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RECONOCIMIENTO DEL CENTRO HISTÓRICO DE BOGOTÁ, UNA

OPORTUNIDAD PARA RESIGNIFICAR LA SALIDA DE CAMPO


Karina Jiménez Rodríguez
Resumen: El artículo presenta una reflexión entorno a la salida de campo realizada
dentro del Seminario de Problemas Rurales y Urbanos, construcción social del espacio y
el territorio a través de un recorrido guiado por el Centro Histórico de Bogotá , en la que
se describe el proceso de apropiación de la misma por parte de los estudiantes,
presentándose de esta forma las implicaciones de su realización, los conceptos
trabajados y se denota dicha experiencia como una oportunidad para resignificar la
salida de campo como una estrategia de innovación pedagógica que permite tanto al
docente como a los estudiantes construir el aprendizaje significativo.
Palabras Clave: Centro histórico, Salida de campo, aprendizaje significativo

Aspectos generales de la salida de campo


La salida de campo partió desde un abordaje previo en el que se asignaron lecturas
sobre la importancia de recorrer la ciudad como apuesta por la formación ciudadana, a
su vez las posibilidades de navegación espacial a través de cartografías y las tecnologías
de información geográfica con el objetivo de acercar a los estudiantes a aspectos claves
del pensamiento geográfico. En segundo lugar, se planteó la ruta o itinerario del
recorrido, el cual constaba de 6 paradas estratégicas: La catedral primada de Bogotá
(punto de partida), la biblioteca Luis Àngel Arango, el chorro de Quevedo, La plaza de
mercado La concordia, el parque de los periodistas, la estatua de la pola y el museo
Quinta de Bolívar.

Fuente: Archivo personal


Finalmente se solicitó a los estudiantes imprimir la cartografía del centro histórico de
Bogotá en la que se muestra la división de este por manzanas
Los objetivos propuestos para la salida de campo estaban enfocados en: reconocer la
polisemia del espacio geográfico, en este caso desde la caracterización del Centro
histórico de Bogotá a partir de su funcionalidad (formal e informal) aplicando de este
modo la metodología de levantamiento de uso de suelo (caracterización a través de
convenciones), valorando de esta forma la representación cartográfica como fuente de
información a partir del registro espacial y el reconocimiento de expresiones de lo rural
y urbano.

Durante la salida se contó con la participación de dos estudiantes de apoyo del


Semillero de Investigación, Formación y Educación Geográfica Itinerantes (SIFEGI) los
cuales estuvieron encargados de orientar el recorrido, dando sus aportes conceptuales y
apreciaciones sobre los espacios seleccionados.

Fuente: Archivo personal

Aportes de la salida de campo


Aunque el Centro histórico de Bogotá es un espacio conocido y transitado con
frecuencia por los estudiantes en su cotidianidad, la salida de campo abrió la
posibilidad de significar dicho lugar de otra manera, reconociendo las prácticas y
contextos de los sujetos que se encuentran en él, estableciendo relaciones entre el
territorio físico y las funciones sociales que tienen lugar sobre éste, a su vez esto se
traduce en la problematización y construcción de conocimientos socio-espaciales que
pueden afectar su realidad.
A su vez, el recorrido permitió identificar las diversas transformaciones que ha sufrido
dicho espacio a lo largo del tiempo, comprendiéndose que ha sido modificado a partir
de la apropiación que han hecho de ella quienes lo habitan , trazando y construyendo de
manera estandarizada lo urbano pero sin dejar de lado lo rural, conservando de esta
forma expresiones de lo colonial, pero también de lo moderno y contemporáneo, de lo
global y local, y en el que han emergido una gran variedad de usos, desde lo económico,
político-administrativo, educativo, cultural, religioso, ancestral, turístico, recreacional ,
etc. En este sentido la salida de campo es una herramienta que permite acercar a los
estudiantes a los distintos anclajes históricos de la ciudad, pues en cada una de las
paradas estratégicas se encontraban elementos significativos del desarrollo histórico de
la ciudad, tales como el hito fundacional, la herencia prehispánica, las características de
la sociedad colonial y la republicana y su posterior apertura al mundo globalizado,
elementos que aportan a su proceso de formación como futuros docentes de las ciencias
sociales y que seguramente cambian su manera de comprender lo aprendido durante su
educación secundaria.
Por otra parte, el centro histórico evoca también una serie de sentimientos y afectos,
sobre el pasado y el presente, sobre el paisaje y su significación, elementos que
responden a la dimensión afectiva de la salida de campo, pues atraviesan la subjetividad
de los estudiantes participantes. A su vez la salida de campo introdujo aspectos no
considerados anteriormente como los distintos ritmos de la ciudad, los cuales se ven
afectados por las condiciones atmosféricas, tal como sucedió en la salida, se evidenció
que, con la lluvia, la ciudad se recoge y hay menor flujo de personas en las actividades
diarias.
La salida de campo es en este sentido una posibilidad para afianzar los conocimientos
previos del estudiante frente a los adquiridos a través del recorrido, confrontando ideas
que se tenían sobre el lugar, dando nuevos aportes, conectando los aspectos
epistemológicos trabajados durante el seminario frente a los del trabajo práctico y en el
que se ponen en juego los saberes, sentidos y significados de los participantes.

Fuente: Archivo personal


En cuanto a los procesos actitudinales la salida de campo contribuye a la formación del
sujeto investigador en cuanto potencia las habilidades de observación, descripción y
análisis del espacio geográfico, la apropiación de métodos de registro espacial, a través
de los cuales los estudiantes aprenden sobre aspectos generales de orientación y
ubicación, mediante el uso de coordenadas astronómicas y el uso de escalas.
Finalmente, la salida de campo se convierte en una experiencia enriquecedora tanto para
el docente, como para los estudiantes participantes y los estudiantes de apoyo, les
permite trascender de la enseñanza tradicional, esquematizada, escasa, poco simbólica a
un aprendizaje significativo, en el que el aula convencional se desborda y los conceptos
de las disciplinas, en este caso la geografía, encuentran una oportunidad para emerger y
cobrar forma.
Bibliografía: Álvarez, Dayana, Vásquez, Wilson y Rodríguez, Liliana. 2016. La salida
de campo, una posibilidad en la formación inicial docente. Revista de didáctica de las
ciencias experimentales y sociales 31, 61-7|. Recuperado de
https://ojs.uv.es/index.php/dces/article/view/8431

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