad de compren-
der los planos sutiles, porque tienen acceso especial al mundo
del Nagual. Estas personas tienen un gran potencial espiritual
y necesitan afianzar lo sutil en lo físico.
Cuando se consumen drogas sin control, se rompe este equi-
librio de comunicación y desarrollo integrador gradual de am-
bos hemisferios. El efecto es similar al paso de un voltaje de
alta tensión por unos cables que sólo pueden soportar media
o baja. Como consecuencia, los planos sutiles se yuxtaponen,
aparecen sin control, al haber sido abierta una puerta a lo bru-
to. El delicado equilibrio entre los puentes se rompe a un nivel
funcional, y aparecen problemas físicos y psíquicos graves, uno
de los cuales es la esquizofrenia.
Cuando cualquier muchacho consume droga, sus canales de
percepción se amplían, no conoce en qué plano y en qué ni-

688 ViLLA RRUBIA / HAUT / MILLERA


vel está, ni cómo operan las leyes de cada plano. No compren-
de lo que ve ni lo que percibe. Su cuerpo físico se deteriora y
se intoxica, y también se deteriora su cuerpo mental. No sabe
dónde dirigir su voluntad, que se va anulando progresivamen-
te. Pierde la capacidad de discernir, y el control de sí mismo.
Si consigue salir a tiempo, con la ayuda adecuada podrá com-
prender, y podrá rehacer su vida. Si las secuelas le ocasionan
algún tipo de esquizofrenia, o cualquier otro problema mental,
salir adelante le va a resultar más difícil y doloroso.
El significado de la palabra esquizofrenia viene del griego
schizoos = hendir, separar, y phren = razón, sentido común.
El esquizofrénico pierde el contacto con el plano físico. Se aísla
del mundo ordinario, y se pierde, en cierto sentido, en viven-
cias internas en los planos sutiles. Vive otra realidad, y le es
difícil integrar lo que vive en otros planos en el mundo físico.
Estas vivencias son reales, percibe otros planos de existencia,
y su propia proyección en esos planos. Cuando intenta comu-
nicar lo que vive, debido al enorme desconocimiento de los
planos sutiles, se le suele interpretar como algo que sólo existe
en su imaginación, y que roza de alguna manera la locura.
El esquizofrénico es inmensamente sensitivo, y percibe que
se le va a juzgar corno un loco, por lo cual se retrae en sí mismo
y en su mundo interior, se vuelve apático e indiferente y se aís-
la del mundo físico que le rodea, y que le resulta más incómodo
que los planos sutiles. Pueden ser muy inteligentes, intelectua-
les, y con gran sensibilidad para la música y la pintura. Pintan
lo que ven en los planos sutiles, y hacen trabajos extraordina-
rios de marcado carácter simbólico y onírico.
La adolescencia es una etapa de riesgo para que se produzca
un primer brote de esquizofrenia de forma espontánea, ya que
en esta etapa se acentúan las crisis, las frustraciones y la nece-
sidad de ser aceptado, valorado y reconocido, y de autoafir-
marse.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 689


16.5. Posibles aportaciones de la Kabbalah:
El análisis del Árbol individual en relación
con la medicina y la psicología

La psiquiatría es una rama de la medicina que estudia el diag-


nóstico y tratamiento de los trastornos psicosomáticos y psico-
sociales, considerando como un todo lo social, lo psicológico y
lo biológico. Investiga cuadros psicológicos de enfermedades
físicas, y trastornos físicos que provienen de enfermedades o
problemas psíquicos. Investiga los efectos de sustancias far-
macológicas (tranquilizantes y antidepresivos) y otros medica-
mentos, combinadas con otras terapias como el psicoanálisis.
La psicología es la ciencia del alma, vinculada a la filosofía,
a lo mítico y a todo lo humano, incluidos los efectos de las di-
ferentes culturas en la conducta. Estudia los fenómenos de la
vida psíquica del ser humano que se encuentran en el origen
de su comportamiento y de sus relaciones ·afectivas y socia-
les. Estudia los caracteres y los diversos tipos de personalidad,
los mecanismos que regulan las emociones, los sentimientos, el
aprendizaje, la memoria, la inteligencia y el comportamiento del
individuo. La psicología tiene distintas ramas: psicología del desa-
rrollo (psicología en las distintas edades), psicología pedagógi-
ca (educación y orientación profesional), psicología diferencial
(análisis de las topologías individuales y de grupos étnicos),
psicología comparada (estudio de la psicología animal y su re-
lación con la conducta humana), psicología personal, interper-
sonal, grupal, intergrupal y sociológica.
Se diferencia de la Psiquiatría en que ésta es una rama de la
Medicina, y la Psicología lo es de las Ciencias Antropológicas.
Desde el punto de vista científico, la Psiquiatría se ocupa de
investigar lo clínico, y la Psicología (que también tiene la espe-
cialidad clínica) es una disciplina con un ámbito más amplio y
versátil, al ocuparse del estudio y tratamiento de los problemas
de la mente y de la personalidad mediante terapias basadas
en la modificación de la conducta: terapias individuales y de
grupo, que facilitan la aceptación, la exteriorización, la comu-

690 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


nicación y la interacción con otras personas con el mismo pro-
blema, sacándolas de su aislamiento y afianzando en ellas una
actitud positiva ante cualquier situación.
La psicología clínica se encuentra vinculada a la psiquia-
tría. El psicólogo clínico trabaja en equipo con el psiquíatra en
centros especializados para el tratamiento de enfermedades y
problemas psicofísicos. Las técnicas de psicometría y psico-
diagnóstico se realizan mediante el uso de distintas baterías
de pruebas (de inteligencia, personalidad, estructura mental,
creatividad, etc.), cuestionarios y escalas, observaciones y re-
gistros de conducta, y todo tipo de pruebas psicofisiológicas y
cognitivas.
La Kabbalah, como ciencia espiritual transpersonal, me-
diante el análisis del Árbol de la Vida personal, enfoca cada
programa de vida como la herramienta perfecta que es para
el desarrollo y la evolución del individuo, dentro de un marco
mucho m as amplio que concierne a toda la humanidad desde
el principio hasta el fin de los tiempos.
El conocimiento, aceptación y comprensión del propio
Programa de Vida Personal es la base indispensable para co-
nocer y realizar el Metaprograma o tikún, es decir, la tarea o
misión para la cual hemos nacido con determinado Programa
de Vida como herramienta, con unas características concretas
y determinadas para un aprendizaje específico, perfecto y ade-
cuado para lo que venimos a realizar.
Podemos valorar adecuadamente tanto lo que somos como
nuestro Programa de Vida, por muy difícil o duro que sea, cuan-
do lo comprendemos. Para ello hay que conocerlo bien, saber
para qué somos así, sólo entonces podemos aceptarlo y acep-
tar lo que somos sin poner objeciones, querernos y sentirnos
integrados en una unidad, y dejar de ser seres escindidos, con
múltiples yoes que nos piden cosas contradictorias, y tiran de
nosotros en distintas direcciones, a menudo opuestas entre sí.
Para ello debemos ser capaces de mirarnos desde nuestras pro-
pias peculiaridades, capacidades y habilidades, y saber discer-
nir lo que somos y lo que no somos ni podemos llegar a ser.
Todos somos expertos en miramos desde nuestras carencias,

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 691


desde lo que creemos que nos falta, distorsionando la realidad
con errores de apreciación.
El conocimiento y realización de este tikún está en perfecta
sintonía con cada Programa de Vida Personal y con su estruc-
tura y características concretas, independientemente del grado
de dificultad o incomodidad. Representa el propósito para el
cual se es de una determinada manera, concreta y específica.
Cuando se comprende el propósito de cada dificultad o inco-
modidad, de cada capacidad y habilidad, incluso de cada ca-
rencia, todo cobra un nuevo sentido, todo encaja en su sitio
perfectamente. Para aceptar el dolor es necesario ver en él un
sentido, una dirección y un propósito constructivo por encima
de una fe impuesta. Este es el camino para hacerlo fructificar:
comprenderlo e integrarlo a la luz de un propósito que pueda
cumplirse y que resuene dentro de nosotros mismos. Si logra-
mos comprender, integrarnos, querernos y aceptarnos, pode-
mos ofrecer lo mejor de nosotros mismos a los demás.
A la luz de la Kabbalah, un Árbol de la Vida especial, duro
y complejo, como los que nos ocupan, es un Árbol perfecto.
Representa una oportunidad preciosa y sagrada para madurar
y trabajar aspectos que permanecen sin resolver, y para apren-
der a desarrollar aspectos nuevos que darán su fruto en el futu-
ro. Este fruto depende del trabajo de integración de los aspec-
tos duros y dolorosos del Árbol de la Vida.
Árboles como éstos, con un número importante de senderos
vacíos, no se pueden evaluar desde un punto de vista psico-
físico sin tener en cuenta el aspecto espiritual transpersonal.
Las respuestas y la perspectiva que ofrece la Kabbalah, en sin-
tonía con las más importantes tradiciones espirituales de orien-
te y de occidente que se ocupan desde tiempos remotos del
equilibrio entre espíritu, alma, mente, cuerpo y vida, no pue-
den ser ofrecidas todavía por la Psicología ni por la Medicina.
Todo aquello que no es mensurable con aparatos físicos, ni vi-
sible con los ojos en el plano físico deja de tener crédito e inte-
rés científico y acaba siendo desestimado. Existe una falta de
conocimiento de los planos sutiles, invisibles, pero no por ello
inexistentes ni imperceptibles. Nos han llegado perfectamente

692 YILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


definidos y conocidos por antiguas tradiciones orientales mi-
lenarias, y van siendo corroborados lentamente por la ciencia
(por la Física Cuántica, las Matemáticas y la Química) y que
asimismo tienen su representación esencial en el Árbol de la
Vida y en la tradición Cabalística.
La medicina, la psiquiatría y la psicología pueden ofrecernos
mucho: el avance en la investigación de fármacos más eficaces
y menos dañinos, el conocimiento bioquímico del organismo
humano, la definición perfecta de cada conflicto y de sus efec-
tos, y la investigación y aplicación de nuevas terapias, las cua-
les, por su parte, tienden a ser cada vez más holísticas.
No obstante, existe hoy en día una limitación importante a
la hora de tratar y enfocar los problemas mentales. Al desco-
nocer los planos sutiles (por ejemplo, el astral y sus diferentes
niveles, o los planos espirituales superiores) se distorsiona el
enfoque de la enfermedad, y por tanto la frontera entre lo nor-
mal y lo patológico, por lo que el enfoque del tratamiento pue-
de resultar parcial. Partimos de la base de que gran parte de lo
que perciben algunas personas tratadas como enfermas es real,
otra parte son sus proyecciones en los planos sutiles, y que la
falta de comprensión de lo que perciben y la falta de ayuda por
desconocimiento de dichos niveles les agudiza la enfermedad.
Tal vez lo que perciben los enfermos pueda ser materia de in-
vestigación, pudiendo agrupar experiencias como para darles
una importancia mayor, en vez de relegar esas vivencias al ám-
bito de la imaginación y la locura.
Ayudaría mucho en el tratamiento de un problema psíquico
(por ejemplo en una esquizofrenia), que la persona afectada
supiese qué es lo que está viendo, qué nivel o niveles de un
plano tiene tendencia a vivir y por qué, qué estructura tiene su
programa de vida y con qué finalidad, a dónde le lleva o para qué
es así, qué significado tiene lo que ve, cómo debe integrar de ma-
nera útil su aprendizaje de otros planos (experiencias, vivencias,
proyecciones) en el mundo físico, en el cual debe vivir y residir,
para llegar a valorar adecuadamente el plano físico y la opor-
tunidad que representa .e star aquí, y tener un cuerpo como ve-
hículo de expresión. Le ayudaría saber que con toda seguridad

MAN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 693


es más sensitivo que la mayoría de la gente, y que de alguna manera
es alguien especial, no necesariamente un enfermo mental, en clara
relación de inferioridad con respecto al resto de las personas sanas.
Sin entrar a delimitar las fronteras, básicamente la medicina se es-
pecializa en los problemas del cuerpo físico; la psicología, en los me-
canismos inherentes a la personalidad y al alma; la Kabbalah, por su
parte, centra su perspectiva desde el espíritu, el cual se expresa de una
forma determinada con un propósito determinado, admitiendo todos
los mecanismos de evolución posibles, comprendidos los que están
fuera de las coordenadas espacio-temporales habituales.
Al establecer un paralelismo entre macrocosmos y microcosmos
mediante un conocimiento de los diferentes planos de manifestación,
imprescindibles para la existencia, y desde los planos más sutiles hasta
el plano físico, la Kabbalah aporta una visión de conjunto del ser hu-
mano y respuestas esenciales y existenciales para mantener todos los
planos en un equilibrio particular y no estereotipado para cada uno
de nosotros. Esta visión de conjunto, útil y amplia, no está hoy al al-
cance de otras ciencias, si bien la moderna psicología transpersonal,
a través de su más insigne exponente, Ken Wtlber, tiene una visión
que, salvando las diferencias de terminología, es prácticamente la mis-
ma. Sin embargo, en general, cada ciencia desde su ventana particular
y su propio campo de operaciones, y en especial las disciplinas que
Wilber denomina «de la mano derecha» (ciencias experimentales que
se basan en la observación de fenómenos, y no en la interpretación de
corrientes espirituales, culturales, artísticas; de sentimientos, en defini-
tiva) tienden a rechazar aquello que desconocen.
La Kabbalah aporta una valiosa perspectiva y la posibilidad de pre-
ver un problema como es el de la drogadicción antes de que se mani-
fieste. El Árbol de la Vida individual puede ser una buena herramienta
al servicio de la psicología, al igual que lo son otras técnicas psicomé-
tricas, mediante la interpretación adecuada de los conflictos y dificul-
tades de estos Árboles especiales, de las dificultades de expresión y
comunicación que presentan en el área de la personalidad, reforza-
das por los conflictos existentes en los planos del alma y del espíritu,
y de la información que nos revelan los demás senderos y las fases
de crisis y/ o anticrisis. Si un Árbol nos refleja determinados conflic-
tos que alertan nuestra atención, y percibimos que están sin resolver,

694 ViLLARRUBIA / HAUT / MILLERA


podemos buscar la ayuda más adecuada en cada momento y en cada
circunstancia, para permitir que el niño vaya madurando e integrando
sus dificultades día a día, antes de que las consecuencias de la falta de
aceptación e integración sean las que estamos tratando.
Tal vez algún día los médicos y psicólogos de la Nueva Era sean
holistas, y acepten e integren en sus estudios, siempre con el más
absoluto rigor y seriedad, el trabajo con otras disciplinas como la
Kabbalah, la Astrología, las medicinas alternativas, las posibilida-
des que ofrece la energía, etc. como herramientas válidas comple-
mentarias a las suyas.

76. 6. Posibles soluciones


¿Qué se puede hacer cuando se sospecha el problema, o éste ya se
ha manifestado? Ante todo es preciso documentarse lo más posible
y buscar ayuda profesional, sin descartar otras terapias alternativas,
que combinadas de manera oportuna y adecuada pueden ser de gran
ayuda.
Hay que considerar que en épocas de manifestación de las crisis
o anticrisis de ciclo largo, o de enfermedad, la fuerza de voluntad de
estos jóvenes se ve alterada. No les es factible un ritmo continuado de
actividad, sino que funcionan de forma intermitente, según el nivel de
motivación de cada momento hacia cada actividad. Por lo tanto, resul-
ta positivo no forzar con estudios o tareas que requieran un esfuerzo
continuado, pero también se debe mantener un cierto nivel de disci-
plina flexible, intentando introducir otras tareas y actividades com-
plementarias, que mantengan a la persona ocupada, y que le permi-
tan más o menos disfrutar de lo que hace. Es positivo estar abiertos a
nuevas posibilidades de orientación personal y profesional para estas
personas, siempre considerando sus capacidades y las características
de su programa de vida.
Si le estamos prestando atención especial a un miembro del núcleo
familiar con estas características, será positivo involucrar en esta tarea
a todos sus componentes, valorando positivamente el esfuerzo de cada
cual, para que esa especial atención hacia uno no genere sentimientos
de desinterés y abandono por parte de los demás.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 695


La mejor forma de enfocar una situación derivada de la droga
y sus consecuencias, de un brote de esquizofrenia, o simplemente
de un niño difícil dentro de la familia, es aceptarla, en lugar de
seguir la «política del avestruz» negando el problema, buscar la
ayuda necesaria y considerar que estas personas os brindan una
oportunidad para crecer, aprender, madurar y ser capaces de ayu-
darlas. La práctica de disciplinas como el yoga y la meditación,
o los métodos de crecimiento personal, son técnicas «limpias» que
pueden ayudar a reestructurar y equilibrar el puente de conexión
entre hemisferios cerebrales, y con el tiempo, a integrar, equilibrar
y sanar.
Los libros llamados genéricamente «Nueva Era», escritos mu-
chos de ellos por autores de reconocido prestigio (ver referencias
bibliográficas), ofrecen una amplia gama de disciplinas y temas
de autoayuda que pueden ser de gran utilidad para satisfacer la
necesidad de aprender a discriminar e integrar las vivencias en
los distintos planos de la vida desde la perspectiva espiritual, y
pueden ser compartidos a nivel familiar. Muchos de estos niños
y adolescentes tienen inquietudes y aptitudes que se mueven en
esta dirección.
Además de las posibilidades que nos brindan la psicología o la
medicina, y en coordinación con los terapeutas, puede ser bueno
que realicen actividades como el teatro, la pintura, la escritura, la
poesía, manualidades como la cerámica, el trabajo con el cuero, la
madera u otras artesanías, pues son seres sensibles y creativos. La
práctica de deportes y algún tipo de artes marciales como el aikido
y el tai-chi va acompañada de una filosofía de vida enriquecedora
y positiva, que puede ayudar a integrar.
Mediante la Kabbalah se pueden estudiar los efectos de un cam-
bio de nombre, por ejemplo un diminutivo por otro, llegando en
los casos extremos a un cambio total, incluso a efectos legales en el
Registro Civil. Cada nombre conlleva un programa, y un cambio
de nombre introduce cambios en el programa. Se trata de intro-
ducir cambios beneficiosos que ayuden a fluir y expresar mejor
los flujos de energía que atraviesan los diferentes planos, para
disolver (o al menos suavizar) los bloqueos y los efectos de las
configuraciones incómodas, y asentar mecanismos de respuesta

696 VILLARR UBIA / HAUT / MILLERA


positivos. Un cambio en el nombre, si se efectúa de forma correc-
ta, puede proporcionar una apertura a nuevas vías de expresión,
pero no borra el programa original. Esto es bueno, porque permi-
te integrar gradualmente, sin perder el propósito original. Y pue-
de ser una ayuda más, combinada con otras posibles soluciones.
Si un determinado diminutivo no resulta adecuado porque no re-
suelve nada, se pueden buscar otros nombres que expresen mejor
la vibración profunda, tal como han hecho a lo largo de la historia,
de la literatura y de la mitología artistas de todo tipo, músicos, pin-
tores, actores, o bien héroes, guerreros o guías, tanto políticos como
espirituales. La expresión de esta vibración profunda significa que a
la persona afectada le debe resonar el nuevo nombre propuesto y
lo acepta para incorporarlo y utilizarlo en su vida cotidiana. Es en
todo caso la persona afectada quien tiene que elegir.

76. 7. Ejemplos reales de Árboles especiales


En las páginas siguientes se recogen once Árboles que tienen este
perfil. Todos ellos son casos reales. La mayoría pertenecen a perso-
nas que habiendo caído en la drogadicción, se encontraban en pro-
ceso de rehabilitación en el momento de redactarse este capítulo.
Junto al diagrama de su correspondiente Árbol, cada caso incluye
un pequeño cuadro con algunas de las magnitudes deducidas de
las cargas de las sefirot y un comentario con los aspectos más rele-
vantes. La interpretación que podría hacerse de cada Árbol sería,
por supuesto, mucho más amplia, pero hemos preferido ceñirnos a
lo más obvio de cada caso, dejando al lector la posibilidad de am-
pliarlo con los conocimientos que hasta este momento hayan podi-
do adquirir como consecuencia del estudio de la presente obra.
Tan sólo nos queda añadir que, en cualquier caso, se trata de
manifestaciones de lo Sagrado, aunque no siempre sea fácil apre-
ciarlo. Por lo tanto, debemos acercarnos a cada caso con sumo res-
peto como manifestación de nuestro amor.

MANUAL DE KABBALA!-1 PRÁCTICA 697


Figura 55
Caso real: A.

Anticrisis de ciclo corto (mes 1 1 / 4 de cada ciclo de 5 meses) en


sendero 5. Anticrisis de ciclo largo (año 7 de cada ciclo de 28 años)
en sendero l. Crisis de ciclo largo (año 21 de cada ciclo de 28) en
sendero 10. Sobrecargas en senderos 1, 5 y 6. Senderos semilla: 3,
9, 12, 18 y 21. Doble oculto en sendero 14. Complejo en Guevurah.
Represión en Netzaj. Oposición de bloqueo en Triadas a Ascética y
Mística. Abertura (indefensión) frente al campo social transpersonal
en sendero 7. Configuración de «mosquito» en Yesod. La gran dife-
rencia de cargas de Keter sobre Maljut (eje Arriba-Abajo) y de Tiferet
sobre Yesod (eje Este-Oeste) junto con el acento en senderos 2 y 11,
propicia una clara tendencia al «cuelgue» y a rechazar los planos infe-
riores. Gran transferencia de energía hacia los aspectos mentales, junto
con un balance fuertemente positivo en el elemento Tierra, lo que hace
del sujeto sumamente susceptible a las energías y a las influencias del
entorno. Su Tiferet fuerte, sin embargo, puede serle de ayuda, si bien
puede originarle también un concepto sobreelevado de su capacidad
para afrontar el problema de la drogadicción. Destaca también su bajo
nivel de autoestima, manifestado en la baja carga relativa de Yesod.

Balance de elementos:
Potencial Expresión Diferencia
Fuego 1,67 0,93 - 0,74
Agua 1,21 1, 12 - 0,09
Aire 0,63 1,46 + 0,83
Tierra 0,33 1,09 +.0,76

Otros datos:
La desviación media es de 0,54, lo que indica un nivel de integración bajo
(alma joven). Ello hace que queden fuera de rango normal Keter y Ttleret,
por exceso, y Guevurah, Yesod y Maljut por defecto. Como consecuen-
cia, el sujeto se vive en un casi constante proceso de «iluminación», ape-
nas sin contacto con el plano físico. La baja carga relativa de Guevurah
hace que la autocomplacencia y la falta de rigor sean patentes.

698 VILLARRUBIA / HAUT / M ILLERA


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Figura SS

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 699


Figura 56
Caso real: B.

Crisis de ciclo corto (meses 7 y 14 de cada ciclo de 14 meses) en


senderos 5 y 14. Crisis de ciclo largo (años 15 y 30 de cada ciclo
de 30 años) en senderos 12 y 3. Sobrecarga en sendero 6. Sendero
semilla: 17. Represión en Yesod. Bloqueo en punto de cruce 4° (sen-
dero 6 bloquea al 8). La gran diferencia de cargas de Binah sobre
Jokmah (eje Fin-Principio) unida a la gran sobrecarga del sendero 6
alude muy probablemente a una madre sumamente dominante,
respecto a la cual el sujeto tiene serias dificultades para cortar sus
«cordones umbilicales». Por otra parte, el predominio de Jesed so-
bre Guevurah en el eje Bien-Mal habla, o bien de autoindulgencia,
o bien de crueldad, o bien de ambas cosas. Posibilidad de coinci-
dencia temporal de crisis en los senderos 3 (ciclo largo) y 5 (ciclo
corto): cuando sucede, aparece un «muerto» temporal en Jokmah.
El balance positivo en el elemento Tierra, unido al nivel relativa-
mente bajo de Netzaj, hace al sujeto sensible a las influencias del
medio.

Balance de elementos:
Potencial Expresión Diferencia
Fuego 1, 1 7 0,68 - 0,49
Agua 1, 13 1,57 + 0,44
Aire 0,92 0,96 + 0,04
Tierra 0,67 1,03 +.0,36

Otros datos:
La desviación media es de 0,34, lo que indica un nivel de integra-
ción medio. Se encuentran fuera de rango normal Binah y Jesed
por exceso, y Jokmah y Maljut por defecto. Así, a la figura domi-
nante de la madre se une un padre débil. También en este caso
aparece un Maljut con baja carga relativa, que muestra el escaso
arraigo del sujeto al plano material.

700 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


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Figura 56

MANUAL DE KABllALAH PRÁCTICA 701


Figura 57
Caso real: M.

Anticrisis de ciclo corto (mes 51 / 4 de cada ciclo de 21 meses) en


senderos 3, 12 y 21. Crisis de ciclo largo (año 20 1 / 4 de cada ciclo
de 27 años) en sendero 18. Anticrisis de ciclo largo (año 6 3/ 4 de
cada ciclo de 27) en sendero 9. Sobrecargas en senderos 3, 12 y 21.
Senderos semilla: 2, 5, 11, 14 y 20. Doctorados en senderos 3, 12 y
21. Complejo en Jesed. Represión en Tiferet. Lo más destacable es
la baja carga relativa de Tiferet respecto a todas las demás sefirot,
que forman una especie de «coraza» defensiva respecto a la esfera
central. Ello hará que, una vez que esa coraza quede perforada,
la individualidad del sujeto corra serio peligro de disgregación.
Si logra consolidarla, puede llegar a ser un gran maestro (carga
negativa en Tierra sumamente alta). Gran transferencia de energía
hacia los aspectos emocionales, manifestada por el alto nivel de
Expresión y la diferencia positiva en el elemento Agua.

Balance de elementos:
Potencial Expresión Diferencia
Fuego 1,67 1,48 -o, 19
Agua 1,08 1,70 + 0,62
Aire 1,43 1,00 - 0,43
Tierra 2,00 1,46 -.0,54

Otros datos:
La desviación media es de 0,37, por tanto con un nivel de integración
medio. Aparecen fuera de rango normal Binah y Maljut, por exceso, y
Keter y Tiferet, por defecto. En este caso se observan unos padres muy
fuertes a la vez que una individualidad sumamente débil y vulnera-
ble, destacando la bajísima carga relativa de Ttferet. Ello hace que el
sujeto sea muy influenciable, una vez que se traspasa la fuerte barrera
de convenciones sociales y educativas marcadas por las fuertes cargas
de las sefirot periféricas, excepto Keter. Al estar esta última fuera del
rango normal, muestra que el ambiente en el que el sujeto creció y se
educó fue de tipo materialista y escasamente espiritual.

702 Y ILLARRUBIA / HAUT / MI LLERA


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Figura 57

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 703


Figura 58
Caso real: S.

Crisis de ciclo corto (meses 20 y 40 de cada ciclo de 40) en sende-


ro 22. Crisis de ciclo corto (mes 30 de cada ciclo de 40) en senderos 4
y 13. Crisis de ciclo largo (años 18 y 36 de cada ciclo de 36 años) en
sendero 18. Crisis de ciclo largo (año 27 de cada ciclo de 36) en sende-
ro 9. Sobrecargas en senderos 2, 11 y 20. Senderos semilla: 3, 12 y 21.
Doctorados en los senderos 22, 4 y 13 («senderos del Dragón»), lo que
podría indicar problemas a lo largo de la columna vertebral. Ídolo en
Binah. Vampiro en Hod. Represión en Yesod. Sernicomplejo en Jesed.
Las bajas cargas de la pareja Jokrnah-Binah hablan probablemente de
unos padres débiles. La fuerte sobrecarga del sendero 2 puede indicar
tendencia al fanatismo, bien de tipo ideológico, bien de tipo religioso
o político. La fuerte carga de Tiferet, unida a la muy baja de Yesod, in-
dican un nivel de autoestima muy bajo. Gran transferencia de energía
hacia los aspectos mentales (alto saldo positivo en el elemento Aire).

Balance de elementos:
Potencial Expresión Diferencia
Fuego 1, 17 1, 1() - 0,07
Agua 1,58 0,70 -0,88
Aire 0,55 1,50 + 0,95
Tierra 1,33 1, 12 -.0,21

Otros datos:
La desviación media de 0,57 indica un nivel de integración bajo.
Están fuera de rango normal Meter, Guevurah y Tiferet, por exce-
so, y Yesod por defecto. Ello indica, probablemente, un ambiente
familiar y/ o educativo de religiosidad muy tradicional, que de-
semboca en un nivel de autoestima bajo mínimos. Se le plantean
al sujeto altas metas y objetivos que se siente incapaz de alcanzar,
máxime cuando sus padres presentan una estructura débil desde
el punto de vista del propio sujeto, además de estar inmersos en
una profunda incomunicación mutua. El carácter «angélico» (en
blanco) del sendero 16 muestra, finalmente, una gran vulnerabili-
dad a a las crisis y contratiempos de la vida.

704 VJ LLARR UBIA / HAUT / M il.LERA


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Figura 58

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 705


Figura 59
Caso real: C. J.

Anticrisis de ciclo corto (mes 4 1 / 4 de cada ciclo de 18 me-


ses) en senderos 9 y 18. Crisis de ciclo largo (año 221/2 de cada
ciclo de 30) en senderos 3 y 12. Crisis de ciclo largo (año 15 de
cada ciclo de 30) en sendero 21. Sobrecargas en senderos 5, 9,
14 y 18. Línea oculta en sendero 13. Doctorados en senderos 9 y
18 (facultades mediúmnicas) y dobles doctorados en senderos
3, 12 y 21. Árbol partido, con el conjunto Guevurah-sendero 12-
Hod separado del resto del Árbol. Cuasi-dictador. Oposición de
Tríadas Raíces-Fe: El sujeto se siente pertenecer a algo en lo que
en realidad no cree. Fuertes desequilibrios en los cinco ejes di-
mensionales: Principio-Fin (relación 2:1), Bien-Mal (relación 7:2),
Arriba-Abajo (relación 2-5), Norte-Sur (relación 2:7) y Este-Oeste
(relación 3:2). Es un gran dador de energía, como lo prueba su alto
valor negativo en el saldo de Tierra.

Balance de elementos:
Potencial Expresión Diferencia
Fuego 1,22 1,30 + 0,08
Agua 1,25 1,05 - 0,20
Aire 0,93 1,06 + 0,13
Tierra 1,67 1, 19 -.0,48

Otros datos:
La desviación media es elevada, 0,48, aunque dentro del nivel
que permite considerar la integración como media. Se encuentran
fuera del rango normal por exceso Jokmah, Jesed y Maljut (esta
última esfera en el límite de tolerancia), y Guevurah y Hod, las dos
esferas descolgadas del Árbol, por defecto. En este caso se observa
a un padre fuerte, lo que unido al alto nivel emocional del sujeto,
hace que vea posiblemente en la droga la única vía para salir de
una situación que se le hace insoportable. Destaca la fuerte estruc-
tura de la Tríada de los Deseos.

706 VILLARRUBIA / HAUT / MIi. LERA


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Figura 59

MANUAL DE KABBALAt-1 PRÁCTICA 70 7


Figura 60
Caso real: M. A.

Crisis de ciclo corto (meses 19 y 38 de cada ciclo de 38 meses) en


senderos 2 y 11. Crisis de ciclo largo (año 151/2 y 31 cada ciclo de 31)
en senderos 4 y 13. Sobrecargas en senderos 5 y 8. Línea oculta en sen-
dero 21. Doctorados en senderos 4 y 13 (este último, no indicado en el
diagrama). Senderos semilla: 22, 1, 6, 10, 15 y 19. Doble ídolo Jokmah-
Binah. La baja expresión en el elemento Tierra (que es a la vez la media
de cargas de las diez sefirot) indica un temperamento general de esca-
sez de estímulos y fuerzas a todos los niveles. Obsérvese la nula trans-
ferencia entre potencial y expresión en el elemento Aire, que se refie-
re a los aspectos mentales. Al ser oculta la única línea del sendero 21
(el cual es, además, el único enlace con.Ja tierra), sólo en caso de estí-
mulos poderosos el sujeto sale de su ensoñación, permaneciendo el
resto del tiempo en práctico estado de «cuelgue».

Balance de elementos:
Potencial Expresión Diferencia
Fuego 0,86 1,27 + 0,41
Agua 1,38 0,97 - 0,41
Ai re 0,82 0,82 0,00
Tierra 0,33 0,95 +.0,62

Otros datos:
La desviación media, 0,44, indica un nivel de integración medio; pero el
bajo nivel de expresión de Tierra, equivalente a la media de cargas del
Árbol, hace que el sujeto se viva en una especie de languidez o sopor
casi permanente. Nada menos que seis sefirot aparecen fuera de rango
normal: Jokmah, Jesed y Guevurah por exceso, y Meter, Hod y Maljut
por defecto. En este caso se cumple el principio taoísta de que el exceso
de yang desemboca en yin, y viceversa; pues el exceso de tensión deri-
vado de tener más de la mitad del Árbol fuera de rango normal hace
que el sujeto se sienta incapaz de controlarla, desembocando, por tanto,
en el mencionado sopor o languidez. Al estar Maljut unido al resto del
Árbol sólo por una línea oculta en el sendero 21, hace que el sujeto sólo
salga de su estado de adormecimiento y pise tierra cuando los estímulos
que reciba sean de alta intensidad.

708 V!LLARRU BIA / HAUT / MIi.LERA


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Figura 60

MANUAL DE KAIJBALAH PRÁCTICA 709


Figura 61
Caso real: M.

Crisis de ciclo corto (meses 41/2 y 9 de cada ciclo de 9 meses)


en sendero 9. Crisis de ciclo largo (año 15 3 / 4 de cada ciclo de 21)
en sendero 21. Anticrisis de ciclo largo (año 5 1 / 4 de cada ciclo
de 21) en senderos 3 y 12. Sobrecargas en senderos 3, 7 y 12. Líneas
ocultas en senderos 12, 13 (en este caso doble) y 20, además de otra
también doble, pero de origen social, en el sendero 16. Doctorados
en senderos 3, 12 y 21. Senderos semilla: 5, 8, 14 y 17. Semiídolo
en Jokmah. Complejo en Jesed. Semirrepresión en Netzaj. Desde
el punto de vista subjetivo, todos los flujos de energía pasan por
Hod, lo que confiere al sujeto una expresión de sus emociones y
sentimientos marcadamente mental («darle al coco»).

Balance de elementos:
Potencial Expresión Diferencia
Fuego 1,53 1,27 - 0,26
Agua 1,00 1,28 + 0,28
Aire 1, 13 1, 11 + 0,02
Tierra 1,00 1,20 +.0,20

Otros datos:
La desviación media (0,39) indica un nivel de integración medio.
Están fuera de rango normal por exceso Binah, Guevurah y Hod,
y Jesed por defecto. Por lo tanto, es el Pilar completo de la Severidad,
el que se encuentra en esta situación, por lo que la influencia del
entorno social sobre el sujeto es sumamente fuerte. Como contra-
partida, destacamos el nivel bajísimo de Jesed, que aparece ade-
más afectada por la configuración incómoda de complejo y por
dos senderos semilla.

71 Ü VILL/\RRUBIA / HAUT / MILLERA


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Figura 61

M ANUAL DE KABBAI.AH PRÁCTICA 711


Figura 62
Caso real: A.

Coincidencia de ciclos cortos (38 meses) y largo (38 años) en los


senderos 2, 11 y 20, con anticrisis general (aunque lógicamente, con
oscilaciones) en torno al año 9 1/2 de cada ciclo largo; estos mis-
mos senderos presentan fuertes sobrecargas, lo que también sucede
en el sendero 9. Líneas ocultas en los senderos 22, 13, 16, 15 y 18,
en los dos últimos de tipo social. Doctorados en senderos 22, 4, 6,
13 y 15. Senderos semilla: 1, 10 y 19. Ídolo en Binah. Complejo en
Jesed. Muerto en Yesod. Oposición de Tríadas Memoria-Inserción
en el Mundo, con el consiguiente bloqueo mutuo: La configuración
muestra una fuerte tendencia a controlar todos los aspectos de la
vida, tanto por la fortísima carga de Tiferet, cuanto que esta esfera es
el único paso para toda la energía que procede de la mitad superior
del Árbol hacia la inferior. Es notable, además, el fuerte desequili-
brio en el eje Este-Oeste (relación 20:0), lo que puede indicar tanto
un gran miedo a la muerte como su opuesto, una tendencia al sui-
cidio.

Balance de elementos:
Potencial Expresión Diferencia
Fuego 1,36 1,02 - 0,34
Agua 1,50 0,97 - 0,53
Aire 0,73 1,61 + 0,88
Tierra 1,67 1,25 -.0,42

Otros datos:
La integración del sujeto es baja (desviación media 0,56), desta-
cando los desequilibrios que aparecen en varias partes del Árbol.
Lo más destacable es la situación fuera de rango normal de Keter y
Tiferet, ambos con carga relativa superior a 2 (o lo que es lo mismo,
por encima del 200 %), junto al O de Yesod. Como consecuencia,
la nula autoestima y el deseo de volver a lo que considera su ver-
dadero hogar, el Cielo, ofrecen una convivencia sumamente incó-
moda para el sujeto.

712 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


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Figura 62

MANUAL DE K ABBALAH PRÁCTICA 713


Figura 63
Caso real: M.

Crisis de ciclo corto (mes 4 1 / 2 de cada ciclo de 6 meses) en sen-


dero 6. Crisis de ciclo largo (año 21 de cada ciclo de 28) en senderos
1 y 10. Sobrecarga en sendero 3. Líneas ocultas en senderos 22 y 15
(sociales) y doble nativa en sendero 12. Doctorados en senderos
l, 7, 10 y 16, acompañado este último por el acento, lo que indica
una fuerte tendencia a «meterse en líos». Senderos semilla: 8, 17
y 19. Complejo en Jesed. Muerto en Yesod. Las esferas superio-
res presentan cargas sensiblemente más altas que las inferiores,
lo que indica fuerte tendencia al idealismo. y a las ensoñaciones.
Problemas intestinales (doble oculto en sendero 12). Oposición de
Tríadas Ascética-Mística. El sujeto es un fuerte «chupador» de la
energía del entorno, lo que puede hacer que, por una parte, absor-
ba todo tipo de energías negativas, y por otra, que tienda a dejar
agotados a quienes convivan con él.

Balance de elementos:
Potencial Expresión Diferencia
Fuego 1,86 1,33 - 0,53
Agua 0,96 1,33 + 0,37
Aire 0,67 0,82 + o, 15
Tierra 0,33 1,07 + 0,74

Otros datos:
Integración baja (desviación media, 0,51). Están fuera de rango
normal Jokmah y Binah por exceso (padres muy fuertes) y Jesed,
Yesod y Maljut por defecto (bajos niveles de autoestima y sequedad
afectiva). La fuerte sobrecarga en el sendero 3 indica relaciones
conflictivas entre los padres.

714 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


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Figura 63

MANUAL DE KAB ll ALAli PRÁCTICA 71 5


Figura 64
Caso real: T Esquizofrénico

Crisis de ciclo corto (mes 7 3/ 4 de cada ciclo de 9 meses) en sen-


dero 9. Crisis de ciclo largo (años 10 1/2 y 21 de cada ciclo de 21)
en senderos 3 y 21. Sobrecargas en senderos 1, 2 y 8. Líneas ocul-
tas en senderos 17 y 19 (este último social). Doctorados en sen-
deros 1, 3, 10 y 19. Senderos semilla: 22, 4, 12 y 13. Vía Muerta en
Jokmah. Represión en Tiferet. Vampiro en Hod. Ausencia de los
senderos 4 y 6, lo que indica desconexión con los padres. El único
circuito primario del Árbol, formado por el recorrido Keter-Binah-
Guevurah-Jesed-Netzaj-Yesod-Maljut, ,evoca la letra hebrea~ boca
abajo. Recordemos que esta letra tiene los significados de corazón,
movimiento y látigo.

Balance de elementos:
Potencial Expresión Diferencia
Fuego l, 17 0,77 - 0,40
Agua 1,25 1,27 + 0,02
Aire 0,95 1,33 + 0,38
Tierra 1,00 1, 11 + 0,11

Otros datos:
Nivel de integración medio (d.m. 0,39). Sólo tres esferas aparecen
fuera de rango normal: Keter y Jesed por exceso, y Jokmah por
defecto. Muy posiblemente, la esquizofrenia del sujeto haya sido
influida por la fuerte carga de Keter unida a la represión de Tiferet
y a la vía muerta de Jokmah, lo que podría haber provocado en el
sujeto una especie de cortocircuito mental.

7 16 VILLJ\RRU BIA / HAUT / MILLERA


1.:&?1:1

u;:::::::r1 LY:fl

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IJ--.-?rl IJ;-?fl

Figura 64

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 717


Figura 65
Caso real: M. Esquizofrénico

Anticrisis general (aunque con períodos de intermitencia) por


coincidencia de los ciclos corto y largo en los senderos 6 y 15, hacia
el año 8 1 / 2 de cada período de 33, y crisis general (también con
intermitencias) en los mismos senderos, hacia el año 24 3 / 4 de cada
período de 33. Sobrecarga en los mismos senderos 6 y 15, aunque
hay períodos de relativa calma hacia el año 16 1 / 2 de cada ciclo,
entre los últimos coletazos de la anticrisis y los primeros avisos de la
crisis. Línea oculta en sendero 21. Doctorados en senderos 22, 3, 4, 7
y 21. Senderos semilla: 13 y 16. Semirrepresión en Jesed. Vampiro en
Netzaj. Destacan las fuertes cargas en Binah y en Tiferet, lo que, jun-
to con la fuerte sobrecarga del sendero que une a ambas, el 6, indica
una más que notable fijación en la figura de la madre.

Balance de elementos:
Potencial Expresión Diferencia
Fuego 1,25 0,90 - 0,35
Agua 1,33 1, 17 - o, 16
Aire 0,65 1, 17 + 0,52
Tierra 0,67 1,04 + 0,37

Otros datos:
Integración media, aunque casi en el límite (0,48). Fuera de ran-
go normal aparecen por exceso Binah y Tiferet (fuertes cordones
umbilicales pendientes de ser cortados), y por defecto Netzaj (gran
vulnerabilidad emocional). Todas las zonas en torno al centro de
la individualidad, Tiferet, y a su relación con el de la personalidad,
Yesod, se presentan conflictivas: sobrecargas, senderos semilla y
configuraciones incómodas y semiincómodas se encargan de ha-
cer la vida del sujeto cualquier cosa menos agradable.

71 8 V !LLARRU131A / HAUT / M ILLERA


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Figura 65

MAN UAL DE KA1313ALAH PRÁCTICA 719


V
LA BÚSQUEDA DEL TIKÚN

Rabi Nejunia ben Hakílna solía decir: «En


esta vida todos corremos, algunos corren ha-
cia la vanidad, hacia la nada y hacia la tumba;
otros hacia la esencia de la vida, hacia la luz
y hacia la verdad. Bienaventurado el hombre
que logra escoger el buen camino».

(Citado por el Rabino Abraham Palti, jefe


espiritual de la Comunidad Sefaradí de México)
1. HAY OTROS UNIVERSOS, PERO ESTÁN (QUIZÁ) EN ÉSTE

or qué existe el Universo? ¿Por qué existe «algo» en lugar de


P «nada»? ¿Tiene algún sentido todo esto?
Ese «sentido» lo intentamos buscar, por una parte, los que nos con-
sideramos a nosotros mismos gentes sensatas, que unas veces por ne-
cesidad, otras por una visión distorsionada de nuestro sentido de la
responsabilidad, pertenecemos al grupo de la mayoría. Aunque sin
duda todos conocemos a personas de una extraordinaria sensatez que
cumplen con casi todos los preceptos oficiales socioculturales esta-
blecidos (al menos, los que «se ven»), para quienes su trabajo es con
frecuencia la máxima prioridad como fuente de dinero y de poder,
y cuyo objetivo es tener por encima de ser aunque no puedan disfru-
tar de sus posesiones, para crearse un status social y económico alto
que provoque una mezcla de envidia y admiración, y una familia (en
ocasiones más por razones de conveniencia y status), a la que gene-
ralmente no podrán dedicar suficiente tiempo y atención, aunque
procuren compensarla con todo aquello que el dinero pueda comprar.
Cuando abandonan este valle de lágrimas suelen dejar a sus hijos en
la mejor posición, pese a que no tengan aptitudes o a que deseen otros
derroteros, ya que piensan que la mejor forma de expresar su afecto es
utilizando sus tarjetas de crédito. Y son felices si a la hora de su muerte
han llegado a ser los más ricos del cementerio, lo que suelen demostrar
encargando suntuosos panteones que perpetúen su memoria, para
admiración y envidia de las generaciones venideras. Intentan ser bue-
nos, siempre que no se toque lo suyo ... Y han hecho de la sensatez y el

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 723


buen vivir su bandera, incluso a costa de los demás, eso sí, procurando
que esta última circunstancia no se note demasiado, para mantener la
imagen de respetabilidad en su entorno social.
También existen otra gente que parece tener una parte de sí misma
en algún otro lugar, tal vez en otro universo que se encuentre inter-
prenetrado con el nuestro, y que sólo ellos han sido capaces de ver.
Su escala de valores es radicalmente otra, con otras metas. Son visiona-
rios, seres desmarcados de cualquier espacio-tiempo, que anticipados
al suyo propio nos han traído vestigios de lo eterno, donde el pasado,
el presente y el futuro se entremezclan, que nos han hablado emplean-
do palabras extrañas, o tal vez, al contrario, ingenuidades de niño;
a veces maravillándonos, a veces inquietándonos. Gentes muy poco o
nada sensatas, que en ocasiones se han ·arriesgado a provocar en noso-
tros o en el sistema furibundos rechazos.
Sí, hablamos de los poetas.
Lamentablemente, la parte del trabajo que se inicia ahora tiene
poco o nada que ver con los primeros, y bastante (más bien muchí-
simo) con los últimos. En este punto es preciso dejar aparcada la
sensatez, al menos como hipótesis de trabajo (a verificar). Si alguien
tuviera la tentación de conservar un mínimo de ella, nuestra reco-
mendación más sincera es que cierre el libro, lo eche a la incinera-
dora más próxima y huya a toda velocidad, lo más lejos posible.
Como no es cosa de entrar en tan peligrosos terrenos sin una
preparación previa, recomendamos que se lean los poemas de las
páginas siguientes. Estos poemas han sido escritos por seres que
han vivido y han muerto en tiempos y lugares diferentes. Algunos,
afortunadamente para todos nosotros, están vivo y coleando;
y que sea por muchos años. Los poemas deben leerse despacio, eli-
giendo para hacerlo un lugar tranquilo y silencioso, durante unos
minutos tan sólo, dejándolo a la primera señal de cansancio.
Y, cosa fundamental: saboreando cada palabra, el ritmo, el so-
nido, las imágenes que nos vayan evocando, cómo nos sentimos.
Después, si nos apetece, podemos escribir unas líneas sobre todo
ello. También, si nos lo pidiese el cuerpo, podemos hacer nuestros
propios pinitos poéticos ...
Estamos entrando en contacto con los Universos Paralelos,
a través de Daat, la sefirá oculta.

724 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


2. Tooo SE EXPRESA MEDIANTE TRíADAS

as Tríadas indican, según vimos, la expresión de nuestras res-


L puestas a los hechos del mundo exterior. Son siempre una se-
ñal de la manifestación, de que algo está apareciendo, surgien-
do al exterior desde un interior no manifestado. Lo que, desde el
punto de vista del emisor (si se puede decir así) es manifestación,
desde el punto de vista del receptor es revelación. Por eso, la letra
hebrea~ gimmel, que tiene precisamente un valor numérico de 3,
significa revelación.
El triángulo de la figura 66 muestra los principios generales de
la manifestación. Si repasamos la figura 7, observaremos que Daat,
la sefirá oculta (o no-sefirá), aunque no tiene una ubicación fija,
se dibuja situada por debajo de la Tríada suprema, Kether-Jokmah-
Binah: ahí tenemos la primera manifestación de la Divinidad en
este Universo. Dios puede manifestarse de muchas formas, pero
es Único; por eso, Daat es la clave que nos puede permitir conec-
tar con otros Universos. Y eso es lo que los poetas, los místicos,
los visionarios están captando.
Esta idea de la manifestación en el 3 es compartida por casi la
totalidad de las tradiciones religiosas y esotéricas, aunque con in-
finidad de variantes y de matices.
Recordemos que en la I Parte estudiábamos el simbolismo
de la estrella de seis puntas, llamada Estrella de David, y tam-
bién sello de Salomón (fig.1). En realidad, la estrella de seis
puntas como símbolo del judaísmo es de origen bastante re-
ciente, no anterior al siglo XVII. La figura 69 recoge el friso en-
contrado en las excavaciones arqueológicas de la sinagoga de
Cafarnaum, construida en estilo helenístico en el siglo II d.J.C.
En dicho friso puede observarse, junto a la estrella de 6 pun-
tas, otra de 5 puntas y un racimo de uvas. Demuestra ello sin
lugar a dudas que la Estrella de David se utilizaba ya en aque-
lla época, aunque no como símbolo exclusivo del judaísmo.
Véanse, por ejemplo, las múltiples referencias al vino en las
escrituras, y su uso ritual en la festividad de Pesaj (Pascua).
Su importancia queda resaltada por la oración que acompaña

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 725


a cada una de las cuatro copas que se consumen en dicha fes-
tividad:

j~~;¡ ~,~ Nii!l O~ivri 1~0 ,~~M~N ri~ MMN ,,,!l


(barúj atá Adonái Elohénu meléj ha-olám boré pri ha-gafén)

«Bendito seas Tú, Eterno, nuestro Dios, Rey del Universo, crea-
dor del fruto de la vid)).

Se trata de una fórmula cuya eficacia hemos podido comprobar


repetidas veces, ya que, recitada al comienzo de una comida (en la
que, naturalmente, se bebe vino ... ·con moderación, por supues-
to) permite que las posibles influencias negativas en torno a los
manjares se neutralicen. Nuestra recomendación es que se pruebe,
recitándola en hebreo cuatro veces, antes de tomar cada vez un
pequeño sorbo de vino.
Un comentario rabínico al Talmud de finales de ese siglo
afirmaba que el Universo tiene tres fundamentos: La Verdad, la
Justicia y la Paz. En la citada fig. 1, estos tres principios ocupan
los vértices del triángulo que apunta hacia arriba. Algunos de-
cenios después, un nuevo comentario establecía como los tres
pilares del Universo a la Torá, el Trabajo y la Actitud Piadosa.
Como resultaba evidente que los tres últimos son la expresión
de los tres primeros, la asociación con la estrella de seis puntas
se hizo inevitable.
Pero esa manifestación a partir de la Tríada (fig. 67) no es ex-
clusiva del judaísmo. El hinduísmo señala el triple aspecto de la
Divinidad Suprema: Brahma, el Creador; Vishnú, el Conservador,
y Shiva, el Destructor. Otra tradición asiática, el shinto japonés,
expresa esta manifestación mediante tres objetos: el espejo, como
símbolo de la verdad; la espada, como símbolo de la fuerza; y el
crisantemo, como símbolo de la belleza (fig. 68).

726 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


EJERqCIOS

.· ;/ 43. Confe~ciona uritriángulo comó,símbolo de. lá .manifes~ -.


· tacióh, -yinc,ulandó a cada,. color y'confunto de cualida-.
· des a él asoeiadas una figura o dibujo que represente ló
- .que cada uno sienta en reladónt6n eJ significado de esa
zona del triángulo; Por ejemplo, si -quieres representar la
alegría,, puedes colocarla figura deun payaso; o si pre~
tendes referirte a la libertad~ la imagen_a's óciada podría
ser la .d e un preso escapando d.e la cá~cel. Para ello, te-
basarás en los conceptos desarrollados en la figura 66.
Podrás utilizar cualqúier técnica a tu alcance: dibujo,
pintura, -co//age,· modéladb, talla, bordado, etc. .Lo bási-
có es que tengas en cúenta las direcciones· que marcan
Jas flechas que· recorren los vértices del triángulo: las gri-
ses son posidvas, m_ientras que las negras son negativas. ·
. por tal razón, si las figuras' que asocias a un punto con-
cretó tienen más_fúerza,que las asociadas al vértice in-
, mediato según ladirección blanca, resultará un triángulo:
._ pgsitivo, evolutivo y anentrópico. Si, por el contrario,
· ,las figuras de un ,vértice tienen más fuerza que las del in:- _
, mediato_según la dirección negra, resultará un triángulo. -
negativo, involutivo y entrópico . .Una vezJen:ninada la.
,, tarea, médita sobre sus resultados. · ·.
-44. Apréndete ge memoria el texto .heb_reo d~ la béndicíón,
. del vino eñ la,telebración de Pesáj, y pruébalo,:recitán"'
dólo, en úna comida que celebres conarríigós y/o -s eres
queridós: Durante .esa comida.no :habléis de negocios. ··
. Tomá nota d~ sus efectos.-

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 727


INTELIGENCIA
CONSCIENCIA
"CHIT"

Blanco
PLENITUD
EQUILIBRIO

Azul Índigo Violeta Magenta Rojo


AMOR - - - - - - - - - - - - - - - - - - a . E NERGÍA
FELICIDAD Empatía ESPIRITVAUDAD Desapego SER - FE
"ANANDA" ~ , ,_ _ UNIÓN CON DIOS +"''" "'"' , • ,..... "SAT"

Figura 66
Triángulo que simboliza los aspectos de la manifestación. Los colo-
res indican las diferentes frecuencias vibratorias, que son crecientes en el
sentido de las agujas del reloj (flechas grises) y decrecientes en sentido in-
verso (flechas negras). A la vez, estos aspectos tienen su expresión en las
cualidades del ser humano, y son el fundamento de la técnica de sanación
por colores psíquicos (ver VI Parte).

728 VILLARRUBIA / HAUT / MIi. LERA


M~tit
Emet
verdad

¡-,,
Shalom,"----------------
paz
D1i1
justicia
Figura 67
Los <fundamentos del Universo» según un comentario rabínico al
Talmud: la verdad, la justicia y la paz, ordenados en Tríada.

Kagami
espejo

7J
Kiku Katana
crisantemo espada
Figura 68
Ideogramas japoneses (kanjis) de los tres fundamentos del shinto:
el espejo, símbolo de la verdad; la espada, de la fuerza; y el crisantemo, de
la belleza, ordenados en Tríada.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 729


3. POESÍA PARA MEDITAR

os textos que siguen han sido escritos por seres de diferentes épo-
L cas, distintas culturas y sensibilidades varias. Pero todos ellos
tienen una cosa en común: intentan poner en palabras lo que no es
susceptible de ser dicho o escrito sin desvirtuarlo de alguna manera.
En unos textos figura su autor, en otros no, pero eso, en último extre-
mo, no importa. La finalidad que tienen, al ser recopilados en la pre-
sente obra, es preparar al lector para buscar en su dimensión interior
el camino para el rescate de la Divina Princesa.

MIGUEL HERNÁNDEZ
(1910-1942)

TRISTES GUERRAS

Tristes guerras
sí no es amor la empresa.
Tristes, tristes.

Tris tes armas


sí no son las palabras.
Tristes, tristes.

Tristes hombres
sí no mueren de amores.
Tristes, tristes.

RUEDA QUE IRAS MUY LEJOS

Rueda que irás muy lejos.


Ala que irás muy alto. .
Torre del día, niño.
Alborear del pájaro ..

730 VI LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Figura 69
Restos arqueológicos de la sinagoga de Cafarnaum, Galilea (Israel), de
estilo helenístico, s. II d. J .C. Arriba, una vista del conjunto, y debajo,
detalle de un friso con una es.trella de 6 puntas a la derecha, otra de 5 en el
centro, y un racimo de uvas a la izquierda (fotos J. Villarrubia).

MANUAL DE KABBALAI-I PRÁCTICA 731


Niño: ala, rueda, torre.
Pie. Pluma. Espuma. Rayo.
Ser como nunca ser.
Nunca serás en tanto.

Eres mañana. Ven


con todo de la mano.
Eres mi ser que vuelve
hacia su ser más claro.
El universo eres
que guía esperanzado.

Pasión del movimiento,


la tierra es tu caballo.
Cabálgala. Domínala.
Y brotará en su casco
su piel de vida y muerte,
de sombra y luz, piafando.

Asciende. Rueda. Vuela,


creador de alba y mayo.
Galopa. Ven. Y colma
el fondo de mis brazos.

EL SOL, LA ROSA Y EL NIÑO

El sot la rosa y el niño


flores de un día nacieron.
Los de cada día son
soles, flores, niños nuevos.

Mañana no seré yo:


otro será el verdadero.
Yo no seré más allá
de quien quiera su recuerdo.

732 YILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Flor de un día es lo más grande
al pie de lo más pequeño.
Flor de la luz el relámpago,
y flor del instante el tiempo.

Entre las flores te fuiste.


Entre las flores me quedo.

* * *

SAIGYO
(Japón, 1118 - 1190)

(Poemas de su obra Espejo de la luna)

Este ruinoso cobertizo con el techo de paja


lleno de goteras, blanco de luna;
que vi
un largo rato reflejarse
en una lágrima sobre la manga de mi blusa.

Encumbrado señor;
como el bambú tu mundo
tiene nudos, nudillos,
complicados eslabones:
si no, lo acataba con gusto.

En lo recóndito de las montañas,


ningún canto cercano de ave
conocida ...
sólo el ulular sobrecogedor
de una lechuza.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 733


De la obra HAIKU DE LAS ESTACIONES
(poesía zen)
Varios autores

Flores de cerezo en la noche


como ángeles
descendiendo del cielo.

(ISSA)

Una vez que el jardín


estuvo barrido,
cayeron unas camelias.

(YAHA)

Un niño mirando las flores que caen


con la boca abierta,
es un Buda.

(KUBUTSU)

Sólo su sonido;
pero era una noche
con un chaparrón de verano.

(ISSA)

Desnudo,
sobre un caballo desnudo,
bajo la lluvia torrencial.

(ISSA)

734 VILLARRUBIA / HAUT / MI LLERA


De vez en cuando
las nubes dan un descanso
a los contempladores de la luna.

(BASHO)

Las hierbas del jardín


caen,
y descansan mientras caen.

(RYOKAN)

* * *

YALAL AD-DIN RUMI


Selección de poemas sufis

¿Qué puedo hacer, oh musulmanes?, pues no me reconozco a


mí mismo. No soy cristiano, ni judío, ni mago, ni musulmán.
No soy del Este, ni del Oeste, ni de la tierra, ni del mar.
No soy de la mina de la Naturaleza, ni de los cielos giratorios.
No soy de la tierra, ni del agua, ni del aire, ni del fuego.
No soy del empíreo, ni del polvo, ni de la existencia, ni de la
entidad.
No soy de India, ni de China, ni de Bulgaria, ni de Grecia.
No soy del reíno de Irak, ni del país de Jorasán.
No soy de este mundo, ni del próximo, ni del Paraíso,
ni del Infierno. No soy de Adán, ni de Eva, ni del Edén, ni de
Rízwán [el ángel que guarda las puertas del Paraíso].
Mí lugar es el sinlugar, mi señal es la Sinseñal. No tengo
cuerpo ni alma, pues pertenezco al alma del Amado.
He desechado la dualidad, he visto que los dos mundos son
uno; Uno busco, Uno conozco, Uno veo, Uno llamo.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 735


Él es el primero. Él es el último. Él es el exterior.
Él es el interior1• No conozco a ningún otro aparte de
«Ya Hu» y «Ya man Hu» [«Oh, Él», y «Oh, Él que es», dos de
los gritos más habituales de los derviches].

Yo dije: «Muéstrame la escalera, que pueda subir has-


ta el cielo».
Él dijo: «Tu cabeza es la escalera, pon tu cabeza
bajo tus pies».
Cuando coloques tus pies sobre tu cabeza, colocarás tus
pies sobre la cabeza de las estrellas; cuando te abras paso
por el aire, pon tu pie sobre el aire, así ¡y adelante!

Yo soy tú, tú eres yo, oh amigo; no te vayas de tu pro-


pio pecho; no te creas otro, no te ahuyentes de tu propia
puerta.

Un ciego tropezó con un cántaro; dijo:


«El portero no tiene cuidado. ¿ Qué hacen los cán-
taros y los vasos en el camino? El sendero debería es-
tar limpio de estas vasijas. Quitad los cántaros del
camino; el portero no está atendiendo a su trabajo».

El portero respondió:
«Ciego, no hay ningún cántaro en el camino, el he-
cho es que no tienes conocimiento del camino. Has
dejado el camino y has ido hacia el cántaro; ése es
un error evidente».

*
1
Referencia al sura 57:3 del Corán. Ver VI Parte.

736 YILLARRUBIA / HAUT / M I LLERA


Al final partíste y fuiste hacia lo Invisible; fue maravi-
lloso cómo te fuiste del mundo.
Sacudiste fuertemente tus alas y plumas, y habiendo
roto tu jaula, alcanzaste el aire y viajaste hacia el mundo
del alma.
Tú eras un halcón favorito, guardado en cautiverio por
una anciana; cuando oíste el tambor del halcón huiste ha-
cia el Vacío.
Tú eras un ruiseñor desamparado entre lechuzas; te lle-
gó el perfume del jardín de rosas, y hasta él fuiste.
Sufrías intenso dolor de cabeza por este amargo fermen-
to; al final fuíste a la taberna de la Eternidad.
Recto como una flecha te dirigiste hacia la señal de la
bíenaventuranza; veloz como una flecha desde el arco has-
ta aquella señal.
El mundo te dio pistas falsas, como un demonio necró-
fago; tú no hiciste caso de ellas, y fuiste hacia aquello que
no tiene pístas.
Puesto que ahora eres el sol, ¿por qué llevas una dia-
dema? ¿Por qué buscas un cinturón, sí te has ido del me-
dio?
He oído que miras con ojos torcidos tu alma, ¿por qué
miras tu alma, si has ído hasta el alma del Alma?
¡Oh, corazón, qué maravilloso pájaro eres, que a la caza
de recompensas divinas volaste con dos alas hasta el blanco
de la lanza, como un escudo!
La rosa huye del otoño: ¡oh, que intrépida rosa eres tú
que fuiste holgazaneando en presencía del viento otoñal!
Cayendo como lluvía del cielo sobre el tejado del mundo
terrestre, corriste en todas direcciones hasta escapar por el
caño.
Guarda silencio y libérate del dolor del habla; no duer-
mas, pues has tomado refugio en tan cariñoso Amigo.

MANUAi. D E KABBALAH PRÁCTICA 73 7


OMAR KHEYYAM
Selección de sus RUBAIYAT

¿Sabes tú por qué al alba el gallo, con su canto


agudo se lamenta? Porque vio en el espejo
de la clara mañana, que había transcurrido
una noche en tu vida sin que te dieras cuenta.

El día que yo muera se acabarán las rocas,


los labios, los cipreses, las albas, los crepúsculos,
la pena y la alegría. Y el mundo habrá dejado
de ser, que su existencia está en nosotros mismos.

Señor, en mi camino tendiste mil celadas.


Después me amenazaste: «¡Ay de ti si no sabes
rehuir estos peligros!» Lo ves, lo sabes todo.
¿Acaso puedes reprocharme mi rebeldía?

No pretendo pedir el perdón de mis culpas,


pues hablar con Allah lo creo irreverente.
Sólo le bastaría cubrirme con el manto
de su clemencia, para hacerme inmaculado.

Pretender que el humilde devuelva en oro el plomo


que a él le han arrojado, y exigirle que pague
una deuda que nunca con nadie ha contraído,
es comercio de usura al que nadie está obligado.

738 Vtl.LARRUBIA / HAUT / MILLERA


Reprendía un ulema a una joven hetaira:
«Estás loca. ¿Por qué tienes tantos amantes?».
Y ella dijo: «Sin duda será tal como afirmas;
mas dime, ¿acaso eres lo mismo que aparentas?».

Cuando el dolor te doble, cuando agotes tu llanto,


recuerda aquellas gotas que tras la lluvia brillan
en las hojas . Y cuando te irrite el día y quieras
noche eterna, no olvides el despertar de un niño.

¡Oh Tú, que hiciste al hombre de deleznable barro


y en el Edén pusiste la serpiente! Por negro
de pecados que veas al ser que Tú creaste,
perdónale y procura que él también te perdone.

Descubrir quise en vano el Cielo y el Infierno


más allá de la Tierra y aun del infinito.
Pero una voz me dijo: «¡Necio! Cielo e Infierno,
hasta el fin de los siglos, viven sólo en ti mismo».

El Cielo es la visión de un ideal que puede


llegar a realizarse. El Infierno es un símil
del espíritu ardiente que ha surgido del caos
para tornar al caos, aunque sea tarde.

¿Por qué debe inquietarme lo que oculta el futuro?


La desgracia persigue al hombre temeroso.

MANUAL DE KABBALAI-I PRÁCTICA 739


Alégrate y no tomes la vida muy en serio:
las zozobras no alteran el curso del destino.

No nos preocupemos por el mañana, amigo.


Hemos de aprovechar este hálito de vida.
Si mañana salimos de esta mansión, seremos
lo mismo que los muertos de hace siete mil años.

No te atormentes nunca por lograr oro o plata.


Antes de que tu aliento se enfríe, haz lo posible
por disfrutar tus bienes con un amigo, antes
de que tus enemigos los derrochen si mueres.

Llegó la primavera, la estación en que nuestros


impacientes deseos buscan la perfumada
soledad. Cada flor, ¿será la blanca mano
de Moisés; y la brisa, grato aliento del Cristo?

El agua se quejaba porque, para llevarla


al monte, la extrajeron del mar. Y éste le dijo:
«Aunque vagues mil años, dejarás algún día
de ser gota extraviada: volverás a mi seno».

* * *

740 VILLARR UBIA / H AUT / MILLERA


EL CANTAR DE LOS CANTARES
(Libro de la Biblia atribuido a Salomón)

Capítulo II

Soy una rosa de Sharón, una azucena de los valles.


Como la azucena entre los espinos, así es mi amada entre las
doncellas.
Como un manzano entre los árboles del bosque, así es mi
amado entre los jóvenes.
Bajo su sombra me deleitaba sentada, y su fruto era dulce a
mi paladar.
Me condujo a su casa de banquetes, y su estandarte sobre
mí era el amor.
«Confortadme con pasas, sustentadme con manzanas,
porque desfallezco de amor».
Esté su mano izquierda debajo de mi cabeza, y abráceme
su diestra.
« Yo os conjuro, oh hijas de Jerusalén, por las gacelas, y
por las siervas del campo,
que no despertéis a mi amada hasta que ella quiera».
¡ Escuchad! Es la voz de mi amado. He aquí que viene
saltando sobre las montañas,
brincando sobre las colinas.
Mi amado es como una gacela o un cervatillo. He aquí
que ya está detrás de nuestra pared.
Mira por la ventana. Atisba por las celosías.
Habló mi amado y me dijo: «Levántate, amada mía,
hermosa mía, y sal conmigo,
porque he aquí que ha pasado el invierno y han pasado las
lluvias.
Ya aparecen las flores en la tierra. Ha llegado el tiempo de
cantar,
y se oye la voz de la tórtola en nuestra tierra.
La higuera muestra sus verdes higos y exhalan su
fragancia las viñas en flor.
Levántate, amada mía, hermosa mía, y sal conmigo.

MAN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 741


¡ Oh, paloma mía que anidas en las hendiduras de la roca,
en las hendiduras de la escarpa!
Déjame ver tu rostro, déjame oír tu voz, porque dulce es
tu voz y agraciado es tu rostro».
«Atrapemos a los zorros, los pequeños zorros que
arruinan los viñedos,
porque nuestros viñedos están en flor».
Mi amado es mío, y yo soy suya. Él apacienta su rebaño
entre las azucenas.
Cuando refresque el día y declinen las sombras de la
tarde, vuelve, oh amado mío,
y sé como una gacela o un cervatillo sobre las montañas
escarpadas.

* * *

MARIOSATZ

BENDITA SOLEDAD

Bendita soledad la del que


A sí mismo entra a visitarse,
Y en tinieblas crece párpados abajo,
Que en cóncava, húmeda piel poseen
La sagrada frescura de la vida.
Bendita soledad que entre los dedos
Estrecha el tibio aire de la paz,

Y al visitarse concede el vasto don


De erradicar torpezas, alejar ruidosas compañías
Con sólo el suspiro tricolor en el que brilla,
Muy celeste el inminente cielo,
Verde y joven aún la tierra,
Ceniciento y liliáceo el horizonte.

74 2 VILLA RRUB!A / HAUT / MI LLERA


JAIME VILLARRUBIA
Selección de poemas

A Lúa

No les pongas fronteras a tus manos,


y déjales que canten:
que el aire entre tus dedos se haga vida
cuando los bese el viento;
que el agua fluya, que brote el fuego
y reciba la tierra tu semilla.
No les pongas fronteras, y el olvido,
transmutado en recuerdo por el tacto,
florecerá en sonrisas ...

* * *

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MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 7 43


AMIAMADA
(Traducción del texto árabe)

Persigo la paz, pero ha huido y no está en mí corazón,


pues te amo y te busco, y no sé quién eres ni dónde estás.
Pregunto por ti, pero la gente se burla y las estrellas callan.

¿Cómo es tu jardín, y cuántos árboles hay en él?


¿Dónde está tu río, y cuánta agua fluye por él?
¿Cómo es tu rostro, y cuánta luz brilla en él?
¿Dónde está tu corazón, y cuánto fuego arde en él?

Pero el día entre los días te cbnoceré y veré tu rostro.


Este día, subiré a tus montañas, y cultivaré tu jardín,
y cogeré tu rosa, y verteré mi agua en tu valle.
Y regresaré a mi casa, y diré: ¡ Ya no tengo miedo!
Y beberé agua de tu río, y diré: ¡Ya no tengo sed!
Y miraré mí espíritu en el mar de tus ojos, y diré:
¡He encontrado mi camino y mi meta!

Pues la luz de tu rostro hará que el sol me parezca


un paño negro,
y el fuego de tu corazón me abrasará por toda la eternidad.

Este día sabré que Tu Fuego es mi fuego, y Tu Luz mi luz,


y Tu Agua mi agua, y Tu Fuerza mi fuerza.

Pues habré descubierto que mi corazón es tu corazón,


¡y que yo soy Tu, ....1

Comentarios al poema «A mi amada»

La figura de La Amada es una constante en toda la literatura sufí.


De una forma o de otra, todo empieza por una comezón, por una inquie-
tud que apenas se comprende:

744 VILLARR UB IA / HAUT / MI LLERA


Busco la paz, pero ha huido y no está en mi corazón.
Pues te amo y te busco, y no sé quién eres ni dónde estás.

Es inútil buscar la ayuda o el consejo de otros que no pasen o hayan


pasado por la misma experiencia, pues no nos entenderán. Ni tam-
poco nos servirá la ayuda de los Cielos (es decir, de poderes ajenos a
nosotros mismos), pues Aquello que buscamos no se encuentra allí:

Pregunto por ti, pero la gente se burla y las estrellas callan.

Sin embargo, intuimos algo acerca de qué forma de manifesta-


ción, qué atributos - si pueden llamarse así - y qué naturaleza tiene
el Objeto de nuestra búsqueda amorosa; y, desde esta intuición,
nos hacemos algunas preguntas:

¿Cómo es tu jardín, y cuántos árboles hay en él?


¿Dónde está tu río, y cuánta agua fluye por él?
¿Cómo es tu rostro, y cuánta luz brilla en él?
¿Dónde está tu corazón, y cuánto fuego arde en él?

Nuestra intuición, en efecto, nos sugiere que en la meta,

• Encontraremos reposo y gozo (simbolizados por el jardín y los


árboles).
• Y sin embargo, todo carecerá de fijeza, todo se moverá con flui-
dez (el agua).
• La manifestación, la apariencia (el rostro) tendrá como caracte-
rística fundamental la luminosidad.
• Y la esencia, la naturaleza profunda (el corazón) tendrá una cua-
lidad ardiente.

En los cuatro versos anteriores, por tanto, se expresa la intuición


del Amor como gozo-fluidez-consciencia-energía. Y aunque des-
de la dualidad se contempla el encuentro con La Amada como un
hecho situado en el futuro, hay también un profundo sentimiento
de estarse produciendo el encuentro eternamente:

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 7 45


Pero el día entre los días te conoceré y veré tu rostro.
Este día subiré a tus montañas, y cultivaré tu jardín,
y cortaré tu rosa, y verteré mi agua en tu valle.

Estos versos admiten una lectura a varios niveles: por una parte,
las imágenes de montañas, jardines, flores, agua.. . sugieren la
Naturaleza, algo que es perfectamente natural (la ausencia de amor es
enfermedad), algo que ya está ahí y que sólo precisa ser descubierto.
Por otra parte, el claro simbolismo de tipo erótico, sensual, orgiásti-
co incluso, apuntan a una cualidad no-mental y de total entrega,
sin peros ni sin embargos. Y también, con las imágenes anteriores se está
volviendo a aludir a la expansión de conciencia (las montañas, desde
cuya cima la visión se amplía), la cualidad transformante del amor
(cultivar el jardín de La Amada), el gozo de la belleza (cogerla rosa) y
el éxtasis-fluir-vida (el agua que riega el valle).
Las consecuencias de esa verdadera transmutación alquímica
serán inmediatas:

Y volveré a mi casa, y diré: ¡Ya no tengo miedo!


Y beberé agua de tu río, y diré: ¡Ya no tengo sed!
Y miraré mi espíritu en el mar de tus ojos, y diré:
¡He encontrado mi camino y mi meta!

Cuando, habiendo realizado el Amor, vuelvo a mi casa, descu-


bro que todos los Universos, exteriores o interiores, son mi casa,
que no hay fronteras que me separen de lo hostil ajeno a mí, que
nada me es ajeno: el Amor, así, ha barrido al miedo, pues miedo y
Amor son incompatibles.

El agua que Jesús le pidió a la samaritana no calma la sed sino


temporalmente; pero el agua que la calma para siempre sólo se
encuentra en el fluir del estar amando.

Y en lo más profundo (el mar de los ojos de La Amada) nos re-


conocemos; y descubrimos que la meta y el camino son una misma
cosa. Nuestro reconocimiento es aún incompleto, pero anuncia un
florecer inmediato:

7 46 VILLA RRUBI A / H AU T / MI LLERA


Pues la luz de tu rostro hará que el sol me parezca
un paño negro,
y el fuego de tu corazón me abrasará por toda la eternidad.

El Conocimiento que surge de ese florecer se manifiesta a través


de vías que son tanto vitales y energéticas como expansivas de la
conciencia y de los propios sentimientos:

Este día sabré [descubriré] que Tu Fuego es mi fuego,


y Tu Luz mi luz,
y Tu Agua mi agua, y Tu Fuerza mi fuerza.

Y llega el descubrimiento final:

Pues habré descubierto que mi corazón es Tu Corazón,


y que yo soy Tú.

Habré descubierto que Tu Esencia, Tu Se1~ es ml propia esencia,


y que, en verdad, Atman es idéntico a Brahman. Si no lo supe
antes es por haber incurrido en un error de principio: el error en
la búsqueda del Amor es el buscar mismo. No importa lo que se
busque, sea lo que sea: hay alguien que busca, alguien que cree
que es, y en realidad no es. El que se creyó sujeto de la búsqueda
era, realmente, su único y verdadero impedimento .. .

* * *

TUVE UN SUEÑO ...

Tuve un sueño ...


En una llanura infinita,
vacía,
sopló un viento venido de los hielos;
en sus ráfagas llevaba jirones
de estructuras matemáticas ...
Y con él llegaron cinco vientos compañeros:
la brisa del amanecer, vibrante de briznas de sol y de vida ...

MANUA L D E KAB BA L/\H PRÁCTICA 747


El siroco abrasador, cuyas arenas en suspensión
cantaban a la violencia y a la lucha ...
El ábrego que llegaba del mar,
triste y majestuoso, gris y magnífico ...
El huracán lleno de rabia, pestilente y sulfuroso,
que surgió de las entrañas de la tierra ...
y el soplo impalpable que cayó del espacio profundo,
de allí donde los ángeles
refrescan al Uno con la agitación de sus alas ...
Los seis vientos confluyeron,
¡así lo vi en mi sueño!
en un no-punto de la llanura vacía,
y Algo nació ...

PERLA NEGRA

Vi por primera vez tu rostro al pie de las columnas


que sostienen el techo del mundo. Aquella vez
me pareciste una perla negra, dura como el diamante.
Mi corazón de niño no supo ver que buscabas la paz desde la sima
oscura ...
que tu renuncia al gozo era expiación ... que tu fragilidad era sólo
aparente,
porque tu dureza procedía de tiempos y lugares remotos ...

Yo ansiaba tu cobijo, pero para tí


fui solamente una carga.
Y habiendo estado tan juntos, nos desconocimos.

Después, mucho después, volvimos a encontrarnos,


y ninguno supo ver quién era el otro: en ese momento
sentí rechazo hacia aquella perla negra,
un rechazo rencoroso, para el que no encontré causa.

Sólo vi la concha que te encerraba,


áspera de miedos y de incomprensión.

748 VILLA RRU l.llA / H AUT / MILLERA


... y fuiste abriendo tu alma, y la perla negra
pudo asomarse fuera de su encierro,

... descubrir la maravilla de la luz y del viento ...


. . . contemplar en sus pasados el grano de arena que la había
formado ...
. . . vivir sus futuros, hasta el grito final de la disolución
en el Océano Eterno ...
.. . ser ella misma en la crisis del crecimiento y del cambio ...

¿Hace falta decir que fue entonces


cuando nos reconocimos?

Una de las propiedades que tiene la poesía es que lubrica la mente, permitién-
dole adquirir una flexibilidad y una agilidad notables. Es de esperar que, tras
la lectura de los poemas anteriores, vuestras neuronas se encuentren frescas y
dispuestas al combate. Vamos a entrar ahora en una especie de juego de guerra,
aunque se trata de una guerra muy peculiar, pues, para los verdaderos prota-
gonistas se trata en verdad de un juego. Una sombra de los juegos de ese tipo
llega a veces a nuestro humilde nivel de seres humanos, y entonces decimos que
esos juegos son iniciáticos.

MANUAL lJE KAB BALAH PRÁCTICA 749


4. Los JUEGOS INICIÁTICOS

as correspondencias entre el juego del ajedrez y el Árbol de


L la Vida nos van a permitir profundizar en la esencia de las
sefirot y los senderos, viéndolos, no como una estructura está-
tica, sino como el diagrama de un proceso dinámico. El ajedrez,
como juego iniciático que verdaderamente es, ofrece, más allá
de sus aspectos lúdicos y competitivos, una profunda enseñan-
za que intentaremos entrever en esta parte de la obra.
Recordemos que cada uno de los cuatro cuadrantes en que
consideramos dividido al tablero de ajedrez era asignado, se-
gún su pieza dominante, a cada uno de los cuatro planos de
manifestación del Árbol de la Vida (fig. 18). También podemos
considerar a cada uno de estos planos (Atziluth, Emanación,
elemento Fuego; Briah, Creación, elemento Agua; Yetzirah,
Formación, elemento Aire; Assiah, Acción, elemento Tierra),
como un campo de juego completo, con sus propias reglas,
las cuales, sin embargo, son como un reflejo de las normas del
plano superior. Podríamos, pues, imaginar cuatro tableros de
ajedrez, formando un cuadrado de 16 x 16 casillas; pero, como
esa disposición permitiría que las piezas de una partida pasa-
sen a los tableros contiguos (lo que, evidentemente, no sucede
en realidad), estableceríamos una fila y una columna adicio-
nales de casillas, que separasen a los tableros unos de otros.
Tendríamos así un cuadrado de 17 x 17 casillas.
Si examinamos ahora la disposición resultante, podremos
observar que los tableros siguen la secuencia desde el plano
más denso, Assiah, al más sutil, Atziluth, en sentido inverso a
las agujas del reloj, es decir, en sentido involutivo. La aparen-
te contradicción se resuelve cuando nos damos cuenta de que
estamos observando el tablero de 17 X 17 de arriba abajo; así
que, si lo observásemos desde debajo hacia arriba, el sentido de
giro sería el contrario, el de las agujas del reloj.
Es en este sentido en el que empezamos a numerar casillas: 1,
2, 3, 4 ... desde la esquina del cuadrante de Assiah, o Cuadrante
de Tierra, hacia la derecha; observamos así que alcanzamos

750 V1L1.ARRUBIA / HAUT / MILLERA


el número 63 justo dos casillas antes de volver al principio.
Este número nos conduce a otro juego iniciático, en este caso
el de La Oca, consistente en un recorrido con diversas pruebas
y vicisitudes desde el número 1 hasta el 63. Puesto que aquí
termina el recorrido visible (esto es, externo), se nos invita a
entrar en nuestro propio interior, recorriendo progresivamente
una y otra vez los cuatro planos, en una espiral que apunta ha-
cia el centro (fig. 70).
La espiral debe terminar en el número 153, que es, precisa-
mente, el número-suma de 17 (suma de los 17 primeros nú-
meros de la serie natural). ¿Por qué? Si siguiésemos cerrando
la espiral, nos encontraríamos en la esquina siguiente con el
157 (1 + 5 + 7 = 13, valor de inN, ejad, Uno) , es decir, debe-
ríamos volver a comenzar el juego; y después con el 159 (1 +
5 + 9 = 15, valor de i"l'I, nombre de Dios manifestado como es-
pacio y energía en la segunda sefirá, Jokmah, lo que equivale
a decir sin forma); para terminar en el 161, i"lN~'IV CiN, Adam
Eilah, Hombre Celestial o Primordial; y también, i"lii"l'I ~:,¡,, ka-
hal IHVH, congregación del Eterno, que ocupan el centro del
diagrama.
En otras palabras: más allá del 153 está lo sin forma, y eso es
lo que trata de representarse con la gran flecha que arranca del
153. Tal vez por eso el Evangelio de Juan (21 : 11) habla de una
captura de ciento cincuenta y tres grandes peces «sin que se
rompiera la red»: el pez siguiente habría provocado la ruptura
del arte de pesca (ver más adelante que uno de los significa-
dos a que nos lleva el número 17 es precisamente pescador; así
como que la siguiente esquina de la espiral, 33, nos remite a la
caña de pescar).
Pero es necesario seguir más allá del 63 externo, el límite o
m eta del juego de La Oca. Pues 63 es la guematria de e~, gas,
que significa rudo, grosero; más allá está el territorio de los
mundos sutiles .. .

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 75 1


CUADRANTE DE LA TIERRA CUADRANTE DEL AIRE

2 3 4 5 6 7 8 10 11 12 13 14 15 16
18
63 64 1 66 67 68 69 70 72 73 74 75 76 19
62 78 20
,,,, "'/
61 111 112 114115 116 ,;f17x 118 119 120 79 21
60 110 122 80 22
59 ,
109 143 144 123 81 23
58 108 142 124 82 24
,¡¡,, ,
' {
'#/2
f?, 107 J.t11 X l~? "'83
".~{-

,.&

56 106 140 126 84 26


55 105 139 127 85 27
54 104 138 128 86 28
53 103 136 135 134 Ú3 132 131 130
e; ~-,.,.: 87 29
52 102 88 30
51 1 100 99 98 97 96 ",~s· 94 93 92 91 90 ; 1
31
50 32
, 1
48 47 46 45 44 43 42 40 39 38 37 36 35 34

CUADRANTE DEL FUEGO CUADRANTEDELAGUA

Figura 70
La «espiral iniciática», presentada en este esquema de forma cuadra-
da, para resaltar las diagonales (vértices de cuadros negros) y los ejes
centrales (cuadros grises, que a su vez marcan los límites de los cuatro
cuadrantes), simboliza el viaje del alma hasta alcanzar la Unidad. Tiene
una fase externa, que termina en el número 63: es la que se recorre en
el popular juego de la Oca. A partir de ese punto, el recorrido se vuelve
interno, hasta el número 153, alcanzado el cual las formas desaparecen.
(hecho indicado por un cuadro negro, sin numeración). El lugar de la
casilla central aparece señalado por una X.

752 VJ LLARRUBIA / H AUT / M ILLERA


5. Los NÚMEROS DE LA ESPIRAL INICIÁTICA

Y SUS SIGNIFICADOS

Suma de los números de la diagonal densa, Tierra - Agua:


1 + 65 + 113 + 145 + 153 + 129 + 89 + 33 = 728

irectamente proporciona los conceptos il~,~ il~~Mn ,~~ (ge-


D mar jatímah tovah), bendición de año nuevo; Mi~n~ (majporet),
mina; cniM~ (potarejem), vagina; y el concepto c',iv ',~ ,~,, (rumó
shel olam), que puede traducirse como la cima del mundo, lasco-
sas más importantes. De forma indirecta, computando la nun final
por su valor alto de 700, ¡,~m (zihyón), orgullo, esplendor; y suman-
do las tres cifras del 728, obtenemos 17, número del que podemos
obtener varias palabras interesantes, de las que seleccionamos:
m~ (agoz), nuez, fruto que ha sido comparado frecuentemente por
los cabalistas con el cerebro humano, por la semejanza de sus sur-
cos;,~, (guid), que significa tanto nervio o tendón como alambre
eléctrico; ,,, (zvad), valija o maleta, y también equipo de soldado;
y finalmente,~,~ (tov), bien, bueno, útil, hermoso.
Todo el conjunto sugiere que la materia, los niveles densos, en este
caso en combinación con el plano anímico, es algo bueno, confirmando
la creencia judía de la bondad de la creación, tal como indica el Génesis
en su primer capítulo; y también es un medio para comunicar el Cielo
con la Tierra, tal como vimos en la disposición que adoptan las Tríadas
relacionadas con el palo de oros (figura 29). Los conceptos de «mina»
y «vagina» hablan, por su parte, de algo que debe ser trabajado en las
profundidades y que, en su momento, parirá su fruto. Y finalmente,
el «equipo de soldado» nos indica el camino del guerrero espiritual,
como no podía ser de otro modo, si del rescate de la Shejiná se trata.

Suma de los números de la diagonal ligera, Fuego - Aire:


49 + 101 + 137 + 149 + 121 + 77 + 17 = 651

Directamente proporciona el concepto de temurá, :ii~M, que es,


como sabemos, la técnica cabalística consistente en permutar letras

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 753


y extraer unas palabras de otras; también significa esta palabra
cambio, trueque o permuta. De forma indirecta, por el valor alto
de las letras finales, aparecen las palabras i'TOiN CN (em adamah),
Madre Tierra, confirmando su naturaleza espiritual, por resultar
de los cuadrantes «ligeros» de la espiral; coi;, (homem), asombrar;
y ci~;,~ (iahalom), diamante, el mineral más duro y a la vez la piedra
más preciada. En otras palabras, las cosas no son lo que parecen,
y lo que parece frágil es en realidad fuerte (¿no dice lo mismo el
Tao-te-King?). La suma de las tres cifras, por último, arroja el valor
de 12, del cual destacamos la palabra~.: (bi), en mí; pues todo esto
está, en efecto, en cada uno de nosotros.

Diferencia entre diagonales:


728-651 = 77

Este número proporciona, entre otras, las palabras iT~~~N (aji-


laiah), aquilea o milenrama, planta cuyos tallos se usan tradicional-
mente en China para consultar el I-Ching, o Libro de las Mutaciones,
sistema oracular que, como veremos en la VI Parte, tiene profundas
conexiones con la Kabbalah, por lo q_ue lo usaremos para el trabajo
de actualización del Árbol nativo; m~.: (blilah), mezcla, aleación;
Nil,o (milú), plenitud; 1ij (nazaj), purificarse, limpiarse; y 'IV ('oz),
fuerza, heroísmo, vigor, y también majestad, esplendor, gloria.
El sentido de «fuerza» aparece también al sumar las dos cifras, pues
14 es el valor de,~ (iad), que significa tanto mano como poder.

Suma del eje vertical:


9 + 71 + 117 + 147 + 133 + 95 + 41 = 613

Es éste uno de los más importantes números del judaísmo, pues


es el de preceptos de la Torá, y conecta, por tanto, el Cielo con la
Tierra. Además, este número alude a la transmisión y a la capta-
ción de la luz, pues también es el de los ojos, MiNii (ro'ót) y el del
cuarzo transparente, ,~;,.: ri,¡, (kvartz bahir). La suma de las tres
cifras del número, 10, nos remite al origen y al Padre.

754 VILLARRUBI A / HAUT / MILLERA


Suma del eje horizontal:
57 + 107 + 141 + 151 + 125 + 83 + 25 = 689

Mientras que el eje vertical indica la comunicación en sentido


vertical, el horizontal indica la acción y la manifestación del Cielo
en la Tierra. En cuanto a lo primero, tenemos el instrumento para
actuar, los brazos, .niv,ii (zara'ot), y en cuanto a lo segundo, la glo-
ria de Israel, ~Nit!'~ M~~ (netzaj Yisrael), expresión que también sig-
nifica Dios de Israel. La suma de las cifras del número, 23, remite
a un concepto plenamente humano, pues es el de pares de cromo-
somas del ser humano.

Diferencia entre ejes:


689-613 = 76

Este número da la idea de servir o rendir culto, ,~V (avad),


lo que se debe hacer en secreto, ¡,~~n (jevión). Por cierto, esta última ·
palabra significa también el Templo de Jerusalén. Al sumar las ci-
fras obtenemos 13 que, como vimos en la I Parte, es el número del
amor (i1~i1N, ahavah), la unidad (iMN, ejad) y el vacío (i;,~, bohu).

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 755


6. Los NÚMEROS DE LA GRAN PIRÁMIDE

L a Espiral Iniciática se halla inserta, como vimos, en un con-


junto de cuatro tableros de ajedrez, separados por una fila y
una columna de casillas, configurando así un cuadro de 17 X 17.
En este campo se desarrolla la partida en la que los seres hu-
manos estamos metidos, o, por mejor decir, las cuatro partidas
simultáneas correspondientes a cada uno de los cuatro planos de
manifestación.
La casilla central, que toca con sus vértices a los cuatro tableros,
sugiere que podría tratarse de la proyección de un punto situa-
do en una dimensión superior (mayor frecuencia vibratoria). Este
punto podría ser representado por el vértice de una pirámide de
base cuadrada. De esta forma, mientras los tableros figuran la can-
cha de juego en la que los humanos tienen la ilusión de jugar, en
realidad no serían sino la sombra de un terreno más real en el que se
está desarrollando la verdadera partida: el juego de los dioses.
En los escritos acerca de la Gran Pirámide de Keops se ha des-
tacado el hecho de que, con gran aproximación, el perímetro de
la base, dividido entre la altura, sea igual al número :n: (3,1416 ... ),
la relación que existe entre la longitud de la circunferencia y su
diámetro. Unos sencillos cálculos nos permiten averiguar que,
en una pirámide de estas proporciones, se cumple también con
gran aproximación que la relación existente entre la superficie de
la base y la suma de las superficies de las cuatro caras es la pro-
porción áurea, que es igual a 0,6180339 ... , o su inversa, designada
como número <I> (fi).
Así pues, si lo que en nuestro plano parece real es esencialmente
una sombra del verdadero proceso que se está desarrollando en
lo alto de la pirámide, calculando las dimensiones de la sombra
podremos aproximarnos a las dimensiones verdaderas de lo Real,
o al menos de lo que es Real en un nivel superior al nuestro.
Ello nos llevará a unos números que, de alguna manera, van a re-
presentar mejor la realidad que los que en un principio teníamos a
nuestra disposición.

756 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


6. 1. El número de oro y la gran pirámide
La relación que existe entre la suma de las superficies de las cuatro caras de la
pirámide y la supeificie de la base se acerca mucho al número de oro.
En la Gran Pirámide de Keops se da la relación entre el perí-
metro de la base (suma de los cuatro lados de la base) y la altura,
que es 2 veces el número :rt (3,1416 .. . ), la misma que existe entre la
longitud de una circunferencia y su radio. Llamando a la altura h,
se expresará esta relación:

h =PERÍMETRO / 2:rt

Si suponemos que el lado de la base, L, mide una unidad (un


metro, un kilómetro, un palmo, etc.), el perímetro medirá 4 de las
unidades que hayamos elegido como medida; por tanto, la fórmu-
la anterior podrá escribirse de esta manera:

h = 4 / 2:rt = 0'636619772 ...

Cada cara exterior de la pirámide es un triángulo isósceles, esto


es, un triángulo con dos lados iguales entre sí (las dos aristas que
limitan la cara con sus vecinas a derecha e izquierda) y un tercero
desigual a las anteriores (el lado de la base). Podemos calcular la
superficie de este triángulo aplicando la fórmula:

SUPERFICIE = (BASE x ALTURA) / 2

Conocemos la base, que es uno de los lados de la base de la


pirámide, y vale por lo tanto l. Y la altura de la cara, o apotema,
a la que llamaremos a, podemos encontrarla aplicando el teore-
ma de Pitágoras, ya que dicha línea es la hipotenusa (lado mayor,
opuesto al ángulo recto) de un triángulo rectángulo, cuyos catetos
(lados menores) son la altura h de la pirámide, cuyo valor hemos
encontrado, y la mitad del lado de la base (figura 71). Según dicho

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 757


teorema, el cuadrado de la hipotenusa es igual a la suma de los
cuadrados de los catetos:

a2 = h 2 + L2 = = 0'6366197722 + 0,52

y despejando a, resulta un valor de:

a = 0,809496593 ...

La superficie de cada una de las caras exteriores,


por tanto, será:

S(l cara) = (1 X 0,809496593 ... ) / 2 = 0,404748297...

Finalmente, al ser la superficie de la base de la pirámide la de


un cuadrado cuyo lado mide 1, y pór tanto 1 x 1 = 1, la relación de
superficies entre la suma de las cuatro caras y la base será:

Relación= (0,404748297 ... x 4) / 1 = 1,618993187.. .

Magnitud esta última que es muy prox1ma al numero de oro,


1,6180339887..., cuyo inverso, 0,6180339887, tiene la misma parte deci-
mal que el anterior, es también designado con la letra griega <D, tal como
se apuntaba más arriba.

758 ViLLARRUBIA / HAUT / MILLERA


2 lados de la base Supelficie de la base entre
entre la altura suma de superficies
igual a n (3,1416): de las 4 caras igual a iI>
(<I> = 0,618):
2l/ h = n
l2 / [(4 x{ l/2 x a)/2] = iI>

Figura 71
Cálculo de la relación entre las superficies de la base y la de las cuatro
caras de la pirámide. Indicaciones: L = lado de la base, que en el cálculo
se hace igual a una unidad cualquiera; h = altura de la pirámide desde
el centro de la base a la cúspide; a = apotema de una cara de la pirámide,
que es a la vez la altura del triángulo que forma dicha cara.

6.2. El cosmos, la vida y el número de oro


El tiempo que dura la gestación de la vida humana y el espacio
recorrido por el sol en su órbita circungaláctica están ligados ma-
temáticamente por el numero de oro (fig. 72).

l. Distancia aproximada del Sol al centro de la Vía Láctea: 30.000 años


luz. Un año luz es la distancia recorrida por la luz durante un
año, y equivale a 9.467.280.000.000 km. (nueve billones, cuatro-
cientos sesenta y siete mil doscientos ochenta millones de kiló-

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 759


metros). Esta distancia de 30.000 años luz es el radio de la órbita
del Sol en su recorrido alrededor del centro de la galaxia (supo-
niendo que dicha órbita es circular).

2. Longitud de la órbita del Sol: 2n x radio. Al ser el radio


de 30.000 años luz, la longitud de la circunferencia orbital es:

Longitud = 2n x 30.000 = 188.495'5592 años luz

3. El Sol tarda en recorrer su órbita unos 225 millones de años. Por lo


tanto puede averiguarse su velocidad media anual:

Velocidad. anual= 188.495'5592 / 225.000.000


= 0'000837758 años luz

4. Podemos expresar esta magnitud en una unidad de medida más


cómoda: la unidad astronómica (U.A.), equivalente al radio de
la órbita de la tierra, 150 millones de kilómetros. Para ello, debe-
remos averiguar cuántas U.A. hay en un año luz:

1 año-luz= 9.467.280.000.000 / 150.000.000


= 63.115'2 U.A.

Por tanto, la velocidad anual del Sol en U.A. será:

Velocidad anual= 0'000837758 x 63.115'2


= 52' 87526372 U.A.

5. La gestación de la vida humana dura unos 10 meses lunares.


Si estimamos este tiempo en unos 286,6 días (aproximadamente
41 semanas), durante este tiempo el Sol recorre:

760 V1L1.ARRUBIA / HAUT / MILLERA


Duración de la gestació
del ser humano:
o
10 meses lunares
.!;11
:o

~
!"" /
11 a/E = ~ = 0,618
ESPACIO;::;~

'---"-'Fó_',-,_m_u_J._'il_d,_e_J._'il_v:_id._'il_'_'____,

"'

Figura 72
Hay una intrincada red de relaciones y proporciones matemáticas
entre el ser humano, su período de gestación, la Tierra (Madre Gaia),
la Luna, el Sol, nuestra galaxia (la Vía Láctea), el espacio y el tiempo.
La ilustración pretende sintetizar algunos aspectos de esta red de re-
laciones. A la izquierda, «Eva», de Alberto Durero, Museo del Prado,
Madrid.

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 761


Recorrido del Sol= (52'87526372 x 286'6) / 365'25
= 41' 49821722 U.A.

Y se cumple que, para la duración de la gestación del ser humano,


el tiempo de dicha gestación, elevado al inverso del número <I>, es igual
al espacio recorrido por el Sol durante ese tiempo. En cifras,

10 1'6180339887... = 41' 49821722

Casualmente, el número 41 (duración en semanas del período


de gestación) es la guematria de la palabra hebrea Cl~, (em), que
significa madre ...

762 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


7. EL COSMOS Y LA VIDA A LA LUZ DE LA KABBALAH

firmaron los clásicos que el hombre es la medida de todas las


A cosas. Las proporciones del hombre y sus tiempos miden y
son medidos por el Universo en que está inserto y del cual forma
parte (fig. 72).
El Sol, esa estrella amarillenta de tamaño medio, situada en uno
de los brazos de la Vía Láctea, sirve de centro al sistema en el que
el hombre y su planeta natal, la Tierra, tienen su hogar. Situado a
unos 30.000 años-luz del centro galáctico, recorre en torno a éste
una órbita con una duración de 225 millones de años; la longitud
de la circunferencia de esa órbita es de 188.495,56 años luz.
El Hombre, viajero del espacio en la nave Tierra, nace y muere
en ella desde hace más de tres millones de años, siendo su tiempo
de gestación de unos 10 meses lunares, (unos 286 días, aproxima-
damente). En ese período, el Sol recorre 6.224,7 millones de kiló-
metros, a una velocidad media de 251,33 km. por segundo. El espa-
cio recorrido por el Sol puede ser también expresado en Unidades
Astronómicas (1 U.A.= 150 millones de kilómetros, radio medio
de la órbita de la Tierra en torno al Sol), resultando así una distan-
cia de 41,49865 U.A. las recorridas en 10 meses lunares.
Lo sorprendente es que estos dos números están ligados entre
sí mediante una ecuación muy sencilla, que puede expresarse tal
como se indica en el capítulo anterior, o en su forma inversa:

41,49865 ... =~O (1)

siendo <I> el número que, conocido desde la antigüedad, tiene un


valor de 0,6180 ... y recibe los nombres de número áureo y divina
proporción. De muy curiosas propiedades, este número se halla
también en el cuerpo humano, expresando la relación existente
entre la distancia desde el ombligo al suelo, tomada como divi-
dendo, y la estatura, tomada como divisor; con algunas peque-
ñas diferencias debidas a la raza, sexo, edad, régimen de vida y
alimentación, etc.

MANUAL DE KABBAL/\H PRÁCTICA 763


El Sol es, en último extremo, el alimentador de toda forma
de vida sobre la Tierra: la luz, transformada por los vegetales
mediante la fotosíntesis, es asimilada directa o indirectamente
por los animales y el hombre, en un ciclo que se renueva in-
cesantemente. El origen de la luz, el Sol, tiene un diámetro de
1.392.000 km. Y observemos que este número, al ser reducido
(1 +3+9+2+0+0+0) nos lleva al número 15, que es el de orden de
la letra samaj (C) en el alfabeto hebreo, uno de cuyos significa-
dos es el de sustento, apoyo, fundamento. Pero, además, 15 es
el valor de il\ uno de los nombres de Dios en la Biblia, mitad
visible del Sagrado Tetragrama al decir de Leo Schaya2, y re-
lacionado con la segunda sefirá, Jokmah, Sabiduría, en la que
Dios se manifiesta en energía, espacio y Padre Cósmico, como
par polar opuesto de Binah, Inteligencia, que es la manifesta-
ción de forma, tiempo y Madre Cósmica (ver desarrollo en
la II Parte). De paso, observamos que el número 1392 propor-
ciona por guematria la expresión hebrea Miivil ¡iiN (aron ha-
edut), el Tabernáculo del Templo, lo más sagrado [tomando el
valor alto de la letra nun final].
Inmediatamente, observamos que el diámetro solar es,
con una gran aproximación, la 108ª parte de una Unidad
Astronómica; y este número nos da una nueva referencia, pues
108 es el valor de ~::tn (jatzi), palabra que significa medio o mi-
tad, y, sobre llevar escondida en sí misma la palabra ~n (jai), vi-
viente, nos invita también a unirla con la otra mitad, iniciando
así el proceso de multiplicación: pues 108 X 108 = 11.664, que,
al reducirse (1 + 1 + 6 + 6 + 4) nos lleva a 18, valor de ~n, que se
hace así visible. En otras palabras, la vida potencial contenida
en la radiación solar se actualiza mediante el proceso de unión
de las dos mitades, masculina y femenina.
El Número Áureo, 0,618 ... , nos lleva también con sus tres pri-
meras cifras al 15, indicándonos así que es Dios la fuente de todo
sustento.
Finalmente, 10 es el valor de la letra \ iod, que significa tanto
origen como padre.
2
El significado universal de la Kabbalah, Leo Schaya. Ver referencias bibliográ-
ficas.

764 ViLLARRUBIA / HAUT / MILLERA


La expresión (1) anterior podemos escribirla también en forma
de potencia:

41,49865 ... 0,618···= 10

Pero si 41,49 ... es la medida del espacio, y 10 la del tiempo, pue-


de decirse que, para la gestación de la vida humana se cumple

ESPACIO<!>= TIEMPO (2)

Hemos visto que el espacio nos revela a la VIDA, lo que además es


coherente con la coincidencia de valores numéricos entre C"Ti (jayim),
vida, y 1,1,n (jalal), espacio; en ambos casos de 68, el tiempo al origen
(puesto que 10 es el valor de la letra\ uno de cuyos significados es pre-
cisamente ese) y el número áureo a Dios (puesto que sus tres primeras
cifras significativas suman 15, que es el valor del nombre divino ir) ;
así que, si quisiésemos sustituir en la expresión (2) sus términos por
sus contenidos ocultos, nos encontraríamos con:

VIDA DIOS= ORIGEN (3)

El espacio como fuente de la vida ya fue propuesto por el cien-


tífico sueco Arrhenius con su teoría de las esporas cósmicas, mien-
tras que el tiempo conteniendo en sí al origen es, ni más ni menos,
la teoría del big-bang. Además, podemos leer la expresión (3) de
forma literal, y entonces aparece con toda su intensidad:

VIDA ELEVADA A DIOS ES IGUAL AL ORIGEN

El gran alimentador energético de la vida, el Sol, es en hebreo


W~W, shemesh, palabra que tiene un valor numérico de 640. Lo más
sorprendente es que:

• Al reducir 640 (6 + 4 +O= 10) lleva nuevamente al padre, ya que 10


es el valor de la letra~, iod, que simboliza precisamente padre.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 765


• De la palabra ti!~W, shemesh se puede extraer Cti! (shem), nombre,
palabra que en el judaísmo se utiliza para sustituir al impro-
nunciable Tetragrama iTiii\ que sería así Dios manifestándose a
través del Sol. j Los antiguos egipcios ya lo supieron, y le llama-
ron Amón-Ra!
• También puede extraerse la palabra WW (shesh), seis, que es el
valor de la letra,, vav, que simboliza al hijo.
• La letra ~ , mem, central de W~W, shemesh, simboliza a la madre.
• Las dos letras W, shin son el símbolo tanto del fuego como de
la consciencia: La vida procedente del fuego (del sol) contiene a la
consciencia.
• Desde otro punto de vista, una vida elevada (entregada) a Dios
sería una vida de amor, en hebréo ii~iiN (ahavá), palabra cuyo
valor numérico es 13. ¿Qué mejor encuentro con el origen que
la primera palabra del Génesis, :i~wNi~ (bereshít), En el princi-
pio? Pero bereshít, con su valor de 913 (~ = 2 +, = 200 + N = 1 + W
= 300 + ~ = 10 + M = 400), se reduce a 13 (9+ 1+3=13). Ambas pa-
labras, sumadas, arrojan un valor de 26, igual al del Tetragrama,
mil~.
• Por su parte, frente a M~N,~ (bereshít), primera palabra del
Génesis y de la Biblia, está j~N (amen), última palabra del
Apocalipsis, libro final del Nuevo Testamento. Entre ambas se
halla contenida la totalidad de las Sagradas Escrituras. La dife-
rencia de los valores numéricos de bereshit (913) y amen (91) nos
dirá en qué consiste esa totalidad de contenido.
• Si restamos 913 - 91 = 822, número en el que encontramos MiMMM
(jítjut), dificultades, escollos, y eso es precisamente el conjunto
de las Escrituras, la narración de todas las dificultades por las
que pasa la Humanidad. Además, podemos reducir este núme-
ro sumando sus cifras: 8+2+2 = 12, en el que encontramos~~ (bi),
en mí; pues la totalidad del contenido de la Biblia y las dificul-
tades que describe están, como el Reino de los Cielos, dentro de
nosotros mismos.
• También podemos reducir 913: 9+ 1 +3 = 13, y restar este úl-
timo número de 91: pues 91 - 13 = 78; número de los naipes
del Tarot (por lo tanto, de la totalidad de los símbolos y ar-
quetipos), y de las palabras en, ([ejem), pan, yn,~ (melaj),

766 VIUARRUBIA / HAUT / MILLERA


sal. Y ello nos recuerda que la vida es un peregrinaje (pues
pan y sal es la tradicional ofrenda al peregrino) y un servi-
cio (pues pan y sal también fueron símbolos de vasallaje).
Finalmente, 78 se reduce a 15, valor de l"'T~ (iah, pronunciado
Adonai), según veíamos, y 15 a su vez a 6, la letra\ vav, el
hombre, en el que se resume la totalidad de los símbolos y
del contenido de la Biblia.
• La única letra en común entre M~N,~ (bereshit) y j~N (amen) es la
álef, N, que significa infinito. Además, al ser la primera letra del
alfabeto, alude al número 1, que en hebreo es iMN (ejad), palabra
que también tiene un valor de 13.
• El valor de la palabra final del Apocalipsis, jON (amen), (Ap. 22: 21) es
de 91, y ello nos remite al salmo de este número, que nos recuer-
da que nada tenemos que temer bajo la protección de Dios.

El resumen del mensaje podría ser éste: el Hombre y el


Universo se pertenecen mutuamente, en una relación de Amor
y de Unidad. El Hombre recibe la vida desde el Cosmos a través
del Sol, y es una manifestación del Amor Divino; Amor que le
llama constantemente desde el Infinito para llevarle a su Origen,
a su propia esencia que no es sino el Absoluto. El haditz básico
del Islam, la ilaha il-la al-lah wa muhammadu rasul al-lah, tra-
ducido habitualmente como No hay más Dios que Allah, y Mahoma
es Su enviado, se revela en realidad como No hay más realidad que
el Absoluto, y lo relativo es Su expresión gozosa ... incluidas las di-
ficultades o escollos que se presentan en cualquier momento.
A través de fórmulas matemáticas y de magnitudes contenidas
en el Sol, la Tierra, la Luna, la Vía Láctea ... así como en el propio
Hombre, éste puede descubrirse a sí mismo como l"'T~l"'TN ~~~l"'T (hejal
ahavá), Santuario de Amor, y también como iMN ~~~i'T (hejal ejad),
Santuario del Uno, del Único. Pues ambas expresiones, con su
valor numérico de 78, el mismo que el del pan y la sal, nos recon-
ducen al 15 de Dios-Espacio-Energía-Padre y al 6 de Hombre-
Hij o-Unión-del-Macrocosmos-y-del-Microcosmos.

MAN U AL DE KABBALAl-1 PRÁCTICA 767


8. VIDA Y MUERTE A LA LUZ DE LA KABBALAH

a cultura occidental, basada en la tradición judeocristiana (en


L la que hay que incluir al Islam), ha hecho de la muerte una tra-
gedia irreversible. Es curioso cómo se predican a la vez una Vida
Eterna y una muerte como final que debe ser pospuesto a un futu-
ro lo más lejano posible. Alan Watts, en su obra El arte de ser Dios,
llama la atención sobre el estilo diferente con que se redactan las
esquelas mortuorias en occidente y en la India. Aquí es normal
encontrarse frases tales como «Fulano de Tal entregó ayer su alma
a Dios», mientras que en la India se dice: «Fulano de Tal abando-
nó ayer su cuerpo». En otras palabras, en la visión occidental nos
quedamos aquí cuando morimos, entregando a Dios una cosa que
nadie ha visto; en cambio, en la visión hindú partimos al morir,
dejando aquí algo, el cuerpo, que ya no nos sirve.
Sin embargo, utilizando las técnicas y métodos que la Kabbalah
pone a nuestra disposición veremos que es posible otra visión de
la muerte que, no sólo es muy diferente de la habitual de trage-
dia irreparable, sino que está, además, de acuerdo con esa Misión
(el tikún) que todo ser humano trae cuando viene a este mundo.
Desde que es concebido hasta que abandona su cuerpo median-
te la muerte, el ser humano pasa por una serie de fases de diferente
duración. En la tabla XXXIV se recogen esas fases y sus significa-
dos en hebreo.
Una de las posibilidades que ofrece el método de la temurá es la de
comparar varias palabras mediante las letras comunes y no comu-
nes entre ellas. Es lo que se hace con las palabras correspondientes a
cada una de las fases: coito (de los padres), concepción, gestación,
nacimiento, vida, agonía, muerte y estado post-mortem.
Hay un aspecto en el que es preciso detenerse, ya que arroja una
luz significativa sobre lo que es y lo que representa el tikún: es la
relación entre las palabras 1:r~n (jaim), vida, y r,i,o (mavet), muerte.
Observemos en primer lugar que la primera termina con una letra,
~, mem, que es la misma con la que empieza la segunda. Como esta
letra significa, entre otras cosas, nacimiento, se nos indica que la
muerte es en realidad eso, un nacimiento.

768 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


En segundo lugar, veamos el conjunto formado por ambas pa-
labras, puestas una a continuación de otra. La primera letra de C
~TI (jaim), la n, jeth, y la última de Mi~ (mavet), la M, tav, forman,
por decirlo de alguna manera, el envoltorio, la corteza de todo el
conjunto; algo así como la parte visible de un bocadillo, cuyo con-
tenido no podemos conocer más que separando los dos trozos de
pan (que es lo que hacemos con el trabajo cabalístico) o comién-
dolo (que es lo que hacemos al morir). Curiosamente, estas dos
letras forman la palabra MM (jat), terror, pánico, que es justo lo que
se siente cuando se contempla el proceso vida-muerte de forma
superficial.
Pero ya hemos visto que el tránsito de una a la otra supone un
nacimiento; nos sobran tres letras: dos 'l'I, iod, de la palabra c~~n (ja-
yim), y una 1 vav, de la palabra MiQ (mavet). Las dos primeras for-
man uno de los nombres de Dios manifestándose como energía;
así pues, la vida sería la energía de Dios en el cerebro, ya que las
letras~- mem y n, jeth forman la palabra MQ (moáj), cerebro. Por su
parte, la 1 vav, simboliza al hombre. Pero si recordamos que uno
de los significados de la letra n, jeth es camino, y el de la M, tav,
materia, veremos que todo el conjunto nos habla de:

Un camino que Dios recorre naciendo en el hombre para lle-


gar a la materia.

Recibimos una materia cuando encarnamos, la vamos renovan-


do y reciclando a lo largo de nuestra vida, y la devolvemos al mo-
rir. Se la devolvemos a la Tierra, a la Madre Gaia. El proceso, en
su conjunto, indica en realidad una sacralización de la materia a
través nuestro. La información contenida en nuestro ADN se va
transfiriendo poco a poco a la tierra. Y tal vez, un día (puede que
no muy lejano), Madre Gaia despierte descubriéndose a Sí Misma
como ser consciente; y quien dice Madre Gaia dice también la to-
talidad del Universo. Y esta idea no es sólo cabalística. La ciencia
se está planteando ya como hipótesis que el hombre en particular,
y los seres vivos en general, son el medio que el Universo utiliza
para hacerse consciente de sí mismo.

MANUAL DE KA13BALAH PRÁCTICA 769


Tabla XXXIV
Las fases de la vida a la luz de la Kabbalah
. . . e• ... •.
.. Fase (he- Significado (prorilln- ··· Guematria:y letras-no repetidas .
· en el conjuntó , •
' . Palabras ,
cóntenidas
breo) ciación)
_, /
de. las fases
: .,. .. ..
.
enla fase

373, ¡TTt:--M (jishjín), calentar ,~ (gal), ola


,,i.:--c coito (mishga/) 13 (por reducción), il:)MN (ahavá), CW (shem),
amor nombre

318, ilii:), 'V:) (baal guevurah), t:-'J (guesh),


concepción, venida, acercarse
ilt:-'') héroe
llegada (guishá) il' (Yah), Dios
12 (por reducción), ':) (bi) en mí

¡; (ron), can-
to, regocijo
¡,,,,, gestación (heraión)
271, i'CN (asir), prisionero
C'j71::) ,:,....,~ (yitzíme'im), hijo, pro-
iJ (nar), arar,
labrar
dueto de las entrañas,, i) (ner).
lámpara

137, il',:)¡, (kabalá), Kabbalah,


~:it (tzé), ¡sal,
N:il11::) nacimiento (motzá) tradición, transmisión, recepción,
fuera!
mística N:it

"'(Adonaí),
C'"M vida (jayím)
',',n (jala/), espacio
68, Dios
c:in (jajam), instruirse n MI:) (moáj),
cerebro
j7J (gue),
¡vete, fuera!
ilj7'1) agonía (gueviá)
94, ci;ci (dimdum), crepúsculo 'J (gai), val le
7i7i (dáaj), apagarse V estrecho
-,, (goi),
extranjero

446, ,,,1::) (maror), apio, una


de las verduras utilizadas en la cr, (tam),
M11.:l muerte (mavet) Pascua judía, que conmemora perfecto,
la salida del pueblo de Israel de completo
Egipto r,

reencarnación, cír- 72, ion (jesed), amor, gracia,


',,J',J culo, causa, proceso misericordia ,~ (gal), ola
(guilgul) i7:) (ba),regocijar

770 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Continuación de la Tabla XXXIV

Palabras formadas por las letras no repetidas en el conjunto de las fases:


vi (ra), pensamiento NM (ta), célula i.n (tar), investigar
¡n (jen), gracia, encanto nit-t (oráj), camino .nn (jat), temor, espanto
iMJ (niter), liberado v:ii.~J (nirtzá), esclavo ;,in (jeret), tinta negra

C""M (jayim), vida

e
ti. s1 nifica nacimiento)

~~,~ Mi~
(motzá), nacimiento (mavet), muerte
(ambas palabras empiezan por la misma letra
Las letras finales de ambas palabras forman estas dos:

Nri
(ta), célula

En un artículo titulado «El Cosmos, espejo del Hombre», pu-


blicado en la revista Universo, núm. 4, de agosto de 1995, Antonio
Bernal González recoge ideas expuestas en 1937 por el científico
Paul Dirac, el cual hizo notar unas extrañas coincidencias en-
tre determinados números que se relacionan con lo muy grande
y lo muy pequeño, con la astrofísica y la física de partículas.
Los números, que pueden ser considerados como básicos, se re-
fieren a tres aspectos fundamentales de la física: la masa, el tiem-
po y la fuerza.

M ANUAL DE K AB B/\Li\H PRÁCTICA 771


l. Masa. Conociendo el número de galaxias que hay en el
Universo, el número medio de estrellas que hay en cada ga-
laxia y la masa media de una estrella, se puede saber cuál
es la masa total del Universo. Esta masa se puede expresar
como un múltiplo de la masa de un protón, lo que equivale a
calcular cuántos protones hay en el Universo, puesto que la
masa del electrón es prácticamente despreciable. El cálculo
así realizado indica que la masa del Universo viene a ser un
número de veces la del protón igual a 1 seguido de 80 ceros,
o, lo que es lo mismo, 1080•
2. Tiempo. Se sabe que el Universo ha existido durante unos
15.000 millones de años, y ese número se puede expresar tam-
bién mediante números que tienen que ver con unidades fun-
damentales: la velocidad de la luz y el diámetro del protón, que
es del orden de 10-35 cm., o, lo que es lo mismo, 1, partido por 1
seguido de 35 ceros. La luz, que viaja a 300.000 km. por segun-
do, tarda 10-24 segundos en atravesar la distancia equivalente
al diámetro del protón. Pues bien: este tiempo es aproxima-
damente 1040 veces menor que la edad del Universo.
3. Fuerza de gravedad y fuerza electromagnética. La primera
de ellas opera en lo macroscópico: las estrellas atraen a los
planetas, éstos a sus satélites y a sus habitantes, las galaxias
se atraen mutuamente. La segunda opera entre partículas
subatómicas, y es la que mantiene la cohesión de la materia.
Al contrario de lo que podría pensarse, la fuerza de lo muy
grande (la gravedad) es débil, mientras que la fuerza de lo
muy pequeño (electromagnetismo) es vigorosa, 104º veces
más intensa que aquélla.
Aunque el primer número parece no coincidir con los otros
dos, es curioso que sea exactamente el cuadrado de ellos,
o el resultado de su producto, ya que 104º x 104 º = 108º. Los tres
números, pues, se refieren a la cifra 1040 • Al analizarlos, Dirac
notó que dos de ellos son constantes (la masa del Universo y
la constante gravitatoria, mientras que el tercero, el tiempo,
es variable (la edad del Universo cambia a medida que pasa
el tiempo). El hecho de que vivamos en una época en la que
los tres números coinciden puede interpretarse, según el autor

772 ViLLARRUB IA / HAUT / MILLERA


del artículo, de dos maneras: es posible que estemos en una
época especial del universo, precisamente aquélla en la que se
produce la coincidencia de los números, o que la concepción
que tenemos de la constancia de la fuerza de gravedad y de la
masa sea errónea. Esta última fue la posición de D irac, quien
pensó que si las igualdades de los números apuntan a algo fun-
damental, o las tres cantidades son constantes, o las tres varían.
Su opinión fue que las tres magnitudes varían, de tal manera
que a medida que el tiempo transcurre, aumenta la masa del
Universo y disminuye la gravedad, lo que implica un Universo
estacionario y una creación continua. Pero esta posición está
en desacuerdo con la teoría del Bíg Bang, que supone que toda
la materia fue creada de una vez, siendo por tanto constante la
masa del Universo.
En 1961, R. Dicke analizó el trabajo de Dirac, que había sido
olvidado por los físicos, y concluyó que tanto la constante d e
gravitación como la masa del Universo deben permanecer
constantes, y que la única que varía es la edad del Universo.
Su análisis dio como resultado una conclusión sorprendente:
las coincidencias de Dirac no se aplican a cualquiera de los
múltiples universos que teóricamente pueden existir, sino sólo
a aquellos universos en los que existan observadores. No es
patente a primera vista cómo un observador puede influir en
el estado del Universo, pero la argumentación de Dicke es muy
simple.
Se sabe que los elementos pesados como el carbono, el nitró-
geno y el oxígeno, componentes básicos de la vida, son sinteti-
zados en las estrellas y lanzados al espacio después de que és-
tas explotan como supernovas. Es por tanto necesario que pase,
al menos, una generación de estrellas para que se formen estos
elementos y la vida pueda aparecer. Por tanto, un Universo ha-
bitado no puede tener una vida menor que la vida media de
las estrellas de menor duración. Por otro lado, si el Universo
fuese mucho más viejo que la vida media de una estrella típica,
la mayoría de ellas ya se habrían transformado en cadáveres
incapaces de soportar la vida: enanas blancas, estrellas de neu-
trones o agujeros negros. Un Universo habitado debe tener,

M ANUAL OF. KABBALAH PRÁCTICA 773


pues, una edad similar a la vida media de una estrella típica,
y en este sentido, nosotros, habitantes de nuestro Universo, vi-
vimos en un momento especial, que es el tiempo coyuntural,
de este momento, que se puede observar. Si el Universo no tu-
viera la edad que tiene, no estaríamos aquí para observarlo.
Hawking y Collins realizaron un análisis que combina las
tres magnitudes, edad, fuerza gravitatoria y masa, y en él hi-
cieron notar que la vida depende de parámetros que tienen un
valor muy exacto para posibilitar su existencia, citando el caso
de la velocidad de expansión del Universo. Si fuera un poco
mayor de lo que se observa hoy, la gravedad no tendría fuerza
suficiente para que el material expulsado se agrupara forman-
do galaxias, y por tanto no habría· sitios estables para que la
vida se desarrollara. Si, por el contrario, la velocidad de ex-
pansión fuera menor que la observada, sólo un poco menor,
la materia se habría juntado de nuevo poco después del Big
Bang y el Universo se habría desplomado sobre sí mismo.
Lo curioso del caso es que el Universo se expande a la velo-
cidad crítica, ni por debajo ni por encima, y esa improbable
coincidencia es la que permite que haya observadores que des-
cubran esas propiedades insólitas.
Junto con la velocidad de expansión, el valor de la constante
gravitacional es también crítico para la aparición de la vida.
Si es muy elevado, las estrellas que se forman son gigantes azu-
les, de gran masa, pero de corta duración, no teniendo sus pla-
netas tiempo de que en ellos se desarrolle la vida. Si el valor de
la constante es muy bajo, nacen estrellas del tipo enanas rojas,
que tienen una vida media larga, pero son muy frías e incapa-
ces de calentar su entorno de forma adecuada para que la vida
aparezca. Vivimos, pues, en un Universo que tiene el valor ade-
cuado de constante gravitatoria, y eso es llamativo.
Esta serie de coincidencias requiere algún tipo de explica-
ción, y se han propuesto varias:

• La existencia d e un Creador: con Él no habría necesidad de


extrañarse por el estado actual del Universo, pues su exis-
tencia implica una voluntad creadora, y por tanto el deseo

77 4 V! LLARRU BIA / H AUT / MILLER/1


de hacer que los distintos parámetros tomen los valores que
se le antojen. Pero aceptar la idea del Dios creador como ex-
plicación de las coincidencias lleva de una forma u otra a re-
nunciar a seguir investigando en esta dirección, lo que para
la ciencia resulta inaceptable.
• Una segunda forma de ver el problema, más que una explica-
ción, es el planteamiento del problema. Consiste en aceptar
que vivimos en un Universo cuyas condiciones para la exis-
tencia de la vida son en extremo improbables, pero no impo-
sibles, algo así como el resultado de una lotería. Sin embar-
go, como en el caso anterior, nadie se resigna a plantearse la
razón de que ocurra un suceso tan poco probable, para luego
concluir que se trata de una mera coincidencia.
• Una tercera explicación podría venir de la existencia de múl-
tiples universos, idea que está en perfecta concordancia con
las teorías cuánticas de la creación, así como con las de la
Kabbalah, que establece en Daat, la sefirá oculta, la clave de
conexión con los universos paralelos. Si suponemos que un
Universo nace a partir de unas condiciones caóticas, cada
universo tendrá sus variables tomadas al azar; pero luego
la vida aparecerá únicamente en aquellos que cumplan con
los valores adecuados dentro de unos parámetros estrechos.
Todo observador, no importa en qué Universo viva, lo verá
como si hubiera sido escogido con gran cuidado para su be-
neficio. Los demás universos, los que no cumplan con los
valores adecuados, nacen, viven y mueren sin que nadie los
mire.
• El físico J. A. Wheeler formula una cuarta explicación consis-
tente en proponer al observador como una necesidad para el
universo observado. Él observador participa en la creación
de su Universo y éste crea su observador. Se apoya para esta
afirmación en el principio de la mecánica cuántica de que el
observador afecta de algún modo la medición. También el
Universo es afectado por el observador participativo (como
él lo llama), el cual es, entonces un co-creador del mismo.
Curiosamente, esta hipótesis coincide con la postura man-
tenida por algunos teólogos católicos, que apoyándose en

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 775


I Corintios 12: 12 ss., argumentan que si los fieles son miem-
bros del cuerpo de Cristo, son corredentores con Él, y por lo
tanto co-creadores con el Padre, ya que el propio Jesús afir-
ma: «El Padre y Yo somos Uno».
• Cabe finalmente otra explicación, no contemplada por la físi-
ca, aunque puede desprenderse de sus postulados. Antonio
Bernal sugiere que tal vez el Universo ha nacido con estos
parámetros tan ajustados para así generar una vida, la cual
le es necesaria al propio Universo para tomar conciencia
de sí mismo. De esta forma, la coincidencia de los pará-
metros en este momento puntual del Universo indicaría
que es ahora cuando el Universo empieza a reconocerse a
sí mismo como ser vivo. En otras palabras, el Universo tie-
ne los parámetros que tiene (constante gravitatoria, veloci-
dad de expansión, masa, edad ... ) para que aparezcan en él
observadores que tomen conciencia del propio Universo.
Los observadores (entre ellos, nosotros) serían necesarios
para que el Universo sea lo que es, precisamente en este
momento. Éste sería, por consiguiente, el momento cósmico
del despertar del Universo a la autoconciencia.

En este sentido, el tikún cobra todo su significado. Lo cumpli-


remos si, al morir, devolvemos la materia que se nos entregó un
poco más sacralizada, con una carga mayor de información que
la que tenía cuando la recibimos. Y si no, no. Hay que destacar la
palabra que cierra todo el proceso, la que hemos elegido para de-
signar al estado post-mortem: es la palabra~,,~, (guilgul), que tiene
varias significados: círculo, causa o proceso, y también reencar-
nación. En realidad, esta palabra, directa o indirectamente, sirve
para describir cualquier creencia que podamos tener acerca de lo
que haya después de la muerte. Veamos las diferentes posibili-
dades:

a) «Creo que no hay nada». La nada se representa por el cero,


que es un círculo: guilgul.
b) «Creo que hay un juicio» (guilgul), «y que, o vas al cielo,
o vas al infierno». Recordemos que Dante, en la Divina Comedia,

776 YILLARRUBIA / HAUT / MI LI.ERA


nos muestra los siete círculos (guilgulim) del infierno, y los círculos
(guilgulim) de ángeles rodeando a la Divinidad en el cielo.
e) «Creo que hay reencarnación»: guilgul.

Ello muestra que, en el fondo, las diferencias doctrinales no pa-


san de ser meramente semánticas, o, como alguien apuntó, «juegos
de palabras para justificar el salario de las castas sacerdotales».

EJERCICIO

45. Teniendo a la vista la tabla XXXIV, observa que en la ter-


cera de sus columnas se incluyen diversas letras hebreas
· encerradas en óvalos, las cuales son las que no se repiten
en ninguna otra de las palabras de la primera columna,
y números que indican el valor de la palabra que defi-
ne cada fila, acompañados de otras con el mismo valor.
La cuarta columna, por su parte, recoge diversas palabras
que se obtienen podernurá pm estar contenidas en las de
la primera columna'. En la. quinta columna hay dos partes:
. en la superior hay diversas palabras formadas por com-
binación de las Letras que no se repiten en la serie de la
colutnná l .ª; err la parte inferior se expone un desarrollo
de las relaciones de la vida y la muerte. Tornando el mo-
..delo dé lapaite inferior de la colurpna derecha, trata de
componer un tex:to.~n el que se utilicen las ideas del resto
9el cuadro, sobre las relaciones.de la vida y la muerte en
cada una de sus fases.

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTI CA 777


9. EL CAMINO HACIA EL NOMBRE

Y EL TIEMPO VERDADEROS

olvamos a la pirámide y a sus proporciones. Imaginémosla su-


V perpuesta a un tablero de ajedrez. Todos nosotros somos las
piezas de la partida, los trebejos, y a veces lo pasamos francamente
mal. ¿Te imaginas ser el peón blanco de rey, cuando el jugador ordena
P4R? Allá enfrente, el bando de las negras, todos formados, siniestros,
amenazantes, malísimos, por supuesto; y uno, que tiene que avanzar
hacia ellos. jFatal se pasa, oyes! Pero las negras, tan formaditas, ven
avanzar a uno de los peones blancos: jYa vienen, ya vienen, ay madre!
Decididamente no es cómodo ser pieza del juego del ajedrez. Aunque,
eso sí, los jugadores se lo pasan estupendamente.
En más de un sentido, nosotros somos como las piezas de ajedrez,
pasándolo generalmente mal en este tablero de al menos cuatro di-
mensiones (cinco, según el Sefer Yetzirah), al que llamamos Universo,
dentro de una pequeña parcelita a la que sus habitantes llaman Planeta
Tierra. Los dioses (sean quienes quiera que sean), jugadores de ese jue-
go, se lo pasan entre tanto muy bien, a lo que parece.
Imaginemos ahora que el tablero del juego del ajedrez represen-
ta a nuestro Universo, y la pirámide superpuesta a él el Universo
de los dioses. Como tenemos que conectar con ese Universo divino
para llegar a conocer nuestro tikún, es necesario que observemos
las relaciones matemáticas que hay entre la pirámide (o mejor aún,
la superficie de sus caras, que es lo que se manifiesta de ella) y su
base, que en nuestro caso es el tablero de ajedrez. Vimos que esa
relación es el número áureo, 0,61803 ... Por consiguiente, nosotros,
los trebejos del ajedrez, somos algo así como la sombra que proyec-
tan los dioses en el tablero desde su Universo, allá arriba, en las caras
de la pirámide. Así que puede establecerse la siguiente proporción:

«Dioses» son a 1
como «humanos» son a 0,61803 . ..

778 V1L1. ARRUBlt\ / HAUT / MILLERA


Así pues, deberemos dividir los números originales de nuestro
nombre y nuestros apellidos (es decir, sin reducirlos, ni siquiera si
son mayores que 22) entre 0,61803 ... Como no saldrá una cantidad
exacta, debido a que el número áureo es irracional, es decir, de
infinitas cifras decimales, deberemos redondear al número entero
más próximo.
Los dioses se rigen también por otro tiempo. Como de ellos pro-
cede la vida, tendremos que tener presente la fórmula de la vida,
cuyo fundamento se encuentra en la figura 72. Claro que en este
caso resulta algo más difícil hacer la conversión del tiempo personal
al tiempo de los dioses, pues el número áureo aparece en este caso
como índice de una raíz ...
Los números resultantes producirán unas letras que van a ser
nuestras herramientas de trabajo. Para facilitarnos la tarea y orde-
nar todos los datos que vayamos obteniendo, dividiremos el tra-
bajo en nueve fases, complementadas con algunas propuestas de
ayuda. Siguiéndolas en el orden indicado, se cumplirán las condi-
ciones necesarias para llegar al conocimiento del tikún individual.
Necesarias, pero no suficientes, pues hay algo esencial que debe
tenerse presente a lo largo de todo el trabajo: una actitud de pro-
fundo respeto ante lo sagrado que está a punto de manifestarse, y
de apertura a la voluntad del Cielo.
Aunque parezca extraño, no es el rechazo a nuestra propia som-
bra lo que puede dificultar el conocimiento del tikún, sino más bien
el rechazo a nuestra propia luz, a nuestra condición esencialmente
espiritual, la cual no es sino es un aspecto de la Divinidad que
es nuestra verdadera esencia. Si hasta ahora no hemos cumplido
nuestro tikún es porque no lo habíamos visto. Pues, como decía
Krishnamurti, ver en profundidad es actuar. Y añadimos noso-
tros: y actuar desde la profundidad es ser.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 779


1Ü. LAS FASES DE LA INVESTIGACIÓN DEL TIKÚN

egún se indicó en la sección anterior, hemos dividido la investi-


S gación del tikún individual en nueve fases, que es recomendable
seguir por su orden. En este punto, las materias desarrolladas en
las partes II y IV de esta obra mostrarán su utilidad en la medida
en que se hayan trabajado y desarrollado. Es también importante
haber realizado todos los ejercicios planteados, así como la lectu-
ra y subsiguiente meditación sobre los textos poéticos con que se
inicia esta V Parte. Además, se añaden al final de la misma deter-
minadas vías que pueden servir de complemento para las nueve
fases, aunque en ocasiones (si el Espíritu sopla favorablemente),
puede suceder que alguno de estos• métodos complementarios
proporcione directamente el tikún. Nunca se sabe.
El desarrollo de las fases no tiene un límite de tiempo. A veces,
la intuición surge como un rayo al dar los primeros pasos, y el
seguimiento de las fases no hace sino confirmar la primera impre-
sión. Y a veces, lo que entrevemos es tan maravilloso, tan deslum-
brante, tan inmenso, tan bello, que nos asustamos y nos cerramos;
y entonces el tikún puede tardar años en desplegar su mensaje.
Tanto si el encuentro es rápido como si es lento, debe aceptar-
se. No olvidemos que estamos colaborando en la reconstrucción
de la unidad del Universo, y esta es una tarea que lleva su tiem-
po, probablemente muchas vidas serán necesarias para cumplir
la misión. Pero tampoco debemos olvidar un principio básico del
cumplimiento del tikún: no debe esperarse alcanzar lo que algún
chusco llamó la filosofía del chinchorro. ¿Cómo? ¿No saben lo que es
un chinchorro? Pues es, simplemente, una de esas hamacas hechas
con una red trenzada, que se cuelgan de dos palmeras próximas en
alguna isla de los mares del Sur, y en la que podremos tumbarnos,
¡por fin!, cuando hayamos rescatado a la Divina Princesa.
Bueno, pues no. La meta es el camino, pues el Espíritu es diná-
mico, lo que es tanto como decir que es vibración, así que no hay
chinchorro alguno, salvo para ocasionales descansos que de vez en
cuando nos tomamos para recuperar fuerzas. Pensad, por tanto,
en un tikún lleno de acción y dinamismo, pero también de belleza,
de profundidad, de luz, de santidad y de alegría. Es lo que hemos

780 VILLARRUBIA / H AUT / MI LLERA


venido a hacer, y por tanto es lo que mejor sabemos hacer y aque-
llo para lo que estamos mejor dotados.
No lo olvidéis.
Y hechas estas advertencias, pasemos a las fases de la investiga-
ción del tikún.

10.1. Fase 1
Búsqueda de los números verdaderos
del nombre, apellidos y fecha de nacimiento

• Calcular el valor numérico sin reducir (es decir, sumando el va-


lor de las letras, sin hacer ninguna otra operación) del nombre,
apellidos y fecha de nacimiento, por separado cada uno de los
seis datos. Buscar en la tabla XXXV los números de nombre y
apellidos, y en las XXXVI, XXXVII y XXXVIII los del día, mes
y año de nacimiento, respectivamente, para convertir los datos
originales en nuevos.
• Si alguno de los datos originales de nombre o apellidos está
comprendido entre 23 y 28, ambos inclusive, anotar aparte el
número nuevo resultante, con la indicación de «árabe».
• Hacer también la anotación «árabe» si el día de nacimiento está
comprendido entre 23 y 28, ambos inclusive. Y lo mismo para
los nacidos en alguno de los años cuyas cifras suman un núme-
ro entre 23 y 28, que son:

1949 1977 1989


1958 1978 1994
1959 1979 1995
1967 1985 1996
1968 1986 1997
1969 1987 1998
1976 1988 1999

La razón para usar también letras árabes es que nos permite,


por una parte, ampliar en todo caso los significados que vayamos
encontrando, y por otra, facilitar la utilización de letras hebreas
adicionales cuando sean equivalentes a otras árabes.

MANUAL DE KAB BALAH PRÁCTICA 781


Tabla XXXV
Conversión de los datos originales de nombre y apellidos

Nuevo
10
12
14
15
8
9
11
13
14
16
9
10
12
13
15
17
9
11
12
14
16
17
10
12
13
15
16
18
11
12
14
15
17
19
20
4
6
7
9
10
12
5
6
8
10
11
13
5
7
9

782 V ILLARRUBIA / HAUT / MIi.LERA


Tabla XXXVI
Conversión del día de nacimiento

Nuevo Nuevo
1 17
3 8
6 9
9 10
14 12
18 14
5 7
11 9
8 12
5 15
12 9
11 4
9 7
9 11
8 16
17

Tabla XXXVII
Conversión del mes de nacimiento

Nuevo

7
9

10

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 783


Tabla XXXVIII
Conversión del año de nacimiento

Nuevo Nuevo Nuevo


11 21 21
12 7 18
13 18 5
14 4 20
6 7 7
16 11 22
18 5 9
10 9 6
21 12 21
4 16 18
14 20 6
7 '75 12
9 . 18 9
19 13 15
12 17 21
5 12 9
6 16 6
17 20 4
10 6 19
21 11 7
5 15 5
16 19 11
9 5 9
3 19 6
14 14 13
16 19 20
10 5 18
21 19 15
5 14 4
8 10 19
19 15 18
22 20 16
16 16 14
19 3 22
3 8 20
6 22 18
18 18 16
3 14 6
6 20 4
9 7 21

784 VILLARRUlllA / HAUT / MILLERA


10.2. Fase 2
Búsqueda de las letras hebreas y en su caso árabes
• Buscar en la tabla XLIII la letra hebrea que corresponde al
número de orden hebreo, el cual es el mismo número nuevo
que se había encontrado en las tablas XXXIX a XLII anteriores,
y anotarla. Anotar aparte su valor numérico. Abrir una hoja con
el título «Relación de significados» (en lo sucesivo, denominada
a efectos de la presente Guía, RS), en la que se anotarán todos
los que vayan apareciendo en las diferentes fases de este traba-
jo, empezando por los de las letras hebreas halladas.
• Buscar en la misma tabla la letra árabe que corresponde al nú-
mero de orden árabe, el cual es el mismo número nuevo que se
había encontrado en las dos tablas anteriores como resultado de
números originales con la indicación «árabe»:
l. Si la letra árabe tiene equivalente hebreo, anotar la letra de este
idioma. Anotar sus significados en la RS y su valor numérico.
2. Si la letra árabe no tiene equivalente hebreo, anotar
solamente sus significados en la RS.
• Anotar la suma de valores numéricos de todas las letras hebreas
halladas.
• Buscar en el Diccionario numérico cabalístico hebreo-castellano los
significados castellanos de las palabras que tengan los valores nu-
méricos hallados según las normas del párrafo anterior, y anotar en
la RS aquéllas con las que nos sintamos más en sintonía, tanto posi-
tiva (empatía) como negativa (rechazo). Esta tarea deberá hacerse
con sumo cuidado, ya que es posible que nuesb"o subconsciente nos
juegue malas pasadas, apartando nuestra atención de palabras sig-
nificativas, o por el contrario, atrayéndola hacia conceptos que nos
harían «salir guapos en la foto».
Es sumamente significativo que una de las letras árabes, la tha (l;),
nunca puede salir en la búsqueda del tikún. En primer lugar, ninguna
de las transformaciones de números o de fechas, de «originales» com-
prendidos entre 23 y 28 (incluidos los años cuya suma de sus cifras
está comprendida en dicho rango), a «nuevos», proporciona el núme-
ro 17, que es el de orden de dicha letra. Pero además, sus significados
ontológicos, sombra y agravio o injusticia, son incompatibles con la
búsqueda del tikún, que se basa justamente en la luz y en la justicia.

MAN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 785


Tabla XXXIX (1)
Alfabetos hebreo y árabe: números, sonidos y significados

Letras hebreas con equivalente árabe (a)


,
Nº .:. 'Nº .. Valor .,
,.
orden Lefra orden ,,.
.Létra
.. '
.,
n~me- So,n,idos Significaél~s·sim~ólicos
hebreo· hebreá áraJ>:e árabe · ... ,
'Si·:::. ',,;
rico /
':
'" <

/ <

1 M 1 1 1 (muda) Infinito - Pecho - Buey

Casa - Hijo - Dentro de


2 .: 2 -,., 2 b,v
El Templo
Revelación - Retribución
3 ~ 5 ( 3 g suave
Plenitud - Camello

4 , 8 ~ 4 d
Puerta - Palabra - Cosa desig-
nada - Justicia externa
h aspira-
Espíritu - Apertura
5 n 26 lb 5 da
Lo femenino
suave

6 , 27 .) 6 O, U, V
Hombre - Enlace, enganche -
Unión - Hiio

7 , 11 j 7
z
francesa
Simiente - Saeta, flecha
Esoada - Centro
j
8 n 6 t. 8 Vida - Dirección - Camino
española
Bien, bondad - Ombligo
9 tQ 16 .1 9 t
Serpiente que ataca
Origen - Principio - Dios
10 ' 28 l.> 10 i, y
Padre - Lo masculino - Futuro

¡J) k, j Mano abierta - Oquedad


11 !) , 22 20

12 , 23 J 30
española

1
Copa, cáliz - Conducta
Corazón - Movimiento - Látigo
Aguijón - Disciplina

13 t)C 24 .,. 40 m
Agua primordial - Madre
Mar - Nacimiento
Percepción - Pez
14 .i ¡ 25 ¡J 50 n
Eternidad

_,,, Sustento, base, fundamento


15 e 12 60 s
Secreto - Serpiente enrollada
Ojo - Fuente, manantial
16 V 18 t. 70 (muda)
Piel

17 IH"\ 20 J 80 p,f Boca - Hombre que se humilla

786 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Tabla XXXIX (2)
Alfabetos hebreo y árabe: números, sonidos y significados

Letras hebreas con equivalente árabe (a)


Nº ' Nº ·~ ·•.
l:etra 1{ váíor .·.
•/· .,
<>rden , letra · ofdén ' '
hebr_eo · hebrea · ..árabe árabe . ·:nuíneri- ..Sonidos
,. ';·,/.y.,. · Significados simbólicos
.,. co . •;
..
-'• " / .

ts, tz
18 ir 14 .J" 90
(b)
Justicia interna - Justeza, exac-
titud - Anzuelo - Equilibrio
Recepción -Tradición - Vocación
19 ¡, 21 J 100 k, q Llave - Parte posterior de la
cabeza

20 , 10 ~ 200 r
Cabeza - Soplo - Espíritu vital
Comienzo, principio
s, sh
21 w 13 V--' 300
(c)
Diente - Fuego - Consciencia

Materia - Signo - Perdiz


r, t, z
22 3 .:;, 400 Microcosmos - Cru z - Tikún, la
española
misión sagrada de cada ser
..:, z
4 500 Rocío - Lluvia - Humedad
española
j
7 t 600
española
Emperador - Otoño

9 ~ 700 dh Causa, razón - Lobo


d
15 .J"' 800 Perla - Raíz - Silencio
enfática
z espa-
17 j; 900 ñola Sombra - Agravio, injusticia (d)
enfática
g suave
19 t 1000
gutural
Cerradura - Límite, término

Nota a la Tabla XXXIX:

Nº Orden. El de la letra en cada uno de los respectivos alfabetos.


Valor Numérico. El de cada letra, que para cada uno de estos dos idiomas puede
verificarse en cualquier diccionario. Obsérvese la coincidencia de valores numéri-
cos de muchas de las letras árabes con las equivalentes hebreas. Ello demuestra el
tronco común semítico de ambos idiomas.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 787


(a) Los sonidos de las letras árabes con equivalente hebreo pueden variar algo
respecto al indicado. Los sonidos v y p no existen en árabe. Tampoco las
vocales e y o.
(b) La letra árabe indicada tiene un sonido de s enfática.
(c) En árabe, sólo el sonido sh.
(d) Esta letra árabe no puede salir nunca como resultado de una transformación
(ver Tablas XXXV a XXXVIII), ni desde el punto de vista matemático, ni tam-
poco desde el punto de vista simbólico. En efecto, al buscarse siempre en
la investigación del tikún fo más alto, fo más sagrado, lo más bello, lo más
fuerte, fo más luminoso, fo más vivo .. . es evidente que los significados de la
letra son incompatibles con tales propósitos.

Pueden darse variaciones focales de fa pronunciación árabe según el país; así


la letra guim, equivalente a la guímel hebrea, puede sonar como j francesa, excep-
to en Egipto, que se pronuncia como g suave. Las letras hebras que cambian su
forma a final de palabra (:::, C, J, ~, J) se transcriben en ambas modalidades.

70.3. Fase 3
Letras solares y letras lunares
El concepto de «letras solares» y «letras lunares» procede del idio-
ma árabe, y se refiere a la letra que sigue al artículo, el cual, como
ocurre con el idioma hebreo, se une a la siguiente palabra. Si la
letra es solar, se omite el sonido L, duplicándose en cambio la con-
sonante que la sigue. En cambio, si la letra es lunar, se pronuncia el
sonido L, seguido del de la consonante que sigue.
En dicho idioma, las palabras «el sol» y «la luna» se escriben y
pronuncian de la siguiente forma:

El Sol: ~ l (ash-shams) La Luna: _;J.)I (al-qamar)

• Determinar cuántas letras son solares y cuántas lunares,


usando la tabla XLIV. Anotar los valores numéricos de unas
y otras, y sumarlos por separado. Buscar en el diccionario
numérico cabalístico las palabras de ambos números y ano-
tarlas en la RS.

788 YILLARRUBIA / H AUT / MILLERA


• El número de letras solares y lunares, o fórmula personal, indi-
cará el tipo de tikún:

l. Predominio de letras solares indica que el tikún es de natu-


raleza luminosa, es un tikún cuya misión es, de una u otra
forma, aportar luz.
2. Predominio de letras lunares indica que el tikún es de natura-
leza purificadora, es un tikún cuya misión es, de una u otra
forma, limpiar y volver transparente aquello que, por su opa-
cidad o suciedad, impide el paso de la luz.
3. Igual número de letras solares y lunares, equilibrio: el tikún
participa de ambas naturalezas, pero sobre todo representa
un nexo o enlace entre los seres cuyas misiones son de una
y otra naturaleza. Actúan, por decirlo así, a semejanza de los
amortiguadores de un automóvil, limando asperezas y bus-
cando la concordia.

• Anotar la fórmula personal, mediante dos números separados


por un guión. El primero de dichos números indicará cuántas
de las letras son solares, y el segundo cuántas lunares. Así, por
ejemplo, la fórmula 7-2 indicará que hay 7 letras solares y 2 lu-
nares, lo que implicará que, además de las seis letras hebreas
procedentes de cada uno de los seis bloques originales (nombre,
apellidos y fecha de nacimiento), hay tres letras árabes, porque
en tres de dichos bloques los números originales estaban com-
prendidos entre 23 y 28, ambos inclusive. Cuando todas las le-
tras sean de un mismo tipo, se indicará con Olas que falten. Así,
por ejemplo, 0-8 indicará que no hay ninguna letra solar y que
hay 8 letras lunares.

MANUAL OE KABl3ALAH PRÁCTICA 789


Tabla XL
Letras solares y lunares en el alfabeto árabe y sus equivalentes hebreas

1
Árábe Hebreo , • ·•. vafor, Árabe Hebre9 '• Valor

~ d 4 1 ~ 1

.) ~ 7 w ~ 2

.1, f 9 e ~ 3

J ~ 30 ~ ii 5

~ n 50 .)
, 6

V" o 60 e n 8

i.r' X 90 l.> ~
10

.)
, 200 ~ :, 20
:.
V" e 300 ~ Q 40

..::., M 400 70
t V
:.
w 500 u ~ 80

~ 700 i.,J ¡, 100

,..;, 800 e 600


J; ( * ) 900 1000
t
(*) Recordemos que esta letra no puede salir de la transformación
matemática de los datos originales, ni tampoco por sus significados on-
tológicos.

790 V!LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


70.4. Fase 4
Colores, cualidades y conceptos significativos

• Según cuál sea la fórmula personal, hay una determinada combina-


ción de colores que son los que preferentemente apoyan el cumpli-
miento del tikún. El color es vibración, y en función del programa
de vida y del tikún de cada uno hay una combinación de vibracio-
nes que armoniza mejor que las demás. La regla general es que en
las letras solares predominan los colores calientes, y en las lunares
los fríos. A su vez, estos colores corresponden a unas determina-
das cualidades o aspectos, tal como quedó reflejado en la figura 66.
En dicha figura podemos observar que la base del triángulo recoge
la gama de los violetas (combinaciones de rojo y azul), los cuales
son, a su vez, los colores opuestos a los amarillos, lo que es tanto
como decir su expresión; en el lado derecho aparecen los de la gama
de los anaranjados (combinaciones de rojo y amarillo), opuestos al
azul; y en el lado izquierdo los de la gama de los verdes (combina-
ciones de amarillo y azul), opuestos al rojo.
• Las combinaciones de colores para cada una de las fórmulas perso-
nales de letras se recogen en la Tabla XLI. En ella se indican también
las cualidades o virtudes que se ponen preferentemente de mani-
fiesto mediante el cumplimiento del tikún. El desarrollo en color de
esta tabla se recoge al final de la obra, en la Lámina I.
• Las fórmulas personales se han agrupado en diez conjuntos. La defi-
nición de los colores debe considerarse de forma aproximativa, de tal
modo que en los vértices del triángulo los colores sean puros, pasan-
do por sucesivas mezclas con los otros dos primarios hasta llegar a
cada uno de los otros vértices. Los colores de la gama de los anaranja-
dos (combinación de rojo y amarillo) se refieren al aspecto expansivo
del tikún; los de la gama de los verdes (combinación de amarillo y
azul) al aspecto restrictivo, y por último, los de la gama de los violetas
(combinación de rojo y azul) al aspecto controlador o de consciencia.
• A su vez, cada conjunto forma una combinación numérica, la cual es el
resultado de dividir el gran triángulo en otros 100 más pequeños, que
se numeran del 1 al 100 empezando en el vértice rojo y continuando
hacia el amarillo, después el azul, y en vueltas sucesivas hacia dentro,
hasta terminar en el centro. Partiendo del lado del «control», se su-

M ANUAi. DE KABBALAH PRÁCTICA 791


man por separado los números de cada diagonal (la dirigida hacia el
lado de los anaranjados y la dirigida hacia el de los verdes) que inci-
dan en cada uno de los triángulos de la base, y después los dos resul-
tados se suman primero, y se restan después. Todo ello origina cuatro
números, que a su vez proporcionarán diversas palabras o conceptos
en hebreo, los cuales se añadirán a la relación de significados (RS).
Ver el desarrollo del triángulo en la figura 73.

Tabla XLI
Colores, cualidades y conceptos significativos según fórmula personal
Color de
Con- Fórmulas Color de Color de
Cualidad unifica- Cualidad Cualidad
junto Personales expansión control
ción

11 -0/ 10-0
9-0 / 8-0 Energía
A Rojo Amarillo lnteli~encia Roj~ Ener~ía
7-0 / 6-0 Fe
escarlata Afirmación
vivo Equi ibrio carmm Equili ria
/10-1

9-1 / 8-1 Justicia


Rojo Amarillo Rojo
B 7-1 /6-1
bermellón
Fortaleza Exactitud D esapego
5-1 /9-2 limón magenta
Precisión

8-2 / 7-2 Justicia


Bermellón Verde
e 4-2 /7-4
puro
Fortaleza
limón
Exactitud Magenta Desapego
5-3 Precisión

7-3/ 6-3 Verde


D 4-2/7-4/ Naranja Fortaleza Justicia Marnta
Alegría hierba Espiritualidad
5-3 rojizo Moderación Vio áceo

6-4 / 4-3
Libertad
5-4 / 6-5 Anaranjado Alegría Verde Vio leta
E Salud Espiritualidad
5-5 / 4-4 vivo Gozo vivo brillante
3-3 Autorrespeto

5-6 / 4-5 Verde Libertad


F Anaranj ado Alegría Violeta
3-4 / 4-6 esmeral- Salud Espiritualidad
dorado Gozo profundo
da Autorrespeto

3-5 / 4-7
2-4 / 3-6 Dorado Verde Templanza Violeta
G Prudencia Empatía
anaranjado mar Suavidad azu lado
3-7

2-5 / 3-8
Dorado Azul Templanza Añil
H 2-6 / 2-7 Prudencia Empatía
2-8 brillante turquesa Moderación violáceo

2-9 / 1-5 Azul


1 1-6/1-7 Dorado Prudencia Templanza Azu l
cielo Empatía
1-8 / 1-9 amarillento Sabiduría Afectividad añi l
oscuro

1-10/0-1 1
0-10 / 0-9 Amarillo Azul Azul
lnteli~encia Amor Amor
J 0-8 / 0-7 vivo Equi ibrio profundo Entrega
profundo
Unidad
0-6 añilado

792 V!LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


AMARILLO

AZUL ROJO
Amor Energla - Fe
Unidad Empatía Espiritualidad Expansión
1 H F E

Figura 73
El triángulo de la figura 66 dividido en 100 triángulos menores. Las sumas
por diagonales según la fórmula personal (indicada al pie del triángulo por flechas
y letras mayúsculas que indican cada fórmula personat deducida a partir de la
Tabla XXXVI) proporcionan por guematria diversos conceptos utilizables para el
desarrollo del tikún. Los correspondientes a las combinaciones de cada fórmula pueden
estudiarse en las tablas XUI a LI. Las palabras relativas a la expansión tienen en hebreo
un valor numérico igual a la suma de los números desde la letra de la base hasta el lado
derecho del triángulo (gama de los naranjas), a través de la diagonal que arranca de su
letra correspondiente. Las relativas a la unificación se obtienen sumando los números
de los trúingulos a partir de cadtl letra de la base hacia la izquierdtl (gama de los verdes)
a través de su diagonal. Por su parte, los números de las palabras relativas hacia la
dirección se obtienen sumando los dos conceptos anteriores (giro hacia la expansión) o
restándolos (giro hacia la unificadón). Para la búsqueda de las palabras correspondientes
a cada suma o diferencia halladtls se ha utilizado el Diccionario Numérico Cabalístico
Hebreo-Castellano, de J. Villarrubia (ver referencias bibliográficas).

M A N UAL DE K AB BA LAH PRÁCTICA 793


Tabla XLII
Conceptos derivados de la fórmula personal

Conjunto A. 11-0 / 10-0 / 9-0 / 8-0 / 7-0 / 6-0 / 10-1


Palabras relativas a la expansión:
:,o,i (dumah) Tumba/ Silencio/ El Ángel guardián
de los muertos

,,:i
ci,:, (hadom)
(ha/aj)
El Templo/ antípodas
Morir/ Caminar /Viajero/ Flujo,
corriente
:,',~ (ka/ah) Novia; un título de Maljut
~):! (neguev) El desierto de Neguev, al sur de
Israel
m (noáh) Llanto, gemido

Palabras relativas a la dirección (giro


hacia la expansión):
cw~ (gueshem) Lluvia
c,;-,',N it)N~, (va iomer Elohim) «Y dijo Dios» (Gén. 1 :3)
:"li::tt) i~ (bar mitzvah) Sujeto al mandamiento,
ceremonia de iniciación de los
niños judíos a los 13 años
:,',nw (shajalah) Ovario

Palabras relativas a la unificación:


Las 288 chispas del «fuego de la justicia», las más duras y pesadas, que ca-
yeron y se mezclaron con los fragmentos de los «recipientes», iniciándose
así el exilio de la Shejiná
:¡in (joref) Invierno
m~v (arigah) Deseo, anhelo
in~ (pejar) Alfarero
n,~ (paraj) Crecer/ Florecer, germinar

Palabras relativas a la dirección (giro


hacia la unificación):

m~,
C""MM
~¡,YV,
ii~~ (zikur)
(/ikiví levanah)
(etz ha-jayim)
Recuerdo/ macho, varón
Eclipse de luna
Árbol de la Vida
~,,~ (karoz) Heraldo, pregonero

794 V11.1.ARRUBIA / H AUT / MILLERA


Tabla XLIII
Conceptos derivados de la fórmula personal

Conjunto B. 9-1 / 8-1 / 7-1 / 6-1 / 5-1 / 9-2

Palabras relativas a la expansión:


i.:N (abdán) Destrucción, ruina
¡,N (on) Fuerza, vigor/ Riqueza
/ Hijo primogénito
¡iN (un) Madeja de hilo
m.: (banah) Construir, edificar/ organizar
pi (dagán) Cereal, centeno
pi (diguén) Almacenar los granos
C'J1 (daguím) Peces / El signo de Piscis
¡, (zan) Alimentar/ Alimento
:i.:,c (mizbé;) Altar, ara
Ni.:nc (majabó) Refugio, escondite, asilo
:i.:J (nibah) Avivar, animar/ Profetizar

Palabras relativas a la dirección (giro hacia la expansión):


lj"t:.' iJ (guer sheket) Convertido al judaísmo
por motivos de I uero

Palabras relativas a la unificación:


c•J~',, •J~', (/ipné velipním) Santasanctórum
/ En lo más profundo
ri,m~~ (tzemitut) Eternidad, perpetuidad
¡ici (rimón) Granada
ccir.:, (shomem) Desierto, vacío, desolado
/ Solitario
ici.n (tomé;) Sostén, ayuda, apoyo

Palabras relativas a la dirección (giro hacia la unificación):


r,',.:w ¡¡,, (zkán shibolét) Punta de la espiga
¡¡,, r,',,:r.:, (shibolét zakán) Barba
=,~v ('atif) Taled, manto, capa

MANUAL DE KAB BALAH PRÁCTICA 795


Tabla XLIV
Conceptos derivados de la fórmula personal

Conjunto C. 8-2 / 7-2 / 6-2 / 8-3 / 5-2

Palabras relativas a la expansión:


:ron (hosaif) Agregar, sumar
;,i;,• ~;,¡, (kahal Adona1) Congregación del Eterno,
el conjunto de los creyentes

Palabras relativas a la dirección (giro hacia la expansión):


~,~ c:i•~~N (aznayím /a-derej) Cuidarse en el camino
/ No descubrir los secretos
vorzm m::mi;, (ha-tzotzeret ha-shemá) Trompa de Eustaquio
yi,¡, (kvartz) Cuarzo
¡i¡,.n (tikún) Reforma, mejora, restitución
/Tikún, la misión sagrada
que venimos a cumplir

Palabras relativas a la unificación:


c:i-,:.-ro (bat-galim) Sirena, hija de las olas
~Niru• r,~.,,O (medinat lsraen El moderno estado de Israel
r,v,n .ni~•~::: (tzelilut ha-daat) Lucidez, con todas sus facultades
c:i-,;,r, (tehilim) El libro de los Salmos

Palabras relativas a la dirección (giro hacia la unificación):


.n,~v,.n (toabot) Abominaciones

796 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Tabla XLV
Conceptos derivados de la fórmula personal

Conjunto D. 7-3 / 6-3 / 4-2 / 7-4 / 5-3


Palabras relativas a la expansión:

WN (esh) Fuego
:i.,.-,',, (valerianah) Valeriana
~~ ~ , •nN (Adonai ha-melej neemán) Mi Señor el Rey Fiel,
nombre de Dios
¡,iN (erek) Tierra
¡~,:, (harmón) Palacio/ Harén, gineceo
¡~,:, (hirmón) Armonización
ciNt:i (meorás) Novio, prometido
:iiiJt:i (menorah) Lámpara/ La menorá, el candelabro
de 7 brazos
Ni¡, (kará) Leer, declamar, recitar
/ Anunciar, convocar/ nombrar
/Leerla Biblia
Ni¡, (krá) Versículo

Palabras relativas a la dirección (giro hacia la expansión):

C~ :,.:i¡-,Ji ~, (zajar u-nekebah braám) Varón y hembra los creó (Gén. 5:2)
.m?!Ni~ iv• (ya'ar bereshit) Selva virgen
e•,-~ ,n (jej toém) Buen gusto

Palabras relativas a la unificación:

:,~iv:i e• (iam ha-'arabá) Mar Muerto, uno de sus nombres


•m:i c¡-,t:i (makóm panut¡ Lugar vacío, libre

Palabras relativas a la dirección (giro hacia la unificación):

C'J-V r,i~l (guebot einím) Las cejas


-,,ci, (hipú¡) Inversión/ Contrario, contraste, oposición
/Trópico
7JNt:l (meuná¡) Perpendicular, vertical

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 797


Tabla XLVI
Conceptos derivados de la fórmula personal

Conjunto E. 6-4 / 4-3 / 5-4 / 6-5 / 5-5 / 4-4 / 3-3

Palabras relativas a la expansión:

,~¡,llCN (aspak/ar) Espejo


j:lMN (eljén) Vosotras
;,-,'iQ;, in (har ha-Moriyáh) Monte Maria (11 Crónicas, 3, 1)
~,~,m (hitguelgue/) Rodar, arrollarse/ Suceder, acontecer
/ Desenvolverse / Metamorfosearse
/ Reencarnar

Palabras relativas a la dirección (giro hacia la expansión):

Mi-~WllM M"WJ (neshiáh ha-pashtút) Olvido de la simplicidad

Palabras relativas a la unificación:

C't:)W,M Mit:l' (iamot ha-gueshamim) La época de las lluvias


n~nwn ml),l)W (shfoferet ha-shajaláh) Trompa de Falopio
,, :,i.i (toref iad) Debilidad, mano blanda

Palabras relativas a la dirección (giro hacia la unificación):

,-,:iN (abréj) Título dado a José en Egipto /Visir


M~'rn (grutáh) Escombro, chatarra
,,.,,;, (heriá¡) Oler, olfatear/ Sentir/ Inspirar
/ Infundir olor
~,in (jarút) Torneado, tallado/ Cono
;,-,n (jarayáh) Palma, hoja de palmera
MlllMt:l (mejpatzáh) Cofre

798 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Tabla XLVII
Conceptos derivados de la fórmula personal

Conjunto F. 5-6 / 4-5 / 3-4 / 4-6

Palabras relativas a la expansión:

MT'Ji':,J (galoniut) Ondulatorio


inw (shahar) Luna
n,w (Sarah) Sara, esposa de Abraham
n,w (sharah) Empapar / Habitar/ Desanudar
iT:!VM (te'aláh) Acequia, acueducto/ Canal, estrecho
/ Remedio, medicamento

Palabras relativas a la dirección (giro hacia la expansión):

M,¡, Mi"'T°ICM (jamudut keshet) Encanto o hermosura del arco iris

Palabras relativas a la unificación:

M,i't)J (guemirut) Fin, término/ Perfección


nlllM."'T l'V (etz ha-tapuáJJ Manzano

Palabras relativas a la dirección (giro hacia la unificación):

C~ CTI~N (Elohim jayim) Dios de vivos


(Sefer Yetzirah 1 :1; relacionado
con la 9.ª sefirá, Yesod)
c•oim (nijumim) Compasión, consolación
ni:itJ (nitzuá¡J Victoria, triunfo/ Dirección
toe~, C,W (o/am ha-ba) El mundo futuro en tiempos del Mesías
c-i¡, (kadím) Este, oriente /Viento siroco

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 799


Tabla XLVIII
Conceptos derivados de la fórmula personal

Conjunto G. 3-5 / 4-7 / 2-4 / 3-6 / 3-7

Palabras relativas a la expansión:


r,inri.o:, (himatjut) Elasticidad, tensión
in•,N ¡¡,~ (zkán Eliyahu) Ajenjo (lit. «barba de Elías»)
C,CJ (natáf) Bálsamo
C,CJ (nátaf) Gotear, rociar, fluir
C,CJ (natef) Gajo, uva
C,CJ (nétef) Gota

Palabras relativas a la dirección (giro hacia la expansión):


y hembra los creó (Génesis 5:2)
CII\~ :i=i,Ji i!l~ (zajar u-nekebah braám) Varón
l"l't:'Ni~ iv• (ya'ar bereshit) Selva virgen
c•,c in Vej toém) Buen gusto

Palabras relativas a la unificación:


,,ron Vasúj) Oscuro, sombrío
,,m '%> (saguí nehor) Ciego
,w, (/eshéd) Grasa, gordura/ Savia, pulpa
,,w (sheled) Esqueleto

Palabras relativas a la dirección (giro hacia la unificación):


,w~, (hejsher) Preparación, validación
/ Declaración de apto
(kosher) para comer
m~v:, (heemit) Unir, juntar
l"l1N~~ M"ui• (Adonaí Tzebaót) Eterno de las Huestes,
nombre de Dios en correspondencia
con las sefirot 7ª Y 8ª, según diferentes
escuelas cabalísticas.
fV.l)J Ji.l)' (iafé nefesh) Bondadoso, de noble corazón
:irvi.= (kresháh) Puerro
iiJ 'i im (nehar di nur) Río de fuego / la Vía Láctea
(Daniel 7:1 O)

800 V1LLARRUBIA / H AUT / MILLERA


Tabla XLIX
Conceptos derivados de la fórmula personal

Conjunto H. 2-5 / 3-8 / 2-6 / 2-7 / 2-8


Palabras relativas a la expansión:
ftn ¡~-,N m"NO ,,, (/ikuí meorót ha-eben jefetz) «Eclipse de luz
de la piedra preciosa»

Palabras relativas a la dirección (giro hacia la expansión):


cnii, M•~ (bet ha-rejem) Vulva
c•.on m11:: (tzepajat ha-mayím) Botijo
j"ii"1 miw.o C'l!l':i (fifním mishurát ha-din) Misericordiosamente,
no según la letra de la ley
Palabras relativas a la unificación:
ri~::~ (batzbútz) Cáñamo
n11¡,n (hakafáh) Vuelta, rueda, círculo
/ La vuelta que se da
en la sinagoga con los rollos
de la Ley
',',;i', MIi' (iafé /ehala/) Loable/ Celestial
'Vl.O (min'aD Zapato/ Cerradura, cerrojo
C,Vl (nee/ám) Escondido, oculto/ Incógnita
¡,',e (se/ek) Acelga
¡::l (nitzán) Brote, pimpollo, botón
¡11c (sapán) Marino, marinero
r,v ('e/etz) Regocijo, gozo, diversión
':i::v ('atzal) Músculo
'.O'l!I (pnimí) Íntimo, interior
r•:: (tziyetz) Gorjear, silbar, trinar
r:: (tzitz) Diadema, guirnalda
/Corola/ Flor
V,:: (tze/a) Costillla / Tórax, busto/ Cateto
e',¡, (ke/es) Burla, mofa/ Alabanza, loa
fi' (ketz) Fin, término/ Destrucción,
ruina
Palabras relativas a la dirección (giro hacia la unificación):
C'll) iz,cn (hester paním) Enojo, ira
¡,e!ll (Neptún) El planeta Neptuno
t:!.Orzl.Oi! fV ('etz ha-mishmésh) Albaricoquero

MANUAL DE KABBALAI-I PRÁCTICA 801


Tabla L
Conceptos derivados de la fórmula personal

Conjunto I. 2-9 / 1-5 / 1-6 / 1-7 / 1-8 / 1-9


Palabras relativas a la expansión:
.n~¡,Jni (hitnakmút) Venganza
C'CW MNi' (irát shamayím) Devoción, piedad,
temor a Dios
¡Ni¡, (kurán) El Corán, libro sagrado
del Islam
Palabras relativas a la dirección (giro hacia la expansión):
¡,,~, :iw¡, (keshet zijarón) Arco iris de la memoria
Palabras relativas a la unificación:
r~i1N (azovión) Lavanda, espliego
",n, (dajlil) Espantapájaros
1Tl~i'! (hitjín) Digerir/ Mascar/ Hacer moler
'!Vil (ha'ez) Osar, atreverse
~ , (jasid) Bueno, piadoso, devoto
/ Jasideo
e:~ (kavás) Lavar
C' ':i,', (/eb iam) Alta mar
¡:', (/abán) Blanco/ Labán
(Génesis, 25,20)
',:J (nabef) Odre, vasija/ Arpa,
lira, laúd
nin'J (nijoáj) Aroma, perfume
i:c (sibéj) Injertar / Enredar, complicar
i:,v ('obed) Obrero, trabajador
mv ('lzáh) Cabra, chivo

Palabras relativas a la dirección (giro hacia la unificación):


n,,.¡:-=iN (ab-ben-rúaj) Padre, Hijo y Espíritu Santo
1:'¡"!Qj' (katm Cosecha, recolección
C"!QW (shitím) Acacias
e",~, wi',w (shelosh regalím) Las tres principales fiestas judías:
Pascua ( Pes aj), Pentecostés (Sha vuót)
y Tabernáculos (Sucot). Se consideran
fiestas de peregrinación

802 YILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Tabla LI
Conceptos derivados de la fórmula personal

Conjunto J. 1-10 / 0-11 / 0-10 / 0-9 / 0-8 / 0-7 / 0-6


Palabras relativas a la expansión:
',•a:,:n (hi¡p;n Multiplicar, doblar, duplicar
1'CJn (hinsij)
z~
Coronar a un príncipe
fJn (henetz) Brillar, centellear, .lucir
(hisiá) Trasladar/ Conducir, llevar
n (he'/ém) Ignorancia, olvido / Negligencia
¡in (hotzén) Armamento /Tallo de lino
c-n,Nn ncc (matéh ha-Elohím) Vara de Dios (Éx. 18,9)
~e (ma'aláh) Subida/ Altura/ Mérito/ Colina
ne V ('almáh) Doncella, virgen
mi (tzonáh) Rebaño
mi (tzináh) Frío, resfriado/ Escudo/ Muralla
Palabras relativas a la dirección (giro hacia la expansión):
rii~J,~J (galoniut) Ondulatorio
int: (shahar) Luna
n,i: (Sarah) Sara, esposa de Abraham
n,w (sharah) Empapar/ Habitar/ Desanudar
ri,vr, (te'afáh) Acequia, acueducto/ Canal, estrecho
/ Remedio, medicamento
Palabras relativas a la unificación:
ca:,,~ (karpás) Apio, perejil (usados en la
comida de Pascua)
¡,,.:in nNic (maráh ha-bazák) Aparición del rayo (S.Yet, 1,6)
iwc (meshé¡) Duración, prolongación
¡,,e (sarák) Púrpura
i::i.-v ('etzer) Gobierno, autoridad/ Freno, vigor
v,:i: (tzera) Sien
'JIV (shanO Carmesí, escarlata

Palabras relativas a la dirección (giro hacia la unificación):


,.,,N (adir) Poderoso, fuerte/ Dios/ Príncipe
miN (oreáj) Huésped, viajero
ni,N (eruáj) Albergue, hospedaje
i•.:i, (guebir) Amo/ Soberano/ Hombre rico
niiNn (haadaráh) Glorificación
n~.,,n (hadráh) Cereal
VJll'i (hetzneá) Humildad, modestia/ Secreto
n,, (zára¡) Salir el sol/ Brillo, resplandor
im (jázar) Volver, regresar/ Investigar/ Girar
ncc'5a:, (p/asmáh) Plasma

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 803


70.5. Fase 5
Ángeles del tikún

• La tabla LII (dividida en 6 subtablas) recoge los ángeles correspon-


dientes a cada fórmula personal, con indicación del número de or-
den en la relación general de los genios o ángeles del Árbol de la
Vida (ver II Parte), con sus nombres hebreos transcritos al castellano
y las cartas correspondientes del tarot, en las que se indican (noctur-
na) o d (diurna). Este concepto de nocturna o diurna, aplicado a las
cartas del tarot, se basa, tal corno se indicó, en el primer capítulo del
Génesis, en el que se describe la Creación. Al final de cada uno de
los «días» que comprende, aparece la expresión CTI i¡,~-m ~iV-iM
(va-ihí-ereb va-ihí-bóker iom ... ) y fue ·tarde, y fue mañana, día ...
Por esta razón, entre los judíos el día comienza a la caída de la tarde,
en el momento de ponerse el sol; y por la misma causa, se asignan
a los genios cuyo número de orden es impar el concepto nocturno y
diurno a los de número de orden par.
• Recordemos que, al reseñar los genios, se citaba el Sefer ha-
Bahir corno el texto en el que se originan sus nombres, a par-
tir del Libro del Éxodo, 14:19-21. En el fragmento CX del
citado Bahir se indicaba la división de los nombres divinos
en tres grupos de veinticuatro nombres cada uno. Y pues-
to que toda manifestación se expresa, según hemos visto,
mediante tres fuerzas, se han dividido los nombres de los
genios en los citados tres grupos, tal corno se indicaba en
la III Parte, sección 14 y Tablas XXX (1, 2 y 3). Por otra par-
te, al analizar en detalle sus nombres pudimos constatar la
profunda correspondencia que la mayoría de ellos tenía con
pasajes o aspectos del Éxodo, lo que no es de sorprender
dada la procedencia de tales nombres. Por esa razón se ha
considerado lógico y cohérente con estos aspectos asignar la
fuerza aglutinante o unificadora a los primeros veinticuatro,
ya que sin ella el pueblo hebreo no habría podido emprender
la marcha corno tal pueblo. El segundo grupo se asigna a la
fuerza equilibradora, de dirección o de consciencia, ya que
era necesario tener un objetivo al ponerse en marcha; pues,
corno apunta Laurence J. Peter, (Las fórmulas de Peter, v. refs.

804 VI LLARRU BIA / HAUT / MI LLERA


bibliográficas), «si no sabes a dónde vas acabarás yendo a
otra parte». El tercer grupo, finalmente, se asigna a la fuerza
expansiva, que es la realización efectiva de la marcha hacia
la Tierra Prometida.
• El uso de esta tabla es sencillo. Basta buscar en el cuadro correspon-
diente al total de letras la fila que corresponde a la fórmula perso-
nal, y anotar los números de los genios correspondientes. Sus sig-
nificados, valores numéricos y referencias pueden consultarse en
las secciones 3.11 y 3.12 de la II Parte. Es recomendable apoyarse en
esta tabla, la cual permite múltiples combinaciones, desde el uso de
los significados de los genios del tikún que a cada uno le correspon-
dan, hasta sumar por separado los valores numéricos de los tres
ángeles personales y los de los tres del tikún, y buscar las palabras
correspondientes a dichos números, anotándolas en la RS. Después
puede hallarse la diferencia entre ambas sumas de ángeles, y bus-
car los significados correspondientes a dicho número, que se ano-
tarán también en la RS. No debe olvidarse la estrecha correspon-
dencia entre los genios y las Tríadas del Árbol, por lo que resultará
muy útil estudiar en cuáles de dichas Tríadas operan los ángeles del
tikún. Es posible que nos llevemos más de una sorpresa.
• Un truco que a veces funciona (no siempre) para valores numéricos
superiores a 1000 en los que quizá no encontremos ninguna palabra
es partir el número en dos, y unir después los conceptos resultantes.
Puede usarse para la partición alguno de los siguientes números
(pueden encontrarse muchos más, dependiendo de la habilidad y
la imaginación del cabalista):
501 - Dará el concepto cabeza, principio o cumbre (w~,, rosh).
556 - Proporciona restitución, reparación o misión (¡i¡,.n, tikún).
800 - Es el valor de arco iris (.nw¡,, keshet).
• Por último, llamamos la atención sobre el hecho de que los ge-
nios se repiten en diferentes fórmulas personales.

M AN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 805


Tabla LII
7. Genios de la Kabbalah en el tikún. 6 letras (todas hebreas)

letras Unificación Consciencia


.. .
Ex.pansión

Solar Lunar Nº. Nombre Tarot Nº. Nombre Tarot Nº. Nombre Tarot
6 o 24 Hahiniah 7ed 48 Míhael 10ed 72 Mumiah 4ed

5 1 20 Pahaliah Sed 44 lelahiah Sed 68 Jabuiah 2ed

4 2 16 Hakamiah 3ed 40 leiazel 6ed 64 Mejiel 9ed

3 3 12 Hah'aiah l0od 36 Menadel 4od 60 Mitzrael 7od

2 4 8 Kahetel 8od 32 Vasaría 2od 56 Poiel 5od

1 5 4 Elemiah 6bd 28 Seehiah 9bd 52 lmamiah 3bd


o 6 1 Vehuiah Sbn 25 Nith-H'aiah 8bn 49 Vehuel 2bn

((b = bastos - c = copas - e = espadas - o = oros)


(n = nocturno - d = diurno)

Tabla LII
2. Genios de la Kabba/ah en el tikún. 7 letras (6 hebreas+ 7 árabe)

Letras Unificación ª Consciencia Expansión' . /.

Solar Lunar Nº. Nombre Tarot Nº. Nombre Tarot Nº. Nombre Tarot
7 o 23 Melahel 7en 47 Asaliah lücn 71 Haiaiel 4cn

6 1 21 Neljael 6en 45 Sealiah 9cn 69 Rohel 3cn

5 2 17 Lauviah 4en 41 Hehahel 7en 65 Damabiah 10en

4 3 14 Mebahel 2ed 38 Ja'amiah Sed 62 lah-hel Sed

3 4 10 Aladiah 9od 34 Lehajiah 3od 58 leialael 6od

2 5 7 Ajaiah Son 31 Lekabel 2on 55 Mebahiah Son

1 6 3 Sitael 6bd 27 lerathel 9bn 51 Hajasiah 3bn

o 7 2 Yeliel Sbd 26 Haaiah 8bd 50 Daniel 2bd

(b = bastos - e = copas - e = espadas - o = oros)


(n = nocturno - d = diurno)

806 ViLLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Tabla LII
3. Genios de la Kabbalah en el tikún. 8 letras (6 hebreas+ 2 árabes)

Letras.. ., Unificáción 'Consciencia Expansión


' ~·
Solar Lunar Nº. Nombre Tarot Nº. Nombre Tarot Nº. Nombre Tarot

8 o 22 Yeyayel 6cd 46 Ariel 9cd 70 Yabamiah 3cd


7 1 21 Neljael 6cn 45 Sealiah 9cn 69 Rohel 3cn

6 2 18 Kaliel 4ed 42 Mikael 7en 66 Manakel 10ed

5 3 15 Hariel 3en 39 Reha'ei 6en 63 Anauel 9en

4 4 11 Lauviah 10on 35 Javakiah 4on 59 Harajel 7on

3 5 9 Haziel 9on 33 lejuiah 3on 57 Nemamiah 6on

2 6 6 Lelahel 7bd 30 Omael 10bd 54 Nithael 4bd

1 7 5 Mahasiah 7bn 29 Reiiel 10bn 53 Nanael 4bn

o 8 1 Vehuiah Sbn 25 Nith-Haiah 8bn 49 Vehuel 2bn

(b = bastos - c = copas - e = espadas - o = oros)


(n = nocturno - d = diurno)

Tabla LII
4. Genios de la Kabbalah en el tikún. 9 letras (6 hebreas+ 3 árabes)

Letras_ Unificación Consciencia Expansión

Solar Lunar Nº. N ombre Tarot Nº. Nombre Tarot Nº. Nombre Tarot

9 o 24 Hahiniah 7cd 48 Mihael 10cd 72 Mumiah 4cd

8 1 22 Yeyayel 6cd 46 Ariel 9cd 70 Yabamiah 3cd


7 2 19 Leuviah Sen 43 Vewaiiah 8cn 67 Ei' aei 2cn

6 3 16 Hakamiah 3ed 40 leiazel 6ed 64 Anauel 9en

5 4 13 lezalel 2en 37 Aniel Sen 61 Umabel 8en

4 5 10 Aiadiah 9od 34 Lehajiah 3od 58 leialael 6od

3 6 7 Ajaiah 8on 31 Lekabel 2on 55 Mebahiah Son

2 7 5 Mahasiah 7bn 29 Reiiel 10bn 53 Nanael 4bn

1 8 3 Sitaei 6bn 27 lerathel 9bn 51 Hajasiah 3bn

o 9 1 Vehuiah Sbn 25 Nith-Haiah 8bn 49 Vehuel 2bn

(b = bastos - c = copas - e = espadas - o = oros)


(n = nocturno - d = diurno)

MANUAL DE KABBALAt-1 PRÁCTICA 807


Tabla LII
5. Genios de la Kabbalah en el tikún. 10 letras (6 hebreas+ 4 árabes)

Letras Unificación Consciencia . Expansión i

Solar Lunar Nº. Nombre Tarot Nº. Nombre Tarot Nº. Nombre Tarot

10 o 23 Melahel 7cn 47 Asaliah 10cn 71 Haiaiel 4cn


9 1 21 Neljael 6cn 45 Sealiah 9en 69 Rohel 3cn
8 2 18 Kaliel 4ed 42 Hehahel 7en 66 Manakel lüed
7 3 16 Hakamiah 3ed 40 leiazel 6ed 64 Mejiel 9ed
6 4 14 Mebahel 2ed 38 )a'amiah Sed 62 lah-Hel Sed
5 5 12 Hah'aiah l0od 36 Menadel 4od 60 Mitzrael 7od
4 6 9 Haziel 9on 33 lejuiah 3on 57 Nemamiah 6on
3 7 7 Ajaiah Son 31 Lekabel 2on 55 Mebahiah Son
2 8 5 Mahasiah 7bn 29 Reiiel l0bn 53 Nanael 4bn
1 9 3 Sitael 6bn 27 lerathel 9bn 51 Hajasiah 3bn
o 10 1 Vehuiah 5bn 25 N ith-Haiah 8bn 49 Vehuel 2bn

(b = bastos - c = copas - e = espadas - o = oros)


(n = nocturno - d = diurno)
Tabla LII
6. Genios de la Kabbalah en el tikún. 11 letras (6 hebreas + 5 árabes)

Letras Unificación Consciencia Expansión •

Solar Lunar Nº. Nombre Tarot Nº. Nombre Tarot Nº. Nombre Tarot

11 o 24 H ahiniah 7ed 48 Mihael 10cd 72 Mumiah 4cd


10 1 22 Yeyayel 6ed 46 Ariel 9ed 70 Yabamiah 3cd
9 2 20 Pahaliah Sed 44 lelahiah Sed 68 Jabuiah 2ed
8 3 18 Kaliel 4ed 42 Hehahel 7en 66 Manakel 10ed
7 4 16 Hakamiah 3ed 40 leiazel 6ed 64 Mejiel 9ed
6 5 14 Mebahel 2ed 38 )a'amiah Sed 62 lah-Hel Sed
5 6 11 Lauviah 10on 35 Javakiah 4on 59 Harajel 7on
4 7 9 Haziel 9on 33 lejuiah 3on 57 Nemamiah 6on
3 8 7 Ajaiah Son 31 Lekabel 2on 55 Mebahiah Son
2 9 5 Mahasiah 7bn 29 Reiiel 10bn 53 Nanael 4bn
1 10 3 Sitael 6bn 27 lerathel 9bn 51 Hajasiah 3bn
o 11 1 Vehuiah Sbn 25 N ith-Haiah 8bn 49 Vehuel 2bn

(b = bastos - e = copas - e = espadas - o = oros)


(n = nocturno - d = diurno)

808 V!LLARRUBIA / HAUT / M!LLERA


70.6. Fase 6
«Mapa» de Ángeles

• El «Mapa de Ángeles» nos permite aproximarnos de forma grá-


fica a las relaciones existentes entre el Programa de Vida y el
tíkún, apoyándonos para ello en los genios personales en ambos
aspectos. Para ello, situaremos «geográficamente» los genios en
una plantilla similar a la de la figura 74. Puesto que cada uno
de ellos se relaciona con una carta del tarot, y éstas a su vez con
las esferas del Árbol de la Vida, podemos saber de inmediato en
qué ámbito se desenvuelven tanto el Programa de Vida como el
tikún. Para ello, situaremos los tres ángeles personales y los tres
del tikún (algunos pueden coincidir) en los lugares correspon-
dientes a las cartas del tarot de cada ángel. Puede ponerse algu-
na indicación cuando se trate de cartas nocturnas, para indicar
tal circunstancia.
• Unir con trazos de diferentes colores las posiciones de los ánge-
les personales y las de los del tikún. Si coinciden en una misma
posición dos ángeles personales, se unirán al restante con una
línea doble. Si hubiese un solo ángel personal, por coincidir en
los tres aspectos (cuerpo, mente y espíritu), se realzará la posi-
ción resultante, por ejemplo con círculos concéntricos. No es po-
sible esta coincidencia en los ángeles del tikún, por las razones
expuestas en la sección anterior.
• Comparar los trazos de ambos colores e interpretar el conjunto
teniendo en cuenta las posiciones y los significados de las cartas
del tarot.
• Si se desea, puede señalarse la posición del As (1) correspondien-
te al elemento a que corresponda el signo solar de nacimiento.
En este caso, se pueden trazar líneas de un tercer color a las po-
siciones de los seis ángeles. Recordemos que los ases se corres-
ponden con los ángeles regentes de los cuatro elementos, cuyos
significados pueden consultarse en la II Parte, sección 3.13.
• Para la interpretación, debe tenerse en cuenta que los ángeles
intervienen para ayudar en las áreas en las que somos insufi-
cientes, por lo que las áreas vacías del mapa de ángeles indicarán

M A NUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 809


nuestras áreas de suficiencia. En este sentido, conviene compa-
rar este «mapa de ángeles» (en realidad, un conjunto de cuatro
Árboles de la Vida «comprimidos» en los que sólo se han dibu-
jado las esferas, pero no los senderos subjetivos) con el Árbol
personal. Si los senderos angélicos de éste coinciden con los
puntos en que se sitúan los ángeles en su «mapa», habrá una
relación armónica entre ambos, e inarmónica en caso contrario.
• Un ejemplo real de «mapa de ángeles», puede verse en la figura 75,
la cual se acompaña de una breve interpretación.

81 O VILLARRUBIA / H AUT / MILLERA


OROS ESPADAS COPAS BASTOS

o o o o
00 00 00 00 s:
e
o::: z
o o
o::: 00 00 00 00 o
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o o o o ~
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2
o o o o o
;o
ASSIYAH YETZIRAH BRIAH ATZILUT
TIERRA AIRE AGUA FUEGO

Figura 74
Plantilla para el mapa de Ángeles

MANUAL DE l<ABBALAH PRÁCTICA 811


OROS ESPADAS COPAS BASTOS

o o o o
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o o o o o
::o
ASS!YAH YETZIRAH BRIAH ATZILUT
TIERRA AIRE AGUA FUEGO

Figura 75
Caso real. Mapa de Ángeles. Unidos con línea continua y en color gris
oscuro, cartas de los genios personales, y con línea discontinua y en
color gris claro, las de los genios del tikún.

En el ejemplo de la figura 75, los genios del Árbol presentan un


gran triángulo que apunta al mundo exterior a través de la 5.ª sefirá,
Guevurah, lo que indica que la actuación del sujeto se desarrolla esen-
cialmente mediante la acción y con un sentimiento de búsqueda de
la justicia. El genio correspondiente es Poiel, número 56, relacionado
con el 5 de oros y la Tríada de la Conservación. Como el naipe signi-
fica «trastorno en el plano material», y la Tríada impone seleccionar
para conservar, y por tanto renunciar, es evidente que la manifesta-
ción externa del sujeto es esencialmente restrictiva. El 9 de espadas,

812 V i LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


por su paite, corresponde al genio número 63, Anauel, y a la Tríada
del Temple de Ánimo: indica que el sujeto se verá a lo largo de su
vida sometido a pruebas generalmente duras, hasta que «aprenda la
lección». Finalmente, el genio número 26, Haaiah, relacionado con
el 8 de bastos y la Tríada de la Intuición, indica la culminación del
proceso: la restricción y el sentido de justicia que se manifiestan al
exterior son el reflejo de una serie de ejercicios de endurecimiento,
cuya finalidad es realmente facilitar el desarrollo de la intuición sin
que el desapego se resienta por ello. De los tres genios, el primero y
el tercero son de naturaleza diurna, mientras que sólo el segundo es
de naturaleza nocturna. La tendencia del sujeto, pues, será a actua-
ciones más bien enfocadas de cara al exterior, quedando reservadas
para el fuero interno las p1uebas destinadas a su fortalecimiento moral
(«lamerse las heridas en soledad»).
La figura formada por las líneas que unen las cartas de los ángeles
del tikún evoca un arco que acaba de ser disparado, siendo la punta
de la flecha precisamente el triángulo de los genios del Árbol. Todas
las cartas de los Ángeles del tikún corresponden al palo de bastos (ma-
dera, que lleva implícito el fuego, y por tanto en consonancia con el
nivel espiritual), y además de naturaleza diurna, puesto que los tres
tienen par su número de orden. Por lo tanto, las energías de los tres án-
geles impulsan vivamente al sujeto a desarrollar su tikún (profunda-
mente espiritual, por lo demás) hacia una proyección social, exterior,
con influencia notoria sobre amplios colectivos: obsérvese que, to-
mando el triángulo como punta de flecha, apunta en ángulo inclina-
do hacia arriba, esto es, hacia el campo externo social transpersonal.
El ángel unificador o aglutinante es el número 4, Elemiah, relacionado
con el 6 de bastos y la Tríada de la Mística: sus significados aluden a
la transmutación alquúnica (ver II Parte, sección 3.11). El genio regen-
te del aspecto consciencia (conductor o controlador) es el número 28,
Seehiah, relacionado con el 9 de bastos y la Tríada del Impulso; recor-
demos que el naipe significa «gran fortaleza», mientras que el nom-
bre del genio nos habla del «fuego que siembra la vida». Finalmente,
el aspecto expansivo del tikún está representado por el genio número
52, Imamiah, relacionado con el 3 de bastos y la Tríada de la Fe, alu-
diendo al proceso de purificación necesario para renovarse y poder
dar en todo momento un gran SÍ a la Vida.

MANUAL DE KAllBALAH PRÁCTICA 813


Todo el conjunto de los seis genios, representado en el «mapa
de Ángeles», indica por lo tanto una misión de gran trascenden-
cia espiritual, apoyada por pruebas severas que buscan realizar
la unidad entre el «interior» y el «exterior» del sujeto. En otras
palabras, se trata de facilitar el cumplimiento de una misión que,
por las trazas, parece haberse iniciado hace bastantes vidas y debe
culminar en la presente o en las siguientes próximas. Nos inclina-
mos a pensar que más bien se trata de esto último, puesto que el
«arco» formado por los genios del tikún acaba de «dispararse»,
por lo que ahora sólo queda esperar a la trayectoria de la flecha.

70.7. Fase 7
El método de las «matrioshkas»

• Con ayuda de un diccionario hebreo-castellano, se buscarán to-


das las combinaciones posibles de las letras hebreas halladas y
se anotarán sus significados (cuando existan) en la RS.
• Las matrioshkas son esas muñequitas rusas de madera en forma
aproximada de huevo, en las que aparece dibujada una figura,
a veces de una campesina rusa (de ahí su nombre). Son huecas,
y las mayores van conteniendo progresivamente a las de menor
tamaño. A semejanza de estas muñecas, se colocarán todos los
conceptos anotados en la RS en 10 cajas, correspondientes a las
10 sefirot del Árbol de la Vida. La colocación se hace tomando
como base la correspondencia o analogía con los significados de
cada esfera. Este trabajo supone repasar a fondo toda la materia
presentada en la II Parte, no sólo en lo que se refiere a las sefirot,
sino también a los senderos subjetivos y a las Triadas, en tanto que
aspectos del Árbol relacionados con cada una de sus 10 esferas.
• En principio se tomarán sólo en cuenta las sefirot, pero, si se
desea, pueden también buscarse significados en corresponden-
cia con los senderos subjetivos y con las Tríadas. En este caso,
se tendrá en cuenta que las sefirot se refieren fundamentalmen-
te a los hechos del mundo que llamamos externo; los sende-
ros subjetivos, a nuestra respuesta psicológica (pensamientos y

814 V! LLARRUB IA / H A UT / M!LLERA


sentimientos) a dichos hechos, y las Tríadas, a nuestra actuación
de cara al exterior. No obstante, recomendamos que, al menos
al principio, se prescinda de esta parte, por su notoria comple-
jidad. Sin embargo, si se desea trabajarlos, los datos obtenidos
deberán clasificarse según su naturaleza, en objetivos (sefirot),
subjetivos (senderos) y relacionales (Tríadas).
• Se comenzará rellenando la caja 10, correspondiente a la 10.ª
Sefirá, Maljut, siguiendo después por la 9.a, 8.a, etc., hasta lle-
gar a la l.ª. Si alguna queda vacía, no importa: es un dato más
a tener en cuenta. Se sugiere usar lápiz para borrar y rectificar
cuantas veces sea necesario; también son muy útiles las pizarras
blancas, por su fácil borrado.
• Si en la RS aparece una palabra o concepto más de una vez, pue-
de utilizarse también más veces, colocándola en diferentes cajas,
según convenga. Los nombres divinos se colocarán en su caja
más afín; en este sentido puede ser de utilidad el Diccionario
Numérico Cabalístico (ver referencias bibliográficas), en el que
se recogen más de ciento treinta nombres divinos con su respec-
tiva correspondencia. Si es posible, se tratará de determinar el
significado preciso de cada uno de ellos, lo que puede facilitar
los pasos posteriores.
• Una vez colocadas todas las palabras que se habían recogido en
la RS, se sintetizará el contenido de cada caja, tratando de ave-
riguar el mensaje contenido en ella.
• La unión de los diez mensajes muestra la historia, por decirlo
así, que describe por qué y para qué vinimos a este mundo.
En algún punto de esa historia está escondido el problema que
hemos venido a solventar: el tikún, o misión que debemos cum-
plir. No nos dejemos engañar por prejuicios acerca de lo que
resulta o no correcto, permitámonos sentir.
• La actitud debe ser en todo momento de apertura y de recogi-
miento, puesto que estamos buscando una chispa extraviada de
la Shejiná, o presencia divina en la Tierra. Por tanto, la búsque-
da (y en consecuencia, la historia de nuestro descenso a lama-
teria) se orientará siempre hacia lo más sagrado, lo más puro,
lo más limpio, lo más luminoso, lo más vivo, lo más fuerte,
lo más bello ...

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 815


• El obstáculo mayor para la apertura que exige la investigación
del tikún podría definirse con la palabra pecado. Aunque este
concepto no es, como vienen repitiendo los mandamases de la
mayoría de las religiones, hacer lo que a ellos les parece mal.
En realidad, la idea está íntimamente relacionada con la filoso-
fía taoísta. Repasando, en efecto, la palabra hebrea correspon-
diente, ~t:ln (jatté), estudiada anteriormente, observamos una
primera letra, M, que significa entre otras cosas, camino y vida,
mientras que la última, ~, significa a la vez pecho e infinito.
Hay, pues un camino interior hacia el Infinito, hacia el Absoluto;
pero la letra intermedia, t:l, con sus significados de serpiente que
ataca y bien (lo que la relaciona con la 4.ª sefirá, Jesed, y con su
chakra mundano, Júpiter, el Gran Expansivo), indica que dicho
camino está bloqueado, sea por una amenaza, lo que implica
por tanto un miedo, sea por una inflamación: en todo caso, una
energía que queda retenida. En nuestra experiencia a lo largo de
muchos cursos, hemos encontrado casos de un tikún que apare-
ce con toda claridad en cuestión de segundos, mientras que en
otros los bloqueos impiden avanzar, incluso en el trabajo ~..:¡,..:,
(be-kahal), en comunidad.
• Paradójicamente, no es el temor a la sombra lo que suele pro-
ducir los bloqueos que impiden desarrollar la investigación
del tikún. Más bien es lo contrario, el temor por parte del
sujeto a encontrar dentro de sí demasiada luz, y ello obede-
ce a una doble causa: por una parte, la idea de que es bueno
ser humilde, desgraciado, y a ser posible, feo, porque así
haremos más méritos ante un dios del que nos hemos forma-
do (o más bien nos han formado) la idea que es una mezcla
de tendero ladrón, sátrapa oriental y psicópata peligroso.
Como consecuencia, la autoestima suele mantenerse bajo
mínimos durante años, y muchas veces a lo largo de toda la
vida. Por otra parte, hay también el temor a la responsabili-
dad excesiva: «si soy tan bueno, tan estupendo, tan maravi-
lloso, jentonces no tengo excusa para fallar!» Lo que es otra
forma de manifestar la baja autoestima.
• Por lo tanto, esta baja autoestima es, mientras no se corrige,
un obstáculo casi insalvable para desarrollar la investigación

81 6 VILLARRUBIA / HAUT / MII.LF.RA


sobre el tikún y, lo que es más grave, para cumplirlo. Pero como
el cumplimiento es ineludible (el maestro Antonio.Blay repetía
muchas veces que «estamos condenados a ser felices», otra for-
ma de definir lo inevitable que es cumplir el tikún), la autoestima
baja no es un buen método para «hacer méritos», sino que, por
el contrario, constituye un sistema estupendo para fastidiarnos
a base de engordar nuestro karma.
• Como resumen de este capítulo, debe resaltarse la necesidad de
tener siempre presente que estamos participando en una misión
que exige lo mejor de cada uno de nosotros, misión que, por
su carácter sagrado, nunca puede ser ni oscura, ni excluyente,
ni débil, sino todo lo contrario: luminosa, inclusiva (por tanto,
amorosa) y fuerte.

70.8. Métodos auxiliares de búsqueda


Junto al método de las matrioshkas, descrito en las secciones ante-
riores, pueden utilizarse otros muchos, dependiendo de la ima-
ginación y los conocimientos cabalísticos de cada cual. Nuestra
experiencia nos ha permitido descubrir algunos de ellos, relati-
vamente sencillos, que no son tanto sustitutivos del anterior, sino
en todo caso complementarios. Por nuestra parte vamos a sugerir
cuatro:
1 º. Los números de las vocales del nombre y apellidos.
El primer método se refiere a la utilización de los valores nu-
méricos de las vocales del nombre y apellidos (bloques 1, 2 y 3).
Al describir lo relativo al acento (ver IV Parte) hacíamos alu-
sión a la doctrina de los masoretas, estudiosos de las Escrituras
que se ocuparon de sus aspectos formales, y especialmente de
la pronunciación de las palabras mediante la aportación de la
puntuación vocálica. La tradición judía establecía que, si bien
el hombre aporta las consonantes (las letras hebreas, en defi-
nitiva), es Dios quien aporta las vocales. Por lo tanto, es posi-
ble inferir cuál es la aportación del Cielo estudiando los valores
de las vocales de cada uno de los tres bloques mencionados
y de sus combinaciones, esto es, tomando en primer lugar el

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 81 7


conjunto de los tres bloques, y a continuación los conjuntos
formados por las vocales de los bloques 1 y 2, por una parte,
y 2 y 3 por otra; serían los equivalentes a los bloques 7, 10 y 11.
Un ejemplo facilitará la comprensión de este método auxiliar.
Supongamos que los datos de los tres bloques primeros pro-
porcionan las letras siguientes:

Bloque 1: A - I - O. Valores numéricos, 11 - 2


Bloque 2: O - I - E. Valores numéricos, 16 - 7
Bloque 3: A - A - E - I - A. Valores numéricos, 10 - 1
Conjunto de los tres bloques (bloque 7): 19 - 10 - 1
Conjunto 1 + 2 (Bloque 10): 18 - 9
Conjunto 2 + 3 (Bloque 11): 1'1- 8

Reconoceremos, pues que la influencia celestial para el tikún es-


taría actuando con énfasis en la intuición superior (sendero 2),
en lo relativo a las relaciones sociales (11), las tareas o actividades
a realizar en común con otras personas (19), la escucha del maes-
tro interior (9), el contacto mágico con la tierra (18), la renovación
según el curso de la naturaleza (17) el sentido de la justicia y
el equilibrio (8); pero, sobre todo, por aparecer los números do-
blados, la creatividad y la iniciativa (1) y la proyección hacia el
futuro (10).
2 º. Análisis de senderos con cargas especiales en relación
con el Sefer Yetzirah. El segundo método utiliza las letras he-
breas asociadas a algunos de los senderos que aparecen con
cargas especiales, concretamente a los que presentan sobrecar-
gas (3 o más líneas), y a los que tienen líneas ocultas y cícli-
cas; no usaremos ni los doctorados ni los jardines de infancia.
Ahora bien: consideraremos las letras hebreas desde una doble
perspectiva: junto a la ya conocida, su relación con el tarot, que
se estudió a lo largo de la II Parte, tendremos también en cuen-
ta la asignación basada en el Sefer Yetzirah (ver en dicha parte
la sección 3.4 y las figuras 15 y 16), jugando con combinaciones
de letras y con las diferencias de sus valores numéricos: sería
otra forma de aportar más datos a la RS. Recordemos ahora la
diferente asignación d e las letras a los senderos según ambas

818 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


atribuciones, observando de paso que cuatro de ellas mantie-
nen sus posiciones invariables:

Tabla LIII
Los cambios de posición de las letras hebreas

Sendero S. Yetzirah Tarót Sendero S.Yetzirah Tarot


•.

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10 ~ "I
21 M M

3 º. Análisis de los senderos ocupados por líneas sociales. El ter-


cer método se basa en la utilización de los senderos ocupados por
las líneas sociales, esto es, las procedentes de los bloques 10 y 11, que,
según quedó apuntado en la IV Parte, funcionan como preprogramas
instalados que se activan a determinadas edades: las líneas que pro-
ceden del bloque 11 son las sociales infantiles, se manifiestan en los
primeros años de vida y tienen por tanto relación con la movilidad
y la comunicación oral, así como con los primeros pasos de los pro-
cesos de socialización: primeros años escolares, contacto con otros
niños, etc. Por su parte, los que proceden del bloque 10 son los socia-
les juveniles, y se manifiestan a partir de la adolescencia, por lo que
tienen profundas relaciones con el despertar de la sexualidad y del
afán de independencia. La reflexión y el estudio de las característi-
cas y significados de los senderos afectados por estas líneas revelan
importantes datos acerca del «qué» y del «cómo» del tikún.
4º. El Árbol vocálico, o la «trama del tapiz». Si consideramos al
Árbol de la Vida nativo como un diagrama del «programa de vida»

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 819


bordado en un tapiz, existe la posibilidad de investigar la trama
del «tejido» por su «envés». Para ello usaremos sólo las vocales del
nombre y los apellidos, tal como se indica en la sección 10.8.1 ante-
rior, añadiendo las vocales resultantes de escribir la fecha de naci-
miento en letras en lugar de números, aunque sin tener en cuenta
las preposiciones «de» que enlazan el día con el mes y éste con el
año. Así, por ejemplo, la fecha del 17 de agosto de 1962 proporcio-
nará las vocales i-e-i-i-e-e para el día, a-o-o para el mes, y como co-
rrespondientes al año las vocales i-o-e-i-e-o-e-e-a-y-o; observemos
que, en este caso, la y tiene el tratamiento de vocal. Levantaremos
e interpretaremos el Árbol con las mismas reglas expuestas en
la III Parte, teniendo en cuenta que pueden existir senderos ocul-
tos en los bloques 4-5-6 y sus derivados 8-12-13, por utilizar letras
en vez de números. Aparecen ciclos largos (líneas variables pro-
cedentes del bloque 13) que pueden superar incluso los 100 años,
pero su análisis refleja las fechas que han sido claves para de-
cantarnos por actividades y estudios relacionados con el tikún.
La fase yang mostrará un período de adquisición de conocimientos
de nuestro interés, su maduración, asimilación, especialización y
perfeccionamiento, mientras que la fase yin, al ser de interioriza-
ción, indicará etapas de realización, de cumplimiento, de restitu-
ción. Tal vez conlleve cierta pérdida de interés por abarcar nue-
vos conocimientos en abanico, en aras de una mayor necesidad
de profundiza1~ investigar o especializarse en los que ya se tienen,
lo que conducirá en muchos casos a la apertura a nuevos cam-
pos de interés que ayuden a la profundización. Que sean ciclos
tan largos tiene también su sentido. Necesitamos más tiempo para
descubrir y adquirir conocimientos sobre el contenido de nuestro
tikún que para realizarlo. En cuanto a los ciclos cortos, son una
herramienta de cambio constante y una invitación a profundizar
en los aspectos afectados por ellos, con la actitud adecuada para
conocer y realizar el tikún. Resulta un ejercicio sumamente inte-
resante comparar el Árbol vocálico con el nativo original, lo que
podrá proporcionarnos pistas sumamente válidas en relación con
muchos de los acontecimientos de nuestra vida.

820 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


11 . EL TIKÚN, O MISIÓN A CUMPLIR EN LA VIDA

a palabra hebrea tikún (ji¡,r,) significa ante todo reforma, mejo-


L ra, como la obra que se hace en un edificio con esta finalidad,
o la reparación de un automóvil que llevamos al taller en caso de
avería. Pero desde el punto de vista de la Kabbalah se refiere a la
misión que traemos para cumplir en la vida, misión que tiene un
carácter en cierto modo cósmico, y significa una cooperación en el
perfeccionamiento de la obra de la Creación.
Esta palabra, tikún, tiene un valor numérico de 556, el cual, a su vez,
es el resultado de la suma de los valores de las palabras hebreas emuná
(m~N, que significa fe, entendida como un acto de completa afirma-
ción y aceptación, con un valor numérico de 102); ahavá (i"t~i'TN, que sig-
nifica amor, entendido éste, no como un sentimiento, sino como una
fuerza que se manifiesta en la actitud consciente y decidida a favor
de la unidad; su valor numérico es 13); y emet (~N, que significa ver-
dad, o transparencia respecto a la realidad; su valor numérico es 441).
Es significativa que estas tres palabras empiezan por la primera letra
del alfabeto hebreo, a1ef, que simboliza el Infinito, el Absoluto, mien-
tras que tikún empieza por la última letra, la tav, que simboliza la ma-
teria; como queriéndonos indicar que el mundo material está forma-
do por tres manifestaciones del Absoluto: la fuerza expansiva (la fe),
la fuerza aglutinante o unificadora (el amor) y la fuerza equilibradora
(la verdad). Otra vez la Tríada.
Por lo demás, si empleásemos un cuasi-sinónimo de amor, la caridad,
en seguida echaríamos algo en falta: «FE, ... y CARIDAD». De hecho,
en la I Epístola de San Pablo a los Corintios, cap. XIII (casualmente el
número de AHAVÁ, amor) se nos habla de las condiciones y requisitos
de la «Caridad»; pero muchos sacerdotes católicos, en diversos actos
litúrgicos (bodas, sobre todo) sustituyen esta palabra por «Amor» en
la lectura del citado pasaje de las Escrituras. Pues bien, sí: echamos de
menos a la esperanza. ¿No se nos ha enseñado acaso que ésta es una
de las tres virtudes teologales (de Teos, Dios, y Lagos, palabra o verbo;
«palabra de Dios»)?. Y, sin embargo, la Esperanza no es lo que parece.
Véase el diagrama de la figura 76, en la que se hace un análisis cabalís-
tico de estos conceptos en relación con el tikún.

M ANUAL DE KABBALAH P RÁCTICA 821


Por algo puso Dante sobre la puerta del Infierno (Divina Comedia,
Infierno, Canto XXXIV) el cartel de «abandonad toda esperanza, to-
dos los que entráis aquí». La esperanza divide nuestra energía, nues-
tra atención, entre el aquí y ahora y el allí y luego. Por ello, el Infierno
es el lugar destinado, como dice el propio Dante párrafos después, «a
los que han perdido el don de la inteligencia». Por su parte, Arnaud
Desjardins relata en su obra Le Vedanta et l'inconscient (ver referencias
bibliográficas) la anécdota de cierto maestro taoísta, a quien uno de
sus discípulos preguntaba qué debía hacer para escapar del fuego del
infierno. La respuesta del maestro fue ésta: «Busca el lugar del infier-
no donde las llamas sean más altas, y tírate allí de cabeza».
El tikún, por tanto, es incompatible con la esperanza. Exige,
como decía Vivekananda, apegarse al trabajo y desapegarse del
resultado del trabajo.
En el triángulo, los valores numéricos de las tres fuerzas que
lo configuran suman 556, como el propio tikún. A lo largo de los
lados del triángulo, diversos aspectos resultan de la interacción de
dos de tales fuerzas. En dos de los casos se han hallado por guema-
tria (diferencia de valores numéricos, que muestra la relación entre
las dos fuerzas que se consideran), mientras que en el tercero se
utiliza la temurá, mediante la combinación de letras no comunes;
en este último caso (interacción de la Fe y el Amor), si se utiliza-
se también la guematria se obtendrían tres conceptos igualmente
valiosos: M~~, (demamá), silencio, calma; Mi~ ~~n (jeblé ledá), dolo-
res del parto; ~ Mi~ (padá), redimir, salvar. En los recuadros blan-
cos, unidos por flechas a cada vértice, palabras obtenidas de és-
tos por temurá. En los recuadros grises, aspectos de la Esperanza,
que muestran que, si bien es favorable en un comienzo, a la larga
es un obstáculo para el cumplimiento del tikún. Finalmente, la re-
ducción numérica del número 556 muestra que en realidad es una
labor de la propia Divinidad. Una nueva reducción (1 +6=7) nos
indicaría que es el aspecto central de todo proceso y su semilla
(significados de la letra\ cuyo valor es precisamente 7).

822 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


12. ACERCA DEL DESAPEGO

odas las tradiciones espirituales proponen, con diferen-


T te terminología, el desapego como medio para acceder a
la Realidad, como requisito ineludible para alcanzarla. Pero
¿desapego de qué? De todas las cosas. Cosa es todo aquello acer-
ca de lo cual podemos decir, pensar, imaginar o proyectar algo;
en otras palabras: lo que no es sujeto, lo que es un objeto al que
el sujeto pueda ver, sentir, imaginar, aludir o intuir como ajeno
a sí mismo. Por su parte, el sujeto es el yo, que en hebreo es ~~N,
aní, mientras que el objeto es la cosa, que en hebreo es ,~-r, dabar,
palabra que también designa al nombre de la cosa, lo que permi-
te al sujeto designarla. Observemos lo que nos dice cada una de
estas dos palabras:

ANI: DABAR:
N : ALEF = «Infinito» i: DALET = «Puerta»
J : NUN = «Percepción» ~ : BETH = «Casa»
"' : IOD = «Origen» i: RESH = «Espíritu»

El infinito percibe su origen La puerta de la casa del espíritu

Pero, ¿pueden ponérsele puertas al espíritu, puede encerrarse


el espíritu en una casa y aislarse del exterior mediante una puerta?
Evidentemente no, por lo que la cosa, dabar, no es sino una ma-
nifestación del sujeto, que es el creador del objeto mediante la
palabra creadora, dabar.
Así pues, cuando soltamos todas las cosas (es decir, nos despren-
demos de los objetos, y por tanto de las palabras que los designan),
incluidas nuestras cosas interiores: conceptos, ideas, recuerdos,
expectativas .. . todo aquello d e lo que podamos decir algo . .. el su-
jeto se queda en la desnudez del silencio.

Y entonces, lo que es, ES.

MANUAL DE KABBAI.AH PRÁCTICA 823


13. EL SENTIDO DEL TRABAJO EN LA KABBALAH
A LA LUZ DEL TIKÚN

l concepto de trabajo se refiere en Kabbalah, tanto a la actividad


E de cualquier tipo, necesaria para ganarse la vida, como a la realiza-
da para el cumplimiento del tikún. En palabras de Alexandre Safran,
Gran Rabino de Ginebra (La Kabbalah, ver referencia bibliográfica),
se trata de la cooperación del hombre con Dios para el perfeccionamien-
to de la creación. ¿Y porqué-se pregunta Safran- hay que perfeccio-
nar la creación? Pues porque Dios la hizo deliberadamente imperfecta,
para que esa imperfección, manifestada en las criaturas como dolor, im-
pulsase a éstas a sanarlo, mediante la restitución (eso significa la palabra
tikún) de la unidad perdida. En lo substancial, esta idea coincide con Ken
Wilber, que la expone en el conjunto de su obra, y muy especialmente
en El p1'0yecto Atman, en Después del Edén y en El ojo del Espíritu (ver
bibliografía). Veamos, por tanto, qué nos dice esta palabra.

¡¡,,~V (avodáh) = trabajo

Guematria
Valor numérico de la palabra hebrea = 87

Este número conduce a otros conceptos:


COi (zamam) = pensar, discurrir
',u (nezel) = fluidez
ito",~ (belimah) =dela nada (Dios creó las 10 sefiroth y las 22
letras hebreas de la nada; Sefer Yetzirah, 1:2)
ci,o (midvam) = muestra, patrón, modelo / pauta, principio
m~~ (levinah) = ladrillo
CiNO (meúm) =algo
m~~ (levanah) = la Luna; chakra mundano de la 9.ª sefirá,
Yesod.
i~ (paz) = oro

824 ViLLARRUBIA / HAUT / MILLERA


El anterior conjunto de conceptos apunta a la naturaleza emi-
nentemente mental del trabajo, el cual es semejante a un flujo que
surge de la nada y forma una red de modelos o pautas, que son
realmente los ladrillos con los que se construye todo lo existente
(algo). Por su parte, la Luna aparece como la fuerza actuante a
través de Yesod, y el oro sería el resultado de la transmutación
alquímica producida por el propio trabajo. También, la suma de
las cifras nos remite al aspecto de Dios como poseedor de ambas
polaridades, masculina y femenina:

8 + 7 = 15 - it, (*) (pron. Adonaí), nombre de Dios asociado a la


2.ª sefirá, Jokmah.

Este nombre divino evoca también el aspecto energético de di-


cha sefirá. En efecto, el trabajo, cualquier tipo de trabajo, está aso-
ciado, en tanto que energía a Jokmah.

Figura 76
Diagrama que muestra la esencia cabalística del tikún.

QN ( em) madre ili'li (tlkva) esperanza ·


fbN (amón) alumno 511 .
fQ\"C (omen) educador T1 (ho) iay!
r~ ( on) fuerza, vigor ◄ i'n (vah) ihlirra!
fQ (man) maná iin¡, (klhut) embotamiento
f0Ni'T (huamán) verificado T11'1 ( tohu) éaos, laberinto

·~
• (risha') ··
:to.mienzo

N.l"I (ta) célula


CIN ( em) madre
01'1 ( tam) perfecto

ERDAD i
:,..::,N .n~N ../
ahavá
/ mijsho/ Jeb, Arrepentimiento emet

~N (ab) padre
N~ ( ba) viene
M ANUAL DE KAB BALAH PRÁCTICA 825
Significado ontológico de las letras (notarikón)

El análisis del significado de cada una de las letras de ri,,~V


proporciona nuevos conceptos que enriquecen los obtenidos del
estudio guemátrico:

VOjo / Fuente
El trabajo espiritual es semejante a una fuente, origen de la vida
y dadora de riqueza. También se asemeja a un ojo, a través del cual
el sujeto y el objeto se relacionan y comunican visualmente.

~ Casa / Dentro de

El trabajo conduce a una interiorización, a una «vuelta a casa»,


al hacernos conscientes de la movilización de nuestra energía y del
propósito que nos está guiando.

i Hombre / Enlace

Se trata de una actividad esencialmente humana, y en este senti-


do, encarnar no es un mal, como pretenden ciertas doctrinas religio-
sas, sino la condición necesaria para que la Unidad quede restaurada.
También la tradición islámica recoge esta idea (v. Corán, sura 2.ª) al
mostrar cómo Allah crea a Adán para que sea su vicario en la Tierra.

, Puerta / Palabra

El trabajo es la puerta que nos permite salir de nuestro aisla-


miento, y también opera a semejanza del verbo creador de Dios.
Al crear algo, le damos nombre, que pasa a ser lo mismo que la
cosa nombrada.

M Espíritu / Apertura

Se muestra, por último, la cualidad espiritual del trabajo y su


efecto de apertura, o comunicación entre el interior (sujeto) y el

826 YI LLARRUBIA / HAU T / MILLERA


exterior (objeto), primer paso para trascender la división entre uno
y otro y recuperar la unidad perdida.

Temurá: análisis combinatorio

Palabras contenidas en ;,ii.!lV

El análisis combinatorio de las letras, o temurá, completa por


último los significados anteriores. Se propone, como ejercicio, re-
dactar un pequeño texto resumiendo y sintetizando los conceptos
relacionados a continuación, y combinándolos con los presentados
anteriormente.

Eternidad tad) iv
Regocijarse (buá) Vi.!l
Sufrir, afligirse (daváh) mi
Conocimiento (de'á) vi
Información (vedá) v,,
Diferenciar, separa (badan) Mi.!l
Laborarse, trabajarse (ha'aved) i.!lV:-t
Vena, arteria (bad) i.!l
Dos, doble (du) ,,
Concertarse, reunirse (hiva'ed) ivi:i
Ampolla, burbuja (bu'áh) MVi.!l
Vacío (bohu) iM.!l
Servir, adorar ( 'avad) i.!lV
Majestad, gloria, esplendor
(nombre de la 8/ sefirá, Hod) ii;,
Eco (hed) i;,
En él (bo) i.!l
En ella (bah) :-t.!l
Viga, umbral ('ob) .!lV
Hervir / Pedir, preguntar (ba'áh) MV.!l
Esclavo, servidor (*) ('eved) i.!lV

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 82 7


Las dos palabras que aparecen señaladas con el asterisco*, en
este párrafo y en el anterior relativo a la guematria (capítulo 13),
forman juntas la expresión :i~ .,~V (eved Adonai) cuyo significado
es profeta, de valor numérico 91. Véase a este respecto el texto,
hebreo y castellano del salmo 91. Este número es, posiblemente,
uno de los que más ricos significados presentan desde el punto de
vista guemátrico. Además de ser el producto de 13 por 7 (números
que proporcionan, respectivamente, las expresiones :,~:,N (ahavá),
amor, y N~., (dové), abundancia, que no precisan por obvias ma-
yor comentario), también proporciona, entre otras, las palabras
j~N (amen), amén, así sea, que con la pronunciación aman significa
educar; ¡irn~ (iahalón), diamante, y 1N',~ (malaáj), ángel.
Adicionalmente, nos remitimos a ·la I Parte, sección 11, sobre el
simbolismo de la Estrella de David, en la que pueden encontrarse
datos adicionales sobre la palabra n-,,~V. Ver también en la I Parte
la sección 12, «El sentido del trabajo en la Kabbalah».

EJERCICIOS

45. En la página sigui~nte se recoge el texto hebreo del


Salmo 91 ¿Te atreves a escr,ibir su transcripción fonética? .
· Está considerado el Salmo de protección por excelencia.·
Si te encuentrascon fuerzas y ánimo para ello~ cÓpiatam-
bién e l texto hebreo del Salmo, y adórnalo tal como .lo
habría hecho un monje copistá de una abadía en plena
Edad Media. Si ~stás satisfecho/ade tu obra, enmárcala y'
colócala en ún lugar de tu gusto. . · · · . ··
46. Investiga tu tikún, siguiendo los pasós qUe se'indican en,
las secciones de esta V Parte, é,lSÍ corno los obstáculos que
encuentras en el camino. ¿Son,, tal vez,, manifestaciones
de no-verdades que se niegan a ser re'.(eladas? Toma.hota
detallada de cada. no-verda? que ~rn::uentres. · .,

828 ViLLARRUBIA / HAUT / M I LLERA


SALM091
:py,i:,,_ ,:rrp ':l~:;i ,;,7~ 11J9:;i :iw·, a
nª~ :
:·1:i-:ito:iK ,;-¡"':,i 'íl7i~~i
:ni,;:i -,~-1~ -tli~p:
·,or,~ ;ir;-¡,', 7~·K :2
17,~~ -K~;-¡ T !3 -
,~-

:in~~ ;-i-jr,101 i13T:;t ;,º1'.'11:! ,,~JT~-nr:rm 717 71º: in:,:;i~:;i :4


:c~i~ ~u1: f[l~ i1?°~7. 71J~~ K:,i°r K? :5 ...
:c,.·xr~ 1,w: :i~r.~ ;¡"'?vi_ ,~-K~ ,~:J~ :6
:w~,_ ·K"'? 1,7~ ~~:~'~ ri;:r,~ ~7~ ·~:T~~ ,·s,_ :7
:;-i~:,r:i □,llef:i nt;J-~t?J·1 co,:;ii:i. ~r~:~~ pj :s
:1~-j~~ !!!~~ ·,;,-,~ · ,9crt;J ;,ti~ ;;!!!~-,~ :9
:1?.CT~+i :r:,p,.-i"' lm:~ i1~J ~,7.~ ;-i~~~-K"'? :10
:1,~:i;r-',~:¡i 1:i~rp"';, i]~-;-¡~~~ ,,~~?t;J ,~ :u
:17~-:i· P~~ ~-~r:i..:,~ 1~,~~~ c,_;i~-~lJ :12
:r~ii11 ,~~-~ o't.~:,r:i :,r,:ir:i 1m:n '?orp-,lJ :13
r~rp· ·in:-,~ ;;,~~~ ~;i~'y;ii,1· p~ilJ ,~ ,~ :14
:~;i::,+i~~l ~;-i~'pci~. ;-i:,~? ,~-J~ i~l? ;;-¡~P~1 ,~~:,p,_ :15
:'r:,~;ttf,:\l ;;-¡~)~1 ;;,p,:\l~~ e,~: T).K 16

1. El que está al amparo del Alto, en sombra del Todopoderoso vivirá.


2. Diré al Eterno: Mi amparo, y mi fortaleza; Dios mío, me confiaré en Él.
3. Porque Él te salvará de la trampa del cazador y de la fétida pestilencia.
4. Con Sus plumas te cubrirá, y debajo de Sus alas te abrigarás, escudo y
rodela es Su verdad. 5. No temerás las asechanzas nocturnas, ni saeta que
volare de día; 6, ni la pestilencia que en tinieblas anda; ni la destrucción
que asuela durante las siestas. 7. Caerán a tu lado mil, y millares a tu
diestra: pero a ti no te afectará. 8. Mas de cierto con tus ojos verás cómo
reciben la paga los inicuos. 9. Porque Tú, Eterno, que eres mi esperanza,
alta pusiste Tu morada. 10. No te atacará a ti el mal, ni plaga se acercará
a tu tienda. 11. Porque a Sus ángeles te encomendará, para guardarte en
todos tus caminos. 12. En sus manos te llevarán, para que no se llague en
las piedras tu pie. 13. Sobre león y v{bora pisarás; hollarás el leoncillo y
la culebra. 14. «Porque a Mí me quiso, Yo le libraré y le ampararé, porque
conoció Mi Nombre. 15. Me llamará y le responderé: con él estaré Yo en
su angustia: le salvaré y le honraré. 16. Por la largura de sus días le har-
taré y le mostraré Mi salvación».

MAN UAL OF. KABBALAH PRÁCTICA 829


Compárese el texto de este salmo con el de los suras 112º, 113º y
114º del Corán, últimos de este libro sagrado. Tanto el salmo como
los suras se consideran de protección, en las respectivas tradicio-
nes, judía y musulmana.

Sura 112. EL CULTO

1. Di: «Él es Dios, es único, 2, Él solo, 3, no ha engendrado ni ha sido


engendrado, 4, y no tiene a nadie por igual».

Sura 113. EL ALBA NACIENTE

1. Di: «Busco un refugio en el Señor del alba naciente, 2, contra el


mal de lo que Él ha creado, 3, y contra el daño de la oscuridad cuando se
extiende [sobre nosotros], 4, y contra el mal de las [brujas] que soplan en
los nudos, 5, y contra el mal del envidioso que escupe envidia».

Sura 114. LOS HOMBRES

1. Di: «Busco un refugio en el Señor de los hombres, 2, el Rey de los


hombres, 3, el Dios de los hombres, 4, ante el daño del tentador furtivo
[Satán], 5, que tienta los pechos de los hombres, 6, salido de entre los
genios y los hombres».

830 V!LLARRUBIA / H AUT / MILLERA


14. Los PROCESOS DE IDENTIFICACIÓN

1 trabajo, entendido como aplicación al cumplimiento del


E tikún, puede sufrir diversas interferencias. Todas tienen
como origen común la existencia de distorsiones en nuestro
Programa de Vida, cuyas causas pueden ser de tipo kármico o
social. En realidad, las causas kármicas tienen, en último extre-
mo, un origen social, entendiendo esta palabra en su sentido
más amplio de relacional: el yo y el no-yo mantienen unas de-
terminadas relaciones, de las que suelen generarse nudos (lo
que el hinduísmo denominaría samskaras) que se arrastran vida
tras vida.
Cuando desoímos la recomendación de Vivekananda y nos
apegamos al resultado, es inevitable que el yo se haga no-yo,
es decir, cosa. Denominamos a este proceso identificación.
En realidad, la identificación de ~)~, ani (yo, el sujeto) con
~.::li, dabar (no-yo, la palabra creadora y la cosa creada median-
te esta palabra), obedece a un impulso de reconstruir la Unidad
perdida. Este sentimiento, además de ser legítimo, es también
inevitable. Según recogíamos antes las palabras de Alexandre
Safran, Dios ha creado el Universo deliberadamente imperfec-
to, para que así, al sentir cada ser en él mismo el vacío de su
imperfección, trate de llenarlo buscando el retorno al Creador.
Es un sentimiento que surge del amor y del anhelo de re-
tornar al Uno; pero sigue un camino erróneo. La naturaleza
de este error puede estudiarse en la tabla LVII mediante el re-
curso de leer sus recuadros de izquierda a derecha en sentido
inverso al de las agujas del reloj. En ellos pueden encontrarse
los datos que proporcionan la guematria y la temurá de ri,;i¡i;i,
(hizdahut), identificación.
Por otra parte, hemos visto cómo una de las palabras conte-
nidas en iiii.::lV (avodá), trabajo, contiene la palabra i.::lV (eved),
esclavo, y que esta última palabra, unida al nombre de Dios en
su manifestación en la 2ª sefirá nos proporcionaba el concepto
de profeta. El valor numérico de esta última palabra, (realmen-
te dos palabras unidas, n~ i.::lV, eved iod-he), es 91, lo cual, por

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 831


una parte, nos remite inmediatamente al Salmo de este núme-
ro, que, según hemos podido comprobar, es uno de los más
completos en cuanto a promesas de protección frente a todo
tipo de males; su equivalente en el Corán serían las tres últi-
mas suras, las 112ª, 113ª y 114ª, últimas del citado Libro. Pero,
por otra parte, 91 nos lleva a la palabra Nl (tzé), sal fuera, nace,
el mandato que el organismo de la madre da al feto cuando
llega el momento del nacimiento, y también, como vimos,
relacionada con todo el proceso de la vida y la muerte. La fi-
gura 78 nos muestra a una pirámide cuya base está dividida
en cuatro partes, tal como se describía en capítulos anteriores,
al principio de esta V Parte. La tierra sobre la que se apoya,
ii~~N CN (em adamáh), Madre Tiérra; el nacimiento desde esa
tierra, Nl (tzé), ¡nace, sal fuera!; y la culminación, expresada en
el vértice, j~N (amen) todas ellas tienen un valor numérico de
91. Tres veces 91 son 273, valor de la palabra v~iN (arba), cuatro
(en femenino), aludiendo de esta manera a los cuatro planos
de manifestación simbolizados en la base, esto es, en la propia
tierra: en otras palabras, es en el plano físico donde se mani-
fiesta todo, aunque no seamos capaces de verlo. Y, finalmente,
podemos también reconocer en la base una semejanza al jardín
de un claustro, con los cuatro caminos, símbolos de los cuatro
ríos del paraíso, confluyendo en el centro, en el que hay una
fuente o pozo.
El trabajo en el propio tikún requiere que se le preste la máxi-
ma atención, y para eso vamos a necesitar herramientas poten-
tes ... También será necesaria una actitud interior de apertu-
ra, así como ligereza, en el sentido de ausencia de pesadez, de
inercia, esto es, una total disponibilidad. En la VI Parte, última
de la presente obra, presentamos algunos métodos que pueden
servir de ayuda para la necesaria apertura a la luz que el tikún
requiere para empezar a manifestarse.

832 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Figura 77
Los procesos de identificación

427 - Soñar, imaginar,


Contrato fantasear,
matrimonial ensoñar
M~l"Q ;ir.,
(ketuba) (haza)
Ilusión, engaño,
maya
4+2+7=13
Amor Identificación .
l"T~l"TN r,i;,,¡;, Compás
:,-,:,
(ahava) (hizdahuf) (hede)
Unidad 427 Girar en
,n:-c torno a un
(ejad) centro sin
alcanzarlo
Vacío nunca
TI~
(bohu) Perverso,

A propósito
,,
malvado

:i,m (zad)
Camino
(hazada) erróneo

Extender.
Fisura agarrar Eco
n,~ n,:i ,n
(zada) (hada) (hed)
Rotura de Intento de Sonido
La Unidad expandirse reflejado

Todo proceso de identificación tiene su origen en el anhelo primordial


de reconstruir la Unidad, que se siente perdida, tal como lo indican los dos
recuadros superiores de la izquierda, desarrollados por guematria de la pa-
labra «identificación». En los recuadros siguientes según el orden indicado
por la flecha, diversas palabras obtenidas por temerá ofrecen posibilidades
para descubrir por qué la identificación es un error, aunque nazca de unan-
helo legítimo. Haz un esfuerzo y trata de escribir un relato, un párrafo cor-
to, un poema, o al menos una frase que resuma el contenido de esta figura.

M A NUAL DE K ABBALA H PRÁCTICA 833


137
n',~~ ¡QN
(kabalá) (aman) educar
cábala (amén) así es
mística, (omen) verdad, veracidad
tradición ~ _.....,. l"I~ ,.:,,
f ~ (ebed Adbna1) v.:iN
l '-
¡
(arba) cuatro
V Esclavo de Dios, 273
N~~ "~,,"" ~~ Ni profeta

n~~~i!~1o ttze)
sal, fuera, _.---:::-:: ----
nace ---
--- ------
f;}~~:;K ' ',~NQ
273=91x3

2+7+3=12
o,,rr (ma;al)
~.:
(1aha/om) alimento, (b1) en mí
diamante comida

Figura 78
Desarrollo cabalístico a partir del número 91. Del concepto de trabajo
(;,i,.:v, avodá), surge el de esclavo de Dios, profeta, cuyo término hebreo
vale 91 (lo relacionamos con el salmo del mismo número, considerado de
protección). Con el mismo valor aparece la orden que la madre da al feto,
mediante un mensaje hormonal, cuando llega el momento del nacimiento:
jnace, sal, fuera! Esta palabra se relaciona a su vez con la Kabbalah a
través del concepto de nacimiento. La pirámide de la figura, apoyada en la
Madre Tierra (también de valor 91), tiene su base dividida en cuatro par-
tes, representando, tal como vimos, los cuatro niveles de la manifestación.
La pirámide tiene su cúspide representada por la palabra amén, que en sus
diferentes vocalizaciones puede también significar educar o veracidad.
A su vez, la Madre Tierra ofrece las riquezas de sus entrañas, representadas
por el diamante y la alimentación de todos los seres vivos.

834 Vll.L/\RRUBIA / H AUT / MI LLERA


EJERCICIOS

47: Reúne en la RS todas las ·palabras derivadas de los sig-


nificados de las letras de tu tikún, y todas las que. puedas
encontrar'en función de tu fórmula personal: frases ya ta-
byladas en la tabla que te corresponda, y significados de .
los nombres de los ángeles de tu tikún y de las cartas del
tárot asociadas, y escribe uh relato o un poema con todo
ello.
48. Usando solamente léls letras de tu tikún y de alguno de
sus significados dibuja lo que ~ería tu «escudo heráldico»..
Si vas a acudir al rescate de la Divina Princesa, necesitarás
w1 blasón que te identifique. Insiste hasta que el resultado
sea una obra de arte de la que te sientas orgulloso/a.

MAN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 83 5


VI

EL CENTRO DEL CENTRO

Todo depende del recuerdo.


No se comienza por aprender, sino por
recordar. La distancia entre la existencia
eterna y las dificultades de la vida nos
hacen olvidar.

Por esta razón Dios ordena: ¡Recuerda!

Sheikh lsmail Hakki

(Citado por ldriesh Shah en «El Camino del Sufí»)


¿Alguna vez se han sentido los seres más despreciables de la Crea-
ción? ¿Han sido educados en la idea de su propia indignidad, de su
miseria moral y todo lo demás? Lean el siguiente relato y descubran
sí su vida tiene algo que ver con la de su protagonista, un gusano
llamado Jannak Maté.

1. EL GUSANO QUE NO SABÍA GUSANEAR

(De la obra «Relatos de las dos Orillas»,


Jaime Villarrubia. Ver referencias bibliográficas)

annak Maté había crecido sabiendo que era un gusano de cuarta

! clase. Tan pronto tuvo capacidad para entender, sus educadores


enseñaron (y le obligaron a aprenderse de memoria) todos los
deberes inherentes a su cualidad innata de gusano de la clase infe-
rior. También le leyeron la relación de sus derechos, bastante más
escasos, por cierto, que los deberes; y, aunque pueda parecer extra-
ño, en este caso no le obligaron a aprendérselos de memoria. Supo
también de los requisitos y condiciones que le permitirían, tal vez,
acceder al codiciado status de Gusano de Tercera Clase, así como
de los castigos reservados a quienes vulnerasen las Sagradas Leyes
de la Gusanería.
El ascenso a la categoría superior era difícil, muy difícil. El Sis-
tema necesitaba que hubiese una sana competencia, lo que, según
afirmaban los Grandes Gusanos (¡sabias voces las suyas, guárdelos
el Gran Espíritu del Gusano Supremo!) llevaría algún día la prospe-
ridad a las generaciones futuras y abriría las puertas a la Edad de
Oro Gusanil. Para lograrlo, el Sistema había establecido múltiples
reglas y requisitos que los candidatos al ascenso deberían cumplir

MANUAL DE KAllllALAH PRÁCTICA 83 9


a rajatabla. Tantas eran estas normas y tan complicado su perfecto
conocimiento, que con el tiempo surgió una casta de gusanos espe-
cializados en asesorar a quienes querían ascender a gusanos de ter-
cera clase. Los Gusanos Asesores (GG. AA.), que así se llamaba esta
notable casta, habían renunciado a su propio ascenso a cambio de
que los aspirantes se ocupasen de buscarles alimento. Los GG. AA.
dedicaban parte del alimento que recibían de sus clientes al soborno
de los miembros de los tribunales de evaluación; eso, al menos, es lo
que ellos afirmaban. Y si bien más de un candidato al ascenso receló
acerca del destino de los alimentos entregados a sus asesores, nun-
ca pudo probarse que fuese otro que el que los GG. AA. afirmaban
que era. Como casta especializada, los GG. AA. se distinguían de los
demás por su aspecto rollizo y por el brillo grasiento de sus anillos,
lo que, indudablemente, facilitaba su localización, ahorrándoles
enojosos esfuerzos de marketing, y a sus clientes desperdiciar ener-
gías buscándoles, pues esas energías, por otra parte, eran necesarias
para la competitividad.
Volvamos a nuestro gusano. Con toda su buena fe, Jannak procu-
raba cumplir todas las directrices emanadas de la alta sabiduría de los
Gusanos de las Clases Dominantes, y muy en especial la número 37,
titulada «Para que el Buque se mantenga a flote». Había que ganarse
la confianza de los Grandes Gusanos, mostrarse digno de ser uno de
ellos ...
Sin embargo, había algo que era incapaz de hacer. Por más que se
esforzaba, era incapaz de gusanear. A los demás les salía con toda
naturalidad, pero a él no ... Le parecía que aquello no era lo suyo.
Sus desmañados intentos de gusanear fracasaron aquel día una
vez más, como tantas otras en el pasado. Probó una y otra vez, en to-
das las posturas imaginables, durante horas, sin concederse un des-
canso, hasta quedar exhausto. Y allí quedó, temblando, con la mente
en blanco, incapaz de tomar ninguna decisión, mirando al mundo
con ojos vidriosos. Los demás gusanos comenzaron a apartarse de él,
disgustados. Cosa curiosa: aquel vacío que se estaba formando a su
alrededor le pareció en un primer momento terrible, pero, en segui-
da la sensación angustiosa empezó a ser sustituida por otra no tan
desagradable, como de alivio. Al darse cuenta, un sentimiento de
culpabilidad le surgió de las entrañas como una ola, arrasando cuan-

840 VIL LARRUBIA / HAUT / MIi.LERA


to encontraba a su paso, llevando la mente de Jannak al borde de la
desintegración:
¡Le era imposible aprender a gusanear, y eso le gustaba!
Los demás gusanos, que tontos no eran -¡ellos sí que gusanea-
ban como el Gran Espíritu Gusanil había ordenado!- olfatearon el
peligro: si no se cortaba aquello, podría transformarse en una epide-
mia, y entonces, ¿qué sería del Sistema, qué sería de la Edad de Oro
Gusanil, del bienestar y la felicidad de las generaciones venideras?
Volvieron hacia Jannak, le rodearon e increparon:
- ¡Anarquista!
- ¡Loco!
- ¡Pecador!
Aquello acrecentó su sentimiento de fracaso, de su fracaso como
gusano, de su futuro como gusano sin futuro. Sumido en una hon-
da desesperación, Jannak Maté empezó a retorcerse, hasta conseguir
llevar la punta de su cola junto a su cabeza. Y, antes de que los demás
gusanos pudieran impedirlo, hizo un nudo en torno a su cuello, y se
ahorcó, pasando a la Otra Orilla en pocos segundos. Un gusaneo de
horror y de estupefacción recorrió la gusanería, si bien por lo bajo
muchos murmuraron lo merecido que Jannak se lo tenía.
Fue una verdadera pena, pues si Jannak Maté hubiese investiga-
do con un poco de atención, habría descubierto que su verdadera
naturaleza no era de gusano de cuarta clase. En verdad, su natura-
leza ni siquiera era la de un gusano, sino la de la boa constrictor,
la más poderosa de las serpientes poderosas. Si Jannak Maté, por
otra parte, hubiese conocido el Poder de las Palabras de Poder
(lo que no era el caso, pues sus educadores se cuidaron muy mucho
de que nunca llegara a conocerlo) podría haberse evitado todo lo
que le sucedió. Pero claro, habiendo confiado de buena fe en lo que
el Sistema le enseñaba, ¿cómo hubiera podido llegar a averiguar que
Jannak Maté significa realmente BOA EQUIVOCADA3'?

3' En hebreo, ~tl~ ¡,Jn (jannák maté) significa precisamente boa


equivocada.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 841


2. LA CÁRCEL Y SUS MUROS

H asta ahora hemos visto cómo estamos condicionados por un


programa, el Programa de Vida, que nos impone una forma
de ser, unos gustos y unos rechazos, unas aptitudes para determi-
nadas cosas y en cambio una total incapacidad para realizar otras ...
Bien es verdad que parece que ese Programa sea una herramienta
para que podamos cumplir nuestro tikún adecuadamente; pero,
¿en verdad podemos asegurarlo? ¿Hay alguna forma experimen-
tal de verificarlo?
Por el momento, todo el cúmulo de condicionantes encerrados en
el Programa de Vida apuntan más bien a algún tipo de cárcel que
nos mantiene encerrados entre sus muros. ¿Tiene algún sentido con-
siderar al nombre y al tiempo como los «comandos» o sentencias
del programa, o lo que es lo mismo, como los barrotes de la cárcel que
nos encierra?
Entre los métodos de trabajo que utiliza la Kabbalah hay uno,
la guematria, o empleo de los valores numéricos de las letras, que tal
vez proporcione una respuesta a la pregunta anterior.
En hebreo, las palabras nombre y tiempo son OW(shem) y¡~, (zman ),
respectivamente. Los valores numéricos de ambas palabras son los
siguientes:

nombre = shem = OW = 300 + 40 340


tiempo = zman = ¡~, = 7 + 40 + 50 97

Suma de ambas palabras 437

Las letras hebreas se leen, recordémoslo, de derecha a izquierda,


mientras que sus valores numéricos se deben leer en las expresiones
anteriores al revés, esto es, de izquierda a derecha.
Por su parte, cárcel o prisión es N~~-M~~ (bet-kelé), cuyo valor nu-
mérico es:

2 + 10 + 400 + 20 + 30 + 1 463

842 VI LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Como en el caso anterior, téngase en cuenta el orden de lectura de
las letras y de sus correspondientes valores numéricos.
Es evidente que ambos números no coinciden, y que entre ellos
hay una diferencia. ¿Cuál es esta diferencia, y qué significa? ¡Precisa-
mente, 26, que es el valor numérico de la palabra l'iTi"!\ el Tetragrama,
el nombre bíblico de Dios!:

Yahvé= rrn,~ =10 + 5 + 6 + 5 26

Valga lo dicho en los párrafos anteriores sobre el orden de lectura


de las letras hebreas y sus correspondientes números.
Este es un Dios Externo, el dios de los cuatro elementos, simbo-
lizados por las cuatro letras iod, he, vav, he del Tetragrama. Parece
que se nos está apuntando a una salida, no hacia fuera, sino ha-
cia dentro. La cuestión es si, efectivamente, puede hacerse algo al
respecto. Para tratar de averiguarlo, se os propone una pregunta,
una reflexión y un ejercicio sencillo.

Una pregunta:

¿por qué Dios es invisible?

Un santo medieval, San Buenaventura, contemporáneo y amigo


de santo Tomás de Aquino, decía que el hombre puede ver con tres
clases de ojos: los de la carne, los de la razón y los de la contempla-
ción. Los primeros, los de la carne, nos permiten ver los objetos ñsi-
cos; los de la razón, también nos permiten ver, pero en este caso las
cosas, los objetos mentales; y finalmente, los ojos de la contemplación
nos situarían ante lo más sublime de los mundos espirituales.
Debemos, sin embargo, observar que hay algo en común entre las
tres formas de ver: hay siempre un sujeto que ve y un objeto que es
visto.
Pero Dios es invisible.
¿Puedes descubrir por qué?

MAN UAL DE KABBALAI-I PRÁCTICA 843


Propuesta de reflexión:
Un tiempo verdaderamente extraño

¿Es el tiempo lo que parece? ¿Es en verdad unidireccional, irre-


versible? Hay razones para pensar que, en contra de lo que nues-
tros sentidos nos indican, no siempre es así. Dejando de lado las
hipótesis científicas que propugnan unas partículas elementales,
los taquiones, cuya característica sería el retroceso en el tiempo, pa-
rece haber un hecho inquietante.
A partir de algún momento no determinado (quizá hacia el 20 de
febrero) del año 1891, a pocos años del final del siglo XIX, el tiempo
histórico pareció detenerse para iniciar acto seguido una alocada ga-
lopada hacia atrás. Por extraño que pueda parecer, acontecimientos
históricos anteriores a dicho año empezaron a tener un extraño para-
lelismo en otros que sucedían a partir de entonces. Pero los tiempos
anteriores y posteriores a 1891 no son iguales, pues, por cada 187 años
de retroceso se producían 13 de avance, o, lo que es lo mismo, cada año
posterior a 1891 resume un período equivalente a 14 años, 140 días y
algunas horas del período anterior. Es como si el tiempo rebotase en
alguna pared invisible situada en ese año, y en el rebote multiplicase
su velocidad por un factor de 14,38, o lo que viene a ser más exacto,
187/13.
Cualquier estudioso de la historia puede comprobar esta afirma-
ción, pero para facilitar su búsqueda incluimos seguidamente algu-
nos de estos paralelismos, advirtiendo que no son ni mucho menos
todos los que hemos encontrado, cerca de 200 en los comienzos del
siglo XXI. Veamos, pues, en la Tabla LVIX algunos de estos aconteci-
mientos conectados en pares, en un fenómeno que hemos bautizado
con el nombre de «La Esquina del Tiempo», pues el tiempo, en efec-
to, parece haber doblado una esquina en 1891 y a partir de entonces
haber comenzado su alocada carrera de retroceso. Deliberadamente
hemos dejado fuera de la tabla acontecimientos ocurridos a principios
del siglo XXI, como los atentados contra el World Trade Center (Torres
Gemelas) de Nueva York y contra el ferrocarril de Cercanías de Ma-
drid para los que en el momento de redactarse la presente obra falta
todavía perspectiva histórica, aunque parecen apuntar al comienzo de
un gran conflicto entre religiones. Aun así, nos ha parecido oportuno

844 VILLARRUBli\ / HAUT / MILLERA


recoger la puesta en circulación de la moneda europea, el euro, en co-
rrespondencia con la reforma monetaria de Diocleciano plasmada en
el decreto de maximum del año 301. En todo caso, es nuestro propósito
presentar en una obra próxima una desarrollo detallado de todo el
proceso4, por el momento, bástenos simplemente apuntar el fenómeno
que está sucediendo, lo que debe ser suficiente para los fines que se
buscan en la presente obra.
Un esquema del proceso de «La Esquina del Tiempo» aparece
recogido en la figura 79.
Tabla LIV (1)
Algunos acontecimientos históricos de «La Esquina del tiempo»

Año Año
anterior Acontecimiento Tipo pos-
Acontecimiento
terior

1839 Invención de la Invención del


1894
fotografía e ·cinematógrafo
1775 Guerra de independen- Guerra España -
-1783 1898
cia U.S.A. M Estados Unidos
1751 Enciclopedia Francesa e 1900 Física cuántica

1704 Conquista de Gibraltar Conquista de


(1 ) M 1904
Port Arthur
1687 Teoría de la gravedad e 1905 Relatividad especial
Sublevación de Revolución en
1640 Portugal p 1908
Portugal
Derrota de la Hundimiento del
1588 Armada Invencible N 1912 Titanic
1571 Batalla de Lepanto M 1913 2 ." guerra balcánica
Heliocentrismo de
1530
Copérnico e 1916 Relatividad general
1525 Batalla de Pavía M 1916 Batalla de Verdún
1517 Revolución luterana R/P 1917 Revolución rusa

1490 Dinastía Habsburgo p Fin de la dinastía


1918
en Austria Habsburgo en Austria
4
La obra «La Esquina del Tiempo» ha sidopublicadapor esta misma editorial.
Recoge cerca de 200 conexiones históricas, junto con otros ciclos que confirman
la realidad de este extraño fenómeno. Ver referencias bibliográficas.

M ANUAL DE KAB BALAH PRÁCTICA 845


1485 Fin de la guerra de las p Sublevación de
1919
Dos Rosas en Inglaterra Irlanda

1480 Invasión turca de Ocupación aliada


M 1919
Europa en Turquía

1455 Comienza la guerra de Independencia de


M/P 1921
las Dos Rosas Irlanda

1430 Álvaro de Luna, valido p Dictadura del general


1923
de juan II de Castilla Primo de Rivera
Guerra de Castilla Golpe de Estado
1382 M P/M
contra Portugal En Portugal
Convenio Ginebra:
Invención de la letra
1330 E 1930 unificación de la
de cambio
letra de cambio
Proclamación de
p Abdicación de
1312 Alfonso 1931
Alfonso XIII
XI de Castilla
Inicio persecución
1270 Última cruzada R/P 1934
nazi a los iudíos
Los mongoles Los japoneses
1215 M 1937
conquistan Pekín conquistan Pekín
Batalla de las Navas
1212 M 1938 Batalla del Ebro (2)
deTolosa (2)

1195 Fin guerra civil


Batalla de Alarcos M 1939
española
Inicio 2ª guerra
1189 Tercera cruzada M 1939
mundial
Saladino conquista Ofensiva del Eje en el
1171 M 1941
Egipto Norte de África
Federico Barbarroja Batalla de Stalingrado:
1143 sa lvador del Imperio P/M 1943 comienza el declive
Germánico (3) del 111 Reich

1043 Ataque ruso a Bizancio M 1950 Guerra de Corea

Sublevación en Roma p Sublevación en Berlín


996 1953
contra los germanos contra los rusos

Los germanos derrotan Los soviéticos aplastan


955 P/M 1956
a los húngaros la sublevación húngara

865 Ataque ruso a Bizancio M 1962 Guerra de Vietnam

846 VJLLARRUBIA / HAUT / MILLERA


814 Muere Carlomagno (4) p 1965 Reelección de De Gaulle

800 p Francia abandona


Carlomagno emperador 1966
estructura militar OTAN

778 Roncesval les P/M 1968 El mayo del 68 francés

Dinastía Omeya en p Juan Carlos de Barbón


756 1969
España musulmana sucesor de Franco

742 Nace Carlomagno p 1970 Muere De Gaulle (4)

Emirato independiente Carrero Blanco


715 p 1973
en España presidente Gobierno

Invasión árabe de Asesinato de


711 M/P 1973
España Carrero Blancoi

622 Regreso de Jomeini


Hégira de Mahoma P/R 1979
a Irán

Sublevación de
585 p 1981 Intento golpe 23-F
Hermenegildo

Caída Imperio Romano p


476 1989 Caída Telón de Acero
de Occidente

Batalla Campos
451 M 1991 P Guerra de lrak
Cataláunicos (5)

410/405 Crisis de los mercados


Saqueos de Roma E 1994
financieros
Documento vaticano
313 Edicto de Milán R 2000 «Memoria
y reconciliación»

Batalla de Puente p Polémicas elecciones


312 2000
Milvio Presidenciales USA

Decreto de maximum Entra en circulación


301 E 2002
de Diocleciano el euro

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 84 7


Clave de tipos de acontecimientos: P, político; M, militar; N, na-
val; C, científico; R, religioso; E, económico. A veces, un aconteci-
miento tiene más de un aspecto.

Notas a la Tabla LV:

(1) En ambos casos, una potencia insu lar (Inglaterra en 1704, Japón en 1904), con-
quistan una fortaleza que estaba bajo la soberanía de una potencia continental
(España en el primer caso, Rusia en el segundo). También en ambos casos la
fortaleza se encontraba situada a orillas del mar.
(2) Ambas batallas tuvieron lugar en España, se libraron en pleno verano, y en los
dos casos había tropas europeas y africanas apoyando a uno y otro bando. Sin
embargo, también en ambos casos las tropas europeas de apoyo (cruzados en la
Edad Media, Brigadas Internacionales en la guerra civil española) no participa-
ron en la batalla, aunque en un principio se tenía la intención contraria. Final-
mente, en ambos casos la decisión final de la batalla recayó en tropas navarras.
(3) Cuando Federico Barbarroja llegó a la corte de su tío el emperador Conrado,
el Imperio se encontraba en total decadencia, y a punto de desaparecer, por lo que
su llegada y la actuación enérgica que emprendió de inmediato dieron un giro
radical a la situación. Por su parte, la batalla de Stalingrado (hoy denominada Vol-
gogrado) representó el punto de inflexión del apogeo nazi, y a partir de entonces
Alemania empezó a retroceder en todos los frentes.
(4) Todos los acontecimientos del nacimiento de la V República Francesa, con De
Gaulle a su frente, tienen un sorprendente para lelismo, aunque en orden inver-
so, como todos los fenómenos de «La Esquina del Tiempo", con los de la vida
y reinado de Carlomagno. Incluso después de la muerte de éste, la división de
su imperio mantiene el paralelismo con el proceso de independencia de los
territorios coloniales franceses.
(5) En la batalla de los Campos Cataláunicos lucharon contra los hunos, bajo el
mando de Atila, un conjunto de pueblos germánicos en coalición con lastro-
pas imperiales romanas. En la guerra del Golfo, lrak, bajo el mando de Sadam
Hussein, se enfrentó a una coalición internacional bajo el liderazgo de Estados
Unidos. En ambos casos el conflicto terminó con la derrota de uno y otro,
pero ambos pudieron escapar y mantuvieron el poder sobre sus respectivos
pueblos.

848 VJLLARRU BIA / HAUT / MILLERA


Figura 79
«La Esquina del Tiempo»

1891

~ 1700-~~------------'""'--

~ :n
~o, 1 5 0 0 - - - ' i < - - - - - - - - - - - - - - - - > . , _ _ 191B %
~ 1400 1925 ~

t
(lj
(lj
1200
1100
1300 1932

1939~
3
1946 ~
fl::' 1000 1953 ~
-1--=-----=------------~'---=--'" 1960 "'

Esquema general del proceso de reversión del tiempo histórico.

Hasta principios del siglo XXI se han detectado cerca de 200


conexiones o repeticiones de hechos históricos, conforme a la se-
cuencia indicada en el gráfico. Estos hechos son de muchos tipos:
políticos, científicos, sociales, religiosos, militares, artísticos, etc.
Sin embargo, siempre han estado relacionados con la actividad
humana y no con catástrofes naturales tales como volcanes, terre-
motos, inundaciones, caída de meteoritos o choques de cometas
contra el planeta Júpiter, por ejemplo.
El fenómeno histórico que llamamos «La Esquina del Tiempo» tie-
ne un origen desconocido, pero está suficientemente verificado, a la
vez que confirmado a través de concordancias con otros ciclos histó-
ricos. Así, la historia española desde el año 1364 muestra unos ciclos
alternativos de 108 y 60 años que, son, respectivamente, innovado-
res y conservadores, y muchos de cuyos años significativos presen-
tan concordancias con otros del ciclo de «La Esquina». También hay
concordancias significativas con momentos claves de los ciclos eco-

MANUAL DE KABl3ALAI-I PRÁCTICA 849


nómicos de Occidente desde tiempos del Imperio Romano, e igual-
mente con los papas y sus circunstancias históricas a partir de 1730.
Las conexiones de este último ciclo con «La Esquina», además, han
sido verificadas mediante el programa informático «Código B», que
busca mensajes secretos en el texto hebreo de los cinco primeros libros
de la Biblia. Para más detalle, ver la obra de J. Villarrubia, I. Villarru-
bia y G. Sauceda sobre este terna, publicada en esta editorial.

Un ejercicio sencillo:
¿Recuerdas cuando supiste tu nombre por primera vez?

Tal vez lo recuerdes: un día, tu madre, o tu padre, o tal vez alguna


abuela, te llamó por tu nombre. Después, te explicaron cuáles son
tus apellidos; y desde entonces, tú has sido el titular de ese nom-
bre y esos apellidos, que has llevado como la cosa más natural.
O puede que no lo recuerdes, pero no importa: imagina que pue-
des revivir ese momento, trata de imaginar cómo pudo ser, quién
te dijo tu nombre completo por primera vez.
Ahora, teniendo presente aquel momento (recordado o imagi-
nado, eso es lo de menos), imagina que tus nombres, el propio (el
de pila) y los familiares (los apellidos), son corno una prenda de
ropa que te han entregado, y que has llevado puesta hasta el pre-
sente, sin que en ningún momento te la hayas quitado.
Pues bien: te proponernos que, durante un minuto, te sientes
en una postura cómoda, con la espalda erguida, cierres los ojos,
(o los mantengas abiertos, si eso te hace sentirte más a gusto) y to-
mes unas pocas respiraciones lentas y profundas. Después, suave-
mente, muy suavemente, imagina que tomas tus nombres corno si
fuesen esa prenda que llevases puesta, y te los quitas, dejándolos
bien dobladitos a tu lado, para recuperarlos y volvértelos a poner
en cuanto el minuto haya transcurrido.
Observa lo que ocurre: ¿Qué eres cuando no tienes nombre?
¿Quién eres? ¿Cómo es tu vida? ¿Cómo es tu espacio, cómo tu
tiempo, cómo tu energía? Recuerda que, mientras no tengas
nombre, podrás usar todo tipo de cosas, pero no podrás tener

850 VILLARRU BIA / H A UT / MILLERA


nada de que vaya colgado al nombre: propiedades, cuentas co-
rrientes (dinero de bolsillo, sí; todo lo que necesites), una fami-
lia.. . Sigue observando: ¿Qué hay a tu alrededor? ¿Cuál es tu
actitud respecto a las personas que amas? ¿Y respecto a aquéllas
a las que aborreces? ¿Cómo visualizas o imaginas tus fronteras
durante ese minuto?
Después, siempre muy suavemente, toma tus nombres y vuél-
vetelos a poner. Toma unas respiraciones un poco más profundas,
y abre despacio los ojos. Toma buena nota de todo lo que recuer-
des, mantén tu evocación de ese minuto todo lo viva que te sea
posible.
¿Cómo te has sentido? ¿Angustiado? ¿Liberado? ¿De alguna
otra forma? ¿De ninguna forma?

¿Quién se siente de esa forma? ¿Tú?

¿Y quién eres tú?

3. ¿QUIÉN SOY CUANDO SALGO DE LA CÁRCEL?

l ejercicio de quitarse el nombre te habrá revelado, probablemente,


E bastantes cosas. Es posible que te haya planteado una pregunta ca-
pital: si al quitarme el nombre se produce tal cambio en mi percepción,
¿quién soy yo, entonces? Por otra parte, el tiempo, al que quizá he
dado un valor absoluto, empieza a mostrar un extraño aspecto cuando
lo examino a la luz de los datos que proporciona el fenómeno (bien
peculiar, por cierto) de la Esquina del Tiempo. Y en cuanto a Dios, ¿he
descubierto por qué es invisible?
Observa cómo sucedieron las cosas. Cuando recibiste el nombre
quizás te diste cuenta por primera vez de lo importante que eras.
El hecho de tener un nombre te afianzaba frente a tu entorno, ya eras
alguien.
En seguida supiste que existe la muerte, y que, pese a ser tan im-
portante, un día morirías: así tomaste conciencia del tiempo. Y tam-
bién del miedo a la muerte, a desaparecer, a dejar-de-ser.

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 851


Y tal vez buscaste algún tipo de ayuda para resolver ese proble-
ma angustioso. Desde la pata de conejo o la herradura de la suerte hasta
los dioses más variados, pasando (es un decir) por las novenas a san
Expedito, el apoyo y los sabios consejos de un competente gurú o los
sacrificios sangrientos sobre la pirámide de Teotihuacán, el ser hu-
mano ha inventado todo tipo de rituales para durar lo más posible
sobre este planeta.
En realidad, el problema surgió cuando el hombre dijo por prime-
ra vez YO. Y tal vez haya sido inevitable este paso, pero finalmen-
te ha resultado ser un verdadero fastidio. La Kabbalah nos muestra
que ~~t-; (ani), yo, admite una temurá o permutación, transformán-
dose en tt-; (ain), nada, lo que está en línea con lo que afirman mu-
chas tradiciones acerca de la inexistencia del yo. En otras palabras,
al querer afirmarse frente al resto del Universo, el hombre se ha en-
cerrado él mismo en su propia trampa (fig. 80). Desde ella, se entrega
a una actividad incesante, para aliviar la angustia (palabra que tiene
la misma raíz que angosto, estrecho) que todo ello le origina. Por eso,
tal como reconoce el Bhagavad-Gita:

«El mundo está aprisionado en su propia actividad, salvo cuan-


do se cumple como culto de Dios. Debes, pues, realizar sacramen-
talmente cada uno de tus actos y quedar libre de todo apego a los
resultados».

Ahora que sé, que sabes, que sabemos, cómo salir de la cárcel, me
pregunto, te preguntas, nos preguntamos: ¿Quién soy, verdadera-
mente?

852 VILLARRU131A / HAUT / MI LLERA


Figura 80
La raíz del problema

Búsqueda
de ayuda

Deseo de Miedo
ser de no
ser

El deseo de ser, como afirmación frente al entorno, desaparece con


la imposición del NOMBRE: mediante él, empezamos a ser «alguién»
en lugar de «nadie». Después, tomamos conciencia del tiempo, que nos
llevará un día u otro a la muerte, y así surge el miedo, que tratamos de
paliar acudiendo a cualquier tipo de «Dios propiciatorio» que nos ayude
a durar lo más posible. De esta forma, quedamos encerrados en la cárcel
que nosotros mismos nos hemos construido.

El gran místico sufí, Muhayydin ibn el Arabi (Murcia, 1170 - Da-


masco 1230) escribió la que muchos consideran una de las cumbres
de la mística universal, Risalatul-ahadiyya («Tratado de la Unidad»,
ver referencias bibliográficas). Un resumen poético de dicha obra per-
mite vislumbrar cuál es, en definitiva, el objetivo que se busca en el
cumplimiento del tikún.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 853


NADA HAY APARTE DE ALLAH
Y SU MANIFESTACIÓN ES PURO GOZO

Tú eres Él, y Él es tú, aunque creas ser aparte de Él.


Nada hay anterior a Él.
Nada hay posterior a Él.

Es Último sin posterioridad, Primero sin anterioridad.


Es Evidente sin exterioridad, Oculto sin interioridad ... 5

Pero tú no Le ves, pues Él es el velo que Le oculta.

Él es único.

Pero tu creencia en la multiplicidad


te impide darte cuenta de ello.

Él te está enviando en todo instante Su mensaje de unidad,


y tú lo vives como multiplicidad, pues crees
que Quien envía al mensaje,
y el mensajero,
y el propio mensaje,
y tú, su destinatario, sois
diferentes .. .
cuando en realidad sois sólo uno: Él.

Él es Allah, el Soplo creador de todos los Universos


visibles e invisibles,
que sólo Se pertenece a Sí Mismo.
Nada existe aparte de Él, benditos sean sus nombres.

Cuando te extingues, le conoces ...

5
Estas cuatro frases se refieren al versículo a aliya 3 de la sura 57 del
Corán, llamado «del hierro»: «Él es el primero y el último. Él es el Exterior
y el Interior. Él conoce todo».

854 VILLARRUl31A / HAUT / MILLERA


y, sin embargo, tú no puedes extinguirte,
pues sólo se extingue lo que previamente existía,
y tú nunca exististe, ni existes, ni nunca existirás ...
Si existieses aparte de Él, habría dos, y no Uno.
Entre los dos habría algún tipo de separación,
y esta separación
sería la negación de Él como Infinito, Eterno e Inmutable.

Nada hay, sino Él.

Tus cualidades, que crees tuyas, son Sus cualidades.


Tus atributos, que crees tuyos, son Sus atributos.
Tu naturaleza, que crees tuya, es Su naturaleza
sin transformación, disminución o aumento
y sin que tú dejes de ser tú mismo.

Sólo tu ignorancia te impide llegar a Él.

Cuando tu ignorancia se extingue y llegas a Él


descubres
que siempre fuiste Él
y nunca dejaste de ser Él .. .

Tal vez temes a la muerte,


o te asuste la condenación eterna;
pero es porque olvidaste
que tú, y tu muerte,
y el Enemigo,
y el Fuego de los Abismos ,
no sois sino El Mismo, jugando a no saber que es El,
Último sin posterioridad, Primero sin anterioridad,
Evidente sin exterioridad, Oculto sin interioridad...

Cuando te extingues, Le conoces


y así, mueres a todas tus cualidades, loables o reprensibles;
mueres a tus rasgos específicos, a toda forma de ser;

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 855


mueres a todo aquello que crees esencial a tus principios,
y descubres que nada queda, sino Él,
pues nada hay distinto de Él o aparte de Él,
el Misericordioso, el Compasivo ...

Y cuando mueres a todo lo que has creído ser hasta entonces


descubres que Él te ama
y en Su amor

Él es verdaderamente tu cuerpo
tu vista
tu oído
tu lengúa
tu mano
tu vientre
tu sexo
tu pie
tu sangre y tu piel
tus huesos y tus cabellos

Él es verdaderamente tu mente
tu pensamiento
tu memoria
tu comprensión
tu olvido

Él es verdaderamente tu corazón
tus deseos
tus sentimientos
tus miedos

Él es verdaderamente tu espíritu
Atman idéntico a Brahman

856 VILLARRU BIA / H AUT / MILLERA


y sabes,
realmente, verdaderamente,
que siempre fuiste Él,
Allah, el Misericordioso, el Compasivo,
el Origen y el Fin de todo lo que ha sido, es y será,

BENDITOS SEAN SUS NOMBRES.

EJERCICIO:

49."Lee atentamente el texto anterior, que está basad_ o en un ,


resumen de la obra de Muháyydin ibn-al Arabí « Tratado de
la Unidad» (Risalat-ul-ahadiyya). Observa las reacciones
que se producen en ti al leerlo. Presta especial atención ·
a aquello que te produce rechazo (si lo hay) y a aquello
- otro que te atrae (también erí el supuesto de que lo haya).
Elige el sentimiento que sientas más fuerte, sea de rechazo
o de atracción, y trata de seguirle la pista, buscando la raíz
en la que ese sentimiento se basa. Si lo crees necesario,
ayúdate de tu propio Árbol personal, intentando situar
en él la' atracción o el rechazo que estés sintiendo.
Si encuentras esa raíz, contémplala sin llamarla de ninguna
manera, obsérvala como mirarías por un microscopio
para averigUar, por ejemplo, la estructura de un cristal de :
cuarzo. Toma buena nota de lo que descubras, y s_igue sin
-ponerle palabras. Tenlo a mano, por si en algún momento
te hiciesefalta. Y no te ofvides de utilizar los Criterios
'LUCIS.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 857


Tabla LV
Los mantrams del vacío

(zmaní af pa'ám lo)

«Mi tiempo es nunca»

(jalalí af lo ejad)

«Mi espacio es ninguno»

(shemí shum ejad)

«Mi nombre es nadie»

.EJERCICIO:

SO.Recita en voz alta y en hebreo lastres frases de la tabla anterior,


.observando los pensamientos, sentirni~ntos· imágenes y/o
sensaciones, incluso corporales, que.'sµrjan a! hacerlo,Toma
bue.na nota de el lo, y·observa si los.efectos se repiten-o varían
cada vez tjue los recitas. Siempre que lo hagas, recita las tres
0

.·._frases emel orden en que aparecen es~titas. .

858 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


4. Los NOMBRES, LOS TIEMPOS, LOS DIOSES

E l experimento de quitarse el nombre, independientemente de


las sensaciones que en cada uno provoque, pone de manifies-
to algunos hechos curiosos. El primero de ellos es que el tiempo
deja de tener el sentido que normalmente tiene con el nombre
puesto. Es como si, en cierto modo, el tiempo desapareciese.
A la vez aparece otra constatación, la de la soledad, simple-
mente porque no hay en ese estado sin nombre nadie con
quien poderlo contrastar. Es como si descubriésemos que yo
soy Fulano de Tal en tanto que tú no eres Fulano de Tal;
así que, cuando yo ya no tengo nombre, no hay nadie fren-
te a mí, aunque la gente siga estando ahí, muy presente.
Se trata, en cualquier caso, de una experiencia desconcertante.
Esta experiencia puede ser examinada a la luz de la Kabbalah.
Podemos en efecto preguntarnos cómo surge el nombre, el he-
cho d e ponernos un nombre, que implica sin duda un rol social.
Según Ken Wilber, el ser humano constata que todo lo que le
rodea acaba por decaer y perecer; de ahí que aparezca inevita-
blemente el sentimiento de tiempo. Y este sentimiento le lleva
de inmediato al de su propia desaparición. De ahí que busque
perdurar, m ediante la afirmación de sí mismo frente al resto
del Universo, frente al «no-yo», asumiendo una palabra dife-
renciadora, (esto es, una palabra creadora) cual es el nombre.
Ya tenemos, pues, a dos de los elementos constitutivos del pro-
blema: el nombre y el tiempo.
El tiempo aparece en el Árbol de la Vida en la tercera sefirá,
Binah, asociada igualmente con los arquetipos de forma (¡antes
de la aparición del tiempo no existen las formas!) y de la Gran Ma-
dre Cósmica, la que encierra en su matriz la idea primaria de
todas las cosas (¡la multiplicidad!). Si dirigimos ahora nuestra
atención a la tradición china, podremos leer en Tao-Te-King, I,
que «Sin Nombre es el padre del Universo, y Con Nombre la madre
de todas las cosas» . Y así, observamos que nombre y tiempo se
hallan íntimamente asociados.

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 859


Observemos también cómo aparece Dios en la tradición bíblica.
En primer lugar, el Dios creador es Elohim (Génesis 1: 1):

(bereshit bará Elohím et ha-shamayím ve-et ha-áretz)

«En el principio creó Dios el cielo y la tierra»

El nombre divino Elohim se repite hasta treinta veces en el pri-


mer capítulo del Libro del Génesis, y ni una sola vez el de Yahvé
(i''Tii'T~), que no aparece sino a partir del cuarto versículo del capítulo
segundo, el cual es una recapitulación del primero. Da la impre-
sión de que ambos capítulos tuvieron diferentes redactores, y pos-
teriormente ambas redacciones fueron enlazadas por una tercera
mano. Yahvé aparece como un Dios externo al ser humano, con el
que dialoga y al que premia y castiga. En el Árbol de la Vida, i'W'T~
aparece como el nombre divino en la tercera sefirá (¡otra vez la
tercera!), de ahí que debamos relacionarle necesariamente con el
nombre y con el tiempo; y, consecuentemente, con el miedo. Ade-
más, el nombre i'Tii''T~ es realmente una variante de una raíz hebrea
que significa ser, como puede comprobarse a la vista de las pala-
bras era, i'T~i'T (hayáh), es, i'Tii'T (hovéh) y será, m,~ (ihyéh) (fig. 81).
Si ahora unimos estos tres elementos, nombre, tiempo y i'Tii'T\
sumando sus valores numéricos, obtenemos el resultado ya co-
nocido:

Nombre: CW (shem): 300 + 40 340


Tiempo: ¡ti, (zman): 7 + 40 + 50 97
Yahvé: i'TiM~ (ihvh): 10 + 5 + 6 + 5 26

Suma: 463

463 es el valor numérico, de ~,6~ ri~~ (bet-kelé), cárcel, prisión.


La experiencia de quitarse el nombre es así la experiencia de la des-
aparición de la cárcel, lo que no siempre puede resultar agradable.

860 V1t. LARRUBIA / H AUT / MILLERA


Los efectos de la supresión del nombre pueden analizarse
mediante la guematria consistente en restar 340 de 463, lo que
arroja el resultado de 123. ¿Recuerdas el ciclo de películas de
La Guerra de las Galaxias, y la invocación a La Fuerza que hacían
sus protagonistas? La Fuerza es en hebreo jCMM, (ha-josén), y tiene
un valor numérico de 123. También tienen este valor las palabras
ce~ (gasás), agonizar, estar moribundo, y i1~n,~ (miljamáh), gue-
rra, lo que evoca de inmediato la muerte iniciática del guerrero
espiritual.
A su vez, la supresión del tiempo puede igualmente ana-
lizarse restando 97 de -463, lo que arroja un resultado de 366,
y ello nos proporciona los conceptos n,,~ e~¡, (kayam be-ruaj),
existente por sí mismo en espíritu; WN ,~~i1, (hejal esh), santua-
rio o palacio de fuego; y ~,~w, (shinui), cambio, proceso, movi-
miento. Al suprimirse el tiempo, el hombre descubre su propia
esencia, que es eterna, sin espacio ni tiempo. En este sentido,
tal vez más de uno, al quitarse el nombre, se haya percibido a sí
mismo como rodeado de fuego: es literalmente exacto.
Sólo queda suprimir ese Dios externo, con el que el hombre
dialogó, porque veía en Él a alguien ajeno a sí mismo. Reste-
mos pues 26 de 463, y encontraremos, con el valor 437, ,~ni1,
(ha-tibel), El Universo. ¿Encontraste algún límite cuando te qui-
taste el nombre?
En la figura 81 se muestra, arriba a la izquierda, la relación
entre el Tetragrama ni~n y el tiempo: «fue», «es» y «será» son
derivados de aquél. La suma de las cuatro palabras es igual
a 92, valor de iMi (pajad), temor. Por su parte, el valor de ¡~,
(zmán), tiempo, 97, sumado al del Tetragrama ni~n (26) y al de
CW (shem), nombre, palabra que en la tradición judía designa a

persona, al propio Tetragrama, proporciona el valor d e N,~


la vez que el común de cualquier cosa o el propio de cualquier
n~~
(bet-kelé), cárcel. El lado izquierdo del diagrama, por tanto, vie-
ne a ser un resumen del planteamiento general del problema
del ser humano.

MANUAL DE KABBAI.AH PRÁCTICA 861


íV = consc1enc1a
i
92-26+300 = 366 - - • n-n~ Cl'¡, - 7 - - 7
"Viviente por 1 1
Sí Mismo en I t
i"'l'l'1' l"!'i'T
Espíritu ,. 1
30 20 ¡,-i.:l 1

......
"fue" "relámpago" 1
1
···•., :,n···· "Santuario
~◄- -t
De Fuego"
16 "cerebro" 1
1
"temor"
' ◄- .J
/ ~,nsi 1


padre
26+30+ 16+20=92 1
' , ◄- J
"hijo"
~ ~~p~ ~~~

340 \ )7¡~1 / / ~ ' ~ r,•~


366+32=398 - •~sin
"libre"
340+26+97= 463 -:.,=!
Los 32 senderos del Árbol de la Vida

Figura 81
Diagrama que propone un análisis cabalístico del Tetragrama mil~ en
relación con el Tiempo, el Nombre y la experiencia de «quitárselo». Expli-
cación más amplia en el texto.

La parte derecha, en cambio, trata de simbolizar la salida al pro-


blema, la solución. La supresión del temor (representada por la
flecha que une a ambos lados del diagrama) implica la sustitución
de los «dioses externos», representados por i1W'T, por la CONS-
CIENCIA, representada por la letra W. Aparecen así los tres aspec-
tos que se suelen experimentar al «quitarse el nombre»: Viviente
por Sí Mismo en espíritu, Santuario de Fuego (recordemos que el
fuego simboliza el Espíritu en muchas tradiciones) y cambio, pro-
ceso o movimiento, pues, en efecto, nada está fijo, todo fluye, y la
experiencia permite constatarlo. Con las letras del primero de es-
tos aspectos pueden formarse, mediante temurá, las palabras ¡,,~

862 VILLARRUBIA / H A UT / MILI.ERA


(barak), relámpago, y M~ (moáj), cerebro, quedando como sobrantes
las letras ~ y i, que simbolizan respectivamente al Padre y al Hijo:
«La unión del Padre y el Hijo mediante un relámpago en el cerebro»;
es decir, la ILUMINACIÓN. Finalmente, sumando a 366, valor de
los susodichos tres aspectos, el de :h (leb ), el corazón, que es 32,
el cual alude también a los 32 Senderos de Sabiduría, el propio Ár-
bol de la Vida, se llega al número 398, que proporciona "W~M (jafsh(),
libre, que enlaza directamente con el pasaje de Juan 8: 32: «Y cono-
ceréis la Verdad, y la Verdad os hará libres».

5. EL ÁRBOL PERSONAL Y EL TIKÚN A LA LUZ DE «SIN

NOMBRE». LA PURIFICACIÓN PREVIA

C ómo se ve el Árbol personal (y sobre todo, el conjunto de sus


significados) después de pasar por la experiencia de «quitarte
el nombre»?¿Y el tikún, cómo se ve?¿ Con qué perspectiva contem-
plas la misión que has traído a este mundo y las herramientas para
llevarla a cabo? No olvides que esa misión, el tikún, es cósmica,
y que sus herramientas, tu Árbol de la Vida personal, son las más
adecuadas para su cumplimiento.
Hay, sin embargo, una serie de condicionamientos, de tipo
biológico unos, social y cultural otros, kármicos muchos de ellos,
que posiblemente te impedirán ver la relación existente entre lo que
has experimentado al «quitarte el nombre», tu misión y tus he-
rramientas. Es como si intentases mirar a través de un cristal
sucio.
Conviene que revises tanto tu Árbol personal como tu tikún.
Respecto al primero, observa sobre todo sus zonas conflictivas:
excesos o defectos, bloqueos, tal vez configuraciones incómodas,
desequilibrios, senderos con cargas especiales, Tríadas abiertas o
cerradas ... Debe haber una razón, una buena razón, para que es-
tén ahí: búscala. No te conformes con respuestas que admitan a
continuación otra pregunta: «¿Y por qué eso es así?». Llega hasta al
fondo, y no le pongas palabras, no le pongas ningún nombre a

MANUAL DE KABBALAI-I PRÁCTICA 863


lo que vayas encontrando. Tampoco lo rechaces, ni te apegues a
ello si te resulta agradable. Mira (o al menos, inténtalo) con igual
serenidad lo positivo y lo negativo. Recuerda la frase del empera-
dor filósofo, Marco Aurelio: «Todos los hechos son neutrales. Nosotros,
con nuestra visión parcial, los coloreamos y los calificamos como buenos o
como malos». Y lo que estás contemplando, aunque pertenezca a tu
Universo Interior, son hechos. Recuerda también que todo aquello
acerca de lo cual puedas decir, pensar, sentir o idear algo pertenece
al mundo real (del latín res, reí, cosa, objeto), al mundo de lasco-
sas, de los objetos, por muy elevado o sublime que sea. Incluso la
idea de Dios no deja de ser una cosa.
En cuanto a tu tikún, trata de sintetizarlo, de encontrar la esen-
cia: « Verdaderamente, ¿qué es lo que h'e venido a hacer aquí?» . Recuerda
las palabras del Bhagavad Gita, sobre la conveniencia de realizar
sacramentalmente cada uno de tus actos y quedar libre de todo
apego a los resultados. Incluso cuando estos resultados se refieren
a tu tikún.
A veces, sin embargo, nos equivocamos y enfermamos.
Todas las enfermedades, tanto las del cuerpo como las del alma,
obedecen a errores nuestros, unos inmediatos, otros remotos,
tal como vimos al analizar los senderos con cargas especiales.
Como consecuencia, nuestros cristales se ensucian, y dejamos de
ver correctamente; sobre todo, dejamos de percibir la relación exis-
tente entre nuestro karma, nuestro Árbol personal y nuestro tíkún.
Y, al no saber a dónde vamos, acabamos por ir en otra dirección.
Equivocada, por supuesto.
Hay muchas técnicas en todas las tradiciones espirituales, que
de una u otra forma buscan limpiar el cristal. Utilizan diferente
terminología para designar su objetivo, que no siempre está su-
ficientemente claro. Muchas de estas técnicas son perfectamen-
te válidas, quedando fuera del propósito de este curso aludir a
ellas. Nos referiremos, en cambio, a tres métodos basados en la
tradición cabalística. Uno de ellos fue desarrollado por el gran
cabalista inglés Israel Regardie en su obra «El arte de la verdade-
ra sanación» (ver referencia bibliográfica), mientras que los otros
dos han sido desarrollados a lo largo de diferentes cursos, talle-
res y seminarios desarrollados a los largo de veinte años por los

864 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


autores. No son, por supuesto, los únicos, ni tampoco pretenden
ser los mejores, pero presentan la ventaja de que son compati-
bles con otros sistemas encaminados a la purificación del incons-
ciente, sin la cual la vía espiritual tiene muchas probabilidades
de fracasar y, lo que es peor, de originar serios problemas a sus
practicantes. Debemos mencionar aquí, junto a autores de la ca-
tegoría de Arnaud Desjardins o Ken Wilber (ver referencias bi-
bliográficas), las palabras que oímos en reiteradas ocasiones al
maestro Antonio Blay, el cual comparaba a la vía espiritual con
un viaje en globo aerostático: si la barquilla tiene un exceso de
lastre es difícil que pueda elevarse, corriendo además el riesgo
de que, al ser arrastrado por el viento sin que haya alcanzado su-
ficiente altura, se destroce en el primer obstáculo que encuentre
en su camino.
Junto al trabajo en el Pilar del Centro, basado en el método pro-
puesto por Israel Regardie, los otros dos métodos que propone-
mos se refieren, el primero de ellos, a la posibilidad de ayudar a
la sanación de problemas físicos que, siendo en general el resul-
tado de errores cometidos a diferentes niveles (ambiente, trabajo,
relaciones o alimentación inadecuada, por ejemplo), o de cargas
kármicas procedentes de vidas pasadas, impiden o dificultan en
la práctica un buen trabajo espiritual; veremos que para él nece-
sitaremos disponer de un diccionario de hebreo-castellano, o al
menos un vocabulario que recoja los principales órganos y funcio-
nes del cuerpo (ver referencias bibliográficas). El segundo trabaja
esencialmente con la limpieza de nuestro tiempo, y puede a la vez
subdividirse en otros dos procedimientos relacionados entre sí: el
único material necesario es nuestra propia mente y la capacidad
de visualizar.

5. 7. El trabajo en el Pilar del Centro


Este método, desarrollado por Israel Regardie, pretende limpiar
nuestros canales energéticos, de tal forma que se unifiquen en
nosotros y a través nuestro las energías del cielo y de la tierra;
se incluye en él el ya conocido de «quitarse el nombre». El ejer-

MAN UA L DE K/\BBALAH PRÁCTICA 865


cicio puede desarrollarse en cualquier lugar tranquilo, pero es
preferible llevarlo a cabo en plena naturaleza, sobre todo si se
realiza en grupo; en este último caso, uno de los miembros del
grupo puede ir guiando y marcando los tiempos y las fases del
ejercicio a los demás. Ciertos lugares de poder, detectados por
las personas sensitivas, son ideales para su realización. En sus
proximidades se encontrará cierto tipo de árboles, como robles
o encinas, así como rocas redondeadas en medio de hierba fina
y espesa, o plantas aromáticas tales como tomillo, romero o
salvia.

Desarrollo del ejercicio:

1. Unos segundos de meditación en silencio, de pie o senta-


dos.

2. Quitarse el nombre.

3. Primer vórtice de energía. Visualizamos la energía del Universo,


que gira y se arremolina sobre nosotros. Un vórtice o remolino
de esa energía, de color blanco azulado brillante, se sitúa sobre
nuestra cabeza, creando una esfera luminosa de unos 25 cm.
(un palmo) de diámetro. Mientras se forma la esfera, recitamos
en voz alta la palabra EHIÉ, (miN), El que Es, unas cinco o seis
veces. Si podemos, visualizamos la palabra escrita en hebreo en
esa primera esfera (fig. 81). Como sabemos, este nombre divino
se relaciona con la primera sefirá, Keter.

4. Segundo vórtice de energía. De la primera esfera, ya forma-


da, comienza a bajar hacia las cervicales un cordón luminoso,
hecho de la misma energía. Al llegar a ese punto, comienza a
formarse una segunda esfera, que llega desde los ojos hasta
el principio del esternón. Y mientras se forma, recitamos en
voz alta JEHOVÁ ELOHÍM (C~ii~N iiiii~), que puede traducirse
como Eterno de los Dioses, unas cinco o seis veces, visuali-
zando las palabras hebreas correspondientes en esta segunda

866 ViLLARRUBIA / HAUT / MILLERA


esfera. En este caso, la relación con el Árbol de la Vida se
establece en el nivel en el que suele colocarse la sefirá oculta
(o no-sefirá), Data.

5. Tercer vórtice de energía. El cordón continúa bajando por la co-


lumna vertebral, hasta la altura del plexo solar, lugar en el que
se forma la tercera esfera; y, mientras se forma, recitamos las pa-
labras IEHOVÁ ELOÁH VA-DAATH (r!'Vi.:l i!i,N i!ff), palabras
que significan Dios manifestado en el Conocimiento, unas cinco
o seis veces, visualizando también, si nos es posible, las palabras
hebreas correspondientes. La correspondencia en este caso se es-
tablece en el nivel de la sexta sefirá, Tiferet.

6. Cuarto vórtice de energía. El cordón luminoso descien-


de hasta los genitales, alrededor de los cuales se forma
la cuarta esfera, que llaga desde los riñones hasta medio
muslo. Las palabras a recitar cinco o seis veces y visua-
lizar son SHADAI EL JAI (~n ~N ~,w), Todopoderoso Dios
Viviente. El nombre se corresponde con la novena sefirá
del Árbol, Yesod.

7. Quinto vórtice de energía. El cordón luminoso se extiende


por ambas piernas hasta los pies, que habrán permanecido
todo el tiempo juntos y sin cruzar. Al llegar allí, se forma una
quinta esfera, con la mitad superior cubriendo los pies y la
inferior dentro de la tierra. En este caso, las palabras a reci-
tar cinco o seis veces y visualizar son ADONAI HA-ARETZ,
(riNi! ~~iN), Mi Señor de la Tierra, nombre en corresponden-
cia con la décima sefirá, Maljut.

8. Apertura al centro de la Tierra. Durante los pasos anteriores


habrá seguido entrando a través de nuestra cabeza la ener-
gía del cielo. Ahora, esta energía es enviada a través nues-
tro hacia el centro de la Tierra, que visualizaremos como el
receptáculo de todo poder: puede adoptar, según nuestras
preferencias, la forma de un lago sereno, o de una gran copa
de plata.

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 867


9. Movilización de la energía personal. Nuestra propia energía
empezará a bajar desde la cabeza a todo lo largo del costa-
do izquierdo, brazo izquierdo, pierna izquierda hasta el pie
izquierdo. De allí pasará al pie derecho, y subirá por la pier-
na derecha, costado derecho, brazo derecho, hasta la cabeza.
Haremos esta fase del ejercicio cinco o seis veces, acompa-
sándola suavemente al ritmo de la respiración: exhalando al
bajar, inhalando al subir.

10. Unión de las energías cósmicas y personales. Ahora, la


energía del centro de la Tierra empieza a subir. Al llegar a
nuestros pies se une a nuestra propia energía, y mientras
inhalamos, toda ella sube por la parte delantera de nuestra
aura, que visualizaremos en forma de huevo luminoso cuyo
radio será a la altura del pecho de la longitud de un brazo.
Al llegar a la cabeza, y mientras exhalamos suavemente el
aire de los pulmones, bajará por la parte trasera de nuestra
aura hasta llegar a los pies. Se repetirá cinco o seis veces.

11. La «ducha» de energía. La fusión de nuestra energía con las


del Cielo y de la Tierra hace que el movimiento se amplifi-
que. Ahora, la energía que viene de lo profundo sube cada
vez con más fuerza, saliendo por nuestra cabeza en forma de
surtidor, que nos envuelve en una refrescante y tonificante
ducha energética. En un momento dado, al cabo de seis o
siete respiraciones, el surtidor se hace tan alto que termina
por escapar hacia el Cielo: las energías del Padre Cielo y la
Madre Tierra se han unido a través nuestro, y el cauce ha
quedado abierto.

12. Acto de agradecimiento, despedida y volver a «ponerse el


nombre». Este ejercicio puede repetirse varias veces al día,
siendo recomendable hacerlo al levantarse y al acostarse.
Si es posible, también es bueno hacerlo al mediodía.

868 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


EJERCICIO

51. Practica el trabajo en el Pilar del Centro, hasta que


aprendas con fluidez todos los nombres hebreos asociados
a él. Después, puedes realizarlo cada vez que estimes
.oportuno.

Figura 81
El trabajo en el Pilar del Centro
Método de sanación según Israel Regardie, y su justificación cabalística

772 ---------1~
,=inrr p-cn
f!?a-.w~retz ha.~veJ) (sal/09
La energía del Universo Alto, Elevado

--------~· Ó.·,
~
(uno de los nombres
(Eh;,,¡ De Dios)
El Que Es
¡
OfflN/'11.T
(Yeho"" liiohi<1) 772-568=204
Eterno de los Dioses rm¡:h
n;,n=i m,~ rn"I'
(YeholG Slo.Í 11;1.0asth)
(1'1-il}ín)
casamiento,
desposorio
Dios manifestado en la
esfera de la mente
2+0+4= 6 14--...J
T1 ?N-,,;¡,
(Sherlda/8 Jai)
..
1
Todopoderoso El hOrntire
Dios Viviente

5+6+8=19
mn
~•av.3)
~ . , '),X
Eva,
(Adon.Jt h:1..¡¡,etz)
Madre Primordial
Mi Señor de la tierra

¡""ffl1::l'"t::/'T
(J'1a-1tterlun ha-2rotz)
El centro de la Tierra

La imagen representa esquemáticamente los cinco vórtices de energía con


sus nombres divinos asocia.dos en hebreo y sus significados. Los vórtices están
conectados entre sí media.nte un cordón de energía (representado por las fle-
chas grises verticales), que conecta a través del hombre el Cielo con el centro de

M ANUAL DE KA BBAL/\H PRÁCTICA 869


la Tierra. Posteriormente se establecen dos circuitos de energía, el primero que
baja por el interior del lado izquierdo del cuerpo y sube por el del derecho, y el
segundo que sube por delante, a distancia del borde del aura, y baja por detrás
a la misma distancia. Alfinal, un surtidor de energía nos «ducha», regresando
finalmente al Cielo. En la parte derecha de la figura humana puede apreciarse
el desarrollo cabalístico, que muestra cómo a través del hombre se produce el
casamiento, la unión mística en definitiva, entre el Cielo y la Tierra.

5.2. Piedras marinas

Si vas al mar, y tienes la suerte de estar en una playa limpia, re-


coge unas sesenta y cinco piedrecitas planas, de esas que son tan
comunes en la orilla, allí donde rompen las olas. El tamaño ideal es
de entre 1,5 y 2 cm. de diámetro. Si te es posible, una al menos de
las piedras deberá ser blanca, aunque no sea plana, y otra negra o
agujereada (suele haberlas, aunque no es fácil encontrarlas). Si no
tienes oportunidad, encarga a algún amigo que te las traiga.
Si llevan arena pegada, lávalas exclusivamente con el propio
agua del mar, y llévatelas a tu casa en una bolsa de plástico o de
tela. No deben lavarse con agua dulce, para que conserven la sal
que llevan en su superficie. Pondrás a secar las piedras extendidas
en una bandeja, dejándolas como mínimo 24 horas sin tocarlas.
Prepara una bolsita de tela o cuero, o un monedero de piel vuelta
con cremallera, lo suficientemente grande para guardarlas todas.
Cuando las piedras estén secas, escribirás en cada una de ellas una
letra hebrea, utilizando para ello un rotulador negro de punta fina no
metálica (el edding 1200 va muy bien), o, si lo prefieres, una plumilla
y tinta china negra. Como mínimo harás las siguientes letras:

2 alfabetos compl etos X 22 = 44 letras


5 letras finales X 2 = 1O "
9 letras más usuales (*) = 9 11
1 piedra blanca (vacía) = 1 sin letra
1 piedra negra o agujereada = 1 //

Total piedras = 65
870 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA
(*) Las letras que es recomendable añadir, por la posibilidad de
que aparezcan más de dos veces en una misma palabra o conjun-
to de dos palabras son: ~ (BETH), il (HE), ~ (IOD), ~ (LAMED),
~ (MEM), C (MEM final) y M (TAV). Si se recogen algunas piedras
más, puede repetirse alguna de estas letras. Por razones de como-
didad y peso no es conveniente pasar mucho de 60 piedras.
Deja secar la tinta otras 24 horas antes de usar las piedras.
No es necesario insistirte en la absoluta necesidad de que en el
trabajo de escribir las letras en las piedras debes poner la máxima
atención y todo tu amor. Si sientes que no estás en buena forma,
es mejor que lo dejes para otro día.

CÓMO USARLAS. El hebreo es uno de los idiomas auténticos,


lo que significa que la palabra tiene una relación real con la cosa que
designa. Por lo tanto, un órgano del cuerpo perfecto es aquél que está
dic"ho y escrito en hebreo. El hígado es hígado, y no ojo. El estómago es es-
tómago, y no pierna. La pierna es pierna, y no oído; y así sucesivamen-
te. Pero todos los órganos del cuerpo, todas sus funciones, proceden de
una misma célula, que contenía desde el principio toda la información.
Y un día, el programa del intestino perfecto o del corazón perfecto se
estropea, su información se degrada, y surge la enfermedad.
Ahora tienes en tu poder unas piedras en las que se ha unido
la energía de la Tierra (potenciada por el oleaje y la sal) con la del
Cielo, representada por las letras hebreas y potenciada por el sol
y el aire. Observa que la palabra hebrea para sal es M~~ (mélaj),
la cual tiene las mismas letras que CM~ (lejem), pan. Y recuerda
que el pan y la sal eran en otros tiempos los símbolos de la hos-
pitalidad al peregrino y de acatamiento al monarca; en este caso,
el valor numérico de ambas palabras, 78, nos indica de qué mo-
narca se trata. Pues con el pan y la sal se construyen aspectos
como el santuario de amor, il~i'U~ ~~~il (hejal ahaváh) y el santuario
de unidad, iMt-= ~~~il (hejal ejad). Y la confirmación nos llega al re-
ducir 78 sumando sus cifras, lo que nos lleva a 15, valor de IAH,
;,~ (pronunciado Adonaí), nombre de Dios en la 2ª sefirá, Dios-
Energía, Dios-Andrógino, a la vez Padre y Madre. La sal, pues,
es la materia que permite la manifestación en tus piedras de ese
pequeño gran milagro.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 871


Para el uso de las piedras marinas deberás disponer de una
relación de nombres de la anatomía humana en hebreo, como la
que puedes encontrar en el Diccionario Numérico Cabalístico.
En cualquier caso, si no eres terapeuta profesional no debes usar
esta técnica sin contar con un diagnóstico previo de uno de ellos
acerca del órgano u órganos dañados. Una vez que conozcas dón-
de aplicar el tratamiento, procederás de la siguiente forma:

1. Toma la piedra blanca con tu mano izquierda, y manténla


en ella mientras buscas las letras que forman la palabra del
órgano enfermo. Esta piedra limpia, por decirlo así, los restos
de antiguos programas que estropearon el original. Cuando
las tengas todas deja la piedra lulanca. Prepara un reloj con
segundero y tenlo a la vista.

2. Forma la palabra hebrea del órgano enfermo sobre la palma


de tu mano izquierda, manteniendo juntos los dedos medio
y anular y apoyando las piedras sobre ambos. En caso de que
el nombre del órgano conste de dos palabras, forma la prime-
ra apoyando las piedras sobre los dedos índice y medio. Sitúa
las piedras del tal forma que la última letra venga a caer en el
chakra del centro de la palma de la mano. Notarás el punto
por una especial sensibilidad a la presión. Mira las piedras y
observa sus formas y las de las letras escritas en ellas. Si has
practicado con las vocales hebreas y las normas de pronun-
ciación que aparecen en la I Parte de esta obra, repite un par
de veces el nombre en hebreo del órgano que estás tratando.
Esfuérzate por grabar en tu mente la imagen formada por
las piedras con el nombre del órgano enfermo. Nunca debe-
rás formar con las piedras el nombre de la enfermedad, pues
conseguirías el efecto contrario.

3. Cuenta un minuto (¡no más!) y retira las piedras. Retíralas


antes si sientes mareo o alguna sensación desagradable.
Las piedras, según han sido medidas, tienen una energía
muy fuerte y deben usarse con cuidado.

872 VJLLARRUBIA / HAUT / MILIERA


4. Si tienes una piedra agujereada (que habrás dejado sin mar-
car, al igual que la piedra blanca), la mantendrás unos se-
gundos en la mano izquierda, mientras recoges las restantes
piedras y las guardas en la bolsita. Esta piedra actuará como
un amplificador o caja de resonancia del programa correcto re-
lativo al órgano dañado.

5. Puede hacerse este ejercicio un máximo de dos veces al día,


mañana y tarde.

RECARGA DE LAS PIEDRAS. Con el uso, las letras pueden


irse desgastando y borrando. Cuando lo creas oportuno, repínta-
las y ello recargará la energía yang o celeste. Si vas al mar, o va
alguien de tu entera confianza, llévate las piedras: bastará con que
las acerques a unos 50 o 100 metros de la orilla, y las piedras se re-
cargarán de energía yin, equilibrándose ambas automáticamente.

PIEDRAS DE UN SOLO USO. Para cierto tipo de enfermeda-


des crónicas pueden elegirse piedras de mayor tamaño, de entre
5 y 10 cm., que tengan la forma aproximada del órgano a tratar:
hígado, corazón, etc. Escribe en ellas la palabra completa del ór-
gano a tratar. Para usarlas, situar la última letra de la palabra en el
mencionado chakra de la palma de la mano.

ACTITUD DURANTE EL TRATAMIENTO. Un minuto no da


para mucho, es cierto, pero siempre es mejor mantener una actitud
tranquila y relajada. Aunque no sea más que para impedir que se
caigan las piedras de la mano ...

PARA QUÉ NO DEBEN USARSE. Lo que se reprograma es el


órgano sano. Por eso, no deben usarse para eliminar enfermedades:
el principio es justamente el opuesto. No se trata de eliminar lo
erróneo, lo negativo, sino de favorecer lo positivo, lo verdadero.

OTRAS POSIBLES APLICACIONES. Se han usado las piedras


en alguna ocasión para encontrar objetos perdidos, o para salir de
un estado de confusión, con la palabra iiN (or), luz. Pueden tam-

MANUAL DE KAB BALAt-1 PRÁCTICA 8 73


bién usarse las palabras ri~
(meretz), energía, fuerza, para casos
en que nos sintamos débiles; o MM~~ (shimjáh), gozo, alegría, para
situaciones de depresión y tristeza.

EJERCICIO

52.Hazte con 65 piedras en una playa de arena limpia1 .


al Ií donde rompen las olas, y escribe en el las las letras hebreas,
tal como se indica en los párrafos anteriores. Es conveniente
que dispongas de una relación en
hebreo de nombres de ·
los diferentes órganos del cuerpo, para componerlos cuando
los necesites con las piedras. No te 'olvides de guardar las
piedras en una bolsita de tela o de cuero, o en una caja de
madera, después de cada utilización. · ·

5.3. El campo de tiempo


¿En qué punto de ti te sientes tú? En otras palabras: cuan-
do dices «yo», ¿en qué parte de tu cuerpo sientes que resuena?
Tal vez lo localices en la cabeza, a media distancia de ambas sie-
nes y a la altura del entrecejo. O quizá lo sientas en el pecho,
a la altura del corazón, o puede que en la garganta, o en cualquier
otro sitio. Lo importante es que sientas a «yo» en algún punto de
ti. Si lo sientes en forma difusa, repartido por todo tu ser, vale
también.
Una vez que lo hayas localizado, adopta una postura cómoda
(mejor donde nadie te moleste), e imagina por un momento que
«yo» sale del cuerpo, hacia delante; no muy lejos, sólo unos 25 cm.,
a la distancia aproximada de un palmo. Date entonces la vuelta y
mírate la frente. Imagina entonces que en su centro, un poco más
arriba de la línea de las cejas se abre una pequeña puerta. Como
«yo» es ahora inmaterial, puede hacerse tan pequeño como quie-
ras. Ajusta tu tamaño al de la puerta que se acaba de abrir, acércate
a ella y detente en el umbral. Mira frente a ti: hay un campo que se

87 4 VILLARRUBIA / HAUT / MILI.ERA


extiende hasta el horizonte. Observa el paisaje que tienes enfrente,
a tu izquierda y a tu derecha. ¿Cómo es, qué colores presenta, en
qué zonas se producen los cambios de color, si los hay? ¿Está verde
o seco? ¿Hay montañas? ¿Dónde? ¿Hay árboles? ¿Están verdes o
secos? Observa también cómo está el cielo: ¿hay sol, está nublado?
Mira con atención todos los detalles y grábalos en tu memoria.
Se trata de tu campo de tiempo (figura 82).
Ahora, imagina que, desde el punto en que te encuentras, en el
dintel de la puerta, hasta la línea del horizonte, el terreno se divide
en cinco bandas horizontales, paralelas a dicha línea de horizonte,
como si fuesen distintas zonas de cultivo. Empezando por la más
próxima a ti, numéralas del 1 al 5, hasta el horizonte: son los cinco
niveles del campo, cuyos significados generales se recogen en la
mencionada figura 82.
Según observas el campo, a tu izquierda están todos los acon-
tecimientos de tu pasado, y a tu derecha los de tu futuro. Unos y
otros aparecen en forma de manchas en el suelo, piedras, plantas,
irregularidades del terreno, etc. Son símbolos que, con la práctica,
aprenderás a ir interpretando.
Uno de los obstáculos más serios para el trabajo de investi-
gación y cumplimiento del tikún es el conjunto de grabaciones
no asimiladas (es decir, que han dejado algún tipo de huella,
y han originado por tanto alguna identificación, samskaras,
en definitiva) en nuestro pasado, tanto de nuestra actual vida
como de otras anteriores. Estas grabaciones pueden aparecer
también en nuestro futuro, pues el tiempo, en último extremo,
no es sino una creación de la mente. Y, mientras esas graba-
ciones estén manchando el campo de tiempo, actuarán como
rémoras que retardarán, y muchas veces impedirán, el avance
hacia la realización. Procede por tanto limpiarlas.
El campo de tiempo permite el uso de dos procedimientos rela-
cionados entre sí, aunque el primero de ellos puede usarse también
directamente.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 875


EJERCICIO

53. Prepara un cuaderno de hojas blancas (no rayadas ni


cuadriculadas). Visualiza tu campo de tiempo, y dibuja en
la primera hoja del cuaderno todo lo que veas en él. Anota
en el propio dibujo la fecha en que hiciste la observación,
y guarda un historial de tus observaciones que irás creando
según vayas realizando trabajos sobre tu campo de tiempo.
El primer dibujo debe hacerse antes de realizar ningún trabajo
de los que se proponen en las secciones siguientes.

CIELO '

.,__ _ _ PASADO
rn:Q) FUTURO----►
'"'
•<I>
: Q_
:O)
•"O
: ro
=~
l::J Linea de horizonte
Nivel 5 • Trabajo

Nivel 4 - Relaciones sociales

Nivel 3 - Familia y afectos TIE f RA


Nivel 2 - Salud física

Nivel 1 - Psicológico y espiritual 1 *


(

Figura 82
Esquema general del campo del tiempo

5.3. 1. Los colores y sus significados:


utilización para limpieza del aura

Al estudiar los procedimientos para la búsqueda del tikún


(V Parte, secc. 10.4, tabla XLI y figura 73) vimos los significados
que, según nuestra experiencia, pueden encontrarse a los 12 colo-
res esenciales del espectro, más el blanco y el negro. Recordémos-
los en la tabla LVI:

876 V1LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Tabla LVI
Los 12 colores esenciales, más el blanco y el negro:
nombres hebreos y significados

Color Hebreo Pronunciación Significados

Energía, ser, fuerza


Rojo C"'IN adóm
poder
Fortaleza, temple de
Bermellón (1) ,ww shashár
ánimo
Anaranjado cri¡, kotém Alegría, gozo
Dorado (2) i~n hupaz Sabiduría, prudencia
Amarillo ~ni zahób Inteligencia, luz

¡,¡,,• Justicia. justeza


Limón (3) yarkrák
precisión

¡,,• Salud, libertad


Verde yarók
autorresoeto
Templanza, flexibi-
Turquesa (4) ,~J noféj
lidad
Azul ,n~ kajól Amor, paz, unidad

',•J Empatía, unión con


Índigo (5) nil
los demás
Violeta ',,e sagól Espiritualidad
Magenta (6)

Blanco ¡~,
i''T.:C samík

labán
Desapego

Equilibrio, plenitud

Negro ,nw shajór Vacío, creatividad

Notas:

l. El color bermellón es un rojo apimentonado, como la sobrasada


mallorquina.
2. El dorado es un amarillo rico, con un leve toque de naranja.
3. El limón es un amarillo verdoso, o verde amarillento.
4. El turquesa es un verde azulado, como el verde mar.
5. El índigo también se llama añil, y es un azul tintado de violeta.
6. El magenta o fucsia es un rojo violáceo claro.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 877


El procedimiento para trabajar con los colores es sencillo. Antes
de entrar en nuestro campo de tiempo, elegiremos una postura
cómoda, y con ojos abiertos o cerrados, a nuestro gusto, iremos
pidiendo cada uno de los doce colores, más el blanco y el negro,
que deben aparecer en forma de círculos en nuestra mente, como
si los estuviésemos proyectando con un aparato luminoso sobre
una pantalla. Según aparezca en nuestra mente el color, y tras
contemplarlo unos instantes, diremos su nombre hebreo, y obser-
vamos si se mantiene igual o se producen modificaciones. En caso
de que el color no nos guste (porque está sucio, opaco, manchado
o descolorido, por ejemplo), a su nombre hebreo añadiremos las
palabras bahir (i~n~), que significa brillante, y tam (Ori), que signi-
fica perfecto. Y así, si nuestro verde aparece con problemas (lo que
indicaría algún trastorno de salud o falta de autorrespeto), diría-
mos las palabras yarók bahír va-tam (cm, ,~n~ ¡,,~), verde brillante
y perfecto. El método es, además de sencillo, sumamente eficaz,
si se usa con cierta asiduidad. Su objetivo se enfoca esencialmen-
te hacia el presente, hacia el momento actual. Ello nos permitirá
constatar qué colores (o lo que es lo mismo, qué aspectos) apare-
cen correctos y cuáles no, y sobre todo, en cuáles percibimos difi-
cultades para su puesta en orden; ello nos permitirá deducir que
hay aspectos en el pasado (o en el futuro) que no permiten que
el presente se limpie. En este caso será necesario trabajar sobre el
campo de tiempo.
Una vez que «entremos» en él, observaremos la impresión general
que nos produce, y dirigiendo nuestra atención, primero al pasado y
después al futuro, diremos en cada caso los nombres de los colores,
añadiendo los complementos de brillante y perfecto. Los cambios en
el campo se producirán de inmediato, aunque debe repetirse con cier-
ta asiduidad hasta que la limpieza del campo se consolide.

5.3 .2. Trabajo directo sobre el campo de tiempo

En muchas ocasiones, las vivencias que han dejado huella en no-


sotros son numerosas, hasta tal punto que han llegado a formar
una especie de «costra» que cubre por completo la totalidad o

878 VILLARRU BIA / HAUT / MI LLERA


gran parte del campo de tiempo. En este caso resulta más práctico
prescindir de la división en niveles, así como de los colores y sus
significados. El método de trabajo se puede utilizar complemen-
tado con el anterior, o lo que es más recomendable, directamente,
sin más apoyos.
El campo de tiempo, tal como lo visualizamos y aparece en
la figura 82, puede dividirse en cuatro cuadrantes por las lí-
neas del horizonte (horizontal) y del presente (vertical). La mi-
tad superior, a la que hemos llamado CIELO, recoge de forma
simbólica todos los arquetipos, ideas y creencias que informan
nuestra trayectoria vital. La mitad superior, la TIERRA, es el
soporte o receptáculo de todas nuestras experiencias. Las mita-
des izquierda y derecha, PASADO y FUTURO respectivamente,
no precisan de mayor aclaración. Hay, además, otras dos mi-
tades, no representadas en la figura, cuya divisoria sería la su-
perficie del papel o, si se prefiere, el dintel de la puerta en la
que nos situamos. Lo que está frente al observador, frente a
nosotros, esto es, todo el campo de tiempo con sus cuatro cua-
drantes, y en su caso con los cinco niveles y lo que en ellos haya,
tiene la naturaleza de algo en cierto modo ajeno a nosotros,
de objeto o cosa: sería, pues, el NO-YO. Por consiguiente, el YO lo
tendríamos a partir de nosotros hacia atrás; o mejor sería decir
que seríamos nosotros mismos. Por último, podemos pregun-
tarnos: ¿hay algo que no sea ni «yo», ni «no-yo»? La respuesta
lógica sería NO, pero como puede quedar algún recoveco sin
limpiar (¡el ego es sumamente tramposo!), completaremos el
juego con la palabra TODO, en hebreo~~ (kol).
Hay, pues, seis direcciones que representamos como los polos
de tres ejes, más una palabra que resume la totalidad del campo
de tiempo:
• Eje CIELO-TIERRA, que marca las influencias celestiales recibi-
das y las vivencias experimentadas. Incluye las tres dimensio-
nes del espacio.
• Eje temporal PASADO-FUTURO, lo ya vivido y lo que en estos
momentos aparece como probable por vivir.
• Eje SUJETO-OBJETO, o del YO y del NO-YO.
• Conjunto, el TODO.

MANUAL DE K A BBAL AI-I PRÁCTICA 879


El método de trabajo es similar al anterior, y como él, se basa
en las particulares características del idioma hebreo como autén-
tico: como cualquiera de los seis polos mencionados puede estar
manchado, puede haber recibido impurezas, es por consiguiente
susceptible de limpieza, y para ello, tras visualizar nuestra cam-
po de tiempo podemos pronunciar las palabras hebreas corres-
pondientes a cada uno de los seis polos, acompañadas como en el
método anterior de sus complementarias, bahir (brillante) y tam
(perfecto):

Tabla LVII
Limpieza de los seis polos y del conjunto del campo de tiempo
POLO Hebreo Pronunciación POLO Hebreo Pronunciación

Cielo c•~r: shamayim Tierra f"'IN áretz


Pasado .,~v 'avar Futuro ,~riv 'atíd
No-yo '~N-N~ /o-aní Yo •~N aní

CONJUNTO: TODO,~ kol

Si observamos nuestro campo de tiempo mientras pronuncia-


mos las palabras anteriores, acompañadas de sus complementa-
rias, bahir va-tam, podremos ver cómo se expande y aclara, vol-
viéndose más y más luminoso, más y más limpio conforme vamos
repitiendo el ejercicio.
Como hemos visto, puede hacerse una temurá con la palabra
~~N (an(), yo, que al permutar sus letras se transforma en rN (aín),
nada, lo que nos dice que en realidad el yo no existe, tal como
afirman las doctrinas y filosofías orientales, budismo e hinduis-
mo vedanta fundamentalmente. Por tal motivo, más de una vez
ha ocurrido que, al pronunciar esta palabra en el desarrollo de
este ejercicio, aparezca una sensación de caída libre, con el consi-
guiente mareo; por ello, es recomendable, al menos al principio,
sentarse cómodamente, o mejor todavía tumbarse para llevarlo
a cabo.

880 ViLLARRUBIA / HAUT / MI LLERA


,,
6. ACTUALIZACIÓN DEL ARBOL PERSONAL

E n muchas ocasiones, mientras impartíamos los cursos y semi-


narios, hemos oído una pregunta: «De acuerdo, ese es mí Árbol
personal, pero ¿cómo lo cambio? ¿Qué tengo que hacer?» Y siempre
hemos dado la misma respuesta: el Árbol no se cambia, el Árbol se
cumple. Es el listado de un programa que elegimos antes de nacer,
quizá como consecuencia de acciones realizadas en vidas anterio-
res (lo que el hinduismo llama karma), y que es la herramienta más
adecuada para cumplir el tikún. Y, como el tikún es una misión sa-
grada, la herramienta para cumplirlo también debe serlo, pues no
se llega a lo sagrado desde lo profano.
El programa, pues, lo cumpliremos: aceptando la voluntad del
Cielo o negándonos a ello, lo que hará que las consecuencias sean
cómodas o incómodas, pero lo cumpliremos inexorablemente.
El maestro Antonio Blay repetía una frase que le escuchamos mu-
chas veces: ·»Estamos condenados a ser felices» . Podemos elegir el
camino directo o el sendero tortuoso, pero nuestro destino final es
la plenitud del Ser, de la Luz y del Amor, Sat-Chit-Ananda, según
la conocida expresión hindú.
No procede, pues, cambiar el programa de vida, pero sí, en
cambio, vigilar su cumplimiento, su desarrollo. Es algo, no sólo
posible, sino también recomendable. Y para ello proponemos
también tres herramientas, dos de ellas sobradamente conocidas,
el tarot y el 1-Ching, y la tercera, a la que llamamos «Rocío», crea-
ción nuestra a partir de la experiencia de muchos cursos.

6. 7. Actualización con el tarot


El juego de la Frontera

El tarot puede considerarse como Kabbalah en imágenes. Tal como


vimos al analizar los significados de las sefirot, los senderos subjeti-
vos y las Tríadas, hay una profunda relación entre ambos sistemas.
Por esa razón puede utilizarse el tarot para aclarar y «poner en su
sitio» el trabajo que estemos realizando en relación con nuestro
Programa de Vida y el cumplimiento del tikún. Por la potencia de

M ANUAL D E KABBALAH PRÁCTICA 881


sus imágenes y símbolos, el tarot admite muchas formas de uso,
bastantes de ellas proclives a apartar a sus usuarios del camino
espiritual.
Puesto que el objetivo de toda vía espiritual auténtica es la rea-
lización de la consciencia del Absoluto, la mayoría de las tradicio-
nes han insistido una y otra vez en la barrera que el yo representa
para ello. Pues decir yo es lo mismo que plantear la separación
respecto al no-yo, esto es, al resto del Universo, y por consiguiente
negar desde la raíz la posibilidad de alcanzar dicha consciencia de
Absoluto.
Por otra parte, es inevitable llegar a la Unidad, que está siempre
presente sin que podamos apartarnos de ella, pues, como dice el
Tao-te-King, «el Tao del que alguien puede apartarse no es el verdadero
Tao». Por esta razón se ha creado el Juego de la Frontera, para in-
vestigar el estado actual, de este instante, del yo en sus relaciones
con el no-yo, o, en otras palabras, el estado de transparencia u opa-
cidad de la frontera que separa al yo del no-yo.
El juego es bien sencillo. Usaremos una baraja completa de ta-
rot, con sus 78 cartas, pues necesitaremos obtener información res-
pecto a los hechos externos (cartas de palo del as al 10), a nuestro
mundo interior (arcanos mayores) y a las relaciones entre ambos
(figuras de corte: reyes, reinas, caballeros y sotas).
Bastará, por tanto, que tras haber mezclado bien los naipes, sa-
quemos tres cartas al azar, y sin mirarlas, determinemos a priori
cuál de ellas representará el yo, cuál el no-yo y cuál la frontera.
Después las daremos la vuelta.
Para apreciar el significado de cada naipe, nos remitiremos a
la II Parte de la presente obra, siendo preferible utilizar el sim-
bolismo asociado a las diferentes partes del Árbol de la Vida.
Observaremos, sobre todo, si cada una de las tres cartas está en
su sitio. Pues, según queda indicado, los arcanos mayores re-
presentan nuestro mundo interior, por lo que su lugar natural
es el yo; las cartas de palo del as al 10, por su parte, al repre-
sentar el mundo exterior, tienen su lugar natural en el no-yo;
y finalmente, las figuras tienen su puesto en la frontera. Otra
solución indicará, bien que el no-yo se mete en el terreno del yo,
o bien que se da la situación opuesta; también puede ocurrir

882 V1L1. ARRUBIA / HAUT / MILLERA


que la frontera esté siendo vivida como impuesta desde el exte-
r ior (cartas de número) o querida por nosotros (arcanos mayo-
res) ... Hay, en fin, múltiples interpretaciones, en todo caso de
una riqueza y de una precisión que nos proporcionará buenas
pistas respecto a nuestro Programa de Vida.
El juego admite una variante más compleja, usando nueve
cartas. Tras barajar y cortar varias veces, sacaremos al azar
nueve cartas, que colocaremos boca abajo formando un cuadro
de 3 x 3. Determinaremos que las tres más próximas a nosotros
corresponden al yo, las tres más lejanas al no-yo, y las tres in-
termedias al enlace entre yo y no-yo, la frontera. Por otra parte,
las cartas de la columna de nuestra derecha serán las cartas del
sí, las de nuestra izquierda las cartas del no, y las de la colum-
na central las cartas del reto. ¿Qué significan estos tres concep-
tos? El sí se refiere a aquello que en estos momentos deseamos,
y que por lo tanto sentimos como carencia, como algo que nos
falta; el no corresponde a lo que estamos rechazando, y por lo
tanto a nuestras vivencias actuales no asumidas; y el reto, a la
actuación que se nos propone en estos momentos para crecer.
Ahora damos la vuelta a las cartas y las interpretamos con-
forme a los principios ya conocidos, según los significados re-
cogidos en la II Parte. Y seguidamente nos preguntamos: ¿están
todas las cartas en su fila correcta? Para que así sea, la fila del
yo debería estar formada exclusivamente por Arcanos mayo-
res; la intermedia, exclusivamente por figuras de corte; y la del
no-yo, sólo por cartas de número de cualquiera de los cuatro
palos. Es una solución poco probable, pero que puede darse;
en este caso, la interpretación es la que resulta de la posición
de cada carta en su fila y su columna correspondiente. Pero lo
normal es que hayan salido cartas que estén en una fila inade-
cuada: en este caso podemos intentar intercambiar esas cartas,
para acercarnos lo más posible a lo correcto. De cómo se realice
ese intercambio podremos extraer también nueva información
que nos será sumamente útil. Conviene llevar un registro de las
tiradas, que no deberían ser demasiado frecuentes: no más de
tres o cuatro veces al año, salvo que ocurran acontecimientos
importantes en nuestr a vida.

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 883


La figura 83 recoge un esquema de la posición ideal en la tira-
da de 9 cartas. En todo caso, es recomendable tener en cuenta las
correspondencias entre diferentes niveles que se deducen de la
Escala de Jacob (v. II Parte, secc. 3.9). En este sentido debe recor-
darse que el nivel de Atzilut corresponde en los arcanos menores
al palo de bastos, el de Briah al de copas, el de Yetzirah al de es-
padas y el de Assiyah al de oros. Por su parte, las sefirot se corres-
ponden con los números del 1 al 10. También debe de tenerse en
cuenta la posible correspondencia que puede afectar a las Tríadas
de la Memoria (Reina de Bastos) y de la Inserción en el Mundo
(Sota de Oros), en relación, respectivamente, con las de las Raíces
(Rey de Bastos) y la Fe (Rey de Copas) (v. II Parte, secc. 3.10.7).

884 ViLLARRUBIA / HAUT / MILLERA


(') (')
Q '. o
,- ,· ,-
e: :O-V/ Ice
.e:
3: 3:
' :z (') /z
> o . ·►

3:
Z'
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o
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,- ONTE ,-
o
m
,-

ó
z Y8. (/)
p 1-4.,
'

Figura 83
Esquema de la tirada de 9 cartas del Juego de la Frontera

6.2. El /-Ching y la Kabbalah


Aunque separadas por un espacio y un tiempo vastos, las tradi-
ciones cabalística y taoísta presentan múltiples concordancias,
lo que sugiere un remoto origen común a ambas. Ello nos permi-
te la utilización del más antiguo sistema oracular conocido, el 1-
Ching, «Libro de las Mutaciones», como una valiosa herramienta
para actualizar el Árbol nativo y verificar el nivel del cumplimien-
to del propio tikún, una vez que se ha conocido, mejor sería decir
descubierto, su verdadera naturaleza.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 885


6.2.1. La actualización del Árbol nativo mediante el J-Ching
Otro de los procedimientos para actualizar el Árbol personal usa
el antiquísimo método del 1-Ching, que nos permitirá conocer de
qué forma estamos cumpliendo nuestro tikún.
La tradición china, en su vertiente taoísta, se basa en los dos
conocidos principios de Yang y Yin, lo masculino-activo-lumino-
so-expansivo y lo femenino-pasivo-oscuro-contractivo. Ya hemos
tenido ocasión de trabajar con estos principios al estudiar las po-
laridades del Árbol de la Vida, y especialmente lo relativo a los
pilares de la Misericordia y la Severidad, y también las polarida-
des de las sefirot y las Tríadas. Verdaderamente, hay profundos
entronques entre la Kabbalah y el taoísmo, entronques que vamos
a aprovechar para la actualización del Árbol nativo.
Para ello, utilizaremos el Libro de los Oráculos, el 1-Ching, res-
pecto al cual tuvimos una aproximación en la II Parte de la pre-
sente obra, y aunque no es nuestro propósito profundizar en ese
fascinante método oracular, será útil conocer algunos principios y
conceptos básicos:
• Los hexagramas. Se trata de conjuntos de seis líneas horizonta-
les, enteras o partidas, que, en número de 64, abarcan todas las
situaciones posibles por las que puede pasar el ser humano.
• Líneas enteras y líneas partidas. Las enteras son yang, activas, fuer-
tes y luminosas. Las partidas son yin, pasivas, débiles y oscuras.
• Forma de hacer la consulta. Se utilizan tres monedas iguales,
siendo preferibles las que tienen un signo masculino por una
cara y femenino por la otra. A este respecto son buenas las an-
tiguas monedas de 100 pesetas, ya que la cara del rey aporta la
polaridad yang, y el escudo, por su carácter pasivo (defensivo)
la yin. De las actuales, pueden servir las españolas (también
las belgas) de 1 y 2 €, pues tienen una cara yang (las efigies de
los respectivos reyes en ambos casos) y una cara yin (el mapa
de Europa). Daremos a cada una de las caras yang un valor de
3 puntos, y a las yin un valor de 2 puntos. Ahora arrojaremos
las tres monedas, y podremos obtener uno de estos cuatro re-
sultados:

886 V!LLARRUBIA / HAUT / M!LLERA


3 caras yang = 3x3 = 9 puntos
2 yang+ 1 yin = (2 X 3) + 2 = 8 puntos
1 yang+ 2 yin = 3 + (2 X 2) = 7 puntos
3 caras yin = 3x2 6 puntos

• Polaridad. Los resultados impares (7 y 9) tienen la polaridad


yang, y los pares (6 y 8) la yin. A su vez, los resultados inter-
medios (7 y 8) se consideran pequeños, y los extremos (6 y 9)
grandes. Los resultados yang proporcionan una línea entera, y
los yin una línea partida.
• Anotación del resultado. Una vez obtenidos los seis números,
dibujaremos las líneas, enteras o partidas según los números
hayan sido impares o pares, siempre empezando por la línea
inferior y terminando por la de arriba.
• Mutación. Los resultados extremos o grandes (9 y 6) propor-
cionan líneas mutantes; es decir, un 9, que origina línea entera,
proporciona también una línea partida que estará en la misma
posición de un segundo hexagrama; y de la misma forma, el 6,
que origina línea partida, proporciona también una línea entera
de ese segundo hexagrama. Las líneas procedentes de resultados
intermedios o pequeños (7 y 8) permanecen invariables en el se-
gundo hexagrama. Si la tirada no contiene ningún 6 ni ningún 9
no hay mutación, y por lo tanto no habrá segundo hexagrama.
• Localización del hexagrama en el libro del 1-Ching. Cada
hexagrama está formado por dos trigramas, o conjuntos de
3 líneas: el superior y el inferior. La tabla LXIII permite localizar
fácilmente el número del hexagrama.
• Cielo previo y cielo posterior. Aplicaremos estos conceptos de
una forma ligeramente diferente a como lo hace el I-Ching, que
deberá ser consultado en todo caso por quienes deseen profun-
dizar en este tema. En nuestro caso, el cielo previo se refiere a
la situación personal antigua que originó la situación presen-
te, y también la trayectoria desde el pasado hasta el presente.
Por su parte, el cielo posterior se refiere a la situación presente y
su proyección hacia el futuro.
• Aplicación al Árbol nativo. La figura 84 es un Árbol de la
Vida colocado sobre un círculo graduado en 64 partes con dos

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 887


notaciones numéricas. La exterior aparece sin orden aparente,
aunque en realidad sigue la secuencia de una mutación orde-
nada de las líneas. La interior, del 1 al 64, tiene el mismo orden
con el que aparecen descritos los hexagramas en el libro del
1-Ching («secuencia del rey Wen»). La aplicación al Árbol se
hará trazando vectores (líneas) de un color para el hexagrama
(o los dos hexagramas, si hubo mutación) que unan el centro
del Árbol con los números exteriores correspondientes, y con
otro color diferente uniendo el centro con los mismos núme-
ros del círculo interior. Tendremos ahora dos (o cuatro) líneas
que atravesarán sefirot, senderos, Tríadas y, eventualmente,
puntos de cruce. La interpretación deberá ligar los significa-
dos de los hexagramas con las partes del Árbol atravesadas
por los vectores resultantes. También deberá tener en cuen-
ta las aperturas de los ángulos formados por los vectores de
ambos cielos, y compararlos entre sí: ¿Se está produciendo
apertura o cierre? ¿A qué dirección apunta el ángulo de los
vectores del cielo previo, y a cuál el del cielo posterior? Como
el ángulo se puede medir en las dos direcciones del círculo se
elegirá siempre la que forme una abertura menor; la máxima
apertura, por tanto, es de 180 grados. También prestaremos
gran atención a los cambios de dirección marcados por los
vectores de uno a otro cielo, pues ellos indicarán cómo van
cambiando nuestras expectativas conforme el Programa de
Vida se va desarrollando.
• Periodicidad y ambiente de la consulta. Queda al arbitrio
de cada uno y a su sentido común. En general se recomienda
que no se usen métodos oraculares más de una vez al mes.
En nuestro caso, lo recomendable sería una consulta cada
tres meses, al principio de cada una de las cuatro estaciones.
En cuanto al ambiente, siempre se obtendrán mejores y más
fiables resultados si se dedican unos minutos previos a medi-
tar sobre el propio tikún y se elige un sitio tranquilo para hacer
la consulta.
• Libros recomendables: el mejor es el de Richard Wilhelm, aun-
que sus comentarios son de gran complejidad y su precio algo
elevado. Si no se desea profundizar hay otras obras de menor

888 VILLA RRUBIA / HAUT / MILLERA


coste que sirven perfectamente a los fines de actualizar el Árbol
personal.

Tabla LVIII
Clave para localizar los hexagramas del I-ching

ARRIBAq = --
-- -- --- -
- --- -- --- -- -- -- --- - --
ABAJO
JJ CH1EN CHEN K'AN KEN KUN SUN LI TUI

1 34 s 26 9 14
CH1EN=
-== 11 43

--- --
CHEN 25 51 3 27 24 42 21 17
K'AN 6 40 29 4 7 59 64 47
KEN -- -
-- 33 62 39 52 15 53 56 31
K'UN --
--
-- 12 16 8 23 2 20 35 45

SUN --- - 44 32 48 18 46 57 so 28
LI
--- - 13 55 63 22 36 37 30 49
TUI
--- - 10 54 60 41 19 61 38 58

Una vez obtenido el hexagrama, y en su caso otro más resul-


tante de la mutación del primero, buscar en la intersección de
los dos trigramas correspondientes el número de orden para su
búsqueda y lectura del oráculo en el tratado.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 889


13
49

3
27 24 2 23 4

Figura 84
Actualización del Árbol de la Vida personal mediante el /-Ching
En el exterior del círculo, números de los hexagramas del Cielo Previo.

6.2.2. Actualización del tikún

Para realizarla se usará un segundo círculo, graduado como el an-


terior, pero en el que el Árbol de la Vida ha sido sustituido por una
división en seis sectores (fig. 85), que comprenden 10 u 11 números
de hexagramas en cada uno de los dos círculos, exterior e interior.
Los pasos a dar serán los siguientes:

890 VILLARRUBIA / H AUT / MILLERA


• Colocar en el área entre los dos círculos anteriores las letras he-
breas resultantes de la conversión de los datos originales. Cuan-
do aparezcan letras árabes (caso de datos originales comprendi-
dos entre 23 y 28, ambos inclusive), se pondrán acompañando a
las primeras resultantes hebreas, bien directamente, bien como
equivalentes hebreas, si las hay (Tabla XXXIX).
• Las letras se colocarán en las casas correspondientes, según el
dato original del que procedan:
l. Letra/ s resultante/ s del nombre de pila, en la Casa del
Hombre.
2. Letra/ s resultante/ s del apellido paterno, en la Casa del Pa-
dre.
3. Letra/ s resultante/ s del apellido materno, en la Casa de la
Madre.
4. Letra/ s resultante/ s del día de nacimiento, en la Casa del
Trabajo.
5. Letra resultante del mes de nacimiento, en la Casa de la
Luna.
6. Letra/ s resultante del año de nacimiento, en la Casa del Sol.
• Este diagrama así confeccionado es personal e invariable, a se-
mejanza del Árbol de la Vida nativo.
• Lanzar las monedas como en la actualización del Árbol nativo,
y trazar los vectores siguiendo las mismas instrucciones que en
el caso anterior. Consultar el I-Ching, y relacionar los significa-
dos con los de las letras hebreas (o árabes) de las casas en las
que se tracen los vectores.
• En este caso, la consulta al I-Ching nos dará pistas sobre los
aspectos relativos al cumplimiento del tikún que están siendo
particularmente activos en el momento presente.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 891


Figura 85
Actualización del tikún a través del I-Ching
Misma clave de números que en la figura 84

¿Por qué puede utilizarse el 1-Ching como método de actualiza-


ción del Árbol de la Vida personal y del tikún?
Aunque el 1-Ching se ha venido utilizando con variados fines,
su verdadera esencia debe ligarse con toda la filosofía taoísta, lla-
mada así porque arranca del concepto de TAO. ¿Qué es el Tao?
El propio texto básico de esta doctrina, el Tao-Te-King, avisa desde
su comienzo (fragmento I) de la imposibilidad de definirlo, cuan-
do indica: «El Tao que puede ser definido no es el verdadero Tao».
Si observamos el ideograma chino que indica la palabra «TAO» ve-

892 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


remos que está formado por la combinación de otros dos: ch'o, que
significa pie caminando, lo que indicaría algún tipo de camino, y
shou, que significa cabeza, lo que implicaría la idea de pensamiento,
y daría al conjunto la de una «ruta de tipo espiritual» (figura 86).

---
;:(_... +

TAO CH'O SHOU


Figura 86

Así pues, la utilización del I-Ching, en combinación con el Ár-


bol de la Vida, encuentra su aplicación correcta en la investigación
de nuestro estado y grado de cumplimiento del tikún. En este sen-
tido, conviene recordar ahora las palabras de Rumi (v. V Parte,
cap. 3), tal como las escribió en uno de sus poemas:

Yo dije: «Muéstrame la escalera, que pueda subir hasta el cielo».


Él dijo: «Tu cabeza es la escalera, pon tu cabeza bajo tus pies».

Cuando coloques tus pies sobre tu cabeza, colocarás tus pies sobre la
cabeza de las estrellas; cuando te abras paso por el aire, pon tu pie sobre
el aire, así ¡y adelante!

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 893


6.3. El Rocío

Se trata de un conjunto de 39 cartulinas blancas de 8 x 5 cm. en las


que dibujaremos los siguientes símbolos:
• 22 cartulinas llevarán cada una de las 22 letras hebreas, acom-
pañada de una breve leyenda en la que escribiremos el valor
numérico, los significados y las correspondencias según el
Sefer Yetzirah, tal corno han sido expuestos en la presente
obra.
• 5 cartulinas llevarán las 5 letras finales, esto es, 1, C, ¡, :¡, i',
acompañadas de la misma leyenda que las correspondientes
letras comunes, más la indicación del valor numérico corno
letra final.
• 10 cartulinas llevarán dibujados sendos círculos, de unos
3 cm. de diámetro, aproximadamente, que colorearemos con
los colores de las 10 sefirot correspondientes al Mundo de la
Creación, Briah. En este sentido, al ser cuatro los colores de
la 10.ª sefirá, Maljut, se suelen colocar en cuatro sectores cir-
culares en aspa, siendo el superior de color amarillo limón,
el derecho verde oliva, el izquierdo bermellón y el inferior
negro moteado de oro.
• 1 cartulina en la que dibujaremos de forma esquemática el
Árbol de la Vida, preferentemente a colores.
• 1 cartulina con la leyenda en hebreo =,io rN(ayin soj), que,
corno sabernos, significa infinito.
Observemos que la superficie de cada cartulina es de 8 x 5 = 40 cm2,
mientras que el número de cartulinas es 39. La diferencia, 1, alude
a la necesidad de hacernos transparentes, de fluir.
La palabra ~~ (tal), de valor 39, significa precisamente rocío.
El juego puede usarse, o bien sacando al azar una cartulina y con-
sultando la información que contenga, o bien de forma semejante
al juego de la frontera, en su modalidad de 3 cartas. En todo caso,
siempre deberemos tener presente el objetivo de la consulta, cual
es el cumplimiento del Programa de Vida y del tíkún.
Las láminas IV a XIII, al final de la presente obra, contienen un
modelo recortable a color del Juego del Rocío. Es recomendable
pegar cada una de las hojas en un papel coloreado, liso o con di-

894 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


bujo pequeño, a gusto de cada uno, como respaldo de las cartas,
antes de recortar cada una de ellas. Una vez recortadas se deben
plastificar, y después recortar cada cartulina plastificada, dejan-
do a todo alrededor un margen de unos 2 mm. para evitar que
se despeguen. Por último, se debe guardar el juego en una cajita
de cartón o madera construida ex profeso, o bien en una bolsa de
terciopelo o piel.

7. RECUPERAR LA MEMORIA

l trabajo de Kabbalah, como el de cualquiera otra vía es-


E piritual, no es posible sin una previa limpieza de fondos.
Cada uno a su manera y con sus propias palabras, dos maes-
tros contemporáneos, el francés Arnaud Desjardins y el espa-
ñol Antonio Blay, han insistido una y otra vez en la necesidad
de purificar el inconsciente. Con su particular ironía, Antonio
Blay comparaba el camino espiritual con un viaje en globo ae-
rostático. «Pero el globo no vuela -decía- mientras la barquilla
tenga un exceso de lastre».
Gran parte de los obstáculos que encontramos para cum-
plir nuestro Programa de Vida y nuestro tikún arrancan de he-
chos dolorosos vividos en el pasado, en la infancia unas veces,
en vidas anteriores otras, en el pasado reciente algunas. Por
eso es necesaria la reconciliación con nuestro niño interior, vol-
ver atrás y recuperar lo que dejamos en el camino. «Quesef»,
el hermoso relato de Carmen Haut que sigue a continuación,
es una muestra de esta necesidad de recuperar y amar nuestro
pasado.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 895


QUESÉF

(de la obra «Cuentos del sueño lúcido», Mª del Carmen Haut.


Ver referencias bibliográficas)

Érase una vez ...


. . .un monedero que dormía en un rincón de un armario,
sin que nadie lo utilizara. Cada vez que veía entrar la luz, sabía
que alguien abría la puerta de su encierro, y él se ilusionaba pen-
sando que, tal vez, sería ese el momento, la oportunidad de salir
de allí. Pero no era así: nadie se acordaba de que existía.
Recordaba como llegó a aquel lugar. Una mujer madura lo había
arrojado allí, con un gesto de desprecio; quizá porque se lo había
regalado una vecina como un detalle, al volver de sus vacaciones.
Posiblemente lo había comprado en un tenderete de la calle y sin
duda lo había utilizado, pues llevaba en su interior un arrugado
billete de autobús; así pues, no era un regalo que su vecina hubiese
comprado pensando en ella, sino un objeto que se da a cualquiera
una vez usado. O quizá fue a parar al fondo del armario a causa del
olor más bien desagradable que la piel de que estaba hecho despe-
día, además de ser áspera al tacto, lo que producía una sensación
un tanto repelente. Tenía la ventaja de ser pequeño y manejable,
pero sus colores apagados no lo hacían precisamente atractivo.
Su futuro no parecía, pues, demasiado brillante.
El monedero ansiaba ser querido, tocado, necesitaba unas ma-
nos que le transmitiesen el sentimiento de que era útil. Le habría
gustado ser abierto y cerrado, sentirse repleto de monedas y oír la
música que producían al chocar unas con otras. Pero sobre todo
anhelaba viajar, sentirse transportado en un bolsillo de un sitio
para otro.
Se habría resignado a permanecer en aquel olvidado lugar si no
fuera por ese arrugado billete de autobús que guardaba en sus entra-
ñas, y que continuamente le recordaba cuál era su utilidad. Sabía que
tenía una misión importante, la de llevar la energía que simbolizaba la
riqueza de aquí para allá; y sin embargo, ¡se sentía tan pobre!
No era de nadie, no pertenecía a nadie, era un monedero olvi-
dado. La idea de permanecer así, en el olvido, para siempre, le ha-

896 ViLLARRUBIA / HAUT / MILLERA


cía sentir una angustia difícilmente soportable. Por eso, cada vez
que percibía la luz en su piel, sabía que alguien buscaba algo en
el armario, y procuraba llamar su atención por todos los medios,
ensayando algún torpe movimiento ajeno por completo a su na-
turaleza, sin conseguir otra cosa que lanzar su concentrado olor
a cuero mal curtido a la nariz del visitante, que se apresuraba a
cerrar las puertas de aquella cárcel para apartarse de tan desagra-
dable experiencia.
En cualquier caso, era difícil que alguien pudiese verlo, pues
había quedado atrapado detrás de la cajonera, dejando asomar
sólo una pequeña porción de su entumecido cuerpo.
A veces soñaba, preguntándose cuál habría sido su suerte si hu-
biera pertenecido a alguien, a un ser humano cualquiera, en vez
de ser un objeto olvidado y sin dueño. Y durante uno de esos mo-
mentos de ensoñación, mientras añoraba ser encontrado, sucedió.
Lo que nunca habría podido imaginar, unas manos pequeñas y
suaves que le sacarían de su olvido, era justo lo que estaba ocu-
rriendo en aquel mismo instante.
-Abuela, ¿qué es esto? -La pequeña María observaba fasci-
nada una lágrima que estaba brotando de aquel objeto. El monede-
ro no podía reaccionar, ¡sólo sentir! ¡Quién sino un niño puede ver
aquello para lo que el ojo adulto es ciego!
-Es un monedero, anticuado y apestoso. ¡Ve a tirarlo, pe-
queña!
-¡No, abuela, por favor! -suplicó la niña- A mí me gusta su
olor, huele a animalitos. ¿Puedo quedármelo?
-¡Está bien! Nunca entenderé por qué a los niños les gustan
siempre las cosas más destartaladas.
María somió mirando su tesoro, mientras sus pequeñas manos lo
acariciaban una y otra vez. Lo abrió y cerró varias veces, haciendo
correr con esfuerzo aquella cremallera atascada por el olvido. A sus
cuatro años, el encuentro con aquel monedero, su olor, su tacto, le ha-
blaban de emocionantes aventuras que podrían empezar a suceder en
aquel mismo instante. Como dándole la razón, el arrugado billete de
autobús, durante tanto tiempo dormido en las entrañas del monedero,
pareció desperezarse una de las veces que María lo abría. Con cuida-
do, la niña lo sacó de su escondrijo y lo extendió ante sus ojos:

MANUAL DE KABBAI.AH PRÁCTICA 897


-¡Éste será tu carnet de identidad, yte llamarás Quesef!-No
sabía por qué le había llamado así, pero el nombre le gustaba. Lo
repitió varias veces, saboreando el sonido: -Quesef. Quesef.
Quesef. Quesef ...
El recién bautizado Queséf se encontraba con su sueño hecho
de repente realidad. Jamás pudo imaginar tanta suerte. Ninguna
mano adulta habría sido capaz de tratarlo de forma tan reveren-
te, de darle tanta importancia, tanto amor, tanto diálogo. Pues,
aunque Queséf no podía hablar, era a su manera un gran comu-
nicador para quien supiese escucharle, y evidentemente María
sabía escuchar. A ningún adulto se le hubiera ocurrido ponerle
nombre propio a un monedero, pero María escuchó su lamento
silencioso, y aplicó el bálsamo curativo en la herida. Tras años
de olvido, ahora Queséf era alguien, y entre él y María el amor
fluyó, un amor hecho de pequeños detalles y de complicidades
compartidas.
María decidió que Queséf sería el mejor guardián de sus teso-
ros, y por ello trasladó al interior de su nuevo amigo un caramelo
que guardaba en el bolsillo delantero de su vestido. Al recibir al
visitante, Queséf preguntó:
-¿Eres una moneda? ¿Y por qué estás envuelta en papel?
-No, no soy una moneda, y mi labor es endulzar la vida de
los niños, pues ellos no entienden las amarguras de los mayores.
¿Sabes tú de esas amarguras?
Queséf quedó callado, saboreando sus recuerdos, y aspiró con
cada poro de su piel aquel olor a fresa que inundaba su espacio.
El caramelo sintió que había tocado sin querer una herida del mo-
nedero, e incómodo se removió en su envoltura de papel.
-Comprendo -dijo, por decir algo. Queséf agradeció el ges-
to, y dejó escapar una lágrima, que penetró a través de un hueco
del papel hasta el cuerpo de fresa del caramelo y se fundió con él.
Para Queséf era toda una novedad el sabor a fresa que le estaba
inundando.
La pequeña mano de María rescató el caramelo de su encierro.
A modo de despedida, Queséf le dijo:
-¡No te olvidaré! -Pero el caramelo le replicó:
-No me recuerdes, saboréame.

898 VILLARRUBIA / H/\UT / MILLERA


Al cabo de un tiempo, Queséf recibió de María un pequeño can-
to rodado, acompañado de un mensaje:
-¡Eres una joya preciosa y te guardaré con muchísimo cuida-
do! ¡No quiero perderte!
-Pero no eres una joya, sólo eres un canto rodado ... -obser-
vó el monedero.
-Según para quién, -respondió el canto-. Soy la joya de
María, y para ella soy maravilloso. Y hoy, ella es mi princesa.
-¡Es verdad, brillas como un diamante! -exclamó, sorpren-
dido, Quesef.
-Los ojos de María me han convertido hoy en uno, y mis des-
tellos han iluminado su rostro. De un mismo sueño nos hemos
alimentado los dos.
Quesef preguntó :
-¿No es eso engañarse?
-No, esto es vivir. Ayer era un canto rodado, y hoy me toca ser
diamante, -respondió la piedra- si a alguien le sirvo como tal.
-Pero ... ¿y después, qué? -insistió el monedero.
-Después ... cuenta a los que me sigan en tu vientre, si te
apetece hacerlo, que una vez guardaste la joya más preciada de
María. Pero hoy no existe el «después», sino sólo el «ahora».
Iba pasando el tiempo, y el amor y las caricias de María trans-
formaron la áspera piel de Quesef en una tentación aterciopela-
da, a la vez que sus colores, antaño apagados destellaban ahora
en suaves aguas. Recordaba su encierro en aquel oscuro arma-
rio y las ideas que le llenaban, cuando pensaba que su utilidad
era exclusivamente la de guardar dinero, sin imaginar su feli-
cidad actual, hecha de amor y embarcada en el aprendizaje a
que le estaba sometiendo aquella encantadora maestra llamada
María. Todavía no había conocido a ninguna moneda, ni si-
quiera de las más pequeñas, las humildes fabricadas de barato
aluminio. En cambio, todo lo que Quesef había ido guardando
eran riquezas de incalculable valor que María, como si siguiese
un plan de enseñanza cuidadosamente programado, le entre-
gaba durante un tiempo, para luego ser sustituidas por otras
todavía mejores. Aquellos tesoros le aportaban a Quesef subli-
mes conocimientos, pero quedaban en casi nada ante los monó-

MANUAL DE KABBALAI-I PRÁCTICA 899


logos llenos de una extraña seguridad que María impartía a su
monedero, con explicaciones, de una visión muy especial, por
cierto, acerca del mundo y de los seres que lo pueblan.
Ahora era un pequeño frasco de colonia el nuevo compañero
de Quesef:
-Hola, Quesef, ¿cómo estás?
-¿Cómo sabes mi nombre? -preguntó, sorprendido, el mo-
nedero.
-Tú también te transparentas, lo mismo que yo, y por eso
puedo reconocerte. Tu piel resulta para mí transparente y no in-
terfiere en mi visión ya que, como ves, soy de cristal, aunque mi
esencia es el perfume.
-¿Quieres decir que yo podría ver más si fuese transparente?
-preguntó, admirado, el monedero.
-Quiero decir que deberías filtrar tu visión a través de tu
piel, para que puedas percibir la «esencia». -respondió el frasco
de colonia.
-¿Y por qué tendría que ver el interior de los demás? Al fin y
al cabo, eso pertenece a la esfera privada de cada cual. -El mo-
nedero se sentía confuso.
En ese momento, María tropezó y cayó al suelo. El monedero
quedó bajo su cuerpo; cuando se levantó y lo recogió, percibió una
intensa fragancia que provenía de Quesef.
-¡Mmm, qué bien huele! -María lo acercó a su nariz; des-
pués, lo abrió y observó los cristales rotos. -¡Qué pena, se ha
roto! Pero ahora Quesef huele bien-. Se dirigió a la cocina,
buscó el recipiente de la basura y sacudió en él los cristales
rotos. Entre tanto, el monedero se estaba despidiendo de su
efímero huésped:
-Adiós, amigo, yo me he beneficiado de tu esencia; ¿puedo
hacer algo por ti?
-Difunde mi mensaje. Cuéntale al mundo que para realizar
la propia obra debemos romper sin temor nuestras limitaciones.
Mi obra era perfumarte, y eso es lo que he hecho.
Era agradable la música de las monedas que María deposi-
taba por primera vez en su monedero, y Quesef intuyó, más
que supo, que aquello era dinero. Tras los saludos de rigor,

900 VII.LARRU BIA / HAUT / MILLERA


como monedas y monedero de buena crianza, una de ellas pre-
guntó:
-¿Eres pobre?
-No, ¿por qué lo preguntas?-contestó Queséf.
-Tienes poco dinero. -contestó con aire crítico la moneda.
-Sí, es verdad, pero sé de diamantes, sabores, amores y esen-
cias; y también sé de dolores, a pesar de que vosotras sois las
primeras monedas que recibo en mi interior.
-¿Y cómo es que conoces tanto si no viajas? Nosotras vamos
aprendiendo según pasamos de mano en mano, viajando de acá
para allá. En cada lugar y en cada mano siempre se aprende algo
nuevo, pero, la verdad, nunca había oído que se pudiera adquirir
tanto conocimiento sin moverse. -La voz de la moneda sonaba
escéptica.
-El hombre cree que ha de buscar una vía que le conduzca
a la sabiduría, sin darse cuenta de que la sabiduría consiste en
darse cuenta de que está desde el principio en el lugar adecuado
para encontrarse con ella. -A lo largo de todos aquellos años,
primero de soledad y de abandono, y después compartiendo su
vida con los pequeños objetos que María le iba entregando, Queséf
se volvía más y más un verdadero maestro. Se dirigió a aquella
moneda:
-Pero dime, cuéntame algo de ti, de todas vosotras.
La moneda buscó en sus recuerdos palabras hermosas que con-
tar al monedero; sin embargo, desde algún oscuro y profundo cen-
tro -de su ser algo comenzó a expresarse a través de ella, sorpren-
diéndola como si las palabras le fuesen ajenas:
-Somos una energía necesaria para todos, y sin embargo no
a todos llegamos. El humilde no sabe aceptarnos, y por eso la
mayoría de nosotras quedamos en poder de unos pocos, que nos
emplean en acumularnos más y más, apartándonos muchas ve-
ces de las obras humanitarias, cuando no nos usan en hacer daño
a otros seres. Es éste uno de los mayores desequilibrios del pla-
neta. Hacen falta «corazones con dinero», y también «dinero con
corazón». Permitir que el dinero se acumule y se monopolice es,
cuando menos, un acto tan irresponsable, y a la larga tan dañino
como el derroche. Se nos utiliza mal demasiadas veces, no sólo

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 901


por excesos de los poderosos, sino también por defecto de los
que se llaman a sí mismos humildes, en realidad inconscientes
del daño que le hacen al mundo con su rechazo. La balanza está
cada vez más desequilibrada, y mucho de lo que queda por ha-
cer nos tememos que causará más daño una vez se realice, pues
el poder ciega a los que lo tienen, y la acumulación de dinero es
eso, poder.
Quesef había escuchado en silencio el largo discurso de la mo-
neda. Algo se estaba moviendo en su interior. Al cabo, preguntó:
-Y yo, ¿qué puedo hacer? Me gustaría ayudar a remediar esa
situación. María es muy niña, y no sabe nada de esto que me
contáis.
Fue una vieja moneda la que cont€stó al monedero. Sus bordes
mellados, su brillo apagado y sus dibujos apenas visibles atesti-
guaban su antigüedad. La contestación de la moneda vino en for-
ma de pregunta:
-¿Fue ella la que te dio el nombre que llevas?
-Sí, -respondió Quesef, sorprendido-. ¿Por qué me lo pre-
guntas?
La vieja moneda siguió preguntando; tal vez había circulado
gran parte de su existencia en Galicia:
-¿Sabías que Quesef significa riqueza, dinero o plata? Es una
palabra que procede del idioma hebreo. Lo sé porque durante
mucho tiempo compartí otro monedero con una moneda que
procedía de Israel, y ella me lo contó. ¡Tus raíces son viejas, y esa
niña sabe más de lo que ella misma sospecha! Tu mayor riqueza,
el mejor servicio que puedes ofrecer, es todo el archivo de tus
conocimientos. Ofréceselo al mundo, y si el mundo tiene oídos
para oír, despertará.
Quesef comprendía ahora que María le había estado prepa-
rando para una misión importante, la más importante quizá,
y lo había hecho con amor y ternura, con perdón y compasión,
haciéndole fijarse y apreciar las pequeñas cosas que hacen de la
vida algo que vale la p ena. Con una lágrima que procuró escon-
der bajo su cremallera, comprendió que debía volver a las manos
que un día le h abían rechazado. Ya era lo suficientemente adulto,
y había llegado el momento de dejar la compañía de María. Si su

902 Vi LLARRUlllA / H AUT / MI LLERA


nombre significaba riqueza, no podía seguir siendo su compañero
de juegos.
La niña también lo sabía. Acercó el monedero a su cara, cerró
los ojos y desde su interior envió a Quesef un silencioso adiós.
Ambos sabían que no hay separación, pese a la distancia, cuando
los corazones son uno.
-¡Mira, abuela! -dijo María, mostrándole el monedero.
-¡Uy, que monedero tan bonito! ¿Dónde lo encontraste?
-No me lo he encontrado, abuela.
-Entonces, ¿te lo ha regalado alguien? -preguntó suspicaz
la mujer.
-Tú me lo regalaste, abuela. ¿Ya no te acuerdas? Es el que
estaba escondido en el armario.
-¿De veras es éste?-preguntó incrédula la abuela.
.-Sí, se puso suave de tocarlo y acariciarlo, y ahora huele a
perfume de rosas. ¿Verdad que es bonito, abuela?
Realmente, era un monedero precioso. ¿Cómo no se había dado
cuenta entonces, cuando se lo había regalado su vecina? Sintió la nece-
sidad de tocarlo, de acariciarlo. Era demasiado «bonito» para estar en
manos de una niña como María, aunque se tratase de su 1úeta.
-¿Puedo verlo de cerca? ¿Me dejas?-Se estaba muriendo de
ganas de tenerlo entre las manos -Es que no tengo aquí mis ga-
fas y no veo bien- añadió a modo de explicación, sin recordar
que sus gafas colgaban de un cordón alrededor de su cuello. María
hizo esfuerzos para no reírse. Ella era quien actuaba con la sabidu-
ría de un anciano, mientras que su abuela se mostraba infantil.
-Es para ti, abuela. Te lo regalo.
La abuela pensó, sorprendida: «Cómo son los niños. Se que-
dan con lo más estropeado, y en cambio no le dan valor a lo be-
llo». María siguió hablando, provocando en su abuela un asombro
creciente:
-¿Sabes, abuela? Se llama Quesef, que quiere decir riqueza,
y es mi mejor amigo. Se ha puesto muy bonito, y las señoras pre-
guntan por él, pero yo siempre digo que es de mi abuela, para
que no me lo quiten. -María lo tomó entre sus manos y se lo alar-
gó a su abuela- ¡Toma, abuela! Te hará mucha compañía, pero,
por favor, no pierdas su carnet de identi dad, está dentro.

MAN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 903


La abuela retuvo las manos de su nieta, y se sintió conmovida.
Jamás había recibido un regalo con más entrega, con más amor.
Y comprendió que lo que olvidamos, lo que rechazamos, ha de
volver a nosotros con la correspondiente enseñanza incorporada a
ello ... si es que somos capaces de escuchar el mensaje.
Acarició amorosamente el monedero, y Quesef dejó caer una
lágrima, que intentó guardar en su interior, para que la abuela no
lo notara. Ésta sintió la humedad en su mano, y se dijo que debía
tener cuidado con el sudor no se fuera a estropear aquella mara-
villa. Abrió el monedero, y descubrió en su interior el viejo billete
de autobús.
-¿Cómo? ¿Todavía conservas este billete de autobús?-Hizo
ademán de tirarlo. María saltó:
-¡No, abuela, no lo tires! ¡Ese es su carnet!
Al extenderlo, la abuela descubrió que aquel papel, que a ella
le había parecido un viejo billete de autobús, era en realidad la eti-
queta del fabricante. O al menos eso parecía, pues estaba escrita en
árabe, idioma que ella habló en su lejana infancia y ahora casi había
olvidado. Con lágrimas en los ojos, leyó trabajosamente las palabras
al-qahira y misr. jEl Cairo y Egipto! jSu lejana patria, que abandonó
cuando era poco más que una niña, para casarse con el que fue su
marido, como vía de escape de un ambiente de pobreza que la esta-
ba ahogando! Entonces comprendió que su rechazo hacia aquel ob-
jeto ocultaba algo mayor y más profundo que debía ser investigado
cuidadosamente. En cierto modo, y sin saberlo, había rechazado su
propio origen, y tuvo que existir una causa para ello.
Sus manos empezaron a calentarse, y el monedero emanó esa
esencia de rosas que delataba su presencia. Pronunció despacio el
nombre que la niña le había dicho:
-¡Quesef! -¿Cómo una niña pequeña, que no sabía nada del
origen de su abuela, había encontrado aquel nombre tan apropia-
do? Ciertamente, la palabra era hebrea, y no árabe, pero el sig-
nificado era bien preciso. Además, le recordaba la palabra árabe
qassif, que significa «ser tierno o frágil», y también «romperse»
Y ese sentimiento de fragilidad, y a la vez de sentirse rota, se le
hizo patente, con un dolor y una nostalgia difícilmente soporta-
bles. Volvió a repetir lentamente la palabra- Quesef, riqueza.

904 VILLARRUBIA / HAUT / MILI.ERA


Se le agolparon un sin fin de recuerdos de su infancia, y se vio
reflejada en María en su seguridad, en su sabiduría, que ahora
sentía haber perdido, a base de renuncias y rechazos. Se vio como
una niña feliz, sin miedos ni dudas, y recordó caras de adultos
sorprendidos por sus palabras. Y supo que no debió apartarse
nunca de su niñez, y que debía recuperarla; esperaba poder con-
seguirlo antes de pasar a la Otra Orilla.
Le volvió de sus recuerdos el tirón suave en su falda de la mano de
María. La niña sonreía silenciosamente, y tenía un extraño brillo en
los ojos, un brillo que la imponía, llenándola de un profundo respeto.
Tras esa mirada había un adulto ... no, un adulto no, un anciano lleno
de profunda comprensión hacia todo lo que sentía en esos momen-
tos. Tras unos instantes, pudo recuperar la calma. Ahora, María era
otra vez una niña que parecía haber olvidado todo lo que acababa de
suceder. Se fue saltando, dispuesta a comenzar otro de sus intermina-
bles juegos, pero se detuvo un instante, se paró como reflexionando,
y después, despacio, muy despacio, se volvió y le guiñó un ojo a su
abuela. Ésta recordó entonces que en su infancia ese guiño había sido
una contraseña secreta con su propia abuela, aquella sabia abuela que
parecía haber conservado todos los secretos mágicos de los antiguos
sacerdotes de Isis.
Decidió recuperar su niñez escribiendo cuentos. Escribiría la
historia de aquel monedero, y titularía al cuento «Queséf». Algún
tiempo después, cuando lo hubo terminado y lo releyó, supo que
la pobreza que la había hecho abandonar sus raíces y mantenido
en una, en cierto modo, travesía del desierto, la había conducido
a recuperar su verdadera riqueza, la de su propio corazón.

8. EL RETORNO

e trata de una oración (en realidad, una «declaración de actitud in-


S terior») basada en el Padrenuestro, y tiene una profunda relación
con el ejercicio de «quitarse el nombre», lo que supone, en definiti-
va, asumir por completo la total responsabilidad sobre nuestra vida
y nuestro destino, aceptando de antemano todo cuanto les afecte.
El nombre de «Retorno» le fue dado por una de las primeras perso-

M/\N U/\l DE KABBALAH PRÁCTIC/\ 905


nas que experimentaron su eficacia, pues, decía: «Ahora sé que estoy
en el camino de retorno a mi verdadero hogar». Se trata, a no dudar,
de un texto extraordinariamente energético y liberador, aunque en
determinados contextos pueda parecer blasfemo. Está, sin embargo,
en total concordancia con las tradiciones y sistemas no dualistas: ve-
danta advaita, sufismo, budismo mahayana y vajrayana, e incluso la
propia Kabbalah, en su sentido más profundo. También su espíritu
está en línea con la obra de un psicólogo y filósofo tan eminente como
Ken Wilber, como puede comprobarse mediante la lectura de su obra
(ver referencias bibliográficas). Lo que esta «Declaración» proclama
es la actitud de buscar al Absoluto, no como algo externo o ajeno a
nosotros, sino como nuestra esencia más verdadera y profunda.
Sin perjuicio de conocer su significado y lo que de él pue-
de derivarse, su mayor eficacia se logra recitándola en he-
breo, para lo cual es conveniente memorizarla en ese idioma.
Por esta razón, se incluye la pronunciación después del texto
hebreo y antes de la traducción y las notas.
Las palabras de esta «Declaración», cuando no habían apare-
cido antes en la presente obra, no se han incluido en el glosario
de voces hebreas, al final de la obra, debido a su extensión.

'~i~'D? , '~1 ifEI 'D~~7~ :rzt:re9 '~~ :y7~?~ □:~o/? ,~.J~


:y7~;:¡ n~1 □"'.~~·v n~ ~::,i::1 '~i~J
7~~01 :7l11 □?ill', 'ni:::i. in n~ n·',;o, ,□~tj;,;,-',::, '~n', n~ ',:,;~
:□-:i? ;,{1 ~-s
J:,v~ ,m,tP~~D ~-', 'ni'~::,01 -□~? ~~~: ~~ J·-:iv
:1p~: ,~1□7il17 ~r:::i.~01 n~C?!J01 mS7~;:i ''? '~

ANOJÍ BESH-SHAMAYÍM U-BE-ÁRETZ. ANÍ MEKUDDÁSH. MALJUTÍ PO


VE-BÍ, BE-JITSONÍ U-BE-PNIMÍ. RATSONÍ BORÉ ET HASH-SHAMAYÍM VE-
ÉT HA-ÁRETS.
OJÉL ET LEJMÍ KOL-HA-IOMÍM, VE SOLÉJ ET JOBOTÍ LE-OLÁM VE-ÉD.
VE-HA-YÉTSER HA-RÁ LO IHYÉ KAYÁM, VE-HA-REIÓT LO TIHIHNÁT, KI-
HA-RÁ LO HOVÉ KAYÁM. KI-LÍ HA-MALJUT VE-HA-RASHUT VE-HA-KA-
VOD LE-OLÁM VE-ED. AMÉN.
Yo soy, en los cielos y en la tierra (1). Soy santificado (2). Mi reino está
aquí y en mí, en mi exterior y en mi interior (3). Mi voluntad crea los
cielos y la tierra (4).

906 VILLARRU BIA / HAUT / MILL ERA


Como mi pan de cada día (5), y perdono mis deudas de una vez por
todas y para siempre (6). La tentación no tendrá existencia real, y las
pruebas no existirán (7); pues el maten verdad, no existe (8). Pues
míos son el Reino, el Poder y la Gloria por los siglos de los siglos (9).
Así es (10).

Notas:
l.Ser «en los cielos y en la tierra» significa «en todos los planos de la realidad,
simultáneamente», cualquiera que sea el nivel de consciencia en cada uno de
ellos.
2.La palabra hebrea tdJ~~, «santificado», muestra su significado a través de
sus letras: nacimiento (r.:i); recepción, y también llave (p); puerta, y también
verbo creador (7); y consciencia (lt!). Es decir, nacer a un nuevo estado en el
que recibimos la llave que nos abre la puerta de la consciencia; o, en otras pa-
labras, la apertura a toda la información, el fin de la ignorancia. De ahí que en
tantas tradiciones se aluda a la ignorancia como el principal pecado y la causa
última de todo sufrimiento.
3.No hay límites, ni internos ni externos, a lo que verdaderamente soy.
4.Soy el creador de todo cuanto me sucede, de todas mis vivencias. Por lo de-
más la palabra ~::,i!l, crea o [es] creador, puede leerse también 7i~;i, en la luz,
pues todo acto creativo es a la vez una iluminación. Mis vivencias, mis expe-
riencias, tienen en último extremo la finalidad de ir expandiendo mi campo
de consciencia.
5.Vivo mi presente, mi aquí y ahora, del que procede todo lo que me ali-
menta.
6.Sólo yo tengo poder para perdonar mis propias deudas; por tanto, ningún
poder para perdonar (o no perdonar) las ajenas.
7.A partir del momento en que haya perdonado mis deudas, no habrá ya ten-
tación ni prueba, pues el karma ha sido resuelto.
8.La palabra mal, en hebreo 117, está formada por los ideogramas soplo (7) y
ojo (11); es, pues, una forma de sacarnos la motal de polvo que nos impedía una
visión correcta, y cumple por tanto una función sanadora.
9.No dependo de nada ni de nadie: la responsabilidad de cuanto suceda es
exclusivamente mía.
10.El texto termina con una afirmación de lo que es, y no un deseo de lo que
deseamos que sea. Es por tanto unificador (aquí y ahora) y no separador (en
parte lo que es, aquí y ahora, y en parte lo que desearíamos que fuese, allí y
luego).

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 907


9. PROPUESTAS PARA DEBATE

l. Toda la Manifestación es Una e Inmutable, pero sus formas son


múltiples y en constante cambio y movimiento.

2. La multiplicidad de las formas y sus cambios crean la ilusión de


la separatividad.

3. El sentimiento de separación que se deriva de aquella ilusión


está en el origen de todos los sufrimientos.

4. Todo hecho, siempre neutral en sí mismo, que se experimenta


como problema, arranca del sentimiento de separación y del an-
helo por reconstruir el sentimiento perdido de Unidad.

5. Lo que denominamos maldad es la manifestación del intento de


reconstruir el sentimiento de Unidad, expresándose a través del
error y la oscuridad.

6. La experiencia de sufrir un problema, dolor o padecimiento es


al mismo tiempo un aspecto concreto de la pérdida del senti-
miento de Unidad, y una pista para reconstruir esa Unidad.

7. El problema, el dolor o el sufrimiento son, por lo tanto, las he-


rramientas perfectas para volver a la Unidad. Tan sólo es nece-
sario no rechazarlos, y vivirlos en estado de total alerta.

8. Cuando la Unidad se recupera, se descubre que nunca se había


perdido y que todo fue y es siempre perfecto: no hay nada que
arreglar, nada que curar, nada que conquistar; nada a lo que
haya que llegara ser, porque todo YA ES.

9. El tiempo es una ilusión. Cuanto más centramos nuestra aten-


ción en el pasado que se fue, o en el futuro que aún no ha lle-
gado, más nos escapamos del momento presente. Aquí y Ahora
co-creamos nuestra realidad. Todo está sucediendo Ahora,

908 V1L1. ARRUBIA / HAUT / MILLERA


y centrarse en el momento presente es el único camino hacia el
Ser, y por tanto, hacia la Unidad.

10. Todo Conocimiento verdadero siempre debe llevarnos a descu-


brir la Fuerza del Amor sin Límite y la Luz de nuestro Ser Eterno
en la Unidad de Todo lo que Es. Desarrollar la Fuerza del Amor
sin Límite de nuestra esencia, amar es lo más importante.

11. Cuando aprendemos a fluir con la vida y a confiar en nues-


tros procesos, aceptando cada cosa que nos suceda sin resisten-
cias, como si la hubiésemos elegido, aflora nuestro Ser. Desde
la Unidad se manifiesta el Wu-Wei, o el arte de «no hacer»,
de «no estorbar» o de «quitarse del medio», como de manera
muy hermosa expresó Zacarías: «No por Fuerza ni por Poder,
sino por Espíritu».

MAN UAL D E K ABBALAH PRÁCTICA 909


APÉNDICE 1

Glosario de voces y expresiones hebreas aparecidas en la obra


(No se incluyen las palabras pertenecientes a ejercicios planteados a lo
largo de la obra, salvo que aparezcan en cualquier otro lugar de la misma.
Las frases largas y oraciones se incluyen en general íntegras en una mis-
ma entrada, ordenada por su primera palabra)

ab, padre. Adonaí ha-Melej Neemán, Mi señor el


Ab, Dios Padre. Rey Fiel, Dios.
Ab-Ben-Rúaj, Padre, Hijo y Espíritu Adonaí Melej, Mi Señor rey, Dios.
Santo. Adonaí Tzebaot, Eterno de las Huestes,
aba ve-imá, papá y mamá. nombre de Dios en correspondencia
'a'bad, trabajar, servir (en un servicio (según las diferentes escuelas) con
religioso), adorar. las sefirot 7.", Netzaj, u 8.\ Hod.
abdán, destrucción, ruina. afek, horizonte.
abik, alambique. agad, unir, ligar.
abir, fuerte, robusto, héroe. 'agavah, lujuria, sensualidad.
abjomer, protoplasma. Agla, nombre de Dios. Ver Atá Gíbor
abó, su (de él) padre, su creador. Leo/am Adonaí.
abréj, gran visir, título dado a José en agoz, nuez
Egipto. agozah, nogal, árbol que se ha asociado
Abrék, la estrella Sirio. repetidamente con la Kabbalah.
'ad, eternidad, botín. ahavá, amor.
'adah, comunidad, colectividad, asam- ahevím, amantes, se refiere al sendero
blea. subjetivo 6 del Árbol de la Vida (ver
Adam Eilah, Hombre Celestial o dodím).
Primordial aholim, áloe.
Adam Kadmon, Adam ha-Kadmon, el aib, odio.
Adán Celestial, Dios. Aimá, la Madre Fértil, un título de Binah.
Adir, Fuerte, Dios. aín, nada, no, sin. Es el primero y más
adom, color rojo. lejano de los planos o niveles de in-
Adonaí, Mi Señor, un nombre de Dios. manifestación, por encima del Árbol
Se usa generalmente para pronun- de la Vida. (Ver otra pronunciación
ciar el Tetragrama Mil"!\ así como enAyin).
otros nombres relacionados con éste aín sof, infinito. El segundo de los
o que representan su abreviatura. planos o niveles de inmanifestación,
Adonaí ha-Aretz, Mi Señor de la Tierra, por encima del Árbol de la Vida. (Id.
Dios. A veces se abrevia en las siglas en Ayin Sof).
A.H.A. Nombre divino asociado a la aín sofor, luz infinita. El tercero de los pla-
10.ª sefirá, Maljut, en el trabajo en el nos de inmanifestadón, por encima del
Pilar del Centro. Árbol de la Vida. (Id. en Ayin Sof Or).

MANUAL DE KAB BALAH PRÁCTI CA 911


aj, desgracia. aretz nod, diáspora, destierro.
Ajaiah, genio n .º 7 de la Kabbalah. 'arí, temporalmente, insignificante,
ajal, absorber, alimentarse. accesorio.
ajilaiah, aquilea o milenrama. 'Ariel, genio n .º 46 de la Kabbalah.
akakia, acacia. 'arigah, deseo, anhelo.
al, encima, arriba, hacia. Arij Anpin, el Gran Rostro, conjunto
al om, «hacia el OM». formado por las tres primeras sefirot
Aladiah, genio n.º 64 de la Kabbalah. del Árbol de la Vida, Keter, Jokmah
aleluya, aleluya. y Binah.
'almáh, doncella, virgen. 'aratz, asustar, temer.
almón, viudez, soledad. 'arí, temporalmente, insignificante,
Alufó shel olam, Gobernador del accesorio.
Mundo, Dios. aritz, ·déspota, tirano.
alúm, escondite, secreto. arón Adonai, el Arca de la Alianza.
'am, muchedumbre. asa!, recoger, recolectar.
Amá, la Madre Estéril, un título de 'Asaliah, genio n.º 47 de la Kabbalah.
Binah. asam, granero, almacén.
aman, criar, educar. asar sefiroth beli mah ve-esrim ve-shtaim
amás, cargar, llevar, levantar. otioth yesod selosh imoth ve-shebah
amatz, ser fuerte, ser valiente. kafuloth ve-shtaim asrah pshutoth:
amen, amén, así es, así sea, última Diez sefirot de la Nada y 22 letras
palabra del Libro del Apocalipsis, Fundamento, tres Madres, sie-
que a su vez es el último del Nuevo te Dobles y doce Elementales (S.
Testamento. Yetzirah, 1:2)
amná, educación, crianza. ashín, rígido, severo, duro.
amán, alumno. ashurí, escritura hebrea cuadrada.
amper, amperio. asir, prisionero.
'Anauel, genio n.º 63 de la Kabbalah. askupah, umbral, portal.
'anav, menesteroso, pobre, humilde, aspaklar, espejo.
modesto. Atá Gibar Leolam Adonaí, Tú eres
'anavah, modestia, humildad, sumisión. Fuerte por Siempre mi Señor, nom-
aní, yo. bre de Dios, se abrevia con las siglas
Aniel, genio n.º 37 de la Kabbalah. AGLA (ver más arriba).
anil, el color añil. atbash, procedimiento cabalístico
Apudah, Zodíaco (ver Mazlot). consistente en sustituir cada letra
'arah, destruir, derramar, desnudar. de una palabra por su opuesta en
Aralim, Héroes, ángeles de Binah en el número de orden alfabético.
Mundo de la formación. 'atid, futuro.
aratz, asustar, temer. 'atíf, taled, manto, capa.
arba, cuatro (femenino). atz, apurar, correr, estrecho, angosto.
Arel, ángel regente del Fuego, asocia- 'atzal, músculo.
do en el tarot al as de bastos. 'atzar, apresar, contener.
aretz, tierra. 'avad, servir o rendir culto, adorar.
Aretz Elioná, Tierra Superior, un título 'avar, pasado.
de Binah. aved, perderse, extraviarse, morir, perecer.

912 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


aví hakaf, ibis, ave asociada en Egipto Baal Nejamot, Señor de Misericordia,
al dios Thot. Dios, asociado a la. 4.° sefirá del Árbol.
aviyonah, concupiscencia, deseo carnal. Baal Shem Tov, Señor del Buen
'avodá, trabajo, especialmente en el Nombre, título dado a preclaros
sentido de servicio espiritual, adora- rabinos y cabalistas.
ción, culto. bad, vena, arteria.
'ayafah, fatiga, cansancio. badáh, diferenciar, separar.
ayejá, ¿dónde estás? (masculino). bah, en ella.
avén, iniquidad, desgracia. bajan, examinar, escudriñar.
'ayin, ojo, fuente. bahir, brillo, brillante.
Ayin, Nada, el plano más oculto de banah, construir, edificar, organizar,
inmanifestación, o primero de los tres restaurar.
velos de la Existencia Negativa. (ver bar be rab, discípulo, alumno,
mah). aprendiz.
Ayin Sof, Infinito, el segundo de los bar mitzvah, «sujeto al mandamiento»,
tres planos de inmanifestación, más ceremonia de iniciación de los niños
próximo que Ayin pero menos que judíos al cumplir los 13 años.
Ayin SofOr. Bar Nidrá, Hijo de la Promesa,
Ayin Sof Or, Luz Infinita, el tercer el Mesías.
plano de inmanifestación, o velo de hará, crear, creó.
Existencia Negativa más próximo a barák, relámpago.
la manifestación. baruj, bendito.
'ayir, borrico, asnillo. Baruj, Bendito, un nombre de Dios.
ayom, terrible. barúj atá Adonái Elohénu meléj ha-
'az, fuerza. olám boré pri ha-gafén, Bendito seas
aznayím la-deréj, cuidase en el camino, Tú, Eterno, nuestro Dios, Rey del
no descubrir los secretos. Universo, creador del fruto de la
azovión, lavanda, espliego. vid (oración de bendición del vino
b, en (unida a la palabra siguiente). en Pesaj, la pascua judía, y en oras
ba, venir, viene con álef final), regocijar festividades en las que el vino tiene
(con ayin final). un uso ritual).
ba'áh, hervir, pedir, preguntar. barzel, hierro.
baal gevurah, héroe. bat, hija.
Baal Gevurot, Señor de los Rigores, bat-galím, sirena, hija de las olas.
Dios, asociado a la 5.ª sefirá del batzbútz, cáñamo.
Árbol. bavá kamá, primera puerta, primer
Baal ha-Brajot, Señor de las versículo.
Bendiciones, Dios, asociado a la 4.ª bdil, estaño.
sefirá del Árbol. be-abik, como un alambique, semejante
Baal ha-Rajamim, Señor de la a un alambique.
Misericordia, Dios, asociado a la 4.ª be-kahal, en comunidad.
sefirá del Árbol. be-kol mas'ehem, en todas sus jornadas,
Baal Ijolet, Señor de la Fuerza, Dios. palabras finales del Libro del Éxodo.
Baal Miljamot, Señor de las Batallas, be-leb kaved, duro de corazón (literal-
Dios. mente, «en el corazón el hígado»).

MAN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 913


be-leb ve-nefesh, en cuerpo y alma. bitajón, seguridad, confianza.
be-or, en la luz. bitzón, curación por barro.
be-sod, en secreto. blilah, mezcla, aleación.
be-Ze, en Dios (en el sentido más bo, venir, entrar.
próximo e inmediato). bó, en él.
bedek, grieta, fractura, arreglo, correc- Boaz, nombre de la columna izquierda
ción, investigación. situada a la entrada del Templo de
beishah, hediondez, agraz, inmadurez. Salomón, y también del Pilar de la
beit ha-kol, glotis (literalmente, «casa Severidad o izquierdo del Árbol de
de la palabra»). la Vida.
beli rosh, sin cabeza. bohu, vacío (Gén. 1 2).
belimah, desde la nada (Sefer bojan, examen, prueba, grado de pure-
Yetzirah, 1:2), nada, sin nada. za del oro.
ben, hijo, hijo de. boré, creador.
Beni El, Hijos de Dios, oro nombre briah, creación.
de los ángeles de Netzaj, también brit olam, Pacto eterno, por extensión,
atribuidos a Hod (ver Elohim y Beni el de Dios con el patriarca Abraham.
Elohim). búa, regocijarse.
Beni Elohim, ángeles de Hod en el bua1i, ampolla, burbuja.
Mundo de la Formación. bubón, muñeco, marioneta.
be'oz, valerosamente. bul shel mélaj, grano de sal.
berek, corrección, arreglo, Caín, hijo de Adán y Eva y asesino de
investigación. su hermano Abel.
bereshit, en el principio. dáag, inquietarse, temer, recelar.
Bereshit bará Elohim et ha-shamayim ve- daaj, apagarse.
et ha-aretz, «En el principio creó Dios Daat, Conocinúento, la sefirá oculta,
los cielos y la tierra», primer versí- o no-sefirá, del Árbol de la Vida.
culo del Génesis y de la Biblia. daav, entristecerse.
bereshit ba'ar, selva virgen. dabar, palabra, verbo creador, cosa,
beshilut, madurez. objeto, simbólicamente, el atrio de
bet ab, familia, clan, linaje. los fieles en el Templo de Jerusalem.
bet ha-rejem, vulva. dabash, endulzar.
bet jalitzah, planta del pie. dabosh, m eloso.
bet-kelé, cárcel, prisión. dabuk, cúpula, coito.
beten, vientre, abdomen. daf, página.
bi, en mí. dag, pescar.
bi-hen, en mí [están] ellas. dagán, cereal, centeno.
bidalón, separación. dagdegán, clítoris, excitador.
bigdé olam, mortaja. dagím, peces, el signo de Pisces.
bikash, buscar. dajaf, impulso.
bin, inteligencia. dal, puerta.
Binah, la r sefirá del Árbol de la dajli1, espantapájaros.
Vida (ver Tebunah). En sentido dak, profundizar, investigar.
genérico significa inteligencia o dalah, elevar, redimir.
entendimiento. dam, sangre.

914 VJLLARRUBIA / HAUT / MILI.ERA


Damabiah, genio n.º 65 de la Kabbalah. dumah, tumba, silencio, el Ángel guar-
dan, juzgar dián de los muertos.
Daniel, genio n.º 50 de la Kabbalah. e? ¿dónde?
dat, religión. 'ebed Adonaí, profeta.
datí, creyente, religioso. eben tovah, piedra preciosa.
datz, regocijarse, alegrarse. eben yesod, primera piedra, piedra
daváh, sufrir, afligirse. fundamental.
de'á, conocimiento, comprensión. ebul, pasaje, galería secreta.
debek, pegamento, soldadura, ligadu- ed, testigo, trapo menstrual, compresa
ra, matrimonio. higiénica, prueba.
debir, santuario, el Santo de los Santos Edom, el Enemigo, simbólicamente
del Templo de Jerusalem. Roma.
degimah, prueba, muestra, señal, evi- 'efah, oscuridad, desierto.
dencia. efatah, oscuridad, tinieblas, desierto.
dejikáh, estrechez, depresión. efod, capa del sumo sacerdote.
dejilah, miedo, pánico. egozáh, nogal.
demamah, silencio, calma. Ehié, El Que Es, nombre divino, abre-
derash, exegético, el tercero de los viatura de Ehíé Asher Ehíé (ver).
sentidos que puede encontrársele a Se asocia a la primera sefirá, Keter,
un escrito, más profundo que pshat en el trabajo en el Pilar del Centro.
y remez y menos que sod. Ehié Asher Ehié, Yo Soy El Que Soy,
dibash, preparar hidromiel. el nombre divino más elevado, que
digén, almacenar los granos. corresponde a la primera esfera del
digul, artificial, ficticio. Árbol de la Vida, Keter (ver Ehié).
diklí, palmeral. Eíael, genio n.º 67 de la Kabbalah.
dildel, debilitar, empobrecer. ejad, uno, unidad.
dimdum, crepúsculo. Ejad Hu Elohím, Sólo Él es Dios.
din, juicio, justicia, especialmente en el, fuerza, poder.
su sentido externo de aplicación de El, Dios.
la ley (ver tzedek). El Ab, Dios Padre.
Din, otro nombre de la 5.ª sefirá del El Adonaí, Dios mi Señor
Árbol de la Vida (ver Gevurah y El Jai, Dios Viviente.
Fajad). El Shaddaí, Dios Todopoderoro.
dobesh, miel Elemíah, genio n.º 4 de la Kabbalah.
Dad Neemán, Amigo Fiel, Dios. 'eles, alegría, regocijo.
dodím, amantes, se refiere al sendero 'eletz, regocijo, gozo, diversión.
subjetivo 6 del Árbol de la Vida (ver 'Elión, Alto, un nombre de Dios
ahevim). (ref.ª salmo 91:1).
dové, abundancia. Eloah, Dios.
du, dos, doble. Elohay Yísrael, Dios (o mi Dios) de
dubash, hidromelado. Israel.
dudá, dudaim, mandrágora(s). Elohé ha-Tzabaot, Dios de las Huestes.
dug, pescar. Elohim, Dios Creador, ángeles de
duk, reflexionar, examinar, Netzaj en el Mundo de la Formación
profundizar. (ver Beni El).

MAN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 915


Elohim Gibar, Dios Riguroso. faká, cortar, romperse, brote, yema.
Elohim Jayim, Dios de vivientes, Dios ga, llegar, arribar, sollozo.
de vivos. (S. Yetzirah, 1,1). Gabab, Júpiter (ver Tzedek).
Elohim Tzebaot, Dios Creador de las gabar, ser fuerte, vencer, crecer en
Huestes. intensidad.
Elojai ha-Olamim, Mi Dios de los Gabriel, arcángel de Yesod en el Mundo de
Mundos. la Creación. El nombre significa «Héroe
Elokim, otra versión de Elohim, de de Dios», y también «Fuerza Divina».
origen ashkenazí. Gad, uno de los hijos de Jacob, su
em, madre. nombre significa «buena suerte».
Em Adamah, la Madre Tierra. gadó, su (de él) suerte, su felicidad.
Em kol, Madre de todo (Binah). gadol, grande.
emet, verdad. Gadol ha-Olamim, Grande de los
emtzah, medio, centro, mitad. Mundos, un nombre de Dios.
emunañ, fe. gaf, frontera, extremidad, borde, tapar,
erej, cura, restablecimiento. poner corchos.
erek, tierra. gahim, cielo.
'eretz, fuerza, vigor, poder, decisión. gai, desfiladero, valle estrecho.
eretz ha-amim, extranjero, la diáspora. gal, galim, ola(s).
eretz ha-behirah, la Tierra Prometida, galgal ha-mazal, rueda de la fortuna.
Israel. Galgal ha-Mazlot, Círculo del Zodíaco
erez, cedro, alerce (Salmo 92:13). (ver Mazlot).
eruáj, albergue, hospedaje. galoniut, ondulatorio.
esel, balancín, palanca. galut, destierro, exilio, diáspora.
esh, fuego. gan, jardín, huerto.
Eshim, Seres de Fuego, ángeles de gaón, orgullo, sabio.
Maljut en el Mundo de la Acción. gar, residir, habitar.
eshkar, regalo. garar, empujar, arrastrar, tirar.
et, totalidad, esta partícula se usa gas, rudo, grosero.
como indicativo del complemento gasás, agonizar, estar moribundo.
directo en las oraciones verbales. gavá, morir.
etjen, vosotras. Gavoañ, Alto, Exaltado, Elevado, un
etnañ, presente, don, regalo. nombre de Dios.
etsmaút, independencia. god, odre.
'etz, árbol goi, extranjero.
'etz ha-mishmésh, albaricoquero. golem, robot, autómata, materia in-
'etz ha-tapuáj, manzano. forme. Hombre artificial fabricado,
'Etz Jayim, 'Etz ha-Jayim, Árbol de la según ciertas leyendas, mediante
Vida. técnicas cabalísticas.
'etzem, fuerza, vigor. grutáh, escombro, chatarra.
'etzem ha-kadkod, hueso parietal. gue, vete, fuera.
'etzer, gobierno, autoridad, freno. guebir, amo, soberano, hombre rico.
'eved, esclavo, servidor. guebot einím, las cejas.
'eved Adonaí, profeta. guebush, piedra.
Eyelut, Fuerza, Dios. guedot ha-nahar, orillas del río.

916 VILLAR RUBIA / HAUT / MILLERA


Guedulah, Grandeza, otro nombre de acerca la venida del Mesías. Este
la 4.ª sefirá del Árbol de la Vida concepto responde a una antigua
(ver Jesed), (I Crónicas 29:11). tradición hebrea, en virtud de la
guemar jatimah tovah, bendición de año cual los judíos que murieron fuera
nuevo. de la tierra de Israel resucitarían o
guematria, guematria, procedimien- reencarnarían al acercarse la venida
to cabalístico que utiliza las letras del Mesías, para estar presentes.
hebreas como números. En hebreo, este concepto tiene el
guemez, sicómoro. mismo valor numérico que tikún,
guemílut jasidim, actitud piadosa, acti- por lo que estaría íntimamente rela-
tud o actividades de los piadosos. cionado con este último.
guemirut, fin, término, perfección. guilgulim, retornos, reencarnaciones.
guenizáh, el armario de la sinagoga en guiluí Eliyahu, aparición del profeta
el que se guardaban los manuscritos Elías, este hecho será el anuncio de
de los libros sagrados ya inservibles la inminente venida del Mesías.
para el uso litúrgico, en espera de guimmul, madurez, maduración.
ser enterrados en tierra sagrada. guisháh, concepción, venida, llegada.
guer, extranjero. gumáh, canal.
guer sheket, convertido al judaísmo por ha-josén, La Fuerza (¡Que la Fuerza te
motivos de lucro. acompañe!»).
guesh, acercarse, aproximarse. ha-Kadosh, el Uno Santo, Dios, asocia-
gueshem, lluvia. do a la 4." sefirá del Árbol.
gueloniyut, ondulación, ondulatorio. ha-meretz ha-tevel, la energía del
gueviáh, agonía. Universo.
Guevurah, la 5." sefirá del Árbol de la ha-merkaz ha-aretz, el centro de la
Vida (ver Din y Pajad). En sentido Tierra.
genérico significa rigor, bravura, ha-shalshelet ha-kabalah, la cadena de
coraje y heroísmo (I Crónicas 29:11). la tradición, que tiene un doble
guf tapar, cerrar, cuerpo (de una per- sentido: horizontal, mediante la
sona), esencia, elemento. transmisión y enriquecimiento a tra-
guibush, cristalización, concentración, vés de las sucesivas generaciones, y
consolidación. vertical, mediante la comunicación
guid, nervio, tendón, alambre del hombre con Dios.
eléctrico. ha-Shem, el Nombre, en alusión al
guidul, crecimiento. Tetragrama i'Tii'1\ y para pronun-
guil tza'ir, niñez, juventud. ciarlo.
gui1ah, alegría, éxtasis. ha-tibe/, el Universo (ver tibel).
guiláh, rastrojo. ha-tzotzeret ha-shemá, trompa de
Guilgal ha-Isodot, Esfera de los Eustaquio.
Elementos, chakra mundano de haadaráh, glorificación.
Maljut en el Mundo de la Acción. Haaiah, genio n.º 26 de la Kabbalah.
guilgul, círculo, esfera, reencarnación, haajadah, unidad.
causa. haakdut, sacrificio, inmolación.
guilgul mejilot, retorno de los judíos haalalah, glorificación.
muertos en la diáspora cuando se haamaná, fidelidad, creencia, fe.

MAN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 917


haatzah, aceleración. harmón, palacio, harén, gineceo.
ha'aved, laborarse, trabajarse. hashket, silencio, calma, reposo.
habdalañ, el himno que se canta a la sa- hasí, mi silencio.
lida del sábado según el ritual judío. haskalah, ilustración, movimiento libe-
habis, derrotar. ral y laico surgido entre las comuni-
haburah, herida. dades judías a mediados del s. XIX.
hadan, extender, agarrar, alargar. hasnaáh, odio.
hadbarah, aniquilación, subyugación hassaáh, levantamiento, aguzamiento,
hadráh, cereal. transporte.
ha'ez, osar, atreverse. hatmaáh, mancha, pecado, impureza.
hadom, el Templo, antípodas. hatzalah, liberación.
hadrarah, liberación. hatzmaáh, sed.
hag ha-aviv, fiesta de la primavera, havanah, comprensión, entendimiento.
Pésaj, la Pascua judía. hayáh, era, estaba.
hag ha-molad, fiesta de Navidad. Hayaiel, genio n.º 71 de la Kabbalah.
hagut, pensamiento, meditación, hrtzadáh, a propósito.
lógica. hazáh, soñar, imaginar, fantasear, ensoñar.
Hahaiah, genio n.º 12 de la Kabbalah. hazakáh, purificación, limpieza.
Hahiniah, genio n. 0 24 de la Kabbalah. hazhamáh, infección.
hajaná, preparación, preparativo. Haziel, genio n.º 63 de la Kabbalah.
Hajasiah, genio n.º 51 de la Kabbalah. hazmaáh, comprensión, entendimiento.
hakafah, vuelta, rueda, árculo, la vuel- heatrut, aceptación.
ta que se da en la sinagoga con los heatzah, aceleración.
rollos de la Ley. hed, eco.
Hakamiah, genio n.º 16 de la Kabbalah. hedéh, compás.
halaj, morir, caminar, viajero, flujo, heehil, cubrir, empañar.
corriente. heemit, unir, juntar, verificar.
halel-luiáh, aleluya. heemitz, fortalecer.
halij, costumbre. hegen, refugio, protección, defensa.
hamlatah, salvación, puesta de huevos, Hehahel, genio n.º 41 de la Kabbalah.
parto. hehenah, gozar, placer, agradar.
hanaah, embellecer. heir, iluminar, aclarar, esclarecer.
hanetz, salida. hejal, santuario, palacio, el Santo de los
Haniel, arcángel de Netzaj en el Santos en el Templo de Jerusalem.
Mundo de la Creación. Hejal Ahavá, Santuario de Amor, un
har, monte, montaña. título de la 4/ sefirá, Jesed ..
har ha-Moriyáh, monte Moria Hejal Ejad, Santuario del Uno. Variante
(II Crónicas, 3,9) de la anterior.
har Tzion, monte Sión. hejal esh, palacio o santuario de fuego,
hará, h acer mal. experiencia que se puede vivir al
Harajel, genio n.º 59 de la Kabbalah. realizar el ejercicio de «quitarse el
harei, naturaleza, esencia. nombre».
harí, mi montaña. hejal ha-olam, palacio del Universo.
Hariel, genio n.º 15 de la Kabbalah. hejelif, renovar, restaurar.
harir, manar. hejesaj, refugiar, proteger.

918 ViLLARRUBIA / HAUT / M ILLERA


hejpt'sh, liberar, libertar. hirmón, armonización.
hejsher, preparación, validación, decla- hirtah, curar.
ración de apto (kosher) para comer, hisiáj, trasladar, conducir, llevar.
según el ritual judío. hisíj, consagrar.
hel, luz, claridad. hisnáh, enseñar, instruir.
he'lem, ignorancia, olvido, negligencia. hissiá, trasladar, conducir.
henetz, brillar, centellear. hisús, duda.
heohid, unir, unificar. hitdarah, frecuencia, regularidad,
heraión, gestación. constancia.
heriáj, oler, olfatear, sentir, inspirar, hiteher, purificarse.
infundir olor. hitguelguel, rodar, arrollarse, suceder,
hesset, sacudida, vibración. acontecer, desenvolverse, reencar-
hester paním, enojo, ira nar, metamorfosearse.
hetés, conmoción. hitjín, digerir, mascar, hacer morder.
hetis, hacer volar. hitlakdut, coherencia.
hetzneá, humildad, modestia, secreto. hitmakmút, venganza.
hevel, aliento, futilidad, frivolidad, hittemmem, ser sincero, ser honesto.
tontería, vanidad, Abel, el segundo hitztareb, quemarse.
hijo de Adam y Eva, asesinado por hiva'ed, concertarse, reunirse.
su hermano Caín. hiyulí, prístino, original.
hezen, nutrición, alimentación. hizaión, revelación.
hezig, purificar. hizdahut, identificación.
hezin, alimentar, nutrir, mantener. hizdakek, purificar, refinar.
hidbir, someter, subyugar. hizdakjut, limpieza, purificación.
hibhalut, susto, temor, espanto. hizil, derramar, verter.
hibraot, creación. hizmaáh, infección.
hidabrut, diálogo, coloquio. hizmin, preparar, disponer.
hidlil, debilitarse, flaquear. ho!, ¡oh!, ¡ay!
higaión, lógica. Hod, la 8.ª sefirá del Árbol de la Vida.
higlish, hervir. En sentido genérico significa majes-
hijañ, afligir, mortificar. tad y esplendor. (I Crónicas 29:11).
hijatbut, escritura. homem, asombrar, pasmar.
hijniá, derrotar, vencer. hosaif, agregar, sumar.
hijpil, multiplicar, doblar, duplicar. hotzén, armamento, tallo de lino.
hile[, alabar, ensalzar, glorificar. hovéh, es, está.
hilum, armonía, conformidad, hu, él, él mismo.
acuerdo. Hu Elohim, Él es Dios.
himatjút, elasticidad, tensión. huamán, verificado.
himtik, endulzar, desalar. hupaz, color dorado.
himul, circuncidado, circunciso. husáj, ungido.
hinsíj, coronar a un príncipe. hushán, fibras de lino.
hipakjut, apertura, viveza. hutzlab, cruzado.
lúpasdut, perdición. iabul, cosecha.
hipuj, oposición, contraste, contrario, iad, mano, poder.
trópico. iad leb, poder del corazón.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 919


iafáh, iaféh, hermosa(o), bonita(o). ihyeh, será, sea, hágase.
iaféh lehalal, loable, celestial. ijum, pasión, embarazo.
iaféh nefesh, bondadoso, de noble ikar rúaj, de noble espíritu.
corazón. Ilat ha-Ilot, la Causa Primera, Dios.
iahalóm, diamante. ilef, cubrir, desmayar.
Iah-hel, genio n .0 62 de la Kabbalah. ilel, inquirir, investigar.
iaín, vino. Imamiah, genio n.0 52 de la Kabbalah.
iajad, juntos, al unísono. immá, matriz.
Iajín, nombre de la columna derecha Immá, un título de Binah, la ter-
situada a la entrada del Templo de cera sefirá del Árbol de la Vida.
Salomón, y también del Pilar de la Significa «La Madre Oscura y
Misericordia o derecho del Árbol Estéril».
de la Vida. immem, oscurecer, volver opaco.
iam, mar, océano, occidente. inesh, humanizar.
iam ha- Arabá, mar de la Artesa, mar iodeá jen, cabalista, conocedor de las
Muerto. ·ciencias ocultas.
iam ha-Melaj, mar de la Sal, mar Muerto. iom, día.
iamot ha-geshamím, época de las iom ha-din, Día del Juicio Final.
lluvias. iomam, la luz del día.
ianak, mamar, alimentarse, nutrirse. ioréh, la primera lluvia del año.
iased, fundar, establecer. 'ir, ciudad, ángel.
ibdán, destrucción, ruina, exterminio. irah, íraot, miedo(s), temor(es).
ibén, hijo, petrificar, fosilizar. irat shamayim, devoción, temor de
ibur, preñez, embarazo. Dios.
'idud, estímulo, acicate. ísh, hombre, varón, marido, valiente.
'idud ha-bin, estímulo de la inteligencia. ish jail, héroe, valiente.
Iehovah Eloah va-Daat, Dios manifes- ishé, holocausto, sacrificio, ofrenda.
tado en el Conocimiento, nombre íshgé, crecerá (Salmo 92:13).
divino asociado a la sexta sefirá, íssem, almacenar.
Tiferet, en el trabajo en el Pilar del ited, preparar, disponer.
Centro. itzeb, estabilizar.
Iehovah Elohím, Eterno de los Dioses, iubal, torrente.
nombre divino que se asocia a la íváh, desear, anhelar.
sefirá invisible, Daat, en el trabajo Iyáh, Dios, se pronuncia Adonaí.
en el Pilar del Centro. 'iyén, ver, reflexionar, meditar.
leialael, genio n.º 58 de la Kabbalah. iyésh, humanizar, poblar.
Ieiazel, genio n.º 40 de la Kabbalah. iyum, amenaza, intimidación, espanto.
Iejuiah, genio n.º 33 de la Kabbalah. 'izan, cabra, chivo.
Ielahiah, genio n.º 44 de la Kabbalah. izmel, bisturí.
Ierahtel, genio n.º 27 de la Kabbalah. ]aamiah, genio n.º 38 de la Kabbalah.
iesh, la realidad, lo real. Jabuiah, genio n.0 68 dela Kabbalah.
Iezalel, genio n.º 13 de la Kabbalah. jaburá, herida, llaga.
ifraj, florecerá (Salmo 92:13). jad, uno, único, filo.
Ihevid, Único, Dios. jadash, nuevo.
ihí or, hágase la luz (Gén. 1:3). jaf, ganzúa.

920 V!LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


jafsí, libre. jashoj, ignorante.
jag ha-molad, fiesta de Navidad. jasíd, bueno, piadoso, devoto, jasideo
jai, vida, viviente, efervescente. (ver jasidím).
]ai, Dios Vivo. jasidim, secta judía surgida en Europa
jaíl, fuerza, valor, opulencia. oriental en el siglo XVIII. La palabra
Jaiot ha-Kadesh, Santas Criaturas significa «piadosos».
Vivientes, ángeles de Keter en el jasín, incombustible.
Mundo de la Formación. jásin, fuerte, poderoso, resistencia.
jajam, instruirse. jasúj, oscuro, sombrío.
jala/, espacio. jat, terror, pánico, espanto.
jalalí af lo ejád, mi espacio es ninguno, jatté, pecado, error, delito.
uno de los «mantrams» del vacío. jatzar ha-mamarah, cárcel.
jalam, soñar, ensoñar. jatzí, medio, mitad.
jalatz, librar, expulsar, desembarazar. Javá, Eva, la Madre Primordial.
jalí, enfermedad, dolor. Javakiah, genio n.º 35 de la Kabbalah.
jamad, desear, anhelar. javilah, palacio.
jaman, ira, cólera. Javilah, la tierra rodeada por el río
jamma11, sol, calor. Pisón, uno de los cuatro del Paraíso
Jamael, arcángel de Gevurah en (Gen. 2:11-12).
el Mundo de la Creación. jayah, alma, principio vital.
jamah, sol, calor (ver Shemesh). jayal, soldado.
jamak, escaparse, evadirse. jayim, vida, alimento.
jamudut keshet, encanto o hermosura jaz, pronosticar, profetizar.
del arco iris. Jazak, Fuerte, Dios.
Jannak Maté, Boa Equivocada, nombre jázar, volver, regresar, investigar, girar.
de un personaje del relato «El gusa- jaziz, relámpago, telegrama.
no que no sabía gusanear», incluido jeblé ledáh, dolores del parto.
en la presente obra. jeblé mavet, estertores de la muerte.
jarah, encolerizarse. jedvah, alegría.
jarayáh, palma, hoja de palmera. jej to'ém, buen gusto.
jarul, zarza, espino. jek, pecho.
jarút, torneado, tallado, cono. jelej, pobre, miserable.
jaruz, poesía, rima, ritmo. jemel, compasión.
jas, proteger, salvaguardar, economizar. jen, gracia, belleza. Es el notarikon de
jasa/, asunto concluido, punto final. jokmah nistarah, sabiduría secreta, la
Jasán, ángel regente del Aire, asociado Kabbalah (ver jin).
en el tarot el as de espadas. jenet, germen.
jash, sufrir. jeret, tinta negra.
jáshaj, oscurecerse, empañarse. Jesed, la 4.ª sefirá del Árbol de la Vida
jasháj, pausa, cese. (ver Gedulah). En sentido genérico
jashej, oscuro, sombrío. significa misericordia.
jashmal, electricidad, ámbar. (I Crónicas 29:11).
]ashmalim, Eléctricos o Brillantes, jevíón, secreto, el Templo de Jerusalén
ángeles de Jesed en el Mundo de la jezkim, potencias, fuerzas.
Formación. jibul, embarazo.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 921


jibur, unión, coito. la 4. ª sefirá del Árbol.
jidush, innovación. Kaf autoridad, poder.
jikum, comprensión, picardía, sagacidad. kafatz, apresurarse.
jil, angustia, tormento. kahal IHVH (pr. kahal Adonai), congre-
jilel, matar, profanar, violar. gación del Eterno, el conjunto de los
jiletz, armarse, fortalecerse. creyentes.
jimah, acidificar. Kahetel, genio n.º 8 de la Kabbalah.
jin, gracia, hermosura (ver jen) kajol, color azul.
jishek, componer, ligar, atar. kal, medir (con caf inicial), ligero, livia-
jishjin, calentar. no (con caf inicial).
jituj ha-zahab, la proporción áurea, la Kaliel, genio n.º 18 de la Kabbalah.
divina proporción, 0,6180339887 ... kalah, novia, uno de los títulos de la
jizaión, revelación, apocalipsis. 10.ª sefirá, Maljut.
jizón, alimentarse. kam, levantarse, despertar, en sentido
joáj, zarza, espino, corchete, gancho. simbólico, resucitar.
Jokmah, Sabiduría, la segunda sefirá kam'ah, mies.
del Árbol de la Vida. (Éxodo 31: 3). kanas, multar.
jokmah nistarah, sabiduría secreta, kanetz, límite, término, extremo.
la Kabbalah. Kaporet, el Velo del Templo, barrera
jom, calor, fiebre. del Árbol de la Vida a la altura de
jomer golem, materia prima. Tiferet.
jor, hoyo, hueco, ministro, noble. kar, ariete.
joref invierno. kará, leer, declamar, recitar, anunciar,
Jorsiá, el Trono, un título de Binah. convocar, nombrar, leer la Biblia.
jasad, ungido. karoz, heraldo, pregonero.
josén, fuerza, poder. karpás, apio, perejil (usados en la festi-
joshej,, oscuridad, tinieblas (Génesis, 1:2), vidad de Pésaj, la Pascua judía).
la novena plaga de Egipto. kashob, escuchar con atención.
jotam, sello, marca. Kasiel, ángel regente de Saturno.
joteb etzim, leñador. kaspit, azogue, mercurio.
jover, mago, hechicero, amigo, com- katíf, cosecha, recolección.
pinche. katz, repugnar.
ka-abik, como un alambique, semejante katzaf irritar, enojar.
a un alambique. kavaná, la intención mística que acom-
kaakdut, sacrificio, inmolación. paña a todo acto religioso.
ka-tamar, como una palmera, semejan- kavás, lavar.
te a una palmera (Salmo 92:13). kavod, gloria, en el judaísmo se refiere
kabalah, mística judía, recepción, tra- a la gloria de Dios.
dición, sabiduría secreta, judaísmo kayam be-ruáj, viviente por sí mismo
esotérico. en espíritu.
kaddar, ollero, alfarero. kayán, de grandes testículos.
kadím, este, oriente, viento siroco. ke-abik, semejante a un alambique.
kadish, santo, santidad. ke-erez, como un cedro, semejante a un
kadkod, pórfido, tipo de roca volcánica. cedro (Salmo 92:13).
Kadosh, el Uno Santo, Dios, asociado a kebal, contratista.

922 V1LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


kedesh, santidad. kimah, las Pléyades (con caf inicial),
keev, sufrimiento, dolor. levantamiento, erección (con caf
kefetz, articulación, coyuntura. inicial).
kehilah, la comunidad judía. kinamon, canela.
kehilah kedoshah, la comunidad judía kipur, expiación, perdón.
(en sentido espiritual). Kiyún, otro nombre del planeta
ke'isah, cólera, ira. Saturno (ver Shabetai)
kejal, ubre. klifot, cáscaras, malos espíritus (ver
kelaí, pérdida, destrucción. qlifot).
kelaj, antiguo. kneset, reunión, el Parlamento del
kelalah, maldición, anatema. Estado de Israel.
keles, burla, mofa, alabanza, loa. ko-moáj, aquí hay [está] un cerebro.
kelí, mezquino. koáj, fuerza, vigor, valor.
keres, vientre, abdomen. kodesh, santidad, santo
keret, villa, ciudad. kohen gadol, sumo sacerdote, pontífice.
Kerubim, Querubines, ángeles de kohenet gadolah, suma sacerdotisa.
Yesod en el Mundo de la Formación. kojab, estrella.
kes, silla, asiento, trono, gobierno. Kojab, Mercurio, chakra mundano de
késar, emperador. Hod en el mundo de la Acción.
kesarit, emperatriz kojab shevet, cometa.
kesef, plata, dinero. Kojebet, otro nombre del planeta Venus.
kesél, tontería, necedad, intestinos, kol todo.
entrañas. Kol, Todo, otro nombre de la 9.ª sefirá
késel, confianza, esperanza. del Árbol de la Vida.
kesheb, atención. (I Crónicas 29:11).
keshet, arco, el arco iris (ver qeshet). kol mavet, todo muere, todo es muerte.
keshet gishur, arco [iris] de conexión. Korab, ángel regente de la Tierra,
keshet zijarón, arco iris de la memoria. en concordancia en el tarot con el as
Keter, la primera sefirá del Árbol de de oros.
la Vida, el Espíritu de Dios, se- kas, copa, cáliz.
gún Éxodo 31:3 (ver Or pnimí, ver Kos Tanjumim, Copa de Consolación,
Nekudah Rishonah). En sentido gené- el Grial.
rico significa corona. kosej, deseo, anhelo, añoranza.
ketz, fin, término, destrucción, ruina. kosem, mago.
ketubáh, contrato matrimonial. kotem, color anaranjado.
kevayah, keviyah, confianza. kra, versículo.
kfor, cáliz. kresháh, puerro.
ki-moáj, como un cerebro, semejante a krum, membrana, piel.
un cerebro. kurán, Corán, el libro sagrado del
ki-tov, «que [era] bueno». Islam.
kibush, dominación, presión. kuz, vaso, cántaro.
kihut, mella, embotamiento. kvartz, cuarzo.
kihún, sacerdocio. kvartz bahir, cuarzo transparente.
kijesh, mentir. labán, color blanco.
kilkul, alimentación, manutención. Labán, Labán (Génesis 25,20)

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 923


labah, entusiasmar. lo aní, el no-yo, todo lo que no sea
lahab, llama. sujeto que habla.
lakiáj, combustible, inflamable. lotus, loto.
lalaj, pacer. lulab, rama de palmera.
lamad, estudiar, aprender, instruirse. maajal, alimento, comida.
Lauviah, genio n.º 11 de la Kabbalah, ma'aláh, altura, subida, colina, mérito.
y también el n.º 17. mah?, ¿qué?
laviyán, satélite artificial. Madim, Marte, chakra mundano de
leb, corazón, por su valor numérico, Gevurah en el Mundo de Assiyah.
32, se le considera un símbolo del maftir, liberar.
Árbol de la Vida y sus 32 Senderos magen David, escudo de David, la es-
de Sabiduría, correspondientes a las trella de 6 puntas formada por dos
10 sefirot y los 10 primeros núme- triángulos entrelazados, símbolo
ros, y los 22 senderos subjetivos y actual del judaísmo y del moderno
las 22 letras hebreas. Otros significa- Estado de Israel.
dos: centro, mente, conciencia. mah: ¿qué?, nada (ver Ayin).
leb iam, alta mar. mahal, mezclar, circuncidar.
Lebanon, Líbano (Salmo 92:13). Mahasiah, genio n .º 5 de la Kabbalah.
leb íad, poder del corazón. maj, mediocre, humilde.
Lehajíah, genio n.º 34 de la Kabbalah. majabó. refugio, escondite, asilo.
le-hodiam, les hará saber (Salmo 25:14). majal, enfermedad (escrito con jet),
lejem, pan, alimento. alimento, comida (escrito con ca!).
Lekabel, genio n.º 31 de la Kabbalah. majamad, delicia, gracia, hermosura.
Lelahel, genio n .º 6 de la Kabbalah. majporet, mina.
leshed, grasa, gordura, savia, pulpa. mak, podredumbre, putrefacción.
Leuvíah, genio n .º 19 de la Kabbalah. makom panuí, lugar vacío, libre.
Levanah, Luna, chakra mundano de malaáj, ángel, mensajero.
Yesod en el Mundo de Assiyah (ver malajá, trabajo, labor.
Yareaj, ver Sahar). maljah, reina, se aplica a la Shejinah,
levinah, ladrillo. la Presencia Divina en la tierra.
lí, para mí, a mí. Maljut, la 10.ª sefirá del Árbol de la Vida.
libnah, linfa. En sentido genérico significa reino.
lifním mishurát ha-din, misericordiosa- (Ver Shejind). (I Crónicas 29:11).
mente, no según la letra de la ley. man, maná.
likiví levanah, eclipse de luna. Manakel, genio n. º 66 de la Kabbalah.
likuí meorót ha-eben jefetz, eclipse de maor rúaj Elohím, luz del Espíritu de
luz de la piedra preciosa. Dios (ref,a Génesis, 1:2).
likujim, casamiento, desposorio. marah, espejo.
líkut, recolección. marah ha-bazak, aparición del rayo
lipné ve-lipním, sanctasantórum, en lo (Sefer Yetzirah 1:6)
más profundo. mareh, aparición, aspecto.
litz, bromear. maror, hierba amarga, usada en la co-
lo, no (escrito con álef final), es suyo, mida de Pésaj, la Pascua judía, apio.
le pertenece a él (escrito con vav mashal, gobernar.
final). masoráh, tradición, se refiere sobre

924 V!LLARRUBIA / HAUT / MILLERA


todo a los aspectos materiales de la que es usado ritualmente en la festi-
Biblia, formas de escribir y pronun- vidad de Januká.
ciar las palabras. meod, fuerza, vigor.
massá, viaje, marcha, expedición, itine- meohabim, amantes.
rario, movimiento. meorás, novio, prometido.
Mataná Tová, el Buen Don, otro nom- merjak, lejanía.
bre de la décima sefirá, Maljut. meretz, fuerza, energía.
matat ha-or, regalo de la luz. merkavah, carro, por extensión, el carro
matbil, bautista, el que bautiza. de fuego que se apareció en una
matéh ha-Elohím, vara de Dios (Éx. 18,9) visión a Ezequiel.
matí, mi desplome, mi caída. meshéj, duración, prolongación.
matas, descubrir, hallar. meshí, seda.
mavet, muerte. Meshiáj, Mesías, ungido.
mavó, entrada. meshugá, loco.
mayim, agua, aguas. Metatron, Arcángel de Keter en el
mazal, suerte, destino Mundo de la Creación.
Mazlot, el Zodíaco, chakra munda- metet, caída, desplome.
no de Jokmah en el Mundo de la metinut, templanza.
Formación (ver Apudah). metzar, desfiladero, angustia, tormento.
Mebahel, genio n.º 14 de la Kabbalah. metzavé, gobernante, comandante.
Mebahiah, genio n.º 55 de la Kabbalah. metzer, límite, frontera.
medaber, portavoz, heraldo, persona, meubal, digerido, consumido.
ser humano. meulé, superior, mejor, excelente.
Medinat Yisrael, el actual Estado de meúm, algo (ver meím).
Israel. meunáj, perpendicular, vertical.
mefukaj, inteligente. meushash, firme, fuerte, consolidado.
megulgal, reencamacion. mezuzá, cajita que se pone a la puerta
meim, algo (ver meúm). de las casas judías conteniendo unos
Mejiel, genio n.º 64 de la Kabbalah. fragmentos del Deuteronomio y la
mejpatzáh, cofre. leyenda Shaddai (Todopoderoso) en
mekjar, estudio, investigación, explo- su exterior. Este nombre de Dios es
ración. a la vez el notarikon o anagrama
mekupaj, erróneo. de las palabras Shomer deltot Yisrael,
Melahel, genio n.0 23 de la Kabbalah. «Dios guarda las puertas de Israel».
melaj, sal. mi?, ¿quién?
melej, rey. mi ben koáj?, ¿quién es el hijo de la
Melej Olam, Rey del Universo. Fuerza? («¡Que la Fuerza te acom-
Melejim, reyes, ángeles de Túeret en el pañe!», decían en «La guerra de las
Mundo de la Formación. galaxias»)
memán, hidrógeno. mibhal, separación, distinción, divi-
memer, amargura, mortificación. sión.
Menadel, genio n .º 36 de la Kabbalah. midbar, desierto, en sentido simbólico,
meniá nitzjí, movimiento perpetuo. el atrio de los gentiles o parte más
menorah, candelabro, en general el de exterior del Templo de Jersusalén,
7 brazos, pero también el de 9, palabra.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 925


midvam, muestra, patrón, modelo, nabel, odre, vasija, arpa, lira, laúd.
pauta, principio. naéh, hermoso, agradable, convenien-
mifrash, línea divisoria de las aguas. te, correcto.
migbash, cristalización. naf, vaciado, derramado.
migdal, torre. nagaf, contagiar, derrotar.
migdal or, «torre de luz» (ver migdalor). nahar di nur, la Vía Láctea.
migdalor, faro. naj, descansar.
migdam, pauta, modelo, muestra. najal, engañar.
Mil1ael, genio n.º 48 de la Kabbalah. najal shoten, torrente.
mijmad, delicia, gracia. najash, serpiente, augurio, sortilegio.
mijshol leb, arrepentimiento. najashim, serpientes, orden angélico
Mikael, arcángel de Hod en el Mundo de atribuido a la sefirá oculta, o no-
la creación. Genio n.º 42 de la Kabbalah. sefirá, Daat.
miljamañ, guerra. najoshet, cobre.
miló, fortaleza, plaza fuerte. najshón, osado, arriesgado.
milú, plenitud. najushah, cobre
min, de, desde (indica procedencia). Najushtan, la serpiente que recorre los
min bohu, desde el vado. 22 senderos subjetivos del Árbol
min'al, zapato, cerradura, cerrojo. de la Vida, se dice que simboliza el
mineá nitzjí, el movimiento perpetuo. desarrollo de la consciencia mediante
mishgal, coito. el despliegue de la energía kundalini.
mishkal, ritmo, métrica. nam, donnir.
mishpajah, familia. Nanael, genio n.º 53 dela Kabbalah.
mitzer, atormentar. nasak, subir, elevarse.
Mitzr, Egipto. nasek, sostenido.
Mitzrael, genio n.º 60 de la Kabbalah. nátaf, gotear, rociar, fluir.
mitzvá, orden, mandamiento. natáf, bálsamo.
mizbéj, altar, ara. natef, gajo, uva.
moáj, cerebro. navah, embellecer, hogar, residencia.
moáj benim, cerebelo. nazaj, purificarse, limpiarse.
mohal, savia, zumo. nazal, fluir, verterse.
mokidá, crisol. nazir, nazareno, anacoreta.
masar, moral, ética, castigo, reprensión. neelám, escondido, oculto.
mitzuj, condensación, solidificación. nefel, aborto.
Moshéh, Moisés. nefesh, alma vegetativa, aliento vital.
motzá, nacimiento, salida. negef, tropiezo, obstáculo, plaga, peste.
moval, conducido. Negev, el desierto de Neguev, al sur de
movil ha-sheten, uréter. Israel.
moz, plátano. nehar di nur, río de fuego, la Vía Láctea.
mum, defecto, imperfección, mutila- neilah, cierre, última oración del Yom
ción, invalidez. Kipur, el Día de la Expiación.
Mumiah, genio n.º 72 de la Kabbalah. nejés, riqueza.
musar, ética. nekion, limpieza, pureza.
musikah, música. Nekudah Rishonah, Punto Primordial,
na, móvil, errante. u título de Keter.

926 V!LLARRUBIA / H AUT / MILLERA


Neljael, genio n.º 21 de la Kabbalah. noféj, turquesa, color turquesa, azul
Nemamiah, genio n.º 57 de la Kabbalah. verdoso.
Neptún, el planeta Neptuno. Nogah, Venus, es el chakra munda-
neptunium, neptunio (elemento no de Netzaj en el Mundo de la
radioactivo). Acción.
nes, milagro. notarikon, procedimiento cabalísti-
neshamah, alma propiamente dicha. co basado en el uso de las letras
neshiañ ha-pashút, olvido de la simpli- hebreas que forman una palabra
cidad. como ideogramas o como iniciales
nétef, gota. de otras palabras.
netiyah, erección, deseo, inclinación. Notzer Jesed, Guardián de la
Netzaj, la 7.ª sefirá del Árbol de la Misericordia, otro nombre de la
Vida. En sentido genérico tiene los 5.ª sefirá del Árbol de la Vida (ver
significados de gloria, victoria y Guevurah, Din y Pajad)
eternidad. (I Crónicas 29:11). nuamán, verificado, comprobado.
Netzaj Yisrael, Gloria de Israel, Dios de ob, odre, hechicero, adivino.
Israel, el Templo de Jerusalem. 'ob, viga, umbral.
neveh ha-kodesh, la Tierra Prometida de 'obed, obrero, trabajador.
Israel. ofán, rueda.
nezel, fluidez. Ofán ha-Mazlot, Rueda del Zodíaco.
nezirut, abstinencia, sobriedad, fruga- Ofanim, Ruedas, ángeles de Jokmah en
lidad. el Mundo de la Formación.
ni, aroma. ofek, horizonte.
nibah, avivar, animar, profetizar. ofel, acrópolis.
nibdal, separarse, aislarse. oferet, plomo.
nijoáj, aroma, perfume. ofí yejidah, temple de ánimo.
nijumím, compasión, consolación. ohel ha-'edut, el Arca de la Alianza.
nikebañ, túnel. ojel, alimento.
Nikrah Pshut, el Punto Pequeño, Dios. olam, mundo, universo.
nil, color añil, color índigo. Olam ha-Assiyah, Mundo de la Acción,
nirtzá, esclavo. el cuarto y más denso de los cuatro
nissej, beber. niveles de manifestación, tiene su
nissek, encendido, prendido. asiento principal en la 10.ª sefirá,
nistar, nistarah, oculto, oculta. Maljut.
niter, liberado. Olam ha- Atzilut, Mundo de la
Nith Haiah, genio n.º 25 de la Kabbalah. Emanación, el primero de los cuatro
Nithael, genio n.º 54 de la Kabbalah. niveles de manifestación, tiene su
nither, purificar, limpiar. asiento principal en la Tríada de las
nitzán, brote, pimpollo, botón. Raíces o Suprema, formada por las
nitzuáj, victoria, triunfo, dirección. sefirot Keter, Jokmah y Binah.
nizel, fluir. olam ha-ba, el otro mundo, el más allá,
noáh, llanto, gemido. el mundo futuro en tiempos del
Noaj, Noé, patriarca bíblico, salvado Mesías.
del Diluvio con su familia. Olam ha-Briah, Mundo de la Creación, el
nob, florecer. segundo de los cuatro niveles de ma-

M AN U AL D E K ABBALAH PRÁCTICA 927


nifestadón, tiene su asiento principal nombre de la 5.ª sefirá del Árbol de
en la Tríada de la Ética, formada por la Vida (ver Gevurah y Din).
las sefirot Jesed, Gevurah y Tiferet. paká, cortar, romperse, reventar.
Olam ha-Yetzirah, Mundo de la pakar, ser ateo.
Formación, el tercero de los cuatro pan, dudar, vacilar.
niveles de manifestación, tiene su panuí, vacuidad.
asiento principal en la Tríada del paraj, crecer, florecer, germinar.
Temple de Ánimo, formada por las parak, aliviar, liberar.
sefirot Netzaj, Hod y Yesod. parashah, versículo.
Om meshiaj tam seled lo, «Om, Mesías pardés, paraíso, las cuatro letras
perfecto, alabanza a Él». hebreas que forman esta palabra
Omael, genio n.º 30 de la Kabbalah. aluden a los cuatro niveles de
omék tov, Profundidad del Bien, uno comprensión de un texto, simple,
de los dos polos del eje ético del alusivo, exegético y oculto.
Árbol de la Vida, según el Sefer partzuf rostro, semblante, apariencia.
Yetzirah. pas'uk, versículo, la Biblia.
amen, educador, verdad, veracidad. paz, oro (ver zahab).
ames, carga, peso. pean, la parte no cosechada del campo
on, fuerza, vigor, pena, aflicción, hijo que se debe dejar para los pobres
primogénito. según las prescripciones de Levítico,
'oní, pobreza. 19, 9.
or, luz. péer, adornar, embellecer, glorificar.
'or, piel. pégam, ruda (planta).
or ikarot, luz agradable. pejar, alfarero
or jozer, reflejo. peká, brote, pimpollo, yema, estrépito,
Or Pnimí, Luz Interna, un título de grieta, hendidura.
Keter. perad, repartido, dividido, separado.
oráj, camino. pérek, encrucijada.
oreáj, huésped, viajero. perék, desnudar.
orek ha-tzavar, carótida. Pésaj, la Pascua judía.
orek shel ha-tzavar, yugular. pilpelet, pimiento.
oryán, estudio, enseñanza de la Torá. pilul, oración.
osef tesoro, cosecha. Pisón, uno de los cuatro ríos que cir-
osem, cosecha abundante. cundaban el Paraíso, según el relato
osher, riqueza, opulencia. del libro del Génesis.
ot, letra. / signo. plasma11, plasma.
ot ga, signo o señal del arrogante. Plutón, el nombre de este planeta,
otek, resistencia. es de origen latino.
'oz, fuerza, heroísmo, vigor, majestad, pnim, interior.
esplendor, gloria. pnimí, íntimo, interior.
ozen, oído. po'al, tarea, trabajo.
pag, volatilizarse, desvanecerse. podeh, redentor, liberador, libertador.
Pahalia, genio n.º 20 de la Kabbalah. Poiel, genio n.0 56 de la Kabbalah.
paj, impedimento. potarejem, vagina.
Pajad, temor, espanto, Temor, otro psak din, juicio, justicia, sentencia.

928 V11.LARRUBIA / H AUT / MILLERA


pshat, simple, se refiere al sentido más rishon, primero, primordial.
obvio de un escrito. Rishon Ruaj Elohim, Primer Espíritu
qedesh, otro nombre del arco iris de colo- de Dios (Gén. 1:2).
res astrales que aparece en el Árbol de rittek, unir, ligar, cautivar, interesar.
la Vida a la altura de Yesod, ver qeshet. ritzé, fustigar, recortar.
qeshet, arco, el arco iris (ver keshet) Rohel, genio n.º 69 de la Kabbalah.
qlifot, cáscaras o malos espíritus, los rosh, cabeza, principio, cumbre.
aspectos diabólicos resultantes de la ron, canto himno, alegría.
primera rotura de la Unidad pri- ro'ót, ojos.
mordial (ver klifot). rosh, cabeza, principio, cumbre.
qodesh, santidad. rúaj, viento, soplo, alma, espíritu,
ra, mal, pensamiento. aliento vi tal.
ra'áh, amiga. Ruaj Elohim, Espíritu de Dios (Gén. 1:2).
rá'ah, mal, destruir, asociarse. Ruaj Immá, Espíritu de la Madre,
raamím, truenos. un título de Binah.
rab, maestro. ruaj jayim, soplo de vida, espíritu de
ra'éh, amigo. los vivos.
rakía, firmamento, espacio (Gén. 1:6). ruaj kahah, pesar, depresión.
rafá, sanar, curar, debilitar. rum, altura, elevación.
Rafael, arcángel de Túeret en el Mundo rumó shel olam, la cima del mundo,
de la Creación. Significa «Dios cura». las cosas más importantes.
rajok, remoto, inaccesible. sabah, vieja, anciana, abuela.
ratak, golpear. sabel, carga, peso, sufrimiento.
ram, alto, elevado. safar, contar, numerar.
Ram ve-Nishá, Elevado y Exaltado, Dios. sagá, crecer, subir, elevarse.
rashá, comienzo, inicio. sagé, grandeza, superioridad.
ratak, golpear. sagfanut, ascética.
ratz, mensajero, correo. sagí nehor, ciego.
ratzá, penetrar. sagol, color violeta.
Ratziel, Arcángel de Jokmah en el Sahar, Luna (ver Levanah, ver Yareaj,
Mundo de la Creación. ver Shahar).
raz, secreto, misterio. sajál, toto, idiota.
raz leb, secreto del corazón. sájal, embrutecerse.
reayah, prueba. salah, censurar, humillar.
regel, pie, pierna. Samael, el Demonio.
Rehael, genio n.º 39 de la Kabbalah. sami1c, color púrpura, color magenta.
Reiiel, genio n. 0 29 de la Kabbalah. sanak, rechazar.
reiyah, peregrinación, eyaculación. sandal, zap ato, calzado.
remez, alusivo, es el segundo sentido Sandalfón, arcángel de Maljut en
que puede encontrársele a un escrito. el Mundo de la Creación.
reshit, principio, comienzo. sapán, marino, marinero.
Reshit ha-Gilgalim, los Primeros Sarah, mujer de Abraham.
Estremecimientos, chakra mundano saraf, serafín, un tipo de ángel.
de Keter en el Mundo de la Acción. sarák, púrpura.
rimón, granada. Satán, diablo, demonio.

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 92 9


sbajah, red. shajalah, ovario.
Sealiah, genio n.º 45 de la Kabbalah. shajor, color negro.
seder, arreglo, preparación de la Pascua shakyah, acequia, campo de riego.
judía, división. shalem, entero, completo, acabado,
Seejiah, genio n.º 28 de la Kabbalah. terminado.
sef, umbral. shalom, paz, el saludo usual entre los
Sefarad, España. judíos.
sefer, libro, escrito. shamayím, el cielo, los cielos.
sejirá, sefirot, esfera, esferas, cada uno de shaní, color carmesí, escarlata.
los diez centros principales del Árbol shanot, años.
de la Vida, época/ s, era/ s. sluzr, cantar, entonar alabanzas.
sejel, imprudencia. sharah, empapar, habitar, desanudar.
sejer, dique, presa. sharim, gobernantes, ministros.
sel, cesto, canasto. sharvit, batuta.
selek, acelga. shashar, color bermellón.
sen, grapa. shearim, puertas, medidas, capítulos.
Serafim, Serafines, ángeles de Gevurah shebet barzel, vara de hierro (Salmo 2:9,
en el Mundo de la Formación. y Apocalipsis 12:5).
seteh, libertino. shej, tranquilizarse, serenarse.
sfar, cuenta, empadronamiento, frontera, Shejiná, la Presencia Divina en la tierra.
límite, confín. Es el aspecto femenino de Dios, que se
shaág, bramido, rugido, grito. encuentra exiliada desde la «rotura de
shaal, preguntar, interrogar. los recipientes». El tikún es la misión
shaar, entrada. de Su rescate. Es también el nombre
shabak, abandonar, dejar. dado al Espíritu Santo. En la presente
shabat, el día del sábado, festivo en el obra se le da a veces el nombre de la
judaísmo (con tav final), batir, golpear Divina Princesa. Es también uno de
(con teth final). los nombres que se da a la décima
shabatt, batir, golpear. sefirá, Maljut.
Shabetai, Saturno, chakra mundano de sheket, arco, el arco iris.
Binah en el Mundo de la Acción (ver shel, de, desde (indica procedencia).
Kihún). shel OM, desde el OM, desde el sonido
shabit, cometa. más primordial (concepto de influen-
shad, pecho, seno, teta. cia hindú).
Shaddai, Todopoderoso, Dios. sheled, esqueleto.
Shaddai El Jai, Topoderoroso Dios shelosh regalím, las tres principales fiestas
Viviente. Nombre divino que se asocia judías, consideradas de peregrinación:
a la 9.ª sefirá, Yesod, en el trabajo en el Pascua (Pésaj), Pentecostés (Shavuót) y
Pilar del Centro. Tabemaculos (Sucót).
shafat, preparar, colocar, causar, coci- shem, nombre, cuando va precedido por
nar, cocer. el artículo ha alude al Tetragrama im".
Shahar, Luna (ver Levanah, ver Yareaj, ver Shem ha-Vayah, Nombre Esencial, Dios.
Sahar) Shem ha-Mforash, Tetragrammaton, Dios,
shajak, reír. el Tetragrama im".
shajakah, sonrisa. shemá Yisrael ha-Shem (im") Elohenu ha-

930 V !LLARRUBli\ / HAUT / MILLERA


Shem Ejad, la «shemá», Deuteronomio siper, mejorar, perfeccionar, embellecer.
6:4, profesión de fe judía que se recita sípur, relato, narración.
en los momentos importantes de la sit, palmo.
vida, es espacial en el nacimiento de Sítael, genio n.º 3 de la Kabbalah.
un hijo o en el momento de la muerte. slijá, perdón.
Su traducción es: «Escucha, Israel, sod, secreto, cuando se refiere al sentido
el Eterno, Nuestro Dios, el Eterno es de un texto o escrito es su nivel más
Uno». profundo y escondido.
Shemesh, Sol, chakra mundano de Tiferet sod Adonaí, el secreto del Eterno
(ver Jamah). (Salmo 25:14).
shemí shum ejád, mi nombre es nadie, sof, limite, frontera.
uno de los «mantrams» del vacío. sofitot, las letras que cambian de fonna
shesh, seis (femenino). cuando son finales de una palabra,
shfoferet ha-shajalañ, trompa de Falopio. el singular es sofit.
shibolet zakán, barba. ta, célula.
shijek, reír, hacer travesuras. tabur ha-afán, cubo de la rueda.
shikutz, abominación, impureza. tajas, agarrar, tomar, conquistar,
shilyah, placenta. adquirir.
shimjañ, gozo, alegría. tafés, comprensión, entendimiento.
shinuí, cambio, proceso, movimiento. tahut, error, equivocación.
shir, canto, himno. tájol, azul celeste.
shit, vestidura. tajól, azul oscuro.
shitef asociar, participar. tal, rocío.
shitím, acacias. taluí, colgado, ajusticiado.
shjak, risa, alegría, entretenimiento, tam, perfecto, completo.
juego. tamar, palmera.
shloshañ, el número 3 masculino. tan, chacal.
shmirah, conservación. tar, explorar, investigar, espiar.
shomem, desierto, vacío, desolado, tas, bandeja.
solitario. tashub, tornarás, volverás
Shomer, Guardián, Dios. (Gén. 3:19), la palabra dicha por
Shomer Yisrael, Guardián de Israel, Dios. Dios a Adán después del pecado
shoresh, shorsim, raíz, raíces. original: «Polvo eres y al pol-
shyar, viajero. vo volverás». Según Annick de
Sibat ha-Sibot, Causa de las Causas, Dios. Souzenelle, significa volver a la
sibéj, injertar, enredar, complicar. esencia primigenia, de ahí que el
sidder, solucionar, resolver, arreglar. arrepentimiento o conversión
sikaión, contemplación, esperanza. (v. teshubah) derive de esta palabra.
silá, pesar, evaluar. tat, debajo.
simán, augurio, presagio. te'alañ, acequia, acueducto, canal, estre-
Sinaí, el monte en el que Moisés recibió cho, remedio, medicamento.
de Dios las tablas de la Ley, según el Tebunah, Inteligencia, otro nombre de la
relato bíblico, actualmente pertenece 3.° sefirá del Árbol de la Vida
a Egipto. (ver Bínah). (Éxodo 31:3).
sinnek, apartar, rechazar. tefilín, filacterias.

MANUAL DE KAB BALAH PRJ\CTI C/\ 931


tehilím, el Libro de los Salmos. toabot, abominaciones.
tehom, abismo (Gén. 1:2), barrera del toda'á, consciencia.
Árbol de la Vida que separa las tres todah, agradecimiento, glorificación,
esferas superiores (v. Arij Anpin) de las alabanza.
siete inferiores (v. Ze'ir Anpin). tohu, caos, vacío, laberinto.
teimah, armonía. tohu ve-bohu, caos y vacío, estado de la
tejel, fin, término. tierra en los primeros instantes tras
tejelet, color azul celeste. la creación (Gén. 1:2)
tejunah, cualidad, preparación, proyecto, tom, simplicidad, sencillez.
astronomía. tomej, sostén, ayuda, apoyo.
tejushah pnimit, intuición, percepción Torá, ley, enseñanza, nombre dado
interior. al conjunto de los cinco primeros
teker, pind1azo. libros de la Biblia, Génesis, Éxodo,
Telihed, ángel regente del Agua, asociado Levítico, Números y Deuteronomio.
en el tarot al as de copas. Se supone que la Torá contiene en
temurá, procedimiento cabalístico basa- . lenguaje cifrado la totalidad del
do en permutaciones de las letras de saber.
las palabras hebreas, cambio, trueque toref iad, debilidad, mano blanda.
o permuta. tov, bueno, bien, útil, hermoso.
teshubah, arrepentimiento. tugah, tristeza, melancolía.
teshuknh, teshukot, deseo(s). tus, volar.
tevel, impureza. tvai, marca, señal, ruta.
tibe/, universo, mundo (ver ha-tebel). tza'ar, empequeñecer.
Tiferet, la 6." sefirá del Árbol de la tzaboá, hiena.
Vida. En sentido genérico significa tz.abuá, hipócrita.
belleza. (1 Crónicas 29:11). tmd, adversario, cazar.
til, proyectil, misil. tzadik, justo (Salmo 92:13).
tikún, reparación, restitución, la misión Tzadik, el Uno Justo, Dios.
sagrada que cada ser humano trae al Tzadik kn-tamar ifraj ke ere-z ba-Lebanón
nacer para realizar durante su vida. isgé, «El justo como palmera florecerá,
La esencia del tikún es el rescate de la como cedro en el Líbano crecerá».
Shejiná, que a semejanza de una prin- (Salmo 92:13)
cesa, se encuentra secuestrada en un Tzadkiel, arcángel de Jesed en el Mundo
oscuro castillo por un dragón que es el de la Creación.
símbolo de la ignorancia. Tzajkiel, arcángel de Binah en el Mundo
El cumplimiento del tikún lleva apareja- de la Creación.
do el completo perdón de los pecados, tzal(, asado.
no sólo de los propios, sino también los tzam, ayunar.
de los padres y los de los hijos, lo que tzé, sal, fuera (nace: orden que el orga-
en otras palabras, y usando termi- nismo de la madre da al feto al llegar
nología hindú, significa la liberación el momento del nacimiento).
definitiva del karma. tzear, dolor, aflicción.
tikvañ, esperanza. Da título al himno del tzedek, justicia (en sentido interno),
Estado de Israel. equilibrio (ver din), piedad, rectitud,
tivej, mediar, intermediar. virtud, salvación.

932 ViLLARRUBIA / H AUT / MI LLERA


Tzedek, Júpiter (ver Gabab). Ve elé shemot, «Y estos son los nom-
tzefek, peritoneo. bres», primeras palabras hebreas del
tzefet, capitel. Libro del Éxodo, las cuales sirven
tzel, sombra. a la vez como título de dicho libro
tzela, costilla, tórax, busto, cateto. en las Biblias hebreas. A veces se
tzelem, imagen, figura. abrevia en Shemot.
tzelilut hil-daat, lucidez, con todas sus ve-gam meshúij tam seled lo, y también el
facultades. Mesías [es] perfecto, alabanza a él.
tzemitut, eternidad, perpetuidad. ve-ihíken, y fue así.
tzepajat hil-mayím, botijo. vedá, información.
tzera, sien. Vehuel, genio n.º 49 de la Kabbalah.
tzeruf be-olam, inserción en el mundo. Vehuíah, genio n.º 1 de la Kabbalah.
tzet, salir. Vewalia, genio n.0 43 de la Kabbalah.
tzi'er, afligir, atormentar. ya'ar, panal de miel, bosque.
tzináh, frío, resfriado, escudo, muralla. ya'ar bereshit, selva virgen.
tziruf, variante del método cabalístico Yabamiah, genio n.0 70 de la Kabbalah.
de la temurá, consistente en efectuar Yabok, el vado que pasó Jacob cuando
todas las permutaciones posibles de fue a reconciliarse con su hermano
las letras de una palabra. Esaú (Gén. 32:23). Símbolo de la
tzitz, diadema, guirnalda, corola, flor. reconciliación entre personas que
tziur, dibujo, figura, imagen, idea, des- estaban enemistadas.
cripción, concepto. Yadayim, un tratado del Talmud que
tziyetz, gorjear, trinar, silbar. regula lo relativo a la impureza de las
tzlab, cruz. manos y su purificación. La expresión
tzlaj, hender, atravesar, lograr, conseguir, significa «las dos manos».
triunfar, aparecer, surgir, manifestarse. Yah, Dios, se pronuncia Adonaí.
tzohel, contento, gozoso. Yahvé, pronunciación aproximada del
tzofé, observador, profeta, explorador. Tetragrama o nombre de Dios, i1ff.
tzon, twnan, rebaño, manada. Los judíos no lo pronuncian, sustitu-
'ul, criatura, bebé. yéndolo por Adonaí o hil-Shem.
Umabel, genio n.º 61 de la Kabbalah. Yahvé Tzebaot, Señor de las Huestes, Dios
un, madeja de hilo. (pron. «Adonaí Tzebaot»).
'upal, alto, elevado. yajad, unirse, asociarse.
va!, ¡hurra! yanshuf, buho.
va-ihí-ereb va-ihí-bóker iom... «y fue tarde, yará, temblar, vacilar.
y fue mañana, día... », fórmula em- yareaj, luna, mes (ver Levanah, ver Sahilr).
pleada por el Libro del Génesis para yarkrak, color amarillo limón o verde
indicar el final de cada uno de los días lima.
en que divide a la creación. yarok, color verde.
va iomer Elohim, «y dijo Dios» (Gén. 1:3). yasad, fundar, establecer.
valiarianah, valeriana. yatzak, vaciar.
Vasariah, genio n.0 32 de la Kabbalah. yatzak 1nayim al ídé, ser alumno o discí-
Ve, el nombre más oculto de Dios, pulo de alguien.
no se pronuncia o se sustituye por yazmah, iniciativa.
Adonaí. Yehova Eloah ba-Daat, Yehova Eloah ve-

M ANUAL DE KAlll3ALAH PRÁCTICA 933


Daat, Dios Manifestado en la esfera de zan, alimentar, nu~ alimento.
la Mente o del Conocimiento. No es zanañ, prostituirse, venderse.
w1a expresión judía, la propone Israel záraj, salir el Sol, brillo, resplandor.
Regardie como «mantra» para el tra- zaro'ot, brazos.
bajo en el Pilar del Medio (ver Iehovah zaruáj, resplandeciente, brillante, reful-
Eloah ba-Daat, Ielwva Eloah ve-Daat) gente.
Yehova Elohim, Eterno de los Dioses, un zarzif chorro, brote.
nombre divino que se asocia a la sefirá zavug, atado, apareado.
oculta, o no-sefirá, Daat. zebajim, ofrendas, sacrificios, matanzas,
yejidah, alma, el principio de individua- es además el nombre de un tratado
ción, el nivel más elevado del alma, del Talmud que regula estos aspectos.
la consciencia cósmica, significa uni- Zebul, el Cuarto Cielo, otro nombre de la
dad y singularidad. sexta sefirá, Tiferet.
Yeliel, genio n.º 2 de la Kabbalah. zedón, con intención, adrede, fogoso,
yeraj, mes. furioso, violento.
Yesod, la 9.ª sefirá del Árbol de la Vida Zeh, Dios
(ver Kol). En sentido genérico significa zeh, éste (el más próximo).
fundamento. Ze'ir Anpin, el Pequeño Rostro, con-
Yeyayel, genio n.º 22 de la Kabbalah. junto formado por las siete sefirot
yi'er, forestar, plantar bosques. inferiores del Árbol de la Vida.
yihud, designación, fijación, separación, zened, codo.
aislamiento. zihyón, orgullo, esplendor.
yijed, unificar, unir. zikañ, purificar.
yizkor, recordará, nombre de una oración zikarón, zikúr, recuerdo, memoria.
que se reza en memoria de los muertos. zikúj, limpio, puro, diáfano.
Yomá, un tratado del Talmud que regula zikur, recuerdo.
el ritual a seguir el Yom Kipur, día del zil, barato, llovizna.
Perdón. zim zum, contracción, en Kabbalah,
Yotzer Reshit, Creador del Principio, la contracción inicial del Ayin Sof que
Dios. originó la primera manifestación.
za, moverse, trasladarse, horrorizarse. ziv, luz.
za'af tempestad. zivug, casamiento, unión conyugal,
zabal, habitar, W1ir. cópula, pareja.
wd, malvado, perverso. zkán Eliyahu, ajenjo («barba de Elías»).
zadañ, fisura, fractura. zkán shibolét, punta de la espiga.
whab, oro (ver paz) zman, tiempo.
zahob, color amarillo. zmaní af pa'am lo, mi tiempo es nunca,
zajar, recordar. uno de los «mantrams» del vacío.
zafar u-nekebañ brama, varón y hembra Zohar, un tratado cabalístico.
los creó (Génesis 5:2). zoken, anciano, sabio.
zajúj, diáfano. zonah, prostituta.
wkan, barba. zvad, valija, maleta, equipo de soldado.
zam, zamam, pensar, discurrir.

934 VII.LARRUBIA / HAUT / MILLERA


APÉNDICE 2
Propuesta para desarrollo en hoja de cálculo
de datos y gráficos de ciclos combinados

Los ciclos combinados son, según se expone en el cuerpo prin-


cipal de la obra, la consecuencia de que el día y el año de naci-
miento pertenecen a la misma familia de números. El resultado es
un ciclo de cierta complejidad, tal como recogen las figuras 40
a 43. Por ello resulta aconsejable presentar una propuesta de
programa para hoja de cálculo tipo Excel que resulte fácil de
desarrollar a quienes tengan unos mínimos conocimientos de
informática.
El principio es muy simple. Tanto el ciclo corto como el largo
pueden representarse mediante una curva de tipo seno, es de-
cir, un sinusoide. Tras un arranque en el nacimiento que siem-
pre es un hecho de gran impacto, tal como han demostrado
las investigaciones sobre el trauma perinatal desarrolladas por
Stanislav Grof (ver referencias bibliográficas), la curva asciende
hasta un máximo 1 tras el cual desciende hasta el mínimo, para
retornar finalmente al punto inicial. Cuando ambos ciclos coin-
ciden en los mismos senderos, dentro de cada uno de los largos
se desarrollan a su vez varios cortos completos y en ocasiones
también una fracción regular de los mismos. Por lo tanto, pro-
cede calcular para cada momento cuál es el valor de cada cur-
va, y sumar ambos. Adicionalmente, si el sendero o senderos
afectados por el ciclo combinado tienen líneas fijas, habrá que
sumar tantas unidades como líneas de este tipo haya.
El desarrollo de las curvas se representa por la función seno,
lo mismo que en el conocido caso de los biorritmos. Ahora bien:
sería sumamente prolijo desarrollar el cómputo instante a instan-
te, e incluso día a día1 por lo que hemos optado por una fórmu-
la simplificada que consiste en calcular los valores mensuales.
De esta manera, como la duración del ciclo corto se calcula en meses,
es fácil pasar el ciclo largo también a esta unidad, para facilitar la
suma de los valores de la amplitud de ambos.
Las instrucciones que siguen deben interpretarse como una
sugerencia para lectores no demasiado entendidos en infor-

MANUAi. OF. KABBAI.AH PRÁCTICA 935


mática, aunque sí con algunos conocimientos de ella. Para los
legos en esta materia que deseen iniciarse a través de estas lí-
neas, una breves indicaciones acerca de la estructura y funcio-
namiento de las hojas de cálculo.
Una hoja de cálculo, como la denominada Excel, de Micro-
soft, es un gran cuadro de casillas, designadas por letras en sus
columnas y por números en sus filas . Es posible relacionar las
cantidades de una casilla con la de otra mediante fórmulas ma-
temáticas, para calcular determinadas magnitudes. También es
posible simplemente escribir palabras y frases, que lógicamen-
te serán tratadas como texto y no como expresión matemática.
Sin embargo, ciertas palabras previamente codificadas en el
propio programa se incluyen en la expresión de las fórmulas
matemáticas. Toda introducción de un dato o fórmula matemá-
tica debe ir precedida del signo igual (=), aunque en ciertos ca-
sos este signo puede sustituirse por los signos más (+) o menos
(-). Además, es posible copiar un dato, frase de texto o fórmula
matemática, desde la casilla en la que se encuentra, pegándola
en otra diferente. Si queremos que el dato que se copia no varíe
cuando se hace una copia para múltiples casillas (lo que sucede
en la propuesta que se hace a continuación) se utiliza el signo
dólar ($) para indicar que siempre copiamos de la misma casi-
lla; si se quiere fijar la casilla en horizontal y en vertical, usare-
mos este signo dos veces. Así, si queremos copiar el dato, texto
o fórmula de la casilla A2, deberemos escribir $A$2.
Como es obvio todas estas explicaciones son elementales para
las personas habituadas a manejar este potente instrumento de
cálculo, pero quizá resulten complejas para los principiantes:
todo consistirá en que se sitúen frente al ordenador y prueben
y ensayen. Veamos, pues, el desarrollo de la hoja de cálculo.
CLAVES CONVENCIONALES: Las instrucciones se han
dividido en fases, para mayor claridad. Cada una de ellas va
precedida de un encabezamiento encerrado en un recuadro,
con las indicaciones 'Casilla' y las indicaciones de «Texto», Co-
mentarios, Número, Fórmula y Orden. Bajo la palabra 'Casilla'
se indica el cruce de verticales y horizontales de la hoja, que
están definidas respectivamente por una o dos letras y por un

93 6 VILU\RRUB IA / H AUT / MILI.ERA


número, cruce en el que debe situarse el cursor en cada mo-
mento. Las frases bajo la palabra «Texto» pertenecen siempre
al encabezamiento de cada una de las columnas de la hoja: apa-
recen entre «comillas», aunque no hay que ponerlas al escribir
las palabras; esta columna no se inserta a partir de la fase 3, por
innecesaria. Bajo el encabezamiento 'Número' se indican con
escritura recta los que deben escribirse en la casilla indicada
a la izquierda, al principio de la línea, precedidos siempre del
signo +; tampoco se incluye esta columna en la fase 2 y a partir
de la fase 4, ya que no es necesario introducir más cantidades
directamente, sino que las resultantes proceden de las fórmu-
las calculadas por el propio programa. Las fórmulas, órdenes
y comandos se indican en letra negrita, también a la derecha;
cuando aparece en ellas una palabra en mayúsculas debe escri-
birse en la fórmula con todas sus letras, y con el cursor situado
en la casilla que se indica. Las fórmulas van siempre precedi-
das del signo= o del signo +. Si la orden se imparte usando el
menú de la parte superior de la pantalla aparece recuadrada.
Los comentarios y explicaciones se incluyen en letra bastardilla,
hacia el centro, y son aclaraciones para hacer más compren-
sible las instrucciones para crear el programa, pero no deben
escribirse en la hoja de cálculo. Los signos de multiplicación y
división son, respectivamente,* y /, cuyas teclas están situadas
en la parte derecha del teclado. (Nota: en los ordenadores por-
tátiles el teclado puede tener diferente estructura).
Fase 1: Introducción de datos de duración de ciclos, y transforma-
ción de ciclo largo a meses.

M ANUAL DE KABBA LAH PRÁCTICA 93 7


Casilla «Texto» Comentarios Número Fórmúla Orden
«Duración
81
ciclo corto»
+meses
D1
ciclo corto
El «Meses»
«Duración
82
ciclo largo»
Esta fórmula transforma
D2 la duración en años en =E2*12
duración en meses
+años
E2 ciclo largo

Fase 2: Preparación del encabezamiento.'

Casilla «Texto» Comentarios


GS «Sendero» Dejar espacio para escribir el número del sendero
HS «Sendero» Dejar espacio para escribir el número del sendero
15 «Sendero» Dejar espacio para escribir el número del sendero
A6 «Mes»
86 «Valor mes»
C6 «Valor año»
D6 «Seno mes»
E6 «Seno año»
F6 «Suma senos»
G6 «Suma+fijo»
H6 «Suma+fijo»
16 «Suma'fijo»
Las columnas G, H e I se utilizan en el caso de que
sean varios los senderos de la misma familia de núme-
ros afectados por el ciclo combinado y tengan diferen-
te número de líneas fijas unos respecto de otros. Si no
hay líneas fijas no se utilizan, y si tienen todos o dos
de ellos el mismo número de líneas fijas se usa sólo la
columna G, o bien la G y la H en caso necesario.

Fase 3: Creación de la columna de tiempo, en meses.

938 VILLARRUBIA / HAUT / MILLERA


Casilla Comentarios Número Fórmula Orden
A7 +1
A8 +A7+1
Poner cursor en A8
(en menú parte Edición
superior de la pantalla) Copiar
Mantener apretada la
tecla de mayúsculas (ir)
A8 a Pasar el cursor -desde A8
A906 hasta A906 usando la tecla
«Av.Pág». o la flecha hacia
abajo ('1-i) hasta cubrir la
rnl,,mn~
(en menú parte supe- Edición
rior de la pantalla) Pegar
La columna A deberá
aparecer escrita desde
el número 1 hasta el
900, mes equivalente a
una edad de 75 at'íos.
Esta columna puede
alargarse o acortarse a
voluntad.
Fase 4. Transformación del tiempo en meses en número de veces
que se repite el ciclo corto.

M A N UAL D E KABBALAH PRÁCTICA 939


Casilla Comentarios Fórmula Orden

Esta fórmula crea la fracción


de ciclo corto correspondiente
al primer mes. El uso del signo
B7 $ sirve para fijar la casi lla 01 =A7/ O$1
como divisor de la fórmula, de
tal modo que se mantenga inva-
riable en sucesivas divisiones
Poner cursor en B7
(en menú parte superior de la Edición
pantalla) Copiar
Mantener apretada la
tecla de mavúsculas (ir)
Pasar el cursor desde
B8 hasta B906 usando
B8 a la tecla «Av.Pág». o la
B906 flecha hacia abajo (,J.,)
hasta cubrir la columna.

(en menú parte superior de la Edición


pantalla) Pegar
La col umna B deberá aparecer
con números que irán creciendo.
Las unidades de la parte entera
indican el número de veces que
se repite el ciclo corto, y los de-
cima les, las fracciones del ciclo
corto siguiente.

Fase 5. Transformación del tiempo en meses en número de veces


que se repite el ciclo largo

B 940 VILLARRUBIA / H AUT / MILLERA


. .,
Casilla Comentarios Fórmula Orden

Esta fórmula crea la fracción de ciclo


corto correspondiente al primer mes.
El uso del signo $ siive para fijar la
C7 =A7/D$2
casilla 02 como divisor de la fórmula,
de tal modo que se mantenga invaria-
ble en sucesivas divisiones
Poner cursor en C7
(en menú parte superior de la pan- Edición
talla) Copiar
Mantener apretada
la tecla de mayúscu-
las ('fr)

Pasar el cursor
desde C8 hasta
C906 usando la
C8 a tecla «Av. Pág». o la
C906 flecha hacia abajo
(,J.,) hasta cubrir la
columna.
Edición
(en menú parte superior de la pantalla)
P P P::ir
~

La columna C deberá aparecer con


números que irán creci endo. Las
unidades de la parte entera indican
el número de veces que se repite
el ciclo largo, y los decimales, las
fracciones del ciclo largo siguiente.
Continuación del cuadro anterior, Fase 5

Fase 6. Cálculo de la amplitud del ciclo corto cada mes.

MAN UAL DE KABBALAH PRÁCTICA 941


Casilla Comentarios .Fórmula Orden
Esta fórmula calcula
la amplitud del ciclo
D7 corto el primer mes. =SENO(B 7*2 *3, 14159)
La función SENO es
la apropiada para ello
Poner cursor en 07
(en menú parte supe- Edición
rior de la pantalla) Copiar
Mantener apretada la
tecla de mayúsculas
( 1r)
Pasar el cursor desde
D8 hasta D906 usan-
08a do la tecla «Av.Pág».
D906 o la flecha hacia aba-
jo ('V) hasta cubrir la
columna.
(en menú parte su- Edición
perior de la pantalla) Pegar

La columna D deberá
aparecer con números
que irán creciendo y
decreciendo alterna-
tivamente de positivo
a negativo y viceversa
con valores extremos
comprendidos entre
+1 y -1.

Fase 7. Cálculo de la amplitud del ciclo largo cada mes.

942 YILLARRUBIA / H AUT / MILLERA


Casilla . ··comentarios Fórmula Orden
:.
Esta fórmula calcula
la amplitud del ciclo
E7 largo el primer mes. =SENO(C7*2*3, 14159)
La función SENO es la
apropiada para ello

Poner cursor en E7

(en menú parte supe- Edición


rior de la pantalla) Copiar

Mantener apretada
la tecla de mayús-
culas (ir)

Pasar el cursor
desde E8 hasta
E906 usando la
E8 a
tecla «Av.Pág». o la
E906
flecha hacia abajo
(w) hasta cubrir la
columna.

(en menú parte supe- Edición


rior de la pantalla) Pegar
La columna E deberá
aparecer con números
que irán creciendo y
decreciendo alterna-
tivamente de positivo
a negativo y viceversa
con valores extremos
comprendidos entre
+1 y-1.

Fase 8. Cálculo de la amplitud del ciclo combinado cada mes en las


líneas variables.

M ANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 943


.. ,.-, '
Casilla ·comentarios Fórmula Or9~n
. .
~ '
Esta fórmula calcula la am-
plitud del ciclo combinado el
F7 primer mes, que es la suma +D7+E7
de las amplitudes de los dos
ciclos, corto y largo

Poner cursor en F7
(en menú parte superior de la Edición
pantalla) Copiar
Mantener apretada la tecla
de mayúsculas ('fr)
Pasar el cursor desde FB
hasta F906 usando la tecla
F8 a
«Av.Pág». o la flecha hacia
F906
abajo (,J.,) hasta cubrir la
columna.

(en menú parte superior de la Edición


pantalla) Pegar

En la columna F deberá aparecer


cubierta con números que irán
creciendo o decreciendo, con
valores extremos entre +2 y -2.

Si los senderos (siempre de la misma familia de números)


que están afectados por el ciclo combinado no tienen líneas fijas,
los valores del ciclo son los hallados, que quedan recogidos en la
columna F, quedando sin utilizar las columnas G, He I. Cada paso
de positivo a negativo a viceversa indica el momento de una crisis.
Los valores máximo y mínim o del sendero serán 2 y -2, respecti-
vamente.
Si el sendero o senderos tienen una línea fija, situaremos el cursor
en G7, escribiendo la fórmula +F7+ 1, quedando de esta forma reco-
gida la amplitud del ciclo el primer m es. Situando el cursor en G7,
usaremos la función Copiar, extendiendo como en los casos ante-
riores la señal para Pegar desde la casilla G8 hasta la G906. Cuan-

944 VILLARRUB IA / HAUT / MILLERA


do el valor de una casilla sea menor de 0,1 consideraremos que hay
crisis, y cuando sea superior a 2,9, anticrisis. Los valores máximo y
mínimo del sendero son en este caso 3 y -1, respectivamente.
Si el sendero tiene dos líneas fijas, situaremos el cursor en G7 (o en
H7, si la columna G está ya ocupada), escribiendo la fórmula+ F7+2,
procediendo a continuación como en el caso anterior. Las crisis
vienen indicadas por la proximidad a O: a efectos prácticos, cuan-
do el valor sea inferior a 0,10. Las anticrisis son como en el caso
anterior en los valores a partir de 2,9, aunque desde que alcanzan
este valor hasta alcanzar el máximo se pueden considerar como
en gestación, produciéndose el estallido a partir del máximo.
Los valores máximo y mínimo son en este caso de 4 y O, no pasan-
do nunca a valores negativos.
Para tres o más líneas fijas se procederá como en los casos ante-
riores, siendo la fórmula de arranque de la columna +F7+3. En este
caso, el valor de amplitud máxima es igual al número total de lí-
neas (fijas y variables) del sendero, y el mínimo, el máximo menos 4.
No hay crisis en estos casos, y sí sólo anticrisis, con las mismas
magnitudes y condicionantes que en el caso anterior.
Es posible dibujar el gráfico o gráficos correspondientes a los
datos anteriores, usando el «Asistente para gráficos» que figura en
el menú de la hoja de cálculo, normalmente en su parte superior.
Se trata de una herramienta de fácil uso, que se aprende sin difi-
cultades en poco tiempo con las instrucciones que proporciona el
mismo programa, pudiendo mejorarse la presentación inicial con
la función «Formato», una vez realizado el gráfico. Dado que las
modernas versiones de Excel tienen en cada «libro» (así se llama
el campo general de trabajo) tres «hojas», es recomendable reali-
zar el gráfico en una hoja diferente de la que contenga los datos.
Para ello, bastará con fijar la columna en la que están recogidos
los datos finales, usando el mismo procedimiento indicado en los
párrafos anteriores para la función Pegar, y seguidamente pinchar
con el cursor el icono «Asistente para gráficos». Según va pidien-
do instrucciones, elegir la hoja 2, si los datos están en la hoja l.
Es conveniente utilizar un gráfico de tipo líneas, que es el que me-
jor recoge la evolución del ciclo. Los sucesivos pasos están indi-
cados en cada uno de los sucesivos menús del Asistente para grá-

MANUAL DE KABBALAH PRÁCTICA 945


ficos. Se recomienda prescindir del paso 2, puesto que los datos
del gráfico estarán ya preparados, así como eliminar la leyenda,
por innecesaria (paso 3), y colocar el gráfico en la hoja 2 (paso 4).
Para poner título o mejorar la presentación puede utilizarse el co-
mando «Formato» del menú principal (en la parte superior de la
pantalla), tras «pinchar» el aspecto del gráfico que deseemos me-
jorar: línea de la curva, fondo, título, etc.

946 VILLARRU131A / HAUT / MILLERA


APÉNDICE 3
Sugerencias de uso del Juego del Rocío

El Rocío es un juego de ayuda para profundizar en el estudio de la


Kabbalah. Está compuesto por 39 cartulinas o fichas de 5 x 8 cm.
De ellas, 27 contienen las letras hebreas (22) más las 5 finales. Estas
fichas tienen en su parte superior derecha el valor numérico de
cada una, acompañado, en el caso de las letras finales, con el valor
numérico alternativo de éstas dentro de un rectángulo amarillo en
su parte superior izquierda.
Las tres letras madres, ~. ~. ~, llevan sobre la letra un indi-
cativo del elemento asociado, aire (en azul claro), agua (en verde
claro) y fuego (en rojo anaranjado), respectivamente. Por su parte,
las siete letras dobles, _:j, ~. ,, ~. 1, ,, M, llevan sobre ellas el signo
en negro de cada uno de los siete planetas tradicionales. Finalmen-
te, las doce letras simples, ii, \ i, M, C, ~, ~. J, O, V, ¡t, incluyen el
signo zodiacal correspondiente, en color azul. Debajo de la cada
letra aparecen escritas en letras mayúsculas rectas de color negro
los conceptos que según el Sefer Yetzirah están asociados con ella,
y en letras minúsculas itálicas (inclinadas) de color rojo malva sus
significados más comunes.
De las 12 fichas restantes, 10 corresponden a las sefirot del Ár-
bol de la Vida, con una breve indicación de sus significados y sus
nombres en hebreo con la correspondiente pronunciación. Todas
ellas aparecen dibujadas con los colores según el nivel de Briah en
un círculo, en el que aparece el signo planetario asociado. Incluyen
el nombre hebreo, el significado o significados de dicho nombre en
español, y una breve indicación de sus significados, que en todo
caso deberán completarse con los contenidos de la obra. Dos fichas
adicionales, correspondientes al propio Árbol de la Vida en su con-
junto y al nivel de inmanifestación (representado por el Ain Sof,
o Infinito) completan el total de 39.
El Juego del Rocío admite muchas variantes. Se sugieren al-
gunas:
• Usar de forma semejante a un tarot, asociando las letras a los
senderos subjetivos del Árbol de la Vida y a los arcanos rna-

MANUAL DE KABBALAK PRÁCTICA 947


yores, las letras finales a los cinco puntos de cruce del Árbol,
las cartas de las sefirot a cada una de ellas, y las cartas «Árbol
de la Vida» y «Ain Sof Or» como avisos respectivos de «Ver la
situación en su conjunto» y «Esperar».
• Sacar al azar tantas fichas como senderos con cargas especiales
haya en el Árbol personal. Sobre un dibujo del propio Árbol
personal, colocar boca abajo las cartas en las posiciones de di-
chos senderos, y después decubrir las cartas una por una. Pues-
to que el Árbol es una representación holística en cada uno de
sus puntos está su totalidad: ¿están las cartulinas «en su sitio»,
o llaman la atención sobre las relaciones que el sendero con car-
ga especial tiene con el aspecto r~presentado por la cartulina
que ha caído sobre él?
• Sacar tres fichas al azar. La primera representa el SÍ, lo que se
desea, y por tanto aquello de lo que se carece desde el punto
de vista subjetivo. La segunda será el NO, lo que se rechaza
en el momento actual. La tercera representa el RETO que nos
presenta la vida en este momento. Es un juego similar al de la
«Frontera», ya expuesto en la VI Parte de la obra.
Pueden montarse otros muchos juegos y consultas, o plantearse
las fichas como una herramienta de apoyo a la meditación.

948 VILLARRUB IA / HAUT / MILLERA

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