Está en la página 1de 6

UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL

DE LOS LLANOS OCCIDENTALES

EZEQUIEL ZAMORA

VICE-RECTORADO DE PLANIFICACION Y DESARROLLO SOCIAL

PROGRAMA: CIENCIAS DE LA EDUCACION

Producción de
aprendizaje

Bachiller: Guillermo Padilla


C.I: 27.259.722
¿Qué se entiende por Aprendizaje?

Etimológicamente, aprender  proviene del latín apprehendere: atrapar, asir, agarrar. Y según


el  diccionario de la Real Academia Española contiene varias acepciones, pero tomaremos
“Adquisición por la práctica de una conducta duradera”.

En este sentido, entre la variedad de definiciones encontradas sobre el concepto de


aprendizaje, y a modo de resumen, en el documento Definiciones Aprendizaje.pdf que
encontraréis justo debajo se especifican algunas acepciones más sobre este vocablo, que
como bien describe Domjan (2007)  “es una experiencia humana tan habitual que apenas se
reflexiona sobre lo que significa haber aprendido algo”.

Entre la variedad de definiciones encontradas sobre el concepto de aprendizaje, y a modo


de resumen, destacamos las siguientes aportaciones:

• Díaz Bordenave (1986) llama aprendizaje “a la modificación relativamente permanente en


la disposición o en la capacidad del hombre, ocurrida como resultado de su actividad y que
no puede atribuirse simplemente al proceso de crecimiento y maduración o a causas tales
como enfermedad o mutaciones genéticas”.

• Beltrán (1990) define el aprendizaje como: “un cambio más o menos permanente de la
conducta que se produce como resultado de la práctica”.

• Zabalza (1991) diferencia el aprendizaje en función a:

– Como se aprende: el aprendizaje como constructo teórico

– Cómo aprenden los alumnos: el aprendizaje como tarea del alumno

– Cómo enseñar a aprender: el aprendizaje como tarea del profesor

• Domjan (2007) especifica que el aprendizaje “es un cambio duradero en los mecanismos
de conducta que implica estímulos y/o respuestas específicas y que es resultado de la
experiencia previa con esos estímulos y respuestas o con otros similares”
• Gómez Salgado denomina aprendizaje “al proceso de adquisición de conocimientos,
habilidades, valores y actitudes, como resultado del estudio, la instrucción, la observación o
la experiencia”.

El proceso de aprendizaje

Sabemos que la adquisición del conocimiento es un acto que se realiza durante toda la vida
y a través de la experiencia. Según Marqués (2010),  para aprender se deben realizar los
siguientes procesos:

 Acceder a la información

 Procesar y comprender  la información

 Memorizar a largo plazo

 Transferir el conocimiento a nuevas situaciones

Pero no todas las experiencias que tenemos logran ser aprendidas. Así, las conductas
pueden ser innatas: (no necesitan aprendizaje) o adquiridas (conductas aprendidas
mediante la experiencia).

¿Cómo aprendemos?

Gutiérrez (2013) detalla que conociendo cómo funciona el cerebro  se puede llevar a cabo
un aprendizaje más efectivo. A este respecto, esta autora señala algunos principios básicos a
tener en cuenta como por ejemplo: que lo que vemos no es exactamente lo que nuestro
cerebro ve; que el orden de los contenidos influye para su procesamiento al igual que  el
ambiente que rodea al alumno;  cuánto tiempo estamos prestando atención a un
determinado tema o que  la participación activa del estudiante promueve el aprendizaje.

Igualmente, Cody Blair nos indica, a través de la pirámide del aprendizaje, la manera en que
aprenden y recuerdan los estudiantes en función de las actividades que realizan. De la
imagen se desprende que cuando se involucra al estudiante  en el proceso de aprendizaje el
porcentaje de retención es mayor que si el estudiante es un sujeto pasivo.

Finalmente, dando unas breves pinceladas en relación a la prospectiva del aprendizaje,


Marcelo (2015) detalla nuevas formas de aprender innovando con  las TICs en la Universidad
centradas en: el sujeto que aprende (activo, constructivo, con motivación e implicación), en
el aprendizaje social (compartir, colaborar en comunidad) y en el aprendizaje a lo largo de la
vida (en cualquier momento y lugar,  mediante una combinación de físico y virtual y
de prosumer).

Estudiante del siglo XXI

En este contexto, los estudiantes que conforman las aulas universitarias son los
denominados “nativos digitales” o “millennials”, es decir, jóvenes que nacieron entre los
años 1980 y 2000, y que han estado rodeados de dispositivos de comunicación, pantallas,
internet (Valdés, 2015).

Esta misma autora  considera que  los nativos digitales se sienten más cómodos cuando:

 La información se les presenta en formato digital

 La información y las  actividades son significativas

 Son partícipes de su propio aprendizaje, ofreciéndoles la posibilidad de liderazgo

 Trabajan en equipo

 Las explicaciones son claras

 Con horarios flexibles

Así pues, las características que definen a los discentes del siglo XXI, según Tourón (2015),
serían estudiantes que: 

 Se mueven y experimentan

 Orientados al proceso y al producto

 Enriquecidos por la tecnología multimedia

 Con aprendizaje colaborativo

 Solucionadores de problemas

 Hacen  preguntas

Por todo ello, si aunamos estos puntos de vista, (las características y las necesidades de los
estudiantes de hoy),  el término Knowmad  podría encajar para definir al discente del
futuro. Este neologismo se traduce como “nómadas del conocimiento” (Know: conocer
y Nomad: nómada) y las habilidades de este perfil las podría adoptar cualquier persona,
según John Moravec (su creador). Moravec (2011), señala que “los estudiantes de la
sociedad 3.0 deberían aprender, trabajar y compartir en cualquier contexto” (2011, p. 57).

Estilos de Aprendizaje

Se denomina estilos de aprendizaje a las diferente técnicas o estrategias que cada uno


utilizamos para aprender algo.

En el proceso de Enseñanza-Aprendizaje, al igual que existen diferentes enfoques


metodológicos debido a la  variedad de docentes que imparten sus clases, nos encontramos
con estudiantes que cuentan con estilos de aprendizaje distintos,  pues no todos
aprendemos igual ni con la  misma rapidez.  Así, si conocemos los diferentes estilos de
aprendizaje de nuestro alumnado, podremos diseñar las experiencias de aprendizaje que
mejor se adecuen a esos estilos.

En este sentido, dependiendo de  cómo seleccionamos  la información se establecen 3 tipos


de alumnos: visual, auditivo y kinestésico.

Páginas 5 a 19 del documento Estilos Aprendizaje por el Gobierno Canarias. Fuente


original: Gobierno de Canarias.

Igualmente, una vez que escogemos la información la tenemos que ordenar. A este
respecto, la Teoría de los hemisferios cerebrales se ocupa de la manera en que organizamos
la información y se distinguen alumnos de hemisferio derecho y de hemisferio izquierdo

Asimismo, esta información se puede procesar de diferentes maneras. Y es en el modelo de


Kolb donde se especifica que para aprender hay que trabajar con la información en 4
etapas: actuar, reflexionar, experimentar y teorizar, por lo que se pueden diferenciar 4 tipos
de alumnos: activos, reflexivos, pragmáticos y teóricos.

Finalmente, con objeto de conocer cuál es el estilo de aprendizaje para trabajar de manera
más eficaz con universitarios, desde este enlace se puede acceder al Cuestionario Honey-
Alonso de Estilos de Aprendizaje (CHAEA). Tras contestar a la preguntas, se detalla qué tipo
de aprendizaje es el que nos define.
Potenciadores de aprendizaje

A pesar de la variedad de estilos de aprendizaje y de los recursos y  estrategias que


utilizamos, no todos los estudiantes logran los mismos resultados de aprendizaje.

Por ello, se debe tener en cuenta que: debemos despertar el interés del estudiante por la
asignatura (motivación); que sólo se aprende aquello que se entiende (atención);  y  que se
retiene mejor aquello que se puede aplicar (memoria) a través de un aprendizaje
significativo. Así, lograremos  que se asimilen y se adquieran los conocimientos.

Tienes algunas estrategias de estos potenciadores en el documento: “Estrategias para


potenciar el aprendizaje”

También podría gustarte