Está en la página 1de 60

11 LEUCEMIAS.

CONCEPTO
Y CLASIFICACIÓN.
LEUCEMIAS AGUDAS
Á. Figuera Álvarez, J. Sierra Gil

Introducción. Clasificación. Etiología y patogenia. Leucemias agudas.


Clasificación de las leucemias agudas: de la morfología a las técnicas genéticas.
Clasificación pronóstica de las leucemias agudas. Cuadro clínicos de las leucemias agudas.
Datos de laboratorio. Diagnóstico y diagnóstico diferencial. Factores pronósticos. Tratamiento

INTRODUCCIÓN ción orgánica por acumulación. Es-


tas enfermedades son rápidamente
Las leucemias conforman un grupo fatales sin tratamiento, pero en su
heterogéneo de neoplasias clonales que mayoría responden a las terapias
surgen de la transformación maligna de actuales y pueden curarse.
las células hematopoyéticas. Su caracte- • Leucemias crónicas: las células
rística común es el acúmulo de las cé- malignas transformadas conservan
lulas malignas anormales en la médula cierta capacidad de diferenciación,
ósea y en la sangre, lo que provoca fallo por lo que esta entidad es menos
medular (anemia, neutropenia y trom- invasiva. Los pacientes sufren un
bopenia) e infiltración de órganos (híga- curso natural de la enfermedad más
do, bazo, ganglios linfáticos, meninges, lento y crónico.
cerebro, testículos o piel).
Las leucemias agudas y crónicas pue-
CLASIFICACIÓN den clasificarse, a su vez, considerando
la línea celular proliferante, en linfoides y
Las leucemias pueden clasificarse se- mieloides (o no linfoides). Por tanto, exis-
gún el grado de diferenciación celular en: ten leucemias agudas mieloides (LAM)
y leucemias agudas linfoides (LAL), así
• Leucemias agudas: son enfermeda- como leucemias crónicas mieloides (LCM)
des usualmente invasivas en las que y leucemias crónicas linfoides (LCL), que
la transformación maligna ocurre en se desarrollan en otros capítulos.
estadios precoces de diferenciación
de los progenitores hematopoyéti- ETIOLOGÍA Y PATOGENIA
cos, por lo que las células neoplá-
sicas son indiferenciadas (blastos) y Al igual que en otros cánceres, la leu-
se produce fallo medular e infiltra- cemia es la expresión fenotípica de la

- 227 -
Á. Figuera Álvarez, J. Sierra Gil
Capítulo 11

trasformación neoplásica celular de cé- factores genéticos y otros adquiridos


lulas sanguíneas normales o sus precur- exógenos (ambientales) o endógenos.
sores, mediante un proceso de acumu- El más importante es la edad. El en-
lación de mutaciones sucesivas en los vejecimiento conlleva una mayor proba-
genes que dirigen y regulan las funciones bilidad de sufrir mutaciones en cualquier
celulares básicas: reproducción, diferen- célula somática, bien por azar, bien por
ciación, supervivencia y muerte celular. exposición a agentes mutacionales a lo
Estas mutaciones ocasionan un defecto largo de la vida. Recientemente se ha de-
de maduración, una proliferación au- mostrado que hasta un 10 % de las per-
mentada y un exceso de supervivencia sonas aparentemente sanas, mayores de
que produce el acúmulo de células indi- 70 años, tienen ya más de una mutación
ferenciadas e hiperlongevas en la médu- clonal subclínica en su hematopoyesis,
la ósea y en la sangre, con obliteración detectable en la sangre periférica, proceso
de la hemopoyesis normal. que seguiría hasta generar una hemopatía
Entre todas las neoplasias, las leu- detectable si la persona vive lo suficiente.
cemias agudas son las más fáciles de Los síndromes mielodisplásicos (SMD) y
estudiar por ser la sangre y la médula las leucemias agudas, sobre todo la LAM,
ósea tejidos tumorales muy accesibles al son enfermedades propias de personas
muestreo. Además, las células normales mayores. Hace años que conocemos el
del tejido hematopoyético y linfoide son potencial de trasformación leucémica de
las que más se renuevan, expanden y los SMD y de las neoplasias mieloprolife-
maduran mediante un complejo proceso rativas (NMP) crónicas, así como la evo-
que conlleva numerosas modificaciones lución a mayor malignidad clínica de la
genéticas y epigenéticas, por lo que tie- mayoría de las neoplasias hematológicas
nen más oportunidades de error o vulne- con el paso del tiempo.
rabilidad a agentes mutacionales. Por otra parte, es bien conocido el po-
La adquisición de estas mutaciones tencial mutagénico de la terapia antineo-
ocurre en cualquiera de los tipos norma- plásica. A medida que esta resulta más
les de células sanguíneas y/o en sus pre- eficaz, y los pacientes sobreviven más,
cursores. Las mutaciones que conlleven aumentan los casos de leucemias secun-
ventaja selectiva en la supervivencia ge- darias a la quimioterapia previa por otro
neran clones persistentes que se expan- tumor. Estas leucemias agudas secunda-
den y son genéticamente más inestables, rias a hemopatías previas y las precedi-
por lo que continúan sufriendo mutacio- das de terapia antineoplásica (t-LAM) son
nes adicionales, en parte producidas por modelos de trasformación neoplásica
la presión del tratamiento, que conllevan secuencial especialmente significativos y
evolución clonal selectiva. fáciles de estudiar genéticamente.
Así, sabemos hoy en día que la leu- Se identifican cada vez más síndro-
cemia, al igual que otros tumores, es mes hereditarios o alteraciones genéti-
una enfermedad multiclonal que en el cas familiares con predisposición a sufrir
momento del diagnóstico suele tener un leucemias agudas, tales como la anemia
clon dominante más expandido, pero al- de Fanconi y otros síndromes de ines-
berga subclones que pueden reaparecer, tabilidad cromosómica, las inmunodefi-
o mutar a lo largo de su evolución, gene- ciencias y una larga lista que incluye los
rando recaídas y resistencias. síndromes de Down, Nijmegen, Seckel,
Entre los agentes etiológicos muta- Bloom, Noonan y Li-Fraumeni o la neuro-
cionales conocidos se incluyen varios fibromatosis, recogidos en la nueva clasi-

- 228 -
LEUCEMIAS. CONCEPTO Y CLASIFICACIÓN. LEUCEMIAS AGUDAS
Capítulo 11

ficación de la Organización Mundial de la utilizaba las técnicas más modernas, se


Salud (OMS) de 2016, que más adelante propusieron 11 clases genéticas de LAM,
veremos. Todos estos casos, que se están cada una con características diagnósticas
conociendo y tipificando cada vez mejor, y clínicas específicas, añadiendo cinco
también son modelos para estudios ge- nuevas categorías a las ocho ya recono-
néticos secuenciales que permitirán ex- cidas (véase más adelante).
plicar la dinámica de la trasformación El estudio tiene que ser continuado y
neoplásica y tratar de impedirla. extendido en el tiempo para permitir in-
Entre los agentes mutagénicos ex- terpretaciones funcionales y pronósticas, y
ternos ya conocidos se cuentan factores la elección de fármacos diana específicos
ambientales como los agentes infec- que se están desarrollando contra las mu-
ciosos, sobre todo virus (virus de Eps- taciones o sus consecuencias metabólicas.
tein-Barr, citomegalovirus, virus de la El conocimiento de las alteraciones
inmunodeficiencia humana y virus de la genéticas de la LAM se ha desarrollado
hepatitis C), los fármacos antineoplási- paralelamente al de las técnicas de su
cos, especialmente los inhibidores de la detección, empezando por el cariotipo,
topoisomerasa II y los agentes alquilan- seguido de la hibridación fluorescen-
tes, agentes químicos como el benceno y te in situ (FISH) y últimamente toda la
agentes físicos como las radiaciones. secuencia de técnicas moleculares cada
Los distintos agentes mutagénicos vez más sensibles, por lo que las entida-
actúan combinadamente sobre las célu- des clínicas aceptadas y recogidas en la
las hematopoyéticas diana a lo largo de nueva clasificación de la OMS 2016 no se
varios años, para inducir distintas muta- pueden comprender sin situarlas en este
ciones que generarían ventajas selectivas marco cronológico.
de supervivencia y evolución clonal con
adquisición de más mutaciones, hasta Anomalías cromosómicas detectables
acabar dando lugar a una hemopatía
preleucémica o directamente a una leu- Ahora ya sabemos que la trascenden-
cemia aguda clínicamente detectable. cia funcional de las mutaciones es inde-
Las técnicas de secuenciación de pendiente de su tamaño, pero hasta hace
nueva generación (NGS) para el estudio pocos años solo disponíamos del estudio
genético han detectado en la LAM más genético celular mediante el cariotipo.
de 5.200 mutaciones en 76 genes o re- Así, las primeras alteraciones gené-
giones, con más de dos mutaciones en el ticas descubiertas en la leucemia aguda
84 % de los casos. Las mutaciones no se fueron las que se manifiestan como gran-
acumulan al azar sino en patrones o per- des anomalías cromosómicas, visibles por
files que determinan el fenotipo leucémi- técnica de bandas, o mediante FISH en las
co, y también el pronóstico y las posibles células leucémicas del aspirado medular
dianas terapéuticas. Así, por ejemplo, dos (véase capítulo 32). Se asocian a entida-
mutaciones en la misma vía metabólica des clínicas específicas, tienen significado
se excluyen entre sí puesto que produ- pronóstico y han servido para clasificar
cen el mismo efecto final, mientras que y definir genéticamente a las leucemias
se asocian aquellas que, por su efecto, agudas desde hace bastantes años.
potencien la supervivencia celular que Las traslocaciones cromosómicas ba-
conduce a la oncogénesis. En uno de lanceadas son típicas de las leucemias
los más recientes estudios de genómica agudas de novo, que generalmente afec-
de la LAM, que incluía 1.540 pacientes y tan a pacientes jóvenes. En ellas se pro-

- 229 -
Á. Figuera Álvarez, J. Sierra Gil
Capítulo 11

duce un intercambio de zonas enteras t(15;17), que produce la fusión de los


entre dos cromosomas distintos sin que genes PML-RAR-a en la leucemia aguda
se pierda ni se gane material cromosómi- promielocítica (LAP) (fig. 1), la t(8;21),
co, lo que provoca la generación de dos que afecta a los genes RUNX-RUNX1, y la
cromosomas anómalos con una zona de inv(16) o t(16;16), que afecta a los genes
material genético que no les corresponde CBFB-MYH11. Cada una de estas altera-
(cromosomas derivativos), mientras que ciones genéticas recurrentes ha definido
sus dos parejas homólogas permanecen una categoría clínica de LAM específica
normales. Los neogenes de fusión así ge- en las clasificaciones de la OMS.
nerados codifican una proteína de fusión, La t(9;22), presente en el 95 % de las
como la proteína BCR-ABL en la t(9;22), o LMC, también está presente en el 25 %
el gen traslocado se apone a un gen acti- de las LAL de adultos, en el 5 % de las
vador que determina su sobreexpresión, LAL infantiles y en el 3 % de las LAM.
como ocurre con el gen MYC en la t(8;14). En la LAL infantil la traslocación genera
Las traslocaciones balanceadas son una proteína de fusión de menor tama-
de buen pronóstico en la LAM y en su ño (p190), mientras que en los adultos
mayoría afectan a genes reguladores con LAL con cromosoma Filadelfia (Ph)
de factores de transcripción (Core Bin- positivo (de novo, no como crisis blás-
ding Factors, CBF). Entre ellas están la tica de LMC) el 50 % tienen la misma

Traslocación t(15; 17) de la LAM-M3

15 der(15) der(17) 17

13 13
12
p 11,2 12 p
11,1
11,1 11,2
11,2 11,1
12 11,1
13 11,2
14 12
15 RAR-α
21
q 21 q
22
22
PML 23
23 24

24 25

25
26

PML PML/RAR-α RAR-α

Cys Leucina Fusión


Pro α-Helixes

Dedos de zinc

u Figura 1. Traslocación t(15;17) típica de la leucemia aguda promielocítica (LAM-M3), de


la que se genera un ácido ribonucleico de fusión PML-RAR-α.
LAM: leucemia aguda mieloblástica.

- 230 -
LEUCEMIAS. CONCEPTO Y CLASIFICACIÓN. LEUCEMIAS AGUDAS
Capítulo 11

p210, y otro 50 %, la p190. La presencia Anomalías subcitogenéticas.


de cualquier fusión BCR-ABL implica mal Mutaciones
pronóstico, pero, como contrapartida, es-
tas leucemias son sensibles a fármacos Más del 50 % de las LAM y el 70 % de
inhibidores de las tirosincinasas. las LAL tienen cariotipo (o FISH) normal.
Recientemente, las técnicas molecu- Se consideraban de pronóstico interme-
lares más sensibles han permitido des- dio, pero se reconocía una gran hetero-
cribir casos de LAL y LAM, Ph negativos geneidad clínica entre ellas.
por técnicas convencionales, pero con Desde que se dispone de técnicas
mutaciones con repercusión funcional moleculares, se han ido describiendo
celular similar a BCR-ABL que afectan a múltiples mutaciones en patrones de
otros genes que se mencionan después. combinación que son detectables en el
Estas leucemias agudas Ph-like, también 100 % de las leucemias agudas.
tienen mal pronóstico, pero también ten- La mayoría de las mutaciones ya es-
drían la ventaja de responder a distintos tablecidas se describieron y estudiaron
inhibidores de las tirosincinasas. usando técnicas moleculares dirigidas,
El otro gran grupo de anomalías cro- básicamente mediante la reacción en ca-
mosómicas fácilmente detectables son dena de la polimerasa (PCR) cualitativa y
las alteraciones numéricas, que dan lu- cuantitativa. Para ello hay que decidir qué
gar a deleciones de grandes zonas del mutaciones se buscan. Sin embargo, los
cromosoma, o a pérdidas o ganancias estudios de genoma completo han des-
de un cromosoma entero, y son típicas velado que en las células tumorales pue-
de las leucemias de pacientes de edad den detectarse cientos de mutaciones. El
avanzada, muchas veces secundarias a estudio funcional de estas mutaciones ha
hemopatías o quimioterapia previa. Las llevado tiempo, para poder definir aque-
deleciones o pérdidas suelen afectar a llas irrelevantes para la trasformación, de-
los cromosomas 5, 6, 7, 11, 20 e Y, y es nominadas “pasajeras”, de aquellas que
frecuente que provoquen una pérdida de se han denominado “conductoras”, de
genes supresores tumorales y, por tanto, las que se han definido unas 100. Estas
una ventaja de supervivencia. Las ganan- serían las mutaciones que afectan a genes
cias suelen conllevar la sobreexpresión de que intervienen en las funciones básicas
genes, y afectan con más frecuencia a los de proliferación, supervivencia, diferen-
cromosomas 8, 12, 19 y 21. Muchas veces ciación, muerte celular y mantenimiento
estas son alteraciones adquiridas durante del genoma, que, al alterarse, conducen a
la evolución clonal de la enfermedad. la trasformación neoplásica celular.
La mayoría de los pacientes que pre- Así, se han denominado mutaciones
sentan anomalías numéricas, especial- de clase I aquellas que afectan a genes
mente las deleciones o pérdidas, tienen que regulan la proliferación celular. Mu-
mal pronóstico. Principalmente es ad- chas de ellas afectan a genes que codifi-
verso en los casos de pérdida del Cr7 can proteincinasas que traducen intrace-
o del7q, pérdida del Cr5 o del5q, o en lularmente las señales extracelulares de
todos aquellos pacientes que presentan activación de la proliferación, como son
tres o más alteraciones cromosómicas las mutaciones BCR-ABL o del grupo Ph-li-
(cariotipo complejo, CC). Y especialmen- ke, del gen FLT3 (FLT3-TKD o FLT3-ITD) y
te ominoso es el cariotipo monosómico de otros genes como JAK2, NRAS o CKIT.
(CM, pérdida de dos o más cromoso- Se han denominado mutaciones de
mas) y la del17p (TP53). clase II las que afectan a genes regula-

- 231 -
Á. Figuera Álvarez, J. Sierra Gil
Capítulo 11

dores de la transcripción, necesarios para cuyo significado se está empezando a


la diferenciación y la maduración celular. desvelar. Son de significado especialmen-
Entre ellas están incluidas las mutacio- te ominoso las mutaciones de TP53, gen
nes del grupo CBF, que en su mayoría regulador de la apoptosis, que suelen ser
se manifiestan como traslocaciones visi- eventos terminales en la evolución clonal
bles por cariotipo, tales como la t(8;21), y auguran resistencia a la terapia.
la t(15;17) y la inv(16), también detec-
tables por FISH o PCR. En pacientes con De la patología genética a la terapia
cariotipo normal, las incluidas en este traslacional
grupo serían las mutaciones del gen
CEBPA, que es de buen pronóstico en su El enorme avance que supone el des-
forma bialélica y constituye una entidad cubrimiento de todas estas alteraciones
clínica en la clasificación de la OMS. Sin genéticas no solo tiene interés clasifica-
embargo, otras, como las mutaciones torio y pronóstico, sino también terapéu-
moleculares del gen RUNX1, parecen ad- tico, al descubrir nuevas dianas para el
versas, y también se han incluido como desarrollo de nuevos fármacos.
una categoría provisional en la OMS. El ejemplo más espectacular es el
En los estudios de la pasada década de la LAP, cuya traslocación típica, la
se descubrió que las leucemias agudas, t(15;17), apone el gen de la cadena alfa
sobre todo las precedidas de hemopatía del receptor del ácido retinoico (RAR-α)
previa, albergaban también gran canti- en la banda q21 del cromosoma 17 con
dad de mutaciones en genes epigené- el gen PML en 15q22. Se producen dos
ticos, que se denominaron de clase III. ARN de fusión, RAR-α-PML y PML-RAR-α
Entre ellas están las mutaciones subcito- (fig. 1). Este segundo, en el cromoso-
genéticas del gen MLL en el Cr11q y de ma 15q+, se traduce a una proteína de
otros genes modificadores de la cromati- fusión, PML-RAR-α, que resulta ser un
na, que son de mal pronóstico, y las mu- receptor anormal para su agonista fisio-
taciones de genes de metilación del áci- lógico (ácido retinoico), ya que se une
do desoxirribonucleico (ADN), como son anormalmente a un complejo co-repre-
las mutaciones de IDH1/2, que han re- sor nuclear que impide las acciones ce-
sultado favorables, y otras como DNMT3, lulares normales de ambos genes RAR-α
TET2 y ASLX1, que suelen aparecer en y PML, lo que da lugar a un defecto de
patrones combinados complejos. transcripción con bloqueo de la diferen-
Se han definido también las clases IV ciación a nivel del promielocito y una in-
y V para agrupar otras mutaciones como hibición de la apoptosis celular (fig. 2).
las del gen de la nucleofosmina NPM1, La comprensión, inicialmente rudi-
proteína trasportadora multifuncional del mentaria, de este mecanismo llevó a en-
núcleo al citoplasma, que son frecuentes sayar un agonista disponible del receptor
(30 % de las LAM con cariotipo normal) RAR, el ATRA (ácido todo-trans-retinoi-
y confieren un pronóstico intermedio o co), derivado oral de los retinoides, fácil
favorable, reconocido también como una de administrar y poco tóxico, que deter-
categoría OMS. Más recientemente se han minó una altísima tasa de respuestas y
descrito otras mutaciones que afectan a ha cimentado sólidas esperanzas en la
genes del splicing del ácido ribonucleico terapia traslacional.
(ARN), a la organización de la cromatina, Tal como se supo después, el ATRA
al complejo cohesina o a la reparación del actúa como un superagonista del recep-
ADN, todas ellas en patrones complejos tor mutado que desbloquea su unión al

- 232 -
LEUCEMIAS. CONCEPTO Y CLASIFICACIÓN. LEUCEMIAS AGUDAS
Capítulo 11

NCoR
HD
NCoR
RAR ATRA RAR
HD ATRA

PML PML

La proteína de fusión El ATRA en cantidades


PML-RAR-α es anómala y terapéuticas se une a su
recluta a un co-represor receptor (RAR) y consigue que
nuclear (NCoR) y a una histona se desprenda el NCoR y la HD,
deacetilasa (HD) que bloquean con lo que ya puede leerse el
la lectura del gen diana gen diana

u Figura 2. Mecanismo de bloqueo de la transcripción por la fusión PML-RAR-a de la


t(15:17) y su desbloqueo mediante el ácido todo-trans-retinoico (ATRA).
LAM: leucemia aguda mieloblástica.

complejo co-represor y restaura la función hematopoyéticas inmaduras de aspecto


normal del receptor RAR-α, permitiendo blástico, cuya acumulación progresiva
así la transcripción génica que lleva a la conduce a la insuficiencia de la médula
diferenciación y a la entrada en apopto- ósea y a la infiltración de diversos órga-
sis (fig. 2). El conocimiento cada vez más nos. Las leucemias agudas son expresión
detallado de las diferentes proteínas que de un profundo trastorno en el equilibra-
intervienen ha llevado a ensayar otras te- do proceso de la proliferación-diferencia-
rapias, como el trióxido de arsénico (ATO), ción celular, que ocasiona el bloqueo de
que desbloquea las funciones de la pro- los progenitores hematopoyéticos en un
teína PML, o los inhibidores de deacetila- determinado estadio madurativo. Estas
sas de histonas, que también han demos- enfermedades pueden surgir de novo o
trado ser útiles en esta leucemia, la cual en la evolución final de otras hemopa-
ahora es altamente curable. tías, como los SMD o las NMP, o tras la
El éxito de la terapia traslacional se exposición a quimioterapia previa.
consolidó más tarde, de forma especta- Las leucemias agudas suponen casi el
cular, con el desarrollo de los inhibidores 10 % de todos los cánceres, con una inci-
de las tirosincinasas, como el imatinib en dencia aproximada de 2-3 casos por cada
la LMC (véase capítulo 12). 100.000 habitantes/año. Es la neoplasia
infantil más frecuente (30 %), pero la
LEUCEMIAS AGUDAS mayoría se diagnostican en la edad adul-
ta. En los niños prevalece la LAL (80 % de
Se entienden como tales las proli- los casos), con un pico de máxima inci-
feraciones clonales malignas de células dencia entre los 3 y los 5 años de edad.

- 233 -
Á. Figuera Álvarez, J. Sierra Gil
Capítulo 11

Por el contrario, las LAM predominan en definir subgrupos, así como para permitir
el adulto, con una incidencia creciente a la detección de enfermedad mínima resi-
partir de los 65 años. dual (EMR) (tabla I).
El inmunofenotipo se basa en la expre-
CLASIFICACIÓN DE LAS sión diferencial de antígenos de estirpe y
LEUCEMIAS AGUDAS: DE LA en la adquisición secuencial de antíge-
MORFOLOGÍA A LAS TÉCNICAS nos de diferenciación linfoide o mieloi-
GENÉTICAS de (CD), lo que ha demostrado cómo
las células leucémicas clonales expresan
Hasta hace poco tiempo la clasifica- tanto marcadores propios de los diferen-
ción se basaba en criterios de morfología tes estadios de la diferenciación hema-
óptica convencional y tinciones citoquími- topoyética normal como combinaciones
cas. Por su simplicidad, su uso generaliza- aberrantes de los mismos o marcadores
do y su reconocido valor pronóstico, aún específicamente tumorales. La tipifica-
es útil la clasificación de las leucemias ción inmunológica es particularmente útil
agudas propugnada por el grupo coope- en la LAL o para definir las leucemias de
rativo Franco-Americano-Británico (FAB). linaje mixto. Una vez detectado el feno-
Actualmente, a la morfología se ha tipo leucémico específico, sobre todo si
añadido el inmunofenotipo, la citogené- resulta discriminativo, con las técnicas de
tica y la genética molecular, técnicas que citometría multiparamétrica, se obtienen
se combinan entre sí para diagnosticar y seguimientos muy sensibles de la presen-

Tabla I. Técnicas para el estudio de las leucemias agudas

Técnica Morfología Citogenética Inmunofenotipo Biología


molecular
Procedimientos • Tinción May- •C  ariotipo • Estudio de • PCR
Grunwald- • FISH para expresión • NGS
Giemsa anomalías diferencial de
• Tinciones específicas antígenos
citoquímicas • Dobles y triples
marcajes
Sensibilidad 1 × 103 1 × 103-4 1 × 104-5 1 × 106
para EMR
Clasificación FAB Clasificación •C  lasificación • Subgrupos
citogenética inmunológica pronósticos
en grupos de LAL en LA con CN
pronósticos • Refuerzo FAB • Clasificación
para LAM de la OMS
(2016)

Sensibilidad para EMR: para detectar una célula leucémica entre10n células normales.
CN: cariotipo normal; EMR: enfermedad mínima residual; FAB: grupo cooperativo Franco-Americano-
Británico; FISH: hibridación fluorescente in situ; LA: leucemia aguda; LAL: leucemia aguda linfoide;
LAM: leucemia aguda mieloide; NGS: secuenciación de última generación; OMS: Organización
Mundial de la Salud; PCR: reacción en cadena de la polimerasa.

- 234 -
LEUCEMIAS. CONCEPTO Y CLASIFICACIÓN. LEUCEMIAS AGUDAS
Capítulo 11

cia de células leucémicas residuales (de- LAL, designados como L1, L2 y L3 (tabla
tección de EMR, véase capítulo 33). III y fig. 3).
En la mayoría de los casos la diferen- Esta clasificación morfológica es poco
ciación entre la estirpe linfoide o linfo- útil y se ha superado primero por la cla-
blástica (LAL) y mieloide o mieloblásti- sificación inmunológica mediante la cito-
ca (LAM) de ambos tipos de leucemia metría de marcadores específicos linfoi-
se puede sospechar por la observación des y luego por la clasificación genética,
morfológica del aspecto de los blastos como refleja la clasificación OMS 2016.
en el frotis de sangre periférica, y se con-
firman por inmunofenotipo y estudios ci- Clasificación inmunológica
togenéticos y moleculares (tabla II).
El inmunofenotipo de los blastos leu-
Leucemias agudas linfoblásticas cémicos refleja la estirpe celular de la
que provienen y el nivel de su bloqueo
Clasificación morfológica del grupo madurativo. Basados en estos concep-
cooperativo Franco-Americano- tos y utilizando un panel de varios an-
Británico ticuerpos monoclonales, las leucemias
agudas linfoblásticas se clasifican en dos
Según la clasificación morfológica del grandes grupos: las de estirpe B (que su-
FAB podemos distinguir tres subtipos de ponen más del 80 % de los casos) y las

Tabla II. Características diferenciales entre la leucemia aguda


linfoblástica y la leucemia aguda mieloblástica

LAL LAM

Morfología Blastos inmaduros Algún dato de


diferenciación mieloide

Bastones de Auer No Posibles

Citoquímica
• Mieloperoxidasa – +
• Esterasas inespecíficas – + (LAM-M4 y LAM-M5)
• Ácido peryódico de Schiff +/(en bola) + (fina en LAM-M6)
•Fosfatasa ácida +/(en Golgi en LAL-T) + (en LAM-M6)
Inmunoglobulinas y genes • LAL-B precursora: genes No reordenados
TCR de inmunoglobulinas
reordenados
• LAL-T: genes TCR reordenados
Inmunofenotipo Específico de línea linfoide Específico de línea
mieloide
Cromosomas y genes Traslocaciones y anomalías Traslocaciones y anomalías
genéticas moleculares genéticas moleculares
específicas de LAL específicas de LAM

LAL: leucemia aguda linfoblástica; LAM: leucemia aguda mieloblástica.

- 235 -
Á. Figuera Álvarez, J. Sierra Gil
Capítulo 11

Tabla III. Leucemias agudas linfoblásticas. Clasificación morfológica


del grupo cooperativo Franco-Americano-Británico

Tipo Tamaño celular Núcleo Citoplasma

L1 Homogéneo Redondo, regular Escaso


Células pequeñas Sin nucléolo Ligera basofilia
L2 Heterogéneo Irregular, con escotaduras Abundante
Células grandes Uno o más nucléolos Basofilia variable
L3 Homogéneo Redondo u ovalado Abundante
Células grandes Nucléolos prominentes Intensa basofilia y vacuolas

u Figura 3. Clasificación del grupo cooperativo Franco-Americano-Británico de las leucemias


agudas linfoblásticas: L1, L2 y L3.
Fondo de imágenes de la Asociación Española de Hematología y Hemoterapia.
LAL: leucemia aguda linfoblástica.

- 236 -
LEUCEMIAS. CONCEPTO Y CLASIFICACIÓN. LEUCEMIAS AGUDAS
Capítulo 11

Tabla IV. Clasificación inmunológica de las leucemias agudas linfoblásticas

• LAL de precursor B1 (80 %, morfología L1 y L2): expresa CD19, CD22, CD79a


(al menos 2):
– LAL-pro-B (B1)
– LAL-común CD10+ (B2)
– LAL-pre-B IgM citoplasma+ (B3)
• LAL-B madura (5 %, morfología L3) (B4): expresa inmunoglobulina de superficie
(k o λ) o cadenas ligeras citoplasmáticas
• LAL de precursor T2 (15 %, morfología L2): expresa CD3 (citoplasma o de membrana)
– LAL-T precoz (CD3 citoplasma, CD7, CD5+/-, CD2+/-)
– LAL-T cortical (CD3 citoplasma y membrana, CD7, CD1a)
• LAL-T madura (CD3 membrana)

1. La mayoría son TdT+ (excepto LAL-B4) y HLA-DR+. 2. La mayoría son TdT+, HLA-DR-.
LAL: leucemia aguda linfoblástica.

de estirpe T (tabla IV). Los subgrupos en Anomalías citogenéticas y


cada una de ellas se corresponden con moleculares
los diferentes estadios de diferenciación
de los linfocitos B y T normales. Más del 80 % de los pacientes con
La clasificación inmunológica tiene LAL tienen alteraciones del cariotipo,
valor clínico y pronóstico, y se correla- numéricas o estructurales (tabla V). Las
ciona bastante bien con las alteraciones hiperdiploidías, cuando superan los 50
genéticas. La variante más frecuente es cromosomas, se asocian a buen pronós-
la LAL común CD10 (CALLA) positiva, tico, mientras que las de menor número
(65 % en niños, 50 % en adultos), segui- modal tienen un pronóstico intermedio,
da de la pro-B en los adultos (25 %) y y las hipodiploidías, desfavorable.
la pre-B en los niños (25 %). El fenotipo Las alteraciones estructurales son
común es favorable en los pacientes pe- habitualmente traslocaciones que no
diátricos y más adverso en los adultos, solo tienen importancia pronóstica sino
mientras que el pro-B es el peor en los también patogénica. El mejor ejemplo es
primeros. La de estirpe B madura (tipo la t(9;22), que se identifica hasta en el
Burkitt) es la variedad menos frecuente 25 % de los adultos y en el 5 % de los ni-
(< 5 %), son TdT negativas, de morfolo- ños que padecen esta entidad. En ella, el
gía L3 y con un marcador cromosómico oncogén ABL se trasloca al cromosoma
específico, la traslocación t(8;14), en la 22, dando lugar a un gen híbrido BCR-
que está implicado el oncogén cMYC. Su ABL, similar al de la LMC, con la particu-
pronóstico es malo, pero ha mejorado laridad de que el punto de ruptura en el
desde que se utiliza quimioinmunotera- gen BCR puede variar en la LAL y generar
pia combinada intensiva. una proteína p190 (o p210 como en la
Las de estirpe T suelen presentarse LMC, en el 50 % de las LAL-Ph positivo
en varones adolescentes como una masa de adultos), ambas con actividad tirosin-
mediastínica (correspondiente al timo) cinasa permanente, responsable de la
(fig. 3); los blastos se tiñen de forma transformación celular. Las LAL-Ph positi-
característica con la fosfatasa ácida, y su vo tienen mal pronóstico tanto en niños
pronóstico es intermedio. como en adultos, aunque en los últimos

- 237 -
Á. Figuera Álvarez, J. Sierra Gil
Capítulo 11

Tabla V. Anomalías cromosómicas y sus correlaciones


en las leucemias agudas linfoblásticas

Alteración cromosómica Genes implicados Fenotipo Clínica y


predominante pronóstico

Hiperdiploidía Varios Línea B Favorable


(51-65 cromosomas)
Hiperdiploidía Varios Línea B Intermedio
(< 51 cromosomas)
Triploidía y tetraploidía

t(12;21)(p12,q22) TEL/RUNX1 Línea B Favorable

Deleciones: del(6q), Varios Línea B Intermedio


del(9p), del(12p)
Hipodiploidía Varios Desfavorable
(< 44 cromosomas)
Hipodiploidía grave Muy desfavorable
(39-30 cromosomas)
Casi haploide Muy desfavorable
(23-38 cromosomas)
t(8;14)(q24;q32) CMYC-IgH LAL-B madura Morfología
L3, infiltración
extramedular
Mal pronóstico
t(9;22)(q34;q11) BCR-ABL Línea B Leucocitosis
Mal pronóstico
Cariotipo normal Ph-like IKZF1, ABL, JAK2 Línea B Mal pronóstico
CSFR1, CRLF2,
PDGFB
t(4;11)(q21;q23) MLL-AF4 Línea B Hiperleucocitosis,
recién nacidos
Muy mal
pronóstico
t(1;19)(q23;p13) E2A-PBX1 LAL-pre B Leucocitosis, raza
negra, infiltración
del SNC
Mal pronóstico
t(11;14)(p15;q11) LMO1-TCR LAL-T Hiperleucocitosis,
enfermedad
extramedular

SNC: sistema nervioso central.

- 238 -
LEUCEMIAS. CONCEPTO Y CLASIFICACIÓN. LEUCEMIAS AGUDAS
Capítulo 11

años su pronóstico está cambiando gra- La clasificación del FAB, que data de
cias a la adición de inhibidores de tiro- 1976, distingue ocho subtipos, según el
sincinasas a la quimioterapia. grado de diferenciación y maduración de
Al igual que en las LAM, aunque se las células predominantes hacia granulo-
conocen peor, en las LAL también se han citos, monocitos, eritrocitos o megacario-
detectado numerosas anomalías molecu- citos (tabla VI), siendo necesario tener
lares, que no son detectables por citoge- un 20 % o más de blastos en la médula
nética convencional. Las mutaciones se ósea para definirse como leucemia agu-
pueden agrupar en las mismas categorías da. Las tinciones citoquímicas ayudan a
ya descritas para las LAM, incluyendo la diferenciar los subtipos. La introducción
familia RAS y receptores de tipo tirosin- del inmunofenotipo resultó imprescin-
cinasas, factores de transcripción, regula- dible para complementar estos datos y
dores epigenéticos y reguladores del ciclo ayudar a definir bien cada subtipo.
celular y TP53, cuyo significado, patrones, Las alteraciones citogenéticas y mo-
combinaciones y significado pronóstico y leculares se pueden imbricar y tienen
terapéutico se está estudiando muy ac- cierta correlación con esta clasificación
tivamente en la LAL de niños y adultos. que, por sencilla y fácil, sigue teniendo
Uno de los hallazgos moleculares de vigencia diagnóstica, clínica y pronóstica.
los últimos años en la LAL ha sido descu-
brir que un 10 % de los niños, y hasta un • M0. Leucemias agudas mieloblásti-
30 % de adultos jóvenes, con LAL tienen cas indiferenciadas (fig. 4). Su estirpe
un perfil molecular genético, denomina- mieloide es irreconocible por morfo-
do Ph-like, similar al BCR-ABL, pero sin logía y citoquímica convencio­nal. Se
expresión de esta proteína de fusión. En precisa un estudio inmunofenotípico
el 80 % estos casos tienen deleción en (positividad para CD13, CD14 o
genes de transcripción necesarios para la CD33) o peroxidasa ultraestructural
linfopoyesis B, como el IKZF1 (gen Ika- para diagnosticarlas.
ros), y en el 90 % actividad tirosincina- • M1 y M2. Leucemia aguda mielo-
sa aumentada, con afectación de genes blástica algo diferenciada. Estos dos
como ABL1, ABL2, CSFR1 y CRLF2, JAK2 subtipos representan las LAM pobre-
y PDGFB, entre otros. mente diferenciadas y diferenciadas,
La OMS 2016 reconoce esta nueva respectivamente. En la M1, un 3 %
categoría de leucemias agudas Ph-like son positivas para la tinción de mielo-
como una entidad provisional hasta que peroxidasa. En la M2, la diferenciación
esté mejor definida y estudiada, ya que granulocítica es evidente, con promie-
tiene mal pronóstico y podría tratarse locitos y formas maduras. También
con nuevos inhibidores de tirosincinasas. pueden observarse bastones de Auer,
que corresponden a gránulos prima-
Leucemias agudas mieloblásticas rios anormales (fig. 5). La M2 es la
variante FAB más frecuente. El 30 %
Clasificación del grupo cooperativo de las LAM-M2 se asocian a la t(8;21),
Franco-Americano-Británico que confiere buen pronóstico (fig. 6).
• M3. Leucemia aguda promielocítica
Las LAM son particularmente hete- (LAP). La mayoría de las células leu-
rogéneas, tanto en su morfología, como cémicas son promielocitos anómalos
en su presentación clínica, pronóstico y con gran cantidad de gránulos azu-
tratamiento. rófilos gruesos en el citoplasma. Los

- 239 -
Á. Figuera Álvarez, J. Sierra Gil
Capítulo 11

Tabla VI. Clasificación del grupo Franco-Americano-Británico de las leucemias


agudas mieloblásticas y su correlación con la citogenética
Subtipo Incidencia Morfología Alteraciones
FAB citogenéticas asociadas
M0 Indiferenciada 3 % Blastos indiferenciados inv(3q26) y t(3;3) (1 %)
M1 Sin maduración 15-20 % Blastos sin maduración,
sin gránulos
M2 Con maduración 25-30 % Blastos con gránulos t(8;21) (40 %) y t(6;9)
Bastones de Auer (1 %)
M3 Leucemia aguda 10-15 % Promielocitos t(15;17) (98 %),
promielocítica Hipergranulares t(11;17) (1 %) y t(5;17)
M3v Variante Bastones de Auer (1 %)
hipogranular
M4 Mielomonocítica 25 % Blastos con 11q23 (20 %),
diferenciación mieloide inv(3q26) y t(3;3)
y monocitoide (3 %), t(6;9) (1 %)
M4Eo Con eosinofilia Eosinofilia inv(16) y t(16;16)
(80 %)
M5 Monoblástica 10 % Blastos monocitoides 11q23 (20 %) y t(8;16)
M5a Monoblástica (2 %)
M5b Diferenciación monocítica
M6 Eritroleucemia 3-5 % > 50 % eritroblastos
> 30 % blastos mieloides
M7 Megacariocítica 3 % Megacariocitos t(1;22) (5 %)
Mielofibrosis

FAB: grupo cooperativo Franco-Americano-Británico.

bastones de Auer son numerosos y se del 20 % de los blastos presentan


pueden disponer en estacas (fig. 7). diferenciación granulocítica, y otro
En la variante M3 microgranular los 20 %, monocítica. La lisozima sérica y
gránulos son pequeños, se identi- la urinaria están elevadas. El subgru-
fica mediante el inmunofenotipo y po denominado M4 con eosinofilia
la citogenética, y cursa con hiper­ (M4Eo), en el que los precursores
leucocitosis. Esta leucemia cursa con eosinófilos son muy prominentes
coagulación intravascular diseminada y las células presentan anomalías
(CID) asociada, debido a la liberación cariotípicas en el cromosoma 16,
de material procoagulante de los grá- inv(16) o t(16;16), suele asociarse
nulos. Es patognomónica de esta leu- a una buena respuesta al tratamien-
cemia la traslocación t(15;17) o sus to (fig. 9). En la M5 el componente
variantes (fig. 8). monocítico supera el 80 % de las
• 
M4 y M5. Leucemia aguda mono- células blásticas. Mientras que en el
blástica/monocítica. En la M4 más subtipo M5a la mayoría son mono-

- 240 -
LEUCEMIAS. CONCEPTO Y CLASIFICACIÓN. LEUCEMIAS AGUDAS
Capítulo 11

uFigura 4. Leucemia aguda


mieloblástica M0 o M1.
Fondo de imágenes de la
Asociación Española de
Hematología y Hemoterapia.

blastos inmaduros, en el M5b exis-


ten promonocitos y monocitos. La
lisozima suele estar muy elevada. Es
frecuente la infiltración extramedu-
lar (fig. 10).
M6. Leucemia aguda eritroide. Es
• 
una leucemia infrecuente. Más de la
mitad de las células medulares son
eritroblastos con gran atipia y dise-
ritropoyesis, fuertemente positivos
para la tinción de ácido peryódico
de Schiff (PAS) (fig. 11).
• 
M7. Leucemia megacarioblástica.
En esta variante, más del 30 % de
los blastos son de estirpe megaca-
riocítica. A menudo los pacientes
se presentan con pancitopenia, y
el aspirado medular es difícil de
obtener debido a mielofibrosis. La
biopsia ósea muestra, entonces,
megacariocitos displásicos y blastos
de difícil tipificación morfológica,
que se identifican por la reacción de
peroxidasa plaquetaria al microsco-
pio electrónico, o por anticuerpos
monoclonales contra glicoproteínas
plaquetarias (fig. 12).

Clasificación inmunológica
u Figura 5. Leucemia aguda mieloblástica
M2 (LAM-M2) , bastones de Auer y tinción La validez de la clasificación FAB se
de mieloperoxidasa (MPO). ha reforzado con la aplicación del feno-
Fondo de imágenes de la Asociación Española tipo inmunológico, ya que este resulta
de Hematología y Hemoterapia. necesario para definir las variantes FAB

- 241 -
Á. Figuera Álvarez, J. Sierra Gil
Capítulo 11

u Figura 6. Estudio
citogenético de la t(8;21)
típica de la leucemia aguda
mieloblástica M2 (LAM-M2).
Cariotipo, hibridación
fluorescente in situ (FISH)
y reacción en cadena de la
polimerasa (PCR).
Fondo de imágenes de la
Asociación Española de
Hematología y Hemoterapia.

u Figura 7. Leucemia aguda mieloblástica u Figura 8. t(15;17). Cariotipo e


M3 (LAM-M3). Promielocitos patológicos hibridación fluorescente in situ (FISH).
con estacas intracitoplásmicas. Por cortesía de Eva Arranz, Citogenética, Hospital
Fondo de imágenes de la Asociación Española de la Princesa, Madrid.
de Hematología y Hemoterapia.
CID: coagulación intravascular diseminada.

- 242 -
LEUCEMIAS. CONCEPTO Y CLASIFICACIÓN. LEUCEMIAS AGUDAS
Capítulo 11

uFigura 9. Leucemia aguda mieloblástica uFigura 11. Leucemia aguda


M4 (LAM-M4) y LAM-M4 con eosinofilia. mieloblástica M6 (LAM-M6).
Fondo de imágenes de la Asociación Española Fondo de imágenes de la Asociación Española
de Hematología y Hemoterapia. de Hematología y Hemoterapia.

u Figura 10.
Infiltraciones
extramedulares de
la leucemia aguda
mieloblástica
M5 (LAM-M5)
(monoblástica).
Fondo de imágenes
de la Asociación
Española de
Hematología y
Hemoterapia.

- 243 -
Á. Figuera Álvarez, J. Sierra Gil
Capítulo 11

más indiferenciadas (M0 y M1) o las de


estirpe eritroide (M6) y megacariocítica
(M7). Además, la identificación de un fe-
notipo leucémico específico por técnicas
de doble y triple marcaje, es imprescin-
dible para el seguimiento de la EMR tras
el inicio de la terapia, ya que los blastos
leucémicos mieloides son imposibles de
diferenciar de los progenitores inmadu-
ros normales por criterios morfológicos
o citoquímicos. La sensibilidad del inmu-
nofenotipo para detectar células leucé-
micas, cuando es discriminativo, es de
hasta 1 × 10-5.
En la tabla VII se resumen los mar-
cadores específicos de cada línea celular,
que permiten una caracterización precisa
de la mayoría de las LAM.

Leucemias de linaje ambiguo

En casos poco frecuentes (5-10 %) nos


encontramos con leucemias bifenotípicas
linfoides y mieloides, bien por expresión
simultánea, bien por dos subpoblaciones.
En 1995, el European Group for the Immu-
nological Characterization of Leukemias
(EGIL) propuso un sistema de puntua-
ción para la definición de estas leucemias
(tabla VIII). Si la suma de la puntuación
de marcadores de linajes distintos es su-
perior a 2, se considera bifenotípica.
La clasificación de la OMS desde el
2008, y ahora también en el 2016 (véase
más adelante), reconoce este subgrupo
de leucemias agudas como una categoría uFigura 12. Leucemia aguda
aparte, denominadas leucemias agudas mieloblástica M7 (LAM-M7).
de fenotipo mixto (LAFM), entre las que Fondo de imágenes de la Asociación Española
de Hematología y Hemoterapia.
se incluyen las que tienen la t(9;22) con
BCR-ABL, que podrían responder a trata-
miento con inhibidores de tirosincinasas. cemias agudas, se ha demostrado que
estas son las que realmente determinan
CLASIFICACIÓN PRONÓSTICA DE el pronóstico.
LAS LEUCEMIAS AGUDAS A lo largo de los últimos años, grupos
cooperativos internacionales como la
A medida que se han ido describien- ELN (European Leukemia Net) han pro-
do las alteraciones genéticas de las leu- puesto diversas clasificaciones pronósti-

- 244 -
LEUCEMIAS. CONCEPTO Y CLASIFICACIÓN. LEUCEMIAS AGUDAS
Capítulo 11

Tabla VII. Marcadores mieloides

Subtipo MPO CD CD13/ CD CD CD CD GA CD41/ TdT HLA- CD CD


FAB 34 CD33 117 15 14 11b CD61 DR 36 9
M0 - ++ ++ ++ +/- - - - - + ++ - -

M1 ++ ++ ++ ++ - - +/- - - + ++ - -

M2 ++ + ++ ++ + - +/- - - - ++ - -

M3 ++ - ++ + +/- - - - - - - - +

M4 ++ + ++ + + + ++ - - +/- ++ ++ -

M5 ++ + + + +/- ++ ++ - - +/- ++ ++ -

M6 + + +/- ++ - - +/- + - - + ++ -

M7 - + +/- ++ - - - - ++ - ++ + +

FAB: grupo cooperativo Franco-Americano-Británico; GA: glicoforina A; MPO: mieloperoxidasa.

Tabla VIII. Sistema de puntuación del European Group for the Immunological
Characterization of Leukemias para las leucemias bifenotípicas

Puntuación Linfoide B Linfoide T Mieloide

2 CD79a CD3 Mieloperoxidasa


CD22
IgM Cit
1 CD19 CD2 CD13
CD20 CD5 CD33
CD10 CD8 CD117
CD10 CD65
0,5 TdT TdT CD14
CD24 CD7 CD15
CD1a CD64

Se llama bifenotípica si la puntuación, sumando dos linajes separados, es > 2.

- 245 -
Á. Figuera Álvarez, J. Sierra Gil
Capítulo 11

TABLA IX. Riesgo genético de leucemia aguda mieloblástica


según la European Leukemia Net

Categoría de riesgo1 Anomalía genética

Favorable t(8;21)(q22;q22); RUNX1-RUNX1T1


inv(16)(p13.1q22); CBFB-MYH11
Mutación de NPM1 sin FLT3-ITD o con FLT3-ITDbajo 2
Mutación bialélica de CEBPA
Intermedio Mutación de NPM1 y FLT3-ITDalto 2
No mutación de NPM1 ni FLT3-ITD (sin otras alteraciones
genéticas de riesgo)
t(9;11)(p21.3;q23.3); MLLT3-KMT2A3
Otras alteraciones genéticas sin riesgo definido
Adverso t(6;9)(p23;q34.1); DEK-NUP214
t(v;11q23.3); KMT2A reordenado
t(9;22)(q34.1;q11.2); BCR-ABL1
inv(3)(q21.3q26.2) o t(3;3)(q21.3;q26.2); GATA2, MECOM(EVI1)
-5 o del(5q); -7; -17/anormal(17p)
Cariotipo complejo4, cariotipo monosómico5
No mutación de NPM1, sí de FLT3-ITDalto 2
Mutación de RUNX16
Mutación de ASXL16
Mutación de TP537

1. El impacto pronóstico de los marcadores es dependiente de tratamiento y puede cambiar con nuevas
terapias. 2. Bajo, bajo rango alélico (< 0,5); Alto, alto rango alélico (≥ 0,5); el rango alélico de FLT3-ITD
(usando análisis de fragmentos de ADN) se determina como el área bajo la curva (ABC) “FLT3-ITD”
dividido por ABC “FLT3-wild type”; si el rango alélico de mutación de FLT3-ITD es bajo, los pacientes
con LAM y NPM1 mutado pueden no tener mal pronóstico. 3. La presencia de la t(9;11) se impone a
otras mutaciones raras de riesgo adverso. 4. Cariotipo complejo se define como tres o más alteraciones
cromosómicas no relacionadas, en ausencia de ninguna de las alteraciones cromosómicas recurrentes
de la OMS; p. ej. t(8;21), inv(16) o t(16;16), t(9;11), t(v;11)(v;q23.3), t(6;9), inv(3) o t(3;3); LAM con
BCR-ABL1. 5. Cariotipo monosómico se define como la presencia de una monosomía (excluyendo la
pérdida aislada del CrX o Y) en asociación con otra monosomía o anomalía cromosómica estructural
(excluyendo las CBF). 6. Estos marcadores no definen alto riesgo si se asocian a alteraciones favorables.
7. Las mutaciones de TP53 se asocian con LAM con cariotipo complejo y cariotipo monosómico.

cas tratando de unir los rasgos morfoló- siempre FAB M2, la inv(16), FAB M4Eo, y la
gicos, inmunofenotípicos y genéticos. t(15;17), típica de la LAP, o FAB M3, cuyo
Las alteraciones genéticas se han estu- modelo patogénico y su especial trata-
diado más extensamente en la LAM, don- miento se describen más adelante.
de ya claramente se han impuesto como El 50 % de las LAM con cariotipo nor-
las más significativas, como propone la mal se han considerado de pronóstico in-
ELN en el 2016 (tabla IX). termedio en las clasificaciones anteriores
Están asociadas a buen pronóstico las a la era molecular. Sin embargo, como ya
leucemias con traslocaciones balanceadas se ha mencionado, son muy heterogéneas
que afectan a los CBF, como la t(8;21), casi y todas presentan mutaciones subcitoge-

- 246 -
LEUCEMIAS. CONCEPTO Y CLASIFICACIÓN. LEUCEMIAS AGUDAS
Capítulo 11

néticas, con valor patogénico y pronóstico. mal pronóstico. Es frecuente la pérdida


En el momento actual, en todas las LAM, del brazo largo 7q- o de un cromosoma
especialmente las de cariotipo normal, se 7 entero, -7, así como 5q- o -5, 20q- o
debe realizar de rutina al menos el estu- deleciones del 9. Esas alteraciones son
dio de mutaciones de NPM1, CEBPA, FLT3 características de las leucemias secun-
(ITD y TDK), MLL y RUNX1. En las LAM se- darias a tratamientos citotóxicos o a
cundarias o relacionadas con terapia pre- hemopatías previas, suelen ser eventos
via deben incluirse también genes como secundarios en la evolución genética y se
ASLX1, TET, IDH1/2 y, desde luego, TP53. asocian a un pronóstico adverso.
La mutación bialélica de CEBPA está Varios trabajos han destacado el pési-
asociada a buen pronóstico, pero es poco mo pronóstico de lo que se define como
frecuente. Las mutaciones de NPM1, que cariotipo monosómico, que consiste en
se presentan en el 30 % de las LAM, aun- la presencia de dos monosomías o de
que en principio se consideraron favora- una monosomía y otra alteración.
bles, se asocian a otras mutaciones en Un caso especial es el 5q-, que cuan-
patrones con significado pronóstico muy do se presenta como única anomalía con
diverso. un cuadro clínico de SMD con tromboci-
Las mutaciones de FLT3 suelen ser ad- tosis no es de tan mal pronóstico, pero
versas, pero su significado pronóstico de- sí lo es cuando aparece en una leucemia
pende del tipo del rango alélico (ITD es la aguda, donde casi nunca va sola.
más adversa) y que se asocie o no a muta- Todas estas clasificaciones están diri-
ciones favorables como NPM1 (tabla IX). gidas a la práctica clínica, contando con
En las LAM secundarias o t(LAM) son técnicas moleculares, como las PCR diri-
frecuentes las mutaciones de genes de gidas, que ya están disponibles. Sin em-
metilación (IDH1/2, ASLX1, TET). Estas bargo, las técnicas de genoma completo
leucemias de por sí son de pronóstico desvelan una alta complejidad, con una
desfavorable y suelen darse en personas media de diez mutaciones por caso, que
mayores y/o deterioradas por la neopla- se adquieren secuencialmente y coope-
sia previa. El significado pronóstico de las ran entre sí para acabar produciendo la
mutaciones en este contexto es difícil de expansión ventajosa de un clon, con va-
deslindar, porque, además, estas mutacio- rios subclones, y, además, cambian con
nes se asocian secuencialmente en patro- la terapia y las recaídas.
nes complejos, que son objeto de intenso Las técnicas de genoma completo se
estudio por su posible valor terapéutico. están abaratando y llegarán en breve a la
En cualquier leucemia aguda, como práctica médica. Los grandes grupos eu-
en otras neoplasias, la presencia de mu- ropeos y norteamericanos están analizan-
taciones de TP53 es de muy mal pronós- do miles de pacientes de forma retrospec-
tico y se asocia a evolución clonal o reci- tiva para tratar de desvelar patrones de
divas refractarias. asociación mutacional de utilidad clínica,
Son de muy mal pronóstico las LAM pronóstica y terapéutica. En una reciente
que presenten un cariotipo complejo, publicación con un gran número de pa-
definido como la presencia de tres o cientes, se proponen 11 subgrupos gené-
más anomalías cromosómicas, que no ticos de LAM. Se incluyen las ocho cate-
incluyan ninguna de las traslocaciones gorías ya reconocidas por la OMS: t(8;21),
de pronóstico favorable. inv(16), t(15;17), fusiones de MLL, inv(3),
Todo lo que suponga pérdida de ma- t(6;9), NPM1 y CEBPA bialélico. Se propo-
terial cromosómico también suele ser de ne una categoría provisional para muta-

- 247 -
Á. Figuera Álvarez, J. Sierra Gil
Capítulo 11

ciones de IDH1/2, otra para mutaciones mas de factores inhibidores de la hema-


del spliceosoma o modificadores de la topoyesis provocan una disminución de
cromatina, y otra, de pronóstico muy ad- los precursores normales de las series
verso, para mutaciones de TP53 o aneu- eritroide, granulocítica y megacariocítica.
ploidía. Finalmente, seguiría habiendo un Todo ello se traduce en el descenso de
grupo amplio de pacientes sin mutacio- las cifras periféricas de hematíes, granu-
nes detectables o no fácilmente encua- locitos y plaquetas con la aparición de
drables en ninguno de estos grupos. síndrome anémico, susceptibilidad a in-
En la tabla X se presenta la propuesta fecciones y diátesis hemorrágica.
de clasificación genómica más reciente La susceptibilidad para contraer in-
del Cancer Genome Project. fecciones es especialmente frecuente y
grave cuando la cifra de granulocitos es
Clasificaciones integradas. inferior a 0,5 × 109/l. En el desarrollo de
La clasificación de la Organización la infección intervienen también las alte-
Mundial de la Salud raciones del sistema inmunológico y la
destrucción de las barreras cutaneomu-
En un esfuerzo por integrar la infor- cosas a consecuencia de la quimiotera-
mación procedente de esta multitud de pia o el uso de catéteres.
abordajes y categorizar su relevancia Entre las localizaciones más comu-
diagnóstica, clínica, pronóstica y terapéu- nes de las infecciones en el momento
tica, se han generado clasificaciones pro- del diagnóstico se encuentran la piel,
puestas por la OMS; la última se expone la faringe, las vías urinarias y los tejidos
simplificadamente en la tabla XI. perirrectales, pero a medida que se pro-
longa la neutropenia aparecen infeccio-
CUADRO CLÍNICO DE LAS nes más graves (neumonías, ileotiflitis,
LEUCEMIAS AGUDAS bacteriemias). En muchas ocasiones la
fiebre es el único signo de infección, de-
Los diferentes tipos de leucemias bido a la falta de focalización clínica que
agudas tienen muchos signos clínicos en conlleva la ausencia de leucocitos. Las
común, derivados de dos hechos fisiopa- más frecuentes son las infecciones bac-
tológicos que ocurren a la vez: la insufi- terianas, sobre todo bacteriemias, pero
ciencia medular y la infiltración de órga- también hay que descartar y cubrir empí-
nos (tabla XII). ricamente posibles infecciones por hon-
En la mayoría de los casos los síntomas gos (Candida, Aspergillus), virus (herpes
iniciales se presentan de forma aguda en simple y zóster) y otros agentes.
personas previamente sanas y se asocian Las hemorragias en el paciente con
a un grave deterioro del estado general. En leucemia aguda son fundamentalmente
el 25 % de las LAM puede darse una fase debidas a la trombopenia. Es habitual la
preleucémica de larga duración, especial- existencia de hematomas espontáneos,
mente en los pacientes de mayor edad o púrpura petequial, gingivorragias o epista-
en los que desarrollan la leucemia des- xis, y más raramente se desarrollan hemo-
pués de recibir un tratamiento citotóxico. rragias digestivas y en el sistema nervioso
central. La CID se asocia sistemáticamen-
Insuficiencia de la médula ósea te a la leucemia promielocítica (fig. 7), y
puede provocar hemorragias cerebrales
La acumulación progresiva de células fulminantes; también se asocia con fre-
leucémicas y la producción por las mis- cuencia a las variantes monocitarias.

- 248 -
LEUCEMIAS. CONCEPTO Y CLASIFICACIÓN. LEUCEMIAS AGUDAS
Capítulo 11

Tabla X. Propuesta de clasificación genómica de las leucemias agudas


mieloblásticas, por orden de frecuencia de presentación en 1.540 pacientes
(Papaemmanuil, 2016)

Subgrupo genómico Frecuencia Genes mutados

LAM con mutación de NPM1 27 % NPM1, DNMT3A, FLT3, TET2,


NRAS, PTPN11

LAM con mutaciones de cromatina, 18 % RUNX1, MLLPTD, SRSF2 DNMT3A,


spliceosoma o ambos ASXL1, STAG2, NRAS, TET2, FLT3-
ITD
LAM con mutaciones de TP53, 13 % Cariotipo complejo, -5/5q , -7/7q,
aneuploidía o ambos TP53, -17/17p, -12/12p, +8/8q
LAM con inv(16)(p13.1q22) o 5 % inv(16), NRAS, +8/8q, +22,
t(16;16)(p13.1;q22); CBFB-MYH11 KIT, FLT3-TKD
LAM con mutaciones bialélicas 4 % CEBPA bialélico, NRAS, WT1,
de CEPBA GATA2
LAM con t(15;17)(q22;q12); 4 % t(15;17), FLT3-ITD, WT1
PML-RARA
LAM con t(8;21)(q22;q22); 4 % t(8;21), KIT, -Y, -9q
RUNX1-RUNX1T1
LAM con MLL genes de fusión; 3 % t(x;11q23), NRAS
t(x;11)(x;q23)
LAM con inv(3)(q21q26.2) o t(3;3) 1 % inv(3), -7, KRAS, NRAS,
(q21;q26.2); GATA2, PTPN11, ETV6, PHF6, SF3B1
MECOM(EVI1)

LAM con mutaciones IDH2R172 sin 1 % IDH2R172, DNMT3A, +8/8q


otras lesiones definitorias
LAM con t(6;9)(p23;q34); DEK- 1 % t(6;9), FLT3-ITD, KRAS
NUP214
LAM con mutaciones conductoras 11 % FLT3-ITD, DNMT3A
no encuadrables en las categorías
anteriores
LAM sin mutaciones conductoras 4 %
LAM con criterios de más de dos 4 %
grupos

LAM: leucemia aguda mieloblástica.

- 249 -
Á. Figuera Álvarez, J. Sierra Gil
Capítulo 11

Tabla XI. Clasificación de las leucemias agudas de la Organización


Mundial de la salud (2016)
Neoplasias mieloides con predisposición congénita
• Neoplasias mieloides sin síndrome orgánico asociado, CEBPA, DDX41
• Neoplasias mieloides con alteraciones plaquetarias, RUNx1, ANKRD26, ETV6
• Neoplasias mieloides con síndrome orgánico asociado, GATA2, síndromes de fallo
medular congénito, telomeropatías, síndromes de Noonan y Down
LAM y neoplasias relacionadas
LAM con alteraciones genéticas recurrentes
• LAM con t(8;21)(q22;q22.1); RUNX-RUNX1T1
• LAM con inv(16)(p13;1q22) o t(16;16)(p13;1q22); CBFB-MYH11
• LAP con PML-RARA1
• LAM con t(9;11)(p21.3;q23.3); MLLT3-KMT2A2
• LAM con t(6;9)(p23;q34.1); DEK-NUP214
• LAM con inv(3)(q21.3;3q26.2) o t(3;3)(q21.3;q26.2); GATA2, MECOM
• Leucemia aguda megacarioblástica con t(1;22)(p13.3;q13.3), RBM15-MKL1
• Entidad provisional: LAM con BCR-ABL1
• LAM con mutaciones de NPM13
• LAM con mutaciones bialélicas de CEBPA3
• Entidad provisional: LAM con mutaciones de RUNX1
LAM con cambios relacionados con mielodisplasia4
Neoplasia mieloide relacionada con terapia previa5
LAM, otras categorías
• LAM indiferenciada
• LAM con diferenciación mínima
• LAM con maduración
• Leucemia aguda mielomonocítica
• Leucemia aguda monoblástica/monocítica
• Leucemia aguda eritroide pura6
• Leucemia aguda megacarioblástica
• Leucemia aguda basofílica
• Panmielosis aguda con mielofibrosis
Sarcoma mieloide
Proliferaciones mieloides relacionadas con el síndrome de Down
• Mielopoyesis anormal transitoria
• Leucemia mieloide asociada con síndrome de Down
Neoplasia blástica plasmacitoide de células dendríticas
Leucemias agudas de linaje ambiguo
• Leucemia aguda indiferenciada
• Leucemia aguda de fenotipo mixto con t(9;22)(q34.1;q11.2); BCR-ABL17
• Leucemia aguda de fenotipo mixto con t(v;11q23.3); KMT2A reordenado
• Leucemia aguda de fenotipo mixto B/mieloide, otras categorías
• Leucemia aguda de fenotipo mixto T/mieloide, otras categorías

- 250 -
LEUCEMIAS. CONCEPTO Y CLASIFICACIÓN. LEUCEMIAS AGUDAS
Capítulo 11

Tabla XI. Clasificación de las leucemias agudas de la Organización


Mundial de la salud (2016)
Leucemia/linfoma linfoblástico B
Leucemia/linfoma linfoblástico B, NOS
Leucemia/linfoma linfoblástico B, con alteraciones genéticas recurrentes
• Leucemia/linfoma linfoblástico B, con t(9;22)(q34.1;q11.2); BCR-ABL1
• Leucemia/linfoma linfoblástico B, con t(v;11q23.3); KMT2A reordenado
• Leucemia/linfoma linfoblástico B, con t(12;21)(p13.2;q22.1); ETV6-RUNX1
• Leucemia/linfoma linfoblástico B, con hiperdiploidía
• Leucemia/linfoma linfoblástico B, con hipodiploidía
• Leucemia/linfoma linfoblástico B, con t(5;14)(q31.1;q32.3); IL3-IGH
• Leucemia/linfoma linfoblástico B, con t(1;19)(q23;p13.3); TCF3-PBX1
• Entidad provisional: leucemia/linfoma linfoblástico B, BCR-ABL1-like
• Entidad provisional: leucemia/linfoma linfoblástico B con iAMP21
Leucemia/linfoma linfoblástico T
• Entidad provisional: leucemia/linfoma T linfoblástico precursores tempranos T
Entidad provisional: leucemia/linfoma de células NK

1. Otras traslocaciones recurrentes que afecten a RARA serían LAM con t(11;17)(q23;q12); ZBTB16-
RARA; LAM con t(11;17)(q13;q12); NUMA1-RARA; LAM con t(5;17)(q35;q12); NPM1-RARA; o LAM
con STAT5B-RARA (con cromosoma 17 normal). 2. Otras traslocaciones que afecten a KMT2A (MLL)
serían LAM con t(6;11)(q27;q23.3); MLLT4-KMT2A; LAM con t(11;19)(q23.3;p13.3); KMT2A-MLLT1;
LAM con t(11;19)(q23.3;p13.1); KMT2A-ELL; LAM con t(10;11)(p12;q23.3); MLLT10-KMT2A. 3. El
diagnóstico de esta categoría es independiente de la presencia o ausencia de displasia multilineal. 4.
≥ 20 % de blastos en sangre o médula Y cualquiera de los siguientes: historia previa de SMD, o NMP
con SMD (NMP/SMD), anomalía citogenética de SMD, displasia multilineal Y AUSENCIA de terapia
citotóxica previa y de cualquiera de las anomalías citogenéticas recurrentes ya mencionadas en el
apartado previo. En cambio, es diagnóstico de LAM con cambios relacionados con mielodisplasia
cualquiera de las siguientes anomalías: a) cariotipo complejo tal como está definido en la tabla IX;
b) anomalías numéricas o deleciones tales como: -7 o del(7q); -5 o del(5q); i(17q) o t(17p); -13 o
del(13q); del(11q); del(12p) o t(12p); idic(X)(q13); c) anomalías balanceadas tales como t(11;16)
(q23.3;p13.3); t(3;21)(q26.2;q22.1); t(1;3)(p36.3;q21.2); t(2;11)(p21;q23.3); t(5;12)(q32;p13.2);
t(5;7)(q32;q11.2); t(5;17)(q32;p13.2); t(5;10)(q32;q21.2); t(3;5)(q25.3;q35.1). 5. Los casos se
deben clasificar con la anomalía genética que tengan. 6. Se define como ≥ 20 % de blastos como
todas las LAM, con ≥ 80 % de eritroblastos inmaduros y ≥ 30 % de proeritroblastos de la celularidad
completa medular. 7. La leucemia BCR-ABL1 positiva puede presentarse con fenotipo mixto. El
tratamiento debe incluir un inhibidor de tirosincinasa.
LAM: leucemia aguda mieloide o mieloblástica. LAP: leucemia aguda promielocítica; NK: natural
killer; NOS: no especificado; NPM: neoplasia mieloproliferativa; SMD: síndrome mielodisplásico.

Infiltración de órganos sencia de adenopatías es más frecuente


en la LAL (60 %) que en la LAM (20 %),
La infiltración medular masiva por las siendo característica la presentación en
células leucémicas puede ocasionar do- forma de masa mediastínica en las LAL
lor óseo, especialmente en los niños, en de células T (fig. 3). Hay hepatomegalia
los que, unido al síndrome febril, puede y esplenomegalia moderadas en la ma-
simular una fiebre reumática. La pre- yoría de los pacientes con LAL (80 %) y

- 251 -
Á. Figuera Álvarez, J. Sierra Gil
Capítulo 11

Tabla XII. Características clínicas de la leucemia aguda

Insuficiencia medular
• Anemia: debilidad, cansancio, palidez
• Granulocitopenia: tendencia a infecciones
• Trombocitopenia: diátesis hemorrágica
Infiltración de órganos
• Linfoadenopatías, especialmente en LAL
• Esplenomegalia y hepatomegalia moderadas (LAL > LAM)
• Hipertrofia gingival, úlceras orales y anorrectales (LAL, M4-M5)
• Infiltración neuromeníngea (LAL, M4-M5)
• Dolor óseo, inflamación testicular, masa mediastínica por infiltración
Otras manifestaciones
• Coagulación intravascular diseminada (M3, M4, M5)
• Trastornos metabólicos
• Síndrome de leucostasis

LAL: leucemia aguda linfoblástica; LAM: leucemia aguda mieloblástica.

en una minoría de los que padecen LAM la OMS se definen como una categoría
(30 %), sobre todo en los subtipos mono- clínica igual que una leucemia. En las
citarios. La hipertrofia gingival (fig. 10), LAL puede aparecer infiltración testicular,
con úlceras orales, y la infiltración de particularmente en las recidivas.
la piel (fig. 10), con úlceras dérmicas y
anorrectales, son típicas de las LAM con Otras manifestaciones
componente monocítico.
La infiltración del sistema nervioso Los pacientes con leucemia aguda pue-
central se produce con frecuencia en las den presentar síntomas generales como
LAL y también en los subtipos monocita- astenia, debilidad o pérdida de peso.
rios (fig. 10). Las células neoplásicas in- Cuando la cifra de blastos circulantes
vaden el espacio subaracnoideo, lo que es muy alta, superior a 100 × 109/l, puede
puede ser asintomático en la mayoría de producirse el denominado síndrome de
los casos u originar un síndrome menín- leucostasis, originado por la obstrucción e
geo con cefaleas, náuseas, vómitos y pa- invasión de los vasos de la microcircula-
piledema. Más raramente pueden infil- ción por microagregados de células leucé-
trar el parénquima cerebral ocasionando micas, sobre todo en el sistema nervioso
déficits neurológicos variados. central y en los pulmones. La clínica es
Las células leucémicas pueden infil- polimorfa, y puede instaurarse en forma
trar otros tejidos, como el pulmón, los de estupor y coma, asociarse a hemorra-
ojos, la nasofaringe, el hueso o los riño- gia intracraneal y otras alteraciones neu-
nes, a veces en forma de masas que se rológicas y/o insuficiencia respiratoria y
denominan sarcomas mieloides o sarco- hemorragia pulmonar. El síndrome de leu-
mas granulocíticos, que son típicos de la costasis requiere un tratamiento inmedia-
LAM-M2 con t(8;21). A veces preceden to para bajar la cifra de leucocitos, preferi-
a la leucemia, pero en la clasificación de blemente con una máquina de citaféresis.

- 252 -
LEUCEMIAS. CONCEPTO Y CLASIFICACIÓN. LEUCEMIAS AGUDAS
Capítulo 11

DATOS DE LABORATORIO producción de ácido úrico y alteraciones


electrolíticas, por lo que con frecuencia se
Hemograma encuentra hiperuricemia, hiperpotasemia,
hipomagnesemia e hipocalcemia, a veces
Se observa anemia normocítica y nor- sintomáticas, y se puede producir un sín-
mocrómica arregenerativa. drome de lisis tumoral. En las leucemias
El número de leucocitos es muy va- agudas con componente monocítico está
riable: alto, normal o bajo, dependiendo elevada la lisozima sérica, cuya excreción
del grado de expresión leucémica en la por el riñón provoca daño tubular renal,
sangre periférica. En un pequeño porcen- que cursa con hipopotasemia. La lactato-
taje de pacientes (< 10 %) no se detec- deshidrogenasa (LDH) suele estar elevada.
tan blastos en el frotis sanguíneo (formas
aleucémicas), pero lo habitual es que la Médula ósea
mayor parte de los leucocitos sean for-
mas blásticas inmaduras, con algunos Aunque el estudio de la sangre peri-
segmentados neutrófilos residuales (“hia- férica proporciona datos importantes y a
tus leucémico”). La neutropenia es cons- veces suficientes para el diagnóstico y la
tante y suele ser intensa (< 0,5 × 109/l). clasificación, es fundamental para ambos
La trombopenia habitualmente es realizar un estudio de la médula ósea.
muy grave (< 20 × 109/l), sobre todo La médula ósea suele ser hipercelular
en la LAM. También pueden encontrarse y muestra una infiltración masiva por ele-
anomalías morfológicas en las plaque- mentos blásticos monomorfos, acompa-
tas, especialmente en la leucemia aguda ñada de una marcada disminución de los
megacarioblástica. precursores hematopoyéticos normales.
Según la OMS, la presencia de un 20 %
Estudio de coagulación o más de blastos se admite como criterio
diagnóstico de leucemia aguda, umbral
Como consecuencia de la fragilidad que es importante para hacer el diagnós-
de algunos subtipos de células leucé- tico diferencial con los SMD.
micas, sobre todo en la LAP y en las En casos aislados, la médula ósea pue-
monoblásticas, se produce lisis celular de ser hipocelular, aunque la mayoría de
intravascular y liberación de material las células presentes serán leucémicas.
procoagulante, que puede desencadenar También puede ocurrir que el aspirado me-
un cuadro de CID (fig. 7), con consumo dular sea muy dificultoso, por la existencia
de factores de la coagulación (fibrinóge- de mielofibrosis asociada (en la megaca-
no, factor V, factor VIII), alargamiento de rioblástica) o por empaquetamiento, y en
los tiempos de protrombina y tiempo de esos casos es imprescindible la realización
tromboplastina parcial activada, aumen- de una biopsia de médula ósea.
to de los productos de degradación del
fibrinógeno (PDF y dímero D) y agrava- Punción lumbar
miento de la trombocitopenia.
Al ser el sistema nervioso central un
Parámetros bioquímicos santuario para la infiltración leucémica,
que a veces resulta silente, en todas las
La lisis de las células leucémicas, que leucemias agudas debe realizarse una
puede ser masiva tras la terapia de in- punción lumbar en el momento del diag-
ducción, determina un incremento en la nóstico. Previamente se debe descartar la

- 253 -
Á. Figuera Álvarez, J. Sierra Gil
Capítulo 11

presencia de hipertensión intracraneal y rios agudos puede producirse una


corregir los defectos de la hemostasia, si leucocitosis intensa con gran desvia-
es preciso. En el líquido cefalorraquídeo ción izquierda y aparición de formas
se realizarán los estudios convencionales inmaduras en la sangre periférica.
(glucosa, proteínas, citología y cultivos), y No suele haber muchos blastos en
la determinación de la morfología y el in- sangre, no existe “hiatus leucémico”
munofenotipo, que identificarán inequí- y no suele acompañarse de anemia
vocamente la presencia de blastos. y trombopenia graves. En caso de
duda, el aspirado medular dará el
DIAGNÓSTICO Y DIAGNÓSTICO diagnóstico diferencial.
DIFERENCIAL • Infiltración de la médula ósea por
metástasis de otras neoplasias. Las
Aunque debe sospecharse cuando metástasis medulares de tumores
existan manifestaciones clínicas sugeren- sólidos o linfoma pueden confun-
tes de insuficiencia medular, para estable- dirse con infiltración leucémica, que
cer el diagnóstico de leucemia aguda es se distingue fácilmente mediante ci-
necesario que en la sangre periférica o en toquímica o inmunofenotipo.
el aspirado medular se encuentre un 20 % • Aplasia medular. Cursa con pancito-
o más de blastos, o infiltración por blastos penia, pero no hay blastos y la mé-
mieloides de tejidos extramedulares. dula ósea está vacía. Se debe reali-
En la clasificación de la OMS, una ex- zar biopsia en estos casos.
cepción a este 20 % son las leucemias • Síndromes mielodisplásicos. Son
mieloides con alteraciones citogenéti- procesos prelucémicos que pueden
cas recurrentes como la t(8;21), inv(16), progresar a leucemia aguda, pero,
t(16;16) o t(15;17), que se consideran por definición, el porcentaje de blas-
LAM independientemente del porcenta- tos medulares en los SMD es infe-
je de blastos. rior al 20 %.
En términos generales, el diagnóstico
es sencillo y se realiza mediante el estu- FACTORES PRONÓSTICOS
dio morfológico de extensiones de san-
gre periférica o de médula ósea teñidas Las leucemias agudas son uniforme-
con las técnicas habituales. mente mortales sin tratamiento. La su-
Sin embargo, para la caracterización pervivencia se cifra en semanas, aunque
específica y establecer el pronóstico ge- en algunos casos que mantienen cierta
nético es imprescindible el estudio por diferenciación, como las LAM que proce-
citometría de flujo de la médula ósea, den de SMD previos, un buen tratamien-
el cariotipo y la FISH dirigida a las alte- to de soporte puede prolongar la vida
raciones citogenéticas habituales. El es- varios meses.
tudio genético está evolucionando muy La terapia curativa actual está basada
rápidamente, pero por ahora debe incluir en la quimioterapia combinada intensiva
al menos un estudio dirigido a las muta- y en el trasplante de médula ósea, que
ciones más frecuentes, ya mencionadas. han permitido supervivencias prolonga-
El diagnóstico diferencial de las leu- das y curaciones en hasta el 60 % de los
cemias agudas incluye: pacientes jóvenes (véase capítulo 24).
Como ya hemos visto, las leucemias
• Reacciones leucemoides. En distin- agudas son sumamente heterogéneas y,
tas infecciones o estados inflamato- por tanto, no pueden ser todas tratadas

- 254 -
LEUCEMIAS. CONCEPTO Y CLASIFICACIÓN. LEUCEMIAS AGUDAS
Capítulo 11

Tabla XIII. Factores pronósticos adversos en las leucemias agudas

LAL LAM

Clínicos

Edad < 1 o > 10 años en niños > 65 años

Estado general Malo Malo

Tipo evolutivo CB de LMC Secundaria a SMD, NMP,


terapia

Afectación SNC, testículo SNC, piel

Leucocitosis > 50 × 109/l > 100 × 109/l

Subtipo FAB L2 y L3 M0, M4-5, M6-7

Inmunofenotipo Pro-B en niños Mismos previos


B madura LA bifenotípica

Biología
Citogenética t(9;22), t(8;14), t(4;11), Cariotipo complejo,
t(11;14), t(1:19) e cariotipo monosómico,
hipodiploidía alteración de 11q, t(6;9),
t(3;3) o inv(3)
Alteraciones moleculares MLL mutado, genotipo FLT3-ITD, MLL reordenado,
Ph-like, deleción de Ikaros, ASXL1 o p53 mutado,
mutaciones de NOTCH1 mutaciones de las cohesinas

Respuesta al tratamiento Lento Lento

Enfermedad mínima residual Persistente tras I+C Persistente tras I+C

CB: crisis blástica; FAB: grupo cooperativo Franco-Americano-Británico; I+C: inducción y consolidación;
LAL: leucemia aguda linfoblástica; LAM: leucemia aguda mieoloblástica; LMC: leucemia mieloide crónica;
NMP: neoplasia mieloproliferativa; SMD: síndrome mielodisplásico; SNC: sistema nervioso central.

igual. Además, se presentan en pacientes • Clínica de presentación de la leuce-


de todas las edades, con tolerancia dispar mia: leucemias de novo frente a leu-
al tratamiento. Por ello, es fundamental un cemias secundarias o relacionadas
tratamiento estratificado por riesgo tanto con terapia previa, cifra de leucoci-
de la enfermedad como del paciente. tos en el momento del diagnóstico
Los factores pronósticos de mayor e infiltración extramedular.
relevancia se exponen en la tabla XIII e • Características biológicas de la leu-
incluyen: cemia: morfología, inmunofenotipo
y, sobre todo, datos genéticos.
• 
Características del paciente: edad, • Respuesta al tratamiento de induc-
estado general, comorbilidades. ción y consolidación.

- 255 -
Á. Figuera Álvarez, J. Sierra Gil
Capítulo 11

La edad y el estado general son con- dida en la práctica médica habitual es la


diciones del receptor que determinan citometría de flujo multiparamétrica de
definitivamente la posibilidad de recibir varios colores, que permite identificar
tratamientos intensivos y, por tanto, la poblaciones de células leucémicas me-
curabilidad de la enfermedad. La evo- nores de 1 × 10-5. Se han definido para
lución a leucemia aguda de cualquier cada tipo de leucemia umbrales numéri-
hemopatía previa o tras haber recibido cos de persistencia tumoral que suponen
tratamientos citostáticos presupone ano- un claro riesgo de recidiva si no se redu-
malías cromosómicas desfavorables y cen, y permiten así intensificar la terapia
muy mala respuesta a la terapia. La ma- subsiguiente. Lo mismo se puede hacer
yor masa leucémica que indica la hiper- con PCR cuantitativa de algunas muta-
leucocitosis o la infiltración extramedular ciones (véase capítulo 33).
(frecuente en algunas LAL y en las LAM La definición de estos umbrales permi-
monocitarias) también indica la necesi- te indicar o desestimar un trasplante alo-
dad de terapia más intensiva o específica génico de médula ósea según la respuesta
del sistema nervioso central (santuario). a la terapia inicial en cada caso, de forma
Las leucemias más indiferenciadas o bi- que casos favorables en los que persista
fenotípicas también suponen en general EMR deben trasplantarse, y casos adver-
peor pronóstico. sos con buena respuesta a la inducción y
Ya se ha comentado el gran valor pro- consolidación pueden no necesitarlo.
nóstico que tienen las anomalías citoge- La importancia de la evaluación de la
néticas y moleculares. EMR es también crucial para la evalua-
Además de estos factores iniciales, es ción de la respuesta a los nuevos fárma-
crucial apreciar y evaluar en cada caso el cos en investigación.
impacto del tratamiento.
Muchos subtipos considerados desfa- TRATAMIENTO
vorables hace unos años mejoraron sus-
tancialmente su supervivencia cuando se Bases terapéuticas y criterios de
trataron con protocolos más intensivos o respuesta
específicos. Este es el caso de la LAL-T in-
fantil o de la LAL-L3 madura con t(8;14), La quimioterapia intensiva es la base
que con protocolos adecuados tienen fundamental del tratamiento actual de la
supervivencias que se aproximan a la de mayor parte de las leucemias agudas.
la LAL de riesgo estándar. Igualmente, la En el momento del diagnóstico, en
LAP tenía una supervivencia previa del fase visible, una leucemia aguda tiene
60 % al 65 %, con una mortalidad precoz una carga tumoral de más de 1 billón de
muy importante complicada por la CID células neoplásicas. La terapia debe ser
en la era pre-ATRA, y actualmente es cu- capaz de eliminar no solo la leucemia vi-
rable en más del 95 % de los casos. sible (remisión completa) sino también
Además, el refinamiento de las técni- el clon leucémico al completo, lo que
cas de inmunofenotipo y cuantificación incluye las células madre leucémicas,
de anomalías genéticas he permitido el que en la mayor parte de los casos se
seguimiento de la EMR, que se define reproducen y conducen de nuevo a una
como la población leucémica residual situación de leucemia visible (recidiva).
que persiste tras la inducción y consoli- Por tanto, el tratamiento quimiote-
dación iniciales. Generalmente se realiza rápico tiene dos objetivos bien defini-
en médula ósea. La técnica más exten- dos:

- 256 -
LEUCEMIAS. CONCEPTO Y CLASIFICACIÓN. LEUCEMIAS AGUDAS
Capítulo 11

• Alcanzar la remisión completa (RC). desciende progresivamente con cada


• Eliminar la EMR para evitar la recidi- nueva tanda de quimioterapia.
va leucémica.
Tratamiento posremisión
Para lograrlo, el tratamiento se divide
en dos fases principales (fig. 13) que se Está destinado a erradicar el clon leu-
resumen a continuación. cémico residual. Suele consistir en ciclos
de tratamiento repetidos (4 a 8 días en
Tratamiento de inducción que se reciben combinaciones de agen-
tes quimioterápicos) con una fase de
Es la quimioterapia inicial necesaria aplasia después de cada uno de ellos.
para lograr la RC o ausencia de leucemia Se denomina consolidación al trata-
visible por examen citomorfológico y re- miento administrado inmediatamente
cuperación de valores hemoperiféricos después de la inducción, generalmente
normales. En concreto, la RC se define similar en intensidad a ésta. Se denomi-
como: nan intensificaciones a los ciclos de trata-
miento administrados tras la consolida-
• Ausencia de blastos en sangre y en ción, más intensos que esta (dosis más
la médula ósea (< 5 %) con presen- altas o combinaciones de más fármacos)
cia de hematopoyesis normal, con para intentar eliminar células leucémicas
precursores de las tres series. que hayan sobrevivido a la inducción y
• Recuperación de los recuentos en a la consolidación previas. Se denomina
sangre, con más de 1,5 × 109/l y mantenimiento al tratamiento en dosis
más de 100 × 109/l. baja, continuado durante meses, admi-
• La remisión no implica curación, ya nistrado después de la fase de citorre-
que puede quedar mucha masa tu- ducción inicial más enérgica, útil sobre
moral aún tras alcanzar la RC, que todo en la LAL.

TRATAMIENTO DE UNA LEUCEMIA AGUDA

Inducción
1012
Tratamiento posremisión
1010 Nivel de
leucemia
Consolidación
Recuento celular

108 visible

106 Hematopoyesis normal


Masa
104 leucémica Recidiva

102
EMR
100
Tiempo

u Figura 13. Curva de respuesta a la terapia en una leucemia aguda.


EMR: enfermedad mínima residual.

- 257 -
Á. Figuera Álvarez, J. Sierra Gil
Capítulo 11

El trasplante de progenitores hema- se expondrá la estructura genérica del


topoyéticos (véase capítulo 24) es una tratamiento, este se ha de individualizar
forma de intensificación final para erradi- según los factores pronóstico, sobre todo
car la EMR en los casos con alto riesgo de la edad (infantil o de adultos), el subtipo
recaída. Todas las formas de trasplante inmunológico, la genética y la presencia
implican la administración de una tera- o no de EMR. De este modo pueden evi-
pia de preparación o acondicionamiento tarse efectos tóxicos innecesarios en los
previo, en general de gran intensidad, y pacientes de riesgo estándar, sin com-
que conlleva una mieloablación que se prometer los resultados, y de otro lado,
rescata con la infusión de progenitores intensificar el tratamiento en los pacien-
hematopoyéticos de donante sano (alo- tes de alto riesgo para aumentar las re-
génicos) o del propio paciente (autólo- misiones y evitar recidivas.
gos). Además, el trasplante alogénico La LAL es sensible a varios fármacos
ayuda a la erradicación final del clon leu- y por ello se usan combinaciones de los
cémico por medio de un efecto inmune mismos. Es obligatorio efectuar profilaxis
del injerto contra la leucemia. en los santuarios leucémicos, particular-
Otro aspecto a considerar es la tera- mente en el sistema nervioso central.
pia local dirigida a los santuarios leucé- En la LAL, a diferencia de en la LAM,
micos, como el sistema nervioso central es importante también la terapia de
o las gónadas, donde el tratamiento sis- mantenimiento.
témico no llega bien.
El tratamiento de soporte es clave Tratamiento de inducción
para el éxito de la terapia de las leucemias
y requiere una infraestructura adecuada, La combinación básica es la asocia-
así como un equipo de profesionales ex- ción de vincristina, prednisona y L-aspa-
perimentados. Incluye, principalmente, raginasa, que se administra a lo largo de
la transfusión de hemoderivados (con- 4 semanas. En los grupos de alto riesgo
centrados de hematíes y plaquetas), la se asocia daunorrubicina y otros fárma-
prevención y el tratamiento de las infec- cos. Con este esquema, más del 90 % de
ciones y la corrección de las anomalías los pacientes alcanzan la RC, siendo la
metabólicas que puedan producirse. Una lentitud en la respuesta o la persistencia
descripción detallada del mismo se reali- de EMR detectable por citometría de flu-
za en el capítulo 23. jo dos de los factores pronósticos adver-
sos más relevantes.
Leucemia aguda linfoblástica
Profilaxis del sistema nervioso
El avance en el tratamiento de la LAL central
ha permitido uno de los éxitos más des-
tacados de la quimioterapia moderna, ya La meningitis leucémica es la forma
que logra, especialmente en niños, unos de recaída de hasta el 60 % de los ni-
porcentajes de RC superiores al 90 % con ños con LAL si no reciben profilaxis del
un 80 % de los pacientes libres de en- sistema nervioso central. La quimiote-
fermedad (y probablemente curados) a rapia sistémica atraviesa mal la barrera
los 5 años. Con todo, la LAL es una en- hematoencefálica, por lo que los blastos
fermedad heterogénea con subgrupos leucémicos pueden permanecer inacce-
que muestran una respuesta variable a la sibles y causar una recaída primero local
quimioterapia, y aunque a continuación y luego generalizada.

- 258 -
LEUCEMIAS. CONCEPTO Y CLASIFICACIÓN. LEUCEMIAS AGUDAS
Capítulo 11

La profilaxis del sistema nervioso cen- combinan en formas y dosis variables los
tral se debe efectuar mediante inyeccio- fármacos útiles (agentes alquilantes como
nes intratecales seriadas de metotrexato la ciclofosfamida, antimetabolitos como el
o, en algunos protocolos más intensivos, metotrexato o la citarabina en altas dosis,
con una combinación de metotrexato, ci- epipodofilotoxinas como el VP-16 y el VM-
tarabina e hidrocortisona (triple terapia 26, y corticoides) para adaptarlos al riesgo
intratecal). Esta profilaxis debe comenzar diferencial de cada situación. Acabada esta
ya durante la inducción. fase más intensiva, se pasa a un tratamien-
La irradiación craneal se ha abando- to de mantenimiento con metotrexato in-
nado como forma de profilaxis, debido a tramuscular semanal y mercaptopurina
sus efectos adversos a largo plazo en el oral, que suele durar 2-3 años.
desarrollo intelectual y en el aprendizaje, En los niños de riesgo estándar se
sobre todo en niños. La citarabina intra- pueden conseguir curaciones del 90 %
venosa en dosis alta, que suele incluirse con una inducción y una consolidación
en las intensificaciones, sí que atraviesa no muy intensivas seguidas de 2 años de
la barrera hematoencefálica y ayuda a la mantenimiento en dosis baja.
profilaxis de la afectación del sistema ner- Por el contrario, los protocolos para
vioso central. No debe administrarse de los casos de mayor riesgo intensifican
forma simultánea al tratamiento intratecal mucho el tratamiento los primeros me-
por el riesgo de toxicidad acumulativa. ses, con mayor número de fármacos
y dosis más alta tanto en la inducción
Tratamiento posremisión como en las fases de consolidación e in-
tensificación, seguido de mantenimiento
Una vez alcanzada la RC, debe adminis- periódicamente intensificado con algún
trarse terapia de consolidación e intensifi- ciclo de dosis alta de poliquimioterapia.
cación durante los 4-6 meses siguientes. Con este esquema general de tratamien-
En la LAL existen diversos protocolos que to (tabla XIV) los resultados en niños de

Tabla XIV. Esquema de tratamiento general de la leucemia aguda linfoblástica

Inducción (4-6 semanas)


• Vincristina: 1,5 mg/m2 i.v./semana
• Prednisona: 60 mg/m2 v.o./día
• L-asparaginasa: 30.000 U/m2 i.m./10 días

Profilaxis neuromeníngea
• Metotrexato: 12 mg/m2 i.t./5-10 dosis
Consolidación
• Combinaciones variables y en bloques alternantes de: metotrexato, vincristina,
ciclofosfamida, citarabina, daunorrubicina, VP-16 y VM-26, tioguanina,
mercaptopurina, corticoides
Tratamiento de mantenimiento (2-3 años)
• 6-mercaptopurina: 60 mg/m2 v.o./día
• Metotrexato: 15 mg/m2 i.m./semana

i.m.: intramuscular; i.t.: intratecal; i.v.: intravenoso; v.o.: vía oral.

- 259 -
Á. Figuera Álvarez, J. Sierra Gil
Capítulo 11

alto riesgo se acercan a los de bajo riesgo antígeno de histocompatibilidad (HLA)


(70 % de curaciones). idénticos, y si no se dispone de él, de
El tratamiento de la LAL de línea B un donante no emparentado compa-
madura (tipo Burkitt) requiere un mane- tible o de sangre de cordón umbilical.
jo similar al del linfoma Burkitt, con una Otra opción es el trasplante haploidén-
consolidación a base de bloques inten- tico, con compatibilidad HLA de solo el
sivos repetidos que contengan combi- 50 %, pero posible si se administran al-
naciones de dosis altas de metotrexato, tas dosis de ciclofosfamida tras el proce-
ciclofosfamida y citarabina, la adminis- dimiento como inmunodepresor. En el
tración del anticuerpo monoclonal an- caso de la LAL es recomendable utilizar
ti-CD20, rituximab y terapia intratecal radioterapia corporal total en el acondi-
frecuente. cionamiento, salvo en niños menores de
Los resultados son siempre peores 5 años, ya que es muy eficaz en esta en-
en adultos que en niños, incluso con fermedad y optimiza la erradicación leu-
factores pronósticos similares. Existe una cémica en el sistema nervioso central. El
tendencia creciente a tratar a los adultos trasplante conlleva una mortalidad tóxi-
jóvenes con protocolos intensivos infan- ca del 20-30 %; pese a ello, aumenta la
tiles, lo que aproxima el pronóstico de curabilidad de la LAL de alto riesgo en
ambos grupos. Por el contrario, muchos primera RC al 40-60 %.
adultos no tan jóvenes no aguantan la
densidad de dosis de estos protocolos. Tratamiento de las recaídas
Además, en general, en los adultos la
enfermedad es intrínsecamente de peor La leucemia puede recidivar en la
pronóstico, ya que muchos casos (25 %) médula ósea o en localizaciones extra-
son Ph positivos, y son comunes las medulares. Hay diferentes pautas de
leucemias bifenotípicas o con cariotipo quimoterapia de rescate y en la mayor
adverso. La LAL-Ph positivo exige proto- parte de recaídas tardías de alcanza una
colos específicos en los que se combina segunda remisión. El tratamiento posre-
quimioterapia intensiva con la adminis- misión debe ser quimioterapia intensiva
tración continuada de imatinib mesilato y es recomendable repetir la neuroprofi-
o dasatinib, con buenos resultados. Aun laxis. El pronóstico depende del momen-
así, las recaídas leucémicas son frecuen- to de la recaída; si esta acontece durante
tes, por lo que en los casos Ph positivos, los primeros 18 meses, la remisión suele
tanto en adultos como en niños, está in- ser breve y es prácticamente inevitable
dicado el trasplante alogénico en primera una posterior recidiva; si, por el contrario,
RC, tras la inducción y la consolidación. la recaída ocurre tras haber finalizado el
Otras formas de LAL, con citogenética tratamiento de mantenimiento, pueden
adversa o con respuesta lenta a la qui- lograrse supervivencias prolongadas en
mioterapia y persistencia de EMR tras la el 25-40 % de los niños afectos.
inducción/consolidación, también deben En los adultos, el pronóstico es uni-
considerarse tributarias de intensifica- formemente fatal una vez que se pro-
ción con trasplante alogénico en primera duce la recaída, y hay que considerar el
RC, indicación que se basa en una pre- trasplante de progenitores hematopo-
dicción de la supervivencia sin trasplante yéticos, siempre que exista donante. El
no superior al 25 %. uso de nuevos anticuerpos monoclona-
El trasplante idealmente debe ser les anti-B (tales como el blinatumomab
alogénico, de hermano con locus del o el inotuzumab) ayuda a conseguir el

- 260 -
LEUCEMIAS. CONCEPTO Y CLASIFICACIÓN. LEUCEMIAS AGUDAS
Capítulo 11

control de la leucemia como puente al giénicas y de aislamiento, antibioterapia


trasplante. Las indicaciones precisas del empírica de amplio espectro, vigilancia
trasplante se analizan en el capítulo 24. microbiológica y uso de factores de cre-
La leucemia meníngea es la forma cimiento hematopoyético, que deben
más frecuente de recaída extramedular realizarse en una unidad especializada
en la LAL. El tratamiento consiste en in- (véase capítulo 23).
yecciones intratecales de triple quimiote-
rapia, que pueden asociarse a irradiación Tratamiento posremisión
craneal. En los varones es también habi-
tual la recidiva testicular, por lo que algu- Una vez obtenida la RC, se prosigue
nos protocolos incluyen la realización de con un ciclo de consolidación igual a la
biopsia testicular al final de la terapia de inducción, seguido de dos o tres ciclos
mantenimiento. El tratamiento de elec- de intensificación, que deben incluir cita-
ción es la irradiación local. Tras la recaída rabina en dosis intermedia (4-8 dosis de
extramedular existe un alto riesgo de re- 0,5-1 g/m2) o alta (6-12 dosis de 3 g/m2)
cidiva generalizada, lo que hace impres- asociada o no a mitoxantrona, VP-16 o
cindible la repetición completa del trata- amsacrina. De nuevo, estas terapias se
miento sistémico. siguen de aplasia de 3-5 semanas de
duración, que requieren atención es-
Leucemia aguda mieloblástica pecializada e ingreso hospitalario. Esta
quimioterapia repetida es necesaria
Tratamiento de inducción para erradicar la masa leucémica, según
el esquema general de la figura 13. En
Los fármacos más efectivos en la LAM la LAM, al contrario que en la LAL, el
son la citarabina y las antraciclinas (dau- mantenimiento no suele ser efectivo y
norrubicina o idarrubicina), que forman la no se usa.
base del tratamiento de inducción. El es- La incidencia de leucemia neurome-
quema más utilizado incluye la asociación níngea en la LAM es mucho menor que
de citarabina durante 7 días e idarrubicina en la linfoblástica, y aparece preferente-
durante 3 días (esquema 3 × 7; tabla XV). mente en las variantes M4 y M5. La profi-
Tras uno o dos ciclos de esta combina- laxis neuromeníngea debe por tanto apli-
ción, el 60-80 % de los pacientes entran carse en estas variedades, y también en
en RC. Se investiga si añadir anticuerpos cualquier paciente con hiperleucocitosis.
monoclonales anti-CD33 o terapia contra También se ha sugerido que es necesa-
dianas moleculares puede mejorar los re- ria en la LAP. En general, aunque podría
sultados de los esquemas 3 × 7. posponerse a después de la inducción
Tras la terapia de inducción se produ- en otras LAM, no está de más realizar
ce una aplasia profunda y duradera (3-5 siempre una punción lumbar diagnósti-
semanas), que se asocia a una alta mor- ca durante las primeras semanas tras el
bimortalidad (10-15 %), especialmente diagnóstico. En las recidivas la afectación
por complicaciones infecciosas. La toxi- del sistema nervioso central es frecuente
cidad aumenta mucho con la edad o con y debe siempre tenerse en cuenta, reali-
las comorbilidades del paciente, particu- zando punciones lumbares y terapia tri-
larmente cardiopatía, neuropatía o he- ple intratecal según se necesiten.
patopatía previa. Este periodo requiere La supervivencia libre de enfermedad
medidas de soporte intensivo, con trans- a largo plazo con quimioterapia es muy
fusiones de hemoderivados, medidas hi- variable, y oscila entre el 25 % y el 60 %

- 261 -
Á. Figuera Álvarez, J. Sierra Gil
Capítulo 11

Tabla XV. Pautas de quimioterapia de inducción y resultados


del tratamiento en la leucemia aguda mieloblástica

Esquema Fármacos (dosis) Días RC (%) RC con un ciclo (%)

Daunorrubicina (45 mg/m2) 3


DA 55-70 36-45
Ara-C (100 o 200 mg/m2) 7 o 10

Idarrubicina (12 mg/m2) 3


IC 74 64
Ara-C (100 o 200 mg/m2) 7

Idarrubicina (10 o 12 mg/m2) 3

ICE Ara-C (100 mg/m2) 7 75 62

VP-16 (100 mg/m2) 3

Idarrubicina (12 mg/m2) 3

IDICE Ara-C (500 mg/m2/ 12 h) 4 77 67

VP-16 (100 mg/m2) 3

Ara-C (100 mg/m2/12 h) 10

ADE Daunorrubicina (50 mg/m2) 3 84 63

VP-16 (100 mg/m2) 5

Fludarabina (30 mg/m2 5

Ara-C (2 g/m2) 5
FLAG-Ida 86 77
Idarrubicina 8 mg/m2) 3

Lenograstim (263 µg s.c.) 7

RC: remisión completa.

de los pacientes. Los mejores resultados largo plazo en adultos hasta 60 años,
se obtienen en los casos de LAM con sin necesidad de trasplante alogénico
factores de buen pronóstico, como las en primera RC. En el resto de LAM un
leucemias CBF [t(8;21) e inv(16)] o en alto porcentaje de pacientes acaba por
las de citogenética de riesgo intermedio recaer y la duración mediana de la RC es
con NPM1 o CEBPA mutado sin otras inferior a los 2 años.
alteraciones genéticas adversas (tales El trasplante de progenitores hemato-
como FLT3). En estos subgrupos favora- poyéticos es un tratamiento antileucémi-
bles de LAM la administración de ciclos co eficaz, con indicación en primera RC
repetidos de altas dosis de citarabina de cualquier LAM salvo en el subgrupo
permite un 60-65 % de supervivencia a favorable mencionado. Con el trasplan-

- 262 -
LEUCEMIAS. CONCEPTO Y CLASIFICACIÓN. LEUCEMIAS AGUDAS
Capítulo 11

te alogénico de hermano o donante no Tratamiento de los pacientes


emparentado compatible se obtiene una mayores y de la leucemia aguda
supervivencia en RC a largo plazo del 40- mieloblástica secundaria
60 %, en pacientes jóvenes sin comorbi-
lidades (tabla XVI). La mortalidad tóxica En los pacientes mayores de 65 años,
es elevada (15-25 %), y el riesgo de reci- el tratamiento quimioterápico descrito
diva sigue existiendo y se cifra en un 20- es mucho menos efectivo y conlleva una
30 %. También puede plantearse un tras- alta morbimortalidad, que se relaciona
plante con células de cordón umbilical con la edad y las comorbilidades. Ade-
o haploidéntico. Una alternativa debati- más, biológicamente la LAM de las per-
da, si no existe un donante o fuente de sonas mayores tiene con frecuencia ano-
progenitores adecuado, es el trasplante malías citogenéticas o moleculares de
autólogo con células del propio paciente alto riesgo y/o son secundarias a SMD,
obtenidas en remisión. Existe debate so- SMP o a terapias previas.
bre si los resultados con trasplante autó- Las formas de LAM secundarias res-
logo en términos de supervivencia mejo- ponden mal a la quimioterapia estándar,
ran los de la quimioterapia intensiva con los porcentajes de RC son del 35-45 % y las
dosis altas de citarabina. remisiones suelen ser de corta duración.
Es generalmente reconocido que los
Tratamiento de las recaídas pacientes mayores con cariotipo comple-
jo (más de tres anomalías cromosómicas)
Los pacientes que recidivan tras la alcanzan con baja frecuencia la RC y, por
quimioterapia tienen muy mal pronós- ello, en general no deben tratarse con qui-
tico, con una supervivencia mediana in- mioterapia intensiva. Por el contrario, los
ferior a los 6 meses. En estos casos la pacientes mayores con buen estado gene-
indicación del trasplante alogénico es ral y sin comorbilidades importantes, con
clara. Se puede conseguir hasta un 30 % genética intermedia o sobre todo favora-
de remisiones duraderas con el TPH alo- ble, pueden beneficiarse de una terapia
génico en segunda remisión. similar a la de los jóvenes, valorando pre-

Tabla XVI. Resultados del trasplante de médula ósea alogénico


o autólogo en la leucemia aguda mieloblástica

Fase TPH N REC (%) p MRT (%) p SLE (%) p

RC1 Alo-TPH 516 25 27 55

Auto-TPH 598 52 < 10-4 13 < 10-4 42 0,006

RC2 Alo-TPH 98 42 32 39

Auto-TPH 190 63 0,001 20 0,002 30 0,22

Datos del European Blood and Marrow Transplant Group.


Alo-TPH: trasplante alogénico de progenitores hematopoyéticos; auto-TPH: TPH autógeno;
MRT: mortalidad relacionada con el trasplante; N: número de pacientes; p: valor de p en la prueba de
significación; RC1: primera remisión completa; RC2: segunda remisión completa; REC: recaídas;
SLE: supervivencia libre de enfermedad.

- 263 -
Á. Figuera Álvarez, J. Sierra Gil
Capítulo 11

viamente todas las variables que pueden te 30-45 días. Con esta pauta se consi-
influir en la tolerancia a estos regímenes, gue la RC en cerca del 95 % de casos,
incluyendo los deseos del propio paciente. con poca toxicidad y control de la CID.
Por tanto, cada paciente debe abor- Posteriormente, la consolidación conti-
darse individualmente. Si el tratamiento núa con ATRA oral, a lo que se añaden al-
intensivo convencional no está indicado, gunas dosis de antraciclinas. En sucesivos
las alternativas de tratamiento son la tera- estudios del PETHEMA se comprobó que la
pia de soporte con hemoterapia y cuida- citarabina podía omitirse sin comprometer
dos generales, la administración de agen- los resultados y que, al contrario que en
tes hipometilantes como 5-azacitidina o otras LAM, en la promielocítica el manteni-
decitabina, la inclusión del paciente en miento con metotrexato y mercaptopurina
protocolos de investigación con nuevos más ATRA intermitente durante 1-2 años
citotóxicos como el vosaroxin o las formas es útil y consolida los excelentes resulta-
encapsuladas de daunorrubicina y citara- dos. Con este tipo de protocolos la super-
bina, los inhibidores de tirosincinasas (de vivencia a largo plazo de los pacientes con
FLT3 o cKIT) o los anticuerpos monoclo- esta entidad es del 85-95 %.
nales (anti-CD33) unidos a toxinas. Pese a ello, todavía se producen al-
gunas muertes precoces y recidivas, y se
Tratamiento de la leucemia aguda han identificado como factores de ries-
promielocítica go la edad avanzada, la leucocitosis en
el momento del diagnóstico o la CID.
El descubrimiento de la patofisiología En estudios recientes se ha encontrado
de la leucemia promielocítica y las posibi- que el 35-45 % de los pacientes con LAP
lidades de tratamiento que ha abierto es tienen mutaciones de FLT3. La presencia
uno de los hitos más importantes de la de esta mutación se asocia a los otros
terapia oncológica de los últimos 25 años. factores de riesgo, particularmente a la
La LAP era una LAM particularmente variante microgranular (M3), que es de
mortal tras el diagnóstico, debido a las peor pronóstico. No obstante, muchos
complicaciones derivadas de la CID, con pacientes con esta mutación mantienen
supervivencia a largo plazo de un 40 %. altas tasas de curabilidad, por lo que su
El tratamiento con ATRA se inició a fina- repercusión es controvertida. En los pa-
les de los años ochenta y se desarrolló cientes definidos como de alto riesgo por
durante la década siguiente con una no- leucocitosis se recomienda hacer profi-
table participación del Programa para el laxis del sistema nervioso central.
Estudio de la Terapéutica de la Hemopa- Recientemente se ha observado que
tía Maligna (PETHEMA) de la Sociedad los excelentes resultados con ATRA y qui-
Española de Hematología. El ATRA es un mioterapia pueden incluso mejorarse
derivado de la vitamina A, un retinoide, con la asociación de ATRA y ATO.
que se puede administrar fácilmente por Las recidivas de esta enfermedad
vía oral. Inicialmente se administraba dia- también responden muy bien al ATO, que
riamente durante toda la inducción com- por sí solo consigue remisiones molecu-
binado con la quimioterapia estándar de lares que se pueden consolidar haciendo
inducción, que en estudios sucesivos se un trasplante autólogo en segunda RC.
minimizó hasta reducirse a dosis repe- Por tanto, hoy en día la LAP resulta
tidas de una antraciclina (generalmente ser una enfermedad curable en más de
idarrubicina) durante los primeros días un 90 % de los casos, con una terapia
de la inducción y ATRA oral diario duran- muy poco tóxica y altamente específica.

- 264 -
SÍNDROMES
12 MIELOPROLIFERATIVOS
CRÓNICOS. LEUCEMIA
MIELOIDE CRÓNICA
J. C. Hernández Boluda, V. García Gutiérrez

Introducción. Clasificación. Etiopatogenia. Leucemia mieloide crónica. Leucemia neutrofílica


crónica. Leucemia eosinofílica crónica. Mastocitosis

INTRODUCCIÓN curso de su evolución pueden sufrir


una progresión a fases más agresi-
Las neoplasias mieloproliferativas cró- vas, que terminan en fallo medular
nicas (NMP) incluyen un grupo de hemo- debido a mielofibrosis o se transfor-
patías clonales íntimamente relacionadas man en leucemia aguda. En la fase
que comparten las siguientes caracterís- de transformación surgen alteracio-
ticas: nes genéticas adicionales, aumento
de la esplenomegalia y aparición de
• 
La célula diana de la alteración células blásticas. A veces existe sola-
clonal es la célula tronco o célula pamiento entre ellas, lo que puede
madre (stem) mieloide y, por tan- dificultar el diagnóstico.
to, existe afectación de las líneas
granulocítica-monocítica, eritroide y Las NMP son enfermedades que
megacariocítica. afectan sobre todo a adultos entre los 50
• 
Inicialmente, todas presentan una y los 70 años de edad, y su incidencia
proliferación incrementada y madu- oscila entre 6-10 casos por cada 100.000
ración de las tres líneas en la mé- habitantes/año.
dula ósea y sangre periférica (pan-
mielosis), aunque con predominio CLASIFICACIÓN
específico de una línea en cada en-
fermedad concreta. Durante décadas las NMP se han
• 
Suelen cursar con esplenomegalia clasificado según las características fe-
y, en menor grado, hepatomegalia, notípicas de la proliferación celular pre-
ocasionadas por el secuestro celular dominante, considerando las siguientes
y por el desarrollo de hematopoye- entidades “clásicas”:
sis extramedular.
• 
Son enfermedades crónicas, con • 
Leucemia mieloide crónica (LMC):
una historia natural larga, que en el proliferación granulocítica.

- 265 -
J. C. Hernández Boluda, V. García Gutiérrez
Capítulo 12

• Policitemia vera (PV): proliferación ces superior de desarrollar una NMP con
eritroide. mutación activadora del gen JAK2.
• Trombocitemia esencial (TE): proli- La teoría patogénica actualmente ad-
feración megacariocítica. mitida acepta considerar las NMP como
• Mielofibrosis primaria (MFP): proli- panmielopatías clonales, es decir, que
feración megacariocítica asociada a como consecuencia de un estímulo on-
proliferación fibroblástica reactiva. cogénico se produce la transformación
maligna y posterior expansión clonal de
Recientemente se ha publicado la una célula troncal hematopoyética pluri-
nueva clasificación de la Organización potente CD34+.
Mundial de la Salud (OMS 2016), que Bajo el punto de vista patogénico,
cataloga las distintas entidades en fun- son de enorme relevancia las anomalías
ción de sus características morfológicas, citogenéticas y moleculares que afectan
citogenéticas y moleculares (tabla I). a las NMP, particularmente la t(9;22)
La diferencia fundamental con respecto en la LMC (con el reordenamiento BCR-
a la clasificación previa (OMS 2008) es ABL), y en el resto, las mutaciones del
que la mastocitosis no se incluye ya en gen JAK2, del gen de la calreticulina
el apartado de las NMP, sino que figura (CALR), del gen del receptor de la trom-
como una entidad aparte. bopoyetina (c-MPL), del gen del recep-
tor del factor de crecimiento derivado
ETIOPATOGENIA de las plaquetas (PDGFR), del gen del
receptor del factor de crecimiento fibro-
Las NMP carecen de etiología conoci- blástico (FGFR1) y granulocítico (CSF3R)
da, aunque se han relacionado algunos y del gen del receptor del stem cell fac-
casos con la exposición a radiaciones tor (KIT) (véase capítulo 32). Todas es-
ionizantes y determinados solventes or- tas aberraciones determinan una ventaja
gánicos. Recientemente se ha observa- proliferativa del clon patológico sobre los
do que algunos individuos tienen una progenitores hematopoyéticos normales,
cierta predisposición a desarrollar NMP a los que desplazan progresivamente.
en base a determinados polimorfismos Por último, hay que destacar que el clon
genéticos. El más importante es el de- neoplásico tiene una gran inestabilidad
nominado haplotipo 46/1 del gen JAK2, genética, por lo que puede dar lugar a
que se asocia a un riesgo entre 3 y 5 ve- subclones con alteraciones secuenciales

Tabla I. Clasificación de las neoplasias mieloproliferativas


(Organización Mundial de la Salud, 2016)

• Leucemia mieloide crónica, BCR-ABL positiva


• Leucemia neutrofílica crónica
• Policitemia vera
• Mielofibrosis primaria
• Trombocitemia esencial
• Leucemia eosinofílica crónica
• Neoplasias mieloproliferativas, inclasificables

- 266 -
SÍNDROMES MIELOPROLIFERATIVOS CRÓNICOS. LEUCEMIA MIELOIDE CRÓNICA
Capítulo 12

del cariotipo y comportamiento biológi- Patogenia: el cromosoma Filadelfia


co progresivamente anómalo.
La presencia de una anomalía cro-
LEUCEMIA MIELOIDE CRÓNICA mosómica específica, el cromosoma Ph’,
confirma que la LMC es una enfermedad
La LMC es una neoplasia mielopro- clonal que resulta de la transformación
liferativa caracterizada por hiperplasia maligna de una célula progenitora pluripo-
mieloide con un gran aumento en la cifra tencial hematopoyética. Puesto que dicha
total de leucocitos y granulocitos, donde anomalía está presente en los granuloci-
las células proliferantes presentan el cro- tos, los monocitos, la serie roja, los mega-
mosoma Filadelfia (Ph’) y/o el reordena- cariocitos y los linfocitos, la LMC es con-
miento BCR-ABL. siderada un trastorno de la célula madre
La historia natural de la enfermedad, sin pluripotencial más inmadura (UFC-LM).
tratamiento, está dividida en dos o tres fa- El cromosoma Ph’ es un cromosoma
ses: una fase crónica (FC) inicial o indolen- 22 disminuido de tamaño a consecuencia
te, que dura una media de 3-4 años, en la de un intercambio de material genético
que existe diferenciación hematopoyética o traslocación recíproca con el cromoso-
con producción de granulocitos maduros ma 9, designándose en términos citoge-
funcionales; inevitablemente la enferme- néticos como t(9;22)(q34;q11). Gracias
dad evoluciona hacia una fase de acelera- a las técnicas de biología molecular, hoy
ción (FA), en la que existe una pérdida pro- conocemos que el punto de rotura del
gresiva de la capacidad de diferenciación cromosoma 22 es altamente específico y
celular, para desembocar en una leucemia está restringido a una pequeña región de
aguda terminal o crisis blástica (CB), en la 5,8 kilobases (kb) dentro del gen BCR,
que las células blásticas inmaduras se acu- denominada M-BCR (major-breakpoint
mulan en la médula ósea, en la sangre y en cluster region), mientras que el punto de
otros tejidos. En la mitad de casos no existe rotura en el cromosoma 9 es variable. El
la FA intermedia y los pacientes pasan di- material genético intercambiado incluye
rectamente de la FC a la CB. el protooncogén ABL, situado inicialmen-
La LMC fue la primera neoplasia en te en el cromosoma 9, que se desplaza al
la que se descubrió la asociación con cromosoma 22 (fig. 1). El resultado de la
una anomalía citogenética adquirida. El fusión del gen ABL con las secuencias de
estudio molecular de esta alteración ci- ácido desoxirribonucleico (ADN) residua-
togenética permitió descubrir la base pa- les del gen BCR situado en el brazo largo
togénica de la enfermedad y diseñar la del cromosoma 22 es la creación de un
primera molécula enfocada a una diana nuevo gen quimérico (el gen BCR-ABL),
molecular, el imatinib, que ha abierto una que se transcribe en un ácido ribonuclei-
nueva era en la terapia antitumoral. co (ARN) mensajero anormal, y este a su
vez codifica la síntesis de una proteína
Epidemiología de fusión de 210 kb (la proteína BCR-
ABL, p210), con actividad tirosincinasa
La LMC representa el 15 % de todas que no responde a la regulación normal
las leucemias humanas, tiene un ligero y está permanentemente activada. Esta
predominio masculino y se da con más actividad tirosincinasa constitutiva es
frecuencia en la quinta y sexta décadas responsable a su vez de la activación de
de la vida. Su incidencia anual es de 1-2 otras vías de transducción de señales al
casos por cada 100.000 habitantes. núcleo celular, que son determinantes

- 267 -
J. C. Hernández Boluda, V. García Gutiérrez
Capítulo 12

Cromosoma 9 Cromosoma 9

Cromosoma
Cromosoma 22
Filadelfia
q11
Gen BCR Traslocación Gen fusión
BCR-ABL

Gen ABL q34

Progenitor
hematopoyético
transformado
Proteína de fusión BCR-ABL
BCR ABL
N C
Transcripción Región Unión ADN
del gen de fusión tirosincinasa
BCR-ABL
Proteína de fusión
BCR-ABL
Adhesión celular anómala

ARNm Supervivencia celular prolongada


BCR-ABL Translación

Proliferación celular descontrolada

u Figura 1. Patogenia de la leucemia mieloide crónica. Formación del cromosoma


Filadelfia y de la proteína de fusión BCR-ABL, que fosforila segundos mensajeros,
responsables del fenotipo maligno de la célula.
ADN: ácido desoxirribonucleico; ARNm: ácido ribonucleico mensajero.

en la adquisición del fenotipo leucémico El conocimiento de este mecanismo


en la LMC, caracterizado por el aumento patogénico ha tenido una enorme tras-
de la proliferación celular, la reducción cendencia para el desarrollo de fármacos
de la adhesión celular al estroma y la dis- dirigidos contra la diana molecular de
minución de la apoptosis (fig. 1). La acti- la enfermedad, como el imatinib, que
vidad constitutiva de BCR-ABL no es solo bloquea la actividad tirosincinasa de
fundamental en la patogénesis de la FC BCR-ABL, y es considerado uno de los
de la LMC, sino que también contribuye mayores adelantos terapéuticos de la
decisivamente a la progresión de la en- medicina moderna.
fermedad. Así, BCR-ABL estimula la pro- Por otro lado, el lugar de rotura en
ducción de radicales libres de oxígeno a el gen BCR puede influir en el fenotipo
la vez que interfiere en los mecanismos de la enfermedad. En la mayoría de los
de reparación del ADN, lo que promue- casos se produce en la región M-BCR,
ve la adquisición de nuevas alteraciones abarcando los exones 12-16, lo que da
moleculares en las células proliferantes. lugar a la proteína p210. Más raramen-

- 268 -
SÍNDROMES MIELOPROLIFERATIVOS CRÓNICOS. LEUCEMIA MIELOIDE CRÓNICA
Capítulo 12

6
Ph M

2
Ph1
5
4
3
1 Ph M
Ph1
Ph1
Ph1
N Ph1
N N N
N
N

u Figura 2. Esquema evolutivo de la leucemia mieloide crónica: 1. Mutación de los


clones normales (N) y adquisición del cromosoma Filadelfia (Ph’). 2. Expansión del clon
Ph’ y diagnóstico de la fase crónica. 3. Efecto del tratamiento. 4. Otra mutación provoca
la aparición de subclones con anomalías citogenéticas y moleculares múltiples (Ph M). 5.
Fase de aceleración. 6. Crisis blástica.

te el punto de rotura ocurre en la región moleculares ocasionados por la traslo-


µBCR, abarcando los exones 17-20, y cación cromosómica determinan una al-
esto ocasiona la codificación de una pro- teración del comportamiento biológico
teína de fusión de mayor tamaño, p230. celular, que se traduce en una ventaja
Los pacientes con esta proteína de fu- proliferativa del clon de los progenitores
sión presentan una maduración neutrofí- Ph’ positivos sobre los normales Ph nega-
lica y/o trombocitosis más prominentes. tivos. Los primeros, en su expansión pro-
Cuando el punto de rotura se produce gresiva, invaden la médula ósea, el bazo y
en la m-BCR (minor-breakpoint cluster el hígado, produciendo los síntomas clíni-
region), que abarca los exones 1-2 del cos. La proliferación anómala afecta sobre
gen BCR, la proteína de fusión es de me- todo a los progenitores determinados ha-
nor tamaño, p190, y con frecuencia se cia la línea granulocítica, que inicialmente
asocia a la leucemia aguda linfoblástica retienen su capacidad de diferenciación y
Ph’ positiva. La m-BCR también puede maduración; de ahí que en la FC se pro-
darse en la LMC, y estos casos se asocian duzca un gran incremento de la masa de
a monocitosis absoluta y pueden simular granulocitos maduros.
una leucemia mielomonocítica crónica Tras un periodo de tiempo variable,
(véase capítulo 15). el clon maligno sufre nuevas mutacio-
Se ha sugerido un modelo patogénico nes, que se manifiestan por la aparición
escalonado (fig. 2), en el que un estímulo de alteraciones citogenéticas añadidas al
neoplásico provocaría la mutación de una cromosoma Ph’ y nuevas anomalías mo-
célula germinal pluripotente con la adqui- leculares en los genes TP53, p16, RAS,
sición del cromosoma Ph’. Los trastornos MYC o EVI1, entre otros. Paralelamente se

- 269 -
J. C. Hernández Boluda, V. García Gutiérrez
Capítulo 12

aprecia una pérdida de la capacidad de se diagnostican en CB inicial. A diferen-


diferenciación y maduración, con la consi- cia de lo que ocurre en otras NMP, los
guiente acumulación de células leucémi- pacientes con LMC no tienen un mayor
cas inmaduras en la médula ósea, en la riesgo trombótico.
sangre periférica y en otros órganos. Esta Las características más relevantes
leucemia aguda terminal o CB puede pre- en la exploración física son la palidez
sentarse de forma abrupta o tras una fase cutaneomucosa y la existencia de es-
intermedia caracterizada por el deterioro plenomegalia, habitualmente grande y
clínico del paciente (fase acelerada). proporcional al grado de leucocitosis.
La CB es de estirpe mieloide en el El bazo suele ser firme y no doloroso. El
70  % de los pacientes y linfoide en el 20- hígado también puede estar aumentado
30  %, lo que supone una evidencia más de tamaño. Por el contrario, son raras
del origen clonal de la LMC en una célula las adenopatías. Los casos que cursan
madre pluripotencial. con leucocitosis extremas (leucostasis)
muestran dilatación de las venas retinia-
Manifestaciones clínicas nas y hemorragias con una típica área
blanca central.
Actualmente, en más de la mitad de Las fases de aceleración o transfor-
los casos la LMC se descubre acciden- mación blástica se suelen acompañar
talmente al realizar un hemograma de de síntomas de insuficiencia medular
control y detectar leucocitosis en un in- (anemia y/o trombopenia), deterioro del
dividuo asintomático. estado general y aumento de la espleno-
En el resto, la enfermedad suele megalia a pesar del tratamiento.
presentarse de forma insidiosa, con un
síndrome anémico progresivo o astenia, Datos biológicos
anorexia, sudación nocturna, pérdida de
peso y otros síntomas de hipermetabolis- Sangre periférica
mo. En ocasiones, el cuadro inicial es una
tumoración abdominal con sensación de • 
Leucocitosis, con cifras de 50-
saciedad precoz, plenitud posprandial o 500 × 109/l (mediana en torno a
dolor en el hipocondrio izquierdo, cau- 100 × 109/l), a expensas de gra-
sadas por el aumento masivo del bazo. nulocitos de morfología normal, en
Los dolores óseos generalizados, ex- todos los estadios de maduración
presión de la proliferación leucémica, (no existe hiatus). En el frotis predo-
son frecuentes. El aumento de la masa minan los neutrófilos segmentados,
granulocítica en pacientes con leucocito- los cayados y los mielocitos, aunque
sis intensa (mayor de 300 × 109/l) pue- también se observan abundantes
de dar lugar a fenómenos de leucostasis, metamielocitos, promielocitos y al-
con trastornos visuales, síntomas neuroló- gunos mieloblastos, estos últimos
gicos, pulmonares o priapismo. De igual en porcentaje inferior al 10 % (fig. 3).
modo, el acelerado catabolismo celular En el recuento celular la aparición
ocasiona eventualmente cólicos renales o de un doble pico de segmentados
artritis gotosa, por depósito de ácido úrico. y cayados, y de mielocitos, con un
En contraste con las leucemias agu- menor número de metamielocitos,
das, los pacientes con LMC rara vez es sumamente característico de la
presentan infecciones o hemorragias, LMC. No hay rasgos displásicos sig-
aunque esto puede ocurrir en los que nificativos.

- 270 -
SÍNDROMES MIELOPROLIFERATIVOS CRÓNICOS. LEUCEMIA MIELOIDE CRÓNICA
Capítulo 12

• La basofilia absoluta es un hallazgo blastos es usualmente inferior al 5 % en


constante y típico de la LMC; tam- la FC. En la biopsia ósea puede observar-
bién hay eosinofilia absoluta y más se un cierto grado de fibrosis hasta en
raramente monocitosis. el 30 % de los pacientes en el momen-
• Inicialmente suele existir una leve to del diagnóstico. No es rara la presen-
anemia normocítica y normocrómi- cia de histiocitos azul marino, o células
ca, que posteriormente se agrava en seudo-Gaucher, como consecuencia del
relación con el grado de insuficien- acúmulo de detritus por la excesiva des-
cia medular. trucción celular.
• La trombocitosis se observa en la
mitad de los casos y suele desapa- Otros datos
recer en estadios avanzados de la
enfermedad, ya sea por insuficiencia • La fosfatasa alcalina granulocítica
medular o por hiperesplenismo. (FAG) está típicamente disminuida
o ausente en más del 90 % de los
Médula ósea pacientes.
• La vitamina B12 sérica, la capacidad
El aspirado medular es típicamente de fijación de la misma, el ácido úri-
hipercelular, con una marcada hiperpla- co y la lactatodeshidrogenasa (LDH)
sia granulocítica a expensas, como en están elevados. Todo ello como ex-
la sangre periférica, de mielocitos y de presión del aumento del recambio
elementos maduros, aunque están re- celular.
presentados todos los estadios de dife- • El estudio citogenético convencional
renciación. También se aprecia basofilia y mostrará la existencia del cromoso-
eosinofilia. Los precursores eritroides es- ma Ph’ en el 95 % de los pacientes.
tán proporcionalmente diminuidos (re- Los casos restantes pueden tener
lación mielo-­ eritroide superior a 20:1). traslocaciones variantes que involu-
Los megacariocitos están aumentados cren a otros cromosomas, además
y suelen tener un tamaño más pequeño de a los cromosomas 9 y 22, o tener
del normal (megacariocitos enanos), con una traslocación críptica del 9q34 y
núcleos hipolobulados. El número de 22q11.2, que no se puede identifi-

u Figura 3. Leucemia
mieloide crónica: morfología
en sangre periférica. Se
observan mielocitos, cayados,
segmentados, dos basófilos y
un mieloblasto.

- 271 -
J. C. Hernández Boluda, V. García Gutiérrez
Capítulo 12

car por la citogenética convencional. cursan con esplenomegalia (salvo que


En estas ocasiones es útil la técnica esta sea propia de la enfermedad de
de hibridación in situ fluorescente base), no hay basofilia, la FAG está ele-
(FISH), aunque tiene menos sensi- vada y el reordenamiento BCR-ABL en
bilidad que los estudios molecula- sangre, ausente.
res (véase capítulo 32).
• El estudio molecular mediante téc- Evolución. Fase acelerada.
nica de reacción en cadena de la po- Crisis blástica
limerasa (PCR) servirá para detectar
el ARN quimérico BCR-ABL. Este La evolución natural de la enfer-
estudio es positivo en todos los ca- medad en la mayoría de los pacientes,
sos Ph-positivos y en el 60 % de los hasta la llegada de los inhibidores de
Ph-negativos. Ambas técnicas son tirosincinasa (ITC), era la de pasar de
imprescindibles, como más adelan- una FC, fácilmente controlable con el
te veremos, para la monitorización tratamiento y con apenas síntomas, a,
del tratamiento. tras un periodo de tiempo variable, una
FA caracterizada por el deterioro clínico
Diagnóstico y diagnóstico progresivo del paciente.
diferencial El resultado final en pocos meses de
evolución de la FA era la proliferación
El diagnóstico resulta evidente en la difusa de células blásticas inmaduras
mayoría de los casos, tras la historia clíni- en la sangre periférica y en la médula
ca, la exploración física, el hemograma y, ósea, es decir, la transformación a leu-
sobre todo, tras observar con detalle una cemia aguda o CB, que era refractaria al
buena extensión de sangre periférica y rea- tratamiento y determinaba la muerte del
lizar el recuento leucocitario. El examen de paciente. Hasta el 70 % de las CB son de
la médula ósea confirmará la hiperplasia estirpe mieloide, y el 20-30 %, de estir-
mieloide; para un diagnóstico definitivo pe linfoide. Las primeras pueden tener
son claves el estudio citogenético (cromo- fenotipo de diferenciación granulocítica,
soma Ph’) y el molecular (reordenamiento monocítica, megacariocítica, eritroide o
BCR-ABL). Si bien la confirmación diag- combinada entre los anteriores, y pue-
nóstica de LMC puede realizarse mediante den coexpresar uno o más antígenos
el estudio citogenético, la identificación linfoides aberrantes. Este fenómeno
correcta del tipo de transcrito al diagnósti- también se produce en las CB de estirpe
co es fundamental para el posterior segui- linfoide, en las que los blastos suelen ex-
miento de la enfermedad. presar antígenos de precursores B y más
En función de estos hallazgos, se rea- raramente de linfocitos T, pero también
lizará el diagnóstico diferencial con otras coexpresan antígenos mieloides. De he-
NMP y cuadros clínicos (tabla II). La leu- cho, hasta el 25% de las CB cumplen
cocitosis con desviación a la izquierda criterios de leucemias de fenotipo mixto
(presencia de formas inmaduras) puede (véase capítulo 11).
también aparecer en infecciones, neo- Se admite que un paciente está en
plasias, enfermedades del colágeno o CB cuando la cifra de blastos es del 20 %
cirrosis fulminante. En ocasiones, estas o mayor en la sangre periférica o en el
leucocitosis pueden ser superiores a 50 aspirado medular, o si en la biopsia ósea
× 109/l; son las llamadas reacciones leu- aparecen agregados focales de blastos
cemoides. Contrariamente a la LMC, no (clusters) en áreas significativas.

- 272 -
SÍNDROMES MIELOPROLIFERATIVOS CRÓNICOS. LEUCEMIA MIELOIDE CRÓNICA
Capítulo 12

Tabla II. Diagnóstico diferencial de las neoplasias mieloproferativas


y la reacción leucemoide

LMC PV TE MFP Reacción


leucemoide

Hemoglobina ↓ ↑↑ N/↓ N/↓ N/N/↓

Leucocitos ↑↑ ↑ N/↑ ↑/↓ ↑

Eosinofilia + + + + 0

Basofilia ++ + + + 0

Plaquetas ↑/N ↑/N ↑↑ ↑/↓ N/↑

Bazo ↑↑ ↑ N/↑ ↑↑ 0
Médula Hiperplasia Panmielosis Hiperplasia Displasia Hiperplasia
granulocítica ↓Fe megacariocítica megacariocítica granulocítica
Fibrosis
FAG ↓ N/↑ N/↑ N/↑ ↑

Otros Ph1 ↑ Masa JAK2/CALR/ Dacriocitosis Infección o


BCR-ABL eritroide MPL Eritroblastosis neoplasia
JAK2 (95 %) JAK2/CALR/
MPL

FAG: fosfatasa alcalina granulocítica; Fe: hierro; LMC: leucemia mieloide crónica; MFP: mielofibrosis
primaria; N: normal; Ph1: cromosoma Filadelfia; PV: policitemia vera; TE: trombocitemia esencial.

La CB puede surgir bruscamente, sin Pronóstico y tratamiento


FA previa. Ocasionalmente, se inicia en
tejidos extramedulares (CB extramedu- Pronóstico
lar), como el ganglio linfático, hueso, piel
y tejidos blandos o meninges, donde se A principios del siglo xx la supervi-
aprecian masas de células blásticas de- vencia mediana de los pacientes con
nominadas sarcomas granulocíticos, que LMC era ligeramente superior a 2 años y
posteriormente invaden la médula ósea. medio. Durante décadas la radioterapia
Los criterios diagnósticos de FA y CB esplénica fue considerada el tratamiento
actualmente admitidos por la OMS y la estándar de la LMC, a pesar de que úni-
European LeukemiaNet (ELN) se mues- camente permitía el control sintomático
tran en la tabla III. de la enfermedad sin prolongar significa-
Afortunadamente, tras la incorpora- tivamente la supervivencia de los pacien-
ción de los ITC al arsenal terapéutico de la tes. La introducción del busulfán en los
LMC, la evolución a estas fases avanzadas años cincuenta desplazó rápidamente a
de la enfermedad ha disminuido sensi- la radioterapia al alargar la mediana de
blemente, observándose únicamente en supervivencia a 4 años, si bien su em-
alrededor de un 10 % de los pacientes. pleo se acompañaba con frecuencia de

- 273 -
J. C. Hernández Boluda, V. García Gutiérrez
Capítulo 12

Tabla III. Criterios de la fase acelerada y la crisis blástica

Fase crónica Definición

Criterios OMS, ELN No reúne criterios de fase de aceleración ni de crisis blástica

Fase acelerada Definiciones


Criterios ELN Blastos 15-29 % en SP o MO
Blastos + promielocitos > 30 % con blastos < 30 % en SP o MO
Basófilos ≥ 20 % en SP
Trombopenia persistente < 100 × 109/l, no relacionada con el
tratamiento
ACA/Ph+, ruta mayor*, bajo tratamiento
Criterios OMS Blastos 10-19 % en SP o MO
Basófilos ≥ 20 % en SP
Trombopenia persistente < 100 × 109/l, no relacionada con el
tratamiento
ACA/Ph+ bajo tratamiento
Trombocitosis (> 1.000 × 109/l), resistente a tratamiento
Incremento de bazo y leucocitosis resistente a tratamiento
Crisis blástica Definiciones
Criterios ELN Blastos ≥ 30 % en SP o MO
Enfermedad extramedular, aparte del bazo
Criterios OMS Blastos ≥ 20 % en SP o MO
Enfermedad extramedular, aparte del bazo
Acúmulos de blastos en biopsia ósea

*Ruta mayor: trisomía 8, duplicación Ph (+der(22)t(9;22)(q34;q11), i(17)(q10), trisomía 19,


ider(22)(q10)t(9;22)(q34;q11).
ACA: anomalías cromosómicas asociadas; ELN: European LeukemiaNet; MO: médula ósea;
OMS: Organización Mundial de la Salud; Ph’: cromosoma Filadelfia; SP: sangre periférica.

efectos adversos graves como la inferti- Sin embargo, ninguna de estas modali-
lidad, el desarrollo de aplasia medular o dades terapéuticas permitía obtener res-
la fibrosis pulmonar. En los años setenta puestas citogenéticas ni modificaba de
y ochenta, el fármaco más utilizado en el forma significativa la historia natural de
tratamiento de la LMC fue la hidroxiurea, la enfermedad (evolución a CB del 25 %
cuyo mejor perfil de toxicidad permitió de los pacientes cada año a partir del pri-
prolongar la supervivencia de los pacien- mer año).
tes a 5 años, si bien menos del 10 % de No fue hasta finales de los años ochen-
los pacientes sobrevivían a los 10 años. ta cuando el grupo de Houston incorporó

- 274 -
SÍNDROMES MIELOPROLIFERATIVOS CRÓNICOS. LEUCEMIA MIELOIDE CRÓNICA
Capítulo 12

A B Estructura del STI571


H H
Sustrato N N N N
N
N O CH3
Proteína CH3
BCR-ABL C29H31N7O•CH4SO3
Fosforilación N
ATP de residuos Imatinib
tirosina Sustrato

Unión al Proteína No
sitio de BCR-ABL fosforilación
unión
de ATP

Transformación maligna ATP

u Figura 4. A. La proteína BCR-ABL fosforila los residuos tirosina en el sustrato,


activándolo. B. El imatinib bloquea el sitio de unión al trifosfato de adenosina (ATP)
e impide la fosforilación del sustrato, bloqueando así el mecanismo patogénico de la
transformación maligna.

el primer agente terapéutico capaz de in- han sustituido al alo-TPH y al IFN-α como
ducir respuestas citogenéticas en una pro- tratamiento de primera línea. El mecanis-
porción de enfermos con LMC, el interfe- mo de acción de los ITC se basa en el
rón alfa (IFN-α). La introducción del IFN-α bloqueo del sitio específico de unión del
incrementó significativamente la duración trifosfato de adenosina (ATP) que tiene la
de la FC y la mediana de supervivencia (a oncoproteína BCR-ABL para fosforilar los
más de 6 años), logrando mantener hasta sustratos con residuos tirosina. Al reali-
un 25 % de pacientes vivos a los 10 años zar este bloqueo, no se produce la fos-
de seguimiento. Con todo, el único trata- forilación y se detiene la transmisión de
miento curativo era el trasplante alogéni- señales responsable del comportamiento
co de progenitores hematopoyéticos (alo- tumoral de la célula (fig. 4).
TPH). Con el alo-TPH se logra erradicar el De esta forma, el pronóstico de los
clon neoplásico, y hasta hace poco tiem- pacientes con LMC ha cambiado drásti-
po ha sido el tratamiento de elección en camente tras la incorporación de los ITC
los pacientes jóvenes con donante HLA a la práctica clínica. En la actualidad po-
compatible y estado general apropiado demos afirmar que la supervivencia de
(véase capítulo 24). los pacientes con LMC se aproxima a la
Más recientemente, el conocimiento de la población general para sujetos de
de las alteraciones moleculares presen- la misma edad y sexo.
tes en la LMC ha permitido el diseño de No obstante, existen factores pronós-
nuevos medicamentos, como el imatinib ticos al diagnóstico que se han relaciona-
y otros ITC, que han demostrado una ex- do con una mayor mortalidad relaciona-
traordinaria eficacia en esta enfermedad y da con la LMC, como son:

- 275 -
J. C. Hernández Boluda, V. García Gutiérrez
Capítulo 12

Tabla IV. Leucemia mieloide crónica. Factores pronósticos

• Anomalías cromosómicas asociadas al cromosoma Filadelfia (Ph’)


• Índices pronósticos de riesgo relativo de Sokal y de Hasford
(disponibles en: http://www.icsg.unibo.it/rrcalc.asp)
– Sokal: se calcula con la siguiente fórmula:
0,116 × (edad en años − 43,4) + 0,0345 × (bazo − 7,51) + 0,188 ×
× [(plaquetas: 700)2 − 0,563] + 0,087 × (blastos -2,10) ∫
Valoración: bajo: < 0,8; intermedio: 0,8-1,2; alto: > 1,2
– Hasford: se calcula con la siguiente fórmula:
0,666 si ≥ 50 años + (0,042 × bazo) + 1,0956 si plaquetas ≥ 1.500 × 109/l +
+ (0,584 × % blastos) + (0,0413 × % eosinófilos) + 0,20399 si basófilos ≥ 3 % =
= total × 100
Valoración: bajo: < 780; intermedio: si > 780–≤ 1.480; alto: > 1.480

• Índices pronósticos de Sokal y de tente con la respuesta al tratamiento y


Hasford: basados en la acumula- con la evolución de la enfermedad, las
ción de datos clínicos y analíticos, recomendaciones de expertos de la ELN
como la edad avanzada, el tamaño no condicionan la elección de tratamien-
del bazo, una cifra alta de plaquetas to de primera línea a ninguno de estos
o un elevado porcentaje de célu- índices pronósticos. No obstante, existen
las blásticas en sangre, entre otros estudios que han mostrado un beneficio
(tabla IV). Recientemente, un nue- clínico del uso de los denominados ITC
vo índice pronóstico, denominado de segunda generación (ITC2G), de en-
índice EUTOS Long-Term Survival, trada en los pacientes de alto riesgo.
ha demostrado predecir la supervi- Con todo, el factor pronóstico más
vencia debida a la LMC, excluyendo importante es la respuesta al tratamiento.
otras causas de muerte. En la tabla V se muestran los criterios ac-
• Anomalías cromosómicas asociadas tuales de respuesta (hematológica, cito-
a la clona Ph+ (ACA): las ACA, pre- genética, molecular) al tratamiento según
sentes en una minoría de pacientes las recomendaciones de la ELN. Resulta
al diagnóstico, se han correlacionado lógico deducir que primero se obtiene
con un pronóstico desfavorable en la respuesta hematológica, después la
pacientes tratados con imatinib, sien- citogenética y, finalmente, la molecular.
do las de peor pronóstico las deno- También que la respuesta molecular es
minadas anomalías de la ruta mayor. de más calidad que la citogenética y esta
• Transcrito BCR-ABL1: los transcritos última mejor que la hematológica. El ob-
atípicos son extremadamente infre- jetivo teórico del tratamiento debería ser
cuentes, pero parecen asociarse a alcanzar la respuesta de más calidad lo
un peor pronóstico. más pronto posible.
La utilización apropiada de estas
A pesar de que la estratificación pro- técnicas es fundamental para realizar el
nóstica se correlaciona de forma consis- seguimiento de la enfermedad y llevar

- 276 -
SÍNDROMES MIELOPROLIFERATIVOS CRÓNICOS. LEUCEMIA MIELOIDE CRÓNICA
Capítulo 12

Tabla V. Leucemia mieloide crónica. Definiciones de respuesta al tratamiento

Respuesta hematológica completa


• Leucocitos < 10 × 109/l, ausencia de granulocitos inmaduros, basófilos < 5 %,
desaparición de enfermedad extramedular
Respuesta citogenética
• Completa: ausencia de metafases Ph+ en cariotipo o < 1% de núcleos BCR-ABL1+
en FISH
• Parcial: 1-35 % metafases Ph+ en cariotipo
• Menor: 36-65 % metafases Ph+ en cariotipo
• Mínima: 66-95 % metafases Ph+ en cariotipo
• No respuesta citogenética: > 95 % metafases Ph+ en cariotipo
Respuesta molecular
• Mayor: ≤ 0,1 % de transcritos BCR-ABL1 medidos en IS
• RM grado 4: ≤ 0,01 % de transcritos BCR-ABL1 medidos en IS. Incluye enfermedad
indetectable en una muestra con ≥ 10.000 copias de ABL o ≥ 24.000 copias de GUS
• RM grado 4,5: ≤ 0,0032 % de transcritos BCR-ABL1 medidos en IS. Incluye
enfermedad indetectable en una muestra con ≥ 32.000 copias de ABL o ≥ 77.000
copias de GUS
• RM grado 5: ≤ 0,001 % de transcritos BCR-ABL1 medidos en IS. Incluye enfermedad
indetectable en una muestra con ≥ 100.000 copias de ABL o ≥ 240.000 copias de GUS
• RM completa: clásicamente considerada como transcritos de BCR-ABL1 no
detectables en dos muestras sanguíneas consecutivas de calidad adecuada. En las
últimas recomendaciones de consenso de expertos se aconseja no utilizar este
término e incluir las determinaciones indetectables como RM 4, RM 4,5 o RM 5,
según las definiciones descritas en los apartados anteriores

FISH: hibridación in situ fluorescente; IS: escala internacional.

a cabo las modificaciones terapéuticas fase avanzada, se han descrito lo que co-
que procedan si existe falta de respuesta nocemos como objetivos subrogados de
o progresión. En la tabla VI puede verse la enfermedad. Así, todo paciente que
la secuencia de monitorización según las inicie el tratamiento con un ITC deberá
recomendaciones de expertos de la ELN. alcanzar estos objetivos de forma diná-
mica en el tiempo, y en caso de no alcan-
Tratamiento inicial. Inhibidores de zarlos, se deberá proceder a un cambio
las tirosincinasas de estrategia terapéutica. En la tabla VII
se resumen los criterios actuales de eva-
Una vez confirmado el diagnóstico luación de la respuesta de la ELN tras el
de LMC los pacientes deben iniciar tra- inicio de la primera línea de tratamiento.
tamiento con uno de los tres ITC apro- Se define como respuesta óptima aque-
bados para la primera línea: imatinib, lla que permite anticipar una superviven-
nilotinib o dasatinib. Con la finalidad cia global (SG) del paciente similar a la
de identificar precozmente aquellas si- de la población general, mientras que el
tuaciones en las que el paciente puede fallo al tratamiento indica que la proba-
estar en alto riesgo de progresión a una bilidad de progresión es alta y por tan-

- 277 -
J. C. Hernández Boluda, V. García Gutiérrez
Capítulo 12

Tabla VI. Monitorización de la respuesta al tratamiento con imatinib

• Hematológica: en el momento del diagnóstico; luego cada 15 días hasta que se


alcance la RHC; posteriormente cada 3 meses
• Citogenética: al diagnóstico, a los 3 y a los 6 meses; luego cada 6 meses hasta RCGC.
Siempre que se sospeche fallo del tratamiento (resistencia primaria o secundaria) o si
aparecen citopenias no explicadas
• Molecular por QRT-PCR: cada 3 meses hasta RMM estable; luego cada 3-6 meses
• Análisis mutacional molecular: cuando exista respuesta subóptima o falta de
respuesta, y siempre que haya que cambiar de tratamiento

RCGC: respuesta citogenética completa; RHC: respuesta hematológica completa; RMM: respuesta
molecular mayor; QRT-PCR: reacción en cadena de la polimerasa cuantitativa en tiempo real.

Tabla VII. Evaluación de la respuesta global a los inhibidores de las


tirosincinasas (recomendaciones de la European LeukemiaNet 2013)

Respuesta óptima Alarma Fallo

Basal No aplicable Alto riesgo o ACC/ No aplicable


Ph+ en ruta mayor1
3 meses BCR-ABL1 IS ≤ 10 % BCR-ABL1 IS ≤ 10 % No RHC y/o Ph >
y/o Ph ≤ 35% y/o Ph 36-95% 95 %
6 meses BCR-ABL1 IS ≤ 1 % BCR-ABL1 IS 1-10 % BCR-ABL1 IS > 10 %
y/o Ph 0% y/o Ph 1-35 % y/o Ph > 35 %
12 meses BCR-ABL1 IS ≤ 0,1 % BCR-ABL1 IS > 0,1- BCR-ABL1 IS > 1 %
1 % y/o Ph > 0 %
Después, en BCR-ABL1 IS ≤ 0,1 % ACC/Ph (-7 o 7q-) Pérdida de RHC, RCC,
cualquier RMM confirmada2,
momento ACC/Ph+, mutaciones

1. Ruta mayor: trisomía 8, trisomía Ph (der(22)t(9;22)(q34;q11), isocromosoma 17(i(17)(q10)),


trisomía 19, ider(22)(q10)(9;22)t(q34;q11). 2. Confirmada en dos determinaciones, de las cuales al
menos una con BCR-ABL1 > 1 %.
ACC: alteraciones citogenéticas clonales; IS: escala internacional; RCC: respuesta citogenética
completa; RHC: respuesta hematológica completa; RMM: respuesta molecular mayor.

to debe realizarse un cambio de actitud estas guías es la incorporación de la res-


terapéutica. Entre medias, se definen los puesta molecular a los 3 meses de trata-
criterios de alarma (antiguamente res- miento. Si bien las recomendaciones de
puesta subóptima) que obligan a realizar la ELN no consideran el no alcanzar una
una monitorización estrecha del pacien- respuesta inferior al 10 % a los 3 meses
te por existir riesgo de cumplir criterios como un criterio de fallo de tratamiento
de fallo al tratamiento en evaluaciones (considerándolo como alarma), las guías
posteriores. Un aspecto controvertido en de la ESMO (European Society for Me-

- 278 -
SÍNDROMES MIELOPROLIFERATIVOS CRÓNICOS. LEUCEMIA MIELOIDE CRÓNICA
Capítulo 12

dical Oncology) y del NCCN (National realizarse un seguimiento estrecho por


Comprehensive Cancer Network) defi- presentar mayores probabilidades de
nen el no alcanzar este objetivo como fallo de tratamiento. En los pacientes
fallo, recomendando entonces el cambio diagnosticados en CB estará indicado el
de tratamiento. En la actualidad existen alo-TPH, con un tratamiento previo con
estudios en marcha que valoran el bene- ITC y/o quimioterapia para reducir la
ficio de cambio a un ITC2G en pacientes masa tumoral.
tratados con imatinib que no cumplan
este criterio de respuesta precoz. Tratamiento de segunda y
Los estudios aleatorizados que han posteriores líneas
comparado el imatinib frente a los ITC2G
(nilotinib y dasatinib) no encontraron Cuando se constata un fallo al trata-
diferencias en la SG. Sin embargo, tan- miento de primera línea debe proceder-
to el nilotinib como el dasatinib mostra- se al cambio de fármaco, tras contrastar
ron menores tasas de progresión a fases si ha habido una adecuada toma de la
avanzadas y un incremento significativo medicación inicial y la ausencia de inter­
en las tasas de respuestas citogenéticas acciones farmacológicas que pudieran
y moleculares, siendo especialmente disminuir los niveles plasmáticos del ITC.
significativas las diferencias en respues- En caso de tratamiento inicial con
tas moleculares profundas (RM4.5 o de imatinib, los fármacos indicados en se-
mayor profundidad). De igual modo, se gunda línea serán nilotinib y dasatinib.
observó que el mayor beneficio del uso Si nilotinib y dasatinib no se consideran
de los ITC2G en primera línea de trata- una opción adecuada para el paciente,
miento frente al imatinib se obtiene en bosutinib, un nuevo ITC2G, ha demostra-
pacientes con índices pronósticos de do ser también una opción eficaz y se-
Sokal o Hasford intermedio y alto. gura. El estudio mutacional en pacientes
La causa más importante de fallo al con fallo al tratamiento es imprescindi-
tratamiento con los ITC (tras descartar- ble, ya que puede ayudarnos en la toma
se el mal cumplimiento en la toma de de decisión acerca del fármaco más ade-
la medicación) es la aparición de resis- cuado como rescate.
tencias. La resistencia a los ITC es multi- En caso de fallo al tratamiento con un
factorial, pero en la mayoría de los casos ITC2G, los resultados de eficacia tras el
se debe a mutaciones que alteran el do- cambio a otro ITC2G no son muy satisfac-
minio de unión de los ITC a la proteína torios. En este grupo de mal pronóstico
BCR-ABL. Algunas mutaciones confie- parece que los pacientes se beneficiarían
ren resistencia al imatinib pero no a los del tratamiento con ponatinib, dado que
ITC2G. La mutación T315I es únicamente es el ITC más potente disponible, si bien
sensible a ponatinib. En caso de no ob- se asocia a una tasa elevada de compli-
tener una respuesta óptima o de pérdida caciones cardiovasculares cuando se usa
de respuesta, debe realizarse un estudio a la dosis actualmente aprobada. En este
de mutaciones, dado que la aparición sentido, están en curso ensayos clínicos
de algunas de estas puede dirigir el tra- para evaluar la eficacia y toxicidad de po-
tamiento en función de la sensibilidad a natinib a una dosis menor.
los ITC disponibles. Las últimas recomendaciones de la
Los pacientes diagnosticados en FA ELN aconsejan el alo-TPH en pacien-
deben iniciar el tratamiento con ITC tes con fallo a ITC2G o con la mutación
(preferiblemente con ITC2G), y ha de T315I. Sin embargo, la actualización de

- 279 -
J. C. Hernández Boluda, V. García Gutiérrez
Capítulo 12

los estudios con ponatinib en estos gru- tos adversos. Afortunadamente, el por-
pos de pacientes evidencia que la ma- centaje de pacientes que sufre efectos
yoría de los que alcanzan una respuesta adversos graves relacionados con la me-
óptima (que se sitúa en torno al 65 %) dicación (y que obliga al cambio de tra-
mantienen la respuesta a largo plazo, tamiento) es bajo (en torno al 10-15 %),
por lo que la indicación del trasplante pero los leves-moderados son más fre-
en estos pacientes es controvertida a día cuentes. Estos últimos no solo afectarán
de hoy. la calidad de vida de nuestros pacientes,
En la tabla VIII se expone un algorit- sino que también pueden condicionar
mo de aproximación terapéutica para las la correcta toma de la medicación. Los
diferentes fases de la LMC. efectos secundarios más frecuentes del
La falta de eficacia no es el único pro- imatinib son los edemas, los calambres,
blema que debemos afrontar en el ma- la intolerancia digestiva, los dolores os-
nejo de los pacientes con LMC, dado que teomusculares y la erupción cutánea.
los ITC, al igual que cualquier otro grupo Los ITC2G pueden producir citopenias
de fármacos, no están exentos de efec- y, raramente, trastornos de la conducti-

Tabla VIII. Leucemia mieloide crónica. Algoritmo de tratamiento

Fase crónica
• Primera línea1:
– Imatinib 400 mg/día
– Nilotinib 300 mg/12 horas
– Dasatinib 100 mg/día
• Segunda línea:
– Si el tratamiento de primera línea ha sido imatinib, pasar a nilotinib
400 mg/12 horas o dasatinib 100 mg/día
– Si el tratamiento de primera línea ha sido un ITC2G, puede utilizarse otro ITC2G
o ponatinib2
– Si hay progresión a FA/CB, alo-TPH en pacientes candidatos tras tratamiento con
ITC2G o ponatinib +/- quimioterapia
– Si aparece mutación T315I, ponatinib +/- alo-TPH
• Tercera línea:
– ITC2G o ponatinib2 +/- alo-TPH en pacientes candidatos
Fase acelerada
ITC (preferiblemente ITC2G) con monitorización estrecha. En caso de no respuesta
óptima, alo-TPH en pacientes candidatos
Crisis blástica
Alo-TPH en pacientes candidatos precedido por ITC2G +/- quimioterapia

1. Los ITC2G (nilotinib y dasatinib), en primera línea de tratamiento, han demostrado beneficio frente
a imatinib en una mayor tasa de RCC y RM profundas, con menor incidencia de progresión a fases
avanzadas. 2. Ponatinib, tras fallo a ITC2G, ha mostrado tasas superiores de RCC y menor progresión
a fases avanzadas que el tratamiento con otros ITC2G.
Alo-TPH: trasplante alogénico de progenitores hematopoyéticos; CB: crisis blástica; FA: fase de
aceleración; ITC: inhibidores de la tirosincinasa; ITC2G: ITC de segunda generación; RCC: respuesta
citogenética completa; RM: respuestas moleculares.

- 280 -
SÍNDROMES MIELOPROLIFERATIVOS CRÓNICOS. LEUCEMIA MIELOIDE CRÓNICA
Capítulo 12

vidad cardiaca. El dasatinib se asocia a tratamiento no se recomienda aún en la


la aparición de derrames pleurales (en práctica clínica general, pero puede con-
un 30 % aproximadamente) y, de forma templarse en casos individuales (intento
muy excepcional, a hipertensión pulmo- de concepción, efectos secundarios im-
nar. El nilotinib puede producir altera- portantes, deseo explícito del paciente
ciones en los niveles de lipasa sérica y adecuadamente informado).
en las pruebas funcionales hepáticas, e
incrementar el riesgo de complicaciones Trasplante alogénico de
cardiovasculares isquémicas (un 10 % a progenitores hematopoyéticos
los 5 años, aproximadamente). Esta in-
cidencia aumentada de eventos cardio- El alo-TPH es el único tratamiento que
vasculares parece estar en relación con ha demostrado ser curativo de la LMC y,
la dosis y la coexistencia de factores de por ello, ha sido el de elección en los
riesgo cardiovascular. El bosutinib produ- enfermos jóvenes hasta la aparición de
ce diarrea autolimitada en un alto por- los ITC. La utilización de dosis mieloabla-
centaje de pacientes (80 % aproximada- tivas de radioterapia y/o quimioterapia,
mente), cuya patogénesis se desconoce seguidas de la infusión de progenitores
por el momento. El ponatinib se ha rela- hematopoyéticos de un donante sano
cionado con un incremento importante HLA compatible, permite la erradicación
de eventos cardiovasculares (un 25  % del clon leucémico y el restablecimiento
aproximadamente). de una hematopoyesis normal. Además,
Hasta el momento, las recomenda- las células inmunológicamente compe-
ciones de expertos han venido aconse- tentes del donante ejercen un efecto
jando mantener el tratamiento de forma inmune antileucémico que elimina la
indefinida debido al elevado riesgo de enfermedad residual y previene la recaí-
pérdida de respuesta tras su suspensión. da. Los resultados del alo-TPH de her-
Sin embargo, la evidencia acumulada en mano HLA compatible indican que más
ensayos clínicos controlados de suspen- del 50 % de los pacientes trasplantados
sión del tratamiento en pacientes con en FC están libres de enfermedad a los
respuesta molecular profunda y mante- 15 años, cifra que desciende al 20 % si
nida muestra que alrededor de la mitad el trasplante se realiza en fases avanza-
de ellos no recaen. Esto sugiere la po- das de la LMC. Desafortunadamente, la
sibilidad de curación de la LMC con ITC mortalidad relacionada con el alo-TPH
en una proporción de pacientes, si bien (MRT) es elevada, debido principalmen-
es necesario un mayor seguimiento para te a infecciones y a la enfermedad del
confirmar esta hipótesis. Por otro lado, la injerto contra el receptor. En este senti-
reintroducción precoz del tratamiento en do, el European Group of Blood and Ma-
los pacientes que pierden la respuesta rrow Transplantation (EBMT) desarrolló
permite, en la gran mayoría de los casos, un índice pronóstico (EBMT Risk Score)
alcanzar el grado de respuesta previo a que permite estimar el riesgo de MRT,
la suspensión de la terapia. Dado que lo que resulta útil a la hora de indicar el
aún es necesario responder a impor- trasplante (tabla IX).
tantes preguntas, como cuáles deben Las recaídas hematológicas tras el
ser los criterios mínimos de respuesta alo-TPH (reaparición de la FC en la ma-
antes de la suspensión del tratamiento yoría de los casos) vienen precedidas por
o cuándo reinstaurarlo en caso de pér- el hallazgo de células Ph’ en el cariotipo
dida de respuesta, la discontinuación del (recaída citogenética) y, aún antes, por

- 281 -
J. C. Hernández Boluda, V. García Gutiérrez
Capítulo 12

Tabla IX. Leucemia mieloide crónica. Factores de riesgo para el trasplante


de progenitores hematopoyéticos (puntuación del European Group for Blood
and Marrow Transplantation)

Factor de riesgo Puntuación

Fase de la enfermedad Fase crónica: 0


Fase acelerada: 1
Fase blástica: 2
Edad < 20 años: 0
20-40 años: 1
> 40 años: 2
Tiempo desde el diagnóstico al TPH < 1 año: 0
> 1 año: 1
Tipo de donante Hermano HLA idéntico: 0
Otros: 1
Sexo del donante-receptor Donante mujer/receptor varón: 1
Resto: 0

Riesgo bajo: 0-2 puntos (17 % MRT); riesgo intermedio: 3-4 puntos (50% MRT);
riesgo alto: 5-6 puntos (70  % MRT).
HLA: antígeno mayor de histocompatibilidad; MRT: mortalidad relacionada con el trasplante;
TPH: trasplante de progenitores hematopoyéticos.

la detección de BCR-ABL mediante técni- Otros fármacos útiles


cas moleculares (recaída molecular). La
infusión de linfocitos del mismo donante La hidroxiurea se continúa utilizando
es muy eficaz en esta situación, particu- durante cortos periodos de tiempo hasta
larmente cuando se realiza en pacientes la confirmación del diagnóstico por técni-
con recaída citogenética o molecular cas citogenéticas o moleculares, así como
(véase capítulo 24). para disminuir las leucocitosis extremas
Cabe reseñar que los resultados del (200-300 × 109/l); en caso de síntomas
alo-TPH han mejorado en los últimos de leucostasis está indicada la leucocito-
años. Además, existen nuevas modalida- aféresis por medio de separadores celu-
des de trasplante (utilización de proge- lares en combinación con la hidroxiurea.
nitores de sangre periférica, acondicio- El IFN-α es una buena opción en las
namientos de intensidad reducida) que pacientes embarazadas, en las que los
permiten su realización en pacientes con ITC están contraindicados, o excepcio-
comorbilidades y edad más avanzada. nalmente en enfermos de bajo riesgo en
Con todo, los excelentes resultados ob- los que no se pueden administrar dichos
tenidos con los ITC hacen que el alo-TPH fármacos a consecuencia de comorbili-
sea una opción de rescate para aquellos dades o tratamientos concomitantes.
pacientes en los que no se alcance una Durante el periodo inicial del trata-
respuesta adecuada con aquellos o pro- miento los pacientes suelen tener hiper­
gresen a fases avanzadas (tabla VIII). uricemia o hiperuricosuria. Para evitar los

- 282 -
SÍNDROMES MIELOPROLIFERATIVOS CRÓNICOS. LEUCEMIA MIELOIDE CRÓNICA
Capítulo 12

problemas renales ocasionados por es- particularmente un mieloma múltiple, lo


tas y otras alteraciones metabólicas de- que indica la necesidad de realizar estu-
bidas al exceso de destrucción celular se dios continuados en el tiempo.
debe mantener una buena hidratación y Asimismo, es obligado excluir el resto
administrar alopurinol. de NMP y los síndromes mielodisplási-
cos. Así, las alteraciones específicas de
LEUCEMIA NEUTROFÍLICA otras NMP, como el cromosoma Ph’ o las
CRÓNICA mutaciones de JAK2 o PDGFR descalifi-
can el diagnóstico de leucemia neutrofí-
Es una enfermedad mieloproliferati- lica crónica.
va muy rara que se caracteriza por una La enfermedad tiene un curso cróni-
leucocitosis neutrofílica mantenida en la co, pero la supervivencia es variable, os-
sangre periférica e hiperplasia mieloide cilando entre 6 meses y 20 años. Algunos
en la médula ósea a expensas de gra- pacientes evolucionan a mielodisplasia y
nulocitos maduros. El resto de las líneas leucemia aguda.
es normal en número y morfología. La El tratamiento convencional consis-
enfermedad se da en pacientes mayo- te en la administración de hidroxiurea
res de 60 años y cursa con hepatoesple- o IFN-α a los pacientes con alto grado
nomegalia. También existe tendencia al de mieloproliferación. En la actualidad,
sangrado cutaneomucoso en un tercio se está evaluando la eficacia terapéutica
de los casos. de los inhibidores de JAK2 en esta en-
El diagnóstico se realiza por la fermedad, dado que las mutaciones de
aparición de leucocitosis mantenida CSF3R activan la vía de señalización de
(≥ 25 × 109/l) con neutrofilia mayor del JAK-STAT. El alo-TPH puede ser una op-
80 % y de hipercelularidad neutrofílica en ción en los pacientes más jóvenes con
la médula ósea sin aumento de blastos, signos de transformación.
ni fibrosis ni displasia, y esplenomegalia.
El estudio citogenético es normal en el LEUCEMIA EOSINOFÍLICA
90 % de los pacientes, y en el resto de los CRÓNICA
casos se han observado anomalías clo-
nales frecuentes en las hemopatías mie- La leucemia eosinofílica crónica (LEC)
loides, como la +8, +9, +21, del(20q), es una neoplasia mieloproliferativa de
del(11q) y del(12p). Por el contrario, la etiología desconocida en la que la pro-
mayoría de los pacientes (más del 80 %) liferación clonal de progenitores eosinó-
presenta mutaciones activadoras en el filos determina un aumento persistente
gen del receptor del factor de crecimiento de eosinófilos en la médula ósea, en la
de colonias granulocíticas (CSF3R), que sangre y en los tejidos periféricos.
constituyen un marcador específico de El recuento absoluto de eosinófilos
esta entidad. En ausencia de esta altera- debe ser de 1,5 × 109/l o mayor. Para
ción molecular, el diagnóstico requiere la realizar el diagnóstico, es necesaria la evi-
exclusión de causas fisiológicas de neu- dencia de clonalidad en la línea mieloide
trofilia como los procesos inflamatorios, o un aumento de blastos en la sangre
infecciosos o tumorales (tabla X). Con- periférica o en la médula ósea (< 20 %),
viene recordar que posteriormente se de- y haber descartado otras entidades de-
tectó que hasta el 20 % de los pacientes finidas por la OMS que pueden cursar
inicialmente diagnosticados de esta en- también con eosinofilia intensa (tabla X).
fermedad tenían una neoplasia oculta, En especial, es importante identificar

- 283 -
J. C. Hernández Boluda, V. García Gutiérrez
Capítulo 12

Tabla X. Otras neoplasias mieloproliferativas


(Organización Mundial de la Salud)

Leucemia neutrofílica crónica Leucemia eosinofílica crónica


• Sangre periférica: • Eosinofilia ≥ 1,5 × 109/l
– Leucocitosis ≥ 25 × 109/l • Blastos en SP o MO < 20 %
– Neutrofilia ≥ 80 % • Ausencia de inv(16) o t(16;16) u otra
– Mieloblastos < 1 % evidencia de leucemia aguda mieloide
– Monocitos < 1 × 109/l • Ausencia de cromosoma Filadelfia
– Sin displasia • Ausencia de reordenamientos de PDGFR,
• Médula ósea: FGFR1 y PCM1-JAK2
– Hiperplasia neutrofílica • Sin evidencia de NMP o SMD de la OMS
– Mieloblastos < 5 %
Si el paciente presenta eosinofilia pero
• Descartar otras NMP de la OMS
no cumple estos criterios, el diagnóstico
• Presencia de mutaciones de CSF3R
puede ser:
En ausencia de mutación de CSF3R: • Eosinofilia reactiva
• Neutrofilia mantenida (> 3 meses) • Hipereosinofilia de significado incierto
• Esplenomegalia • Síndrome hipereosinofílico idiopático
• Exclusión de neutrofilia reactiva • Neoplasia mieloide/linfoide con
(infección, inflamación, neoplasias, eosinofilia y reordenamiento de PDGFRA,
gammapatía) PDGFRB, FGFR1 o PCM1-JAK2
• Demostración de clonalidad en la línea
mieloide

CSF3R: receptor del factor de crecimiento de los granulocitos; FGFR1: receptor 1 del factor de
crecimiento de los fibroblastos; MO: médula ósea; NMP: neoplasia mieloproliferativa;
OMS: Organización Mundial de la Salud; PDGFR: receptor del factor de crecimiento derivado de las
plaquetas; SMD: síndrome mielodisplásico; SP: sangre periférica.

las neoplasias mieloides con eosinofi- idiopático; si no hay daño tisular, el tér-
lia asociadas a los reordenamientos de mino será hipereosinofilia idiopática
PDGFR-a (cromosoma 4q12), PDGFR-b o de significado incierto. La distinción
(cromosoma 5q33) y FGFR1 (cromoso- entre estas enfermedades es difícil, por
ma 8p11), dado que suelen cursar de lo que su verdadera incidencia no está
forma agresiva y son susceptibles de un clara, aunque son raras (tabla X). Por el
tratamiento específico dirigido frente a contrario, la eosinofilia reactiva es muy
dichas dianas. Aunque no hay informa- frecuente en la práctica clínica.
ción precisa, se ha descrito que alrede- No existen anomalías citogenéticas
dor de un 10-20 % de los pacientes con o moleculares específicas de la LEC. El
hipereosinofilia no reactiva tienen un re- diagnóstico definitivo requiere la exclu-
ordenamiento de los genes anteriormen- sión de todas las causas de eosinofilia re-
te mencionados. activa, derivada de la liberación anormal
Si es imposible probar la clonalidad en la sangre o los tejidos de citocinas eo-
mieloide por técnicas citogenéticas y/o sinopoyéticas como la interleucina (IL) 3
moleculares, y no hay blastosis pero sí y 5 o factores estimuladores de colonias
hay daño tisular, se aconseja utilizar de granulocitos y macrófagos (GM-CSF)
el término síndrome hipereosinofílico (véase tabla XI, capítulo 10).

- 284 -
SÍNDROMES MIELOPROLIFERATIVOS CRÓNICOS. LEUCEMIA MIELOIDE CRÓNICA
Capítulo 12

La enfermedad tiene un curso clínico para los casos resistentes son el IFN-α, el
variable, con pacientes que viven esta- imatinib (durante un periodo de prueba
bles durante décadas con síntomas leves corto), el mepolizumab (anticuerpo fren-
y otros casos que progresan rápidamen- te a la IL-5) y el alo-TPH.
te a leucemia aguda. Es frecuente la afec-
tación del estado general, con febrícula, MASTOCITOSIS
tos, disnea, mialgias, prurito y diarrea. La
infiltración tisular de los eosinófilos y la Este término define las proliferacio-
liberación de citocinas, enzimas y otras nes neoplásicas clonales de mastocitos
proteínas de sus gránulos son la base con mutaciones puntuales del gen KIT. La
patogénica del daño de los tejidos, par- mastocitosis se caracteriza por la presen-
ticularmente del corazón, de los pulmo- cia de agregados multifocales compactos
nes, del sistema nervioso central, de la o infiltrados de mastocitos anómalos. La
piel y del tubo digestivo. En el corazón, enfermedad es muy heterogénea e inclu-
la infiltración eosinófila puede ocasionar ye desde lesiones en la piel que desa-
fibrosis endomiocárdica y cardiomiopatía parecen espontáneamente hasta neopla-
restrictiva. Tampoco es rara la fibrosis val- sias altamente invasivas que provocan
vular, que facilita la formación de trom- fallo multiorgánico y muerte precoz. La
bos intracardiacos y de embolismos muy enfermedad se da a cualquier edad. La
graves. Otras manifestaciones habituales mastocitosis cutánea aparece fundamen-
son las alteraciones del sistema nervioso talmente en niños y se caracteriza por la
central y la neuropatía periférica, la clíni- presencia de lesiones maculopapulosas
ca pulmonar derivada de los infiltrados pigmentadas, que al contacto producen
a ese nivel y la sintomatología reumatoi- un gran prurito y urticaria debido a la li-
dea. Menos del 10 % de los casos están beración de histamina por los mastocitos
asintomáticos en el momento del diag- (signo de Darier). La mastocitosis sisté-
nóstico, el cual se realiza al identificar la mica se caracteriza por la afectación de al
eosinofilia en un hemograma de control. menos un órgano extracutáneo con o sin
El tratamiento de las hipereosinofilias implicación dérmica. Las manifestacio-
debe individualizarse. El curso clínico es nes clínicas son variables y derivadas de
muy heterogéneo y no se ha demostrado la infiltración tisular por mastocitos y de
una correlación directa entre los niveles la liberación de histamina y otros media-
de eosinófilos en sangre y el daño tisu- dores químicos a la sangre, que pueden
lar. El pronóstico depende del daño or- producir dolor abdominal, diarrea, hipo-
gánico, sobre todo a nivel cardiaco, y del tensión, síncope, taquicardia, sudoración
riesgo de transformación a leucemia o profusa, sofocos o síntomas respirato-
linfoma. En primer lugar, debe evaluarse rios. En la exploración física pueden exis-
si el paciente presenta alguna alteración tir hepatoesplenomegalia y adenopatías.
molecular susceptible de un tratamien- No es rara la aparición de anemia,
to con inhibidores de tirosincinasas. Así, leucocitosis y eosinofilia, y pueden verse
las hemopatías con reordenamiento de lesiones osteoescleróticas y osteolíticas
PDGFR-a o PDGFR-b responden muy en la pelvis y en huesos largos.
bien al tratamiento con imatinib. En au- El diagnóstico es histológico y requie-
sencia de diana molecular, el tratamien- re la demostración de infiltración por
to inicial suelen ser los corticoides o la mastocitos, con su morfología típica, po-
hidroxiurea, esta última para las formas sitivos para CD117 (KIT), CD2 y CD25. La
más mieloproliferativas. Otras opciones triptasa sérica está elevada.

- 285 -
J. C. Hernández Boluda, V. García Gutiérrez
Capítulo 12

El pronóstico es bueno en la mayoría sos más graves con anafilaxia. En las for-
de los casos, pero las formas agresivas mas agresivas con síntomas invalidantes
se asocian a una supervivencia de meses está indicado el tratamiento citorreductor,
pese al tratamiento con quimioterapia. La generalmente con IFN-a (combinado con
detección de la mutación del gen KIT en prednisona) o cladribina. Recientemente
mastocitos exclusivamente confiere me- se han referido resultados prometedores
jor pronóstico que cuando también se de- con midostaurina, un inhibidor de tirosin-
tecta en otras líneas celulares (mieloides cinasas activo frente a la forma mutada
o linfoides). Deben evitarse los fármacos de KIT más frecuente en las mastocitosis
y otros agentes que puedan provocar la (D816V).
liberación de mediadores, y si esta ocu- La consideración extensa de esta en-
rre, deben emplearse antihistamínicos e fermedad queda fuera de los objetivos
incluso esteroides o epinefrina en los ca- de este capítulo.

- 286 -

También podría gustarte